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Cómo lidiar con la tricotilomanía

6 partes:Identificar tus factores desencadenantesDesarrollar estrategias para dejar de


arrancarte el cabelloMejorar la autoaceptación y la autoestimaReducir el estrésBuscar
apoyoDiagnosticar la condición

La tricotilomanía es un impulso irresistible a arrancar el cabello del cuero cabelludo, las


cejas u otras áreas del cuerpo. Esto a menudo da lugar a áreas calvas, lo que hace que las
personas que sufren tricotilomanía realicen grandes esfuerzos para ocultarlo.[1]
Aproximadamente el 1 % de la población adulta en general encaja dentro de los criterios de
diagnóstico de tricotilomanía, siendo en su gran mayoría mujeres.[2] A menudo, las personas
comienzan a arrancarse el cabello de manera compulsiva aproximadamente a principios de
la adolescencia, aunque algunas empiezan antes o después de esta etapa. En conjunto con la
depresión, esta condición puede dar lugar a una incapacidad para desempeñarse de manera
adecuada en situaciones sociales y laborales.[3] Podrías sentirte impotente cuando te
encuentras sumergido en el acto de arrancarte el cabello. Sin embargo, esta condición
puede tratarse con gran éxito.

Parte 1

Identificar tus factores desencadenantes

1.
1

Lleva un registro de los momentos en que te arrancas el cabello. Considera los


tipos de situaciones que te hacen recurrir a este acto. ¿Solo lo haces cuando estás
desesperado, molesto, confundido o frustrado? Entender los factores
desencadenantes de la tricotilomanía puede ayudarte a encontrar otros métodos de
afrontamiento positivos.

o Durante dos semanas, anota las veces en que te arrancas el cabello. Registra
lo ocurrido justo antes de hacerlo, así como los sentimientos que
experimentas.
2.
2

Toma nota de lo que sientes cuando te arrancas el cabello. Cuando aprendas los
factores desencadenantes, intenta determinar lo que podría reforzar el
comportamiento. Si te arrancas el cabello cada vez que te sientes ansioso y eso
alivia tu estado, entonces significa que este acto se ve reforzado positivamente por
la sensación de alivio.[4] Analiza la forma en que te sientes durante e
inmediatamente después de arrancarte el cabello.

o Saberlo puede ayudarte a lidiar con esta condición porque la próxima vez
que te sientas ansioso podrás tratar de buscar otra estrategia de
afrontamiento que te produzca alivio. Luego esfuérzate por convertirla en tu
reacción acondicionada a la ansiedad o en tu estrategia de afrontamiento en
lugar de arrancarte el cabello.
o Existen tres etapas distintas para los que sufren de tricotilomanía, aunque no
todos pasar por todas ellas. Podrías experimentar una o más de dichas
etapas:[5]
 1. Inicialmente experimentas una tensión acompañada de un deseo de
arrancarte un poco de cabello.
 2. Comienzas a arrancarte el cabello. Se siente realmente bien, como
una sensación de alivio, así como una cierta excitación.
 3. Después de arrancarte el cabello, puedes sentir culpa,
remordimiento y vergüenza. Quizás trates de cubrirte la zona calva
con bufandas, sombreros, pelucas, etc. Pero con el tiempo dichas
zonas serán más evidentes para todos y comenzarás a ocultarte. Tal
vez comiences a sentirte sumamente humillado.
3.
3

Examina el cabello que te arrancas. ¿Lo haces porque no te gustan ciertos tipos
de cabello? Por ejemplo, una persona podría arrancarse el cabello de manera
compulsiva cuando encuentra canas, pues no le gustan y piensa que todas ellas
deben desaparecer.[6]

o Una forma de abordar este desencadenante es replantear tu percepción de las


canas. No tener cabello es inherentemente malo, pues este cumple con un
propósito. Tratar de cambiar tus patrones de pensamiento con respecto a
estos cabellos puede ayudarte a reducir el impulso de arrancártelos.
4.

