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ABRIENDO PUERTAS

Como hemos anunciado, este mes estaremos platicando acerca de lo sobrenatural. Ya platicamos
de por qué nos llama tanto la atención a lo sobrenatural y hoy vamos a ir más allá.

Si te preguntara, oye ¿tú crees que existe un mundo espiritual? Algo además de este mundo físico.
¿qué responderías? Probablemente algunos piensen en esto como si fuera un multiverso ajeno
completamente al lugar donde vivimos, pero no. El mundo espiritual existe, lo creamos o no, y
habita aquí, con nosotros. No lo podemos ver (a veces) pero sí lo podemos sentir y experimentar,
sea para bien o para mal, y de eso vamos a platicar hoy.

En el mundo espiritual hay ángeles, el Espíritu Santo y también, existe el mal o como quizás lo
conoces, demonios. Los demonios son espíritus que habitan en el mundo espiritual y están ahí para
atormentarnos, para hacernos caer y hacer muy difícil nuestra vida cristiana.

Pero ¿así nada más? ¿O sea que voy caminando y de repente me topo en el aire con uno? No.

Al vivir en un mundo espiritual necesitan un lugar por donde entrar a nuestra vida, una puerta. Pero
antes de continuar ¿Qué es una puerta? De acuerdo con el diccionario es: Abertura en una pared o
valla que va desde el suelo hasta una altura adecuada y permite pasar de un lugar o ambiente a
otro; generalmente consta de un elemento de cierre, a veces tiene un picaporte para llamar; siempre
cierra la puerta de una casa con llave.

Hay decisiones que nosotros tomamos que van a afectar nuestra vida o nuestra herencia espiritual,
es una puerta que dejamos abierta para que el enemigo venga y traiga una maldición a nuestras
vidas. Las puertas abiertas son puertas espirituales que Satanás utiliza para tener entrada a tu vida
para atormentarte mental, física y emocionalmente. Estas puertas dan acceso al enemigo a tu alma
y tu cuerpo físico. Los espíritus buscan estas puertas porque les da permiso para causar estragos en
tu vida.

El propósito del enemigo es robar, matar y destruir, y lo hace a través de estas puertas abiertas
espirituales y Jesús nos advierte de esto en su Palabra. “El enemigo viene a robar, matar y destruir.
Yo he venido para que tengan vida y la tengan abundantemente" Juan 10:10.

De modo que, una puerta espiritual es aquella que abrimos consciente o inconscientemente por
medio de nuestras acciones o pensamientos con cualquiera de nuestros 5 sentidos y que da acceso
a los demonios para atacar nuestra vida.

Ahora que ya sabemos a qué nos referimos con una puerta espiritual debemos saber identificar
cómo son abiertas y también identificar si ya hemos abierto alguna. Y claro, necesitamos saber cómo
cerrarlas.

Antes de continuar debes saber que lo que estas por escuchar no se rige por lo que tú o yo creamos.
Puedes decidir no creer que el fuego quema, pero si lo tocas, te quemaras. Puedes decidir creer que
el aire no existe, pero aun así lo respiramos. Lo mismo sucede con el mundo espiritual, existe, está
aquí y hay una constante batalla por nuestras almas. Lo que hacemos tiene consecuencias para
bendición o maldición. Desconocer lo que dice la Palabra no nos exime de culpa. Peor es cuando la
conocemos y lo hacemos de forma intencional.
Un siervo que sabe lo que su amo quiere, pero no se prepara ni cumple las instrucciones, será
severamente castigado. Pero alguien que no lo sabe y hace algo malo, será castigado
levemente. Lucas 12:47-48a

Hace algunos años lo de moda y prohibido era jugar la quija, el tarot, consultar a un adivino/médium,
la lectura de las cartas o la mano y aunque esas cosas siguen vigentes y sí, son causas de dar entrada
a maldición en la vida, ya dejaron de ser las causas principales. Antes todo eso era en lo oculto,
ahora el peligro no está en las sombras sino oculto a plena vista. Antes se hacía en lo secreto. En los
bosques, cuevas, alejados de la ciudad. Ahora es dentro de la misma casa donde vive la gente.

¿A qué nos referimos? Es cierto que siempre han existido las películas de terror, pero ahora
sobreabundan, y no solo eso, también hay series con temas muy delicados que proyectan la
depresión, el suicidio, el sufrimiento y el asesinato como entretenimiento. Todo este contenido lo
que hace es desensibilizar a la persona que lo consume hasta llegar a ver como algo normal eso.

“Ay bueno, pero es solo una película/serie/juego, no pasa nada” ¿Eso crees?

El relativismo nos hace creer que todo lo que del diablo se dice es un juego y que no existe un ser
malvado que puede meterse en nuestros hogares e intentar destruirnos. Es así que, sin darnos
cuenta, realizamos prácticas que le abren las puertas de par en par. El diablo aprovecha estos
espacios y nos engaña, nos hace creer cuentos fantásticos para finalmente ingresar en nuestras
vidas y en nuestro espíritu.

Recuerda que nosotros somos cuerpo, alma (que son las emociones) y espíritu, y es nuestro espíritu
el que anhela lo espiritual. Nuestro espíritu no busca satisfacer su hambre con comida o con
emociones, nuestro espíritu se llena de la presencia de Dios para estar vivo, o al menos así debería
de ser. ¿Cómo te has sentido después de tener un tiempo cantando alabanzas? ¿o qué tal después
de meditar en la Palabra o teniendo un tiempo de oración? Nuestro espíritu se fortalece y se vuelve
más sensible a la presencia de Dios, a lo sobrenatural, pero cuando hacemos lo contrario, cuando
consumimos contenido que en lo secreto o a plena vista son contenido demoniaco, nuestro espíritu
se apaga e invariablemente abrimos puertas a los demonios.

