Los requisitos que aplican al Testamento Militar, irradian desde los artículos 748-753 del Código

Civil.

De los cuales se denotan: Que, en casos de guerra, los militares en campaña, voluntarios, rehenes
y demás individuos empleados en el ejército, o que sigan a éste, podrán otorgar su testamento a
un oficial o jefe.

En los casos aplicados a las personas enunciadas, podrán otorgar su testamento cerrado ante un
habilitado que ejercerá funciones de notario.

En todos los casos, en base al artículo 748, será siempre necesaria la presencia de 2 testigos
idóneos para el asertividad del mismo, y en el caso, que el testador se salve de peligro de guerra,
este será ineficaz.

En caso que el testador estuviera enfermo o herido, podrá otorgarlo al facultativo que lo asista.
Una vez emitidos, deberán ser remitidos a la mayor brevedad posible a los encargados. Deberán
ser entregados o remitidos al Cuartel General y por éste, al secretario de Gobierno y Justicia.

En el caso que el testador haya fallecido, el secretario remitirá el documento al juez del último
domicilio del difunto, para que cite a los herederos y demás interesados de la sucesión. Se elevará
a Escritura Pública y se protocolarizará según el Código Judicial.

El Juez procederá a su apertura de la forma prevenida en el Código Judicial con citación en

intervención del Ministerio Público y una vez abierto, lo pondrá en conocimiento a los herederos.
Los testamentos militares caducarán 4 meses después.