4
Piensa en tus influencias de la niñez. La causa inicial de la tricotilomanía podría
ser genética o ambiental. Los investigadores observan similitudes con los factores
que desencadenan el trastorno obsesivo-compulsivo y consideran que las
experiencias caóticas y angustiantes en la niñez o las relaciones tempranas
perturbadas con los padres o tutores podrían estar detrás del desarrollo de este
trastorno.

o Un estudio ha demostrado que más de dos tercios de las personas que sufren
esta condición han experimentado por lo menos un evento traumático en sus
vidas, donde una quinta parte de ellas cuenta con un diagnóstico de trastorno
por estrés postraumático.[7] Esto ha dado lugar a la especulación de que es
una forma de buscar alivio para algunos adultos, es decir, una forma de
lidiar con diversas situaciones.
5.
5

Investiga tus antecedentes familiares. Cuando busques el origen de tu


tricotilomanía, determina si tienes un antecedente familiar de arrancarse el cabello,
un trastorno obsesivo-compulsivo o algún trastorno de ansiedad. Existe un riesgo
significativamente mayor de desarrollar tricotilomanía si existe un antecedente
familiar de dicho trastorno.[8]

Parte 2

Desarrollar estrategias para dejar de arrancarte el cabello

1.
1

Elabora un plan para dejar de hacerlo. El plan que consiste en “notar,


interrumpir y elegir” es una estrategia que puede ayudarte a dejar de arrancarte el
cabello.[9] Este plan consiste en darte cuenta del momento en que sientes deseos de
arrancarte el cabello, interrumpir la cadena de sensaciones y el impulso de
arrancarte el cabello al escuchar recordatorios positivos en tu cabeza. Por último,
puedes elegir hacer algo más en su lugar, algo que te relaje y te tranquilice.

2.

2
Lleva un diario o un cuadro donde registres los momentos en que te arrancas
el cabello. Mediante este procedimiento podrás tener una idea de la frecuencia, los
factores desencadenantes y el impacto que tiene el hecho de arrancarte el cabello.
Registra la fecha, la hora, el lugar y la cantidad de cabellos que te arrancas, así
como lo que usaste para hacerlo. También anota tus pensamientos o sentimientos en
ese momento. Esta es una buena manera de eliminar la vergüenza y expresar el
impacto que arrancarte el cabello tiene en tu vida en general.

o Hacer un recuento de la cantidad de cabello que te has arrancado puede


servirte como una revisión de la realidad acerca de todo el cabello que
pierdes. ¿El resultado te sorprende?, ¿qué hay con la cantidad de tiempo que
le dedicas, es más de la que creías?[10]
3.
3

Elige una forma alternativa de expresar tus emociones. Una vez que hayas
identificado las señales de alerta y los factores desencadenantes, haz una lista de los
comportamientos alternativos que puedes hacer en lugar de arrancarte el cabello.
Sin importar cuál sea el comportamiento alternativo, debe ser sencillo de realizar y
de acceder. Algunas sugerencias para las formas alternativas de expresar tus
emociones y sentimientos son las siguientes:[11]

o Tomarte unos cuantos minutos para despejar tu mente


o Dibujar o garabatear en un papel
o Pintar
o Escuchar música que esté relacionada con tus emociones
o Llamar a un amigo
o Realizar un trabajo como voluntario
o Limpiar
o Jugar videojuegos
4.
4

Prueba un recordatorio físico que te haga detenerte. Si te arrancas el cabello sin


querer, tal vez necesites un recordatorio físico que te haga dejar de hacerlo. Para una
barrera física, considera usar pesas para los tobillos en el brazo o un guante de goma
para desalentar el comportamiento.

o Incluso podrías tener pósits colocados en áreas donde suelas arrancarte


mucho el cabello. Estos pueden actuar como recordatorios físicos para que te
detengas.
5.
5

Aléjate de los factores desencadenantes. Si bien es probable que no puedas


eliminar todos los factores desencadenantes que te obligan a arrancarte el cabello,
podrías reducir tu exposición a algunos de ellos. ¿Tu novia es la causa de la mayoría
de tus episodios? Tal vez sea hora de reconsiderar tu relación. ¿Tu jefe es quien te
genera todo este estrés? Quizás sea hora de buscar otro trabajo.

o Por supuesto, para muchas personas, los factores desencadenantes no son tan
simples de identificar o evitar. Para algunas, el cambio de escuela, el abuso,
una sexualidad recién descubierta, los conflictos familiares, la muerte de un
pariente o incluso los cambios hormonales en la pubertad son las causas de
esta condición compulsiva. Estos factores desencadenantes son muy difíciles
(si no imposibles) de evitar. Si no puedes alejarte de uno de los factores
desencadenantes mencionados anteriormente o por otras razones, sigue
trabajando en la autoaceptación, cambiando tus hábitos y obteniendo el
apoyo social que te ayude a lidiar con tu trastorno.
6.

