P romesas de Dios para tu vida

Una puerta abierta en medio de las vicisitudes de la vida

Carlos A. López
Tabla de
Contenido
01 Clasificación de promesas

02 Primera promesa en la Biblia

03 Promesas para los pobres

04 Promesas para la familia

05 Promesas de protección

06 Promesas de provisión

07 Promesas de sanidad

08 Promesas para los hijos

09 Promesas para los tristes

10 Promesas para los generosos

11 Promesas de vida eterna

 Promesas de Dios para tu vida
Introducción
¿Qué es una promesa?

El significado bíblico de promesa hace alusión a la

declaración de seguridad dada por Dios dentro de las Escrituras.
A pesar de que en el Antiguo Testamento no se encuentra
ninguna palabra hebrea con este significado, se ve planteada de
forma tácita. Esto se puede ver dentro de los juramentos que el
Creador les hizo a sus servidores más fieles.

En la Biblia encontramos alrededor de 3500 promesas, una

promesa para cada ocasión en los momentos de más profunda
necesidad. “Las promesas de Dios revelan sus propósitos
particulares y eternos a los que está inalterablemente
comprometidos y sobre los cuales los creyentes pueden depender
totalmente. Estas promesas son, sin embargo, condicionadas a la
obediencia por parte de los creyentes”.[1]

[1] Manser, M. H. (2012). Diccionario de temas bíblicos. (G. Powell, Ed.). Bellingham,
WA.
1 Clasificación de promesas

Dios hará exactamente lo

que ha prometido, pero exige
nuestra obediente cooperación
antes de cumplir algunas de
sus promesas.

Josué 23:14
"Y he aquí que yo estoy para
entrar hoy por el camino de toda
la tierra; reconoced, pues, con
todo vuestro corazón y con toda
vuestra alma, que no ha faltado
una palabra de todas las buenas
palabras que Jehová vuestro Dios
había dicho de vosotros; todas os
han acontecido, no ha faltado
ninguna de ellas".

La Biblia contiene dos clases de promesas: las

incondicionales y las condicionales. Una promesa incondicional
es aquella cuyo cumplimiento le incumbe solamente al Señor; su
compromiso no está sujeto a las personas ni a las situaciones. Un
ejemplo sería la garantía de Dios de no enviar jamás otro diluvio
para destruir toda la Tierra (Génesis 9:11).

La segunda clase de promesas divinas son las condicionales.

En otras palabras, el Señor está dispuesto a actuar bajo ciertas
circunstancias, implica nuestra participación. Veamos dos
promesas condicionales que tienen que ver con la salvación y el
perdón.

01
 Romanos 10:9 "Esta es la palabra de fe que predicamos:
9 que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y
creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos,
serás salvo". Este versículo dice que la promesa de salvación
es para quienes confiesen con su boca y crean en su corazón
que Jesús es el Señor.

1 Juan 1:9 "Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y

justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda
maldad". Si venimos al Señor con una sincera confesión de
pecado, tenemos la garantía de la limpieza y el perdón divinos.
El cumplimiento de esta promesa por el Señor depende de
nuestra conducta obediente.

Para recibir la bendición, debemos satisfacer las

condiciones que Él ha puesto. Si usted espera que el Señor
cumpla su promesa, entonces cumpla con su parte.

"Todas las promesas del Señor Jesús

son apoyo poderoso de mi fe;
mientras luche aquí buscando yo su luz,
siempre en sus promesas confiaré".
Himnario Adventista #412
2 La primera promesa
de redención
"Y pondré enemistad entre ti y la mujer, y entre tu simiente
y la simiente suya; esta te herirá en la cabeza, y tú le
herirás en el calcañar" (Génesis 3:15).

“La primera indicación

que el hombre tuvo
acerca de su redención
la oyó en la sentencia
pronunciada contra
Satanás en el huerto.
Esta sentencia,
pronunciada contra la
serpiente fue una
promesa para Adán y
Eva. Mientras predecía
la lucha entre el hombre
y Satanás, declaraba
que el poder del gran
adversario sería
finalmente destruido....
“Se les aseguró a Adán y a su
compañera que a pesar de su
gran pecado, no se les
abandonaría a merced de
Satanás. El hijo de Dios había
ofrecido expiar, con su propia
vida, la transgresión de ellos. Se
les otorgaría un tiempo de
gracia y, mediante el
arrepentimiento y la fe en Cristo,
podrían llegar a ser de nuevo
hijos de Dios.”
—Historia de los Patriarcas y Profetas, 51,
52.

