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HERBARIO DE AMORES DULCES

HERBARIO DE AMORES DULCES

Edición limitada y numerada de 500 ejemplares

Piezas
Azules
<quererte querer queriendo

cazar mosquitos,

digo larvas,

digo letras>

COLECCIÓN PIEZAS POÉTICAS Comenzar a decir dudas en alto, comenzar a querer decir las dudas en
Primera edición, marzo 2023 alto, comenzar a querer.
@ De los autores Empiezo este prólogo con vocación de final, tras recoger y ver qué pasa
@ De las ilustradoras
@ Selección y prólogo: Andrea López Montero en esas dudas, qué con el amor que lanzas sin saber hacia dónde sucede,
edición: piezas azules, editorial independiente. qué otros interrogantes, cuántos temblores.
licencia de la edición: creative commons.
reconocimiento no comercial compartir igual 4.0 España. El último poema que recibo contesta a mi reclamo y ahí veo que no
diseño de portada: Elisabeth Karin Pavon Rymer Rythen
he logrado decir qué dudas tengo, siquiera resolver o compartir, pero
ISBN: sí convocar muchas respuestas, nutridas, como un jardín poblado de
Depósito legal: caminos porque sí: hay preguntas que nos despiertan el movimiento,
Piezas Azules llamábamos en nuestro lenguaje a los proyectos locos que se nos ocurrían.
que nos llevan a abrir la boca, rápido, que nos dicen también los miedos
Eran proyectos con los que nunca nos haríamos ricos, con los que posiblemente nos propios y nos abren un hueco a conocer la vulnerabilidad del otro, su
hiciéramos más pobres, pero eran tan bonitos que tenían la vocación de no quedarse para
siempre en el terreno de los sueños. sospecha.

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Y qué con el amor. Así acababa el email, el primero, que he mandado a cada autor. En esta
sentencia creo fielmente.
Por qué, dónde, duende, cuándo.
El amor nos necesita/lo necesitamos: es la respuesta, incluso para quien
No sé qué le sucede normalmente a quien antologa, no sé si hay un
duda si existe, para el cambio: el amor es motor, es pálpito, es la enaje-
normalmente en algo, la verdad. Yo pienso en tribu tantas veces que
nación necesaria más pura, más dulce, más, también, erosionante: del
estar con textos y con emails durante medio año ha sido finalmente
amor no podemos salir indemnes, como no podemos hacerlo del soni-
como estar hablando, algo raro, en mil cien sitios, algo raro y a la vez
do, de la palabra, de la vida.
la esencia propia de la literatura, de la escritura, del amor: hablar con
muchas voces y también no saber cómo comenzar a decir nada de esto. Contaba, cuento, cómo esta idea de antología (que tanto ha ido cam-
biando y transmutando, porque el amor también es metamorfosis) sur-
Al final entiendo que he conseguido provocar un poco de inquietud.
gió de hablar con Berta sobre qué cansados estábamos todos, tanto, que
Convocar, hacer voz y hacer caleidoscopio: en verdad todo, el amor, querernos querer parecía imposible, cómo de repente todas las conver-
también, trata del movimiento y del espacio: movimiento, espacio, saciones derivaban en ese cansancio puro, de un peso de titanes, casi sin
tiempo, temperatura, sensación. anécdotas, sin brindis: estoy cansada y ya solo me recojo de forma útil,
quiero de forma útil, me comunico de forma útil: pavor, yuyu, susto.
Decía: no he logrado contar para hacerme entender, pero he logrado
Hay que hacer algo, hay que hacer: acción.
desentender al hacerme contar.
Surge pues esta idea como un deseo de salvar el espacio para el amor, el
No he conseguido -confieso- explicar nada y eso me gusta: quizá querer
amor con todo, el amor de piel, el amor del solitario, el amor de nuestro
es estar pese a que entendernos sea imposible.
perro, del gato, el amor con órganos, el intelectual, el breve, el serio, el
Amor combate, amor derrota. Amor por sospecha, o como me dice G., amor urgente, el dulce, el íntimo, el tribal, el amor distancia. El amor
por intuición. deseo.

Intuirnos. Dice Anne Carson: eros es un verbo.

; El por qué, el para qué, el cómo de este herbario es convocar la acción.

//del por qué//para qué//cómo// ;

Te necesitamos en la antología, el amor lo hace. //la defensa de lo vivo//

He dejado de pelearme para tildar acentos ¿no empieza así la desazón?

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Pareciera a ojos cerrados, a ojos de la publicidad, a quien se asomase, //quiénes, quiénes, cuáles//
extraterrestre, a lo cotidiano del día a día que el amor hoy sucede en la
Amar es primitivo y yo os amo a todos.
app. El consumo de.
Capricho, deseo, gusto. Variedad.
El amor, un elemento relegado a ser cuerpo en una app. La pareja, neu-
tra, sosteniendo el cansancio, el deseo dónde. Qué deseo. Cómo. Tan Etimológicamente la palabra antología viene de escoger flores.
cansados para querernos, tan cansados para querernos querer.
De alguna forma este ha sido el deseo, es imposible convocar a todos
Ante ese peligro de la ruina del deseo, la alerta: amar. los jardines, pero hay una pequeña selección aquí de voces vivas.

Entender el deseo. De voces vivas que traen nuevas definiciones abiertas, que fracturan el
límite de la palabra y la amplían: un jardín, que es una constelación, que
Entender la vulnerabilidad.
es celebración y fiesta.
Dinamitar el tiempo útil.
Amor zoo-vivo, amor transformación, amor río, amor casual, encuen-
Dinamitar la utilidad. tro, amor distancia, amor mediano, amor ternura, amor cansado, amor
cortés, amor conjuro, amor combate, amor de hadas, amor urgencia:
Sacar al amor del terreno de la melancolía, volverlo vivo, darle tendo-
¿sobrevivirá el vínculo?
nes, cuerpo, palabra: tal es la pretensión de estas voces. Obsesionarse
con esta necesidad, convocarla. ¿Equivocarse? Seguro. Amor y eco.

Pensé inicialmente que podía haber una diferencia de generaciones. Pen- ;


sé porque pensar es un yoyo que nos devuelve matices y nos des-piensa.
//sustrato: turba, turbación, tierra rara: de aquí hacia el esqueje
Qué diferencia hay entre escogerse en un contexto digital, en un bar, en
que no sospechaba el paisaje//
el círculo de amistades: la palabra la dio Mariano: el amor es azar.
No quiero estar cansada para quererte
Azar y no. Azar y cultivo. Azar, cultivo y clima.
querer.
Quien dice clima, dice tiempo. Amar es coincidir y cuidar el esqueje.

;
Que el tiempo y la temperatura eran indivisibles lo supieron los griegos.
;
El tiempo afectado del calor o del frío, su manera de alargarse, las tres
;

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estaciones. Un cuerpo que ha de dar de sí el cuerpo-todo al deseo que siente, que
no puede no hacerlo salvo que nada tenga que sentir, cómo enfrentarse a
El brote, la piel de las plantas, el fruto y el vientre. Así las Horas, diosas
ese cuerpo enajenado casi mágico de los amantes, cómo silenciarlo para
menores y, como todo lo pequeño, imprescindibles, ponían el escenario
que el equilibrio de los acuerdos que están fuera de la piel se nos sosten-
preciso para el deseo.
gan, cómo generar un cuerpo donde la pulsión de vida no quepa, donde
El cuerpo hecho de tiempo, de brote, de sintaxis, el cuerpo y sus esta- la pulsión de muerte no quepa, donde la pulsión no, solo un rumor de
ciones, el pudor, el secreto, el encuentro, los años, la traición y los años, dicha silenciado- organizado, rentabilizado, negador del deseo en sí en
el pudor, el secreto: el deseo en el cuerpo, de forma circular. cuanto a colmar físicamente, sin duda- un cuerpo administrativo, hecho
de trámites donde la dicha ocupa un app más.
El cuerpo del amante desequilibra los tiempos de una forma inusita-
da: hace del tiempo algo largo, frío, eterno y dubitativo hasta llegar al El cuerpo del sistema, el cuerpo de la producción, el cuerpo en la rueda
cuerpo deseado, y a su vez breve, cálido, enrojecido ante el cuerpo del del consumo, agotándose: el amor, pospuesto, utilitario, hueco: contra
amado, que detiene a la vez que acelera los minutos. el cuerpo enamorado que no atiende a la necesidad de un mercado que
lleva el alma muerta.
Ese ensimismamiento improductivo que vuelve al cuerpo paciente, no
solo en espera, también en afección: el cuerpo-cuerpo que padece y Rota la fe unida, el cuerpo volvió a dudar y entonces, entonces tuvo
sobrevive en un tiempo irregular, en un cuerpo inmensurable y egoísta, tanto que hacer sin el hacer que qué le queda al cuerpo: una esperanza
lejos de la utilidad y el ensamblaje. Un cuerpo libre de la responsabi- de calendario. El cuerpo sometido a la acción, un cuerpo tropezando,
lidad en tanto que se ve atado al deseo de otro cuerpo que lo autoriza con voces de allá fuera que desordenan e inventan, aumentando sin
y lo eleva a la misma velocidad que lo destruye. Un cuerpo inútil para parar, los impulsos.
cualquier cosa que no sea el deseo. El cuerpo anticapitalista, el cuerpo
Un cuerpo como en ay retoma la caída: no queda adorno en la sala que
en pro de lo irrepetible, el cuerpo elevado por, elevado hacia: divinidad.
eleve la postura o nos levante los hombros, la mirada no tiene ya nada
Un cuerpo enajenado, asistemático, que desoye la norma y todo lo des- que mirar, allá al fondo del ojo, la mueca se averigua: desganados, apá-
oye: un cuerpo para el cuerpo, pendiente del temblor. ticos. Opacos, impenetrables.

Un cuerpo improductivo, anarquista, radical, un cuerpo peligroso e in- Con los cuerpos cansados. NO.
dependiente, por dependiente de la furia de la entraña: un cuerpo atra- En el cuerpo, cansado. NO.
vesado. El cuerpo tan cansado. NO.
Cansados. NO.
Un cuerpo de venganza, un cuerpo animal, un cuerpo de conjuro, hecho
Los cuerpos allá afuera tan cansados. NO.
de cantos, con cal y ácido y sorna.

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Estamos tan cansados qué dónde queda el tiempo del cuerpo que se Cómo no hacer, cómo no actuar, cómo no armarse con semillas y esque-
entrega: a qué, con qué energía. NO. jes y poner en pie la vida.
Hablamos del cansancio. El deseo lo tramitamos, hablamos del cansan-
Queremos incendiarios en el color.
cio. NO MÁS.
El cuerpo tan cansado. El cuerpo sin la mente, cansado solo ya, el cuer- El amor es jugársela, arriesgarse a la pérdida: ceder la vulnerabilidad a
po sin las dudas, tan solo ya cansado. NO MÁS CANSANCIO. otro, piel que entregas y duda.
Cansando hasta el silencio, en un cansancio gris que nos cierra la boca.
Qué hacemos: algo que no sea útil.
El cuerpo de los ojos por un sitio, inyectados, con susto, el cuerpo sin
Por ejemplo, un murmullo.
retina. NO: ESCOGEMOS MIRAR. ESCOGEMOS MIRARNOS.
Por ejemplo, un poema.
Por ejemplo, resistirnos.
El cuerpo de los hombros que caen y solo dicen: qué cansado es todo.
Por ejemplo, entregarnos.
Cómo estás: estoy cansado. Qué puedes decirme: estoy cansado. Cómo
En concreto: entregarnos.
te sientes: no lo sé. Cómo van tus amores: cuándo. Cómo va el entu-
Al deseo, a lo inútil, a la nuca ya recta, decidida.
siasmo: cómo ¿qué? Cuéntame tus valores: qué cansado. Cuéntame tu
Al amor.
verano: tan cansado. Cuéntame algo bonito: para qué. Cuéntame qué
has vivido: no recuerdo. Dime, qué sientes: no sé si siento algo, acaso
Cansarse en el amor. Cansarse por exceso. Cansarse y no hacer nada,
siento gris.
salvo hacer el amor hasta que irrumpa un vecino, hasta que te echen
No. del trabajo, hasta que la tribu viva al borde de las bocas en canto, rito
Pausa. y juego.
No.
Cansarse como antes. Cansar al cuerpo a base de otros cuerpos, vol-
ver a estar de pie, jugar en corro vivo, hacer cuenco a la lluvia entre
Movimiento. las manos, cansar las palabras que administran con las palabras de los
Hacer. amantes. Hacernos un lenguaje a la medida del canto, de la risa, del
Vivir. venido. Hacernos el lenguaje único de dos, de varios, de la intimidad,
Sonido. hacernos juego de lenguaje, travesura, pillería. Amarnos y amar a los
Tacto. otros hablándonos de amar. Desearnos sintagmas, asombros, dudas vi-
Cuerpo. vas. Desearnos.
Lucha.

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Empezar los poemas, acabarlos también, cuidar el tiempo de nuestras No sé bien concluir ni resumirme: también creo que la vida es generosi-
amigas. dad y desorden y este prólogo un intento vital de sustentar un pequeño
mundito dulce.
Convocando a Afrodita, querernos hasta el límite de la llaga y la muerte.
querernos, al fin, como un ecosistema. Nada más.
Del relámpago en el estómago, del hogar que nos crece entre el ombligo
y la boca y no para de latir. .

Permitirnos el lenguaje de lo cursi, morder la lengua toda que nos viene


a morder, saltar el alarido, caer exhaustos de sonido y, en la piel, crear
Andrea López Montero,
constelaciones.
Madrid. Diciembre 2022.
Hacerlo en el blanco con las letras, amar también con miedo, sin huir.
Seguir amando.

//jugar, jugar, jugar//

Y no lo estoy, no estoy cansada: estoy cantando.

Jugar, querer, cuidar se trata del hacer. No entendáis nada.

//ñoña, ñoño, ñoñería, cursilada, rosa chicle//

No entiendo del cansancio, entiendo de sintaxis, del balbuceo.

No entiendo tampoco del amor, supongo que entender, no entiendo mu-


cho: pero sí me debo a la sospecha, al deseo.

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ABRAHAM GRAGERA

[amor fragmento]
No tiene que ver con percibir una única parte, es el amor que permite
que el tiempo suceda en todos los sentidos: a la vez y por separado.
Amor-atención, amor-lupa. Describe el tacto exacto sin tocar.
Sobre el amor

Hay en las piedras de este paisaje amarillento


estrellas que cayeron cuando tú no existías
aún. Las estoy viendo brillar, enrojecidas
por el sol del ocaso, muy lejos de tus ojos.

Estrellas que pesaban mucho más que la noche.


Fragmentos de constelaciones que no tuvieron
nombre y que reúno fugazmente en mi memoria,
como una gota de agua derramada en la arena,

antes de que la noche los vuelva inencontrables.


Lo sé, es vano este trabajo, es pretender
la plenitud del ave partiendo de una sola
pluma, el universo trazando torpes líneas

que van a dar a ti, estrella nunca sida.


Sé bien que es imposible imaginar el centro
de tanta gravedad desparramada, de tanta
periferia indiferente a su desposesión.

Algún día, el suelo que ahora te sostiene


vagará hecho pedazos a través del vacío
hasta depositarse en un suelo semejante.
Tus huellas llegarán más lejos que tus pasos.

Puede entonces que alguien de aspecto insignificante


abrigue entre sus manos un trémulo cristal,
un oscuro latido, el brillo inabarcable
de lo que en otro tiempo fue tu corazón.

Y una sola piedra le daría sentido a un mundo


que ya te estará amando sin saberlo, un mundo

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erguido frente al centro y frente al caos. Albada
Si no estoy a tu lado cuando el sol se anuncie

recorre sus caminos sin temor, descalza. Somos como los siglos
Si he perdido mi tiempo en los alrededores, antes de separarse.
la voz en cada obstáculo que piso, Espera un poco más, amor,
lo he hecho únicamente para evitar que caigas. que el mar está lloviéndonos aún,
que no llegamos tarde.
De Adiós a la época de los grandes caracteres, 2005.
Que ya no teme la semilla
caer sobre la roca,
y el silencio y la oscuridad se besan,
y mi mano te busca,
y hay otros en nosotros que se tocan

sus pieles encendidas.


Estar desnudos es venir de lejos
y siempre estar llegando.
Espera un poco más, amor,
que nada es poco para los que esperan tanto.

Que el aire se hará llama,


como la voz aliento,
como ahora es de noche
y el ojo mira a las estrellas,
y las estrellas miran hacia dentro.

De El tiempo menos solo, 2012.

