Wenibert ramirez guzman nacio el 16 de febrero del 2008

en santo domingo en un hospital llamado la altagracia a las

10 de la mañana,son sus padres teudys Ramirez montero y
de wendy Guzman de Ramirez, es el mayor de tres
hermanos . Estudiante del tercer grado de bachiller en el
politecnico pilar constanzo destacandose como un joven
honesto ,amable y buen compañero. Desde muy pequeño
ha mostrado un interes mayor por la forma de pensar de
aquellos que vivieron el temible suceso de la era trujillista y
hoy plasma el pensar de aquellos que ya no estan en esta
obra de su autoria

WENIBERT RAMIREZ
 Memorias del pasado

Capitulo 1
Terror de tiempos pasado
El sol caía a plomo sobre las calles de Santo Domingo
mientras los ciudadanos hacían sus quehaceres diarios. Los
vendedores ambulantes gritaban los precios de sus productos,
los niños jugaban en los charcos de agua y los adultos se
apresuraban a llegar a sus destinos. Pero un rumor empezó a
extenderse por la ciudad: Leonidas Trujillo estaba vivo.
La noticia se difundió rápidamente por toda la isla. Muchos no
pudieron creerlo, ya que Trujillo había sido asesinado hacía
décadas, en mayo de 1961. Pero otros afirmaban haberlo visto
en persona. El rumor creció hasta convertirse en una leyenda
urbana.
Mientras tanto, en una mansión en las afueras de la ciudad, un
hombre viejo y enfermo yacía en su cama. Era Leonidas
Trujillo, que había logrado sobrevivir a los múltiples intentos de
asesinato en su contra. Durante décadas había permanecido
oculto, viviendo bajo identidades falsas y moviéndose
constantemente de un lugar a otro para evitar ser capturado.
Pero ahora, en su lecho de muerte, había decidido revelar su
verdadera identidad.
La noticia se difundió como la pólvora, y los ciudadanos de
Santo Domingo comenzaron a preguntarse qué significaba
esto para su país. Habían quienes temían que Trujillo intentara
recuperar el poder, y otros que lo veían como un héroe que
había logrado sobrevivir a sus enemigos.

La incertidumbre y el miedo se apoderaron de la isla. Las

fuerzas militares de alerta y seguridad estaban en máxima,
temiendo que la noticia fuera cierta y que Trujillo intentara dar
un golpe de estado. Los ciudadanos se prepararon para lo
peor, mientras el rumor de la resurrección del dictador se
extendió por toda la isla.
Pero después de varios días de incertidumbre, se supo que el
rumor no era cierto. La noticia había sido creada por un grupo
de personas que buscaban sembrar el miedo en la población.
Aunque muchos respiraron aliviados, otros se sintieron
decepcionados al darse cuenta de que Trujillo no había
regresado.

Sin embargo, la leyenda de Leonidas Trujillo nunca murió por

completo. Aún hoy en día, hay quienes creen que el dictador
está vivo y que en cualquier momento podría reaparecer en la
isla. Aunque la realidad es que su legado sigue presente en la
memoria de los dominicanos, quienes aún recuerdan con dolor
y temor los años de su gobierno.
A pesar de que la noticia resultó ser falsa, el rumor había
dejado un impacto profundo en la psique colectiva de la isla.
Las personas seguían hablando sobre el tema y discutiendo
sobre lo que habría pasado si Trujillo hubiera regresado.
Quienes habían creído que el dictador habría tratado de
recuperar su poder y controlar el país una vez más, mientras
que otros argumentaban que había sido un tirano cruel y
opresor que no merecía ser grabado.
Sin embargo, algunos comenzaron a cuestionar la veracidad
del rumor ya investigando más a fondo. Descubrieron que
había un grupo de personas que habían creado y difundido el
rumor para llamar la atención sobre las desigualdades sociales
y políticas que aún existían en el país. Querían recordarle a la
gente que aún había trabajo por hacer para construir una
sociedad más justa y equitativa.