Reduce el escozor o las sensaciones extrañas en tu cabeza. Utiliza un aceite


completamente natural para aliviar los folículos y reducir el escozor, pero más
importante, para convertir el comportamiento de agarrar y arrancar en acariciar y
frotar. Asegúrate de usar productos completamente naturales tales como una mezcla
de aceites esenciales y aceite de ricino. Nunca utilices productos basados en
químicos.
o Asimismo, ten cuidado con los productos que prometen soluciones rápidas.
Los tratamientos que prometen resultados o curas instantáneos no son de
confianza, pues la tricotilomanía no se cura de la noche a la mañana.
o También puedes hablar con tu médico para que te recete una crema
anestésica que puedas usar en tu cabeza. Esto puede ser útil si uno de tus
desencadenantes es un escozor o sensación extraña en tu cabello. En un
estudio de caso realizado a una chica de 16 años, se descubrió que el uso
temporal de cremas anestésicas en combinación con la psicoterapia tuvo
resultados exitosos en la eliminación de los comportamientos compulsivos
de arrancarte el cabello.[12]

Parte 3

Mejorar la autoaceptación y la autoestima

1.
1

Vive el presente. A menudo, arrancarse el cabello es el resultado de negarse a


sentarse y estar en el presente con los sentimientos incómodos o las emociones
negativas.[13] Utiliza técnicas de atención plena para ayudarte a aceptar que estas
emociones negativas e incómodas son una parte natural de la experiencia humana.
No es totalmente necesario que las evites.[14] Cuando el impulso constante de evitar
la incomodidad disminuya, el acto de arrancarte el cabello también desaparecerá.

o Para realizar un ejercicio de atención plena, siéntate en un lugar tranquilo y


cómodo. Respira profundamente inhalando por cuatro segundos,
conteniendo la respiración por cuatro segundos más y exhalando por otros
cuatro. A medida que sigues respirando, tu mente probablemente comenzará
a divagar. Reconoce estos pensamientos sin juzgarlos y permite que se
vayan. Vuelve a enfocar tu atención en tu respiración.
2.
2

Mejora tu autoestima. Muchas de las personas que sufren este trastorno también
tienen una autoestima baja o muy poca confianza en sí mismas. Para desarrollar tu
autoestima y autoaceptación, emplea la Terapia de Aceptación y Compromiso
(ACT, por sus siglas en inglés), la cual consiste en un enfoque terapéutico que
puede ayudar a una persona a aclarar sus valores y enfocarse en sus metas de vida.
Desarrollar la autoestima es una parte importante de la recuperación.

o Recuerda que eres una persona maravillo y única. Hay gente que te ama y tu
vida es preciosa. Sin importar lo que alguien más te diga, debes amarte a ti
mismo.
3.
3

Sustituye los pensamientos negativos con unos positivos. Los pensamientos


negativos sobre ti pueden disminuir tu autoestima rápidamente y provocar tus ansias
de arrancarte el cabello. Las humillaciones, el miedo al fracaso y otros
pensamientos negativos te harán sentir que no eres suficiente. Comienza a cambiar
estos hábitos mentales para empezar a recuperarte y aumentar tu confianza. Estos
son algunos ejemplos de cómo puedes empezar a cambiar tu manera de pensar
acerca de ti mismo:[15]