24 25
ALEJANDRO SIMÓN PARTAL

[amor luz]
La capacidad de filtrar el entusiasmo está mediada por el calor, por
asentar: un cuerpo solo no deja pasar la luz, dos cuerpos la encien-
den.
Finitud sanada

Amar es concretar una evidencia,


que tú me mires y yo exista,
apurar en un nombre todos los destinos,
o entender, por ejemplo, que lo infinito
prefiere la cordura de las metas posibles,
que las cimas se miden
cuando hay alguien dispuesto a subirlas,
que la muerte hace sitio
para que otros pisen la tierra
mientras la hierba crece.

También supone aceptar las limitaciones


de lo demostrable,
entender que las mejores herencias
son una forma de renuncia prematura,
que el gran misterio queda resuelto
cuando esa persona llega sin más
y lo reduce a una tarde junto a un castaño
o a un hueco en su armario
que parece suficiente,

el sereno milagro de aquel


que sin acontecimiento
logra que la tarde
se reconozca en eternidad

y descienda
creando de los dos
un mismo deslumbramiento.

De Una buena hora, 2019.

29
Bendecidos

Y de pronto, del suelo,


se han alzado los tomates,
como una pasarela de luces rojas
con las que se inaugura el verano.
El animal en celo. Alguien encala la casa.
De repente, un exceso de vida
se ha impuesto en nuestra rutina.
Podemos saltar al vacío o amar sin cautela,
desaparecer hasta que no podamos más,
pero solo salimos a la puerta
y nos sentamos al fresco.

Quiero decírtelo de la forma más sencilla,


sin laberintos: estamos bendecidos.

Ya nada va a poder con nosotros.

De Una buena hora, 2019.

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ANDREA ABELLO

[amor esfuerzo]
Dudarse, cuestionar, sacar la garra.
Amor que pierde el terreno y lo afirma, amor-hueso con sus pregun-
tas vivas, trastabillando.
El deshielo

Leyendo “The Couriers” de Sylvia Plath

Una criatura blanda espacia


su esfuerzo. Sube,

pero algo sólido vuela al abrir


lo cerrado, polvo

manojo de desiertos, todo lo que brilla


en el dorso, ácido.

Mi mano es joven y madura,


y gotea sumergida bajo el crujido.

Alguna ondulación. Tocamos tierra.


Algo líquido se agita.

Es mi estación, subir a la luz


henchida de flores, saberme agua turbia,

esforzada, esforzada, mi temblor.

Inédito.

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Una novia pide trabajo Es una prueba de agua, de verde, una prueba
contra el techo que baja en el piso,
Para Julia bellísima cripta.
Leyendo «The Applicant» de Sylvia Plath
Un ser amado puede drenar su cabeza, hacer
¿Has perdido mucho el tiempo? una exposición de materia blanca
«Cuestionario pre-matrimonial», Berta García Faet como fugas de llanto entre las placas
de su cráneo. Aún podemos
aprovechar esto.
¿Puede usted procesar estas anémonas blancas?
¿Le falta ¿Tiene usted miedo? ¿Tiene usted
alguna cosa en este mundo amigas?
para la adecuada verificación de las huellas ¿Ha visto alguna vez
de sus pezuñas? tanta blancura?
Tiesa como un papel,
¿Nos tiende usted la mano para apretar sus tornillos?
¿Hay huellas digitales en su cuerpo? pronto llena de huellas digitales,
Nada es válido, ¿cómo concederle pronto sellada en sociedad,
una labor? No llore, perfecta identidad compulsada. Ahora
hay cicatrices en el casco, nada más. No recuerda puede pedir, llamar,
cortar en dos esta mano.
la historia entera. Hay una fuga,
va perdiendo cosas. Mire: hemos cambiado
Un ser amado puede la huella, fósil binario. Un ser amado puede
masajear sus sienes, autorizar el derrame. drenar los restos,
Un certificado matrimonial no valida una firma. tal vez se quede a cantarle
firme aquí, aquí, aquí.
Un ser amado puede cerrar sus ojos, regalar
lengüetazos de amoníaco, echar cubitos Inédito.
al agua. Tal como es
no nos sirve.
Puede probar con un nombre que no conste aquí.

Tiesa como un papel, un ser amado


puede llevarla a casa.

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ANDRÉS NEUMAN

[amor hogar]
Amor de aprendizaje y tiza: el latido recíproco que nace de dos cuer-
pos, sonar a la vez en cada uno de uno, ser multiplicidad, tejer sus
referencias. Devolverle al tiempo la materia que da: continuarse.
La noche entre paréntesis

La noche entre paréntesis


y su adictivo roce
bastaron para hacerme conocer
el ansia elemental,
el ritmo de unas ropas,
la opinión de una vela,
la música recíproca, un rincón,
el peso y la medida del olvido.

De Métodos de la noche, 1998.

43
Canto de ti Robamos varias llaves,
insistimos en libros siempre a medias,
Para Erika, en su 40 cumpleaños íbamos a conciertos sólo para mirarnos,
tachábamos palabras y sabíamos
callar sobre la hierba.
Nos conocimos a la edad precisa
en que todo cambiaba. Poco a poco nos fuimos eligiendo,
Éramos tan de aire como una antología del amor.
que no lo percibíamos, Estuvimos seguras no por ninguna estrella
como el viento no tiene referencias ni intuiciones pasivas, que es opresión con aura;
y las ganas le brotan sin querer. estuvimos seguras porque el tiempo
conversó con nosotras y nos hizo,
Ibas, recuerdo, en medias de resplandor cinéfilo, entregándonos toda su materia.
te movías con la seguridad Y poco a poco fuimos traduciéndonos
de quien sabe que algo va a ocurrir en esta lingua franca, de una a otra orilla.
y aún no sabe qué es, y lo celebra. Porque nos enseñamos lo mismo que aprendimos.
Sonreías con nota a pie de página.
Fumabas como dando una opinión. Tuvimos cada una nuestra casa,
Tu nuca descubierta era más amplia fabricamos espacio, contexto compartible.
que el tacto del futuro. Crecimos cada cual por separado
para que fuese ancho el habitar.
¿Cómo iba yo? ¿Recuerdas? Me imagino Nos recuerdo en tu alfombra,
haciendo lo posible por desaparecer una mezcla de gata y de naranjo.
bajo ese abrigo largo que tenía Aquel banco zancudo que jugaba a trepar.
más memoria poética Aquel pequeño armario donde tu piel se hizo
que el resto de mi cuerpo. tan grande como el mundo que nombrábamos.
Sospecho que mi pelo se exhibía
para cubrir el miedo digamos específico Hubo tantos estantes en la siguiente sala
que tienen las cabezas extranjeras. que hasta la noche oscura se leía.
Nos costaba dormir siendo contiguos,
Pronto nos habituamos a buscarnos tus ojos dialogaban con el amanecer.
sin retenernos: cultivamos el modo accidental. Había una campana en una puerta
Veías a otra gente y yo también. y un vinilo en silencio:
El deseo coral nos iba haciendo la música de hablarnos.
íntima multitud.

44 45
Y fuimos y vinimos, como el mar en cada dedo que se entrelazaba,
que a veces visitábamos a la luz de los versos esos dedos de grillo que aún teclean
en las manos. Vacaciones desde mesas recíprocas.
era para nosotras el trabajo
de hacer introspección en compañía. Igual que los ancestros murmuraron
Así se ama y se escribe, eso supimos, al oído o al margen,
deseándole un plural al yo que canta. que una generación entera se redujo al absurdo
de su propia potencia,
Devoramos fronteras te tocó aterrizar en pleno páramo.
que ampliaron el perímetro de nuestra intimidad. No perdiste las alas
Nos pareció que había hogar en todas partes porque nunca pudiste permitírtelas:
o una fiesta de centro disponible. el vuelo era cavar
Plegamos las ciudades con la ropa, las fosas del relato, más adentro.
releímos reflejos, Fuiste fuerte y precaria,
abrazamos montañas, fuimos carne de remo y cuatro brazos.
llegamos a un desierto con gotas de sentido.
Viajamos para ver qué veía la otra. Y chocaste con algo, y ese algo
Invertimos inviernos en nuestra resistencia. se desplazó del golpe. Hubo un esguince
en cada percepción. El ansia lenguaraz
Ganamos una casa y yo perdí una madre trascendió el techo.
en la misma mudanza de relojes. Y de pronto hubo aire a trompicones,
Vinieron los bisontes y aplastaron esa especie de oxígeno
esta espalda que abrazas. brusco, posdoctoral
Hicieron su trabajo de dolor, que tomó los pulmones al asalto
pasaron y se fueron. y el cuerpo laboral de los pensantes.
Plantamos dos abuelas. Rabiábamos tomadas de la mano,
Crecida, nunca intacta, el eros salpicado de política.
conseguías flotar de inteligencia Y la historia crujió como los goznes,
en un mar removido. porque la expectativa da la escala
de su propia violencia.
Habitando las pérdidas,
amueblando los huecos, Pero hay una marcha, la única que entiendo:
comprobamos la fuerza de elegir el ritual. seguirte y deducir adónde vamos.
Conviviendo entre reglas que inventamos, Revisar mis pisadas, su extravío de muchos.
nos corría un anillo sin cerrar Escucharte diciendo, resonando en tus otras,

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aspirar, ojalá, a ser una de ellas.
Una de las que cantan saliendo de su asombro.
Te veo hacer y ser y transformarnos
y no encuentro un espejo, sino más horizonte.

Como el tiempo ironiza ante mis cálculos,


me extraña que hoy perdone cierta simetría:
media vida sin ti, en preparativos,
entrenando los músculos del alma;
y la otra mitad en el encuentro,
reunidas hasta el último aliento de lenguaje.
No podemos saberlo, pero bien lo sabemos.

Ahora, sin querer, cumples cuarenta.


Es el único número redondo
que se adapta al desorden de tu alcance,
tu pulsión polimorfa.
Hoy somos nuestra propia creación,
dos aprendices
de nuestro ser nosotras.
Mi amor cumple cuarenta.
Nuestro amor sin edad, que es adicto a aprender.

De Casa Fugaz, 2020.

48
ÁNGELA SEGOVIA

[amor partícula]
Amor blanco, que zumba.
Caminar, soplar, hacer la hierba. Asustarse de la hierba. Asustarse
del conjunto. Hacer el conjuro.
Amor magia: una luciérnaga en el umbral.
La guarida de las hadas

Tenemos cientos de mariposas


Un millón
Tenemos tortugas
En la orilla son devoradas
Por los caballos
Los caballos de ojos entrecerrados
Brillantes
Enanos
No sé, muchacho, me sostienes la mirada
Parado en el umbral
Yo no soy nadie
Te lo advierto
En las montañas bajan cortinas
De cientos de mariposas
Descienden tortugas
Hié
Hié
Los caballos
Con los párpados entrecerrados
Las patas de rueda
Mordisquean
Banquetas con vástagos de hierba
Flecos
Delantales
Cabríamos dentro
En la forma de hadas
Cientos
Minúsculas
Hitos de partículas
Pesadas
Flotando
Somos hadas

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Hagáis lo que hagáis Blancura
Fzz Me pareció
La sangre que chorrea Ver
Pálida Un huevo azul
De las junturas Brillante
* Gritó
No tengo ningún granero O yo lo sacudí
Ni estrellas Me fui corriendo
Mi cuerpo recibe Pero sus gritos
Sus dibujos horadados Me perseguían
Las manos sobre todo Me tapé las orejas
Lo padecen Tenía orejas rosas de conejo
Somos brillantes Me las até a la cabeza
El cielo, un trozo aún celesta Miré atrás
Los pequeños alados El huevo se había vuelto negro y zumbó
Me tratan a empujones Las paredes blancas se transformaron
Me sacan de una estancia En maleza
Ellos me meten en otra En la male
Las camisetas blancas Zzza
Hacen flotar
Echan polvo y polvo Inédito.
Me esconden detrás
Tengo miedo de la hierba
Pero no me voy a levantar
Sólo estirarme y plegarme
Sobre esta cuerda
Que han tendido
Ahora soplan
Fzz
El muchacho continúa derramando
Un vaso de leche
Contra la pared
Fzz
*
Entre la

56 57
ÁNGELO NÉSTORE

[amor escama]
Amor animal, amor valiente.
Sostener frente al miedo la mano cerca, rescatarse en el cuerpo, ser
cuerpo, nutrir la flor.

59
Si viviera Franco estaríais muertos

Si viviera Franco estaríais muertos,


nos dijeron y, míranos,
diez años juntos en la ribera,
la hierba nos alcanza las rodillas.
Algún día, crecerá el prado,
nos vestiremos de este campo,
todo será verde, brillante y fresco alrededor.
Algún día, la espesura será tan alta
que ocultará el secreto de nuestros deseos
y ni los gorriones, ni las flores ni los grillos
temerán el chocar cansado de nuestros cuerpos.
Volveremos así dispuestos a nutrir esta tierra,
porque nuestra será para siempre
su primavera.

Inédito.

61
De por qué me pongo tus camisas usadas

La ropa que tú has usado


me define más que las flores aterciopeladas de mis camisas.
Cojo una de las tuyas de la boca de la lavadora, antes de encenderla,
y la guardo en la penumbra del armario
donde sé que jamás la encontrarás.

Rescato tu camisa del peligro


de no tenerte cerca, y me introduzco en ella
para estar por casa,
como si la ausencia se aliviara con la misma tela
que antes sostuvo tu cuerpo.

El polvo que habita la casa


es en su mayoría escamas humanas,
y yo quiero que la muerte me sorprenda dentro de muchos años,
después de haber llenado las esquinas oscuras de nuestros muebles
con tu vida.
En el fondo de los armarios se acumula lo animal y lo eterno.
El olor salvaje que llamamos hoy amor.

De Hágase mi voluntad, 2020.

62
ANTONIO RÓMAR

[amor guarida]
Estar y estar, saber que estás, estar tan lejos, amor de cueva.
Entre los huesos solo está el yo, amor distancia, sólo está el yo, sin
un tú ¿qué dicen las palabras? ¿qué se queda?
Tendencia a un cierto valor

hay una gran mentira


y es la piel.
la piel te hace creer que hay un adentro y un afuera,
la piel se finge límite de ti.
y somos, sin embargo, novias de la ruina,
somos nada en tránsito,
carne en camino del aire vacío.

pues ni siquiera tú,


que estás ahí,
estás aquí.

así que nos buscamos una casa


y no tenemos dónde guarecernos.
la lluvia nos deshace.
así que registramos meticulosamente
los accidentes nimios. guardamos dientes viejos
en cajas de madera hinchadas de humedad.

hacemos de las cosas esa piel


y el tiempo la traspasa, le da igual.

tratamos de hacer piel con los recuerdos,


lo que nos sale es cuero, arena, polvo,
tristeza de cetáceo.
volumen de océano viejo.
la música de baile de nuestra plusvalía.

así que nos ocupa dejar huella


y luego viene el hielo y la sepulta
debajo de un kilómetro de tiempo.

67
y ni siquiera tú, Un lugar alto
que has estado aquí,
habrás estado nunca en ningún sitio
el día en que aún es la noche en su nombre.
la ruina se declare en matrimonio. yo temo siquiera pensarlo.
en ella es oscura la noche
entonces nos ponemos piel con piel tan temprano.
y nos parece casi que nos hemos encontrado.
si su nombre yo lo dijera
a veces, yo me siento en medio de la habitación aun siendo la noche tan joven
e intento darme menos, la misma luz madrugaría,
darme nos, habría motores y fábricas.
intento concentrarme: habría carteros y tiendas,
quitar, robar, qué menos, un segundo, colegios, canciones
quedarme al menos uno. y hogueras.

sospecho que una abuela que no está, si caigo y pronuncio su nombre,


sospecho que el abuelo de una abuela se llenaría de pájaros
que no está en ninguna parte, la acera.
trató de hacer lo mismo.
y todos fracasamos. como el espejo ciega al agua, cegaría.

no se ha creado mano sé que si lo pronuncio


capaz de atesorar, ella tal vez descendiera
estamos tan a solas. del lugar alto
en que se acuesta.
no se ha inventado piel
que pueda contener lo que nos mueve. apoyaría su frente
de cera en mi hombro de cera
y ni siquiera tú y yo sería
(¡que estás ahí!) algo muy parecido a la alegría,
estás ahí. algo así como la pena,

Inédito. pero entonces


sería también la mañana.

68 69
vendría el cartero, abrirían
las tiendas, sonarían las sirenas
y fabricarían incendios
los niños en las hormigoneras.

y aún es la noche, apenas…


se rasga una luz
muy lejos muy quieta,
sin mañana.

aún es la noche, me digo,


(todavía)
no hemos perdido
(y ya falta)
nada.

Inédito.

70
BERTA GARCÍA FAET

[amor de corzo]
En la despensa se saldan pecados viejos, el ciervo trae el hambre
entre mamíferos y la distancia: amor jungla, amor juglar. Ajar viviendo,
vivir, dijimos, amor y espina.

