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CAMBIO DE

RUMBO
EL PROGRAMA ECONÓMICO
PARA LOS ’90

CARLOS BOLOÑA BEHR

INSTITUTO DE ECONOMÍA DE LIBRE MERCADO – SIL


Primera edición, 1993
© Carlos Boloña Behr
Diseño de Cubierta
Judith Kahn
Corrección de pruebas
María Blume
Prohibida la reproducción total o parcial
de esta obra sin permiso expreso del autor.
Este libro es una publicación del
Instituto de Economía de Libre Mercado
“San Ignacio de Loyola” (IELM - SIL).
Impreso por Gráfica Biblos S. A.
Jr. Tizón y Bueno 639, Jesús María.
Hecho en el Perú
A mi esposa Sylvia, que me dio el
valor y el aliento para perseverar en
la tarea de cambiar nuestro país; y a
mis hijas Bárbara, Daniella, Carla y
Joanna, que supieron aceptar la falta
de su padre durante tantos meses para
poder vivir en un Perú mejor.
ÍNDICE

Prólogo

Agradecimientos

Introducción

CAPJTULOI:
LA HERENCIA RECIBIDA

l. La hoja clínica J
2. Dos destructores: Guzmán y García 4
3. La fábricación del desastre 9
4. Una oportunidad inédita 18

CAPITUWII:
VIEJOS PRINCIPIOS PARA NUEVOS TIEMPOS

l. No hay que descubrir la pólvora 29


2. Denominador común 34
3. Principios políticos para un orden libre 37
4. Los principios de una economía sana, libre y próspera 41
5. Combustible para el despegue 45
6. Burócratas iluminados 47
7. No hay tercera vía 49
8. Privilegios S. A 50
CAPITUW111:
LA POUTICA PARA EL CAMBIO

l. Una visión panorámica 53


2. Las cinco grandes reformas estructurales 58
3. El impacto de las reformas 86
4. La tiranía del Statu Quo 89

CAPITUWIV:
DE LA TEORIA A LA PRACTICA

J. La búsqueda del equilibrio perdido (La reforma


macroeconómica) 91
2. La reforma microeconómica de los mercados 109
3. La reforma de la estructura de la propiedad 123
4. La reforma del Estado 126
5. La reforma institucional 130
6. La resistencia a la Reformas Estructurales 130
7. ¿En cuánto tiempo dan frutos las Reformas Estructurales? 131

CAPITUWV:
LA POUTICA EXTERIOR Y LA REINSERCION 135

l. Club de París 11 140


2. Banca Comercial 141
3. Proveedores sin garantía 141
CAPITULO VI:
MAS ALI.A DEL DERECHO 143

l. Las reglas del juego 143


2. Estado de Derecho 144
3. Gobierno limitado 152
4. Seguridad de los c iudadanos 155

CAPITUW Vil:
TIGRES DE PAPEL 161

l. Las críticas al Programa Económico 161


2. Desviaciones del Programa Económico 165
3. Reflexiones 169

CAPITULO VIII:
CONCLUSIONES YRECOMENDACIONES 175

l. Avances del Programa Económico 175


2. Agenda pendiente 178
3. Recomendaciones y responsabilidades para el futuro 179

Anexos 181
Referencias bibliográficas 247
PRÓLOGO

Para el Perú este libro ofrece una oportunidad singular, pues no es


frecuente que un Ministro de Economía se embarque, inmediatamente terminada
su gestión, en la tarea de hacer un recuento de la misma. Contar con esta obra
de Carlos Boloña-se esté o no de acuerdo con sus posiciones-contribuirá sin
duda a diseñar el plan de acción que definirá el destino económico y también
político de nuestro país en el futuro mediato e inmediato.

"Cambio de Rumbo" reseña el plan maestro que el autor aplicó en sus dos
intensos años de gestión con una energía y una perseverancia poco comunes y
que dio como resultado concreto el control de la inflación y la modernización de
nuestra economía.

A mi entender, este libro justifica a aquellos que, como yo, creen que más
peligrosa que la depresión económica es la depresión moral. Hay que tener fe y
confianza en nuestro país porque hay razones para tenerlas, pero también hay
que tener la decidida voluntad de contribuir a su recuperación. En los campos
político y económico estamos asistiendo a una vigorosa y positiva reacción de
los países latinoamericanos-el Perú entre ellos-que, aunque parezca un sueño,
tienen actualmente un crecimiento superior al de los países desarrollados. Como
hace poco lo admitía el Director General del Fondo Monetario Internacional, no
estamos ya a remolque de ellos. Hay queperseverar en el esfuerzo. Los sacrificios
no han sido vanos.

La obra de Carlos Boloña, resumen de una gestión ardua y exitosa, tendrá


permanentemente actualidad. Su carácter técnico y su lenguaje didáctico la
convertirán en lectura obligada de estudiosos y de universitarios; y el hecho de
que no esté sujeto a consideraciones políticas e intereses y ambiciones particu­
lares atraerá la atención y el interés generales.

Javier Pérez de Cuéllar


AGRADECIMIENTOS

Quiero aprovechar la publicación de este libro para expresar mi


agradecimiento a las diversas personas que me apoyaron y ayudaron a
sacar adelante el Programa Económico.

En primer lugar al Presidente Fujimori, por dejar que aplicara una


reforma basada en la economía de mercado y por su capacidad de convencer a
la ciudadanía de su conveniencia.

A mis hermanos y amigos: Fernando Boloña Behr, Raúl Diez Canseco


Terry y Marcial Vargas Gonzales

A los colegas de gabinete que me mostraron lealtad, en especial a Jaime


Yoshiyama, el mejor y más convencido aliado que pude haber tenido para
impulsar el cambio de rumbo en el país.

A mis queridos amigos Hernán Büchi y José Piñera, que me visitaban


cuando se lo pedía para darme consejo y asesoría. También al ILD de Chile que
supo exportar sus ideas.

A Javier Pérez de Cuéllar, el verdadero iniciador del retorno del Perú a


la comunidad internacional.

A Carlos Rodríguez Pastor y Hernando de Soto, que me alentaron para


asumir el reto.

A la gente de línea: los Viceministros, AlfredoJailitie y Rosario Almenara


Díaz de Pezo; y la Secretaria General, Roxana Córdova.

Al Negociador de la Deuda Externa, Raymundo Morales Bermúdez.

A mis asesores económicos: Carlos Adrianzén, Luis Arias Grazzini,


Eduardo Bastante, Osear Blanco, Jorge Cortez. Fritz Dubois, Víctor Merino,
Felipe Mo"is, Wolfgang Pedal, César Peñaranda, Alfredo Romero, Guillermo
Thomberry, Edua.rdo Valdivia Velarde, Luis Va/divieso.
A mis asesores en la parte tributaria: Dominga Sota y Armando Zolezzi.

A mis asesores legales: Mario Ferrari y Ludwig Meier.

A mis asesores de política y publicidad: Vicente Silva y Ana Gibson.

A los políticos que me enseñaron y apoyaron.

A los empresarios y trabajadores progresistas, que supieron entender y


apoyar el Programa Económico.

A mis secretarias: María Laura Castañeda de Guerrero, Marce/a Valdez


Ladrón de Guevara y Rocío Rodríguez Middleton.

A quienes se encargaron de mi seguridad.

Por último a Federico Salazar y Mario Ghibellini, que me ayudaron


a darle forma a este libro.
INTRODUCCION

Las circunstancias que precipitaron mi renuncia al Ministerio de Economía


y Finanzas no han sido hasta ahora puestas en conocimiento de la opinión pública
a cabalidad. Muchos piensan que cuando dejé el cargo, el 4 de enero pasado, lo hice
por desavenencias con el Presidente Fujimori y me atribuyen Ia responsabilidad
de que el importante proceso de transformaciones que iniciamos en febrero del '9 1
desde el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), pudiera perder su dinámica.

Pero eso no es exacto. Lo cierto es que desde que asumí la cartera de Economía,
sostuve que sólo permanecería en el puesto mientras pudiera seguir avanzando con
las reformas. Y el 30 de diciembre de 1 992, supe que no continuaría "por razones
políticas".

Esa tarde habíamos estado trabajando en la nueva ley de Control del


Gobierno con el Ministro de Industrias, Jorge Carnet Dickman, el Ministro de
Justicia, Femando Vega Santa Gadea, y la Contralora, María Herminia Drago, en
Palacio de Gobierno. Hacia el final de la sesión se sumó el Primer Ministro, Osear
de la Puente y, poco después llegó el resto del gabinete para participar de una
pequeña reunión de fin de año. El '92 había sido un año difícil que, sin embargo,
estaba terminando con buenas perspectivas para el Gobierno. Se había ganado las
elecciones al Congreso Constituyente Democrático (CCD) por amplia mayoría,
Abimael Guzmán estaba tras las rejas, la inflación había cedido considerablemente
y la segunda reinserción estaba en marcha.

La reunión tenía también otro propósito: todos debíamos firmar las cartas de
renuncia que se estila presentar el 28 de julio y a fin de año con la idea de dejar al
Presidente en libertad de reformular su equipo ministerial y sus políticas de
gobierno en esas fechas que, tradicionalmente, sirven para hacer un balance en la
vida política del país. Se trata de renuncias "de oficio", todas iguales.
Al finalizar la reunión el Primer Ministro se despidió de todos. Pero a Alfredo
Ross Antezana (hasta ese momento, Ministro de Transportes y Comunicaciones,
Vivienda y Construcción) y a mí nos pidió que nos quedáramos. La reunión
parecía tener un tercer propósito.

A decir verdad, desde hacía algunas semanas había estado recibiendo


señales de que mi situación en el Gabinete comenzaba a complicarse. Por una
serie de razones, la firma de la Carta de Intención con el FMI, cuya negociación
habíamos ya concluido en noviembre, se venía postergando. Y el 1 3 de diciembre
el Presidente había enviado, una carta al Director Ejecutivo de esa institución,
Michael Camdessus, en la que solicitaba flexibiJizar los términos de la Carta de
Intención para facilitar los fines de "pacificación". El impasse se superó final­
mente negociando en Washington la inclusión de un nuevo párrafo que atendí a
a la demanda del Presidente Fujimori pero, aun así, Ja Carta continuó sin
aprobarse. La única explicación que podía imaginar para esta actitud del
Gobierno era la inadecuada percepción de que el Japón podría financiar el
Programa Económico por cuenta propia, permitiéndonos prescindir del FMI .

Al quedarnos solos, nos volvimos a sentar a la mesa y De la Puente tomó


la palabra.

-Se ha decidido no seguir contando con sus servicios para t 993- nos
comunicó.

Según nos dijo, se había evaluado que se vení a una coyuntura política
difícil para el Gobierno, de muchas presiones, y los sectores más vulnerables
resultaban ser los que nosotros encabezábamos. En mi caso, remarcó que mi labor
al frente del MEF me había desgastado mucho, lo que me haría objeto de los
ataques más serios, trance difícil que se me quería evitar. Nos ofreció, por último,
puestos dependientes del Gobierno en el exterior, convencido de que aquello
podría satisfacemos. En mi caso sería un alto cargo en el FMI .

Consideré importante hacerle dos comentarios. Primero, que me hubiera


gustado escuchar directamente que ya no se quería contar con mis servicios; y
segundo, que la oferta de un puesto en el extranjero no era necesaria ni de interés
para mí. "Vine sin pedir nada y me voy sin pedir nada", le dije. A De la Puente
mi respuesta pareció sorprenderlo y, antes de despedirnos, me pidió que lo
pensara.

De regreso en casa, sólo comenté la noticia con mi esposa y decidí


salir de Lima con mi familia durante Jos días de Año Nuevo, como tenía pensado
originalmente, y no hacerme problemas con el tema. En los días siguientes,
curiosamente, ninguna señal del cambio ministerial se filtró en la prensa. Sólo
aparecieron en los medios algunos líderes de gremios empresariales-principales
propugnadores hasta hacía poco de un cambio de timón en el MEF porque ya no
querían soportar los rigores del programa-, para expresar sus deseos de que mi
actitud cambiara para el '93. Recién el sábado 2 de enero, en una entrevista radial
en RPP, el Presidente Fujimori admitió que podría haber cambios en el gabinete.

Durante esos días, llegué a la conclusión de que era conveniente escribir


una carta de renuncia que realmente expresara mi pensamiento y diera
testimonio de mi preocupación por el futuro del Programa Económico.

El lunes 4 regresé a Lima recién a las cinco de Ja tarde. En casa me encontré


con que el Primer Ministro me había estado llamando. Al responderle, me dijo
que por favor fuera a la Escuela Militar de ChorriJlos, donde él y el Presidente
me estaban esperando.

Al llegar, fui conducido a una sala donde, además del ingeniero Fujimori
y De la Puente, se encontraba Ross Antezana.

Tras los saludos de rigor, el Presidente tomó la palabra.

-Hemos evaluado que va a haber mucha presión en sus sectores y por


estrategia política, ustedes no deben continuar- dijo.

Me pareció pertinente plantear algunas opiniones. Le reiteré primero que


tras casi dos años de colaboración, me hubiera gustado que me comunicase
personalmente que ya no quería contar conmigo en el Gabinete y luego le
pregunté acerca de las presuntas presiones a las que había hecho referencia:
¿Había ganado el Gobierno las elecciones al eco por amplia mayoría o no?
¿Estaban entonces los políticos de la oposición en mejor situación que nosotros?
¿Tení an acaso las quejas de algunos gremios empresariales contra el Programa
Económico más eco en la opinión pública que la de los políticos tradicionales?
Por último, si las presiones se daban, yo estaba seguro de poder capearlas. Algo
había aprendido de política en todo ese tiempo al enfrentarme a García, a tantas
comisiones del Congreso o al salir ileso de una interpelación.

Pero el Presidente Fujimori insistió:


-Por estrategia política, usted no debe continuar.

Le dije que él tenía ciertamente la Jibertad de determinar con quién deseaba


trabajar y con quién no, pero le manifesté asimismo que los términos de mi

VII
renuncia no estaban expresados en la carta de oficio que había firmado el 30 de
diciembre junto con el resto del gabinete, sino en otra que había preparado
durante el fin de semana, la cual le entregué en ese momento.

El Ingeniero Fujimori puso el sobre que la contenía a un lado e insistió en


lo del puesto en el FMI, pero yo rechacé nuevamente la oferta diciéndole que
estaba decidido a regresar a mis actividades privadas.

Me preguntó, por último, si yo apoyaría lo que se hiciera en adelante. Yo


le dije que eso dependería de lo que se hiciera.

Tras un momento de silencio, el Presidente concluyó:

-Bueno, pues ...-. Buenas noches.

-Buenas noches- le dije y me retiré con la sensación de que un


importante capítulo de mi vida tocaba a su fin.

A la mañana siguiente, cerca del mediodía, el periodista Den nis Vargas de


RPP me llamó "para saludarme por el Nuevo Año y desearme éxitos para el '93
en mi gestión como ministro". Le agradecí los deseos pero le dije que veía difícil
que pudieran cumplirse, pues yo ya no era Ministro de Economía. Sorprendido, me
pidió autorización para dar a conocer la noticia en la radio y yo accedí.

En los días siguientes, recibí múltiples visitas y mensajes muy reconfortantes,


incluso de gente que quería sencillamente expresarme su reconocimiento por la
labor de transformación que yo había encabezado en el MEF. De todos ellos, el
más halagador fue el del representante de la Cancillería del Japón para América
Latina, el señor Terusuke Terada, quien tuvo palabras generosas para mi gestión
y mostró inquietud por el futuro del Programa Económico.

Estos son los hechos. Lo que queda por hacer ahora es interpretar cuáles
pudieron ser las razones que determinaron no sólo mi separación del Gabinete
- locual finalmenteno pasaría deserun episodiopersonal-, sino fundamentalmente
la modificación de la dinámica del proceso de transformaciones que estábamos
llevando adelante desde el MEF. Porque, independientemente de lo sucedido con
la Carta de Intención con el FMI, hacia fines del '92 habían comenzado a aparecer
indicios de que no se quería avanzar con algunas de las reformas.

No se accedió, por ejemplo, a culminar con la apertura del mercado de trabajo


a través de la superación de dos rémoras de la antigua legislación laboral: la
flexibilización de las normas de la Estabilidad Laboral y la Comunidad Laboral.

VIII
Asimismo no se aprobaron normas relacionadas con el Fondo de Vivienda,
la reducción de sobretasas arancelarias a ciertos productos agrícolas, la eliminación
de restricciones al uso de leche en polvo para la producción de leche evaporada,
la reestructuración del Banco de Ja Nación y la privatización de ENCI. Reformas,
cuyos dispositivos legales estaban ya listos para ser promulgados pero quedaron
encarpetados por cálculo político o un injustificado temor a "los monopolios
privados".

No pretendo con estos comentarios negarle méritos al Presidente Fujimori.


Los tiene y múltiples. La comparación de su gestión con las de sus antecesores
es bastante elocuente en ese sentido. Trabajando junto a él aprendí a valorar su
coraje, decisión, e intuición. En el Perú muchas cosas han cambiado desde que
él asumió la Presidencia. En particular, en la tarea de gobierno en la que a mí me ha
tocado intervenir-la de la reforma y la modernización económica del país-, pienso
que su principal virtud ha sido entender y permitir que las cosas se hagan. El
Presidente Fujimori llegó al poder sin un plan de gobierno y rodeado de asesores
"heterodoxos", cuyos planteamientos sólo habrían profundizado la hiperinflación
y el aislamiento del Perú de la comunidad económica internacional. Sin embargo,
cuando tuvo oportunidad de escuchar una explicación de por qué esa política nos
llevarí a al despeñadero y de cuál debería ser la orientación del Programa
Económico, el Presidente optó por la estabilización económica, por dura que ésta
resultase en esos momentos para su recién estrenada popularidad. Tuvo también,
luego, la visión de encargar a gente especializada una tarea difícil y compleja
(pero a la que dio luz verde gracias a que había accedido al poder sin estar
comprometido con ningún grupo de interés): la modernización de nuestra
economía a través de la eliminación de las intervenciones y privilegios que la
tenían maniatada.

En ese proceso estábamos hasta diciembre del año pasado, por alguna razón
desde entonces se ha hecho más lenta la dinámica de las reformas. Es fundamen­
tal, sin embargo, salir de esa inercia y no perder el norte que hemos venido
siguiendo a lo largo de todo este camino.

La firma del programa con el FMI tal como lo negociara durante mi gestión
y la limpieza de Jos atrasos con el FMI y el Banco Mundial en marzo de 1993
son buenos indicios respecto a la dirección del Programa. Ello despeja una de las
inquietudes expresadas en mi carta de renuncia del 4 de enero. Quedan pendien­
tes, sin embargo, otras inquietudes relativas a la posibilidad de que el Perú pierda
la dinámica en sus reformas por presiones de los diversos grupos de interés, se
maneje "políticamente" el país o se quede a mitad del camino el cambio de rumbo
iniciado.

IX
Tras haber ocupado el cargo de Ministro de Economía y Finanzas por más
de 22 meses, considero necesario presentar un análisis y algunas reflexiones
acerca de los cambios que ha venido experimentando el Perú durante todo este
tiempo. Llevo esta labor a cabo con el ánimo de crear conciencia respecto de la
filosofía, dirección y orientación de esta revolución basada en la economía de
mercado, que se empezó a aplicar en forma decidida durante mi gestión y fue
apoyada por el Presidente de la República. Es importante que se conozca el
camino recorrido y, más importante aún, que se tenga conciencia clara de lo que
falta por hacer.

El 30 de diciembre de 1992 se tomó la decisión de que y o no siguiera en


el MEF "por razones políticas". A pesar de ello, considero necesario continuar
colaborando y defendiendo el proceso de estabilización económica, las reformas
estructurales y la reinserción económica internacional. Por tal motivo he decidido
quedanne en mi país, para seguir en esta tarea. El esfuerzo y sacrificio que los
peruanos hemos realizado desde el 28 de julio de 1990 no puede ni debe perderse,
ni en s u orientación ni en su dinámica; así corno tampoco deben erosionarse los
avances logrados. Estoy convencido de que el rumbo emprendido traerá bienestar
para todos los peruanos y en especial para los más pobres. Este esfuerzo se está
haciendo para abrir un camino de esperanza especialmente para nuestros hijos.
El objetivo es orientar a los que creemos en el Perú para desterrar de raíz y
definitivamente ideologías basadas en el terror y la demagogia.

X
CAPITULO I

LA HERENCIA RECIBIDA

Los cambios realizados en la economía y la sociedad peruanas desde 1990


marcan una ruptura no sólo frente al gobierno de Alan García, sino frente
al tipo de gestión pública de por lo menos los últimos 40 años. Por esa razón,
pueden abrir realmente una vía al desarrollo y a la calidad de vida que el Perú
necesita.

Para tener una idea de la verdadera magnitud de este cambio, puede ser
ilustrativo fijar nuestra atención en lo que sucedió con algunas de las principales
variables de la economía peruana de 1950 en adelante.

l. LA BOJA CLINICA

Los indicadores económicos son como la hoja clínica con la que los
médicos siguen paso a paso la salud o enfermedad de un paciente. Se trata,
generalmente, de cifras y variaciones que dibujan un "cuadro" más o menos
aproximado de lo que pasa en la economía.

Cuando la economía de un país es saludable, sus indicadores se desplazan


con orden y en forma equilibrada. No hay en tal caso demasiadas "sorpresas"; esto
es, no se dan variaciones bruscas en los factores que inciden en la toma de
decisiones de los agentes económicos.

En nuestro país todos los indicadores económicos de Jos últimos 40 años


corresponden a la hoja clínica de un enfermo, con curvas y líneas que suben o
bajan violentamente. Si se compara la evolución de estas variables con la
registrada en cualquier país desarrollado se ve claramente la diferencia.
Algunos de los principales indicadores son la inflación, el déficit fiscal, la
producción, las exportaciones y las reservas. Veamos brevemente en qué consiste
cada uno de ellos.

1.1. Inflación

La inflación es quizá una de las variables más conoeidas por los peruanos.
Eso se debe a que hemos sufrido sus consecuencias en forma permanente. La
inflación consiste en el alza generalizada de los precios. En una economía sana,
si bien los precios varían, lo hacen en forma aislada y de acuerdo a los cambios
en las preferencias del consumidor (demanda) o en la cantidad de bienes y
servicios producidos (oferta). La inflación, en cambio, es un alza de todos los
precios, que no ha sido creada por variaciones en la oferta o demanda de los
bienes y servicios. Es el resultado de "inflar" los medios que sirven para realizar
las transacciones en el mercado.

El intercambio de bienes y servicios no se realiza como trueque. Para


facilitarlo utilizamos medios de intercambio, como el dinero o los cheques. El
Estado controla la oferta de los medios monetarios que se utilizan para realizar
este intercambio.

La inflación se produce cuando el Gobierno pone en la economía más


billetes de los que se requiere para intercambiar los bienes y servicios existentes.

Con mucha frecuencia el Estado utiliza su poder de crear dinero para


financiar presupuestos desequilibrados. Los Gobiernos difícilmente quiebran,
debido a que pueden tomar para sí los billetes que mandan a imprimir. Cuando
sus gastos crecen por encima del nivel de sus ingresos se crea lo que los
economistas llamamos déficit fiscal.

1.2. Déficit Fiscal

El déficit es el hueco, el saldo negativo en las cuentas del Gobierno.


Generalmente, los Gobiernos generan la inflación para cubrirlo.Cualquier gobernan­
te que realiza un gasto público para atender las demandas de uno u otro sector de
la población puede obtener niveles espectaculares de popularidad en su momento.
El problema viene después, .cuando hay que pagar la cuenta.

2
Es fácil que el gobernante caiga en la tentación de pasar la factura para más
adelante y evitarse así el trago amargo de hacer un manejo estricto de los gastos
en función de los ingresos fiscales.

Una vez que el gobernante se da cuenta de que puede realizar gasto público
a cuenta de la emisión de moneda. se hace tan adicto a la inflación como la propia
economía. La inflación sube los precios y para producir y consumir lo mismo que
antes se requiere más dinero. La flaqueza del gobernante ante Ja sensualidad del
poder hace a la economía dependiente de la inflación (y de la política), como si
se tratara de una droga.

Con el fin de medir Ja magnitud del faltante en las cuentas fiscales y poder
compararla con la del de otros años, el déficit se expresa como s i fuera una parte
del total de bienes y servicios producidos en el ejercicio (como porcentaje del
Producto Bruto Interno, del famoso "PBI").

1.3. Producto Bruto Interno

Para, a su vez, poder comparar el desempeño de las economías nacionales,


algunos economistas tienen una manera especial de medir la producción. Ellos
suman el total de bienes y servicios que se intercambian en el mercado,
incluidos los montos pagados por concepto de exportaciones y deducidas las
importaciones. A esto llaman el Producto Bruto Interno (PBI), cuyas variaciones
reflejan en cierta medida el crecimiento o la caída de la actividad económica del
conjunto de la nación.

El bienestar y la calidad de vida mejoran cuando el país utiliza sus recursos


(naturales, humanos y de capital) en forma eficiente. Crea menos riqueza quien
necesita utilizar una mayor cantidad de recursos en un determinado proceso
productivo. Esto vale tanto para una empresa como para una familia o un país.
El PBI se utiliza, justamente, como un indicador que refleja en forma aproximada
el tamaño de la producción.

1.4. Exportaciones

Otra forma de medir la eficiencia económica de un país es a través de sus


exportaciones; es decir, de su capacidad para vender sus mercancías en el
extranjero. Las empresas del mundo están cada día más interconectadas y logran

3
hacer economías de escala debido a que se relacionan con otros mercados con
mayor facilidad. El comercio exterior es una pieza clave en el crecimiento de la
producción.

Con economías cada vez más integradas en el nuevo orden mundial, la


capacidad para exportar mide también de alguna fonna el grado de vinculación
entre un país determinado y los demás. Esta capacidad de exportar se puede
expresar comparando el total de lo que se vende en el extranjero con el total de
lo que se produce en el país; es decir, midiendo las exportaciones como porcentaje
del PBI.

La integración comercial, sin embargo. supone adquirir del extranjero


todas aquellas materias primas e insumos que requiere una producción en proceso
de expansión, especialmente si se debe cubrir la demanda de grandes mercados
internacionales. El saldo que dejan las exportaciones frente a las importaciones
se puede sumar a los que resultan de otras operaciones con el exterior, como los
que dejan nuestras obligaciones y compromisos financieros. entre otros. Todos
ellos conforman las Reservas Internacionales Netas {RIN).

1.5. Reservas Internacionales Netas

Las Reservas Internacionales Netas miden, indirectamente, el grado en que


un país es vulnerable a los cambios en la economía mundial. Las variaciones en
el valor de las monedas, en los precios de las materias primas o de los productos
manufacturados van a determinar variaciones en los montos obtenidos por
exportación y los requeridos para importación.

Lo que pase con la inflación, el déficit, la producción, las exportaciones y


las reservas no sólo refleja la responsabílidad con que los gobernantes manejan
los instrumentos de la política económica. También es resultado del acierto o
desacierto de las ideas que ellos tienen sobre el significado de estas variables y
de la concepción que manejan acerca de cómo puede el Gobierno influenciar en
su evolución.

La hoja clínica de la economía peruana muestra que nuestros gobernantes


de Jos últimos 40 años, han sido cada vez menos eficaces o responsables en el
manejo de la política económica y que han tenido ideas equivocadas sobre el
significado de las variables y el tipo de influencia que la política podía ejercer
sobre ellas.

4
2. DOS DESTRUCTORES: GUZMAN Y GARCIA

Hace casi un año comenté en una conocida emisora radial que los nombres
de los dos más grandes terroristas que ha tenido el Perú empiezan con la iniciales
"A.G.": Abimael Guzmán y Alan García. El primero es un terrorista tradicional
que ha sembrado muerte y destrucción en el Perú, pero nunca pudo tomar el poder.
Hoy está encarcelado con el número 1509; su organización, "Sendero Luminoso",
perdiendo la "lucha armada" y su ideología, derrotada en el mundo. Guzmán es
t'CSponsable del asesinato de miles de personas en 1 2 años y de la destrucción de
bienes por miles de millones de dólares. García, por su parte, sí llegó al poder
y en sólo cinco años logró una destrucción económica y un empobrecimiento de
la población mayores que los de Guzmán. Para ello contó con una ideología
completamente equivocada y una gran vocación por la demagogia. Hoy goza de
un confortable auto exilio, viviendo entre París y Bogotá. Veamos el desastre que
nos legó cada uno de ellos.

2.1. Abhnael Guzmán: Muerte y Destnicción

La década de los ochenta conoció el crimen terrorista, liderado por Sendero


Luminoso. Su objetivo era la aplicación de los principios marxistas, leninistas y
maoístas a Ja sociedad peruana Se proponía imponer un sistema comunista,
mediante una estrategia basada en el terror, al estilo Poi Pot en Camboya En este
sistema se pretende liquidar el mercado, lo que lleva a la eliminación de la
libertad económica y política, y a la imposición del totalitarismo. Esta política
causó en Camboya más de un millón de muertos y probablemente ese mismo
número se habría repetido en el Perú de haber triunfado Sendero Luminoso.
Nuestro país habría sido así escenario del "Tercer Genocidio de este Siglo", como
lo manifestó en 1992 Bemard Aronson, alto funcionario del Departamento de
Estado Norteamericano.

Para medir los efectos de la barbarie terrorista durante Ja década de los


ochenta se requieren indicadores que salen del campo de la economía. Debido a
la subversión más de 22 mil personas murieron, 50,000 nifios quedaron huérfanos
y 700 mil peruanos fueron desplazados de su lugar de origen. Se perdieron
asimismo 22 mil millones de dólares en bienes materiales. Los atentados
producidos sumaron más de 20 mil, 1,100 de los cuales fueron contra torres de
alta tensión. Los subversivos seguían el "Camino de Camboya" en un momento
en que la ideología socialista y comunista se desmoronaba junto con el muro de
Berlín, como resultado del colapso económico del bloque socialista. Guzmán y
Sendero se mostraban como terroristas sin ideología ni romanticismo, como

5
meros asesinos. Sendero había íniciado el camino de su destrucción, pero s u
accionar había ocasíonado una gran fuga de capitales y había ahuyentado a la
inversión extranjera provocando la migración de cerca de 240,000 peruanos al
extranjero, entre los cuales había por supuesto una gran cantidad de profesionales.
Había generado, por último, una pérdida de confianza nacional e internacional
en el Perú como país viable.

Pero no sería justo afirmar que este cuadro de miseria es atribuible


únicamente a Guzmán y a sus huestes asesinas. Lo cierto es que sus propósitos
devastadores recibieron una gran ayuda desde Palacio de Gobierno entre el '85
y el '90.

2.2. Alan García: Desastre Económico y Fracaso Político

Alan García ha pasado a la historia como el peor presidente que ha tenido


que padecer el Perú. Los grandes desastres que ocasionó al país no tienen
precedentes y se pueden resumir en los siguientes puntos:

. Llevó a la economía peruana a la quiebra .


. Empobreció a la población .
. Permitió el deterioro de Ja infraestructura nacional .
. Estatizó importantes áreas de la propiedad privada.
. Aisló al Perú del mundo .
. Permitió el avance del terrorismo .
. Permitió el avance de la corrupción .·

. Concentró el poder político.


. Destruyó la administración de justicia y liquidó el derecho.
. Propició una crisis moral y de valores.

García, durante su gobierno, llevó al Perú a la crisis económica más grande


de su historia republicana. La bancarrota o quiebra que ocasionó fue más grave
que la que se experimentó durante la Guerra del Pacífico. La i nflación acumulada
de julio de 1985 a julio de 1990 alcanzó la tasa de 2.2 millones por ciento. El
crecimiento del PBI acumulado en dicho periodo cayó en 7%. El PBI per cápita
real llegó a 720 dólares, cifra menor que la de 1960.

Durante su gestión, las resevas internacionales llegaron hasta -300 millones


de dólares. El déficit fiscal y cuasi fiscal alcanzó el 16% del PBI. La presión
tributaria cayó de 14.4% a sólo 4.1% del PBI. La liquidez total se redujo de 17%
a sólo 6% del PBI. Las empresas estatales perdieron 1,653 millones de dólares.

6
El jngreso mínimo legal se redujo en 50%. Por último, los gastos en salud y
educación cayeron 15% en términos reales. Este cuadro es la auténtica "Radiografía
de un Desastre", según lo llamó la revista Perú Económico.

