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CaríruLo VII

Urquiza en el gobierno. Retirada al Tone-


lero. Gobiernos de Pedro Pablo Seguí y
José María Paz. Batalla de Arroyo Grande.
Tratado de Villanueva. Campaña en el Es-
tado Oriental. Asesinato de Cipriano J. de
Urquiza. Gobierno provisional de Antonio
Crespo. Batalla de India Muerta. Nueva
campaña de Corrientes. Laguna Limpia.
Tratados de Alcaraz. Campaña de Vences.
1842-1847

En la madurez de los cuarenta años Justo J. de Urquiza


es nombrado gobernador de Entre Rios. Nació el 18 de octubre
de 1801 en las cercanías de Concepción del Uruguay, habiendo
transcurrido su vida hasta entonces dentro de un corto ámbito
semirrural, Sólo hubo de alejarse de allí con el objeto de
seguir en Buenos Aires dos años de estudios regulares en el
Real Colegio de San Carlos. Retorna a su tierra para dedicarse
por breve lapso a la procuración, mas su actividad peculiar
será la mercantil. Alcanza pronto la holgura económica y la
estima de los conciudadanos. Subteniente del cuerpo de cívicos
en 1823 por su calidad de comerciante, activo miembro de la
legislatura en 1826, se ve envuelto durante un lustro en aso-
nadas y conspiraciones. A partir de 1832 y por una década
consolida su prestigio al frente de la comandancia del segundo
departamento principal.
Tremendos peligros acechan ahora a Entre Ríos. Él lo
dice en la proclama inicial: “Nadie ha sido colocado al frente
de la provincia en circunstancias más difíciles. El mando
desnudo de cuanto halaga, sólo me presenta sus azares”. Al
no poderlo asumir personalmente, la Sala de Representantes
lo encarga con carácter provisional al comandante Vicente
Zapata.

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Por las costas del Paraná avanza el vencedor en Caaguasú; mente pronto comienzan
por las
las reuniones de los dispersos. Ya
del Uruguay, el general Rivera. El territorio queda en febrero hay una muy numerosa en los rincones de Guale-
expuesto al pillaje de ambos ejércitos. Correntinos y orientales guaychú. En marzo surgen “montoneras” por doquier. Los
rivalizan en las depredaciones. Los pobladores del interior se comandantes Mariano Páez, Romano Góngora, Abraham Ifrán
refugian en los montes; los de la periferia, en las islas. Sor- y Otros mantienen en continuo jaque a los opresores. El 15
prendido entre dos fuegos, Urquiza actúa con rapidez y pericia de marzo trescientos hombres, claman en la plaza de Villaguay
sumas, Desde el campamento en Arroyo Grande enfila hacia
por la vuelta de Urquiza.
el Sur en marchas paralelas al río Gualeguay. Lo persiguen
Dispuesto a concentrar fuerzas en el interior, parte Paz
de cerca fuerzas del coronel Núñez. El 28 de enero de 1842
hacia Gualeguay el 29 de marzo tras delegar el gobierno en
alcanza las costas del Paraná a la altura de la isla del Tonelero.
Seguí. Su marcha es penosa. Cerca de Nogoyá se le dispersan
Instala allá los restos del ejército salvado: dos mil hombre
s y los efectivos de los coroneles Velazco y Báez por obra de
doce mil caballos. Táctica eficaz, que merece hasta el elogio Crespín Velázquez y Mariano Páez. “El país, que es bastante
del propio general Paz.
despoblado —anota— donde no se manifestaba hostil abierta-
Batallones correntinos ocupan Paraná el 29 de enero. El mente, se mostraba notablemente esquivo”. Después de sufrir
gobernador delegadó Zapata se retira a Santa Fe. Presionada toda clase de penurias, casi en fuga, séguido de unánime resis-
por los vencedores,la legislatura nombra en su lugar a Pedro tencia, llega a Gualeguaychú. El 12 de abril resigna sus últimas
Pablo Seguí, candidato del gobernador Ferré, quien ha acampa- aspiraciones al entregar la dirección de la guerra a Rivera
do en Las Conchas. El 11 de febrero se le conceden facul- en virtud del tratado de Galarza.
do es extraordinarias para llevar la guerra contra Rosas. El El 3 de abril se sublevaba en Paraná la escolta del capitán
20 se decreta la libre admisi mtos-ríos Paraná y Uruguay Tomás Vásquez Novoa. Le secundan tropas de la guarnición,
de buques y mercancías extranjeras despachadas desde el exte- que encarcelan al gobernador Seguí. La capital queda libre de
rior. Un nuevo lema: “Patria, Libertad, Constitución”. enemigos. El presidente de la legislatura doctor Francisco Dio-
El general Paz se adelanta a posesionarse de Paraná antes nisio Alvarez asume el poder ejecutivo. Inmediatamente se
que Rivera. Los miembros de la legislatura acuden a cumpli- dirige a Urquiza: “Los entrerrianos suspiran por verlo al frente
mentarlo ostentando la divisa federal. Entre el gobernador de ellos y escuchar sus órdenes”. El día 16 el así llamado
Ferré y los otros dos aliados surgen graves desavenencias al anuncia su regreso y designa gobernador delegado a su her-
punto de provocar la renuncia de Seguí el 12 de marzo. El mano Cipriano José.
mismo día se lo reemplaza con el general Paz, el que nombra
ministros a los doctores Florencio del Rivero y Santiago Derqui. El 20 de mayo parte Justo J. de Urquiza desde el campa-
mento del Tonelero con un poderoso ejército, cuya caballada
Desconforme con el ascenso de Paz, Ferré se retira a Co- ha sido provista por el gobernador de Buenos Aires. El 29
rrientes con el grueso del ejército. “Quedé, pues, solo en la entra en Gualeguay a la cabeza de mil ochocientos hombres
Bajada a merced de los acontecimientos —recuerda aquél en
comandados en la vanguardia por el coronel Manuel Antonio
sus Memorias— sólo conseguí que se me entregasen los prisio-
Urdinarrain. El 10 de junio grupos de federales al mando de
neros de Caaguasú que había en los cuerpos, con los que se
Eduardo Villagra y Marcos Neyra ganan Gualeguaychú. El 30
formó un escuadrón, que se dijo mi escolta, y un pequeño
los coroneles Olivera e Ifrán atacan con suerte a Concordia,
batallón de negros, que estaba ya formado”. Líneas anteriores
mientras Velázquez y Páez disponen de seiscientos hombres
había reconocido hallarse entre gente, “...que si no era ene- entre Tala y Villaguay. El 21 de julio Neyra penetra en Con-
miga hasta entonces declarada, tampoco era amiga, y que cepción del Uruguay con ciento cincuenta de los suyos. Por
solo esperaba la ocasión propicia de abandonar una causa que
entonces la escuadrilla de Garibaldi, al servicio de los unitarios,
no conocían, y a un jefe que apenas habían visto”.
cañonea a la federal en el puerto de Paraná. Sube por el río,
Antes de retirarse, Urquiza hubo de impartir directivas pero el 15 de agosto es destrozada por el almirante Brown
de resistencia tenaz frente a los invasores. Acatadas celosa- en Costa Brava, cerca del Guayquiraró. En esos días el gobier-
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no delegado embarga los bienes de Francisco Soler y Juan el estado de las cajas. A todo aquel que se le justifique “... la
Camps, colaboradores del ejército invasor. El titular ordena introducción clandestina de una hebra de hilo que sea, se le
análoga medida contra Bernardo Cantin. clasificará como un ladrón y como tal será degollado...”.
A principios de junio el general Oribe, de regreso de una De regreso de Corrientes el 23 de febrero, grave responsa-
campaña victoriosa por las provincias del Norte, acampa en bilidad incumbe a Urquiza en adelante: el comando del ejér-
Las Conchas. Desde allí redacta El Federal Entre Riano, perió- cito de vanguardia de la Confederación Argentina. Ha de inter-
dico fundado en el mes de mayo. Con el propósito de reunír- narse en suelo extraño y emprender una campaña de gran
sele, Urquiza avanza en agosto hacia Yeruá. El 1? de sep- alcance. Durante dos años persigue a Fructuoso Rivera a
tiembre desde el cuartel general en Raíces convoca al servicio través de las cuchillas orientales. Revela dotes de estratega,
de las armas a todos los habitantes entre quince y cincuenta pericia y denuedo singulares. El 11 de marzo verifica el pasaje
años de edad. Sólo exceptúa a los miembros del clero y a del río Uruguay. Consistía su misión en colaborar con el
los que sigan la carrera de las letras. general Oribe, que ha puesto sitio a Montevideo. Instala su
Después de un ligero choque con Rivera en el Paso de la cuartel al Sur de Salto y avanza hacia el río Negro. Por
Laguna, Urquiza se repliega en busca de Oribe. Unidos y rápidos movimientos, en el mes de julio ya está en San José
con nueve mil hombres atacan el 6 de diciembre en Arroyo y en septiembre ha conseguido que Rivera pierda autoridad en
Grande. Intervienen a su lado los generales Angel Pacheco y todo el Sur de aquel río. A fines del año acampa sobre el
José María Flores y los coroneles Ignacio Oribe y Servando arroyo Casupá.
Gómez. Con Rivera están seis mil combatientes correntinos, Entre tanto, en Corrientes el gobernador Cabral es de-
orientales y santafecinos a las órdenes de los coroneles José puesto por los hermanos Joaquín y Juan Madariaga. Los entre-
Domingo Abalos y Juan Pablo López. El desenlace sobreviene rrianos que lo sostenían, son abatidos en Paso Obscuro y Laguna
a las pocas horas. Rivera sufre formidable desastre. El régimen Brava, Con sus restos ordena Urquiza al coronel José Miguel
federal queda afirmado en definitiva. Galán, que los comandaba, formar un ejército de reserva en
Urquiza realiza además una rápida incursión por Salto y Arroyo Grande. Como continuaran las deserciones encomienda
otra por Corrientes con el fin de respaldar al nuevo gobernador reorganizarlo al general uruguayo Eugenio Garzón.
Pedro Dionisio Cabral a principios de 1843, Al otro mes en A fines de diciembre tres mil correntinos encabezados
el campamento de Villanueva el capitán Manuel Basavilbaso y por dichos Madariaga invaden desde Pago Largo con un rápido
Martín Ramos, en representación de Entre Ríos y Teodoro Gau- movimiento hasta Arroyo Grande. Garzón se repliega para obli-
na y Domingo Latorre, en nombre de Corrientes, suscriben garlos a internarse y les ofrece batalla al pasar el Yeruá el 17
un tratado, que fija los límites entre ambas provincias en los de enero de 1844. Los correntinos cometen numerosos des-
ríos Guayquiraró y Mocoretá. Además, la de Corrientes abo- manes. Se suceden los desórdenes, pululan los desertores.
nará a Entre Ríos 320.000 cabezas de vacunos de marca y Grupos armados asaltan los pueblos.
20.000 yeguarizos. Por su parte Entre Ríos renuncia a indem- El gobernador delegado intenta dominar el caos por medio*
nizaciones similares exigidas en un convenio anterior firmado de un decreto de amnistía. Se hallaba en la villa de Nogoyá
en abril de 1839. Habrá libertad de tránsito y de comercio Cipriano J. de Urquiza con una pequeña escolta, preocupado
entre los dos territorios. Una fuerza entrerriana permanecerá en el restablecimiento de la disciplina, cuando el 26 de enero
en Misiones hasta tanto alcance jerarquía de provincia. Dos la banda de Pedro Martínez, (a) Rodas le da muerte en forma
diputados por el territorio misionero tendrán asiento en el alevosa. No resulta fácil determinar los móviles del crimen,
congreso correntino, ni señalar sus inspiradores. Todo induce a ligarlo con el des-
A su salida el gobernador dio severas órdenes en materia concierto generado por la invasión del ejército correntino, en
fiscal, las iniciales de una administración que se caracterizará el cual posteriormente es recibido el mismo Rodas.
por la rigidez en esa materia. Todo suplemento que se pida En la crítica emergencia, ausente el gobernador titular y
al comercio se pagará al contado. Mensualmente se publicará muerto el delegado, la legislatura nombra en este segundo

