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BOTÁNICA
RAÍZ
Funciones.-
Anclaje. En el caso de plantas que crecen en el suelo, según la granulometría del
sustrato, la raíz se desarrolla y se ramifica más o menos. El aspecto de las raíces cambia
de una planta a otra: una encina tiene las raíces desarrolladas en profundidad, mientras
que un álamo las desarrolla superficialmente. En el caso de las Tillandsias, las raíces
están especializadas para cumplir solo la función de anclaje.
La absorción del agua y de los nutrientes del suelo, y su transporte al resto de la planta
para su crecimiento y a las hojas para la fotosíntesis. El transporte se realiza por
la presión en la raíz debida a la absorción del agua.
Comunicación. Ciertas especies de árboles pueden unir sus raíces a las de árboles de la
misma especie y así poner en común los recursos hídricos y nutritivos. Esta unión puede
ayudar a un árbol gravemente herido a sobrevivir y a resistir mejor la erosión de los
suelos, pendientes y ribazos. Cuando la conexión no es directamente física, las
comunicaciones pueden existir por medio del tejido micorrizado. Se ha descubierto que
hileras de árboles, bosquetes y partes importantes de bosques pueden estar unidos, lo
que hace suponer que se trata de una ventaja evolutiva importante.
Caliptra o cofia
En la punta de la raíz hay una pequeña capa que no es visible cuya función es darle
protección mientras crece y, sus diferentes tipos de células se van multiplicando y
diferenciando, también la mantiene anclada al suelo, no importa el tipo de terreno que
sea, se trata de la caliptra, la cual cumple diversos roles según la etapa de desarrollo de
la planta, por lo que se ubica justo al final de la planta.
La caliptra está formada por células parenquimáticas vivas, (El parénquima está
constituido por células vivas, generalmente bien vacuoladas, fisiológicamente
complejas, en general con paredes primarias, poco diferenciadas) capaces de reanudar la
actividad meristemática. A esta capacidad deben las plantas la posibilidad de cicatrizar
las heridas, regenerar tejidos, y formar nuevos vástagos y raíces adventicias . que a
menudo contienen almidón. Las células se disponen en hileras radiales, las células
centrales forman un eje llamado columela. Las células apicales se diferencian en células
periféricas que junto con las células epidérmicas secretan el mucigel, sustancia viscosa
compuesta principalmente por polisacáridos elaborados en los dictiosomas. Las células
periféricas se desprenden a medida que la raíz se abre paso en el suelo. Las células
meristemáticas que se encuentran detrás de la caliptra, se dividen continuamente por
mitosis, lo que permite el crecimiento en longitud de la raíz, se trata del meristema
apical radical, estas células empujan a la caliptra para que continúe su descenso por el
interior del suelo.
Cuerpo
El cuerpo es la parte de la raíz que está bajo tierra y le sigue al cuello, dependiendo del
tipo de planta puede tener una raíz principal única o, además poseer raíces
secundarias que surgen de la primaria y lo más importante es que estas raíces
secundarias, tienen finísimos pelos radiculares o absorbentes, así llamados por ser los
órganos activos de la absorción, todo depende de la especie vegetal y su complejidad
morfológica y de funcionamiento, está compuesto por varias zonas, zona de
maduración, Corresponde a la zona en la que los tejidos primarios o meristemáticos
maduran y se transforman en tejidos especializados, la zona de elongación, la región de
elongación corresponde a la zona en la que dichas células se elongan verticalmente
mediante la absorción de agua hacia la vacuola. Este es el mecanismo principal
mediante el cual la raíz crece longitudinalmente. Dicho estiramiento requiere sin
embargo, un aumento en la cantidad de citoplasma celular y la zona de división que
también es también conocida como zona meristemática y corresponde a la región de la
raíz en donde se producen los llamados tejidos primarios debido a que son los primeros
en originarse en la raíz y la zona apical, el meristemo radicular se encuentra en una
posición subterminal de la raíz, protegido en su avance a través de la tierra por la cofia o
caliptra. En los meristemos apicales de las raíces se forman distintos tejidos.