La población peruana se empobreció a niveles sin precedentes. El índice


de pobreza crítica en diciembre de 1989 llegó a un nivel de 141, comparado con
un valor promedio de 105 en 1985. En la ciudad de Lima la pobreza pasó del 17%
de la población en 1986 al 44% en 1990. La pobreza afectó a 13 millones de
peruanos y la pobreza crítica, al 54% de la población. Los gastos de consumo
cayeron en 46% entre 1986 y 1990. El gasto social por habitante se redujo de 46
dólares en 1986 a 12 dólares en 1990.1

La infraestructura nacional presentó un deterioro inédito. Al final del


gobierno de García, sólo el 20% de la red vial nacional se encontraba en buen
estado. En materia energética existía un déficit equivalente a 26% de la demanda.
No se realizaron inversiones para incrementar la oferta de agua potable, proveer
saneamiento, incrementar el suministro de energía eléctrica o construir carreteras
y caminos.

Lapropiedadprivada sufrió serios atentados. Se estatizó laBelco Petroleum,


los bancos, financieras y compañías de seguros y se nacionalizó Leche Gloria.
Esto generó caos y desconcierto, y lo paradójico es que tales políticas iban en
contra de las corrientes de privatización que se llevaban a cabo con éxito en el
mundo.

El Perú se aisló del mundo al seguir una política unilateral de no pago de


la deuda externa. Al pretender ser líder tercer mundista y latinoamericano en
materia de deuda externa, García nos convirtió en un "paria económico". El Perú
fue calificado de "inelegible" para nuevos créditos, tanto de los organismos
internacionales como de la banca y los proveedores. Asimismo, la polítiéa de
dedicar sólo el 10% de las exportaciones para el pago de la deuda externa
incrementó durante su gestión lo adeudado de 13 a 20 mil millones de dólares.
Nos endeudamos por siete mil millones de dólares a cambio de nada. Los
depósitos de moneda extranjera del Estado no podían mantenerse en la mayoría
de bancos extranjeros por temor a que fueran embargados.

La inversión extranjera desapareció del país. En cinco años el Perú recibió


15 millones de dólares, cuando Chile en un año recibía mil millones de dólares
y Malasia 11 mil millones de dólares a fines de los ochenta.

1 BID, 1992. pp. 221-228.

7
El terrorismo avanzó de manera alannante. Los atentados se incrementaron
de 2,050 en 1 985 a 3,149 en 1989. El número de torres de alta tensión dañadas
por los subversivos subió de 1 07 a 276. Las víctimas de la violencia política
pasaron de 1,437 a 3,022.

García, en lugar de combatir al terrorismo, quiso competir con é1, ser más
"izquierdista" que la subversión. Uegó incluso, en uno de sus discursos en 1988 en
Ayacucho, a alabar la "mística de] senderista". Dijo, en efecto, entre otras cosas:
"Cómo no vamos a admirar eso si tuviéramos 1 O mil militantes con la fe fanática
...

que tienen ésos, que dejan todo, no tienen familia, son tuberculosos. Qué autoridad
moral tenemos nosotros, a veces pienso, para combatirlos cuando estamos rodeados
de pseudo comodidades pequeñas".2

la corrupéión se extendió en forma alarmante. Entre 1 985 y 1990 el área


dedicada al cultivo de la coca prácticamente se duplicó alcanzando 200 mil
hectáreas. El dólar MUC, la colocación de las reservas en el BCCI, Ja negociación
de papeles de la deuda y las importaciones de alimentos fueron solamente la punta
del iceberg de la inmoralidad en la gestión pública de esos años.

García concentró en sus manos el poder político. El Poder Legislativo perdió


su autonomía, encontrándose a merced de sus designios. El Poder Judicial también
era controlado por él. Lo mismo sucedía con el Jurado Nacional de Elecciones y los
organismos de control. El Banco Central perdió su autonomía e imprimió dinero de
acuerdo a sus caprichos.

Por si esto fuera poco, dos años antes de que terminara su mandato García
nombró gente de su confianza en puestos claves de Gobierno, cuya duración era
de siete años, con el objeto de maniatar y .¡;ontrolar al régimen entrante. La
concentración de poder que tenía García para el período 1990-95 era impresionante.
Esta situación distanciaba al régimen político peruano que heredamos en 1990
de lo que debe ser una democracia legítima.

A tal punto había llegado esa deformación que, entre 1990 y 1992, García
manejaba o tenía influencia todavía sobre la Contraloría General de la República,
el Tribunal de Garantías Constitucionales, el Poder Judicial, el Consejo de la
Magistratura, el Jurado Nacional de Elecciones y alrededor de 20% del Congreso
Nacional. Adicionalmente, seguía detentando el poder en el Partido Aprista, tras
haber sido reelegido Secretario General por aclamación. También tenía el apoyo de
algunos medios de comunicación de manera bastante parcializada

2El Comercio, 5 de julio, 1988, p. AS.

8
Finalmente, García acarreó una pérdida de valores morales y éticos
inconmesurab1e en el país. El deterioro de principios, la desmoralización de la
población, el desencanto y l a desesperanza fueron en gran parte obra de García.
Para muchos no había salida. El caos y la destrucción eran nuestro destino
inexorable. Con esta política García "exportó" peruanos. El capital humano,
lamentablemente, es muy difícil de recuperar y tomará muchos años restuírlo. Al
liderar la oposición, muchas veces, García desacreditó a los partidos políticos en
general y minó la confianza de los peruanos en un régimen constitucional.

3. LA FABRICACION DEL DESASTRE

Si bien nada se puede comparar al desastre producido por el gobierno de


Alan García, la crisis heredada en 1990 no fue resultado sólo de esa mala
administración. El régimen de García fue el extremo al que llegó el desmanejo
y la irresponsabilidad, así como el error ideológico e intelectual practicados en
las últimas cuatro décadas. Durante todo ese tiempo se privilegió la decisión
política por sobre el criterio técnico que exigía el manejo de los asuntos públicos.

La nuestra es la historia del triunfo de la política sobre Ja economía. La


política se ha entrometido en los asuntos económicos a través de una progresiva
concentración de poderes en el gobierno y, con respecto a él, de una serie de
jaJoneos por su usufructo y extensión. Ello explica que, aunque los gobiernos
cambiaran de signo político, el resultado fuera invariablemente un crecimiento
del aparato estatal y de su injerencia en la economía. Este ha sido, a su vez, el
motivo de la disminución de los estándares de vida del poblador peruano.

La causa de elJo no ha sido el Estado por sí solo, sino la apropiación de sus


poderes por parte de grupos de intereses sectoriales o gremiales tratando de servir
a sus fines a través de la presión, la influencia y el privilegio. Incluso gente bien
intencionada ha caído en Ja garras de este sistema, que Hernando De Soto caracterizó
como mercantilista por su semejanza con lo que sucedió en Europa entre los
siglos XVI y XVII 3• La lógica de ese sistema hace que el poder atraiga como un
imán a Jos aventureros, a los incapaces y a Jos aprovechados.

3 Se puede constatar, afirma Hemando de Soto, que "el sistema de la Europa mercantilista y el
sistema de Derecho redistributivo del Estado peruano tienen una gran semejanz.a" dado que "comparten,
en mayor o menor grado, características como la producción autoritaria de la legi.,Jación, un sistema
económico directamente intervenido por el Estado, una reglamentación engorrosa, detallada y 'dirigista'
de la economía, acceso dificil o imposible a la empresa por parte de los que no tienen vínculos estrechos
con los gobernantes , burocracias abigarradas y una ciudadanía obligada en muchos casos a organizarse
en coaliciones redistributivas y gremios poderosos." DE SOTO, 1986, p. 259. En general, véase el
capitulo Vil, #El Paralelo Mercantilista".
El sistema hizo una crisis extrema a fines de los '80, pero ya desde los años
cincuenta había síntomas de su efecto perverso sobre la economía. Así lo
demuestran los principales indicadores económicos.

3.1. El Precario Equilibrio de los 'SO

En los '50, durante los gobiernos de Odría y Prado, la inflación promedio


fue de 8% al año. Esto, que hoy podría parecer un paraíso, era en ese momento
una tasa alta en el contexto mundial.

Hacia finales de la década esta tendencia se había profundizado y en 1959 la


inflación anual llegó a 12.6%. Fue entonces que entró al Ministerio de Hacienda
Pedro G. Beltrán, cuya gestión constituye el único esfuerzo por un cambio
significativo antes del '90. El logró reducir la tasa inflacionaria en nueve meses al
punto de que, ya en 1961, se registró una tasa anual de 3.6%.

El Programa Económico de Beltrán pudo, en corto tiempo, estabilizar la


economía, comenzando por equilibrar las cuentas del gobierno, de suerte que
para el '60 y el '6 1 se registra, incluso, un saldo positivo.

En los años '50, en el contexto de una intervención del Estado en la


economía relativamente limitada, hubo un crecimiento sostenido de la producción.
Eso permitió aprovechar las oportunidades del momento. No se había dado el
"boom" exportador y no obstante alcanzamos tasas de crecimiento del PBI del 7%
anual en promedio.

En esa década, nuestra economía tenía un grado de vinculación con el


exterior mucho más alto que el actual, ya que las exportaciones representaban
alrededor del 20% del PBI. En 1960 este rubro había crecido en más del 100%
con respecto a 1950, pasando de 194 millones de dólares a 444 millones de una
fecha a otra. En 1961 el nivel fue de 510 mi1lones de dólares.

Había niveles aceptables de inversión extranjera y podíamos, además,


captar ahorro externo a través del endeudamiento. La deuda pública creció sin
embargo en forma permanente aunque, a finales del período, Beltrán logró
reducir sustantivarnente los niveles de lo adeudado, mientras aumentaban las
exportaciones.

Las reservas reflejaron también las crisis del momento. Si bien en la década
se mantuvo un nivel promedio por encima de los 60 millones de dólares, ello

10
representaba más del 20% del promedio de las exportaciones. Beltrán fue
llamado al Ministerio de Hacienda cuando el nivel de las reservas cayó a 43
millones de dólares o 15% de las exportaciones, lo que se consideraba entonces
un desastre. Luego de aplicado su programa de estabilización, ese nivel se
recuperó hasta alcanzar 124 millones o 24% de las exportaciones de 1961.

3.2. Los Frutos del "Desarrollismo"

Lapolítica sin embargo, cortó la tendencia a la recuperación y estabilización


de los principales indicadores. Lejos de aprovechar los resultados económicos, tanto
laJuntaMilitardeGobiemo(queejercióelpoderentre 1962y 1963ycreó,entreotras
cosas, ellnstituto Nacional de Planificación) como el primergobiernodel arquitecto
Belaunde ( 1963-68), ampliaron la esfera de intervención económica del Estado,
inyectando más dinero a las empresas estatales, haciendo crecer laadministración
pública y desentendiéndose del tema del equilibrio y la disciplina fiscal.

En ese entonces la mayoría de la gente no percibía la inflación como un


gran problema, al punto que se admitieron una serie de teorías y posiciones
inflacionistas que no mucho más tarde hicieron ver sus consecuencias indeseadas.
El tamaño del gobierno crece aún contra la voluntad del gobernante, por la propia
lógica del sistema, a no ser que se cuente con un programa de acciones específicas
para detener la tendencia. No basta con estar persuadido de las ventajas del
mercado, hay que estar absolutamente convencido de la superioridad de este
sistema y de los principios que exige mantener en forma inalterable.

En efecto, en los '60, fundamentalmente bajo el primer belaundismo y en los


inicios del gobierno de V elasco, la inflación promedio fue de 30% anual. El influjo
de las ideas "desarrollistas" rompió con la visión ortodoxa de la política monetaria
de la década anterior. Según la nueva percepción de las cosas, el Gobierno podía
intervenir en la economía protegiendo a la industria nacional de la competencia del
extranjero e invirtiendo sus recursos en el proceso productivo, aunque para ello sus
cuentas incurrieran en déficit.4

4 Si bien ya en 1959 la ley 13270, de Promoción Industrial, anunciaba la desviación del marco
de una economía orientada por el mercado a otra guiada por la intervención gubernamental, en 1961
era evidente la vuelta que había dado la tendencia. Un hecho anecdótico la ilustra muy claramente.
En la primera Conferencia Anual de Ejecutivos (CADE), inauguraba el evento Pedro Beltrán,
advirtiendo sobre una época "llena de peligros, si nos equivocamos en el camino", mientras en la
clausura Raúl Prebisch hacía un abierto llamado a la "planificm:ión económica en la América
Latina" para fijar objetivos de producción y dar los estímulos respectivos. IPAE, 1961, pp. 14 y 219-
20, respectivamente.

11
Bajo el modelo nacionalista, en los años sesenta se comenzaron a suceder
déficit fiscales de hasta más de 2%. De haber sido eficaz, el modelo de la
"sustitución de importaciones" que cobró fuerza en esa década. las tasas de
crecimiento de la producción habrían mejorado o, por lo menos, se habrían
mantenido. Los resultados, sin embargo, fueron otros: el promedio anual de la
tasa de crecimiento del PBI pasó del 7% en la década del cincuenta a sólo 4%en
la década del "desarrollismo".

Perdimos entonces ritmo en el aumento de nuestra capacidad exportadora


y, por supuesto, en el grado de vinculación de nuestra economíacon el resto del
mundo. Como porcentaje del producto, las exportaciones cayeron al 17% y
disminuyó el flujo de inversión extranjera.pero no el endeudamiento externo. En
elcontextode una tendencia a la caída dela producción el aumento del endeudamiento
representaba un riesgo. Si exportábamos menos en términos relativos, ¿cómo
pagarí amos en el futuro esos créditos?

En 1961 teníamos una deuda pública externa de 140 millones de dólares


y exportaciones por 51Omillones. Hacia 1969la deuda era de 874millones frente
a exportaciones de 880 millones de dólares.

Ya hacia 1968 se habían acumulado los frutos nocivos del mal manejo
económico. El gasto público había pasado de 13.3%del PBIen 1961a 18.6% en
1967 y la inflación,de 3.6%en 1961a 10.8%en 1967y a 18.4% al año siguiente .
Las cuentas fiscales habían pasado de los superávit de 1960 y 1961 a déficit de
3% del PBI en 1966 y 1967.

La producción, mientras tanto, luego de haber crecido 8.2% en 1960 veía


declinar sus tasas de 3.3% en 1966 a 0.4% al año siguiente y a -3.l % en 1968.

La situación estaba maly seguía empeorando. Quizápor eso no existió un


rechazo de la población al golpe militar del 3de octubre de 1968,encabezado por
Velasco . La gente quería un cambio a como diera lugar, aunque no supiera
exactamente en qué dirección.

3.3. El Intervencionismo Desatado

Quienes llegaron al poder en esa oportunidad eran partidarios del


intervencionismo estatal. Se explicaban los males de la economía por una
insuficiencia en l a aplicación del modelo: como la intervención parcial en la
economía no había dado resultado, se pensó que había que generalizarla y

12
profundizarla. protegiendo a Ja industria nacional de la competencia y controlando
por decreto las principales variables económicas.

El Gobierno Militar pretendió cambiar todos los aspectos de la vida


económica y política de la nación. Supeditó la actividad privada a la planificación
compulsiva y omnicomprensiva del Gobierno. Barrió el derecho de propiedad en
el agro, a través de la Reforma Agraria. quiso sustituir el sistema de partidos a
través del S inamos, creó beneficios especiales para la llamada "propiedad social"
(autogestionaria}. para las cooperativas y las empresas estatales. Desplazó la
iniciativa privada sustituyéndola por la acción estatal a través de la Reforma
Pesquera que malogró el desarro llo espectacular de esta actividad. Controló la
producción manufacturera a través de aranceles diferenciados y muy altos (la
protección efectiva arancelaria y cambiarla se acercó a1 400% 5), creó la ley de
Estabilidad Laboral, bajo el supuesto de que la legislación del Estado podía
sustituir a la demanda de mano de obra de la producción con tan sólo dar un
mandato gubernamental. Estableció la Comunidad Laboral, el Re¡istro de
Manufacturas, multiplicó las licencias para producir, importar y comerciar; impuso
el control de cambios, incrementó la inversión pública, aumentó irresponsablemente
el endeudamiento y estatizó empresas privadas.

Los remedios, obviamente, fueron peores que la enfermedad. En los '60,


bajo Velasco y Morales Bermúdez, la inflación anual fue de más del 70% en
promedio. Se produjo un crecimiento rápido y desproporcionado del Gobierno
Central, alrededor del cual se formaron más de doscientas empresas públicas.
Todo salía de las arcas fiscales, creando en conjunto déficit cada vez mayores.
Estos llegaron a representar, en promedio, hasta 5% del producto.

A pesar de haberse aumentado el gasto y la inversión pública, cayeron los


niveles de crecimiento de la producción. En los sesenta la tasa promedio había
sido de 5. 1 % anual, mientras que en los setenta fue de 3.2%.

El escaso crecimiento obtenido, además, era en mayor medida resultado de


la "inflación" de recursos inyectados en la economía que de un crecimiento real de
la producción. Se produjo entonces un mayor endeudamiento para las empresas
públicas, para el Gobierno Central y para equipamiento bélico. Fue en ese momento
que nos precipitamos en el carrusel de la deuda externa. Contamos para ello con
la ayuda de los organismos multilaterales de crédito y aquellos de sus funcionarios
que creían estar financiando el desarrolJo de los países del Tercer Mundo.

s Ferrari ( 1982), p. 62 y SS.

13
Durante esa década la capacidad exportadora siguió cayendo hasta llegar
al 1 4% del PBI y, por efecto de l as nacionalizaciones y expropiaciones, se terminó
de ahuyentar a la inversión extranjera del país. Perdimos nuestra posición en los
mercados del pescado, los minerales y el petróleo. ¡En los años del "boom" de
precios de las materias primas !

Las Reservas Internacionales Netas reflejaron el impacto del endeudamiento.


registrándose durante tres años consecutivos reservas negativas.

Hacia fines de la década la crisis económica hizo insostenible al régimen


político y tuvo que llamarse a elecciones para una Asamblea Constituyente, lo
que creó expectativa y esperanza en Ja población. Para Jos bolsillos de la gente,
sin embargo, pocas cosas cambiarían con el advenimiento de la democracia.

3.4. Democracia Deficitaria

Para mantener las formas, los militares dijeron que el regreso al sistema de
renovación del poder por elecciones debía estar condicionado al mantenimiento
de las "reformas estructurales". Los líderes de los partidos rechazaron tales
exigencias y declararon la autonomía y soberanía de la Asamblea Constituyente.

Curiosamente, sin embargo, el texto constitucional consagró las principales


"reformas estructurales". así como la "planificación concertada", la "iniciativa
privada armonizada con el interés social " , el estímulo a las empresas
autogestionarias, la actividad empresarial del &tado para "promover" la economía
o la reserva de cualquier actividad económica en su conjunto a favor del
Gobierno, entre otras cosas.6

El segundo gobierno del arquitecto Belaunde (1980-85) mantuvo todo el


pesado e i neficiente aparato empresarial del &tado, no hizo mayores esfuerzos
de raciona1i:zación de la administración pública, ni eliminó las excesivas regulaciones
estatales sobre la actividad privada. La intervención estatal se mantuvo, aunque
moderadamente administrada, en casi todos los campos del quehacer productivo

• Para una documentada critica sobre los efectos económicos de los graves errores contenidos
en la Constitución de 1979. véase el documento del Instituto Apoyo, 1992. Incoherente e
intervencionista. dice el Resumen Ejecutivo de este valioso trabajo, la concepción básica de la carta
del '79 "ignora las leye.q más fundamentales de la «onomfa y, paradójicamente, termina perjudican­
do a quien busca proteger".

14
y comercial . En el aspecto financiero, incluso, el poder gubernamental para
la toma de decisiones económicas aumentó.

Se expandió la banca "asociada" y se facilitaron mayores créditos a través


de la llamada Banca de Fomento. Gran parte del proceso inflacionario de la
década se puede explicar por la utilización de este mecanismo de crédito
artificial. En 1977 el crédito de la banca de fomento era un 25% del crédito
interno; en 1982 llegó a un 40%.

En el segundo régimen de Acción Popular se continuó con los controles de


precios en productos claves para la economía, como los combustibles, los
alimentos, el crédito, el tipo de cambio (que, además, era distinto según la
actividad económica), el acero y el cemento, entre muchos otros.

En el comercio se hizo una mínima reducción de los niveles arancelarios.


En promedio bajaron de 39 a 34% de julio de 1980 a diciembre del mismo año,
pero en diciembre del '84 terminaron en 57%. En algunos sectores se sintió más
la exposición ante la competencia extranjera, debido a que había una gran
dispersión en los aranceles. Se mantuvieron, además, innumerables controles,
supuestamente de calidad, sobre las mercancías importadas (controles sanitarios,
fito y zoo sanitarios, entre otros). Estos controles, denominados "barreras para­
arancelarias ", parecerían estar hechos en realidad para impedir la competencia
de los productos extranjeros.

Las empresas públicas se mantenían a través de los subsidios a la


producción y el control de precios para evitar la competencia. Ello ocasionaba
enormes transferencias del Tesoro Público y, a la vez, anulaba la iniciativa
privada y creaba graves distorsiones en el mercado, dando ganancias a empresas
que no utilizaban eficientemente Jos recursos productivos y financieros.

Este esquema hizo muy vulnerable a la economía. El promedio de inflación


anual del período 1 98 1 - 1 985 fue de 108%. El déficit fiscal se situó en promedio
en 7 .1 % del PBI. La producción prácticamente no creció en el período, mostrando
un promedio de variación anual del PBI de 0.04%. Las exportaciones tuvieron un
crecimiento promedio de apenas 0.4% al año. Las Reservas Internacionales
Netas, por su lado, sí exhibieron un repunte, pasando de 77 1 millones de dólares
en 1 98 1 a 1 ,420 millones en 1 985.

15
3.5. El Futuro Diferente

Al final del segundo belaundismo, las cosas habían empeorado y la gente


nuevamente quería un cambio, viniera de donde viniera. Alan García lo ofrecía,
prometiendo... mayor intervención estatal en la economía. "La planificación -<lecfa
el Plan de Gobierno de] Apra- constituye aspecto fundamenta] de nuestro futuro
gobierno", ya que el mercado no asigna adecuadamente el ingreso. "En esta tarea,
fundamental papel le corresponde al Estado", sentenciaba el documento.

Alan García prometía ampliar la actividad empresaria] del Estado y


"reestructurar los patrones de consumo en función de las exigencias del país"; es
decir, planteaba sustituir las preferencias de los ciudadanos por las del Gobierno,
de manera de poder planificar la asignación de recursos.

También se proponía reconvertir la industria nacional en función del nuevo


modelo de desarrollo. Advertía, además, que la banca privada debería canal izar
los recursos financieros "en función de las prioridades: globalmente definidas por
el Gobierno", como "condición imprescindible que garantice su supervivencia".

El Plan de Gobierno del Apra consideraba que la inflación, si bien era un


problema, no debía constituirse en obstáculo para lograr los fines de reactivación
productiva. Suponía que la inflación bajaría luego de la reactivación. Para ello,
proponía la concertación, el control de precios, un tipo de cambio diferenciado
y la reducción del déficit "no a partir de una reducción drástica del gasto".7

La realidad volvió tercamente a traicionar los buenos deseos: García nos


l levó hasta una hiperinflación de 7,650% en diciembre de 1 990.

Con Atan García tuvimos treinta meses con una inflación mensual promedio
de 39%. Inicialmente la inflación cedió por la reducción del déficit operada
durante el último tramo del gobierno anterior. El déficit "manejable" de García
Pérez, a pesar de ello, fue en promedio de 6.4% para sus cinco años de gobierno,
sin contar con que no se pagaba la deuda externa. Si se toma en cuenta el déficit
fiscal y cuasifiscal 8, la cifra corresponde al 16% del PBI en 1 990.

7 Comisión Nacional de Plan de Gobierno, Plan del Perii, Aprendamos a Vivircon lo Nuestro,
pp. 33, 66 y 68.

• BI déficit cuasifiscal es la emisión del Banco Central para financiar el gasto público.

16
La producción. Jejos de ser reactivada. cayó en promedio en más del 7%
de 1985 a 1 990. De nada sirvió haber "inflado" la economía los dos primeros
años con tasas artificialmente sostenidas de 9.3 y 8.3% de crecimiento del PBI.
En los ú ltimos tres año s de la década se llegó a una caída de más del 20% del
producto.

Las exportaciones se habían estancado y en términos comparativos habían


caído a menos del 10% del Producto Bruto Interno.

Las reservas se utilizaron irresponsablemente para "reactivar". Según el


Gobierno, si en las bóvedas del Banco Central "había plata", ¿por qué no recurrir
a esos fondos para inyectarlos en la economía? Si se cobraban menos soles por
dólar. los empresarios podrían importar más y, así. producir también en mayor
cantidad.

Fue bajo el influjo de este razonamiento que se remataron los dólares a


quienes lograron ponerse en las listas de favorecidos. Ellos compraban dólares
más baratos que los que se vendían en la calle. Por el precio de cada dólar que
un ciudadano común podía obtener, los favorecidos podían comprar tres.

Fue así corno se dilapidaron nuestras reservas. llegando a ser negativas en


varios cientos de millones de dólares en 1988 y de apenas 690 millones en 1990.

Obviamente el esquema alentaba la corrupción. Más aún, como los demás


peruanos pagábamos más soles por cada dólar, el resultado final no fue -ni iba
a ser nunca- una mejora de la economía mirada en su conjunto. Unos cuantos
se llenaron los bolsillos; pero al término de ese gobierno éramos más, trabajábamos
mayor tiempo y ganábamos mucho menos.

El retroceso había sido completo. No había inversión extranjera, no había


capacidad de endeudamiento y. paracolmo, no había reservas. Teníamos hiperinflación
y l a producción había caído drásticamente. El país estaba. finalmente, quebrado.

Hay que dejar en c laro, sin embargo, que el hecho de que l a gente haya
escogido reiteradas veces una alternativa equivocada no es un argumento contra
la democracia sino, específicamente, contra los líderes políticos y los intelectuales.
Fueron ellos los que no ofrecieron propuestas verdaderamente alternativas o no
fueron capaces de hacerlas suficientemente atractivas. En política sucede lo
mismo que en el mercado: el "comprador" sólo puede escoger entre las opciones
que ve en vitrina. Es a Jos responsables de la oferta política a quienes toca
proponer ideas, programas y caminos a seguir.

17
Las políticas de fuerte intervención estatal y la despreocupación por la
inflación y el déficit fiscal crearon un grao caos. una menor producción y aumento
de la pobreza. Creció no sólo la pobreza-visible sino. sobre todo, la encubierta.
Poner las cosas en orden iba a revelar necesariamente la verdadera magnitud del
daño ocasionado a la economía y a la gente.

4. UNA OPORTUNIDAD INEDITA ·

4.1. La Hora de los Independientes

Las elecciones de 1 990 representan un fenómeno realmente complejo. El


voto mayoritario fue a favorecer a un candidato poco conocido en el ámbito
nacional, cuya única virtud electoral era la de no ocupar el lugar del Apra y la
17.quierda. pero tampoco formar parte del Frente Democrático.

A pesar de proponer tesis de s::ambio con respecro a las tendencias


predominantes de las últimas cuatro décadas, Vargas Llosa no logró convencer
al electorado. Sepuede especular mucho sobre las razones de esto, pero entre ellas
habráque contar sin duda a su alianza con dos de los partidos ahora l lamados
tradicionales.

Quizá en esa época no se podíaver con claridad lo que hoy es evidente: la gente
buscaba un cambio total, no solamente un nuevo gobierno. ¿Podía confiarse este
encargo a personajes que ya habían ocupado la escena política? Vargas Llosa
tercamente intentó demostrar que sí, mientras que Fujimori presentó, por vaga e
imprecisa que fuera, una alternativa

Como en un primer momento Vargas Llosa ejercía atractivo electoral,


todos sus seguidores querían aparecer identificados con él. En las pantallas de
televisión se veía al candidato abrazado, por ejemplo, con dirigentes empresariales,
con políticos tradicionales e, incluso, con personas que habían apoyado la tesis
de Alan García de la reducción unilateral de la deuda.

Los expertos dicen que se creó u.n "efecto de saturación" publicitaria. Un


despliegue inusitado de recursos en la propaganda, en una época muy dura para
la gente común, difícilmente podía generar confianza entre 1.os electores. ¿Cómo
podrían los de toda la vida realii.ar los cat'DQios necesarios? ¿Cómo repondrían
la financiación de campañas que iban desde los 100 mil dólares. las más
modestas, hasta el millón de dólares? ¿Era tata la genle que se iba a ocupar de

18
Ja pobreza en elPeni? &tas preguntas quizá no se formularon de modo explícito,
pero uno puede ver ahora que formaron probablemente parte de la inquietud del
electorado.

El primer campanazo severo de crítica contra el viejo orden establecido lo


revelaron las encuestas que se hicieron inmediatamente después de que, a
mediados de 1989, el candidat9 dt=) Fredemo renunciara a Ja candidatura
presidencial y rompiera con suial�s porque éstos no se ponían de acuerdo para
ir también en alianza a las elecciones municcipales. Según esos sondeos, 68%
estaba de acuerdo con que Acción Popular y el Partido Popular Cristiano retiraran
sus candidaturas municipales. Significallvamente, en el estrato más popular, el
porcentaje llegaba a- 72%. Adicionalment.e. el 72% de encuestados estaba de
acuerdo con que Vargas Llosa debía ser candidato aun si se rompía el Frente
Democrático 11• Bien manejado ese capital. electoral, otro quizá hubiera sido el
resultado de los comicios. Pero superado el problema, Vargas Llosa, por alguna
razón, prefirió insistir con la idea del Frente, cuando ya para entonces la izquierda
no representaba la amenaza que pudo parecer en 1987.

El segundo carnpanazo fue la masiva elección de Ricardo Belmont como


Alcalde de Lima. Era la hora de los independientes; esto es, el ocaso de los
partidos. Sólo así se explica que al año siguiente el ingeniero Fujimori lograra
derrotar al candidato que durante meses se mantuvo favorito, que contaba con
gran apoyo financiero y logístico y en favor del cual salieron artistas, deportistas
y hasta el propio Belmont, para tratar de endosarle las simpatías.

Hay que decir que, a pesar de su derrota, Vargas Llosa contribuyó con un
b�e de ideas fundamentales para los cambios que tenían que darse. Modificó
la agenda política del país y despertó en la gente intereses que antes no habían
sido .identificados, como, por ejemplo, el que se refería a la reducción del aparato
empresarial defEstado. Su campaña fue también una campaña a favor de la
reducción de la interferencia estatal en la economía.

Las encuestas revelarían, meses después, que, por ejemplo, 8 1 % de la


opinión pública creía que el &lado podía servir mejor al pueblo con pocas
empresas, muy eficientes en sus manos. Lo notable es que esta opinión la
compartía el 74% de los encuestados del estrato popular, según un sondeo de
mayo de 1 989. En diciembre de ese año� ya 43% de los encuestados pensaba que,
en principio, todas las empresas estatales debían privatizarse y en febrero de 1 99 1
56% consideraba que l a productividad mejoraba con la transferencia de las

9Apoyo, 1 989b. Anexo.

19
empresas al sector privado. En el estrato popular el 45% estaba de acuerdo y 48%
de los encuestados que se autocalificaban "de izquierda", también. m

4.2 Oportunidad Unica

Si bien la elección de un candidato desconocido representa un riesgo, la


población electoral prefirió correrlo con tal de librarse de la carga que hubieran
representado los intereses que ya habían rodeado a Vargas Llosa. Fujimori era una
incógnita, pero no lo era menos lo que hubiera podido suceder entre Vargas Llosa,
Jos partidos tradicionales y los grupos empresariales que, de la noche a la mañana,
confesaban su conversión ideológica.

Dicen Mílton y Rose Friedman que con todo cambio de gobierno se abre
la posibilidad, en los primeros seis a ocho meses, de realizar cambios decisivos
en la legislación y regulaciones estatales que protegen y preservan los grupos de
interés, los burócratas y los políticos que obtienen beneficio de las rnismas .11

En el Perú de 1990, a pesar de que Vargas Llosa propiciaba un cambio del


orden establecido, se veía difícil que pudiera vencer esta alianza de interés, que
ya se había formado a su alrededor, copando los puestos claves de lo que sería la
nueva administración. El hecho de que, durante tantos meses, el candidato del
Fredemo apareciera como único favorito, convirtió sus cuarteles en una i nstancia
de poder, donde ya se concentraban ciertas influencias del viejo orden establecido.

El triunfo de Fujimori dio, por eso, una oportunidad inédita al país, al


"descolocar" a los grupos de presión e impedir su inmediato trasvase hacia las
huestes ganadoras. La recomposicibn de las posiciones mercantilistas tomaría
meses en remontar las distancias creadas por el enfrentamiento electoral; el
Gobierno tendría, pues, precioso tiempo libre de influencias para iniciar un
cambio de rumbo radical.

