La construcción de la arquitectura de Ralph Erskine
Jaime J. Ferrer Forés
Este artículo, que analiza los avances constructivos y
el contenido bioclimático de la arquitectura de Ralph
Erskine (1914-2005), pionero también en la partici-
pación de los usuarios, presenta una investigación so-
bre la exploración de los medios constructivos y la
aplicación de los nuevos sistemas constructivos en el
campo de la prefabricación, en una trayectoria mar-
cada por los conceptos de sostenibilidad y adecua-
ción climática y respecto por el paisaje.
Atraído por la tradición nórdica y el funcionalismo
sueco, se trasladó a Suecia tras titularse en la Escuela
Politécnica de Regent Street en Londres donde com-
pletó su formación y construyó en 1942 una cabaña
de madera en Lissma, a las afueras de Estocolmo
como residencia y estudio profesional que anticipa su
espíritu de investigación y de innovación. Desde la
pequeña escala de la cabaña hasta sus propuestas a
gran escala, en Suecia encontró «la herencia de una
larga tradición basada en el empleo práctico de mate-
riales sencillos» (Erskine 2008), sobre la que desa-
rrolló una arquitectura que combina el lenguaje mo-
derno con los principios de la construcción
tradicional incorporando las innovaciones técnicas y
poniendo de relieve su potencial, así como su capaci-
dad de anticipar tanto la participación de los usuarios
como la construcción bioclimática del futuro (Norri
1995).
Las marcadas exigencias climáticas en Suecia
marcaron la arquitectura de Erskine cuyo lenguaje
formal se adapta tanto a la participación de los usua-
rios y la dimensión social como a las características
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de protección frente al clima, entre los que destacan
las terrazas suspendidas que evitan los puentes térmi-
cos, cubiertas que tratan de retener la nieve para
aprovechar su capacidad aislante o las ingeniosas so-
luciones de los cerramientos que completan un decá-
logo de soluciones climáticas que van desde la escala
urbana y la compacidad de las formas edificatorias a
las ingeniosas soluciones constructivas que retoman
soluciones tradicionales y abrirán nuevas posibilida-
des constructivas ilustrando las interacciones entre el
sistema industrial y el artesanal, propio de la cultura
constructiva.
LABORATORIO EXPERIMENTAL DOMÉSTICO
La pequeña cabaña de madera, donde residió durante
los cuatro primeros años en las afueras de Estocol-
mo, constituye un manifiesto de la arquitectura de
Erskine. Fue construida por el propio arquitecto en
una parcela cedida por un conocido suyo propietario
de una granja cercana y se concibe desde las premi-
sas de la autoconstrucción y el autoabastecimiento
con las que pretendían, no sólo hacer frente a las di-
ficultades económicas, sino también manifestar su
compromiso con un modo de vida basado en la sim-
plicidad de la vida rural. Construida con la ayuda de
su esposa, con piedras del lugar, madera de los bos-
ques, ladrillos de un antiguo horno y diversos mate-
riales reciclados de otras edificaciones, la casa cono-
cida como the Box en Lissma se construyó con gran
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Figura 1
Ralph Erskine. Casa The Box en Lissma, 1942 (Egelius 1977)
economía de medios. La vivienda experimental tam-
bién contaba con un jardín, un pequeño huerto y un
pozo además de colmenas de abejas y un palomar, no
construido, que aseguraban el autoabastecimiento de
la familia (figura 1).
Sobre un basamento de piedra, armado con mue-
lles metálicos de unos colchones abandonados, se le-
vantó una ligera estructura de madera tipo balloon
frame, de 6 por 3,6 metros, cuyas vigas acarteladas
de madera dotan a la cabaña de un cierto aire de mo-
dernidad, además de separarla de la humedad del te-
rreno para protegerla de un clima extremo en invier-
no. La fachada norte se cierra herméticamente y se
retranquea para organizar una franja protegida para
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el almacenamiento y secado de la leña aumentando
la inercia térmica y mejorando el aislamiento com-
plementándolo en la parte interior con un armario.
