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CEREMONIA DE PRIMERA COMUNIÓN

RITO DE INICIO
MONICIÓN:
Luz y Verdad con Jesús Eucaristía.
Bienvenidos a esta celebración eucarística, en el día anterior al primer domingo de Adviento, que nos prepara
para la Navidad. Con los hombres y mujeres que a lo largo de los siglos esperaron la venida del Mesías, con
Isaías, con Juan el bautista, con José y con María Santísima que esperaba gozosamente el nacimiento de su Hijo,
nosotros también esperamos la gran fiesta que se acerca.
En este ambiente de gozo, nos hemos reunido para celebrar la Eucaristía; en la que un grupo de estudiantes
de nuestra Institución educativa van a recibir, por primera vez a Jesús. Sabemos que este acto de hoy, además
de ser un día muy feliz para ellos, llena de alegría a la Iglesia porque vemos como sigue aumentando el número
de los que participamos en este alimento santo que Dios nos da.
Los invito a ponerse en pie para recibir a los niños que ingresan en procesión y con ellos al Reverendo padre
Máximo Huamán Inga, quien preside nuestra Celebración.
MI PRIMERA COMUNIÓN
Desde niño conocí por mis padres a Jesús, y comprendí el sacrificio que El hizo por mí.
Hoy una inmensa alegría, colma mi corazón, porque voy a recibir mi Primera comunión.
Que emoción, que linda sensación, llenar mi alma y cuerpo con Jesús, quiero que siempre permanezca en mi vida, desde
hoy y hasta el resto de mis días.
En su última cena a sus amigos El reunió, compartiendo el pan y el vino como signo de su amor, hagan esto en mi memoria a
sus hermanos exclamó, con su Cuerpo y con su Sangre, vida eterna nos dio.
Si en alguna ocasión tú te alejas del camino, recuerda con alegría tu Primera Comunión, tu maestra, tus amigos, la Palabra de
Jesús, y seguro volverás al sendero de la luz.
MONITORA:
Iniciamos nuestra Celebración, cantando.
LA MISA ES UNA FIESTA
La misa es una fiesta muy alegre, la misa es una fiesta con Jesús
La misa es una fiesta que nos une, la misa es una Fiesta con Jesús.
Cada Domingo celebramos que nuestro amigo nos salvó
que por amarnos dio su vida y resucito... (2 veces)
SALUDO
CELEBRANTE: En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.
TODOS: Amén.
CELEBRANTE: El Dios de la esperanza, que por la acción del Espíritu Santo nos llena con su alegría y con su
paz, permanezca con todos ustedes.
TODOS: Y con tu espíritu.
Sacerdote: Queridos niños, guarden en lo más profundo de su corazón este día, para que esta hermosa
experiencia de Dios, anime su fe y el compromiso de ser fieles a Jesús, hasta el fin de sus vidas.
Niña : Te alabamos y te bendecimos amigo Jesús por el día de nuestra Primera Comunión. Estamos, de verdad
muy contentos porque eres tú Jesús quien nos invita a participar junto a toda la comunidad de esta fiesta, que
es la Eucaristía.
Niño : Gracias a nuestros papás por estar aquí con nosotros. Les pedimos que nos ayuden con su ejemplo, a
vivir como verdaderos cristianos; que nos hablen de Dios, que recen con nosotros, que siempre nos
acompañen para celebrar la Eucaristía dominical y aprendamos así a amar a Dios y al prójimo.
ACTO PENITENCIAL
CELEBRANTE: En nuestra vida hay muchas cosas que no son como deberían ser. A menudo nos preocupamos
sólo de nosotros mismos y no vivimos con el amor que Jesús nos enseñó. Ahora lo reconocemos delante de Él,
para que nos dé su fuerza y su gracia. (silencio breve).
CELEBRANTE: Yo confieso…
NIÑO/A: Hoy te pido perdón Jesús, en nombre de todos los que te recibiremos por primera vez en nuestros
corazones, por las veces que nos olvidamos de Ti, hemos sido egoístas, no hemos obedecido o hemos mentido.