Epidermis
La raíz de las plantas está cubierta por una superficie dura que la protege y que se
conoce como epidermis en general uniseriada (una sola capa de células), que carece de
estomas y presenta pelos radicales en la zona de maduración, región situada a
continuación de la zona de elongación. Además de cumplir esta función protectora, en
esta porción de la planta se hallan las células encargadas de absorber el agua. Las
células de la epidermis tienen simetría radial (ayudan a aumentar en grosor a la raíz) al
igual que las células del cortex y de la endodermis y se originan de células
meristemáticas diferenciadas llamadas células iniciales, que son las precursoras de todos
los tipos de células que dan lugar a los diferentes tejidos
Pelos radiculares
Córtex
Debajo de la epidermis se halla una estructura conocida como córtex y cuya función
es almacenar el agua que absorben los pelos radiculares, los que además poseen
espacios intermedios que tienen como objetivo el permitir que la raíz de la planta respire
mediante la entrada y salida de aire. Sus células al igual que las de la epidermis, tienen
también simetría radial, ayudan al aumento en grosor de la raíz.
Endodermis
La endodermis de la raíz de las plantas es una capa delgada que se halla en la zona
interna del córtex. Esta parte de la raíz está formada por una sustancia conocida como
suberina, la cual sirve para crear la llamada banda de caspari, que es impermeable y
redirige el agua para evitar que se quede en sus células, esta banda se encuentra dentro
de la endodermis, las células de la endodermis, tienen simetría radial. Dentro de la
endodermis, se encuentra el periciclo, de ahí surgen las ramificaciones de la raíz, dentro
del periciclo también encontramos el cilindro vascular, formado por floema y xilema.
Cilindro vascular
El cilindro vascular es la zona que está más al centro de la raíz, alejada de las paredes
externas y el ambiente. Esta parte ubicada bajo la endodermis, contiene justamente el
sistema vascular de la planta con una serie de tubos y tejidos, los cuales pueden ser más
o menos complejos según el tipo de especie vegetal. El cámbium es el meristema
secundario que forma xilema y floema que son los tejidos vasculares de las plantas y en
especial de la raíz, como conocemos, el xilema conduce la sabia bruta hacia las hojas
para que esta sea elaborada, y el floema, conduce la sabia elaborada hacia los diversos
órganos de la planta para que esta sea alimentada.
Raíces fasciculadas
También llamada raíz atípica o fibrosa. En este tipo de raíces no existe una raíz
principal, por lo que todas las ramificaciones son igual de importantes y pueden
alcanzar tamaños parecidos. Es uno de los tipos de raíces más vistos en las plantas de
jardinería.
Raíces napiformes
La planta contiene una gran raíz principal, que ha evolucionado para ser capaz de
almacenar nutrientes de reserva y otras sustancias vitales. Por tanto, se trata de raíces
muy gruesas y, además, muchas de ellas son comestibles.
Raíces ramificadas
La estructura de esta raíz recuerda mucho a la de las ramas de un árbol. No consta de
raíz principal, y se ramifica de forma muy marcada y por eso se le llama raíz ramificada.
Raíces tuberosas
Las raíces tuberosas también tienen la capacidad de ensancharse y multiplicar su tamaño
al acumular sustancias de reserva, pero en lugar de hacerlo en una única raíz principal,
pueden hacerlo en
varios depósitos. Son los llamados habitualmente tubérculos.
Raíces adventicias
Estas son raíces que nacen y se desarrollan por encima del suelo, en lugar de bajo este.
La misma se mantiene en contacto con el suelo para poder absorber nutrientes y agua de
él, pero se expande por encima, sin enterrarse.
Raíces acuáticas
Las raíces acuáticas son propias de las plantas que crecen en medios acuáticos, como el
propio nombre indica. No están en contacto con la tierra, y toman los nutrientes que
precisan de la misma agua. Habitualmente son plantas que no se mantienen fijadas a
nada y simplemente flotan en la superficie.
Raíces de almacenamiento
Se engloban en este grupo los tubérculos y otras raíces que son capaces de almacenar
agua y nutrientes bajo tierra, para mantenerlos a salvo de los depredadores herbívoros y
poder aprovecharlos cuando la planta los necesite.
Tipos de raíces según el anclaje que dan a la planta
Raíces contráctiles
Son también un tipo de raíz adventicia. Se trata de raíces cuya función es desplazar el
brote hasta una ubicación cercana a la superficie del suelo. Las raíces contráctiles son
largas y de tipo carnoso, y cuando la planta crece se consume en parte.
