Está en la página 1de 10

REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA EDUCACIÓN


UNIVERSITARIA

UNIVERSIDAD EXPERIMENTAL DE LAS ARTES

CARACAS, DISTRITO CAPITAL.

ENSAYO CRÍTICO.

Estudiante:

Margaret Sánchez

C.I.: 29.753.281

Unidad curricular:

TEATRO VENEZOLANO

NOVIEMBRE, 2022.
El arte, se manifiesta de diversas maneras, cada persona la refleja y así vez
la observa y cataloga con diferentes características, diferentes cualidades, pero
todas a ello la representan como hermosa, y por su diversidad y variedad se crea el
teatro, las obras, las pinturas, así como la música, la obras escritas son grandes
reflejos del arte, son manifestaciones de todas las emociones y vivencias que
acompañan al ser humano, que conforman la vida de cada ser, estás obras, este
tipo de arte, declara fielmente un sentimiento, una emoción y una entrega infinita a
quien la crea y a quien se atreve a conocerla, es por ello que existen desde la
antigüedad mucho escritores que no solo hicieron escritos, no, sino que también
crearon arte, el arte en una de sus mejores expresiones, dejando ver y experimentar
a todo cuánto pueda, palabras y versos cargadas de nostalgia, rabia o sueños
fantasiosos. Y de este modo permitieron que en el teatro estás cobrarán más vida y
esencia que la que poseían en su primera y más básica creación. Las cuatro obras
a ser resaltadas en lo posterior, son por consiguiente: Virginia, la tragedia en cinco
actos; La Prometida; Venezuela Consolada, y por último; El Libertino Arrepentido.

De las cuales luego de una agradable y pausada lectura se destacarían a


continuación las similitudes y por el contrario además, sus diferencias más
marcadas, destacando sus características más llamativas y el significado transcrito
en sus versos y actos, colmados de excelentes diálogos y meditaciones entre los
personajes. Ya que en primer lugar, la obra titulada Virginia, Tragedia En Cinco
Actos, deja entrever entre sus páginas, la triste historia de amor y conflictos políticos
que se desarrollan durante la Roma de 1824, por la cual los personajes reflejan su
descontento con el actual gobierno del Apio el decenviro, quien ha cometido
asesinatos y otras fechorías a cambio de mantenerse en el poder, y el cual tiene
deseos de poseer a Virginia hija de Virginio, cómo su esposa, sin embargo la cual,
ya está prometida a matrimonio con Ycilio, antiguo Tribuno de la plebe, cuyo
corazón está con Virginia, y quién también considera un enemigo al señor Apio. Se
desarrolla en la trama, un profundo deseo de posesión de poder sobre todo y todos
del señor decenviro Apio, pues por su deseo de tener a Virginia para él y no dejarla
con el amor de ella, hace por todo los medios cuánto puede para impedirle la
felicidad, y decide por ello levantar una calumnia con ayuda de su compañero de
asañas Claudio, el cual finge ser el dueño legítimo de Virginia, puesto que según su
infamia ella es hija de una esclava del mismo, y fue robada por la esposa de Virginio
el Centurión, para hacerla pasar por hija suya.

Debido a las complicaciones Ycilio toma las medidas y manda a traer a el


padre de la muchacha en secreto, y crea un complot contra la tiranía de Apio, más
la joven muchacha afligida guarda un puñal en su pecho para salir en su propia
defensa de ser necesario, y luego de comparecer frente a Apio y mostrar junto con
su tío Numitorio, su nodriza, su prometido Ycilio y Virginio su padre, dejando así
Apio en claro su gran ímpetu en acabar con dignidad y el honor de la muchacha y
su familia, deciden atacar. El padre huyendo con ella saca el puñal de su pecho y
acaba con la vida de su hija, tratando de así mantenerla pura y honrada hasta la
pronta muerte de ella. Ycilio y los otros combatientes terminan con la batalla
acabando con la vida de Apio y su tiranía, y quedando en la tristeza por la perdida
de su amada Virginia. En contexto es una tragedia, muy en diferente de la segunda
obra. La cual refleja por el contrario una historia de amor, escondido y prohibido,
plasmando en frases y versos, la historia de amor de La Prometida. Dónde una
joven con deseo apasionado por su amado llamado Don Lorenzo, lo cual le causaba
un gran gozo, pero irremediablemente acabaría trayendo consigo una grande pena
amorosa, debido al alto estatus de la señorita Rosa, dado que su padre Don
Gerónimo jamás aceptaría que la menor anduviera con alguien como Don Lorenzo,
él joven era estudiado y dotado de inteligencia, pero no de dinero, ni de haciendas,
ni de ganado, él no poseía ni la más mínima riqueza, sin embargo su amor por
Rosita era gigante y apabullante.

