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PRESENTADO A:
ÁREA DE CONSERVACIÓN TEMPISQUE
INSTITUTO NACIONAL DE BIODIVERSIDAD
OCTUBRE 2001
Introducción
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afecte a otras especies y su ambiente asociado (Thorbjarnarson 1992; Ross
1998).
El uso sostenible provee incentivos económicos para comunidades rurales y
propietarios de fincas, para el mantenimiento de la especie y del hábitat en
general. Este manejo racional de un recurso renovable puede ser aplicado por
varios métodos: cacería de animales silvestres, rancheo y establecimiento de
granjas, de acuerdo al estado de las poblaciones silvestres y a lo que estipulen las
leyes en materia de conservación de vida silvestre.
Por muchos años, las diferentes especies de crocodílidos, han sido vistas
como depredadores que atacan al hombre, ganado y otras especies domésticas o
como fuente de pieles y carne para la subsistencia del hombre, por lo que han sido
cazados indiscriminadamente o su hábitat ha sido destruido (Luxmoore et al
1985). A partir de los años 60, la implementación de leyes prohibiendo la caza y
comercio, la acción y apoyo gubernamental y privado (ONG´s) para la
conservación de los crocodílidos, permitieron la recuperación de algunas
poblaciones basado en programas científicos, cuidadosamente implementados y
regulados que dieron las bases para un aprovechamiento legal del recurso (King
et al 1993).
La Convención Internacional para el Comercio de Especies Amenazadas de
Fauna y Flora Silvestre (CITES), tiene la responsabilidad de regular el comercio
internacional de fauna de tal forma que las poblaciones silvestres no se vean
amenazadas o reducidas cuando son sujetas de explotación. Esto es posible si se
implementan programas de utilización de un recurso sobre una base de manejo
sostenible, rigurosamente controlado, al cual no escapan las poblaciones de
crocodílidos (King et al 1993).
En este orden de conciencia y legalidad, la necesidad de conocer el estado
de las poblaciones silvestres con estimaciones iniciales y monitoreos regulares
darán las bases para definir el tipo de manejo que se debe implementar en una
población dada. Las evaluaciones continuas permitirán estimar y actualizar la
situación de la población y redefinir los lineamientos con respecto al manejo de la
especie.
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Este estudio permitirá actualizar la información existente sobre la
distribución, estructura poblacional y densidad del cocodrilo en el río Tempisque y
las características de su hábitat.
La obtención de esta información es valiosa por cuanto, en los últimos años,
las poblaciones tanto de cocodrilos como de caimanes en el país se han visto
disminuidas por la alteración de sus hábitat, por el incremento en la cacería ilegal
ya sea para obtener su piel, su carne, su cabeza como artesanías o por el simple
hecho de ser considerado un animal peligroso para el humano o sus animales
domésticos, dejando en la ignorancia que esta especie representa una posible
fuente de ingresos económicos para una comunidad y el país, como recurso
renovable para la conservación, explotación racional en su estado silvestre o en
cautiverio, o bien, como atractivo turístico.
El río Tempisque no escapa a esta realidad, pues en el pasado reciente, las
márgenes de su cauce donde anidaban las hembras, han sido alteradas para otros
fines y aunque la matanza de adultos no ha sido tan intensa como en el río
Grande de Tárcoles, es imperativo conocer la situación actual de la especie.
Por otra parte, con el conocimiento del estado de la especie se pretende
obtener algún parámetro que permita ofrecer recomendaciones a las autoridades
gubernamentales sobre el posible manejo de la especie en términos de programas
de conservación o bien, de uso sostenible de un recurso muy valioso como fuente
de proteínas para las comunidades humanas aledañas o de productos o
subproductos como piel, carne, trofeos, etc., basado en lo que permita la Ley de
Conservación de la Vida Silvestre N° 7317.
Para ello se necesita complementar este estudio y la factibilidad de manejo
con un análisis adicional durante la época seca, donde se pueda medir los
patrones de actividad y comportamiento y esfuerzo reproductivo a través de las
nidadas y neonatos nacidos en esa época.
4
Antecedentes.
5
Nicoya, Sierpe-Térraba, La Rambla (Bolaños et al, 1996); Río Tempisque-
Bebedero (Sánchez et al 1996); ríos Grande de Tárcoles, Tulín y Jesús María
(Piedra 2000).
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Más recientemente, miembros de la Asociación Costarricense de
Investigadores en Crocodílidos (ACIC), ha mantenido los monitoreos de ambas
especies en ríos como el Grande de Tárcoles, Tulín, Jesús María, La Ceiba y
Chirripó, así como el manejo de poblaciones cautivas en Punta Morales (ECMAR)
y en Lagar-Tico (Jacó) a través de proyectos de la Universidad Nacional. La ACIC
también esta en la fase inicial de desarrollo de un módulo de producción
experimental e investigación, en La Rambla de Sarapiquí, Heredia.
