Lección 25 - El hogar y los medios de comunicación

Reflexión: ¿Qué es el hogar?

Es la unidad básica de la sociedad, la cuál fue creada por Dios, en el tiempo de la creación que vemos en Génesis
y que tiene como objetivo glorificar a Dios. Hoy los medios de comunicación han distorsionado el concepto de
hogar y han causado daños serios. Vamos a ver lo importante que es que Cristo sea el Señor absoluto de tu casa.

La interferencia de los medios de comunicación

La comunicación en los hogares ha sido afectada por la llegada de los medios de comunicación como la televisión
o el internet. El problema principal es la falta de control y el exceso de horas que pasamos frente a estos
medios.Infelizmente estos medios han contribuido al alejamiento de los miembros de la familia, creando en los
hogares un ambiente de aislamiento.

El desmoronamiento de la comunicación en el hogar

Casos donde los hijos o los padres no se toman en cuenta o no interactúan entre ellos por estar pendientes de los
medios de comunicación o entretenidos con ellos. Como con los celulares o la televisión. Esto ocurre por un mal
uso de los medios de comunicación.

Cuando Cristo es el Señor del hogar

El hogar fue instituido por Dios para traer felicidad al hombre, a la mujer y a los hijos. Tener un hogar cristiano
significa que Jesús ocupa el primer lugar en todo (Marcos 12:30). Por esa razón debemos de tener control sobre
lo que vemos y consumimos. Material que ofende la santidad de Dios no debería de ser consumido por nosotros.

Dejando que Cristo asuma el mando

Debemos dejar que Cristo tome el control de nuestras vidas primero para que nuestro hogar sea transformado.
Por medio de nuestro testimonio es posible transformar a los nuestros (Hechos 16:31).

Actuando con sabiduría

Para sacar provecho de la tecnología debemos de actuar con sabiduría (Pr. 4:6, 14:16). Retened lo bueno (1
Ts.5:12).
Mejorando el diálogo en el círculo familiar
La situación respecto al aislamiento causado por los medios de comunicación puede revertirse si empleamos un
espíritu crítico sobre lo que vemos y formamos espacio de debate en nuestro hogar en el que podremos aprender
y despejar dudas.

Disciplina y prudencia
Es importante que el cristiano viva una vida prudente y con disciplina. Que sepa que debe mantener una
disciplina en cuanto a la lectura de la Palabra y de oración. También que sepa hacer un uso prudente de los
medios y sus contenidos.

Reflexión
¿Han usado los medios para aprender?