Lo ocurrido

Capítulo 2
Escrito por
Juan Francisco Pérez Sáez

02.01. CASA DE SALVA, SUS PADRES Y SUS TÍOS/

 COMEDOR/ENTRADA. INT-AMANECER.

Empieza un nuevo día en Ferro: Sira ya está vestida y se atusa el vestido. Se

pone el pelo tras las orejas y pasa un trapo por la mesa. Tocan a la puerta y abre.
JORNALERO 1
Buenos días, señora.
SIRA
Buenos días.
JORNALERO 1
Me han dado esto para usted.
El j0rnalero le entrega un sobre que tiene una marca de agua de “Central
Telefónica de Ferro”.
SIRA
Gracias.
JORNALERO 1
A mandar.
El jornalero se marcha. Sira cierra la puerta y se va introduciendo de nuevo en el
comedor mientras abre el sobre. Saca una hoja y lee.
SIRA
Está usted contratada y requerimos su asistencia como telefonista a partir de
esta misma tarde.
Sira salta de alegría y empieza a reír de la felicidad. Entra Salvador y Sira, al
verlo, se detiene.
SALVADOR
¿Qué pasa? ¿Quién era?
SIRA
(Seria)
Me han contratado en la central telefónica.
SALVADOR
(Serio)
Una buena noticia.
Salvador se sienta y contempla la casa sin mostrar ningún sentimiento.
SIRA
 ¿Dónde está el resto?
SALVADOR
Salva ha ido al entierro del Fonseca y Severo e Irene ya están trabajando. Eso es
justo lo que debería hacer yo: irme a trabajar.
Salvador se levanta y Sira le toma de la mano.
SIRA
Espera.
SALVADOR
¿Qué?
SIRA
No quiero que te vayas sin antes preguntarte algo que no me deja de dar vueltas
en la sesera.
SALVADOR
¿Es por lo que les ha pasado a las Santisteban?
SIRA
Sí, es precisamente eso. Salvador…
Sira suspira.
SIRA
Salvador, ¿qué tienes que ver con lo ocurrido a las Santisteban?
Se miran a los ojos en silencio hasta que Salvador asiente y Sira le suelta la
mano.
SIRA
¿¡Cómo has podido!?
SALVADOR
¡Eleonora Santisteban acabó con toda mi vida!
SIRA
¡Lo sabía! ¡Lo sabía! ¡Sabía que habías sido tú mas no lo quise creer! ¿Sabes en
la situación en la que eso nos deja?
SALVADOR
¡Ojalá! Escúchame, Sira ¡OJALÁ haya acabado con ellas!
SIRA
¿Y si no lo has conseguido? ¿¡Y si se descubre que fuiste tú!? ¡Estás loco!
SALVADOR
 No estoy loco ¡Quiero venganza! ¡Venganza contra esa cacique que mató a mi
mujer y no sé si a mi hijo!
SIRA
¿Venganza? ¡Ese siempre ha sido tu deseo y nos va a arrastrar a TODOS! Porque
¿sabes qué? Eleonora quemó tu casa en venganza por la huelga ¿qué va a hacer
ahora con nosotros si has puesto su vida y la de su hija en juego?
SALVADOR
No sabemos si han muerto.
SIRA
(A punto de llorar)
Espero que hayan muerto porque si no seremos nosotros los que muramos por
tu culpa.
Sira se pone a llorar y Salvador se va.

02.02. CEMENTERIO. EXT-DÍA

Un anciano cura, biblia en mano, despide a Álvaro Fonseca en el cementerio
durante su entierro junto con Magdalena, Gonzalo y Salva pero pocos asistentes
más.
CURA
¡Oh Dios, que concedes el perdón y quieres la salvación de los hombres! Te
rogamos que por la intercesión de la santísima Virgen María y de todos los
santos, concedas la bienaventuranza a tu hijo Álvaro a quien llamaste de este
mundo. No le abandones en manos del enemigo y te olvides de él para siempre
sino recíbelo con tus santos ángeles en el cielo, su paz ya definitiva. Y porque
creyó en ti y esperó concédele para siempre las alegrías del cielo por Cristo
nuestro señor.
TODOS
Amén.
Magdalena solloza al borde de un ataque.
CURA
Yo soy la resurrección y la vida, quien cree en mí aunque haya muerto vivirá y
todo el que vive y cree en mí no morirá eternamente.
TODOS
Concédele Señor el descanso eterno.
CURA
Y brille para él la luz eterna. Descanse en paz.
El cura cierra la Biblia. Dos hombres se disponen a meter el ataúd bajo tierra y
Magdalena rompe a llorar intentando abrazar el ataúd.
MAGDALENA
¿¡Por qué!?
GONZALO
Madre.
Gonzalo la sujeta entre sus brazos.
MAGDALENA
¿Por qué ha tenido que irse tan pronto?
SALVA
Doña Magdalena…

