El contexto histórico de Roma abarca desde su fundación legendaria en el 753 a.C.

hasta la caída del Imperio Romano de Occidente en el año 476 d.C. Durante este
extenso período, Roma experimentó una transformación significativa desde una
pequeña ciudad-estado en la península itálica hasta convertirse en una de las
potencias imperiales más grandes y duraderas de la antigüedad.
La historia de Roma puede dividirse en varios períodos importantes:
1. Monarquía (753-509 a.C.): Según la leyenda, Roma fue fundada por Rómulo en el
año 753 a.C. y fue gobernada por siete reyes hasta la instauración de la República.
Este período inicial de la historia romana está envuelto en mitos y leyendas, por lo
que es difícil separar los hechos históricos de la ficción.

2. República (509-27 a.C.): La República Romana fue establecida en el año 509 a.C.
con la expulsión del último rey. Durante este período, Roma se expandió
gradualmente a través de conquistas militares y se convirtió en una potencia en el
Mediterráneo. La República estaba gobernada por un Senado y dos cónsules, pero a
medida que la expansión continuaba, se produjo una creciente tensión entre la
aristocracia y las clases bajas.

3. Imperio (27 a.C.-476 d.C.): En el año 27 a.C., Augusto se convirtió en el primer

emperador romano, marcando el comienzo del Imperio Romano. Durante los siglos
siguientes, el imperio se expandió aún más y alcanzó su máxima extensión bajo el
reinado de Trajano en el siglo II d.C. El imperio se caracterizó por su administración
eficiente, la construcción de monumentos y la consolidación de la paz y la estabilidad
en gran parte de Europa, el norte de África y el Oriente Medio.

Sin embargo, el Imperio Romano también enfrentó desafíos internos y externos.

Internamente, hubo conflictos políticos, intrigas y problemas económicos, incluida la
crisis del siglo III, que debilitó la autoridad central. Externamente, Roma se enfrentó
a amenazas de invasiones bárbaras y luchas fronterizas constantes. En el siglo IV
d.C., el emperador Constantino se convirtió al cristianismo, lo que tuvo un impacto
significativo en la religión y la sociedad romana.

Finalmente, en el año 476 d.C., el último emperador romano de Occidente, Rómulo

Augústulo, fue depuesto por Odoacro, líder de los hérulos, lo que marcó el fin oficial
del Imperio Romano de Occidente. Sin embargo, el Imperio Romano de Oriente,
conocido como el Imperio Bizantino, continuó existiendo hasta su caída en 1453.
 DEFINICION:

Roma es el nombre de una antigua ciudad y capital del Imperio Romano,

así como el nombre del imperio que gobernó gran parte del mundo
occidental durante varios siglos. También se utiliza para referirse a la
civilización y la cultura asociadas a esta ciudad y a su imperio.

Roma fue fundada, según la leyenda, en el año 753 a.C. en la península

itálica, en lo que hoy es Italia. Inicialmente, era una pequeña ciudad-
estado que se expandió gradualmente y se convirtió en una potencia
regional en el Mediterráneo.

El Imperio Romano, que surgió después de la época de la República, se

estableció en el año 27 a.C. con Augusto como el primer emperador.
Durante su apogeo, el Imperio Romano abarcó vastos territorios que
incluían gran parte de Europa, el norte de África y el Oriente Medio.

Roma se destacó por su gobierno centralizado, su eficiente

administración, su poderoso ejército y su sistema legal. También fue
conocida por su arquitectura monumental, con la construcción de
estructuras icónicas como el Coliseo, el Foro Romano y el Panteón.

En términos culturales, Roma tuvo una influencia significativa en la

literatura, el arte, la filosofía y la religión. El latín, el idioma de Roma, se
convirtió en la base del romance y fue utilizado ampliamente en la
administración y la Iglesia.

Hoy en día, Roma sigue siendo una ciudad importante en Italia y es

conocida por su rica historia, su patrimonio arquitectónico y sus vínculos
con la antigua civilización romana. También es sede del Vaticano, el
centro espiritual de la Iglesia Católica Romana.