TODOS: Señor, ten Piedad
PADRE: Te pido perdón Padre, en nombre de todos los papás, por todas las veces que nos hemos apartado de
ti, no hemos sabido darte a conocer a nuestros hijos, y no hemos tenido paciencia con ellos.
TODOS: Cristo, ten Piedad
CATEQUISTA: Señor, hoy te pedimos perdón por las veces que no hemos seguido tu ejemplo y nos hemos
olvidado del compromiso con nuestro prójimo.
TODOS: Señor, ten Piedad
TEN PIEDAD SEÑOR, TEN PIEDAD
Ten piedad Señor, ten piedad soy pecador, ten piedad. (2v)
Y de mí Cristo apiádate contra Ti yo pequé
MONITORA: respondemos a las alabanzas a Dios Padre.
SACERDOTE: te alabamos Padre Nuestro, porque has hecho para nosotros este mundo maravilloso y porque
nos das la vida.
TODOS: ¡Gloria a Ti Señor porque nos amas ¡
SACERDOTE: te alabamos Padre Nuestro, porque nos das a tu Hijo Jesús en la Eucaristía, para que El nos lleve
hacia Ti.
TODOS: ¡Gloria a Ti Señor porque nos amas ¡
SACERDOTE: te alabamos Padre Nuestros porque tu Hijo Jesús es nuestro amigo y se hace Pan de Vida para
nosotros.
TODOS: ¡Gloria a Ti Señor porque nos amas!
SACERDOTE: Te alabamos Padre Nuestro, porque nos reúnes con El en esta comunidad cristiana para celebrar
esta Fiesta de la Primera Comunión de estos hijos tuyos.
TODOS: ¡Gloria a Ti Señor porque nos amas!
SACERDOTE: Te alabamos Padre Nuestro, porque estos niños que van a comulgar alegran nuestro corazón y
confortan nuestra fe.
TODOS: ¡Gloria a Ti Señor porque nos amas!
SACERDOTE: en esta fiesta que es la Eucaristía, cantemos con alegría el Himno del Gloria.
GLORIA, GLORIA AL SEÑOR
Gloria, gloria, gloria al Señor, Gloria en el cielo, gloria en la tierra.
Te alabamos, Señor, te bendecimos, te adoramos, oh Padre, Dios y Rey Celestial.
Eres Cordero de Dios, Hijo del Padre Tú no perdonas y salvas, nos ofreces tu amor.
Tú solo Santo y Señor, Tú Jesucristo Con el Espíritu Santo, en la gloria de Dios.
SACERDOTE: Padre Dios, que nos regalas en la Santa Misa la obra de amor de tu Hijo Jesucristo, te pedimos
que quienes participan por primera vez de tu Cuerpo y Sangre, cultiven siempre tu amistad y sigan el ejemplo
de Nuestro Señor Jesús, que vive y reina por los siglos de los siglos.
Todos: Amén
MONITORA: pueden sentarse
LITURGIA DE LA PALABRA
Procesión de la Palabra de Dios
Nos disponemos a acoger la Palabra de Dios, que viene en procesión. Cantamos y reconocemos que ella es Luz
para nuestra vida. Junto con la participación en la mesa del altar, comulgamos también en la mesa de la Palabra
de Dios.
TU PALABRA ME DA VIDA
Tu Palabra me da vida, confío en Ti Señor
Tu Palabra es eterna, en ella esperaré.
Dichoso el que, con vida intachable, camina en la ley del Señor,
dichoso el que guardando sus preceptos, lo busca de todo corazón.
PRIMERA LECTURA
MONICIÓN :
En la lectura que escucharemos, Moisés nos recuerda que Dios es "pan y agua" para caminar por el desierto. A
este Dios hay que aceptar, no al que da certezas y soluciona problemas. Desde el principio, la Revelación más
pura y profunda del Dios de Israel es ésta: pan y agua para caminar por el desierto.
Lectura del Libro del Deuteronomio.
