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HISTORIA DE LA

DOCTRINA
SOTERIOLOGÍA
INFORMACIÓN
Alumno: Angelo Asignatura: Trabajo de Profesor:
Mitchell Oncoy Historia de las investigación Dr. Gerardo
Salazar Doctrinas sobre la Alfaro
Soteriología

ÍNDICE
1
Periodo Patrístico
2
Periodo Medieval
3
Periodo Moderno
4
Periodo Presente
Página 3-9 Página 10-14 Página 15-23 Página 24-29
SOTERIOLOGÍA
PATRÍSTICA
Vamos a ver a los padres
apostólicos tratando el tema de
la salvación.

35, IGNACIO DE
ANTIOQUIA
Puesto que las cosas tienen fin y se me presentan
dos, la muerte y la vida, y cada una debe ocupar
su propio lugar… porque del mismo modo hay dos
monedas, la de Dios y la del mundo y cada una de
ellas tiene su propia impronta: los incrédulos
llevan la de este mundo, los creyentes en la
caridad la impronta de Dios Padre por medio de
Jesucristo. (1)
95, CLEMENTE DE
ROMA
Todo nos viene de Dios, Padre bueno y
misericordioso; pero todo nos viene por medio de
Jesucristo, su Hijo amado. Somos los llamados,
los elegidos y bendecidos de Dios, pero por
medio de nuestro Señor Jesucristo.
"Fijemos nuestros ojos en la sangre de Cristo y
démonos cuenta, cuando preciosa es ante Dios y
Padre suyo, pues, derramada por nuestra
salvación, alcanzó gracia de penitencia para todo
el mundo. (2)
180, IRENEO DE
LYON
Por eso el mismo Señor ofreció como signo de nuestra
salvación al Emmanuel que nació de la Virgen (Is 7,14),
para indicar que era el mismo Señor que nos salvaba,
ya que por nosotros mismos no éramos capaces de
salvarnos. Por eso Pablo describió de esta manera la
debilidad del ser humano: «Sé quenada bueno habita
en mi carne» (Rom 7,18), para indicar que el bien de
nuestra salvación viene de Dios y no de nosotros.
He aquí que nuestro Dios ejercerá el juicio y hará
justicia. Vendrá y nos salvará» (Is 35,3-4). Es claro:
nosotros no podemos salvarnos sino con la ayuda de
Dios. (3)
319, ATANASIO

De dos maneras nuestro Salvador tuvo compasión


a través de su encarnación: consiguió por una
parte que desapareciera de nosotros la muerte y
quedáramos renovados, y por otra que, aun
siendo invisible e indiscernible, se revelara por
sus obras y se conociera que él era el Hijo de
Dios y Verbo del Padre, el guía y rey del universo.
(4)
340, AMBROSIO

Todos pecaron, tanto judíos como griegos, por lo


cual la muerte de Cristo les aprovechó a todos, y
les enseñó lo que en este siglo debe creerse y
observarse; y rescató a todos del Infierno. (5)
420, AGUSTIN DE
HIPONA
Para san Agustín el plan divino de la salvación
no lo desencadena el pecado, sino que tiene su
origen en la obra creadora. La misma creación es
salvífica. Al comienzo del último libro de las
Confesiones escribe san Agustín: «Previniste
todos mis méritos buenos para premiar a tus
manos, con las cuales me formaste. Porque antes
de que yo fuese, ya existías Tú, ni yo era algo
para que me otorgases la gracia de la existencia»
(Conf. 13,1,1). La misma obra creadora tiene ya
una inequívoca impronta cristocéntrica y
salvífica. (6)
SOTERIOLOGÍA
MEDIEVAL
Vamos a ver a
los diferentes
hombres de la época tratando la
soteriología.

