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Guía de Petrología Metamórfica

Autor: Nicolas fuentealba


Terminología básica Textura: la disposición de las partes de una roca, incluyendo las relaciones
geométricas entre sus partes, la morfología de cada parte y sus características internas, a la escala
de una lámina delgada. Es sinónimo de microestructura.

Estructura: lo mismo, pero a la escala de muestra de mano o de afloramiento.

Fábrica: el tipo y grado de orientación preferente de las partes de una roca. El término se usa para
describir tanto la orientación preferente mineral como la orientación preferente cristalográfica.
Normalmente su uso se restringe a la microescala (lámina delgada) y la meso escala (muestra de
mano y afloramiento).

Tipos de texturas Texturas isótropas, con una disposición al azar de los elementos constituyentes.
Texturas anisótropas, con una orientación preferente de alguno o de todos sus elementos. Estas
texturas anisótropas se denominan fábricas (anglicismo que proviene de la palabra inglesa fabric) y
se distinguen tres categorías:

fábricas planares

fábricas lineales

fábricas plano-lineales

Texturas Básicas
Textura granoblástica: Se trata de un mosaico equi- o inequigranular de cristales equidimensionales
o de cristales inequidimensionales con orientación al azar. Predominan los cristales alotriomorfos,
pero también se dan las texturas granoblásticas con cristales subidiomorfos. Es la textura más típica
de corneanas, granulitas, mármoles, cuarcitas y peridotitas metamórficas. Se distinguen cuatro tipos
de texturas granoblásticas:

Textura lepidoblástica: la orientación preferente de minerales viene dada por la disposición


subparalela de minerales planares (normalmente filosilicatos) (Figura 2, esquema 4).

Textura nemato blástica: la orientación preferente viene dada por la disposición subparalela de
minerales prismáticos (normalmente anfíboles o piroxenos). Es una textura muy típica de las
anfibolitas (Figura 2, esquema 5).
Tipos de foliaciones secundarias
La Foliación Pizarrosa consiste en una estructura en lajas muy finas, delimitadas por superficies
planares regularmente distribuidas o espaciadas. Es típica de las Pizarras. En estas rocas, la
composición a base de minerales laminares (micas) dispuestos perfectamente orientados de forma
paralela (Textura Lepidoblástica) condiciona la definición de lajas de roca perfectamente planas y
muy finas.
La Foliación Esquistosa consiste en lajas delimitadas por superficies ligeramente irregulares,
alabeadas. Es típica de los Esquistos. Es consecuencia del mayor tamaño cristalino que presentan
estas rocas, comparadas con las pizarras, y de la coexistencia de minerales equidimensionales y
minerales laminares orientados en torno (Textura Granolepidoblástica – Lepidoblástica).

La Foliación Gneísica es una estructura orientada de forma más grosera, irregular y discontinua. Es
característica de la mayoría de los Gneises. Se debe a la existencia de porfidoblastos en el seno de
una masa de fondo de cristales de tamaño inferior y con disposición orientada que contornean
(TexturaPorfidoblástica).

Categorías composicionales para determinar protolitos


Términos especiales
Anfibolita. Roca metamórfica máfica, foliada, compuesta predominantemente por anfíbol (>40%,
casi siempre de tipo hornblenda) y plagioclasa.

Corneana. Roca sin esquistosidad, de tamaño de grano fino a muy fino, compuesta por silicatos ±
óxidos, que muestra rasgos de recristalización importantes por metamorfismo de contacto. Las
corneanas suelen retener alguna característica heredada de la roca original, como laminación
gradada o cruzada en las corneanas metasedimentarias. Ejemplos: corneana con andalucita,
corneana pelítica, corneana básica, corneana con epidota y anfíbol, corneana calcárea con diopsido,
vesubianita y wollastonita.

Cuarcita. Roca metamórfica con más de un 80% de cuarzo.

