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Música de tensión

Océanos, mucho viento


(Música de fondo)

La Era Paleozoica

Tuvo una duración de 290 millones de años aproximadamente.

Abarca desde la aparición de los animales con concha o exoesqueleto, hasta el


surgimiento de los primeros anfibios y reptiles.

La configuración geológica del Paleozoico era muy distinta a la del mundo actual. La


Era inicia con la desintegración del supercontinente Pannotia.

Además, como consecuencia del término de la anterior era glacial, el nivel de


las aguas aumentó con el derretimiento del hielo. Así, los continentes fueron invadidos
por los mares.

Este proceso arroja un número pequeño de continentes diferentes o cratones:

 Laurentia,
 Báltica,
 Siberia
 Kazakhstania
 y el supercontinente Gondwana, que a lo largo de la Era fueron reuniéndose en
unidades mayores.

Al final del Paleozoico nace el supercontinente de Pangea, en el que se hallaba la


mayor porción de la superficie no sumergida del planeta.

El clima de esta Era inicia con el fin de una glaciación, por lo que supone un lento
proceso de calentamiento.

Así, al término del Paleozoico inferior, se produjo la glaciación del Ordovícico superior.
Fue corta, pero intensa y tuvo efectos adversos en la vida (extinción masiva).

El Paleozoico terminó con un supercontinente formado con regiones áridas en su


interior. La caída en los niveles del agua marina y el deterioro climático probablemente
condujeron a la Extinción Masiva.

La vida a inicios del Paleozoico se hallaba circunscrita a los mares. Por eso, la flora
predominante consistía en fitoplancton, algas, esponjas y bacterias fotosintéticas.

Sin embargo, a lo largo de la Era se diversificó enormemente la vida y en el Silúrico


colonizó la tierra firme, dando lugar a las primeras plantas. Éstas no poseían las
capacidades vasculares de las plantas modernas para succionar agua y nutrientes
del suelo y repartirlas por sus ramas, así que probablemente eran de pequeño tamaño.

En el Devónico las plantas terrestres se adaptaron al medio y comenzaron a surgir los


helechos, los primeros árboles y arbustos, y hacia el final del Paleozoico había
grandes extensiones de bosques primitivos en los continentes, especialmente durante
el Carbonífero. Las primeras plantas modernas se generaron hacia finales de la Era.

La fauna a principios de la Era se reducía a unas pocas especies pluricelulares


marinas.

Durante el Ordovícico los invertebrados marinos fueron la forma de vida más


abundante, a la que sucederían luego los peces.

La invasión a la tierra firme ocurrió a mediados del Paleozoico, y en un principio


consistía puramente en invertebrados, como los artrópodos. Hasta que al final del
Devónico surgieron los primeros tetrápodos, de apariencia más o menos reptiliana y
de formas sumamente.

El evento final de la Era Paleozoica es conocido como la Extinción Masiva del


Pérmico-Triásico o “La Gran Mortandad”. Es el mayor evento de extinción en la historia
del planeta.

Un alto porcentaje de la vida desapareció en el tránsito hacia la Era Mesozoica.


Como consecuencia nuevas formas de vida pudieron aprovechar los nichos vacíos y
proliferar, aunque les tomó bastante tiempo.

Las causas de esta extinción masiva se ignoran. Sin embargo, las hipótesis
apuntan a repentinos y severos cambios climáticos que impidieron a las especies una
adaptación eficaz.

Música de tensión

Pisadas de dinosaurios

Ruidos

Música de fondo

Era Mesozoica

La Era Mesozoica duró 186 millones de años, durante los cuales el mundo estuvo
bajo el dominio de los dinosaurios.”.
El Paleozoico se inició con la desintegración del supercontinente Pannotia y culminó
con la formación del supercontinente Pangea.

Duró más de 290 millones de años. A lo largo de este tiempo, la vida en


el planeta evolucionó.

Aparecieron los animales marinos con concha, pero también formas más complejas


como los grandes reptiles y plantas relativamente modernas, como las coníferas.