1ºApoyo, 1 989a, diciembre de 1989c, 199 1 .

' 1 Los Friedman seilalan que todo nuevo presidente tiene un periodo d e "luna de miel" en el
que se suspende el poder de las influencia.� y en el que, por tanto, se pueden hacer gmmles cambios.
Friedman, Milton y R. Friedman ( 1 984), pp. 9, 41 y ss.

20
4.3. Fujimori en el Poder
El ingeniero Fujimori triunfa en 1as elecciones del '90 sin tener equipo ni
plan de gobierno, anunciando únicamente un enfático rechazo a las líneas
generales del programa económico del Fredemo� Pero si bien esos planteamientos
podían ser efectivos para ganar una elección, no lo eran para gobernar el país. De
aplicarlos, su gobierno terminaría adoptando la forma de un continuismo poco
matizado, de resultados previsibles. Si se quería salir del abismo, había que sanear
y modernizar la economía con un plan de orientación ortodoxa.

No obstante, 1as personas que conformaban el entorno inmediato deJ


Presidente electo , los llamados "siete samurais", no eran precisamente técnicos
con los que se pudiera llevar adelante un programa económico de esa naturaleza.
Por el contrario, dada su formación ideológica y su trayectoria política, era difícil
que aconsejaran hacer algo muy distinto de 1o que había venido haciendo García.
Entre ellos, quien más ascendiente tenía sobre el ingeniero Fujimori era Adolfo
Figueroa, un economista bastante inclinado a la intervenci6n del &tado en Ja
economía.

La única persona cercana en ese momento al Presidente que creía en la


economía de merc ado era Hemando de Soto, el presidente del Instituto Libertad
y Democracia. El ingeniero Fujimoñ había recurrido a él, sobre todo después de
la primera vuelta, interesado en sus ideas acerca del sector informal y, por
supuesto, a sabiendas también de las desavenencias personales que lo habían
alejado dos años atrás de Vargas Llosa.

De Soto tuvo el buen tino de persuadir al ingeniero Fujimori de hacer una


viaje a Estados Unidos como Presidente electo, para entrevistarse con los
representantes de los organismos financieros internacionales y mejorar su
imagen y la del país frente a ellos. Le sugirió también que para hacer este diálogo
fructífero, se rodeara de técnicos y asesores de peso, capaces de sintonizar con
las inquietudes y absolver las i nterrogantes de los voceros del Fondo Monetario
Internacional, el Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo.

Se barajaron varios nombres, la mayoría de los cuales fue desestimada por


el Presidente por razones políticas o de imagen. Hasta que por fin se l legó a la
conclusión de que Carlos Rodríguez Pastor era la persona ideal. Si bien había sido
Ministro de Economía durante el segundo belaundismo, su imagen de técnico
serio, la solvencia con la que se había desempeñado en el cargo (teniendo en cuenta
las limitaciones que ese régimen suponía) y el perfil bajo que había mantenido a lo
largo de su gestión, lo salvaban de ser identificado políticamente con el desafortu­
nado gobierno de Acción Popular.

21
No sin esfuerzo, Hemando de Soto convenció a Rodríguez Pastor de, primero,
enviarle al Presidente Fujimori un fax con sus recomendaciones acerca de lo que
debería hacer el nuevo gobierno en materiaeconómica y. segundo-una vez que el
ingeniero Fujimori dijo que las recomendaciones le parecían sensatas-, de
acompañarlo y ayudarlo a formar un equipo de técnicos para el viaje a F.stados
Unidos. Como es obvio, las recomendaciones de Rodríguez Pastor eran de
orientación "-Ortodoxa". como lo e.ran también los fénicos peruanos con los que se
puso en contacto para cumplir con el encargo del Presidente: Luis Valdivieso, Felipe
Morris y yo.

Por ese entonces yo vivía con mi familia en Connecticut, donde estaba


dedicado a negocios particulares y me desempeñaba también como consultor
internacional. Había dejado el Perú a mediados del '89. preocupado por el avance
del terrorismo y el desastre económico en el que nos había sumido el gobierno
de Alan García. Sólo venía a Lima cada�ierto tiempo para supervisar los intereses
que mantenía aquí.

La campaña presidencial la había seguido de lejos y, hasta antes de la primera


vuelta, no había tenido más noticia del ingeniero Fujimori que un cartel publicitario
que detecté en la avenida Javier Prado en una de mis breves estadías en Lima. Como
muchos. pensé que se trataba solamente de un candidato sin posibilidad alguna. No
obstante,cuando Vargas Llosacayóderrotado porcausadesus propios errores y tuve
conocimiento de los lineamientos económicos que el candidato ganador había
anunciado para su gobierno, pensé que no había muchas esperanzas para el futuro
del país.

Cuando Rodríguez Pastor me ubicó, corrían los primeros días de julio y yo


me encontraba en Miarni por motivos familiares. Me habló por teléfono y me
pidió que le diera el encuentro en el aeropuerto, donde él solamente estaría por
unas horas, pues debía hacer la conexión con otro vuelo. No quiso mencionar el
tema de la reunión hasta tenenne frente a frente. Accedí a la cita, pero cuando
nos encontramos y finalmente me reveló el propósito de la entrevista, pensé que
estaba bromeando.

¿El candidato que había ganado las elecciones predicando el "no" al ajuste
económico quería ahora montar un equipo de orientación ortodoxa para que lo
asesorara en sus reuniones con los organismos financieros? Y, en todo caso, o
estar seguros de que el ingeniero Fujimori sería luego cons ecuente con aqu ue
se comprometiera a hacer en Nueva York? Lamenté tener que rechazar la invitación
pero, aparte de las reservas que tenía acerca de la seriedad del esfuerzo, los asuntos
familiares que me habían llevado a Miami se encontraban todavía pendientes
y no podía postergarlos más. Me despedí de Rodríguez Pastor y quedamos en que
nos mantendríamos en contacto.

El siguió viaje hacia Nueva York, donde se reunió con el ingeniero


Fujimori, Hernando de Soto, Adolfo Figueroa, Felipe Morris y Luis Valdivie5o.
Lo que allí sucedió es bastante conocido. Gracias a la intervención de Javier Pérez
de Cuéllar, quien era entonces todavía Secretario General de la ONU, el
Presidente Fujimori fue recibido por los organismos financieros internacionales
y, basándose en el fax de Rodríguez Pastor, expuso cuáles habrían de ser los
lineamientos de la política económica de su gobierno. Es a esta primera promesa
de viraje hacia una economía sana a lo que Michael Camdessus denominó
"música celestia1" para sus oídos.

Pero esas conversaciones no quedan decir que el ingeniero Fujimori


estuviese ya completamente con vencido del rumbo que debía imprimirle a nuestra
economía . Los "samurais" seguían siendo una voz importante en su entorno y,
:sintomáticamente, tuvo por esos días una áspera discusi6n acerca de lo severa que
debía ser la disciplina fiscal del futuro gobierno con Luis Valdivieso, a quien poco
después apartó del equipo económico por "conflictivo".

De Nueva York, el ingeniero Fujimori siguió viaje a Japón, acompañado


por Adolfo Figueroa. Lo que el gobierno japonés le transmitió en esa oportunidad
no ha trascendido. Pero cabe suponer que le hicieron saber que, para contar con
su colaboración, se requería llegar a un acuerdo con el FMI.

En su viaje de regreso a Lima, el ingeniero Fujimori se detuvo en Miami


y pasó una tarde en la habitación de un hotel, reunido con el equipo económico
que lo había acompañado en Nueva York (menos Luis Va1divieso). Como todavía
me encontraba en esa ciudad, Rodáguez Pastor me invitó a participar de esa
nueva reunión y esta vez sí acepté. Si mi consejo podía ser útil para que en el Perú
se impusiera un manejo económico sensato. en buena hora. Además tenía una
gran curiosidad por conocer al protagonista de la hazaña electora] más inusitada
de nuestra historia.

Me presenté en el hotel a la hora acordada y me hicieron pasar a la


habitación que ocupaba el Presidente electo. Ahí estaban, sentados sobre las
camas, Rodríguez Pastor, Felipe Morris, Adolfo Figueroa, Hernando de Soto y
el propio ingeniero Fujimori. Se empezó a hablar del plan económico y se me
pidió que expusiera lo que yo creía que debía hacerse para controlar la
hiperinflación.

23
Yo tenía el tema muy fresco, pues entre el '85 y el '88 había seguido de cerca
el proceso boliviano y había estado en contacto con el ministro Sánchez de
Losada y su asesor Jeffrey Sachs. Incluso durante algunos meses me había
trasladado para allá con el propósito de observar el fenómeno de cerca. Las
hiperintlaciones no son muy frecuentes y para los economistas que, como yo,
están interesados en investigar el tema, la aparición de una hiperintlación en
algún lugar del mundo es como el paso del cometa Halley para los astrónomos:
todos corren a verlo. Lo que yo no sabía en el '85 es que no hacía falta irse hasta
Bolivia para observar ese devastador "Halley", pues no mucho tiempo después
íbamos a tenerlo en el Perú.

Lo cierto es que mi conocimiento de la experiencia boliviana me permitió


exponer mis ideas con comparaciones ilustrativas y en un lenguaje sencillo, que
el ingeniero Fujimori siguió con facilidad, tomando notas. Por supuesto, la
recomendación que se desprendía de mi exposición era que en el Perú debía
hacerse un ajuste económico severo.

-¿Tú qué piensas, Adolfo?-le preguntó el Presidente a Figueroacuando


terminé mi intervención.

- Yo no estoy de acuerdo con esos ajustes -dijo él-. Hacen falta muchas
proyecciones para poder tomar una decisión así. Yo creo que primero habría que
hacer un modelo econométrico y luego, en base a lo que indiquen esos cálculos,
hacer ajustes parciales.

. La posibilidad de que se siguiera practicando el "gradualismo" en el país


me preocupó. Volví a tomar la palabra.

- Adolfo -repliqué-, los modelos econométricos estiman coeficientes


en una época normal, pero en una hiperinflación no sirven porque en dos días los
supuestos macroeconómicos varían totalmente-. En el Perú tenemos que volver
a empezar nuestras estadísticas de cero, porque lo que va a emerger de aquí es
otro país. Además, lo que planteas es como querer tomarle la presión a un enfermo
al que hay que extirparle un tumor para sal varle la vida. El país es un paciente
al que tienes que operar ahora. aunque sólo tengas un cuchillo de cocina, porque
sino se te muere.

Bueno -dijo entonces el Presidente-, ya los he escuchado por dos horas


y si bien no sé nada de economía. tengo mucha i ntuición-. Por algo he ganado
las elecciones. No creo que lo que tú propones, Adolfo, pueda parar la inflación.
En cambio, me parece que lo que dice el doctor Boloña sí puede funcionar.

24
Acto seguido el ingeniero Fujimori se puso de pie, me agradeció, me pidió
mi teléfono y se despidió de mí diciéndome:

- Vamos a estar en contacto.

Dejé el hotel con la sensación de haber contribuido a cambiar el rumbo del


manejo económico del país. El Perú debía cambiar y el i ngeniero Alberto
Fujimori había tenido el sentido de percibir la necesidad de estos cambios, al
punto que no le importó contradecir sus propias ofertas electorales.

4.4. Las Disyuntivas del Ministerio de Economfa

Ese mismo fin de semana regresé a Connecticut, convencido de que no


volvería a saber del Presidente Fujimori sino por los periódicos. Pero estaba
equivocado. Unos cinco días más tarde recibí una llamada de Hemando de Soto
diciéndome que por favor viajara a Lima lo antes po5ible, pues el Presidente
necesitaba hablar conmigo. Me embarqué intuyendo la razón de la convocatoria.
Era públicamente sabido que De Soto lo estaba ayudando a fonnar su primer
Gabinete. La perspectiva de convertirme en ministro, sin embargo, me suscitaba
sentimientos encontrados.

Ya en Lima me presenté junto con De Soto en el Círculo Militar, donde el


Presidente electo había establecido su centro de operaciones hasta que le tocara
asumir el poder. Me recibió con discreta cordialidad y sin preámbulos me dijo:

- Doctor Boloña, yo quisiera ofrecerle el cargo de Ministro de Economía.

Le agradecí la confianza que esa propuesta expresaba, pero le dije que antes
de responderle quería discutir con él unos cuantos asuntos. Le manifesté primero
mi preocupación por el equipo ministerial con el que habría que trabajar. La ya
conocida designación como futuros ministros de varias personas que habían
candidateado en las elecciones en alguno de los frentes de izquierda, me hacía
dudar de la coherencia al interior del Gobierno. La izquierda, además, no había
llegado ni al 10% en las elecciones. El Presidente se mosttó ligeramente flexible
a mi argumento pero, en general, parecía estar convencido de que había que
"balancear" el Gabinete.

Pero en donde realmente se estancó la conversación fue en la discusión


acerca de quién sería el presidente del Banco Central de Reserva (BCR). Yo
sugerí a Luis Valdivieso, de quien tenía una buena impresión. Pero. como es de

25
suponer. tras Ja confrontación que habían tenido en Nueva York. el ingeniero
Fujimori no tenía una buena disposición frente a él y se opuso.

No obstante, yo insistí en que él era la persona adecuada. Para un Ministro


de Economía resulta fundamental tener a una persona seria y disciplínada en ese
puesto, pues si bien lo fiscal depende del MEF. la política monetaria y cambiarla
se maneja desde el BCR. Tenía que ser una persona con la convicción y l a
presencia de ánimo suficientes como para decirle "no" al Ejecutivo cuando éste
presionara. Y al parecer, esto último también preocupaba al Presidente, pero
desde l a perspectiva exactamente contraria Alguien lo había prevenido contra
el "síndrome Webb", aludiendo a un cierto momento del segundo gobierno de
Belaunde en el que Richard Webb, presidente en ese entonces del BCR, había
hecho prevalecer su autonomía frente a las presiones gubernamentales.

Estuvimos negociando por horas sin llegar a nada. Nos reunimos también
al día siguiente para seguir tratando de ponernos de acuerdo pero no lo logramos.
Así que a eso de las cinco de la tarde decidimos dej ar de tratar y me despedí del
Presidente deseándole la mejor de las suertes. Un día después me embarcaba de
regreso para Connecticut.

En el avión pensé que el hecho de haber insistido hasta el final en


Valdivieso para la presidencia del BCR, había sido quizás una manera de librarme
de un compromiso que no me resultaba del todo atractivo. Dos años atrás me había
ido del Perú llevándome a mi familia por motivos de seguridad. ¿Cómo habría
podido explicarles ahora que debíamos regresar para que yo asumiera uno de Jos
cargos de mayor riesgo en el país?

De regreso en Connecticut, los primeros días recibí múltiples l lamadas de


gente que me acusaba de intransigente por las condiciones que le planteé al
Presidente y que trataba de convencerme de aceptar el cargo. "Todavía estás a
tiempo", me decían. Y yo los escuchaba ya un poco cansado. Para mi tranquilidad,
al empezar la semana siguiente la espera terminó: el ingeniero agrónomo Juan
Carlos Hurtado Miller, antiguo condi scípulo del Presidente Fujimori en Ja
Universidad Agraria, había sido designado Presidente del Consejo de Ministros
y Ministro de Economía.

4.5. "Ortodoxia" por Encargo

Durante los seis meses que Hurtado Miller estuvo al frente del MEF, yo
mantuve cierto contacto con De Soto y, a través de él, indirectamente con el
Presidente. En setiembre fui convocado para viajar a Venezuela y ayudar a Jorge

26
Chávez, en quien finalmente había recaído la presidencia del BCR, a negociar un
crédito puente con ese país. Aparte de eso , entre octubre y febrero, estuve
viniendo también a Lima con mayor frecuencia que antes para colaborar con De
Soto y el equipo del ll.D en la elaboración de la nueva política antidrogas y el
Convenio acerca de esa materia que el gobierno peruano iba a proponerle al
norteamericano.

Como es sabido, lamentablemente la gestión del i ngeniero Hurtado MiUer


no arrojó los resultados esperados. El 8 de agosto del '90, diez días después del
cambio de gobierno, se aplicó un programa económico de emergencia con tres
objetivos: detener la hiperintlación, iniciar las reformas estructurales para lograr
mayor eficiencia productiva y aliviar los efectos de la estabilización en las clases
más pobres.

Se utilizaron mecanismos de mercado para estabilizar y eliminar los


controles de precios, unificar el tipo de cambio y permitir que flotara con
i ntervención del BCR. Para equilibrar las cuentas fiscales se suspendió el
financiamiento del BCR al Gobierno Central, se incrementaron los precios
administrados (tales como la gasolina, electricidad y otros servicios), se redujeron
subsidios y exoneraciones de derechos de importación e impuestos a las ventas
y se aplicaron impuestos de emergencia al patrimonio y a Jas exportaciones. En
setiembre se eliminó las barreras cuantitativas al comercio exterior y se aplicó
un arancel de importaciones con niveles de IS, 25 y SO %.

En materia de salarios y política social, en agosto el Gobierno dio a los


trabajadores un bono equivalente al sueldo de julio y aumentó el sueldo mínimo
vital de 4 a l O soles, y en setiembre, a 25. Anunció también en agosto un programa
social de emergencia a través del cual el tesoro transferiría recursos a 500
Organizaciones No Gubernamentales para proveer asistencia médica y alimenticia.

Si bien para noviembre se contaba ya con algunos avances -la inflación


mensual bordeaba el 6% y las RIN, los 5 3 1 millones de dólares-, en diciembre
se hizo evidente que se había perdido el control del proceso. La Reforma
Tributaria aprobada en diciembre significó un retroceso y las presiones del gasto
público superaron los ingresos, propiciando en ese mismo mes un "gasolinazo"
de 60%. Esto motivó que la inflación mensual se empinara hasta el 24% en
diciembre y hasta el 1 8% en enero. Tras estos acontecimientos, la credibilidad
del programa económico se vio seriamente erosionada, sobre todo porque al
momento de aplicar el programa se había dicho que la inflación iba a ser derrotada
en seis meses y que no harían falta más "gasolinazos".

27
El 12 de febrero Juan Carlos Hurtado MiJJer tuvo que renunciar al
Ministerio de Economía. El intento del Gobierno de encargarte llevar adelante
un plan semiortodoxo a una persona que no parecía convencida de la conveniencia
del mismo y que además no era un técnico en la materia, no había resultado. Ahora
había que volver a empezar la búsqueda de los equilibrios macroeconómicos.

En ese momento yo me encontraba en Lima. trabajando en el Convenio


Antidrogas con De Soto. Su cercanía a Palacio seguía siendo significativa, así que
al producirse Ja crisis ministerial, el ingeniero Fujimori consultó con él lo que
debía hacer.

Así, la madrugada del 1 3 de febrero fui despertado por una llamada de De


Soto y poco más tarde nos encontrábamos ambos en Palacio, donde el Presidente
volvió a ofrecerme la cartera de Economía y Finanzas. La situación me parecía
curiosa. Generalmente esas oportunidades no llaman a la puerta de una persona
dos veces. Pensé en que algún día tendría nietos y me imaginé diciéndoles: "Yo
pude haber sido Ministro de Economía" . Y me dije que si les iba a contar algo,
por lo menos que fuera por una realidad, por un reto de envergadura que asumí
en un momento crucial de la hi storia del país.

Le dije al Presidente que estaba dispuesto a aceptar el cargo pero sólo si


era para ir a fondo con las reformas estructurales. El asintió, aunque .quizá sin
tomarle el peso debido a mis palabras. Pero yo hablaba en serio.

De ese modo, el 15 de febrero juramenté como Ministro de :Economía y


Finanzas, dando inicio a uno de los desafíos más duros y al mismo tiempo
gratificantes de mi vida.

28
CAPITULO 11

VIEJOS PRINCIPIOS PARA NUEVOS TIEMPOS

1. NO HAY QUE DESCUBRIR LA POLVORA

La crisis económica y el caos social que hemos vivido en nuestro país no


son inéditos en la historia ni únicos en e) mundo. Otras naciones han sufrido
procesos similares y, sobre todo, algunas de ellas han logrado superar el atraso
y llegar a niveles de bienestar y desarrollo notables.

Para salir de los problemas no hace falta. pues, descubrir la pólvora. Hay
que fijarse, más bien, en Jos denominadores comunes de las políticas aplicadas
en aquellos países que tuvieron éxito en la lucha contra Ja pobreza, el atraso y el
subdesarrollo.

Los principios políticos y económicos que tuvieron vigencia en los


procesos de "despegue" son básicamente los mismos.. Decir que no podemos
igualarnos a Suiza, Alemania o Estados Unidos supone partir de un inaceptable
complejo de inferioridad.

Nosotros sí podemos alcanzar el desarrollo, pero no si esperamos que caiga


del cielo. Sólo lograremos resultados si es que hacemos lo que otros países ya
hicieron.

En su proceso de "despegue", Gran Bretafia dup1icó su ingreso per cápita


en sólo seis décadas (1 780-1 838). Estados Unidos lo hizo en 47 afios (1 839-1 886)
y el Japón en 34 (de 1 885 a 1 91 9).

Esto no es sólo parte del pasado de un mundo distinto al nuestro.


También sucede hoy dfa mismo y con países más parecidos al nuestro, como
en el caso de la República de China en Taiwán o el de nuestro vecino del Sur,
Chile, que lograron dar un salto económico en apenas diez años (de 1977 a 1987
y de 1983 a 1993, respectivamente). '

1.1 "Milagro" sin Misterio

Si bien la crisis de los últimos años ha sido la peor de nuestra historia, no


es tampoco la más grave que recuerde el mundo. El caso de Alemania Occidental
es especialmente ilustrativo. Lo ha recordado Ludwig Erhard, el Ministro de
Hacienda alemán que lideró la reconstrucción de la economía de su país.

En la posguerra, Alemania presentaba un cuadro en el que " .. .la industria


producía poco, y lo que producía no se comercializaba en los mercados; el país
vivía una fuerte i nflación reprimida, Ja moneda oficial (el Reichsmark) era
rechazada en las transacciones económicas. y ·no había reservas alemanas de oro
y divisas, por lo que las posibilidades de financiación de importaciones fueron
muy precarias. Proliferaba el trueque (la "moneda de cigarrillos", como se decía
entonces), el estraperlo y otras actividades clandestinas, la especulación y la
corrupción. La incertidumbre con respecto al futuro político y económico del país
era enorme, l o cual no podía menos de paralizar la iniciativa privada . " 2 ..

En Alemania, como en cualquier país que se encuentre en situación


semejante, había dos caminos. ETde hacer ajustes graduales y el de ir a un cambio
radical de los principios por los que se manejaba la economía. La primera vía
puede crear la i l usión de que el gobierno puede mantener su popularidad a costa
del siguiente, trasladándole un problema mayor. La segunda opción, en cambio,
si bien parece corresponder a una especie de "suicidio político", resuelve
problemas para el largo plazo aunque parece sacrificar la popularidad del corto
plazo.

En un país que llega a los extremos de una crisis prolongada, las soluciones
graduales y cortoplacistas, sin embargo, no sólo hacen imposible la recuperación
sino que, además, tampoco concitan la confianza de la opinión pública. La
situación exige en tales casos un verdadero liderazgo, en el sentido de tomar
opciones duras pero responsables. Aunque el país en crisis haya sufrido ya

' Banco Mundial, (1991) p. l!l.

2 Douges, "Mercados Libres y Progreso Económico", prólogo a Erllard, ( 1 989) p. 1 2.

J(I
bastante, estará dispuesto a apoyar a aquellos líderes que, aun a un alto costo,
ofrezcan una salida definitiva de la crisis prolongada. Un enfermo cansado de su
enfermedad no va a pedir placebos o sedantes, sino verdaderos remedios o una
alta cirujía.

"La realidad -decía el Ministro alemán- demuestra que Jos gobiernos,


temerosos de cosechar votos de impopularidad, tienden no sólo a ser gradualistas
sino también a orientarse en el corto plazo y cambiar de rumbo cuantas veces esto
parezca rentable a efectos eJectoralistas".1

Erhard optó por un tratamiento de choque y lo nevó hasta las últimas


consecuencias, poniendo de lado las objeciones que le hacían tanto el Alto
Comisarjo norteamerjcano, como los empresarios, los sindicatos y profesores
universitarios alemanes, que favorecían la facilitación del crédito para "reactivar"
la economía.

Con el füme apoy o político de su canci ller, Konrad Adenauer, Erhard hizo
los cambios necesarios para pasar de una economía planificada a una de mercado,
de una economía cerrada a una abierta y competitiva, de una economía adicta a
la inflación a una con estabilidad de precios, de una economía dependiente del
Estado omnipresente a una basada en la libre iniciativa de los ciudadanos. Estas
fueron las bases del llamado "milagro alemán", que no es algo misterioso e
incomprensible sino un programa de accio� de política económica claro,
coherente y acertado.

Se equivocan quienes piensan que estos cambios en el destino de una nación


han sido reservados sólo a los países occidentales llamados desarrollados o
i ndustrializados. Es al revés. Esas naciones son desarrolJadas hoy día porque
durante la mayor parte del tiempo sus economías se orientaron hacia mecanismos
cada vez más eficientes de asignación de recursos.

Lo mismo puede empezar a suceder entre los países de menores ingresos.


Los principios apJicados para salir de las grandes crisis son los mismos que se
requieren para permitir el despegue económico con un desarrollo social más justo
y ordenado.

Así lo demuestran casos de países con mayor similitud histórica y cultural


con el Perú, como, por ejemplo, la Rept1blica de China en Taiwán o Chile mismo.

lüp. cit. pp. 12- 1 3.

JI
1.2 Exito " Made in Taiwán "

Luego de haber experimentado una hiperinflación de tres mil por ciento en


el primer semestre de 1 949, en Taiwán se aplicó una Refonna Monetaria por la
cual se devaluó la moneda. se restringió su oferta y se adoptó un sistema
conservador de reservas. El temor a la inflación propició la intervención
gubernamental en el tipo de cambio y éste, al mantenerse por sobre el nivel de
mercado, alentaba más las importaciones que las exportaciones, por lo que el
gobierno optó por restringir las primeras.

Este esquema de "sustitución de importaciones" no hizo posible el control


de la inflación sino hasta doce años después de aplicado. Esto tuvo lugar, incluso,
luego de que en 1 958 se iniciara el proceso de liberalización comercial, financiera
y económica que dio al proceso taiwanés su verdadero impulso. Durante todo ese
tiempo, sin embargo, se mantuvo un presupuesto público equilibrado, que fue la
base de la estabilización.

Mientras que en 1 954 las exportaciones taiwanesas llegaban apenas a 96


millones de dólares, el ingreso per cápita era de aproximadamente 70 dólares.
Para 1980 las exportaciones se habían multiplicado por 200 y el ingreso per cápita
había alcanzado los 2,280 dólares."

El desarrollo de Taiwán, con todas sus dificultades, se debe en gran medida


al rechazo de las tesis estructuralistas que, en cambio, sedujeron desde los años
cincuenta a los países de América Latina y en especial al Perú. Si bien no hubo
un seguimiento al pie de la letra, "De todas las filosofías del desarrollo
económico, las políticas de desarrollo de Taiwán han estado probablemente más
próximas a coincidir con la escuela neoclásica... ", señala Hou 5• Aunque en
Taiwán se mantuvieran algunas intervenciones gubernamentales en la economía,
"en conj unto, sin embargo, el clima económico en Taiwán se ha aproximado muy

• Harberger ( 1 985) p. 38 Como dice el profe..�or Hou. "Tan temprano como en los cincuenta,
Taiwán pennitió una depreciación masiva de su moneda con respecto a los mercados de cambio
internacionales. redujo los controles de importación, diluyó el impacto de la sustitución de
importaciones y comenzó gradualmente a desplazarse hacia una e.�trategia de expansión ex portadora
(. . .) En 1 960 el valor total de las exportaciones de Tai wán era aproximadamente 70 por ciento má.�
alto que el de 1954;en 1 970 fue nueve veces lo que había sido en 1 960, se había incrementado a 200
veces el nivel de 1954". Hou, (1 985), p. 14.

s Hou, op., cit. p. 16.

32
estrechamente a los ideales neoclásicos" de libertades económicas y comerciales 6,
al punto que Hou asocia su desarrollo a la influencia que ejercieron en ese. país,
desde los años cincuenta. liberales como Jacob Viner y Goufried Haberle.r.7

1.3 Un " Milagro" Cercano: Chile

El caso de Taiwán, frente a lo ocurrido con la economía de China


comunista, demuestra que el desarrollo no está asociado a factores culturales o
raciales. Son las "reglas de juego" (las instituciones) las que determinan el curso
de los eventos en uno u otro sentido. Eso se ve claramente cuando se estudia el
caso del despegue económico chileno.

Luego de la experiencia socialista del gobierno de Salvador Allende, Chile


quedó en una situación de verdadera postración. Protestas callejeras, crímenes
terroristas, escasez de los más elementales productos de consumo, corrupción y
caos eran los resultados de la arrogante pretensión de diseñar el "orden" liiOCial
desde el Gobierno.

Se estima que la inflación l legó en 1973 a J ,000 %, mientras la producción


cayó en 5.6 %, a pesar de las 500 empresas estatales y de dirigir el Gobierno las
principales actividades económicas. El déficit fiscal representaba el 50%, con
todo el poder, del gasto y las reservas internacionales no alcanzaron ni siquiera
los 100 millones de dólares.8

Después de aplicarse las políticas de ajuste estructural, no sólo se estabi l izó


la economía, sino que se diversificaron las ramas de la exportación, terminándose
con la dependencia que antes había con respecto a la producción y los precios del
cobre. El aparato productivo se modernizó en apenas una década, la industria se
h izo competitiva en términos i nternacionales, el sistema financiero cobró u n
vigor saludable y el mercado d e capitales s e amplió notoriamente, llegándose a
exportaciones de más de 10 mil millones de dólares.

Aunque todavía quedan muchas reformas por culminar, luego de iniciado


un primer impulso de liberalización de la economía y privatización de las

� ibid p. 16.

7 ibid, pp. 24-25.


K Bardon, Carrasco y Vial ( 1 985) pp. 33 y ss.

JJ
empresas estatales, "el resultado es un sistema económico basado, por sobre todo,
en la libre iniciativa privada, un crecimiento pujante liderado por el sector
exportador, la eficiencia en la asignación de los recursos disponibles al país
y mayores perspectivas para alcanzar un mejoramiento generalizado del bienes­
tar de todos Jos chilenos".9

Este viraje de economías compulsivas y cerradas a economías abiertas y


de mercado ha producido resultados objetivamente encomiables en los países en
que se dio. En ellos el Producto Bruto Interno creció entre 7 y 10% por más de
una década, la inflación no fue más allá de entre 4 y 9% por ciento, nivel
compatible con el internacional. Se logró también tasas de desempleo menores al
3% de la población económicamente activa, así como niveles de presión
tributaria superiores al 20% del PBI.

En las economías abiertas a la competencia internacional las exportaciones


representan más del 25% del PBI, los niveles de las reservas internacionales
equivalen 11 v11Tios 11ilos de necesidildcs de importilción, fluctu11ndo enln: 1 O y 70
mil millones de dólares. El ahorro y la inversión superan el 25% del PBI. Con
estas recetas, en l O a 1 5 años países del Tercer Mundo se han convertido en
nuevos países industrializados. Hong Kong, Singapur. Taiwán, Malasia, Tailandia,
Chile y México son ejemplos exitosos de Ja aplicación, en mayor o menor medida,
del modelo que conduce al desarrol lo y el bienestar.

2. DENOMINADOR COMUN

Nuestro país no está condenado al fracaso. Otros países salieron de crisis


similares si no peores. No somos ni racial, ni cultural, ni intelectualmente
inferiores. Lo que ha empobrecido a nuestro país no es la gente, sino los políticos
y los intelectuales que señalaron caminos equivocados, paraísos artificiales
donde ellos tenían el poder de dominar a los demás y de indicarles en qué debía
consistir su felicidad.

Si queremos salir del error y optar por el camino que conduce al desarro llo
y el bienestar no es difícil seguir los pasos que otros ya dieron. Se trata
simplemente de identificar los elementos comunes que comparten los programas
de estabilización y reforma económica que han tenido éxito comprobado.

' Wisecarver ( 1 992) p. 65.

34
Detrás de todo programa de acciones políticas existen ciertos principios
básicos que articulan y dan orden a los propósitos y objetivos. Sin coherencia en
los planes, los resultados no pueden ser eficaces ni permanentes. ¿Podría un
gobernante atraer la inversión o limitar las expectativas inflacionarias si un día
cree que emitir dinero es perjudicial y, al otro, que es un medio idóneo para
aumentar la producción?