"Dios instituyó el ritual de los sacrificios para proporcionar

al hombre una ayuda visual, a fin de que pudiera
comprender algo del precio que se debía pagar para expiar
su pecado. El cordero inocente tenía que dar su sangre en
lugar de la del hombre y su piel para cubrir la desnudez del
pecador, a fin de que el hombre pudiera así recordar
siempre por medio de los símbolos al Hijo de Dios, que
tendría que entregar su vida para expiar la transgresión del
hombre y cuya justicia sería lo único suficiente para
cubrirlo".

Comentario Bíblico Adventista, vol. 1, p. 245. Buenos Aires: Asociación Casa

Editora Sudamericana.

03
 Mas allá de la maldición de la serpiente (identificada como
el Diablo y Satanás, Ap. 12:9) viene el primer destello de
esperanza para la humanidad.

En Génesis 3:15 tenemos el comienzo de una corriente de

la promesa Mesianica que surca a través de la Biblia desde
Génesis hasta Apocalipsis (Allis, Dios Hablo Por Medio de
Moisés, Pág. 19).

1. Enemistad – mala voluntad, hostilidad, disposición

adversa (cfr. Núm. 35:21-22). Esta enemistad existirá entre las
fuerzas de Satanás y la simiente de la mujer a través de quien
el Mesías vendrá.

2. Simiente – descendencia, posteridad. En este sentido

figurado somos la descendencia de aquel cuya voluntad
escojamos hacer (Jn. 8:44).

3. La simiente de la mujer (EL) se refiere finalmente a

Cristo. Cristo herirá la cabeza de la serpiente. Jesús pisoteó
la cabeza de la serpiente por medio de su victoria sobre la
muerte (Heb. 2:14; 1 Jn. 3:8). Aunque murió, Satanás fue
vencido por medio de su
resurrección.

Conclusión

Dios planeó el esquema de

redención antes de la creación.
Cuando el hombre pecó, y fue
comprendida la necesidad de la
redención, fue anunciada la
primera promesa de redención.
El resto de la Biblia describe el
desarrollo de esta gran
promesa.
3 Promesas para los pobres

La Biblia es una fuente

inagotable de aliento y
sabiduría. Y hay muchos
pasajes que nos hablan
del amor de Dios por los
pobres y necesitados, y
de nuestra responsabilidad
hacia ellos.

La vida de Jesús, tal

como la narran los
evangelios, nos habla de
su amor hacia los niños, a
menudo los más
vulnerables.
Lucas 4:18
El Espíritu del Señor está sobre mí, por cuanto me ha
ungido para dar buenas nuevas a los pobres; me ha enviado a
sanar a los quebrantados de corazón; a pregonar libertad a los
cautivos, y vista a los ciegos; a poner en libertad a los
oprimidos.

"Cristo siempre ha sido el amigo de los pobres. Eligió la

pobreza y la honró haciendo de ella su suerte...Ocupó su
puesto con los pobres, para poder quitar de la pobreza el
estigma que el mundo le había puesto" (El Ministerio de la
Bondad, pág. 180).

"Cristo dijo que habrá siempre pobres entre nosotros, nos

dice que son sus representantes en la tierra. Los colocó entre
nosotros para despertar en nuestro corazón el amor que él
siente hacia los afligidos y los oprimidos" (Patriarcas y
Profetas, pág. 576).
 En la Biblia existen tres diferentes tipos de personas que se
pueden clasificar como pobres: El huérfano, la viuda y el
extranjero (Deut. 10:18). Estos tres tipos de personas vivían
realidades que apuntalaban el desprecio entre la sociedad o
como una maldición de parte de Dios.

El huerfano La viuda El extranjero

Se entiende el La situación de la En el Israel bíblico

niño o niña (menor mujer en los existían muchos
de doce años), tiempos bíblicos extranjeros
huérfano de era de total avecindados o
padre. Su pérdida marginación. Era comerciantes de
significaba para considerada una paso. El extranjero,
sus hijos pasar por propiedad del y sobre todo el
necesidad y padre, del marido inmigrante, era un
marginación, o del hermano ciudadano de
terminando casi mayor. Al casarse, segunda clase. El
siempre en la pasaba a la no ser parte del
mendicidad. propiedad del pueblo de Israel
marido, por lo que hacía de él un
al enviudar, y sin personaje
hijos mayores, menospreciado y
quedaba en total marginado.
desprotección.