A medida que la verdad salió a la luz, los ciudadanos

comenzaron a reflexionar sobre la historia de su país y su
futuro. Comprendieron que la memoria de Trujillo aún estaba
presente en sus vidas cotidianas y en la historia de la isla, y
que era importante seguir trabajando para construir una
sociedad más justa y libre de opresión.
La noticia falsa sobre la resurrección de Trujillo había
provocado miedo y confusión, pero también había provocado
un diálogo importante sobre el pasado, el presente y el futuro
de la República Dominicana. Los ciudadanos se unieron para
reflexionar sobre lo que habían vivido y lo que querían para su
futuro, y comenzaron a trabajar juntos para construir una
sociedad más igualitaria y justa.
Aunque Trujillo había muerto hacía décadas, su legado seguía
siendo una parte importante de la historia y la cultura
dominicana. Pero gracias a este evento, la gente comenzó a
reflexionar sobre el impacto de su gobierno ya que trabajar
juntos para crear un futuro mejor para todos. Y esa era una
lección que nunca olvidarían.
La lección que la gente de la República Dominicana aprendió a
través de la noticia falsa sobre la resurrección de Trujillo fue
valiosa. Comprendieron que su historia era una parte
importante de su identidad como nación, y que deberían
aprender de ella para avanzar hacia un futuro mejor.
A medida que el diálogo continuó, las personas comenzaron a
abogar por cambios en el sistema político y social del país. Se
iniciaron discusiones sobre la necesidad de una educación de
calidad para todos, una atención médica accesible y servicios
públicos básicos. También se discutieron temas de derechos
humanos, como la igualdad de género y la discriminación
racial.
Con el tiempo, el país comenzó a implementar cambios
importantes en su estructura social y política. Se promovió la
igualdad de oportunidades y se trabajó para reducir la brecha
económica entre los ciudadanos. Se incluirán políticas y
programas para mejorar la educación, la salud y los servicios
públicos. Y, poco a poco, la sociedad dominicana comenzó a
transformarse en una comunidad más justa y equitativa.

La noticia falsa sobre la resurrección de Trujillo había sido un

catalizador para este cambio. Había sacado a la luz las
desigualdades que aún existían en el país y había motivado a
la gente a trabajar juntos para construir un futuro mejor. Y
aunque la sombra de Trujillo seguía presente en la historia de
la isla, la gente había aprendido a enfrentar su pasado ya
construir un futuro más prometedor.
A medida que la sociedad dominicana se transformaba,
también lo hacía su economía. El país comenzó a atraer
inversiones extranjeras ya promover el turismo como una
fuente de ingresos. Se crearon oportunidades para los jóvenes
emprendedores y se promovió la innovación tecnológica.

Además, la República Dominicana se convirtió en líder regional

en la promoción de la democracia y los derechos humanos. Se
convirtió en un modelo para otros países de América Latina
que también estaban buscando reformas políticas y sociales.
Los líderes del país se comprometieron a no olvidar las
lecciones del pasado ya trabajar juntos para construir un futuro
mejor para todos los dominicanos. Se establezca una comisión
nacional para la verdad y la reconciliación, encargado de
investigar los abusos cometidos durante el régimen de Trujillo y
promover la reconciliación entre las víctimas y los
perpetradores.

Poco a poco, la sociedad dominicana comenzó a superar la

división y el odio que habían caracterizado gran parte de su
historia. Los ciudadanos aprendieron a trabajar juntos en
beneficio del bien común ya respetar las diferencias culturales
y políticas.
La historia de la noticia falsa sobre la resurrección de Trujillo se
convirtió en un recordatorio constante de la importancia de la
verdad y la transparencia en la construcción de una sociedad
justa y equitativa. Los dominicanos aprendieron a valorar su
historia ya utilizarla como una fuente de fortaleza y unión en
lugar de división y discordia.

En resumen, la noticia falsa sobre la resurrección de Trujillo se

convirtió en un momento crucial en la historia de la República
Dominicana. A través de la reflexión y el diálogo, los
ciudadanos del país aprendieron a enfrentar su pasado ya
trabajar juntos para construir un futuro más prometedor. La
lección que aprendieron fue valioso y se convirtió en una
fuente de inspiración y un ejemplo para otros países de la
región que también buscan reformas políticas y sociales.