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etc.? Nadie, absolutamente
E
car ml ¡ Coso |
(1784-1879). Era un santafecino ave- para proceder a capar, marcar,
los habitantes propietarios en
sl Sea $ ntre Ríos, que pertenecieron a su suegro nadie; porque a más de hallarse
s lo están también los hijos y
o ero Francisco Antonio Candioti. Se había de- armas contra los salvajes unitario
no contarían con brazos para
romo rl A de paz, integrando después la legisla- deudos de éstos y sus familias
e la provincia. De manera que
pa Po ipó a en las deliberaciones que condujeron estos trabajos, porque no los tien
vec hosa para un corto número
el Pacto Federal, Estará al frente del gobierno la marcación vendría ser pro
sentimientos de patria, y preva-
a dos os años,
durante añ desde el 30 de enero de 1844 al 24 de marzo (quizá de malvados), que sin méritos se aprove charían
lidos de la ausencia de tantos bene
haciendas orejanas, cuya Ope-
de de sus fortunas, marcándoles sus
enero la Sala de Representantes confiere a Crespo una total ruina y eterna des-
facultades
por ser “.. importantísimo premu- ración infaliblemente les causaría
rdinarias
ale
mir y a ra o e
vierno de cuanto conduzc gracia para sus familias”. *
a a a obora el desorden existente:
E edición de a que tiendan a la Alda del Aquel comandante Calvo corr mon tuo sos se
buenas costas y
En =n- da un a de febrero decreta un “En los campos de rinconadas, campos abiertos sin abrigo y
enda s de los
Sino A os los individuos que abandonaron el han reunido las haci pos las vacas de éstos han
eno y Pe sl sa o el plazo de tres días. No habrían escasos de agua: en aquellos campariciones; de tal forma que
E Sl ] ntados, porque la intranquilidad persistió. hecho dos, tres y hasta cuat ro
crías todo orejano. Hay hacen-
qee e motivos de reuniones. Se prohí- hay toros de cuenta y vacas cOn
vaca en sus respectivos campos,
de Gigio dados que no tienen una sola
do tener tanta fuerza O golpe
Le aa pu Ss ambulantes en la campaña, fuera
Sie E oí espondiente guía y otros que jamás habían creí
a todos los artículos de nudos de todo derecho a los
nducidos desde los puertos al interior. Se impone de ganado; aquéllos se ven des porque dicen están en sus
os
Acpetnadió EEori
además la obligat ¿ a orejanos y éstos se creen dueñ
de la licencia para dirigirse de un
cuya acci ón tien en”. El cuero es siempre, por cierto,
campos
En 21 de junio de 1844 se
la base principal de todo tráfico.
a
LO $ cd se admite en todos los contratos la seiscientos Cueros vacunos con
libra de derechos la salida de
a: pl ! oliviana. El 6 de mayo por un decreto de cual es se adquirirán ornamentos
E E 1elve levantar un padrón de marcas del ganado destino a Barcelona, con los
ná.
as ps del departamento Gualeguay se aprontan de culto para la iglesia de Para
El ejército invasor corr enti no había comenzado a retirarse
a s marcaciones con una rigidez militar. Mas no pín Velázquez y Lucas Mo-
O Pr los trabajos por fundados motivos. Así el 12 de febrero. Fuerzas de Cres expulsarlo de la provincia
a
reno lo hostilizan de continuo hast os Aires coopera con el
de Buen
tamento Uruguay no puedo Mora se Ñ a Seo el día nueve. El gobierno
cabo ede a Edepa. tos hombres al mando del
sepelio estado de despoblamiento, sino que e dueños envío de una división de seiscien o está radicada en Las
a pesa por lo suyo; unos en el ejército, otros coronel Hilario Lagos. Desde marz costas paranaenses.
e las
qispersos y ot a A Conchas. Impone autoridad sobr
o no existen o casi están
Entre tanto, ¿qué era de Just o J. de Urquiza? Dos días
Sh 2. mes presenta el propi ,
- mano, el 24 de enero de 1844
pe nr de el cuartel general en Chaizo lA de antes del asesinato de su her Enc omi end a después
Sauc e.
ju ad E ia derrota a Rivera en Puntas del
Tres Cuartas partes de los hacendados de sus subalternos. Pasa el in-
operaciones ofensivas a varios
e paros B e ha sacrificándose en campaña, expuestos
vierno en Santa Lucía. Ante la oche noticia del sitio puesto por
de nuestra amuda patria,
A a. en cuya defensa
efensa hon hanparocido
parecidolla
infini- Rivera a la villa de Melo, salv a nta leguas en siete días
pueblo del saqueo. Traslada
a Ear se haría cargo de repuntar y de marchas forzadas librando al
ie Le puntos. A fines del año se
o s los individuos de este ejército y del de reserv luego su campamento a diversos
carrio en que están los ganados, hasta parar los dodsas ubica en el Yi.
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A principios de 1845 los unitarios intentan atraer a Ur-
quiza. Desde luego que no lo consiguen. Por el contrario rechazar al bando únitario y a la intervención europea. Es
el presunto rebelde se muestra implacable con enemigos y este peligro, precisamente, el que impulsa al electo a aceptar
desertores. En los años 1843 y 1844 el gobierno embarga las el riesgoso encargo, pese a sus deseos de volver a la vida
estancias de Barú, Céspedes, Santos, Cabral, Cáceres,
privada.
Busta-
mante y las casas de Isidro Robledo y José Laracochea de En carta al gobernador delegado de 27 de diciembre Ur-
Gualeguay, continuando retenidas las propiedades incautadas quiza agradece la colaboración prestada por muchos dignos
por orden de Echagúe. funcionarios: el redactor de El Federal Entre Riano José Ga-
El 25 de marzo de 1845 Justo J. de Urquiza obtiene al rrido, el coronel José Miguel Galán, los comandantes Mariano
fin la ansiada victoria sobre Rivera en India Muerta. Expide Loza, Francisco Arce, Francisco Candioti, Pedro Reynoso y
en seguida un indulto general. Muchos de los oficiales venci- Basaldúa, los mayores Casto Domínguez y Mariano Páez. Un
dos vienen a sus filas. Su prestigio raya a gran altura en día antes anuncia a la legislatura su marcha hacia la provincia
ambas orillas del Plata. Demora seis meses en el campamento de Corrientes, donde el general José María Paz, llamado por el
sobre el arroyo Alférez. Ocasión propicia para que los unitarios gobernador Joaquín Madariaga ha preparado un formidable
vuelvan sobre sus planes de seducción. ejército en el campamento de Villanueva. Es su propósito des-
El nuevo conflicto suscitado entre el gobierno de Buenos truir ese baluarte opositor, cuyos dirigentes se han aliado a
Aires y los de Francia e Inglaterra, al implantarse el bloqueo la república del Paraguay y están en contacto con los inter-
en el Río de la Plata en el mes de agosto, obliga a adoptar ventores extranjeros.
medidas de precaución en los puertos y costas entrerrianas. El 2 de enero de 1846 parte un ejército de cuatro mil
A pesar de ello, el comandante de Gualeguaychú Eduardo Vi- ochocientos combatientes desde el paso de Yuquerí Grande.
llagra se deja sorprender el 20 de septiembre por fuerzas de El cuerpo principal va al mando de Garzón y las divisiones a
desembarco de la escuadrilla de Garibaldi. El pueblo es sa- las órdenes de los coroneles Hilario Lagos y Servando Gómez.
queado impunemente. Una semana después el marino griego Casi sin ser sentido por el enemigo, penetra en la provincia
Jorge Cardassy se apodera de ocho embarcaciones mercantes vecina. Del 21 al 23, cruza el río Corrientes, favorecido por
en el puerto de Paraná. Antes de los dos meses, el 20 de ineficaces disposiciones del general Juan Madariaga, quien es
noviembre, la escuadra anglo-francesa irrumpe por la fuerza sorprendido el 4 de febrero en Laguna Limpia y apresado.
en el paso de Vuelta de Obligado, defendido por el general Perseguido de cerca por Urquiza, Paz apresura sus marchas
Lucio Mansilla, entonces al servicio de Rosas. Por primera vez hacia San Miguel. Se sitúa en la cañada de Ibahai, sitio
buques a vapor entran al río Paraná llegando hasta Paraguay. fragoso bordeado por esteros de una cuadra de ancho. Obstacu-
Los invasores aspiran a lograr el libre tránsito fluvial a los lizan su acceso diez mil estacones puestos por los defensores.
fines del buen éxito de sus actividades mercantiles. Pretenden Urquiza comprueba la imposibilidad de desplegar allí la caba-
el retiro del ejército argentino de la Repúblico Oriental y el llería. Retrocede a las orillas del Paraná. El 3 de marzo pisa
levantamiento del bloqueo decretado por Rosas a los puertos ya tierra entrerriana. “Se había retirado a la luz del día, sin
uruguayos. dejarse sentir —comentará el oponente años más tarde—, y en
El 15 de diciembre finaliza el primer período gubernativo varios días de persecución no pude darle alcance, pisándole
de Urquiza. La legislatura considera la gravedad de las cir- los talones, ni tomarle un «prisionero, ni un caballo, tal era el
cunstancias. Por el voto unánime de sus miembros se lo reelige orden y la rapidez de sus movimientos”.
por el período, que va de 1846 a 1850, pues, según el presidente Aunque pretexta que se retira por la proximidad de la
Camilo Idoate se precisa “...un genio que por sus aptitudes estación lluviosa, hay sin duda, alguna otra causa que le im-
y virtud” encamine a la provincia a la prosperidad anhelada: pulsa a tan inesperada actitud. Madura un viraje fundamental,
Se Te acuerda un voto de gracias. Los representantes le ofren- convencido de las ventajas de concluir una guerra entre her-
dan sus personas, haberes y fama, si así pueden contribuir a manos. Dispensa confianza al conspicuo prisionero, mostrán-
dole las felices proyecciones de un convenio equitativo. En-
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cuentra al punto asentimiento. Pronto cunde el rumor invero- Busca Urquiza quitar de lado al general Paz. Al corriente
símil. Que Urquiza quería la paz. Decae el ánimo bélico de de tal propósito, éste maniobra con el fin de destituir al gober-
los invadidos, El gobernador Madariaga queda muy agrade- nador Madariaga, inclinado al avenimiento. Descubierta la
cido por el noble rasgo de conservarle la vida a su hermano. intriga, el vencedor de Caaguasú experimenta rotundo revés
Urquiza propone sencillas bases: Corrientes delegaría en Rosas exiliándose al Paraguay. Remata el desgrane del enemigo el
el mantenimiento de las relaciones exteriores; expulsaría al pedido de indulto del general Juan Pablo López y de los pai-
general Paz y revocaría alianzas con países enemigos de la sanos que lo siguen.
Confederación Argentina. En cambio, sería garantizada su Cerca de mes y medio después de iniciada la corresponden-
actual posición, sus propiedades y derechos. cia con el gobernador de Corrientes, Urquiza informa a Rosas
Aunque ofrezca la paz, no deja de tomar sus precaucio- sobre la misma. El ministro del Restaurador doctor Felipe
nes. Instalado en el paraje céntrico de Calá (hoy villa Roca- Arana no juzga prudentes los pasos dados y exige garantías
mora, distrito Moscas del departamento Uruguay), convoca al más positivas sobre la adhesión de Madariaga, la entrega de
servicio militar a todos los habitantes de doce a cincuenta los generales Paz, Madariaga y López y el reintegro del poder
años de edad. Permite realizar marcaciones de ganado entre a don Pedro Dionisio Cabral.
el 19 de abril y el 30 de junio, aprovechando el licenciamiento La postura pacifista del gobernador de Entre Ríos des-
del ejército. Fortifica la capital ante posibles ataques por vía pierta esperanzas entre los anti-rosistas esparcidos en el exte-
fluvial. En febrero fuerzas de marinería inglesa asaltan estan- rior. Los dos partidos uruguayos lo aceptarían como mediador
cias en Ibicuy; en marzo buques extranjeros protegen un de- en sus querellas. Los ministros extranjeros avanzan más: sugie-
sembarco de Cardassy en Paraná, el que es repelido con ren todo un plan secesionista encubierto bajo una modesta
buen éxito. solicitud de tregua. Formaríase una nueva república con las
Desde el campamento de Calá, Urquiza rige la provincia provincias de Corrientes y Entre Ríos, de la cual Urquiza sería
por el órgano del gobernador delegado. Con Crespo y con el jefe. De uno y otro asunto se entera a Rosas oportunamente.
sacerdote Francisco Dionisio Alvarez —párroco de la iglesia Distinto temperamento sigue Urquiza en las cuestiones
de Paraná y a la vez presidente de la legislatura— mantiene con la provincia vecina. Las exigencias del ministro Arana
interesante correspondencia. Contempla los diversos proble- quedan en el papel. O pierden actualidad, o las desdeña sim-
mas administrativos, imparte órdenes e indica el tenor de los plemente. La huida del general Paz vuelve superflua a una
decretos que se expedirán, ya con su firma, o con la del susti- de ellas. De la relativa al general Madariaga hace caso omiso.
tuto. En salvaguardia de los intereses fiscales tiende a favo- El prisionero de Laguna Limpia regresa a su terruño el 23 de
recer a los hijos del país y grava con una fuerte patente a abril. Su hermano Joaquín mantiene la alianza con Paraguay.
los negociantes extranjeros, mientras dura el estado de guerra. Piensa prorrogarla, por lo demás. En cuanto al general Juan
Sin embargo, no alienta xenofobias, En paridad de aptitudes, Pablo López sugiere Urquiza un indulto aceptable,
prefiere al nativo, pero si el extranjero aporta saber, técnica Tanto el general Juan Madariaga, como su hermano el
o arte útil lo acoge entusiasta. gobernador incitan ahora a rebelarse al gobernador de Entre
Crespo objeta la universalidad del reclutamiento. Sabida Ríos. Presentan bases de neto corte revolucionario: las dos
la amenaza existente, exceptúa Urquiza a las fuerzas de la provincias se separariían de la Confederación hasta que advi-
guarnición paranaense, pero indica el envio al campamento de niera una época propicia a la convocatoria de un congreso
varios jóvenes, a quienes se instruirá en el arte militar. Tam-- constituyente. El gobernador de Entre Ríos sería el encargado
bién le aclara que el corto plazo fijado para las marcaciones de las relaciones exteriores.
responde a la necesidad de cumplir rápidamente la tarea y Los dirigentes correntinos ponen sobre el tapete el proble-
volver en seguida a las filas. Es siempre inflexible en materia ma de la libre navegación de los ríos con las consiguientes
de disciplina e imperturbable en su rigor respecto al ejercicio ventajas mercantiles. Era entonces un requisito sine gua non
de las funciones públicas. en la existencia independiente de la república del Paraguay y
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para la prosperidad futura de las provincias ribereñas. Arbi- postas, el poblamiento de las fronteras y la salida de un correo
trarias medidas del gobernante porteño provocaban perma- mensual entre las capitales de las dos provincias.
nentes quejas. En represalia por el bloqueo de las escuadras Urquiza comunica el feliz suceso a Rosas, al ministro Arana,
anglofrancesas se ha prohibido el tráfico directo entre los puer- a los gobernadores de las provincias y a amigos particulares.
tos del litoral y los de Montevideo. El delegado Crespo se En todas partes se recibe la noticia con gran júbilo, salvo en
ingenia, en cambio, en permitirlo, No averigua la procedencia Buenos Aires. Rosas y Arana desconfían desde el primer mo-
de los buques al principio. Más tarde debe requerir fianza mento de los móviles aducidos. En la intimidad estallan en
para las mercaderías de trasbordo. improperios contra el entrerriano. Este procura apaciguarlos
Aquella prerrogativa la considera, entre otros, el periodista por intermedio del coronel José Miguel Galán, quien les aclara
Florencio Varela en Comercio del Plata, diario que aparece que el tratado secreto carecía de valor. Era una simple garantía
en Montevideo. Afirma que la ciudad porteña nada pierde con que el gobernador Madariaga precisaba ofrecer a los unitarios,
implantarla. Invita a unirse a Entre Ríos y a Corrientes en su El 26 de agosto Comercio del Plata insta a desacatar la
defensa. En el artículo de redacción de 23 de junio nombra orden del cierre de los puertos. “La posición del general Ur-
a Urquiza por primera vez, como único jefe posible de tal quiza —sostiene— nunca ha sido más seria. Sus resoluciones
liga. “De todas esas provincias —explica— el Entre Ríos es jamás han tenido mayor alcance que la que hoy adopte. Ya no
la que está llamada a resolver perentoriamente la cuestión del es solo el Entre Ríos; son todas las demás provincias las que
derecho, respecto del extranjero, porque es la que domina exac- se interesan, lo mismo que él en la continuación de un co-
tamente lo mismo que Buenos Aires, las bocas de aquel río mercio legítimo y provechoso. Todo el interés público, toda
y la parte baja de su curso navegable”. la razón, todo el derecho están de parte de Urquiza”.
Un enviado de Urquiza logra de los ministros interventores Incitación más vibrante todavía proviene pronto de un
que las naves bloqueadoras no ataquen los puertos entrerrianos, poeta. El 19 de septiembre Esteban Echeverría lo divisa desde
ni los buques de esa procedencia. El vapor “Alecto” sale hacia ya como *.. .primer grande hombre de la República Argentina”,
el Uruguay con el encargo de hacer efectiva la garantía. ¿Se A su juicio, él puede consumar el programa del recién apare-
trataría de un sondeo de parte del gobernante entrerriano? cido Dogma Socialista. Deben terminar las guerras civiles y
La entrevista ha quedado en el misterio. Un mes atrás —el 25 confraternizar todos los argentinos por el afianzamiento del
de Mayo— buques anglofranceses empavesados rindieron home- dogma social de Mayo. Enuncia un vasto programa: organiza-
naje a la fecha patria frente al puerto de Paraná. ción nacional, autonomía de las provincias, gobierno central
Urquiza y Joaquín Madariaga se entrevistan en el punto para dirigir los negocios generales, garantías sociales, igualdad
de Alcaraz, asiento antaño de un piquete militar, hoy en el de deberes y derechos, vigencia del régimen municipal, forma-
departamento La Paz. El mismo día 15 de agosto de 1846 ción de un partido nacional “...que abarque todos los intere-
se suscriben dos tratados: uno público, otro secreto. Por el ses y todas las opiniones legítimas; y que represente la religión
primero habría un olvido absoluto de la discordia pasada; social de la patria, simbolizada por la bandera de Mayo”.
Corrientes observaría el Pacto Federal y autorizaría al goberna- Otro poeta, Hilario Ascasubi, sirve a idénticas finalidades
dor de Buenos Aires para el mantenimiento de las relaciones subversivas con los versos pegadizos de Paulino Lucero, opúsculo
exteriores. Mas el tratado secreto anulaba dichos compromisos aparecido en Montevideo en el mes de noviembre. De su
pues, la provincia hasta ahora disidente mantendría la alianza lado, el general Echagiie destaca a Rosas el sospechoso trasfondo
con Paraguay y no auxiliaría a la Confederación en sus luchas del convenio de Alcaraz. En Santa Fe gritan públicamente
contra los ministros extranjeros, ni contra los unitarios de la traición de Urquiza. Interrúmpense las comunicaciones entre
Montevideo. Tampoco entregaría presos o criminales, sino a las dos provincias.
los que incurrieran en delito después de ratificado el convenio. Indice de un prestigio día a día acrecentado lo tenemos,
En fin, se prevé la convocatoria de un congreso constituyente. en cambio, en la solicitud del ministro plenipotenciario de Boli-
Fuera del texto ambos gobernadores deciden la mejora de las via Eusebio Guilarte, quien, rechazado por Rosas, aspira a