73
Habitaciones a distancia y relaciones a distancia y documentales
sobre mamíferos de tierra y mar a distancia

Para F.

sola
en los 10 m² de mi vivienda
de madrid
especulo: ¿hace 70 siglos
en sus cuevas de 10 m²
los grandes póngidos ya hacían el amor
como nosotros?
(aunque sea nuestro
en exclusiva
y del chimpancé
pigmeo
el sexo genital cara a cara)

desde el sofá plegable de la indolencia educativa


me fascina el ensañamiento del tiempo contra el tiempo;
veo un documental
repetidísimo; engullo
y muerdo chai y soy un artefacto
de tacto y de recuerdo;
llego a la conclusión
grotesca
te que echar de menos da
hambre

las galletas me exhortan


a gruñir, como el invierno;

75
lejos, allá en la jungla, alguien o algo da risa escucharte
himpla escuchándome

sudan el té y las galletas del té: en la raíz estoy viendo un documental sobre mamíferos: grandes póngidos y
del desarraigo cachalotes

los monos bailan ¿por qué no me llamabas?

; lejos allá en la jungla se abuchean


mutuamente
extraño poder palpar los coches
pólipos coloridos
muslos pestañas kril cejas ;
arena
estoy en una ciudad-jungla y tú estás
en la pantalla habitan criaturas muy en una ciudad-jungla
prodigiosas distinta

se confunden el cuerpo humano y el cuerpo quiero que veamos exactamente


de las ballenas lo mismo: grandes póngidos y
cachalotes
por eso cojo el teléfono y te riño y
protesto te suplico que cambies de canal

el cable amplificador sirve lo justo no cambias de canal. no cierras la ventana y se oye


para perpetrar estas infracciones anímicas la jungla. no te gusta
la fauna. no te gusta bailar. no te gusta
la ira es la cara B de la ausencia
echar de menos y tener hambre y tener
ahora aprendo sobre cetáceos. los cetáceos como los monos sed y tener
también bailan que acostumbrarte
al hambre y a la sed y a la
; fauna mimética y al baile
agotador
de la extrañeza

76 77
las habitaciones a distancia las relaciones a distancia nos aleja
funcionan y no funcionan y funcionan más o menos así
tengo tristeza y fiebre
;
¿por qué no me llamabas?
lánguidamente
como corresponde por eso cojo el teléfono y te riño y
a mi condición de protesto
chica-pleonasmo o alumna-aplicada-en-madrid
bajo el volumen de la televisión (inadjetivada) ¿qué haces?
y te narro mi historia fibra a fibra jungla a jungla tecla a tecla té
tras té: se confunden el amor y la rabia

acrasia culpa deseo líquenes veo un documental sobre ballenas y chimpancés pigmeos
lianas cláxones interjecciones farolas placer:
la vida parece lejos ;
si la nombramos; el límite del edredón que te robé en italia
cuando viajamos a italia de fondo más murmullos de bestias más cuchicheos
es el límite del mundo de metrópoli
o de italia
buenas noches. recita para mí
; el salmo el panegírico

olvidaste tu suéter en mi maleta en italia ¿hacemos las paces? ¿aceptamos


la otra vez. ya en madrid que el amor y la rabia se confunden?
se esparcen las migas y se esparcen las migajas
por tu suéter: obsesivo- ¿sabías que
compulsivo té chai con los simios sienten nostalgia? ¿has visto
galletas las fotos de italia? están borrosas

alguien o algo filma algo y alguien ;


estiliza
el corazón de la selva y del océano en la pantalla
habitan criaturas muy
el auricular nos une y prodigiosas

78 79
el corazón de la selva y del océano cuando desperté con el teléfono debajo de
palpita muy fuerte se contrae y se estira la almohada y los títulos de crédito del
fuera de sí documental
repetidísimo
un gorila llora
porque su gorila favorito como un cetáceo como un gran póngido tú
llora
en el auricular que nos une y
un delfín da nos aleja
a luz con
destreza ¿tienes sueño?

esto nos emociona muchísimo todavía estabas ahí

; ;

queremos bailar dentro de 15 minutos comienza otro documental


pero tenemos una relación a distancia mi habitación ¿por qué no me llamabas? ¿qué
está a mucha distancia temperatura
de tu habitación hace allí?
sobre dinosaurios narrativos
el sol copia al jengibre y luego y dentro de 47 minutos comienza otro
adopta documental
el pigmento del titanio sobre las contradicciones político-emocionales de las nuevas relacio-
en los 10 m² de mi vivienda nes amorosas
de madrid a distancia

es tarde. anochece. todo es redundante. estar sola y dormir —lo siento, no podré verlo, tengo que escribir un artículo
sola en madrid sobre un libro que no he leído y que no voy a leer
es redundante
—no pasa nada, yo tampoco
de algo que estoy intentando decirte
continuamente De La edad de merecer, 2015.
;

80 81
Una pequeña personalidad. o en ermita perdida.
o en capilla escondida.
si existiera.
equivale vivir equivale vivir eso, el sol.
a besar. y bicicletas.
se asemeja vivir se asemeja vivir eso, mirarnos.
a ajar. eso, y mirarnos
una cestilla de frutas podridas los corzos, beber
no me amilana. de la aporía.
una cestilla de trapos, el cenacho de dichos
saludo cordial. por las castillas,
una cestilla de costras el capazo de corzos.
no me acobarda. el sol que nos ama.
el cenacho de dichos nos chupa.
por las castillas, y había un corzo.
el capazo de corzos. y había espigas.
el sol que nos chupa nos quiera o no. que lo tapaban,
el sol que lo ponían
nos chupó, a la vista.
que chupóse el canal. y hubo el sol.
el sol que tiene una gran personalidad. y hubo el corzo.
fue lo que dijimos. y hubo hubo
lo que juramos. amor y espina.
eso y eso. y había amor.
fue lo que dijimos. y había espinas.
que lo consignaríamos. que lo tapaban,
baliza y seña. que lo ponían
fue lo que dijimos. a la vista.
eso, lo del besar eso, y besar.
la lesión y la tierra eso, y ajar.
y el mal, si existiera. eso, y las cintas.
fue lo que dijimos. para el capazo de los regalos.
eso, lo del ajar una pequeña personalidad linda.
de los campos la hora
y lugar, si existiera. De Una pequeña personalidad linda, 2021.
eso, el sol.
y bicicletas.
eso, sentarnos.
en el murete de la iglesia.

82 83
CARLOS BUENO VERA

[amor territorio]
Amor impostura.
Un hueco espeso que esquiva a los extraños. Amor territorial: ve un
protagonista donde aúllan dos, donde aúllan varios -susto de culebra
con eco de No-.

85
Ella esconde un corazón lóbrego, como la lobreguez de un bosque. No
sólo melancólico sino de espesura sombría.
Adentrarse allí es enfrentarse con el miedo; adentrarse en ese bosque
frondoso es ir en busca de lo que ella dice que es la vida. Es hablar del
futuro, con todo lo que tiene de juego y de impostura; con todo lo que
tiene de sacar los cuchillos sobre la mesa para afilarlos y limpiarlos.
Viven animales allí. Algunos son asustadizos, otros, territoriales y,
unos pocos, amistosos y curiosos. Luego están los pájaros que sólo
miran y son de ojos.
Tengo el corazón caliente, dice. Estamos en un teatro, esperando a que
comience la obra.
Entiendes que hay cosas que ella siempre pensará que sólo le han
pasado a ella cuando lo cierto es que os han pasado a los dos. Tiene el
corazón anegado.

De Las indagaciones, 2020.

87
Hablaste de la nobleza de las culebras y de que, si por ti fuera, vivirías
en el bosque para siempre, a partir de aquella noche.
Soñé también que, de tu boca redonda, dibujando aros en el aire, tras
los besos, sólo salía una palabra: No.
Luego escribías en un trozo de papel-memoria: El No que digo no se
instala en lo perpetuo, aunque está lanzado a mantenerse en el aire por
un tiempo indefinido.
Entonces, las hermosas culebras, plateadas y verdosas, que habías
convocado antes con tu canto, se deslizaron sobre tu cuerpo; lo cubrie-
ron con delicadeza. A pesar de quedar enterrada, no dejó de oírse tu
voz toda la noche.

De Las indagaciones, 2020.

88
CRISTIAN ALCARAZ

[amor sinónimo]
Las sílabas que suenan son hermanas: sonar a una sílaba en otra
sílaba, ser acto de palabra en otra palabra, contener. Un cuerpo en
otro cuerpo modifica.
Canino

He salivado como un perro


–descendiente de Pávlov
con la boca repleta de moscas–
todas las veces que asoma y procura un encuentro.
Me he saltado todas las señales de STOP!
con el objetivo de que un coche me estampe hacia la izquierda
y volar.
He llamado al sol infierno y al calor autoestima.
He cortado la piel que me sobra de la oreja
para sentirme un poco más usado.
Escucho por placer el ritmo de otros testículos
golpeándome
y bailo
ti-ro-te-a-do.

De La orientación de las hormigas, 2013.

93
El cuerpo del enemigo

Un hombre detona su cinturón junto a las vías de tren


de Volgogrado;
un hombre dentro de otros hombres
a una velocidad de siete mil metros por segundo.
Cuando un fragmento de cuerpo entra dentro de otro
cuerpo
lo sexualiza.
¿Quién no entendería el privilegio?
Cada interacción nos modifica.
El que recibe es
receptáculo.
Segundos antes de la explosión he imaginado una vida
junto a él.
Por la ciudad del Volga los trenes salían
como sale la nieve de los cubos.
He intuido la fuerza de esos dedos detonando el cinturón,
también abriendo un obsequio
de la cesta personalizada de los hoteles.
He intuido la violencia.
Yo, ser que recibe,
dudo si soy un hombre
menos hombre.
Cuántas veces han entrado dentro de mí
para modificarme.

De Individuo armado, 2021.

94
96 97
DAFNE BENJUMEA

[amor cultivo]
Palpar la pregunta, no responderla.
A la palabra antaño la pregunta, en el quererse de ayer hoy qué que-
da, cuánto será distinto después de ahora, de tantos quienes cuál
seré yo, qué no puedes cultivar, qué fruto crece.
El álamo alamea
el peral y sus hijillas (qué frutillas)
estos arbolitos por su nombre

Sus sombras no es nombre


no me cubren
entonces cogí la manzana
(lloraba y lloraba)

hendí incisiva
incisivos sobre la
fruta la humedad
de la fruta

el rabillo en la tierra
sus semillas en la tierra
y de ella nacieron
hectáreas de colores
(qué colores)

Pensé en la tilde de álamo


y luego pensé que álamo puede venir de alma
o al menos
se asemejan

Que por allí vienen los petirrojos


tan ninfos y orgullosos
que se comen las bayas que planté
y me dejan sola
sin hijillos

Entonces mi nombre se agranda


me cubre como sombra
como un campo de secano
como el sol

101
en el secano Qué
dime
Es mi vientre esta llanura ¿que no puedes cultivar
en los días algo de manzano y peral?
y digo Mejor así
¿de qué manera decirte? así estás despierto y vas suavemente por donde te adoré

Ya en la urbe ¿Ves?
me animo Ya cierras ojos
me agito como siempre, criatura,
nerviosa que no ves
y te observo que ves
nada
La cascada del grifo me convierte apenas las magnolias que planté con formas de deseo
en lo que soy
pues ¿quién soy? Ah, sí, abres un ojo
y parece que caen de un árbol mil secretos
Creí que bajo la luz mis árboles crecerían pues tú, cobarde,
que bajo la luz crecerían alto eres más tú en mis tierras
que bajo la luz más fulgorosa se elevarían
pero Dos, ahora son dos,
qué va animalillo interesado,
no crecen que no
yacen calcinados que no te llevaré a la choza
sin pliegues que no recogeremos la leña (la última vez ya sabes qué
ni bifurcaciones secretas pasó)
Pasó el fuego
Entonces mi corazón triste y el agua
tigre abuelo que palpa las alas de los buitres nunca el no, vayamos, sí, vayamos
y a la palabra antaño a la Alta colina
se pregunta por donde te adoré y en los cuatro,

En Desde la hierba, 2021. un cielo.

Inédito.

102 103
DAVID LEO GARCÍA

[amor ¿qué?]
Amor ritmo.
Amor me da lo mismo, amor sonido: la vida día a día, los estados de
estar, los estados de ver, la transparencia. Amor tartamudo.
CABEZA tronco extremidades ¿qué?
¿Algo más? Algún alma,
la energía mental de imaginar un alma.
Martes miércoles jueves ¿alguna ocupación?
¿Resolver un problema? Dar nombres a las cosas,
pero cómo
tanta seguridad
si el mundo fue inventado antesdeayer.

Si únicamente suena un estallido.


De mi experiencia aquí
me llevo un diosteama
y un noarrojarbasuras.
Tus datos personales se han apagado,
puedes decir «todo me da lo mismo» y significa que amanece tarde.
Y hay flores que se llaman como actrices, síndromes
que se apellidan como tú,
tú, mi animal de mundo,
que en sandalias paseas por el precipicio
y que bailas un vals con los obstáculos,
dueña de cicatrices entusiastas,
sólida gaseosa ¿qué? Amanecen

vidas provisionales
con la luz del que sí que no que sí,
desordenadas como firmamentos,
minusválida fe de creer hoy
en los dioses de dentro de las cosas, en el dios
que vigila el desorden de las cosas.

De Dime qué, 2011.

107
«Tan sólo movimiento» y el futuro nos abre un ventanal,
la transparencia de ser alguien. Tú,

Amanece el movimiento. Él no ha dormido, desnuda,


nosotros, sin embargo, son las once, como las novedades,
di S. E. D., di Y. A.,
pupilas amoldándose a la luz, di S. O. L., ¿lo ves? ¿A que parecen iniciales?
pupilas donde caben los miembros de otro cuerpo. Tú
De Dime qué, 2011.
despiertas cuando digo: «¿Estás despierta?»,
pierdes una pestaña, en el interior del sol
va el día verdadero.

Tu pereza instalada en el ritmo de la vida,


la vida día a día hecha de sílabas (ten - go - sed)
y objetos en el suelo manchados de persona.

Pero hay que estar aquí, y aquí es moverse,


la vida que llevamos es eso, dijo alguno. El movimiento

agitado en su propia duración,


como si fuera más de tiempo que de espacio.

La acuarela de lo que te imaginas.


Los estados de ánimo
como una suma de velocidades

y este hablarse con siglas, V. E. A.


L. A. F. A. R. M. A.
C. I. A... Te leo

con la uña
las líneas de la mano,
vida sin fin o pentagrama de un aplauso

108 109
ERIKA MARTÍNEZ

[amor presencia]
Amor concepto.
Estar en el estar, quedarte también, aunque te has ido. Estar en cada
amor que está después de ti -amor herencia, amor acto, amor pu-
chero- tener para el amor más de lo que la vida tiene.
Trabajo vivo

Cocinar para tu gente no da ningún trabajo: es un acto de amor. Y, sin


embargo, las moléculas exactas de este cocido

puestas sobre la mesa vulgar de un restaurante son doce euros.


Querer a quienes quieres te convierte en su riqueza.

Un poema es un acto de amor. A cambio de sus versos cada poeta se


imagina juntando una suma delirante de capital

erótico, cuya unidad mínima tiene algo de sílaba o golpe de cadera.


Con ellos trastoca los ritmos del mundo: hace política

y sigue insistiendo en lo real (que algo de esclavo tiene, aunque eso


nos ponga como furias). Pero el siglo veintiuno,

el siglo veintiuno, el siglo veintiuno separa nuestras manos, y aquello


fue imposible, o eso dicen para quien se lo trague.

¡Mira! Entre tu idea del amor y mi idea del amor se ha abierto un


surco donde está creciendo la hierba.

Reñimos a menudo y siempre la regamos. Sabemos que la vida no


puede acumularse.

De La bestia ideal, 2022.

113
Casi amor Hueles igual que una tormenta,
desde lejos: lamo la tierra.

1
5
Ni la mosca
ni el ojo de la mosca Lo que tú y yo
ni el polvo en el ojo de la mosca. estamos haciendo
Trajiste aquí tu cuerpo y, a escondidas, se lo hacemos al mundo,
lo que hay en ti más que tú. Ya nada cabe. aquí en nosotros.
Nos tomamos,
nos dejamos
2 y es lo único,
esto que queda.
Tienen los ojos siempre
muy abiertos las moscas.
Sólo ellas, que no pueden dividir 6
el tiempo y el espacio en los parpadeos,
logran ver lo que excedes. Algo desgarro
Un paisaje cubierto de huellas dactilares. en tu pigmento oscuro.
La comisura.

3
7
Mancha de luz.
Cierro exhausta los ojos Yo no lo agarro:
y permaneces. el hilo tenso
de la cometa
me sostiene.
4
La brida sola,
Tu axila, la soga de la barca,
el pozo de tu axila, tu piel ahora,
en éxtasis el pozo de tu axila. la mano del que cae.

