DEFINICIÓN DE TEOLOGÍA FUNDAMENTAL

Es la "disciplina  que tiene como objetivo , tal como lo indica su título, la

demostración científica de la divinidad del cristianismo "[1] otra definición que
encontramos es la de "una disciplina teológica que estudia el acontecimiento
de la revelación y su credibilidad" también se define como la —justificación
racional del acto de la fe—[2] Existen otros acercamientos;  "es la disciplina
que tiene por objeto establecer la base racional previa o punto de partida de la
Teología.  En definitiva es la manera de entender la Revelación de la Verdad de
Dios a través de la razón, por lo cual es necesario establecer con claridad su
significación y sentido, sin ahondar en el plano de la fe, siendo ésta más
profunda.[3]

Referencias Bíblicas

(1 Cor 2, 3-5) Me presenté ante ustedes, débil, tímido y tembloroso, apoyando

mi palabra y mi predicación, no en persuasivos discursos  de sabiduría, sino en
la demostración del Espíritu y de su poder .

(1 Pe 3, 15) Dar razón de la esperanza.

(Isaías 7, 9) Afirmarse, estar firmes en Dios

(Heb 11, 1) a fe es garantía de lo que se espera y prueba de lo que no se ve, por

ella fueron alabados nuestros mayores.

(Rom 12, 2) Transformen el mundo mediante la renovación de su mente… no

acomodándose al mundo.

(Fil 3, 9) La fe, apoyada en la razón, nos lleva a Cristo

FUNCIONES DE LA TEOLOGÍA FUNDAMENTAL

 1. Se preocupa del problema de la verdad de la Revelación cristiana y
la Iglesia , además centra su atención  su atención en el sentido y
vigencia actual del creer en Jesucristo vivido en la Iglesia.

 2. Busca la articulación de la "fe sobrenatural" y "la razón natural" por lo

menos desde el plano del Concilio Vaticano I el cual manifiesta que.

 La fe es conforme a la razón

 La recta razón demuestra los fundamentos de la fe

 Se puede llegar a una cierta comprensión de la fe, ya sea por analogía

que se conoce como lo natural, bien sea por la conexión de
unos misterios  con otros. En definitiva la racionalidad de la fe[4]
  3. Se plantea como problema primario la cuestión de la significatividad,
credibilidad, razonabilidad de la propuesta cristiana en su conjunto y en
su núcleo, como también en lo que dice la primera carta de San Pedro;
"Den culto al Dios Señor, Cristo, en vuestro interior; siempre dispuestos
a dar respuesta a quien les pida a quien les pida Razón de su
esperanza"(1Pe 3,15)

ACENTUACIONES DE LA TEOLOGÍA FUNDAMENTAL

 Se centra en la darle credibilidad de la Revelación cristiana tal como la
propone la Iglesia católica. Es decir que no se trata de hacer
planteamientos vagos sobre sobre lo que puede ser la teología, sino que
parte de lo que nos ha sido Revelado en esencia por Dios, en la que la
Iglesia es la transmisora fiel de dicha Revelación.

 Analiza las fuentes  del conocimiento  teológico. El objetivo central de la

Teología fundamental es el hecho histórico de la divina Revelación, que
con razón puede considerarse como el centro de unidad de todas
las investigaciones  de la Teología fundamental[5]

 La teología fundamental es una ciencia, en el plano de la teología se

centra en un conocimiento de la Revelación que no puede partir de la fe
por su carácter  de ciencia, pero si tiende hacia la misma.

DISPOSICIONES DE LA IGLESIA
 La Sagrada Escritura  en la 1Pe 3, 5. Es el punto de partida para que la
Iglesia fomente este tratado.

 En constitución  apostólica —Sapientia Christiana— de Juan Pablo II en

el Numeral 68 con sus parágrafos  el Papa invita a que en las facultades
de teología de las universidades se tenga en cuenta la investigación
científica  respecto a ella como ciencia, con el propósito de poder dar a
conocer con claridad la Divina Revelación;

