Una iglesia auténtica

Estamos viviendo una gran cantidad de enfermedades mentales, posiblemente una

gran cantidad de enfermedades se debe a la falta de amor. Si no hay amor, de nada
sirve, es como un metal que retiñe y no tiene un sentido real. Hay heridas del alma.

Colosenses 3:12 Entonces, como escogidos de Dios, santos y amados, revestíos de

tierna compasión, bondad, humildad, mansedumbre y paciencia; 13 soportándoos
unos a otros y perdonándoos unos a otros, si alguno tiene queja contra otro; como
Cristo os perdonó, así también hacedlo vosotros. 14 Y sobre todas estas cosas,
vestíos de amor, que es el vínculo de la unidad. (LBLA)

Para ponernos la nueva ropa nos debemos quitar la anterior. Si tenemos queja contra
otros perdonemos. Debemos vincularnos con lo que están pasando otros. Un vínculo
te lleva a otro lugar, podemos adjuntar un vínculo. ¿Qué te vincula a venir a una
iglesia? La fe en Cristo. Debemos estar revestidos de bondad, mansedumbre y
paciencia, el Señor nos pide que nos vistamos de eso. El problema es cuando nos
vestimos de otras cosas. Debes tomar la decisión de decidir con qué vestirnos.

1. Restaurar con mansedumbre

Gálatas 6:1 Hermanos, aun si alguno es sorprendido en alguna falta, vosotros que sois
espirituales, restauradlo en un espíritu de mansedumbre, mirándote a ti mismo, no sea
que tú también seas tentado. 2 Llevad los unos las cargas de los otros, y cumplid así
la ley de Cristo. (LBLA)

Es más importante el Invisible que el visible, el que sorprenda a alguien en una falta
debe restaurarlo en un espíritu de mansedumbre porque nosotros podemos fallar en lo
mismo.

En los últimos tiempos el amor de muchos se enfriará, pero preocupa más los de
adentro que los de afuera, para tener mansedumbre necesitamos relación con el
Espíritu Santo. Si comemos mansedumbre de Cristo podemos restaurar de esa
mansedumbre que el Señor ha depositado en ti.

El gozo no es una situación del momento, debemos comer del gozo de Cristo para
vivir una situación de aflicción. El vehículo que lo llevaba a la aflicción era el gozo
porque no es una emoción es un fruto del trabajo de tu vida espiritual con Cristo.

La mansedumbre es para domar el caballo, debemos ser apacibles y pacíficos, Jesús

no quiso recibir muchos títulos, pero dijo que era manso y humilde. La restauración
debe ser con mansedumbre, de esa manera se puede llevar las cargas con mayor
facilidad, la mansedumbre no implica debilidad sino el poder bajo control.

Necesitan caminar juntos el anciano y el joven, hay gracia de Dios que ha depositado
en ti, a veces los cristianos somos los que más nos criticamos. El que divide debilita y
puede gobernar, pero si están unidos va a ser más difícil.
 2. Vínculo de unidad- Amor

Somos seres vinculantes, a veces nos marcan desde hace mucho tiempo, el mundo
quiere dividirse y apartarte. La iglesia se va a modelar de acuerdo al ejemplo que mire
del pastor, nos van a reconocer por el amor. Los pastores deben oler a gente y a
ovejas.

3. El don de Cristo en nosotros

Efesios 4:1 Yo, pues, prisionero del Señor, os ruego que viváis de una manera digna
de la vocación con que habéis sido llamados, 2 con toda humildad y mansedumbre,
con paciencia, soportándoos unos a otros en amor, 3 esforzándoos por preservar la
unidad del Espíritu en el vínculo de la paz. 4 Hay un solo cuerpo y un solo Espíritu, así
como también vosotros fuisteis llamados en una misma esperanza de vuestra
vocación; 5 un solo Señor, una sola fe, un solo bautismo, 6 un solo Dios y Padre de
todos, que está sobre todos, por todos y en todos. 7 Pero a cada uno de nosotros se
nos ha concedido la gracia conforme a la medida del don de Cristo. (LBLA)

Dios pone gracia en ti, te pone un aceite para que seas bendición en el grupo que
lidera el pastor, debe rociar y bendecir a los que están cerca, esa medida y don de
Cristo debe estar en nosotros, no desprecies lo que Dios ha puesto en tu vida.

4. Vínculo con Cristo

Un momento en su Presencia va a traer fuerza, claridad y vida. Muchos necesitan

mansedumbre y otros que Dios ponga su mano y pueda levantarte, no hay temor más
fuerte que la Sangre de Cristo, no hay ruido más fuerte que la voz que nos llamó.
Quizás seas un Moisés, pero Dios te va a sorprender en lo cotidiano, apacentarás a
otro. Cuando el Señor les pidió a sus discípulos que oraran con Él, se durmieron.

Debes internalizar nuevamente que Jesús es nuestro Señor y como Él es Nuestro

Señor ya no conducimos nosotros sino Él.

Mateo 8:14 Al llegar Jesús a casa de Pedro, vio a la suegra de este que yacía en
cama con fiebre. 15 Le tocó la mano, y la fiebre la dejó; y ella se levantó y le servía.
(LBLA)

El Señor nos va a cuidar la casa, si el Señor nos cuidó cuando andábamos lejos,
¿cómo no nos va a cuidar ahora? Debemos vincularnos con la necesidad con los que
están en la iglesia.

5. Servicio en amor a otros

Mateo 25:40 Respondiendo el Rey, les dirá: «En verdad os digo que en cuanto lo
hicisteis a uno de estos hermanos míos, aun a los más pequeños, a mí lo hicisteis». 41
Entonces dirá también a los de su izquierda: «Apartaos de mí, malditos, al fuego
eterno que ha sido preparado para el diablo y sus ángeles. (LBLA)
El Señor quiere que sirvamos a los demás, a aquellos extranjeros que lo necesitan y a
aquellos que no tienen una cobertura.

6. Dar sin esperar nada a cambio

Mateo 5:43 Habéis oído que se dijo: «Amarás a tu prójimo y odiarás a tu enemigo». 44
Pero yo os digo: amad a vuestros enemigos y orad por los que os persiguen, 45 para
que seáis hijos de vuestro Padre que está en los cielos; porque Él hace salir su sol
sobre malos y buenos, y llover sobre justos e injustos. 46 Porque si amáis a los que os
aman, ¿qué recompensa tenéis? ¿No hacen también lo mismo los recaudadores de
impuestos? 47 Y si saludáis solamente a vuestros hermanos, ¿qué hacéis más que
otros? ¿No hacen también lo mismo los gentiles? 48 Por tanto, sed vosotros perfectos
como vuestro Padre celestial es perfecto. (LBLA)

Aquí Jesús nos llama a tener un amor sin medida, no es un intercambio, es un dar sin
esperar nada a cambio. Los pastores deben tener espalda de goma por las puñaladas.
Cuando te ataquen y necesitas hacer algo: ¿Cómo te gustaría que fueran contigo?
Debes restaurar con un espíritu de mansedumbre.

7. Comparte con los tuyos

Hechos 2:46 Día tras día continuaban unánimes en el templo y partiendo el pan en los
hogares, comían juntos con alegría y sencillez de corazón, 47 alabando a Dios y
hallando favor con todo el pueblo. Y el Señor añadía cada día al número de ellos los
que iban siendo salvos. (LBLA)

Comparte con los tuyos, con sencillez, no debe ser mucho, siéntate a escuchar a otros
y Dios va a traer gozo en tu vida