GONZALO
 Madre, por favor. Tranquilícese.
MAGDALENA
Dímelo, Gonzalo, dímelo. Dime que no te vas a ir. Dime que no me vas a
abandonar en un camino tan difícil como este.
GONZALO
Claro que no, madre. Se lo dije y se lo diré hasta que le entre en la sesera: no me
pienso apartar de su lado.
Magdalena grita rota de dolor y abraza aún más fuerte a su hijo.
SALVA
(Apurado)
Lo siento mucho, Gonzalo.
Le pone la mano en el hombro.
GONZALO
Gracias, Salva.

02.03. CONSULTORIO. INT-DÍA

Irene está hablando con unos pacientes que están en la puerta del consultorio a
punto de abandonarlo.
IRENE
Les recuerdo que es muy importante que mantengan las curas lo más limpias
posibles y vengan las veces que sea necesario al consultorio para cambiar la
venda. Yo estaré aquí dispuesta a ayudarles en todo lo necesario.
Los pacientes sonríen y se van. Irene ordena las camillas ya vacías de las
víctimas del cortocircuito en la central telefónica y la única ocupada en el
momento es la de Eleonora, que allí continúa inconsciente con la cabeza
enrollada en una venda. Cuando Irene termina de ordenar las camillas, se sienta
en el escritorio y observa una bolsa con medicamentos. Eleonora despierta
lentamente.
ELEONORA
¿Dónde estoy?
Su voz sobresalta a Irene que se levanta y va hasta ella.
IRENE
Se encuentra en el consultorio.
Eleonora se va a levantar pero le cuesta.
IRENE
Tranquila, no se sobresalte y tenga cuidado con los movimientos bruscos.
ELEONORA
Quiero ponerme en pie.
IRENE
La ayudo.
Irene la ayuda a sentarse sobre la camilla que es en la postura en la que se queda
Eleonora para conversar.
ELEONORA
No sé por qué estoy aquí.
Se acaricia la cabeza y nota la venda.
ELEONORA
¿Y qué llevo en la cabeza?
IRENE
Un vendaje.
ELEONORA
 (Asustada)
¿Un vendaje? ¿Qué diantres me ha ocurrido?
IRENE
Le voy a pedir que se tranquilice.
ELEONORA
¡Y yo te voy a pedir que guardes silencio!
Eleonora suspira.
ELEONORA
Solo recuerdo haber montado en el coche para volver a casa tras el velatorio.
IRENE
Hubo un accidente.
ELEONORA
¿Un accidente? ¿A causa de qué?
IRENE
Aún se desconoce mas se está investigando.
ELEONORA
Mi hija me acompañaba ¿Dónde está Amelia? ¿Ha resultado ilesa?
IRENE
El caso es que su hija Amelia ha corrido peor suerte que usted.
ELEONORA
¿Dónde está? ¡Quiero ver a mi hija!
IRENE
Está en el hospital.
ELEONORA
¿QUÉ?
Eleonora se levanta de la camilla.
ELEONORA
¿Qué le ha pasado a mi hija?

IRENE
 Quedó atrapada en el coche y cuando fue rescatada, las contusiones del
accidente la habían dejado en muy malas condiciones.
ELEONORA
¿En qué condiciones? ¿¡Habla mi idioma, enfermera!? Quiero saber qué le
ocurre a mi hija.
IRENE
Aún no han llegado noticias.
ELEONORA
¿Su prometido? ¿Está junto a ella?
IRENE
Sí. Él la acompaña.
ELEONORA
Lo mejor será que me dirija hasta allí.
IRENE
No se lo aconsejo, Eleonora.
ELEONORA
¿Por qué?
IRENE
Porque debe descansar y bueno, para que no se repita un episodio como el
ocurrido anoche.
ELEONORA
¿Temes que me vuelva a accidentar? ¡Ya sería mala fortuna!
IRENE
No se volverá a accidentar.
ELEONORA
¿Entonces?
IRENE
Lo que ocurre es que se duda que fuese un accidente y podrían volver a atentar
contra su vida.
ELEONORA
Espera… ¿Se cree que alguien pudo querer acabar con nuestras vidas?
Irene asiente y Eleonora mira a todos lados sin saber qué pensar.

