Está en la página 1de 1

El país más conformista

El título que damos a España de «mejor país del mundo para vivir» no lo refrenda ningún organismo
internacional, aunque en unas cuantas naciones lo consideran estupendo para veranear y jubilarse porque
tiene bastante luz solar, mucha costa y poco coste. Los españoles coincidimos con los turistas en eso, aunque
por la misma luz y la misma costa el coste sea superior para nosotros.

El conformismo nacional y autonómico repite constantemente que este es «el mejor país del mundo para
vivir» contra el hecho de que los jóvenes tienen que elegir entre trabajar fuera, es decir, irse a vivir a un país
peor, o quedarse a vivir en las peores condiciones dentro del mejor país del mundo. ¿Desanima la
experiencia de estos hechos el discurso? ¡Qué va! Cuando los que emigran hablan de regresar, sus precarios
amigos les dicen que les entienden porque España es el mejor país del mundo para vivir.

Para explicar por qué merecemos ese título con el que nos autocondecoramos añadimos a la lógica de
veraneante unos argumentos de becario Erasmus. Además de buen tiempo y mucha playa hay bares donde te
ponen tapas con la cerveza y unos horarios extensos, que vienen de los años prósperos de los noventa, para
cenar y tomar copas el fin de semana. Ole.

El Covid da el golpe definitivo al mejor país del mundo para vivir porque la radiografía económica muestra
una neumonía bilateral con grave afectación a ambos pulmones, uno por la crisis de 2008, otro por la
pandemia de 2020 y eso nos ahogará.

En el mejor país del mundo para vivir el paro es feroz, los trabajos son precarios, los salarios, bajos y la
vivienda cara, sea en propiedad o en alquiler y, además, el bar de abajo y los locales de copas tienen que
cerrar pronto por unos horarios que actúan como un toque de queda no declarado para que hagamos lo que
debemos por nuestra salud. En el mejor país del mundo nuestra vida es peor.

También podría gustarte