No basta, pues, apuntar en la dirección correcta. Hay que estar plenamente


convencido de los principios y hay que ser completamente ronsecuente con los
mismos. Más aún cuando la tarea de reformar laeconornía se enfrenta con presiones,
influencias y grandes poderes, al mismo tiempo que debe vencer temores,
debilidades e inconsistencias de quienes están persuadidos pero no orgánicamente
convencidos.

Detrás de los programas de refonna no está lacasua1idad o el a7.81". Existe toda


una línea de pensamiento, una filosofía, con ideas y valores que han soportado la
prueba del tiempo. Los principios que permitieron el desarTollo de la Alemania de
la posguerra son los mismos viejos principios que guiaron el gran desarrollo
económico británico del siglo XVID y el despegue norteamericano en el XIX. Son
los mismos principios que, de cara al siglo XXI, nos permitirán sacar a nuestro
país del marasmo y el atraso para enrumbarnos en el camino de la integración con
el mundo y la economía globalizada, que es la realidad dominante de los nuevos
tiempos.

Para poder acometer las tareas de la reforma nada puede ser peor que la
carencia de principios. El sistema mercantilista que nos ha atado de manos, que
ha sido la principal fuente de injusticia y de pobreza. ha logrado mantenerse a lo
largo del tiempo gracias a que los gobernantes no estuvieron dispuestos a jugarse
por determinados principios que, incluso, autolimitaran su conducta.

La búsqueda del poder por el poder ha hecho que unas veces el Gobierno
se pronuncie a favor del sector privado y otras, que esté dispuesto a confiscar sus
derechos. En el reino del pragmatismo, las autoridades salen un día a aplaudir la
pujanza de los trabajadores informales y al día siguiente ordenan el desalojo y el
decomiso.

Parte de nuestra crisis se origina en esta falta de apego a principios,


cualesquiera que sean, equivocados o correctos. La fuente de equívocos y errores
no puede cerrarse si se insiste en cambiar de líneas de acción a cada momento,
según cada circunstancia o cada caso particular. El mercantilismo, ese sistema
económico y político basado en los favores del Estado a grupos de influencia, se

35
ha alimentado principalmente del fácil abadono de los principios, de lasustitución
de los valores por los intereses, del zigzagueo político producto de su juego.

En economía. como en política, sin principios no hay rumbo. Como decía


Friedrich Hayek en los cuarenta, "La actitud pragmática dominante [ . . ]. lejos de
.

aumentar nuestro control sobre los acontecimientos, de hecho nos ha llevado a


un estado de cosas que nadie quería, y el único resultado de nuestro desprecio por
los principios es que estamos gobernados por una lógica de acontecimientos que
tratamos en vano de ignorar". m

Por definición, "con los principios no se transa; se respetan o se violan " 1 1


y por eso es necesario tenerlos cl aramente delineados.

El denominador común en los programas de reforma económica exitosos


es la l ibertad de los individuos para labrar sus destinos personales. El principio
rector de la libertad personal exige abandonar toda pretensión sobre cómo
encaminar la vida de loa otros, supone confinr en cl poder creativo de nuestros
semejantes y requiere de una disciplina de todos y cada uno para respetar las
aspiraciones, los fines y los medios legítimos de los demás.

Un sistema político basado en la libertad "no depende para su


funcionamiento del hallazgo de hombres buenos que lo dirijan, o que todos los
hombres se conviertan en mejor de lo que son ahora, sino que hace uso de hombres
en toda su variedad y complejidad, a veces buenos y a veces malos, algunas veces
inteligentes y más frecuentemente estúpidos". La finalidad de quienes lo auspician
es "un sistema bajo el cual sería posible conceder libertad a todos, en vez de
restringirla... a 'los buenos y a los sabios'"12

El principio de la libertad es indivisible. No existe algo así como una


"libertad económica" distinta a una "libertad política". En la realidad se dan
distintos grados de libertad individual. De hecho, si no hay un mercado abierto
y libre de la interferencia estatal, las posibilidades de los i ndividuos para fijar sus
fines o establecer sus expectativas personales se ven reducidas a lo que materialmente
es capaz de producir el Estado o el Gobierno a través del sistema de intervención
económica. Al revés, si no hay un ámbito para la libre expresión de las

to Hayel: (1968) p. JO.

"op. cit. p. 7.
11 ibid. pp.31-32.

36
preferencias personales, los individuos no procurarán los medios materiales
adecuados para cumplir con ellas.

Para una mejor exposición de los principios que hacen posible una sociedad
de hombres libres, sin embargo, cabe hacer una separación entre aquellos que se
refieren al orden institucional y aquellos otros que se relacionan al intercambio
económico.

3. PRINCIPIOS POLITICOS PARA UN ORDEN LIBRE

Los principios básicos para garantizar la existencia de un orden político


libre, según uno de los representantes más doctrinarios de esta corriente de
pensamiento, Ludwig von Mises, 13 son:

. La libertad.
. La paz.
. La propiedad privada.
. La igualdad ante la ley .
. La limitación del Estado.
. La democracia.
. La tolerancia.

La libertad es el valor político fundamental de esta doctrina y se entiende


"como capacidad para escoger entre diversas opciones, es un atributo que se
refiere a la persona humana individualmente considerada y no a los agregados o
colecti vidades que éstas forman".'4

La libertad supone, pues, reconocer a la persona como el sujeto principal


del orden social. Pero para que el orden sea posible y la supervivencia
quede garantizada, los principios deben salvaguardar no sólo a una persona
determinada, sino a todas.

Por eso, otro principio político fundamental de las doctrinas liberales se


refiere a la paz; esto es, a la convivencia pacífica. Para que todos los hombres sean
libres se requiere, ante todo, que sean igualmente libres. Es necesario, asimismo,
que no se agredan entre ellos, que no afecten sus derechos y que, en caso de que

13Mi.- ( 1 978) pp. 18 y SS.

14Sabino ( 1 99 1 ) p. 9.

37
ello suceda, haya un sistema de detección de las infracciones a la libertad y a l a
paz ajenas, así como un sistema d e sanciones proporcionales a las faltas
cometidas.

Una de las principales fuentes generadoras de derechos es la propiedad


privada. Los derechos en general semejan una extensión del principio de la
propiedad privada a campos no estrictamente materiales. El punto de referencia,
la última instancia a que puede reducirse toda infracción a la paz o la li bertad es
la propiedad privada en este sentido extenso de la palabra.

Corno dice Hayek, la principal preocupación de los grandes autores


liberales fue "encontrar un grupo de instituciones mediante las cuales el hombre
pudiese ser inducido, por su propia elección y por los motivos que determinaran
su conducta ordinaria, a contribuir tanto como fuese posible a las necesidades de
los demás, y su descubrimiento fue que el sistema de propiedad privada
proporcionaba tales incentivos en una extensión mucho mayor de lo que hasta
ahora se había comprendido" .15

La propiedad privada es un principio político y económico; no sólo es el


resultado de la división soci!ll del trabajo, sino que también genera derechos y
obligaciones y, por eso, es una de las piedras angulares de la doctrina liberal.

Los derechos y obligaciones, a su vez, deben estar equitativamente


distribuidos y para eso se requiere respetar el principio de la igualdad ante la ley.
Esto significa que las normas de conducta exigibles por la socied!ld deben ser
idénticamente aplicadas a cada individuo.

Cada uno contribuye en distinta medida con los demás miembros de la


comunidad y en un régimen de libertad, son ellos los que deben decidir con cuánto
retribuyen a sus semejantes por aquel1os bienes o servicios que les suministra
cada quien. El proceso de mercado es el mecanismo más eficaz de asignación de
los recursos, pero la igualdad ante la ley es el principio que impide que en este
proceso alguien tenga ventajas derivadas del uso de la fuerza; esto es, que pueda
obligar por medio de elJa a los demás a contribuir con su particular posición más
de lo que ellos lo harían en caso de poder escoger en libertad.

No puede haber progreso ni bienestar si no hay retribución por los


esfuerzos de las personas y una retribución mayor por los esfuerzos más
eficientes. La igualdad ante la ley permite que todos se sujeten en igual medida

'5 Hayek op. cit. p. 33.


a las mismas normas generales de recta conducta y que todos contribuyan entre
sí l ibremente para la mejora mutua.

En las sociedades complejas, sin embargo. el número de miembros de la


comunidad es tal que puede haber quienes se fijen fines antisociales, pretendiendo
i nfringir el principio de la igualdad ante la ley y los derechos ajenos. Para evitar
que esto suceda y remediarlo apenas se pueda. fa sociedad concentra los poderes
coercitivos de represión de la conducta antisocial.

· El Estado, dice Mises, no es un mal necesario, sino que es un bien esencial


para la convivencia pacífica y el mantenimiento de un orden civilizado. El
Estado, sin embargo, al disponer del derecho del uso de la fuerza, puede caer en
la tentación de hacer uso ilegítimo de la misma. Un principio fundamental para
mantener un orden social libre es el que se refiere a l a limitación de las actividades
estatales para aquellos fines para los que fueron establecidas.

Los poderes del Gobierno deben limitarse para garantizar por sobre sus
prerrogativas los derechos de propiedad de los individuos y la igualdad ante la
ley que los coordina.

El poder del Estado puede exceder sus usos legítimos y por eso es
i mprescindible un sistema de salvaguardas de la libertad individual y de
limitación de la esfera estatal a las tareas básicas de protección de la libertad, la
paz y la propiedad.

El papel del Estado no es crear un orden social, sino servirlo con ciertos
instrumentos para su mantenimiento. Por eso el Gobierno debe ser gobierno de
leyes y no de órdenes. Para tal efecto, debe proveer el marco adecuado dentro del
cual la libre cooperación de los hombres se desenvuelva.

El orden social puede mantenerse en la medida en que haya cierto tipo de


cosas que puedan preverse en forma razonable. Por eso son importantes las
normas, las tradiciones, las convenciones, Jos usos y las leyes. El marco de reglas
de conducta, en general, es i ndispensable para garantizar la supervivencia del
grupo humano.

El Gobierno debe velar por la seguridad física de los ciudadanos, así como
por la seguridad jurídica de sus contratos y derechos. Debe evitar y sancionar todo
abuso del poder orientado a crear situaciones de privilegio y monopolio. El
Gobierno no debe intervenir en la competencia. Ahí donde el mercado no es,
ir��
eficiente para cobrar o compensar los efectos externos de una economía"' cabe
que el Estado busque las compensaciones del caso.

Adarn Smith, uno de los defensores de la necesidad de limitar la intervención


del Estado en la economía señaló también como otra de sus funciones el llevar
a cabo las refonnas requeridas. dado que no siempre se parte de la situación ideal
en que el Estado no ha distorsionado la economía con sus interferencias.17

Los ancianos, los limitados, los niños pueden también quedarprotegidos bajo
el ámbitc;> estatal, en Ja medida que estas atenciones no se realicen con fondos
obtenidos contra Ja voluntad de los demás ciudadanos. La mejor forma de intervenir
en ayuda de Jos más necesitados es a través del subsidio directo a los individuos en
cuestión, por medio de sistemas de participación competitiva del sector privado.

Para que los ciudadanos puedan expresar su voluntad sobre cómo destinar
los fondos públicos se requiere de un sistema de elección de autoridades que
represente las preferencias ciudadanas. El sistema menos imperfecto para la
selección de funcionarios que manejen los poderes coercitivos del Estado es la
democracia. No se entiende ella como el poder absoluto de las mayorías, sino
como el sistema que, a través de la consulta de la opinión mayoritaria, adopta las
decisiones pertinentes a las funciones públicas.

La democracia debe también ser un tipo de gobierno limitado, para que no


caiga en lo que De Tocqueville llamaba "la tiranía de las mayorías". En efecto,
el principio fundamental es e] de la libertad del individuo y ninguna mayoría, por
numerosa que sea, tiene derechos legítimos sobre Ja esfera de la persona.

La democracia es un sistema que permite que el Gobierno se adapte a los


deseos de los gobernados sin recurrir a la violencia. Para e11o se utilizan elecciones,
representaciones y normas constitucionales que limitan el uso del poder, incluso el
de las mayorías.

16Los efectos externos o "extemalidades" son aquellas erogaciones que debe hacer alguien
para beneficio de otro.

17 "las leyes-decía Smith -con frecuencia siguen vigentes mucho tiempo después de que las
circunstancias que oñginalmente las ocasionaron, y que son lo único que la.� justifica. dejan de estar
presentes." Smith ( 1 98 1 b), Vol. f, p. 383.

El profesor Skinner ha comentado e.<Ue pasaje señalando que demuestra que "Smith,
entonces, adscñbía al Estado una responsabilidad para la reforma. una responsabilidad para
deshacer distintos obstáculos institucionales y legales al sistema de la libertad natural, [. ] todos los
..

cuales afectaban en fonna adversa la libre transferencia de recursos entre sus distintos empleos y
violaban la libertad del súbdito". SKINNER, "Introducción" a Smith ( 1 98 1 a), p. 79.

40
De esta manera, lo que en un momento puede ser un criterio minoritario
tiene la opción de convertirse, mediante la utilización de la persuasión y otros
medios pacíficos, en el criterio de la mayoría. La democracia debe ser el régimen
de competencia entre las distintas opciones de acción política, para lo cual es
fundamental que sus instituciones funcionen eficazmente.

El valor fundamental que sostiene la institución democrática es la


tolerancia. Ella significa aceptar los diversos credos, ideologías y actividades
que no infringen las normas de la convivencia pacífica aunque no obtengan
de nosotros una suerte de aprobación moral . La tolerancia es la base de Ja
discrepancia pacífica y ésta, a su vez, el fundamento de la democracia, de la paz
y de la libertad.

Ninguna democracia se podría mantener si los ciudadanos no ·comparten


una cultura tolerante; esto es, una en l a que no se pretenda la persecución legal
o armada de quienes no comulgan con las ideas o valores de los demás cuando,
a la vez, respetan las normas elementales de la convivencia.

Los valores de la tolerancia, sin embargo, no se reducen al ámbito político.


El reconocimiento de la libertad individual como valor político fundamental
implica extender esos valores al propio funcionamiento de ta economía.

4. PRINCIPIOS DE UNA ECONOMIA SANA, LIBRE Y PROSPERA

Los principios en que se basa una economía sana, libre y próspera son el
resultado de una longeva tradición de pensamiento. Los mismos escritores que
defendían las l ibertades políticas y la limitación del poder del Estado, reclamaban
también las garantías para el desenvolvimiento de una economía l ibre.

El desarroUo moderno de estas escuelas de pensamiento parte sin duda de


la l l amada Escuela Austriaca de Economía, que se constituye en forma sólida
hacia 1 87 1 , luego de la publicación de los Principios de Economía Política de
Carl Menger. Los representantes de esta escuela -Menger, BOhm-Bawerk,
Mises, Hayek- actualizaron y perfeccionaron lo que pensadores del siglo XVIII
ya habían dejado establecido.

La Escuela Austriaca tuvo cierta influencia hasta l a década del '30. Si bien
luego la economía de los principales países del mundo cayó bajo el infl ujo de
ideas contrarias, desde los '40 y especialmente a partir de los '50, comenzaron a
sembrarse y divulgarse doctrinas que rescataban los principios fundamentales de
una economía sana, libre y próspera. Tal es el caso de la Escuela de Chicago, cuya

41
influencia se inicia hacia 1 946 y dura hasta hoy a través de los escritos de autores
como Milton Friedman, George Stigler, Gary Becker y Arnold Harberger.13

El Programa de Reforma de la Economía se basa, justamente, en los


principios que sustentan el camino hacia la economía de mercado. Tanto en los
"austriacos" como en los de la Escuela de Chicago se puede encontrar una
coincidencia respecto a estos principios fundamentales. Ellos pueden resumirse
en siete puntos:

. Libre competencia.
. Propiedad privada de los medios de producción .
. La soberanía del consumidor.
. Libre comercio e integración con el mundo.
. Estabilidad de las principales variables.
. Libre movilidad de los factores de la producción.
. Alivio a la pobreza extrema.

El progreso y el bienestar son resultado de los mejores esfuerzos productivos


y creativos de Jos miembros de la comunidad. Hay sólo dos fomias de hacer que
éstos colaboren mutuamente para su intercambio. Se puede hacer esto a través de
la compulsión y coerción o, también, a través del acuerdo libre y voluntario entre
las partes que intercambian.

Para garantizar que así suceda es fundamental que todos sean igualmente
libres para participar de las actividades económicas, ya sea como productores o
consumidores. Esto supone que los individuos son libres para ofrecer los bienes
y servicios que creen pueden ser de utilidad para los demás y por los cuales
esperan recibir de ellos una retribución atractiva.

Para tal finalidad se requiere que todos respeten el principio de la libre


competencia; es decir, que nadie se reserve por la fuerza alguna rama o actividad
económica. Es fundamental para una economía próspera que los precios sean
l ibres, que Jas ganancias sean libres y que la concurrencia sea libre.

El sistema de precios libres es un mecanismo de transmisión de


i nformación. Allí donde hay precios relativamente altos es claro que hay una
demanda insatisfecha y, por tanto, una oportunidad para obtener mayores
ganancias por unidad de capital invertido. Si la concurrencia es l ibre, las mayores

•• Stigler ( 1 992) p. t 97.


ganancias relativas atraerán Ja inversión de mayor capital, con lo cual la oferta
aumentará, los precios empezarán a bajar y las ganancias unitarias tenderán a
normalizarse.

Este mecanismo permite que las necesidades sean satisfechas y que, tarde
o temprano, la población de menores recursos se beneficie con el abaratamiento
de los bienes producidos en gran escala. Estimula, también, a que cada uno saq ue
de sí mismo lo mejor de su capacidad y conocimiento y lo ponga al servicio de
los demás.

Para que funcione tal mecanismo es imprescindible un respeto estricto al


principio de l a propiedad privada. Sólo la propiedad privada de los medios de
producción permite calcular las ganancias en función de los costos, debido a que
se pueden comparar en el mercado los usos alternativos de los bienes de capital.
De esta suerte, se puede hacer un análisis racional del mejor uso que cabe asignar
a los factores de la producción. Si los medios de producción fueran todos de
propiedad del Estado, no habría forma de conocer los usos alternativos ni
su costo de oportunidad. No se podría saber, pues, si un recurso es eficiente
en determinada posición en el proceso productivo o si, más bien, sería más
eficiente buscarle otra posición.

En el proceso productivo guiado por el mercado, el que manda es el


consumidor. Contra lo que generalmente se cree, no son los productores los que
deben determinar qué se produce, a qué costo y utilizando qué factores de la
producción. Es el consumidor el soberano que, comprando o dejando de comprar,
mantiene con ganancias al que lo sirve mejor y saca del mercado, por tanto, a
quien lo provee de bienes o servicios que éste no está dispuesto a adquirir.

El productor que no se ajusta a las demandas de los consumidores corre el


riesgo de desaparecer del mercado o de tener que cambiar de actividad. A través
de los precios pagados, el consumidor decide quién lo sirve y cuánto debe ganar
por hacerlo. El mercado es como un gran sistema electoral de todos los días y a
cada hora, donde cada centavo es un voto a favor de unos productores y en contra
de otros.

El Estado, sin embargo, puede intervenir indirectamente en esta decisión


de compra. Como el instrumento del intercambio es la moneda y el Gobierno tiene
el monopolio de su impresión, éste puede emitir más moneda de Ja necesaria y
apropiarse así de una porción del producto de la nación. No es l ibre un consumidor
cuya moneda carece de poder adquisitivo a causa de la intervención del Estado.

.u
Para que una economía sea realmente libre se requiere de una relativa
estabilidad en las principales variables, sobre todo en aquellas que dependen del
Gobierno, como la moneda o el tipo de cambio. El Gobierno tiene en sus manos
la posibilidad de crear u n clima económico de relativa estabilidad de variables
como la inflación o la devaluación. Que así suceda es fundamental para garantizar
una auténtica soberanía del consumidor y un régimen de libre competencia.

El desplazamiento de los factores de la producción dentro de la economía


debe obedecer justamente a los mandatos d irectos de los consumidores, a fin de
hacer más eficiente el uso de los escasos recursos. Si las máquinas y l a mano de
obra se concentran en un sector de la economía, cuya producción no tiene
demanda, quedarán desatendidos otros sectores donde sí hay demanda efectiva.
Se impedirá así que funcione el mecanismo de la libre concurrencia que permite
abaratar los procesos productivos y, en consecuencia, ampliar la capacidad
adquisitiva del presupuesto familiar.

Si con un ingreso de 1 00 podemos comprar 30 biene!:: y luego SO, habremos


hecho una economía. S i todos o la mayorfa de nosotros puede hacerla, la nación
en su conjunto dispondrá de mayores medios para produci r más cosas. Es así
como progresa la economía, para lo cual se requiere que no haya obstáculos a la
movilidad de los factores de la producción.

S i i mpedimos la libre movilidad de estos factores congelamos los niveles


de bienestar general e impedimos una mejora en la calidad de vida de los
pobladores. A veces por beneficiar a uno u otro grupo especial sacrificamos a toda
l a nación en su conjunto, haciendo la economía más i neficiente y menos
competitiva en general.

Hoy enfrentamos un mundo de economías cada vez más interrelacionadas,


una economía "globalizada". Por tal motivo es realmente necesario que ajustemos
las piezas de nuestro mecanismo productivo a fin de hacerlo altamente eficiente
y competitivo. Para beneficiarnos de las economías de otros países, de los
i nventos y las mejoras ya realizadas en otras partes del mundo, es necesario
mantener el principio de la libertad de comercio.

El consumidor debe ser soberano para decidir cómo utiliza su dinero, el


fruto de su trabajo, de sus ahorros o de su ingenio productivo. Si el Gobierno
interviene el comercio exterior con altos impuestos lo que hace es, en el fondo,
confiscar una parte de sus bienes a los consumidores, limitando su capacidad de
consumo con respaldo productivo. Los puede forzar por esa vía a adquirir bienes
nacionales, pero eso significa sencillamente que beneficia a grupos particulares
a costa del bolsillo de las masas. Eso no sólo es injusto sino que produce
ineficiencia y neutraliza nuestras posibilidades de competir y crecer al ritmo y
niveles del resto del mundo.

La l ibertad de comercio permite que la economía de un país se integre a las


del resto del mundo, haciendo participar a los trabajadores y a los empresarios
de las mejores remuneraciones que para sus actividades existen en otros países.
La competencia con el extranjero nivela los costos y lleva los precios a cierta
uniformidad relativa de la que se benefician los consumidores y, a través de ellos,
el país entero.

La economía de mercado no supone desatención de los pobres. Al


contrarío, sólo exige que haya el menor componente posible de política e
intereses sectoriales a la hora de decidir sobre el uso de los fondos colectivos. Un
sistema representativo adecuado, en efecto, puede permitir que los c iudadanos
de mejores ingresos acepten derivar parte de sus fondos comunes para la atención
de la pobreza. La miseria que ha creado la crisis prolongada del sistema
mercantilista en nuestro país es definitivamente un obstáculo al desarrollo.
Además de la tragedia personal que supone, la pobreza artificialmente creada
impide el concurso de ciudadanos hábiles en los procesos productivos y comerciales.

Para combatir la pobreza no hay mejor mecanismo que la ampliación de


la acumulación de capital. El Gobierno, sin embargo, puede invertir parte de sus
esfuerzos en un combate directo contra la pobreza. Para evitar que ello se
transforme en un mecanismo más de la política y los i ntereses, es preciso que los
programas de alivio a la extrema pobreza den preferencia al subsidio directo al
ingreso, a través de algún tipo de contraprestación.

Los programas de asistencialismo paternalista desincentivan el trabajo, el


ahorro y la disciplina productiva y terminan convirtiéndose en una fuente de
despilfarro de los fondos colectivos. Por eso debe intentarse contar con la
participación del sector privado y con mecanismos de competencia para detectar
las deficiencias e ineficiencias de la asignación de estos recursos.

5. COMBUSTIBLE PARA EL DESPEGUE

Hay quienes señalan que los principios políticos y económicos de una


sociedad l ibre están sujetos a fluctuaciones cíclicas y que ahora sólo se vive una
moda. Es cierto que hay algo de moda; pero, como decía u n filósofo español, "no
todo lo que reluce es hojalata".

45
Con la caída del muro de Berlín en 1 989 y la crisis del socialismo en todo
el mundo se afirmaron los argumentos a favor de una vuelta a los viejos principios
de justicia, paz y libertad que caracterizaron el desarrollo de Occidente. En esa
dirección apunta también la ola conservadora que se inició con Margaret Thatcher
en Gran Bretaña y Rona1d Reagan en los Estados Unidos. Si bien mucho mayor fue
la propaganda con respecto la liberalización efectiva realizada, la ola conservadora
pennitió el desarrollo aparejado de una tendencia liberal, que ojalá vaya logrando
mayor influencia en los países desarrollados.

En nuestros países, en cambio, no se trata de una moda l ujosa para tener


en vitrina, sino del combustible necesario para el despegue que requieren nuestras
economías si queremos enfrentar los desafíos del nuevo orden económico.

Hay quienes anticipan que el triunfo electoral del Presidente norteamericano


Bill Clinton revertirá la tendencia hacia la liberalización económica y comercial.
Si ello fuese cierto, con mayor razón tendríamos nosotros que favorecer una
posición contraria, tanto de los países desarrollados como, especialmente, de los
nuestros.

El subdesarrollo consiste en no disponer de recursos. Nuestros países no los


tienen porque aún no los han descubierto. El mejor mecanismo para descubrir
recursos y ponerlos a disposición de los consumidores es el mercado. La
economía de mercado y la libertad política constituyen aquí un imperativo.

Chile, México, Honduras y Costa Rica, Hong Kong, Taiwán, Corea y


Singapur, seguirán abriendo sus economías y beneficiándose cada vez más de las
oportunidades comerciales de una integración económica en expansión. Los
países que fueron socialistas no tienen un destino claro, pero en todo caso pueden
entrar a competir también en este proceso.

Justamente por ser un país pequeño en términos económicos debemos


diversificar nuestros mercados, extender la escala de nuestras economías,
aprovechar las ventajas del extranjero para crecer y capitalizamos, para vencer
Ja pobreza y lograr los deseados niveles de prosperidad y bienestar.

El proteccionismo, el socialismo y el intervencionismo estatal han fracasado


en nuestro país y en el mundo entero. Debemos, pues, persistir y profundizar las
reformas de liberalización y modernización de nuestra economía. El pensamiento
liberal provee de la filosofía que ha propiciado el desarrollo en el mundo
occidental y que a nosotros debe darnos un imprescindible impulso para encender
el chispazo del "despegue" económico y social.

46
6. BUROCRATAS ILUMINADOS

La economía de mercado ha demostrado, lógica e históricamente, su


superioridad sobre otros sistemas de asignación de recursos, especialmente sobre
el socialismo. La toma de decisión centralizada no ha sobrevido al mecanismo
descentralizado del mercado.

El socialismo se caracteriza por:

. La planificación central.
. El acceso al mercado por autorización gubernamental .

. La propiedad pública de los medios de producción .


. Los controles y regulaciones económicas .
. La igualación de los resultados de la gestión individual.
. El proteccionismo industrial y la autarquía.
. La subordinación de la economía a la política.

Los principios en que se basa el orden socialista son exactamente opuestos


a aquellos en los que se funda una economía de mercado.

La planificación central significa que las autoridades gubernamentales


deciden cuánto, qué y cómo debe producirse y, en consecuencia, cómo debe
retribuirse a los factores de la producción. Las empresas, por lo tanto, no pueden
planificar su propio desarrollo sino que deben seguir la pauta oficial indicada.

La distribución bajo un esquema socialista se decide también de acuerdo a los


criterios de los funcionarios encargados. No hay forma de que los consumidores
emitan juicio alguno sobre sus preferencias o el grado de satisfacción que tienen
con las mercancías y servicios ofrecidos.

No hay, pues, una libre movilidad de los factores de la producción. Si a


alguien se le ocurre que se debe desarrollar algún tipo de actividad económica en
beneficio de la comunidad, debe convencer primero a los burócratas a cargo de
l a conveniencia de la actividad. No obtiene, además, ninguna ventaja especial por
haber tenido tal ocurrencia.

El requerimiento de un acceso autorizado al mercado, sin beneficios, desalienta


obviamente la iniciativa y deja margen sólo a las personas extraordinariamente
altruistas. Estas existen, pero son muy pocas generalmente frente a la cantidad de
necesidades de la población.

47
Como no hay propiedad privada, difícilmente se puede saber en cuánto
estiman los consumidores sus demandas y los bienes y servicios obtenidos. No
hay un patrón en función del cual adscribir un valor objeti vo a las transacciones
mercantiles. Esto hace inviable el cálculo económico en una sociedad socialista,
como l o demostró Mises ya desde 1 920.19

Los controles y regulaciones de la acti vidad económica son consecuencia


necesaria de la planificación centralizada. E11as quitan, sin embargo, lo más
i mportante de la función empresarial: la de adecuar la oferta a l os requerimientos
de la demanda o, dicho en otras palabras, Ja posibilidad de que se produzca l o que
la gente necesita.

El socialismo parte de la arrogante suposición de que el grupo de hombres


que ejerce el poder puede saber exactamente la posición que corresponde ocupar
a cada uno en l a jerarquía social. Se sustituye a los consumidores como agentes
que toman la decisión con respecto a quién premiar por los servicios o bienes
recibidos. Se pone en su Jugar a los burócratas il uminados para resolver cuánto
corresponde obtener a cada uno de los millones de agentes económicos.

La pretensión de igualar los resultados de la gestión económica individual


no sólo es tremendamente i njusta con quienes son más eficientes, discipli nados
y productivos. Es absolutamente i neficaz para reproducir conductas cooperativas
y desplegar los esfuerzos creativos e i maginativos de la gente, por los cuales
pueden subvenir las necesidades de sus semejantes.

S i los individuos, a pesar de todo, l ogran diferenciarse en sus estándares


de vida, el Gobierno socialista debe proceder a imponer por l a fuerza su criterio
sobre la distribución del i ngreso. El socialismo lleva inevitablemente al
totalitarismo. Pero ni la coerción ni el terror han garantizado nunca la " igualdad
de resultados", como se aprecia en los países comunistas y sobre todo en los casos
más extremos como Albania o Camboya.

Bajo este esquema sería realmente subversivo permitir el i n greso de


mercadería importada. Los altos costos de l a producción local no le permitirían
competir con mercancías creadas al amparo de procesos en los que se coordina
eficazmente la actividad creadora y productiva de millones de individuos. Por
eso, en el socialismo se debe cerrar las fronteras comerciales y desplegar u n

19Mises ( 1 920), en Hayelc ( 1 975), pp. 8 7 y ss.

48
" desarrollo hacia dentro" orientado hacia la autosuficiencia y la autarquía. El
socialismo representa en este sentido un retorno a formas de organización
económica superadas hace siglos.

Una economía autárquica es la menos capaz de integrarse al mundo, a las


nuevas corrientes de innovación y tecnología, a las ventajas de la superación
técnica y científica, al proceso mundial de utilización racional de los recursos
económicos. En los tiempos actuales el socialismo es inviable. Sólo es posible
mantener sus principios a la fuerza.

En la sociedad socialista todo se reduce a la toma de decisión política. Los


ciudadanos no pueden hacer nada individualmente para mejorar su destino o
siquiera para influenciar en él. La vida viene dada por un decreto gubernamental
y todo se subordina a las prioridades del Estado, a las conveniencias de los grupos
en pugna por el poder.

La subordinación de la economía a la política concentra el poder en pocas


manos y alienta la corrupeión para canal izar los favores estatales. En un sistema
donde no hay separación de poderes no hay forma de oponerse al aparato social
de compulsión y coerción. No hay modo de escapar del yugo porque las fronteras
se cierran para quien desee salir y por eso se tienen que construir muros, cercos
y alambradas electrificadas, de manera de poder imponer la decisión del gobierno
sobre la libertad del individuo.

7. NO HAY TERCERA VIA

Pero, ¿es que no hay forma de que se puedan moderar las grandes
desigualdades que puede crear una economía de mercado sin caer en la tentación
autoritaria? ¿No puede pensarse en un sistema económico que tenga las ventajas
de cada sistema y elimine sus desventajas?

La realidad también ha demostrado en forma contundente la inviabilidad


de esta tecera vía, "ni capitalista, ni comunista". Cuando la propiedad privada se
conserva en el nombre pero se somete a regulaciones que reducen el control que,
sobre ella, deben tener los propietarios se llega en efecto a un s istema que no es
ya capitalista pero tampoco del todo socialista o comunista: es, simplemente,
el caos intervencionista.