En aquel tiempo habló Moisés al pueblo y dijo: ¨Recuerda el camino que el Señor tu Dios, te ha hecho recorrer
estos cuarenta años por el desierto, para afligirte, para ponerte a prueba y conocer si ibas a guardar sus
Mandamientos o no.
Él te afligió, haciéndote pasar hambre y después te alimentó con el maná, que tú no conocías, ni conocieron
tus padres, para enseñarte que no sólo de pan vive el hombre, sino de todo cuanto sale de la boca de Dios.
No sea que te olvides del Señor tu Dios, que te sacó de Egipto y de la esclavitud; que te hizo recorrer aquel
infierno inmenso y terrible lleno de serpientes y alacranes; que de la tierra árida, hizo brotar para ti agua de
la roca más dura y que te alimentó en el desierto con un maná que no conocían tus padres¨ Palabra de Dios.
SALMO RESPONSORIAL
Cantare eternamente el amor del Señor.
❖ Cantaré eternamente los favores del Señor y por todas las edades su lealtad anunciaré, Tú dijiste mi favor
un edificio eterno es y por siempre mi amistad en el cielo afianzaré.
❖ Una alianza yo he sellado con David mi servidor, le daré un linaje eterno y su trono mantendré, que dichoso
es el pueblo que te aclama y es feliz porque alumbras su camino con tu amor y protección.
❖ En tu Nombre eternamente sin cesar se alegrará, tu justicia será causa de que se le exaltará, porque Tú eres
nuestra gloria y nuestra fuerza eres Señor, sin tu gracia nada somos, nos da fuerza tu favor.
SEGUNDA LECTURA
MONICIÓN: Antes de morir, Jesús quiso celebrar aquella gran fiesta judía reuniéndose en familia con sus
apóstoles y mandó que esta acción se repitiera hasta que Él volviera de nuevo a la tierra.
Lectura de la primera carta de San Pablo a los Corintios
Les voy a repetir las enseñanzas del Señor en cuanto a la cena de comunión: Que el Señor Jesús, la noche que
fue entregado, tomó el pan y después de dar gracias lo partió y lo dio a sus discípulos diciendo:
“Este es mi Cuerpo que se da por ustedes. Hagan esto en memoria mía”. De la misma manera tomando la copa
después de haber cenado dijo: “Esta es la nueva Alianza de mi Sangre. Siempre que beban de ella, háganlo en
memoria mía”. Así pues, cada vez que coman de este Pan y beban de esta Copa, están proclamando la muerte
del Señor hasta que vuelva. Palabra de Dios.
EVANGELIO
MONICIÓN: En el Evangelio que escucharemos, san Marcos narra la institución de la Eucaristía. El amor
infinito de Jesús al pueblo lo llevó al extremo de quedarse con nosotros como pan de vida eterna, como vino
de eterna salvación. La Eucaristía fue instituida como banquete, y como banquete ha de ser celebrada.
Aclamemos con fe y esperanza el Evangelio de Nuestro Señor Jesucristo.
Puestos en pie, entonamos el Aleluya
ALELUYA, JUNTO A TI REZARÉ
Aleluya, aleluya, aleluya, aleluya.
Junto a Ti Jesús rezaré, tu Palabra quiero vivir.
Tú me haces sencillo Señor, en tus manos me dejaré.
Lectura del Santo Evangelio según San Marcos 14, 12-16. 22-26.
Todos: Gloria a ti Señor.
El primer día de los panes sin levadura, cuando se sacrificaba el cordero pascual, le dijeron a Jesús sus
discípulos: ¿Dónde quieres que vayamos a prepararte la cena de Pascua? Él envió a dos discípulos, diciéndoles:
Vayan a la ciudad, encontraran un hombre que lleva un cántaro de agua: síganlo, y en la casa en que entre
digan al dueño: “El Maestro pregunta: ¿Dónde está la habitación en que voy a comer la Pascua con mis
discípulos?” Les enseñará una sala grande en el piso de arriba, arreglada con divanes. Preparen allí la cena.
