Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Bion - DIFERENCIA ION DE LAS PERSONALIDADES
Bion - DIFERENCIA ION DE LAS PERSONALIDADES
reparatorias normalmente asociadas con la pos1cton concie� l�ada a" las impresiones sensoriales. Me
depresiva. Yo hago referencia aquí a un estadio más apoyo en su afirmación hecha doce afios más tarde
temprano de la misma historia. Creo que el_<:!wo .que en su trabajo El Yo y el Ello. Allí dice que la pre
se hace mucho más evidente en la posición depresiva, gunta; "¿ Có�o se hace una cosa consciente?" puede
en realidad se inició en la fase esquizoparanoide, cuan ser mas venta3osamente planteada: "¿ Cómo una cosa
do se echan l�s bases para el. pensamiento primitivQ, se hace preconsciente?" Y la respuesta sería: "Co
pero_ que no llega a establecerse a causa de la exage nectándose con las imágenes verbales que le corres
ponden" _(3). En mi trabajo de 1953 (1) dije que
de
ración de la escisión y de la identificación proyectiva.
59. Freud atribuye al pensamiento, la función el eensam1ent2 verbal está ligado con_lac conciencia de
proveer un medio para restringir la acción. J,>ero ade l<1; realidad psíquica; pienso que esto también es cierto.
más dice: "Es probable que el pensar sea originaria en cuanto al pensamiento 2reverbal del cua1 habi�
mente inconsciente, ya que emergió de la mera idea al�:- En vista _ de lo que he dicho de fos ataques del
ción y viró a las relaciones entre las impresiones d<' ps1cot1co sobre el aparato mental que le permite tomar
objeto, y que luego se revistió con cualidades percepti conciencia de la rea�idad externa e interna, se podría
bles para la conciencia solamente a través de su cone esp erar q�e el �hei�:_de identificaei6n proyectiva
,
xión con las huellas mnémicas de las palabras" (2) . sena parttculannenresevero, en contra del pensamien
Mis experiencias me h�n llevado a suponer gue existe to, cte cuatquier clase que sea, que estuviese dirigido
desoe el comienzo, alguna clasecle pensamiento, refe
rid(')'--a lo que llamaríamos ideografía y visfón,�s
--:--. ·,---- - :.I""__:...
- si este vinculo
- o
a "'r�e:s-entre 1ás-nilnrés1onesde oh1·;.:;J t�:- $.norque
_, _me1· or aún) no
pudiera ser roto
foqarse nunca, por lo menos .la concienga deJa realí
.
--
Freud define como apñcado it--las ?'elaciones entre las que dada la mayor destructividad del psic6tic� los
"la procesos de esc1sión se extienden a los vínculos, dentro
impresiones de objeto el que . es responsable por_,,,_ ........
74 W. '.R. BION VOLVIENDO A PENSAR 75
del proce� rnis�o�pe�amiento. Tal como lo im mentos, hace que desde aquí en adelante haya una
p1l'éa la frase de Freud de que el pensamiento redunda divergencia cada vez mayor entre las partes psicóticas
en las relaciones entre las impresiones de objeto, esta y no· psicóticas de la personalidad, hasta que al fin
primitiva matriz de ideografías, de la cual surge el el espacio entre ambas es sentido como imposible de
pensamiento, contiene eñst misma eslabones entre una ser cubierto.
iae<;g�i o� Todos éstos son atacados, hasta 9.ue 1
61. Para el paciente, las consecuencias son de que
fiñlrmente, dos ·objetos, no pueden ser puestos en con ahora se mueve, no en un mundo de sueños, sino en
tamo clemanera tal de dejar a qi,da uno sus cuaji un mundo de objetos que ordinariamente constituyen
dhae's"iñtnnsecas intactas y además con la capacidad los artefactos de los sueños. Las impresiones de sus
defroducir un nuevo objeto mental a través de_ él. . sentidos parecen haber sufrido una mutilación, tal co
Consecueñteiñente, la formación de símbolos cuya efec mo si hubieran sido atacados, en la tortna en que el
tividad""térapéutica depende de la posibilidad dejuntar pecho es sentido que fue atacado en las fantasías sá
dos 061etos, ae manera tal que su semejanza sea mani dicas del niño ( 5). El paciente se siente prisionero en
fiesta-y s1ñ embargo, su diferencia quede inalterada, ese estado mental al que ha llegado, e incapaz de es
resuffii muy dificultoso. En un e�is> auru'ostehor, caparse, a causa de que siente que le falta el aparato
ef'resuffado de estos aiaquesde escisión $e ven en la de la conciencia de ]a realidad, que es simultáneamente
negaciónde la articulación como principio para ta la llave de escape y la libertad a la cual escaparía.