El problema del i ntervencionismo es que produce tales distorsiones en la


economía que, para salir de los problemas creados, exige una supresión de la
intervención inicial o una ampliación de la misma.

49
El caso del control de precios es ilustrativo. Se empieza con un control
sobre el precio de un bien final, por ejemplo, el pan. Si hay expectativas
i nflacionarias, los comerciantes tenderán a violar el control o a acumular
existencias en espera del nuevo decreto de precios.

El Gobierno puede remediar la escasez dando en efecto un nuevo preci o


para e l bien o , e n su defecto, disponiendo d e medidas policiales para sancionar
a los infractores. Si todo eso falla puede también decidirse a establecer controles
de precios sobre las materias primas; en este caso, sobre la harina. Con este bien
sucederá lo mismo. Más tarde o más temprano se volverá escaso y exigirá, a su
vez, nuevos controles sobre los factores necesarios para su producción.

Por esta vía, un control llama a muchos otros y se pasa de la intervención


aislada al sistema de intervenciones, al intervencionismo; del control, al
controlismo. El paso final es aquel en el que se decide que los particulares siempre
serán especuladores incorregibles y que, en consecuencia, lo que procede es una
expropiación, una nacionalización, una estatizaci6n.

El intervencionismo lleva inevitablemente al socialismo. Al final las


opciones son las mismas, sólo que con mayores costos pagados por la población
en encarecimiento y escasez. En última instancia se tiene que tomar la decisión
de ir a un régimen totalmente intervenido por el Gobierno o a uno totalmente libre
de interferencias estatales en la economía.

No hay, pues, tercera vía en el l argo plazo. Sólo hay, en el fondo, dos
sistemas posibles: el que parte de la propiedad privada de los medios de
producción y el que parte de la propiedad pública de estos medios. U na y otra vez
la historia y la realidad han demostrado cuál es más propicio para el desarrollo
y el bienestar de la población.

8. PRIVILEGIOS S.A.

Las crisis que hemos experimentado en el Perú son expresiones de la


i nviabilidad de la tercera vía que se ha presentado, ya bajo formas de "izquierda"y
socialismo, ya bajo formas de "derecha" y conservadurismo. En ambos casos lo
que ha sido impracticable ha sido el sistema de intervenciones públicas a favor
de determinados intereses especiales y la utilización del aparato coercitivo del
Estado para realizar distintos "ideales" redistributivos.

50
El problema es que cada quien puede tener una idea bastante diferente de
cómo se debe redistribuir el ingreso a través de la exacción compulsiva de
recursos. De hecho, así ha sido en nuestra tradición "mercantilista".

Nada más equivocado que identificar las políticas de liberalización con el


sistema de apropiación de los poderes estatales en favor de los grupos de presión.
La liberalización, al contrario, al apuntar a la igualdad ante la ley y al gobierno
de leyes y no de hombres, debe desmantelar todo ese sistema de vasallaje y
clientelismo que es el mercantilismo.

La política es, en la visión de James Buchanan, por ejemplo, un proceso de


intercambio. En su terreno se canjean promesas de intervención pública a cambio
de votos, cuando no de apoyo financiero para las campañas electorales. De esta
manera sobreviven los políticos, los grupos de influencia y los burócratas de alta
jerarquía.

"Los políticos y los burócratas---d ice Buchanan.- son considerados como


personas comunes, bastante parecidas al resto de nosotros, y 'la política' es
considerada como un conjunto de acomodos, un juego si se quiere, en el que
muchos jugadores, con objetivos bastante dispares, se interrelacionan de tal
manera que se genera un conjunto de resultados que pueden no ser ni internamente
coherentes ni eficientes bajo ningún estándar" .20

Bajo este sistema toda la sociedad se va convirtiendo en un gran tablero


donde todos transan ventajas, favores, excepciones, prerrogativas, tratamientos
especiales, tasas preferenciales, exoneraciones, l icencias, permisos, autorizaciones.
Esta es la sociedad del privilegio, donde es ventajoso agruparse con otros
individuos con similares intereses para abaratar los costos de transacción de la
presión pública o el favor estatal.

En el Perú esto se ha convertido en una verdadera contracultura que se


manifiesta desde la coima que se paga al policía de tránsito, hasta la que pagaban
los prófugos de las cárceles o los beneficiarios de los privilegios especiales.

La crisis política persitente de nuestro país se debe a que la redistribución


del ingreso por esta vía, independiente y contraria a la voluntad de los consumidores,
desalienta la inversión productiva y la mejora de la capacidad real de consumo.

20Bucbanan (1987) pp.25-26.

51
La torta se hace cada vez más chica y cada vez hay más jugadores expertos en
la técnica de tramitar rentas en los pasillos de los ministerios, del Congreso, del
Poder Judicial y, en general, del propio Gobierno.

"Los partidos de i ntereses especiales -decía Mises ya en 1 927-, que no


ven en la política nada más que la prosecución de los privilegios y prerrogativas
de sus propios grupos, no sólo hacen imposible el sistema parlamentario, sino que
rompen la unidad del Estado y la sociedad. No sólo conducen a la crisis del
parlamentarismo, sino a una crisis política y social general. La sociedad no puede
existir en el largo plazo si se divide en grupos definidos, cada uno de los cuales
i ntenta conseguir privilegios especiales para sus miembros, en alerta continua
para no perder los adquiridos y preparados, en cualquier momento, a sacrificar
las instituciones políticas más importantes con tal de ganar alguna pequeña
ventaja".21

La única forma de evitar este curso de acontecimientos, estas crisis cíclicas


y perman entes es optando por un camino radicalmente distinto al de los privilegios
y l a intervención, al del mercantilismo y l a presión. Ese rumbo distinto es el de las
reformas hacia una economía de mercado con estado de derecho, hacia los viejos
ideales del liberalismo económico y político.

21Mises (1 978) p. l 75.

52
CAPITULO 111

LA POLITICA PARA EL CAMBIO

l. UNA VISION PANORAMICA

Llegar a Ministro de Economía y Finanzas en circunstancias en que el


orden económico ha sido destruido y las finanzas públicas se encuentra colapsadas
cuenta con algunas ventajas que no son obvias. Paradójicamente, el extremo de
la crisis da un margen de maniobra para realizar reformas con un gran apoyo de
la población.

Acepté ocupar la crítica cartera con la seguridad de que otros países habían
salido de desórdenes peores que el nuestro, con la convicción de que los viejos
principios liberales podían aplicarse ventajosamente a los nuevos tiempos,
porque en realidad siempre habían permitido vencer las crisis e impulsar el
desarrollo. Conté en ese momento, además, con el desprestigio total de las
posiciones que querían una vuelta al pasado inflacionista y con un firme respaldo
de un Presidente que tenía apoyo sostenido de la opinión pública.

El 27 de mayo de 199 1 , dicté en Trujillo mi primera conferencia como


Ministro de Economía y Finanzas. En ella presenté los cuatro grandes pilares
sobre los que se sustentaría el Programa Económico Peruano para la década de
los '90: la estabilización económica, la modernización de la economía, la
reinserción económica y financiera internacional, y la recuperación de la seguridad
ciudadana. Conocí en esa oportunidad al ex Ministro y candidato presidencial
chileno Hernán Büchi y nuestras ponencias fueron posteriormente publicadas en
el libro "Boloña y Büchi: Estrategas del Cambio".

El primer pilar consiste en la reforma para lograr la estabilidad o los


equilibrios de las principales variables macroeconómicas. Restaurar estos equilibrios
macroeconómicos es una tarea difícil que toma tiempo. Cuanto más grandes sean
los desequilibrios, mayor es la dificultad de lograr la estabilidad. No se puede
crecer sin equilibrio macroeconómico y si los desequilibrios no se resuelven en
el corto plazo, no se resuelven nunca. No estabilizar un país utilizando el
argumento del excesivo costo social que eso supone, es un grave error, ya que la
inestabilidad es más costosa que el ajuste. Lograr el equilibrio macroeconómico
es un proceso complejo y se basa muchas veces en la aplicación de una serie de
medidas bajo el esquema de "ensayo y error".

Tras más de cuarenta años de desaciertos, el Perú cometió el pecado más


grande de América Latina: caer en una hiperinflación que todavía no controla y
generar un enorme problema en su balanza de pagos que todavía no resuelve. Y
ya se sabe que mientras más grande es el pecado, mayor es la penitencia.

Durante los 22 meses y medio que estuve en el MEF, avanzamos en el logro


de los equilibrios macroeconómicos: la inflación se redujo de 7,650% a 57% al
año; las Reservas Internacionales Netas se incrementaron de US$ -100 millones
a US$ 2 mil millones; el déficit fiscal y cuasi-fiscal se redujo de más de 16% a
2.5% del PBI; y la emisión monetaria se mantuvo a tasas de crecimiento menores
que la inflación. El crecimiento económico no mostró cifras positivas para 1 99 1 -
92, y ése fue e l costo pagado para salir d e la hiperinflación.

Pensar que en 22 meses y medio se podía entregar un a economía estabilizada,


creciendo, sin inflación, con el problema de la balanza de pagos y el déficit fiscal
resuelto es una utopía, digna de aquellos que no son concientes de que el Perú es
un país que hace más de 40 años se atrasa y empobrece; y que hoy i ntenta salir
de la bancarrota.

El segundo punto se refiere a las Reformas Estructurales o medidas de


desregulación y modernización de la economía, las que permiten un significativo
crecimiento gracias a una mayor inversión. Las Reformas Estructurales son los
cimientos del nuevo ordenamiento a que conduce el modelo económico. Ellas son
lo que queda, lo que perdura, en la medida que se las deje dar sus frutos. La
estabilización es una condición necesaria pero no suficiente para el crecimiento.
Es, además, l a que menos réditos da a un gobernante, por la sencilla razón de que
todos J a aprecian cuando l a pierden, pero pocos cuando la tienen. Estas reformas
son de tipo microeconómico y apuntan a la liberalización de los mercados. Otras
reformas importantes se refieren a la propiedad, al Estado y a las i nstituciones.

Como ya he mencionado, desde que asumí el cargo de ministro, el 1 5 de


febrero de 1 99 1 , fue clara mi orientación y convicción de llevar a cabo un
conjunto integral de Reformas Estructurales que permitieran sentar los cimientos
del crecimiento futuro. Asimismo, estaba convencido de que dichas reformas
debían real izarse paralelamente al proceso de estabilización y en el menor tiempo
posible; es decir, en menos de 3 años. Las reformas que no se hacen en los

54
primeros momentos difíciles de Ja estabilización ya no se hacen más. Así que lo
primero que hice durante las tres semanas iniciales de mi gestión fue dedicanne
a preparar la primera ola de Reformas Estructurales con un reducido equipo de
10 personas, que más tarde pondría en conocimiento de la opinión pública, a
través de mi mensaje a la nación del 1 1 de marzo de 199 1 .

U n argumento que se utiliza frecuentemente para n o aplicar Reformas


Estructurales es el que afirma que ellas atentan contra los "derechos adquiridos".
Pero en nombre de estos mismos derechos se quiebran empresas, sectores
económicos, gobiernos y países. Así pues, ¿qué derecho da que 10% de la
población económicamente activa tenga estabilidad laboral a costa de un 90% en
situación de desempleo y subempleo? ¿O que el sistema de seguridad social
estatal dé un monto de j ubilación mensual de 60 dólares al mes al 90% de los
jubilados, cuando el 10%, por privilegios, se jubilan con sólo cinco años de
aportación o con sueldos superiores al personal activo de actividad semej ante?
¿O la existencia de un Banco Agrario que al final pagaba las planillas de algunos
agricultores, convirtiéndolos en burócratas rentados por el Estado, que sólo
trabajaban cuatro horas al día?

Las Reformas Estructurales se dieron en tres grandes olas: la primera se


inició el 12 de marzo de 1991 y duró hasta abril de ese mismo año. Se aprobaron
en ella 6 1 decretos supremos, de los cuales 23 se referían al comercio exterior,
ocho al mercado cambiarlo, tres al mercado financiero, 14 al ámbito fiscal, cinco
a las empresas públicas y ocho a normas laborales. En esta primera ola se
incluyeron normas como la reducción de aranceles y eliminación de medidas
para-arancelarias, la liberalización del mercado cambiarlo, la eliminación de
monopolios públicos, la liberalización del mercado laboral y la primera norma
de privatización de empresas públicas, cuya lista original de 80 empresas se
redujo a 23 por presión y oposición de los miembros de tendencia socialista en
el Gabinete. El mérito de esta primera ola fue la de ser la pionera y haber
convencido al Gabinete pluripartidario y al país de que éste era el camino a seguir.

La segunda ola de Reformas Estructurales se dio entre el 1 8 de mayo y el


1 5 de noviembre de 1991 . En ella se aprobaron 1 17 decretos legislativos bajo el
amparo de la ley de delegación de facultades en materia de pacificación,
promoción de la i nversión y promoción del empleo.

La tercera ola de Reformas Estructurales tuvo lugar entre el 5 de abril y el


30 de diciembre de 1992. En esta etapa se dictaron 745 decretos-ley; 281 de ellos
en diciembre. Las reformas se orientaron al sector comercio, sector financiero,
sector pú blic o, sectores productivos, sectores sociales y al restablecimiento del
Estado de Derecho.

SS
Una Reforma Estructural vital, cuya importancia muchos no consideran,
es la que consiste en "privatizar al sector privado"; es decir, lograr que los sectores
mercantil istas de la actividad privada no vivan del monopolio, de las rentas y de
los feudos asignados por regulación. Ello implica eliminar protecciones, el
crédito, el dólar, la energía y los combustibles subsidiados y la capitalización
de empresas con dinero que no es propio. Estos vicios, que se han practicado por
lo menos durante las últimas c uatro décadas, son difíciles de corregir en dos años.
Pero es imprescindible hacerlo en menos de cinco, de otro modo será muy difícil
que fu ncionen las Reformas Estructurales. El reto es crear u n verdadero sector
privado, ya que el existente está muy descapitalizado y sin capacidad de
respuesta. El actual tiene muchos sesgos mercantilistas que es necesario corregir.
Hasta se podría decir que en el sector formal casi no contamos con un sector
privado, sino más bien con una suerte de "empresas para-estatales" que se rigen
por la regla de oro de "privatizar ganancias y socializar pérdidas".

Dentro de las Reformas Estructurales consideramos el Programa de Emergencia


Social, destinado a aliviar o mitigar l a extrema pobreza en el corto y mediano
plazo hasta que l a estabil ización y la modernización, vía las otras reformas,
permitan que el país crezca, genere empleo y salga del subdesarrollo.

Las Reformas Estructurales han permitido moderni zar el país, l iberar el


funcionamiento de los mercados y han hecho posible que el consumidor tenga
capacidad de elegir. Así, por ejemplo, en el Perú entre 1 985-89 el automóvil más
barato costaba 25 mil dólares y había que pagarlo al contado. Hoy día, uno
consigue autos hasta por 7 mil dólares, todo tipo de marcas y los puede pagar en
tres años; a razón de 250 dólares al mes. Asimismo, l a inversión extranjera en el
quinquenio 1 985-89 alcanzó apenas los 15 millones de dólares; mientras que en
el período 1 990-92 la inversión concertada llegó a los 600 millones de dólares.
En materia de transporte público, la liberación de tarifas y rutas ha permitido u n
incremento sustancial d e la oferta de movilidad (ya la gente n o hace largas colas
para tomar unidades deterioradas), tenemos competencia de precios y ya no hay
huelgas de transportistas. Estos son algunos de los resultados visibles en el corto
tiempo transcurrido desde que se han adoptado las Reformas Estructurales.

El tercer punto se refiere a l a Reinserción Económica y Financiera


Internacional, lo que supone normalizar nuestras relaciones con el exterior en
materia de pagos con el objeto de reci bir créditos, inversiones y tecnología. La
política de "no pago" nos cerró las puertas al crédito y capital extranjero. El
argumento demagógico que se esgrimió como justificación fue la necesidad de
atender la "Deuda Social Interna" antes que la "Deuda Externa". Los resultados
fueron catastróficos y l a población se empobreció más. Desde setiembre de 1 990
se empezó a pagar a los organismos multi1aterales y recién un año más tarde, en

56
setiembre de 1 99 1 , se logró la reinserción del Perú, al crearse el primer Grupo de
Apoyo, el Programa de Acumulación de Derechos con el FMI, con el Club de
París y obtenerse el primer crédito del BID, previa l impieza de atrasos. El Perú
volvió a ser un miembro de la comunidad financiera internacional, después de
haber sido un "paria económico" por más de siete años. Más tarde, los sucesos del
5 de abril de 1 992 pusieron en peligro la reinserción; estuvimos a punto de
convertirnos en un "paria político". Esto, sin embargo. pudo evitarse gracias al
compromiso asumido por el gobierno del Presidente Fujimori el 18 de mayo de
1 992, en las Bahamas, referente a la elección del Congreso Constituyente, idea
en cuya formulación participé junto con Hernando de Soto. Ese compromiso
permitió mantener las puertas de la Reinserción entreabiertas hasta el 30 de
diciembre de 1 992, fecha en la que se instaló el Congreso Constituyente.

La Segunda Reinserci6n Internacional se empieza a gestar con las


negociaci ones con el FMI a partir de octubre de 1 992, para lograr un Acuerdo
de Facilidad Ampliada, que a su vez permitiría la limpieza de atrasos con el Banco
Mundial y el FMI. Asimismo, requiere la conformación del Segundo Grupo de
Apoyo, las renegociaciones con el Club de París y las negociaciones con la Banca
Comercial Internacional. Esta vez no me tocó culminarlas.

El cuarto punto se refiere a los aspectos del mantenimiento del Estado de


Derecho. Sin seguridad no puede haber estabilidad política y sin ésta no hay
estabilidad jurídica. Estas tres condiciones son necesarias para que funcione un
programa económico y es el Estado quien debe garantizarlas. El mantenimiento
de la ley y el orden debe hacerse en un contexto de libertad económica y política.
Es decir, se debe respetar el derecho de los individuos y el equilibrio de los
poderes del Estado. Siempre hay que estar en guardia contra los excesos del
poder; no sólo en la economía, sino también en Jo que afecta los derechos
fundamentales de las personas. El Estado se subordina a los individuos, no al
revés.

El terrorismo es el principal enemigo del Estado de Derecho en el Perú, y


ninguno de los otros tres pilares del Programa Económico pueden funcionar, s i
no s e controla y vence al terrorismo. Ello requiere desmantelar l a estructura
subversiva mediante una labor de i nteligencia, operaciones militares, acción
cívica y una movilización de Ja población. Requiere también una adecuada
distribución de los costos que esta lucha supone entre el sector público y privado
y, finalmente, realizar cambios en la legislación referida a penalidades, enjuiciamiento
y castigos a los terroristas. Es decisivo, asimismo, dar l a lucha en el plano
ideológico.

57
El narcotráfico es otro enemigo que atenta contra la ley y el orden del país,
distorsionando la actividad económica y corrompiendo a personas, instituciones
y a la sociedad como un todo. Si no se lo controla y erradica en el mediano plazo,
él acabará controlándonos.

Para entender a caba1idad la Política Económica que se está aplicando en


el Perú, es necesario desarrollar y anali zar a nivel conceptual las cinco grandes
reformas estructurales que se vienen aplicando.

2. LAS CINCO GRANDES REFORMAS ESTRUCTURALES

2.1. Tratamiento de Emergencia

2.1.1 Objetivos, Instrumentos y Precios Claves

Como veíamos en el primer capítulo, la inflación, la recesión y el desempleo,


el déficit de balanza de pagos, el déficit fiscal, la emisión monetaria y el
desbalance entre el ahorro y la inversión son síntomas que sirven para diagnos­
ticar si una economía está sana o enfenna. El primer paso para volver a la
normalidad es llevar al paciente a la sala de emergencia. Se trata ahí de impedir
que las variables se hagan imprevisibles y evolucionen en forma descontrolada.

Dentro de una receta liberal , el control de la inflación es la piedra angular


de la estabilidad económica, mientras que para las políticas intervencionistas el
gran objetivo es evitar la recesión y el desempleo. Las teorías keynesianas
propician una mayor intervención estatal mediante el gasto público y la emisión
monetaria. Se pusieron muy en boga en la década del treinta, con el objeto de
evitar la depresión económica y el paro. Sin embargo, los miembros de la Escuela
Austríaca, habiendo vivido épocas de hiperinflación en su país, eran concientes
de que las políticas keynesianas traerían como consecuencia una mayor inflación,
lo que a l a larga generaría mayor recesión y paro. Estos resultados se vivieron en
las dos posguerras, en la década de los ochenta en los países capitalistas y en la
década de los noventa en Europa Oriental tras el colapso del socialismo.

La estabilidad económica tiene por objeto lograr el control de la inflación


y evitar la recesión y el desempleo para alcanzar un crecimiento de la economía
en el mediano y largo plazo. Para ello se requiere equilibrar las cuentas
macroeconómicas, lo que implica tener una balanza de pagos viable, equilibrio
en las cuentas fiscales y monetarias, y equilibrio del ingreso con el gasto o el
ahorro y la inversión.

58
La estabilidad económica se mide a través de un conjunto de objetivos de
política económica, que se enumeran en forma explícita y se cuantifican a
continuación para el caso peruano:

Control de la inflación

Controlar la inflación significa alcanzar niveles internacionales; es decir,


tasas menores a 1 0% anual o l % mensual.

Crecimiento económico y desempleo

El objetivo es lograr tasas de crecimiento del PBI mayores al 4% anual en


el corto plazo para crecer en el mediano plazo a tasas mayores al 7% anual.

Las tasa de desempleo podría reducirse a menos del 3% de la PEA.

Nivel adecuado de Reservas Internacionales Netas (RIN)

Esto quiere decir, disponer de Reservas Internacionales Netas equivalentes


a entre seis meses y un año de necesidades de importación; es decir, de un nivel
mayor a los tres mil millones de dólares.

Disciplina fiscal

El déficit fiscal no debe financiarse con crédito interno, sino con crédito
externo y no debe exceder los niveles de 2.5% del PBI. En el mediano plazo se
debe tender a un equilibrio fiscal.

Disciplina monetaria

La emisión monetaria en una economía estable debe ser consonante al


incremento del PBI. Además, debe estar por debajo de los niveles de la inflación
y el Banco Central no debe otorgar créditos al sector público o privado.

Los instrumentos de la política económica se orientan a lograr los objetivos


antes mencionados. Los instrumentos se pueden manejar bajo un esquema de

59
economía de mercado o según los principios de la intervención estatal. Nosotros
desarrollaremos el primer caso por ser el relevante.

Los instrumentos que el Gobierno maneja son: la política fiscal, la política


monetaria, la política comercial, la política cambiaría, la política de precios y l a
política salarial .

La política fiscal contempla instrumentos como el gasto público, los


impuestos y el endeudamiento externo e interno. La política monetaria incluye
instrumentos como la emisión monetaria, la tasa de encaje, los redescuentos y las
operaciones de mercado abierto o compra y venta de valores del Gobierno por
parte del Banco Central.

La política comercial considera los derechos de importación. La política


cambiaría comprende la determinación del tipo de cambio y del régimen
cambiario (v.g. administrado o determinado por el mercado).

La política de precios se refiere a la determi nación de los precios


administrados, en una situación en la que el Gobierno los fija dada su posición
monopólica. Nos referimos a precios tales como el de los combustibles, la
electricidad, el agua y las comunicaciones.

Finalmente, la política salarial incluye la determinación de los salarios en


el sector público y la definición de reglas para determinarlos en el sector privado.

Los Precios Claves Macroeconómicos son aquellos precios que equilibran


los principales mercados. Es decir, el mercado de bienes y servicios, tanto
nacionales como importados� el mercado de di nero y el mercado l aboral . Los
precios que equilibran estos mercados son: el tipo de cambio, los precios de
bienes y servicios, y los administrados; la tasa de interés y los salarios.

De acuerdo con una política liberal , el tipo de cambio, la tasa de i nterés y


los salarios deben determinarse por el libre mercado, mientras que los precios
administrados, en tanto los determi na el Gobierno, deben calcularse con criterios
de mercado. Así por ejemplo, podría establecerse como guía que se aproximen
a los precios i nternacionales.

60
2.1.2 La Inflación: el Peor de Todos los Males

¿Cómo se genera?

La inflación, o el aumento generalizado y sostenido de los precios en l a


economía, e s u n a enfermedad muy peligrosa. Al desbocarse y convertise en
hiperinflación puede ser fatal al punto de destruir una sociedad. Como hemos
visto, la i nflación es un fenómeno monetario que se genera por un mayor
incremento de la emisión de dinero en la economía comparado con el crecimiento
de la producción. La i nflación determina el valor i nterno de la moneda y el tipo
de cambio, su valor externo.

La i nflación es generada por el Gobierno mediante un crecimiento acelerado


en la oferta de dinero, que a su vez responde a un aumento acelerado en el gasto
público, a una po1ítica de reactivación del Gobierno o a políticas erradas de la
autoridad monetaria (el BCR).

Si el gasto público se financia con impuestos o endeudamiento i nterno


(voluntario con el público) o externo, no genera i nflación. Pero establecer
i mpuestos o endeudarse tiene límites y no es una medida que les resulte atractiva
de aplicar a los políticos, pues con ello pierden votos. La única manera de
financiar el gasto público y no perder votos, es Ja de emitir más dinero, y esto
se logra mediante créditos del BCR al MEF, a la Banca Estatal o al Sistema
Financiero. Gastar más sin poner impuestos sí resulta atractivo para los presidentes
o para los congresistas, pero es fatal e irresponsable.

Se piensa también que inyectando más dinero en la economía se puede salir


de una recesión. Atan García, por ejemplo, emitió para "reactivar" la economía
peruana desde 1985. Al llegar al poder quiso reactivar la producción estimulando Ja
demanda. Para eso bajó los intereses, controló los precios, aumentó los salarios e
interfirió en el tipo de cambio. El creía entonces que "la primera forma de impulsar
la producción es aumentando la demanda. Si nadie compra -argumentaba-, las
fábricas y los campos se abandonan" . Creía ingenuamente que bastaba con crear
u n programa de empleo masivo para aumentar la capacidad de compra de los
desempleados y así incrementar la demanda y sostener la producción1• Utilizando

1 Cf. varios de Jos discursos de Atan García, pero esencialmente Ja versión de la Conferencia de
Prensa del 5 de octubre de 1985, reproducida en GARCIA PEREZ, Alan. s.f., pp. 337-387.

Los pa�ajes citados corresponden a la� pp. 380 y 38 1 -382.

61
la capacidad ociosa del sector productivo, la emisión desenfrenada y el uso de
dólares de las RIN en el BCR, García pretendió incrementar la producción, el
empleo, las remuneraciones, las exportaciones y las importaciones. Pensó que el
mayor gasto público generaba producción y empleo, mientras que los impuestos
producían lo contrario. Sin embargo, al gastar más, emitiendo dinero para salir de
la recesión, lo único que hizo fue inyectar mayores dosis de inflación a l a economía
para hacerla caer luego en una recesión mayor.

El BCR puede también fomentar la inflación al aplicar políticas erradas,


tales como controlar la tasa de interés o el tipo de cambio, cuando lo único que
debe manejar es la cantidad del dinero que inyecta en la economía. Así, por
ejemplo, supongamos que emitiendo más soles, el BCR decide comprar más
dólares en el mercado con el objeto de subir el tipo de cambio; es decir,
devaluarlo. Al hacer esto, en un primer momento se devalúa el tipo de cambio
nominal y la tasa de interés en soles puede bajar. Ello incrementa la inflación, lo
que a su vez reduce el tipo de cambio real (es decir el tipo de cambio, descontada
la inflación) y la tasa de interés reaJ . Esto produce una pérdida de paridad en el
tipo de cambio y una pérdida de rendimiento de los ahorros. De esa forma la
situación del exportador y del ahorrista, comparada con la original, ha empeorado.

El di nero adicional mente emitido por el BCR equivale a un impuesto sobre


el dinero de las personas, por lo que se habla del "impuesto inflación". Este
i mpuesto es el más injusto que el Gobierno pueda aplicar a la población, ya que
las personas de menores ingresos no tienen mecanismos para protegerse de la
pérdida del poder adquisitivo que supone.

¿Si la inflación es tan perniciosa por qué se cae en ella? Rothbard, u n


heredero de l a Escuela Austríaca, tiene una buena interpretación: "En resumen,
la atracción que ejerce la inflación se debe a que el Gobierno y otros grupos en
la economía pueden beneficiarse, silenciosa pero efectivamente, a expensas de
los grupos de la población que carecen de poder político" 2

Las grandes inftaciones

La inflación no tiene límites y cuando se desboca toma el nombre de


"hiperinflación". La hiperinflación, según Cagan, se inicia en el mes en que la
i nflación supera el 50% y termina cuando, tras haber alcanzado niveles menores

2 Rothbard, en Mises { 1980), pp. 246-247.

62
al 5 0% mensual, se mantiene así por más de un año. En el mundo se han dado
muchos casos de hiperinflación (sobre todo después de una guerra).

La mayor fue la de Hungría en 1 9 45, que presentó un promedio mensual


de 20 mil por ciento. La siguen la de Greci a en 1943 con 365% y la de Alemania
en 1922 con 322%. La peruana figura entre las ocho mayores hiperinflaciones del
mundo y ha sido después de la rusa, la segunda de mayor duración. (ver cuadro
A . 1 del anexo estadístico).

En el Perú se han presentado dos casos de hiperinflación. La primera se dio


entre 1879 y 1883, como consecuencia de la Guerra del Pacífico. En esa ocasión
la inflación alcanzó niveles de 1,200% debido a la i nundación del billete fiscal
y el alejamiento del patrón oro. La segunda se presentó entre 1988 y 199 0 , cuando
la inflación alcanzó cuatro millones por ciento.

La inflación toma años en generarse y años también en controlarse, y la


relación entre mayor emisión monetaria y mayor inflación no es inmediata. Así.
por ejemplo, en los Estados Unidos o Gran Bretaña un incremento de la emisión
monetaria toma entre seis y nueve meses para aumentar la producción y reducir
el desempleo artificialmente; y entre 12 y 18 meses para que este efecto se
traduzca en mayor inflación, desbaratando los efectos iniciales.

Para el Perú los tiempos pueden reducirse a la mitad o a la tercera parte,


pero lo cierto es que a mayor inflación menores son los tiempos requeridos para
transmitir los efectos de una variación en la emisión a una en l a i nflación.

La inflación es una droga

A la inflación se le puede comparar con la drogadicción: un poco de droga


(inflación) produce sensaciones agradables al inicio (reactivación). Pero cada
vez se necesita mayores dosis (hiperi nflación) para sentirse bien, lo que puede
l levar a la muerte (o al caos social).

Una vez que la drogadicción está en etapas avanzadas (hiperinflación), la


cura toma largo tiempo y tiene efectos secundarios muy dolorosos, como
convulsiones, náuseas, desesperación, decaimiento, etc. (En economía, esto
equivale a decir menor crecimiento económico, altos ni veles de desempleo y una
reducción lenta de la inflación).

En una hiperinflación unos se benefician y otros sufren. Estos últimos son


los que menos tienen. Los que se benefician quieren continuar usufructuando de

63
esa situación, pero esto perjudica la actividad productiva. Se gana sin producir,
sólo a través de la especulación y el rentismo.

La única cura para la drogadicción es dejar de tomar la droga. Es fácil


decirlo, pero difícil hacerlo; todo depende de la voluntad del drogadicto y la
perseverancia de quienes lo tratan. Del mismo modo, la única cura para l a
inflación e hiperinflación es reducir l a emisión monetaria. E s simple decirlo, pero
difícil hacerlo; lo importante es tener la voluntad política para llevarlo adelante.

Inflación y desempleo

No se puede vivir con inflación ya que ésta fácilmente se conv ierte en


hiperinflación, y esto conduce a un caos de toda la sociedad. En palabras de
Hayek: "A la inflación hay que darle el golpe de gracia".

Los controles de precios y salarios no curan ni controlan la inflación;


son contraproducentes pues distorsionan Ja estructura de precios. Son malos
sustitutos, temporales e inadecuados de la disciplina fiscal y monetaria. Producen
efectos por un período corto y luego fraca<;an, ya que elevan las expectativas
inflacionarias y resultan así en una mayor inflación. Lo único que logran los
controles es una mayor intervención del Estado en Ja economía.

No existe otra manera de acabar con la inflación que controlar el incremento


de la cantidad de di nero en la economía. Esto acarrea en lo inmediato un fuerte
desempleo, pero eso es a consecuencia de las malas inversiones que se realizaron
durante los años de inflación.

