Bombones de Licor

De Marcos Casanova

Pancho Nacaratti - 78 años. Ex boxeador internado en una residencia para ancianos

“Tordo” Mosca / Boloquito: 80 años. Ex asistente de Pancho. Vendedor de pochoclos.
Laura Calamante: Nuera de Pancho. Hermosa mujer de 24 años

I – Memorias

“Residencia Libertad” para ancianos. La historia se desarrolla en un pequeño

gimnasio y sala de masajes que los residentes usan como espacio para realizar
ejercicios físicos, pero además se reserva para que puedan recibir a las visitas con
cierta privacidad, mientras no funciona como gimnasio.
Hay un pequeño escritorio metálico con un fichero y un sillón individual, una
camilla y una bicicleta fija. Sobre un costado un dispenser de agua fría y caliente y
algunas bolsas de nylon llenas con sábanas para lavar. Pancho Nacaratti de pie,
le dicta a Laura, sentada en el sillón, quien graba con su Smartphone y además
escribe en un anotador con un lápiz. Pancho disfruta exageradamente de un
bombón de licor.

Pancho: Muy buenos… igual bombones de licor como los hacía Matilde… un día
te voy a contar de Matilde. Ella derretía el chocolate, hacía los moldecitos y
después preparaba almíbar de tequila… esto no es licor ¿Sabías? (Pausa) ¿Qué
te estaba contando? Ah de Matilde… Matilde me crio a mí cuando mamá…
Laura: Lo del tequila Don Pancho
Pancho: ¿Tequila? ¿Qué tequila? A si… ¿vos sabes cómo saber si un tequila es
bueno? Lo tenés que servir en una copa anchita… (Todo gesticulado. Hace la
acción) Lo miras a unos 30 cm., y si el tequila es blanco tiene que ser bien
trasparente. El aroma… (Huele sus dedos como si tuviera la copita) madera…
vainilla, especies…en fin (Pausa) Es muy interesante saber un poco de todo… y
está muy bien que te seas curiosa ¿Eh? (Pausa) Che que ricos bombones… se
hacen con almíbar de Tequila. Yo esto lo sé de la vida… no como ahora que creen
que saben por internet ¿No? ¿Trajiste más?
Laura: Ya se comió dos… el miércoles le traigo más… la diabetes…
Pancho: Bue… ahora sos médica… gente que no es médica, diciendo que es lo
que hace bien, y que es lo que hace mal. El chocolate está demostrado que
reaviva las células dormidas del cerebro… y el licor... (No sabe que decir). Pero
vos, decidiste que me hace mal. Fijate si no te quedó ninguno.
Laura: Déjese de joder hombre. No sea bardero ¿Quiere que sigamos por donde
dejamos, o prefiere corregir algo del principio, de su niñez… adolescencia?
Pancho: Jaja ¿Corregir mi niñez? Cómo si hubiera sido una gran niñez… ¿Ya te
conté de Matilde? (Pausa, nadie dice nada) ¿Y por donde habíamos dejado? Lo
de Tucumán ya te lo había contado
Laura: No. De eso no me contó
Pancho: Bue… ahora vas a saber más vos que yo de lo que dije. Primero me
prohibís el chocolate como si fueras Cormillot, y ahora me decís lo que dije y lo
que no dije.
(Laura reproduce en el dispositivo lo último grabado “El lunes te voy a contar toda
la secuencia del viaje a Tucumán… hoy dejamos acá… fijate si no te quedó algún
bombón en la mochila” Stop)
Pancho: (Retomando, no se hace cargo) Nosotros llegamos a Tucumán un 19 de
noviembre. Martes… un calor, fue el 19 porque el día anterior había sido feriado…
no me preguntes por qué. Viste que en este país… Cuestión que llegamos
directamente al hotel… éramos tres. Mi segundo: Miguel Antaño y el tordo Mosca,
que entre paréntesis y esto no lo grabes. ¿Ya estabas grabando no?
Laura: Sí. Ahí ya corté
Pancho: (Infidencia) El tordo no era tordo, ni enfermero. Se daba maña con
primeros auxilios y era muy macanudo. Me duele haberlo perdido. Un pobre
huérfano que lo único que tenía era una hermana y encima desaparecida. Pero
vos anótalo así… nadie se va a poner a buscar eso en internet.
Laura: Claro… yo quiero ayudarlo así no se atraganta con bombones, y que no
tengamos que salir corriendo para cortarle la gamba por diabético, pero como no
soy doctora y soy una pendeja insolente, todo el bardo es para mí… pero al
chabón este Mosca, hay que darle el título de cirujano….
Pancho: Noooo. No mezcles gordura con hinchazón. Si hay algo que me molesta
de este invento del google (Leído gugle) es que demolió el romanticismo... El que
busque en internet para saber si el tordo era tordo o no, no entendió nunca nada
Laura: Baje un cambio Pancho, que tiene que estar tranqui… Se graba lo que
usted dice, no lo que yo quiero… no agite…. ¡Mire que me voy a poner a discutir
con usted! Póngale premio nobel si quiere. Sigamos (Pone a grabar) El tordo
Mosca los acompañó a usted y a… Miguel Antaño, su… ¿Segundo? (Pausa)
Pancho: Exactamente. Al hotel Castellano, que nos había pagado la Asociación y
nos vino a dar la bienvenida un gordo grandote, un tal Coluchi, que era el jefe de
prensa de Walter. (Pausa) Walter… el que tenía el título… (Ante la mirada de
Laura que no entiende) No... Cortá. (Laura corta) Mi hijo, tu novio se llama Walter.
Eso, por un lado. ¿Hasta ahí me seguís? Perfecto. Punto aparte: El tipo al que le
quería sacar el cinturón, también era Walter, pero de apellido… Carlos “La
tartamuda” Walter. Seguí grabando. Al gordo este, Coluchi, lo recibimos en el
lobby del “Castellano” y nos preguntó si éramos nada más que tres. Y sí. Éramos
tres, contándome a mí (Primer dedo) El tordo Mosca (Segundo), Miguelito Antaño
(Tercero) y yo (Cuarto)
Laura: ¿Cuatro?
Pancho: No… tres… El tordo, Miguelito y yo
Laura: Contó cuatro
Pancho: Habré contado cuatro con los dedos, pero éramos tres… más te digo…
éramos el Tordo Mosca, Miguelito Antaño y yo
Laura: (Sonríe)… Eso ya me lo dijo “Pancheitor”. Parece remixado. Y los fue a
recibir el gordo Coluchi… eso también ya me lo dijo… ¿Y le pudo sacar el cinto?
Pancho: Cortá. (Laura corta)
Laura: ¡Cortá, arrancá cortá, arrancá…No terminamos mas así
Pancho: Es que no cazas una nena, el campeón, el que ostenta la corona, de
trofeo le dan un cinturón
Laura: Pero sí que entiendo… ¿Que se cree que soy tarada? Así como me ve yo
hago entrenamiento de boxeo. ¡Lo estoy jodiendo! y ya lo sé lo del cinturón, le
digo más… es de cuando se peleaba sin guantes, los chabones se ponían un
pañuelo como cinturón.
Pancho: ¿Boxeas?
Laura: Hago el entrenamiento. (Demuestra secuencia de golpes y con cada golpe
dice una ventaja) Libera tensiones y estrés.... Te da aire (Golpe) Es bueno para el
corazón (esquiva) Quemas calorías (Golpe) Y lo principal (Se frena y se le pone
en guardia a Don Pancho) Nadie se hace el atrevido conmigo. Lo tengo cagando a
su hijo. Ahhh Jaja. Mentira, no peleo con nadie suegro… entreno nomás. (Se sirve
un vaso de agua) En mi casa estaban metidos en esto del boxeo. No pelearon
como usted, pero bueno, digamos que tuvieron que ver. Le digo más… yo
conozco el Luna Park, de una vez que mi vieja nos llevó a ver, que no había
peleas desde hacía no sé cuánto, a Narváez por el título
Pancho: 13 de Julio del 2002, Narváez y el nicaragüense Adonis Rivas. Por el