Por otra parte la constitución hace su énfasis en que hay un encuentro muy
específico entre lo que es "la fe y la razón" puesto que ambas se unen en la
misma verdad… "y su exposición  sea tal, que, sin mutación de la verdad, se
adapte a la naturaleza  y a la índole de cada cultura , teniendo especialmente en
cuenta la filosofía  y la sabiduría de los pueblos, excluyendo no obstante
cualquier forma de sincretismo o de falso particularismo" es decir que la
teología no es especulativa, que la verdad de la revelación se debe mantener
intacta y se debe dar como tal en cada pueblo, teniendo en cuenta la diversidad
de cada uno. Este se puede constatar en que dice el Apóstol San Pablo. "…y ni
mi palabra ni mi predicación fueron con palabras persuasivas de humana
sabiduría, sino con demostración del Espíritu y de poder" (1 Cor 2, 3-5)
  La carta apostólica "Fides et Ratio" de Juan Pablo II acentúa de manera
especial al final "Que el Trono de la sabiduría sea puerto seguro  para
quienes hacen de su vida la búsqueda de la sabiduría. Que el camino
hacia ella, último y auténtico fin de todo verdadero saber, se vea libre de
cualquier obstáculo por intercesión de aquella que, engendrando la
verdad y conservándola en su corazón , la ha compartido con toda la
humanidad para siempre"[6] es decir que la Iglesia quiere que el
cristiano pueda dar razón de su fe en Cristo, en la búsqueda de la verdad
que Él mismo es.

 El catecismo de la Iglesia Católica: "Se presenta fiel y orgánicamente

la enseñanza  de la sagrada escritura, de la tradición viva en la Iglesia y
en el magisterio auténtico" [7]pero con esto también invita a la
profundización de la revelación con miras al conocimiento de la verdad
de Dios, por medio de la Iglesia.

 El concilio Vaticano II a través de la constitución dogmática Dei Verbum

o de la Divina Revelación. Ella ilustra todo lo que la Iglesia debe conocer
frente a la revelación desde la tres grandes fuentes; sagrada escritura,
tradición y magisterio. Ellas son fundamento "para que todo el mundo
oyendo crea en el anuncio de la salvación, creyendo espere, y esperando
ame" (D.V 1)

ORIGEN DE LA TEOLOGÍA FUNDAMENTAL

Se empieza a gestar la expresión de la teología fundamental a principios  del
siglo XVIII, pero especialmente aparece en el siglo XIX con la expresión de
Apologética. Sin embargo las raíces de la teología fundamental la ubican en los
—lugares teológicos de la fe— "loci theologici", es decir en los lugares de
encuentro con Dios donde se ha revelado (La tradición, la Divina revelación o
sagrada escritura, la vida de los santos y de los mártires, los padres apostólicos
y la praxis) como también en las discusiones dadas en la edad
media sobre análisis  de la fe, pero también en el 1550 con la aparición de toda
la confrontación de Lutero y Calvino. Esto deja entrever cómo ha sido una
ciencia que siempre se ha dado, pero que tan sólo desde el siglo XVIII y XIX se
viene a profundizar y valorar tal cual es su importancia.

DESARROLLO DE LA TEOLOGÍA FUNDAMENTAL, SIMILITUD Y DIFERENCIA

 1. La teología fundamental y la apologética

En un primer momento diversos autores centraron la teología fundamental en

la defensa de la fe., pero esta defensa de la fe tiene un carácter rigurosamente
racional y demostrativo en cuanto su método  porque su función  propia es la
de presentar la religión  revelada "bajo la perspectiva de la evidencia de la
credibilidad… supone la fe, y, a pesar de todo, no invoca, sino argumentos de
razón" [8]lo anterior referido a la apologética clásica.

 2. Teología fundamental y dogmática

La teología dogmática es la parte de la teología que trata de las verdades

teóricas de fe concernientes a Dios y a sus obras (Dogmata Fidei), mientras la
teología fundamental ya no se trata como parte de la teología dogmática sino
que ha alcanzado el rango de ciencia independiente, que se considera
generalmente como la introducción  y fundamento de la teología dogmática,
para la comprensión de la misma[9]En definitiva la teología fundamental es
una ciencia independiente encaminada hacia la explicitación de la fe, de
manera particular a quienes poseen otro tipo de creencia diferente del
cristianismo. Con ello se busca entrar en diálogo  con otro tipo de posiciones
del mundo actual dando paso a la posibilidad de exponer de manera clara la fe
Cristiana.

La teología fundamental hoy

Dentro de la evolución  de este tratado de teología fundamental, su santidad

Juan Pablo II en la carta  apostólica fides et Ratio —fe y razón— dice que desde
el concilio Vaticano II se busca que el hombre  de hoy pueda entender que
tiene la capacidad de conocer a Dios y que el cristiano del nuevo milenio tiene
que prepararse en la dinámica  de dar respuestas concretas de su fe pues así lo
exige el mundo de hoy y por tanto la Iglesia tiene que estar a la vanguardia  de
la misma. En los Hechos de los apóstoles ya Pablo tiene que enfrentarse en un
diálogo con los estoicos y epicúreos usando el argumento de la fe, pero con
un discurso  que partía de las mismas realidades del entorno.