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entablar vínculos amistosos y económicos entre su país y Entre Los correntinos alegan que se los humilla; Urquiza, que
Ríos. En la respuesta afirmativa de Urquiza se evidencia ya el sus exigencias son injustas. Sin embargo, recomienda a Rosas
influjo indudable de la reciente lectura del Dogma Socialista. la conducta de los Madariaga. El 17 de febrero el ministro
Señálale el 21 de noviembre de 1846: “Hallándose esta provincia Valdés ofrece abonar las sumas requeridas, a medida que el
en perfecta tranquilidad por consecuencia de haber pululado tesoro provincial lo permita, Pero Galán no acepta la enmienda,
en ella el supremo bien de la paz, pueden venir a ejercer su obedeciendo a órdenes de Arana. El 10 de marzo declara
industria los hombres pacíficos y honrados, bajo la seguridad concluida su misión. El ministro bonaerense dispone el 3 de
de que serán respetados por este gobierno”, abril, que comiencen las hostilidades. No se iniciarán enton-
El coronel Galán demora más de tres meses en Buenos Aires. ces, sin embargo, so pretexto de la seca que atraviesa la
Durante ese lapso acrecen en los círculos porteños y santafecinos provincia.
los decires desfavorables a Urquiza. Este reclama con energía La ruptura de los aliados recientes alerta a cuantos cifra-
repetidas veces ante Rosas. Le han de confortar, sin duda, los ron esperanzas en un plan subversivo de envergadura. Pero no
halagos que recibe desde el exterior. Oficialmente se le solicita los descorazona del todo. Siguen pendientes de los pasos del
desde Montevideo su mediación en el conflicto oriental. Reac- gran caudillo del Litoral. Discurren los exiliados en Brasil
tualizase también el rumor en torno a un plan secesionista. y en Uruguay en sus epístolas acerca de las probabilidades de
Hasta Rivera envía emisarios al campamento de Calá. Muchas una acogida a sus insinuaciones. Formulan halagiieñas conje-
familias de proscriptos desean vivir en una provincia donde turas y no cejan en sus tentativas seductoras. Los emisarios
reina un clima de tolerancia. se renuevan. Urquiza se les aparece como “un astro de espe-
ranza en medio de la tormenta”, según palabras del enviado
El gobernador Madariaga apremia por la ratificación de de Paraguay en Brasil Juan Andrés Gelly.
los tratados. Había dispuesto Urquiza canjearlos por intermedio Tales maniobras son ya un secreto a voces. Hasta La Gaceta
del doctor Alvarez, cuando advertido por Crespo de la falta Mercantil, el órgano de Rosas, las denuncia. En cuanto a las
de autorización del encargado de las relaciones exteriores, reca- de Echagiie las remata Urquiza en la “carta de larga historia”.
pacita. Despacha en seguida a Buenos Aires a José Ruperto El 26 de mayo de 1847 reseña al gobernador de Buenos Aires
Pérez con el encargo de disipar el malentendido. Mas, pese a todas las provocaciones y desaires recibidos de su antiguo
la sagacidad lucida por el comisionado, Rosas rechaza los con- amigo. Quince documentos anexos confirman los cargos. Aun-
venios. Arana remite un nuevo proyecto reducido a un mero
que Rosas haya desconfiado antes, puede al presente contar con
arréglo de paz. Habrá que restituir propiedades confiscadas y él para la defensa del honor nacional,
abonar indemnizaciones a ciudadanos federales. Desde el cuartel general en Gualeguaychú y por nota del
Urquiza acepta los reparos formulados. El brusco viraje 22 de junio traspasa al encargado de las relaciones exteriores
habrá sido fruto, quizás, de maduras reflexiones en torno a la la correspondencia mantenida con los jefes correntinos. Quiere
precariedad de recursos necesarios a la puesta en obra de un dilucidar bien su conducta. Ha creído en la sinceridad de los
plan subversivo. Tiene presente el conflicto con las naciones Madariaga y reconoce los obstáculos presentados en la emer-
europeas. Por el momento, urge conservar la paz. No es de gencia. También el gobernador de Corrientes remite sus pape-
extrañar, por tanto, que sacrifique hasta su susceptibilidad les. El coronel Galán, a su vez obtiene al fin el pasaporte
personal. bastante postergado, luego del regreso de un chasque a quien
Espinosa misión incumbe ahora al coronel Galán. El 19 Urquiza descubriera las trazas urdidas para demorar una gue-
de enero de 1847 presenta plenipotencias ante el gobierno de rra ya inevitable.
Corrientes. Debe lograr un nuevo convenio según las bases El gobernador Madariaga convoca a las armas el 28 de
propuestas por Arana. De entrada el ministro Gregorio Valdez julio. El de Entre Ríos se ocupa entre tanto en el progreso
rechaza los dos artículos relativos al pago de indemnizaciones. de la comunidad. Se delinea el pueblo de Diamante y se
Se produce una impasse. abre un canal en los riachos de Victoria. En este punto fun»