combinación delas pala6ras. ;Es.to_ no significa q_ue · La sensaci6n de aprisionamiento se intensifica por la
los objetos no pueden ser juntados; como mostraré más amenazadot'a presencia de los fragmentos expulsados,
a'delante cuánao ñable cíe la aglomeración, esto no es dentro de cuyo movimiento planetario se halla el pa
cierto Cle-nínguna manera. Por otra parte, desde gue ciente. Estos objetos, primitivos pero complejos, par
"lo que conecta" no solo ha sidoiiünuciosañiente frag ticipan de l�s cualidades que en la personalidad no
meñtado, sino también p �yectado aentro de objetos y psicótica, son peculiares a 1a materia, objetos anales,
�
unido coñ otros Q.2.ietos 1zarros, el paciente se sieñte sensaciones, ideas y superyó.
rodeado ,E_Or minúsculos eslabones qµe estañdo impr� 62. La· diversidad de tales objetos, al depender de
nacfosab.017"aco"n cñi'eldad 1 unen objetos cruelmente. la sensación en la cual están sumergidos, advierte más
· Para cprn;]'.!Jir la descripción de la fragmentación del de lo que la rápida indicación que he dado del modo
yo y su expulsi6n en, y alrededor de sus objetos, diré que se originan. La reacción de estos objetos con el
que creo que estos procesos que he descripto son el materia..!_,del J?ensamiento ideográfico, lleva al¡>aciente
factor central, en tanto que tal factor pueda ser aisla acciñIUn�� objetos reales-con ideas fil!I!Út1vas ;_ j;,luego
do sin distorsión, en l a diferenciación de la parte a"1aconfus1ón, cuando ooedecen las leyes de las cien
psicótica de la no psicótica de la personalidad. Esto ci!ís naturalE!y no las del funcTonam1ento mental.
tiene lugar en el comienzo de la vida del paciente. Si el paciente desea recuperar uno de estos objetos;"'en
Los ataques sádicos sobre el yo y sobre la matriz del una tentativa de restitución de su yo, y en análisis
pensamiento, y la identificación proyectiva de los frag- justamente, se siente impelido a hacer tal tentativa,
76 W. R. BION VOLVIENDO A PENSAR 77
tiene que recuperarlos por una identificación proyec ría estar reemplazado por un mundo de elementos de
tiva revertida y por el mismo camino por el cual fue los sueños.
ron expelidas. Ya sea que sienta que uno de estos 64. Trataré ahora de describir una sesión real; e&
o_bjetos ha sido puesto de vuelta por el analista, o que una experiencia clínica basada en estas teorías más
sienta que él los ha retomado, lo mismo sentirá el bien que una descripción de las experiencias sobre las
ingreso como una agresión. El grado e.xtre.mo al cual cuales basé estas teorías, pero espero que podr� señalar
ha llevado la escisión de los objetos y del yo) hace que el material de sesiones previas que me llevaron ·a inter
cualquier tentativa de síntesis sea muy dificultosa. pretar las cosas tal como lo hice.
Además, como se ha libra�o de "Jo que junta'\ su El paciente, en el momento de esta sesión, de la que
capacidad para la articulación, sus métddos para la describo una pequeña parte, ha estado viniendo por
sí�tesis son sentidos como macilentos; pu�� �mpri espacio de seis años. A veces llegaba con 45 minutos
. de atraso, pero nunca perdió una sesión; las sesiones
mu:. pero no puede Juntar;_ puede fundir pero no pue
de .::rticular. g_�sultado de la eyección y al igual nunca sobrepasaron su límite de hora. Esta mañana
llegó con 15 minutos de atraso y se tiró sobre el diván.
que toda .ºl!ª partícula expelida, la capacidad para'
Empleó cierto tiempo, en girar de un lado para otro,
juntar es sentid� mucho peor que foqueera cÜando ostensiblemente tratando de acomodarse. Al final,
fue eva�da. T9da articulación que tiene lugar, es dijo: "No creo que consiga h�cer algo hoy; debí haber
}fecha vcngativamente, es decir, de una manera ex llamado a mi madre". Hizo una pausa y luego prosi
pres'ameñte coñtraña a los oeseos dcf paciente en � guió: "No; pensé que iba a ser así", una pausa más
mmrtenfo. En el curso del análisis, este-proceso de prolongada y entonces: "Nada más que cosas inmun
éompréslóñ o aglomeración pierde algo de su malig das y olores" ; y luego: "Creo que he perdido mi vista".
nidad y entonces emergen nuevos problemas. Habían pasado 25 minutos, y yo hice aquí una inter
63. Debo llamar la atención de ustedes a un punto pretación; pero antes de repetirla, quisiera relatar al
que requiere un trabajo por sí •mismo y por Jo tanto gún material previo, que espero hará más comprensible
no puedo más que mencionarlo aquí. Está implícito mi intervención.