TALLO
Concepto.- Se define como todo órgano aéreo o subterráneo, verde o incoloro, derecho,
rastrero o trepador, portador de hojas (sean éstas verdes, reducidas a escamas o
cicatrices foliares), flores y frutos. A diferencia de las raíces, el tallo
presenta geotropismo negativo, tiene nudos (lugares donde se originan las hojas)
y entrenudos (regiones entre dos nudos consecutivos), yemas (áreas del tallo situadas
justo por encima del punto de inserción de la hoja apical y axilares) y por lo común
hojas bien desarrolladas.
Función.- Es el eje de la planta que sostiene a todas las partes de la planta y en especial
a las hojas, órganos de asimilación con forma aplanada, las cuales se disponen de un
modo favorable para captar la mayor cantidad de radiación solar con el mínimo
sombreamiento mutuo (ver filotaxis). En las plantas que no presentan hojas
identificables como tales, como en la mayoría de las cactáceas, el tallo se encarga de
la fotosíntesis. En el momento de la reproducción, el tallo sostiene también las flores y
los frutos. En muchas especies, el tallo es además uno de los órganos de reserva de agua
y fotoasimilados, especialmente con antelación a la etapa reproductiva.
No obstante, la función principal del tallo es la de constituir la vía de circulación de
agua entre las raíces y las hojas de las plantas. Puede tener muchos metros de altura, el
tallo leñoso más largo que se conoce es el de la palmera trepadora Calamus manan de
185 m.
El flujo de agua a través de la planta se realiza debido a las diferencias en el potencial
hídrico entre la atmósfera y el suelo, siendo el xilema el tejido conductor. El flujo de
agua en el xilema es un proceso físico, en donde la energía necesaria para que se lleve a
cabo proviene de la transpiración del agua desde los estomas de las hojas hacia la
atmósfera. Como consecuencia de tal transpiración, se produce una deficiencia de agua
en las células del mesófilo de la hoja, el cual hace que el agua fluya desde las células
más internas con un mayor potencial de agua. La deficiencia hídrica inicial se propaga
sucesivamente hasta llegar a la altura de los conductos del xilema. La
naturaleza capilar del xilema, las propiedades de cohesión de las moléculas de agua
entre sí, la adhesión del agua a las paredes celulares y la tensión desarrollada por
diferencias en el potencial hídrico originadas en la transpiración, permiten en conjunto,
el movimiento de la columna de agua desde la raíz hasta las hojas.
Origen.- El tallo se forma a partir de la yema caulinar en la plántula o de las yemas
secundarias en las ramificaciones. Estas ramificaciones pueden producirse mediante dos
sistemas: monopódico o simpódico.
Yema.- Una yema es el extremo joven de un vástago, y por lo tanto además
del meristema apical, lleva hojas inmaduras o primordios foliares. La yema situada en el
extremo del eje es la yema terminal, mientras que las que se encuentran en la unión de
las hojas con el tallo son las yemas axilares. En ciertos casos es difícil distinguir las
yemas del resto del tallo, especialmente cuando los primordios no están claramente
agrupados, como sucede en el espárrago (Asparagus officinalis) y en especies de gran
porte de las monocotiledóneas como Agave y Pandanus.
De acuerdo a su estructura se distinguen dos tipos de yemas, las yemas escamosas y
las yemas desnudas, cuando no están cubierta por escamas.
El ápice de las yemas escamosas está protegido por hojas modificadas con aspecto
escamoso, dispuestas apretadamente. Generalmente estas escamas, pérulas o tegmentos
son oscuras y coriáceas, cumplen el rol de protección del ápice vegetativo. Las escamas,
estrechamente aplicadas unas sobre otras y provistas de una gruesa cutícula, impiden la
desecación de los tejidos embrionales durante el invierno, cuando la circulación de
la savia es más lenta. Si se hace un corte longitudinal de la yema, se observa, por debajo
de las escamas protectoras el ápice vegetativo, asiento del meristema apical del tallo y
los primordios foliares. Cuando en la primavera el meristema inicia su actividad, las
escamas caen, y los primordios foliares se desarrollan en hojas adultas.