título mosca… lo volteó… ¿vos estuviste ahí?
Laura: Tenía 8 años. … de lo único que se hablaba en casa, después de eso…a
la mierda todo. Mala palabra (Pausa. Duda) Sigamos Pancho. Estamos
grabando… Ya me contó lo del gordo este Coluchi que lo fue a recibir al hotel
Pancho: ¿Ves? Ahora no hubiera ido, nos hubiera buscado en Facebook… le dije
al gordo ese, que para noquear a la tartamuda Walter bastaba conmigo solo. ¡Que
todos los demás habían venido al pedo, inclusive él! ¡El quilombo que se armó! Me
Lo tuvieron que sacar… pero bueno así eran las previas. Ahora se mandan
mensajes por Instagram. El que peor la sacó fue el Tordo Mosca, que el gordo
Coluchi en el tumulto, le bajo las dos paletas de adelante de una piña…Se había
puesto picante la previa. En todo Tucumán se veía el cartel de la pelea por el título
argentino de la FAB y en grandote arriba el campeón Carlos “La tartamuda” Walter
versus Francisco “Pancho” Nacaratti. En ese entonces era Pancho. Lo de “el
santo” vino después en el 71
Laura: ¿El santo? (Pausa) ¿Qué onda?
Pancho: Era el nombre que me habían puesto… Yo me llamo José Francisco…
entonces en honor al Libertador… ¿No entendés no? (Pausa) San Martín (Pausa)
El santo de la espada, una peli con Alcón, Evangelina Salazar, Lautaro Murúa y
Alterio… no los conocés… Torre Nilson menos ¿A San Martín lo tenés visto no? Y
sino búscalo en twitter… el de las patillas…de los andes… mejor seguí grabando:
Combate pactado a 12 asaltos el sábado 23 de noviembre de 1968 21 30hs. En el
salón de la asociación Sirio Libanesa de San Miguel de Tucumán. ¿Cómo puede
ser que no conozcas a San Martín?
Laura: Uhh no se ortive don Pancho… sí que lo conozco… de la escuela lo
conozco
Pancho: (Irónico) ¿Ah iba con vos?... La cabeza quemada con las redes. Y eso
que yo tengo segundo año…
Laura: ah re, que no entendía nada la tipa
Pancho: ¿Qué tipa? Seguí grabando. Estadio Colmado. Unas 400 personas
bramaban alentando a Carlos Walter. Lo mío era la explosión. Yo Pegaba como
una mula. (Laura ríe por la ocurrencia. A don Pancho no le gusta) … ¿De qué te
reís? Prepárate unos mates.
Laura: ¿Tiene yerba Don Pancheli, o le pido a las chicas adelante?
Pancho: No hay nada que pedirle al comando de pelotudas. Saca yerba de la
bolsita esa.
Laura: ¿A quiénes? ¿A Beba y Sunní? ¡Son re piolas!
Pancho: ¡Uh sí! ¡Unas piolas bárbaras! Me quiero quedar a ver boxeo de primera
y me mandan a dormir…. Ya van 3 sábados
Laura: No sea bardero… se la agarra con las pobres pibas. ¿Mire que las
pavadas que dice se están grabando eh?
Pancho: Escribí a mano lo que te dicto. Otra cosa que el internet decidió que no
era necesario.
Laura: ¡¡¡Uhh con internet!! En vez de protestar póngase las pilas con la compu…
¡Que Pancho don Pancho! Con internet en su época, hace banda de años,
hubiera peleado en Las vegas, mire lo que le digo
Pancho: Jaja Yo uso internet… pero internet no me usa a mí. ¿Se entiende la
diferencia? Seguí grabando mejor…
Laura: La seguimos el miércoles Don Pancheli. To be continued... si no está
concentrado le entran todas las manos. (Le amaga con un “jab” de derecha que
toma por sorpresa a Pancho. Salta y juega alrededor de él) Me dijo su hijo que le
pregunte a ver si necesita algo… ropa más de abrigo… yerba, o lo que quiera yo
lo anoto. Walter me di...
Pancho: ¡Quédate quieta carajo! ¡A los saltos como liebre entre los zapallos! Que
me mande el barbero decile… Dejá…. Me cortas vos, no sea cosa que se le
acabe el dinero a este
Laura: ¿Yo? Jaja No le conviene… como quiera bah…le voy a dejar la pera toda
cortada. Don Pancho le tengo que pedir un favor, una pavadita antes de irme.
Pancho: ¿Favor? ¿A un preso? en el trato no figura nada de hacer favores
Laura: Okey ni favores, ni bombones de licor ¿me los devuelve? Ah, pero si ya se
lo comió. Pancho… no se ponga agreta conmigo…. Un campeón como usted
flaqueando con una pendeja. Yo vengo, le tomo nota de lo que me dicta, de su
biografía. Y usted se me porta bien. Ese es la onda acá. Mire que nos hizo pegar
un cagaso que…
Pancho: Otro sermón… dale que va
Laura: Otro sermón no. ¿Qué onda? Tres patrulleros buscándolo, su hijo y yo
como locos barriendo la ciudad de lado a lado. Recorrimos hospitales, comisarías,
bares y cabarulos. No, no se ría… No. No me tire cualquiera, yo vengo de onda
Pancho: ¿De onda? Yo te pago querida… Uno arriba del otro
Laura: No es por la guita amigo…. Es porque me lo pidió su hijo
Pancho: Listo. Es como discutir con la conciencia. ¿Qué favor necesitas?
Laura: ¿Favor de qué? Ahhh Necesito la data de un acta acuerdo que dice su hijo,
que usted firmó con la gente del sindicato de choferes de remis hace como cinco
años… No hay manera de encontrar eso y estos tipos no paran de…
Pancho: ¿Sabés qué? Decile a mi hijo que Don Pancho no se acuerda, por eso
mismo, él me hizo internar acá. Deterioro cognitivo, eso me dijo, que se fije en
alguna receta del doctor ese amigo de él… ¿Lombardo era…? decile que el
deterioro no me permite recordar eso que él me pide del sindicato…
Laura: Pancho… lo están presionando con eso… puede perder la agencia (Larga
pausa)
Pancho: Yo ya la perdí, y acá me ves… deteriorado
Laura: Está bien, le digo… Cuando se pone así…
Pancho: Como para acordarme… con semejante diagnóstico. Vos que decís que
no sé nada de internet. Mira lo que me hice imprimir (Saca un papelito del bolsillo
y lee) “Deterioro cognitivo: pretende describir la sintomatología previa a la
demencia “previa a la demencia dice… o sea que me estoy volviendo loco según
mi hijo y su amigo el Doctor ese. ¡¡¡Cría cuervos!!!
Laura: Si usted lo dice … ¿Algo más aparte de lo de la barba Don Pancho?
Pancho: ¿Qué barba?
Laura: La suya… que le tengo que emprolijar
Pancho: A mí nadie me toca la barba
Laura: (Contrariada) Bueno si me va a tomar el pelo, mejor sigo viaje (Se dispone
a irse)
Pancho: (No quiere que se vaya) Quisiera seguir contándote lo de la pelea con
ese Walter.
Laura: ¿Ahora?
Pancho: ¿Te puedo pedir un favor yo a vos? Nunca te pongas contemplativa
conmigo. No importa que yo me enoje, vos mantenete imperturbable. Te voy a
contar una cosa: Una vez vino el Tordo Mosca, confesándome que se había
enamorado. Yo en un primer momento me puse contento, imaginate. Hasta que
me dijo que la mujer que lo había enamorado y había cautivado su corazón era…
Cecilia Bolocco
Laura: ¿Quién?
Pancho: No dejá… no conoces a San Martín, menos vas a conocer a la
Bolocco… una mina… ¡En aquel momento un minón…! modelo chilena…. Fue
miss mundo. Cuestión que lo mandé a la concha de su hermana.
Laura: Uhh
Pancho: es que yo pensé que me estaba tomando el pelo. Una especie de locura
que le agarró… como que yo ahora te diga que estoy noviando con pampita…
Laura: Aguante don Pancho…que pasó con el chabón y la chilena esa
Pancho: No entendiste nada… ¡El tipo enloqueció! pero no es el tema. El tema es