168 169
ciona con apoyo oficial un seminario para formar sacerdotes Desde el 15 de noviembre el ejército federal domina en
católicos. De acuerdo con el requerimiento del canciller Arana, los departamentos de Esquina, San Roque y Goya. Como buen
el 13 de septiembre Urquiza expide un ultimátum a Joaquín conocedor del terreno, Madariaga lo conduce por sucesivos re-
Madariaga. Después de caracterizar el proyecto de convenio pliegues a un sitio inaccesible. Es el potrero de Vences bordea-
presentado por el coronel Galán, insta a aceptarlo y a presidir do de esteros y malezales. Allá el correntino experimenta tre-
“,..un pronunciamiento franco de la provincia de Corrientes mendo descalabro, Acompañaron a Urquiza en la batalla del
por la causa federal”. 27 de noviembre el general Garzón y los coroneles Apolinario
El 7 de octubre se subleva el coronel Nicanor Cáceres, Almada, Miguel G. Galarza, Manuel A. Palavecino, Crespín
Velásquez, Antonio Borda, Nicanor Cáceres y Benjamín Vi-
oficial subalterno del ejérc'to de Madariaga. Se dirige a Entre
rasoro. Los tres últimos pertenecen a la provincia invadida.
Ríos por el Mocoretá, donde lo protegen por orden de Urquiza
los coroneles Velásquez, Tacuabé y Páez. El suceso precipita Sus batallones actúan con la intrepidez y la crueldad propias
la postergada campaña ofensiva. de las guerras civiles. Mueren durante la lucha o en las per-
secuciones los coroneles Carlos Paz, Manuel Saavedra y Cesáreo
Dos semanas más tarde Comercio del Plata culmina la Montenegro y el teniente coronel Castor de León.
serie de notas sobre cuestiones económicas del Litoral con un Uno de los participantes, el coronel Pedro J. Martínez, es-
tajante paralelo: “Hablamos de Rosas, combatiéndolo, porque cribirá en 1869 al diario La Tribuna de Buenos Aires: “Todos
él es quien representa y sostiene el principio de las restriccio- los prisioneros, que éramos más de cuatro mil, fuimos respe-
nes, del aislamiento, de la dependencia comercial de las pro- tados y algunos a despecho de exigencias de jefes que pedían
vincias. Hablamos también de Urquiza, porque es el jefe de se nos fusilase. En cuanto al coronel Paz murió en la perse-
una de esas provincias, de aquella precisamente que, por su cución postrera. Al coronel Saavedra lo ultimó por encono
colocación entre los dos ríos interiores, en la embocadura de partícular el conductor del indulto concedido por Urquiza,
uno y otro, está llamada a representar el primer papel en El comandante León, famoso por sus excesos y arbitrariedades,
toda cuestión de navegación y de comercio en esos ríos; por- resulta víctima de los subalternos en la huida al Brasil una
que, siendo la que más inmediatamente sufre perjuicios del semana más tarde”. Trámites diversos comprobarán después
sistema de Rosas, es también la que, por causas que todos co- la prestación de servicios y la supervivencia de muchos pri-
nocen, se encuentra hoy con más medios de hacer respetar los sioneros de Vences en Entre Ríos, Cerca de dos mil se en-
derechos de que el dictador quiere privar a las provincias, Por tregaron al nuevo gobernador de Corrientes Miguel Virasoro.
eso hablamos de Rosas y de Urquiza; sus personas mo nos
ocupan, sino como símbolo de las cosas, de los sistemas”. Esta victorla consolida el prestigio militar de Justo J. de
Urquiza. Es ahora sin disputa la primera espada de la Con-
Madariaga responde al ultimátum el 20 de octubre. Acu- federación Argentina. Sabe de homenajes numerosos, oficiales
sa al ex aliado de faltar a los compromisos contraídos. El 24 y particulares, Se le dedican h'mnos y canciones. Se le res- *
Urquiza está en las puntas del rio Feliciano al frente de seis peta y se le admira.
mil hombres. Lo secundan los batallones correntinos del pros-
cripto coronel Benjamín Virasoro. Aunque desde Buenos Ai-
res se le remiten armamentos, las marchas se tornan lentas Agenda de Lecturas
por el retardo de la escuadrilla del teniente coronel Nicolás
Jorge, la que debe custodiar las costas del Paraná. A más de las obras citadas de Martínez y Ru'z Moreno,
Pese a las acusaciones del enemigo, Urquiza se conduce se tratan los anteriores temas en nuestros libros: Los tratados
con serenidad. Ya en camino, reintegra los bienes al emigrado de Alcaraz. Buenos Aires, Instituto de Historia Argentina Dr.
Juan Manuel Aldao: “...siendo argentino y desgraciado Emilio Ravignani, 1955 y Urquiza y su tiempo, cit., capítulos
—asienta— no pregunto de qué pelo es...”. La generosidad Vila X. Sobre las consecuencias de Caaguasú, ver las Memo-
de la frase repercute hondamente, rias de Paz, cit., tomo III y sobre los sucesos militares: Ama-

170 17
supuestas matan-
ranto A. Abeledo, “El general Urquiza y las
en Renacimiento.
zas de Pago Largo, India Muerta y Vences”, , en:
Buenos Aires, 1911, año 11, n27. La carta de Echeverría
Buenos
Alberto Palcos, Echeverría y la democracia argentina.
Aires, El Ateneo, 1941. También sobre la actividad política y
Bue-
militar: Pablo Santos Muñoz, Años de Lucha (1841-1845).Arroyo
nos Aires, 1973 y Humberto María Pezzar ini, Batall a de
Grande. Santa Fe, 1976. CarfruLo IX

Entre Ríos, la provincia de Urquiza. Ga-


nadería y agricultura. Comercio. Reformas
administrativas. Educación pública. Revo-
lución del 19 de Mayo de 1851. Tratados
de alianza. Levantamiento del sitio de Mon-
tevideo. Batalla de Caseros. Acuerdo de
San Nicolás. Secesión de Buenos Aires.
1848-1852