Mientras, hacia el sur la cabaña se abre a través de un
amplio vano acristalado que comunica el cuarto de
estar con el porche recurriendo al doble y triple
acristalamiento, cerrándolas incluso con material ais-
lante por la parte exterior para responder a las extre-
mas temperaturas nocturnas. El marco de color blan-
co que encuadra las caras norte y sur contrasta con
las fachadas de listones de madera superpuestos, de
las fachadas laterales cuyo aislamiento se realizó con
paneles porosos de treetex, cartones y virutas de ma-
dera (Lapuerta 2008).
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En apenas 20 metros cuadrados, la vivienda míni-
ma se organiza en dos ámbitos divididos por la chi-
menea central: la cocina y la sala de estar que se uti-
liza también como estudio del arquitecto a través de
unos ingeniosos mecanismos que permiten mediante
un mobiliario versátil adaptar el reducido espacio a
las distintas funciones. La cama se transforma en un
sofá y se eleva como la cuna mediante un sistema de
poleas y cables de acero así como la mesa abatible de
dibujo del arquitecto.
Erskine junto a su esposa Ruth y su hija residieron
en la cabaña de Lissma desde 1942 hasta 1945 cuan-
do se trasladaron a vivir a Drottningholm donde Ral-
ph estableció su estudio con el danés Aage Rosen-
vold, después de completar su formación en la
Escuela de Arquitectura de Estocolmo.
El empeño tenaz en la innovación y la experimenta-
ción que ensaya en la cabaña de Lissma se desarrolla
en la casa para Sven Båge (1947) y en la casa Nilsson
en Storvik (1947-1948) donde continua explorando las
posibilidades constructivas conjugando la maestría sa-
bia y lenta de la construcción en madera que articula y
ensambla con rigor vernáculo en el Centro de ocio y
esquí en Lida (1942-1943). La protección climática de
un muro de mampostería que se extiende para definir
un patio y proteger la casa a norte contrasta con la de-
licada estructura de madera de la casa para Sven Båge
que se abre al sur y al paisaje.
En la casa Nilsson, Erskine plantea los precursores
principios bioclimáticos que anticipa en la cabaña en
Lissma: planta compacta, porche perimetral con el
enmarcado blanco, la estructura de vigas de madera
laminada que eleva y protege la casa sobre el suelo o
el revestimiento de las fachadas de listones de made-
ra superpuestas que alternan la disposición vertical y
horizontal, las ventanas que encuadran y sobresalen
del plano del cerramiento y la chimenea como un
elemento autónomo. El programa doméstico se orga-
niza en torno a un jardín de invierno caracterizado
por un gran lucernario que ilumina el centro de la
casa en la que destaca la autonomía de la estructura
de vigas y postes de madera en relación a la compar-
timentación de la casa (figura 2).
En lugar a recurrir a la doble vertiente de la cu-
bierta tradicional que facilita la caída de la nieve,
Erskine proyecta un cubierta de doble vertiente in-
vertida para aprovechar la nieve como aislamiento
recogiendo las aguas en el centro. Así prescinde del
canalón perimetral de recogida de agua y evita la for-
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Figura 2
Ralph Erskine. Casa Nilsson en Storvik, 1947-1948 (Egeli-
us 1977)
mación de carámbanos en los aleros (Egelius 1977).
La constante caracterización de la casa a través de
la cubierta se desarrollará también en la casa Molin
en Lidingö (1947) donde la doble vertiente asimétri-
ca de la cubierta se extiende hasta el suelo propician-
do el crecimiento de la vegetación sobre el muro sur
y favoreciendo con el tiempo que la vegetación en-
vuelva el volumen construido para conseguir la inte-
gración de la casa con la naturaleza.
