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CRISIS Y SALIDAS

Arrancar y destruir, construir y plantar. La vocación de Jeremías.

el capítulo 1 contenía el llamado del profeta durante el reino de Josías, rey de Judá. Después
describimos la sucesión de reyes bajo los cuales Jeremías profetizó, culminando con
Sedequías. Cuando éste se rebeló, Nabucodonosor vino y destruyó Jerusalén enviando a
Sedequías cautivo a Babilonia. A Jeremías se le permitió continuar en la tierra de Judá y allí
continuó su ministerio entre el remanente de israelitas que había quedado en Jerusalén. Pero
ellos obligaron al profeta a ir con ellos a Egipto, donde Jeremías continuó su ministerio hasta el
día de su muerte.
hubo dos cosas que caracterizaron a la vida de Jeremías: sus lágrimas y su soledad. Podemos
decir que esas son las señales del ministerio cristiano en las vidas de aquellos que sirven a
Dios.
Ahora, en el versículo 4, de este capítulo 1 de Jeremías, leemos:
"Vino, pues, palabra del Señor a mí, diciendo"
Y así llegó la palabra del Señor a Jeremías. Nunca podríamos enfatizarlo demasiado. Tenemos
que estar dispuestos a escucharla, porque es un mensaje de la Palabra de Dios. No nos
proponemos explicar cómo Dios la hizo llegar al profeta, pero se la comunicó, y ha quedado
registrada para nosotros como la Palabra de Dios. Continuemos leyendo el versículo 5:
"Antes que te formara en el vientre, te conocí, y antes que nacieras, te consagré, te di por
profeta a las naciones."
Nos alegramos que la madre de Jeremías no creyera en el aborto, pues este gran profeta
entonces no habría nacido. El fue una persona desde el mismo momento en que fue
concebido. En el Salmo 139:15 el rey David dijo: No fue encubierto de ti mi cuerpo, aunque en
oculto fui formado y entretejido en lo más profundo de la tierra. Es decir, que él fue formado
en el vientre de su madre, y en ese momento, su vida comenzó. Porque hay un gran desarrollo
del feto en el mismo comienzo del proceso de gestación. El aborto es un crimen, a no ser que
se lleve a cabo para salvar una vida. Esa es la forma en que la Palabra de Dios considera este
tema. Dios le dijo a Jeremías, antes que te formara en el vientre, te conocí, y antes que
nacieras, te santifiqué, te consagré.
Ahora, ¿por qué le habló Dios de esta manera a Jeremías? Estimado oyente, es que Dios le iba
a pedir a Jeremías que comunicara un mensaje al pueblo de Judá que sería rechazado. El
profeta iba a ser encarcelado debido a su identificación pública del lado de Dios. Su mensaje
quebrantaría su propio corazón porque él amaba a su pueblo, y detestaba decirles lo que les
iba a suceder.
Pero Dios quería un hombre como éste, un hombre tierno. Para comunicar al pueblo Su
mensaje. A la corte de los antiguos reyes Acab y Jezabel Dios había enviado a un profeta duro
llamado Elías. Pero antes de que el reino de Judá fuera conducido al cautiverio, Dios quiso que
Su pueblo supiera que El los amaba, y que quería salvarlos, quería librarlos. Por tal motivo
escogió a este hombre Jeremías.
Por lo tanto Dios le estaba hablando de esta manera a Jeremías para animarle. Le dijo que El
era el que lo había llamado y lo había consagrado y nombrado profeta.
La palabra santificar simplemente significa "apartar, separar para el uso de Dios". Aquellas
vasijas viejas que había en el tabernáculo o tienda del desierto y en el templo, que habían sido
rozados y golpeados por el uso durante tantos años, fueron llamados "vasos santos" "vasos
santificados". Y, teniendo en cuanta que el aspecto de tales vasos indicaba claramente que
debían ser cambiados por otros nuevos, ¿por qué eran llamados "santos"? Porque estaban
dedicados al uso de Dios. Cualquier cosa que esté separada, dedicada al uso de Dios se
considera santificada.
Fue como si Dios le hubiera dicho a Jeremías: "Antes de que nacieras, te consagré para mi uso.
Así que no te preocupes por el efecto de tu mensaje. Tu simplemente comunícalo".
Francamente, Dios espera lo mismo de mí y de cada uno de nosotros. Yo me siento cómodo al
preparar estos mensajes y no ando con rodeos sino que digo las cosas directamente. Estamos
presentando la Palabra de Dios tal como ella es. Esa es mi responsabilidad. Y digo esto con el
mayor respeto. Yo no me siento responsable ante usted, estimado oyente, sino ante Dios, a
quien tengo que rendirle cuentas. Lamento mucho si en alguna ocasión lo que yo diga no es de
su agrado, aunque yo querría que lo fuera. Y conviene aclarar que la Palabra habla para todos.
En ese sentido estamos todos en el mismo nivel y suele hablarnos primero a quienes la
comunicamos a los demás; y a veces, esa Palabra señala áreas de nuestro carácter, de nuestra
vida, que no nos agrada escuchar. Así que una vez que nos hemos examinado a nosotros
mismos frente a ella, somos responsables ante Dios de comunicarla a los demás, porque
hemos sido dedicados a este ministerio. Y a veces, las personas se resienten contra el
mensajero, por causa del mensaje, porque el mensaje les molesta, les incomoda.
Y Dios continuó diciendo, como vemos en el versículo 5, te di por profeta a las naciones. Estas
palabras le dieron autoridad a Jeremías. Le proporcionaron ánimo que le ayudaría a soportar
los días oscuros que iba a vivir.
Veamos ahora la respuesta del profeta. Leamos el versículo 6:
"Yo dije: ¡Ah, ah, Señor Dios! ¡Yo no sé hablar, porque soy un muchacho!."
En aquellos días Jeremías tenía probablemente unos 20 años de edad, pero ante las palabras
de este versículo no nos lo imaginamos con esa edad. En realidad, él no era un niño en la
forma en que usted y yo pensamos de un niño. La palabra "niño" aquí es la misma palabra que
se tradujo "joven" en Zacarías 2:4, donde el ángel le dijo a Zacarías: Corre, habla a este joven
En verdad, Jeremías era un hombre joven y lo que quería decir era lo siguiente: "Yo soy joven,
una persona sin experiencia. No soy capaz de llevar a cabo semejante tarea. No me considero
preparado para ello."
Ahora, ¿se ha dado usted cuenta de que la persona que Dios usa, es la que piensa que no
puede hacer las cosas? Si usted piensa que puede hacerlas hoy, entonces, estimado oyente, no
creemos que Dios pueda a usarlo a usted.
En cierta ocasión, una persona que desempeñaba cierto ministerio cristiano fue a ver a un
siervo de Dios veterano, de gran experiencia, para quejarse, lleno de celos hacia otra personas,
y le dijo: "Yo tengo más capacidad que tal persona, mejor preparación, mayor facilidad de
palabra, y me gustaría saber por qué Dios está usando a esa persona, y no a mí". El veterano
maestro le respondió: "Su problema es que usted se considera capaz y competente para
hacerlo todo. La otra persona, a quien usted se refiere, cree que no puede llevar a cabo su
ministerio para Dios, por sí misma. Y el caso es que Dios siempre utiliza a esa clase de
personas, Dios elige a las personas que son conscientes de su debilidad."
Jeremías se sintió insuficiente, incapaz, poco preparado. Escuchemos la respuesta que Dios le
dio. Leamos el versículo 7, de este primer capítulo del libro de Jeremías:
"Me dijo el Señor: No digas: "Soy un muchacho", porque a todo lo que te envíe irás, y dirás
todo lo que te mande."
Tomemos nota de la frase dirás todo lo que te mande. Son precisamente las comunidades e
iglesias cristianas que creen en la Biblia las que están creciendo numéricamente y en
desarrollo espiritual, y en donde se vive una dinámica de testimonio y expansión. Allí los
maestros y predicadores creen lo que están diciendo, y no se dejan llevar por ideas o teorías
que suelen pasar con el tiempo, para dar lugar a otras. En estas palabras a Jeremías, vemos
que el profeta proclamaría su mensaje con una autoridad dada por Dios mismo. Por ello estas
palabras que le sirvieron de ánimo y de consuelo a él, son válidas también para todos aquellos
que difundimos la Palabra de Dios. Continuemos leyendo el versículo 8;
"No temas delante de ellos, porque contigo estoy para librarte, dice el Señor."
Aquí vemos la seguridad que transmiten estas palabras no temas delante de ellos. Esa
seguridad convierte la tarea de proclamar la Palabra de Dios en una labor agradable. Por ello
Dios le dijo que fuera a donde Él le enviara para comunicar Su mensaje con convicción y valor.
La palabra nunca volverá vacía, sino que cumplirá el propósito para el cual Dios la envió.
Cada vez se necesitan más personas que hablen con autoridad de lo que Dios ha escrito en Su
Palabra. Esto es todo lo que El nos pide que hagamos. En un sentido, es una tarea sencilla y en
otro sentido, es una labor muy difícil
Dios le dijo a Jeremías, No temas. . . porque contigo estoy para librarte. Es como si le hubiera
dicho: "¡Tranquilo, que estoy de tu parte!" Martín Lutero dijo: "Una sola persona con Dios,
constituye una mayoría". Y esto siempre ha sido cierto. Como cristianos podremos pensar que
estamos en minoría, pero a la hora de la verdad estamos en la mayoría. Continuemos leyendo
en este primer capítulo de Jeremías, el versículo 9:
"Extendió el Señor su mano y tocó mi boca, y me dijo el Señor: He puesto mis palabras en tu
boca."
He puesto mis palabras en tu boca. Esta es una frase muy importante, Dios ha inspirado las
palabras de las Sagradas Escrituras, no simplemente los pensamientos o las ideas de la
Escritura. Por ejemplo, el diablo no fue inspirado por Dios para contar una mentira, pero el
registro de la Biblia que relata que el diablo dijo una mentira, es inspirado.
Esta idea a veces no ha sido bien entendida y por tal motivo a veces no pueden recomendarse
algunas llamadas "traducciones" de la Biblia que, en realidad, pueden ser buenas
interpretaciones, pero como traducciones son deficientes, porque las mismas palabras de las
Sagradas Escrituras son inspiradas.
Y esta verdad confirmó la autoridad del mensaje de Jeremías. De ahí la importancia de que
Dios le dijera al profeta: he puesto mis palabras en tu boca. Y luego, en el versículo 10, dijo:
"Mira que te he puesto en este día sobre naciones y sobre reinos, para arrancar y destruir,
para arruinar y derribar, para edificar y plantar."
Jeremías profetizó durante los reinados de Josías, Joacaz, Joacim, Joaquín y Sedequías. Todos
estos reyes tenían varias oficinas y proyectos de gobierno. Todos tenían la intención de
mejorar Jerusalén. Iban a tratar los problemas para la ecología y el estado de los barrios bajos.
Cada uno tenía programas de asistencia social para los necesitados. Pero ninguno de ellos
prestó mucha atención al profeta Jeremías, más bien lo ignoraron. Ahora, han transcurrido
casi 3.000 años. ¿Podría hoy alguien mencionar alguno de aquellos proyectos
gubernamentales? ¿Podemos recordar algo digno de mención que haya hecho el rey
Sedequías? ¿O algún hecho meritorio realizado por Joacim y Joaquín? En la historia no ha
quedado nada bueno sobre ellos registrado. Sin embargo, en su tiempo, todos creyeron que
estaban actuando bien y gozando de la aceptación popular. Sin embargo, Jeremías fue
ignorado. Pero, ¿acerca de quien han leído innumerables creyentes de todas las épocas y
leemos en la actualidad? Pues acerca de Jeremías.
El libro de Jeremías, estimado oyente, es la Palabra de Dios. Ha sobrevivido y va a perdurar en
nuestra época. Usted y yo estamos viviendo en un mundo donde ya no se escucha a Dios. Su
voz ya no se escucha en los centros de decisión política, en las aulas de las universidades o en
colegios, y entre muchos científicos. Pero Dios continúa hablando y Su Palabra sobrevivirá.
Dios le estaba diciendo a Jeremías que le asignaría la responsabilidad de comunicar Su Palabra
al reino de Judá. Y el pobre Jeremías quería retirarse incluso antes de comenzar su tarea.
Después Dios le presentó a Jeremías dos grandes figuras relacionadas con su ministerio
profético. Leamos el versículo 11 de Jeremías 1.
"La palabra del Señor vino a mí, diciendo: «¿Qué ves tú, Jeremías?». Yo respondí: «Veo una
vara de almendro»."
El almendro era conocido como el "despertador" o el "observador". Era el primer árbol que
aparecía después de la larga noche del invierno con las flores de la primavera. Este era en
realidad el primer árbol que salía de la larga noche del invierno en el cual brotaban las flores
de la primavera. Y como el almendro, Jeremías tenía que ser como un reloj despertador. El iba
a tratar de despertar espiritualmente a la gente, pero ellos no querían que se les despertara. A
nadie que esté durmiendo le agrada que se le despierte. Un reloj despertador es uno de los
objetos más impopulares del mundo. Hay personas que incluso descargan su primer impulso
agresivo del día al despertarse y tratar de acallar ese sonido inoportuno. Y Jeremías iba a
actuar como un despertador para la nación de Judá. Y dijo en el versículo 12:
"Dijo el Señor: «Bien has visto, porque yo vigilo sobre mi palabra para ponerla por obra»."
Dios estaba diciendo que la palabra que le iba a dar al profeta los iba a despertar, les sacudiría
arrancándolos de su sueño profundo. Y en el versículo 13, leemos:
Vino a mí la palabra del Señor por segunda vez, diciendo: «¿Qué ves tú?». Yo dije: «Veo una
olla hirviendo, que se vierte desde el norte».
¿Cuál era esa olla hirviendo? En los días de Jeremías, Egipto y Asiria ya no constituían un
peligro para el reino del sur, o de Judá, pero alrededor de la llamada "media luna fértil", en el
norte, se había estaba gestando algo comparable a una olla hirviendo. Y se trataba del
creciente poder de Babilonia, que finalmente destruiría a Judá. La tarea de Jeremías consistiría
en advertir constantemente a su pueblo lo que le iba a suceder a su nación. Continuemos
escuchando las palabras del Señor en los versículos 14 y 15:
"Me dijo el Señor: Del norte irrumpirá el mal sobre todos los moradores de esta tierra. Porque
yo convoco a todas las familias de los reinos del norte, dice el Señor; vendrán, y pondrá cada
uno su campamento a la entrada de las puertas de Jerusalén, junto a todos sus muros en
derredor y contra todas las ciudades de Judá"
Un siglo antes, Dios había librado a Jerusalén de un enemigo, y en los días de Jeremías todos
los falsos profetas estaban yendo por todas partes diciendo que Dios los iba a librar otra vez.
Todos los profetas de Dios del pasado, Oseas, Joel, Amos, Miqueas y Nahum, todos aquellos
que habían sido contemporáneos del profeta Isaías, habían desaparecido de la escena.
Creemos que Sofonías y Habacuc aun vivían. Los profetas Ezequiel y Abdías también eran
contemporáneos de Jeremías, pero no iban a profetizar hasta que los cautivos estuvieran
realmente en Babilonia. EL profeta Daniel también profetizaría más adelante. Pero en ese
tiempo, Jeremías estuvo solo, y él tuvo que anunciar estos juicios que vendrían sobre la
nación.
Y, ¿cuál sería la reacción al mensaje? Leamos, finalmente por hoy, el versículo 19 de este
primer capítulo del libro de Jeremías.
"Pelearán contra ti, pero no te vencerán, porque yo estoy contigo, dice el Señor, para librarte."
Fue como si el Señor le hubiera dicho: "Sigue adelante Jeremías. Ellos se te van a resistir, no
querrán escuchar tu mensaje, pero tú tienes que comunicarlo". Jeremías se sintió incapaz e
indigno del oficio de profeta, y había expresado ese sentimiento como una excusa. Pero Dios
le dijo: "Voy a poner mis palabras en tu boca, y tu estarás expresando mis propias palabras."
Creemos que nadie debería subirse a un púlpito y pronunciar un mensaje hasta que tenga la
seguridad de que va a comunicar la Palabra de Dios. Si alguien tuviera dudas al respecto, o si
siente que debería expresar sus propias ideas, ideas que eludan mencionar o desnaturalicen
los puntos claves del evangelio, debería mantenerse alejado del púlpito. Indiferentemente de
su grado de conocimiento de las técnicas de la predicación, de cuanta conozca sobre la ciencia
de la interpretación, de cuanta teología, o del nivel de entrenamiento sofisticado que haya
recibido, debería de abstenerse de decir que va a exponer la Palabra de Dios, su realmente no
va a hacerlo. En el caso de Jeremías, él pudo tener la convicción y confianza de que iba a
expresar las mismas palabras de Dios.