Caracterización de la especie.
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sustratos o bien hacer montículos de arena o material orgánico (Ross 1998; Obs.
Pers.).
En relación con la coloración, existe gran variación dependiendo del tipo de
hábitat en el que se encuentra; desde el verde grisáceo, verde oliva claro hasta el
café grisáceo en la parte dorsal. Este patrón de coloración se oscurece conforme
el individuo envejece. Las zonas ventrales por lo general presentan un tono
amarillo claro.
Sus osteodermos dorsales están dispuestos en forma más irregular y de
menor tamaño, en relación con las otras 22 especies de crocodílidos vivientes.
Por lo general, no presenta más de 4 escudos en cada una de las 14 a 17 filas de
escudos precaudales continuos (Ross y Mayer 1983). Presenta un grado de
desarrollo único de la elevación preorbital media (EPM) en la extensión rostral de
los adultos y subadultos (Brazaitis 1973; Alvarez del Toro 1974; Medem 1981). El
tamaño y la forma de la EPM varía con la distribución geográfica de las
poblaciones estudiadas y se ha asociado como una característica de dimorfismo
sexual del estado adulto (Thorbjarnarson 1989).
La combinación de estos dos factores, la irregularidad en el número de
escudos dorsales y la EPM es suficiente para distinguir a C. acutus de entre las 23
especies vivientes de este grupo, excepto de C. moreletti; que presenta ambas
características, pero menos desarrolladas (Ross 1987). Las diferencias entre
ambas especies son escasas y están básicamente determinadas por las
intrusiones en la base de los escudos ventrolaterales que presenta C. moreletti y
que están ausentes en C. acutus (Ross y Ross 1974); esta condición limita la
posibilidad de determinar la distribución geográfica original de C. acutus. No
obstante estas descripciones, C. acutus es similar en forma, estructuras y tamaño
a C. intermedius, su única diferencia observable radica en la ausencia de la EPM
en esta última especie y un hocico en forma más aguda (Obs. Pers.)
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Fig. 2. Rasgos morfológicos externos que caracterizan al cocodrilo.
Objetivos
Objetivo general:
Objetivos específicos:
9
Metodología
1. Área de estudio:
10
Se hizo uso de hojas cartográficas 1:50 000 para demarcar los recorridos.
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2. Uso de hábitat.
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lograr estandarizar las observaciones realizadas; los animales que se ocultaban
antes de poder observar su talla se anotaron como “ojos”.
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FC = Factor de corrección
El FC se calcula utilizando la fracción visible de la población (p), a través de
la fórmula 100 / p.
El cálculo de la densidad se estimó haciendo uso de la fórmula PE / Re,
donde:
PE = población estimada
Re = recorrido
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Escamas dobles
Decenas
Centenas Escamas simples
(unidades)
Fig. 4. Método de identificación de cocodrilos. Para este proyecto, se varió el método a un corte
raso de las escamas caudales. En el ejemplo, el número corresponde al 132. Tomado de Bolton
1989.
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Los animales fueron clasificados por tallas de acuerdo al siguiente cuadro:
Cuadro 1.
Clasificación de C. acutus
de acuerdo a la talla.
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si en las poblaciones a las que pertenecían hacían algún uso del recurso
cocodrilo, por lo que existió el compromiso de no consignar sus nombres.
Se pretendía conocer si había cacería en el río, que partes del animal
utilizaban, desde que época se cazaba, que arte de captura utilizaban, si
consideraban peligroso al animal.
Las personas entrevistadas no solo pertenecen a las poblaciones vecinas del
río Tempisque como Bolsón, Ortega, Puerto Humo, Puerto Moreno, Bebedero,
sino a otras localidades como San Pablo. Los entrevistados son personas que se
turismo
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Resultados y discusión:
1- Uso de hábitat:
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En las zonas inundables por la marea o las llenas en la época lluviosa la
vegetación que no es manglar esta compuesta por gramíneas y platanillas,
principalmente. Entre las especies encontradas figuran: arroz silvestre (Oryza
latifolia), gamalote (Paspalidium geminatum), jenjibrillo (Paspalum notatum),
platanilla (Canna glauca, Thalia geniculata), alacrancillo (Heliotropium indicum),
lotus (Nimphaea sp). Al ritmo de las mareas puede encontrarse lirio de agua
(Eichhornia crassipes), directamente sobre el río.
