Una póliza de seguro es un documento que contiene las condiciones y los beneficios de un contrato de seguro entre una

persona o empresa y una compañía aseguradora. Esta sirve para proteger al asegurado de posibles riesgos o pérdidas que puedan
afectar a su salud, su vida, su propiedad o su ingreso. La misma tiene un precio llamado prima, que el asegurado debe pagar
periódicamente a la aseguradora. A cambio, la aseguradora se compromete a indemnizar al asegurado o al beneficiario en caso
de que ocurra el siniestro cubierto por la póliza. Estos documentos legales contienen información sobre las partes contratantes, el
objeto del seguro, el riesgo cubierto, la suma asegurada, la prima, el plazo, las exclusiones, las obligaciones y los derechos de
cada parte.
Las pólizas de seguro tienen sus antecedentes en las antiguas civilizaciones de Babilonia, China y Roma, donde los
mercaderes buscaban formas de reducir los riesgos asociados al transporte marítimo de sus mercancías, repartiendo el riesgo entre
varios barcos o al recibir un préstamo condicionado a la llegada del barco a puerto. Más tarde, los romanos y las ciudades-estado
italianas desarrollaron formas más sofisticadas de seguros marítimos, basados en contratos financieros. Los primeros contratos
escritos de seguro marítimo datan del siglo XIV en Italia y el sur de Francia. Estos contratos establecían las condiciones, las
primas y las indemnizaciones en caso de daños o pérdidas de las mercancías transportadas. Los primeros agentes de seguros eran
los corredores de cambio, que intermediaban entre los asegurados y los aseguradores.
Luego, en el siglo XVII, con el auge del comercio internacional y la expansión colonial, los seguros de transporte se
extendieron por toda Europa y América. Específicamente n Londres, surgió una cafetería llamada Lloyd's, que se convirtió en el
centro de información y negociación de los seguros marítimos. Allí se reunían los comerciantes, los armadores y los aseguradores
para intercambiar noticias sobre los barcos y sus cargas, y para negociar las pólizas, fue así como nació el mercado de seguros
más famoso del mundo. Con el tiempo, los seguros se fueron desarrollando y diversificando para cubrir otros tipos de riesgos,
como los personales, los patrimoniales y los de servicios. Entonces, se puede decir que, las pólizas de seguro son el resultado de
la evolución histórica y social de una institución que busca ofrecer seguridad y tranquilidad.