La historia de la República Dominicana se convirtió en una

inspiración para muchas personas que luchan por la justicia y
la igualdad en todo el mundo. La valentía y la determinación de
la gente para superar su pasado y construir un futuro mejor se
en un modelo para otros países que enfrentan desafíos
similares.
La historia también registró la importancia de la libertad de
prensa y la responsabilidad social de los medios de
comunicación. La difusión de noticias falsas puede tener
consecuencias graves para la sociedad y puede generar una
desconfianza generalizada en los medios de comunicación.
Los periodistas y los medios de comunicación tienen una
responsabilidad importante para investigar y verificar la
información antes de publicarla, y para corregir rápidamente
cualquier información errónea que hayan publicado.

En última instancia, la historia de la noticia falsa sobre la

resurrección de Trujillo se convirtió en una fuente de fortaleza y
unidad para el pueblo dominicano. La gente aprendió a trabajar
juntos para enfrentar los desafíos y construir un futuro mejor
para todos. Y aunque la sombra del pasado todavía se
extiende sobre la isla, los dominicanos han demostrado que
pueden superar las divisiones y trabajar juntos para lograr un
futuro más justo y equitativo.
La República Dominicana se convirtió en un ejemplo para otros
países que también buscan transformarse. Los líderes
dominicanos aprendieron que la transparencia y la verdad son
fundamentales para construir una sociedad justa y equitativa.
Además, comprendió que los cambios importantes solo pueden
lograrse si se abordaran los problemas de la desigualdad
económica y la pobreza.
 Capitulo 2

Solo pensamientos
Con el tiempo, la República Dominicana se convirtió en un país
más próspero y equitativo. Los líderes trabajaron para mejorar
la educación y la atención médica, y para fomentar el
crecimiento económico. Los ciudadanos también se
involucraron en la política y lucharon por sus derechos y
libertades.

La experiencia de la noticia falsa sobre la resurrección de

Trujillo enseñó a los dominicanos que la verdad y la honestidad
son esenciales para construir una sociedad justa y
transparente. A medida que el país continuó avanzando,
también aprendió a superar sus divisiones y trabajar juntos
para lograr un futuro más brillante.
Hoy en día, la República Dominicana sigue enfrentando
desafíos, pero está más unida y fuerte que nunca. Los
dominicanos han demostrado que, con determinación y unidad,
pueden incluso superar los momentos más oscuros de su
historia y trabajar juntos para construir un futuro más próspero
y justo para todos. Pero esos fueron sólo pensamientos de un
hombre que caminaba por el parque mientras veía lo que
pasaba en el pais.

Que aunque los dominicanos se habían unido después de lo

del rumor todavía seguían muy lejos de ser una nación unida
Porque a pesar de que la República Dominicana había logrado
superar muchas divisiones y desafíos, todavía había mucho
trabajo por hacer para unir a la nación. El hombre que
caminaba por el parque se dio cuenta de que aún había
desigualdades económicas y sociales que deberían ser
abordadas, y que algunos grupos seguían marginados y
excluidos de la sociedad.

Pero este hombre también vio que había esperanza. En todo el

país, había personas trabajando increíblemente para abordar
estas cuestiones y construir un futuro más justo y equitativo
para todos. Habían líderes comunitarios, activistas y
ciudadanos comprometidos que estaban luchando por la
unidad y la igualdad.

Y así, con la esperanza y la determinación en su corazón, el

hombre se reunió a estos esfuerzos. Comenzó a trabajar con
otros líderes y activistas para abordar las desigualdades y
fomentar la unidad en todo el país.

Juntos, trabajaron para construir puentes entre las diferentes

comunidades y fomentar el diálogo y la colaboración.
Trabajaron para mejorar el acceso a la educación y la atención
médica, y para apoyar a aquellos que habían sido marginados
y excluidos.
Poco a poco, la nación comenzó a unirse de nuevo. Aunque
todavía había desafíos por delante, el hombre sabía que con la
determinación y la unidad, la República Dominicana podría
seguir construyendo un futuro mejor para todos sus
ciudadanos que día tras día se esforzaban por un pais mejor.