LA COMUNIDAD DE ISRAEL EN CRISIS: EL EXILIO DE BABILONIA


Si observamos la historia de la humanidad, nos damos cuenta de que ésta ha pasado por
grandes crisis en cada cambio de época. ¿Por qué no estudiarlas para proyectar alguna luz
sobre nuestro mundo actual? Este es el objetivo de nuestro curso. Para cada una de estas
épocas o crisis, nos hemos hecho tres preguntas: 1) qué estaba en crisis; 2) qué “profetas” o
testimonios surgieron para dar esperanza e iluminar el camino, y 3) qué pueden decirnos ellos
sobre “nuestra” crisis actual.
Nos situamos perfectamente en la época del exilio del pueblo judío en Babilonia. El 609 antes
de Cristo, muere el rey de Israel, Josías, y el territorio queda dominado por faraones egipcios.
Poco después, el 597, el imperio de Babilonia de Nabucodonosor conquista Israel. Este vive el
dilema de resistir o transigir. Finalmente se decide por la primera opción contra toda lógica
política y el 587 el imperio destruye Jerusalén con su Templo. Empieza un largo exilio en
Babilonia que durará décadas hasta la reconstrucción del Templo en el 515 a. C.

En esta época aparecen dos grandes profetas: Jeremías e Isaías (el segundo, autor de los
capítulos 40-55 del libro de Isaías). Jeremías era una de las pocas voces que había advertido y
anunciado que Israel se encaminaba hacia el desastre si continuaba con su infidelidad a Dios y
si no cambiaba su sistema económico y político, injusto y corrupto. ¿Cómo podía ser
escuchado si poco antes, el 622 a. C., Israel vivió una segunda época dorada y próspera bajo el
Reinado de Josías en el que se dice que se produce el encuentro del Libro de la Ley, el
Deuteronomio? ¿No será Jeremías como aquellos que durante la burbuja inmobiliaria
denunciaban y advertían del riesgo que se estaba gestando?

Jeremías muere en el exilio. ¿Nos imaginamos la crisis económica (dominación y esclavitud),


moral (desánimo) y religiosa (“¿cómo puede haber permitido Yahvé la destrucción de su
templo?”) que vivió aquel pueblo? Lógicamente, las nuevas generaciones de judíos caen en la
tentación de acomodarse a las costumbres de Babilonia. ¡Cuántos inmigrantes sienten aquí la
crisis cultural y religiosa al llegar a un país diferente del suyo propio, además de la crisis del
paro!

En este contexto aparece el profeta Isaías (el llamado Deutero-Isaías) que genera utopía
imaginándose el retorno a la tierra prometida. El sufrimiento vivido con fe genera esperanza, y
la esperanza dinamiza el pueblo para buscar activamente el retorno.

En nuestro contexto, ¿no buscamos con ansiedad también “profetas” que nos den esperanza,
que nos digan que hay una salida posible a la crisis? ¿No buscamos a alguien que nos profetice
el tiempo que deberemos aguantar la destrucción constante de lugares de trabajo en nuestro
país? ¿No leemos con avidez las páginas económicas de los periódicos para encontrar a
alguien que nos diga que conoce la puerta de salida? ¿No nos rendiríamos con pasión al
Mesías que supiese infundir ánimos y asegurase que siguiéndolo nos llevaría la tierra
prometida de la prosperidad económica?
Palabras de jeremías sobre el reinado de Joaquín
Joacaz accedió al trono de Judá pero reinó solo por 3 meses, porque fue destituido por el
Faraón Necao, que elevó a Joaquín al trono. Este rey tuvo que pagar un impuesto a Egipto, y
entonces se vio obligado a imponer gravosos impuestos al pueblo. No pasó mucho tiempo
hasta que Nabucodonosor derrotó al rey egipcio y Joaquim se convirtió en un vasallo de
Babilonia. Joaquín se mantuvo en el trono por 3 años y se rebeló contra el rey de Babilonia,
ignorando las advertencias de Jeremías para que no lo hiciera. Jeremías también había
advertido antes contra realizar una alianza con Egipto, que estaría basada en una confianza
falsa. Pero los reyes de Judá no le prestaron atención y se hicieron cada vez más corruptos.
Solo Jeremías estaba del lado de Dios. Joaquín, un rey corrupto, ocupaba el trono. La situación
empeoraba cada vez más y él se preguntó qué iba a suceder. Dios le había asegurado a
Jeremías que Él se ocuparía de la situación. Leamos el 11:16, que dice: Olivo verde, hermoso
en su fruto y en su aspecto, llamó el Señor tu nombre. Pero al son de un recio estrépito hizo
encender fuego sobre él, y se quebraron sus ramas. El apóstol Pablo se refirió a esto en
Romanos 11, diciendo que el buen olivo verde había sido cortado y puesto a un lado. Y eso fue
exactamente lo que Dios hizo con aquel pueblo. Hoy Dios, de la misma raíz de ese buen olivo,
está haciendo crecer a un olivo silvestre. Y esto es lo que usted y yo somos. Nosotros somos la
Iglesia que ha sido injertada a la raíz, y esa raíz es Cristo. Como dijo Isaías en 53:2, Él es la raíz
que sale de tierra seca y El trae vida. Dios le dijo a Jeremías: "Yo me ocuparé de esto: yo
trataré este asunto". Dios tenía un plan que se extendía mucho más allá de las circunstancias
que Jeremías podía ver.

Palabras de Ezequiel a los deportados.


Ezequiel iba a mostrar a este pueblo que no iba a haber ninguna paz y que Jerusalén iba a ser
destruida. Escuchemos ahora lo que tuvo que hacer leyendo aquí en el capítulo 4, versículo 1:
"Tú, hijo de hombre, tómate un adobe, ponlo delante de ti y diseña sobre él la ciudad de
Jerusalén."
Estos ladrillos de adobe eran el material que usaba la gente de Babilonia para escribir. En estos
ladrillos guardaban sus archivos. Muchos de estos ladrillos han sido descubiertos, conteniendo
escritos grabados en ellos. Eran casi cuadrados y medían aproximadamente 35 x 30 cm.
Lo que tuvo que hacer Ezequiel fue dibujar la ciudad de Jerusalén en el ladrillo (y no sabemos
cómo lo hizo), y después tenía que romperlo para mostrar que la ciudad iba a ser destruida. Y
continúa diciendo el versículo 3:
"Toma también una plancha de hierro y ponla en lugar de muro de hierro entre ti y la ciudad;
afirmarás luego tu rostro contra ella, y será en lugar de cerco y la sitiarás. Es una señal para la
casa de Israel."
Tenía que tomar también una plancha de hierro y colocarla como un muro entre él y el dibujo
de la ciudad que él había preparado, para mostrar que Dios había puesto un muro entre El
mismo y la ciudad de Jerusalén. La destrucción de la ciudad era inevitable; no podría ser
detenida. ¡Qué forma tremenda de comunicar el mensaje de Dios a este pueblo!
La señal del ladrillo describió el sitio de Jerusalén. La segunda señal del recipiente mostraría las
privaciones del juicio divino, pues la gente iba a pasar por terribles sufrimientos. Una tercera
señal describiría castigos adicionales que caerían sobre Jerusalén. Fue la señal del pan
contaminado. Leamos entonces los versículos 9 al 13 de este cuarto capítulo:
"Toma para ti trigo, cebada, habas, lentejas, mijo y avena; ponlos en una vasija y hazte pan de
ellos para el número de los días que te acuestes sobre tu lado: trescientos noventa días
comerás de él. La comida que comerás será de peso de un cuarto de kilo al día; de tiempo en
tiempo la comerás. Y beberás el agua por medida, medio litro; de tiempo en tiempo la
beberás. Y comerás pan de cebada cocido debajo de la ceniza. Lo cocerás a vista de ellos en
fuego de excremento humano. Dijo el Señor: Así comerán los hijos de Israel su pan inmundo,
entre las naciones a donde yo los arrojaré."
Estas instrucciones resultarían agobiantes para la mayoría de nosotros, pero para Ezequiel
fueron especialmente difíciles de seguir porque él era un sacerdote y nunca había comido
nada impuro. Escuchemos su reacción leyendo el versículo 14 de este cuarto capítulo:
"Yo dije: «¡Ah, Señor, Dios!, mi alma no es impura, ni nunca desde mi juventud hasta este
tiempo comí cosa mortecina ni despedazada, ni nunca en mi boca entró carne inmunda."
Sin embargo, ésta tenía que ser una señal del Señor acerca del hambre que el pueblo sufriría
en el tiempo de la destrucción de la ciudad de Jerusalén. A pesar de las continuas promesas de
los profetas falsos, la ciudad y el pueblo iban a ser destruidos. Así que estas diferentes señales
describían los horrores que vendrían sobre ellos. Y así llegamos al
Ezequiel 5
En el cual tenemos
La señal del profeta afeitando su cabello
Este capítulo se inicia con Ezequiel representando aun otra señal para el pueblo. Leamos los
versículos 1 al 3 de ese quinto capítulo:
"Tú, hijo de hombre, tómate un cuchillo agudo, una navaja de barbero, y hazla pasar sobre tu
cabeza y tu barba; toma después una balanza de pesar y divide los cabellos. Una tercera parte
quemarás en el fuego en medio de la ciudad, cuando se cumplan los días del asedio; tomarás
otra tercera parte y la cortarás con espada alrededor de la ciudad, y la otra tercera parte
esparcirás al viento, y yo desenvainaré espada en pos de ellos. Tomarás también de allí unos
cuantos y los atarás en la falda de tu manto."
¿Pero cuál era el significado de todo esto? Tenía que afeitarse la cabeza y la barba, lo cual era
una acción inusual para un sacerdote. Esto era algo muy extraño de hacer de parte de un
sacerdote. Nos imaginamos que el pueblo se reunió alrededor de él para observarlo mientras
Ezequiel se afeitaba en público.
Después de afeitarse, Ezequiel separó cuidadosamente su cabello en tres partes. Luego tomó
una tercera parte del cabello y la quemó dentro de la ciudad. Esto representó al pueblo que
iba a permanecer sitiado y quemado con fuego dentro de la ciudad en el momento de su
destrucción. Y esto fue exactamente lo que les sucedió. Después tomó la segunda tercera
parte de los cabellos y los cortó, los desmenuzó. Este acto describió lo que le ocurriría al
pueblo que viviera en el momento del sitio; caerían muertos a espada. Y la última tercera
parte debía ser esparcida; esto incluiría a aquellos que descendieron a Egipto llevándose a
Jeremías en el grupo. Y el pequeño remanente del pueblo de Dios que finalmente regresaría a
la ciudad fue ilustrado por los pocos cabellos que fueron atados al borde del manto de
Ezequiel. Y la explicación continuó en el versículo 12 de este tercer capítulo:
"Una tercera parte de ti morirá de peste y será consumida de hambre en medio de ti; una
tercera parte caerá a espada alrededor de ti, y otra tercera parte esparciré a todos los vientos;
y tras ellos desenvainaré espada."
Este fue el mensaje que Ezequiel comunicó, y transmitió su significado con toda claridad.
Finalmente, por hoy leamos el resto del mensaje en el versículo 17 de este quinto capítulo:
"Enviaré, pues, sobre vosotros hambre y bestias feroces que te destruyan; peste y sangre
pasarán por en medio de ti, y enviaré sobre ti espada. Yo, el Señor, he hablado."
La advertencia de Ezequiel al pueblo fue desatendida. La destrucción de Jerusalén y el
sufrimiento soportado por el pueblo deberían ser para nosotros una advertencia de la realidad
del juicio divino. Pero estamos muy alejados en el tiempo de aquellos terribles
acontecimientos y muy pocas personas hoy conocen verdaderamente la Palabra de Dios. (El
mayor pecado entre los cristianos es la ignorancia de la Palabra de Dios). Dios comunicó esta
advertencia al pueblo de Jerusalén, pero Sus palabras tienen también un mensaje para
nosotros, como lo tiene toda la Biblia. Estimado oyente, cuando el juicio de Dios comience, va
a ser demasiado tarde para que usted tome una decisión. Por ello le decimos que hoy, cuando
usted escuche Su voz, Él le dice, como escribió San Pablo en 2 Corintios 6:2, Ahora es el tiempo
aceptable; ahora es el día de salvación. Se habla de una generación que cuestiona el cinismo
religioso predominante en la cultura occidental y hace recaer el énfasis en la intencionalidad
de los actos. Pero aquellos que realmente realizan un acto de consecuencias seculares y
espirituales, y de alcance eterno, es decir, un acto que afecte la existencia más allá de esta
vida terrenal, son aquellos que no han postergado su decisión, sino que ya han aceptado la
salvación de Dios.