Esta zona es utilizada por los cocodrilos de todas las tallas para descanso y
asoleo.
Las zonas de anidamiento están constituidas por sitios de arena, material
arcilloso o una combinación de ambos, protegidos por algunas especies de
vegetación como el guácimo, las gramíneas y la zarza. Como característica
particular, los nidos están ubicados de tal forma que el sol del mediodía no da
directamente sobre el mismo. Cuando un nido esta expuesto al sol del mediodía,
el nido es más profundo que aquellos que están protegidos por la sombra.
Se pretendía conocer las zonas más utilizadas por los animales para
descanso, asoleo, protección, alimentación y postura.
Para descanso y asoleo más del 95 % de los animales avistados (58% del
total) utilizan las zonas de fango y gramíneas que quedan al descubierto durante
la marea baja. Durante la marea alta utilizan las áreas secas de tierra firme y
gramíneas pero en lados opuestos donde haya actividad humana o donde la
vegetación continental les ofrece alguna protección. Las horas preferidas para
asolearse es entre las 8:00 y 10:00 horas y entre las 15:00 y 17:00 horas.
Durante el día el sitio preferido para protección resulta ser siempre el agua,
sumergiéndose rápidamente en ella ante eventuales amenazas como la presencia
de humanos o de botes. Por la noche los animales de tallas inferiores (neonatos,
reclutas y juveniles) encuentran fácil protección entre las raíces (ñangas) y ramas
de los mangles o las gramíneas durante la marea alta, pero en marea baja es
similar al comportamiento mostrado cuando se están asoleando o descansando.
Los adultos y subadultos se mantienen dentro del agua, normalmente en el centro
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del río, independientemente de la marea y se mueven al ritmo de esta, excepto
cuando se están asoleando.
Los cocodrilos exhiben una actitud de jerarquía y un comportamiento
territorial que los hace defender su nicho o territorio, donde los animales adultos
de mayor talla son dominantes. Fuera del agua, cuando se asolean, mantienen
una actitud de socialización, comparten territorio, pero una vez que la temporada
de reproducción inicia la socialización entre adultos se interrumpe y el macho solo
acepta el acercamiento de una o varias hembras.
La alimentación se lleva a cabo tanto dentro del agua como fuera de ella y es
independiente del hábitat donde se realiza la captura u obtención del alimento
pero si depende del tamaño de la presa. Si la presa es pequeña la engullen en el
sitio pero si es grande y deben destrozarla prefieren hacerlo en el agua y luego
engullir los trozos. El tamaño de la presa va de acuerdo a la talla del individuo.
Cabe mencionar que los neonatos se alimentan de insectos, pequeños peces
(olominas), moluscos y renacuajos. Conforme aumenta la talla de los cocodrilos
aumenta el tamaño de la presa.
Las áreas de postura seleccionadas por la hembra son muy amplias y
depende de factores físicos como temperatura, humedad, protección, sombra,
radiación, textura, aireación y de factores interespecíficos de la especie como
jerarquía, estado de gravidez y la selección del sitio por parte de una hembra
determinada. Las hembras grávidas en busca de áreas de anidamiento evitan
enfrentarse con hembras que ya han desovado o con hembras de mayores tallas
como forma de proteger su integridad y la de su progenie. Los factores físicos
determinan la profundidad del nido que oscila entre los 30 a 60 cm.
Las hembras que habitan sitios cercanos a playones de arena utilizan éstos
para anidar; en playones pequeños de unos 10 a 20 m anida una sola hembra,
pero en playones de mayores dimensiones que abarcan longitudes desde 20
hasta 200 m anidan varias hembras con separaciones entre nidadas que van de 3
m a 10 o 20 m, e incluso más distancia.
Algunos sitios de postura no son completamente arenosos, pueden ser de
tierra compacta o suelos arcillosos.
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Los sitios de postura pueden tener inclinaciones, con respecto al nivel del
agua en marea alta, desde 20° hasta 90°, es decir en forma de talud (corte vertical
del terreno); en marea baja se dificulta su acceso desde el agua.
Una observación que arrojó un resultado interesante es la relación entre la
existencia de una cueva y la cercanía de un nido. Siempre que se observó una
cueva, en sus alrededores se localizó un nido (no se anota más información por
razones de seguridad para la especie). Cabe mencionar que localizar un nido de
cocodrilo es una misión muy difícil.