02.04. CALLES DE FERRO – TABERNA. EXT-DÍA

Salva camina con Gonzalo.
SALVA
Cuando llegué, mi tío no me dijo nada y yo me fui a la tina.
GONZALO
¿Y entonces?
SALVA
Entonces llegó mi madre y le contó todo lo que le había dicho a mi padre. Yo
entré y salí en su defensa-
GONZALO
¿Y cuál es el motivo por el que tu tío Severo le salta a la gresca a tu padre?
SALVA
La vida de mi padre no ha sido un camino de rosas ¿sabes?
Salva sigue hablando y Gonzalo queda pensativo recordando que vio a su padre
tirotear el coche de las Santisteban.
SALVA
Gonzalo ¿me estás escuchando?
GONZALO
Sí, sí.
Pasan por la puerta de una posada.
SALVA
¿Te encuentras bien? ¿Te apetece tomar algo en la posada?
GONZALO
No, gracias. Debería volver ya para ver a mi madre.
SALVA
Sí, será lo mejor. Nunca la había visto así.
GONZALO
Créeme que yo tampoco.
Salva mira hacia la posada y ve a su padre bebiendo.
SALVA
Si me disculpas…
Salva entra en la taberna y se apoya en la barra mirando a su padre justo a su
lado.
SALVA
Padre.
SALVADOR
¿Qué haces aquí, Salva?
SALVA
Esa es la respuesta que me gustaría que usted a mí me diese.
SALVADOR
¿Qué quieres saber?
SALVA
Quiero saber qué hace perdiendo el tiempo y el dinero bebiendo en esta posada,
padre.
SALVADOR
Me han echado.
SALVA
¿De dónde? ¿Qué dice?
SALVADOR
¡Que me ha echado el hijo de una perra judía de don Ataulfo!
SALVA
¿Y esa es razón para andarse aquí bebiendo?
SALVADOR
Bebo para aliviar mi dolor.
SALVA
¿Dolor?
SALVADOR
¡Sí, dolor! Salva, sí. Dolor.
SALVA
¿Por qué?
SALVADOR
¿Quieres saber qué me duele?
 SALVA
Quiero que deje de beber y que a continuación, me lo explique.
Salvador termina su bebida y lo mira.
SALVADOR
Dolor por ser el responsable de la muerte de mi mujer y la desaparición de mi
hijo hace veintitrés años. Dolor por haber hecho una huelga y haber criado un
hijo que no me correspondía. Dolor por sentir que cada paso que doy es un paso
mal dado. Dolor por haber defraudado a personas en las que en algún momento
generé esperanzas. Dolor por creer que el ojo por ojo y el diente por diente
tendrían algún sentido en mi maldita venganza, una venganza sin sentido
¿Sabes por qué? ¿Sabes por qué mi venganza no tiene sentido? Porque el único
responsable de lo ocurrido soy yo y hasta que no acabe conmigo mismo, no
podré culminar mi venganza.
SALVA
Padre…
SALVADOR
Crees que estoy loco ¿verdad?
SALVA
No, no está loco.
SALVADOR
¿Y si lo estoy? ¡Mi vida perdió todo el sentido el día en que mi casa ardió!
SALVA
Padre ¿usted lo es?
SALVADOR
¿El qué? ¿Qué soy?
SALVA
¿Usted es mi padre?
Salvador queda en silencio.
SALVADOR
¿Qué?
SALVA
Hace un instante ha dicho que le duele haberse hecho cargo de un hijo que no le
correspondía.

SALVADOR
 Yo…
Salva se marcha con los ojos inundados en lágrimas.
SALVADOR
¡Salva!
Salvador resopla y se vuelve a sentar.