Pronto la joven Rosita se ve afligida por su repentino compromiso con Don


Andrés, con quién su padre desea verla felizmente casada incluso si no es por
propia voluntad de ella, y al notar la inconformidad de la misma, busca a toda costa
convencerla u obligarla a obedecer su única orden y deseo primero, Teresa, la
criada de confianza de Rosita, nota su tristeza y su dolor y decide acudir a su
consejo, pero nada logra, pues la felicidad de la joven está en un hombre que no
puede ser su esposo, y para su desconsuelo, por falta de méritos no sería, sino por
un compromiso que ella no consentía, es por ello que envía a Teresa hasta Don
Lorenzo para llevarle la triste noticia de su promesa a un extraño, quien poco tarde
en aparecerse frente a Rosa en su casa y luego de discutir despiden separarse, sin
saber que el criado de Don Lorenzo, acabaría ejecutando improvisadamente un
plan en beneficio de su señor, haciéndose pasar ellos por Don Andrés y su fiel
sirviente, engañando al padre de Rosita y permitiendo así una oportunidad de
ganarse a Don Gerónimo. Aunque sus planes no tardan en ser interrumpidos por el
verdadero Don Andrés y su criado, quienes desmienten la situación y se disculpan,
puesto que el señor Prometido de Rosita tampoco desea cumplir la voluntad de su
padre, y prefiere aclarar todo y convencer a Don Gerónimo de permitirle a su hija la
felicidad al lado de su amante y joven compañero Don Lorenzo. Y luego de una
acalorada discusión, surge un final feliz para la pareja de enamorados y el
matrimonio se da, permitiendo un desenlace que poco se asemeja a la primera
historia, pero que en contexto de felicidad, se asemeja a la siguiente obra.

De la cual el título es Venezuela Consolada, está obra es un poema escrito


por Andrés Bello que relata la historia de sufrimiento de Venezuela por la epidemia
de la viruela, pues azotaba a Venezuela desde el siglo XVII, en el cual el personaje
de mayor transcendencia en Venezuela, quien demuestra su congoja, su dolor y su
tristeza, de ver a sus hijos muertos y otros muchos en sufrimiento, a sus quejas se
une el tiempo, el cual narra y relata a través de los hechos y los acontecimientos
sus vivencias, y trata de darle algo de consuelo a Venezuela, aunque conoce bien
él, todo lo que ha sufrido y le duele a Venezuela, pues él ha visto, que todo el
derecho tiene de quejarse y sentirse triste, la cual no descansa en sus lamentos, en
su llanto sigue predicando sus males, sus tragedias y todo lo que sucede sin que
pueda ella detenerlo, sin poder evitarlo, el tiempo describe y expresa sus sueños y
relata su pasado, avivandola en su presente, pero es realmente nefasto el mismo,
porque el tiempo no lograría nada, pues la viruela azota sin piedad y no descansa,
agotando más las pocas fuerzas de una adolorida Venezuela, que penas halla
consuelo en un repentino personaje llamado Neptuno, una fantasía parecía para
ellos en medio de su duelo, pero gratificante se sentía oír su voz llenándoles de
esperanzas y nuevas fuerzas.
Venezuela no quería creer pues temía ser aún más lastimada, pero termina
por convencerse por el maravilloso consuelo dado por Neptuno, quien en sus
versos refleja la mejor de las intenciones, pues representa la llegada de una cura,
ejemplificando a la vacuna para la viruela y por fin a una salida a tanto llanto y dolor,
cantan los coros, cantan todas las voces, con jubilo el tiempo es instado a recordar
todo lo acontecido y todos gozosos celebran las buenas nuevas. Es este contexto,
se refleja un cambio de tristeza a felicidad como en la historia anterior, pues se ve
plasmado en la obra o sentimiento de alivio al ver el final obtenido, en la última obra
a tratar, se refleja un cambio, que invita a la reflexión de los actos de la juventud de
sus oportunidades y beneficios sociales, está se titula: El Libertino Arrepentido, la
cual es una historia venezolana que representa a Fernando como personaje
principal y categorizado cómo Libertino, por sus palabras bien acomodadas para
hacerle creer lo que se desee a su conveniencia, jugando así con diversas señoritas
y señora, y sus respectivos sentimientos amorosos, se desarrollan las escenas de
una manera explícita, dónde se nota el carácter de Fernando siendo estrafalario en
su palabrería y ilusorio en todas sus promesas, puesto que la obra da inicio en una
discusión entre Fernando y su padre Pedro Quiroga, la cual se debe a los rumores
que con el tiempo se han ido esparciendo en contra de Fernando, pues ya no era
secreto su felicidad por ilusionar a todas las señoritas posibles y por entretejer las
mejores calumnias de ser necesario para mantenerse a tope.