que no aboné a esa realidad y entonces…le pequé una zamarreada y lo mandé a
la puta que lo parió
Laura: ¿Y él qué hizo?
Pancho: Me obedeció. Se fue a la puta que lo parió. No lo vi nunca más
Laura: ¿Pero al final el tordo Mosca tuvo alguna historia con la modelo chilena?
Pancho: (Piensa) Hay veces que yo no sé si me estás boludeando o que…Grabá
(Laura graba) En la pelea con La Tartamuda tenía todo en contra. El público no
me conocía ni de nombre. La radio no me hizo ni una sola nota. Yo estaba
enfurecido. Y la calentura siempre se acumula en las entrañas, en los puños….
¿Viste? Y te puede llevar arriba o a la tumba. Cuestión que aquello no fue una
pelea. Fue un robo a mano armada. En el estadio “La tartamuda” estaba como si
fuera a hacer un trámite. Se hacía el simpático..., saludaba, bailaba para el
público…
Laura: Ganas de matarlo da… cuando estoy así y la otra no se hace cargo es
peor.
Pancho: A ver pendeja… pará. Con todo respeto. ¿Vos boxeas?
Laura: ¿Pero cuantas veces se lo voy a tener que repetir? ¡No boxeo! ¡Solo
entreno! ¡Hago el entrenamiento de boxeo! ¡Pero no boxeo! ¡Guanteo!
Pancho: y cla… precisamente por eso te hago repetir… aprendes a cocinar, pero
vas a la rotisería, aprendes a manejar, pero salís a pata, y ¡aprendes a boxear,
pero guanteas. Bien… ahora entiendo
Laura: ¡Y si! ¿Qué problema tiene? Herencia familiar Pancho… a veces es difícil
correrte del camino que te marcan… De un día para el otro en casa de boxeo no
se habló más… ¡¡ Mala palabra!! Pero… la semilla ya había germinado como
quien dice… pero entreno nomas… … para endurecer las cachas …de acá me
voy al gimnasio. Ojo que me defiendo igual… (Nuevamente salta alrededor de
Pancho y tira golpes al aire) Me recontra caliento Panchuanco y digo que, si a mí
me pasa eso, me imagino a usted por el cinturón. ¿Cómo fue, cuénteme?
Pancho: Portate quieta nena. Que me mareas la puta que te parió (Pausa)
¿Tenés estilo eh? Deberías probar un par de rounds. Tenés velocidad de piernas,
y una mirada de bronca…pero quédate quieta que no venís acá a boxear. ¡Grabá!
Nos llama el referí para la charla de “nada de golpes bajos y que cuando dice
break hay que soltar y todo eso” Después nos chocamos los guantes y antes de
que doy el primer paso atrás para arrancar el combate, me metió de Cayetano un
Cross de izquierda a la mandíbula que me sentó de ojete
Laura: ¿Pero había sonado la campana?
Pancho: Al unísono con la trompada. No me acuerdo ni cuando caí. Una traición
que nadie la tomó seriamente…
Laura: Me imagino. Lo habrá querido matar.
Pancho: Cuando me desperté ya habían pasado tres días. Yo preguntaba por
Matilde… imaginate… que no la tenía conmigo desde mis doce años Me costó
mucho recuperarme. Pero yo soy como el ave Félix que resurge entre las cenizas.
¿Te conté de Matilde no?…
Laura: Siga con esto Don Pancho
Pancho: Quiero decir que juré vengarme. La fatalidad quiso que Miguelito Antaño,
mi mentor, se nos fuera de este mundo unos meses después del fatídico
Knockout, una tardecita entrenando conmigo en el gimnasio, mientras se planeaba
mi vuelta. Todavía me acuerdo de ese momento…. Ni el tordo Mosca con toda su
sabiduría lo pudo salvar. Se nos murió entre las manos…
Laura: ¿Estaba enfermo?
Pancho: Una fatalidad… había terminado de hacer guantes. Cuestión que cuando
Miguelito fue a entrar al cuadrilátero, voleó la pata para pasar la soga, con tanta
mala leche que se enganchó, se pialó, y fue a dar con todo el peso del cuerpo al
piso y la cabeza castigó con el canto de la escalerita… quedó ahí… hicimos lo que
pudimos…. El tordo le practicó todas las maniobras… le levantó los brazos… lo
sentó…le enderezó la lengua. Pobre Miguel, que final indigno. Cuando lo subieron
a la camilla para llevarlo, dentro de su puño cerrado, … un bombón de licor (Llora)
por eso cada vez que como uno…. Se me aparece él
Laura: Y si le revive tanto recuerdo triste no le traigo más…
Pancho: (Se sobrepone) Traiga hija, usted traiga… yo me arreglo. Pero lo que
más me duele de todo es la venganza que le prometí sobre el lecho de muerte a
Miguelito. Yo lo tengo que volver a ver
Laura: ¿A Miguelito?
Pancho: Al tordo Mosca…. Un tipo….
Laura: ¿Falleció?
Pancho: ¿Quién?
Laura: Y el tordo Mosca ¿Quién va a ser?
Pancho: ¿No me lo conseguís?
Laura: ¿A quién?
Pancho: ¡Al tordo! ¿Vos sos tonta?
Laura: ¿Querés pedirle fecha nueva para pelear con la tartamuda? Jaja
Pancho: ¡Pero no! ¡No! ¡No me enquilombes más! Al tordo…. mi amigo
entrañable. Ojalá pudiera volver a tener una oportunidad con él.
Laura: ¿Y para que lo quiere? Usted lo bardeó cuando le fue a contar que se
había enamorado de la chilena esa. Primero lo bardea y después lo busca
Pancho: Vos no hagas juicios. Te pido que me lo ubiques nomás
Laura: ¿Pero y el tordo Mosca este tiene Facebook o alguna red? (Pancho se la
queda mirando) Deje deje… hay una página de amigos del boxeo… por ahí
aparece ahí (Busca en su teléfono) Como Mosca nada che… Tíreme más data
amigo… Mire acá hay un Walter… ¿no será la tartamuda no? Ah no… es mina…
Pamela Romina Walter, de Tucumán ¿De Tucumán? ¿La Tartamuda, el que lo
primerió a usted no era de Tucumán? (Sigue buscando) ¿No le digo? Es hija de la
Tartamuda… acá dice… y es campeona provincial… ja… Lo que son las
coincidencias… pero del tordo Mosca ni noticias…
Pancho: Se ve que a la Tartamuda sí dejó una semilla y le germinó … hasta en
vos germinó según me contás… en cambio, a mi hijo le germinó el remis, que en
realidad ya estaba germinado por mí... el agarro la plantita crecida, y ahora se
quiere ahorrar el terrible obstáculo de discutir con los muchachos del sindicato en
la agencia, destino esquivo el mío. Vos sabés que me parece que el acta esa que
quiere mi hijo está en… ay… no no…. Ya me voy a acordar…. Bueno yo te aviso,
lo mismo vos si lo llegaras a ubicar al Tordo
Laura: ¿Me está extorsionando suegro? ¿Feo eso eh?
Pancho: Yo no extorsiono querida. Favor por favor. Vos tráeme al Tordo y yo me
pongo a pensar donde mierda está esa acta. Y ahora sí. Andá, que tengo que
tomar la sopita de verduras y comer el pollo hervido sin piel, al que me confinó tu
novio.
Laura: No sea injusto hombre. Que acá lo atienden a cuerpo de rey. Son divinas.
Déjese querer y déjese atender, que no es tan malo recibir un mimito de vez en
cuando
Pancho: Claro… el comando de pelotudas liderado por Beba y Sunny, ahora son
mimosas… ojalá fueran mimosas jajajaja
Laura: Bue… listo. Se completó lo que le faltaba. Ahora se me pone viejo verde.
Pancho: Andá, decile a mi hijo que voy a pensar lo del acta… mientras vos me lo
buscás y me lo traes al Tordo… algo bueno va a salir de todo esto
Laura: Me voy al gimnasio. No le prometo nada… yo acá vengo a escribir su
historia. No me meta en más quilombo que me sobra
Pancho: Y eso es lo que vas a hacer. Escribir la historia. Andá… y no te olvides
de traerme Bombones… que esos son los mimos que necesito