Capitulo 3

Una República unida

Con el tiempo, el trabajo duro y la colaboración de muchas
personas, la República Dominicana comenzó a ver resultados.
La economía se fortaleció, y la nación comenzó a recibir más
inversiones ya atraer turistas de todo el mundo. Las
desigualdades comenzaron a disminuir, y la educación y la
atención médica se mejoraron en prioridades para el gobierno
y la sociedad en general.

El hombre que había iniciado el esfuerzo por la unidad y la

igualdad se convirtió en un líder reconocido en todo el país.
Trabajó increíblemente para continuar fortaleciendo la nación,
y fue una fuente de inspiración para muchos otros líderes y
ciudadanos.

A medida que la República Dominicana avanzaba, el hombre

se dio cuenta de que aún había mucho por hacer. Si bien la
nación había hecho grandes progresos, todavía había desafíos
económicos y sociales que requerían atención. Pero él sabía
que, con la determinación y la unidad, la República Dominicana
podría seguir avanzando y convertirse en un país más
próspero, justo y equitativo para todos.
Y así, el hombre continuó trabajando para fortalecer a la
nación, inspirando a otros y grabando a todos que, con la
unidad y la determinación, cualquier desafío podría ser
superado y cualquier objetivo podría ser alcanzado.

Con el tiempo, el hombre llegó a ser conocido en toda la región

como un líder visionario y comprometido con la construcción de
una nación más fuerte y unida. Se convirtió en un modelo a
seguir para muchos jóvenes que buscaban inspiración para
sus propias luchas por la igualdad y la justicia.

Más allá de la República Dominicana, su historia inspiró a

personas en todo el mundo a trabajar por la unidad y la
igualdad en sus propios países y comunidades. Su ejemplo
surgió que, incluso en medio de las mayores adversidades, la
determinación y la unidad pueden llevar a grandes cambios y
transformaciones.

Y así, la historia del hombre que inició un movimiento por la

unidad y la igualdad en la República Dominicana se convirtió
en un ejemplo perdurable de lo que se puede lograr cuando las
personas trabajan juntas hacia un objetivo común.

Su legado inspiró a generaciones de líderes y ciudadanos a

trabajar juntos para construir un mundo mejor y más justo para
todos.Su legado perduró durante décadas y siguió inspirando a
nuevas generaciones de líderes y ciudadanos comprometidos
con la construcción de un futuro más justo y equitativo para
todos.

La República Dominicana se convirtió en un país próspero y

desarrollado, con una economía fuerte y una sociedad más
unida y diversa. Las desigualdades que habían existido en el
pasado disminuyeron aún más, y el país se convirtió en un
modelo para otros países que lucharon por superar divisiones y
construir una sociedad más justa y equitativa.
Y en el corazón de todo esto, seguía estando el legado del
hombre que había iniciado el movimiento por la unidad y la
igualdad. Su espíritu y su ejemplo continuarán inspirando a las
personas en todo el mundo a trabajar juntas hacia un futuro
mejor, más próspero y más justo para todos.

El hombre había sido un líder visionario y unificador que había

transformado no solo a su nación, sino también a muchas
vidas en todo el mundo. A medida que pasó el tiempo, su
legado continuó vivo en la memoria de todos aquellos que
habían sido tocados por su ejemplo y su compromiso con la
justicia y la igualdad.

En cada nuevo desafío, los ciudadanos de la República

Dominicana y de otros lugares encontrados inspiración en el
ejemplo del hombre y en su mensaje de unidad y
determinación. Y así, su legado siguió siendo una fuerza
poderosa para el cambio y la transformación en todo el mundo,
recordándonos que con la determinación y la unidad, cualquier
desafío puede ser superado y cualquier objetivo puede ser
alcanzado.

Y asi el rumor que infundió temor en los habitantes se había

convertido en la razón de que hoy la República Dominicana
estuviera unida como una familia de nuevo