en mi descripción que la personalidad psicótica o Cuando e) paciente maniobraba en el diván, le esta
parte de la personalidad, ha usado la escisión y )a ba observando algo que era familiar para mí. Cinco
identificación 'proyectiva como sustituto de la repre años antes me había explicado que su médico le acon
sión. C�c.!2,._y <lonqe la parte no psicótica de _l.ª'- per sejó una operación para la hernia y que su incomo
sonalidad, rec_urre..a. Ja represi6ñ-como modo de eli didad y sus movimientos eran a causa de la misma.
miñar ciertas tendencias de la mente, tanto sea de la Pero era evidente que se trataba más que de la hernia y
cóñcieñéia como de otras 'formas de manifestación y la actividad racional. Le habfa preguntado a veces,
actividad, � parte psicótica de la personalidad int.enta cuál era la causa de estos movimientos y a estas pre
librarse del2P�rato _del cual la psiquis depende para guntas respondi6: "Nada". Otra vez dijo: "No sé".
. llevar~a cabo las represiones•' el inconsciente
..
parece- Sentí que ese "nada" era una invitación velada a que
t. --
78 W. R, BION VOLVIENDO A PENSAR 79
me ocupara de mis propias cosas, tanto como la ne es realmente una hernia" dije. "No tengo idea, res
gación de algo muy malo. Proseguí a través de sema pondió, sólo una hernia." Quedé sintiendo que su
nas y años observando sus movimientos. Un pañuelo "no tengo idea", era igual al "Sin ideas", acerca de
fue acomodado cerca de su bolsillo derecho; arqueó los sueños y los movimientos, pero por lo menos en
su espalda il.seguramente un gesto sexual? Un encen aquella sesión no pude ir más lejos. A este respecto
dedor se escapó de su bolsillo. ¿Lo levantaría? Sí. No. los movimientos y· los sueños eran francos ejemplos de
Tal vez, no. Bueno, sí. Fue recogido del suelo y colo tentativas mutiladas de cooperación, y •acerca de esto
cado al lado del pañuelo. Inmediatamente una llu también le había llamado la atención.
via de monedas, corrió sobre el diván hasta el suelo. 65. Se les ocurrirá, como a menudo se me ha ocu
El paciente quedó tieso y esperó. Sus gestos parecieron rrido a mí, que estaba observando una serie de _preJen
sugerir que tal vez fue imprudente recoger el encen taciones dramáticas minusculasJ.r�aradones _para 1:l
C
dedor, pues había provocado la caída de las monedas. 155ño o la alimentación d un bebé.,_9 �l,..cambio� de
Esperó alerta, furtivamente. Y finalmente hizo la ob p�ñales o una scduc;--ión sexual. Más a menudo, sería
servación que transcribí. Me acordé de sus descrip c0ñ-ect6""de'tir.-qne ta -reseñiación era un cong!2me
ciones producidas a lo largo de muchos meses, acerca ra_g.Q..�ªr�s �ad.2l.J_ un nú_mer� taley�scen�
de las tórtuosas maniobras que tenía que empren,der v' fue esta impresión que me llevó finalmente a su
antes de ir al toilette, o bajar para el desayuno o tele poner ue estaba o6s'crv ndo�actividad,.ideomotQ-
fonear a su madre. Yo estaba acostumbrado a recor a. es decir, un medio dec expresar una idea sin nom
dar muchas de sus asociaciones libres que podían ser
fácilmente apropiadas, para 1a conducta que mostró
�e aqui hay üñ orto pasoa peñsar que e�ta
clase de actividad motora, es la que Freud ha descrip
en ésta como en muchas otras mañanas. Pero éstas to como característica de la supremacía del principio
fueron ahora mis asociaciones, y una vez que probé del placer ( 1) . Porque en cuanto que yo estaba obser
hacer uso del material en una interpretación, esa fue vando fenómenos psicóticos, eLJ;laciente no P.odía estar
exactamente la respuesta que él había dado. Una actuando como respuesta a lá percepción de realidad
, interpretación que recordé, babia tenido buen resul- externa; estaba mostrando Ja clase de descarga motora
tado. - que Freud �� �ajC!_la supremacía del prin
Le señalé entonces que él había sentido más o me cip10 del plaJ;_er �a servido par�- descargar el apa
nos. lo mismér•acerca de estos movimientos que lo que rhlo mental del incremento de est1mulos, y para llevar
había sentido acerca de un sueño que me había con a-cabo tal tarea ña enviadO inervaciones hacia el
tado -no tenía idea acerca del s.ueño, ni idea acerca int�rior del cuerpo ( expresiones gesticulares de afec
de los movimientos. "Sí", dijo. "Eso es." "Y sin em to)". Esta impresión,. fue la que tuve de nuevo cuando
bargo, repliqué,. usted una vez tuvo una idea acerca el paciente dijo: "No creo que pueda hacer algo ho(.