o Suponiendo que piensas de la siguiente manera: “No tengo nada interesante


qué decir, así que puedo ver la razón por la que las personas piensan que soy
patético”. Percátate de los pensamientos desagradables como este y haz un
esfuerzo consciente por cambiarlos al corregirte. Repítete lo siguiente: “A
veces no tengo mucho qué decir y eso está bien. No tengo por qué mantener
a otros entretenidos o tomar toda la responsabilidad de esta conversación”.
o Sustituye los pensamientos críticos con pensamientos productivos. Por
ejemplo, este es un pensamiento crítico: “No hay forma de que vaya hoy día
a cenar con todos. La última vez que fui estaba demasiado avergonzado por
mi comentario fuera de lugar. Soy tan tonto”. Reemplaza este pensamiento
con uno productivo: “Estaba demasiado avergonzado en la última cena, pero
sé que cometo errores y eso está bien. No soy tonto, solo cometí un error
honesto”.
o A medida que practiques la detección de estos pensamientos y su sustitución
notarás que tu autoestima se incrementa junto con tu confianza.[16]
4.

4
Escribe tus logros y fortalezas. Otra forma de empezar a aceptar tus emociones y
aumentar tu autoestima es elaborar una lista de tus logros y fortalezas.[17] Refer to
this often.

o Si tienes problemas para elaborar una lista, habla con un amigo o familiar de
confianza. Esta persona pueda ayudarte con algunas ideas. Ningún logro es
demasiado pequeño para esta lista, así que sigue añadiendo todo lo que
puedas.
5.

5
Esfuérzate por comunicarte de manera asertiva con los demás. Practicar
mejores técnicas de autoafirmación puede ayudarte a superar las situaciones en las
que te sientes desafiado. Por ejemplo:

o Aprende a decir que no. Si las personas te piden cosas que no quieres hacer,
reafirma tus propias necesidades y deseos al decir que no.
o Deja de complacer a los demás. No hagas cosas por el solo hecho de obtener
la aprobación de alguien más. Determina lo que es verdaderamente
importante para TI. Pide lo que quieras.
o Utiliza frases en primera persona. Estos tipos de frases te ayudarán a
transmitir responsabilidad por tus propias emociones y reacciones. Por
ejemplo, en lugar de decir “Nunca me escuchas”, puedes decir “Me siento
ignorado cuando miras tu teléfono mientras hablamos”.

Parte 4

Reducir el estrés

1.
1

Elimina algunas de tus fuentes de estrés. Muchas personas que sufren de


tricotilomanía descubren que el estrés desencadena el deseo de arrancarse el cabello.
[18]
Haz lo que esté a tu alcance para reducir el estrés en tu vida y aprende a
manejarlo empleando mejores técnicas de afrontamiento.

o Haz una lista de las cosas que te generen estrés. Estas pueden ser cosas
grandes tales como el dinero o el trabajo, o pequeñas como las colas largas
en el supermercado. Si bien no puedes evitar todo lo que te cause estrés,
puedes minimizar tu exposición a algunas cosas.
2.
2

Relaja tus músculos mediante la relajación muscular progresiva. Puedes reducir


el estrés que sientes al emplear la relajación muscular progresiva.[19] Este tipo de
relajación reduce la tensión muscular enviando una señal a tu cuerpo para que
empiece a relajarse. Al tensar y luego soltar la tensión en los músculos, puedes
devolver a tu cuerpo a un estado de calma.

o Aprieta los músculos durante seis segundos y luego suéltalos por otros seis.
Presta especial atención a la forma en que cada músculo se relaja.
o Trabaja desde tu cabeza hacia la punta de los pies hasta que sientas que tu
cuerpo comienza a relajarse.
3.
3

Prueba la meditación. La meditación puede ser útil para reducir el estrés. Un


régimen de meditación regular, incluso solo 10 minutos al día, puede ayudarte a
despejar tu mente y reorientar tu energía hacia un espacio positivo.

o Para meditar, busca un lugar tranquilo y siéntate o recuéstate. Comienza


respirando profundamente y con lentitud. Incluso podrías probar la
visualización guiada, donde imaginas un lugar tranquilo como una playa, un
arroyo o un área boscosa.
4.
4

Duerme lo suficiente. Asegúrate de tener un patrón de sueño regular y de dormir lo


suficiente cada noche. Trata de dormir por lo menos siete u ocho horas diarias.

o Si tienes problemas para quedarte dormido, escucha música suave. Deja de


usar cualquier dispositivo electrónico por lo menos 15 minutos antes de irte
a dormir.
5.
5

Trata de hacer ejercicio. Los estudios demuestran que el estrés puede reducirse
considerablemente con un régimen de ejercicios regular.[20] Tu cuerpo aumentará su
producción de endorfinas, lo que contribuye a una sensación más positiva.

o No es necesario que camines por las calles por una hora diaria. Puedes
realizar un ejercicio que disfrutes. Esto puede incluir el yoga, las artes
marciales u otras actividades. Incluso la jardinería puede darte un impulso de
energía.