El Paleozoico se divide en los períodos Cámbrico, Ordovícico, Silúrico,


Devónico, Carbonífero y Pérmico.

El Mesozoico se divide en tres grandes períodos, cada uno dividido a su vez en


Épocas y Edades, de la siguiente manera:

El Triásico: En este periodo se formó el supercontinente de Pangea.

Aparecieron sobre la tierra los primeros dinosaurios, generalmente bípedos


y carnívoros, así como los primeros mamíferos.

Este período inicia y culmina con dos eventos de extinción


masiva: la del Pérmico-Triásico y la del Triásico-Jurásico, siendo
el primero el más catastrófico de la historia del planeta entero.

Período Jurásico
El Jurásico fue el período en que proliferaron y reinaron los dinosaurios,
razón por la cual es quizá el más famoso de los períodos del mesozoico.
Además, se inició la fractura del Supercontinente de Pangea.

Los grandes reptiles proliferaron y se diversificaron. Así, conquistaron la


tierra, el mar e incluso el aire. Algunos de los dinosaurios más voluminosos
descubiertos son de este período de clima caliente y húmedo.

El Cretácico es un período particularmente extenso, en el que los dinosaurios


se diversificaron aún más y alcanzaron las formas más complejas de su historia
evolutiva. Aparecieron las primeras aves y se diversificaron los mamíferos,
que desde el Triásico jugaban un papel poco importante.

El clima durante el mesozoico varió considerablemente. Comenzó con una


tendencia seca y cálida durante el Triásico, herencia de la Era anterior, que
generaba desiertos y climas áridos en el interior de Pangea, alejado de la
presencia apaciguadora del mar.

La expansión del lecho marino que se produjo en el Jurásico permitió el


aumento del nivel de los mares, inundando nuevas regiones continentales
e inundando las zonas costeras. Como consecuencia el clima mundial se
refrescó considerablemente, tendiendo a ser húmedo y cálido, casi tropical.

Por último, durante el Cretácico, el clima es menos conocido. Se asume que


las temperaturas siguieron aumentando, alcanzando incluso 10 °C más que
en la actualidad, lo cual habría convertido las zonas ecuatoriales en regiones
áridas, a pesar de su cercanía al mar, pero no existen demasiadas evidencias
al respecto.

Dado que el Mesozoico inició luego de la más violenta extinción masiva que el
planeta haya conocido, la Extinción Masiva del Pérmico-Triásico, la Era
Mesozoica tuvo mucho lugar para nuevas especies tanto animales como
vegetales. Este espacio fue rápidamente aprovechado por los reptiles y luego
por los dinosaurios en que estos evolucionaron.

Los dinosaurios fueron la forma de vida predominante durante todo el


Mesozoico, tanto en la tierra, el aire y el mar: carnívoros, herbívoros, voladores,
de cuello largo o raptores veloces, y un largo etcétera que hoy en día
conocemos bastante bien.

El fin de la Era tiene lugar cuando se produce el Evento de


Extinción Masiva K-Pg, hoy en día comprendido como la caída de
un meteoro de colosales proporciones en Yucatán, México,
poniendo fin para siempre al reinado de los dinosaurios no
aviares y de muchas otras especies prehistóricas.

Flora de la Era Mesozoica

El Mesozoico inició luego de una expansión vegetal sin precedentes, ocurrida


durante el Carbonífero y el Pérmico. Existían enormes selvas, bosques y
junglas a lo largo del continente Pangea. Esto continuó a lo largo del
Mesozoico.
El gran evento evolutivo en materia vegetal se dio hacia el final del cretácico: surgieron
las angiospermas. Con ellas aparecieron las flores como nuevas formas botánicas.

Esto tuvo un impacto importante en la evolución de las plantas y de los insectos,


aunque las cícadas continuaron siendo la forma vegetal predominante hasta finales de
la Era.

Era cenozoica

Durante el Cenozoico, se separaron los supercontinentes de Gondwana y de Laurasia.


Es decir que los continentes fueron adquiriendo su orientación y posición actuales.
El Océano Atlántico se ensanchó y luego se juntaron los dos continentes americanos
(Norte y Sur, con la creación del Istmo Centroamericano).