El componente faunístico estuvo representado por especies tanto de aves
como de mamíferos y reptiles. Entre las especies de mamíferos se observó
mapaches (Procyon lotor), pizotes (Nasua narica), monos (Cebus capucinus,
Allouata palliata), venados (Odocoileus virginianus), armadillos (Dasypus
novencinctus). Entre las especies de reptiles se observó a la tortuga candado
(Kinosternun spp), cascabel (Crotallus durissus), boa (Boa constrictor), gallego
(Basiliscus basiliscus), garrobo (Ctenosaura similis), iguana (iguana iguana). Las
especies de aves observadas fueron: gavilán chapulinero (Buteo magnirostris),
gavilán caracolero (Rostrhamus sociabilis), cuyeo (Nyctidromus albicolis), yeguita
de agua (Jacana spinosa), pijije (Charadrius vociferus), martín peña (Tigrisoma
mexicanum), garceta bueyera (Bubulcus ibis), garza real (Casmerodius albus), ibis
blanco (Eudocimus albus), tortolita (Columbina inca), pecho amarillo (Tyrannus
forficatus), chocuaco (Cochlearius cochlearius) y otras especies.
Como parte de las interrelaciones entre las distintas especies que se
encuentran en este hábitat se puede mencionar el mutualismo que existe entre el
cocodrilo y la garceta bueyera. Esta última se alimenta de organismos que
localiza entre las escamas de la piel del cocodrilo. Asimismo, una especie de ave
de pequeño tamaño (no fue posible identificarla) se alimenta de restos de comida
que encuentra entre los dientes del cocodrilo (cuando mantiene la boca abierta)
sin que este le haga daño.
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2- Captura, medición y marcaje:
El primer conteo de cada área fue utilizado para calcular la fracción visible de
la población. Los conteos presentaron una gran variación entre sí en el número de
individuos observados (cuadro 2, figura 5).
A partir del cuadro 2 se elabora el cuadro 3 que resume la información de los
datos obtenidos en el primer conteo de campo y que son utilizados para calcular la
fracción visible.
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Cuadro 2.
Distribución por tallas de C. acutus en las áreas de estudio, en las
diferentes giras al río Tempisque durante el período de conteo.
Cuadro 3.
Resumen de la información obtenida
en el primer conteo para cada área muestreada.
AREA NEONATOS RECLUTAS JUVENILES SUBADULTOS ADULTOS OJOS TOTAL
A 0,0 68,0 57,0 14,0 15,0 70,0 224,0
B 0,0 56,0 107,0 15,0 23,0 73,0 274,0
C 0,0 0,0 38,0 8,0 58,0 21,0 125,0
23
Fig. 5. Número de individuos observados
por clases en el río Tempisque,
Guanacaste, Costa Rica.
55.7 98.3
130.3
543.7
41.7
93.3
124.3
24
P = 0.60697189 q=1-p q=1-0.60697189=0.39302811
El factor de corrección (FC) para la fracción visible de la población se calculó a
partir de la fórmula 100 / p, dando como resultado:
FC = 100 / 0.60697189
FC = 1.65
La población estimada (PE) se obtuvo al multiplicar el número de individuos
observados por el FC. Por tanto, la densidad estimada se obtuvo de la relación de
PE por el recorrido en kilómetros.
Cuadro 4.
Resumen de las observaciones totales por muestreo.
AREA NEONATOS RECLUTAS JUVENILES SUBADULTOS ADULTOS OJOS TOTAL
A 0,0 68,0 57,0 14,0 15,0 70,0 224,0
A 0,0 32,0 31,0 10,0 18,0 34,0 125,0
A 53,0 15,0 48,0 21,0 36,0 104,0 277,0
B 0,0 56,0 107,0 15,0 23,0 73,0 274,0
B 45,0 55,0 27,0 12,0 9,0 38,0 186,0
B 32,0 24,0 28,0 13,0 23,0 28,0 148,0
C 0,0 0,0 38,0 8,0 58,0 21,0 125,0
C 6,0 38,0 41,0 17,0 47,0 5,0 154,0
C 31,0 7,0 14,0 15,0 51,0 0,0 118,0
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de agua que se forman por las inundaciones. En la época seca los individuos
tienden a concentrarse en el río o en lagunas que mantienen agua aún en verano.
Cabe resaltar que en la época seca, cuando el río baja su nivel y se ve
afectado por la gran cantidad de agua que se extrae, muchos cocodrilos encuentran
su agua en los canales de riego de las empresas que se dedican a las actividades
agrícolas.
Cuadro 5
Distribución por áreas, distancias recorridas,
y densidades relativas en el río Tempisque,
en las diferentes giras de trabajo, año 2000.
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Cuadro 6.
Número, porcentaje y distribución por tallas de C. acutus en
las diferentes áreas de estudio, en el río Tempisque para el año 1993.