Los discípulos se marcharon, llegaron a la ciudad, encontraron lo que les había dicho y prepararon la cena de
Pascua. Mientras comían, Jesús tomó un pan, pronunció la bendición, lo partió y se lo dio, diciendo: Tomad,
esto es mi Cuerpo. Cogiendo una copa, pronunció la acción de gracias, se la dio y todos bebieron. Y les dijo:
Ésta es mi Sangre, sangre de la alianza, derramada por todos. Les aseguro que no volveré a beber del fruto de
la vid hasta el día que beba el vino nuevo en el Reino de Dios. Después de cantar el salmo, salieron para el
Monte de los Olivos.
Sacerdote: Palabra del Señor.
Todos: Gloria a ti, Señor Jesús
PRESENTACIÓN DE LOS NIÑOS
MONITORA: en un clima de fiesta y alegría vamos a presentar a los estudiantes de nuestra comunidad que
recibirán la Primera Comunión.
Cada uno será llamado por su nombre y responderá: Aquí estoy, Señor.
HOMILÍA
RENOVACIÓN DE LAS PROMESAS BAUTISMALES
RITO PARA ENCENCER LA VELA
MONITORA: en este momento, padres de familia, encienden sus velas del Cirio pascual y trasmiten la luz a los
estudiantes que van a recibir por primera vez a Jesús Eucaristía. De pie por favor.
Canto: Ilumíname Señor con tu Espíritu
CELEBRANTE: queridos estudiantes, éste es el Cirio Pascual que representa a Jesús resucitado. En el día de
su bautismo, Jesús empezó a iluminar su corazón; por eso el sacerdote entregó a sus padrinos una vela
simbolizando la luz de Cristo. A lo largo de estos años han ido conociendo en qué consiste ser amigos de Jesús
y que les ofrece.
Ahora ustedes mismos van a llevar esa Luz para decir a todos que Cristo resucitó y van a tratar de hacer
ustedes mismos, con su ejemplo, que esa luz brille, como señal a los demás de lo que hay que hacer para llegar
al cielo. Que brille en ustedes la Luz de Cristo Jesús.
Todos: Amén
Sacerdote: Hoy día cada uno personalmente va a proclamar su fe.
Ustedes padres y todos los presentes respalden este compromiso repitiendo las mismas promesas.
Sacerdote: ¿Renuncias al pecado que tanto ofende a Dios?
Todos: Sí, renuncio.
Sacerdote: ¿Renuncias a todo lo que le disgusta a Jesús?
Todos: Sí, renuncio
Sacerdote: ¿Crees en Dios Padre Todopoderoso, creador del cielo y la tierra?
Todos: Sí, creo
Sacerdote: ¿Crees en Jesucristo su único Hijo, nuestro Señor, que nació de Santa María Virgen, murió, fue
sepultado, resucitó de entre los muertos y está sentado a la diestra de Dios Padre?
Todos: Sí, creo
Sacerdote: ¿Crees en el Espíritu Santo, en la Santa Iglesia Católica, en la comunión de los santos, el perdón de
los pecados, la resurrección de los muertos y la vida eterna?
Todos: Sí, creo
Sacerdote: Ésta es nuestra fe, esta es la fe de la Iglesia, que nos gloriamos en Cristo Jesús, Nuestro Señor.
Todos: Amén.
PETICIONES:
Sacerdote: Ahora, juntos oremos a Dios nuestro Padre: oremos no solo por nosotros, sino por todos los
hombres y mujeres del mundo, para que podamos vivir siempre con esperanza y alegría, llenos del amor de
Dios.
1. Por la Santa Iglesia.
Para que sea rica en frutos del Espíritu Santo, conserve siempre el gozo, la paz y el amor, y manifieste al
mundo la presencia de Cristo. Roguemos al Señor
2. Por el Papa
Te suplicamos Señor, por el Papa Francisco, por su salud e intenciones. Bendícelo Señor con tu amor,
fortalécelo con tu Espíritu, para que siga siendo Luz para la Iglesia y el mundo. Roguemos al Señor.