CONSTRUCCIÓN, CLIMA Y PAISAJE
En el Hotel en Borgafjäll en Laponia (1948-1950), Ers-
kine enfatiza la divergencia entre las formas rigurosa-
mente rectilíneas y las formas de geometría más libre
que se amplían de una forma más enérgica hacia el en-
torno para sugerir una relación con él construyendo con
el terreno y la nieve «a gigantic ground sculpture» para
proteger el edificio (figura 3). La arquitectura de Erski-
ne expresiva y rica en su lenguaje formal se caracteriza
por el énfasis en el tratamiento de las cubiertas. En el
Hotel en Borgafjäll construye una silueta del edificio
quebrada y resonante con la geografía del sitio (Ole
Lund 2008). Prolongando uno de los faldones de la cu-
bierta del hotel hasta su encuentro con el terreno, Erski-
ne convierte la cubierta en una pista de aprendizaje para
los clientes del hotel. Asimismo, la expresividad de las
cubiertas, las superficies de los faldones y los escalona-
mientos, además de las inflexiones y articulaciones de
las alas que componen el Hotel, repercute y determina
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Figura 3
Ralph Erskine. Hotel en Borgafjäll, Laponia, 1948-1950 (Egelius 1990)
la espacialidad interior de las áreas comunes y de las
habitaciones a tres niveles.
Construido con materiales locales disponibles y
técnicas tradicionales debido a su remota situación,
el interior queda caracterizado por la estructura de
vigas y postes de madera articulados con elementos
metálicos, el uso intensivo del color y los revesti-
mientos de madera que compendia el interés del ar-
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quitecto centrado en las cualidades constructivas y su
naturaleza expresiva muy vinculado a la difusión del
uso de la madera del finlandés Alvar Aalto, que des-
de el diseño de mobiliario hasta la estructura y el
acabado de edificios, contribuyó a la difusión de una
tradición muy arraigada en el entorno escandinavo.
Para Erskine, la creatividad se basa en la constante
experimentación, tratando de encontrar nuevas posi-
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bilidades a los materiales tradicionales, distanciándo-
se así, en esta obra realizada con 34 años, del funcio-
nalismo nórdico que con fervor vanguardista y
optimismo tecnológico se presentó en La Exposición
de Estocolmo en 1930. El retraimiento y la escasez
de materiales importados junto con el interés en los
edificios tradicionales y los materiales locales forja-
ron el Regionalismo escandinavo (Ole Lund 2008).
La construcción va más allá de los requisitos de
estabilidad estructural y las exigencias del rigor cli-
mático, y muestran una sensibilidad exquisita hacia
los materiales y su articulación, como se reflejan los
componentes y sus encuentros, modelados para con-
seguir la sensación táctil y la resonancia con la cultu-
ra constructiva nórdica. Su apego por la construcción
y su afán de hacer de cada proyecto un ejercicio ge-
nuino de inventiva y de riesgo caracterizará su tra-
yectoria profesional donde conjuga la capacidad
constructiva y artesanal de la tradición constructiva
con los nuevos materiales disponibles como se ilustra
en la cabaña para scouts en Lovö (1953) construida
con una prominente cubierta metálica, abierta con un
lucernario, alrededor de un hogar construido con ma-
teriales y técnicas tradicionales.
Contraponiendo las técnicas modernas con las téc-
nicas tradicionales, Erskine recurre también, en la
Figura 4
Ralph Erskine. Casa Tesdorp en Skövde, 1954 (Erskine
1962)
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casa Tesdorp en Skövde (1954), al valor de contraste
plástico y cromático que ofrece la textura del estria-
do vertical del enlistonado de madera de apariencia
tan abstracta, con el que reviste el cuerpo superior
que aloja los dormitorios, confrontándola a los aca-
bados modernos de los muros construidos con blo-
ques prefabricados de hormigón que definen las
áreas de estancia de la planta baja (figura 4). El ce-
rramiento, compuesto por tablas de madera en verti-
cal, alude tanto a las casas tradicionales del entorno
como a los revestimientos de madera, que alejándose
de la ortodoxia del funcionalismo, Alvar Aalto intro-
duce en la casa del arquitecto en Munkkiniemi de
1936. Esa fusión armoniosa de tecnología, naturaleza
y tradición confiere a los edificios una apariencia
más anclada al lugar y a la tradición.