Área/Clase Neonatos Reclutas Juveniles Subadultos Adultos Ojos Total
A 11,0 2,0 8,0 1,0 0,0 10,0 32,0
% 34,4 6,3 25,0 3,1 0,0 31,3
B 2,0 8,0 7,0 2,0 5,0 32,0 56,0
% 3,6 14,3 12,5 3,6 8,9 57,1
C 5,0 7,0 5,0 4,0 5,0 24,0 50,0
% 10,0 14,0 10,0 8,0 10,0 48,0
Total 18.0 17.0 20.0 7.0 10.0 66.0 138.0
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Cuadro 7.
Resumen del total de cocodrilos observados por categoría
en el río Tempisque para los años 1993 y 2000.
CLASE NEONATOS RECLUTAS JUVENILES SUBADULTOS ADULTOS OJOS TOTAL
TOTAL 1993 18.0 17.0 20.0 7.0 10.0 66.0 138.0
TOTAL 2000 55,7 98,3 130,3 41,7 93,3 124,3 543,7
Cuadro 8.
Información comparativa del número de individuos observados
y las densidades relativa y estimada para el río Tempisque.
Area Recorrido Conteo Población Densidad Densidad Conteo Población Densidad Densidad
Km 1993 Estimada Relativa estimada 2000 Estimada relativa estimada
(ind/km) (ind/km) (ind/km) (ind/km)
A 21,75 32 52.8 1,5 2,5 208,7 344.3 9,6 15,8
B 15,24 56 92.4 3,7 6,1 202,7 334.5 13,3 21,9
C 12 50 82.5 4,2 6,9 132,3 218.3 11.0 18,2
TOTAL 48,99 138 227.7 2.8 4.65 543,7 897.1 11.1 18.3
Relación: 18.3 / 4.65 = 3.9
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Bolaños, et al. (1996), reportan densidades para el Golfo de Nicoya 1,93
ind/Km; en Sierpe 2,28 ind/Km y para la Rambla de Sarapiquí, región continental, de
2,33 ind/Km.
Sasa y Chaves (1992), reportan una densidad de 19,1 ind/Km para el río
Grande de Tárcoles, Costa Rica. Este valor resulta muy alto comparado con los
encontrados por Bolaños et al. (1996) y es muy cercano a los obtenidos en este
estudio. Piedra (2000) reporta valores de 32.02, 8.14 y 2.39 ind/km, en los ríos
Grande de Tárcoles, Tusubres (Tulín) y Jesús María, respectivamente, sin embargo,
estas poblaciones se han visto seriamente afectadas por la indiscriminada matanza
de cocodrilos, principalmente el río Tárcoles donde han dado muerte a más de 300
individuos en los últimos 3 años, por diversas razones (cuadro 9).
Cuadro 9.
Datos comparativos de densidad entre diferentes zonas de Costa Rica.
L o c a lid a d D e n s id a d (in d /k m )
G o lfo d e N ic o ya (B o la ñ o s e t a l 1 9 9 6 ) 1 ,9 3
S ie rp e (B o la ñ o s e t a l 1 9 9 6 ) 2 ,2 8
R a m b la (B o la ñ o s e t a l 1 9 9 6 ) 2 ,3 3
B e b e d e ro (S á n c h e z e t a l 1 9 9 3 ) 4 ,5
Te m p is q u e (S á n c h e z e t a l 1 9 9 3 ) 2 ,9
Te m p is q u e 2 0 0 0 (e s te e s tu d io ) 1 8 ,3
Tá rc o le s 1 9 9 2 (S a s a ) 1 9 ,2
Tá rc o le s 1 9 9 2 (M o tte ) 1 5 ,2
Tá rc o le s 1 9 9 2 (To rre a lb a ) 111
Tá rc o le s 2 0 0 0 (P ie d ra ) 3 2 ,0 2
Tu lín 2 0 0 0 (P ie d ra ) 8 ,1 4
J e s ú s M a ría 2 0 0 0 (P ie d ra ) 2 ,3 9
29
y los adultos en el área C. Los individuos de talla V o superiores fueron vistos,
principalmente de noche y, durante el día, trasladándose con la corriente río arriba o
río abajo, según el ritmo de la marea (Figs. 6 a 12).
12.3 15.0
25.7 45.0
17.7 38.3
A B C
A B C
31.0
45.3 13.3 15.0
54.0 13.3
A B C A B C
23.0 18.3
69.3 46.3
52.0 8.7
A B C A B C
30
Fig. 12. Distribución total de individuos
en las diferentes áreas del estudio.