114 115
8

La grieta de tus labios al hundirse.


Es casi amor: tú quieres apiadarte
y yo quiero romper algo de ti.

Si te ahogas y no llego,
surge tu envergadura sobre el agua.

¿No permanece
el sudor en el río?
Te vas así.

10

Pero nunca te marchas.


Mira mis manos y mis pies
─me dices─, soy yo mismo.

No cabe en un cajón
quien rebasa esta cama,
ni hay tierra suficiente
para cubrirte.

¿Es húmedo el silencio?


Más dulce, la madera
a punto de quebrarse.

De Chocar con algo, 2017.

116
GONZALO ESCARPA

[amor equívoco]
El tamaño aumenta cuando crece la dudar. Amor grande. Amor de
cantidad. Amor que ocupa. Dudar como en pequeño no es querer,
querer tiene un tamaño que ocupa más que el tamaño en sí, su masa
es intangible. El amor desborda. Se queda incluso cuando se acaba
el sentimiento. Amor inevitable.
Me

Dicen que la palabra amor está roída.


Andrea me asegura que es más que la palabra.
Que lo que está gastado es el “nosotros”.
Lo de dentro, no sé, lo que nos significa.

Que los nuestros están erosionados, ahítos.


Los más jóvenes, esos que representan (suele
ser así) lo ulterior, lo de luego, lo alto.

Al hacerlo, utiliza expresiones tan grandes,


emociones de lanza, lenguajes increíbles
que hacen que sus teorías pierdan fuelle, curiosa,
extraña, suave, ambigua, paradójicamente.

Andrea se convence de su tristeza última.


Que no hay tiempo. Que no hay ni intención de entenderlo
(dice mientras intenta entender, entender).

Yo, que no estoy de acuerdo con ninguna de estas


ideas vagabundas, nocturnas, tristes, solas
(aunque sí las entiendo), escribo este poema.

Del amor nada sé es cierto, poco o nada.


Del desgaste algo más. De la vida, lo poco
que la vida me canta. Lo que me deja ver.

Yo no sé por qué Andrea ha contado conmigo


para incluir un poema en este libro equívoco.

Yo estoy en este libro (a pesar de su tesis)


por amor, nada más. Solo eso: por amor.
Simplemente con eso destruyo sus teorías,
curiosa, paradójica, cabal y felizmente.

Inédito.

121
Yonquis de las emociones medianas que se fue
y se quedó a una distancia mediana,
ni muy cerca ni muy
Vivimos con una sensación de excitación ligera, integrándonos con lejos, y nos rompió
paciencia para satisfacer la promesa de vivir sin demasiada intensi- el corazón
dad la buena vida de aquello que Slavoj Žižek llamaría un sublime medianamente.
descafeinado.
Lauren Berlant Inédito.

Las grandes nos asustan.


Las pequeñas las reconocemos fácilmente,
y nadie atesora lo pequeño,
sea una emoción o un armario amarillo.
Así que toca conformarse
con un flujo constante
de emociones medianas.

Tal cantidad de emociones medianas


no conforma una grande.
Sentimos sólo miles de emociones medianas
desparramadas en medio de un desierto atroz
e insoportable.

Sería fácil rebelarse,


dejar de hurgar en ese
ridículo desierto
y volver a sentir una emoción inmensa,
de las de antes.

Sin embargo, seguimos


sumando medianías,
sin casi despeinarnos,
y lloramos a veces tontamente,
pero lloramos lágrimas medianas
por un amor mediano

122 123
JUAN DE BEATRIZ

[amor saeculum]
Amor fonema, amor quietito, amor misterio. El dulce triste, alegre
amargo, amar lo vivo, amor que sacia, sencillamente, de pena y miel:
amor de pan.

125
Homo mitologicus 1

En mi mano come el otoño su hoja: somos amigos.


Paul Celan

una lágrima en ámbar


o resina te conserva
por los siglos,
tan quietita,
en medio deste prado verdecido
tan bella que te piensa incluso un árbol
por los siglos abrazando
dos cuerpos estelares Cipariso

todo lleno de llanto


amor habita
fonemas microchips raíces
la corteza herida
y dulcetriste de los cielos
por siglos y más siglos

mientras que
el nadador primero de la historia
allá en Paestum
se nace hacia su tumba
regresa por la muerte hacia lo vivo
per saecula saeculorum

sea el amor, entonces,


como quisiera Safo,

1
un día lejano ya los dioses regalaron un ciervo a Cipariso / fueron tan pronto amigos! / sin em-
bargo, oculta oscuros diezmos el misterio: no hay cura sin veneno / los dioses además le habían
dado flechas y arco a Cipariso / y qué sucedió entonces? / entonces hubo muerte y hubo llanto /
pero también hubo el milagro / en medio deste prado / un día lejano ya

127
una urdimbre de mitos Coplilla
que nos une y sana el descosido
de tanta vida, pues
para qué tanta vida, señor, para qué diáfanos espacios
y amplísimas regiones,
sea el amor también te deseo
saciar al pobre las lágrimas del hambre para llorar tu soledad,
libar juntos la miel en los esquejes para cansar tu pena
compartir alimento, por ejemplo,
una mieja de pan junto al embalse y mil chorros de miel
en aguaclara
o mucho más sencillo aún bendigan tu heridica,
ser simplemente amigos ese hueco acariciado que nos dejan
al final de un poema que derrama las cosas que se van
todo ese ámbar mítico
que llora si te piensa cualquier árbol salud traigan tus hijos, un patio
con geranios, dos nietas
e igual que Cipariso con su ciervo que te expliquen
grabar en los cipreses nuestros nombres el rojizo sabor de las cerezas
per saecula saeculorum saeculorum y algún amigo bueno
que guarde cada día sus mejores
Inédito. pensamientos para ti
así como es guardado el oro en paño

que al final de tu vida alguien


te espere y se atreva a esperar
tu última belleza

que tu nombre sea nombrado en sobremesas


más allá de tu muerte,
vidamía,
te deseo

Inédito.

128 129
Homo mitologicus
(bonus track)

somos,
amiga mía
prenda mía,

sinónimos de todo eso que dura


sin extinguirse:
un círculo un anillo un alma
que dibuja planetaria
el baile alucinado del derviche

y gira y gira y gira

y nada lo detiene
igual que nuestro amor
también se espuma
al fondo de la noche de los tiempos

per saecula
saeculorum
saeculorum

Inédito.

130
133
JUANPE SÁNCHEZ

[amor decadencia]
Amor con nata. Amor naif.
Amor, eres muy guapo, amor cantemos, amor febrícula, color pastel:
amor de serie, amor lingüístico, amor qué incierto, amor disimulando
n palabras hirientes. Amor, yo quiero.
los cielos terrestres

Así la vida desaparece


transformándose en nada.
Víktor Shklovski

la imagen y la nata y las horas en las que tú


y yo supongo haremos

hombre
sobre
hombre

u otras cosas torpemente


y la imagen y la nata y el lodo
son de extraña rareza por la noche
volarán los humos y el vaso siempre
medio vacío me arrepiento de la primera
comunión

he visto tu corazón
y lo encuentro muy sentido

Gil de Biedma, amigo mío

después de los hipos gritas el error


-mis semas son de ante, -mi yerma la mano!

la belleza es inexacta
y cruel y a veces dulce
como el amor y a veces duele
y se va y vuela como los pájaros

si yo no puedo desnudarme sin dos nudos

137
sin dos nudillos contra dos nudillos y la existencia depende de la belleza
sin sentir mi carne en medio y la belleza depende de cómo me miras supongo
de la pista de baile
o sin sentir el derrumbamiento del derrumbamiento y por eso tengo nostalgia de lo que no existió
o el derrumbamiento del desdoblamiento me mueve me conmueve me remueve
la imagen y la nata y las horas
pero no estoy solo y nuestras canciones me arrastran en el
en el poema estoy conmigo tiemblo en las ciudades de pluvia
/para ti el placer y el agua de la pluvia será ferida
del peso/ será vertida o un indecente indefenso
y si soy un libro la autoría no me pertenece momento en el que se saca a reducir
aunque me digas te quiero la infancia o las noches revertidas

porque la para-sabiduría el para-aprendizaje para aprender y/o coaprender y/o reaprender


del amor oscuro nos dice que no podremos amar si no el amor en madrid nápoles ámsterdam
nos amamos a nosotros mismos y quizás nueva york
y otras tonterías que pueden contradecir
las lógicas de la vida y a judith butler mi amor, idolátricos
y a berta garcía faet y a roland barthes los márgenes y las gráficas y los jardines
y a mi madre y a amaral todo de una vez y las cimas y los semas y la soledad
robamos tempo al tiemblo
por todas las veces que me dices te quiero y nos rehacemos las trenzas
y hay algo quizás el yo de barro del poema y sí
o quizás una baba algo traviesa querríamos la decadencia de la razón accidental
que se me escurre por la boca y/o descubrir que todo lo bello
ni es bueno ni verdadero
solo entiendo la existencia escurridiza de mi cuerpo que la ficción nos presta sus formas
a través de ti y el cuerpo es una imagen flota

sí, un poco de nata y unas horas


un triste tópico un cliché y un corazón que hace sombras
y hace todo parecer y perecer
y vamos juntos a bailar sobre las palabras
pero yo estoy irremediablemente desarmado y vamos juntos allá más allá de las vallas
en la cara de la existencia y espera que está sonando

138 139
nuestra canción favorita y después de todo todo 2020. las formas lingüísticas o algo más están atravesadas inevitable-
lenguaje es un tam tam mente por otras formas como las de producción, instrumentalización
y profesionalización y algo más y les impiden coincidir en tiempos y
si la vida no son estos relámpagos espacios iguales condenándoles a una ausencia permanente
si no es esta mentira una tómbola
una puerta entornada un sonido típico no me gusta el mundo del recuerdo no me gusta el mundo del recuerdo
y bailo contigo baila conmigo vamos a decir juntos que estamos hartos
si la vida no es celebrar los cielos de bailar sobre las palabras sobre estas palabras que cuestan sudor y
alucinar las lunas montar tiempo y esfuerzo pronunciarlas vayamos a bailar a un mundo distinto
montañas abanicar árboles a este vayamos a bailar al mundo de la coincidencia:
qué podemos pedir entonces?
qué podemos decir entonces? *te leo estos poemas y coincidimos en que hay sonidos bo-
nitos que disimulan el cráter del corazón te leo estos poemas
por ahí me han dicho que eres muy guapo y a veces no me escuchas te leo estos poemas y de repente te
y he pensado que a lo mejor olvidas que tú nunca estuviste aquí aunque siempre estuviste
podríamos salir juntos unos años más adentro más abajo de las palabras disimulando la conca-
vidad fangosa que habían dejado los nnₒviₒs con los que coincidí
De Desde las gradas, 2021. antes que tú ~ tú estabas más abajo de las palabras disimulan-
do las npₐlₐbrₐs hirientes que ralentizaron el paso por el camino
manchado.

*coincidimos en que el futuro es incierto e inexacto y que


vivir por y para el futuro es cruel y despiadado porque nos
convertimos en maquinarias desgastadas, en pájaros (gavio-
tas de 1933) que tiran de unas cuerdas atadas a un trineo que
amenaza con aplastarnos.

*coincide que la vida son cuerpos llenos de vida que quieren


coincidir.

*el recorrido del trineo es, muchas veces, coincidente con la


forma del cráter y el recorrido del vuelo del pájaro funciona,
otras tantas veces, como un cometa de los cielos.

*qué poca coincidencia que seamos dos pájaros que tiran de

140 141
trineos distintos y que para que no nos aplasten tengamos que
volar continuamente por el mundo debilitando y delimitando
las veces que coincidimos.

*coincidir es, según su etimología latina, caer juntos en el


mundo pero ocurre que el mundo no siempre es el mejor de
los mundos posibles y ocurre, también, que en este mundo
coincidir ha de ser sinónimo forzoso de querer coincidir, de
querer caer juntos en el mundo que nos separa.

*si dejamos de coincidir, acuérdate de que en cualquier otro


mundo —en un mundo donde los trineos vuelen solos— vol-
veremos a coincidir.

De Desde las gradas, 2021.

142
LOLA NIETO

[amor identidad]
Amor quién soy. Qué somos. Amar con eco, amor de iguales, her-
manas dobles que respiran a la vez: cuál respira en cada cuerpo.
Amor simultáneo, de oído a cuatro voces, a cuatro giros. Amor ter-
nura, con sonrojo, notitas, dudas, posibilidad.
Ellas

Son idénticas las dos abren la puerta saludan cierran

la puerta caminan por un


pasillo largo y ancho No se puede saber adónde lleva
Camina él

detrás de ellas y mira cómo avanzan el paso es sincronizado

exacto izquierda y derecha y así así

Caminan

muy juntas juntas la pierna derecha de ella y la izquierda de ella

tocándose Una manta las envuelve un extremo


echado sobre el hombro izquierdo de ella
y el otro
sobre el hombro derecho de ella Él

camina
detrás

Llevan zapatos idénticos calcetines


idénticos Él camina
detrás y no sabe adónde
van El pasillo
es largo y ancho y a los lados

esparcidos por el suelo

hay juguetes Se giran


a la vez de pronto ya están frente a él:

149
queremos
pedirle
algo
muy
importante Hablan:
para habla ella y luego ella eso parece parece que mientras ella habla
nosotras ella mueve los labios luego al revés pero no se puede saber
hablan a la vez no habla una pero con certeza es confuso habla o hablan habla y hablan lo mismo da

la otra mueve los labios


nosotras nacimos
como si hablara cogidas de la mano
o habla también no
así
se puede
nos cogimos
saber de la mano antes de

es algo realmente importante y por eso nacer


le hemos llamado nosotras vivimos aquí nosotras deseamos morir
y así nacimos
aquí
quisimos nacer a la vez y cogidas de la mano
nacimos
aquí cuando era invierno
quisieron separarnos
quisimos nacer pero no
a la vez pudieron
y nuestra madre no pudo los médicos
pensaron
soportarlo ella que estábamos unidas por la
murió y nosotras piel
estamos aquí
pero eso es mentira
vivimos estamos unidas porque nos damos la mano y nunca

150 151
nos hemos dejado de mos

tocar nunca
estamos unidas Esta casa es muy grande en realidad no sabemos cómo de grande es no

porque queremos y nadie puede ir en contra de nuestra voluntad siem- se puede


pre
ha sido saber
así
con precisión

Cuando Se giran
ella a la vez
habla siguen avanzando por el pasillo Él
parece
oírse un eco camina detrás Llevan el
pequeño mismo
como si ella también peinado
hablara
tienen
y al revés Cuando el pelo corto rizos de color
ella blanco y a veces violáceo depende
habla parece de cómo dé la luz tienen
oírse un eco la cara idéntica y maquillada igual
pequeño como
si ella hablara también los párpados verdes los pómulos rosados los labios rojos Son viejas
muy pequeñas de estatura sorprendentemente ágiles

no tienen ojos pequeños


somos hermanas esto es otra cosa nos damos la mano una vez dejamos y negros muy
de darnos brillantes como cuatro gotitas
de petróleo
la mano
Cuando miran sus rostros parecen separarse
pero no podemos contar lo que vimos no se puede saber y no lo hare- ligeramente de los cuellos así miran

152 153
con esa enorme avidez los ojos redondos y negros miran con la encontramos a un anciano
curiosidad y la inocencia de los perros
muerto
Miran así pero luego de mucho mirar ya no parecen curiosos ni ino-
centes parece en una habitación

que hubieran visto algo que no creemos que era nuestro padre
se puede
saber De pronto vuelven a girarse ya están frente a él: lo lavamos

lo peinamos lo tumbamos sobre una cama y


vivimos aquí
lo hicimos desaparecer
en esta casa
creemos que hicimos lo correcto desde ese día
es
nosotras
enorme
mismas nos procuramos la comida
nunca hemos salido
la hacemos aparecer
creemos que fue nuestro padre
pero esto es distinto
quien nos encerró en una parte
esto es realmente importante para nosotras
de la casa nos traían comida
necesitamos
un día nos dejaron de traer
su ayuda
comida

y cuando tuvimos hambre Vuelven a girarse Siguen avanzando por el pasillo Él camina
detrás Susurran y ríen una risita corta y pícara ¿quién ríe? ¿ella
golpeamos la puerta hasta romperla
o ella? ríen a la