de esto; pensó que era la hernia." "Eso no es nada" Era una observación que podía referirse � la probabi
replicó, y se quedó callado, casi astutamente diría, lidad de producir material para interpretaciones, o
para ver si yo había pescado el punto. "Así que nada igualmente a la probabilidad de que yo produjera al-
80 W, IR. BION VOLVIENDO A PENSAR 81
guna interpretación. "Debiera haber telefoneado a mi que ·con esto, él expresaba una negación celosa de mi
madre", podía significar que su fracaso en hacerlo era insight.
el castigo por no ser capaz de hacer análisis. También 66. Cuando el paciente dijo, después de una pausa,
significaba que su madre sabría cómo hacerlo -clJa que él sabía que esto sería así, presumí con seguridad
podría obtener asociaciones de su material, o inter que era yo el que tenía pocas probabilidades de hacer
pretaciones de mí; algo dependía de lo que su madre algo en esa sesión y que su �adre era alguna persona
significara para él, pero en este punto yo estaba a o cosa que podría habilitarlo para manejarse más sa
oscuras. Ella apareció en ci análisis como una simple tisfactoriamente. Esta impresión se fortificó más por
mujer trabajadora que había tenido que salir a trabajar la próxima asociación.
para mantener la familia; este punto de vista era sos Si las teorías que describí son correctas, entonces, en
tenido con el mismo grado de convicción con que cualquier situación dada, un paciente que está sufi
sellaba sus afirmaciones de que la familia era extre cientemente enfermo como éste, que se hallaba inter
madamente rica. Se dignó concederme algunos vis nado, tiene dos problemas parn resolver: tmo, pertene
tazos de ella, como una mujer con tat cantidad de ciente a la parte no psicótica de la pers9nalidad, y otro
compromisos sociales que le restaba escasísimo tiempo de la parte psicótica. En este caso particular, y en
.para satisfacer las necesidades tanto del paciente, que este particular momento, la personalidad psicótica y
era su hijo mayor, o de su hija, dos años mayor que sus problemas todavía oscurecian la personalidad no
el paciente, o del resto de la familia. La describió, si psicótica y sus problemas. Sin embargo, como espero
algo tan inarticulado puede ser llamado descripción, mostrar, la última podía ser discernible en el material.
privada de sentido común o cultura, y sin embargo La personalidad no psicótica estaba preocupada con
habituada a visitar galerías de arte de fama interna un problema neurótico, es decir, un problema que se
cional. Me dejó inferir que en la crianza de los niños• centraba en la resolución de un conflicto de ideas y
fue ignorante y afanosa en extremo. Puedo decir que emociones, al cual había dado lugar las operaciones
para esa época a la que me estoy refiriendo, conocia del yo. Pero la personalidad psicótica -estaba dedicada
poco más de su madre real que lo que habría conocido al problema de reparar el yo, y la clave de esto residía
una persona que se ha librado de su yo en la forma en el temor de haber perdido. su vista. Desde que era
que he descripto como típica de la personalidad psicó el problema psicótico el que se imponía, me encaré
tica. Sin embargo, tenía estas impresiones y otras que con él tomando primero su última asociación. .1_e,
omito, y sobre ellas basé mis interpretaciones. La res dij.e que esas cosas_ y olores ipmundos era lo que ér
puesta del paciente a estas interpretaciones fueron de seittí��e7ia�ía obligado a hacer, y que sentía �ue
franco rechazo y absoluta inadmisibilidad a causa de méruibía compelido �eíecar esas cosas y olores m
ser equivocadas, o acertadas, pero inoportunamente mundos, íñéluyendo El vista que ef había puesto en mj.
