Tema Mensual: TODAS LAS COSAS LES

AYUDAN A BIEN
Título: UNA ALMOHADA SUAVE
Base Bíblica y Texto a Memorizar:
Romanos 8:28 Reina-Valera 1960
28 
Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es,
a los que conforme a su propósito son llamados.

I. INTRODUCCION
La epístola a los Romanos es conocida por muchos como uno de los libros mas
importantes en todas las Escrituras, además recalquemos que es la carta más
grande escrita por Pablo. Y si hablamos del capitulo 8 podemos decir que es uno
de los capítulos mas leídos y estudiados en la historia.

Pablo escribe esta carta después de haber viajado durante más de diez años por
los territorios del mar Egeo evangelizando a la población. Por aquel entonces,
Roma estaba gobernada por el emperador tirano Nerón. El cristianismo y
judaísmo eran perseguidos y eran muchas las personas que vivían sumidas en la
persecución y la pobreza. La carta a los Romanos da luz a esa gente que no
veían salida a su situación. Además, el apóstol ya había acabado su labor de
evangelización en Asia y Grecia y se disponía a viajar a España e Italia, para
proclamar la Palabra del Señor y unir a las comunidades cristianas.

Sabiendo esto, veamos algunas grandes verdades que revelan este grandioso
verso:

II. DESARROLLO
a. Dios quiere que todos se salven
2 Pedro 3:9 NTV
En realidad, no es que el Señor sea lento para cumplir su promesa, como algunos
piensan. Al contrario, es paciente por amor a ustedes. No quiere que nadie sea destruido,
que ninguno se pierda; quiere que todos se arrepientan.

Una de las verdades bíblicas mas extraordinarias es que Dios no quiere que
nadie se pierda, Su amor es tan grande y tan pleno, que trabajara de diferentes
maneras, para algunos de maneras que no se pueden entender, para otros de
maneras locas y sobre pasadas, pero si como hijos de Dios logramos concebir lo
que Dios está tratando de desenlazar, entonces nuestra visión será aumentada, y
visualizaremos su gran obra maestra para nuestras vidas y quienes nos rodean.
Dios quiere salvarnos.

b. La Fuerza Imparable de Dios

Romanos 8:31 RVR1960
¿Qué, pues, diremos a esto? Si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotros?

En los versos que acompañan a este fragmento de Romanos 8, se nos revela la
fuerza imparable de Dios todo poderoso, que obra maravillas a través y a favor
de su pueblo.

Al entender que tenemos un Dios tan grande, creador de todas las cosas, que
mantiene el universo en sus manos, por Él fueron hechas todas las cosas, por Él
existen todas las cosas, por Él nosotros mismos fuimos creados y no sólo eso, nos
creo al igual que a todo con propósitos, con anhelos, con sueños propios hacia
nosotros.
Conociendo esto, se nos revela también la fuerza imparable de Dios, que a
pesar de que tenemos un enemigo que busca siempre dañarnos, robarnos y hasta
matarnos (San Juan 10:10), Él, nuestro Dios Grandioso busca como cambiar hasta
las peores situaciones y no solo salvarnos y redimirnos, también restituirnos.
Woooo que hermoso es nuestro Dios.

c. Una almohada suave para un corazón cansado.

El Doctor estadounidense Reuben Archer Torrey (1856–1928), fue uno de los más
grandes evangelistas del siglo XX. Y además fue un devoto estudioso de la Palabra
de Dios. Fue el quien llamo a este verso 28 de Romanos 8: “Una almohada suave
para un corazón cansado”.
Y es que en esa frase hay muchísima verdad, porque tenemos la esperanza
eterna, que, a pesar de las adversidades, de los tiempos difíciles, Dios sigue
trabajando para nuestro bienestar y progreso. "Todas las cosas ayudan a bien", que
magnifica promesa, y que bello es entender que Dios pretende que su pueblo
pueda mantenerse seguro y tranquilo en cualquier, cualquier situación.

III. CONCLUSION
Pueden ser muchas los contratiempos de nuestras vidas, pero el AMOR DE
DIOS hacia nosotros seguirá siendo infinito y nunca nos abandonará.
Romanos 8:39 NTV
Ningún poder en las alturas ni en las profundidades, de hecho, nada en toda la creación
podrá jamás separarnos del amor de Dios, que está revelado en Cristo Jesús nuestro Señor.
Basándonos en esta hermosa verdad, entonces vemos a Dios cuidándonos,
ayudándonos y buscando siempre nuestro bien, poniendo almohadas para
nuestros corazones cansados.