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Cimentaciones profundas

Pilotes con carga lateral


Cuando un pilote es solicitado por una carga horizontal o un par en su cabeza este
reacciona movilizando la resistencia pasiva del suelo en que se encuentra sumergido. La
distribución de presiones sobre el suelo depende de la rigidez del pilote y de la rigidez del
suelo. De acuerdo a la configuración deformada que adopta el pilote este se puede clasificar
como pilote corto (figura 1a) o pilote largo (figura 1b).

Figura 1

Para modelar el comportamiento del pilote con cargas normales o de servicio


supondremos que este se comporta como una viga sobre un apoyo elástico. Esta hipótesis es
cierta solo para cargas de pequeña magnitud suficientemente alejadas de la carga de falla del
sistema suelo pilote.
Es conocida la ecuación diferencial desarrollada en Resistencia de los materiales que
d 4x
sirve para describir el comportamiento de una viga E p I p 4  p( x) siendo Ep el módulo de
dz
elasticidad del pilote, Ip el momento de inercia del pilote y p(x) la reacción del suelo sobre el
pilote en función de la profundidad.
Si suponemos que el suelo reacciona en forma proporcional a la deflexión del pilote
entonces p( x)   kh  x por lo tanto la ecuación de la elástica del pilote se transforma en
d 4x
Ep I p  kh  x  0
dz 4
El parámetro kh es denominado módulo de reacción horizontal del suelo y se observa
que en suelos cohesivos preconsolidados se mantiene aproximadamente constante con la
profundidad y es igual al módulo de reacción vertical, en cambio en suelos granulares y en
arcillas normalmente consolidadas aumenta con la profundidad y es igual a kh ( z )  nh  z . En
la siguiente tabla se observan algunos valores para suelos arenosos

SUELO k1 (kN/m3)
Rígida 10000 – 25000
Arcilla Muy rígida 25000 – 50000
Dura 50000 o mayor

Sebastian Stefanini
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SUELO nh (kN/m3)
Suelta 1800 – 2200
Arena seca o húmeda Media 5500 – 7000
Densa 15000 – 18000
Suelta 1000 – 1400
Arena sumergida Media 3500 – 4500
densa 9000 - 12000

No debe olvidarse corregir los valores obtenidos por los coeficientes de tamaño
2
30cm  B  30cm 
kB  en el caso de los suelos cohesivos o k B    en el caso de los suelos
B  2B 
( L  0.5 B)
granulares y por el coeficiente de forma k s  .
1.5 L

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Método de Davisson y Hill (1963) para pilotes sumergidos en suelos homogéneos
cohesivos.

Qg R 3 M g R2
xz ( z )  Ax  Bx
Ep I p Ep I p
M z ( z )  Am Qg R  Bm M g
EpI p
Siendo R  4
kh

Suelos arcillosos (Davisson y Hill)

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Método de Mathlock y Reese (1960) para pilotes sumergidos en suelos homogéneos
no cohesivos.

Qg T 3 M gT 2
xz ( z )  Ax  Bx
Ep I p Ep I p
M z ( z )  AmQg T  Bm M g
Ep I p
Siendo T  5
nh

Suelos granulares (Matlock y Reese)

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En el caso en que el suelo no sea homogéneo, o sea que se encuentre estratificado, una
forma de modelar el sistema será mediante la consideración de una viga apoyada sobre una
cama de resortes elásticos cuya rigidez axial será igual al producto del módulo de reacción
horizontal por el área de influencia de cada resorte. En este caso es importante densificar la
cantidad de resortes próximos a la cabeza del pilote para así obtener resultados que mejor se
ajusten a la realidad.

Cuando las cargas horizontales sean importantes una alternativa es ejecutar al pilote
con un cierto grado de inclinación.

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Un método para estimar la capacidad de carga horizontal en la cabeza de un pilote es
considerar al mismo como una tablestaca de ancho B, empotrada en un suelo granular o
cohesivo según corresponda. En la figura 2 se observa un pilote empotrado en un suelo
granular y en la figura 3 en un suelo cohesivo. En ambos casos se alcanza la capacidad de
carga cuando el suelo desarrolla empuje pasivo y activo en torno al pilote.

Pilote en suelo no cohesivo

Figura 2

En donde
2
 8P  2  12 PL   2P 
D 4
D  D   0
  ( K p  K a )    ( K p  K a )    ( K p  K a ) 
2P
z 
 (K p  Ka )
 z3 ( K p  K a )
M max  P  ( L  z) 
6

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Pilote en suelo cohesivo

Figura 3

En donde
P  ( P  12cL)
4c  D 2  2 P  D  0
2c
P
z 
4c
4cz
M max  P  ( L  z) 
2

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Otro método para estimar la carga última de colapso del sistema suelo – pilote fue
desarrollado por Broms (1965). Este investigador observó que el sistema podría colapsar
debido a que el suelo supera su resistencia al corte o por porque el pilote supera su resistencia
a flexión. Los pilotes susceptibles de sufrir el primer tipo de falla se denominan cortos y los
pilotes que puedan fallar por flexión se los denomina largos.

Seguido se adjuntan los gráficos publicados por Broms. La figura 2a corresponde a


pilotes cortos en arena y la figura 2b a pilotes cortos en arcilla. En cambio la figura 3a
corresponde a pilotes largos en arena y la figura 3b a pilotes largos en arcilla.

Figura 2

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Figura 3

 
K p  tan 2  45º   es el coeficiente de empuje pasivo y My es la resistencia
 2
nominal del pilote a flexión.

Sebastian Stefanini

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