dichas, por ser sentidas, como que yo había estado El'pacieñte saltó convulsivamente y lo vi escudriñar
usando su mente ( en verdad serfa su capacidad de cuidadOliamente lo que parecía ser el aire que lo ro
rontacto con la realidad) sin su permiso. Se observara deaba. Entonces le dije 9'!���.tía rodead� PQr
82 W. R. BION VOLVIENDO A PENSAR 83
pedazos de cosas malas y mal olientes de sí mismo de la pers �nalidad a causa de que la parte psicótica
in'éruyen'dos1:rs ojtr� gyeél sentía haber-expulsado pó; era la dommante, y en esta parte, el suceso era·mera
s��Replicó: "No puedo ver". Entonces !JL.dije mente significante como una ideografía para la cual
q�a que había perdido J<L_Yjsta y su 1:i<!bilidad no había una necesidad inmediata. Cuando por fin
para h�blar a su mad!.e � a mí, cuando se había liOra el hec?� irrumpió en el análisis, tuvo la apariencia
dC.,� ,§as h�d.«.§., �v_p,cuá,i_dolas p�ra-evitar el superf1c1almente, de una especie de reacción diferida;
dolor. pero tal punto de vista depende de la suposición que
'67. En esta última interpretación, yo usaba una se la asociación de los anteojos oscuros era una expresión
sión de varios meses antes, en la cual, el paciente se del conflicto neurótico en la parte no psicótica. Y en
quejaba de que el análisis era una tortura, una tortura verdad, no era una expresión diferida de un conflicto
de recuerdos. Le mostré entonces, como lo había evi de la parte no psicótica, sino como mostraré, la movi
denciado en esfa sesióg__c.91!.2US sa!_tos convuls1vOs,ciue- lización de una ideografía necesaria para la parte
ér1iaf.i1�_s.qp�gyid�estesiarse librándose de sus re psicótica para reparar de iwnediato al yo dañado por
c§rdos y de cualqaj_e.E_ otra cosa que pudiera fiacerle el exceso de identifü_:ación proyectiva que he descripto.
sentir dolor. Tales obstrucciones de hechos que pasan originalmente
en silencio, no son impor�antes por su' ap'arición dife
Ei dijo: ;-;-Mi cabeza se está partiendo; pueden ser
mis anteojos oscuros". Unos cinco meses antes, yo rida, sino porque evidencian la actividad de la parte
había estado usando anteojos oscuros; el hecho no psicótica de· la personalidad.
había producido reacción visible alguna desde ese día Suponiendo entonces que .}os anteojos oscuros son
hasta ahora; pero .es menos sorpresivo el asunto si con aquí la comunicación verbal de una ideografía, es ne
sideramos que al usar anteojos oscuros, yo fui sentido cesario determinar la interpretación de la ideografía.
por él como uno de los objetos a los cuales me había Temo que deberé comprimir tal vez hasta hacer in
referido cuando describí el destino de: las partículas compr�nsible, las evidencias que poseo. Los anteojos
expelidas del yo. Ya expliqué que la personalidad psi conteman. un recuerdo de la mamadera. Habrá ·dos
c?�ª J2.ª.rece.. qut! tuviera que_esper.;g_ la ocurreñ anteojos o mamaderas, o sea, que se parecían 'al pe
c1ª de un suceso apto, a�es de gye sg_sienta en cho. Eran oscuros a causa del desagrado y del enojo.
posesión de. una ideografía apropiada para usarla en Eran de vidrio para vengarse de sus intentos de ver
la comuni�ón consigo mismo o con !esotros. Re � través de ellos cuando eran pechos. · Eran oscuros a
causa de que él esperaba a la oscuridad para espiar a
cíifr'o'cameñte, -;¡¡:os sucesos que podrían haber teniao
sigpj!icación inmediata- ara la personaliaaa no psi sus padres en coito. Eran oscuros a causa de que había
� tomado la mamadera, no para sacar leche, sino para
cótica, son desapr�echa os a causa de que son senti
d�u1gnificantes, solamente como ideografías que no ver lo que sus padres hicieron. Eran oscuros porque
sirven para una necesiaad inmediata. En el ejemplo él los había tragado y no solamente ia leche que con
pr� elpro6Iemacreaoopor mi uso de los anteojos tenían. Y eran oscuros a causa de que los buenos obje
oscuros, estaba oscurecido para la parte no psicótica to$ claros se habían hecho negros y malolientes dentro
84 W. R. BION VOLVIENDO A PENSAR 85
de ellos. Todos estos atributos fueron logrados a través Paciente. El fin de semana; no sé si aguantaré.
de las operaciones de la parte no psic6tica de la per Esto es un ejemplo de la forma en la cual el pa
sonalidad. Agregado a estas características, estaban ciente sentía que había reparado su capacidad de con
aquellas que he descripto como perteneciéndoles como tacto y podía por lo tanto decirme que era lo que
parte del yo expulsada por identificación proyectiva; sucedía a su alrededor. Este e·ra un fenómeno ya
por ejemplo, su odio por sí núsmo, como parte de sí f��iliar para él y no se lo interpreté. En cambio le
mismo, que él había rechazado. Usando este cúmulo d11e:
de experiencias analíticas, y aun concentrado en el Analista. Usted· siente que debe poder seguir sin
problema psicótico, es decir, fa necesidad de reparar mL Pero para conseguirlo, siente que necesita poder•
el yo para poder encarar las demandas de la situación ver qué sucede a su alrededor, aun para poder comu
externa, le dije : nicarse connúgo; para poder contactar conmigo a la
Analista. Su vista ha vuelto a ponerse dentro suyo, distancia, tal como hace con su madre, cuando usted
pero le parte la cabeza; usted la siente como uQa vista le telefonea; así que trató de reobtener su habilidad
muy mala a causa de lo qµe usted le ha hecho a ella para mirar y hablar de mí.
antes. P3ciente. Brillante interpretación. (Ccm brusca con
Paciente (moviéndose con dolor, como si protegiera vulsión.) ¡ Dios mfo!