entes, Urquiza se
Concluida la segunda campaña de Corri
el camp amen to de Calá. Sólo aho-
instala por buen tiempo en
ivame nte el gobie rno de la provincia. Pero
ra va a ejercer efect ndo el de-
sigue actua
no se allega todavía a la capital, donde sepamos,
país no regist ra, que
legado Crespo. La historia del la que co-
benéf ica y compl eta, como
hegemonía más larga, a años ningún
noció Entre Ríos bajo su égida. Durante treint
a a su estric to contr alor, o a
aspecto de la vida cotidiana escap primi tivo del
Pract ica el ideal crist iano
su sagaz previsión. proc lama do
época
“gobierno paternal”, un desideratum de la
a. Partiendo
en 1820 por los jefes federales triunfantes en Ceped dirigir sus
acida d de las masas para
del supuesto de la incap sus hijos.
por
destinos, vela por los gobernados como un padre forma una
El pueblo confía en su celo y talento. Entre Ríosrla “provin-
gran familia. No incur rimos en hipér bole al llama
cia de Urquiza”.
como déspota re-
Caeríamos en error si lo divisáramos su es-
trógrado. Por el contrario, consciente de las lagunas de ones
cuyas opini
caso bagaje intelectual, busca asesores eficaces,
esa todo cuant o contribuya a la
escucha con respeto. Le inter gobierno: “Pro-
Bosqueja un neto plan de
prosperidad general,
173
greso material e intelectual, protección pronunciada a nuestra El viajero inglés William Mac Cann nos presenta un es-
santa religión, protección dec'dida al comercio, fuente inago- pectáculo común en 1847: “Al tercer día de viaje desde la ciu-
table de riqueza y adopción de todas aquellas medidas ten- dad de Paraná atravesamos una extensión de campo despo-
dientes a mejorar y engrandecer por todos los medios posibles blado, de unas cuarenta a cincuenta millas, donde pastaban
a la heroica provincia cuya dirección, actualidad y porvenir, tropas inmensas de vacas y caballos chúcaros. Una manada
ella misma ha querido confiarme”, según se explaya con el de caballos salvajes produce la más singular impresión: la es-
delegado eclesiástico José Leonardo Acevedo. beltez de sus formas, la soltura de sus movimientos, la rapi-
Veamos sus realizaciones. Comienza por imponer una dez fogosa de su carrera, las crines largas y flotantes, las colas
autoridad rigurosa en las diversas jerarquías. Exige máxima al viento, formaban un cuadro lleno de belleza y gracia. Cuan-
dedicación y honradez en los funcionarios y formal acatamien- do pasaron en masa, galopando atropelladamente, con sus cri-
to a sus órdenes, aunque admite objecciones sinceras y cons- nes y copetes agitándose a la luz de la luna mientras hacían
tructivas. En materia de rentas instaura un contralor prolijo. temblar el suelo con sus cascos, produjeron en mí una impre-
Mensualmente se publica el estado de las cajas, quedando sión romántica, rayana en lo sublime”.
constancia escrita de todo su movimiento. El fondo de Hacien- En las costas del Uruguay y sobre el Gualeguay residían
da correspond'ente a la época de Urquiza es uno de los más varios ingleses que Mac Cann visita en su gira. Al Sur de
copiosos del Archivo Histórico de Entre Rios en el presente. Concordia hay una “espléndida estancia” de la sociedad Camp-
Gracias a la severidad observada en los gastos públicos bell, Wright y Parlane, de Manchester, con puerto propio des-
desaparece el deficit del presupuesto. El ministro tesorero de el cual se despacha directamente a Europa la lana producida.
Vicente del Castillo informa al gobernador el 26 de mayo de Mr. Alexander posee cuatro leguas de campo cerca de Con-
1847: “El Estado cuenta hoy en todas las cajas de la Provincia cepción del Uruguay y la familia Brittain doscientas, incluso
con una existencia efectiva de ciento treinta mil pesos, des- un buen puerto en la zona de Gualeguay, “la mayor extensión
pués de pagados todos los gastos de la Provincia y este es so- de tierra perteneciente a un súbdito británico en esta parte
lamente el resultado de los ingresos de poco más de un año, del mundo”. El número de sus ganados lo calcula en doscientas
Hace dieciocho años que administro las rentas generales del cincuenta mil cabezas. La estancia de Mateo García de Zúñiga,
Estado y veinticinco hace que soy funcionario del Estado en de cien leguas, contaría cien mil vacunos y cincuenta mil ca-
el mismo ramo y le aseguro que en ninguno de ellos he visto ballos y yeguas; la vecina, de Isaías de Elía, ochenta leguas.
el admirable progreso de las rentas como en este tiempo en que Hacia 1850 hay en toda la provincia cuatro millones de
Vuestra Excelencia se ha contraído al arreglo de ellas”, vacunos, un millón ochocientos mil de caballar y dos millones
Este probo funcionario recibe austero homenaje. Un de- de lanares. Los últimos, refinados con ovejas South Downs, con
creto de 15 de enero de 1847 considera que ha merecido “Bien carneros sajones, Negretti y con merinos. Sin contar la ha-
de la Patria”, honor sólo acordado en otras ocasiones al ejér- cienda cerril. Abundan los medianos propietarios. El Registro
cito victorioso. General de Marcas denuncia en aquel mismo año la existencia
Atinadas medidas tienden a preservar la ganadería, prin- de 547 poseedores de menos de quinientos vacunos en el de-
cipal ocupación de los habitantes. Las guerras la dañan al partamento Paraná; 613, en el de Victoria; 167, en el de Vi-
privarla de brazos para las tarcas rurales y por las depreda- llaguay; 113, en el de Diamante; 61, en el de Concordia.
ciones de los ejércitos invasores de Lavalle, Paz y Rivera. Pro- Prolongadas sequías dañan el agro entre los años 1844 a
hibidas las hierras en 1844, sobrevino una gran confusión en 1849. Para proveer de agua a los animales ordena Urquiza el
los planteles por la mezcla de los animales, Se autoriza en- 27 de septiembre de 1848 construir “tajamares” en los campos
tonces a matar los orejanos, si bien únicamente para el consu- desprovistos de aguadas naturales permanentes. Son éstos te-
mo de cada familia. Permitidas las marcaciones en 1846, la rraplenes, que atraviesan los arroyos y cañadas secundarias,
tarea no resulta fácil, porque gran parte de la hacienda se ha Configuran un embalse, cuyo cubaje aumentan las aguas de
vuelto cerril. lluvia. Reviste la tarea carácter obligatorio de carga pública.