Esta trilogía, sin embargo, Dios los tenia en alta

consideración.

“Y al extranjero no engañarás ni angustiarás,

porque extranjeros fuisteis vosotros en la tierra de
Egipto. A ninguna viuda ni huérfano afligiréis.
Porque si tú llegas a afligirles, y ellos clamaren
a mí, ciertamente oiré yo su clamor; y mi furor
se encenderá, y os mataré a espada, y vuestras
mujeres serán viudas, y huérfanos vuestros hijos"
(Éxodo 22:21-24).
 "En este mundo siempre
habrá gente pobre. Por eso
les ordeno que sean
generosos con la gente
pobre y necesitada del país"
Deuteronomio 15:11

La viuda pobre

“Llegó una viuda pobre y echó LA ACTITUD DE JESÚS

dos pequeñas monedas de
cobre, o sea, un cuadrante. Y
llamando Jesús a Sus
discípulos, les dijo: ‘En verdad
les digo, que esta viuda pobre
echó más que todos los
contribuyentes al tesoro; porque
todos ellos echaron de lo que
les sobra, pero ella, de su
pobreza, echó todo lo que
poseía, todo lo que tenía para
vivir" (Marcos 12:42-43).
HACIA LOS POBRES
“Id, y decidle a Juan las
cosas que oís y veis. Los
ciegos ven, los cojos andan,
los leprosos son limpiados,
los sordos oyen, los muertos
son resucitados, y a los
pobres es anunciado el
evangelio” (Mateo 11:3-5).
Elena White escribió:
“Muchos pueden ser alcanzados sólo por medio de actos
de bondad desinteresados. Sus necesidades físicas
deben ser atendidas primero. A medida que vean
manifestaciones de amor generoso, será más fácil que
crean en el amor de Cristo”.

“Volviendo su “En cuanto lo hicisteis a uno de estos mis

vista hacia Sus hermanos más pequeños, a mí lo
discípulos, decía: hicisteis” (Mateo 25:40).
‘Bienaventurados
ustedes los
pobres, porque de “El Espíritu del Señor está sobre mí,
ustedes es el porque me ha ungido para anunciar
reino de Dios" el evangelio a los pobres. Me ha
(Lucas 6:20). enviado para proclamar libertad a los
cautivos, y la recuperación de la vista
a los ciegos; para poner en libertad a
los oprimidos” (Lucas 4:18).

“Bienaventurados los pobres en

espíritu, pues de ellos es el reino de
los cielos” (Mateo 5:3).

4
Promesas
para las familias
El origen de la familia
"Y creó Dios al hombre a su
imagen, a imagen de Dios lo
creó; varón y hembra los
creó. Y los bendijo Dios, y
les dijo: Fructificad y
multiplicaos; llenad la tierra,
y sojuzgadla, y señoread en
los peces del mar, en las
aves de los cielos, y en
todas las bestias que se
mueven sobre la tierra"
(Génesis 1:27-28).
La familia es muy
importante para Dios, podía
habernos creado para vivir
aislados, pero no lo hizo.
Nos necesitamos no solo
para la continuación de la
raza humana sino para
apoyarnos, construir y
bendecir el lugar donde Dios
nos ha puesto.
Aunque son diversos los
intentos sociales de
eliminar la imagen de la
familia conformada por Dios
con ideas equivoca-das que
muchos creen, los
cristianos no deben
rendirse en la lucha de
dignificar la familia,
mediante el ejemplo de
familias Cristocéntricas que
emanen amor, fe,
obediencia, sabiduría y
frutos que activan el poder
sobrenatural del Señor.
 Cree en el Señor Jesucristo, y serás salvo, tú y tu casa.
Hechos 16:31

"Hagan los padres y las madres una promesa solemne al Dios a

quien profesan amar y obedecer, de que por su gracia no
disputarán entre sí, sino que en su vida y genio manifestarán el
espíritu que desean ver manifestado por sus hijos"
El Hogar Cristiano, pág. 157

Aunque son diversos los intentos sociales de eliminar la imagen

de la familia conformada por Dios, los cristianos no deben rendirse
en la lucha de dignificar la familia como una institución fundada
desde el principio de la fundación del mundo.
A continuación, se presenta unos versículos maravillosos para las
familias en los momentos de mas profunda adversidad.