,u canal posterior) . Nada. Analista. Siente que puede ver y comprender añora,
Analista. Parecería ser su canal posterior. pero lo que ve es tan brillante, que le causa un in
Paciente. Censuras morales. tenso dolor.
Le dije que su vista, los anteojos oscuros, fueron sen Paciente ( apretando sus puños y mostrando mucha
Lidos como una conciencia que le castigaba, en parte, tensión y ansiedad) . Lo odio.
porque había tratado de librarse de ellos para evitar
dolor, y en parte, porque él los había usado para es Analista. Cuando usted ve, aquello que usted mira,
piarme, así como había espiado a sus padres. No. siento -la pausa del fin de semana y las cosas que espía en la
que haya hecho justicia a lo compacto de la asociación. oscuridad- lo llenan de odio y de admiración ha
Se observará que no he podido ofrecer una suges cia mí.
tión, en., cu9:nto a que podía estar estimulando estas Creo que en este punto la restauración del yo im
reacciones en �l paciente. Esto no es extraño porque plicó que el paciente se había enfrentado con su pro
estoy tratando con un problema psicótico que al con• blema no psicótico, la resolución de sus conflictos
tracio del no psicótico, está relacionado precisamente neuróticos. Pienso así por las reacciones de las siguien
con la destrucción de todo el aparato mental que trae tes semanas en que mostró su incapacidad de tolerar
conciencia de los estímulos de realidad, y por consi los conflictos neuróticos estimulados por la realidad y
guiente, no puede discernirse la naturaleza y ni aun la sus tenta�vas de resolverlos por identificación proyec
existencia de tales estímulos. Sin embargo, la siguiente tiva. A esto seguía tentativas de usarme como su yo,
observación del paciente dio la clave. ansiedades acerca de su insania, posteriores tentativas
86 W. R. BION VOLVIENDO A PENSAR 87
para reparar su yo y volver a la realidad y la neurosis; ciencia de la realidad interna y externa, es de esperar
y así el ciclo se repetía. que estará sujeto una y otra vez, a lo largo del aná
68. He descripto esta parte de una sesión en detalle, lisis a destructivas escisiones e identificaciones pro
porque puede ser usada para ilustrar varios puntos sin yectivas. He descripto el comienzo del pensamiento
sobrecargar al lector con un número de ejemplos dife verbal como perteneciendo a la posición depresiva,
rentes de asociaciones e interpretaciones. Lamento pero la depresión propia de esta fase, es en sí misma,
tener que excluir material muy llamativo y dramático, algo por lo cual la personalidad psicótica protesta, y
porque incluirlo implicaría agregar una abrumadora en -consecuencia, el desarrollo del pensamiento verb,;1!
cantidad de descripción del diario análisis con su carga cae bajo ese ataque, !iÍendo sus elementos expulsados
de claras incomprensiones, errores y demás, lo que de la personalidad a medida que se desarrollan por la
produciría un cuadro completamente confuso. Al mis identificaci6n proyectiva cada vez que ocurre la depre
mo tiempo, no quiero dejar dudas de que el apprqach sión. En su trabajo del Congreso Internacional de
que describo, es el que según mi opinión, produce J 955 Hanna Sega! ( 11) describió la manera por la
sorprendentes resultados. El cambio que tuvo lugar en cual '1a psiquis maneja la depresi6n; los· remitiría a
este paciente durante las semanas en las que pude aquella descripción complementándola con esa parte
demostrar el interjuego que acabo de describir, fue tal de la posición depresiva que he incluido aquí, en la
que creo cualquier analista lo aceptaría de veras comq discusión sobre el desarrollo del pensamiento verbal.