Parte 5

Buscar apoyo
1.

Habla con un amigo o familiar de confianza. Busca a alguien en quien confíes y


cuéntale sobre tu tricotilomanía. Si no puedes hablar del tema en voz alta, escribe
una carta o un correo electrónico. Si tienes miedo de hablar acerca de tu lucha
contra esta enfermedad, por lo menos habla con esta persona sobre tus sentimientos.

o También podrías decirles a tus amigos y familiares cuáles son tus factores
desencadenantes. De esta manera, podrán ayudarte a recordar los momentos
en los que podrías correr el riesgo de arrancarte el cabello. También pueden
ayudarte a encontrar un comportamiento alternativo.
o Pídeles a tus amigos y familiares que te brinden un refuerzo positivo cuando
vean que tienes éxito al utilizar una alternativa saludable en lugar de
arrancarte el cabello.[21]
2.

Habla con un profesional en la salud mental. Un consejero o terapeuta podrá


ayudarte a encontrar formas de lidiar con tu trastorno. Esta persona también puede
tratar cualquier depresión u otro problema que pueda contribuir a tu
comportamiento autodestructivo.

o Si visitas a un consejero o terapeuta y sientes que no obtienes ayuda, busca a


otro. No estás obligado a acudir a un solo médico o consejero. Es importante
que encuentres a alguien con quien sientas una conexión y que te
proporcione ayuda.
o Los tipos de terapia que podrían beneficiarte son la terapia conductual (sobre
todo la terapia de reversión de hábitos), la psicoterapia, la psicoterapia
psicodinámica, la hipnoterapia, la psicología cognitivo-conductual y los
medicamentos antidepresivos.[22]
3.

Pregúntale a tu médico acerca de los medicamentos. Se ha demostrado que


varios medicamentos son eficaces para tratar la tricotilomanía. La fluoxetina, el
aripiprazol, la olanzapina y la risperidona son medicamentos que se han utilizado
para tratar los casos de tricotilomanía. Estos medicamentos ayudan a regular los
químicos en el cerebro con la finalidad de reducir los síntomas de ansiedad,
depresión y otras emociones que pueden desencadenar los deseos de arrancarse el
cabello.[23]

4.

Consulta con un grupo de apoyo en línea o por teléfono. Si no tienes acceso


inmediato a la consejería, existen otras fuentes a las que puedes acceder. El Centro
de Aprendizaje sobre la Tricotilomanía (Trichotillomania Learning Center) cuenta
con grupos de apoyo en línea.
o Seven Counties Services, Inc. cuenta con una línea de ayuda gratuita para
que las personas con tricotilomanía puedan llamar. El número es 800-221-
0446.[24]

Parte 6

Diagnosticar la condición

1.

Presta atención a algunas acciones o reacciones que indiquen este trastorno. La


tricotilomanía está clasificada oficialmente como un trastorno del control de
impulsos que sigue la misma línea de la piromanía, la cleptomanía y la ludopatía
patológica. Si sufres de tricotilomanía, podrías actuar o reaccionar de ciertas formas
cuando te arrancas el cabello. Estas podrían ser las siguientes:

o Masticar o comer el cabello arrancado


o Frotar el cabello arrancado por tus labios o cara
o Un aumento en la sensación de tensión inmediatamente antes de arrancarte
el cabello o cuando resistes el comportamiento
o Placer, satisfacción o alivio al arrancarte el cabello
o Darte cuenta de que te arrancas el cabello sin siquiera notarlo (esta es una
actitud “automática” o involuntaria)
o Ser consciente de que te arrancas el cabello deliberadamente (arrancarte el
cabello conscientemente)[25]
o Utilizar pinzas u otras herramientas para arrancarte el cabello[26]
2.
2