3. Por nuestra Arquidiócesis.
Concede Padre bueno, a nuestro Arzobispo Héctor Miguel Cabrejos Vidarte, las gracias necesarias para
guiar a nuestra Arquidiócesis por el camino del verdadero amor, del que habla Jesús en el Evangelio.
Roguemos al Señor.
4. Por quienes hoy recibimos la Primera Comunión.
Ayúdanos amigo Jesús, a cultivar siempre tu amistad, que nunca olvidemos nuestro compromiso de
participar cada domingo en la Santa Misa. Roguemos al Señor.
5. Por la Congregación Hermanas Dominicas de la Inmaculada Concepción.
Dios Padre te pedimos colmes de gracias y bendiciones a nuestras Hermanas Dominicas, de manera
especial a las hermanas que nos acompañan en nuestra Institución Educativa, acoge en tu corazón todas
sus intenciones y permite que sigan siendo servidoras fieles a tus santos propósitos. Roguemos al Señor.
6. Por nuestras catequistas.
Profesoras Aurora Alayo, Katherine Sánchez, Lourdes Ubillus, Alicia Luján y todas las personas que
colaboraron en nuestra preparación, bendícelas Buen Padre y sigue regalándoles un corazón generoso para
que sigan donándose en bien de la evangelización, con un corazón noble. Roguemos al Señor.
7. Por nuestros padres.
Asístelos Señor Jesús con tu gracia y otórgales los dones que necesiten para que sigan formándonos bajo el
ejemplo de San José y María tus Padres y formen nuestros corazones con un amor profundo a Ti. Roguemos
al Señor.
8. Por nuestra Institución educativa “San Martín de Porres”
Para que como auténtica familia, sigamos esforzándonos por predicar la Verdad y portar la Luz de Cristo.
Roguemos al Señor
LITURGIA DE LA EUCARISTÍA
MONICIÓN:
Hasta este momento, en nuestra celebración, hemos escuchado la Palabra de Dios y hemos orado por todas las
personas. Ahora vamos a preparar la Mesa. Esta Mesa será así, el símbolo de la gran Mesa del mundo, en la
que Dios quiere que se puedan sentar todos los hombres y mujeres.
Cirios:
Señor, te ofrecemos estos cirios, que se van a consumir en tu altar. Su llama encendida expresa nuestro amor
a Ti, que eres nuestro Padre. Te prometemos mantener siempre encendida su luz en nuestros corazones.
Todos: Recibe Señor nuestra ofrenda.
Uvas:
Ofrecemos también la vid, de donde proviene el vino, que pronto se convertirá en tu Sangre redentora. Que
sea para nosotros símbolo de amor y de alegría.
Todos: Recibe Señor nuestra ofrenda.
Pan:
El pan que acercamos a tu altar, será para nosotros el Pan de Dios que alimenta nuestra fe. Que sepamos
compartir lo que tenemos con los más necesitados, para que a ellos no les falte el alimento necesario.
Todos: Recibe Señor nuestra ofrenda.
Flores:
Las flores necesitan tierra bien cultivada y abonada. Hoy las presentamos como adorno de esta Mesa, igual
que adornan la tierra que Dios ha creado. Son el signo de nuestra alegría y de que estamos de fiesta. Que
sepamos cuidar del planeta para que siga siempre hermoso.
Todos: Recibe Señor nuestra ofrenda.
Rosario:
Te presentamos Señor el santo Rosario, por el cual nos unimos a Ti, junto con tu Madre Santísima. Ofrecemos
nuestro esfuerzo, a fin de que se convierta para nosotros, en instrumento de oración para acercarnos cada
vez más a Ti.
Compromisos:
Acercamos a tu altar Señor, los compromisos de los padres de nuestros niños que hoy reciben por primera vez
a Jesús Eucaristía; en ellos están los mejores deseos de seguir conduciendo a sus hijos por el camino de la
salvación.
Todos: Recibe Señor nuestra ofrenda.
OFRENDA DE AMOR
Por los niños que empiezan la vida, por los hombres sin techo ni hogar;
por los pueblos que sufren la guerra, te ofrecemos el vino y le pan.
