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Otras consecuencias:

Como es obvio recalcar, la pandemia del covid-19 provoco muchas problemáticas del carácter
mental a las personas del todo el mundo y es que es algo lógico al tener en cuenta que estamos ha
blando de una enfermedad que podía llegar a ser mortal para gran parte de la población y que
golpeo con fuerza por todo el mundo. Nicolini (2020) nos dice que:

los estudios han señalado que se han aumentado las cifras de diagnóstico de ansiedad a
raíz de la pandemia de COVID-19. El diagnóstico de ansiedad frecuentemente se presenta
con problemas de sueño y comorbilidad con depresión. Identificar las poblaciones con
mayor riesgo de resultados adversos para la salud mental, incluidos los pacientes con
COVID-19 y sus familias, individuos con morbilidad física o psiquiátrica existente, y
trabajadores de la salud, es una tarea muy importante de la salud pública durante y
después de la pandemia. (pg. 1)

A raíz de esto, podemos ver que el aislamiento social y el pánico general ocasionado por la
pandemia trajo graves consecuencias como podían ser el insomnio, estrés y ansiedad en niveles
muy altos, depresión, ataques de ira e histeria entre otras. A su vez, estas consecuencias
provocaron otras aún peores como podía ser el maltrato y la violencia familiar, escasez de
recursos como medicina, comida o papel higiénico, o incluso casos de suicidio.

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