154 155
vez o es ella y luego puede
ella En este instante empiezan a cantar: saber No importa ahora necesitamos su ayuda siempre la necesitamos
cuando llega
el universo aquí
nosotras aquí este momento
nosotras o el universo y usted siempre está
gira gira gira y vuelve a girar
cómete este pedacito de canción aquí
y harás que todo
vuelva a empezar queremos que nos

una
Se giran y le miran fijamente: aquí
puede suceder todo ahora sí queremos que nos corte
la carne
pero no se puede saber por el mismo
sitio y que
con seguridad No podemos salir de aquí pero necesitamos nos una
que otras por el hueco

vengan lo
hará
por eso le pedimos su ayuda para que otras vengan y continuar
sabemos que lo hará sólo así moriremos
quizá seamos
nosotras a la vez no estaremos nunca
mismas las que
solas sólo usted puede
siempre hacerlo si lo hiciéramos nosotras
mismas dejaríamos de darnos la mano y eso no lo haremos nunca
volvemos

eso Él camina por el pasillo abre la puerta sale


no en el exterior es invierno no sabe
se muy bien dónde

156 157
está se mira las manos y en una de ellas lleva su maletín Cf
en la otra todavía tiene una mancha rojiza

No sabe muy bien dónde está ¿Tú crees que si pienso en algo, algo me percibe de algún modo? ¿Tú
crees que pensar así cambia el devenir de las acciones, la fluctuación de
Recuerda algo la música de una canción quiere regresar volver al lugar las corrientes de una sangre almibarada a pista de un caldo angélico?
de donde viene saber qué ha sucedido la música de la canción se borra ¿La posibilidad de hacer que alguien haga algo por pensarlo, por estar
y no puede retener la melodía oye a un niño llorar no ahora mismo en esto, esto sucede? El cuerpo entero lo fruncí de pro-
yección con la mente plegada en cesta sin canal, sin acompañamiento
una niña recuerda es una niña no ni estructura. El lapso en solo concentración. Lo llamarías adorar. Pues
creo que es adorarte in situ, a divinis, a verbis ad verbera, ab aeterno,
dos niñas o una niña una niña o dos oye llorar a la vez ellas nacen confieso que es exageración esto del final, pero me gusta probar la línea
cogidas de la mano recuerda eso acaba de suceder por eso ha ido a la frágil. Lo supiste. Y voy a ser sincera. De hecho, lo podías saber desde
casa por eso está ahora aquí por eso tiene una mucho antes, cuando deambulé con una notita patética y tierna. No sé
mancha rojiza y su maletín por eso cómo sabía entonces cuál era tu casa, ¿cómo supe?, ¿dime, cómo fue
camina y todo siempre continúa eso? Me senté en el bar feo de delante con la nota estrujada, tomé café,
así esperé y nada sucedió. Te da tanta vergüenza como a mí. Por eso escri-
bo. Justo como ahora. Es una prueba. Seguro que fue un aprendimiento
De Tuscumbia, 2016. de ti, de aprender y prenderme, de lo que aprendí porque yacía sujeta
de ti en ti para que por ti me vieras dejándome de ver en ti misma trans-
formada: ad absurdum pero bonito. Como traición y abandono. Trai la
ción ya dono a ti tútú et túdemí et medetí. ¿Funciona en la distancia?
Solo alguien trabaja. Y otra ampara. Si donde tú estás ahora yo no estoy,
sientes la baba de los moluscos que te regalé, ¿estarán aún prendidos en
la pared frente a la cama? Tibia un viaje se parece a sopa sin grumos,
caldera en abstracción, cardiopatía es coronación porque parte el cardo
en cuerdas par et coeur ador ía corta carta acta fabula est: parte es lo
que esto í esta no es. Carta debe ser de una a otra, en círculo cerrado.
Y en eso la carta reconvierte la ambigüedad en dos acontecimientos
concretos y consabidos, tú:yo. El pronombre es lo más cerca. Por eso tú
lees esto que es una carta pero se encuentra en un sitio de no ser carta y
piensas que tú eres el tú al que escribo. Y quizá sí. Si en algún momento
tú que eres el único tú de esta carta lees esta carta, sabrás que eres. O
quizá no. Todo el otro tú sabrás que esto no es una carta sino ficción
y por eso está en un sitio de no ser carta sino de ficción. ¿Cómo saber

158 159
entonces quién eres? Es lo único que no puedo saber yo: tú-c / tú-f: tres pasaba todo pero al revés. Tú calibrabas lo mismo y contrario, versus.
aristas iguales. Porque carta es círculo cerrado pero no vínculo cerrado. Quizá perdiste mi fuerza. Estelar, tela, tri. Por creer siempre creí que
Esta carta es un triángulo y una carta-ficción. En algunas lenguas, letra lo querías todo. Y por querer quería que quisieras esto. Por esto, pensé
y carta se dice igual. Si escribo en algunas lenguas esta carta es una letra que nunca te he visto llorar. Como todas, nosotras también. Fuerza,
y muchas. ¿Cuál? Cf: esto. Como aquel día en el cine. Cuando estaba fantasma, futuro, todo va con f. Ave atque ave. Ahora c. Nos sirve para
sentada en la sala muy grande en oscuridad y sin personas. Percibí que proyectarnos en algo. Acordarnos de adoración o de odio, cor, cordio,
estaba cerca, de pie, con un bastón. Me dio tal estremecimiento que cordialmente, lo mismo da: bis. Nunca pierdo cuando juego. Tú tampo-
necesité cambiar de sitio. Pero antes noté que estaba más cerca todavía, co. Sospecho que piensas ahora mismo dos cosas a la vez. Destruir es
muy cerca realmente. Me dijo a la altura del hombro, por estatura no un buen alimento.
llegó a más, algo que aunque no recuerdo en su literalidad, fue una carta
para el futuro. Yo no respondí, como ahora tú no respondes, supongo De Caracol, 2021.
que es un modo de estar en paz, en letra muerta, ad litteram, ad hoc,
ad memoriam rei perpetuam, ad nauseam. Solo trato de ser un tanto
irónica, porque ciertamente esto se está poniendo ex ungue leonem, in
fine, muy per se. Sucedió en un sueño esta cuestión tratada pero siempre
pensé que habías tramado tal modo de conectar. Igual que hice yo: me
asusté para siempre. Dices: si quieres escribir una carta deberías hacer-
lo y acabar con esto. Te imagino ante esta c-f que no te envié y que sí
te envié. Enfadada para siempre. Fue por pensar en todas las posibili-
dades: stellein, stello, apo, epi, poner en orden, mandar, yo envío, yo
pongo, aparte, fuera, lejos, sobre, estel, estrela, stea, star, stern, stjärna,
seren, sitara. Fue por pensar en: llenar, romper, rodaja, espuela, persona
que se dedica a ver, también caballo que lleva la cabeza alta general-
mente por tener una en la frente. En esta carta hay tres. Cuando una de
las dos muera, ¿qué pasará?, ¿dónde crees que irá toda la energía tan
fuerte? Luego crecí. Luego volví a crecer más. Y ahora viene el motivo.
Se puede llamar de muchas formas. Yo lo llamo igual. Quiero decir
que te traté y en esa imposibilidad traté en lo que envuelve. El caso es
que un acontecimiento nunca alberga una necesidad. Ese día era una
plaza de noche porque era invierno o casi. Y me lancé a llorar. En una
mano sujetaba una bici y en la otra la solapa, a la que me agarré y tuve
que agacharme por estatura, como siempre. Alguien mira. Miraban de
hecho dos personas, recordarás. Ese día pudo suceder. No entendiste
que era algo así como cabernos a la vez. O precisamente. A veces no
calibro la fuerza que poseo. Deshacer. Qué exageras. Quién sabe. Igual

160 161
LUISA CASTRO

[amor brutal]
Amor mordisco, con carne, dientes, daños, de crueldad.
Pesar el peso al paso, terrible, en el corazón de golondrinas con
pena. Amor de tribu, amor caníbal, amor cuántas partes de cuerpo
siguen siendo nuestras después de otra piel: pedazos piadosos de
vuelo.
Mordiendo por las Calles a los Hombres que se Aman

Algunas palabras para perder la vía,


algunas palabras, que no falten palabras,
quiero saber
el lugar
que
ocupa
mi
odio, quiero saber dónde se puede encontrar
una tienda del mejor
de los vinos
del vaso de la palabra.

Atentos al dolor, sí, sí,


atentos al dolor como en los huesos poderosos de mis piernas,
atentos al regreso de los hombros
o la tierra hacia las ascuas.

Quiero saber cómo se cae a las llamas,


cómo se cae a la hoguera alta
y el doble del
dolor mejor de todo dolor. Yo soy
un ángel falto de recursos, no me mires, voy
hecho lentamente
con el corazón pobre de pobreza de ángel,
con la indigencia en el centro
atento
como un noble mensajero del error
al dolor de los mamíferos.

Cómo se me vierte el fuego en la raíz


de la lengua y la carne
empieza a oler a campana que no cesa. Es terrible,

167
es terrible que olvido,
no conocer el mundo de las aves inferiores, sus vestidos azules que tendré que colgar, sus
sus migraciones, vuelos, dolorosas manos, vírgenes verdaderas.
averías, de las cornejas tan útiles, de las Las mujeres que mi madre me abrió para que no empezase todos los
golondrinas ignorantes y ciegas, versos con un nombre. Para que no empezase todos los versos con su
de las gaviotas tristes como vidrio de nombre.
otoños. Todas las mujeres que
recuerdo
Mirad, mirad, es tan terrible esto, buscando un duro cuenco donde albergar el vientre.
yo creo adivinar la sangre de Todas las mujeres que mi madre me abrió.
los míos, es larga, aguda, cruel, se necesitan
trajes Pero perdón, el mundo.
para verlo. Como mi sangre
que va Pero perdón, la noche de los gendarmes
mordiendo viñas, que va que me araña el pezón
mordiendo Y me pide consuelo.
cuerpos, que va con dientes y con sangre
mordiendo por las calles a los hombres que se aman saliendo de los Todo eso, perdón, yo soy
cines. un ángel.
Mi odio es infinito.
Yo vivo en una ciudad pétrea y Mi odio espera el odio con olor a mantel
a veces y derramado vinagre, ese odio
somos pasos. que se mea en el tacón de las bibliotecarias
hasta que nacen lirios
Se pueden ver arrastrando a nadie, y la tierra empantana los taxis vigilando
se pueden ver una escuela.
lustrosas cabelleras,
tres o cuatro pasos solos, Sí que conozco esa lluvia de dolor,
duros, sí que conozco esa muñeca herida por el odio.
precisamente amargos golpeando
la tarde y las cenizas Y a veces las alas comienzan
brillantes a pesarme
como lluvia. y sobrevuelo el polvo
porque más allá de la muerte, más allá de la muerte
Y las mujeres que cuento en mi cabeza, que recuento, mi odio seguirá repoblando los bosques.

168 169
los pies, los días, las orejas,
Puedo pensar que no, y entonces los pechos y las alas
hay un árbol. con hierro
Como un número blanco, como una ola de algas y quedarme.
tu cuerpo
largo y libre, algo lejano y mío, mío Ésta es una canción desaparecida
hasta el desastre. para cantar con los brazos extendidos y los ojos
Un árbol con su techo delante de mi alma. cerrados
y las rodillas
Será merced a mi alma que se va en el fango tormentoso de la culpa
con el primer ingrato de septiembre mientras cae una lluvia de arcos y volutas milenarias.
o la milicia,
que no espera Es más dulce mi cuerpo;
por una vez, por una sola vez, aquí está con medallas y
para meterme tu lengua ávida y rota caderas, con el verbo del tabaco y la hojarasca.
y perdonar al circo tanto asunto de valor, Es más dulce
tanto temblor, así
tanta ruina con leones despeinados. con huellas diminutas de dientes de ave viva
en mi sexo como una ropa
Mi amor, si digo esto mis ojos antigua que devora
crecen y la sal, en los pechos enanos como pruebas, retenidos
sonrío y aún distantes, enemigos para siempre,
pero, mi amor, si digo esto tu boca se parece a una tribu roja que gol- y en la cintura que ardió
pea cristales con muertos, barricadas, botellas,
y es el olor de las amigas que amé armaduras
tanto y un almanaque inútil con la fecha del ocho
detrás de un cementerio. y los niños del valle, los perros y las cañas.
Mi amor, mi amor, y como este cuerpo que toco
alguna vez Ven, amor, a degollar conejos encima de mis
una alegría sin centro me despierta en la noche nalgas.
que no termina aún, que no acaba Cuánto tiempo he de esperar, cuánto tiempo
y todo se ve azul he de esperar.
hasta morir
y yo habría de tener hierro en las manos Además
y quedarme. Tener el silencio de la tierra que

170 171
no dice O principe e a anduriña
palabras, que no dice
estertor,
que no dice Fará pedazos o meu corazón
colegio ni cita mayo alguno. pero non espero máis.

Cuánto tiempo he de esperar. As árbores tremeran,


detrás de cada folla adiviñarei un páxaro
De Los versos del Eunuco, 1986. coa sua mesma cara,
o sustento chegará por bocas inimigas,
rulas piadosas enviarán mensaxes,
en cada tronco e en cada pola
atoparei un sinal ameazante ou propicio,
esquecerei o deber, esquecerei os amigos,
as cousas por facer iranse amoreando
e quedando atrás a caza e o voo.

Adelgazarei,
chegará o día de emigrar á calor
e non me atopará a xefa de escadra,
retrasarei os plans da colectividade
e da xeoloxía.
A ciencia deterase nun pozo de dúbidas por min,
e eu quedarei detrás.

Pero non espero máis:


fará pedazos o meu corazón.

172 173
El príncipe y la golondrina

Hará pedazos mi corazón


pero no espero otra cosa.

Tiritarán los árboles,


detrás de cada hoja adivinaré un pájaro
con su misma cara,
el sustento me llegará por bocas enemigas,
tórtolas piadosas enviarán mensajes,
en cada tronco y en cada rama
encontraré una señal amenazante o propicia,
me olvidaré del deber, olvidaré a los amigos,
las cosas por hacer se irán acumulando
y quedando atrás la caza y el vuelo.

Adelgazaré,
llegará el día de emigrar al calor
y no me encontrará la jefa de escuadra,
retrasaré los planes de la colectividad
y la geología.
La naturaleza se detendrá en un pozo de dudas por mí,
y yo me quedaré atrás.

Pero no espero más:


hará pedazos mi corazón.

De mí haré una estatua ecuestre, 1997.

174
LUZ PICHEL

[amor transhumante]
Amor diminutivo y andarín, amor ambulante vive, vuela, ciervita, an-
dando al extranjero, mujer, andando y llueve. Muller, as cousas, mu-
ller, andando: aguanta, hay bosque y niebla.
va una mujer requeteconcentrada por la vereda con una vacaloura en
la mano / ciervita voladora escarabajo grande a pájaro no alcanza va
mirando su cara toda surecita en el brillo negruzco verdoso azulado de
las alas de la vacaloura / vai unha vacaloura / un espejo a lo largo de
la beirarrúa / la acera va por la vereda por el camino allá por la línea
de los bordillos viene después y de repente la chica se llama camarera
limpiadora cuidadora madre aceitunera celtíbera colombiana extreme-
ña vendimiadora reponedora vendedora ambulante polaca campesina
la mujer de repente le dio y echó a volar vacaloura rompe contra las
piedras / esnaquízase mucho llovía encima
recógela en pedacitos el que la miraba bien sentido muy sentido antes
repartía peces y cubitos de hielo por las pescaderías boquerón caballa
bacalao bonito del barrio de madrí cuando había
—juntámonos y volando para la alemania parécete bien?
—parece sí y tenemos pulpitos de bracerío abundante a lo menos siete
—bueno y llegarán o no?
—la alemania estará muy lejos?
—eso qué más tiene!

De Tra(n)shumancias, 2015.

179
descansa a cabeza harriet tubman na vía do tren e dorme ela vai por
diante porque sabe linguas entende os letreiros aguanta os paus / los
palos coñece os camiños de ferro sub da terra e ve o que non se ve e
soña o que non se soña a caronciño / a la verita de harriet as outras
dormen todas sobre da vía as viaxes sen retorno fanse largas as fragas
/ bosques meten moito medo meten medo os bichos e os estraperlistas
algúns países están lonxe de máis / quedan tan tan lejos algunhas ma-
ñás / mañanas non chegan nunca á estación dun tren / no llegan nunca
nunca pasan na escuridade as cousas semellan vultos os que se moven
cargando con sacos de liño / lino ou cunha velliña ao lombo / una vie-
jecita sobre los hombros semellan lobos néboa / niebla na man aberta
ten escrito a muller un verso con tinta de cor laranxa a vía do tren non
é unha almofada xeitosa / una almohada agradable no es la vía de un
tren o frío non permite acomodar as ideas sen perigo / peligro durme
e soña dicía a mensaxe o soño canto máis fondo máis lonxe te leva /
más lejos te transporta extranxeiriña

De Tra(n)shumancias, 2015.

