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* Romanos 6:21, 22, “¿Pero qué fruto teníais de aquellas cosas de las cuales
ahora os avergonzáis? Porque el fin de ellas es muerte. 2 Mas ahora que habéis sido
libertados del pecado y hechos siervos de Dios, tenéis por vuestro fruto la
santificación, y como fin, la vida eterna”.
-- Con esta pregunta Pablo sigue animando a los santos de Roma a llevar vidas
santas y no volver a los pecados de la vida pasada.
-- Pregunta por los frutos (provecho, beneficios) que recibieron de los pecados.
Momentáneo placer y ¿qué más? Mucha miseria y el fruto final, muerte (la eterna
separación de Dios y sufriendo los horrores del infierno de fuego).
-- Por el contrario ahora, libertados del pecado, tenéis por vuestro fruto la
santificación, y como fin, la vida eterna. Entonces no tiene sentido volver al
servicio del pecado.
* Todo pecado es como “vómito” y “cieno” (lodo). 2 Pedro 2:21-22, “Porque mejor
les hubiera sido no haber conocido el camino de la justicia, que después de haberlo
conocido, volverse atrás del santo mandamiento que les fue dado. 22 Pero les ha
acontecido lo del verdadero proverbio: El perro vuelve a su vómito, y la puerca
lavada a revolcarse en el cieno”.
-- Juan 21:7, “Entonces aquel discípulo a quien Jesús amaba dijo a Pedro: ¡Es el
Señor! Simón Pedro, cuando oyó que era el Señor, se ciñó la ropa (porque se había
despojado de ella), y se echó al mar”. El griego literal dice que estaba desnudo,
sin la ropa exterior.
-- 1 Timoteo 2:9, “Asimismo que las mujeres se atavíen de ropa decorosa, con
pudor y modestia”. Pudor, sentido de vergüenza (en inglés, “shamefacedness”).
* Desde luego, todo pecado es vergonzoso. Romanos 1:18-32; 1 Corintios 6:9-11;
Gálatas 5:19-21; Efesios 4:22-32; Colosenses 3:5-10. No solamente la idolatría, la
fornicación, el homicidio, sino también los demás: avaricia, celos, envidias,
enojos, soberbia, sin misericordia, etc. La lista es muy larga y cada uno de los
pecados mencionados es vergonzoso. Manchan y destruyen el alma como cáncer y la
prepara para el infierno.
* El error doctrinal es vergonzoso. Muchos errores doctrinales son aceptados y
practicados por millones. Para ellos el error doctrinal es popular y por eso
aceptable. Muchos tienen el concepto de que si alguna práctica religiosa es
aceptada y practicada por millones, tiene que ser la verdad. Dicen que tantas
personas no pueden estar equivocadas.
-- Pero véase Mateo 7:21-23, “No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en
el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los
cielos. 22 Muchos me dirán en aquel día: Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu
nombre, y en tu nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre hicimos muchos
milagros? 23 Y entonces les declararé: Nunca os conocí; apartaos de mí, hacedores
de maldad”. También Mateo 15:9, Pues en vano me honran, Enseñando como doctrinas,
mandamientos de hombres”.
-- Y todo error doctrinal es vergonzoso. Todas las religiones que profesan ser
“cristianas” pero que ni una sola vez se mencionan en las Escrituras deben tener
vergüenza por rechazar el evangelio puro, y la verdadera iglesia de Cristo, la que
compró con su sangre.