02.05. CASA DE LOS FONSECA – COCINA. INT-DÍA

Magdalena cierra una olla con su tapa y cuando se da la vuelta, Gonzalo está
entrando.
MAGDALENA
Ay, Gonzalo ¿Cuándo has llegado?
GONZALO
Acabo de llegar.
MAGDALENA
¿Qué tal con Salva?
GONZALO
Un paseo agradable ¿Qué prepara, madre?
MAGDALENA
Un puchero.
GONZALO
¿No cree que le vendría bien una mano?
MAGDALENA
Gonzalo, ya sabes que yo sola me basto con mis labores ¡Que de joven llevaba yo
la casa y el anticuario cuando tu padre, que en paz descanse, partía de viaje!
GONZALO
No hablo de una criada.
MAGDALENA
Hablas de una muchacha que me deje la casa como una patena mientras yo
escucho una radionovela. Hablas de eso, Gonzalo.
GONZALO
Es usted terca, madre.
MAGDALENA
Terca y cumplidora.
GONZALO
Cumplidora con lo que no le corresponde. Es usted una señora.
MAGDALENA
Tú lo has dicho. Una señora mas una señora de mi casa Por cierto, ¿qué se sabe
de las Santisteban?
GONZALO
Eleonora está bien mas de Amelia aún no han llegado noticias del hospital de la
capital.
MAGDALENA
Deberíais ir a visitarla.
GONZALO
Sí, yo también lo creo. Madre…
MAGDALENA
¿Qué es eso que te preocupa y dudas entre decirlo o callarlo para siempre?
Anda, siéntate.
Se sientan en una mesa que hay en el comedor.
GONZALO
Verá… Estuve hablando con Amelia antes de lo sucedido.
MAGDALENA
¿Y?
GONZALO
Me habló de que se le había perdido un pendiente.
Gonzalo se lo saca del bolsillo y se lo muestra.
MAGDALENA
¿Lo encontraste?
GONZALO
Lo encontré instantes antes de que partieran.
MAGDALENA
¿Y fuiste a dárselo?
GONZALO
Cuando fui a dárselo, pude ver qué ocurrió realmente.
MAGDALENA
¿Y qué fue lo que ocurrió?
GONZALO
Disparó a las ruedas del automóvil y el coche volcó.
MAGDALENA
¿Y quién? ¿Quién lo hizo? ¿Pudiste verlo?
GONZALO
 Lo hizo Salvador, el padre…
MAGDALENA
¿El padre de Salva?
Gonzalo asiente y Magdalena queda sorprendida.
GONZALO
Y no sé.
MAGDALENA
Denunciarlo, Gonzalo. Has de denunciarlo.
GONZALO
Madre, Salva ama a su padre ¿Qué dirá cuando sepa que fui yo quien metió a su
padre a la cárcel acusado del intento de asesinato de las Santisteban?
MAGDALENA
Ese no es el problema, Gonzalo.
GONZALO
¿Y cuál lo es entonces?
MAGDALENA
El problema estará cuando deje de amarlo al saber de lo que es capaz. Es ahí
cuando has de estar para apoyarlo mas denunciar un intento de asesinato no
debe ser cuestionable, pecado de Dios sería no hacerlo.

02.06. HOSPITAL/HABITACIÓN DE AMELIA. INT-DÍA

Lucas está sentado ante la camilla de Amelia en la que pertenece inconsciente y
redacta una carta.
LUCAS OFF.
Te pido tiempo. En Ferro el trabajo se acumula por momentos porque una
terrible epidemia azota el pueblo. Soy el único doctor de la zona y en los
diversos hospitales de campaña que se están abriendo no damos abasto para
curar a todos los enfermos que padecen el mal de la varicela. Te aconsejo que
estés alerta y que no viajes hasta que no te envíe misiva asegurándote que todo
está bien aquí. Te amo y solo quiero tu bien…