Apagón
II – BOLOQUITO
Entra Laura, inmediatamente lo hace entrar al Tordo Mosca. Es un viejo de unos
80 años “salido de un cuento” pantalones de tiro alto, camisa de manga corta,
tiradores, gorra pichonera con visera, anteojos ahumados, y aún le faltan los dos
dientes que le arrancó “el gordo Coluchi” en aquella pelea. Los dientes faltantes y
algún mal de nacimiento no le permiten pronunciar la letra “R” con facilidad.

Laura: Usted se me queda acá. Es muy importante para él (El tordo no se

muestra muy convencido y por el contrario está fastidioso) Arréglese hombre…
¿Es un amigo que no ve desde hace cuánto? Parece mentira … Me espera
paradito acá… ¿Estamos?
Boloquito: Veinte minutos
Laura: Ya me dijo. Si (Sale buscándolo) ¡Beba! ¿No me lo presta a Don Pancho?
(Mientras espera Boloquito, queda por unos segundos en modo estatua y luego
tímidamente se acerca al dispenser de agua e intenta infructuosamente descubrir
cómo funciona. Entra Laura acompañada de Don Pancho. Lo lleva hasta quedar
enfrente los dos. Le saca el saco de lana como para que esté más cómodo y lo
cuelga del perchero)
Laura: Bueno señores, aquí están frente a frente… nada de golpes bajos y
cuando yo digo break inmediatamente sueltan. En la campana cada uno a su
rincón. Usted Boloquito y usted Don Pancho…
Pancho: (Risa) ¿Bo lo quito?
Laura: Si si… Boloquito le dicen así en la plaza
Boloquito: ¿Algún Problema?
Pancho: Naa…ja ja (A Laura) ¿Me trajiste bombones?
Laura: Tome Don Pancho (Le entrega los dos bombones de licor)
Pancho: (Inmediatamente come el primero y deja el otro sobre la mesita)
¿Boloquito te dicen, Tordo?
Boloquito: Yo no soy Tordo…
Pancho: (Lo Observa. Lo escanea) Estás intacto
Boloquito: Vos no (Pausa. No hay respuesta) ¿Qué querés?
Pancho: Pasaron Muchos años Tordo.
Boloquito: Último aviso. No soy tordo… nunca fui tordo. Te deben quedar tres
meses de vida, y querés irte con las cuentas pagas. Yo te perdono. ¿Listo? ¿Era
eso?
Pancho: No
Boloquito: Entonces necesitas guita. Conmigo estás muerto… yo necesité guita
toda mi vida y la sigo necesitando
Pancho: ¿Seguís enamorado de la mina esta chilena?
Boloquito: Andate vos, a la puta que te parió
Pancho: ¿Qué tendrá que ver Matilde en todo esto digo yo?
Laura: ¡Break! (Pausa)
Pancho: Listo. ¿Ahora estamos a mano? Volvemos al ruedo papá… vos y yo
Boloquito: Notición vuelve “El santo” Nacaratti. El hombre record que besó la lona
a los 2 segundos de haber sonado la campana. Vuelve a batir su propio record
(Risa) pero para batirlo, deberá arrancar ya desmayado en el piso como cuando
los autos arrancan desde boxes, vos arrancas desde el suelo
Pancho: (Redobla la apuesta) Vuelve el “Santo” Nacaratti ¡Con la preparación del
pololo de Cecilia Bolocco! Que ha decidido poner pausa en su apasionado
romance con la chilena, otrora miss universo, para volver a su primer amor. El
boxeo profesional que hoy festeja la vuelta del apodado “Boloquito”
Boloquito: ¿Me tomás el pelo? (Lo encara para pelear) ¡te voy a matar a palos!
(Insultos mutuos)
Laura: ¡break! ¡Campana señores ¡A sus rincones caballeros! ¡Parece mentira,
gente grande! ¡Pancho, para eso tanto quilombo de que lo traiga al tordo Mosca, o
boloquito o como mierda se llame! Ya la cagó una vez y lo rajó a puteadas. Ahora
me extorsiona y me usa a mí para volver a traerlo… usted sabe el bardo que se
me armó con su hijo con todo este delirio
Pancho: ¡¡¡Yo ya no tengo hijo!!! ¡¡¡Mi hijo me metió acá adentro y se quedó con
mi agencia!!! Y para mí eso ya es suficiente
Laura: Bueno entonces le cuento que esa persona que para usted no es más su
hijo, fue quien fue a buscar a Boloquito y lo convenció de que venga a pasar la
tarde acá
Boloquito: Mil quinientos mangos por veinte minutos. Y quedan siete, asique me
voy yendo
Pancho: ¿Le cobraste hijo de puta? ¿A mi propio hijo?
Laura: ¡¡¡Basta carajo!!! ¡¡¡Basta los dos!!! Boloquito no me tires más de la cuerda
porque me voy a terminar calentando yo. Hablen como dos personas civilizadas…
peor que los chicos che
Pancho: Tengo una sola oportunidad para vengar lo de la pelea en Tucumán…y
te necesito Tordo
Boloquito: No soy tordo
Pancho: Bueno… Boloquito Escuchame lo que te cuento. La tartamuda tiene una
Hija… La Pamela… y es campeona provincial súper gallo … 118 libras…. 52 kilos
y estaba buscando retadora. ¿Vos cuánto pesás nena?
Laura: (Sorprendida) ¿Eh?
Pancho: ¿En cuánto andás? … debes andar por ahí… sos súper gallo de acá a la
China. Te necesitamos Boloquito y yo
Boloquito: ¿Necesitamos?
Laura: Panchuli… disculpe, pero otro era el trato… Todo bien con sus delirios,
pero yo acá estoy para escribir sus memorias. Si le di bola con esto es porque
pensé que estaba bueno que pueda volver a reencontrarse con un amigo. Ahora
ya está, ya lo vio y aproveche el tiempo en recuperar lo que perdieron los dos por
una boludez de hace 20 años.
Boloquito: Yo no tengo amigos y no quiero recuperar una mierda. Recuperar es
volver atrás, y atrás no se vuelve. Lo único que quiero es mi Luca y media y
volver a la plaza antes que abra la calesita para vender pochoclos.
Pancho: Y quien quiere volver atrás… parecen boludos los dos. Yo con mi déficit
cognitivo lo veo todo claro y a ustedes dos: cuerdos de mierda ¿No se les cae ni
una idea? Lo que yo les vengo a plantear es que la piba esta ¿Cómo es que te
llamabas?
Laura: Laura
Pancho: Que la piba esta, Laura pelee por el título con la hija de la tartamuda. Yo
estoy seguro sin conocerla a la Carmela esa
Laura: Pamela
Pancho: Pamela o como se llame ¡¡No me corrijan más!! ¡¡Que me equivoco por
mi diagnóstico!! esta nena le hace morder el polvo. Mostrale al Tordo lo que sabes
hacer
Boloquito: (Se enoja mucho y saca un tramontina) ¡Yo no soy tordo y la puta que
te parió! (Todo se desmadra. Se enfrentan con Pancho en una pelea de
amenazas físicas sin contacto alguno. Casi coreográfica)
Pancho: ¿Qué me vas a cortar con eso, cara de papa?
Boloquito: ¿Querés probar si corta esto? ¡Vení si sos tan guapo! (No se acercan.
Todo es a distancia)
Pancho: ¿Qué te haces el cuchillero conmigo…? bien que al Gordo Coluchi le
atajaste las trompadas con la trompa, que te dejo la jeta como un nicho.
Boloquito: Claro por qué vos a la Tartamuda se la atajaste con la frente. Gordo
mascarita
Laura: ¡¡¡Basta los dos!!! ¡O me caliento yo! y no les conviene. Les juro que no les
conviene. ¿Pancho usted está loco o que mierda le pasa? ¡¡No lo puedo creer!!
Pancho: Deterioro Cognitivo. Eso le dijo el Doctor Lombardo a Walter…
Boloquito: Desde se la pegó la Tartamuda, quedó deteriorado éste
Laura: ¡¡¡Qué deterioro ni deterioro!!! ¿De qué me estás hablando? Yo no peleo
con nadie… yo acá vengo para su autobiografía. Que yo haya accedido a
conseguirle a su amigo es porque…
Boloquito: Momentito que yo no soy una cosa para que me anden consiguiendo.
Yo tengo mis principios
Pancho: Si. Mil quinientos pesos
Laura: Y yo también ¿Qué es esto? ¿Sabes porque accedí y conseguí a tu amigo
que vos te encargaste de perder?
Pancho: No me digas nada. Porque mi hijo es tan pelotudo, que no tiene las
pelotas necesarias como para venir él, a buscar un papel para conservar un sueño
que alguna vez fue ajeno, se lo apropió, y lo tiene como si fuera de él. ¿Quiere el
papelito para que no lo coman vivo los muchachos del sindicato? (Mete la mano
en el bolsillo y saca un papel que hace un bollo y se lo da a Laura) ¡Llévaselo!! Y
no vuelvas más. Te lo pido por favor. Yo al menos tenía un sueño que ya cumplí…
ver al viejo tarambana este, y darme cuenta que sigue tan mal arriado como
siempre. Que nada ha cambiado. Viejo macaco y más loco que un plumero. El otro
sueño me lo pusiste vos cuando me nombraste a la hija de la metralleta
Boloquito: Tartamuda
Pancho: Si si, el de la Candela esa
Laura: Pamela
Pancho: ¡¡Cómo carajo sea!! ¡Y no me mires con carita de que soy un pobre viejo
loco y tarado que no sabe lo que dice!! Te lo pedí el otro día por favor. Mandame a
la mierda si querés, pero no soy ningún pobre tipo para que te compadezcas. El
otro sueño me lo metiste vos en la cabeza cuando me dijiste que la hija de la
tartamuda era campeona provincial. Pero me equivoqué, porque vos andas con un
sueño prestado. Te lo prestó mi hijo, y ni siquiera era de él. Te iba a transformar
en campeona… y ahí cumplíamos con la promesa que le hicimos a Miguelito. O ya
te olvidaste… Cambiaste de nombre, pero las promesas deberían haber