Si tú eres una persona que tiene una relación con Jesús, pero de verdad llevas una, no solo de dientes
para afuera, te aseguro en primer lugar que no ves películas ni series de terror o cualquier contenido
que involucre suicidios, asesinatos o con contenido sexual. También te puedo asegurar que, si en
algún momento lo intentaste, sentiste temor. Eso era tu espíritu alertándote de que algo no estaba
bien. Pero ¿qué pasa cuando comenzamos a consumir ese material? EJEMPLO BREAKING BAD

Mientras más películas/series de terror ves, menos efecto te van haciendo. Es clásico escuchar a
alguien que dice que ya no le dan miedo y le toman por valiente. O ven una serie de asesinatos
donde se juega con la vida de las personas y piensan que es puro entretenimiento. Por ejemplo (el
juego del calamar/escuelas que emulan la serie)

¿Sabías que detrás de estos programas e incluso lugares que se construyen hay rituales en los que
se ofrecen sacrificios y todo se hace para que sean programas/lugares con éxito? Uno muy conocido
porque salió a la luz (aunque tampoco es como que lo ocultaron) es la ceremonia que se hizo en San
Gotardo por la inauguración del túnel.
¿Qué ocurre cuando se abren puertas al enemigo?

Hemos insistido que cuando se abren puertas al adversario, él toma ventaja y genera influencia
demoníaca en la persona.

Hay cuatro niveles sobresalientes en este tipo de injerencia de maldad sobre alguien que permitió
el ingreso de Satanás y sus huestes a su vida, de manera voluntaria o inconsciente: la opresión, el
tormento y la enajenación.

Opresión: Se presenta en creyentes y no creyentes. El enemigo busca vencer la residencia de la


persona. Opera por tentación y persecución. Se abren puertas a la influencia destructiva a través
del pecado.

Tormento: El demonio opera dentro de la persona, especialmente en alguna área específica. Él es


quien domina allí. Puede evidenciarse con insomnio, temores constantes, aislamiento, sentimientos
de persecución, depresión, desasosiego, problemas constantes, inclinación al suicidio. Es una
situación permanente en su vida. Una mujer de los gentiles, que vivía allí, se le acercó y le rogó:
«¡Ten misericordia de mí, oh Señor, Hijo de David! Pues mi hija está poseída por un demonio que la
atormenta terriblemente». Mateo 15:22

Posesión: La persona pierde control de sus pensamientos y acciones. (Ataques sorpresivos, sin
explicación médica, pérdida de coherencia y lucidez mental, desdoblamiento de la personalidad).
Un hombre de la multitud tomó la palabra y dijo:—Maestro, traje a mi hijo para que lo sanaras. Está
poseído por un espíritu maligno que no le permite hablar. Y, siempre que este espíritu se apodera
de él, lo tira violentamente al suelo y él echa espuma por la boca, rechina los dientes y se pone
rígido. Así que les pedí a tus discípulos que echaran fuera al espíritu maligno, pero no pudieron
hacerlo. Marcos 9:17-18

Enajenación: Posesión demoníaca completa: cuerpo, alma y espíritu. Pérdida total de dominio.
Luego llegaron a la región de los gerasenos, al otro lado del lago de Galilea. Mientras Jesús bajaba
de la barca, un hombre que estaba poseído por demonios salió a su encuentro. Por mucho tiempo,
había estado desnudo y sin hogar, y vivía entre las tumbas en las afueras de la ciudad. Lucas 8:26-
27

Debemos identificar que puertas se han abierto a causa de nuestras acciones para cerrarla. Esa es
la buena noticia. Una puerta abierta significa que puede ser cerrada, necesita ser cerrada y ¿Cómo
las puedo cerrar? A través del arrepentimiento del pecado que hizo que esa puerta se abriera,
después tenemos que salir de ese lugar, renunciar a estar en ese lugar y cerrar la puerta de pecado.
En otras palabras, arrepentirnos y no volver a cometer el mismo error, el mismo pecado y glorificar
a Dios por lo nuevo que ha empezado en ti.

Tú y yo somos hijos de Dios. Él nos creó con planes maravillosos, que escapan a todo nivel de
comprensión; sin embargo, fruto de las artimañas de maldad del enemigo, nos roba esas
bendiciones y es necesario poner un freno a su influencia.

Pero ustedes, mis queridos hijos, pertenecen a Dios. Ya lograron la victoria sobre esas personas,
porque el Espíritu que vive en ustedes es más poderoso que el espíritu que vive en el mundo. (1 Juan
4.4)
Hoy te invitamos a que tomes un tiempo y le pidas al Espíritu Santo que traiga a tu memoria todas
las puertas abiertas que puedas haber tenido o tengas aun, y hagas una oración de arrepentimiento
poniéndole ante su trono toda cosa que sea desobediencia a Dios o que no está de acuerdo con su
santidad. Dios ve tu corazón y tu sinceridad de arrepentimiento.

Oración: Padre Celestial vengo delante de ti en arrepentimiento por todas las puertas que haya
abierto, todo pecado que he cometido, todo pacto que haya hecho con conocimiento o sin
conocimiento. Te pido que ahora tomes control de mi vida, que guíes mi camino para ser una
persona integra para que todas las puertas de tus bendiciones sean activadas en mi vida. Renuncio
a toda obra del enemigo en mi vida que le haya permitido oprimirme o atarme sea que haya sido
herencia espiritual ancestral o sea que yo le haya dado autoridad y cierro todas las puertas de
maldiciones abiertas en mi vida. Declaro que a partir de este momento solo seguiré tu voluntad para
mi vida y que no volveré a ser la misma y que todo propósito tuyo para mi vida se cumple en el
nombre de Jesús.

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