180
MAITE MARTÍ VALLEJO

[amor humano]
Chocarse con el cuerpo, amor de multitudes cuando pasan, dudar
lo natural con el asombro: saber lo natural con el asombro, quedarse
con el hueso del deseo que calla sin cumplir en otra humana, amar
humanamente, hasta el brote, humillarte humanamente: delirar.
Nadie quiere estar con el cangrejo
porque hace daño a todos con sus pinzas

Seguir siendo humano


es romper un impedimento.
Quiérelo si eres capaz.
Quiérelo si te atreves.
Anne Carson
1
Una mujer me escribió para contarme su batalla contra la sima:
dentro de un frasco cerrado herméticamente donde no podía entrar
el aire, se golpeaba contra las paredes y subía y bajaba
unas escaleras imaginarias.
Es natural medir la realidad a través del cuerpo.
Aquella mujer necesitaba ayuda para atravesar el río.

2
Por falta de agua se ven los huesos de las manos
y todos los otros huesos como cestas de limosna.
Me organizo por si la lluvia no llega mañana.
Ni pasado. Ni al otro.
Manejo la lengua del drenaje.
No me molesta que me pisen
las multitudes con las que no comparto
ningún recuerdo.

3
Dicen que las cejas de Anne Carson siempre están ligeramente levan-
tadas,
como si procesara el asombro con antelación.

4
Es el granizo.
Se asoma a la ventana y deja el rastro de la guerra sorda.

185
Es una alfombra marrón o una cortina horrible y un extraño pusiera el brazo sobre el respaldo de mi butaca.
colgando de la ventana. Atraviesa la pared con el puño primero y con el zapato después.
Cabalgar exige girar las rodillas hacia dentro. Me hace el amor rezando,
Donde dije rodillas me agita a la manera del carnero
digo el único alimento, hinchado y húmedo como el ciclo menstrual.
digo otra vez en manos de,
digo el corazón alrededor de un huso. 8
Hay una laguna de unas quince líneas donde debí mencionar
5 que me quité la ropa sucia y me lavé el pelo.
¿Qué hacemos con una idea que no se puede desarrollar?
Hay gente que besa una pared durante cuarenta minutos. 9
¿Y qué ocurrió con la mujer? Rick abre la brecha y se infiltra en la escarpadura.
Una gran proporción de mujeres se quejan durante toda su vida No tengo animal que se lo coma.
de la forma de sus piernas: celulitis en la parte superior de los muslos
o un hueco en la horcajadura. De Todos vienen al funeral de Rick, 2018.
Cada mujer retiene el agua de forma distinta:
Agnès imaginaba que paladeaba con gran dulzura y deleite
el prepucio de Cristo.
Margarita se humillaba limpiando con su lengua
los vómitos de los enfermos.
Rick hunde sus zarpas en mi corteza
y evoluciona hasta la médula.

6
Deseo que permanezcas en la habitación y que llores.
Que llores porque podrías haber tenido un novio que te amara de un
modo
muy especial y no lo tuviste.
No haré ningún intento para que ceses de llorar porque deseo que lo
hagas.

7
Mira qué cruda estoy.
Azucé al perro en busca de Rick y ahora Rick ladra.
Es como si estuviera sentada en el cinematógrafo

186 187
You must remember this

También hay brote lingüístico.


Parece razonable buscar en el hígado o en el cerebro algún humor,
negro como la pez, que explique los negros presagios.
Mírale la cabeza, a ver qué tiene. Lo he oído millones de veces.
Si nadie ha visto y nadie puede demostrar,
nadie podrá tampoco comprender
por qué estoy abatida, por qué oigo voces,
por qué deliro.
No es lo mismo desnudarse en la ducha de casa, en una exploración
ginecológica,
en una playa, ante la pareja sexual en el dormitorio, en plena calle ante
los transeúntes
o aquí.
No sé si aquí es el este o el oeste de la fractura
pero sé que si te aludo
es para hacer juntos una cosa nueva
que no existía cuando estábamos separados.

De Todos vienen al funeral de Rick, 2018.

188
MARIANO PEYROU

[amor río]
Amor posibilidad, amor, tú no eres igual que ayer y eres la misma,
amor promesa antes de la caída, amor qué queda en el ojo que es
otro ojo, el mismo ojo, el mismo amor, que es frágil y pequeño y ocu-
pa una pupila cedida hacia el cansancio. Amor concepto, en distinto
estado de amor.
Posibilidades en la sombra (fragmento)

Tal vez ese ojo no sea bello,


pero yo lo veo bello porque puedo entrar en él
y verme bello, triste y aceptado,
frágil y pequeño,
volando por encima de las cosas del mundo.

Tal vez ese ojo no me mire como yo lo veo. Yo era
ese ojo. Yo seré ese ojo. Hay otro ojo al lado y
no es igual. Yo no soy ninguno de ellos. La diferencia
que hay entre esos ojos tal vez sea la misma que hay entre
nosotros,
cuando tus ojos me miran y yo entro en tu ojo
y veo cosas que no ves, que no hay, el dolor,
el cansancio.

Ese ojo es un salto, una promesa, un hito, como


cerca de las cataratas había un hito, una piedra
que marcaba el lugar de una promesa,
antes de que existiera el mundo
y se rompiera.

Antes de que existiera el mundo y se rompiera


había un jardín, era una foto de un jardín
con una mesa y cuatro sillas, y una
se había caído para atrás. Un terremoto
tira una silla para atrás y eso no está en
tus ojos. En tus ojos hay otros jardines,
no hay tiempo todavía. En tu nariz hay
tiempo, el tiempo sube por tu frente
y no se ve.

195
Tal vez tu padre pueda meter las fluyendo los ríos y abre o rompe la lógica
manos hasta las muñecas en un río del miedo. Cuando tu boca se rompe, te creo.
de sangre, lavarse las manos en sangre. Cuando tu boca se abre, te toco.
Tal vez me cures el miedo, o me inocules
el miedo, pero eso ahora está detrás Miro fotos que muestran cosas
y tiene la presencia intermitente del que no están en las fotos.
deseo. Hay
Todo es aquí deseo, pero alguien esperando y alguien que
¿deseo de qué? De tiempo, de camina. Miro la foto y veo
sangre, de tener veinte años para la tristeza de una silla.
no saber, Tal vez quieras ayudarme a levantarla
no la energía sino la o sentarte en el suelo, a su lado.
deriva de los veinte años; Yo quiero darle una patada,
deseo quemarla, sacarla de la foto.
de descansar y de que algo no
termine nunca. Tal vez podamos bajar al río,
meternos hasta las rodillas en el
Tal vez el calor baste para apagar río, calzados, para no cortarnos.
esa pregunta, o el sabor, Una hora metidos en el río hasta
o una forma nueva de dormir y mirarse. las rodillas y cambiaría nuestro concepto
O tal vez no se trate de apagar de esperanza. Mi concepto de esperanza
sino de alumbrar otro sol, tal vez se parezca al tuyo como
cuando subes un río se parece a su valle
y bajas sugiriendo otros soles, o a su catarata, o como este río
otra sangre. se puede parecer a tu boca
Nada de esto está cuando
en ti, ahora, ni yo sé nada de no la miro o cuando estamos
tu miedo o tu deriva. Sé que había una silla metidos hasta las rodillas en el río
tirada para atrás, en el jardín, una hora. Es raro, lo de los parecidos,
y que tú me miras. cuando hay un río en medio
o veinte años. Desde mi orilla,
Tal vez en la proximidad destaque el concepto de esperanza está gastado,
la diferencia. Tus ojos están cerca de tu pero la esperanza no; desde la tuya,
boca, todavía no ha acabado de formarse.
que se abre o se rompe para que sigan En eso se parecen, como no mirarte

196 197
se parece a rozar había al otro lado de la montaña,
tu boca, pero ya no lo recuerdo.
o un río se parece a verlo desde lejos. Sé que era
un poco previsible pero no decepcionante,
Tal vez a esa silla no la haya algo encajaba, como a veces las cosas
tirado un terremoto, sino el peso encajan en los sueños y en la vigilia
de la esperanza. todo es discordancia. Esa forma
en que encajan las cosas en los
Tal vez prefieras subir una sueños tal vez sea lo que busco
montaña lentamente para ver en la vigilia,
qué hay al otro lado. No hay cuando miro tus
nada al otro lado. O tal vez ojos o tu boca, cuando subo una
estemos tú y yo montaña y pienso en lo que verás
bajando una tú, cuando entro en tu ojo
montaña. ¿Qué te gustaría para verme mirándote, despierto
ver ahí? ¿Una segunda oportunidad? y activo, ilusionado, nuevo.
¿Un fracaso merecido? ¿Un
sentimiento mutuo? ¿Una emoción De Posibilidades en la sombra, 2019.
fugaz? ¿Una montaña? Y tal vez,
si me rozas, pueda descubrir lo que
me gustaría ver a mí. ¿Una reacción
visceral? ¿Un dilema ético? ¿Una
persona mirando una montaña?

Pero tal vez donde tú ves una montaña,


yo vea un río; donde tú ves un dolor
leve, yo vea una promesa; donde
tú ves agua, yo vea sangre. O tal
vez yo vea un símbolo donde tú
ves un rastro; yo vea una mirada
limpia donde tú ves una cosa;
y donde tú ves un jardín, yo
vea una silla caída.

Hoy he visto, en un sueño, lo que

198 199
MARTA VICENTE ANTOLÍN

[amor cantidad]
Amor persiana, amor milagro.
Mitades de cuerpo, mitades de río, canto, a mitad, cuánto. Una acu-
mulación: hay, hay, hay, y qué con lo que no. Amor carencia.
Cinco
semanas estudiando para obtener un puesto de trabajo.

Una ventana,
una persiana de bandas metálicas horizontales,
un metro atestado,
un metro de la tierra,
un metro que mide dos, tres, cien,
un camino de mitades de cuerpos,
un humo pegándose a las cosas,
un ruido posándose en las voces.

Un desarrollo sostenible,
un viento quedándose quieto,
una llanura circular,
una hoja arqueando los brazos,
un aire de viscosidad tráquea,
la luz perpetua,
una máquina soplando por un tubo,
un frío que se nos arruga.

Es posible
que esa persiana horizontal
sea por lo que yo soy canto.

Inédito.

203
No hay.

Hay sábanas que rozan los pelos de la piel.


Hay sueños que nos hablan y otros que nos miran.
Hay lugares violetas, hay lugares violetas.
Hay tornillos pequeños sobre un estante plano.
Hay personas que nunca debieron ser pensadas.
Hay secretos que enfrían los muslos para siempre.
Hay mentiras que siempre serán nuestras verdades.
Hay teclados que gritan mi nombre entre susurros,
pero no-no no hay
suficiente saliva entre toda esta Tierra.

Inédito.

204
MARTHA ASUNCIÓN ALONSO

[amor mayúscula]
Amor entero, amor insaciable, amor anaconda. Amor histórico, amor-
amor, brindar la acción cada vez que repetimos el verbo: amar y
amar.
Amoramor

La palabra AMOR no está registrada en el diccionario. La que se


muestra a
continuación tiene formas con una escritura cercana.

Aquella tarde descubrimos que el DRAE no recoge el AMOR como lo


buscábamos y queríamos: con mayúsculas. Propone a cambio, por si
cuela, una mustia imitación en minúsculas. Bisutería. Seguimos leyen-
do, curiosas, a ver de qué estaba hecho el académico sucedáneo:

amor.

(Del lat. amor, –ōris).

1. m. Sentimiento intenso del ser humano que, partiendo de su propia


insuficiencia, necesita y busca el encuentro y unión con otro ser.

¿¡Insuficiencia!? ¿¡Necesitar!? No. Lo que nosotras pedíamos era un


amor de naranjas enteras. Un amor anacondo. Un AMORAMOR.

¡Al infierno los diccionarios!

Provisionalmente, para no dar la tarde por perdida, de entre todas las


demás acepciones de mercadillo que nos regateaba la RAE, termina-
mos merendándonos la octava:

8. m. p. us. Apetito sexual de los animales.

Después nos marchamos al zoológico.

A abrir la jaula de las elefantas.

De Wendy, 2015.

209
Carreteras secundarias

…lo que mañana ocurra


ha ocurrido hace mil años…
Luljieta Lleshanaku

Hace miles de años, alguien pintó un bisonte en Altamira


para que yo te quiera.

Para que yo te quiera, se han hecho y se han deshecho


castillos y pirámides.

Te quiero por el Big-bang,


por la Biblia, por Darwin.

Te quiero porque no somos microscopios.

Sin duda repetimos, al querernos, los gestos de otro amor


que nació siendo anciano.

No vamos a inventar la poesía.

El beso ya lo esculpió Rodin.

Tal vez sólo podamos escoger si deprisa, o si contigo.

De Balkánica, 2018.

210
MIGUEL SÁNCHEZ SANTAMARÍA

[amor mustio]
Violencia lenta que va erosionando, cansado del regreso, cansado,
auxilio, amor, agotado el hueco, amor, querernos un ratito: seamos
pegajosos, amor, que merezca el peso.
Sin título

En la violencia
un agujero exacto
amó · amó

Inédito.

215
Manifiesto y la prueba
su certeza en mi caída
y el auxilio
cada día si podéis
me levanto así a él
sorprendido cansado amor
cansado amor cansadlo
cansado
del martes y el café mustio Inédito.
aire tostado también
envuelto
de frío
en los carriles
y oigo
los tonos de aquel
cansado amor
cansado
que nos mira en los vagones
y se hace jirón
humedece
de tedio
la punta de las mangas
y los pasos
así
boquiabierto regular
de las mañanas
dispuesto mi
cansado amor
cansado
en cualquier menester inútil
de apatía larga
y con ánimo tostón
con las ganas del regreso
del remartes
retostado

216 217
Poema de amor obstáculo
tras
otro
Un poema
poema pies
largo de
extenso tedio
que y rutinario
empiece poema
aquí enrarecido
y termine un
más poema
allá centímetro
que a centímetro
requiera métrico
pasos poema
muchos cien
pasos veces
un cien
poema metros
camino poema
entero también
y poema
equipaje llama
agotador débil
poema y
que día
pesa airoso
y prolongado
es en
den una
so hoja
una y
carrera paciente
de como
poema el
poema hueso

218 219
el poema
poema orilla
un harta
poema una
ratito y
rato otra
y vez
ratón del
que puente
marcha zigzag
con en
una el
pierna poema
barro zig
y la zag
otra en
sendero el
poema poema
tobogán en
pegajoso un
de poema
paredes que
de termina
fricción pero
muy luego
centrífugo poema
en cuánto
las queda
formas una
y cansado más
muy cuánto
cansado queda
el aún
poema una
del más
poema es
un este

220 221
un
pasillo
en
el
poema
que
se
cansa
y
que
persigue
sin
saber
dónde
conduce
dónde
va
un
poema
sobre
todo
muy
difícil
sobre
eso
un
poema
que
merezca
la
espera.

Inédito.

222
OLGA NOVO

[amor lenguaje]
Amor de cosmos, implosivo, amor conciencia que dice la piel, sentir
la epidermis, amor con carne, descomunal, imprevisto.
Amar, lenguaje del milagro, amor abismo, amor que queda y cae en
todos los cuerpos del amor. Amor y canto.
A chegada do amor

Non se parece a nada.

Para poder traer á linguaxe un milagre


houbo que crear un pomba mística
un arcanxo
unha lingua de lume e a gramática pola cal
un verbo se fixo carne.

Pero eu
que son humana e só teño
pequenas palabras que limitan coa sintaxe
e que petan nunha pedriña cando fincamos a rabela do arado
na conciencia.
Eu que tan só son humana…
Non se parece a nada.

Pero inda así


acepto que me ronde unha fera prodixiosa que fala na flora
e empurra o meu corazón ao cosmos
e teño que ir por el de noite soa traelo á caixa do peito
aínda así eu acepto

ter que aprender a respirar de novo


para pronunciar de maneira simultánea
as vinte sílabas do amor
intrapalatais
sonoras
implosivas
aínda así eu acepto
que a miña mente repte cos seus aneis pola Terra
que non é de todo redonda
se non estás.

227
Sigo sendo aquela nena salvaxe cando están a piques de morrer
atenta á chegada descomunal do imprevisto e as últimas burbullas da súa vida fan un ruído mínimo
deitadiña na aira mirando estrelas que xa non existen máis que só escoitamos
que na súa luz cando amamos.
e non obstante vemos porque son memoria
da materia Para poder traer á linguaxe un milagre
coma ti. prescindo das cordas vocais e no seu lugar
fáloche con todo o son saíndo da sirinxe
Sigo sendo aquela nena no final da filosofía que é o órgano do canto dos paxaros no extremo inferior
onde o último protón do pole se desintegra da tráquea Non
por efecto da tenrura se parece a nada.
coma a túa.
Entón
Pensei que quizais ao medrar que se pode facer? Di
podería domesticar o instinto da poesía e vivir senón disolverse no disolto
entre os demais discretamente. na paz
Poñer unha lavadora profunda
ir á compra facer en fin da partícula que ama e se abisma
xestos cotiáns con só o significante no coñecemento
e que Saussure calase nas súas leccións de lingüística de 1913. da paz
profunda
Pero non foi así da partícula
creme. que ama

Porque eu sei Porque non


que para poder traer á linguaxe un milagre se parece
hai aves de apenas 20 cm que veñen voando desde Islandia a nada.
varios centos de quilómetros
outras dormen comen aparéanse no ar durante meses Inédito.
sen se pousaren no chan.