TEMOR DE DIOS. ¿Qué es eso?


Isaías 11
Al comenzar nuestro estudio de hoy recordemos que nos encontramos en una sección de
profecía del Libro de Isaías que comenzó en el capítulo 7 y que concluirá en el capítulo 12. Hay
un progreso, un desarrollo en esta sección de profecías que fueron pronunciadas todas
durante el reinado del rey Acaz. En los capítulos anteriores hemos visto la descripción de
tiempos de juicio, un período al cual el Señor Jesús llamó la "Gran Tribulación". Y de esta
manera llegamos a este capítulo 11, que constituye una de las grandes profecías mesiánicas de
las Sagradas Escrituras. Es decir, que nos habla de la venida de Cristo para establecer Su reino,
y nos muestra el tipo de programa que desarrollará. Así es que tenemos en este capítulo la
persona y el poder del Rey, así como el propósito y el programa del reino. En el capítulo 12
podremos ver la culminación de esta prolongada sección y en él veremos la adoración del
Señor en el Reino.
Con respecto a este capítulo 11 diremos que en los versículos 1 y 2 se habla de la Persona y el
poder del Rey. Luego tenemos el propósito del reino en los versículos 3 al 5; luego en los
versículos 6 y 7 se nos dan algunos detalles sobre la vida en el reino, y en los versículos 10 al
16, se habla sobre el programa del reino.
Leamos el versículo 1 de este capítulo 11 de Isaías, donde comienza a hablarse de:
La persona y el poder del rey
"Saldrá una vara del tronco de Isaí; un vástago retoñará de sus raíces"
Otra traducción lo expresa de esta manera: "Y brotará un retoño del trono de Isaí, y un
vástago de sus raíces dará fruto". Observemos que aquí se menciona una "vara" o un retoño,
pero no se hace referencia a David; se menciona al padre de David. Aquí se habla de una vara
o un vástago viviente procedería de él. Vamos a tratar este tema cuando estudiemos el
capítulo 53, cuando veamos allí al Señor Jesucristo como la Vara, el Vástago y el Tronco que
procede del mismo rey David. Por supuesto que en nuestro pasaje de hoy se explica que Él
formaría parte de la descendencia de David, pero ¿por qué el profeta Isaías retrocedió hasta
Isaí? Bueno, el linaje real comenzó con David. Isaí era un agricultor, un pastor de ovejas, vivía
en una pequeña población llamada Belén. El linaje real, la línea de descendencia de David se
había rebajado al nivel de un campesino. Ya no pertenecía a un príncipe criado en un palacio,
sino a Alguien criado en el taller de un carpintero. Por lo tanto, Isaías escribió, con delicadeza,
que el retoño procedería del tronco de Isaí.
Ésta es la segunda oportunidad en que se menciona esta vara o retoño. La primera vez fue
mencionada en Isaías 4:2. Como ya hemos dicho anteriormente, hay unas 18 palabras en
hebreo que son traducidas como vara. Y éste es uno de los títulos que se le ha dado al Señor
Jesucristo. En el capítulo 53, de este mismo libro de Isaías, se le menciona como una raíz que
sale de tierra seca.
Delitzsch, un gran erudito hebreo dijo: "En el cumplimiento histórico, aún el sonido de las
palabras de la profecía se destaca, y la palabra para vara aquí, es "nehtzer"; el nehtzer, al
principio tan humilde, era un pobre nazareno" (como podemos ver en Mateo 2:23). Cristo tuvo
un origen humilde, naciendo allá en Belén, la ciudad de David, pero también la ciudad de Isaí.
Ahora, leamos el versículo 2, de este capítulo 11 de Isaías, donde podemos ver algunas
características del Rey:
"Y reposará sobre él el espíritu del Señor: espíritu de sabiduría y de inteligencia, espíritu de
consejo y de poder, espíritu de conocimiento y de temor del Señor."
Éstos son las siete características del espíritu que reposó sobre el Señor Jesucristo, y que
expresan la plenitud del poder: (1) es del Señor; (2) de sabiduría; (3) de inteligencia; (4) de
consejo; (5) de poder; (6) de conocimiento y (7) de temor del Señor. El número siete en las
Sagradas Escrituras no representa necesariamente a la perfección. La idea principal significa
plenitud, algo que es completo. En el Evangelio de Juan 3:34 leemos: "Dios no da el Espíritu
por medida". Y en la carta del apóstol Pablo a los Efesios 5:18 se nos aconseja sed llenos del
Espíritu. En el recipiente de nuestra vida cristiana, algunos de nosotros tenemos sólo unas
gotas allí en el fondo, otros tienen una cuarta parte del vaso, otros la mitad. Realmente uno
encuentra a pocos cristianos que estén verdaderamente llenos del Espíritu Santo. Una niña
solía decir en su oración: "Señor, lléname de Tu Espíritu Santo. Yo no puedo tener mucha
cantidad, pero puedo rebosar mucho". Y hay muy pocos creyentes que están tan llenos que
rebosan por todas partes. En este sentido, el Señor Jesucristo fue una excepción.
(1) Se nos dice aquí que en primer lugar reposará sobre Él el Espíritu del Señor. El Señor
Jesucristo, en su humanidad, vivió en el poder del Espíritu. Cuando Él regrese, va a gobernar
en el poder del Espíritu.
(2) Aquí vemos que es el espíritu de sabiduría. En la primera epístola de Pablo a los Corintios
1:30 dice que Dios le ha hecho nuestra sabiduría. En el día de hoy, Él es el único que puede
guiarnos a través de esta vida. La realidad, amigo oyente, es que, ni usted ni yo podemos
enfrentarnos al mundo del presente. El Señor Jesucristo pudo decir en Juan 14:30, "viene el
príncipe de este mundo, y él nada tiene en mí". Satanás no tiene ningún poder ni dominio
sobre Él, pero sí puede encontrar algo en nosotros. Necesitamos el espíritu de sabiduría y el
Señor Jesucristo es ese espíritu de sabiduría.
(3). Aquí se menciona también un espíritu de inteligencia, lo cual se refiere a un
discernimiento espiritual. Es algo realmente entristecedor descubrir que pocos creyentes
tienen alguna clase de discernimiento. Nos sorprende ver la forma en que algunas personas
siguen a un individuo, basándose solamente en experiencias humanas. Parece que valoran su
apariencia o el sonido de su voz, pero no comprenden realmente lo que está diciendo, o si lo
que está diciendo está de acuerdo con la Palabra de Dios. Los cristianos necesitan ese espíritu
de inteligencia. Ésta es una de las cosas por las cuales siempre hemos orado y que parece ser
más necesaria que nunca antes. Necesitamos ser conscientes de quienes están de parte del
Señor, y quienes no lo están.
Esta falta de inteligencia para considerar los asuntos espirituales se manifiesta de muchas
maneras. Algunos cristianos evidencian una falta de comprensión del carácter, o de la
situación de otros cristianos. En otros se nota una falta de comprensión de los alcances y
posibilidades de la obra de Dios. Hay algunos que juzgan las cosas a primera vista, sin
profundizar y emiten juicios u opiniones apresuradas. A veces los creyentes se dejan
influenciar fácilmente por las opiniones de los demás, no distinguen las motivaciones ni
perciben si éstas son espirituales o simplemente egoístas. Amigo oyente, cuan importante es
la Inteligencia espiritual. ¿Ha orado usted alguna vez por eso? Pídale a Dios que le dé el
espíritu de inteligencia, para aplicarlo a todos los asuntos personales de su vida y a los
derivados de su relación con otros cristianos y no cristianos.
(4) Luego, dice aquí en este versículo 2: Espíritu de consejo. Todos nosotros necesitamos
consejo. ¿Ha notado usted que el Señor Jesucristo nunca le pidió consejo ni dirección a nadie?
Él daba consejos a los demás.
(5) Dice también: Espíritu de poder. ¡Cuánto necesitamos poder en el día de hoy! El Apóstol
Pablo, escribiendo a los Filipenses, en 3:10, y hablando del Señor Jesucristo, manifestaba su
deseo de conocerle, y de conocer el poder de su resurrección. Y tenemos que reconocer que
necesitamos esa fuerza, esa energía espiritual, ese poder.
(6 y 7) el versículo dos finaliza mencionando el espíritu de conocimiento y el espíritu de temor
del Señor. Y aquí tenemos algo otra vez que es indispensable en la formación del carácter
cristiano, que podemos adquirir mediante el estudio de la Palabra de Dios, bajo la guía del
Espíritu Santo.
Continuemos leyendo ahora los versículos 3 y 4 de este capítulo 11 del libro del profeta Isaías,
que comienzan a hablarnos sobre:
El propósito del reino
"Y le hará entender diligente en el temor del Señor. No juzgará según la vista de sus ojos ni
resolverá por lo que oigan sus oídos, 4sino que juzgará con justicia a los pobres y resolverá con
equidad a favor de los mansos de la tierra. Herirá la tierra con la vara de su boca y con el
espíritu de sus labios matará al impío."
Observemos aquí la última frase del versículo 4, en la que se dice que Él matará al impío. Esto
se refiere a la época en que Satanás tenga su apogeo sobre la tierra, durante la Gran
Tribulación. Y humanamente hablando, no habrá liberación para el mundo en dicho período.
Aun Israel clamará, y la ayuda no vendrá del norte ni del sur, ni del este, ni del oeste. La ayuda
vendrá de arriba. En aquel tiempo llegará el Mesías y Él establecerá Su reino. El propósito de la