Sin embargo, Erskine construye en la casa Engs-
tröm en Lisön (1955-1956) un singular caparazón
curvo y brillante en el archipiélago de Estocolmo re-
tomando sus iniciales preocupaciones de adecuación
climática, tratando de resolver cuestiones objetiva-
mente mensurables como lograr encerrar el máximo
volumen con el mínimo de material (figura 5). Apro-
vechando el conocimiento del cliente, un ingeniero
civil propietario de un taller siderúrgico y la colabo-
ración con un especialista de la construcción aero-
Figura 5
Ralph Erskine. Casa Engström en Lisön, 1955-1956 (Ege-
lius 1990)
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Figura 6
Ralph Erskine. Estudios bioclimáticos de la casa Engström en Lisön, 1955-1956 (Erskine 1963)
náutica, construyeron, en un reducido plazo de cinco
semanas, una cúpula de 16 metros de diámetro y una
altura de 5,5 metros con 16 láminas de acero de 3
mm en forma de triángulos esféricos apoyados en
una estructura metálica de perfiles en T de 52x52
cm, erigidas en torno al eje central de la chimenea
donde la grúa permitía el izado de los segmentos.
El espacio doméstico se organiza en torno al nú-
cleo del hogar y a un espacio a doble altura que co-
munica con el estudio y el resto de las habitaciones
que se sitúan en la primera planta y que se abren al
exterior mediante ventanas de reducidas dimensiones
y lucernarios.
La casa Engström ilustra la investigación sobre el
tipo de edificio adecuado al clima nórdico que reali-
za y a lude al prototipo de vivienda planteado por
Buckmister Fuller en la casa Wichita (1946). Para
Erskine, «una esfera es obviamente la forma geomé-
trica que encierra el máximo volumen con el mínima
superficie, pero no tendría sentido utilizarla como
forma edificada ya que tiene un mínimo contacto con
la inercia térmica del terreno. La temperatura del aire
varía mucho del verano al invierno pero la tempera-
tura del terreno es constante» (Erskine 1963). La
casa Engström es un ensayo basado en el análisis
científico. Como resultado es un casa poco habitual,
media esfera semihundida en el terreno para la pro-
tección, con una terraza protegida exterior que deno-
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mina la habitación de primavera y otoño que aprove-
cha el sol pero queda resguardada de los vientos, un
interior donde se desarrolla la vida en invierno,
mientras que en verano la vida se desarrolla en el ex-
terior en contacto con la naturaleza (figura 6). Este
ciclo de vida se ilustra en los dibujos analíticos que
realiza y fundamenta el contenido bioclimático de
sus propuestas.
PREFABRICACIÓN Y CLIMA
La casa Engström fue concebida también como un
prototipo para la construcción prefabricada y las pre-
cursoras ideas de Erskine sobre la industrialización
de la construcción en Suecia se concretaron en el
conjunto de viviendas en Lassaskog, Växjö (1954)
cuya construcción con paneles prefabricados de hor-
migón se realizó desde las tres grúas que se despla-
zaban sobre raíles, determinando el emplazamiento
de las seis torres de viviendas en el sitio. Los paneles
de las fachadas, caracterizados por una marcada tex-
tura vertical, las escaleras y las losas de los forjados
fueron prefabricados e izados con ayuda de las grúas
y los balcones quedan suspendidos por tirantes de
unas vigas en la cubierta con el objeto de evitar el
puente térmico (figura 7). Este recurso, para minimi-
zar el contacto entre del balcón y el edificio y en
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Figura 7
Ralph Erskine. Detalle del balcón suspendido en el conjunto de viviendas en Lassaskog, Växjö, 1954 (Collymore 1983)

consecuencia el puente térmico, será una constante de Frescati en Estocolmo (1989) o en la cantina del
en los proyectos de Erskine. hospital St. Göran (1983).