Para poder traer á linguaxe un milagre


hai un ser liminal dos ríos
que produce o seu propio osíxeno
árbores que ceden os seus minerais a outras

228 229
A eternidade é hoxe xa
non serve pra nada un verbo
El infinito mapa de aquel xa toda acción é desexo
que es todas sus estrellas e eu
esta variación que son de todos os meus espectros.
J.L. Borges.
No carro da conciencia tirado por unha parella de bois
veñen feixes de herba verde talvez
Eu son a antepasada que te amará mañá. desde antes de que o ser humano inventase a escritura e eu só
puidese entregarche o poema en forma de pedra ou de caracol
No carro da conciencia tirado por unha parella de bois ou raspar o po cun pau
veñen feixes de herba verde de cando eu non era. e debuxar o infinito mapa que es
Pero podo ulilos desde o fondo da pituitaria con todas as túas estrelas nun carro de bois
podo sentir a brisa da mañá preclara abaneándome o raciocinio tirado pola conciencia.
e mesmo o bufar dos bois cando xa vou cansa.
Inédito.
E se miro inda máis dentro con todo o poema tendido sobre o pensado
eu son sen dúbida a muller antepasada que te amará mañá
cun pano á cabeza e toda a primavera segada á mau cun fouciño.

Xa
desaparece a linguaxe tras dun silveiro
xa
se disgregaron no amor as partículas de varios corpos
que fomos xa
se reorganizou a materia e o fósforo
xa case son eu cando de min nada queda
no final do pracer igual
que a última mazá no fondo dunha cesta
acabada de apañar mañá en 1950.

E descalciña de pé e perna no medio deste don impetuoso


vou por sede á fonte onde sei que estás
con toda a auga fresca da miña boca.
E xa desaparece a linguaxe

230 231
PABLO FIDALGO LAREO

[amor encendido]
Porque todo es igual y es igual, se enciende la luz de las cosas pe-
queñas: en la fragilidad de los distintos nos encontramos.
Porque siempre llegamos a la noche

desde días distintos.


Porque hemos encendido la luz.
Porque siempre hemos vivido
en la fría habitación del hijo único.
Porque si tu época se ha detenido
piensas que es por ti.
Porque nunca aprendimos a ir a dormir
sin que pareciera un fracaso.
Porque sabíamos la fuerza que teníamos
y nunca nos creímos que nadie
estuviese cansado.
Porque en el juego de nuestra juventud
el que antes se duerme
lo pierde todo.
Porque nunca supimos exactamente
de qué habitación venía el dolor.
Porque llegamos a las estrellas
desde cielos distintos.
Nunca más volverás a amar
como el día que yo te desnudé,
nunca olerás tan bien
como en el poema que te escribí.

Nos elegimos como la más frágil


entre todas las cosas frágiles.
Elegimos la forma más lenta de volver a casa
pero ya estamos cerca.

De La educación física, 2010.

235
Corso Regina Margheritta es para que entiendas que sé llegar a cualquier sitio,
y que como tú dijiste un día: la geografía me salvó.
Sigue un poco más y ya estarás en casa.
Dejemos que las cosas ocurran, esta vez de verdad. Por la mañana abrirás la ventana
No nos perdamos otra vez en el viaje y verás la nieve sobre la que hoy volaste.
de lo grande a lo pequeño.
Llegarás a Torino en avión, atravesando los Alpes. Hemos vivido mucho tiempo solos.
Prende il Pullman y baja en la estación de Porta Susa, La casa es pequeña,
camina San Donato y al pasar el cine Roma Blue nos costará aprender a movernos sin molestarnos
gira a la derecha. Yo no saldré a encontrarte. pero eso ya será parte del camino de vuelta.

Será de noche, poco después tu cara será iluminada De Mis padres: Romeo y Julieta, 2013.
por la luz naranja de la parada del tranvía: Livorno.
Una ciudad bien iluminada por la noche
nos conducirá a la revolución,
de momento es la felicidad.
Japón. La terra torna ancora a tremare.
Y siento que ha sido el comunismo,
su éxito y su fracaso, la idea del comunismo,
lo que permite que nos encontremos año tras año
en ciudades tan lejanas, en poemas tan distintos.

Un poco más, y estarás conmigo.


Si consigues orientarte solo con mis palabras,
sin otros mapas ni otros libros,
tu mente se irá reparando y llegarás curada.
Creo que me has descubierto.
Palabra por palabra, recordamos la lengua en la que crecimos,
y aún pienso que uno de los dos morirá joven.

Nos hemos quedado en Europa definitivamente


y eso es lo que distingue nuestro odio
del odio de los demás.

Si me he tomado el tiempo de explicarte esto

236 237
PABLO LÓPEZ CARBALLO

[amor sustento]
Cargar aquí el peso del otro, compartir, coger el peso a dos, qui-
társelo al amado, amor cuidar, amor, me encargo: amor, descansa.
Pasaría el día aquí
haciendo todo lo que no quieres hacer
para que no tuvieras que hacerlo.
Esa es —me dices— la distancia
que nos separa del resto.

241
Al separarnos
permanece un déficit.
La sincronía es para
los que solo se soportan
y desconocen el peso
de llevarse
el uno al otro,
con voluntad
y gozo sosegado,
a cuestas.

De Perder la naturaleza, 2021.

242
PILAR TROL

[amor desafinado]
A veces lo parece. Amar sin coincidir, amor ruido, parece a veces
simultáneo, a veces lo parece, pero, a veces lo parece, pero. Amar
descoordinado. Amarse y coincidir: amar con suerte, poder amar,
sonar al tiempo.
todo tan lejos el anverso
de una huella no hay ni un poquito
de yema de los dedos está desafinado
porque todas somos somos y no hay
ni un agujerito de verdad no hay
ni un agujerito incluso a veces lo parece
una grieta lo parece que un trasvase de luz y lo parece
a veces hay un riego momentáneo y lo parece
a veces no es verano y no hay
ni un verano que no esté amenazado y él
huele a cosa deshuesada y no es verano pero
los efectos siempre huelen a yema de secano
aun así se pudre siempre

Inédito.

247
La suerte sumergida entre la coronilla y la pared es mala .
como un desasosiego
la suerte que se borra Es la suerte
es buena
Como un buitre que me han dicho
La Suerte que decide las mayúsculas es tan indefinidA que es de una ensoñación

la suerte del Espacio no se cae .


la suerte de los Puntos cae aquí como un buitre
.
Así
la Suerte de los puntos cae allí Así que ten cuidado

. TÚ
A veces la suerte coincide con la Suerte que decide .
LAS MAYÚSCULAs
. Tú, que tienes las rosas en los ojos.
.
.
a veces sumergidas
La suerte se lleva una substancia a veces sin prefijo
. Inédito.
.
.
no coincidE
a veces en espacio a veces ni en el tiempo
a voces ni
.

hay espacio definido en la Suerte

Ni tampoco Ni sonido
.

248 249
RAQUEL VÁZQUEZ

[amor ingrávido]
La amabilidad del primer amor, su peso leve, como si aún estuviéra-
mos a tiempo de volver, traducir tranquilos lo real, como si lo más real
fuera posible: dar pasos atrás, inventar los mapas.
En caso de emergencia

Rompimos el lenguaje.
Vamos, dijiste; o yo traduje, eso no importa:

sólo importó aquel mirlo


que aguardaba en tu mano con las alas plegadas.

Pusiste esa sonrisa


boba que tanto me ha atraído siempre.

Ahora pude decírtelo.

La eternidad se demostró pequeña,


manejable: cabía
dentro de una modesta habitación de hotel.

Y estábamos allí para tocarla.

De Aunque los mapas, 2020.

253
A tiempo

Eres lo más real y no es posible


Jorge Riechmann

En qué orden sucede lo ingrávido imposible,


con qué leyes se inspira el engranaje del mundo.
La levedad primera del amor
cabe en un solo paso de un jilguero
y qué huella indeleble puede llegar a ser,
y qué huella indeleble: un ancla amable,
una toma de tierra
a la serenidad sin horizontes,
un cielo replicado en el camino.
Vuelve el jilguero y en su canto ratifica
lo real imposible
que irrumpe sin empeño de marcharse.
Lo real imposible, como si todavía
no hubiéramos errado.
Como si aún estuviéramos a tiempo
de volver a nacer.

De Puerta de embarque, 2022.

254
ROSA BERBEL

[amor celebración]
Quererse como en paz, justo a la vez, estar en el estar, justo a la vez:
estar en el estando, no ser ni en la memoria ni ser en los futuros:
estar juntos aquí, tranquilamente. Brillar con brillo vivo.
Otras fiestas

Pienso mucho en los días en el pueblo.


En el olor a lumbre y a hierbajos
y en esas flores blancas, pequeñitas,
que cogí para ti frente a mi casa.
Las colocaste dentro de los libros
que leíamos a medias aquella Navidad
y que luego olvidamos.
A pesar del bullicio de las cenas,
el mundo era tranquilo, éramos simples,
nuestros ojos brillaban todo el tiempo.
Pienso en aquellos días,
en las celebraciones transcendentes.
Es un milagro estar
justo donde la vida está ocurriendo,
casi nunca sucede, rara vez esas flores,
blancas y pequeñitas,
crecen junto a mi puerta.
Casi siempre me esfuerzo
en salir a buscarlas.

De Los planetas fantasma, 2022.

259
Primer amor

Era verano entonces y a nosotros


nos picaban las piernas del sudor
y la euforia.
Desde aquel día parece que los demás
tan tibios
se quieren siempre menos.

De Las niñas siempre dicen la verdad, 2018.

260
RUTH LLANA

[amor cincel]
El lienzo blanco, el sueño blanco, la vergüenza de estar hechos de
capas, en escondites, en escondites de piedra, lo de dentro enros-
cado, el otro que se desplaza, aleteando: el gesto, el gesto, el gesto,
atroz, dulce, disperso. El gesto y al fin la paz: entonces ver.
Ceremonia

He vuelto a soñar, he vuelto a soñar, anoche, que te decía, que nos


casábamos, que eras una mujer, que yo iba de blanco, con el cabello
recogido en un moño infantil, que en el momento de la comunión, te
decía, eras una mujer. La iglesia era de piedra, en medio del monte,
pero no vi la hierba, te digo, regresé del sueño sin ver la hierba. Y no
recuerdo el beso, no, no recuerdo el momento de unión, no recuerdo
más que la piedra, las caras de los invitados porque éramos demasia-
do jóvenes y de repente tú una mujer y quizás no podríamos casarnos
pero me vestí de blanco para escribir nuestros nombres en otro papel
blanco blanco como no lo era mi piel debajo de ese vestido de novia
y la tuya que me lo recordaba que me querías con esa presencia tuya,
transformada, y no recuerdo, no recuerdo más que el momento de es-
cribir tu nombre y el mío al lado, no uno encima del otro, no, sino uno
al lado del otro, como debía ser para mantener el equilibrio, bajo la
mirada del párroco, bajo las vigas de madera, y las paredes de piedra
gris, y una puerta marrón que no abrí, pero pregunté por el otro lado, y
quién sabe, sólo, si no vi la hierba; te digo, me casé de blanco contigo,
una mujer de repente, en el monte, y no vi la hierba, no vi la hierba ni
un instante, sólo el cielo cubierto por la luz marchita de las nubes de
otoño, y mi cuerpo infantil, casi, casándose en blanco, en tres lugares
blanco, o cuatro lugares, con un cuerpo, con aquella que pretendía ser
aquello de ti; y escribí tu nombre al lado del mío, y estuviste de alguna
manera, unido a mí, no por un cordón, una cuerda, un ombligo, o una
palabra, sino puede que por el cielo encapotado, la iglesia, saber tu
nombre, saber las vigas en mi boca, saber el frío de la pared en mis
ojos, sí, saberte a ti y no necesitar, no necesitarlo, no, no más que esa
posición, no más que esa posición de nuestros nombres, no más que
ver el modo en que lo son y los veo, laterales de nosotros mismos.

De Tiembla, 2014.

265
Creación del amante

Toma con las manos la figura del amante su silueta su atroz su ver-
güenza. Entre tus palmas se transfigura, aletea, trata de dispersarse.
Pero no lo consigue con rotundidad la misma que se acoge al gesto,
la misma que se retiene va cegando. La cara del amante se desfigura
entre tus manos negras de lirio de rosa de jazmín de linaria turquesa o
púrpura. Las manos del amante y tu vergüenza se separan se destru-
yen. Las manos del amante se pierden bajo la forma del agua. En una
mancha oscura se transfigura su rostro. Cientos de palomas lo forman
a lo lejos, su cara extraña. Queda durante un segundo el rostro disper-
so en el aire, en los pétalos de los tulipanes, bajo la mano que guarda
semilla. Y con esa misma desgana que la eterniza, la figura se desma-
terializa, se enrosca sobre sí misma, se detiene. Así como lo tomes
entre las manos, su rostro será marca de curva o rectilínea; así como lo
agarres ente los dedos puede ser escarmiento o mano que se cierra; así
como entre los puños cerrados, puede ser golpe, traición, el reverso.
Un ángulo determinado puede hacer que desaparezca o revelar perfil;
un ángulo determinado puede crear la ilusión óptica de varios rostros
superpuestos, algunos sobre el tuyo en el momento del amor y su atro-
cidad, y tu vergüenza; algo se posa sobre ti cuando apartas la mirada,
el rostro que se pierde; de algún modo mirar al sol de frente permite
mantenerlo unos segundos en los ojos. Con arcilla entre las manos
creas la figura retenida del amante, y tiene la cara de tres hombres de
tres mujeres distintos. A todos ellos amas y vas amando hasta que se
gastan y queda el rostro verdadero entre tus manos. Toma entre las
manos el rostro del amante, bésalo en la frente, dile: «buenas noches»;
dile: «hasta mañana».

De La primavera del saguaro, 2021.

266
SARA TORRES

[amor vivaz]
Amor pisada, amor hogar, amor hocico, con las patitas sonando,
trotando, haciendo casa, haciendo hogar, con el calor de un cuerpo
entre dos cuerpos, amor perruno que dice -hocico y ojos- y ocupa
el pecho.
I

M. quiso construir algo nuestro


y yo imaginé tus dientes chiquitos Pan
raspando la miga dura

las patas cortas entrando al río


las huellas mojadas sobre la losa

al principio también quería tenerte


nadie la había avisado
de que los perros hacen suyas a las mujeres
como si fuesen sus amantes
o sus recién nacidos

--al final, qué cansancio


todas las metáforas
las da el mundo heterosexual--

yo me sentí agradecida
me estaba abriendo
la posibilidad de una casa

quería que M. fuese


el dragón de mi perro
que al andar abriese camino
entre la maleza
y que tú Pan
avanzases un trote corto
para ir tras de ella

sus hombros fuertes al sol


y un sombrero de hierba seca

271
con un pañuelo de colores II
atado

Cuando viniste a vivir con nosotras


De Deseo de perro, libro inédito. todo era nuevo y entonces
sí echaba de menos un lenguaje articulado
Un código complejo compartido
para desambiguar ciertas cosas
que solo el tiempo aclararía:

Eres amada
Siempre vamos a volver al lugar
donde te dejamos sola unas horas
Nadie va abandonarte
Nunca te dejaré de querer

Era verdad
Pensé, qué fortuna la suya
con ningún otro amor
podríamos mirarnos a los ojos
pronunciar esas frases
sin temer el quiebre
el futuro
lo que aún no sabemos

De Deseo de perro, libro inédito.

272 273
SERGIO NAVARRO

[amor tacto]
La realidad tintinea una nueva dimensión entre tus manos, el corazón
en tus manos, mi cuerpo entre tus manos, el tamaño del aire, el ta-
maño del mundo, fazer revolución, la nueva realidad que te amotina.
Génesis en un bar del puerto

Niña, un gesto más


y el corazón será inevitable.

Me pondré al borde de mi ser, como el nadador en su trampolín.

(¿Quién salto?)

Tus manos tienen mi cuerpo, una piedra que le quitas a la playa; y lo


lanzas a que salte dos, tres, cuatro veces sobre la faz de la tierra.

II

Tus manos dan tu nueva dimensión


a una moneda.
Sostienes con el índice su eje,
con el pulgar la giras
y levantas la tierra, que es plana,
en el mundo de oro donde cenamos.

