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A L.·. G.·. D.·. G.·. A.·. D.·. U.·.

SOBERANO CAPITULO ROSACRUZ


Luz del Caribe No 58

M S y P M
EExcy PPerf CCab Prim y Seg Vig
PPerf CCab Todos.

De Conciencia y consciencia.

Reencontrar el camino a recorrer entre la escuadra y el compás es tarea


indispensable en el aprendizaje del maestro secreto, para ese propósito se nos
dan las enseñanzas a través de símbolos que con ayuda divina nos permitirá
encontrar el vinculo eterno que hay entre lo material y lo divino, entre lo profano y
lo sagrado entre el cuerpo y el espíritu. Vinculo no fácil de establecer, filósofos y
científicos han dedicado enormes cantidades de energía a ese menester, Sir.
Roger Penrose eminente matematico, fisico y filosofo ingles postula que la mente
y el cerebro, son dos entidades separadas cuyo vinculo físico no ha podido ser
establecido, mas aun plantea la inexistencia de vinculo físico entre el cerebro
humano y la consciencia.

Y aunque no exista un vinculo físico entre cerebro y mente, entre cerebro y


consciencia, el iniciado aprenderá de la existencia de la conciencia libre y de la
conciencia Universal como perennes vigilantes internos de nuestros pasos y
nuestro actuar, en el trayecto entre la escuadra y el compas, sabemos de la
intuición esa otra misteriosa y maravillosa facultad humana que nos informa de la
presencia eventos no registrados por el intelecto, suerte de alarma divina que nos
anuncia lo bueno y lo malo antes de que estos se hagan presentes, la intuición
nos permite hacernos conscientes de las amenazas, o de las potenciales
violaciones a los códigos de nuestra conciencia, siempre y cuando estemos
atentos y oigamos los avisos.

Recibimos en la ceremonia de iniciación al grado 4 una llave de marfil


blanco que nos permitirá abrir el santuario de nuestra conciencia, y contrastar de
manera consciente nuestro vivir, nuestras acciones, nuestros pensamientos,
nuestras omisiones con los dictámenes de nuestra conciencia propia y de la
conciencia Universal. Se nos da el signo del silencio, del mágico y maravilloso
silencio pues solo en silencio, que en el exterior es ausencia de ruido, podremos
encontrar el silencio interno que es estado de atención y consciencia, es ausencia
de ego, es esencia divina es espíritu.
La obediencia, y la fidelidad son las otras dos virtudes que ha de cultivar el
maestro secreto para transitar en este grado guiado por su conciencia libre, el
camino entre la escuadra y el compas sin extraviarse, la obediencia a los
dictámenes de su conciencia, y los postulados de la institución (leyes,landmarks,
constituciones y estatutos) y la fidelidad a los juramentos consignados que
resumen los deberes del masón y en particular del maestro secreto para con sus
hermanos y para con la institución y para consigo mismo.

La consciencia es la capacidad que tengo de darme cuenta de mi propia


existencia, de mi propio vivir, de mi respiración, de mis sentimientos, mis
emociones, mis pensamientos, de mis acciones y de mis omisiones, la autentica
experiencia solo es posible en total estado de atención, de consciencia, la única
forma que puedo hacer contacto con mi conciencia es desde la consciencia, la
consciencia es la llave que abre el arca divina, solo en estado consciente puede
aparecer mi capacidad de discernir entre la conducta que me acerca a la virtud y a
la divinidad y aquella que me aleja y que hace que pierda la ruta correcta entre la
escuadra y el compás.

La conciencia es el crisol donde se vacían todas las enseñanzas éticas


recibidas durante mi existencia, todos los valores, todas las diferencias entre bien
y mal, todo el aprendizaje de limites mapas y territorios que viene marcado en mis
genes.
Hay sin embargo un montón de ideas, valores, limites códices inculcados
por las religiones, la sociedad, la familia que solo sirven para moldearnos a su
conveniencia, y así como afuera nos ponen un sacerdote o un policía para
asegurarse de nuestra conducta, adentro pretenden instalarnos sus propias ideas
que nos sirvan de conciencia, y es entonces cuando aparece la iniciación
masónica que nos permite irnos gradualmente librando de falsos limites, falsos
conceptos, falsos mapas, falsas reglas que rayan en a menudo en el fanatismo y
la superstición, hasta llegar a un estado de conciencia libre y limpia, el camino de
la transformación consiste en dar a la luz la verdadera conciencia, en hacer
aflorar mi propia conciencia, que toda mi conducta mis acciones, y pensamientos,
se realicen en profundo respeto por mi mismo, por el otro y por lo otro, así
entonces comenzara a aparecer el maestro secreto que habita en nosotros.

Buda lo plantea en el óctuple sendero, La sabiduría se alcanza a través del:


Entendimiento correcto y del pensamiento correcto, La conducta ética consiste en
hablar correcto, actuar correcto y vivir correcto, y el camino de la consciencia, se
recorre a través de la intención correcta, la contemplación (observación) correcta
y la meditación (estado de consciencia) correcta, así pues la conciencia es el
marco referencial al que acudimos a contrastar nuestra conducta, nuestras
acciones y nuestros pensamientos y revisar si se desvían de las ancestrales
enseñanzas, de los ancestrales códigos éticos, de los limites aceptados
transmitidos a nosotros de generación en generación, y la forma de hacerlo es
haciéndonos conscientes de nosotros mismos, convirtiéndonos en perennes
testigos de nuestro actuar y pensar, de esa manera podremos atajarnos antes de
encontrarnos en territorio en el que violamos el códice de la conciencia, el códice
ya limpio y aceptado por nosotros como propio, lo que normalmente sucede es
que como vamos en piloto automático, nos damos cuenta tarde de haber violado
los limites, y surge entonces la culpa (remordimiento) que es la forma que tiene la
conciencia de recordarme la desviación,. El camino se resolver el remordimiento
(culpa) es el perdón, una vez que me responsabilizo (me hago consciente) de mis
acciones comienzo el proceso de perdonarme, el perdón ademas de un proceso
intelectual, es un proceso orgánico, no basta con el deseo de perdonarme o de
perdonar, necesito experienciarlo, vivirlo, a veces se da más rápido que otras pero
eventualmente el perdón llega cerrando aquello que esta abierto, la funcion de la
conciencia no es la de perdonar,la conciencia nos informa el terreno que pisamos,
el perdon es don divino que todos tenemos y que un vez ejercido la conciencia
regresa al inconsciente al estado intuitivo, y volvemos a tener de nuevo “La
conciencia tranquila”.
El camino de la luz es aquel por el que me hago consciente de que cada
una de mis acciones producirán una reacción, por la que tendré que hacerme
responsable, y por la que necesariamente tendré que enfrentar las
consecuencias, y si procedo de manera sabia evitare actos, pensamientos
acciones y omisiones que provoquen la necesidad de resolverlas y sopesarlas
mas tarde en mi alma y en mi corazón al confrontar esas acciones pensamientos
u omisiones con los dictados de mi conciencia libre.

Recorrer el camino entre la escuadra y el compas, sin perderme,


encontrar el justo centro en silencio alli donde esta la divinidad solo
sera posible si con la llave de mi discernimiento y mi consciencia abro
la divina arca de mi conciencia y dejo que esta me guie.

Jacobo Cifuentes
M:.M:. Gr:. 4

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