Reconoce las señales físicas de este trastorno. Existen algunas señales reveladoras
de que una persona puede estar sufriendo tricotilomanía. Estas incluyen las
siguientes:

o Pérdida de cabello notorio provocada por el hecho de arrancarte el cabello


constantemente
o Áreas de calvicie en el cuero cabelludo o en otras áreas del cuerpo
o Pestañas o cejas escasas o faltantes
o Folículos pilosos infectados
3.
3

Observa si tienes otros problemas corporales compulsivos. Algunas de las


personas que se arrancan el cabello podrían comerse las uñas, chuparse el pulgar,
golpearse la cabeza y rascarse la piel de manera compulsiva.

o Lleva un registro de estos tipos de comportamientos durante varios días para


ver si son habituales. Ten en cuenta los momentos en que los haces y con
qué frecuencia.
4.

4
Evalúa si tienes algún otro trastorno. Determina si la tricotilomanía es el único
trastorno que te afecta. Las personas que se arrancan el cabello de manera
compulsiva podrían sufrir de depresión, trastorno obsesivo-compulsivo, trastorno de
Tourette, trastorno bipolar, fobias, trastornos de personalidad y, en algunos casos,
exhibir tendencias suicidas.[27] Acudir a un médico o un profesional en la salud
mental puede ayudarte a determinar si padeces algún otro trastorno.

o No obstante, es complicado determinar qué trastorno causa otro. ¿La pérdida


de cabello provoca la depresión a través del deseo de aislarte de los demás y
evitar las actividades agradables porque sientes una vergüenza profunda?[28]
o A menudo, para recuperarse exitosamente de la tricotilomanía, es necesario
tratar también los trastornos coexistentes.[29]
5.
5

Habla con tu médico acerca de los trastornos de pérdida de cabello. Alguien


que cree sufrir de tricotilomanía debe someterse a un examen realizado por un
médico para descartar otros trastornos del folículo piloso. Algunos trastornos
incluyen la alopecia o la tinea capitis, las cuales pueden producir pérdida de cabello.
Cuando un médico te examine, buscará evidencia de cabellos irregularmente rotos,
cabellos en espiral además de otras anomalías como los signos de tricotilomanía.[30]

6.

6
Reconoce que la tricotilomanía es un trastorno. Lo primero que debes tener en
cuenta es que tiene tratamiento. Es un trastorno, no algo impulsado por la fuerza de
voluntad o la falta de ella.[31] El trastorno surge como resultado de la composición
genética, los estados de ánimo y tu entorno. Esta es una condición que necesita
tratamiento, no algo por lo que debas martirizarte.

o Los exámenes cerebrales han demostrado que las personas con


tricotilomanía tienen diferencias en su cerebro en comparación con aquellas
que no sufren este trastorno.[32]
7.

7
Ten en cuenta que este trastorno es una forma de autolesión. No te convenzas
de que nada está mal ni de que arrancarte el cabello es “normal. La tricotilomanía
puede considerarse como una forma de autolesión, aun cuando no se hable tanto de
ella en comparación con otras. Al igual que con todas las formas de autolesión, la
tricotilomanía puede convertirse en un comportamiento adictivo. Con el tiempo, se
hace cada vez más difícil de detener; es por ello que es mejor controlarla lo antes
posible

Advertencias
 El abuso de drogas o alcohol puede ser el resultado de la tricotilomanía, pues las
personas que la sufren buscan alejarse de la sensación de vergüenza, infelicidad y
culpa involucradas.[33] Si crees que estás empezando a beber demasiado o a
consumir drogas, busca ayuda.

Referencias
1. ↑ http://www.mayoclinic.com/health/trichotillomania/DS00895
2. ↑ Snorrason, I., Berlin, G.S., & Han-Joo, L. (2015). Optimizing psychological
interventions for trichotillomania (hair-pulling disorder): an update on current
empirical status. Psychology Research & Behavior Management, 8, p.105-113.
3. ↑ Tung, E.S., Flessner, C.A., Grant, J.E., & Keuthen, N.J. (2015). Predictors of life
disability in trichotillomania. Comprehensive Psychiatry, 56, 239-244.

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