La realidad y sus titubeos


cuando la tocas.
Mientras tú y yo
desean por ahí.

El mundo se oye en la tarde


como un temor que se sueña
porque no quiere soñarse.

De Historia del tacto, inédito.

277
Los danzantes bajo la colina (Fragmento)

Aquí yacen dos


que se amaron en paisajes de montaña,
con gritos muy cerca de las sus bocas
et a tal lo llamaron
el nos arder las animalias.
Fizieron juegos de criaturas chicas
que pueblan su porción de aire
con excesos de tanto propio
que ni siquiera forman parte del paisaje.
El amor que se hacían
lo arrebataban a la montaña.
Confundían sus propias nieves,
sus propias águilas.
Por fazer revolución
ayuntaron los sus cuerpos,
amotinaron las sus carnes,
y fijados en su altura,
desde algún punto de su gloria
cernirán sobre el siglo.

Inédito

278
VICENTE LUIS MORA

[amor temperatura]
Huir de quien amas, tropezar, amor que hiela pronto y rompe, el
cuerpo que tarda ahora mil años en curarse, que no cura nunca, ser
de nuevo cuerpo del amor, ver en ese cuerpo amado hoy hielo de
antes.
[Fragmento]

Esta es la imagen:
un hombre tropezando como ebrio
mientras camina huyendo
de quien ama

un hombre como un agujero negro


solo en perenne autoaniquilación
un hombre como isótopo de cesio
un hombre que parece arder
como un cometa que surcara el cosmos
y que es –como el cometa– roca y hielo
un hombre como un pólipo maligno
un hombre en crisis como un antiquark
un mineral a cero grados kelvin

amor
que de la misma forma que el mercurio
se enfría pronto al cesar el fuego

dolor
que de la misma forma que el plutonio
requiere cuando llega al rojo vivo
más de mil años para contraerse

De Construcción, 2005.

283
VII. Integración de variantes ecdóticas Esa es tu foto típica,
normal, característica.

Tengo 74 fotos de ti. Es justo esa


Desglose de gestos en ellas: en la que estás con él.

52 sonriendo. De Serie, 2015.


27 sentada.
18 tocándote el pelo de algún modo.
12 de espaldas, girándote
hacia la cámara.
10 en París.
8 vestida de verde.
6 desenfocadas.
4 conmigo, besándonos.
1 con otro hombre.

Elimino resultados aleatorios


o poco consistentes,
desecho variaciones sospechosas
en busca de la imagen fija.

Elijo foto tipo, texto fijo


y limpio de impurezas:

hay una foto tuya sonriendo,


sentada, anudándote el cabello,
y vestida de verde y en París,
girada mientras miras a la cámara.

284 285
XAIME MARTÍNEZ

[amor apocalipsis]
Amor derrota. Amor qué sabemos que sabemos, qué recuerdo re-
cuerdo con verdad (qué es verdad) y qué de lo vivido lo he vivido:
cuando hemos sido ambos ¿nos coincide? Es hermoso rendirse: la
capacidad de entender que nunca nos encontramos.
Demuestra que no eres un robot

¿Vas a creerme, amor, cuando te diga


que alguien ha intercambiado mis recuerdos
con los de un náufrago lustroso de la burguesía catalana?

Te veo hermosa y quieta,


el sol llenando los limones de su significado extraño,
burós incestuosos de caoba y Franco y libros lejanísimos, la desespe-
ración
de un padre de familia que vuelve de la muerte para seguir actualizan-
do Windows,
los cables y electrodos que aquel día adornaron mi cerebro...
¿En serio no lo ves?

Es broma, no me mires así,


pero contempla
la destrucción de los palacios invernales, los caminos tomados por la
hierba y ese gesto
que hago cuando toco, tratando de imitar a Paul Simon en Zimbabwe.
Así, con la guitarra.
(Créeme que lo intento, no es tan fácil).

Detén tu juicio silencioso, lo suplico, responde a estas preguntas o


márchate de aquí:
1. ¿Tú sabes si es amor o sangre eso que nubla nuestros ojos?
2. ¿Qué probabilidades hay de que esto sea un Apocalipsis
pop?
3. Los héroes son los gestos de los héroes y todo lo demás ya
su derrota.

Alguien ha intercambiado mis recuerdos con un burgués de mierda,


pero cómo es posible que yo me haya enterado.
Recuerdo caminar por Varcelona, esta ciudad que amé

289
como una bestia hermosa, desesperado y lento, y la guilty conscience Interpretación cabalística d’un versu del cantar de los cantares
de Auden y de Biedma se me abría entre los huesos como una flor azul
o tal vez solo Fuxe de min, amada, tal corza pelos montes,
como algún motivo literario. ye dicir,
fuxe de min a reblinquinos, señora mía y del pueblu d’Israel,
¿Estás en casa? Sí, siempre estás en casa, mirándome a estos güeyos de cyborg y doliosa,
mirándome muy quieta y muy hermosa, apocalíptica, y yo nunca te o sía,
hice estas preguntas: fuxe de min como fuxisti la nueche aquella na qu’entrambos
1. Hay algo horripilante escondido entre nosotros. dos sospechemos ún del otru y escapemos
2. ¿Será bastante el pop para salvarme? dica’l mesmu llugar y pesie a too nunca mos alcontremos,
3. Pero en mitad del día y de la noche, ¿qué sabremos al fin? esto ye,
¡Nada, como tampoco sabe nada fuxe de min pa contra min,
la rosa que al crepúsculo pues somos nós les rexes de la cárcel
olvida su color! y la madre amurniada
y l’asesín confesu de 32 muyeres
Y tanto paraíso para eso. Alguien ha intercambiado mis recuerdos, (y, evidentemente, les 32 muyeres
como pareces o, a lo menos,
negarte a admitir, pero ¿podré saber qué había antes? eso interpreto yo).
Como la alegoría de algo que no existe tú permaneces quieta.
Estoy seguro a veces de que vas a responderme pero no, estamos
unidos
como esferas perfectas en medio de la nada.

1. ¿Qué estoy haciendo mal? ¿De dónde viene este dolor terri-
ble?
2. ¿Es por ser nazi?
3. Lo siento de verdad, solo quería fingir que opino cosas.

Permite que me hunda, te lo ruego.


Estamos tan cansados de demostrarlo todo...

También los robots tienen hermosos sentimientos.

De Cuerpos perdidos en las morgues, 2018.

290 291
Interpretación cabalística de un verso del cantar de los cantares.

Huye de mí, amada, tal corza por los montes,


es decir,
huye de mí dando saltinos, señora mía y del pueblo de Israel
mirándome a estos ojos de cyborg y doliosa,
o sea,
huye de mí como huiste aquella noche en la que ambos
sospechamos el uno del otro y escapamos
hacia un mismo lugar y pese a todo nunca nos encontramos,
esto es,
huye de mí y contra mí,
porque nosotros somos las rejas de la cárcel
y la madre afligida,
y el confeso asesino de 32 mujeres
(y, evidentemente, las 32 mujeres
o, por lo menos,
eso interpreto yo).

Inédito.

292
YOLANDA CASTAÑO

[amor ¿y cuándo?]
Aguantar la tarea en el altar, la vocación. Dentro, criaturas, cosas,
miedos, exigirse escondida, hacer la fe al fin del logro, fuera, piel de
trabajo, exigirse a la luz de un flexo, no saber qué luz, qué hora hay
fuera, salvar al tiempo laboral pedacitos de amor: hacerse hueco.
A bolsa ou a vida

Ela finxe ser fragua,


definidamente indefinida.
Desposou a súa tarefa
nun altar perturbado.
A súa pedra basilar é estatura e territorio.
No cilicio e na vocación,
na saúde e na enfermidade.

Pero dentro do seu fogar colgan outras criaturas,


simios bebé, crisálides, rango, expectativas.

Así se abre paso o amor:


regueiriños de mofo na parede do traballo.
Sucumbe o día, remonta o día...
Ela por non termar do sol
medra á calor do seu flexo.

Sobe o caudal entre os muros. A pirámide dos cargos.

O rostro incondicional do amor


é deleznable.

297
La bolsa o la vida

Ella finge ser fragua,


definidamente indefinida.
Desposó su tarea
en un altar perturbado.
Su piedra basilar es estatura y territorio.
En el cilicio y la vocación,
en la salud y en la enfermedad.

Pero dentro de su hogar cuelgan otras criaturas,


simios bebé, crisálidas, rango, expectativas.

Así se abre paso el amor:


regueritos de moho en la pared del trabajo.
Sucumbe el día, remonta el día...
Ella por no aguantar del sol
crece al calor de su flexo.

Sube el caudal entre los muros. La pirámide de los cargos.

El rostro incondicional del amor


es deleznable.

De A falsa autónoma, inédito.

298
Tres ilustradoras, tres, para esta idea dulce.

Elisabeth Karin Pavon Rymer Rythen

Eli primero fue un signo de admiración: recuerdo verla pasar por Ma-
lasaña, tomaba yo un vino con Pita y con Paco antes de un recital en
rojo, ya en tentativa de pensar la temática del amor, junto a Iria. Pasó
Eli, esquiva, rápida, llamativamente pelirroja y distinta: hablamos poco
ese día pero algo anticipaba la sorpresa: una manera de decir, una forma
de moverse, no lo sé: miré su Instagram y entendí las formas que usaba
en sus ilustraciones, las aristas al dibujar el hambre, la oscuridad y la
dulzura y supe que era la persona que necesitábamos: se lo propuse,
poesía, ilustrar poesía, hacer poesía en imagen, dijo sí, a lo loco, sin
saber: hoy hemos tomado unos cuantos vinos más y ha sido precioso
ver cómo llevaba la idea poética al dibujo: ilustrar con metáforas puras
este herbario, dejarse liar, tener tantos apellidos: los agradecimientos
son pocos y sé que de hacerme huérfana de mundo, me iría a una de sus
casitas de pájaro, a la deriva, sin miedo.
Se puede seguir su trabajo en:
https://linktr.ee/elisabeth.karin
@elisabeth.karin

Sus ilustraciones en esta obra:

Diseño de portada.
Página 51
Páginas 96 y 97
Página 133
Página 145
Página 191

303
Mar Reinoso Lozano Raquel Bullón Acebes

Decir lleva a hacer y hacer a seguir haciendo: si el amor está construido Llegó un día a la clase de collage que organiza Nares Montero con una
de azar, las cosas bellas también, la sorpresa y las ramas y el árbol son libreta perfecta, dos tapas equilibradas en el azul: poeta visual, define
también azar, puntería, asalto. A Mar la conocí primero en sus dibujos, herbarios a trozos anatómicos, sabe cómo vuela el corazón y baila un
una tarde con Patricia y con Mariano, para que este le contase a Patri su vals entre gráficas y señaléticas: encargada normalmente de destacar
pequeña joya, su tierra acompañada de hojas pequeñitas, de grandes fi- lo pequeño, dialoga con distintos elementos que parecían estar bus-
guras atadas a una roca y a un hilo del escorpión. Antes de ver el poema cándonos: ella sabe que el tacón del zapato es lapicero, como lo es el
de Mariano vimos las ilustraciones de Mar y todo un universo comenzó árbol o el pincho punk, sabe lanzar jabalinas de gráficos y escalar la
a desplegarse en esa mesa: símbolo, color, racimo. Pude preguntarle su montaña del grafito para demostrar que dentro del abecedario está el
poética visual en la presentación de Estratos y luego seguir viendo su tú y que querer es una cuestión siempre nueva. Agradecidas, mucho,
obra desde las redes, ampliándose en el tejido y en las formas limpias, en el baile.
pájaros, nubes y casas con el color de la tierra: una tradición oral hacia Se puede seguir su trabajo en:
el ojo. No podíamos trabajar lo primitivo, la memoria, el tacto (todo eso https://vivoenbajito.blogspot.com/
es el amor) sin tenerla: se lo propuse y dijo sí y gracias, tantas, y lo que @vivoenbajito
aún nos queda por ver con este dúo imparable.
Se puede seguir su trabajo en: Corazón rojo, página 19
https://marlozanoreinoso.com/
@marlozanoreinoso Pasos básicos de tango, páginas 300 y 301

Sus ilustraciones en esta obra:


Tus palabras vuelan con el viento, páginas 38 y 39
La carta que nunca envié, página 163

304 305
Gracias por este cultivo de amores bellos

La cosa empezó con timidez en un comentario rápido ¡hay que hacer


algo! La respuesta de Patricia fue inmediata: hagámoslo.
A ojos ciegos me dejó hacer y hacer, con expectativa y creo que, tam-
bién, aceptando el juego de ver qué pasaba si lo intentábamos: ha pasa-
do este herbario y entretanto emails, emails, emails: no sé ni cuántos,
con esperanza tras creer que quizá sí podía salir hacia delante.
Hacer por primera vez algo y que quede hecho: hacer hasta el final,
porque crees en que será bonito, en que será tener una recolección de
autores que admiras, de autores que lees que quizá, sí, se sumen: y lo
han hecho
.
En uno de esos emails me preguntaban: para qué hacer esto, por qué,
qué necesidad: ¿la respuesta ante estar solos? No me parece una res-
puesta estéril, más bien, plantar más dudas vivas, que es la forma que
entiendo de vivir.

A partir de ahí, gracias, gracias y gracias: a Patricia Lodín, editora de


Piezas Azules, por la confianza y el cariño, a Gonzalo Escarpa, Mariano
Peyrou y Miguel Sánchez Santamaría por ayudarme a contactar con
autores admirados, por ponerme en la pista de otros que aún no había
leído, por recogerme la diversión y compartirla, por debatir el acto de
amar, el azar, los brindis.

A Berta García Faet por el diálogo inicial, rápido y casual, que fue fogo-
nazo para la idea y por ser la más veloz, muyyyyyy veloz, en mandarme
los textos: es una experiencia bonita ver las dudas de poetas admiradas
a la hora de escogerse, de por qué, de si encaja o no con la idea: la idea
es iniciar caminos, es cultivar y al final, el diálogo a mil voces ha sido
precioso, sorprendente, animal. Cuántas coincidencias, cuántas sorpre-
sas al ir viviendo cada texto recibido.

Gracias, tantas, a todos los que os habéis sumado a esta salvación del
amor, a esta antología hecha desde el cariño y sin saber bien cómo se

307
hace o no nada de esto. Gracias a cada uno de vosotros: y a los que no
estáis pero habéis seguido el proceso, permitido, dudado, dado al fin
el tiempo propio: Abraham Gragera, Alejandro Simón Partal, Andrea
Abello, Andrés Neuman, Ángela Segovia, Ángelo Néstore, Antonio
Rómar, Berta García Faet, Carlos Bueno Vera, Cristian Alcaraz, Da-
fne Benjumea, David Leo García, Erika Martínez, Gonzalo Escarpa,
Juan de Beatriz, Juanpe Sánchez, Lola Nieto, Luisa Castro, Luz Pichel,
Maite Martí Vallejo, Mariano Peyrou, Marta Vicenta Antolín, Martha
Asunción Alonso, Miguel Sánchez de Santamaría, Olga Novo, Pablo
Fidalgo Lareo, Pablo López Carballo, Pilar Trol, Raquel Vázquez, Rosa
Berbel, Ruth Llana, Sara Torres, Sergio Navarro, Vicente Luis Mora,
Xaime Martínez, Yolanda Castaño.

Con cada uno de ellos ha habido un diálogo, un aprendizaje, una sorpre-


sa: el resultado es un herbario afortunado de cada una de sus voces, qué
más decir: la antología habla.

308
Índice
<quererte querer queriendo cazar mosquitos, digo larvas,
digo letras> Andrea López Montero 7
Abraham Gragera 21
Alejandro Simón Partal 27
Andrea Abello 33
Andrés Neuman 41
Ángela Segovia 53
Ángelo Néstore 59
Antonio Rómar 65
Berta García Faet 73
Carlos Bueno Vera 85
Cristian Alcaraz 91
Dafne Benjumea 99
David Leo García 105
Erika Martínez 111
Gonzalo Escarpa 119
Juan de Beatriz 125
Juanpe Sánchez 135
Lola Nieto 147
Luisa Castro 165
Luz Pichel 177
Maite Martí Vallejo 183
Mariano Peyrou 193
Marta Vicente Antolín 201
Martha Asunción Alonso 207
Miguel Sánchez Santamaría 213
Olga Novo 225
Pablo Fidalgo 233
Pablo López Carballo 239
Pilar Trol 245
Raquel Vázquez 251
Rosa Berbel 257
Ruth Llana 263
Sara Torres 269
Sergio Navarro 275
Vicente Luis Mora 281
Xaime Martínez 287
Yolanda Castaño 295
Tres ilustradoras, tres, para esta idea dulce 303
Gracias por este cultivo de amores bellos 307

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