132.3
202.7
208.7
A B C
31
Debido a esta afectación no fue posible ubicar los puntos de anidamiento,
considerando que las hembras utilizan el mismo sitio durante varios años. Esta
demarcación habría permitido plantear alguna estrategia de protección y manejo de
los huevos y nidadas.
Los individuos de grandes tallas se localizaron entre Puerto Humo y La
Cutacha, pues en esta zona se ubica el Parque Nacional Palo Verde, que les ofrece
protección, ya que el río Tempisque es el límite sur y oeste del Parque (Salas, 1985).
En este estudio se pretendía estimar la estructura de la población por sexos, no
obstante, la captura de individuos no fue suficiente para estimar este parámetro,
debido a que los animales resultaron ser muy cuidadosos y no permitían un
acercamiento estrecho que facilitara su captura. Su comportamiento de huir o
ponerse a salvo de un inminente peligro evitó que se cumpliera con este objetivo.
Por otro lado, el número de nidos era otra variable que se utilizaría para estimar
el número de adultos reproductivamente activos, en el río Tempisque. Sin embargo,
los trabajos de ampliación del cauce del río en el sitio de mayor postura para esta
población, que arrasaron con todos los nidos y los bancos para anidamiento,
provocaron su efecto negativo y no fue posible estimar esta proporción de la
población sexualmente madura.
A pesar de estos problemas, se pueden hacer algunas inferencias.
Considerando el número de adultos observados a lo largo del área de estudio, 93.3 y
la relación de sexos de forma natural (3 hembras por macho) se infiere que habría
aproximadamente 69 hembras y 23 machos. Si el número total de adultos
observados se multiplica por el FC (1.65), da un valor de 154 adultos, lo que
traducido a la relación de sexos implica un número de 114 hembras y 38 machos.
A estos datos habría que sumarle la proporción de adultos que componen la
categoría “ojos”, que para el caso particular no se puede siquiera estimar que
porcentaje de estos individuos corresponde a los adultos. Si se especula que un
20% de la categoría “ojos” corresponde a adultos entonces se añadiría 25 individuos,
lo cual sumaría 18 hembras y 6 machos más, para un total de 132 hembras y 44
machos.
32
Si consideramos que estas hembras son activas sexualmente y el 100 % de
ellas anidan, a un 95% de fertilidad y 30 huevos por hembra, esperaríamos 3762
críos, de los cuales sobrevive un 10% para un total de sobrevivientes de 376 críos.
Con el paso del tiempo este grupo disminuye como consecuencia de la mortalidad
natural por depredación, enfermedad, incapacidad de cazar, migración o por
acción del hombre, datos que no han sido evaluados certeramente. Lo que si esta
comprobado es la capacidad de estos animales de migrar entre diferentes cuerpos
de agua e incluso regresar a su lugar original. En esta migración, que depende de
la época y de los recursos disponibles, algunos individuos mueren.
33
Fig. 13. Razones que justificaban la Fig. 14. Principales partes
cacería en la zona del río Tempisque. aprovechadas producto de la
cacería de cocodrilos.
8% 5%
25% 18
25
35
62%
15
34
Fig. 18. Comportamiento de los cocodrilos
según opinión de las personas.
70%
30%
Agresivos Tímidos
35
Es importante destacar que los cocodrilos, a pesar de ser animales muy
resistentes son vulnerables a muchas de las actividades antrópicas tales como la
pérdida de hábitat, la cacería, la contaminación. Según la encuesta, el 60 % de
los entrevistados considera que uno de los principales problemas que enfrentan
los cocodrilos para su supervivencia es la pérdida de hábitat (Fig. 16).
Fig. 15. Uso actual de las poblaciones Fig. 16. Principales problemas que
de cocodrilos en el río tempisque. enfrenta la población de cocodrilos
para sobrevivir
Turismo 25%
15%
54%
13% 20%
13%
36
Se debe mencionar que de las conversaciones mantenidas con personas de
los diferentes poblados del Tempisque se evidenció la preocupación por la
matanza de cocodrilos ocasionada por las personas encargadas de construir el
puente sobre el río Tempisque a la altura de la desembocadura de este, dando
muerte a animales adultos, afectando con ello la tasa de reproducción y el
reclutamiento, tanto de este río como del río Bebedero.
En la figura 19 se indica las zonas de anidamiento para C. acutus en el área
de estudio. Se ha estimado un orden de prioridad de estos sitios en virtud de la
importancia en cuanto a densidad de nidos, según observaciones hechas a lo
largo de 10 años. No obstante, las zonas marcadas con los números 1 y 4 son
sitios de alta vulnerabilidad como consecuencia de actividades humanas en dos
sentidos:
La zona 1, que corresponde con la recta del río a la altura de La Cutacha , ha
sido objeto en distintos años de alteración de las dos riberas del cauce como una
justificación de ampliar el cauce para disminuir o prevenir las inundaciones que
provoca el río Tempisque en las comunidades locales como La Guinea, Ortega,
Bolsón, Corralillo y otros.
