Está en la página 1de 2

Una llamada al amor

9.- Una llamada al amor


Sobre el amor...

Del amor se ha dicho todo, o... casi todo. "En todas las partes del lllllndo, la gente anda buscando el amor, por­
Palabra atractiva y fascinante, donde las haya. que todos están convencidos de q11e sólo el amor puede salvar al mundo.
Pero, también, palabra peligrosa,difícil de driftnir y... de vivir. Pero muy pocos comprenden en qué co11siste realmente el amor y cómo
brota en el corazón humano. Co11 demasiada J rewencia se equipara el
En la mañana y durante el día, deja que resuene en tu corazón amor a los bue11.os sentimieutos para co11 los demás, a la benevolencia, a
estas palabras de Jesús: "A maos los unos a los otros co1110 yo os he amado" On la no-violencia, al servicio... Pero todas estas cosas, en sí mismas, no son
13, 34). el amor.
Jesús hace siempre lo que dice. O primero lo hace.. . Y si te pide que El amor brota del conocimiento co11sciente. 56/o en la medida en que
le ames, es porque él te ha amado primero. Y no de cualquier manera seas capaz de ver a alguien tal y como realmente es aquí y ahora, no
(amor de pacotilla), sino "hasta el extremo", hasta dar la vida por ti. col/lO es en tu memoria , en tu deseo, en tu imaginación o en tu proyec­
Trata de recordar algún gesto de amor de Jesús hacia gentes con­ ción, podrás verdaderamente amarla; de lo co11tmrio, no será a la persona
cretas de su tiempo . . . Y cae en la cuenta de que lo que hizo entonces, lo q11e ames, síno a la idea que te has formado de ella, o bien a la per­
lo quiere hacer ahora contigo: por eso, recuerda algún acto de compa­ SO/la como objeto de tu deseo, pero no tal y como es en sí misma.
sión, de perdón ... o bien algún signo reciente (o más antiguo) de que Por eso, el primer acto de amor consiste en ver a esa persona u obje­
Jesús te ama inmediatamente a ti, o a través de las personas que te rode­ to, esa realidad, tal y como es e11 sf misma."
an, o de las oportunidades ofrecidas...
Anthony de Mello
Toma conciencia de si en tu vida te vives en esa relación de amor
con Jesús y con los demás.

En la noche, observa si has sabido reconocer el amor de Dios y


de Jesús y si esta toma de conciencia te ha ayudado a ti a amar. Si
encuentras que te falta mucho, concéntrate un rato en esta pequeña
escena del Evangelio

"U11 leproso se acerca a Jesús y se postra ante él, diciendo: '¡Set'ior,


si quieres, p11edes limpíarrne! Él exte11dió la 11/allo, lo tocó y dijo:
'¡Q11íero, q11eda /impío!' Y al instante quedó limpio de su lepra.
Entonces le dice Jesús: 'Mira, no se lo digas a nadie, sino presenta la
ofrenda prescrita para que sepan que estás sa11o '" (Mt 8,2-4).
La lepra es como el SIDA, da miedo. Pero mira lo que hace Jesús y
escucha lo que dice. Admíralo.

También podría gustarte