Está en la página 1de 1

La selección natural

La selección natural es un proceso evolutivo que tiene lugar en la naturaleza. Este proceso
se basa en la idea de que los seres vivos que tienen ciertas características tienen más
probabilidades de sobrevivir y reproducirse, mientras que aquellos que no las tienen
enfrentan dificultades para hacerlo.

La selección natural es importante para la evolución de los seres vivos porque es uno de los
principales mecanismos que influyen en la diversidad de la vida en la Tierra. A lo largo del
tiempo, los organismos que tienen características favorables para sobrevivir y reproducirse
tienen una mayor probabilidad de transmitir sus genes a la siguiente generación. De esta
manera, las poblaciones de seres vivos pueden cambiar y adaptarse a los cambios en su
entorno.

Los factores que influyen en la selección natural son variados, e incluyen la competencia
por recursos como alimento y agua, la presencia de depredadores, la capacidad de
adaptación al entorno y la resistencia a enfermedades y cambios climáticos, entre otros.

Los animales que sobreviven a la selección natural tienen características que les permiten
adaptarse a su entorno. Estas características pueden incluir la capacidad de migrar a otras
áreas en busca de recursos, un tamaño y forma corporal que les permita camuflarse o
escapar de depredadores, una mayor resistencia a enfermedades, una mayor capacidad de
reproducción o una mayor diversidad genética.

Por otro lado, los animales que no pueden sobrevivir a la selección natural pueden tener
características que les impidan adaptarse a su entorno. Esto puede deberse a una variedad
de factores, como la falta de recursos, la presencia de depredadores, la competencia con
otras especies o cambios en el clima.

La selección natural puede afectar la supervivencia de los animales de diferentes maneras.


Los animales que tienen características que les permiten adaptarse tienen una mayor
probabilidad de sobrevivir y reproducirse, mientras que los animales que no pueden
adaptarse pueden enfrentar dificultades para sobrevivir y reproducirse, lo que puede llevar
a su extinción.

Algunos ejemplos de animales que han sobrevivido a la selección natural incluyen el


tiburón blanco, la mariposa monarca y el cocodrilo del Nilo. Por otro lado, algunos animales
que no han sobrevivido a la selección natural incluyen el dodo, el tigre de Tasmania y el
tiburón toro de la Bahía de San Francisco.

La actividad humana también puede afectar la selección natural de los animales. La caza
furtiva, la destrucción del hábitat y la introducción de especies invasoras pueden poner en
peligro la supervivencia de muchas especies animales.

Para proteger a los animales que se encuentran en peligro de extinción debido a la


selección natural y otros factores, es importante que tomemos medidas para proteger su
hábitat, reducir la caza furtiva y la pesca excesiva y controlar la introducción de especies
invasoras. También podemos ayudar a proteger a los animales apoyando proyectos de
conservación y educando a otros sobre la importancia de la diversidad biológica.

También podría gustarte