Uno de los mayores problemas con este tipo de obras es que se realizan en
época seca, precisamente durante los meses de postura de varias especies de
reptiles tales como los cocodrilos, tortugas, iguanas, garrobos, gallegos, entre
otros, afectando con ello el reclutamiento, la estructura de la población, alterando
la cadena alimentaria y dejando sin nichos de anidamiento a muchos individuos.
La zona 4, que posee playones de anidamiento solitarias, es afectada todos
los años en la misma época como consecuencia de la extracción de arena por
parte del ingenio CATSA, destruyendo los nidos de los cocodrilos.
Las demás áreas de ubican dentro de los terrenos del Parque Nacional Palo
Verde, sitio declarado como Humedal de importancia internacional (Humedal
Ramsar).
Es importante mencionar que estas no son las únicas áreas de anidamiento
para esta especie. Considerando que la población del río Bebedero es la misma,
genéticamente hablando, que la del río Tempisque, existe otra área de
37
anidamiento sumamente importante, en las inmediaciones del Ingenio Taboga y la
Hacienda Solimar, en el humedal conocido como Laguna Madrigal, aguas arriba
del río Bebedero, sitio considerado como un santuario de aves acuáticas y
cocodrilos.
Este es quizá el único sitio conocido donde hay anidamiento comunal y
debido a las actividades humanas de diversa índole tanto las aves como los
cocodrilos se han visto afectados.
A pesar de que este sector esta fuera de los alcances de este estudio, es
importante mencionarlo por cuanto la población del río Tempisque también se ve
afectada por las actividades realizadas en la cuenca del río Bebedero.
38
4
2
3
Fig. 19. Mapa del área de estudio donde se indican las principales zonas de
anidamiento para C. acutus en el río Tempisque. Los números indican las
zonas según importancia en cuanto a densidad de nidos.
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5- Modificación a la metodología y limitaciones:
40
acuerdo a los números mostrados en este estudio (cuadro 2), el número de
neonatos contabilizados es de 161 individuos, que en el mejor de los casos
sobrevivirían 16 individuos.
Si se hace una proyección rápida de la posible cantidad de neonatos que
habría nacido, tomando como modelo el total de adultos estimado, y de acuerdo a
la relación de sexos natural de 3 hembras por 1 macho, de 132 hembras
reproductivamente activas, por un promedio de 40 huevos por hembra, habría un
total de 5280 huevos. Considerando que se pierde por depredación un 30% de los
nidos (24 nidos), se tendría un total de 4320 huevos, por un 95% de eclosión,
habría finalmente 4104 críos. Si a esto se le resta el 90% de mortalidad,
quedarían 410 individuos recién nacidos y no 16 como se mencionó al final del
párrafo anterior.
Conclusiones y Recomendaciones:
41
Aún cuando es difícil asegurar que la población alcanza niveles satisfactorios
como para determinar que la población es autosuficiente para mantener la
población por varias generaciones, es importante continuar con los monitoreos y
ampliar estos estudios a zonas de influencia.
La destrucción de las márgenes del río ha afectado los sitios de postura de
los cocodrilos y su comportamiento, ya que también han destruido las cuevas que
utilizan los animales para ocultarse del peligro o, eventualmente descansar o
“guardar alimento” como aseguran las personas de las poblaciones vecinas.
El efecto de la destrucción de los sitios de anidamiento es claro que afecta el
reclutamiento anual. Debe recordarse que los cocodrilos alcanzan su edad de
madurez sexual después de 10 años. Esta situación, que parece ser repetitiva,
pues se ha dado durante varios años, afecta además, cualquier plan que se quiera
implementar para protección y manejo de huevos, nidadas y neonatos.
Una alternativa de investigación importante de ejecutar es un análisis
genético de la población del río Tempisque así como de las áreas de influencia de
éste, para valorar su grado de consanguinidad y relación con otras poblaciones,
de manera que permita tomar una mejor decisión de manejo de dicha población.
La alternativa de evitar las inundaciones en las comunidades afectadas como
Bolsón, Ortega, Corralillo, La Guinea y otros poblados tal vez sea drenar la
desembocadura del río donde se han acumulado los sedimentos que no permiten
que el río “desague”; caso contrario, de seguir efectuando los trabajos en el sector
de la recta, debería formarse una comisión que evalúe el impacto sobre las
poblaciones silvestres, no solo de cocodrilos sino de otras especies, con el fin de
evitar la destrucción de estas especies y realizar los trabajos en una época
diferente a la época de postura de muchas de ellas.