sobrevivido al cambio de identidad…. Boloquito. Yo pensaba que todos teníamos
algún sueño… y me imaginé, al pedo, que podía hacerlos coincidir. Una especie
de… Sueños compartidos (Pausa. A Laura) Me voy a la mierda… (Desaparece)
(Quedan Laura y Boloquito. Parados frente a frente. Inmóviles, Laura recoge su
mochilita. Mira el papel arrugado que le dio Pancho, lo guarda en el bolsillo de la
mochila y saca otros dos bombones de Licor que se los deja a pancho en el
bolsillo del saco que se olvidó en el perchero colgado)
Laura: (Le da el dinero a Boloquito) … Ya está... Piró Pancho, ya se le va a pasar.
Ahora lo agarran Beba y Sunny y lo calman. Hoy lo dejan hasta más tarde… les
pedí que lo dejen ver un programa que le gusta… ya se va a calmar. Lo
Acompaño a la parada del bondi y lo deja en la plaza al lado de la calesita.
Moviendo viejito… vamos
Boloquito: ¿Vos boxeas pendeja?
Laura: No… que va… entreno… guanteo
Boloquito: Ya me parecía. Estás muy buena…
Laura: ¿Qué me está diciendo?
Boloquito: Eso… que este re buena… ¿Me expreso mal yo? ¿No se me
entiende?
Laura: No si… se le entiende. Lo que no entiendo es…
Boloquito: que no tenés cara de boxeadora. Los que pelean tienen otra postura…
que se yo. Ahí tenés a mi mujer, la Chechu también es preciosa. Vos no me lo vas
a creer, pero a mí me chupa un huevo. Ella fue Miss mundo ¿Sabés? Y bueno,
con esa belleza, tampoco podría haber boxeado
Laura: ¿Su… mujer?
Boloquito: Efectivamente, se ve que no se me entiende. ¿Bueno y a ver qué
sabes hacer?
Laura: ¿Qué se hacer de qué?
Boloquito: Uh la puta madre. Te contagiaste el deterioro cognitivo del Pancho.
Del entrenamiento, de que va a ser… mostrame algo…. Qué se yo. Soga,
guantes, desplazamientos laterales. Te quiero ver castigar retrocediendo
Laura: Déjese de joder viejo. Que de acá me voy a entrenamiento a las 4 y
media… mire que le voy a… aparte no tiene nada que ver
Boloquito: Ya son cinco y cuarto… no llegas ni a place. En vez de perder el día,
entrená acá… Me imagino que trajiste ropa de entrenamiento… cámbiate en el
bañito, que demasiado tengo con mi mujer como para tener que atenderte a vos
Laura: ¡Pero que no le digo! ¿Qué se cree que estoy de oferta yo? Yo ya expliqué
que no boxeo. Que entreno nomás
Boloquito: Por eso… ¿Yo te pedí que boxearas? Yo no te pedí eso Yo te pedí
que entrenaras ¿Y vos que me estás diciendo qué boxeas?
Laura: No.… yo
Boloquito: Perfecto. Vos entrenas y Boloquito te pide que entrenes. A veces no
me doy cuenta que la gente no tiene sentido común. Te digo una cosa y me
contestas otra. Y eso que tengo cuarto grado
Laura: Yo no sé para qué mierda me meto con estos dos… Si yo estaba bien…
¿Quién mierda me mandó a mí?
(Laura dudando toma su mochila y se va al bañito contiguo a cambiarse. Mientras
tanto Boloquito corre algunas cosas y deja un espacio libre en el centro de la sala.
De pasada mira el dispenser con recelo, no se anima a sacar agua. Entra Laura.
Shorts y corpiño deportivo de Lycra. Descalza)
Laura: Esto está mal Boloquito. Nos van a echar a la mierda. Esto es un geriátrico
Boloquito: ¿Y? si nos echan nos vamos… ¿Cuál es el problema? La gente se
preocupa por boludeces. ¿Tenés soga? Empezate a mover un poco
(Laura se empieza a mover y a saltar la soga. Mientras Boloquito sigue dándole
indicaciones)
Laura: ¿Qué se pensaba? Jaja
Boloquito: Dale pendeja movete, que saltar salta cualquier gil. Esto es para entrar
en calor. Boxear es otra cosa. Para pelear tenés que tener bronca, aparte de saltar
y tener buen lomo. El viejo Pancho, así como lo ves era un toro. Se rompía el culo
en los entrenamientos, pero aparte quería matar al resto de la humanidad. Una
historia de mierda… por eso su sed de revancha…. Seguí nena, seguí. Estás
aflojando… eso es lo que pasa, cuando tratas con minas que están muy buenas…
se creen que con eso alcanza… a mí con Ceci me cuesta mucho, pero ya no le
digo más nada. Ya es grande… se le pasó el berretín de modelo. Han tenido todo
servido, y aparte está buena… como vos, entonces
Laura: (Para en seco) Ahhh pare un poco amigo. ¿Qué se cree que soy?
Boloquito: Bueno dale. Por fin un poquito de bronca. Seguí entrenando que
nadie te pidió que pares. Vamos con desplazamientos laterales, gancho y directo.
Vuelta y lo mismo para el otro lado.
(Laura comienza con el nuevo ejercicio)
Boloquito: Para triunfar en esto tenés que tener hambre. Y si tenés resentimiento,
mucho mejor nena. ¿Porque te crees que Pancho arrancó a pelear? Él tiene una
historia de mierda. Le mataron a la vieja de pendejo…
Laura: (Se para en seco) ¡Epa! Epa ¿Cómo le mataron a la madre...? ¿A Matilde?
Boloquito: ¿Y vos no le estás escribiendo su historia?
Laura: No, qué se yo. No me alcanzó a contar
Boloquito: Y cómo vas a escribir una historia sin la semilla que generó todo. A la
verdadera madre, digamos la que lo parió, “La murió” misteriosamente el propio
papá… en realidad nunca se supo, pero todo se sabe viste… y después este viejo
crápula se fue a la mierda y lo dejó a Pancho con una amante que tenía. La
Matilde famosa. El Pancho se quedó sin mamá y con la ex amante de su papá,
que no apareció nunca más…... Pancho a los 13 años ya andaba solo por la
vida… Menos mal que arrancó a boxear. Hay veces que es la única manera de no
mandarte alguna cagada… ¡¡No parés nena!! ¡¡No pares!! O entrenas o no
entrenas… acá no te podés quedar en el medio…
Laura: Pero ¿cómo que mató a la madre?
Boloquito: Yo no sé. Preguntale a él. No hablo de cosas privadas…. Ahí tenés
toda su bronca y su sed
Laura: ¿Y su bronca Boloquito?
Boloquito: A mí me salvó el amor…me salvó Cecilia… yo agarré para ese lado.
Pero yo también tenía bronca antes de enamorarme. Yo nací de un repollo como
en los cuentos, ni mamá, ni papá, ni una mierda. pero ahora con la Cheche no me
falta nada. Le vamos a sacar el título a esa Pamela… vos vas a ir por ese cinturón
Laura: (Frena en seco) ¿Qué está diciendo hombre? ¿Están todos locos acá?
¡¡ No peleo!! ¿No me entienden lo que les digo? ¡¡Yo no boxeo!! Yo solo entreno
porque se dio así, pero nunca pelee con nadie. ¡¡Loco!! ¡Que me miras! ¡Ya abrió
la calesita! Vamos que te llevo (Pausa. Nada. Boloquito inmóvil la mira) ¡Ma sí!
Arréglense.
(Se Va. Boloquito queda solo y se dispone a irse. De pasada por la mesita mira el
bombón de licor que Laura había dejado y se lo guarda en el bolsillo. Asoma
Pancho e interrumpe su salida)
Pancho: Dejá ese bombón… Boloquito, que no vale la pena terminar así. Encima
… que le cobraste a mi propio hijo, …. Sangre de mi sangre ¡Miserable!
Boloquito: ¿Ahora es tu hijo? Hace un rato era una rata. Llamalo “Locro” cesante.
Mira quien habla de miserable ¡Te cagas en un bombón y el miserable soy yo! Acá
tenés tu bombón… si fuiste capaz de abrirle la mano a un muerto…
Pancho: ¿Qué? ¿De qué hablas?
Boloquito: ¡De qué hablo? Sabés muy bien de que hablo. Le abriste la mano a
Miguelito en la camilla, muerto para afanarle el bombón todo apretado y hecho
mierda
Pancho: ¿Ves que hablás pelotudeces? El bombón era mío. Era mi premio… me
lo iba a dar. Y si tan cagador y sorete he sido con vos, y con mi hijo, con esa
pendeja y con Miguelito y con todo el puto mundo que me rodea, cazá el mono y
metele por la vía, vos, la pendeja, mi hijo y todos. Volvete con tus pochoclos y con
tu amor incondicional y no vuelvas más… nunca más.
(Pausa. Boloquito se come el bombón)
Boloquito: Ahora si estás listo carajo…. Esa es la bronca que necesitás, para
cumplir la promesa que le hicimos a Miguelito. Así si estoy con vos…. La pendeja
va a pelear… ella es dinamita… falta que le encendamos la mecha. Y me acabas
de mostrar que todavía tenés fuego
Pancho: Me debes un bombón. Y te lo voy a cobrar
Boloquito: Te dejé dos bombones en tu saco, en el bolsillo ahí colgado
Pancho: (Dubitativo revisa el bolsillo del saco y encuentra los dos bombones) Sos
un fenómeno…. Tenemos que prepararnos para la pelea. Nuestra revancha está
más cerca
Boloquito: Vos ocúpate de conseguir guita. No sé de donde… pedile a tu hijo así
se redime de la chanchada que te hizo con la remisería. Y anda viendo cómo vas
a hacer para salir de acá. Del resto me ocupo yo (Se va)
Pancho: Esperá… a dónde vas
Boloquito: Y a la plaza… tengo una vida… y a mí casa con mi mujer… cuando
tenga noticias vuelvo
Pancho: ¿Y yo? ¿Qué hago?
Boloquito: Tus cosas… y yo las mías… nos vemos