una mejoría psicoanalítica. La conducta del paciente Pero dije que aun en la fase más temprana la posición
!-
se ablandó; su expresión se hizo mucho menos tensa. csquizoparanoide, los procesos del pensamiento que ya
En los comienzos y finales de sesiones podía mirarme estarían' en desarrollo son también destruidos. En este
a los ojos y no me evadía, ni como era frecuente antes, estadio no hay problema de pensamiento verbal sino
fijaba la mirada lejos como si yo fuera la superficie solamente progreso de un pensamiento primitivo . de
de un espejo delante de la cual él ensayaba algún tipo preverbal. Una identificación proyectiva excesiva
dram,i, interior, peculiaridad que me ayud6 a menudo, en este estadio tan temprano impide una introyección
a darme cuenta de que yo no era una pe_rsona real adecuada y la asimilación de las impresiones senso
para él. Infortunadamente estos fenómenos rio son riales, y por lo tanto niega a la personalidad una base
fáciles de describir, y no intento hacerlo, porque quiero firme sobre la cual la iniciaci6n del pensamiento pre
llamar la-'ateñci6n sobre una mejoría que he encon verbal pueda proseguir. Además, no solamente ,el
trado, y aún encuentro en otros pacientes, sorpren pensamiento es atacado por ser en sí mismo un ele
dente y desconcertante. Como toca el tema principal mento vincular sino que los factores que llevan a la
de este trabajo, volveré sobre él retomando la discusión coherencia de Íos pensamientos en sí, son igualmente
teórica que he interrumpido para_ introducir mi t jem atacados en tal forma, que al final los elementos del
JJlO clínico. pensamiento, las unidades diría, de las cuales se cons
69. Si el pensamiento verbal es lo que sintetiza y truye el pensamiento, ya no pueden ser ar�culadas.
articula las impresiones y es así esencial para la con- .
El desarrollo del pensamiento verbal > por cons1gu1ente.
\
.
88 W. R. BION
VOLVIENDO A PENSAR 89
----
está comprometido tanto por los ataques continuos que mente avanzado. El almacenaje de tal suceso para ser
he descripto como típicos en la posición depresiva,
como por erhecho de la larga historia de ataques so - -
usado como ideografla,se-aptmóma a 1a descripción
bre cualquier clase de pensamiento, de cualquier clase de Freud de !�12,�sgueda de_<iªt.9s de manera tal, que
que preceda. ya semrfiiñiiTiaE_es si surge una urgente necesidad in
tei-ña,""como una_ÍlJnción de_atención, .como uno de
El esfuerzo de pensar que es una E_arte del eje cen lofasj5eCtos del y9. Y también nos muestra, si bien
trar·ae toOoel proceso"°de r�arac1ón del yo, incluye rndirnentariamente én este ejemplo, una ingeniosa
el Yfi:_de �oi:los preverbales _primitivos que hansufri aglomeración que sirve �ra_tw�itir significados.
do la mutilación y la identificación proyectiva. Lo que
La:,_tn:ey¡rfu.-l....l.lr_e,resiva y �esconcert�nte de que hablé,
significa que la._! P�tiS!:!l�dd..yg__f:_xpulsadas, y s1;1s
te"ndría que ver_�n !:_Sto de I� �lo�r:-s!ón ingeniosa.
acúmulos, tienen que volver a estar �ajo contro.[y_ por
lo tanto dentro de la �rsonalícfad. La identificaéióu Porque encontré, no solamente que los Eacien�s re
proyectiva es entonces revertida y los objetos vuel curren más y más al pensamiento verbal ordinario.
ven_2.9¡:_el mismo camin,2_J>or-el que fueron expelidos. mostrando así un aumento de la capacidad del mismo
Esto fue ex..E!-l!_!ado J?._Ot: un paciente que decía que y una consideración mayor por rl analista como ser
tenía que usar un intestino y_� un �erebro para pen humano, sino que se hacen cada vez más hábiles f'n
sa_f;-y-reforzo7a-a_g_i.icteza de su de�ctiEción corrigién el I_!lWejo_de este lenguaJe má� füeU:-aglomerado que
dome enÜna ocasión posterior, cuand�le nabfé de artk.,ulado, ...Lo importante del lenguaje civilizado es
ha�� tomado algo tr�.án!!olo; el intesting no traga, que simplifica grandemente las tareas del pensador o
me dijo. -P�a�olver1·estos objetos deben ser compri del que habla. Con tal instrumento los problemas
mjdos. ]Jeoido a la hostilidad con que fue rechazada pueden ser resueltos, a causa de que por lo menos
la función de articulación, ahora un objeto, los obj�tos pueden ser establecidos, sin el mismo ciertos interro
solamente pueden ser unidos inapropiadamente o aglo gantes, rualquiera que sea su importancia, no podrían
merados. Sugerí en mi ejemplo clínico, que los anteo siquiera ser propuestos. Lo extraordinario es el tour
jos oscuros eran un ejemplo de esta clase de aglol!le de_l!!.!.·� por :_l cu�l ErÍlpitivos modos de pensamiento
ración de objetos bizarros que eran el producto de la son usados por el paciente para establecer temas de
identifir.aci6n proyectiva del yo. Además, debido a la gran complejiéfaa. Y esto mejora aun con nuevos y
incapacidád élel · paciente para distinguir e�re tales bien recibid.os prógresos. Y digo bien recibi<;los, por
obJétosy los oojetos reales, es que debe esperar por que aún no estoy satisfecho de que sea correcto ignorar
sucesosaproprados que o provean con ideografías que el contenido de una asociación porque trabajar con
sus-impulso!,_ de coriiu�r reqüiereñ. Este caso fue lo ella tendría al analista hablando infinitamente más
recíproco de esto, es decir, un ejemplo de almac-enaje tiempo que al paciente. ¿ Cuál es por ejemplo la inter
de un suceso no a cuenta de su significación neurótica, pretación correcta del contenido de "censuras mora
sino por su valor como ideografía. Esto significa que les"? Y habiéndolo decidido, ¿ cuál es el procedimiento
este particular uso de los .anteojos oscuros es franca- correcto? ¿ Hasta donde debe seguir uno la aclaración?