En Eucalyptus las yemas pueden tener hasta 50 pares de primordios foliares. Suelen
tener pelos en abundancia que retienen el aire y constituyen un abrigo para
el meristema, protegiéndolo de las variaciones térmicas bruscas. Las escamas pueden
tener coléteres, estructuras glandulares secretoras de sustancias pegajosas
como mucílagos y resinas, que contribuyen a la defensa contra la desecación al asegurar
una mayor impermeabilidad; son comunes sobre todo en las plantas de deciduas. Las
yemas desnudas están desprovistas de escamas protectoras y en este caso generalmente
están protegidas por las hojas jóvenes. Estas yemas se presentan generalmente
en plantas herbáceas.
Las yemas axilares son generalmente únicas, es decir que en la axila de cada hoja nace
una sola yema; en algunas especies, sin embargo, pueden presentarse yemas axilares
múltiples o supletorias que originan flores, ramas, espinas o zarcillos. Según cómo estén
dispuestas, hay dos tipos de yemas múltiples: seriales y colaterales. Las yemas seriales
están situadas una por encima de la otra en la axila de la hoja tectriz, formando una fila
vertical, como por ejemplo en el mburucuyá (Passiflora caerulea), en la madreselva
(Lonicera japonica) y en la santa rita (Bougainvillea spectabilis), como así también
están presentes en las bignoniáceas, las fabáceas y las rubiáceas). Las yemas colaterales
o adyacentes se encuentran situadas una al lado de la otra en la axila de una misma hoja
formando una fila horizontal. En el ajo (Allium sativum), cada diente es una yema
axilar; en las inflorescencias del bananero (Musa) cada conjunto de yemas originará una
"mano" de bananas. También están presentes en las aráceas y en las palmeras.
El fenómeno de la caulifloria (árboles o arbustos que producen las flores en el tronco y
en las ramas añosas) se debe al desarrollo tardío (años o décadas después) de yemas
durmientes que quedan en la corteza del tallo.
La epidermis del tallo frecuentemente lleva estomas y tricomas, al igual que la de las
hojas. La corteza es la región entre los tejidos vasculares y la epidermis. Esta corteza
primaria o córtex está formada por tejidos fundamentales, en algunos casos
solo parénquima con función asimiladora o reservante, y en otras ocasiones también
por colénquima, esclerénquima o ambos, con función mecánica. El conjunto entre la
corteza y la región vascular se denomina región pericíclica, de donde pueden surgir las
raíces adventicias. El cilindro central o estela es también llamado cilindro vascular
primario, ya que está constituido por los tejidos conductores
(floema y xilema primarios).
Dichos tejidos en dicotiledóneas pueden formar un cilindro hueco (cuyo centro está
ocupado por una médula parenquimatosa), o bien aparecer en forma de haces o
cordones dispuestos en círculo alrededor de una médula parenquimatosa y separados
entre sí por porciones parenquimáticas, llamadas radios medulares, que comunican la
médula con la corteza.
Si los vasos son de diferentes tamaños, y los formados en el leño temprano son
notablemente mayores que los del final del anillo de crecimiento, la porosidad se conoce
como circular o anular, ej.: Quercus.
Peridermis
La epidermis no acompaña el crecimiento en grosor del tallo secundario, siendo
remplazada por la peridermis, tejido formado por el otro meristema secundario
llamado felógeno, el que produce súber o corcho hacia fuera, y felodermis hacia el
interior. Esta peridermis es gradualmente eliminada junto con las capas más viejas
de floema, este conjunto de tejidos muertos es el ritidoma conocido vulgarmente como
la corteza en los árboles. Un nuevo felógeno se forma cada cierto tiempo. En algunos
árboles como el Quercus suber, del cual se extrae el corcho comercial, el felógeno dura
toda la vida de la planta, produciendo súber de forma continua.
El intercambio gaseoso se lleva a cabo por zonas llamadas lenticelas. Se forman
normalmente donde se encontraban los estomas. En esta zona, el felógeno desarrolla un
tejido de relleno, formado por células con abundantes espacios intercelulares.
Epígeos o aéreos: son todos aquellos tallos que crecen, como su nombre lo indica, por
encima de la tierra. Incluyen los tallos normales con auténticas hojas y los estolones,
siendo estos brotes laterales más o menos delgados y generalmente muy largos (como es
el ejemplo de la frutilla, Fragaria). De acuerdo con la dirección que sigue su
crecimiento, los tallos aéreos pueden ser rectos o ascendentes si crecen de
forma vertical, o rastreros si crecen de forma horizontal sobre la tierra.