Pan y vino sobre el altar son ofrendas de amor,
pan y vino serán después, tu Cuerpo y Sangre Señor (2v)
Por los hombres que viven unidos, por los hombres que buscan la paz;
por los pueblos que no te conocen, te ofreceos el vino y el pan.
Plegaria Eucarística
Sacerdote: Vuelve tu mirada, Señor, sobre las ofrendas que te presentamos y que nuestra celebración sea para
tu gloria y alabanza. Por Jesucristo nuestro Señor.
Todos: Amén.
Sacerdote: Oremos hermanos, para que este sacrificio mío y de ustedes sea agradable a Dios Padre
Todopoderoso.
Todos: El Señor reciba de tus manos este sacrificio para alabanza y gloria de su nombre para nuestro bien y el
de toda su Santa Iglesia.
Sacerdote: Qué maravilla es la Eucaristía, recibe Señor, con el pan y el vino todos nuestros trabajos e ilusiones.
Tú como Padre, concédenos con la fuerza del Cuerpo de Cristo, que nuestros corazones obren según tu bondad.
Te lo pedimos por el mismo Cristo Nuestro Señor.
Todos: Amén.
Sacerdote: Que el Señor esté con ustedes.
Todos: Y con tu Espíritu.
Sacerdote: Levantemos el corazón.
Todos: Lo tenemos levantado hacia el Señor.
Sacerdote: Demos gracias al Señor nuestro Dios.
Todos: Es justo y necesario.
Sacerdote: En verdad, Padre bueno, hoy estamos de fiesta; nuestro corazón está lleno de agradecimiento y con
Jesús te cantamos nuestra alegría
Todos: Tú que nos amas, Señor Jesucristo, ¡Gloria a Ti, Señor!
Sacerdote: Tú nos amas tanto que has hecho para nosotros este mundo inmenso y maravilloso. Por eso te
aclamamos
Todos: Tú que nos amas, Señor Jesucristo, ¡Gloria a Ti, Señor!
Sacerdote: Tú nos amas tanto que nos das a tu Hijo, Jesús, para que él nos acompañe hasta ti. Por eso te
aclamamos:
Todos: Tú que nos amas, Señor Jesucristo, ¡Gloria a Ti, Señor!
Sacerdote: Tú nos amas tanto que nos reúnes con Jesús como a los hijos de una misma familia. Por eso te
aclamamos
Todos: Tú que nos amas, Señor Jesucristo, ¡Gloria a Ti, Señor!
Sacerdote: Por ese amor tan grande queremos darte gracias y cantarte, con los ángeles y los santos que te
adoran en el cielo:
SANTO FONES
Santo, Santo, Santo es el señor
Dios del universo, Santo es el señor
El cielo y la tierra, están llenos de tu gloria
Hosanna en el cielo.
Bendito es el que viene, en el nombre del señor Hosanna en el cielo.
CONSAGRACIÓN
Sacerdote: Bendito sea Jesús, tu enviado, el amigo de los niños y de los pobres.
Él vino para enseñarnos como debemos amarte y amarnos unos a otros.
Él vino para quitar del corazón de las personas todo lo malo que impide la amistad y el odio que no nos deja
ser felices.
Él prometió darnos el Espíritu Santo para que todos los días de nuestra vida, vivamos como verdaderos hijos
tuyos.
Todos: Bendito el que viene en nombre del Señor, Hosanna en los más alto de los cielos. (de rodillas)
Sacerdote: A ti, Dios Padre nuestro, te pedimos que nos envíes tu Espíritu para que este pan y este vino sean
el Cuerpo y la Sangre de Jesús, nuestro Señor.
El mismo Jesús en la noche anterior a su pasión y muerte, nos dio la prueba de su amor infinito, pues cuando
cenaba con sus discípulos, tomó pan, rezó en acción de gracias, lo partió y lo dio a sus discípulos diciéndoles:
Tomen y coman todos de él porque esto es mi Cuerpo que será entregado por ustedes.