Para evitar los puentes térmicos en los balcones, Si la pequeña cabaña en Lissma conjugaba la arte-
Erskine recurre a esta estructura que desde la cubier- sanía y el apego material a la articulación y a los en-
ta suspende los balcones mediante cables de acero sambles, la casa y el estudio del arquitecto en Drott-
garantizando la mínima conexión entre el balcón y el ningholm (1963) retoma, con nuevas posibilidades
edificio en el conjunto de viviendas en Vallmon, Ti- tecnológicas y con gran sensibilidad al contexto, la
bro (1955-1956), en Barberaren, Sandviken (1962- predilección por la articulación de los componentes
1972) y en Släggsmeden, Sanviken (1973) y cuyo ha-
llazgo plástico desarrollará en los balcones de la casa
Ström en Stocksun (1961) y en los balcones de la Bi-
blioteca de la Universidad de Estocolmo en Frescati
(1974-1982).
Un edificio muy articulado es mucho menos apro-
piado al clima nórdico que uno compacto. Así la
casa Ström en Stocksund (1961) es un volumen
compacto, con balcones independientes de la estruc-
tura de la casa, que organiza el programa doméstico
en torno a un jardín interior iluminado cenitalmente
a través de dos grandes reflectores solares (figura 8).
Aquí Erskine introduce el reflector solar que canali-
za la entrada de luz natural en el interior del edificio
por primera vez y lo irá desarrollando en los proyec-
tos posteriores como en las oficinas para el Ayunta- Figura 8
miento de Tibro (1969), en Resolute Bay (1973- Ralph Erskine. Croquis de la sección de la casa Ström en
1977) y en el centro de estudiantes de la Universidad Stocksund, 1961 (Egelius 1990)

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apostando por la pesantez y la opacidad, como antíte-
sis de la transparencia y ligereza, en un conjunto or-
ganizado, como las construcciones tradicionales del
lugar, en torno a un patio que contribuye a la protec-
ción climática. (Erskine 1968)
Los planos de emplazamiento de sus proyectos re-
velan el respeto reverencial por la naturaleza. En la
casa del arquitecto en Drottningholm, la vegetación y
otros elementos naturales fueron también cuidadosa-
mente organizados para componer una secuencia de
ámbitos en el exterior mientras en el interior recurre
a un espacio a doble altura segregado espacialmente
mediante desniveles y organizado en torno a su ám-
bito de trabajo y el núcleo del hogar.
La casa fue construida con elementos prefabrica-
dos de hormigón aligerado «Siporex» en los muros,
forjados y en las bóvedas atirantadas de la cubierta
(figura 9). Los paneles del cerramiento se caracteri-
zan por el irregular estriado que dota a las superfi-
cies de una gran plasticidad y fuerza expresiva, alter-
nando los huecos y las carpinterías de madera con
los balcones y escaleras independientes para reducir
los puentes térmicos (Erskine 1968).
La doble cubierta hace visible su lógica constructi-
va y bajo los aleros, se produce la exposición de los
Figura 9
Ralph Erskine. Casa del arquitecto en Drottningholm, 1963
(Egelius 1990)
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componentes. La cubierta de chapa de acero galvani-
zado se separa de la bóveda de «Siporex», favorece
que la nieve actúe como aislamiento facilitando la
ventilación y evita que la cubierta se vea afectada por
el calor del interior de la casa y la nieve se derrita
propiciando la formación de carámbanos en los ale-
ros y las filtraciones en los canalones así como la
obstrucción de los bajantes (figura 10).
En el proyecto para un conjunto de viviendas de
vacaciones en Härjedalen (1975-1977) Erskine reto-
ma la doble cubierta y dibuja en la sección de las vi-
viendas de reducidas dimensiones la nieve acumula-
da sobre el faldón exterior de la cubierta que actúa de
aislamiento y lo plantea a mayor escala en el proyec-
to para el Hotel en Jochberg, Austria (1979).