174 175
Las autoridades de cada punto deben vigilar los trabajos y Hay que combatir la plaga de la langosta, verdadero azo-
dar cuenta del estado de los mismos mes por medio, Los ve- te de los campesinos. “Un viajero puede cabalgar de diez a
cinos deparan hermosos ejemplos de solidaridad. Hasta seis veinte leguas entre nubes de langosta —observa Mac Cann—,
colaboran a veces para erigir un tajamar. O por el contrario, tan densas que constituyen un peligro para los ojos. Ni las
un solo dueño construye varios en su campo. A los tres meses ciudades, ni los campos abiertos se ven libres de ellas”,
el departamento Gualeguaychú tenía treinta y tres tajamares; En menor número los pobladores explotan los montes y
a los cuatro meses, el de Nogoyá, ciento treinta y cinco. A las canteras de las barrancas del Paraná; fabrican ladrillos,
mediados de 1851 llegaban, según nuestras investigaciones, a velas y jabón. Facultado por la legislatura. Urquiza presta
cuatrocientos sesenta y cinco en toda la provincia. Posterior-
dinero a comerciantes e industriales, que abren herrerías, car-
mente y a consecuencia de nuevos períodos de sequía vuel- pinterías, molinos, etc, También lo fue para conceder gratui-
ven a levantarse en gran escala en los años de 1861 a 1863.
tamente campos y terrenos, como premio a la lealtad de sus
En el campo reina tanta disciplina como en los pueblos. colaboradores.
Ningún peón admiten los estancieros sin la papeleta de tra-
bajo, ni es permitido el vagabundeo de individuos sin oficio Es protegida la industria de los saladeros por la reduc-
honesto. En el transcurso de las hierras y de las cosechas que- ción de los aforos de la sal, de las tablas, duelas, ete., en uso en
dan proscriptos los bailes y en cualquier tiempo, los juegos dichos establecimientos, los que se levantan en Concordia, Con-
de azar. cepción del Uruguay y Gualeguaychú. A las “Estancias del
Cobra impulso la agricultura. El gobierno facilita semillas Estado” se remite el ganado orejano. La instalada en Las
para la siembra de tr"go, importada
de los Estados Unidos, y Conchas es de origen oficial; las de Concordia y Mocoretá,
dinero para levantar la cosecha; licencia a los soldados que son fundac'ones particulares de Urquiza, que luego traspasa
trabajan en las sementeras e impone el encierre de los ani- al Estado. Con la venta de sus productos se construyen edifi-
males, que las destruyen. Grava, además, la entrada de trigo cios públicos o se beneficia a servidores, cuyos sueldos no se
y harina con miras proteccionistas. Se llevan estadísticas men- pueden abonar puntualmente, en particular a oficiales y tropa.
suales sobre la siembra y cosecha del trigo. En 1848 se ob- Se exportan los productos de la ganadería (carnes y cue-
tienen 2.803 fanegas en Nogoyá; 1.922 en Victoria; 1.607 en ros salados y secos; grasa, lana, cerda, asta) y de la floresta
La Paz; 982 en Tala; 808 en Uruguay; 799 en Diamante; 329 (estacones de ñandubay y algarrobo, palmas, leña). La im-
en Gualeguaychú. En el año 1849, 1.922 en Victoria; 507 en - portación comprende todos los artículos necesarios a la vida
Gualeguay; 1.175 en Paraná; 1.607 en La Paz. Según Pedro diaria, Practican el tráfico algo más de un millar de pequeñas
Serrano en el opúsculo Riqueza Entre Riana publicado en embarcaciones. En número de diez a veinte mensuales, gole-
1851, el total del trigo obtenido en el año 1848, fue de 17.452 tas, chalanas, queches y pailebotes de ínfimo calado arriban
fanegas y en 1849 de 16.403, En 1850 una gran seca impide a cada puerto. En los pueblos, españoles, italianos y franceses
la siembra en el momento oportuno. Se ensayan, además, cul- atienden las casas de negocios.
tivos en seis sementeras públicas y en ellas se dictan cursos El tráfico directo de ultramar continúa sufriendo- las
teórico-prácticos de agricultura. restricciones impuestas por el gobierno
de Buenos Aires. Pese
En 1847 se exonera del pago de los derechos respectivos a las mismas, el intercambio directo uruguayos
a José Caballero, quien instala un molino hidráulico a orillas prosi . El contrabando deviene
del Paraná. Al año siguiente se ensaya otro similar en el inevitable y llega a oídos del ministro Arána. Urquiza ordena
campamento de Arroyo Grande. Alcanzan a una docena los en consecuencia instruir sumario a los patrones de buques, que
molinos establecidos en 1851, según cifras del mismo Serrano. presenten falsas patentes de procedencia. Habilitado el puer-
La molienda continúa también realizándose con el auxilio de to de Diamante en el mes de julio, alcanzan mayor margen las
yeguarizos en las primitivas atahonas, de las cuales este autor operaciones regulares. Durante todo el año 1848 se cobra fianza
cita seis, por los cargamentos con destino a Paraguay.
176 177
en sentido integral: enseñanza primaria, secundaria, superior y
Levantado el bloqueo anglo-francés el 19 de junio de 1849, especial, educación femenina, teatro, bibliotecas, periodismo
Urquiza cuestiona el 1? de septiembre la veda a la extracción etc. Tiene claras miras al respecto. Lo dice en carta a Fidel
de moneda metálica, sin lograr empero una salida adecuada. Sagastume de 11 de octubre de 1849: “Mis afanes, mis desvelos
Igualmente luchan con trabas burocráticas cuantos explotan y conatos por enseñar e instruir a esta joven generación son
canteras para obtener la pólvora utilizada en el laboreo del contraídos y encaminados al loable fin de difundir y propagar
producto. la civilización, elevar a la provincia de Entre Ríos y si se quie-
Alrededor de cincuenta m'l habitantes cuenta por entonces re a la Confederación toda a un grado de progreso y adelanto
la provincia. La mayoría vive dispersa en los campos y el a que la he ascendido, teniendo lugar entonces la libertad que
resto en una docena de centros urbanos. Sólo la mitad de esos apetece la presente de disponer a su arbitrio de lo que hoy por
poblados pasa del millar de vecinos. Paraná reúne la mayor no hallarse en estado de hacerlo le es vedado por limitaciones
cifra con 5.386. Le siguen Gualeguaychú con 3.032; Concep- convenientes. Entonces también sabrá aquélla manejar los in-
ción del Uruguay, con 2.578; Gualeguay con 2.019; Victoria tereses, pensar, calcular y esmerarse en aumentarlos y no de-
con 1.993; Nogoyá, con 1.278 y Concordia con 1.255, según el rrocharlos, ni destruirlos como ahora lo ejecuta esta otra por
censo de 1848. Predominan los mestizos y mulatos sobre los ignorancia o por mil hábitos perniciosos, que al éxito feliz de
blancos puros. Apenas si hay un centenar de negros esclavos. mi obra de regeneración es imprescindible desterrar y combatir.”
Muchos de ellos son manumitidos en premio al arrojo revelado Aumenta el número de escuelas primarias, tanto en las
en acciones de guerra. Como se sabs, ya no existen indios ciudades como en las campañas. El gobernante vigila perso-
belicosos. Residen estancieros ingleses, irlandeses y escoce- nalmente la marcha de la enseñanza, A sus cuarteles se le
ses en la zona ribereña del Uruguay. remiten las planas de escritura de los alumnos. El las revisa
En el orden administrativo se introducen varias reformas. y las devuelve con observaciones propias. En carta al delega-
El 4 de marzo de 1848 cesa la administración general de co- do Crespo manifiesta su disgusto porque, al parecer, sólo ade-
rreos, pasando el servicio a las oficinas de aduana. Desapa- lantan los hijos de ricos. Cuando encuentra algún niño en
recen las juntas de propios y las comandancias departamenta- edad escolar ocupado en otras tareas, ordena su inmediato en-
les, sustituidas éstas por las jefaturas políticas. El 8 de octu- vío a la escuela más próxima. Y si alguno deja de asistir al
bre se establece un Tribunal de Medicina, presidido por el aula, deben comparecer los padres ante las autoridades.
doctor Angel M. Donado. Nadie podrá ejercer la medicina, El 29 de agosto de 1849 se crea la Junta Directora de las
la cirugía o la farmacia sin una credencial expedida por dicho Escuelas Primarias. Estará compuesta por un presidente, siete
cuerpo. En su defecto, rendirá examen. Mas la falta de pro- vocales y un inspector visitador general. Comisiones inspec-
fesionales en la campaña inclina a permitir que, en lo sucesivo, toras en los departamentos dependen de la central. La ense- '
actúen curanderos. ñanza será gratuita y obligatoria para los niños de seis a trece
sanciona
- — El 13 de abril de 1849 la Sala de Representantes años. Se eligen buenos maestros, se aplican nuevos métodos y
justicia, La provincia
el reglamento de la administración de se aumenta el números de materias. Inspector se designa en
Í ; da uno de los
que vidida
en las 1850 a Marcos Sastre, el iniciador del Salón Literario en el
un juez, alcaldes de cuartel Se adopta su método de lectura y se
cuales se desempeñará
a, capital” Buenos Aires de 1838.
o en ta mpañ
ciudades y alcaldes de distritca En la le encarga un texto de geografía.
han de ofi primer a instanc ia; uno en lo civil
Por orden de Urquiza de 27 de enero de 1847 la imprenta
y otro en lo criminal, a más de uno de comercio. Una cámara del Estado imprime cinco mil silabarios; en 1848, ochocientos
ape-
de justicia compuesta de cinco miembros considerará en catones, o sea manuales para ejercitar en la lectura a los prin-
mayor cuantía; las que en tercera ins-
lación las causas de cipiantes. Otros textos se adquieren en Montevideo con des-
tancia pasan a un Tribunal de Recursos Extraordinarios. tino igualmente a las escuelas públicas. La imprenta de Jai-
Ningún gobernante de su tiempo ha de sobrepujar a Ur- me Hernández de Concepción del Uruguay edita en 1849 el
ión
quiza en orden a la cultura popular. Propulsa la educac
179
178
Catecismo del Padre Astete, el Método Práctico de enseñar a contaduría de pago del subsidio. Hay, en cambio, numerosos do-
leer de Vicente Naharro y los Elementos de Gramática Caste- cumentos que revelan la búsqueda incesante en el curso de los
llana de Diego Herrán y Quirós; en 1850, El Amigo de los Ni- años 1849 y 1850 de un director para el gran colegio entre-
ños y Las Obligaciones del Hombre, breve compendio de mo- visto, al que se le destina un edificio construido ex profeso.
ral, junto con la Anagnosia de Marcos Sastre. Por lo demás, Jordana carecía de personalidad intelectual su-
Hasta 1848 no hubo en Entre Ríos establecimientos de en- ficiente para desempeñar aquella importante misión, Recomen-
señanza secundaria. El gobierno suplía su falta becando hasta dado por el doctor Vicente López, por el doctor Juan José Al-
una docena de jóvenes, que estudiaban en Buenos Aires o en varez y por el doctor Diógenes J. de Urquiza, el candidato
Córdoba. Esta solución no resultaba, por cierto, satisfactoria. ideal parece ser el doctor Alberto Larroque (1819-1881), quien
Ya en aquel año Urquiza decide fundar en la misma provincia no puede aceptar por el momento, Entonces se designa al
un instituto o colegio superior. Medita largamente sobre el presbítero Manuel María Erausquin el 11 de marzo de 1851,
punto. “Nadie ignora que yo no omito, ni omitiré sacrificio fecha a la cual debemos admitir como la de fundación del Co-
alguno por la educación de la juventud del país —confía al legio del Uruguay, a falta de un documento expreso sobre el
presbítero José María Delgado—, teniendo en vista que es el acto. A Erausquin se le encarga redactar el programa de es-
plantel de donde han de salir los ciudadanos útiles para el tudios y el reglamento interno. Ha sido, pues, el primer direc-
servicio público en todos los ramos; pero estos justos motivos tor fundador del establecimiento. Con él colaboran al prin-
que me animan, me hacen fijar mucho en no prodigar sacrifi- cipio el mismo Jordana y el médico belga Adolfo Fiberghien
cios por cosas fosfóricas, que dejen a la juventud con nociones Ackermann. Se enseña latinidad, filosofía, matemáticas, fran-
imperfectas de los ramos a que quieran dedicarse, y por lo mis- cés, inglés, teneduría de libros, jurisprudencia y música,
mo quiero reunir todos los elementos necesarios para dar un Se dota al colegio de una imprenta regentada por Jaime
paso firme en mi indicado propósito”. Hernández. Provee de textos en uso: una Aritmética clemen-
Un Colegio de Estudios Preparatorios funciona en Paraná tal, las Gramáticas francesa e inglesa y el Libro de Lectura
desde el 22 de noviembre de 1848 hasta el 26 de agosto de Inglesa de Ackermann, De Institutione Gramaticae de Nebri-
1850. Lo dirige el presbítero Manuel María Erausquin. Con- ja para el estudio del latín y el Codicilo de los Estudiantes de
curren treinta y tres alumnos, que reciben una enseñanza pre- Latinidad de Ciriaco Rodríguez Valdivieso.
dominantemente humanista: gramática castellana, latín, historia Una biblioteca se forma en la casa de gobierno de Paraná
antigua, dibujo, aritmética y álgebra. El director renuncia tras con el asesoramiento del doctor Vicente López. El erudito na-
un incidente con el gobernador delegado, Ante la dificultad politano Pedro de Angelis ofrece la suya en 1849. Aceptada
de encontrar reemplazante, el colegio cierra sus puertas. la propuesta, se disponía a remitir los volúmenes el 9 de sep-
Urquiza aspira a preparar la clase dirigente de un futuro tiembre de 1850, cuando inopinadamente cancela la operación.
próximo. Opta al fin por un colegio del tipo clásico europeo. Interesado en la enseñanza de la mús'ca, Urquiza contrata en
Mientras analiza los detalles de su erección, aprovecha el ofre- 1849 a ex miembros de la Legión Italiana de Montevideo —Do-
cimiento del profesor español Lorenzo Jordana, a quien sub- mingo CGarbino, Esteban Casalino y David Vinelli— con el
venciona desde el 28 de julio de 1849 para el dictado de cla- objeto de preparar bandas militares de música en Gualeguay-
ses de humanidades en Concepción del Uruguay. Dará ense- chú, Gualeguay y Nogoyá. En igual año acoge al periodista
fñanza a veintidós jóvenes de Gualeguaychú y a dieciséis de oriental Isidoro De María, quien funda en Gualeguaychú El
Concordia, a los que se agregan a fines de 1850 los del extin> Progreso de Entre Rios.
guido colegio de Paraná. Reelecto el 15 de diciembre de 1849, el tercer período
Generalmente se considera que éstos son los orígenes del gubernativo de Urquiza corre entre 1850 y 1854. Siempre
su intensa gestión. La gran
después famoso Colegio del Uruguay. En verdad, no se conoce desde el campamento prosigue
hasta ahora decreto gubernativo, acta de inauguración, ni cró- seca padecida en 1850 le induce a rebajar el aforo del maíz
nica periodística relativa al suceso. Sólo existe una orden a la y de los porotos para favorecer a los más necesitados. Regu-
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lariza además la inscripción de títulos de bienes raíces y uni- Los pueblos adelantan por la construcción de edificios pa-
forma pesos y medidas. Al otro año vuelve a especificarse el ra comandancias, escuelas,
régimen de tasas aduaneras. iglesias, cementerios, etc. Un efi-
Deja de circular la moneda bo- ciente servicio de posta los une. Impera notable compostura
liviana.
urbana, Escuchemos al periodista Angel Elías, huésped de la
Presentado por Antonio Cuyás y Sampere un proyecto de provincia en aquel año. “Con asombro observé y me es sa-
colonización,

al aceptaria complacido,
placido, Urqui.
Urquiza aparece cual tisfactorio el escribirlo, que el Entre Ríos es un país donde
precursor de una corriente de ideas, que tardará todavia unos
e — = .