Hipógeos o subterráneos: son los tallos que crecen debajo de la tierra y
presentan catáfilos (hojas rudimentarias). Dentro de este tipo de tallos se hallan
los tubérculos, los rizomas y los bulbos, los cuales se describen a continuación:
Cormos: se trata de tallos aplanados y de reserva con nudos y entrenudos muy cortos.
Según su consistencia:
Trepadores: son aquellos tallos que se fijan a un soporte mediante zarcillos, como por
ejemplo los tallos de la vid (Vitis).
Leñosos: son tallos rígidos y duros, sin color verde ya que no presentan clorofila.
Arbustivos o Sufrútices: llegan a desarrollar tejidos secundarios, pero solo en la región
próxima a la base, manteniendo la parte superior de la planta siempre con tejidos
jóvenes.
Arbóreos: Son tallos que desarrollan tejidos secundarios por completo, limitando los
primarios a las yemas tanto apicales como axilares. Son de consistencia dura, la que se
debe a la acumulación de súber en ellos.
Estípite: Son aquellos tallos monopodiales en los que la única yema que se desarrolla es
la apical, quedando todas la demás atrofiadas. Es el caso de la mayoría de las palmeras.
Carnosos o suculentos.- Los tallos carnosos son los que han desarrollado un sistema
para almacenar agua. Esto se debe al fenómeno de adaptación a ecosistemas donde el
agua puede llegar a ser muy escasa.
Según las modificaciones estructurales que presenten, los tallos pueden ser
Zarcillo caulinar: es un tallo muy delgado que ha perdido la capacidad de formar hojas
y flores. Su función es la de permitirle a la planta trepar o arrastrarse por diversas
superficies.
Espina caulinar: se trata de una rama modificada y muy lignificada que sirve como
defensa contra los depredadores.
Estolón: es un tallo cuya yema apical tiene la capacidad de formar raíces adventicias, lo
que le permite formar una nueva planta.
Tallos fotosintéticos:
Son aquellos tallos que han asumido las funciones de las hojas. Son propios de plantas
que, por razones adaptativas, han dejado de formar hojas o estas se redujeron hasta
volverse rudimentarias, o fueron modificadas hasta perder la capacidad fotosintética.
Estos tallos, a su vez, pueden ser:
platíclados: son tallos aplanados y fotosintéticos que puede tener la forma de una hoja,
como los filodios o filóclados, los cuales son ramas aplanadas y de aspecto foliáceo, que
puede llevar flores.
TALLO HORIZONTAL
Hoja
Concepto.- Las hojas son apéndices caulinares, en general verdes y aplanadas, que
nacen y se expanden lateralmente en los nudos de los tallos y ramificaciones, son los
órganos encargados de realizar la fotosíntesis.
La morfología y anatomía de tallos y hojas, está estrechamente relacionada, un órgano
no puede existir sin el otro; en conjunto constituyen el vástago.
A través de los estomas de las hojas, la planta toma el dióxido de carbono, CO2, de la
atmósfera, y expulsa el O2 procedente de la fotólisis del H2O, proceso incluido en la
fotosíntesis. Este oxígeno es fundamental para la vida en nuestro planeta.
Sucesión foliar
En numerosas especies de dicotiledóneas la forma de la hoja se modifica en el curso del
desarrollo del individuo.
Se distinguen los siguientes tipos de hojas (Fig.2.1)
1. Hojas embrionales o cotiledones Fig.2.1. Sucesión foliar
Vaina
El limbo está surcado por una serie de líneas o cordones, perfectamente visibles al
trasluz y salientes por el envés, llamadas nerviaciones, nervaduras o nervios. Son
hacecillos de conductos vasculares prolongación y ramificación de los del pecíolo,
cuya misión es aportar la savia bruta y retirar la elaborada.
En muchas hojas el nervio principal es central y finaliza en la punta del limbo (el
ápice); del nervio principal suelen partir otros nervios secundarios. Mediante las
nervaduras del limbo se puede realizar clasificaciones de las hojas (véase más abajo la
clasificación de las hojas según su nervadura).
Por su nervadura
Etc.
La nervadura o nerviación de las hojas varía dependiendo de las especies, aunque las
más comunes son las de nervadura paralela o paralelinervias, en que que las
nervaduras se extienden paralelamente desde su base; y las de nervadura reticular, en
las que existen nervios principales, de los que salen, a modo de red, otros nervios
secundarios o menores en disposición de retículo.