600, GREGORIO
EL MAGNO
Quien se enciende ansiando los atrios de la
eternidad, es justo que languidezca en el amor de
lo temporal, pues cuanto más se enfría en el
empeño por este siglo, más ardientemente se
eleva al amor de Dios. Si se abraza plenamente a
este amor, deja también plenamente el mundo y
muere tanto más completamente a las cosas
temporales cuanto más altamente es animado por
el soplo de la eternidad hacia la vida divina. (7)
740, JUAN DE
DAMASCO
Él muere, por lo tanto, porque asumió la muerte
en nombre nuestro, y se hace una ofrenda al
Padre por el bien de nosotros. Porque habíamos
pecado contra Él, y fue hecho que Él recibiera el
rescate por nosotros, y que así debiéramos ser
liberados de la condenación. (8)
1033–1109, ANSELMO
DE CANTERBURY
Así el conocido, remoto Christo, mediante el cual
se quiere probar la necesidad de la redención
prescindiendo del mismo Cristo, debe entenderse
como un elemento lógico, no de contenido
esencial. Esta razón, el intellectus es el paso
intermedio entre la fe y la visión. Aquí entiende
Anselmo por fe la fides quae, la fe objetiva, la
tradición, a la autoridad de la cual somete toda
su obra. (9)
1265, TOMÁS DE
AQUINO
Fue necesario que el hombre, para su salvación,
conociera por revelación divina lo que no podía
alcanzar por su exclusiva razón humana, Más
aún. Lo que de Dios puede comprender la sola
razón humana, también precisa la revelación
divina, ya que, con la sola razón humana, la
verdad de Dios sería conocida por pocos después
de muchos análisis y con resultados plagados de
errores. Y, sin embargo, del exacto conocimiento
de la verdad de Dios depende la total salvación
del hombre, pues en Dios está la salvación. (10)
SOTERIOLOGÍA
PROTESTANTE
Vamos a ver a
los diferentes
reformadores poniendo la luz de
revelación que van teniendo en
cuanto al tema de la salvación y
todo lo que engloba.

1530, MARTÍN
LUTERO
Lutero hizo un énfasis especial en enseñar que la
verdad del evangelio trae certeza al creyente.
Esto es apreciado en su énfasis en la doctrina de
la justificación solo por fe o “Sola Fide”. De
acuerdo a Lutero, la justificación solo por fe y no
por obras es el punto en el cual está sostenida la
iglesia de Cristo. Es por medio de esta que el
creyente puede recibir el perdón de Dios por sus
pecados y ser justificado delante de Él.
Pues la justicia de Dios es la causa de la
salvación. (1)
1550, PHILIPP
MELANCHTHON
Compartía lo mismo que Martin Lutero.
Los hombres no pueden ser perdonados por sus
propias méritos y obras, sino que el perdón se
obtiene, gratuitamente, por la fe, si creemos que
Cristo padeció por nosotros y que por su causa
se nos perdonan los pecados y se nos conceden la
justicia y la vida eterna.(2)
1550, THOMAS
CRANMER
Cranmer quería que todos en las iglesias inglesas
aceptaran la justificación solo por la fe. "Que somos
justificados por la fe solamente, gratuitamente y sin
obras— se pronuncia para quitar claramente todo el
mérito de nuestras obras, por ser insuficientes para
merecer nuestra justificación en las manos de Dios; y así
expresar más claramente la debilidad del hombre y la
bondad de Dios, la imperfección de nuestras propias
obras y la gracia más abundante de nuestro Salvador
Cristo; y por lo tanto atribuir completamente el mérito y
el merecimiento de nuestra justificación a Cristo
solamente y su sangre más preciosa derramada.(3)
1509-1564, JUAN
CALVINO
Esta salvación descansa en Dios; y no ha
de verse de otra manera: la salvación es
por puramisericordia de Dios. De modo
que ha creado de tal forma lascosas que
tanto en teleología como en providencia
todo está dispuesto para facilitar
lasalvación de los elegidos. (4)
1561, LA CONFESIÓN
BELGA
Dios es misericordioso
al remover y salvar de esta perdición a
aquellos que, en su consejo eterno e
inmutable, han sido elegidos y
escogidos en Jesucristo nuestro Señor,
por su pura bondad, sin considerar en
absoluto sus obras. (5)
1610, LA PROTESTA
HOLANDESA
(ARMINIANA)
“Dios ha decretado inmutablemente, desde la
eternidad, salvar a aquellos hombres que, por la
gracia del Espíritu
Santo, creen en Jesucristo, y por la misma gracia
perseveran en la obediencia de la fe hasta el final;
y, por otro lado, condenar a los incrédulos e
inconversos. La elección y la condena están así
condicionadas por el
conocimiento previo y dependen de la fe prevista o
la incredulidad de los hombres. “(6)
1632, LA
CONFESIÓN DE
DORDRECHT
Porque ni el bautismo ni el sacramento o comunión
en la Iglesia, ni ninguna otra ceremonia externa,
puede sin fe o sin el nuevo nacimiento ayudar o
calificarnos para que podamos agradar a Dios o
recibir ninguna consolación de él.
Tampoco hubieran podido ser redimidos o
reconciliados con Dios jamás, salvo que Dios (que
tuvo misericordia de ellos, sus criaturas) actuó a
favor suyo e hizo provisión para su restauración.(7)
1646, LA
CONFESIÓN DE FE
DE WESTMINSTER
La gracia de la fe, por medio de la cual los
elegidos son capacitados para creer para la
salvación de sus almas, es la obra del Espíritu de
Cristo en sus corazones, y es ordinariamente
efectuada por el ministerio de la Palabra.(8)
SOTERIOLOÍA
MODERNA
En esta etapa, veremos a los más
significativos teólogos de la
época actual.
1750, JONATHAN
EDWARDS
El hombre es pecador y caído, de acuerdo a esta
condición se encuentra miseria. Es una criatura
indefensa, débil como un niño que esta envuelto
en su propia sangre al nacer. Pero Cristo es el
León de la tribu de Judá, Ha prevalecido para
conquistar la victoria por nosotros, haciendo lo
que nadie hubiera podido hacer. Y más aun, en
Cristo no solamente encontramos infinito poder
y valor sino también infinita condescendencia.
Dios tiene misericordia de vosotros.
¡Solo en ÉL podemos ver como esto es posible!
(9)
1920, HERMAN
BAVINCK
El Pacto de Gracia
, Bavinck plantea que Religión esestar en una
verdadera relación entre Dios y la humanidad, y
esto es a través deuna relación de Pacto. En la
relación de Pacto, Dios se obliga a sí mismo con
unapromesa para garantizar al hombre salvación
eterna pese a su infidelidad. Elhombre por su
parte es obligado a una nueva obediencia. Por su
parte, el Pactode Redención es un Pacto entre las
mismas personas de la Trinidad, donde en
laeternidad pasada, decidieron cooperar y cada
una desarrollar una tarea especial. (10)
1965, KARL
BARTH
Dios es creador pero las criaturas se han alejado
de él por el espantoso abismo... No hay
posibilidad de que el mundo cruce el abismo que
lo separa de Dios... pero Dios envuelto en un
misterio impenetrable, la luz divina y gloriosa
les alivia.
El hombre nunca puede salvar ese abismo, pero
Dios lo ha superado. (11)
1974, J. I.
PACKER
Cuando Dios justifica a los pecadores por medio
de la fe en Cristo, lo hace apoyándose en la
justicia que ha sido hecha; esto es, en el castigo
que Cristo, nuestro sustituto, ha sufrido en su
persona por nuestros pecados; así, la forma que
toma esta misericordia justificante lo presenta a
Él como total y absolutamente justo (Romanos
3:25–26), y se presenta nuestra propia
justificación como
justificada en el sentido judicial. (12)
2000, MILLARD
ERICKSON
Por lo tanto, aunque la salvación está a disposición
universal, no es universal. No todo el mundo se
salvará. Esta no es una conclusión que nosotros
establezcamos con satisfacción, pero es la más fiel a
todo el testimonio bíblico.
La gracia es absolutamente necesaria. Aunque el
arminianismo a menudo pone un fuerte énfasis en
la gracia, en nuestro esquema calvinista no existe
base para que la elección que Dios hace de algunos
para la vida eterna no sea otra que su soberana
voluntad. No hay nada en el individuo que persuada
a Dios para conceder la salvación. (13)
BIBLIOGRAFÍA

