Señor, GRACIAS por enviarme a tan increíble compañera, mejor amiga y esposa.

Junto a tu gracia, su amor es el regalo más grande en mi vida. Por favor nunca permitas que la dé
por segura.

Ayúdame a amarla, valorarla, respetarla, adorarla y protegerla de la manera que ella merece. Yo
sé que no es solamente mi esposa, ella es TU hija, y tú confiaste en mí para que fuera su esposo.

Por favor ayúdame a amarla de la manera en que tú la amas. Estaría dispuesto a dar mi vida por
ella de la misma forma en que tú la diste por nosotros.

Padre, vivimos en un mundo donde tus hijas han sido reducidas a ser objetos e imágenes para la
lujuria y satisfacción egoísta. Por favor ayúdame a mantener mis ojos abiertos y mi corazón puro
en un mundo de pecado y abuso.

Ayúdame a tener solo ojos para mi esposa. Dale la confianza de saber que ella nunca competirá
por mi atención con una imagen de otra mujer real o retocada digitalmente.

Permítele saber que hoy y siempre estaré cautivado por su belleza interna y externa.

Por favor, mantenla lejos de la trampa de las comparaciones, las que podrían intentar destruir su
confianza reemplazándola por inseguridad.

Ayúdala a saber que no tiene que comparar su vida o sus logros con ninguna otra persona
porque tu plan para ella es magistralmente único.

Ayúdame a ser su más grande alentador y nunca su más grande crítico. Proporcióname las
palabras para cuando necesite ánimo y dame la sabiduría de cuando callar y quedarme tranquilo
al momento que solo necesite ser escuchada.

Ayúdame a respaldar sus sueños y pasiones para impulsarla a alcanzar todo lo que Tú tienes
reservado para ella.

Por todo lo que pueda lograr, no permitas que caiga en la trampa de creer que su identidad está
atada a sus resultados o derrotas, sino que su identidad está asegurada en tu amor por ella.

Nunca dejes que pierda de vista el hecho de que ella es eternamente amada por Ti y permítele
encontrar la fuerza en mi amor por ella también.
Llena su corazón de gozo. Permite que su risa sea la banda sonora de nuestra vida en común.

Hasta en las temporadas más difíciles, ayúdanos a escoger el gozo como recordatorio de que
nuestras dificultades son temporales, porque por ti mi Señor nuestro gozo será eterno.

Ayúdame a ser fuerte por ella en sus días de debilidad y ayúdala a que sea fuerte en los días que
me sienta débil y, Señor, danos fortaleza para lo que tenemos por delante.

Ayúdanos a NUNCA perder la fe en Ti o rendirnos el uno con el otro.

¡Gracias Señor por mi maravillosa esposa! Ella es un obsequio invaluable para ser apreciado y rezo
para que me ayudes para ser un obsequio para ella también.

Por favor dame la sabiduría, el coraje y la fuerza para ser el mejor esposo que pueda ser día a
día. En el nombre de Jesús.

Amén.