venida del Señor a este mundo, será muy evidente. Es que este mundo necesita quién lo
gobierne. El mundo no le ha elegido ni votado por Él, ni tampoco lo hará en el futuro. Pero
éste es el Universo de Dios, y Él colocará al Mesías aquí en la tierra. Como dice el versículo 3,
No juzgará según la vista de sus ojos, es decir, que no juzgará según las apariencias, ni
tampoco por lo que oigan sus oídos, es decir, que no pronunciará sentencia fundándose en
rumores. No habrá juicios prolongados, ni dudas, ni fallos en la aplicación de la justicia, como a
veces sucede en la actualidad, cuando los culpables se las arreglan para eludir el castigo que
les corresponde. Todo este asunto reviste una gran severidad para algunos, y una gran
responsabilidad para otros. Habrá dos juicios; uno para los creyentes, y otro para los no
creyentes. Al principio de la tribulación los creyentes tendrán que presentarse ante el tribunal
de Cristo. La presencia de los creyentes frente al tribunal de Cristo fue descrita por el apóstol
Pablo en su Segunda epístola a los Corintios, capítulo 5, versículo 10. Luego, al final del reinado
de Cristo, habrá otro juicio para los que no creyeron en Jesucristo, como podemos ver en
Apocalipsis, capítulo 20, versículos 11 y 12, juicio que la Biblia llama el Gran Trono Blanco.
En lo que respecta a los creyentes, es decir, los que ya hemos encontrado la salvación gracias a
la obra de Cristo en la cruz, como ya hemos dicho, tendremos que presentarnos tendremos
que presentarnos ante el Señor Jesucristo. Todo lo que en nuestra vida cristiana haya sido
falso o aparente, saldrá a relucir en aquel día. Por ello, sería conveniente que mientras
estemos aquí en la tierra, nos sometamos al examen de Su Palabra y a la acción de Su Espíritu
y nos despojemos de todo lo que no sea auténtico, y seamos transparentes ante esa luz divina
y ante la mirada de los demás, ya que algún día todo quedará expuesto y a la vista.
Leamos ahora el versículo 5 de este capítulo 11 de Isaías, que dice:
"Y será la justicia cinto de sus caderas, y la fidelidad ceñirá su cintura."
Es decir, que como el rey estará revestido de justicia y fidelidad, ése será el propósito de Su
reino. Ese reinado caracterizado por la justicia y la fidelidad también tendrá el propósito de
restaurar el dominio sobre la creación, perdido por Adán en el jardín del Edén cuando el
pecado entró en la raza humana. Recordemos nuestras consideraciones al estudiar el libro del
Génesis.
Leamos ahora los versículos 6 y 7 de este capítulo 11 de Isaías, en los cuales se dan algunos:
Detalles del reino
"Morará el lobo con el cordero, y el leopardo con el cabrito se acostará; el becerro, el león y la
bestia doméstica andarán juntos, y un niño los pastoreará. La vaca pacerá junto a la osa, sus
crías se recostarán juntas; y el león, como el buey, comerá paja."
Durante el reinado del Señor sobre la tierra, el ternero y el cachorro del león andarán juntos.
De todos son conocidos los instintos de estos animales. En la actualidad la única manera en
que estén juntos es que el ternero se encuentre en el estómago del león.
Y a nosotros, puede parecernos ridículo que el león coma paja, conociendo los hábitos
alimenticios de este animal feroz. Sin embargo, en esta imagen vemos a los animales más
incompatibles viviendo en paz, y a los más feroces transformados en animales dóciles y
tranquilos. Este cambio, que va contra instintos naturales, y actualmente imposible, sólo
puede ser logrado por el creador del león. Y el versículo 9 añade:
"No harán mal ni dañarán en todo mi santo monte, porque la tierra será llena del
conocimiento del Señor, como las aguas cubren el mar."
Estas palabras de la segunda parte del versículo 9 también fueron citadas por el profeta
Habacuc, en su capítulo 2 versículo 14. Aquí se nos describe la enorme extensión de este
reino, que abarcará la totalidad de la tierra.
Leamos ahora el versículo 10 de este capítulo 11 de Isaías, que comienza a hablarnos de:
El programa del reino
"Acontecerá en aquel tiempo que la raíz de Isaí, la cual estará puesta por estandarte a los
pueblos, será buscada por las gentes; y su habitación será gloriosa."
La clave de este versículo se encuentra en la frase en aquel tiempo o, "en aquel día" como
traducen otras versiones de la Biblia. Ese "día" o tiempo comenzará con la tribulación y
continuará hasta el reino. Y los no judíos tendrán una parte en ese reino que la Biblia describe
como el reino milenario en el capítulo 20 del libro de Apocalipsis.
Y en el versículo 11, leemos:
"Asimismo, acontecerá en aquel tiempo que el Señor alzará otra vez su mano para recobrar el
resto de su pueblo que aún quede en Asiria, Egipto, Patros, Etiopía, Elam, Sinar y Hamat, y en
las costas del mar."
De acuerdo con esta profecía, Dios restaurará a los israelitas a la tierra. Recordemos que ellos
fueron establecidos allí por primera vez cuando Moisés los sacó de las tierras de Egipto, y
posteriormente fueron introducidos a la tierra de Canaán por Josué, que fue el sucesor de
Moisés.
Luego, el versículo 12 dice:
"Levantará estandarte ante las naciones, juntará los desterrados de Israel y desde los cuatro
confines de la tierra reunirá a los esparcidos de Judá."
¿Cuál es ese estandarte, esa bandera o insignia? Bueno, esa insignia no es otra cosa que el
Señor Jesucristo mismo. No se trata de una bandera que alguien levantará. Esta expresión
simboliza el hecho de que en aquel día Él será el punto o centro de reunión para los humildes
que se encuentren en la tierra. Recordemos las bienaventuranzas pronunciadas por el Señor
mismo en el Sermón del Monte, según el relato del Evangelio de Mateo 5. En aquella ocasión
el Señor Jesucristo dijo que los humildes heredarían la tierra. Aquí tenemos el cumplimiento
de aquellas palabras, de acuerdo con los planes de Dios. Éste será su programa, y Él lo llevará a
cabo.
Finalmente, por hoy, leamos el último versículo de este capítulo 11, el versículo 16, que dice:
"Y habrá camino para el resto de su pueblo, el que quedó de Asiria, de la manera que lo hubo
para Israel el día que subió de la tierra de Egipto."
Éste y los versículos precedentes parecen indicar que se abrirá una gran vía de comunicación
desde Asiria hasta Egipto, pasando por las tierras de Palestina. El retorno desde Asiria aquí
mencionado podría ser quizás representativo de todos los lugares desde donde el remanente
vendrá. Sería entonces como la salida de Egipto, en el pasado. El profeta Isaías no sabía
cuándo ese nuevo éxodo tendría lugar, es posible que haya pensado que ocurriría pronto. Y
proyectándonos hacia el futuro, aparentemente, y tal como profetizó el profeta Zacarías en su
capítulo 14:16-18, las naciones del mundo vendrán a Jerusalén para adorar al Rey de reyes y
Señor de Señores.
Estimado oyente, este capítulo 11 también presenta los aspectos que la Biblia presenta como
la culminación en la historia del programa de Dios, y Él lo realizará en todos los detalles que ha
previsto llevar a cabo. De todas formas, Dios, por Su Palabra no sólo habla para los tiempos
futuros. El Evangelio constituye Su mensaje para el día de hoy. Recordemos que según el
relato del libro de los Hechos de los Apóstoles 17:30 y 31, el apóstol Pablo, predicando en
Atenas dijo: "Dios declara ahora a todos los hombres, en todas partes, que se arrepientan,
porque Él ha establecido un día en el cual juzgará al mundo en justicia, por medio de un
Hombre, Jesucristo, a quien ha designado, habiendo presentado pruebas a todos los hombres
al resucitarle de entre los muertos."
Actualidad del temor de Dios
La situación del pueblo va de mal en peor por falta del temor de Dios! Nada más verdadero
que esta afirmación. Los gobernantes y poderosos solo piensan en sus intereses, solo protegen
y defienden a los más fuertes y, ¡ay del más débil! Esta solo y sin defensa y eso es, según la
biblia, ¡literalmente falta de temor de Dios en aquellos que mandan!
Si a los gobernantes falta el temor de Dios, a nosotros, pueblo, es necesario hacer crecer la
“intimidad con Dios”. El único camino que buscamos tener, cada día, mas afinidad con Javé,
tener su sensibilidad para percibir el valor y los derechos del más débil. Es confiar y creer en el
pequeño, cierto es que Dios está de su lado, de que el “Dios de los conocimientos” quiere virar
de adentro hacia afuera las injusticias de nuestra sociedad.
El proyecto presentado en Is 11,1-9 comienza por el temor de Dios, por la verdadera justicia al
más débil, por leyes y gobernantes que ven su función propia (e está ahí la constituyente):
impedir que el lobo devore al cordero, como estamos viendo todos los días. Mas no basta
esperar y no pasa de una ilusión confiar en los gobernantes (¿quién puede esperar que el lobo
haga leyes para proteger al cordero?). el propio pueblo es el que puede y debe comenzar a
“inundar al país de intimidad con Javé como las aguas que cubres al mar”.