Tomó después el cáliz lleno de vino, volvió a dar gracias y lo pasó diciendo:
Tomen y beban todos de él porque éste es el Cáliz de mi Sangre, Sangre de la Alianza nueva y eterna, que será
derramada por ustedes y por todos los hombres para el perdón de los pecados.
Y les dijo también: “HAGAN ESTO EN CONMEMORACIÓN MÍA”.
Monitora: (de pie)
Sacerdote: Éste es el sacramento de nuestra fe.
Todos: Anunciamos tu muerte, proclamamos tu resurrección. Ven, Señor Jesús.
Sacerdote: Por eso Padre bueno, recordamos ahora la muerte y resurrección de Jesús, el Salvador del mundo.
Él se ha puesto en nuestras manos para que te ofrezcamos como sacrificio nuestro y junto con Él nos
ofrezcamos a Ti.
Todos: Te alabamos, te bendecimos, te damos gracias.
Sacerdote: Escúchanos Señor, Dios nuestro, danos tu Espíritu de amor a nosotros que participamos de esta
eucaristía; para que vivamos cada día más unidos a tu Iglesia con nuestro Santo Padre Francisco, nuestro
Arzobispo Héctor Miguel y los demás Obispos y con todos los que sirven en bien de esta familia.
Todos: que todos seamos una sola familia para gloria tuya.
Sacerdote: recuerda a los que queremos y a los que no queremos como debiéramos. Acuérdate también de
todos aquellos que murieron en tu paz y recíbelos con bondad en tu casa.
Todos: que todos seamos una sola familia para gloria tuya.
Sacerdote: reúnenos contigo Señor junto con la Virgen María, Madre de Dios y Madre nuestra para celebrar en
tu Reino la gran fiesta del cielo, donde todos los amigos de Jesucristo, Nuestro Señor, cantarán ante Ti para
siempre.
Todos: que todos seamos una sola familia para gloria tuya.
Sacerdote: Por Cristo, con El y en El, a Ti Dios Padre Omnipotente, en la unidad del Espíritu Santo, todo honor
y toda gloria por los siglos de los siglos.
Todos: Amén
Sacerdote: Muchas veces han orado con sus padres, la oración del Padre Nuestro. Hoy vamos a hacerlo con un
sentimiento especial porque van a participar por primera vez del Pan de Dios como hijos suyos.
Unamos nuestras voces para invocar a Dios, como Padre de todos los hombres, tal como nos enseñó Jesús,
para que aprendamos a querernos y a perdonarnos como hermanos. Cantemos juntos.
Sacerdote:
Líbranos Señor de todos los males y concédenos la paz en nuestros días, para que ayudados por tu Misericordia
vivamos siempre libres de toda perturbación, mientras esperamos la venida de Nuestro Señor Jesucristo.
Todos: Tuyo es el Reino, tuyo el poder y la gloria por siempre Señor.
Saludo de la Paz
Sacerdote:
Señor Jesucristo, que dijiste a los apóstoles: “MI PAZ OS DEJO, MI PAZ OS DOY”. No mires nuestros pecados sino
la fe de tu Iglesia y conforme a tu Palabra concédenos la paz y la unidad. Tú que vives y reinas por los siglos
de los siglos.
Todos: Amén.
Sacerdote: La paz del Señor sea siempre con vosotros.
Todos: Y con tu Espíritu.
Sacerdote: Daos fraternalmente la paz.
CORDERO DE DIOS
Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo, ten piedad de nosotros, ten piedad.
Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo, tan piedad de nosotros, ten piedad.
Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo, danos la paz, danos paz.
Fracción del Pan
Sacerdote: Éste es el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo. Dichosos los llamados a esta cena.
Todos: Señor, no soy digno de que entres en mi casa, pero una palabra tuya bastará para sanarme.
RITO DE COMUNIÓN
MONICIÒN:
Llegamos al momento más importante y tan esperado en el que ustedes, niñas y niños, recibirán el Cuerpo y
la Sangre de Cristo. Jesús viene a ustedes, viene a su corazón. Y sentirán el gozo de amarlo con todas sus
fuerzas, con todo su amor. Y para nosotros, los que ya desde hace tiempo participamos de esta mesa de la
Eucaristía, que nuestra comunión de hoy sea con una fe renovada, para acompañar a nuestros estudiantes en
el nuevo paso que hoy dan en su vida de cristianos.