Otros eventos geológicos importantes durante el Cenozoico fueron la colisión entre el


subcontinente indio y el continente asiático hace 55 a 45 millones de años. Así se
desencadenó la formación de los Himalayas.

Similarmente, Arabia colisionó con Eurasia hace 35 millones de años. Como


consecuencia, se cerró definitivamente el mar de Tetis, y se produjo la orogenia de los
Alpes. Esos procesos continúan hoy todavía.

El clima del Cenozoico ha sido de un enfriamiento a largo plazo. Inicialmente se debió


al bloqueo solar que produjo la ceniza del Evento K-Pg (la extinción de los dinosaurios)
en la atmósfera.

Posteriormente continuó debido al alejamiento de los continentes y la aparición de la


Corriente Circumpolar Antártica, lo cual permitió el enfriamiento de las aguas polares.
Lo mismo ocurrió con las corrientes de Humboldt y del Golfo con la región del Ártico.

El Cuaternario se entiende como un período de fluctuaciones en el nivel del hielo en


las regiones polares, ciclos más o menos estables que oscilaban los 100.000 años.
Algunas estimaciones señalan que hubo alrededor de 80 glaciaciones a lo largo del
período, generando períodos glaciares o “edades del hielo”.
Durante las glaciaciones, los hielos se expandían, los mares descendían y el clima
global enfriaba y secaba. Pero en los períodos interglaciares el frío mermaba y los
hielos retrocedían, liberando agua a los océanos.

Gracias a la desaparición de los dinosaurios, en el Cenozocio la vegetación pudo


expandirse y diversificarse, sobre todo durante las primeras épocas, más húmedas y
cálidas. Posteriormente, los bosques empezaron a ceder terreno a zonas más secas y
áridas. Así surgieron las gramíneas y las hierbas.

Finalmente, la mano del humano se hizo sentir en este ámbito: las especies


comestibles y cultivables comenzaron a predominar en muchos aspectos. Esto se
debió a la intervención humana y el desarrollo de la agricultura.

La separación continental también permitió una mayor diversificación. Gracias a el


aislamiento de los ecosistemas continentales durante miles de años, muchas especies
dieron pie al surgimiento de otras nuevas.

Al inicio de la Era, las especies supervivientes de la Extinción Masiva fueron en su


mayoría pequeños mamíferos, reptiles y aves. Por eso fueron los que más y más
rápido proliferaron, despojados de sus grandes depredadores.

Entre los mamíferos estaban los roedores y pequeños equinos. Sus mayores


depredadores pasaron a ser grandes aves sin vuelo, como las pertenecientes al
género Titanis.

En el Neógeno aparecieron los primeros primates, y entre ellos los


primeros homininos, antecesores del género humano. Los bovinos, antílopes, gacelas
y otros mamíferos de buen tamaño florecieron durante dicho período, así como los
mamíferos acuáticos, como las ballenas.

Finalmente, el cuaternario se caracterizó por la presencia de los grandes


depredadores felinos, como los tigres dientes de sable. También proliferaron los
mamuts lanudos, adaptados a las eras glaciales.

La presencia del ser humano influyó en el destino de muchas de estas especies.


Algunas de ellas hallaron su extinción debido al aumento de la cacería por parte de
esta nueva especie que poco a poco se convirtió en la dominante en todo el planeta.

La Era Cenozoica nos ofrece la explicación de cómo el mundo prehistórico llegó a ser
como lo fue al inicio de nuestra civilización. Por tanto, es el contexto del inicio de
nuestra historia como especie.

Los cambios geológicos, climáticos y bióticos que se produjeron durante sus 66


millones de años definen directamente lo que hallamos hoy en día en los diversos
ecosistemas. También son el origen de los recursos del suelo en el que sembramos y
de los mares de los que nos alimentamos.

Por otro lado, el Cenozoico representa un reflorecimiento de la vida en una nueva


clave: los mamíferos. De ellos surgió eventualmente la especie humana.
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