“DENLES USTEDES MISMOS DE COMER” DESAFIO, CRISIS Y COMPARTIR


Introducción
Esta palabra de Jesús “denles ustedes mismos de comer” (Mc 6,37), al responder la solicitud y
propuesta de sus discípulos en el tratamiento de la multitud “despídelos para que vayan a los
campos y aldeas vecinas y compren para si algo que comer” (Mc 6,36), guarda dentro de sí una
gran fuerza teológica creativa y generadora de un modo de si caminar y de ser comunidad
eclesial.
Este versículo solemne carga elementos y pistas que posibilitan la individualización y
localización de una perspectiva comunitaria muy definida, en cuanto muestra las fuerzas
generadoras de la comunidad, desafíos y crisis que la envuelven, definición de su lugar en la
historia y el consiguiente papel a ser desempeñado por sus agentes.
De este modo, este estudio recorrerá un camino que proporcione el aparecimiento de las
preocupaciones comunitarias, situaciones críticas de contradicción, males, carencias y sin
embargo de trazos configurativos de la comunidad en cuanto sustentan y encaminan su
experiencia y misión.
El escritor Marcos retoma aquí la narración del ministerio de Jesús, cuando los apóstoles le
presentaron su primer informe. Observemos la falta de detalles, leyendo los versículos 30 y
31:
"Los apóstoles se reunieron con Jesús, y le informaron sobre todo lo que habían hecho y
enseñado. Y Él les dijo: Venid, apartaos de los demás a un lugar solitario y descansad un poco.
(Porque había muchos que iban y venían, y ellos no tenían tiempo ni siquiera para comer.)"
Para nosotros resulta difícil comprender cuán realmente ocupado estaba el Señor Jesús y cuán
grandes eran las peticiones que le dirigían. Se tuvo que retirar a un lugar deshabitado, en un
intento de descansar y de permitir que Sus apóstoles también descansaran. Acompañémosles
leyendo los versículos 32 al 34:
"Y se fueron en la barca a un lugar solitario, apartado. Pero la gente los vio partir, y muchos los
reconocieron y juntos corrieron allá a pie de todas las ciudades, y llegaron antes que ellos. Al
desembarcar, El vio una gran multitud, y tuvo compasión de ellos, porque eran como ovejas
sin pastor; y comenzó a enseñarles muchas cosas."
Era inútil intentar encontrar un lugar donde estar solos. La multitud les siguió alrededor de la
ribera del Mar de Galilea, hasta que se encontraron con Jesús y sus discípulos cuando éstos
llegaron en su barca a la orilla. La reacción de Jesús fue de una completa simpatía hacia la
gente. Para El, todos los seres humanos eran como ovejas. Y solo Él era el verdadero Pastor.
Por este motivo les alimentaría. Primero satisfizo sus necesidades espirituales enseñándoles.
Luego, hizo frente a sus necesidades físicas, dándoles de comer. Leamos los versículos 35 al
37;
"Y cuando era ya muy tarde, sus discípulos se le acercaron, diciendo: El lugar está desierto y ya
es muy tarde; despídelos para que vayan a los campos y aldeas de alrededor, y se compren
algo de comer. Pero respondiendo El, les dijo: Dadles vosotros de comer. Y ellos le dijeron:
¿Quieres que vayamos y compremos doscientos denarios de pan y les demos de comer?"
Él les ordenó realizar una tarea imposible. Ellos tendrían que aprender, así como también
nosotros, que Él siempre manda realizar lo imposible. La razón es evidente. Él tiene la
intención de llevar a cabo el trabajo. Veamos como dispuso las cosas leyendo los versículos 38
al 44:
"Y Él les dijo: ¿Cuántos panes tenéis? Id y ved. Y cuando se cercioraron le dijeron: Cinco, y dos
peces. Y les mandó que todos se recostaran por grupos sobre la hierba verde. Y se recostaron
por grupos de cien y de cincuenta. Entonces Él tomó los cinco panes y los dos peces, y
levantando los ojos al cielo, los bendijo, y partió los panes y los iba dando a los discípulos para
que se los sirvieran; también repartió los dos peces entre todos. Todos comieron y se saciaron.
Y recogieron doce cestas llenas de los pedazos, y también de los peces. Los que comieron los
panes eran cinco mil hombres."
Este sí que fue un milagro. El Creador que en el principio creó el pez e hizo que el grano se
multiplicase en los campos, ahora, por su mandato creativo creó los alimentos para la
multitud. Esta debió ser la primera vez en la vida en que muchas personas de aquella multitud
quedaron satisfechas.
El grupo se puso nuevamente en movimiento, Leamos el versículo 45:
"Enseguida hizo que sus discípulos subieran a la barca y fueran delante de El al otro lado, a
Betsaida, mientras El despedía a la multitud."
Hay un sentido de urgencia en las 2 palabras, "enseguida" e "hizo". La explicación se encuentra
en el pasaje paralelo del Evangelio de Juan 6:15, donde se aclaraba que Jesús percibió que la
multitud intentaría hacerle Rey a la fuerza. Leamos los versículos 46 al 52, en que cambia la
escena:
"Y después de despedirse de ellos, se fue al monte a orar. Al anochecer, la barca estaba en
medio del mar, y Él estaba solo en tierra. Y al verlos remar fatigados, porque el viento les era
contrario, como a la cuarta vigilia de la noche, fue hacia ellos andando sobre el mar, y quería
pasarles de largo. Pero cuando ellos le vieron andando sobre el mar, pensaron que era un
fantasma y se pusieron a gritar; porque todos le vieron y se turbaron. Pero enseguida El habló
con ellos y les dijo: ¡Tened ánimo; ¡soy yo, no temáis! Y subió con ellos a la barca, y el viento se
calmó; y ellos estaban asombrados en gran manera, porque no habían entendido lo de los
panes, sino que su mente estaba embotada."
Observemos que aquí no se nos dice nada sobre Simón Pedro viniendo hacia Jesús, caminando
sobre las aguas. Después de todo, en el plano humano, Marcos consiguió su información de
Simón Pedro, y Pedro simplemente dejó fuera su participación en aquel incidente. Fue Mateo
el que nos proporcionó esos detalles.
Quisiera llamar tu atención al versículo 48, donde dice: "Y al verle remar fatigados . . . "
Aquellos hombres estaban en la barca esa noche, mezclando su sudor con las olas que
invadían el interior de la pequeña embarcación. Estaban aplicando toda su fuerza sobre los
remos y verdaderamente pensaron que se hundían. Pero Él les vio remar fatigados. ¡Me
agrada recordar aquella mirada! Yo no sé dónde te encuentras hoy o en qué situación estás.
Puede que estés viviendo ahora en un momento difícil. Puede que te halles sentado y solo en
un oscuro rincón. Puede que te estés enfrentando a la tentación y a problemas que son
demasiado grandes para soportar. Puede que te encuentres a ti mismo fuera, en un mar
tempestuoso y sientas que tu pequeña barca está a punto de naufragar.
Si es así, tengo buenas noticias para ti, amigo cristiano. Recuerda la frase: "Y al verles remar
fatigados . . ." Él te ve a ti. Conoce tus problemas. No necesitas enviarle una señal luminosa
para que te localice. Él ya lo sabe todo. ¡Si pudieras hoy mismo entregarle tu camino a El de
una manera definida! Eso es algo que muchos de nosotros necesitamos hacer en tiempos de
oscuridad; simplemente confiarle nuestro camino a Él. "Y al verles remar fatigados . . ." A
propósito, solo Marcos registra ese detalle. Después encontramos que El vino hacia ellos y
subió a la barca para acompañarles. Y Marcos dice que ellos estaban "asombrados en gran
manera"
En la conclusión del capítulo vemos que Jesús se dirigió hacia la región de Genesaret. Leamos
los versículos 53 al 56:
"Terminada la travesía, llegaron a tierra en Genesaret, y atracaron. Cuando salieron de la
barca, enseguida la gente reconoció a Jesús, y recorrieron apresuradamente toda aquella
comarca, y comenzaron a traer a los enfermos en sus camillas adonde oían decir que Él estaba.
Y dondequiera que El entraba en aldeas, ciudades o campos, ponían a los enfermos en las
plazas, y le rogaban que les permitiera tocar siquiera el borde de su manto; y todos los que lo
tocaban quedaban curados."
Ni siquiera podemos formarnos una idea del número de enfermos que Jesús sanó. Sus
milagros fueron genuinos, por tal motivo, sus enemigos nunca pudieron negar que Él había
realizado milagros.
CONCLUSION
“Denles ustedes mismos de comer”, en cuanto al texto, en sus reservas de significaciones y
guardando un modelo de acción por la articulación implicante de la teoría y de la práctica,
articula un proceso de remodelación de la conducta de la comunidad en la medida en que esta
lanza sobre sí misma un mirar crítico, la luz del ministerio de Jesús, y capta, con conciencia, el
desafío inconmensurable de la crisis generada por la existencia de compartir a fin de que el
ministerio redentor y libertador de Jesús Cristo, Mesías, pastor y maestro sea actuado en las
circunstancias sufridas y dolorosas del pueblo que lo sigue y de quien él tiene compasión. Por
eso, la comunidad, de modo crítico, relee su camino de compromiso a la luz de la misión de
Jesús y descubre que su modelo de acción es la experiencia del ofrecimiento total de sí mismo
en el servicio prestado, en las circunstancias concretas de la vida sufrida de quien es la razón
de la compasión de Jesús, así, cuando el compartir es regla y los bienes se tornan propiedad al
alcance de todos, existe siempre más de lo que es necesario. La carencia nace de la regla de no
compartir en la convivencia. En el contexto, los discípulos son llevados a percibir que nada
consiguen sino a partir de Jesús. Esta toma en sus propias manos lo poco que se tiene para el
sustento: cinco panes y dos peces. Y, en la dinámica de colocar en común el compartir, sacia el
hambre de todos y hace sobrar mucho. En la comunidad es colocado el gran desafío de
encontrar un estilo donde la incidencia del proyecto redentor de Dios supere las situaciones
de carencia y sufrimiento, haciendo ser verdad la benevolencia de Dios y cuanto el aprecia la
vida de cada hombre. Queda subrayado el compromiso básico con la vida, en todas sus
dimensiones, que es crear las condiciones necearías e imprescindibles para la supervivencia.
Así, siempre críticamente, la comunidad deberá vivir el desafío de rupturas, donde venga a
establecerse la regla del amor, de tal manera que el compartir en la convivencia sea siempre la
fuerza recreadora de la comunidad y le constituya un camino de fidelidad en el compromiso
de hacer valer el alcance e implicaciones del ministerio redentor de Jesús Cristo en las
circunstancias sufridas y dolorosas de las multitudes que rastrean la historia en todos los
tiempos.