Charnockita. Rocas con feldespato potásico y ortopiroxeno y textura de apariencia ígnea. El término
se emplea independientemente de que la roca sea ígnea o metamórfica. Otros autores limitan este
término a las variedades de facies granulita.

Eclogita. Roca máfica sin feldespatos compuesta fundamentalmente por onfacita (piroxeno sódico)
y granate, ambos en proporciones importantes.

Esquisto azul. Roca metamórfica con esquistosidad y una tonalidad azulada debida a la presencia de
anfíbol sódico (glaucofana, riebeckita, crossita). El tono "azul" raramente es azul en realidad.

Esquisto verde y Greenstone. Rocas metamórficas con esquistosidad (esquisto verde) o sin ella
(greenstone), de color verde debido a la presencia de minerales como clorita, actinolita (un anfíbol
cálcico) y epidota.

Granulita. Roca metamórfica con una asociación mineral de alta temperatura dominada por
minerales anhidros máficos. La moscovita está siempre ausente. Es característica la presencia de
ortopiroxeno. Texturalmente se caracteriza por poseer un mosaico granoblástico poligonal,
normalmente equidimensional aunque también hay variedades con una cierta orientación
preferente.

Mármol. Roca metamórfica compuesta fundamentalmente por calcita y/o dolomita (por ejemplo,
mármol dolomítico).

Migmatita. Roca silicatada heterogénea en escalas meso- y megascópicas que aparece en terrenos
metamórficos de grado alto y muy alto. Está compuesta por partes oscuras (máficas) y partes claras
(félsicas) en una disposición compleja. Las partes félsicas se han formado por cristalización a partir
de fundidos de origen local o por segregación metamórfica; las partes máficas representan el residuo
del proceso de fusión local o se han formado por segregación metamórfica.

Roca calcosilicatada. Roca metamórfica compuesta por carbonatos (< 50%), junto con silicatos
cálcicos como epidota, zoisita, vesubianita, diópsido, granate cálcico, wollastonita, anortita,
escapolita o anfíbol cálcico.

Serpentinita. Roca ultramáfica compuesta sobre todo por minerales del grupo de la serpentina
(antigorita, crisotilo, y lizardita).
Skarn. Roca meta somática compuesta por silicatos de Ca-Fe-Mg-(Mn), a menudo con un bandeado
composicional, formada por la interacción de una roca carbonatada con un fluido silicatado.
Como determinamos el grado metamórfico
Tipos de facies
1. Facies de presión moderada y temperatura de media a alta. Incluye las facies de esquistos
verdes, anfibolitas y granulitas y engloba a la mayor parte de las rocas metamórficas más
comunes. Las zonas minerales de los Highlands escoceses pertenecen a las facies de
esquistos verdes y de anfibolitas; las rocas en facies granulita se forman a grados todavía
más altos.
2. Facies de grado muy bajo. Estas facies se definieron más tarde que las demás,
principalmente a través de los trabajos de Coombs en Nueva Zelanda (Coombs, 1961). Este
grupo incluye las facies de ceolitas y de prehnita-pumpellyita.
3. Facies de metamorfismo de contacto. A las presiones bajas y temperaturas relativamente
altas que caracterizan el metamorfismo de contacto se pueden desarrollar unas
asociaciones minerales distintivas, aunque existe bastante solapamiento entre algunas de
estas asociaciones y las correspondientes a las facies de temperaturas similares pero de
presiones más altas. Este grupo incluye, de temperaturas bajas a temperaturas altas, las
facies de corneanas de albita-epidota, corneanas anfibólicas, corneanas piroxénicas y
sanidinitas.
4. Facies de alta presión. Incluye las facies de esquistos azules y de eclogitas y representan
condiciones de presiones inusualmente altas que producen fases con una densidad alta. Las
rocas ígneas básicas metamorfizadas en condiciones de facies de esquistos azules obtienen
su color “azul” característico (normalmente más gris azulado que azul) de la presencia del
anfíbol sódico glaucofana (en lugar del anfíbol cálcico de color verde, mucho más común).
Del mismo modo, la facies de eclogitas se caracteriza en las metabasitas por la presencia de
clinopiroxeno sódico (onfacita), en lugar de los clinopiroxenos cálcicos normales a presiones
más bajas.
Genesis de las serpentinas