Los esbeltos conductos metálicos de las chimeneas
en la casa del arquitecto en Drottningholm constitu-
yen un elemento característico de su predilección por
mostrar la capacidad expresiva de las instalaciones
con las que enfatiza, de forma recurrente en diversos
proyectos, el carácter de las instalaciones, los bajan-
tes como elementos escultóricos y las chimeneas.
CONCIENCIA MEDIOAMBIENTAL
Ampliando el enfoque para relacionarse cuidadosa-
mente con el contexto y la cultura y más armoniosa-
mente con la naturaleza Erskine tomó conciencia de
la especificidad de construir en climas fríos y pro-
yectó en 1958 una ecológica ciudad en el ártico. En
Figura 10
Ralph Erskine. Estudios que ilustran el aislamiento de la
nieve y las cubiertas (Collymore 1983)
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 La construcción de la arquitectura de Ralph Erskine
su participación en los CIAM en Ottterlo en 1959,
Erskine presentó una investigación de la arquitectura
en el clima ártico, analizando las viviendas de los la-
pones y de los esquimales, estudiando cómo ante es-
tas rigurosas y adversas condiciones climáticas se or-
ganizan y cómo son sus relaciones sociales y las
construcciones, los iglús de los esquimales y los kåta
los lapones (figura 11).
Todos estos estudios le llevaron a considerar aten-
tamente los factores climáticos, los cambios estacio-
nales y las condiciones específicas de los emplaza-
mientos y a introducir los sistemas pasivos que dotan
de confort a los usuarios en su arquitectura. Formuló
una «gramática arquitectónica para altas latitudes»
que presentó en el CIAM de 1959 y que atendía a los
factores de temperatura, abogando por la compacidad
y reduciendo la superficie de la envolvente; la forma-
ción aerodinámica de las ciudades y edificios de bor-
des redondeados; regulando la incidencia de la luz
mediante contraventanas que gradúan y proporcionan
un notable efecto plástico expresando el ritmo climá-
tico; utilizando la radiación solar como recurso ener-
gético; aprovechando la dirección y protección de los
vientos; atendiendo a los cambios estacionales y evi-
tando el aislamiento social así como, dotando de una
gran protección estructural e independizando la en-
volvente exterior de la estructura interior evitando los
puentes térmicos en los balcones y las terrazas que al
atravesar el aislamiento térmico se produciría.
Los principios ambientales de un emplazamiento
en el ártico atienden tanto a la buena orientación al
Figura 11
Ralph Erskine presentando sus estudios sobre el ártico en la
reunión de los CIAM en Ottterlo, 1959 (Collymore 1983)
LIbro 2 Congreso.indb 623
623
sur y protegiéndose completamente de los vientos del
norte y disponiéndose sobre una pendiente suave que
facilite la mayor exposición al sol. Formas compactas
y una menor superficie de envolvente minimiza las
pérdidas de calor junto con ventanas de reducidas di-
mensiones. Todos estos precursores principios am-
bientales guiaron los proyectos de Erskine reformu-
lando el conocido principio form follows climate
(Egelius 1990).
El recorrido solar la integración con el terreno y la
compacidad se reflejan en la casa Gadelius en Lidin-
gö (1961) que combinando formas curvas de gran
expresividad, balcones independientes y cubiertas
ajardinadas ilustra la aplicación de los principios am-
bientales de Erskine (figura 12). En el conjunto urba-
no que construye en Ortdrivaren, Kiruna en Laponia
(1961-1966), ajusta la escala de los edificios, de bor-
des redondeados, mediante la sección de la cubierta.
En la cara sur las fachadas son altas para recibir la
incidencia solar y las caras norte del edificio son más
bajas evitando sombras a los edificios contiguos
(Egelius 1990). La sección asimétrica y las pendien-
tes de los faldones de hasta tres plantas de altura ge-
neran un gran canalón que permite que la nieve acu-
mulada actúe de aislamiento (figura 13).
