0 calificaciones0% encontró este documento útil (0 votos)
165 vistas1 página
El adolescente le escribe una carta a su padre explicando los desafíos que enfrenta durante esta etapa de cambios y búsqueda de identidad, como definir su rumbo en la vida, encontrar su independencia y autoestima, y comprometerse en el amor y en la definición de sus propios valores y creencias. Pide la guía, comprensión, aceptación y amor incondicional de su padre durante este periodo de definición como persona.
El adolescente le escribe una carta a su padre explicando los desafíos que enfrenta durante esta etapa de cambios y búsqueda de identidad, como definir su rumbo en la vida, encontrar su independencia y autoestima, y comprometerse en el amor y en la definición de sus propios valores y creencias. Pide la guía, comprensión, aceptación y amor incondicional de su padre durante este periodo de definición como persona.
El adolescente le escribe una carta a su padre explicando los desafíos que enfrenta durante esta etapa de cambios y búsqueda de identidad, como definir su rumbo en la vida, encontrar su independencia y autoestima, y comprometerse en el amor y en la definición de sus propios valores y creencias. Pide la guía, comprensión, aceptación y amor incondicional de su padre durante este periodo de definición como persona.
Expulsado de las plácidas playas de mi niñez y arrojado a las
aguas turbulentas de mi adolescencia, necesito un puerto de llegada para definir el rumbo de mi travesía. En este momento de cambios, que llaman crisis, corro el riesgo de perderme y tengo la oportunidad de encontrarme. Busco mi identidad como persona y debo darle un sentido a mi vida. Mi rebeldía es el “gateo” hacia mi independencia, y me desafía para que alcance mi caminar con libertad comprometida. Mi ebullición sexual me desafía a definirme como persona, comprometiéndome en el amor. Mi desorientación ante los valores ofrecidos me desafía a jugarme por ellos con decisión y criterios propios. Mi temor y mi inseguridad ante el futuro me desafían a tener el valor y el coraje para encarar con esperanza mi vida como tarea. Mi efervescente fantasía me desafía para que ensaye en sueños los que serán mis proyectos de mañana. Mi confuso sentimiento de culpa me desafía para que alcance una recta conciencia moral, para juzgar mis conductas. Mi doloroso sentimiento de soledad me desafía para el encuentro conmigo y para la convivencia y comunión con mis hermanos. Mi vacilante valoración de mí mismo me desafía para que busque y logre la seguridad de mi autoestima. Mi incertidumbre vocacional me desafía para que encuentre mi modo de inserción social, prestando un servicio a Dios y al prójimo. Y en esta encrucijada de mi vida necesito de ti: que me descubras, que me comprendas y valores, que me aceptes y me AMES como la persona que soy. Espero de ti la guía de tu palabra, avalada con el testimonio de tu vida, como un MODELO para mi camino.