De acuerdo a la información obtenida en las entrevistas informales, la
cacería de cocodrilos ha disminuido fuertemente, y el recurso se aprovecha para
fines de turismo ecológico.
En la actualidad, la contaminación es una de las principales amenazas para
esta especie. En los meses de junio y julio el río es contaminado con algunos
productos químicos provenientes del Ingenio El Viejo (y posiblemente de otras
42
industrias) que provoca la muerte de gran cantidad de peces, moluscos,
langostinos y tortugas, principalmente, pero no esta lejos el día que estos
productos químicos sean vertidos en mayores cantidades y concentraciones que
terminen por afectar de igual manera a los cocodrilos y se acabe con una especie
que habita este planeta hace 240 millones de años.
Se sugiere crear un plan de manejo o desarrollo para la conservación,
manejo y uso de la población silvestre de cocodrilos del río Tempisque, dando
participación a las comunidades, ONG´s, MINAE y Universidades, de manera que
las acciones a ejecutar sean en beneficio de las comunidades humanas y las
poblaciones silvestres.
Es importante ampliar los rangos de acción de los estudios de población para
evaluar el estado de otras poblaciones de cocodrilos en la cuenca del río
Tempisque, de forma tal que pueda darse un manejo integrado de las diferentes
poblaciones de cocodrilos de la cuenca del Tempisque.
No quiero perder la oportunidad de manifestar mi descontento con la oficina
del Área de Conservación Tempisque por su negligencia e ineficiencia ante la
matanza de los cocodrilos por parte de los Taiwaneses que construyen el puente.
De haber existido interés por solucionar un supuesto problema por la
presencia de cocodrilos adultos en la zona, la matanza de estos reptiles pudo
haberse evitado a través de reuniones con expertos en la materia. Será que aún
continúan dando muerte a los indefensos cocodrilos?
El cocodrilo es una especie declarada en peligro de extinción por la Ley de
Conservación de la Vida Silvestre N° 7317 y la Convención CITES. De que vale
para una especie estar en esta categoría si las acciones son totalmente
diferentes? Ejemplos de animales considerados en estas categorías y que el
Estado realiza pocos o ningún esfuerzo por protegerlas o conservarlas mediante
programas de conservación, son: la población de cocodrilos en el río Tárcoles, las
lapas, las tortugas marinas, el mono tití, entre otros.
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Agradecimientos:
Este trabajo fue realizado gracias al soporte financiero del Instituto Nacional
de Biodiversidad (INBio) y al apoyo del Área de Conservación Tempisque.
Agradezco la colaboración de las siguientes personas: Lilliana Piedra, Juan
Bravo y Randall Piedra, así como aquellas personas vecinas de las comunidades
aledañas al río Tempisque.
Asimismo, quiero agradecer toda la paciencia demostrada para hacer posible
la entrega de este documento, después de varias prórrogas para la entrega del
mismo.
44
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Caiman (Caiman crododilus fuscus) en Caño Negro National Wildlife Refuge,
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fuscus en la época seca en el Refugio Nacional de Vida Silvestre Caño Negro,
Alajuela, Costa Rica. Investigación por tutoría. Escuela de Ciencias
Biológicas, Universidad Nacional, Heredia.
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Diseño de la entrevista:
48
Indice
Contenido Página
Índice ................................................................................. 1
Introducción ......................................................................... 2
Antecedentes ....................................................................... 5
Caracterización de la especie .......................................... 7
Objetivos .............................................................................. 9
Objetivo general .............................................................. 9
Objetivos específicos ...................................................... 9
Metodología ........................................................................ 10
Área de estudio .............................................................. 10
Uso de hábitat ................................................................ 12
Estimación de la densidad y estructura poblacional ...... 12
Estudio de calibración ......................................... 13
Estructura de la población ................................... 13
Captura, medición y marcaje ............................................. 14
Uso del recurso ................................................................. 16
Modificación a la metodología y limitaciones..................... 17
Resultados y discusión ..................................................... 18
Uso de hábitat .............................................................. 18
Captura, medición y marcaje ........................................ 22
Estimación de la densidad y estructura poblacional ..... 22
Estudio de calibración ........................................ 22
Distribución y estimación poblacional ................. 25
Uso del recurso ............................................................ 33
Modificación a la metodología y limitaciones ............... 40
Conclusiones y recomendaciones .................................... 41
Agradecimientos ................................................................. 44
Referencias bibliográficas ................................................ 45
Anexos .............................................................................. 48
49