Las hojas se sitúan en los nudos a lo largo del tallo según diferentes órdenes, e incluso
con cierto desorden (las llamadas hojas esparcidas); a veces se disponen varias juntas
en un mismo nudo formando un verticilo (hojas verticiladas); en otras ocasiones se
muestran dos hojas en cada nudo enfrentadas entre sí (opuestas), etc.
Alternas: si las hojas están dispuestas siguiendo una línea espiral a lo largo
del tallo, es decir, nacen de una en una a lo largo de él.
Opuesta Sésil
HOJAS CAULINARES
Según la composición de las hojas en base a las características y aspecto del limbo, se
las clasifica en simples o sencillas y compuestas. En las primeras, el pecíolo no se
ramifica, siendo el limbo de una sola pieza.
Las hojas compuestas presentan el limbo dividido en hojitas (los folíolos) que a su vez
pueden subdividirse. La diferencia entre una hoja verdadera y un folíolo (que pueden
ser grandes), reside en que en la axila de la primera hay una yema, de la que carecen
los folíolos.
Las espinas foliares son estructuras duras acabadas en punta que, como hojas que son,
desgarran los tejidos al arrancarlas, ejemplo de los cardos, cactos, agracejo, etc.; esto
les diferencia de los aguijones, que, por ser modificaciones epidérmicas, se arrancan
con facilidad, como es el caso de las rosas.
Los filodios son hojas cuyo pecíolo se ha aplanado en forma de lámina con aspecto de
hoja, ejemplo de las acacias y eucaliptos.
Estructura
Flor
Concepto.- La flor es un vástago modificado para la reproducción con crecimiento
(antófilos).
Orientación en imágenes
PARTES DE LA FLOR
Esquema 1
En la imagen de abajo se distinguen las hojas modificadas que forman los carpelos de
una flor.
Las hojas modificadas (antófilos) se convierten en piezas estériles y fértiles.
1. Las piezas estériles son los sépalos y pétalos.
2. Las piezas fértiles son los estambres y carpelos.
El conjunto de sépalos componen el cáliz (K) y el conjunto de pétalos componen
la corola (C).
Los etambres (antera y filamento) forman la parte masculina de la flor (androceo).
Los carpelos (estigma, estilo y ovario) forman la parte femenina de la flor (gineceo).
Frecuentemente se suele confundir al gineceo con el pistilo. Cabe destacar que ambos
términos no son sinónimos. El gineceo puede estar compuesto por uno o más pistilos.
Cuando un gineceo posee un solo pistilo podemos decir que ambos comparten las
mismas partes en su composición.
TIPOS DE FLORES: CLASIFICACIÓN
Las monocotiledóneas tienen flores trímeras mientras que las dicotiledóneas tienen flores
tetrámeras o pentámeras.
Perianto
El conjunto de piezas estériles que componen la flor, es decir, el cáliz (K) y la corola
(C) se denomina perianto.
Perianto= K
+C
Perigonio.
Cuando el cáliz y la corola tienen apariencia semejante se denomina perigonio.
Flor asimétrica:
Función .- La función de una flor es producir semillas a través de la reproducción
sexual. Para las plantas, las semillas son la próxima generación y sirven como el
principal medio a través del cual las especies se perpetúan y se propagan.
La mariposa es uno de los agentes
Polinización
Es el desplazamiento del grano de polen desde las anteras (uno de los organelos del
androceo) hacia la parte superior del pistilo (estigma). La polinización, a su vez, puede
ser de dos tipos:
Polinización directa: el paso del polen hasta el estigma se lleva a cabo sin la
intervención de factores polinizadores.
Polinización indirecta: el paso del polen hasta el estigma se efectúa de una flor a otra
con la ayuda de agentes polinizadores como abejas, aves, insectos o la mano humana.
Producción de semillas
Una vez que el polen ha sido producido y transportado al estigma se produce la
fecundación, lo cual generará nuevas semillas.
Las semillas de una flor son nuevos frutos y plantas en potencia. Por lo tanto, la
supervivencia de esa especie depende de que las semillas puedan producirse, propagarse
y desarrollarse de manera eficiente.
Producción de frutos
Si las semillas se desarrollan adecuadamente darán lugar a nuevos frutos que en muchos
casos son comestibles. Por lo tanto, las flores son una fuente de alimento tanto para los
animales como para el ser humano.