"La gran inflación de Austria y Alemania -dice al respecto Hayek- nos


l l amó la atención por la conexión entre cambios de dinero y cambios en el nivel
de desempleo. Especialmente nos mostraba que el empleo creado por la inflación
disminuía en cuanto ésta empezaba a disminuir y que su terminación producía
siempre lo que vino en llamarse crisis de estabilizacion, con un fuerte paro".3

Los efectos secundarios al bajar la inflación ocurren porque al reducir la


emisión monetaria se introduce "estática" en l a información transmitida por el
sistema de precios, la misma que se traduce en respuestas inapropiadas de los
agentes económicos, que toma tiempo superar. No se puede reducir la inflación

3 Hayek ( 1 979) p. 34.

64
sin desempleo y recesión. Hayek lo díce en forma muy clara luego de explicar
por qué es i nevitable sufrir l as consecuencias de la irresponsabilidad ·
i nflacionista:"No existe elección posible entre inflación y desempleo, al igual
que no se plantea al ternativa alguna entre gula e indigestión; durante algún
tiempo el glotón podrá entregarse al placer gustativo; más adelante, sin embargo,
deberá forzosamente soportar el doloroso síndrome de la indigestión" 4• Se
pueden mitigar estos efectos mediante la disminución gradual, pero decidida, de
Ja inflación a través de la reducción paulatina de la emisión monetaria de manera
preanunciada y verosímil .

La inflación en el Perú

Entre 1 950 y 1 972 la inflación promedio anual fue de 7%; de 1 968 a 1 977,
de 1 7% anual; de 1 983 a 1 990, de 1 400% anual y de 1 99 1 a 1 992, de 98% anual.

La inflación subió de 61 % en 1980 a 158% en 1985. Luego experimentó


una baja a 63% en 1 986 debido a la aplicación de controles de precios; para más
tarde manifestarse a través de una escalada que llegó a 1 1 5% en 1 987, 1 ,700%
en 1 988, 2,800% en 1 989 y 7,650% en 1 990. Tras Ja aplicación del Programa
Económico, la inflación se redujo a 1 39% en 1 9 9 1 y 57% en 1 992.

El Perú entra en un proceso hiperinflacionario en setiembre de 1 98 8 que


va hasta agosto de 1 990; es decir, por un período de duración de 24 meses.
Durante 1 99 1 la inflación se redujo de 1 8% mensual en enero a 4% mensual en
diciembre; y durante 1 992 se mantuvo a niveles de 3.5% mensual, salvo el pico
de 7.4% en marzo debido al paquete tributario y mostró un nivel bajo de 2.6%
en setiembre.

La hiperinflación se dio porque la emisión monetaria se incrementó en


1 1 6% en 1 987, 440% en 1 988 y 2,400% en 1989. Los efectos perniciosos de Ja
hiperinflación se observan en la forma como se erosionó Ja base tributaria. Esta
se redujo de 1 5% promedio a inicios de los ochenta a 6% en 1 989. Sus nocivos
efectos se hacen también visibles en la distorsión de precios relativos tales como
el tipo de cambio, las tasas de interés, Jos salarios, los precios administrados y
precios en general. La demanda de dinero experimentó una reducción progresiva
del 1 8% del PBI en 1980 a 5% en 1 989; y Ja producción cayó en 24% entre 1 988
y 1 990.

4 Hayek, op. cit. p. 73.

65
2.1.3. La Recesión y el Desempleo

El ciclo económico

El ciclo económico conduce a expansiones y luego a contracciones económicas


generalizadas, las que ocasionan recesión y desempleo.

Keynes planteó la "idea fatal" de que el paro se debe a la insuficiencia de


la demanda globaly que el Estado, mediante el gasto y la emisión monetaria, puede
reactivar la demanda. Esta, sin embargo, fue una política inflacionista que les
ofrecía a los políticos no sólo un método rápido y barato de aliviar el sufrimiento
humano, sino que también los aliviaba a ellos de aquellas molestas restricciones
que les impedían alcanzar la popularidad. El gasto y los presupuestos deficitarios
se consideraron de pronto la representación de las virtudes. Se arguyó,
persuasivamente incluso, que el continuo gasto gubernamental era muy meritorio,
dado que llevaba a Ja utilización de recursos hasta entonces no usados y que esto
no sólo no costaba nada a la comunidad, sino que aportaba una ganancia neta".5

Las políticas keynesianas, por ello, crearon una dislocación de la oferta y


Ja demanda reales y el consecuente desorden de precios relativos a los distintos
factores de la producción.

"La explicación verdadera, aunque no comprobable del paro masivo radica


en la discrepancia entre la distribución del factor trabajo (y de otros factores de
la producción) en las industrias (y en las localidades) y la distribución de J a
demanda sobre sus productos. Esta discrepancia está causada por una distorsión
del sistema de precios y salarios relativos. Y ello sólo puede corregirse mediante
un cambio en esas relaciones; esto es, estableciendo en cada sector económico
precios y salarios tales que en ellos la oferta se iguale con Ja demanda. En otras
palabras, la causa del paro está en una desviación del equilibrio de los precios y
salarios que se hubieran establecido por sí solos en un mercado libre con moneda
estable" 6• Es la consecuencia de reacomodar la inversión bajo las nuevas y más
sanas condiciones del entorno económico.

La i ntervención en el mercado mediante el i ncremento de la oferta


monetaria crea distorsiones en Ja tendenci a natural del mercado por la inflación

S ibjd p. 42.
6 ibid p. 4 1 .
que se genera. Según Taylor 7, el problema de la inflación es que afecta l a esencia
del proceso de mercado, produciendo, en el mejor de los casos, movimientos
cíclicos intermitentes y perturbadores, y en el peor, la cesación desastrosa del
intercambio de mercado que se ha observado en las sociedades altamente
industrializadas.

Fuente del crecimiento

El crecimiento económico es el resultado de los efectos de largo plazo de


la formación de capital físico (o inversión), el incremento de la fuerza laboral (o
capital humano) y el cambio tecnológico. Estos deberían darse en el contexto de
una economía de mercado para obtener mayores niveles de crecimiento y un
mayor rendimiento de los factores de la producción. Adicionalmente, el crecimiento
económico está influido por las fluctuaciones de los términos de intercambio (es
decir, el poder de compra de las exportaciones respecto a las importaciones).

En países de reducida capacidad de ahorro interno, y por tanto de un escaso


nivel de inversión interna. es de suma importancia recurrir a la inversión extranjera
como fuente de crecimiento. Sobre todo s i se toma en cuenta que el capital
externo tiene una capacidad mayor que el interno y que además incorpora los
cambios tecnológicos más recientes. Para atraer inversión extranjera en el Perú,
es necesario romper los tabúes acerca de su presunta naturaleza perversa y de que
se trata de una forma de explotación del imperialismo. Estos prejuicios fueron
agitados y alimentados por la izquierda, el populismo y el burocratismo en lo años
setenta y ochenta. Y todavía hay algunos políticos que persisten en estas
posiciones.

Las exportaciones son una fuente importante de crecimiento, ya que suponen


dejar de consumir internamente para importar o invertir.

Empleo imaginario

Los períodos de alto crecimiento en la economía peruana entre 1900 y 1979


se dan cuando las exportaciones crecen, cuando hay inversión extranjera. cuando
los términos de intercambio son favorables o cuando se da una combinación de
tales elementos. (Ver cuadro A.2 del Anexo Estadístico).

7Taylor(l989) p. 121.

67
En el período 1 95 1 - 1 990, el crecimiento económico ha estado asociado
con aumentos en las exportaciones, un crecimiento en la inversión nacional y una
mayor productividad de la misma. (Ver cuadro A.3 del Anexo Estadístico).

Pensar que se puede crecer sostenidamente utilizando instrumentos como


un mayor gasto público, una mayor emisión o influyendo en los precios claves
artificialmente(v.g. tipodecambiootasadeinterés)paraincrementarlasexportaciones
y la inversión respectivamente, constituye un grave error. Estas no son políticas sanas
y al final Jo único que producen es una mayor inflación y distorsión en los precios.

Si bien las cifras en el Perú en materia de empleo son poco confiables, el


desempleo abierto es más relevante que el subempleo. Este último es un concepto
impreciso porque depende de un sueldo mínimo vital u otro salario referencial
sobre la base del cual se calcula. Sabemos que al fijar los salarios mínimos lo que
se está haciendo es generar desempleo, pues tales salarios están generalmente por
encima del salario de mercado.

Independientemente de eso, la Población Económicamente Activa (PEA)


en el Perú para 1 990 era de 7 .5 míllones de personas. El desempleo y subempleo
para el período 1 980�9 1 ha experimentado una reducción en el primer caso de
siete a seis por ciento y un fuerte incremento en el segundo de 26 a 79%. (Ver
anexo A.4 del Anexo Estadístico).

El desempleo durante los primeros años del gobierno del Presidente


Belaunde bajó a siete por ciento, para luego crecer durante la crisis de 1 983-84
a 10%. Luego el gobierno de García aplicó una política de reactivación basada
en un mayor gasto financiado con emisión, que bajó el desempleo durante 1 9 86-
87 para l uego caer en una recesión que incrementó considerablemente el
desempleo durante la etapa de la hiperinflación.

2.1.4. Las Cuentas Macroeconómicas

Las Reservas Internacionales Netas y la Balanza de Pagos: ¿Son necesarias


las reservas internacionales?

Las Reservas Internacionales Netas son activos que un gobierno está dispuesto
a aceptar de otro gobierno como pago de deudas contraídas.

68
Ellas se obtienen de la diferencia entre activos y pasivos internacionales
y sus variaciones son el resultado de lo que sucede con la balanza de pagos. Es
decir, de la diferencia entre los ingresos y egresos de divisas por concepto
de transacciones de bienes y servicios, así como movimientos de capitales. Las
reservas internacionales se incrementan cuando los i ngresos de divisas son
mayores que los egresos. Los bancos centrales de muchos países mantienen u n
stock d e reservas i nternacionales para amortiguar las fluctuaciones o desbalances
entre los ingresos y egresos de divisas; así como para estabilizar el tipo de cambio.

Estos stocks permiten mantener el tipo de cambio estable, incluso en


situaciones de superávit o déficit de la balanza de pagos. Y, aún más importante,
permiten mantener la economía doméstica estable cuando se presentan shocks
externos en la balanza de pagos. Las reservas i nternacionales deben caracterizarse
por su liquidez, es por ello que se deben mantener en dólares o monedas
extranjeras fuertes de aceptación internacional; DEGs 8 del FMI y oro. La
composición de las reservas debe permitir cubrir con reservas líquidas las
necesidades de la transacción internacional y las de inversión para lograr un
mayor rendimiento con el resto de las reservas.

Según Williamson 9, el monto total del stock de reservas depende de cuatro


factores: la vulnerabilidad de la balanza de pagos a los shocks externos, las
consecuencias de quedarse sin reservas, el costo de oportunidad de mantener
reservas, y la velocidad y confiabilidad del ajuste de la balanza de pagos.

Un elemento crucial en la determinación del nivel y la necesidad de acumular


reservas radica en la política cambiaria y, específicamente, en el régimen
cambiarlo. Bajo un sistema de tipo de cambio fijo, se requiere de un valor
significativo de reservas para evitar fluctuaciones del tipo de cambio o que shocks
externos afecten a la economía doméstica. Sin embargo, bajo un régimen de tipo
de cambio libre oflotante, el problema de la liquidez internacional desaparecem.
No es necesario acumular reservas i nternacionales, ya que si hay escasez de
divisas el sector privado reaccionará a un i ncremento en el tipo de cambio
proveyendo las reservas requeridas.

8 Los DEG son los Derechos Especiales de Giro, unidad de cuenta que utiliza el FMI y cuyo valor
se

relativo establece a travé.� de un promedio ponderado de la cotización de las principales monedas.

• wmiw:nson { 199 1 ), pp. 165-175.

10 Friedman y Roosa ( 1 967) p. 16.

69
El tipo de cambio flexible permite orientar la política fiscal y monetaria
hacia la estabilidad interna sin tener que distraerse en los problemas de balanza
de pagos. Una crítica que se le hace a la política de tipo de cambio l ibre es que
genera inestabilidad, pero las fluctuaciones que han ocasionado los tipos de
cambio administrados han sido siempre mayores.

Las Reservas Internacionales en el Perú

Las Reservas Internacionales Netas (RIN) del BCR alcanzaron un nivel de


US$ l ,480 millones en 1980, para luego bajar a alrededor de US$ l ,OOO en los años
siguientes y retomar el nivel inicial en 1 985 con US$1,493 millones. Durante el
gobierno de García las reservas alc anzaron niveles negativos de US$ -352 millones
en 1988, para Juego en 1 990, durante el gobierno del ingeniero Fujimori, subir a
US$53 1 millones, en 199 1 aUS$1 ,304millones y en 1 992aUS$2,001 millones. Este
incremento de las RIN ha sido el resultado de la aplicación del Programa Económico
de los noventa.

El nivel de RIN para 1 992 es el más alto de los últimos 1 2 años y representa
alrededor del 50% de las necesidades anuales de importación. Sin embargo, no
todas las RIN del BCR son de libre disposición, ya que los encajes de depósitos
en moneda extranjera de los residentes peruanos forman parte de las RIN. Si
deducimos de ellas las obligaciones de corto y largo plazo con los residentes (que
para 1 992 eran de US$ 1 ,000 y US$ 500 millones, respectivamente) se obtiene
el concepto de posición de cambio o la caja disponible en dólares. La posición
de cambio llegó a ser US$-1 ,434 millones en 1988, US$-31 5 millones en 1 990,
US$-55 millones en 1 99 1 y US$ 3 1 1 millones en 1 992. Recién en 1 992 hemos
logrado una posición de cambio positiva, fundamental para ganar confianza en
el Programa Económico.

Para el Perú es importantemostrar RIN y posición de cambio positivas. Las


razones principales para esto radican en la confianza y credibilidad externa e
interna hacia el país y el programa que ellas proveen. Después de que el Perú se
quedó si n dólares, los agentes económicos tienen que ver un monto significativo
de respaldo. Lo ideal en el mediano plazo es que el régimen cambiario a aplicarse
se aproxime al tipo de cambio libre y se vaya apartando del esquema de "flotación
sucia" (es decir, con intervención del BCR en el mercado cambiado para lograr
un objetivo respecto al nivel de las reservas) que actualmente se viene aplicando.
Este régimen cambiario permitiría reducir el nivel de RIN.

Mientras tanto, tenemos que mantener un nivel alto de reservas y mejorar


la posición de cambio para generar confianza en el país interna y externamente.

70
El presentar dos mil millones de dólares en RIN crea riesgos, pues los
políticos y los agentes económicos suelen querer hacer uso de ellas, ya sea para
realizar gastos, "hacer obras" u orientarlas a financiar préstamos al sector privado.
Esto no es dable, ya que el verdadero monto disponible es de US$3 1 1 millones y,
segundo, se trata de montos que se han generado por la compra de divisas del BCR
vía emisión y no por ahorro del Fisco, lo que en síntesis significa que su uso sería
inflacionario.

Mucho se dice que existe un fuerte déficit de balanza de pagos en el Perú


y que éste se ha agravado de 1 99 1 a 1 993, alcanzando niveles de 4.6 y 6.0% del
PBI (es decir, entre 2,200 y 2,700 millones de dólares). Esta situación, según
algunos críticos, haría fracasar el Programa Económico que se viene aplicando
hace dos años y medio. Tal apreciación, sin embargo, carecerá de sentido mientras
el programa se siga aplicando tal como ha sido diseñado, el tipo de cambio y el
régimen cambiario sean libres y nos vayamos alejando de los esquemas de flotación
sucia y la tentación de fijar o anclar el tipo de cambio. Los Estados Unidos
mantuvieron un déficit de balanza de pagos significativo durante todo el siglo
XIX aplicando un sistema de tipo de cambio libre.

La disciplina en las cuentas fiscales

Una práctica sensata, tanto para un individuo como para un gobierno o un


país es no gastar más de lo que se tiene. En todo caso, un país que se sale de esta
práctica debe hacerlo sólo por medio del endeudamiento (interno y externo). Pero
aún así esta situación no se puede dar en forma permanente ya que tiene un límite
a partir del cual se presentan problemas económicos.

Un gobierno para gastar más de lo que tiene (es decir, de lo que le aporta
la recaudación de impuestos) requiere recibir préstamos del exterior o del
interior. Estos últimos pueden ser por medio de bonos que el Gobierno coloca
voluntariamente al sector privado mediante la bolsa, o por bonos o préstamos
coercitivos que coloca en el BCR generando emisión y a su vez inflación, tal
como hemos visto anteriormente.

El déficit fiscal en el Perú durante 1 985 llegó a 6% del PBI, de los cuales
el 90% era financiado al no pagar la deuda externa (el esquema aplicado por
García) y el 10% con emisión del BCR. Para 1 988 el déficit alcanzaba ya niveles
de 1 6% del PBI, de los cuales el 23% se financiaba al no pagar la deuda externa
y el 77% restante se :financiaba internamente con emisión del BCR.

71
Como hemos visto, estos niveles de déficit, y la manera como se financiaban,
generaron una hiperinflación que llegó a nivel� de 7,650% en 1990.

La disciplina fiscal se empieza a aplicar a partir del segundo semestre de


1 990, cuando el déficit se reduce al 6% del PBI, (de los cuales el 60% se financió
externamente al no pagar la deuda externa y el 40% con financiamiento i nterno).
Para 1 9 9 1 ya se alcanzó una disciplina fiscal sólida; el déficit se redujo a 3% del
PBI, externamente fue financiado en su totalidad (ya sea con créditos externos
o con alivio concertado de no pago). En 1 992 el déficit se redujo a 2.5% del PBI
con cero de financiamiento i nterno y con un nivel reducido de financiamiento
externo, debido a los sucesos del 5 de abril. Para 1 993 se proyecta un déficit de
2.9% del PBI con cero de financiamiento interno.

Para reducir el déficit se requiere recortar gastos e incrementar ingresos


tributarios. A propósito de esto último el Perú aumentó su presión tributaria de
5.5% del PBI en 1 989 a 9 . 5% en 1 992.

La disciplina en las cuentas monetarias

El Gobierno tiene una gran responsabilidad en materia monetaria. La


emisión monetaria, i mpresión de billetes o acuñación de monedas, debe estar
sujeta a reglas claras y no libre a la discrecionalidad de las autoridades monetarias.

La emisión, una vez controlada l a inflación, debe ser igual al crecimiento


de la producción y en caso de darse altos niveles de inflación, debe ser igual al
crec imiento real más un valor de la inflación esperada, necesariamente mucho
menor que la inflación actual.

Las variaciones en la emisión en el Perú y su relación con la inflación se


pueden observar en el siguiente cuadro:

72
Emisión e Inflación 1 987 - 1 992

(Variación Porcentua1)

EMISION INFLACION

1 987 11 1 15
1 98 8 439 1 722
1 989 1 783 2766

1 990 5214 7650


1 99 1 96 1 39

1 992 62 57

Es importante señalar que al acelerarse la emisión, la i nflación supera el


crecimiento de la misma y cuando ésta se reduce, la inflación la sigue, pero con
cierto retraso.

La cuenta ahorro e inversión

La inversión es un factor determinante para el crecimiento. Mayores tasas


de inversión están asociadas con mayores tasas de crecimiento y en la medida en
que la productividad de Ja inversión aumente, se i ncrementará también el
crecimiento. La inversión puede ser pública o privada y esta última, nacional o extranjera.
La inversión extranjera tiene la característica de movilizar más capital y ser más
productiva que la inversión nacional.

La inversión pública en el Perú entre 1 980 y 1 984 representó a1rededor del


8% del PBI. Y, entre 1 985 y 1 9 89, el 4%; para luego reducirse a 1 .7% en 1 990
y presentar una tendencia alcista de 2.4% en 1 99 1 y 3% en 1 992. Es decir, Jos
niveles más bajos experimentados en décadas como efecto de la hiperinflación.
La i nversión privada en el Perú presentó la siguiente trayectoria: 1 8% del PBI
entre 1 980 y 1 984, 1 5% entre 1 985 y 1 989, 1 3% en 1 990, 1 4 % en 1 99 1 y 1 3%
en 1 992.

73
El ahorro que financia la inversión puede provenir del exterior (vía créditos
o inversión extranjera) o internamente (ahorro de los individuos, de las empresas
o del Gobierno). El ahorro en el Perú ha sido principalmente externo (vía créditos
o la política de no pago con García) o proveniente del sector privado. El sector
público desahorraba debido a la presencia de un fuerte déficit fiscal. El ahorro
total en el Perú se ha reducido de 25% a 1 6% del PBI en los últimos 1 2 años. A
modo de comparación, los niveles de ahorro de China Popular para ese mismo
período eran equivalentes a 35% del PBI, en Indonesia a 30%, en Malasia a 30%
del PBI y en Tailandia a 26% del PBl,respectivamente.

El ahorro se determina por el nivel del ingreso actual y futuro de la gente,


así como el de la rentabilidad de los ahorros. Con tasas de interés reales positivas
(es decir mayores que la inflación), la gente está dispuesta a ahorrar más, y se
incrementa la oferta de fondos prestables financiando mayores volúmenes de
inversión y generándose un mayor crecimiento. Es por ello que (hasta cierto
límite) las tasas de interés reales positivas están asociadas con mayores tasas de
crecimiento económico en los países donde se dan.

2.2. La Liberalización de los Mercados

La Estabilización Macroeconómica es una condición necesaria para que los


mercados funcionen y las Reformas Estructurales tengan éxito. Los mercados no
pueden transmitir las señales correctas a los agentes económicos en el contexto de
un fenómeno inflacionario. El programa de reforma de los mercados se basa en la
liberalización económica de cada uno de los mercados en los que se aplican Reformas
Estructurales. Mediante las reformas, por lo tanto, se liberalizan los mercados de
bienes y servicios, el mercado de dinero (incluido el de divisas), valores y créditos;
y el mercado laboral. El objetivo es lograr una mayor eficiencia, producción y
productividad. Por otro lado se busca reducir el tamaño del Estado y su intervención en
la economía Lo que puede hacer el sector privado, no debe llevarlo a cabo el sector
público. Las reformas buscan una transición exitosa de la estabilización al crecimiento
económico.

2.2.1. Mercado de Bienes y Servicios

El objetivo de la reforma de este mercado es el de liberalizarlo tanto para


los b enes y servicios producidos internamente como para los procedentes del

ex tenor.

74
Los precios se liberan, se eliminan los controles, las regulaciones y la
fijación de precios internos por otros mecanismos que no sean los del mercado.
Se e1iminan también los subsidios a las actividades económicas y los monopolios
creados por ley.

Los aranceles y trabas a la importación se reducen a niveles compatibles


con los promedios internacionales para fomentar la competencia entre los bienes
nacionales y los importados.

2.2.2. Mercado de Dinero

Mercado de dinero en general

El objetivo de la reforma en el mercado de di nero es lograr un sistema


financiero eficiente, rentable, competitivo, abierto al exterior y que se caracterice
por su solvencia y prudencia. Se busca elimi nar la represión financiera y que este
nuevo sistema atienda las necesidades financieras de corto y l argo plazo.
Asimismo, se busca desarrol lar un mercado de capitales, que juegue un papel
significativo en el financiamiento de las empresas. El sector financiero debe ser
un i ntermediario eficiente del ahorro privado y público para que financie a los
distintos sectores de la economía. El sistema financiero es la base para el
crecimiento económico.

Se requiere para esto la liberalización de las tasas de i nterés, la eliminación


de los controles cuantitativos y cualitativos y la reducción de las tasas de encaje
a niveles normales. Asimismo, la flexibilización de la entrada de instituciones
financieras al mercado y la eliminación de monopolios en el sistema financiero.

Mercado de divisas

Se busca unificar el tipo de cambio y su determinación a través del mercado.


Una alternativa para ello es aplicar un sistema de flotación con intervención
restringida del Banco Central en función de las reservas internacionales y las metas
monetarias. La otra, es la flotación libre del tipo de cambio. Esta última es la más
adecuada.

Se dispone la libre convertibilidad de la moneda nacional y la libre tenencia


y transacción de l a moneda extranjera; y se eliminan los controles de divisas en

75
las tran�acciones de las cuentas corrientes y de capital. La remisión de utilidades al
exterior se realiza sin límites, así como las de patentes y regalías.

2.2.3. Mercado Laboral

Flexibilización del mercado laboral

El objetivo de Ja reforma en el mercado laboral es su flexibilización, tanto


a través de la libre entrada o salida de éste (libertad para reducir y aumentar
personal), como de la libre determinación de los salarios y la reducción de los
costos laborales. Se requiere acabar con el poder monopólico de los sindicatos
en las negociaciones de las condiciones de trabajo y en el uso de la huelga como
mecanismo de negociación.

Se debe eliminar el monopolio que generan las licencias ocupacionales y


los colegios profesionales para ejercer una profesión.

Reforma del sistema de pensiones

Un costo significativo en el mercado laboral lo constituyen las pensiones, por


lo que se debe reformar también el sistema que las rige. El objetivo de esta reforma
es la creación de un sistema de pensiones basado en la libertad de elección, los
mecanismos de mercado y el manejo del sector privado. Este S istema Privado de
Pensiones debe ser gerenciado por Administradoras de Fondos de Pensiones y
regulado y supervisado por una Superintendencia.

Las principales características de este sistema son: cuentas individuales


para cada trabajador con fondos de su propiedad; el trabajador controla los fondos
y tiene su libreta de ahorros; el aportante es el beneficiario y los aportes de cada
trabajador van a su propia cuenta y a su propio fondo de pensiones; manejo privado
de diversas Administradoras en competencia; ahorro forzoso del propio trabajador;
el trabajador puede elegir dónde ahorrar y las coberturas son de jubilación, i nvalidez,
muerte y sepelio.

76
2.3. La Reforma de la Estructura de la Propiedad

2.3.1. Privatización de Empresas Públicas

No existen razones técnicas para que el Estado tenga empresas; las únicas
razones para que éstas existan son de carácter polftico. Resulta necesaria y
conveniente la transferencia de las empresas públicas al sector privado mediante
procedimientos eficientes y transparentes. En el caso de empresas insolventes se
debe proceder a su liquidación.

Las empresas públicas, ganen o pierdan dinero, deben ser privatizadas y no


hay mejor momento para hacerlo que ¡ahora!. De otra forma, si se mediatiza l a
decisión por temores políticos o por querer aguardar a u n a mejor coyuntura
económica para obtener un mayor precio por ellas, nunca se van a vender. Los
beneficios de l a privatización no sólo radican en el valor de venta que se obtiene
sino en dejar de perder dinero, cobrar impuestos y propiciar reinversiones, nueva
gerencia y nueva tecnología.

La estrategia de privatización debe contemplar los siguientes elementos:

Empezar por las empresas más pequeñas, para luego ir a las más grandes.
Ello con el objeto de ir aprendiendo y no poner en riesgo el proceso.

Contar con un marco legal claro, flexible y transparente que, a su vez,


permita cierta libertad de acción para no poner una camisa de fuerza al
proceso.

Llevar a cabo el proceso en forma centralizada a través de un comité central


de privatización y comités especiales.

Restructurar las empresas grandes antes de privatizarlas y proceder luego


partiéndolas en bloques.

Vender las empresas al contado, con el objeto de que no regresen a manos


del Estado y que el sector privado asuma totalmente el riesgo.

No vender monopolios o privilegios en el proceso.

No permitir que la valorización sea un i mpedimento para la venta. Si bien


la valorización de las empresas puede hacerse a partir de su valor en libros
o su valo� económico, su verdadero valor es el que mercado está dispuesto

77
a pagar. Por eso, la bolsa es el mecanismo más transparente y adecuado para
la privatización.

Facilitar la participación de los trabajadores en la propiedad de las


empresas a privatizarse.

Orientar los recursos obtenidos de la privatización a gastos de i nversión


(social o productiva) y no a gastos corrientes, pues son ingresos de una sola
vez.

Convencer a la opinión pública de las bondades del proceso paraconvertirla


en impulsora del mismo.

2.3.2. Apertura a la Inversión Extranjera

La inversión en capital físico es un req uisito i ndi spensable para el


crecimiento económico. Ella puede provenir de fuentes nacionales o extranjeras
y para ello se requiere de reglas claras y de una serie de medi das y acciones que
promuevan la inversión y no la discriminen por razones de procedencia.

Se requiere de una legislación de apertura a la inversión privada, que sea


competitiva internacionalmente, para atraer la i nversión extranjera y nacional.
Se deben eliminar las trabas a la' inversión extranjera, estableciendo además
convenios de garantía a ésta.

2.3.3. Estructura de la Propiedad a Nivel Sectorial

La propiedad privada en los distintos sectores de la economía debe ser la


pieza clave de la conducta económica. Se deben eliminar las prácticas que
restrinjan el uso, disponibilidad y transferibilidad de la propiedad; así como las
medidas expropiatorias que fijan precios o cantidades en los mercados. Estos
principios deben aplicarse en sectores como el agrario, industrial y de vivienda,
entre otros.

2.4. La Reforma del Estado

El objetivo de esta reforma es reducir el tamaño del Estado, así como la


intervención de éste en la economía. Esto supone la restructuración del Estado,

78
la reforma tributaria, la reforma del gasto público y la atención de los sectores
más pobres.

2.4.1. Tamaño del Gobierno

Hace falta reducir la Administración Pública. Los ministerios deben tener


una función más normativa que ejecutiva. Se debe reducir el número de
ministerios y organismos públicos descentralizados. El personal del Estado debe
ser recolocado en gran medida.

2.4.2. Impuestos

La reforma tributaria tiene como objetivos modernizar el sistema tributario


y ejercer un mejor control en la recaudación de los ingresos fiscales. Se deben
aplicar tributos que permitan 1 ograr una mayor recaudación, 1os mismos que
deben ser neutros; es decir, no favorecer a una actividad económica respecto de
otra. Hace falta que sean, además, simples y fáciles de administrar.

2.4.3. Gasto Público

El gasto público a través del presupuesto debe seguir el principio de la caja


ú nica, eliminándose los "ingresos destinados" . Se debe buscar una asignación
eficiente y racional del gasto, priorizando el de inversión sobre el corriente y
dando especial énfasis al gasto social para alivio de la extrema pobreza.

La inversión pública debe restructurarse, gastando con criterios de


costo-beneficio y dejando su ejecución al sector privado. La priorización debe
considerar mayores gastos en infraestructura básica, tales como carreteras, agua,
electricidad y saneamiento.

2.4.4. Atención de la Pobreza Extrema

El objetivo es reducir la intervención del Estado en los sectores sociales, ya


que ella no ha rendido los frutos esperados, sino más bien ha creado distorsiones,
prebendas y privilegios. Del Estado Benefactor, que busca "socializar" la educación,
la salud, la vivienda y la ayuda a los más pobres, se debe pasar a un Estado pequeño

79
y eficiente, que haga posible la consecusión de estos objetivos mediante la
participación del sector privado ahí donde sea posible contar con él.

Reforma de la educación

El objetivo de la reforma de la educación es fomentar la inversión en capital


humano mediante l a utilización de mecanismos de mercado y la i niciativa del
sector privado. La i ntervención del Gobierno en la administración de la educa­
ción ha generado un despilfarro y un mal uso del dinero del contribuyente, así
como un sistema educativo de muy baja calidad, centralizado, burocratizado y
socializado.

La educación es una actividad económica que puede tener fines de lucro


y, en esa medida, no debe estar exonerada de impuestos. La libre entrada de la
inversión privada al sector educación debe estar garantizada. Lo importante es
fomentar la i ndustria educativa a través del libre mercado y evitar un monopolio
estatal en el sector.

Los centros de educación básica de propiedad estatal deben ser transferidos


a los municipios y promotores privados. Tales centros recibirían del Estado un
pago mensual, a manera de subsidio por alumno ( voucher o bono educativo) que
asiste regularmente a clases. Este subsidio educativo, sin embargo, debe darse
solamente a los más pobres.

La gran ventaja de este sistema es que elimina una odiosa e injusta


discriminación por la cual los más pobres resultan a la postre condenados a niveles
de educación realmente bajos, mientras que los que pueden pagar educación privada
obtienen niveles de calificación cualitativamente superiores, quedando más aptos
para enfrentar los retos del mercado laboral. El sistema de las becas por alumno
permite que pobres y pudientes accedan a los mismos servicios educativos, con la
misma calidad en la enseñanza, los métodos y el material educativo.