Nos acercamos con profunda fe a participar de este alimento.
CANTO DE COMUNIÓN
MILAGRO DE AMOR
Jesús, aquí presente en forma real, te pido un poco más de fe y humildad.
Y así poder ser digna de compartir, contigo el milagro más grande de amor.
Milagro de amor tan infinito, en que Tú mi Dios te has hecho
tan pequeño y tan humilde para entrar en mí.
Milagro de amor tan infinito, en que Tú mi Dios te olvidas
de tu gloria y majestad por mí.
Hoy vengo lleno de alegría a recibirte en esta Eucaristía,
te doy gracias por llamarme a esta cena,
porque, aunque no soy digno, visitas tú mi alma.
Gracias Señor por esta comunión (2v)
CRISTO MÍO
Siento tu presencia en mi vida, siento que alimentas tú mi alma,
vida en abundancia tú me has dado, vives dentro de mi corazón. (2 veces)
Te darás, te darás, te darás en cuerpo y sangre, me alimenta tu palabra y tu amor
es tu pan y vino convertido, es la fuente y culmen a todo mi ser.
Oh, oh Cristo mío, eres el pan del cielo Oh, oh Cristo mío, toma, toma mi vida,
Toma mi vida….

Acción de Gracias
Estudiantes: Jesús, ahora que estás dentro de mí, ya no quiero que te marches. Te quiero con todo mi corazón.
Gracias por ser mi amigo. Gracias por mi familia, gracias Jesús mío por la fe que me trasmitieron mis padres,
gracias por reconocerte como mi único Salvador y Señor.
Gracias Señor por mi colegio “San Martín de Porres” donde siempre me han enseñado a conocer y amar más a
Dios.
Gracias por la Virgen María, porque siempre he sentido su presencia y su mano maternal. Que este día
maravilloso mi corazón de niño te cante agradecido por la vida, por la esperanza y por el deseo de acercarme
más a Ti en la Sagrada Comunión. Amén
Todos: Gracias, Señor, gracias.
Plegaria a María Madre de Luz
Monitora: La oración Bendita sea tu pureza es una breve plegaria de pura devoción a la virgen María.
En ella se refleja el fervor por un ser celestial que ilumina nuestras vidas. La madre que todos queremos y
sin la que no comprendemos nuestra existencia.
Nuestros estudiantes, después de haber recibido a Jesús Eucaristía, le ofrecen a la Virgen María, esta plegaria.
Bendita sea tu pureza y eternamente lo sea,
pues todo un Dios se recrea, en tan graciosa belleza.
A Ti celestial princesa, Virgen Sagrada María,
te ofrezco en este día, alma vida y corazón.
Mírame con compasión, no me dejes, Madre mía. Amén.
Rito de Despedida
SACERDOTE:
Gracias Señor, por la alegría de esta Primera Comunión porque nos ha unido a Jesús, tu Hijo, porque has unido
su vida a la de estas hijas tuyas.
Que sus hogares se sigan fortaleciendo por la Palabra de Dios. Y se conviertan en familias constructoras de
paz.
TODOS: Amén.
BENDICIÓN DE RECUERDOS
MONITORA: El sacerdote bendecirá los recuerdos que sus padres han preparado con tanto cariño.
SACERDOTE: El Señor que llenó nuestros hogares con el nacimiento de estas hijas suyas, mire con agrado y
bondad en este día de su Primera Comunión.
TODOS: Amén.
SACERDOTE: Bendición final.
MONICIÓN DE SALIDA
Te damos Gracias Señor por el milagro de tu Eucaristía, por morar en nuestros corazones, que la gracia de este
encuentro contigo se prolongue en nuestro compromiso de perseverar en tu presencia, con nuestro buen
obrar, en nuestras actitudes cotidianas. Y podamos ser verdaderos testimonios de tu presencia en nuestras
vidas hacia los demás.

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