Está en la página 1de 2

Si es necesario, es posible

Miguel Ángel Buonarotti lo dijo muy sencillamente: “la estatua está dentro del bloque de yeso; sólo
hay que ir sacando el material sobrante para llegar hasta ella”.

Eso que buscan la maza y los cinceles de un artista es la forma final de su visión, definida con la
simple grandeza del genio italiano. Para generarla, pone en juego lo que vayan dictando su sensibilidad y su
talento, apoyadas en lo que ha aprendido, lo que ha experimentado, las competencias desarrolladas, su
inteligencia emotiva y su equilibrio espiritual.

Lo que es necesario, es posible.

Todo proyecto arranca en una idea. Lo que llevará esa idea a una obra es su componente emocional.
Cuanto más sientas esa idea en tu cuerpo y vivas como si estuvieras “dentro de ella”, estarás creando lo que ha
imaginado tu visión. Por el contrario, si la idea da vueltas por tu cabeza, va y viene, discutes con ella y más la
cargas que disfrutas, estás en el mar de la ilusión. Lo que existe allí no existe aquí.

No estás todo el tiempo inspirado porque no hay tantas cosas que te inspiren. Sólo pasa con lo que es
necesario que pase. Que te pase, cuando sea que tiene que ser. No sabemos, en general, cuántas cosas influyen,
cuántos astros tienen que alinearse ni cuánto ayudamos (y no), conscientes de eso, para que se concreten nuestros
proyectos. Pero tampoco importa demasiado.

Tu mayor capacidad para ajustar el proyecto está ahora. En cada ahora que transcurras “en” el
proyecto. En plenitud de tus datos, saberes y sentimientos estás en condiciones de hacer los trazos gruesos y
finos. Darle la terminación más acabada que decidas. No tienes apuros ni necesidad de influencias de terceros.
Será tu modelo. Diseñas las etapas, defines recursos requeridos antes y durante las mismas, haces el plan o
programa de avance con detalle de tareas, convocas (o precisas) colaboradores, proveedores y aliados, los eliges
y aseguras, combinas actividades, negocias, ajustas y te dispones a ejecutarlo. En el camino, monitoreas el
progreso de las obras según el plan para estar presto ante eventuales desvíos y necesidades de correcciones. Vas
haciendo evaluaciones parciales de los resultados esperados. Puede haber replanteos por acciones internas del
proceso o por influencias externos, o todo seguir su curso normal. Todo previsto y marchando apropiadamente
según lo visionado, hasta que sea la visión. Corte de cintas y aplausos.

Déjate llevar, fluir en esa rueda mágica. Cree en lo que te escuches.

Lo que es necesario, es posible.

No bases las decisiones de tu vida en atender consejos de quienes no tendrán nada que responder ante
los resultados. O que no los disfrutarán como tú. Serán ajenos al producto y, por lo tanto, son ajenos a su génesis.
Por lo mismo, recuérdalo cuando le hablas a otro quien o el mismo no te preste atención.

Cuando el plan sufra cambios y trastornos que lentifican el avance, cuando quieras más de lo que
vivas, estarás escuchando a otros directores de obra. De otras obras, no de la tuya. Que esperan que hagas su
obra y no la tuya. Y no sabes. Y no sale. Te desilusionas y enroscas con tu propia cola. Te inmovilizas y es el
fin del proyecto. Lo tomas como un fracaso y deliberas sobre tus capacidades, tus agallas, tu fe y hasta tu suerte.
No existe todo eso en tu cabeza. Todo eso existe en tu vida, donde lo que es necesario es posible.
Aceptar que algo no pase como lo quieres ver pasando no es tu rendición. Es liberar las emociones
negativas que ha generado tu ilusión. Lo que quisiste creer, lo que te gustaría que pase, pero no lo viste antes. La
vista es uno de los sentidos. O sea, que no has sentido eso. Aceptarlo es sabiduría. Es todo ganancia. Ninguna
pérdida de lo que nunca fue necesario ni posible.
En algún lugar luminoso, donde vas a cargar baterías cada tanto, están tus obras maestras. Allí te
esperan los bloques de yeso y las mazas y cinceles: tus virtudes, tus amores, tus verdades, tus posibilidades y tus
necesidades. Probablemente, nos encontremos en algunas necesidades, comunes.
Lo demás, como el material que sobra, no es tuyo. Pura ilusión. Nada.

También podría gustarte