Así es como el señor Quiroga interroga a Canuto, el criado de Fernando


quien le debe a este su mayor fidelidad y por ende se presta para engañar a su
padre y a todo aquel a quien se necesite engañado para continuar con sus
estrategias, los chismes corren y es así como Anita se ve terriblemente enojada por
los rumores, más aún cuando su tía se empeña en presumir su compromiso con
Fernando, del cuál ella apenas se enteró, pues ella misma, también es la prometida
a matrimonio a Fernando, así mismo pretender ahuyentar al pretendiente que no
soporta, el rival de Fernando, López. El cual al ver a su objeto de amores engañada
planea todo lo que está a su alcance para desentrañar los deshonestos tratos de
Fernando a las muchachas jovencitas del pueblo y las afueras, desea humillar a
Fernando, y se revuelven los chismes y malos entendidos en los que Fernando
parece salir bien parado de cada uno, hasta la llegada de Amelia, amiga de Anita, la
cual confiesa ser otra de las prometidas de Fernando, a la cual este ignora
firmemente y debido al padre de esta y la tia de Anita despechada por el nuevo
rechazo escondido por tanto tiempo, terminan convenciendo al señor Quiroga, quien
encierra a Fernando mientras se encarga de resolver algunos embrollos, y
determina finalmente que para evitar más conflictos, deberá contraer nupcias con
Anita, sin importar los debates, así debe cumplirse y López ve frustrados todos sus
planes, cuando Fernando finamente se arrepiente y decide aceptar casarse con
Anita, dejando una reflexión sobre el carácter ambiguo.

En conclusión, hay 4 historias de amor representados, una de tragedia


(VIRGINIA), una fructífera (LA PROMETIDA), una acongojada (VENEZUELA
COSOLADA) y una engañosa (EL LIBERTINO ARREPENTIDO), así como hay 4
finales con desenlaces en el caso de la prometida y el Libertino Arrepentido que
terminan en un matrimonio inminente, por el contrario, en Virginia resulta en una
liberación cargada de muerte, y en Venezuela Consolada, se resumen en una
felicidad consoladora después de la aflicción. Los inicios muestras contextos y
ambientes distintos, los personajes de la primera obra reflejan creencias arraigadas
y reacciones violentas y sin miramientos. En la segunda, se destacan personajes
con sentimientos fuertemente claros y determinados, y la firmeza de todos por
cumplir su propia voluntad, en la tercera obra, se ven desarrollados personajes
reflexivos, con profundas tristezas y expresiones que demuestran en la grande
apego a una tierra, a un pueblo que consideran propio incluso en el dolor, y en la
cuarta obra, se refleja la despreocupación y el superficial apego y responsabilidad
de los personajes, demostrando que debería pensarse mejor antes de hablar,
puesto que todos hablan por impulso, y ocultando, mintiendo y manipulando la
verdad para beneficio de sus metas. En general, son diversos los temas tocados,
pero con enfoques que podrían llegar a considerarse únicos y reflexivos.