Apagón
III – Pata Floja
Boloquito intenta infructuosamente servirse agua del dispenser. Pancho se ejercita
en la bicicleta fija. Están juntos desde hace más de media hora aguardando la
llegada de Laura. Boloquito se enoja con el dispenser y le pega una cachetada al
botellón

Boloquito: Porque mierda no ponen canillas y mangueras

Pancho: Tenés que tocar la palanquita esa para arriba
Boloquito: ¡Ya toqué! ¡Y la sigo tocando! ¡No me tratés de boludo!
Pancho: No hace falta
Boloquito: Ma… si… ¡Hijos de puta los que inventaron este alambique del orto!
Pancho: ¡Es un dispenser, no te podés calentar así!
Boloquito: ¡Y vos! ¡En una bicicleta que no te lleva a ningún lado! ¡Vamos a lo
que nos interesa! Repetime por favor… el itinerario
Pancho: ¿Otra vez? Ya te lo dije como quince veces
Boloquito: ¡Sí! ¡Otra vez! ¡Que no quede nada librado al azar!
Pancho: 24 de noviembre 21 hs - Lugar: Ciudad de Yerba Buena, Tucumán…
Concentramos en la Hostería Aconquija… y nos dan un gimnasio a nuestra
disposición… nosotros nos hacemos cargo de la comida. Que más querés saber.
Mirá… (Saca un afiche de la pelea. Lo coloca a la vista en la pared) ¡¡Mirá lo que
me llegó!!!... “Pamela “mate amargo” Walter vs Laura “La bonita” Calamante. Un
fenómeno. Me llegó con el contrato que tenemos que firmar los tres. Igual hay
cosas que organizar… hay que llevar un médico por ejemplo… antes yo te ponía a
vos de tordo, pero ahora hasta matrícula piden.
Boloquito: Hay ratos que yo no la veo convencida a la nena
Pancho: Pero que decís, la nena ya está. Faltan boludeces. Pero tengo un plan
que si sale… agarrate
Boloquito: Yo guita no pongo más... vengo como 350 pesos abajo con todo esto
de la pelea, y aparte me costó mucho formar una familia. ¿Viste como es Cecilia?
Es buena, pero ni se acerca a la plaza a ayudar con los pochoclos. Lo que pasa
que yo la he acostumbrado a…
Pancho: ¿Qué hora es?
Boloquito: Las cuatro. Cuatro y cuarto venía, quédate tranquilo.
Pancho: Íbamos a arrancar cuatro y cuarto, porque entre que llega, me da los
bombones, desensilla, se cambia y boludea un rato, se hacen como las cuatro y
media
Boloquito: La ansiedad es aliada del fracaso. No hay que sacar los pochoclos
crudos, ni pasados. Todo a su debido tiempo. Siempre fuiste un atolondrado y así
nos fue. Ahora mando yo
Pancho: Jaja ¿Cómo?
Boloquito: Bue… pará… cosas en claro. ¿Quién concertó la pelea? ¿Quién
convenció a la pendeja? (Pausa) ¿Quién puso en juego a su matrimonio? ¿Quién
la estuvo entrenando afuera?
Pancho: ¡Con mis directivas carajo! ¿O estoy pintado yo acá?
Boloquito: No. Pintado no. Apenas dibujado. Vos lo que tenés que hacer, es lo
que tenés que hacer. Y yo lo que tengo que hacer, es lo que tengo que hacer. Lo
que tenés que hacer vos, no es lo que tengo que hacer yo. Y vos estas
permanentemente metiéndote en lo que yo hago, y no haces lo que tenés que
hacer. ¿Vos vendes pochoclos? No señor (Comienza a agarrar vuelo y casi es
una proclama) ¿Yo trato de sacar guita de la remisería, para la pelea? ¡No señor!
¿Vos estás en el parque todas las mañanas de helada, con la pendeja haciéndola
correr en las escaleras del balneario? ¡No señor! ¿Yo estoy acá planificando como
salir para viajar sin que te metan preso? No Señor. ¡Yo no hago eso, porque lo
hacés vos! ¡Y vos no haces esto, porque lo hago yo! Cada uno a sus cosas.
Ahora, la pregunta del millón: Yo estoy comprometido (Se envalentona). ¿Y vos?
… Este proyecto es una mesa con tres patas. Ya de movida nació enclenque. La
cuarta pata… (Mano al pecho) nuestro querido y recordado Miguelito Antaño. Pero
puestas las tres patas que quedan en el punto en el que deben estar, la mesa
debería sostenerse sola… en un equilibrio… precario si se quiere… pero con
actitud y de pie. Ahora, la pregunta del millón…
Pancho: Ya la habías hecho
Boloquito: ¡Bueno, del millón doscientos! Qué pasa si en esa mesa, hay una pata
floja…
Pancho: ¿Pata floja de qué? ¿Me estás acusando de pata floja vos a mí?
¡Zoquete! ¿Cómo que no sabes si está convencida? ¡Ella debería ser una fiera
enjaulada lista para que le abramos la puerta y salga a comerle el hígado a la
gorda esa!
Boloquito: ¿Y por casa? ¡Vos sos la bestia que tiene que saber si puede salir de
su jaula, no ella! ¡Preocúpate por vos, que estas acá como un viejo choto tomando
sopa! ¡A ocho días de la pelea! ¡Pata floja!
Pancho: A mí no me carajees.
Boloquito: Es que vos tenés que hacer tu parte. Activá Pancho… porque a mí
nadie me hace mover al pedo.
Pancho: ¡La pelea se hace! Confía en mí. Se consigue la guita, yo me voy de acá
y la pendeja noquea a la hija de la Tartamuda. Patas flojas tenemos todos. A vos
hay que tenerte la vela con eso que decís de que estas con…
Boloquito: ¿Con quién? Decile, anímate y espera el vuelto
(Los dos se paran distantes y desafiantes. Ninguno emite palabras, inmóviles)
Pancho: ¡Al primer paso que das, te siento de ojete!
(Aparece de golpe Laura)
Laura: Muchachos… (Pausa. Misterio Le da los bombones a Pancho) ¿Otra vez
peleando entre ustedes? ¿No son amigos?
Boloquito: ¡Éramos! Pasado plus perfecto, querida
Laura: ¡Basta! ¡Parecen pavotes! Vengo con la noticia del año, y ustedes se
detienen en cosas que no le importa a nadie Señores: (Suspenso) ¡Habemus
cash!
Pancho: ¿Qué qué?
Laura: ¡Que la guita para la pelea está! ¡Y más de la que necesitábamos!
(Momento de extrema emoción. Se abrazan los tres, gritan y festejan. En el
forcejeo desaparece un bombón y Pancho se da cuenta)
Pancho: ¡¡Devolveme el bombón viejo malhechor! (Se lo quita) ¿Apareció la
guita? Yo sabía que al final la sangre iba a tirar. Las cosas de a poco se
acomodan. Soy su padre, fui su madre. Ahora falta que le diga al Dr. Lombardo,
que me firme el alta. Yo sabía que el cielo se iba a ir abriendo.
Laura: Si. no… igual lo importante ahora es que la pelea se hace, y que, si le
metemos toda esta semana para entrenar, voy a volver con el cinturón. Miren con
parte de la guita me compre la pilcha… ¿Quieren que me la pruebe? ¿Nos
sacamos una foto los tres? Esperen (Sale a cambiarse)
Pancho: Yo no me voy a sacar una foto acá… yo quiero una foto en el gimnasio
Boloquito: ¡No hay gimnasio!... de que gimnasio me hablás
Pancho: Bueno… en la remisería … ya que auspicia…
Boloquito: Aparte hay que bordarle el logo a la bata… Remisería el Santo, y en
los pantaloncitos, Pochoclos “La Bolocco”
Pancho: ¿Cómo le vas a poner Pochoclos “La Bolocco” a la piba en los
pantalones? ¿Vos querés que se le rían desde que llega a Tucumán hasta que se
vuelva?
Boloquito: Al que todavía se le siguen riendo es a vos ¡Si ni tiempo le diste al
hombre de la campana! Que te haces el superado conmigo ¿Quién te crees que