INFLORESCENCIA
Fruto
Concepto.- En las plantas con flor, el fruto es el conjunto del ovario maduro y todas las
demás piezas florales. En sentido botánico, se llama fruto sólo al ovario maduro. En
términos coloquiales, la palabra suele usarse sólo para describir los frutos suculentos y
comestibles de las plantas leñosas, los de matas y arbustos, como el tomate o el melón,
y algunos otros más pequeños, como la fresa o la frutilla. En condiciones naturales, el
fruto suele formarse una vez que ha tenido lugar la fecundación del óvulo, pero en
muchas plantas, casi siempre variedades cultivadas, como los cítricos sin semilla, la
uva, el banano y el pepino, el fruto madura sin necesidad de fecundación; este fenómeno
se llama partenocarpia. En cualquier caso, la maduración del ovario provoca el
marchitamiento de los estigmas y las anteras y el agrandamiento del propio ovario (o de
los ovarios, si la flor tiene más de uno). Los óvulos presentes en el interior de los
ovarios fecundados se desarrollan y forman las semillas. En las variedades
partenocárpicas éstas no se desarrollan, y los óvulos mantienen el tamaño original. La
principal función del fruto es proteger las semillas durante su desarrollo; en muchas
plantas también favorecen su dispersión.
Partes del fruto.- Las partes del fruto son las siguientes:
Mesocarpo: Puede ser delgado y seco (Zea mays “maíz”) o adquirir gran desarrollo en
los frutos carnosos (Prunus domestica “ciruela”). En éstos, la clorofila, los ácidos, los
taninos, etc., abundantes al comienzo del desarrollo, van siendo paulatinamente
reemplazados por azúcares, vitaminas, esencias, almidón, dando origen a frutos vistosos
y de sabor dulce. El origen de la pared carnosa varía en los diferentes frutos, algunas
veces deriva de la pared ovárica exclusivamente, otras veces pueden contribuir las
placentas que proliferan hacia el interior de los lóculos (Lycopersicom esculentum
“tomate”).
Endocarpo: Constituye la parte interna que rodea la semilla, consta de una o más capas
de células algunas veces carnosas (Vitis vinifera “uva”), otras apergaminadas (Malus
domestica “manzana”) o esclerificadas formando un carozo (Prunus persica “durazno”).
En los cítricos, se desarrollan pelos pluricelulares, jugosos que llenan los lóculos.
Frutos Simples.- El fruto simple, es el producido a partir de un pistilo único que puede
consistir en un único carpelo (frutos monocárpicos) o en varios carpelos unidos entre sí
(es decir, un gineceo sincárpico o gamocarpelar, como por ejemplo el tomate, que dará
origen entonces a frutos policárpicos).
Los frutos que derivan de una flor con un sólo carpelo, monocarpelar se
denominan monocárpicos (ej. ciruela, durazno, chaucha, etc.).
Aceituna Palta
Ciruela (monocárpico)
(monocárpico) (monocárpico)
Si por el contrario derivan de una flor con ovario pluricarpelar, tenemos dos
posibilidades:
que los carpelos estén unidos (formando un único ovario -que proviene de un
gineceo gamocarpelar-): frutos policárpicos (ej. uva, tomate, naranja, kiwi)
que los carpelos están separados entre si, (por lo tanto la flor tiene varios
ovarios independientes -el gineceo es dialicarpelar-): frutos múltiples.( ej.
frutilla, magnolia, mora, etc.). El mejor ejemplo para visualizar esto es la mora o
la frambuesa, donde cada "bolita" que constituye el fruto fue originado por uno
de los carpelos que tenía la flor, como son muchos....
Naranja (policárpico) Kiwi (policárpico) Manzana (policárpico)
Dehiscencia del fruto:
Hay algunos frutos que al madurar permanecen cerrados y sus semillas quedan en el
interior, estos son los frutos indehiscentes (ej. manzana, durazno, roble, arce, etc.). En
estos casos, para que las semillas se liberen del interior del fruto y alcancen la tierra
para poder germinar, éste debe caer al suelo y pudrirse o bien, si es un fruto carnoso,
podrá ser ingerido por algún animal y las semillas pasarán por su tubo digestivo y serán
eliminadas con las heces (es por esto que en el campo es tan común encontrar pequeñas
plantas germinando en los montículos de bosta de los animales: podríamos decir que
tienen suficiente "abono" para ello...)