botellas de quemante anya, que iban y venian
tntre las manos de aquellos buenes hombres
‘ue tan despreocupadamente rien ante les fr
Hhebres mirajes de Ia muerte.
‘Los mis aficionados 4 amorellos peeamino-
03, regodedbanse 4 su sabor en la stita mor.
thrid, enbre un surtido grupo de mujeres en
fue revueltas se velan palurdas lavanderas s
fregonas de cocina; amojamadas vejauelas nd:
rmadoras de cuenitos de estupendas tramas, 5
pimpollos de cabezas enfloradas y de pattoletas
Fdelantales pintarrajeados de rantrones, 4.
irechos ofanse, entre el roncar do agin empe-
dernido trasnochador, explosiones de regitel-
‘des deseocados y modorras entonaclones de
tezos que percuLlan frente al cadaver de send
Raperta, formando coro con la algarnbia de los
chaseartillos yel sonar de las risasoon que se
Sazopa y condimenta el acto de nusstres velo-
Flos populares. .
‘Tantos deleites ofrecieron 4 Amaeleto las
juozgas de aquella velada bulliclosa, que hasta
corta le pareei6 la noche de tanto que god, ya
eneharit amena con su Romualda, eraen union
fle sus compinehes. jugadores de albures + de
rentoy.
ra la del alba cuando Anacleto rolvid 4 su
tioza, un poco pesado de cuerpo yun mucho.
ligero de alma, de puro satisfecho con los re-
cuerdos de aquella noche, tanto més venturosa
441, cuanto que Romualda, con susdesprecios,
habia dado terrible golpe de muerte & las pre”
tensiones recaleitrantes de Herculano.
‘Mas jubiloso que nunea, fué pot la tarde &
coneertar con su amada los uttimos planes par
rael més breve arreglo de su coyunda matri-
‘monial.
Sentados fuera de la casucha agreste, d la
sombra de frondoso, tamarindo que data luci-
‘lez al sitio, la, ristica pareja enamorada pasi
‘a tarde aquelia formulando proyectis de labo-
res, adivinando clelos de futuras ategrias y
presiadlendo arrullas de matrimonials dichas,
Rieron como pocas veces de la estulticia de
Herculano y juzgaron su amenaza como tonto
Alesahogo de corazén despechado,
Durante el dia, Romualda habia sentido
clerto malestar de euerpo que. juzgé como re-
sultado Inmediato del veloriode sei Ruperta;
pero en mirdndose junto al dueito de su amor
ho habla dolamas que prendiesen nublados en
su alegria ni clavasen flayuezas ensu querer,
‘Niella ni el doncel umartelado, pusieron mfen-
ies en la malandanza consabida, y dl y ella se
dieron esa tarde tan almibarada'y subrosa des-
pedida, que la madre de Romualda legs & pen-
sar que aquello era el preludio de una ausencis
Gilatada,
Pero no. Al dia siguiente, cuando el alba te-
‘fa el orto con apacible diadema de fulgores,
Anacleto, con machete al einto y el ventrado
‘ecomate echado & 1a espalda, iba, & pasos lentos,
por la angosta callejuela, fod la vivienda don-
de su amada, tras de Insomnlo fatigoso, oy 6 la
vox de Anacieto que cantaba:
Ere} mi prenda querii
Bre) ml encanto, mujer,
¥ prefiero ejtar sin vid
Que dejarte de querer.
Despuésde doce horas de recla labo, hundl-
do en os eaales de tio Mecho, torus al pue
blo Anacteto, si con las earnes esrependas por
sl trabajo, cn of niin bion nutri de alee
tas.
redigindose patochadas y gractos con el
nogeo Saturn su viejo camaradade labores,
alvin caminito. de suelo, no_ sh tragr en
hhombros, como slempre, los blandes teotos de
caa,con'que ebsequaban las mozos do Uo e-
thio 4 las porsonas qu elles relan eomo or
hata de su querer,
TEntrado al pueblo, dos ocaslones nots Ana:
cleto, bien claramente, que. vias y mucha:
ha en. los. barrios, proferan el nombre de
itomvalda, eomentando suceso extsano con
scentos dé mistariso resablo,
“"Puo| eso. e} dao, svnalden me qulta esa
lea deta cabera.~exelamabs eon énfasis la
abuela‘do las Rosas.
“Vora to, nana, qe esa muchacla ejté em
Drujtt-deoia & dstanela una vor tipluda que
se eseayaba de vieja zahiuzda en manentes eh
‘Tue Atteleto, ya eon ot julelo& melo destor.
‘lag, Segui’ au camino has Ia pobte vivien-
ta donde, con st anclana madre, sitnreaba ins
horas de Su dletioso existit.
Cuando ol apastonado jornalero, aturdldg de
alleen, Hiege ln casa de su Totals, ésta
se agitaba nerviostmente, presa de horrible
shajenaeidn, que aceso exaterbaban son suse
inieas exelamaciones is vieja ¥iasmonas que
fn torno do la enferma Iban y venlany 88 sat
Uiguabin, ya en tropelconddslendo la tisans,
‘on atrekdando sitaplsmos, ora pontendo oh
Tenuek de Romualda blzmis de. tgua tra, 6
sapos despanzurradas,
Yen medio. do-aquel tr y venir esrepitoso,
en que so andaban tan_aburdldas asi vies co-
‘mo muetnichas, Anaslet, como ale de yer
tl martirio de au novia, recontando In eolerl
Ee MUDD HEUETREDO
a amenaza que recibié Romualda en el yelorio.
desend Rupert, silo decia eon aeento dol
~iEito ej dano del Herewlano,
el tal Sime ia pagal
Cinco dias después de 10 aeaeclio 4 Ia bien
nade del trovista popular, los Uulliclosos me-
adores del barrio de La Cachinés turbabal
silencio de la noche dando Yoees de alarma &
invoeando auxilio, ante. el cuerpo ensangre
tado de un hombre. moribindo ‘que, al pede
‘eastigo para su agresor, “pronunciaoa el hon
brede Anaeieto,
Blamado de Romuaida no logré, cual to de
seaba, escapar del poder de la jisticla; per
cuentan ‘los quo tales y tan variados slesos
presenciaron, ‘que Anacleto, mas satisfecho
(que artepentido, menudo edntaba en el cat
‘oz, con aire apesarado:
Si me encuentro ajuzticiao
Bi shlo porque euré
Cons sangredeun matvao
‘idatio deuna mujer
100,
Benito Peranes,
stro Bose rete pub
RONDELES
1
Enia manana adios,
emo del ago ai,
io league in,
1 alamela odors
ta
deinmatand raise,
¥ sola rsa varrose
ie su rsa harmenosa,
u
lee sta a sie pra de ta niads;
vrai ala prt tne dots so
Sis inne hl gnosias de reads,
$delas his Sus haste ayer prot
Esl esperanua dra lst aorada
softs tres tngnfe 6 ce
ere vist lie gute a me,
Sadi eros agra dst sn,
Oh ulate rue ase
‘at hlas fo ty acento de pasion;
porauevetaras ols isore a e
Porto bears fats po des svi.
DARIO HeRReR:,
PELBLEIOSES TTI IESIT TITTIES EN OH TOOTS SOLIS T ITO TITS ITI STET ETO SES.
EDIFICIOS PUBLICOS NOTABLES:
CORREDORES DEL INGTITUTO GEOLOGICO NACIONAL,