LA SALIDA ES QUEDARSE. EL CONFLICTO DE LOS CRISTIANOS CON LA SOCIEDAD SEGÚN LA


PRIMERA EPISTOLA DE PEDRO.
UNA CARTA DE SOLIDARIDAD
General
La primera carta de Pedro se dirige a las comunidades cristianas de Asia Menor, que tenía que
hacer frente a un ambiente hostil. Esta carta tiene un típico carácter post-Paulino. Es un
mensaje de advertencia. Sus contenidos principales son los temas de la fe, la obediencia y la
paciencia. Es para los residentes temporales de la dispersión – dirigida a la diáspora El primero
esto fue una designación normal para todos los judíos, que vivían en la dispersión; por lo que
en algún lugar de exilio fuera de la madre patria. Este nombre llevó primero (Santiago 1:1) a
los judíos dispersos entre las naciones. Como Pedro escribe en esta carta también a los
cristianos gentiles (1 Pedro 2:1;. 4,39), también incluye a los gentiles en el término
"extranjeros". Tanto los judíos como también y los gentiles vivían en una "enemistad contra
Dios, en el mundo alejado de Dios." También los cristianos fueron "dispersados”. En los
Hechos.se informa que por la persecución de los cristianos se dispersa la iglesia primitiva.
Estos dispersos, luego fundó comunidades en todas partes.
Sólo los apóstoles se quedaron todavía en Jerusalén (Apg.8, 1) . Por lo tanto, es una carta de la
"peregrinación de la Iglesia" .
La primera La carta de Pedro es particularmente caracterizada por su riqueza de ideas. Es una
verdadera carta de consuelo y recordatorio a la iglesia de Jesús. Casi todos los países
mencionados en la carta, fueron las comunidades, que han sido fundadas exclusivamente por
el propio Pablo. Esta carta fue aparentemente un boletín enviado a todas las comunidades de
la zona . Así como Pedro “abrió” la salvación a los Judios, los samaritanos y los gentiles, e hizo
utilizar sus "llaves”, así también sirvió a través de su carta a las comunidades fundadas por
Pablo en "Asia Menor" (cf. Mt 16,17-19 / Luk. 22,31 / 21,15 Joh -17). Jesús confió el cuidado de
su iglesia a Pedro la "roca de la fe”. Pedro había tomado muy en serio esta misión a su cargo
pastoral (Hechos 2:14; 8,14 -17, 10,1 a 47; -1 8 11.4, 15.7 a 12) y también lo llevó a cabo
consistente. Y así se va a las comunidades que Pablo había fundado, y les escribe también con
el fin de animarlos y fortalecerlos en la fe. No como "competencia" a Pablo, sino como un
"suplemento" para él. La razón de esto fue: La cuestión de la fe tenía que ser confirmado por
dos o tres testigos (Mat.18, 16 / 2 Cor. 13,1 / 1 Tim. 5:19). De historia de la iglesia, sabemos
que también el apóstol Juan seguía actuando en las comunidades fundadas de Pablo. También
todas su "Epístolas" (Apocalipsis 2-3) se dirigen a las comunidades de la zona. Por lo tanto,
esta carta pone por delante a sus lectores, el conocimiento de la predicación y la teología de
Pablo. El contenido irradia los pensamientos de Pablo, y por lo tanto bien podría estar
relacionado con la carta a los Efesios. Muchas de las similitudes van en la misma cuenta de una
tradición, como las piezas cristológicas que hacen hincapié en el significado salvífico de la
muerte de Jesús (1 Pedro 1:18 ff,. 2,21 ss, 3,18 ss.). Además incluye las secciones, que
advierten y solicitan la subordinación (cf. 1 Pe especial 2,13 con Rom. 13:1 ss) o demanda para
ilustrar la vida pre-cristiano o cristiana en forma de catálogos de virtudes y vicios (cf.
especialmente 1 Ped. 4,3 y Rom. 1,28). Sorprendente aún es la combinación de juego y la
modificación de las citas del Antiguo Testamento, que sin duda está basada en una tradición
compartida de la interpretación (ver la forma de Isa. 28,16 y 8,14 en 1 Ped. 2,6 y Rom. 9:33). Al
lado de una tal tradición compartida, pero queda suficiente a otros, que se considera típico de
Paulino y es la primera Carta de Pedro.
Página 01 Compare esto sólo las palabras clave típicas: "En Cristo" (1 Pedro 3:16. 5,10,14)
Carisma (1 Ped. 4,10) Libertad (1 Ped. 2:16) La participación en los sufrimientos de Cristo (1
Ped. 4:13) Participación en los sufrimientos de Cristo (1 Ped. 4:13) Revelación (1 Pedro 1,7,13,.
4:13) La conciencia (1 Ped. 2:19). Por tanto, el apóstol Pedro confirma y complementa en esta
carta, sólo a su colega Pablo, aquel que había sentado allí las bases para las comunidades.
Aunque las estadística simple de la palabra no puede ser un claro indicador, llama la atención
que, por ejemplo, el término" gracia” se produce no menos de diez veces. Este es un signo y
una expresión que la 1 carta Pedro ha tenido un punto en el mensaje de Pablo. El el primer
plano del concepto de la comunidad, en la primera Carta de Pedro está - el pensamiento de la
gente de Dios (capítulo 2) y bastante sin problemas y sin dialéctico, que se relaciona con el
pueblo de Dios de la Antigua Alianza. Aunque la primera Carta de Pedro está muy cerca de
pensamiento paulino, ya que tantos temas se podrían llamar "Paulinas", debido a que estas se
conocen con precisión de las cartas de Pablo, por lo que, aquellos temas son en realidad, sólo
la tradición común de la teología cristiana primitiva. Acerca de todo lo que Pablo transmitió,
como la 'Última Cena', dijo, que la había recibido directamente del Señor y Creador del cielo y
la tierra. En realidad, él no da básicamente algo nuevo o especial. Incluso los primeros
cristianos celebraban la Eucaristía ya mucho antes de Pablo (de aquí para allá en las casas).
Pablo había recibido sólo un caso confirmado por el Espíritu Santo. Era habitual, que los
primeros cristianos , por lo que tomó de los demás de alguna manera necesitaban para sí
mismo una confirmación especial del Espíritu Santo. Ellos dijeron a sí mismos, que no hemos
discutido con carne y sangre ... (Gal.1, 16 – 17).
Incluso el conocimiento de Pedro, que Jesús era el Mesías, había recibido a través de la
revelación del Espíritu Santo (Mat.16, 17). La primera Carta de Pedro tiene contactos muy
estrechos teológicos con las cartas a los Romanos y Efesios. A veces se supone que la primera
carta de Pedro, al principio no fue una sola escritura, sino que consistía en varios documentos,
y más tarde se puso luego juntos. Esto se aplica, por ejemplo, para la primera Pe. 1,13 a 4,11,
que es un discurso de bautismo, tal vez una preparación para un bautismo o una especie de
"tasa de base de la fe". Esta carta tiene un significado práctico, y es principalmente una
enseñanza contributiva. Además de la enseñanza carismática (1 Ped. 4,10 y ss) el sacerdocio
común (1 Ped. 2,5,9) y la misericordia de Dios (1 Ped. 2:10) la eclesiología (la doctrina de la
Iglesia) va a ser determinada por la constitución Presbiteriana de la iglesia post Paulina. (1 Ped.
5:01 ss) También en la cristología (cf. el motivo modelo 1 Ped. 2,21), en la antropología (cf. la
influencia helenística-dualista en 1 Ped. 2:11) y en la exhortación (es decir, consejo
amonestación), (ver la espiritualización en 1 Ped. 3,3 y ss) para mostrar el cambio enfrente a
Pablo, por lo cual, algunas tensiones se pueden explicar simplemente por las diferentes
tradiciones. Por otro lado, la primera Carta de Pedro es a veces "Paulina", como el mismo
Pablo, como cuando en1 Pedro. 2.16 justifica el comportamiento de los cristianos delante las
autoridades con la libertad cristiana. Aparte de las tradiciones comunes de las cartas de Pablo,
la carta han sido alimentada de una amplia corriente de las primeras tradiciones de los
cristianos originales, lo que sus homólogos encuentra por ejemplo, Carta a los Hebreos (ver los
paralelismos con 1 Pedro 1,1,2,23,. 2.24, 3.18 y en otros lugares) .
La carta está llena de alusiones y citas del Antiguo Testamento. El remitente escribe de
Babilonia, bajo el nombre reconocido del apóstol Pedro. (1 Ped. 5:13) Babilonia fue utilizado
como nombre de cobertura de la capital, Roma. La carta refleja la amenaza a las comunidades
durante la primera persecución generalizada de los cristianos, en el Imperio Romano en la
época del emperador Domiciano (81-96 d.C) . Las comunidades sufrieron bajo la hostilidad
política y social, y fueron humillados por todos los medios. Ellos fueron difamados y
despreciados. La carta anima a los cristianos para perseverar: Justamente en estas situaciones
más difíciles ha sido probado la verdadera fe. Francamente es purificada, como la plata en el
fuego. Se aplica como un premio, pertenecer al pueblo elegido de Dios (1 Pedro 2.9.),y como
Jesucristo a través del sufrimiento inocente, para obtener la gloria espiritual. Para este
proceso interior de maduración es tanto, ir en la cuenta del conocimiento en sí mismo, para
transmitir acerca de la fe. (1 Ped. 3:15).
página 02 La primera Carta de Pedro fundó la teología del martirio en el cristianismo primitivo.
Las persecuciones fueron interpretadas como señales del inminente regreso de Cristo (1 Ped.
4,7). Es sólo una cuestión de seguir a Cristo en nuestro propio sufrimiento, a llevar su cruz
pequeña, sin contradicciones, sin gemir o quejarse. Es decir, así soportar el destino de su vida
humilde, tranquila y suavemente, como está sucediendo, y de este modo salvar el tribunal del
futuro, y por lo tanto, ser liberados de la ley implacable, de la culpa y la expiación (1 Pedro
4,16-17) . En la primera carta de Pedro 1,3 a 4,11, el sufrimiento se caracteriza como una
posible acción. En la primera carta de Pedro 4:12 ff , por el contrario, el sufrimiento es como
una realidad presente. Pero también en el 1 Pedro. 1,3 a 4,11, se habla del sufrimiento - y la
experiencia de la persecución (1 Petr.1, 6, 2:12, 3:16, 4,1,4). En la primera carta de Petr. 4:12
es de nuevo utilizada explícitamente las declaraciones anteriores sobre el tema "sufrimiento",
especialmente con el término "sufrimiento de Cristo" en 1 Petr. Ss 4,13 y 2,21 y 3,18 . Aquí los
cristianos afectados se sienten incurridos por el sufrimiento de los fieles controvertidos con un
énfasis especial en Jesucristo y de la futura gloria de los cielos, por el momento sea necesario
crecer, como consecuencia natural, como consecuencia del bautismo. La esperanza futura de
los creyentes es un tema central de la carta. Los sufrimientos de los cristianos son una
consecuencia natural de la relación con el rechazó a Cristo. Pero últimamente todo conduce, a
noble meta de la perfección completa (también Rom. 8:28), incluso las experiencias negativas,
para el beneficio de todos los hijos de Dios. Aquí habla un experimentado y madurado hombre
de Dios. Él nos lleva no sólo una teoría fría sobre el sufrimiento, sino que, él mismo habla de
sus propias experiencias dolorosas. Pedro habla aquí del sufrimiento que viene (cf. 1 Ped. 2:14
y ss 3:13). Esto, afirma, sobre todo de la propia experiencia, explicando, que no obstante el
sufrimiento cristiano por causa de Jesús, da buenas obras. Por esto Pedro indica, que también
a la gente buena y justa sucede a menudo un montón de cosas malas. Vivimos en un mundo
malo allí, que Dios nos ha dado. (1 Pedro 1,3 -. 4:11). Cuando surgió la carta, las comunidades
en ese momento experimentaron muy grandes tentaciones y sufrimientos. No por casualidad
nos encontramos aquí la palabra "sufrimiento”, con la mayor frecuencia dentro de todas las
cartas del Nuevo Testamento, incluyendo la revelación, el Apocalipsis. Preguntas explosivas,
que en el tiempo de Pablo en la iglesia primitiva fueron apasionadamente debatidas, aquí ya
no jugaban más ningún papel: Esto se aplica a la cuestión de la ley, así como por supuesto para
la convertida misión de los gentiles. La causa del Reino de Dios, entretanto paso más allá y se
ha decidido. La primera Carta de Pedro es aproximadamente tan, como los primeros cristianos
"catecismo" .
Lo indica tal como quien dice, una estrecha relación con las canciones originales cristianas y las
fórmulas confesionales (cf. 1 Pedro 1:20;. 2,21 ss, 3,18 ss) o hacia esas formas e
interpretaciones, que fueron anunciados en el espacio de los primeros cristianos y judíos en el
Antiguo Testamento, y con eso se explica la proximidad a la Epístola de Santiago. En la Epístola
de Pedro, no se trata tanto el rito del bautismo, la vivencia del bautismo y sus consecuencias
(cf. Rom. 6, etc.). Aquí hay algunos ecos de las "palabras del Señor, “y son para encontrar las
palabras de Jesús (cf. 1 Pe. 3,9 Mt con 5,39,44 o Lucas 6,27 ss, sino también Rom. 12:17) . se
hace eco de la sabiduría, para alineadas filas y su justificación, (cf. la cita de Proverbios 3,34, lo
que refleja tanto en 1 Pedro 5.5, al igual que en Santiago 4:6 es, ... también en ss y 1 Pedro 1.5
en 1 Ped. 4:12 ss 1.2 con Jak. ff).
También el detalle de las citas del Antiguo Testamento tiene su paralelismo con el contenido
de Isa. 53 (cf. 1 Pedro 2:22 - 25) ..Obviamente que el autor fue menos por la originalidad y la
individualidad ,y más bien en un registro y actualización de las buenas oraciones. Parece como,
que la primera Carta de Pedro consiste de dos partes diferentes. Algunos intérpretes toman
también especificado de la Biblia como seguro. Esta es la primera parte de ambos (1 Pedro 1,3
a 4,11.) originalmente han sido independientes, pero más tarde han sido recopilados en una
carta posterior. Es indiscutible, sin embargo, que la carta viene en dos partes por el mismo
autor. Tiene los mismos temas: Tentación (1 Pedro 1, 6 y 4:12.) La conexión de la revelación y
la gloria (1 Pedro 1, 7 y 5, en primer lugar); futura gozosa exultación (1 Pedro. 1, 8 y 4:13) El
sufrimiento por la voluntad de Dios (1 Ped. 3,17 y 4,19 Bienaventuranza de los que sufren (1
Ped. 3.14 y 4.14) Los versículos 11 y 12 (en 1 Ped. 4) forman la interfaz de las dos secciones. En
1 Pedro.4:12 ff,se supone una situación diferente dirigida a la comunidad , como es el caso en
el resto de la carta.
Página 03 : Es llamativo, que en la primera Carta de Pedro no existe no una sola observación o
alusión de confirmación ,que Pedro fue un testigo de ver y oír, de una relación directa con
Jesús. No hay ni siquiera un indicio de que hubiera tenido una relación especial con Jesús. Tal
vez también aquí es la palabra que Pablo dijo: "Ya no conocemos a Cristo según la carne, sino
conforme al Espíritu" (I Cor 5,16-17 vgl.2 ..) Además, Pedro había pasado ya, probablemente la
historia de su vida en el Evangelio de Marcos, por lo que ya no considera necesario repetir
aquí de nuevo para responder. La cosa de la fe surgió su camino. Para los cristianos primitivos,
ya no era tan importante la vida histórica de Jesús judío. para sus creencias. Así escribieron
