Está en la página 1de 43

Introducción

En vidas pasadas, bajo la influencia de las perturbaciones mentales, acumulamos gran


cantidad de karma negativo, rompimos nuestros compromisos e incurrimos en caídas
morales raíz y secundarias. Como resultado, ahora nos resulta difícil tener fe y convicción
en el Drama y progresar en las etapas del camino hacia la iluminación. Además, si no
purificamos este karma negativo ahora que tenemos la oportunidad de hacerlo,
experimentaremos más sufrimiento en el futuro.

Todos los seres sintientes, incluso los gusanos e insectos, pueden cometer acciones
perjudiciales, pero sólo los seres humanos tienen la capacidad de purificarlas. Hemos
acumulado malas acciones y experimentado sus resultados de sufrimiento desde tiempo sin
principio, pero ahora tenemos la oportunidad de purificarlas por completo. Debemos utilizar
esta preciosa oportunidad para purificar nuestro karma negativo, ¡no para acumular más!.
Puesto que la purificación es la raíz de la felicidad futura y las realizaciones espirituales,
hemos de esforzarnos por limpiar nuestra mente de engaños y karma negativo. Uno de los
mejores métodos para purificar nuestras faltas y caídas morales es el Sutra de la confesión
mahayana, también conocido como Sutra de los tres cúmulos superiores, Confesión del
Bodhisatva y Confesión de las caídas morales del Bodhisatva.
VISUALIZACIÓN:

Visualiza a los treinta y cinco budas. Buda Shakyamuni, como figura central, se visualiza en el
espacio frente a ti y un poco más arriba de tu cabeza. Se sienta en un trono confeccionado con
perlas y sostenido por un elefante. La perla, por su color blanco, simboliza la purificación
completa de las negatividades y el elefante, al ser un animal poderoso, simboliza una purificación
poderosa. Buda se sienta en la postura del vajra con sus hábitos de monje; su mano derecha
adopta el gesto de tocar la tierra, mientras que la izquierda sostiene, sobre su regazo, un bol lleno
de néctar. De su corazón emanan treinta y cuatro rayos de luz, diez hacia arriba, diez hacia abajo y
siete hacia cada lado. En la punta de cada rayo hay un trono de perlas sostenido por un elefante.
Los treinta y cuatro budas restantes están sentados sobre sus tronos en la postura vajra, todos ellos
con el aspecto de monjes.

Conforme recitas la oración, emanan rayos de luz desde los budas que purifican todas las
negatividades de tu cuerpo, palabra y mente. Inmediatamente desaparecen por completo tus
impresiones negativas, igual que se desvanece la oscuridad en una habitación cuando se enciende
la luz. Siente que tu cuerpo y tu mente se vuelven de naturaleza vacía y pura.
Sutra de la confesión mahayana

Namo: Confesión de las caídas morales del Bodhisatva

Mi nombre es . . ., en todo momento me refugio en el Guru, me refugio en Buda, me


refugio en el Dharma, me refugio en la Sangha.

Ante el Maestro, el Ser Bienaventurado, el Tathagata, el Destructor del Enemigo, el Buda


Totalmente Perfecto, el Glorioso Vencedor Shakyamuni, me postro

Ante el Tathagata Subyugador Completo con la Esencia del Vajra, me postro.


Ante el Tathagata Gema de Luz Radiante, me postro.
Ante el Tathagata Poderoso Rey de los Nagas, me postro.
Ante el Tathagata Guía de los Héroes, me postro.
Ante el Tathagata Placer Glorioso, me postro.
Ante el Tathagata Gema de Fuego, me postro.
Ante el Tathagata Gema de Luz Lunar, me postro.
Ante el Tathagata Tesoro de Contemplación, me postro.
Ante el Tathagata Gema Lunar, me postro.
Ante el Tathagata Ser Inmaculado, me postro.
Ante el Tathagata Otorgador de Gloria, me postro.
Ante el Tathagata Ser Puro, me postro.
Ante el Tathagata que Transforma con Pureza, me postro.
Ante el Tathagata Deidad del Agua, me postro.
Ante el Tathagata Dios de las Deidades del Agua, me postro.
Ante el Tathagata Excelencia Gloriosa, me postro.
Ante el Tathagata Sándalo Glorioso, me postro.
Ante el Tathagata Esplendor Ilimitado, me postro.
Ante el Tathagata Luz Gloriosa, me postro.
Ante el Tathagata Ser Glorioso Sin Dolor, me postro.
Ante el Tathagata Hijo sin Ansia, me postro.
Ante el Tathagata Flor Gloriosa, me postro.
Ante el Tathagata que Conoce con Claridad con el Deleite del Resplandor Puro, me postro.
Ante el Tathagata que Conoce con Claridad con el Deleite del Resplandor del Loto, me
postro.
Ante el Tathagata Riqueza Gloriosa, me postro.
Ante el Tathagata Memoria Gloriosa, me postro.
Ante el Tathagata Nombre Glorioso de Gran Fama, me postro.
Ante el Tathagata Rey de la Bandera de la Victoria, Sumo de los Poderosos, me postro.
Ante el Tathagata Ser Glorioso, Subyugador Completo, me postro.
Ante el Tathagata Gran Vencedor en Batalla, me postro.
Ante el Tathagata Ser Glorioso, Subyugador Completo que ha Pasado al Más Allá, me
postro.
Ante el Tathagata Gloriosa Gala que lo Ilumina Todo, me postro.
Ante el Tathagata Gema de Loto, Gran Subyugador, me postro.
Ante el Tathagata Destructor del Enemigo, Buda Totalmente Perfecto, Rey del Monte
Meru Sentado con Firmeza sobre una Gema y un Loto, me postro.