90 W. ·R. BION VOLVIENDO A PENSAR 9i
Las partículas que deben ser empleadas participan su yo y la substitución de la identificación proyectiva
de las cualidades de las cosas. El paciente parece sen por la represión e introyección deben ser elaboradas.
tir esto como un obstáculo adicional en sus reentradas. Considero que esto es también verdad c�o
· Como esos objetos expelidos por identifícaci6n pro se� en quien creo ha'¼-UJlª personalid� p,sicó!ica
yectiva se vuelven infinitamente peores después de la ocu�por la neurosis tanto como la �rsonalidad neu
1 expulsi6n que lo que eran cuando fueron originaria róti�a está oculta por la psicosis en el j?Sicótico, y que
1
: mente expelidos, el paciente se siente forzado, asaltado, tienegu'Dei,1lescuo1-erta_y tratada.
y torturado por este reingreso, aun deseado por él.
Esto se ve en el ejemplo que di por el movimiento
convulsivo del paciente y por su sorprendente reacci6n
a la "brillante" interpretaci6n. Pero esto último, tam
b�muestra que los sentidos: como parte del yo.. e�'
BIBLIOGRAFIA
pelido� también son -:::a:olOrosarnente com_prli:ñidOs al 1) Bion, W. R. (1953). "Notas sobre la teoría de la es
r�a.':es..i:.me__filldo la exelica�i6n de las ex quizofrenia". Int. J. Ps,,cho-Anal., vol. 35, 1954. Cap.
. IV de este libro.
tremadamente dolorosas alucinaciones táctiles, audíti 2) Freud, S. (1911). "Los dos principios del suceder psí
v:-'rsiVJsuafesm:�asae las cuales parece estar 7abo quico". Bibl. Nueva, tomo 2, pág. 495.
r�do. La depresión y la añsieáad, estando sujetas a 3) - (1923), El yo y· el ello. Bibl. Nueva., tomo 2, pág. 9.
lós mismos mecanismos, son igualmente intensificadas 4) •- (1924}. Neurosis y psicosis. Bibl. Nueva, tomo ?,
° pág. 449.
hasta que el paciente se ve obligado a encararlas con la 5) Klein, M. (1928). "Estadios tempranos del complejo
identificación proyectiva, como ha descripto Sega!. cdípico'\ en Contribuciones en psicoanálisis, Buenos Ai
res, Hormé, 1964.
6} - (1930). ''La importancia de la formaci6n de los sím
bolos en el desarrollo del yo", en Contribuciones al psi
CONCLUSION coanálisis, Buenos Aires, Hormé, ·1964.
7) - 1946} . "Notas sobre algunos mecanismos esquizoides".
70. La experiencia de estas teorias en la práctica en Desarrollos en psicoanálisis, Buenos Aires, Hormé,
me ha convencido que ellas tienen real valor y con 1967.
8) - Desarrollos en psicoanálisis, Buenos Aires, Hormé,
ducen a ,mej,orjas que todo psicoanalista debe sentir 1967.
como meFece'dcµ-as de prueba y escrutinio. Recípro 9) Rosenfeld, H. (1952) . "Tranference-phenomena and
camente, no creo que pueda lográrse un progreso real Tranference-analysis in an Acute Catatonic Schizoprenic
con psicótícos hasta que no se dé todo el valor a la Patient". lnt. J. Psycho-Anal., vol. 33.
divergencia entre la personalidad psicótica y no psic6- 10) Sega!, H. (1955). "Paper on Symbol-formation read to
th,e Medica! Section of tbe British P�chological Society''.
tica, y e� particular al rol de la identificación pro 11) - (1956). "Depression in tbe Schizopbrenic", Int. J.
yecti•;a en la parte psicótica de la personalidad como Psycho-Anal., vol. 37.
reemplazante de la regresi6n en la· parte neur6tica de
la personalidad. El ataque destructivo del paciente a