La educación superior universitaria, vocacional y profesional no debe ser


gratuita. El Estado establecerá sistemas de crédito educativo, sin discriminar entre
entidades públicas y privadas. Los subsidios en la educación superior generalmente
favorecen a las personas de mayores ingresos y por ello no son aconsejables. La
educación superior para todos es un propósito muy loable, siempre que los alumnos
paguen el costo de la misma, ya sea al recibirla o posteri ormente, como si fuera un
crédito o una inversión en título valor (es decir, como un porcentaje del ingreso que

80
generen). Los pagos a este crédito educativo pueden hacerse conjuntamente con
el pago del impuesto a la renta.

Otra opción es otorgar también en este caso un voucher educativo, similar


al de la educación básica, que pueda utilizarse en cualquier entidad de educación
superior. En este esquema, los alumnos competirían por los vouchers de acuerdo
con criterios pre-establecidos y las instituciones de educación superior, públicas
o privadas, lo harían entre sí por los alumnos. Se lograría así una racionalización
de instituciones públicas y privadas.

Lo importante es subsidiar a las personas y no a las instituciones de educación,


ya que eHo crea distorsiones.

Las donaciones deducibles de impuesto al sector educación son una forma


de subsidio encubierto para algunas instituciones educativas en desmedro de
otras, y generalmente crean corrupción y privilegios. A través de este sistema el
Estado termina dando mayores recursos a algunru: instituciones privadas que lo
que da en forma directa a las universidades estatales.

El sistema de los certificados de donación se prestó, lamentablemente, a


la comercialización venal de los mismos, creándose un verdadero mercado negro
por el cual las universidades recibían finalmente una muy pequeña parte del
monto sujeto a exoneración. Es por eso que un voucher educativo resultará más
j usto y eficiente.

Hace falta introducir el concepto de calidad de la educación y orientación


de la educación para la vida o el trabajo. Los padres de familia deben tener mayor
control e i njerencia en el tipo de educación que se les da a sus hijos, directa o
indirectamente (v.g a través de los gobiernos locales).

Reform11 de la salud

Esta reforma se propone introducir al sector privado en la prestación de


servicios relativos a salud, generando una libertad de opción entre atención
privada y estatal. Para ello es necesario crear los instrumentos de descentralización,
introducir incentivos de eficiencia en el sistema estatal y establecer subsidios en
proporción i nversa a los ingresos de las personas. Se debe priorizar la atención
primaria y la cobertura de la madre y el niño, así como la de los desvalidos y los
más pobres.

81
Reforma de la vivienda

El objetivo de esta reforma es la creación de un sistema privado de ahorro


y préstamo para v ivienda que reemplazaría al obsoleto sistema estatal.

Los objetivos son: crear un sistema de financiamiento a largo plazo para


la vivienda, conservar el poder adquisitivo de los aportes y apoyar a los aportantes
de niveles más bajos, así como ayudar a la construcción y a Ja formali zación de
la "autoconstrucción".

Las características del nuevo sistema serían : cuentas individuales, sistema


financiero privado, ahorro forzoso e interés de mercado.

2.4.S. Alivio de la Extrema Pobreza

El mayor alivio contra fo. extrema pobreza es controlar la inf1ación. Pero


puede darse también a través de programas que definan una población objetivo,
métodos de ayuda y un período de duración de la misma. La ayuda puede darse
de diversas maneras: mediante la distribución de alimentos (v.g. desayunos y
almuerzos escolares, comedores populares, etc.), la distribución de medicamentos
básicos (v.g. vacunaciones), mediante empleo, desarrollo de inversión en infraestructura
comunal básica y distribución de bienes de capital a la comunidad que utilice
mano de obra. También mediante la distribución de información y medios de
planificación familiar.

Los administradores adecuados para este tipo de programas son los


municipios, la Iglesia y organizaciones privadas.

2.4.6. Protección del Medio Ambiente

La falta de derechos de propiedad claros y ciertos ha permitido la explotación


depredadora de nuestros recursos naturales, favoreciendo el sistema de obtener
beneficios privados trasladando el costo a terceros, es decir, privatizando las
ganancias y socializando las pérdidas. Por ello, utilizando derechos de propiedad y
mruros institucionales transparentes, debe buscarse Ja reducción de la contaminación
en el mar a causa de los desagües y la basura, los ríos y lagos por los relaves mineros
y la basura; de los bosques tropicales por la coca, la explotación petrolera y de oro;
del aire o atmósfera por los gases tóxicos i ndustriales y del transporte.

82
Se busca también la protección de especies de animales y vegetales en vías
de extinción (v .g la vicuña). Y la eliminación de l a depredación de especies animales
y vegetales por la sobre-explotación (v.g. la anchoveta).

2.5. Reformas Institucionales

2.5.1. Marco Jurídico

Se requiere de una nueva Constitución, ya que la de 1 979 fue el resultado


de una negociación política entre los partidos de la izquierda, el aprismo y el
Partido Popular Cristiano. La resultante fue una constitución que consolidaba las
Reformas Estructurales intervencionistas y socialistas del gobierno de Velasco
y que contemplaba líricamente conceptos de economía social de mercado sin
sustento en el contexto de sus prescripciones efectivas.

2.5.2. Marco Institucional

Reforma del Poder Legislativo

Se debe restructurar el Poder Legislativo con el objeto de obtener un poder


autónomo, moderno, que legisle y fiscalice al Poder Ejecutivo. La inmunidad
parlamentaria debe estar garantizada.

La eficiencia legislativa podría darse mediante la aplicación de un sistema


que garantice l a rapidez en la aprobación de las leyes y la calidad de éstas.

Hace falta reducir los cabildeos y Jobbys de intereses creados mediante l a


aprobación de reglas amplias y n o d e casos particulares.

Se debe aplicar el esquema del Distrito Electoral Multiple (DEM), en lugar


del Distrito Electoral Unico (DEU), para garantizar elecciones más abiertas,
de mayor acceso a los ciudadanos y más democráticas.

Se debe establecer las condiciones y mecanismos para aliviar presiones del


gasto, de regulación y las presiones presupuestarias en el Congreso.

83
Reforma del Poder Judicial

Hace falta una descentralización de la administración de justicia, tanto en


su ubicación física como en la mayor utilización de arbitrajes para delitos
económicos, entre otros. Se deben "municipalizar" los juzgados de paz,
establecer tribunales especiales y juicios sumarios para los casos de
terrorismo; así como utilizarse técnicos para-legales para descargar la
labor de los jueces.

Se debe despolitizar,. moralizar, profesionalizar e "informatizar" el Poder


Judicial .

Hace falta despenalizar y utilizar servicios privados o públicos para brindar


seguridad a las prisiones.

Se debe abrir el acceso de mayor número de profesionales al campo del


notariado eliminando la i1ituaci6n monopólica que pudiera generarse en
dicha especialidad.

Reforma de los gobiernos locales y regionales

Los gobiernos locales y regionales deben reducir su tamaño e interferenci a


e n l a vida económica de las regiones y municipios. Deben autofinanciarse,
no imponer presiones tributarias excesivas y privatizar totalmente los
servicios que ofrecen a sus comunidades.

Reforma del Jurado Nacional de Elecciones

Se debe modernizar y automatizar el Jurado Nacional de Elecciones y


poner en vigencia la Cédula Unica de Identidad (CUI).

Reforma de los partidos políticos

Los partidos deberían aplicar las reglas de economía de mercado a los


procesos políticos. Se evitaría así la concentración o monopolización de
poder. Se abriría el acceso de las personas a los partidos, democratizándolos.

84
La mayor competencia política vía elecciones � permitirla una renovación
y modernización de los partidos políticos. Ello debe arrnoniz;u-se, sin embargo,
con la libertad de asociación y organización política.

Reforma de los derechos de propiedad

Se debe facilitar el acceso a la propiedad privada mediante una titulación


urbana y rural expeditiva y de costo reducido, así como garantizar los
derechos de propiedad.

Hace falta una simplificación administrativa en lo que concierne a crear


empresas, realizar trámites y obtener documentos. Es necesaría también
una desregulación, descentralización y reducción de los costos del sector
informal.

Reformas de las fuerzas del orden

Hace falta una racionalización de personal y fusión de instituciones que


cumplan las mismas funciones entre las distintas armas.

Se debe privatizar y liquidar las empresas de las fuerzas del orden (v.g.
Etramsa, Fable, Indumil).

Es necesaria Ja venta de activos fijos con miras a obtener mayor raciona1idad


económica (v.g. vender cuarteles en el centro de la ciudad y construir otros
en zonas más adecuadas).

Se debe racionalizar y limitar los gastos en armamentos y orientarlos a l a


lucha contra e l terrorismo.

Hace falta aplicar esquemas de licitación y adquisición transparentes a los


gastos relacionados con la defensa y la policía.

Hace falta por último una moralización y eliminación de la corrupción.

85
3. EL IMPACTO DE LAS REFORMAS

A nivel macroecon6mico podemos analizar las Reformas Estructurales


dividiendo, a través de una simplificación, la economía en tres grandes mercados:
el mercado de bienes y servicios, el mercado laboral y el mercado de dinero. Estos
mercados en realidad no son i ndependientes entre sí, sino que están
interrelacionados. Por otro lado, los agentes económicos se pueden clasificar en:
consumidores, productores y Gobierno.

Hasta antes de Ja aplicación del Programa Económico de Jos '90, el


mercado de bienes y servicios se encontraba plagado de controles de precio, y
restricciones a la oferta y a la demanda de bienes, mediante regulaciones y
prácticas administrativas. Todo control de precios genera escaseces, colas,
racionamiento y mercados negros. Asimismo reduce el nivel total de producción
y empleo. Al liberalizar estos mercados, así como el comercio exterior, los
precios suben inicialmente, pero también se i ncrementa la oferta y la demanda
de estos productos. se eliminan las escaseces y Ja competencia. ha.ce que los
precios no se desborden ni tengan márgenes monopólicos.

El mercado laboral antes del '90, se caracterizaba por Ja aplicación de una serie
de regulaciones y restricciones, tales como la remuneración mínima, prácticas como
las negociaciones colectivas y múltiples h que encarecían la mano de obra.
La estabilidad laboral y la comunidad l oral contribuían también a este
encarecimiento. Todo esto generaba el siguiente resultado: una remuneración por
encima de la de equilibrio en el mercado, lo cual ocasionaba un incremento del
desempleo. Las prácticas laborales que encarecen la mano de obra disminuyen tanto
la demanda como la oferta de la misma y ocasionan, por lo tanto, una disminución
en la producción.

La reforma estructural en el mercado laboral busca liberalizar el mercado,


eliminar la remuneración mínima y las prácticas que encarecen la contratación
de mano de obra sin llegar a transferir a la remuneración costos adicionales. Los
resultados a esperarse en el mediano plazo son positivos y opuestos a los
señalados anteriormente; es decir, que bajen el costo de generar un puesto de
trabajo y un incremento del empleo y de la producción en general.

El mercado de dinero y de fondos prestables, por su lado, se caracterizaba


por una "represión financiera"; es decir tasas de interés controladas y por debajo
de la inflación, controles cuantitativos sobre el crédito, una relación baja entre
activos financieros y el ingreso, subdesarrollo de l a i ndustria bancaria y escasa
evolución del mercado de capitales. A l liberalizar el mercado financiero, la
demanda de dinero se i ncrementa ya que los fondos prestables se pueden trasladar

86
de actividades poco rentables a otras de alta rentabilidad. La oferta de fondos se
incrementa debido a los instrumentos financieros que se crean. Los costos de la
intermediación o márgenes entre las tasas de interés (de préstamo y de depósito)
se reducen; aunque se esperaría que la tasa de préstamo baje y la tasa de depósito
suba. Finalmente en cuanto a la tasa de interés, se esperaría que ésta suba.

El mercado de divisas (como parte del mercado de dinero) se caracterizaba


por estar sobreregulado y controlado. El tipo de cambio se fijaba por debajo de su
nivel de equilibrio; la demanda de divisas estaba reprimida, mediante la aplicación
de instrumentos para-arancelarios y restricciones al comercio exterior; y la oferta de
divisas estaba también reprimida por los controles, fugas de capital, etc. Al
liberalizarse el mercado cambiario se incrementaría la demanda y la oferta de
di visas y el tipo de cambio podría devaluarse o revaluarse dependiendo del
desplazamiento de las curvas de oferta y demanda de divisas. Posiblemente se
podría esperar una devaluación como resultado de esta liberalización; sin
embargo, si en el mercado de dinero la tasa de interés es lo suficientemente alta
como para atraer capitales del exterior. la oferta de divisas superaría a la demanda
generando una revaluación del tipo de cambio.

La reducción del tamaño del Gobierno, ya seaporrestructuración o privatización


de empresas públicas y servicios públicos, genera al principio mayor desempleo por
la recomposición del personal y la caída en el ingreso nacional por el recorte en el
gasto público. Al final, sin embargo, genera más actividad para el sector privado que
resulta más eficiente y productivo propiciando un mayor crecimiento y empleo en
el mediano plazo.

Los mecanismos de ahorro forzoso, tales como la capitalización individual


de la compensación por tiempo de servicios, los fondos de pensiones y los fondos
de vivienda transfieren estos fondos de la administración estatal a la privada para
velar por su seguridad e integridad. Dicha transferencia incrementa la oferta de
fondos prestables, fortalece y desarrolla los mercados de dinero y de valores,
propiciando un mayor financiamiento para la inversión y el crecimiento económico.

Las Reformas Estructurales aquí analizadas pueden producir efectos


desfavorables en el corto plazo. No obstante, en el mediano plazo sus efectos son
positivos y contribuyen a un mayor crecimiento y empleo, así como a una mejor
utilización de fondos prestables. También mejoran la disponibilidad de divisas
y hacen posible la creación de un gobierno pequeño pero eficiente.

A nivel microeconómico es mejor analizar teóricamente los efectos de las


Reformas Estructurales en la empresa, utilizando las herramientas de los estados
de ganancias y pérdidas, y el balance general de una firma.

87
En una economía como la peruana entre 1 988 y 1 990, en donde los tres
mercados antes mencionados se encontraban sobrerregulados y reprimidos, el
estado de pérdidas y ganancias de una firma podría mostrar los siguientes
resultados:

Los ingresos se regulan por la cantidad producida, ya que sin competencia


externa los precios pueden ser muy altos por los elevados márgenes de i neficiencia
permitidos. Ciertos costos claves son bajos si se considera que los i ntereses son
reducidos (debido a que la tasa de interés está controlada), el combustible y la
energía eléctrica, subsidiados y dado que la materia prima i mportada tiene un
dólar igualmente subsidiado. La mano de obra puede ser relativamente cara, pero
también las remuneraciones están controladas y, finalmente, los impuestos casi no
se pagan, se evaden o se consigue una exoneración por ellos. Y por si fuera poco, si
la firma exporta productos no tradicionales, se le entrega un subsidio promedio
equivalente al 23% del valor de la exportación, que en algunos casos podía l legar al
40%.

El balance de esta firma mostraría pasivos muy altos (ya que el dinero no
cuesta), muy poco capital y una tendencia a altos activos fijos (con un dólar
subsidiado) y poco activo corriente.

Si se cambia el entorno macroeconómico, se liberalizan los mercados antes


mencionados y se reduce el tamaño del Gobierno, Jos resultados de esa firma
podrían ser los siguientes:

El estado de pérdidas y ganancias arrojaría pérdidas en un primer momento.


Las ventas pueden reducirse y los precios caer, debido a la competencia i nternacional
o a una caída en los volúmenes de venta. Los costos subirían, ya que los intereses,
los combustibles, la energía, y los insumos importados tendrían valores reales. La
mano de obra bajaría en términos relativos y los impuestos tendrían que pagarse.

El balance de esta firma vería i ncrementar sus pasivos y reducir sus activos
y capital por las pérdidas que generaría. Esta situación se complicaría al
considerarse el pago de i mpuestos, especialmente en el caso del i mpuesto a los
activos que termina reduciendo el capital.

En este contexto es necesario que la empresa se restructure para ser más


eficiente. Necesita reducir sus costos al máximo y capitalizarse, ya sea con capital
propio o de terceros, para hacer frente a un entorno macroeconómico realista y
sostenible en el mediano y largo plazo.

88
4. LA TIRANIA DEL STATU QUO

Los grupos monopólicos pueden presentarse en los sindicatos, los gremios


empresariales, los gremios profesionales, en el Gobierno y en los grupos políticos.
Estos grupos son los que generalmente presentan mayor oposición a las refonnas
estructurales, tanto individualmente como en alianzas.

Los sindicatos son muchas veces grupos monopólicos que no reflejan Jos
intereses de sus miembros, sino que más bien intentan beneficiarse a costa de ellos.
Las mejoras que obtiene un sindicato en sueldos mayores que los del mercado, por
ejemplo, se hacen a costa de los trabajadores no sindicalizados. Ellos, en algunos
casos, limitan la oferta de trabajadores y aplican mecanismos de coerción por medio
de ta violencia en contra de los trabajadores y empleadores. Ciertos sindicatos
además, suelen obtener -ya sea por presión o negociación-- protección por parte
del Gobierno. Ello se hace efectivo a través de leyes de salario mínimo,
reglamentación del máximo de horas de trabajo, compensaciones laborales y
prohibición del trabajo de menores.

La mejor protección para un trabajador es la competencia para sus servicios


y no la sindicalización. Los desprotegidos son los trabajadores que tienen un solo
empleador o ninguno.

Las personas deben tener la libertad de formar los sindicatos que deseen
para prestar los servicios que quieran a sus miembros, siempre y cuando éstos
respeten el derecho de los demás y no utilicen la coerción. La membrecía y la
participación en sus actividades deben ser de carácter voluntario.

Existen también los "sindicatos de sindicatos", así como los sectoriales,


que pretenden ejercer la personería de todos los trabajadores de un sector de la
producción (pesca, minería, etc).

El otro posible grupo monopólico es el que constituyen los gremios o


asociaciones profesionales, que buscan restringir el número de asociados con el
objeto de generar mayores remuneraciones. Asimismo, obtienen del Estado contri­
buciones cobradas poreste último y transferidas a ellos. Financian ao;í sus actividades
a costa del encarecimiento de las transacciones para los ciudadanos comunes.

Algunos gremios empresariales pueden constituirse a veces en el tercer


grupo monopólico para hacer lobby y obtener rentas y ·privilegios del Estado o
mantener las existentes. En muchos casos estos gremios dejan de tener la

89
representatividad que proclaman, convirtiéndose en organizaciones para reducir
los costos de transacción del lobby en beneficio de una cúpula empresarial.

El cuarto gran grupo monopólico suele encontrarse dentro del Gobierno


mismo. Este puede estar manejado por un grupo de burócratas de intereses
definidos. Por otro lado, existen también los sindicatos administrativos y
sectoriales'.

Las acciones del Gobierno las llevan a cabo funcionarios, algunos de los
cuales se caracterizan por gastar el dinero de terceras personas y medir su éxito
mediante la concentración de poder. También aquí se difunden los costos de
gestión y se centralizan los beneficios (políticos} en una sola persona.

Dentro del Gobierno se encuentra un grupo muy importante: las Fuerzas


del Orden. Debemos contar con este grupo si se quiere lograr l a estabilidad
política y económica en nuestro país. Así se ha demostrado en los 172 años de vida
republicana.

El quinto gran grupo monopólico lo conforman los políticos: los representan­


tes elegidos por votación y que han obtenido esos votos gracias a una campaña
que fianciaron con su dinero o el de sus promotores. O también prometiendo a
los votantes ventajas que serán pagadas por otros votantes. Algunos de ellos
enfrentan a los votantes sólo en la coyuntura electoral, desentendiéndose luego
del mandato que reciben.

Estas tres tiranías: la tiranía de los beneficiarios (conformados por los


gremios laborales, profesionales y empresariales}, la tiranía de los burócratas y
la tiranía de los políticos constituyen lo que Milton y Rose Friedman han
denominado el "Triángulo de Hierro", que protege los privilegios y derechos
adquiridos y evita desmontar los mecanismos redistributivos del Estado. Este
triángulo constituye una "Tiranía del Statu Quo" que es difícil de quebrar por su
fortaleza, consistencia y coincidencia de intereses.
CAPIT U L O IV

DE LA TEORIA A LA PRACTICA

l. LA BUSQUEDA DEL EQUILIBRIO PERDIDO (LA REFORMA


MACROECONOMICA)

1.1. El Programa de Referencia con el FMI (agosto 1990 - setiembre 1991)

En agosto de 1 990, a poco de iniciado el gobierno del ingeniero Fujimori,


se aplicó un programa de estabilización cuyos detalles hemos visto en el acápite
4.5 del capítulo l. En líneas generales, se liberaron precios, se eliminaron
subsidios y se empezó la búsqueda de los equilibrios macroeconómicos. Pero tras
algunos resultados positivos iniciales, en diciembre de ese mismo año se pierde
el control del proceso y la inflación recrudece llegando hasta el 24% mensual.
Esto, como se sabe, provocó la salida del ingeniero Juan Carlos Hurtado Miller
del MEF.

El 15 de febrero de 1 99 1 fui designado Ministro de Economía y me


encontré ante una situación difícil, en la que como primera prioridad tenía que
rescatar el programa de estabilización, que estaba seriamente afectado. En
segundo l ugar tenía que iniciar las Reformas Estructurales, en las cuales muy
poco se había avanzado. En el caso específico de la reforma tributaria, en
realidad, se había retrocedido. Y en tercer lugar tenía que avanzar en la reinserción
internacional, que para muchos ·se estaba retrasando demasiado.

Durante las tres primeras semanas me encerré en el ministerio con el equipo


económico para preparar 61 decretos supremos de Reformas Estructurales
referidas a los sectores: comercio, financiero, laboral y público. Estos fueron
aprobados el 1 1 de marzo en el Consejo de Ministros y a las 1 O de la noche expuse
el Programa Económico a la nación. Este fue bien recibido, pues no había
gasolinazos ni paquetazos. Recuerdo especialmente dos reacciones bastante
distintas ante el mensaje. La primera, del presidente del Consejo de Ministros;
la segunda, de la esposa del pintor que hacía por entonces trabajos en mi casa.
El doctor Torres y Torres Lara se me acercó después del Consejo de Ministros.
"Esto no es un programa", me dijo, "¡no tiene un paquetazo!". No creo que lo
reclamara, pero parecía de alguna manera extrañarlo. Por su lado, la señora del
pintor entre lágrimas murmuró: "no hay paquetazo, no hay paquetazo".

En efecto, no se pretendía ajustar nuevamente las clavijas del viejo


modelo intervencionista. Se trataba más bien de cambiar completamente de
modelo, de manera que se revertiera la tendencia deficitaria de las cuentas
fiscales. Había que ajustar más al Gobierno que a la gente y esto representaba
un giro de 1 80 grados en el manejo de la pol ítica económica. En materia de
estabilización me comprometí con los principios de Ja disciplina fiscal y monetaria.
El BCR no iba a financiar el gasto público, ésta era una "regla de oro". Por otro
lado, había que reestructurar el presupuesto para 1 99 1 , ya que se había calculado
una presión tributaria de 1 2% del PBI y una inflación de 28% para todo el año
y esas cifras eran totalmente irreales: la presión tributaria no pa,;¡arfa del 8% del
PBI y, para marzo, l a inflación acumulada ya era de 39%. Fui al Congreso a pedir
un crédito suplementario, ya que con una mayor inflación íbamos a tener un
incremento de la recaudación en soles. Los congresistas también estaban
sorprendidos ¿Boloña quería un crédito? ¿No iba a recortarles el presupuesto?
¿Se había olvidado de su ortodoxia? ¿Qué estaba pasando?

No sé formalmente si ellos Jo entendieron, pero lo que sucedía era que l a


inflación me estaba ayudando. Si J a inflación iba a ser de 90% y no d e 28%,
dejando los montos nominales aprobados e incluso aumentándolos un tanto vía
el crédito suplementario, en realidad se estaba haciendo un tremendo ajuste
presupuesta!. También los parlamentarios parecían víctimas de la llamada "ilusión
monetaria". Pero lo que realmente hacía ese crédito suplementario era reestructurar
el presupuesto y darJe, en términos reales, un corte muy grande.

El nuevo presupuesto se aprobó en mayo de 1 99 1 . La i nflación comenzó


a ceder: 7. 7% en marzo y 5.8% en abril. Asimismo, el tipo de cambio, que estaba
estancado en 0.55 soles por dólar de enero a marzo, se empezó a mover a 0.64
en abril. En l o relativo a l a reinserción i nternacional, abril fue también un buen
mes. Tras el viaje a Nagoya, Japón empezaba a actuar en forma más decidida en
aras de la conformación del Grupo de Apoyo. Enrique Iglesias del BID, David
Mulford del Tesoro Americano y el Viceministro de Economía japonés, Utzurni,
se comenzaban a comprometer en forma efectiva.

Mayo, en cambio, fue un mes en el que las cosas se complicaron. Primero,


con mi declaración pública de que habría pequeños ajustes mensuales en el precio

92
de los combustibles. Esto disgustó al Presidente, quien declaró que a causa de esa
falta de experiencia que se dejaba ver en mi rostro de niño, había cometido una
ingenuidad. Su actitud me restaba autoridad ante el Congreso en mis negociaciones
sobre el Presupuesto, por lo que el incidente motivó mi primera carta de renuncia,
el 1 5 de mayo de 1 99 1 . El Presidente, sin embargo, se rectificó inmediatamente
diciendo que yo era "su ministro predilecto" (ver anexo 11), razón por la que
continué en el cargo.

Por otro lado, ese mismo mes, la devaluación del dólar se empezó a disparar
llegando a 0.90 soles por dólar, debido a una inadecuada intervención del BCR
en el mercado cambiario. Se estaban otorgando líneas de crédito o redescuento
a los bancos al 4% mensual y, como la devaluación era superior a ésta cifra, los
bancos generaban ganancias. Qué mejor negocio podía haber, entonces, que
comprar dólares con una ganancia asegurada y con una oferta ilimitada de soles
del BCR. Esta intervención inadecuada se cortó y se anunció que el BCR podría
actuar en el mercado vendiendo dólares, con lo cual se detuvo la ola especulativa
y se redujo el tipo de cambio a O.R3 soles por dólar. La inflación. por su parte.
aumentó y alcanzó una cifra de 7.6%.

Junio fue también un mes difícil, por la "guerra de los impuestos" que libré
con la Comisión de Economía del Congreso, la que no quería que modificase e
incrementase la cobertura del IGV y el Impuesto a la Renta. Lo que pretendían
los allegados a Alan García era validar la política del quinquenio pasado. Su
mensaje era: "no te aprobamos más impuestos, finánciate dejando de pagar deuda
externa o emitiendo más". En este mes se dio un incremento de los combustibles
de 1 8% por razones fiscales y a causa de la pugna entre el Fisco y PetroPerú por
los ingresos de los combustibles. Esta pugna era ya antigua y se sintetizaba en l a
pretensión de que se ajustara e l Perú por PetroPerú. Estos aumentos restaron
credibil idad al Programa.

Por esas razones la inflación siguió subiendo y alcanzó l a cifra de 9.3%.


En este mes se dio la huelga de los maestros y l a del sector salud, huelgas que
involucraron a 400 mil personas en el primer caso y a 100 mil en el segundo. Esta
situación genera expectativas adversas al Programa Económico, pues el pedido
era por mejoras salariales. Se demandaba que los sueldos se incrementaran de 30
a 300 soles. Esto era fiscalmente imposible y el Programa no podía soportarlo.
Mientras no se solucionara esta huelga de manera favorable para el Gobierno, la
gente no creería que la inflación iba a bajar. Muchos decían de nuestra política
en ese momento: "cifras en azul, pero calles en rojo" o mejor dicho "cifras en azul ,
pero inflación galopante" . Las expectativas inflacionarias no s e quebrarían si la
huelga no terminaba.

93
Sin embargo, en julio la huelga se quiebra con un aumento de 70 soles en
lugar de 300. Recién entonces empiezan a ceder las expectativas i nflacionarias.
La inflación baja a 9. 1 % en ese mes y en agosto a 7 .2%, trazándose una trayectoria
hacia la baja que termina en diciembre con 3.7%. Esto se logró gracias a que se
pudo mantener el gasto público en línea, a que se aumentaron los impuestos y s e
redujo la emisión monetaria.

En agosto y setiembre empieza a activarse el Grupo de Apoyo, razón por la


cual viajé a Europa. En Lima, mientras tanto, se maquinó a mis espaldas un
programa económico alternativo concebido para producir una devaluación de
1 00% y evitar así la quiebra de algunos agentes económicos que habían apostado
mal y se habían endeudado excesivamente en soles. Se pretendía que una
maxidevaluación les licuase la deuda y les generase grandes ganancias. Era, pues,
la directa aplicación de un principio mercantilista: "ajustemos al Perú para
beneficiar a unos pocos". Afortunadamente la iniciativa pudo ser desactivada.

En estos meses. por otro lado. las negociaciones con la Comisión de Economía
se habían roto. El juego de los "alanistas" era claro y le pedí al Presidente que legislara
los impuestos que hacían falta por Decretos de Emergencia, a lo que no accedió. Se
tuvo que esperar al cambio de presidente de la Comisión de Economía del Congreso
en setiembre, para conseguir que se aprobaran algunas mejoras al Impuesto General
a las Ventas, pieza clave de la reforma tributaria.

Setiembre fue un mes gratificante, que coronó un gran esfuerzo del Gobierno.
Entre el 9 y el 1 8 se logró el Grupo de Apoyo, la firma con el FMI del Programa
de Acumulación de Derechos, la negociación del Club de París y el préstamo con
el BID, que nos otorgaba dinero después de 7 años de haber sido "parias económicos".
Habíamos alcanzado un gran logro, pero los retos futuros iban a ser mucho
mayores.

Con la aplicación de este Programa se consigue que el Perú vuelva ser un


"país serio" con credibilidad interna y externa. Se estaba devolviendo el Perú a
los peruanos.

1.2. El Programa de Acumulación de Derechos (RAP) (setiembre 1991 -

diciembre 1992)

El primer programa formal con el FMI fue firmado el 1 2 de setiembre de


1 99 1 y se denominó "Programa de Acumulación de Derechos" (RAP). Tuvo una
duración de 1 5 meses y durante su apli cación muchas fueron las veces que se

94
corrió el riesgo de incumplirlo. El Programa de Acumulación de Derechos es un
mecanismo creado para restablecer la confianza luego de haber aplicado un esquema
unilateral de pagos a la deuda externa. Reglamentariamente, el FMI y el Banco
Mundial no pueden desembolsar créditos a un país que ha incumplido con los pagos
de préstamos anteriores.

Con el FMl se adoptó un acuerdo de "acumulación de derechos" (RAP), por


el cual no se pagaría por dichos atrasos hasta fines de 1 992. El Programa
Económico 1 99 1 - 1 992 de 1 5 meses de duración (del 1 de octubre de 1 99 1 al 3 1
de diciembre de 1 992) fue aprobado por e l Directorio del FMI, e l 1 2 de setiembre
de 1 99 1 . El cumplimiento de las metas del Programa permitían acumular
trimestralmente el derecho a obtener, al final de 1 992, un préstamo de 873
millones de dólares por un período de ocho años que incluirían un período de
gracia de tres años. A principios de 1 993 el Perú necesitaba conseguir un
préstamo puente para cancelar los atrasos con el FMI y que éste desembolsara
recursos por el mismo monto para cancelar el puente. Desde ese momento el Perú
sería dc:giblc parn recibir rccur:ms fre:>1cos del FMI para financiar o apoyar su

balanza de pagos y entraría a negociar un Programa de Facilidad Ampliada (EFF)


para el período 1 993-95, como efectivamente sucedió, aunque con un atraso de
tres meses.

En octubre, recibí una presión muy grande de parte de las Fuerzas Armadas
para incrementar el gasto público en 350 millones de dólares, con la justificación
de un inminente conflicto fronterizo. El Ministro de Defensa me cursó dos cartas,
muy fuertes y con copia a todos los Comandantes Generales, en las cuales me
conminaba a la entrega de esos fondos a la brevedad posible y pretendía atribuirme
una "responsabilidad histórica" en el caso de que sucediera algo. Pero cometió
el error de enviarme un documento con lo adeudado de enero a setiembre, donde
se pedía dinero para viáticos, fotocopias y medal las; gastos poco justificables con
el pretexto de conflicto bélico (ver anexo ID). Ello motivó una respuesta dura
de mi parte, en la que dije "por razones de ancestro y por mi conducta personal
no podía permitir que se dudara o cuestionara mi patriotismo en forma alguna"
y que su pedido no tenía nada que hacer con las necesidades de un conflicto
bélico y que, más bien, estas necesidades las estaba tratando con los Comandantes
Generales directamente. Al final el conflicto no se dio; se había magnificado un
problema que finalmente se solucionó meses después por la vía diplomática.