En todas las obras hay expresiones al cielo, expresiones que podrían


considerarse religiosas, exclamando desconsolación en Virginia (pág. 35) “¿Por
qué es que el Cielo contra mi inclemente de la ley que me impone te ha
eximido?”. Así como en La Prometida (pág. 203) dice con ofuscación: “¿Qué
decís señor? ¡Oh, Cielos! Desechad tales ideas.” Inclusive en Venezuela
Consolada, la misma menciona con gran dolor y alivio, (pág. 106) “¡Oh gran Dios!
¿Con que al fin las tristes quejas de Venezuela a tu mansión llegaron?”. Por
último, entre las expresiones halladas en El Libertino Arrepentido que con asombro
e indignación refleja, (pág. 310) “¡Válgame Dios! Y ¡Sin llamarme!” denotando la
gran variedad de comunes exclamaciones que se usan hablando de un ente
celestial. Además fue notable su sentimentalismo marcado en los versos, las frases
y poéticos textos, dónde desde el fondo de sus mentes y corazones demuestran las
más íntimas expresiones de sus emociones y temores. En Virginia (pág. 51) “Y que
el vivir me sirva de martirio. ¡Cuántos consuelos, cuando tú me amabas, el
corazón sentía! ¡Cuan distinto era mi afán en tan dichoso tiempo!...” luego en
La Prometida (pág. 192) dónde Rosita dice: “Mi corazón arrastrado por una
fuerza secreta cedió al impulso invencible e una impresión tan violenta”
hablando de su amado. Posteriormente en Venezuela Consolada, (pág. 104), dónde
Venezuela en su dolor manifiesta “Los favores gozaba alegre de su regia mano,
cuando en infaustas naves me tragiste, de las ciruelas el arroz contagió.
¿Cómo pretendes, pues, que Venezuela sin turbación te mire y sin espanto?”.
En El Libertino Arrepentido (pág. 306) el señor Francisco explica su pensar
reflexionando “Esto me tiene ciertamente confundido y abatido… Estoy que no
me conozco, pero ¿Qué he de hacer en tan crítica circunstancia, sin plan, sin
recursos, sin dinero, y desacreditado?”.
BIBLIOGRAFÍA

 VIRGINIA, una tragedia en cinco actos. Domingo Navas Spinola; 111.


 LA PROMETIDA. José Maitin: 185.
 VENEZUELA CONSOLADA. Andrés bello: 97.
 EL LIBERTINO ARREPENTIDO. Gerónimo Pompa: 263.
BUSCANDO EN ESTRELLAS.

Una señora se encuentra con dos jóvenes muchachas sentadas en un café


platicando sobre su vida. Y lo que ha pasado en los últimos días.

Señora Miranda: buenas tardes, ¿cómo se encuentran? (Viendo


directamente a las jóvenes)

Mariana: Buenas tardes, bien, ¿y usted cómo se encuentra?

Señora Miranda: ¿Me puedo sentar a conversar con ustedes un rato?

Mariana: Sí.

Valeria: Si.

Señora Miranda: Jóvenes ¡me acuerdo cuando solo eran unas niñas! Se me
hace un nudo en la garganta y la nostalgia parece.

Valeria: El tiempo ha pasado muy rápido señora Miranda.

Señora Miranda: Me acuerdo de mi juventud, ustedes se parecen un poco a


mí.

Mariana: ¿Y eso por qué?

Valeria: Cuéntenos un poco de usted.

Señora Miranda: bueno, mis niñas, era una persona feliz, activa, con ganas
de comerme al mundo. ¡Como ustedes! Con los ojitos brillantes.

Mariana: ¿qué sueños tenía, usted?

Señora Miranda: Bueno mi niña, como ya sabréis el tiempo no espera por


nadie, pasé toda mi vida queriendo lo que todo el mundo quiere un buen trabajo,
una familia y un esposo a quien atender. Así se fue mi vida.

Valeria: Todavía tiene tiempo para hacer lo que le gusta y descubrir cosas
nuevas.
Mariana: Señora Miranda, usted todavía tiene tiempo para hacer cosas
nuevas, nunca es tarde para hacer algo nuevo.

Señora Miranda: Mis niñas cuando uno crece se da cuenta qué algunas
cosas no son para siempre. Veo el cielo todas las noches buscando en las estrellas
a mi querido.

Mariana: Su esposo la quisiera ver feliz.

Valeria: Era una increíble persona que le gustaba el espacio y las cosas que
pasan en el.

Señora Miranda: Por eso cada noche busco, ahí, para tener un poco de él en
las estrellas.

También podría gustarte