¡Oh!, vosotros y todos los demás, cuantos Tathagatas, Destructores del Enemigo, Budas
Totalmente Perfectos, Seres Bienaventurados haya, habitando y morando en los reinos
mundanos de las diez direcciones, todos vosotros, los Budas, Los Seres Bienaventurados,
por favor, escuchadme.
En esta vida y en todas mis vidas desde el sin principio, en todos los lugares en
donde he renacido al vagar errante en el samsara, he cometido acciones perjudiciales, he
ordenado cometerlas y me he alegrado de que se hubieran cometido. He robado los bienes
y bases de las ofrendas, los bienes de la Sangha y los bienes de las Sanghas de las diez
direcciones, he ordenado robarlos y me he alegrado de que se hubieran robado. He
cometido las cinco acciones atroces sin límite, he ordenado cometerlas y me he alegrado
de que se hubieran cometido. He seguido de lleno los caminos de las diez acciones
perjudiciales, he ordenado seguirlos y me he alegrado de que se hubieran seguido.
Ofuscado por tales obstrucciones kármicas me convertiré en un ser infernal o
renaceré como un animal o acabaré en la tierra de los espíritus ávidos; o renaceré como un
bárbaro en un país sin religión o como un dios de larga vida; o con los sentidos
incompletos, con creencias erróneas o sin la oportunidad de complacer a Buda.
Declaro todas estas obstrucciones kármicas en presencia de los Budas, los seres
Bienaventurados, que se han convertido en la sabiduría excelsa, en los “ojos”, en los
testigos que son válidos, que ven con su sabiduría. Me confieso sin esconder u ocultar
nada y, de ahora en adelante, evitaré tales acciones y me abstendré de cometerlas.
Todos los Budas, los Seres Bienaventurados, por favor, escuchadme. En esta vida y
en todas mis vidas previas desde tiempo sin principio, en todos los lugares donde he
renacido al vagar errante en el samsara, cualquier raíz de virtud que pueda haber en mi
generosidad hacia los demás, incluso al haber dado unas migajas a alguien que haya
renacido como un animal; cualquier raíz de virtud que pueda tener por haber mantenido la
disciplina moral; cualquier raíz de virtud que pueda haber en mis acciones conducentes a
la gran liberación; cualquier raíz de virtud que pueda haber en mis acciones dedicadas a
que los seres sintientes se realicen en plenitud; cualquier raíz de virtud que pueda tener por
generar la mente suprema de la iluminación; y cualquier raíz de virtud que pueda haber en
mi insuperable sabiduría excelsa; todas ellas acumuladas, recogidas y unidas al dedicarlas
por completo al [logro] insuperable, al más elevado, al que es más elevado que el más
elevado, al que supera al insuperable, las destino para la perfecta e insuperable
iluminación completa.
Así como los Budas, los Seres Bienaventurados del pasado, las han dedicado por
completo; así como los Budas, los Seres Bienaventurados que están por venir, las
dedicarán por completo; y así como los Budas, los Seres Bienaventurados que ahora
viven, las dedican por completo, yo también las dedico por completo.
Confieso una por una todas mis acciones perjudiciales. Me regocijo de todos los
méritos. Ruego y suplico a todos los Budas. ¡Que pueda alcanzar la sagrada, suprema e
insuperable sabiduría excelsa!.
Quienes sean los Vencedores, los seres supremos que ahora viven, los del pasado y
asimismo los que están por venir, con un océano de alabanzas sin límite por vuestras
excelentes cualidades, y con las palmas de las manos juntas me acerco a vosotros en busca
de refugio.

Así concluye el Sutra mahayana titulado el Sutra de los tres cúmulos superiores.

Oraciones de la tradición virtuosa

Para que la tradición de Yhe Tsongkhapa,


el Rey del Dharma, pueda florecer,
que todos los obstáculos sean pacificados
y que abunden las condiciones favorables.

Que gracias a las dos acumulaciones, mías y de otros,


reunidas durante los tres tiempos,
pueda la doctrina del Vencedro Losang Dragpa
brillar para siempre.

Oración de nueve versos de migtsema

Tsongkhapa, corona de los eruditos de la Tierra de las Nieves,


eres Buda Shakyamuni y Vajradhara, fuente de todas las realizaciones,
Avalokiteshvara, tesoro de compasión inconcebible,
Manyushri, suprema sabiduría inmaculada,
y Vajrapani, destructor de la multitud de maras.
¡Oh venerable Guru Buda!, síntesis de las Tres Joyas,
con respeto, con mi cuerpo, palabra y mente, te suplico;
bendícenos a mí y a los demás seres para que nos liberemos y realicemos,
y concédenos las realizaciones comunes y supremas. (x3)

Esta sadhana ha sido recopilada a partir de fuentes tradicionales


por el venerable Gueshe Kelsang Gyatso Rimpoché
y ha sido traducida bajo su compasiva guía. Las imágenes de los Tathagatas
han sido coloreadas a partir de los dibujos recogidos en el libro
El voto del bodhisatva, del venerable Gueshe Kelsang, por uno de sus
afortunados discípulos, que dedica los méritos acumulados para la larga vida
de su precioso Maestro.

También podría gustarte