sos? ¿Jean Paul Belmondo? ¡Ahhh no, porque remisería el santo es re canchero!
Menos glamour que lechuga en un florero. Yo llevo 350 pesos para atrás, lo único
que pido es canjearla por publicidad
Pancho: ¿350 pesos? ¡Laucha de cañería! ¿En qué país vivís? ¿Qué querés
publicitar con tres violetas?
Boloquito: Y bueno, dame la guita entonces.
Pancho: Yo no ando con contante y sonante acá adentro, pero anótalo y te doy. A
mí no me corres con un cuatro de copas
Boloquito: Anotalo si… anótalo. Me cago en cuatrocientos pesos, pero no me
vengas a correr vos a mí…
Pancho: Trecientos cincuenta
Boloquito: ¿Qué?
Pancho: Nada que no sabes ni lo que decís… y después el deteriorado soy yo.
Dijiste trecientos cincuenta pesos, y ahora decís cuatrocientos
Boloquito: ¿Y?
Pancho: Que eran trecientos cincuenta pesos, y vos viejo ventajero cada vez que
hablas le agregas más a la cuenta
Boloquito: ¿Y mi tiempo? ¿Y el “locro cesante”?
Pancho: ¡Viejo rata! ¡Delincuente! ¡Crápula!
Boloquito: ¿A quién le decís rata?
(Nuevamente se colocan en posición de pela ficticia con amagues desde lejos)
Boloquito: ¡Que te voy a sacar si sos un pobre jubilado!
Pancho: ¡Ahhh porque vos no!
Boloquito: ¡Yo tengo mi negocio, mi mujer! ¡Tengo una vida!
(Aparece Laura con una bata y capucha tornasolada y brillante, guantes de boxeo
y se para entre los dos en silencio y desafiante, como posando para una película
de cine. Pausa. Pancho y boloquito se paralizan. Luego se abrazan y comienzan a
cantar ¡Dale Campeón! Como si nunca hubiesen discutido. Se esfuman las luces,
suena música de fondo y bullicio de público. Todo se transforma en un lugar de
ensueño. Suena la típica voz de presentador de veladas boxísticas. Mientras
tanto, en esa ensoñación, Boloquito y Pancho acompañan a Laura mientras
realiza movimientos pre competitivos)
VOZ EN OFF: Ahora si amigos de boxeo de primera, 24 de noviembre de 2019,
siendo las 21 hs bienvenidos a este show pugilístico hoy desde la localidad de
yerba buena en nuestro Jardín de la república, la bella Tucumán. ¡Combate
programado a la distancia de diez asaltos, en la división peso gallo de boxeo
femenino! Esquina azul. Originaria de la ciudad de San Miguel de Tucumán,
record oficial Fab de 5 peleas ganadas, una empatada y un Knockout. Registró en
el pesaje oficial el peso de 52 kilos exactos, ¡cinco dos! ¡Aquí presento a la
laboriosa púgil mediterránea! Del barrio “murga” aquí presento a Pamela Romina
“mate amargo” Walter. Y su oponente en la esquina roja perteneciente al Barrio
Las Ranas de la ciudad de Tandil, Capital homónima del partido que lleva su
mismo nombre, record oficial Fab desierto por lo que hoy hará su debut como
profesional, nada menos que por el título: Registró en la báscula 52 kilos y 600
gramos, cinco dos y seiscientos. Aquí presento a la joven debutante de las sierras
tandilenses. Laura “la bonita” Calamante!!!
(Sube nuevamente la música. Laura se saca la bata y saluda a los cuatro
costados como si realmente se encontrara en el ring ante un estadio completo.
Boloquito la lleva a un rincón y la masajea para la pelea imaginaria. Pancho le da
las instrucciones para la batalla a la manera de mensaje motivacional, mientras
que boloquito le pone vaselina en la cara y le da agua en el típico vasito con
sorbete)
Pancho: Nunca habías estado ante tanto público ¿verdad? Eso no importa.
¿Nunca habías estado tan lejos de casa? Eso no importa. Lo que importa es lo
que hagas en el cuadrilátero. Y lo que te lleves a casa. ¿Sabés que es eso? El
orgullo y saber que diste tu máximo, que lo estás haciendo por vos misma. No por
mí, ni por mi bronca, ni por este otro viejo pelotudo. (Registro de Boloquito) ¡Es por
vos! ¡Ahora lo veo en tus ojos! ¡Vas a lograrlo!
(Laura se pone de pie. Toma la posta Boloquito)
Boloquito: Un paso a la vez, un golpe a la vez, un salto a la vez. Un Round a la
vez y ¡Este es tu lugar! ¡Ella no sabe lo que has sufrido! ¡No tiene ni idea de lo que
hemos vivido, ni de que tuvimos que entrenar en la plaza mientras todos dormían!
¡Ni de lo que te tuviste que aguantar con este viejo loco acá encerrado! (Registro
de Pancho)
Pancho: Ella no sabe que sos peligrosa. Tenés que estar segura que vas a ganar.
En la cara de la Carmela
Boloquito: Pamela, no la confundas a la piba
Pancho: ¡Cerrá la jeta! En esa cara, está toda la gente que no creyó en vos, todos
los que te faltaron el respeto, y todo lo que la tuviste que remar con el viejo
zanguango éste. (Fin del clima motivacional)
Boloquito: ¡Me cansaste!
(Vuelven las luces normales y todo el clima vuelve a la normalidad)
Pancho: ¿Y qué te pensaste? ¿Qué te ibas sin el vuelto?
Laura: ¡Basta che! ¡A los dos les digo! ¡Deberíamos estar festejando que la pelea
se hace, que apareció la guita y no hay caso! ¡Como perro y gato! Digo yo… ¿No
pueden focalizar? Ahora tengo mi propia bronca, ahora voy por lo mío… por el
lugar que nadie en mi familia pudo o se animó a ocupar. Y por lo tuyo Boloquito…
por tu decisión de cambiar tu vida desde el amor por esa mujer y por tus
convicciones. Por vos Pancho, que te la bancas de a puñados desde que naciste,
sobreviviendo a todo y a todos…y fundamentalmente porque ustedes son los que
hicieron germinar mi propia bronca. Ahora voy por todo contra ella y contra todo lo
que la tuvimos que pelear los tres. Contra su hijo también Pancho, porque usted
tenía razón. Es un ladrón de sueños y yo no soy de andar con sueños prestados.
Pancho: Por lo menos te habilitó el dinero, que sino…
Laura: ¡Que mierda va a habilitar! No hay más rata, que un ladrón con su botín
¡Renuncié! ¡Le vendí mi parte! ¿Qué me miran así? ¿No querían que me la
juegue?
Boloquito: Yo quiero decir también, visiblemente emocionado, que… condono la
deuda que la organización tenía conmigo… son cuatrocientos cincuenta pesos
más, que ojalá sirvan para …
Laura: tenemos que dar el doble de lo que tenemos muchachos
Boloquito: Yo hasta esos 450 llego…
Laura: Digo de lo que somos. Vengar a Miguelito Antaño, devolverle la paz a Don
Pancho y poner a Boloquito en el lugar que merece en la historia
Boloquito: Lo hago por mí y por Cecilia…. Ella en casa, también pone su granito
de arena bancando mis ausencias…
Pancho: Yo te agradezco nena… Me avergüenza mi hijo
Laura: Desde hoy, una bronca compartida, amigo
Pancho: ¿Y pudieron ver al Lombardo? si mi hijo no fue a ver al Doctor ese, yo
sigo preso acá de por vida…Y ahora con lo que le hiciste vos menos. Me tiene
agarrado de las bolas el muy guacho. Si Lombardo no firma…
Laura: ¡Míreme a los ojos! La vida no es siempre lo que se ve, o lo que nos
quieren hacer ver. No le digo que va a ser fácil, pero de esta… de esta salimos
todos