ellos, y no dijeron nada más acerca de los acontecimientos históricos como el nacimiento de
una virgen santa, Escribió y les dijo nada acerca de los acontecimientos históricos como el
nacimiento de una virgen santa, sobre el cuerpo puro de María, la madre de Jesús, o que el
vientre directamente desde la casa de David etc. Ellos predicaron exclusivamente sólo del
Cristo resucitado y glorificado, de la ascensión de Cristo Jesús en el cielo santo. El propósito de
la carta Al parecer, la carta fue escrita para lograr un doble objetivo: 1) Muchos entre los
primeros cristianos se preguntaron si Pablo y Pedro, probablemente representan diferentes
puntos de vista acerca de las verdades fundamentales de la fe cristiana. Se supone, a saber,
Pedro escribió esta carta, y le entregó a través del compañero de Pablo a las iglesias asiáticas
fundadas por Pablo, a fin de refutar los errores. 2) La carta también debía fortalecer y animar a
los judíos convertidos que tenía que pasar por duras pruebas y persecuciones amargas. De
esta manera, Pedro hizo el servicio que el Señor Jesús le había aplicado (Lucas 22:31 – 32) .
La palabra clave en esta carta es el "sufrimiento". Esta palabra aparece en diversas formas 21
veces en esta breve carta, y nos muestra el mensaje del libro. Pedro se refiere, en cada
capítulo a los sufrimientos de Cristo, que luego en la segunda carta de Pedro ya no se
menciona más .. Una de las ideas principales aquí es, que un valiente soportar las pruebas y
tribulaciones, pertenece a una vida cristiana y es bastante normal. Debido a eso uno se
identifica con Jesús y sus sufrimientos y con su resurrección - no sólo simbólicamente después
de experimentar el bautismo, pero también tener que experimentar muy cerca . Así como
Jesús lo ejemplifica, así también debía los cristianos preservar fortalecidos en la paciencia y la
resistencia. Ellos deben considerarse afortunados desde el punto de vista espiritual, si tienen
que sufrir por su fe en Dios, en Jesucristo en su vida santa (1 Pedro 2:19;. 3:14, 4.12 a 19, 5.9)
El calor de la carta en relación con las instrucciones prácticas, es la única fuente de estímulo
para todos los creyentes, que, entre otros, deben conducir una vida en conflicto con su
entorno cultural. Es una carta pastoral, llevada a cabo de un padre perfecto en Cristo Jesús. Su
teología se centra exclusivamente en el consuelo y la exhortación a los fieles en sus angustias
cotidianas. El autor El autor de la carta se refiere a sí mismo como "Pedro, apóstol de
Jesucristo" (1 Pedro 1:1.). Él utiliza la traducción griega del apodo arameo de Cefas (cf. Mt a
16:18. Este nombre de honor para la fuerza de la fe "roca" es Simeón (Hechos 15:14;. 2 Pedro
1:1) o Simon (Marcos 1:16), como el primer testigo de la resurrección (1 Corintios 15:5 /
Lucas . 24:34) probablemente lo recibió del mismo Resucitado. Diferentes respuestas son
ciertamente en Marcos. 3,16 / Mat 16:17 ff y en Juan 1:42. Curiosamente, él es la única figura
en el Nuevo Testamento, que lleva el nombre "Pedro". Aquí tenemos a un Pedro
transformado. La imagen de Pedro, que nos dan los Evangelios, se diferencia en una forma
increíble y maravillosa del retrato que se desprende de sus cartas. Aquí se nos presenta un
Pedro maduro y "transfigurado”. Él ha sido transformado por la gracia ilimitada de Dios. En los
Evangelios, encontramos contrariamente, un pronunciado "sanguine Pedro”, el atrevido,
inquieto, descuidado y , rápidamente preparado para tomar venganza por afrentas personales.
Él fue también un ambicioso Pedro, cuando llegó al poder terrenal. Su modificación fuerte del
carácter personal, hacia lo bueno, también nos quiere dar coraje . Pues ahora, aquí vemos a un
hombre maduro, paciente, tranquilo, tardo para la ira y amoroso, y cuyo descuido y arrogancia
de otros tiempos, se han purificado y refinado. Este es un maravilloso ejemplo de la fuerza
vital transformadora de la gracia de Dios. Ahora una de sus palabras favoritas, es "delicioso" o
"precioso". Esta palabra positiva se usa siete veces (1 Pedro 1,7,19, 2,4,6,7, 3,4 / 2 Pedro
1,1,4). página 04 "Esperanza" es otra palabra favorita en su carta (1 Pedro 1,3,13,21,. 3:15).
Así, cada uno de los Apóstoles tiene un mensaje especial: Pablo es el "apóstol de la fe" Juan el
"Apóstol del Amor" y Pedro, llamado el "apóstol de la esperanza". El nombre "Pedro" es, pues,
un recordatorio de que este hombre, conocido por los Evangelios, Hechos, y de acuerdo con
Gal. 1.18era el portavoz de los Doce y más tarde uno de los "tres pilares" de la iglesia primitiva
(Gálatas 2:9). Un recuerdo que él a través de su experiencia de la Pascua y la confesión -se ha
convertido en la piedra de la Iglesia. Que Simón debería haber nunca mencionado el nombre
de honor en el sentido de un nombre propio, con su roca de la fe ,es difícil de creer. Además,
Pedro pone un fuerte énfasis en: la elección (1 Pedro 1, 2.) la presciencia de Dios (1 Pedro
1,20) la Trinidad (1 Pedro 1, 2.) Adjunto la muerte sacrificio de Jesucristo (1 Pedro 1, 2,18,19,
2,21,24, 3,18;. 4.1).
En general, se puede decir que Pedro fue un alumno de Jesús muy apto. Nunca olvidó lo que
había aprendido. Y lo que aprendió de Jesús, eso da él lealmente aquí en esta carta: en el 1
Pedro. 1,17 ...menciona lo que aprendió en los Hechos. 10,15,3 en el 1 Pedro 2, 4-8 ..dice lo
que experimentó en Mt 16:18; en el 1 Pedro 2,25 ... dice lo que había aprendido en Juan 10,1
en el 1 Pedro. 4,19 ..dice lo que aprendió en Lucas 23:46; en el 1Pedro. 5, 2 ..., dice lo que
aprendió en Juan 21,15,17; En el 1 Pedro. 5, 5 ... dice lo que ha aprendido en Juan 13,4,5 Él se
considera a sí mismo renacido de nuevo (1 Ped. 1,3) y es "anciano también con ellos" y
"testigo" de los sufrimientos de Cristo (1 Ped. 5,1). Uno piensa aquí, por ejemplo, la negación
de Jesús, la experiencia de la resurrección de Jesús, etc. La carta no fue escrita personalmente
por Pedro, pero como él mismo dice, por su colaborador Silvano: "A través de su fiel hermano
Silvano le he escrito un poco" (1 Ped. 5:12). Este es sin duda una declaración de que la Biblia
está escrita en un griego muy bien, que niega la investigación por el simple pescador de Galilea
Simón. Acerca de la persona y el ministerio de Pedro, los Evangelios y Hechos, nos dan una
imagen bastante completa. Sólo sobre el final de la vida del apóstol, la Biblia no nos dice nada,
a excepción de la profecía en Juan 21,18, donde se menciona la muerte de un mártir. Esta
tradición testifica que Pedro fue asesinado en la persecución de Nerón en el 67 (?) en Roma
como un mártir. Clemente de Roma recuerda en su carta a los Corintios (alrededor de año94
d.C) de la muerte del apóstol. Otros padres Iglesia, como Ignacio de Antioquía, Papías y
Clemente de Alejandría, transmiten el mismo informe. Curiosamente, ninguno de ellos
menciona a Pedro como obispo de Roma. Según Ireneo, Lino fue el primer obispo de Roma.
Sólo en el tercer siglo, comenzó el episcopado romano a palpitar a los Apóstoles. Los
testimonios bíblicos y eclesiásticos no dejan duda respecto, que el apóstol Pedro es el autor de
esta carta. Esta carta fue escrita por Pedro al final de su vida (año 60 d.C.), mientras que se
hospedaba en "Babilonia" (1 Ped. 5:13), donde había sido fundada una iglesia cristiana. Es
poco probable que a la vez se trata de Babilonia histórica, ya que este en el tiempo de los
Hechos de los Apóstoles aún existía, pero era prácticamente insignificante. Es más probable
que Pedro utilizó el nombre de Babilonia como un símbolo apocalíptico de Roma. "Babilonia"
fue el nombre en clave contemporánea para el poder mundial de Roma (cf. Apocalipsis 14:8;.
16,19, 17,5, 18,2 y 3). Así debe uno que asumir, que el remitente escribió y envió su carta
desde Roma. En la primera Pe. 5,13 la mencionada Babilonia es bien documentada de hecho,
como una cubierta y el nombre secreto de Roma. En analogía con la Babilonia malvada del
Antiguo Testamento (cf. Isaías 13, 43.14 / Jer 50 y siguientes ...) fue el nombre apocalíptico
secreto de la capital del imperio (Apocalipsis 14:8, 16 – 18). Con eso Roma se denuncia
demoniaca, y su estado de descomposición se muestra en la corte divina. La "Babilonia", que
dice aquí Pedro, no es la antigua Babilonia, en Mesopotamia. El nombre de Babilonia parece
realmente ser más bien el nombre apocalíptico de Roma (Apocalipsis 14:8; 6:19, 17, 5, 18,
2,10, 21) o un nombre en clave, que, según Eusebio era la opinión de Papías . Otra indicación
sobre el nombre de la ciudad de Roma es, que él en la redacción de S. Marcos es conocido
como un hijo espiritual de Pedro (1 Pe. 5, 13). En 2 Tim. 4.11, pero pide a Pablo, años 63/64
d.C, escribió desde Roma, a Timoteo, hay que llevar a Marcos.
Página 05 La comparación sugestiva de "Babilonia" por "Roma" ha sido desde la toma del
poder de Roma sobre Israel, en particular bajo la influencia de los zelotes (amargados
combatientes de la resistencia judía). Israel en ese momento era un país ocupado, y se
detuvieron antes del estallido de la guerra. Y puesto que las comunidades cristianas también
trabajaron en la clandestinidad, utilizaron el mismo seudónimo y tenían que actuar con mucha
cautela. Especialmente aún entre los discípulos de Jesús eran zelotes (Lucas 6,15 / Mark. 3,18 /
Mat.10, 4). A Roma, como lugar de la redacción, armoniza también la mención de Marcos en
Pe. 5,13 (cf. 2 Tim con. 4,11 /1 Ped. 1:17). Pero es posible, que el autor debido a la escritura de
la carta, había llegado a esta suposición, porque Pedro había pasado los últimos años de su
vida, probablemente en Roma. La carta fue entregada por Silvano (1 Ped. 5:12) . Debido a que,
Silvano (nombre en latín) es mencionado junto con Marcos, podemos suponer que, él es el
compañero de Pablo Silas (nombre griego). Ya que Pablo estaba en prisión, Silas estaba libre
ahora para este trabajo. Ahora, por Silvano (en Hechos. Silas =), sólo se sabe, que él debe ser
el portador del decreto apostólico era (Hechos 15, 22,27,32). Y que él en la segunda así
llamado “Viaje misionero”, junto con Pablo y Timoteo predicó el evangelio (Hechos 15,40 ; 2
Cor. 1,19) y de acuerdo a Hechos. 15,22 procedía de la iglesia de Jerusalén . Se cree que Pedro
tenía a Silvano como secretario, pues le dio las temas y las directrices para el contenido, pero
la escritura en sí, hasta el escrito final a mano en la primera Ped. 5:12 ss, le defirió a Silvano.
Por ese motivo, uno entiende fácilmente, porque esta carta fue escrita en un griego muy
bueno. En esta carta, Pedro vuelve, sobre todo, pero no exclusivamente a los hebreos
cristianos (1 Pedro 1,1 Judios -. así como los paganos y 1 Pedro 2,9,10).. Las numerosas
alusiones del Antiguo Testamento, habla en la carta en verdad con claridad a los lectores
judíos, Los lectores con un fondo pagano es cierto (por ejemplo, 1 Ped. 1,8). Y en un Petr. 4.3
pecados, son enumerados en el arte típica pagano. De esta carta nosotros sabemos, que los
lectores fueron perseguidos por su fe (1 Petr.1, 6, 3,13 a 17; 4.12 -19; 5,9). No fueron las
persecuciones dirigido por el Estado, adoptados por la ley, fueron más bien aflicciones
ordinarias, con la que los cristianos del siglo primero tuvieron que hacer frente. Estos
incluyeron como un culpable insultos (1 Ped. 4,4,14) y la calumnia (1 Pedro 2:12;. 3:16) Incluso
los latidos (1 Ped. 2,20), el ostracismo social y otros abusos de la mafia local, etc pertenecía a
la misma. Pedro escribió esta carta a los creyentes perseguidos e inseguros para fomentar y
fortalecer en su firmeza en la fe (1 Ped. 5:12). Por esto, que él repite una y otra vez el
pensamiento de la recompensa eterna de la fe (1 Pedro 1,3-13,. 4:13, 5:14). Recibidor Como
destinatarios el escritor menciona a los cristianos de la diáspora. Además, esta dado el nombre
de cinco provincias (1 Ped. 1,1), que representan casi toda el Asia Menor. Donde uno tiene que
encontrar el destinatario no está muy seguro. Probablemente es en el Ponto, Galacia,
Capadocia, Asia y Bitinia (1 Ped. 1,1) sobre el nombre de la provincia romana, incluso si el
Ponto y Bitinia para la administración romana formó una unidad de longitud. Al igual el orden
impar, que indica el nombre de la provincia, indica que, el autor no es muy bien informado
sobre la geografía de Asia Menor . Esta carta suena como una circular, que debe ser
transmitido de una comunidad a otra. La primera Carta de Pedro pertenece al grupo de los
siguiente siete cartas del Nuevo Testamento que se llama las "Epístolas Católicas" : las dos
cartas de Pedro, Las tres cartas de Juan, la Epístola de Santiago y La carta de Judas . "Cartas
católicas" no tiene nada que ver con La Iglesia Católica - romana, sino que simplemente
significa "universal". Por lo tanto, hay que decir que esas cartas no estaban dirigidas a una
comunidad particular, sino son dedicadas a todas Iglesias de Jesucristo.
Los destinatarios son sospechados y maldecidos, y al parecer, también acusados por ser sólo
cristianos. Ellos fueron también llevados ante la justicia, sin que podría decir, más
precisamente, hasta que las autoridades, que probablemente intervino sólo a los anuncios
hacia fuera, había ido ya, a su actitud anti-cristiana. El autor quiere evitar confrontaciones y
provocaciones innecesarias , que llevará a los gentiles cualquier pretexto para sus acusaciones.
Aunque probablemente no se puede hablar todavía de una verdadera persecución organizada
por el Estado, sino más bien por una actitud hostil para el medio ambiente. Página 06 Debido a
la nueva forma de vida inconformista , los cristianos fueron a una alienación social ocurrido.
Esto llevó no sólo a la discriminación y el acoso privado, sino también a criminalizar . Con
recoger las acusaciones por las autoridades ,se había causado un peligroso agravamiento de la
situación ,que ya no era limitada local . Lo que el escritor dice de su pasado (1 Pedro 1,14,18,.
2,9, 4,39), sugiere que la mayoría de los beneficiarios eran paganos antiguos. El autor los
identifica en el título (1 Pedro 1, 1.): "Los extranjeros elegidos esparcidos" - en la diáspora. La
palabra griega "diáspora" podría tentarnos a pensar que eran cristianos de origen judío. En
dichas provincias romanas había muchas colonias judías. Pero Pedro no escribió para "judíos
no creyentes", sino a una” iglesia diáspora de los creyentes de Jesús ", que no tenía un hogar
permanente en el mundo (1 Ped. 2:11).