02.07. CASA DE SALVA, SUS PADRES Y SUS TÍOS /COMEDOR/

ENTRADA. INT-DÍA

Sira se mira frente al espejo y comprueba que esté lista. Alguien entra y da un
portazo. Sira se asusta. Aparece Salva.
SIRA
Salva.
SALVA
¿Por qué me lo ocultaron?
SIRA
¿El qué?
SALVA
No se haga la tonta, madre.
SIRA
¡No te consiento que me hables así, Salvador!
Sira deja el espejo sobre la mesa.
SALVA
¡Usted no me consiente nada! ¿Cómo han podido?
SIRA
¿Cómo hemos podido qué? ¿De qué hablas?
SALVA
¡Me han estado engañando durante toda mi vida! ¡Me han dicho que mi padre
es alguien que en realidad no lo es!
Sira se lleva las manos a la cabeza y suspira.
SIRA
 Es eso.
SALVA
¡Claro que es eso!
SIRA
Salva, todo el mundo necesita un padre.
SALVA
¡Un padre real!
SIRA
Y Salvador siempre se ha comportado como un padre real contigo. Por eso lo
empezaste a llamar padre y a Severo e Irene, tíos ¡Porque han sido los que te
han faltado!
SALVA
¡He vivido en una mentira y usted lo ha permitido!
SIRA
¡Por tu bien!
SALVA
¿Y quién es mi padre?
Se miran a los ojos.

02.08. HOSPITAL – HABITACIÓN DE AMELIA. INT-DÍA

Lucas está guardando la carta justo cuando Eleonora entra y él la esconde a toda
prisa.
LUCAS
¿Eleonora?
ELEONORA
Lucas ¿cómo está mi hija?
Eleonora la toma de la mano.
ELEONORA
¿Pero qué te han hecho?
LUCAS
Amelia no está bien.
ELEONORA
¿Qué es? ¿Qué le pasa?
LUCAS
Podría entrar en estado de coma por culpa del accidente.
ELEONORA
¡Ay Dios mío no! Mi niña en coma.
Lucas las observa mientras esconde hasta el más profundo fondo de su bolsillo
la carta para Simón.

02.09. ESTACIÓN DE TREN. EXT-DÍA

Salvador espera en la cola de la taquilla hasta que llega su turno.
SALVADOR
Buenas, quiero un billete con dirección a Extremadura.
TAQUILLERO
Claro, espere un momento.
El taquillero se da la vuelta y mira, dando la espalda a Salvador, su rostro en un
cartel de “Se busca”.
SALVADOR
¿Ocurre algo?
TAQUILLERO
Sí.
SALVADOR
¿El qué?
TAQUILLERO
Ocurre que pese a que sobran plazas en el tren a Extremadura, no hay billetes
impresos. Si me disculpa, indago un instante con un compañero y dejo resuelto
el problema a la mayor brevedad.
SALVADOR
De acuerdo. Gracias.
El taquillero se va y Salvador espera. Cuando Salvador se da cuenta, el
taquillero, a lo lejos y con dos guardias a su lado, lo está señalando. Salvador
emprende su huida y echa a correr por toda la estación de tren pero finalmente
es atrapado.

02.10. HOSPITAL /HABITACIÓN DE AMELIA/FACHADA.

INT/EXT-DÍA
Lucas introduce la carta en un buzón que hay en la puerta del hospital. Gonzalo
llega y se acerca a él.
GONZALO
Doctor.
LUCAS
¿Qué quiere?
GONZALO
Ver a Amelia.
CORTE:
Eleonora está sentada en la habitación. Gonzalo toca y entra.
GONZALO
Buenas. No es mi intención molestar mas estaba interesado por el estado de su
hija Amelia.
ELEONORA
No te preocupes. Pasa.
GONZALO
¿Cómo se encuentra usted, doña Eleonora?
ELEONORA
A mí no me ha ocurrido nada mas… Amelia…
GONZALO
Está grave ¿verdad?
ELEONORA
Podría quedar en coma.
La noticia sorprende a Gonzalo que se acerca a ver a Amelia en la camilla.
ELEONORA
Es terrible.
GONZALO
Lo es. Yo…
Tocan a la puerta y entra una enfermera.
ENFERMERA
Señora, unos guardias quieren verla.
 ELENORA
Discúlpame un segundo, joven.
Eleonora se levanta y sale.
GONZALO
Encontré tu pendiente ¿sabes?
Gonzalo ve las cosas de valor personal de Amelia en una pequeña mesa junto a
la camilla y ahí se encuentra el otro pendiente. Justo cuando los coloca juntos,
Amelia va abriendo los ojos lentamente.

