Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Ser santo no significa ser mejor. Ser santo no significa no tener pecado.
Ser santo no significa ser favorito. Ser santo no significa tener el
derecho de aprovecharse de su posición. Santidad tiene que ver con
mayor responsabilidad. Santidad tiene que ver con obediencia. Santidad
tiene que ver con mayor sacrificio. Santidad tiene que ver con pagar un
precio más alto. Santidad tiene que ver con una posición superior.
Santidad tiene que ver con límites marcados. Santidad tiene que ver con
cercanía.
Un judío no tiene permiso para casarse con una mujer que no es judía.
Un creyente en el Mesías no tiene el permiso para casarse con una no
creyente en el Mesías. Un sacerdote no puede casarse con mujeres que
hayan practicado la fornicación, que hayan nacido de una relación
prohibida, que sean divorciadas o convertidas.
Esto nos enseña que cuanto más santidad haya, más estricta es la
exigencia. El que quiere vivir una vida de santidad no puede hacer cosas
que otros pueden hacer. Uno que desea acercarse más a la santidad
dentro del plan del Eterno que hay para su vida tendrá que revisar toda
área de su vida y preguntarse si lo que está haciendo es agradable para el
Eterno.
http://www.messianictorah.org
Para los diferentes grupos de personas hay cosas permitidas que no son
totalmente agradables para el Eterno. También hay cosas agradables
para el Eterno que no son perfectas para él. Y finalmente hay cosas
perfectas en cada uno de los diferentes grupos de personas, según el
nivel de santidad máxima de cada grupo. Vemos por o tanto que se
puede vivir en diferentes niveles de santidad dentro del grupo al cual
uno pertenece.
“Todas las cosas me son lícitas, pero no todas son de provecho. Todas las
cosas me son lícitas, pero yo no me dejaré dominar por ninguna… Todo
me es lícito, mas no todo conviene; todo me es lícito, mas no todo
edifica.” (1 Cor. 6:12; 10:23 LBLA)
Ketriel
http://www.messianictorah.org