ATA A mm mm
reina el orden y una completa moralidad, pues, en el tiempo
años en afirmarse. Desecha el supuesto peligro, que su propio. que llevo de residencia en él, no he oído las más pequeña renci-
A Tcoronel Galán ve en la introducción de inmigrantes. lla, ni una sola palabra de las que en otras partes vocifera por
Avizora desde ya “...los inmensos bienes que de estos hombres las calles el bajo pueblo, ni el espectáculo tan repugnante de
va a reportar necesariamente la provincia”. la embriaguez. En él no se consiente ninguna clase de juegos,
Desde 1850 el Colegio de San Justo y Pastor proporciona en que los hombres puedan malgastar el fruto de sus trabajos
en Paraná esmerada educación a la mujer. Una circular del y la juventud corromperse. Las carreras de caballos, que al
gobernador a los jefes políticos destaca el deber de fomentar parecer son un entretenimiento inocente de los paisanos, las ha
sentimientos de honor, honestidad y beneficencia en el bello vedado el general Urquiza, porque, según me lo han dicho,
sexo. “Poderosa y constante es la influencia de la mujer en el son el origen de muchos males y no se consienten sino en los
corazón de los hombres, como lo es la de éstos en la prospe- pueblos o donde estén a la vista del magistrado. Esta sola
ridad de los pueblos”. Para las clases más modestas se implanta prohibición ha disminuido los homicidios y otros crímenes... .”.
la enseñanza de la agricultura en las escuelas de campaña y la Otro testigo calificado, el general uruguayo César Díaz, afirma
de oficios manuales, en las urbanas. En el primer caso se for- al respecto: “... puede asegurarse, que no solo nadie roba, sino
man chacras labradas por los vecinos, donde los alumnos rea- que nadie piensa que sea posible robar”.
lizan cultivos dirigidos por sus maestros. En el segundo caso,
concluidos los cursos primarios lo alumnos concurren a casas La prosperidad, el orden y el espíritu de tolerancia rei-
de maestros artesanos, que les enseñan sus oficios bajo contrato. nantes en Entre Ríos atraen a su seno a numerosos emigrados,
Son éstos los antecedentes de las escuelas de agricultura y de En 1848 regresan dos antiguos luchadores por el federalismo:
las escuelas industriales de la actualidad. Pedro Ferré y Manuel Leiva, el ex gobernador unitario Pedro
Pablo Seguí y muchos más. En todos los círculos, dentro y fue-
El 1? de enero de 1850 aparece en Concepción del Uru- ra de la provincia provoca elogios la rendición de cuentas del
guay El Porvenir de Entre Ríos, tercero de los periódicos que
ven la luz en la provincia. Otra circular gubernativa propende ejército. En su conocimiento la legislatura declara el 28 de
a estimular el hábito de la lectura. Atribuye a la prensa una enero de 1850 que el general Urquiza merece “Bien de la
misión “benéfica y santa”, cuando se circunscribe “a los justos Patria”, porque “...con la escasísima suma de veintisiete mil
límites de la razón y de la moral”; la califica de “noble instru- ochocientos sesenta y cinco pesos un real que Vuestra Exce-
mento de ilustración y progreso social”, que contribuye a per- lencia recibió del Tesoro de la Provincia incluso en ella cuatro
feccionar las costumbres públicas y privadas. mil noventa y cinco pesos un real importe de algunas corarm-
bres, y esta misma cantidad en mezquinos dividendos, mal pudo
Análogo objetivo educador informa la resolución de cons- Vuestra Excelencia atender ni aún aquellas necesidades más
truir teatros en varios pueblos. Los de Gualeguaychú y Pa- indispensables del ejército, en el largo período que va de fe-
raná funcionan ya en 1851 y 1852 respectivamente, Se forma brero de 1843 hasta octubre de 1849, como lo demuestran las
a propósito por José Quirce una Sociedad Dramática Entre- cuentas de Vuestra Excelencia sin echar mano para ello, de
rriana. En 1850 León Solas viaja a Italia a expensas del go- algún recurso extraordinario. Este recurso lo encontró Vues-
bierno. Aprenderá en la tierra del arte, el de la escultura. Es| tra Excelencia en su fortuna particular, tomando de ella trein-
el primer becario argentino en bellas artes en el exterior, ta mil quinientos pesos, los mismos que generosamente donó
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en beneficio de la lucha que sostiene el país en defensa de periódico La Regeneración, que sale en Concepción del Uru-
sus más sagrados derechos”, guay, anuncia que en su transcurso el país se organizará. Ante
Hacia 1850 la provincia sobresale por un armonioso de- la réplica de Rufino de Elizalde, abogado perteneciente al círcu-
senvolyimiento, alcanzando su gobernante el pináculo de la lo rosista, Urquiza aprovecha para dar a conocer, aun al mismo
fama. En Argirópolis Sarmiento juzga a Entre Ríos capaz de Rosas, su ferviente anhelo por ver la Nación constituida, A
“.. convertirse en el país más rico del universo”, porque “...la esta altura la rivalidad entre uno y otro es ya pública.
naturaleza no ha creado un pedazo de tierra más privilegiado”. En Buenos Aires se trama oscura componenda por la vía
De contar con leyes inteligentes de navegación “...será el de los gobernadores de las provincias de Catamarca, Salta,
paraíso terrenal, el centro del poder y de la riqueza, el con- Tucumán y Jujuy, quienes proyectan conceder al de Buenos
junto más compacto de ciudades florecientes”, Con tan lisonje- Aires el supremo poder nacional. El 5 de abril de 1851 Justo
ras frases y titulándolo “...la gloria más alta de la Confede- J. de Urquiza denuncia la maniobra en una circular a las
ración”, incita a Urquiza a decidir la convocatoria de un con- provincias. Confiesa que en vano esperó un cambio en la
greso constituyente. Punto en el que coincide asimismo el poeta política de Rosas, convertido en único obstáculo a la organiza-
José Mármol. ción constitucional. Resuelve por tanto ponerse a la cabeza
La convocatora de un congreso es el desideratum de la de un movimiento que la posib'lite. Pide solamente que se le
hora, cual eco de las revoluciones constitucionalistas europeas retiren las facultades a aquél delegadas. Tres días antes ha
de dos años atrás. Ya en 1849 la plantea el joven abogado Dió- despachado al doctor Nicanor Molinas en procura de la alianza
genes J. de Urquiza (1825-1905), a la cabeza de un selecto de la república del Paraguay.
grupo de universitarios porteños. En verdad, tales incitaciones Tres notables documentos suscribe el 12 de Mayo. Por el
resultan superfluas en el ánimo del gobernador de Entre Ríos. uno la provincia reasume la soberanía hasta que se reúna un
Hace tiempo que medita una salida institucional. Espíritu rea- congreso constituyente y le retira al gobernador de Buenos Aires
lista viene esperando la ocasión propicia para lanzar su plan la facultades que le delegara. Por el segundo, Urquiza acepta
con probabilidades de buen éxito. La oportunidad arriba una a Rosas la renuncia al encargo del mantenimiento de las rela-
vez solucionados los conflictos con Inglaterra (1849) y con ciones exteriores. Por el tercero, queda abolido el lema “¡Mue-
Francia (1850). Se cuenta ahora con la pazy tranquilidad ran los salvajes unitarios!”. Se lo reemplaza por “¡Mueran los
prescriptas en el Pacto Federal para encarar la cuestión. enemigos de la organización nacional!”,
Se trata de una revolución, cuyo fin es organizar la Repú-
blica. Una primera faz militar tendrá por objeto concluir con Al conjunto de esos actos, aprobados por la Sala de Repre-
sentantes el 24 de mayo, se lo suele calificar de “pronuncia-
el gobernante, que busca postergar sine die la convocatoria
del congreso. En el mes de septiembre Urquiza se entrevista miento” erróneamente. No se trata de una simple “rebelión mi-
litar”, que tal es el sentido castrense del vocablo, sino de un .
en Concordia con el gobernador de Corrientes Benjamín Vira-
soro. Convienen en unirse para derribar ese obstáculo. Hay movimiento de trascendental envergadura, que conducirá en
etapas previstas a un cambio profundo y duradero en la estruc-
que perseguir alianzas, además, que aporten elementos bélicos
complementarios. a tura del país. Estamos entonces frente a una revolución. Se
pasará del período de inconst'tución al período constitucional.
Urquiza se vale de singulares intermediarios en su diplo-
macia. Un comerciante —Antonio Cuyás y Sampere— le acerca El estado de confederación que regía hasta el momento per-
a los dirigentes de Montevideo; otro —Domingo Duarte Mon- mitía la denuncia del pacto y el aislamiento temporario, formar
geres—, a funcionarios cariocas; un artista plástico —Salvador ligas con otras provincias y vincularse con potencias extran-
Ximenes—, a plenipotenciarios brasileños. Gestiones iniciadas jeras. Cada provincia tenía estatuto, escudo, bandera, moneda
en 1849, de las cuales participan también Manuel Muñoz y propios; concedía cartas de ciudadanía y exigía pasaporte para
Francisco Etchenique, que se intens'fican en 1850 y se preci- entrar y salir del territorio. En documentos y filiaciones no
pitan finalmente en 1851. El 5 de enero de este último año el aparece el gentilicio “argentino”. Cuando se interroga por la