02.11. CENTRAL TELEFÓNICA. INT-DÍA

Sira se da dos besos con Filo (30), una mujer normal y corriente.
SIRA
Encantada.
FILO
Será un placer enseñarte cómo funcionan las cosas aquí en la telefónica.
Filo le hace un gesto para que se siente en su cabina y ella se coloca justo en la
de al lado.
FILO
Sé que a simple vista puede parecer un poco complicado.
SIRA
Lo es sin duda.
FILO
No. Tan solo lo parece. Colócate esto.
Sira se coloca unos cascos que tienen incorporado un micrófono.
FILO
Tienes dos cables.
SIRA
Ajá. El oscuro y el colorado.
FILO
Exacto. Cuando se te ilumine uno de los círculos del panel, colocas el oscuro y te
pondrá en contacto con el cliente.
SIRA
¿Y entonces?
FILO
Él te dirá el número del cliente y tú, muy amablemente, le dirás que espere un
instante. Entonces, buscas el número en el panel. Supongamos que quiere
hablar con el 38 pues introduces el cable rojo en el agujero del 38 y enseguida,
nuestros dos clientes podrán mantener la conversación gracias a ti.
Sira está impresionada ante la explicación de Filo justo cuando se ilumina el
círculo 11 del panel.
FILO
¿Ves? El cliente 11 quiere hablar con alguien.
Sira introduce el cable negro en el 11.
 FILO
Estupendo.
SIRA
(Sin saber qué decir)
Ho-hola, soy la operadora 99…
FILO
(Ayudándola)
¿Con quién le gustaría hablar?
SIRA
¿Con quién le gustaría hablar?
Sira espera.
SIRA
Con el 44.
Sira introduce el cable rojo en el 44 y se quita los cascos.
FILO
¡Ay muy bien!
Sira, contenta, se quita los cascos.
FILO
Pues así todo el tiempo mas menos nerviosa.
A Filo se le ilumina el panel.
FILO
Cualquier duda no has más que de decírmelo.
Filo se pone sus cascos y realiza el trabajo en su panel.
FILO
Operadora 98, ¿con quién le gustaría hablar? Enseguida.
Sira se pone los cascos y escucha una conversación.
HOMBRE 1 OFF.
Ya hemos encontrado a quien atentó contra las Santisteban.
HOMBRE 2 OFF.
¿Quién ha sido?
HOMBRE 1 OFF.
 Un hombre, Salvador Muñoz.
HOMBRE 2 OFF.
¿Tiene antecedentes?
HOMBRE 1 OFF.
Un revolucionario con posibilidades de haber participado en movimientos
anarquistas.
Sira, asustada, se quita los cascos y se levanta.
SIRA
Tengo que irme.
Filo, sorprendida, se quita los cascos.
FILO
¿Cómo que te vas?
SIRA
Que me voy, que tengo que irme.
FILO
¿Qué ha pasado?
SIRA
Ha habido un problema con mi marido. Tengo-tengo que irme.
FILO
¡Yo no me hago responsable de tu panel!
SIRA
Filomena, por favor.
FILO
Bueno, le echaré un ojo de vez en cuando ¡pero no me vuelvas a llamar
Filomena!
SIRA
Gracias.
Sira se marcha corriendo.

02.13. HOSPITAL/PASILLOS. INT-DÍA

Gonzalo está en la puerta de la habitación justo cuando sale Eleonora.
GONZALO
¿Qué tal?
ELEONORA
Aún es pronto para conocer un diagnóstico.
GONZALO
¿Qué está haciendo el doctor?
ELEONORA
Le realiza unas cuestiones para saber si ha podido perder la memoria o alguna
otra secuela del dichoso accidente.
GONZALO
Lo importante es que han detenido al culpable.
ELEONORA
Gracias a ti ¿o me equivoco?
GONZALO
No se equivoca, Eleonora.
ELEONORA
Lo mejor será que te vayas.
GONZALO
¿Cómo?
ELEONORA
Lo siento, Gonzalo mas mi hija está comprometida.
GONZALO
Yo no he denunciado por su hija.
ELEONORA
Has denunciado porque lo has visto.
GONZALO
Exacto.

ELEONORA
Bueno ¿y dónde está el problema? Yo te aconsejo que vuelvas a casa. Tu madre
acaba de perder a su marido y allí te necesitan más que nosotros aquí. Mi hija
aquí tiene a su prometido que además es doctor y va a estar a su lado en todo
momento.
Eleonora le pasa la mano por el hombro.
ELEONORA
Todos necesitamos descansar.
GONZALO
De acuerdo. Buenas tardes.
ELEONORA
Buenas tardes.
Gonzalo se va.