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Manko Inka Yupanqui y Qori Ocllo

(1514 - 1545)
Inició la Rebelión y resistencia Inka en 1536, sitiando Cusco y llegando hasta Lima con su gran
ejército, quien llego dominar los armamentos españoles como cabalgar el caballo. Salio
victorioso en muchas batallas derrotando al ejército Español cuyo objetivo fue recuperar Cusco
y restaurar el Imperio de Tawantinsuyo.
Ingresó a Willkapampa en junio de 1537, junto a su Panaka Real portando las momias de los
principales gobernantes del Tawantinsuyo: Wirakocha Inka, Pachakutic Inka Yupanki, Tupac
Inka, Wayna Qhapaq y sus ídolos (Dioses) : Wanakaure, Punchaw, Mama killa, etc.
Murió asesinado en Vitkus por un grupo de traidores Almagristas.

Sayri Tupac
(1536-1561)
Hijo de Manko Inka, cuando obtuvo la mayoría de edad, recibió la Mascapaycha, que le
convirtió en sucesor de su padre.
Abandono Vilcabamba en 1557 presionado por los españoles, fue bautizado por el agustino
fray Juan de Vivero con el nombre de Diego, se casó con el qoya Maria Cusi Huarcay
Murio en Yucay envenenado por el Cañari Francisco Chillche

Titu Kusi Yupanki


(1526-1571)
Hijo de Manko Inka, fue sucesor de su padre en la lucha y rebelión contra la invasión española
Instauró una gran conspiración religiosa del Taki onqoy para recuperar la religión andina.
Firmo la Capitulación de Acobamba, siendo el primero en entablar un tratado entre la corona
española e inkaika.
Primer cronista Inka, convivió en Vitkus junto a Martin Pando con quien escribió “La
Instrucción Histórica del Inka”
Murió envenenado cerca al adoratorio de Chukip’alta.

Tupac Amaru Inka


(1545-1572)
Fue el último inka rebelde de Vilcabamba sucesor de Manko Inka. Fue apresado junto a su
joven esposa embarazada y también junto a sus parientes y principales generales, en la espesa
selva cerca al rio Picha por traición del curaka Manarie de una tribu nativa. Junto con el
también son confiscados las momias Inkas y el ídolo del “Dios Punchaw” y gran cantidad de
objetos de oro y plata.
Murió decapitado cuan valiente luchador sin rendir pleitesía al Virrey en la plaza de
Hawkaypata (Cusco) frente al lloro y lamento de la multitud, en setiembre de 1572.

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