EN LA PERSEVERACION DE LA LUCHA, LA CERTEZA DE LA VICTORIA. UN EJEMPLO DE LAS


PRIMERAS COMUNIDADES (AP 2,8-11)
El libro de Apocalipsis es un libro muy estructurado, muy organizado y podemos encontrar tres
divisiones generales. El personaje principal es el Señor Jesucristo, pero no Aquel que podemos
contemplar al leer la historia de la Navidad, o aquel Jesús que murió en una cruz, para pagar
las culpas y los pecados de cada ser humano. En Apocalipsis tenemos al Señor Jesucristo
glorificado, magnífico y excelso, en la Gloria de los Cielos. El autor de este libro, el único
profético que está en el Nuevo Testamento, es el apóstol Juan quien, exiliado en la Isla de
Patmos, recibió una visión de las cosas "que fueron", "las que son" y "las que serán". El
capítulo uno contiene la presentación y los saludos de Juan, el autor, y de Jesucristo quien le
ordena escribir todo cuanto ve y oye.
Los capítulos 2 y 3 de Apocalipsis, tratan de "las cosas que son", es decir, se ocupa de temas
que concierne a la Iglesia. A partir del capítulo 2, el Señor Jesucristo le dicta siete cartas, a las
siete iglesias escogidas, que se encontraban en lo que en esos días se llamaba "Asia Menor".
En nuestro tiempo a esa región geográfica la conocemos como Turquía. Estas siete iglesias
fueron seleccionadas por una razón muy bien definida. Cada una de ellas tiene una
característica que puede relacionarse con las diversas épocas por las que ha pasado la historia
de la iglesia, hasta llegar a nuestros días.
Vimos en nuestro programa anterior que la iglesia en Éfeso, a la cual fue dirigida la primera
carta, representaba a las numerosas iglesias de los primeros tiempos, a la iglesia apostólica.
Esta etapa comenzó en el día de Pentecostés, cuando miles de personas aceptaron a Jesucristo
como su único y suficiente Salvador, hasta aproximadamente el año 100 D. C.
Hoy veremos a la iglesia en Esmirna, que representa a la siguiente etapa de la Iglesia de
Jesucristo. Se la llama también "la iglesia mártir". Como dijimos en nuestro programa anterior,
ésta iglesia padeció el martirio, por su fe en Jesucristo. La palabra "Esmirna" proviene del
significado "mirra", que implica la idea del "sufrimiento". Y esta se encuentra en Turquía y se
llama en la actualidad Izmir. Es una ciudad muy comercial y hay quienes opinan que Izmir
llegará a ser más grande que Estambul algún día.
Izmir es una de las ciudades más hermosas de Asia, de hecho ha sido llamada la corona de
toda Asia. Su puerto, de gran tamaño, es uno de los más hermosos. Se puede encontrar La
Acrópolis el monte Pagus. La fundación de la ciudad se remonta al año 2000 A.C., una ciudad
hetea en las laderas del monte Pagus; más tarde Alejandro Magno agregó muchos edificios de
hermosa construcción. La ciudad tenía grandes y hermosas avenidas a lo largo de las laderas
del monte Pagus. Se la llamó "la ciudad coronada" porque estaba rodeada por hileras de
flores, arbustos y de árboles de arrayán. Hermosos templos y elegantes edificios la adornaban.
Había un templo para el dios Zeus, otro para la Cibeles, que era la misma Diana, otro templo
para Afrodita, y uno para Apolo. Izmir también tenía un teatro y un audium, es decir un centro
musical. Los habitantes eran amantes de la música, y también había un gran estadio. Fue en
ese estadio que Policarpo, un estudiante del apóstol Juan, quien como obispo de Esmirna, fue
martirizado allí en ese estadio, donde fue quemado vivo, en el año 155 D. C.
Ya hemos mencionado que en la literatura cristiana, Esmirna se identifica con el "sufrimiento".
Al dirigirse a esta iglesia en Esmirna, el Señor Jesucristo les dijo: "Conozco. . .tu tribulación, y tu
pobreza. . .". (Ap. 2:9). Él les hacía saber que conocía su sufrimiento y su pobreza. No tuvo
ninguna palabra de condenación o reproche para los creyentes y miembros de esa Iglesia,
débil económicamente, pero fuerte en espíritu y fe. Solo hay otra iglesia más, la de Filadelfia,
que veremos algo más adelante, a la cual el Señor Jesucristo tampoco acusó, ni reprochó de
falta alguna. Es interesante notar que sólo estas dos iglesias han perdurado a través de los
siglos, aunque actualmente no practican su fe en el Señor Jesucristo abiertamente, por la
escasa libertad religiosa que todavía hoy existe en ese país.
Así como los creyentes en la iglesia de Éfeso representan el período apostólico de la Iglesia, así
Esmirna representa la iglesia mártir, que cubre un período desde el año 100 D.C., hasta
aproximadamente el año 314 D. C., desde la muerte del apóstol Juan, hasta el Edicto de
Tolerancia del emperador romano Constantino, promulgado en el año 313 D. C., con el cual se
puso fin a la persecución de los cristianos, no sólo en Esmirna, sino en todo el imperio romano,
especialmente en Roma.
Pero prosigamos con el texto que se encuentra en el capítulo 2 de Apocalipsis, versículo 8. El
Señor Jesucristo se dirige a esta iglesia, en un mensaje muy breve; todo lo que les dice son
elogios y palabras de alabanzas y complacencia. Leamos el versículo 8:
8
  Y escribe al ángel de la iglesia en Esmirna: El primero y el postrero, el que estuvo muerto y
vivió, dice esto: (Ap. 2:8)
Este versículo es una referencia al capítulo 1, versículos 17 y 18, donde leemos que el apóstol
Juan comenta: "Cuando le vi, caí como muerto a sus pies. Y él puso su diestra sobre mi,
diciéndome: No temas; yo soy el primer y el último; y el que vivo y estuve muerto; mas he aquí
que yo vivo por los siglos de los siglos, amén. Y tengo las llaves de la muerte y del Hades". El
Señor Jesucristo eligió de la visión que le otorgó a Juan, aquello que era adecuado y
representativo de Si mismo, para cada iglesia. A la valiente iglesia de Esmirna, la iglesia mártir,
el Señor se describe a Sí mismo como "el primero y el último, que estuvo muerto pero vivo".
La frase "el primero y el postrero" quiere decir que no hubo nada antes de Él, y que no habrá
nada después de Él. Él es quien tiene a Su cargo la declaración final de todas las cosas. Los
creyentes que estaban siendo perseguidos necesitaban saber que Él estaba a cargo de todo, y
que sus sufrimientos, la persecución y hasta la muerte, estaba en los planes y propósitos de
Dios.
Continuó diciendo el Señor: El que estuvo muerto y vivió. Estas palabras contienen el
verdadero mensaje para los mártires. Habla de la muerte y resurrección de Cristo, y Su
experiencia personal con la muerte lo identifica con los cinco millones de creyentes que fueron
martirizados durante ese período. El comentarista Fox, en su "Libro sobre los Mártires"
menciona como fidedigna la cifra asombrosa de 5 millones de personas que murieron como
mártires durante ese período en concreto. Pero, el Señor Jesucristo triunfó sobre la muerte, y
Él puede salvar a todos aquellos que están soportando persecución y martirio por su fe en Él. A
continuación, Jesucristo sigue con su mensaje a los creyentes de la iglesia de Esmirna. Leamos
los versículos 9 y 10 de este capítulo 2 de Apocalipsis:
9
  Yo conozco tus obras, y tu tribulación, y tu pobreza (pero tú eres rico), y la blasfemia de los
que se dicen ser judíos, y no lo son, sino sinagoga de Satanás.  10  No temas en nada lo que vas a
padecer. He aquí, el diablo echará a algunos de vosotros en la cárcel, para que seáis probados,
y tendréis tribulación por diez días. Sé fiel hasta la muerte, y yo te daré la corona de la vida.
(Ap. 2:9-10)
Ahora, el Señor Jesucristo menciona siete características de esta iglesia que el Señor elogia en
la iglesia. Primero, menciona la tribulación. Ahora, es cierto que en los mejores manuscritos
del original de esta carta no están incluid as las palabras "tus obras", pero esto no altera para
nada el sentido del mensaje. La tribulación que se menciona aquí, no es una referencia al
período de la Gran Tribulación, sino a la terrible persecución que estaba padeciendo la iglesia
bajo el dominio romano. Su amor por Jesucristo era tan fuerte y tan fiel que aceptaban incluso
la muerte, porque entendían que su fe en Él merecía ser vivida hasta las últimas
consecuencias. ¡Ojalá los cristianos en nuestros días fuéramos tan valientes para proclamar
nuestra fe, a pesar de las críticas, las burlas, el desprecio y la incomprensión que un auténtico
cristiano suele recibir, al ser consecuente con su fe y amor por Jesucristo!
Ahora, la segunda característica que Jesucristo elogia es su desprendimiento de posesiones
materiales, o la falta de interés en ella "y tu pobreza (pero tú eres rico)". Estimado amigo
oyente, la primera iglesia estaba formada en su gran mayoría por personas sin recursos, por
gente obrera y por gente necesitada de ayuda. Cuando se convertía alguna persona ricos,
como represalia, sus propiedades eran confiscadas, todo a causa de su nueva fe en el Señor
Jesucristo. Sigue el Señor: Pero tú eres rico, y eso nos habla de otra clase de riqueza, que son
las bendiciones espirituales. Más adelante, cuando lleguemos a estudiar el caso, o el mensaje
dirigido a otra iglesia, la iglesia de Laodicea, veremos un gran contraste. La iglesia en Laodicea
era rica, pero el Señor le tuvo que decir: "Tú eres pobre y no lo sabes".
Esta iglesia mártir no podía jactarse de tener muchos bienes materiales. Los miembros esa
congregación eran gente pobre, y muchos habían sido esclavos, esclavos que habían sido
liberados o que habían huido de sus amos.
Tercer característica: "y la blasfemia de los que se dicen ser judíos, y no lo son, sino sinagoga
de Satanás. La implicación es que los judíos de Esmirna que habían llegado a aceptar a
Jesucristo, eran judíos íntegros, eran judíos en su interior y en su exterior. El Apóstol Pablo, en
Romanos 9, 6 dijo que no todo Israel, es Israel. Un judío, un hebreo, no lo es solamente por su
raza, sino por seguir y practicar la religión del pueblo de Israel, eso es lo que lo identifica.
Había judíos que vivían en esa ciudad pero que habían aceptado la cultura de esa región; a
pesar de decir que eran judíos, estilo de vida negaba la herencia histórica de sus antepasados,
como también la fe en los libros sagrados del Antiguo Testamento.
La cuarta mención específica de Jesucristo fue: No temas en nada. Este es el ánimo que da el
Señor en medio de la persecución. Y es la segunda vez en este libro que el Señor ofrece esta
clase de aliento. La historia de la iglesia, pero también la secular relata de las multitudes de
personas que se enfrentaron a la muerte, cantando alabanzas a Dios.
En quinto lugar, Jesucristo menciona al diablo. Más adelante estudiaremos a este terrible
personaje. Aquí Cristo dice que Satanás es responsable por el sufrimiento de los santos en
Esmirna. Nosotros, generalmente acusamos a las personas más cercanas, o a las
circunstancias, como instrumentos que Satanás emplea para infligir dolor, angustia o
problemas. Pero el Señor Jesucristo indica la raíz misma del problema. El autor de estos
estudios bíblicos, el Dr. J. Vernon McGee, contaba que él creía que podía clasificar todos los
sufrimientos que padecen los hijos de Dios como juicios o castigos de Dios. Pero cuando él
mismo comenzó a tener muchos problemas físicos estaba un poco confundido. Muchas
personas comenzaron a escribirle diciendo que creían que Satanás era el responsable, y que
esa era la explicación por la cual tenía tantos problemas físicos. Por lo tanto, el Dr. McGee
llegó a la conclusión que esa debía ser la explicación de tantas dolencias.
Ahora, la sexta cosa que el Señor Jesucristo menciona es: Y tendréis tribulación por 10 días.
Hubo 10 períodos de intensa persecución contra los creyentes de parte de 10 emperadores
romanos, y queremos mencionarlos, porque opinamos que son datos importantes. 1. Nerón,
del año 64 al 68 D. C. El Apóstol Pablo fue decapitado bajo el gobierno del emperador de
Nerón. 2. Domiciano, desde el año 95 hasta el 96 D. C., y él fue todavía mucho peor que
Nerón. El apóstol Juan fue exiliado durante ese período. 3. Trajano, de los años 104 al 117. Fue
entonces cuando Ignacio fue quemado en la hoguera. 4. Marco Aurelio, de los años 161 al 180.
Policarpo encontró el martirio en ese período. 5. Severo, del año 200 al 211; 6. Maximiano, del
235 al 237; 7. Decio, del 250, al 253; 8. Valeriano, del 257, al 260; 9. Aureliano, del 270, al 275,
y 10. Diocleciano, el peor de todos los emperadores, durante los años 303 al 313. Estos fueron,
pues, los 10 emperadores romanos que encabezaron una terrible persecución de los
creyentes.
Luego, la séptima cosa que el Señor Jesucristo menciona es: Sé fiel hasta la muerte. Y ellos lo
fueron. Los creyentes de Esmirna fueron fieles hasta la misma muerte. Y Él promete que les
dará la corona de la vida. Es muy interesante notar que el Señor tiene coronas especiales.
Conocemos a muchos santos maravillosos que van a recibir esa corona algún día. Y queremos
decirle a nuestros amigos oyentes que si alguien está sufriendo en estos momentos y se
pregunta si Dios realmente se preocupa, podemos asegurar que no sólo usted es muy
importante para Él, sino que Él tiene algo bueno para usted preparado en la Eternidad. El
apóstol Santiago dice en su epístola, capítulo 1, versículo 12: Bienaventurado el varón que
soporta la tentación; porque cuando haya resistido la prueba, recibirá la corona de vida, que
Dios ha prometido a los que le aman. Y esa corona de la vida indica que la disfrutará por toda
la Eternidad. ¡Qué cosa más gloriosa le espera a todos aquellos que soportan penalidades y
sufrimientos, pero perseveran en su fe en Él, en Jesucristo! Continúa el versículo 11 de este
capítulo 2 de Apocalipsis, dice:
11
  El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. El que venciere, no sufrirá daño de
la segunda muerte. (Ap. 2:11)
Dwight L. Moody lo expresó de la siguiente manera: "Aquel que ha nacido una vez tiene que
morir dos veces. Aquel que ha nacido dos veces, sólo debe morir una vez. Y quizá ni siquiera
tenga que morir una vez". No sufrirá daño de la segunda muerte. Esa es la muerte que ningún
creyente va a experimentar. La primera muerte es la física, por la que todo ser humano pasa, y
tiene que ver sólo con su cuerpo físico. La segunda muerte es la del alma y el espíritu, una
separación eterna de Dios. Eso es lo que significa la segunda muerte, y por la que ningún
creyente pasará.
Llegamos ahora a la carta del Señor Jesucristo a la iglesia de Pérgamo. Izmir, la Esmirna de la
antigüedad, es una gran ciudad que puede ser visitada cuando se viaja a Turquía. ES una
ciudad moderna, con un aeropuerto y muchos hoteles. Si usted viaja unos 100 kilómetros al
sur, llegará a Éfeso. Pero si viaja unos 110 kilómetros al norte, llegaría a Pérgamo. Estas son
tres grandes ciudades. Eran ciudades de la realeza, y competían entre sí. Izmir, o Esmirna, era
el gran centro comercial. Pérgamo, era el gran centro religioso. Y Éfeso, era el gran centro
político. Allí es donde permanecían los emperadores romanos. Allí también hay una hermosa
avenida de edificios revestidos de mármol. Se puede contemplar el templo de Trajano, con
una gran fuente, y también está el templo de Adriano.
Pergamum, como se la llamaba hace muchos siglos, era la capital del reino de Pérgamo. Sir
William Ramsey dijo de ella: "Era una ciudad que merecía el nombre de ciudad real, en la cima
de la montaña, una gran ciudad". Era una ciudad muy bien fortificada, una ciudad real, con su
acrópolis que dominaba toda la región de hermosos y fértiles valles que eran bañados por dos
ríos. Pérgamo era muy pagana, debido a sus muchos templos, dedicados a Atenea, Deméter,
Hera, Dionisio, Esculapio (dios de la medicina), y el gran altar de Zeus, estaban allí como un
trono en la cima de la acrópolis.
El apóstol Juan le dijo a esta iglesia en Pérgamo, que allí estaba el trono de Satanás. Esto lo
comentaremos en nuestro próximo programa. Esperamos que usted, estimado oyente nos
acompañe también en nuestro siguiente estudio.
Mientras tanto, le sugerimos que usted lea los próximos versículos, del versículo 12 hasta el
versículo 17, que contienen el mensaje del Señor Jesucristo a la iglesia en Pérgamo, y se
familiarice con su contenido.
Será entonces, hasta nuestro próximo programa, amigo oyente, y es nuestra más ferviente
oración para que también usted sienta la necesidad de conocer más a Jesucristo, y las cosas
que han de ocurrir en el futuro en nuestro planeta Tierra.

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