1. Jose Berlanga López, Padres apostólicos II. Sevilla, Editorial Apostolado


Mariano,2004, 22.
2. 1Carta S. Clemente Romano A Los Corintios, 138.
3. Ireneo de Lyon, Contra los herejes, 459
4. Atanasio, La encarnación del verbo, 69.
5. Grupo de Investigación y Estudios Medievales – Facultad de Humanidades –
Universidad Nacional de Mar del Plata 2014.
6. P. Ramón Sala, Aproximación a la salvación en San Agustín.
7. Gregorio Magno - Libros Morales 1, 291.
8. John of Damascus, An Exact Exposition of the Orthodox Faith, 27.
9. R. Nardin, Il Cur Deus homo, 229
10. Tomás de Aquino, Suma de Teología, I, c. 1, art. 1
11. Martin Lutero, Comentario a los romanos, Volumen I, página 45.
12. Confessio Augustana Das Augsburgische Bekenntnis, Artículo IV.
13. Las obras de Thomas Cranmer ,archbishop of canterbury, 131.
14. Calvino, 1967, pág. 199.
15. Guido de Bres, Confesión Belga, articulo 16.
16. Philip Schaff, Creeds of Christendom, Volumen 1, 516.
17. J. C. Wenger, Compendio de historia y doctrinas amonitas, 239.
18. Nicolás G. Lammé, Los estándares de Westminster, 51
19. Jonathan Edwards, La excelencia de Cristo, 48
20. Herman Bavinck, Reformed Dogmatics Vol III, capitulo 5.
21. J. Gresham Machen, Karl Barth y La Teología de La Crisis, página 3.
22. J.I Packer, Teología concisa página 53
23. Millard Erickson, Teología Sistemática, página 936-1027

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