Apagón

IV – Segundos Afuera
Es el día en el que hay que partir. Boloquito con un bolsito tipo Di porto y buzo de
gimnasia, conversa con Pancho, mientras esperan por Laura. Pancho está
visiblemente movilizado por su imposibilidad de salir de alta para poder viajar.
Cuando comienza la escena, la discusión lleva largo rato en la que Boloquito
intenta calmar a Pancho.

Boloquito: Si te vas a poner así…

Pancho: Y sí ¿Querés que te lo diga? ¡Te lo digo! ¡De frente y manteca te lo digo!.
Se hubieran ido derecho. Yo no estoy acá para dar lástima.
Boloquito: Yo no vine a consolarte, o me viste cara de ayudante terapéutico. Yo,
si estás resentido lo siento mucho, porque yo también tengo lo mío. Yo vine a que
vos, me tires una punta para que esta nena gane la pelea. Porque ese es tu
laburo. ¿Y con que me encuentro? Con un borrego caprichoso, que no lo dejan
salir de la penitencia, y no quiere hacer los deberes. Ahora viene ¿Sabes? Y viene
a buscar tu sabiduría antes de que nos tengamos que ir a Tucumán. Y si ella pelea
pasado mañana, es en gran parte gracias a vos. A pesar de que vos y tu ego
nunca le preguntaron por qué en su familia nunca más se habló de boxeo.
Pancho: Mentira, ella algo me dijo
Boloquito: (Burlón) Algo me dijo, algo me dijo. Mirá que linda la bola que le has
dado, que ni te acordas. El papá de esta piba era asistente de Narváez… que fue
campeón del mundo y lo volteó a un tal Rivas en el…
Pancho: En el Luna… año 2002… Narváez noqueó a Adonis Rivas. Laura tenía
ocho años…
Boloquito: La historia fue bastante comentada… el tipo este, el papá de Laura,
desapareció después de la pelea, esa noche no volvió a su casa… denuncias, de
todo. Pero el tipo no apareció más. Dejó a Laura y su hermanito con la mamá sin
laburo, sin nada. con el tiempo, con los años, alguien dijo que tenía una doble
vida, otra familia, otra casa en otro lugar… eso yo ya no lo sé. Cuestión que en lo
de la nena esta, el boxeo pasó a ser mala palabra desde aquella noche
Pancho: Increíble...
Boloquito: ¿Te das cuenta? No sos el ombligo del mundo, así que si ahora no
podés viajar, o no querés… quien sabe, no tenemos por qué andar todos en
puntas de pie para que no te enojes.
Pancho: ¡No puedo! ¡No tengo el alta! ¿Qué mierda estás insinuando? No tenía ni
idea de lo de la nena. Y ustedes eran los que me tenían que conseguir ese papel
de mierda del alta. Ahora resulta que la culpa de que no me dejen salir es mía
Boloquito: ¿Qué? ¿Y es mía la responsabilidad de que qué estés acá metido?
¿Es de Laurita acaso? Ahora cuando llegue ella, te vas a comportar como un
hombre. Igual que yo con Cecilia
Pancho: Bue
Boloquito: ¿Bue qué? A lo que voy, es que esto es un desafío para vos, y eso no
lo duda nadie. Pero yo tampoco me la llevo gratis, flor de quilombito familiar tengo
ahora y hasta tuve que cerrar un negocio funcionando con el que vivimos muy bien
mi mujer y yo, todos estos años. Porque si la pendeja pierde la pelea, me vuelvo
con una mano atrás y otra adelante a tener que escuchar a la Chechu que me diga
con toda la razón “¡Viste, Viste!
Pancho: No me vuelvas más loco de lo que estoy
Boloquito: ¿Y la piba que renunció y se peleó con tu hijo? ¿De qué se disfraza?
Como si estuviera tan fácil para conseguir laburo ¿De qué va a vivir si me la
sientan de ojete como te sentaron a vos? ¿De la venta de tu autobiografía? Ni que
fuera tan interesante. A vos en cambio no te cambia mucho… vos seguís
tomando sopa de verdura calentito mirando la tele en este hotelito
Pancho: ¡Ahora sí que te la pego!
Boloquito: ¡Qué vas a pegar! ¡Se la hubieras pegado a la metralleta, y no
estaríamos metidos en esta payasada de los sueños y las broncas! ¡Viejo
desorientado!
Pancho: ¡Ahhh ajaja escúchalo vos que tenés tiempo! ¡El tuerto se asusta del
degollado! Yo encerrado acá por el deterioro cognitivo, tomando sopa de verduras
como vos decís, y vos suelto con una chilena inventada ¡¡Tordo Mosca!!
(Los dos en guardia. Pausa incómoda. Boloquito se acomoda y recupera
artificialmente su tranquilidad. Toma su bolsito y se dispone a irse. Con la última
frase de Pancho, todo se acabó)
Boloquito: (Antes de irse, explica tranquilo) Estuve demasiado cuerdo más de la
mitad de mi existencia, viendo la vida tal cual es… ¿Y querés que te diga una
cosa? Me estaba muriendo de tristeza. Así que un buen día, empecé a ver la vida
como debería ser, como a mí me gustaría, y no como es en realidad. En mi
locura, querido amigo, encontré la calma (Se va) ¿A vos te incomoda? ¡Vas a
tener que luchar con eso! Porque yo estoy diez puntos como estoy
(Pancho le corta el paso y le ruega que no se vaya, clamando perdón)
Pancho: ¡Pará! ¡No te vayas! Te lo pido por favor, sos lo único que tengo ¡Te pido
perdón! De rodillas si es necesario, pero no te vayas. Soy un idiota, todo lo que
pasa cerca de mí lo destruyo… no me dejes más solo de lo que estoy
Boloquito: Yo no tendría que haber venido nunca. Sabía que, si venía, ibas a
volver a ponerme en un camino que no quiero volver a caminar, y menos con vos
que me has hecho caminar al pedo como quince años
Pancho: ¡¡Que mierda tengo que hacer para que no se vayan todos de al lado mío
carajo!! Mi vieja, Matilde, la madre de Walter y mi propio hijo. ¿Vos también viejo
te vas a ir? Decime que tengo que hacer
Boloquito: ¡Dejar de dar lástima y aceptarte como sos! Eso para empezar
(Entra Laura de buzo de gimnasia también y con un bolso de viaje. Los encuentra
cara a cara)
Laura: ¿Otra vez? ¿No van a parar no? Tome Don Pancho (Le da dos bombones
y Pancho le da uno a Boloquito) Hubiera jurado que jamás presenciaría semejante
acto en esta vida.
Pancho; A veces, querida Paula, hay que rebotar contra algo más duro que vos,
para poder cambiar de rumbo
Laura: Jaja No pega una Planchuela… No soy Paula… soy
Pancho: No me corrijas…
Laura: Ah, ahora resulta que no lo tengo que corregir. En qué quedamos.
Boloquito: Sigamos viaje nena… No nos pongamos boludos con cuestiones de
despedidas. Cada uno lo que tiene que hacer, es lo que tiene que hacer. Yo lo que
tengo que hacer, es lo que tengo que hacer ¿Se entiende?
(Laura abre su bolso y saca de entre su ropa, otro bolso que le da a Pancho de
prepo)
Laura: Pancho… tome este bolso y meta ropa como para una semana. Nos
vamos de acá. Somos un equipo y el equipo no se rompe. Nos vamos todos o no
va nadie
Pancho: No jodas nena… enserio. Estoy viejo para que me corra la policía
Laura: Que policía ni policía… Me lo fui a ver a Lombardo…
Pancho: ¿El doctor?
Laura: Ahí les dejé el alta a Beba y a Sunny. Nos vamos Don Pancho. Lombardo
nos acompaña…
Boloquito: No no no… momentito dijo Galarza y se le fue el tren a Lobería.
¿Cómo que Lombardo nos acompaña? Ya somos tres y llevo 500 pesos para
atrás. Tenemos un presupuesto digamos, escueto…y si va Lombardo yo la subo
a...
Pancho: Yo Disculpame nena, pero en ese Lombardo no confío…mintió conmigo
con lo del deterioro y junto a tu ex novio me metieron acá adentro
Laura: Miren muchachos, no hay mucho tiempo que perder. Lombardo no es
doctor ni es un carajo. Es un chanta que hizo negocios con su hijo para quedarse
con la agencia. Y parte del trato era ese, hacerse pasar por médico para meterlo a
usted acá adentro y sacarlo del medio.
Pancho: ¡Lo mato! ¡Hijo de Puta! Salgo de acá y lo amasijo
Laura: Tranquilo Viejo. La vida acomodó los tantos. No hace falta
Pancho: ¿Y vos siempre supiste todo?
Laura: Digamos que guardé información y la usé en su debido momento. Sin ese
dato yo no me iba con guita de la agencia… y saber todo esto, nos dio el efectivo
para poder encarar este proyecto a cambio de mi silencio. Y sin esta información
no podíamos viajar tampoco porque por contrato tiene que venir un doctor a
Tucumán así que también le vendí mi silencio a este Lombardo a cambio del alta y
el viaje… si el muy trucho pasó por médico hasta ahora sin que se entere nadie,
que pase una semana más.
Pancho: ¿Pero que soy yo en esta película? ¿Una marioneta? Todo el mundo
hace lo que quiere conmigo. Me inventan enfermedades, me afanan mi negocio,
me internan, me cagan a pedos.
Laura: Y así y todo sos el generador de un sueño que ahora es de todos.
Pancho: Pero ¿cómo que Lombardo no era Médico?
Boloquito: Flojitos de papeles, como falcon de gitano
Laura: Se repite la historia. Ustedes en aquel momento lo llevaron al Tordo
Mosca… como doctor y no pusieron ningún reparo, ni se pusieron colorados. Hoy
va Lombardo, y no se preocupen que su viaje se lo paga él. Parte del trato
Pancho: Armo el bolso en dos minutos…
Boloquito: Yo no voy gente…
(Estupor general)
Pancho: Pero viejo ¡Qué mierda estás diciendo! ¡Una vez que me remango hasta
el culo se me ve! Si ya está todo arreglado ¡No la enquilombes ahora! ¡Dejate de
joder! ¿Otra vez arrancar con todo esto?
Laura: Nos está esperando con el auto en marcha… no se ponga en difícil
Boloquito, que estamos a dos días de la pelea
Boloquito: ¿Y para que me necesitan ahora? lo que tenía que hacer yo, ya lo
hice. Lo que tiene que hacer cada uno de ustedes, ya lo hicieron
Pancho: ¡Terminala con lo que hay que hacer!
Boloquito: Sobro muchachos, seamos prácticos. Chechu y yo hacemos fuerza
desde acá.
Pancho: Pero sos fundamental vos… ¿Quién te dijo que sobras?
Laura: ¡Vamos! ¡Vamos! ¡Déjese de joder hombre! ¡No se haga rogar! ¡Usted
Pancho, ponga la ropa en el bolso que no nos vamos más!
Boloquito: Yo tengo una vida armada, y no la quiero perder para conseguirme
otra. ¿Qué parte no entienden?
Pancho: Subila viejo. Que Cecilia venga con nosotros. Vos no estás completo sin
ella… y te necesitamos, créeme. Más que nunca. Andá a tu casa, avisale y los
pasamos a buscar ¿No Paula?
Laura: Laura…
Boloquito: No sé si va a querer…está alejada de los medios y…
Pancho: Vas a ver que sí… ustedes dos son como… uno solo. Hay que ver la
vida como debería ser… eso me dijeron, casualmente hace un ratito
Boloquito: No te aseguro nada, dame media hora
(Boloquito se va. Se para frente al dispenser. Toma coraje y logra servirse un
vasito de agua. Sale con autosuficiencia. Quedan Pancho y Laura)
Pancho: Me voy a armar el bolso…. Dame cinco minutos. Esperame afuera con el
candidato ese… Lombardo, y después los pasamos a buscar a Boloquito y la
Chechu
Laura: Pero ¿cómo? No entiendo ¿Qué onda con la chilena esta? ¿Era verdad?
Pancho: (Pela un bombón) ¿Y alguna vez lo dudaste? (Se lo mete en la boca y
se va a armar el bolso)
fín