El proyecto para la ciudad de Svappavaara en La-
ponia (1963-1964) compendia sus principios de la
ciudad ecológica en el ártico (figura 14). En una la-
dera en pendiente hacia el sur organiza el conjunto
delimitado por un edificio de cuatro plantas que ac-
túa de elemento de protección contra a las ventiscas
árticas del norte y además como elemento de co-
nexión entre las viviendas y los elementos comunita-
rios y públicos de la agrupación como el cine, la bi-
blioteca, el programa comercial y otras instalaciones.
Los edificios se plantean desde la industrialización
Figura 12
Ralph Erskine. Casa Gadelius en Lidingö, 1961(Collymore
1983)
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Figura 13
Ralph Erskine. Sección de las viviendas en Ortdrivaren, Ki-
runa, 1961-1966 (Collymore 1983)
de la construcción que permite la rápida ejecución y
puesta en obra de los elementos prefabricados en ve-
rano y la finalización de la construcción en los inte-
riores en invierno.
En el proyecto de Resolute Bay (1973), en el ártico
canadiense, Erskine concibe una estructura amuralla-
da que actúa como pantalla contra el viento y crea un
ámbito protegido donde se sitúan las zonas de circu-
lación, actividades al aire libre además de unas vi-
viendas unifamiliares que fueron diseñadas de forma
aerodinámica y compacta, con el máximo volumen y
la mínima superficie con los reflectores solares ensa-
yados para introducir la luz solar en el interior (figu-
ra 15).
El largo edificio muro se retomará en Byker
(1969-1981) en Newcastle como protección frente a
Figura 14
Ralph Erskine frente al edificio muro construido en la ciu-
dad de Svappavaara en Laponia, 1963-1964 (Collymore
1983)
LIbro 2 Congreso.indb 624
Figura 15
Ralph Erskine. Proyecto para la ciudad de Resolute Bay,
Canadá, 1973 (Egelius 1990)
los vientos del norte y frente al ruido de una arteria
urbana e ilustra el intenso vínculo del arquitecto con
la materialidad física de la construcción.
CONCLUSIÓN
Los fundamentos esenciales de la trayectoria de Ers-
kine se hallan en la construcción, la experimentación
y la participación ciudadana. Los proyectos analiza-
dos responden con sensibilidad al contexto, a la cul-
tura nórdica y a la tradición constructiva buscando
una armonía con el clima, la naturaleza y la sociedad,
forjando una conciencia ecológica que oriente la
aplicación de la tecnología e involucrando a los ciu-
dadanos a través de encuestas y organizando asam-
bleas. Esa capacidad de dar respuesta al entorno in-
mediato, y a las cualidades del lugar, evocando los
aspectos esenciales de la cultura nórdica, es lo que
hace de Erskine, el arquitecto formado en Inglaterra,
capturar el espíritu de un lugar y su cultura y perte-
necer a la saga de los arquitectos nórdicos. Estas
obras analizadas cronológicamente permiten aproxi-
marnos al discurso, tan significativo y actual de Ral-
ph Erskine y a la singular producción de su aventura
nórdica con la peculiar combinación de técnica, con-
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 La construcción de la arquitectura de Ralph Erskine
texto, así como su capacidad de anticipar la construc-
ción prefabricada del futuro, la conciencia ambiental
y la participación social.
En su barcaza que le sirvió de estudio durante casi
veinte años, afronta cada nuevo proyecto como un
viaje de descubrimiento, donde la destreza y la maes-
tría en la interpretación y aprovechamiento de las
condiciones del sitio y la firmeza en el rumbo marca-
do, en torno a la construcción, la conciencia ambien-
tal y la participación social, trazan un minucioso pe-
riplo que cubre más de cuatro décadas de trabajo y
muestran su excepcional capacidad técnica en una
secuencia de descubrimientos constructivos y hallaz-
gos plásticos.
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Gili.
LIbro 2 Congreso.indb 625
625
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