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a
“patria”, la respuesta“es: Córdoba, Tucumán, Mendoza, etc.
todo el territorio al Norte del río Negro responde a los invaso-
No tenemos todavía la Nación Argentina, res. Un ejército brasileño al mando del conde de Caxias pene-
La provincia de Corrientes es la única, que de acuerdo con traría simultáneamente en territorio uruguayo. Sus marchas se
la circular de abril retira las facultades delegadas en Rosas. Las retrasan considerablemente, tanto que Urquiza debe avanzar
restantes producen, en cambio, exaltadas manifestaciones de
solo. Mas el 14 de septiembre Oribe entabla proposiciones de
adhesión al dictador. Por su parte los periódicos porteños em- paz por intermedio del coronel Lucas Moreno. Fracasadas éstas,
prenden furibunda diatriba contra Urquiza y sus colaboradores. suceden algunas guerrillas entre el 1% y el 5 de octubre. La
Dos proclamas del entrerriano, lanzadas el 25 de Mayo, reite- situación de Oribe se vuelve insostenible por el aumento de
ran su alto anhelo: el triunfo de la República, la era de la las deserciones en sus filas. Reitera entonces el jefe “blanco”
organización. sus anteriores propuestas. El 8 de octubre Urquiza las acepta.
El 29 de mayo se concluye en Montevideo el convenio Suscribe una capitulación con el coronel Moreno. Se reconoce
entre el Estado de Entre Ríos, representado por Cuyás y Sam- los servicios de los oficiales orientales, los actos legales y las
pero; la República Oriental del Uruguay, por Manuel Herrera deudas del gobierno del Cerrito, el carácter defensivo y nacio-
y Obes y el imperio de Brasil, por Rodrigo de Souza da Silva nal de la resistencia a la intervención anglo-francesa. Queda en
Pontes. Tiene por objeto pacificar la República Oriental por libertad el general Oribe; su ejército obedecerá en adelante
el retiro del general Oribe y la libre elección de autoridades. al general Garzón. Senadores electos elegirán al presidente de
Las provincias de Entre Ríos y Corrientes (si ésta asiente) la República. Habrá un olvido absoluto de todas las querellas:
garantizan el libre tránsito por el río Paraná, cuya guarda “Se declara que entre las diferentes opiniones en que han
incumbe a la escuadra brasileña. La alianza se volverá contra estado divididos los orientales, no habrá vencidos, ni vence-
el gobierno de Buenos Aires, si éste declarase la guerra a cual- dores, pues todos deben reunirse bajo el estandarte nacional
quiera de sus miembros. Se invitará a participar de la misma para bien de la patria y para defender sus leyes y su inde-
a la república de Paraguay. pendencia”.
Los detalles de la próxima campaña se analizan el 17 Justo J. de Urquiza es el pacificador de la República Orien-
de junio en una conferencia mantenida en' Concepción del tal del Uruguay. Ha llevado a cabo su obra sin el concurso
Uruguay con dirigentes orientales, quienes arriban a bordo brasileño, pues, el ejército del conde de Caxías llega a su
del “Uruguay”, primer buque a vapor que surca las aguas del campamento el 14 de octubre. Héroe de la jornada, sin embar-
río homónimo. Dos días más tarde aparece en Paraná El Iris go, no entra en triunfo a Montevideo. Permanece en el Panta-
Argentino, título significativo de la revolución proclamada. noso, donde recibe continuos homenajes. El 21 retorna a
El respeto a las glorias comunes mueve a Urquiza, no Entre Ríos.
bien llega a su conocimiento la noticia de la muerte del general
José de San Martín, a disponer el 16 de julio la erección de Mientras tanto Rosas declara la guerra a Brasil el 18 de
una columna de honor en la plaza principal de la capital de agosto. Desiste de su renuncia al mantenimiento de las rela-
la provincia. El de Entre Ríos es el primer homenaje, que ciones exteriores, ante cuya actitud la legislatura bonaerense
expide dos leyes de insólito alcance. Por la una, los legisladores
se rinde en el país al vencedor en Maipú.
La lucha contra Oribe se inicia el 18 de julio. El cruce colocan los fondos de la provincia a disposición de Rosas, así
del río Uruguay se verifica por tres sitios: por el paso de como las fortunas, vidas y famas de sus comitentes, hasta
Higos en el Norte, van mil quinientos correntinos al mando dos años después de terminada la guerra, que ahora se suscita.
del coronel José Antono Virasoro; por el paso del Hervidero, Por la otra, declara crimen de alta traición todos los actos de
mil novecientos que comanda el general Garzón y por Paysandú, Urquiza tendientes a desconocer el poder de Rosas; privan al
tres mil a las órdenes directas de Urquiza. El 19 los expedi- gobernador de Entre Ríos de esa dignidad y del grado de
cionarios se posesionan de Paysandú sin derramar sangre. Ofi- general, dejándolo fuera del amparo de las leyes. En todos los
ciales de Oribe cooperan en la maniobra. Hacia el 7 de agosto documentos oficiales se lo denominará “loco, traidor, salvaje
unitario”,
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combatientes. Jefe de estado mayor es el general Benjamín
Se ha llegado al caso previsto en el convenio de 29 de de guerra, el doctor Juan Francisco Seguí.
Virasoro; auditor
mayo. El nuevo comisionado brasileño Honorio Hermeto Car- Antes de empren-
neiro Leáo, el doctor Manuel Herrera y Obes y el doctor Dió- Nueve médicos forman el cuerpo de sanidad.
der las marchas, el 19 de diciembre Urquiza anuncia en una
genes J. de Urquiza, representantes respectivos del imperio
de Brasil, de la República Oriental del Uruguay y de los Esta- proclama que va “...a completar la grande obra de la rege-
dos de Entre Ríos y Corrientes acuerdan el 21 de noviembre neración social de las repúblicas del Plata, para que dé principio
la nueva era de civilización, de paz y de libertad...”.
la alianza contra Rosas. La guerra se lleva contra el dictador,
no contra el pueblo argentino. La iniciativa de las operaciones El pasaje del Paraná comienza el 23 desde Punta Gorda y
bélicas corresponderá a las provincias de Entre Ríos y Co- concluye dos semanas después. El mismo 23 estalla un movi-
rrientes; Brasil y Uruguay actuarán como meros auxiliares. Co- miento en Santa Fe de resultas del cual es depuesto el gober-
mo general en jefe, Justo J. de Urquiza se obliga a pasar cuanto nador Echagiie, reemplazado al instante por Domingo Crespo.
antes el Paraná. El Imperio aportará una división de tres mil El 24 adhiere el pueblo de Rosario. Ya son tres las provincias
argentinas que participan en la empresa. En proclamas y
hombres de infantería, un regimiento de caballería y dos bate-
rías de artillería, a más de la escuadra. Es esta última su circulares posteriores a los gobernadores de las provincias, Ur-
principal contribución, motivo por el cual se buscara su alianza quiza reitera sus propósitos de hacer efectivo el Pacto F ederal.
por la necesidad de la custodia del cruce del río. La República Cierto eco inmediato encuentra en los gobernadores de Córdo-
Oriental del Uruguay remitirá dos mil hombres de las tres ba y Tucumán.
armas con una batería de seis piezas. Brasil concede un em- El 3 de febrero de 1852 el ejército aliado se alista en los
préstito de cien mil patacones mensuales, reconocido como aledaños del palomar de Caseros. Comandan las columnas prin-
cipales los generales Gregorio Aráoz de La Madrid, Anacleto
deuda nacional por el futuro gobierno. En garantía de su pago, En la caballería
Entre Ríos y Corrientes hipotecan las rentas y terrenos de Medina, Juan Pablo López y Juan Madariaga.
propiedad pública. Se impone otra vez la libre navegación de se ve a los coroneles Manuel Basavilbaso, Manuel A. Palavecino,
los ríos Paraguay y Uruguay. Las dos provincias acceden gus- Casto N. Domínguez, Doroteo Salazar, Apolinario Almada y
A. Urdinarrain; en la artillería, al coronel José María
tosas a conceder una prerrogativa, por la que vienen luchan- Manuel
do desde la génesis de la Nación, y sobre la que descansa toda Pirán y los teniente coroneles B. Castro y Bartolomé Mitre,
su economía. Jefe inmediato de la infantería argentina es el coronel José
Instalado en Gualeguaychú, Urquiza elimina los últimos Miguel Galán. Las divisiones auxiliares de Brasil y Uruguay
resabios de la dictadura. En adelante no ha de emplearse otro responden al brigadier Manuel Márquez de Souza y al general
lema que “¡Viva la Confederación Argentina!”; se usarán libre- César Díaz, respectivamente. En el frente opuesto está el
mente los colores verde y azul, si bien subsistirá la cinta punzó mismo Rosas con un ejército de veintitrés mil hombres.
“ como distintivo federal, que nunca emanó del tirano de A las tres de la tarde se pronuncia la victoria del ejército
Buenos Aires”. Además, asciende a la categoría de ciudad a aliado. Su celeridad torna prescindible el aporte de un ejército
todas las villas de la provincia y a la de villa, a los pueblos. En brasileño estacionado en Colonia. Siete mil prisioneros quedan
el campamento de Calá finalizan los preparativos de la nueva en el campo. La batalla de Monte Caseros cierra un ciclo
campaña. en nuestra historia. Termina el período de aislamiento de las
provincias. Pronto se echan las bases de la organización
Todo el ejército se concentra en el puerto de Diamante. definitiva.
El 11 de diciembre Sarmiento, encargado de la imprenta volante,
da a luz el primer boletín. Naves imperiales arriban el 19. Al otro día de la victoria Urquiza ofrece en una proclama
Integran el ejército aliado 10.350 hombres de Entre Rios; 5.260 “paz, organización y gloria”. Inaugura la política de fusión de
de Corrientes; 4.249 procedentes de Buenos Aires e incorpo- los partidos y olvido de los agravios. En seguida se le toma
rados luego del levantamiento del sitio de Montevideo; 1.970 de la palabra; ni rastro queda de los excesos partidarios de la vís-
la República Oriental y 4.020 de Brasil. Son en total, 28.149 pera. Nadie compadece a Rosas fugitivo. Todos se aprestan
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a rendir pleitesía al vencedor, Regresan los proscriptos. El Al frente de la provincia de Buenos Aires Urquiza adopta
jueves|19 de febrero, de acuerdo con la crónica de Comercio dos medidas de suma importancia: la abolición de la confis-
del Plata, el ejército aliado entra en triunfo en Buenos Aires. cación de bienes por cualquier clase de delitos y de la pena
Los gobernadores de las provincias no habrán de ser ex- A
ceptuados de los beneficios de la nueva política. Con el objeto
de interiorizarlos del alcance de la misma, el 28 de febrero
se despacha al doctor Bernardo de Irigoyen. Su misión se 4

cumple satisfactoriamente. Todos los gobernadores anulan las


leyes condenatorias de la actitud del de Entre Ríos y lo reco-
nocen como libertador. En el curso del mes de marzo las
provincias de Salta, Córdoba, Santiago del Estero, Tucumán y
Catamarca y la de La Rioja el 5 de abril le encargan el manteni-
miento de las relaciones exteriores. Las de Buenos Aires,
Santa Fe, Entre Ríos y Corrientes le acuerdan análogo papel
por el Protocolo de Palermo el 6 de abril. Funciones que el
entrerriano asume en solemne acto el día 12. Un hombre del
Litoral dirige desde entonces los destinos del país.
Urquiza convoca a los gobernadores de las provincias a
una reunión en San Nicolás. Allá se suscribe el Acuerdo
de 31 de mayo, documento de trascendental importancia. Re-
presenta el compromiso solemne de constituir el país. Declara
Ley Fundamental al Pacto Federal de 4 de enero de 1831.
Un congreso se reunirá en Santa Fe y dictará una Constitución
federal. Hasta que se elijan las autoridades definitivas, Urquiza,
con el título de Director Provisorio de la Confederación Ar-
gentina, tendrá el mando de las fuerzas militares, reglamentará
el tránsito por los ríos, el servicio de correos y los medios de
transporte. Quedan abolidos los derechos de tránsito. Desa-
parecen las aduanas interiores, barreras al progreso del interior.
El Acuerdo de San Nicolás causa enorme desasosiego en
Buenos Aires, principalmente por la representación igualitaria
concedida a las provincias en el futuro congreso constituyente.
Numerosos oradores lo discuten con ardor en las sesiones de la
Sala de Representantes del 21 y 22 de junio. Renuncian los
ministros y el gobernador. Temeroso de ver fracasada su obra, Justo J. de Urquiza. Daguerrotipo de 1852. Museo
Histórico Nacional de Buenos Aires.
interviene Urquiza basado en el artículo décimo cuarto del
de muerte por los políticos. Dictadas ambas el 7 de agosto,
Acuerdo. Disuelve la Sala, destierra a los perturbadores y acalla.
como Director Provisorio las extiende luego a todo el país.
la prensa. Designa gobernador otra vez al doctor Vicente El 18 de agosto impone el Reglamento General de Aduanas.
López. Al renunciar éste al cabo de un mes, asume él mismo
En adelante habrá aduanas exteriores en Bahía Blanca y en
el poder el 26 de julio. Las provincias del interior, en cambio,
las bocas del Salado, sobre el Atlántico; en Buenos Aires y
ven en el Acuerdo la sola garantía de organización. Paulatina-
mente todas expiden leyes aprobatorias.

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en la isla de Martín García, dentro del Río de la Plata; en dades en el antiguo Entre Ríos”, en Universidad Nacional
Concepción del Uruguay; en Rosario, Páraná y Corrientes. de Cuyo. Facultad de Filosofía y Letras, Actas de las segundas
Aduanas terrestres funcionarán en Mendbza, San Juan, Salta jornadas universitarias de humanidades. Mendoza, 1964.
y Jujuy. Revolucionario decreto. Concluye el monopolio fiscal
Las observaciones de Mac Cann pertenecen al libro Viaje
del puerto único de Buenos Aires. Cambio trascendental en
a caballo por las provincias argentinas. 1847. Traducción de
la economía argentina. Once registros aduaneros más aparecen
José Luis Busaniche. Buenos Aires, 1939. Sobre la revolución
en el territorio nacional. de 1851: Martín Ruiz Moreno, La revolución contra la tiranía
Catorce días más tarde, el 11 de septiembre, estalla un y la organización nacional. Rosario, 1905, t. 1 y los capitulos
motín en Buenos Aires. Lo encabezan los generales José María
XII a XXI de Urquiza y su tiempo, citado.
Pirán y Juan Madariaga, durante la ausencia de Urquiza, que
ha viajado a Santa Fe a inaugurar el congreso constituyente.
El movimiento triunfa sin derramamiento de sangre. En su
Manifiesto los dirigentes solicitan la unión de todos los porte-
ños contra el “conquistador” provinciano y exhortan a anular
el Acuerdo de San Nicolás.
Conocedor del resuelto propósito separatista de los subleva-
dos, Urquiza opta por librarlos a su suerte. Por un protocolo
de 20 de septiembre deja al gobierno de Buenos Aires en el
pleno goce de sus derechos. El documento representa un
triunfo de los rebeldes. Desde entonces se inicia el período de
la secesión de la primera provincia argentina prolongado hasta
1862. Uno de los primeros actos de la Sala de Representantes
es dejar sin efecto el encargo del mantenimiento de las rela-
ciones conferido al vencedor de Caseros.

Agenda de Lecturas

Sobre la acción gubernativa de Urquiza ver: Martín Ruiz


Moreno, Contribución a la historia de Entre Ríos, cit., t. 11 y
El General Urquiza en la Instrucción Pública. Buenos Aires,
1910; nuestros libros: Urquiza Gobernador de Entre Ríos, cit.,
El Colegio del Uruguay. Sus orígenes. Su edad de oro. Bue-
nos Aires, 1949, cap. 1 y IH; Presencia de Urquiza. Buenos
Aires, Raigal, 1953; Urquiza y su tiempo, cit., cap. XI y XII
y los artículos: “Los tajamares de Entre Ríos”, en Revista Geo-
gráfica del Instituto Panamericano de Geografía e Historia.
Río de Janeiro, 1954, N941; “Antiguas sementeras entrerria-
nas”, “Antiguas bandas de música”, “Becarios argentinos en
Europa”, “Edición oficial de textos escolares” y “Libreros del
antiguo Entre Ríos”, en La Prensa, del 15-1X-1963; 5-X1-1972;
16-1-1966; 2-X-1977 y 11-1-1976; “La enseñanza de las humani-

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