Alteración hidrotermal de rocas ultra básicas como dunitas y peridotitas, el mineral mas frecuente
por metamorfismo retrogrado es la lizardita

Por metamorfismo progrado de serpentinitas preexistentes el mas frecuente es la antigorita, aunque


a bajas temperaturas pueden aparecer mezclas de crisotilo y lizardita, bajo estas condiciones suelen
formarse los abestos

También puede formarse serpentina a partir de caliza dolomíticas en este caso no aparece asociada
a magnetita y suele presentarse como venas de crisotilo o remplazamiento de olivinos magnésicos

Nota: el crisotilo es el que se ve fibroso mientras que la antigorita y la lizardita se ven parecidas a
la biotita, aunque estas últimas dos las podemos diferenciar por que la lizardita se ve blanca y la
antigorita tiene tonalidades verdes
Estructuras, microestructuras, y fábrica

Las estructuras encontradas en las rocas metamórficas dependen de si ésta ha sufrido o no


deformación, y del tipo de estructuras de las rocas originales, ígneas o sedimentarias.

En el caso de no haber sufrido deformación (como sería el caso típico de las rocas de metamorfismo
de contacto), no suele existir orientación preferencial de los blastos minerales. La fábica sería por lo
tanto generalmente isótropa. En estos casos, se encuentran estructuras bandeadas, que pueden ser
relictas de estructuras sedimentarias antiguas (como superficies de estratificación), o desarrolladas
durante el propio proceso metamórfico (e.g. diferenciados metamórficos, migmatitas
estromáticas), estructuras masivas (e.g. granulitas y mármoles corneánicos, algunas serpentinitas)
y estructuras nodulosas (e.g. corneanas nodulosas o moteadas).

En el caso de que las rocas hayan sufrido deformación contemporánea con el metamorfismo (rocas
de metamorfismo regional), todos o parte de los blastos minerales presentan orientaciones
morfológicas (fábrica) y/o cristalográficas (fábrica cristalográfica) preferentes. Las estructuras y las
fábricas encontradas son en parte equivalentes. La estructura más común es la bandeada que,
además, presentará orientación preferente de los minerales paralelamente al bandeado.

Tanto en las rocas no deformadas como en las deformadas (aunque especialmente en estas últimas)
se pueden encontrar características estructurales penetrativas en grandes volúmenes de rocas,
independientemente de su estructura básica. Se dice que una característica es penetrativa cuando
se encuentra homogéneamente distribuida por toda la roca a una escala determinada, lo cual
supone que se repite en el espacio de manera constante. Normalmente, la escala es pequeña, esto
es microscópica o de muestra de mano. En las rocas metamórficas las estructuras penetrativas son
la foliación y la lineación, caracterizadas por la existencia de cualquier superficie o línea,
respectivamente, presente en la roca de forma penetrativa. Estas estructuras imprimen la facilidad
de rotura a favor de las mismas. En las rocas metamórficas deformadas, tanto las foliaciones como
las lineaciones son el resultado de la deformación sufrida ante la acción de esfuerzos dirigidos (i.e.,
esfuerzos no hidroestáticos).

Además de las estructruras anteriores, existen muchos tipos de microestructuras particulares sobre
las que no entraremos dada su complejidad. Si acaso, sólo mencionar las sombras de presión, que,
como su nombre indica, suponen la presencia de zonas donde los esfuerzos deformacionales han
sido menores debido a la acción "protectora" de porfidoblastos. Estas zonas se identifican
fácilmente al microscopio ya que no están tan deformadas como el resto de la roca y suelen
presentar texturas granoblásticas.

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