En noviembre de 1 99 1 surge una iniciativa popuJista en el Congreso: la Ley


de Emergencia del Agro. En ella se otorgaban una serie de exoneraciones de
derechos de importaci6n a semillas y fertili zantes , se exoneraba del impuesto
selectivo al consumo del diesel a los agricultores que extraían agua del subsuelo, se
dolarizaba la deuda agraria y se devolvía el IGV a quienes realizaban actividades

95
agrícolas. Los gastos que esta ley suponía superaban los 300 millones de dólares,
y se presumía que serían financiados con sobretasas a los derechos de importación
a los productos agrícolas, las que no habrían llegado ni al 1 5% de lo que se
necesitaba.

Esta ley era el principio del fin del Programa Económico, ya que rompía
la lógica de l a política arancelaria y generaba un mayor déficit fiscal. Por tal razón
me presenté ante la Cámara de Senadores a exponer sus i nconveniencias y evitar
así que se les otorgaran ventajas a algunos agentes económicos. Pude evitar esto
último, pero Ja ley, a pesar de todo, se aprobó. Se tuvo que minimizar sus aspectos
negativos con Decretos Supremos hasta que después de abril de 1992 fue derogada
y reemplazada por una ley más neutral al Programa.

Diciembre fue uno de los meses más complicados. Lo primero que tuve que
enfrentar fue mi i nterpelación en el Congreso los días 6 y 7. Me enfrenté a la
Cámara de Diputados, respondiendo a un pliego interpelatorio del APRA, l a
Izquierda y algunos independientes.

En esos mismos días se suscitó un problema entre el Presidente Fujimori


y et Congreso. El mandatario acusó a algunos representantes de colusión con el
narcotráfico por haber derogado artículos de una ley referente al lavado de dinero.
Esto motivó que el Senado respondiese en forma airada, planteando la vacancia
de la Presidencia y pasando dicha moción a Diputados, en los precisos momentos
en que yo estaba siendo interpelado. El Diputado Letts calmó entonces los ánimos
y la moción de vacancia no prosperó. El sábado 7 de diciembre concluyó mi
i nterpelación, de la que salí airoso, habiendo llegado inclusive a responderle una
intervención al diputado aprista Carlos Rivas Dávila con una cita de Víctor Raúl
Haya de La Torre sobre la conveniencia de la i nversión extranjera.

Pero mientras yo era i nterpelado en Lima, en Bogotá se negociaba el Acta


de Barahona con los otros países miembros del Grupo Andino. Allí se aprobó un
arancel externo común con niveles de O, 5 , 1 0, 1 5 y 20%, con lo cual se terminaba
el arancel uniforme de 1 5% al cual tendíamos y sobre el que se basaba el Programa
Económico. Me tomó varios viajes y negociaciones durante los seis meses siguientes
evitar que se aprobase el arancel externo común y, al final en junio de 1 992, se
encontró como solución la figura de la suspensión temporal del Perú en el Grupo
Andino.

En diciembre vino también la batalla del presupuesto con el Congreso. Este


había desechado la propuesta del Ejecutivo que contenía 100 artículos y había
elaborado su propia propuesta de más de 300 artículos. Entre ellos se encontraban
artículos con beneficiarios específicos, ya sea para el caso de los pagos del Certex
u otros, que más tarde, a consecuencia de las discusiones y denuncias, fueron
retirados . Lo más grave es que se había desequilibrado el presupuesto al haberse
tomado más de 400 millones de soles de los incrementos salariales y haberlos
dedicado a "obras". A pesar de mis tres cartas al Congreso acerca de los problemas
que presentaba, el presupuesto fue aprobado el 1 5 de diciembre de 1 99 1 . Se trataba
de un presupuesto desfinanciado en 1 ,265 millones de soles o el equivalente al 2%
del PBI.

También fueron aprobadas las leyes de Endeudamiento y de Financiamiento.


En esta tlltima se incorporó el nuevo Impuesto a la Renta que, aparte de una
serie de correciones y mejoras, incluía el i mpuesto a los activos. Estas leyes se
aprobaron en el Pleno del Congreso. Sin embargo, se les introdujeron algunas
enmiendas que recortaban ingresos fiscales y creaban serios problemas, distan­
ciándonos de la meta de presión tributaria del 9.3% del PBI. Esto motivó que el
28 de diciembre promulgásemos el DS 307-EF-9 1 , que corregía todo ello y
claramente constitu ía una enmienda a la ley anterior. El Presidente, finalmente,
observó el Presupuesto para 1 992.

Empezamos 1 992 sin presupuesto y en enero no se giró casi nada; sólo la parte
salarial. El Congreso, seguidamente, se autoconvocó y aprobó el 1 de enero el
presupuesto para 1 992, sin consid�rar las modificaciones del Ejecutivo.
Adicionalmente, teníamos el problema de que habíamos pagado los aguinaldos
de diciembre de 1 99 1 sin marco presupuestal. En medio de esta batalla, tenía que
ir al Congreso para pedir un crédito suplementario que validara el pago del aguinaldo,
o sino proceder a descontárselo a los empleados públicos. Discutimos el punto
en la Comisión Bicameral de Presupuesto y logré que se aprobara el crédito.
Luego fui a la Comisión Permanente, la que también finalmente lo aprobó. Era
una victoria en medio de esta guerra entre el Ejecutivo y el Legislativo.

A fines de enero viajé a Washington, a una reunión con el Banco Mundial


para discutir sobre los problemas de la "sobrevaluación cambiaría". A ella
asistieron el Ministro de Economía de Argentina, Domingo Cavallo, y técnicos
y autoridades del Banco Mundial. La conclusión fue clara: las condiciones para
aplicar el Plan Cavallo al Perú suponían haber resuelto el problema fiscal y tener
cuantiosas reservas i nternacionales, lo que nos hacía descartar tal posibilidad.
También me reuní con el Director del FMI, Michel Camdessus, quien mostró
preocupación por la situación fiscal peruana. Me dijo que con el Presupuesto y la

97
Ley de Emergencia del Agro aprobados por el Congreso y las medidas fiscales
mediatizadas también aprobadas, no era viable continuar con el Programa Económico.
Me ofreció ayudarme y venir al Perú, a mediados de febrero, para convencer a las
autoridades y al Legislativo de aplicar las medidas tributarias correctas.

Camdessus vino el 12 de febrero, por pocos días, y después de una agenda


nutrida y de múltiples reuniones, dejó un mensaje sobre la necesidad de mayor
tributación como expresión de una mayor solidaridad. Después de su visita, se
aplicó u n paquete tributario en el mes de marzo con el objeto de incrementar la
presión tributaria de 7.8 a 9.3%. Este se basaba en modificaciones al IGV, el
Impuesto a la Renta y la eliminación de exoneraciones tributarias. Los impuestos
fueron aprobados por decretos supremos de emergencia con validez de seis
meses, debido a que el Congreso había limitado los actos del Presidente y no $e
podían aplicar Decretos Supremos de Emergencia amparados en el inciso 20.

Al poco tiempo de haberse dado el paquete tributario, la presión de varios


ministros hizo que se diera marcha atrás en algunas de las medidas, lo cual me
obligó a detener esa tendencia. Ante esta ola de tributos el Congreso decide llamarme
a la Comisión de Econonúa y la Comisión de Constitución para justificar los DS de
emergencia.

En marzo parecía que vivía en el Congreso, pues tenía reuniones en las


mañanas y en las tardes, ya fuera viendo los impuestos, el presupuesto o la quiebra
y cierre de bancos públicos y privados.

Ya en abril, con el inicio de la nueva legislatura en el Congreso, Alan


García enfila sus baterías contra mí y contra el Programa Económico con el
propósito de desestabilizar el régimen y convertirse en líder de la oposición. Lo
que García buscaba era mi censura inmediata, y sin posibilidad de defensa el 7de
abril, y estaba corriendo firmas para ello. Dfas antes de la instalación le respondí
duramente, culpándolo de la bancarrota del país y comparándolo con Sadam
Hussein de Iraq. García y Sadam --dije- eran los dos únicos líderes en el mundo
que después de destrozar sus países tenían todavía vigencia política en ellos, por
más insólito que pareciera Me estaba preparando para enfrentar mi censura y la
mejor defensa era el ataque. Esto lo había aprendido durante mi interpelación de
diciembre.

Antes de que el Congreso se instalara, el domingo 5 de abril, a las 9:30 de


la noche me vi en el "Pentagonito", convocado por el Presidente a una reunión
con todos los ministros. En ella nos anunció, media hora antes de su mensaje a la
nación, el cierre el Congreso. Los que siguieron, fueron momentos muy tensos y
difíciles. Sobre todo la decisión de continuar o no en el Gobierno. Debía tomar una

98
resolución rápida y terminante. En ese momento mi permanencia era críticamente
importante para e l Gobierno, especialmente en el frente externo. ¿Cómo podía
avalar la ruptura del orden constitucional? Pero, por otro lado, ¿qué pasaría con
el Programa Económico? ¿Se perderían el orden constitucional y las reformas?

Finalmente, opté por el mal menor. Ya se había violentado la normalidad


institucional; pero con mi salida--creí en ese momento y todavía lo c reo-- corría
riesgo, además, la orientación de las reformas. Adicionalmente, pensé que en l a
medida e n que el proceso de reinserción dependía en buena parte de l a credibilidad
del Gobierno, yo podría colaborar con el retomo a la normatividad institucional
desde dentro del Gabinete.

Era testigo de lo difícil que había sido empezar apenas con el cambio de
rumbo con respecto a cuarenta años de mercantilismo e intervencionismo. Las
distorsiones no sólo venían del Congreso y de un ordenamiento institucional
i nadecuado de raíz; surgían también muchas veces del seno mismo del Ejecutivo.
Entre lm: que se quedaban en el Gobierno, ¿había quiénes hubieran querido y
podido mantener no sólo el Programa de Estabilización, sino, sobre todo, las
Reformas Económicas?

En general, suponía que el pragmatismo que predominaba en el Ejecutivo


podía llevarlo hacia cualquier giro de orientación. La tentación au,,toritaria podía
finalmente trasladarse a la economía, lo que nos hubiera devuelto a la vieja
historia intervencionista. Por otro lado, sé que las Reformas Económicas, donde
se han podido completar, han llevado a la postre a una mayor liberalización
política y democrática.

No pretendo decir que veía las cosas tan claras como ahora; tuve muchos
sentimientos encontrados y algunas ideas confusas. Pero las dificultades para
defender el Programa habían sido tan grandes, que me indicaban, sobre todo,
hacia dónde no ir. Creí y creo todavía que el 5 de abril se estaba poniendo en riesgo
mucho más que la democracia. Se pusieron en juego las bases mismas de nuestro
orden civilizado.

Si este Gobierno fracasaba, con Guzmán suelto en ese momento, con Alan
García saboteando todo intento de modernizar el país y sin un arreglo definitivo
con Jos organismos multilaterales de crédito, las perspectivas eran realmente
oscuras.

No creo ser la única persona capaz de !.levar adelante un programa de


reformas. Pero en ese momento era yo quien tenía que decidir. Cada vez veo con
mayor claridad que no tenía opción. Ibamos a un "paréntesis institucional", con
todos sus riesgos, o con toda seguridad cambiábamos de rumbo para quizá no salir
nunca más del pasado; la oposición al menos, no había demostrado querer un
viraje de las viejas prácticas mercantilistas.

Yo había visto la correlación de fuerzas en el Parlamento. Como se ha


dicho, Alan García iba en camino de convertirse en líder de la oposición. Aunque
la gente lo rechazaba, su influencia en los mecanismos del poder crecía día a día.
Con la irresponsabilidad que lo caracteriza. García estaba dispuesto a desestabilizar
a l Gobierno con tal de reflotar las demandas por el populismo. No hubiera logrado
nunca su propósito, pero sí habría terminado de liquidar al país.

Resolví, pues, ponerme en primera f ila sobre la vereda contraria a la suya.


Debía asegurar la vigencia del Programa Económico e intentar colaborar en la
mejora i nstitucional.

Para cumplir la primera tarea busqué afianzar mi posición en el Gabinete.


Para la segunda, planteé la posibilidad de una Asamblea Constituyente, para lo
cual me reuní con líderes de la oposición y de Jos principales partidos políticos.
Eso fue entre abril y mayo.

Esta solución no fue aceptada por el Presidente, hasta que junto con Hernando
De Soto sugerimos la figura del Congreso Constituyente, planteamiento que fue
l levado a las Bahamas . En l a reunión de Cancilleres, el Presidente asumió el
compromiso de retornar a l a institucionalidad democrática en un plazo de cinco
meses. De esa manera evitamos que el Perú se convirtiera en un "paria político"
de la comunidad internacional.

Esos dos motivos guiaron mis acciones entre el 5 de abril y el 30 de diciembre.


Fueron meses muy duros, en los cuales tuve que enfrentarme a presiones de gasto
de las Fuerzas del Orden, presiones de los gremios, presiones mercantilistas de
todo tipo y de los mismos miembros del Gabinete. Es en esos momentos que uno
aprecia más que nunca el equilibrio de poderes y ve reafirmada la necesidad de
la existencia del Poder Legislativo. A pesar de todo ello, se l levó adelante el
Programa, se avanzó significativamente en las Reformas Estructurales y se
colaboró en el retorno a la institucionalidad democrática.

A partir de abril de 1 992, se experimentó un superávit fiscal importante,


consecuencia de la acumulación del Fonavi en el Fisco, (ya que se había liquidado
el Banco de la Vivienda), los ingresos propios de la Sunat, los fondos de la
privatización y los ingresos propios de los ministerios. El monto llegó al orden
de 400 millones de soles a junio de 1992. Por otro lado, l a recesión se venía
agudizando significativamente debido al "fenómeno del Niño" (inundaciones en

100
el Norte y sequías en el Sur), el racionamiento de energía eléctrica (por la falta
de lluvias), la "restricción vehicular" (por los atentados terroristas) y el ajuste
económico (por el "paquete fiscal"). El crecimiento, estimado inicialmente en
2.5% del PBI para 1992, presentaba cifras negativas. Ello motivó que se elaborase
en agosto un paquete de medidas benignas, con el objeto de reducir los efectos
de la fuerte recesión que estábamos experimentando desde abril, sin caer en
la tentación de la "reactivación". El paquete contempló mayores gastos en
inversión pública, alivio a la pobreza extrema y apoyo a la l ucha antisubversiva.
Se otorgó la devolución al IGV que gravaba la producción exportable y se
eliminaron impuestos antitécnicos, tales como el impuesto a los cheques y l a
reducción del ISC a los intereses en 5 puntos. S e destinó 1 00 millones de dólares
para el financiamiento de mediano y largo plazo y se crearon bonos para
restructuración financiera. Este paquete benigno en ningún momento atentó
contra el Programa Económico, ya que se financiaba con el superávit fiscal que
se había generado. El mismo, sin embargo, fue considerado por los agentes
económicos como insuficiente. La presión que habían ejercido era por mayores
volúmenes de gasto y. al no haberlos conseguido. modraron su insatisfacci6n.

En el mes de setiembre se inicia una presión por una mayor devaluación


del tipo de cambio, motivada por un incremento en el gasto p6blico del orden de
100 millones de soles, financiado con el superávit fiscal acumulado y gastado de
acuerdo al paquete benigno aplicado en agosto. Esta inyección de soles en l a
economía motivó una reducción de l a tasa d e i nterés e n soles, l o que a s u vez atrajo
conversiones de deudas de dólares a soles incrementando la demanda de dólares.
Esto impulsó la devaluación del tipo de cambio. Ello se reforzó con el cambio
de sistema de depósitos y pagos de la Sunat, que se ampliaba del Banco de l a
Nación a la Banca Privada. Estos factores propiciaron una devaluación de 20%
en 45 días ganando 9 puntos de paridad cambiaría. Esta devaluación continuaba
acelerándose y tuvo que ser controlada con la venta de dólares por parte del Fisco,
ya que mayores devaluaciones habían puesto en riesgo las metas inflacionarias
del Programa.

En los cinco trimestres de aplicación del Programa de Acumulación de


Derechos con el FMI, las evaluaciones conjuntas mostraron un cumplimiento
holgado de las metas fiscales, monetarias, de reservas internacionales y de límites
de endeudamiento externo. Asimismo, evidenciaron un avance significativo y
una intensificación de las Reformas Estructurales. Fue el primer caso de un
cumplimiento del RAP en el FMI y un gran éxito para el Perú en su lucha contra
la i nflación y en el proceso de lograr mayor credibilidad externa. Gracias a ello,
además, nos ganamos el derecho de limpiar los atrasos con el Banco Mundial y
el FMI.

101
1.3. El Programa de Facilidad Ampliada (1993-95)

El programa que negociamos con el FMI durante noviembre y diciembre


de 1 992 era un "Programa de Facilidad Ampliada" (EFF), cuya duración era de
tres años ( 1 993-1 995). Los objetivos de este programa son cinco: controlar la
inflación, reduciéndola en 1 993 a 27% para llegar a 9% en 1 995; crecer a tasas
de 3.5% en 1 993 para llegar a 5% anual en 1 995; viabílizar la balanza de pagos,
mediante la conformación de un Grupo de Apoyo, la renegociación de l a deuda
externa y el incremento del nivel de las reservas internacionales; aliviar la
pobreza extrema dedicando el 1 % del PBI al gasto social y, finalmente, continuar
profundizando las Reformas Estructurales.

Las ventajas que se obtuvieron de la negociación fueron: el incremento del


déficit fiscal del 2.5% del PBI en 1 992 a 2.9% en 1 993, para disminuirlo
gradualmente a 1 .8% en 1 995; el incremento de Ja presión tributaria de 9.5% al
1 0% del PBI entre 1 992 y 1 993, para luego crecer, en 1 .5% en los años siguientes;
la posibilidad de tener mayores márgenes de emis ión para comprar dólares y
mantener el tipo de cambio, en tanto no afectara las metas inflaci onarias. Una vez
que se terminó de negociar la Carta de Intención, no se procedió a su firma por
una serie de razones. Primero porque se consideró necesario aprobarla en Consejo
de Ministros; una vez logrado esto, se planteó que era necesario publicarla y
defenderla, lo cual también se hizo, ante los gremios, los académicos y en CADE.
Luego surgió la idea de flexibilizar la Carta de Intención, incorporando el concepto
de "pacificación" que se formuló en una carta del 1 3 de diciembre de 1 992 del
Presidente de la República al Director Ejecutivo del FMI {ver anexo IV).
También este impasse se logró superar en la negociación en Washington con la
i ntroducción de un nuevo párrafo, en el que se considera "que las donaciones
y créditos concesionales que se obtengan para estos fines no se contabilizarán en
las metas de déficit fiscal". Sin embargo, aun después de eso parecía no haber
mayor intención de aprobar la carta. La razón que podía explicar esta actitud era
que existía la esperanza de que Japón financiara el Programa Económico, sin tener
que recurrir al FMI. Esta posibilidad no era factible de acuerdo a mi experiencia,
pero algunos miembros del Gobierno continuaban pensando que éste era el
camino a seguir; y cometían un error. Esto me preocupó, ya que era claro que los
elementos claves de la segunda reinserción {limpieza de atrasos con el Banco
Mundial y el FMn debían cumplirse antes del 20 de enero de 1 993, fecha en l a
cual cambiaba l a administración Bush por la Clinton.

Sin embargo, la.decisión del Presidente de ya no seguir contando conmigo en


el Gabinete estaba tomada y consideré un deber para con el país enviar una carta de

102
renuncia enfatizando la necesidad de evitar "caer en presiones mercantilistas", "de
no quedamos a medio camino, no caer en populismos y firmar cuánto antes la
Carta de Intención con el FMI." (Ver anexo Il).

Las proyecciones macroeconómicas del Acuerdo de Facilidad Ampliada


para 1993-95 son las siguientes: (ver anexo V).

1.3.1. Objetivos de Política Económica:

La inflación se reduciría a 27% en 1 993, a 1 5 % en 1 994 y 9% en 1 995.

Las RIN se incrementarían en 1 70, 127 y 88 millones de dólares en cada


uno de estos años, respectivamente.

El déficit fücal :.e incrementaría a 2.9% del PBI en 1993 para luego disminuir
a 2.3 y 1 .8% del PBI en el 1 994 y 1 995, respectivamente. El déficit se
financiaría totalmente con recursos externos.

La emisión monetaria se i ncrementaría en 36, 22 y 1 7% durante el período


1 993-95.

El crecimiento del PBi tendría la siguiente trayectoria de 1 993 a 1 995: 3.5 ,


4.5 y 5.0%, respectivamente.

1.3.2. Instrumentos de Política Económica:

Política fiscal

La presión tributaria se incrementaría en 1 993 a 1 0% para luego pasar a


1 1 .5 y 1 3% del PBI en los años siguientes. Las medidas tributarias para ello se
basan en la ampliación del IGV y del Impuesto a la Renta.

Los ingresos por privatización equivaldrían a 0.6, 0.6 y 0.3% del PBI
respectivamente. Es decir, una recaudación en 3 años de 630 millones de dólares
por este concepto.

103
Los gastos corrientes se reducirían de 7 a 6.6% del PBI, las Reformas
Estructurales absorberían los ingresos por concepto de privati:zación, los gastos de
capital se incrementarían de 3 a 4.7% del PBI y el déficit cuasiftscal se eliminaría
a partir de 1994.

Política monetaria

La emisión monetaria debía ser consistente con las metas de inflación y


crecimiento del PBI. La tasa de encaje en moneda extranjera no debería variar;
la tasa de i nterés debería ser libre; los redescuentos darse en forma coyuntural y
a muy corto plazo, y el BCR ir creando instrumentos para realizar operaciones
de mercado abierto.

Política comercial

Se debían mantener los avances de la reforma del comercio exterior y reducir


los aranceles a una tasa uniforme de 15% para junio de 1 995.

Política cambiarla

El tipo de cambio lo debía seguir determinando el mercado, con una posible


intervención del BCR por razones de reservas internacionales o para evitar
fluctuaciones en el tipo de cambio, en tanto no afectara las metas de inflación.

Política de precios

Los precios debían seguir siendo libres, determinados por la oferta y la


demanda. Los precios administrados debían ajustarse con la inflación esperada
y reestructurarse de acuerdo a precios internacionales para permitir la privatización
de las respectivas empresas públicas.

Política saJaripl

Los salarios del sector privado se debían determinar por el libre mercado,
y el Gobierno abstenerse de fijar el salario mínimo vital. Los salarios del sector

104
público se debían ajustar de acuerdo a la disponibilidad de la caja fiscal y no
podrían exceder en promedio el valor de la inflación esperada.

1.3.3. Los Precios Claves

El tipo de cambio presentaría devaluaciones de 34, 1 6 y 7%, respectivamente,


en el período 1 993-95. Esto generaría una ganancia de paridad real de 1 5%.

La tasa de i nterés de préstamo en moneda nacional podría presentar el


siguiente comportamiento: de 63% anual en 1 992 pasaría a 32, 14 y 1 0% en Jos
tres años siguientes, con tasas de inflación de 27, 15 y 9%.

Las tendencias de los precios claves no son metas sino resultados esperados
del Programa Económico.

El Programa con el FMI para 1 993-95 pennitiría que mediante la disciplina


fiscal y monetaria se Uegase a una situación de i nflación de un dígito, a presentar
tasas de crecimiento del 5% del PBI y a tener RIN de 2,385 millones de dólares.
En resumen, a lograr los equilibrios macroeconómicos durante 1 993-95.

1.4. Los Precios Claves de la Economía Peruana

1.4.1. El Tipo de Cambio

El tipo de cambio real en el Perú se ha ido deteriorando progresivamente


desde que l a inflación se aceleró y se convirtió en hiperinflación. Así por ejemplo,
s i éste era equivalente a l OO en 1 985, se deterioró a 77 en 1 9 87 y 54 en 1 989. Para
julio de 1 990 alcanzó el valor de 46 y con el shock de agosto se redujo aún más,
a un nivel de 33.

El deterioro del tipo de cambio real significa que la devaluación del sol ha
ido más lenta que la inflación. Así, por ejemplo, en 1988 la inflación fue de 1 ,700%
y la devaluación de 680%; para 1 989, fueron de 2,800 y 1 , 1 00%, respectivamente,
y para 1 990 alcanzaron 7,600 y 3,700%, respectivamente. En 1 99 1 la i nflación se
redujo a 1 39%, pero la devaluación continuó la tendencia de mantenerse por
debajo de ésta, alcanzando un valor de 87%. Esta tendencia fue revertida en 1992
con una i nflación de 57% y una devaluación de 63%.

105
Al devaluarse más lentamente que la inflación se "sobrevalúa" el tipo de
cambio. Es decir, los productos nacionales se vuelven más caros que los importados,
y las exportaciones, menos competitivas. Esta situación se ha venido dando desde
1 986, pero se encubrió con controles de cambio, prohibiciones de importaciones
y controles en cada uno de los principales mercados.

Algunos exportadores buscan acelerar este proceso de ganancia de paridad.


Es decir, que la devaluación supere significativamente a la inflación. Esto no es
posible, ya que para ganar paridad el Banco Central emite para comprar más
dólares en la economía y subir o mantener el tipo de cambio. Esto tiene un límite
al cual se llega muy rápidamente y de continuar con esta política, lo único que
se lograría es hacer recrudecer la· inflación. Este proceso de sobrevaluación
cambiarla se generó en cinco años y va a tomar tiempo en corregirse. Probablemente
algunos años más, durante los cuales los exportadores se tendrán que reestructurar
y ajustar para ser más eficientes. Esta d istorsión de precios relativos no se va a
componer con la aplicación de la política monetaria.

Tomando como base el tipo de cambio real de agosto de 1 990 que equivale
a 100, éste se redujo a 86 en diciembre de 1 99 1 y luego se i ncrementó a 91 en
diciembre de 1 992. Es a partir de abril de 1 992 que se empieza a ganar paridad;
es decir, que la deval uación supera a la inflación buscando corregir la
sobrevaluación cambiaría. Para corregir esta posición el Gobierno debe trabajar
por el l ado del denominador del tipo de cambio real, reduciendo una serie de
sobrecostos i nternos en el comercio exterior y para hacer más competitivas las
exportaciones y la producción para el mercado doméstico. Esto se lleva a cabo
mediante las Reformas Estructurales.

1.4.2. La Tasa de Interés

La tasa de interés de M/E tiene el siguiente comportamiento: l a tasa de los


depósitos en M/E es igual a la tasa de i nterés internacional más el "riesgo país"
o percepción de confiabilidad en un país.

El concepto de "riesgo país" puede definirse como 1 a diferencia entre la tasa


de interés de la moneda extranjera en el país en cuestión y la tasa de i nterés
i nternacional (Libor) . Esta diferencia es l a que i ncentiva a las personas a traer sus
ahorros de Suiza o Miami al Perú. Cuando se liberaron las tasas de interés en
marzo de 1 99 1 , el "riesgo país" con respecto al Libor fluctuó entre 4 y 7% en 1 99 1
y 5 y 7 % e n 1 992. E n u n país estable política y económicamente, fluctuaría entre
l y 2%.

106
La tasa de interés de préstamos en M/E es igual a la tasa de depósitos
en M/E más el spread o margen financiero de los bancos o instituciones financieras.

La tasa de interés de depósitos en moneda nacional equivale a por lo menos


la tasa de inflación en un mercado libre. Si esto no fuese así, ninguna persona
medianamente sensata estaría dispuesta a tener depósitos en moneda nacional, ya
que perdería el valor de su dinero y su capacidad de compra. La tasa de interés
de depósitos en moneda nacional e,quivale a la tasa de interés de depósitos en moneda
extranjera más la expectativa de devaluación. Lo mismo sucede para el caso de los
préstamos. La expectativa de devaluación está en función de la tasa de i nflación.

Las tasas de interés en moneda nacional presentan el siguiente comportamiento:


a medida que la inflación se acelera -como sucedió en diciembre de 1 990 y
enero de 1 99 1 - la tasa de interés de los depósitos se incrementa con un retraso
de dos a tres meses. Luego, al mostrar la inflación una tendencia a la baja, la
tasa de interés de los depósitos se acerca a la tasa de i nflación. El principio es
sencillo: nadie ahorra para perder su dinero La gente aprende a defenderse de
.

la inflación y prefiere ahorrar en bienes u otros activos y no en dinero. El margen o


spread de los bancos llegó a ser 7% mensual y se redujo a 4% mensual en dos
años. Pero aún sigue siendo alto. Las razones de ello las analizaremos más
adelante (ver cuadro A. l del anexo estadístico).

Las tasas de interés en moneda extranjera presentan el siguiente


comportamiento: en la medida en que la inflación y la devaluación se reducen y se
observa una mayor estabilidad económica, las tasas de interés en M/E disminuyen
también gradualmente. El margen de las instituciones financieras en las opera­
ciones de M/E se ha reducido de 15 a 12%, pero todavía sigue siendo alto (ver cuadro
A . l del anexo estadístico).

Durante 1 99 1 las tasas de interés en MIN y M/E presentaron una tendencia


a la baja debido a que la inflación estaba disminuyendo. Sin embargo, la relación
entre tasas de i nterés en dólares y soles mostraba un premio o devaluación
esperada entre 55 y 176%. La devaluación fue del orden de 96%. Durante 1 992
la relación de las tasas de interés mostraba una devaluación esperada entre 34 y
55% y la devaluación fue del orden de 65% debido a políticas devaluatorias del
Gobierno con la intención de ganar paridad cambiaria.

En conclusión: las tasas de interés después de una hiperinflación alcanzan


niveles altos en moneda nacional y moneda extranjera. presentando una persistencia
a mantenerse en dichos niveles, aun cuando l a inflac ión empiece a bajar. La
reducción de las tasas de interés sigue con cierto retraso a la reducción de la

107
inflación. La única manera de bajar las tasas de interés es reduciendo la inflación
y por ende la expectativa devaluatoria.

Así como la inflación toma años en generarse y años en controlarse, las tasas
de interés (en moneda nacional y extranjera) tomarán años en reducirse. Pero tal
reducción definitivamente tiene que ir de la mano con una caída de la inflación .

Aplicar controles para bajar la tasa de interés en M/N o fijarla a niveles


inferiores a su valor de mercado, sólo crea mercados negros de dinero elevando
aún más las tasas de interés y los spreads de las instituciones financieras; o
incentiva la fuga de capitales en el caso de fijar la tasa de interés en M/E.

Para contribuir a una disminución rápida de las tasas de interés es conveniente


acompañar la reducción de la inflación con Reformas Estructurales en el sector
financiero que lo hagan más competitivo, así como eliminar una serie de
sobrecostos que encarecen el dinero.

1.4.3. Los Salarios

La remuneración mínima vital, por razones de política económica, casi


no se ha modificado o se ha hecho esto de modo que no tuviera relevancia y
contribuyera a liberalizar el mercado laboral. Así por ejemplo, en el segundo
semestre de 1 990 se incrementó de 4 a 25 soles, en enero de 1 99 1 se subió a 38
soles y se mantuvo así todo el año con 1 39% de inflación; en 1 992 se mantuvo
en 72 soles con 57% de inflación y en 1 993 debería mantenerse en 92 soles
siguiendo la trayectoria de l a inflación esperada del año en curso.

Los sueldos del sector privado se redujeron debido a Ja hiperinflación de 1 00


en 1 987 a 29 en 1 990 y subieron a 34 a fines d e 1992. Los salarios s e redujeron
a 32 y subieron a 48, respectivamente.

Finalmente, los sueldos del Gobierno se redujeron de 1 00 en 1 987 a 1 4 en


1 990 y subieron a 28 en 1 992.

La hiperinflación es el mayor enemigo de las remuneraciones y en corto


tiempo les reduce el poder adquisitivo a cifras extremadamente bajas.

Los programas de estabilización contraen también los sueldos, pero la


principal causa de esa reducción es la h iperinflación. No se debe confundir la cura
con la enfermedad.

108
1.4.4. Los Precios Administrados

Durante el gobierno de García los precios administrados se retrasaron


tanto, que el galón de gasolina llegó a costar 12 centavos de dólar, cuando en los
Estados Unidos cuesta más de un dólar. Esta distorsión de precios se i ntentó
corregir en agosto de 1990. Así por ejemplo, los combustibles aumentaron seis
veces, la tarifa eléctrica, tres veces; la tarifa de agua, dos veces y las tarifas
telefónicas cuatro veces. Sin embargo, estos ajustes no significaron que los
precios públicos llegasen a niveles i nternacionales, ya que se hicieron por razones
fiscales o para equ i librar las finanzas de las respectivas empresas públicas. A dos
años y medio del ajuste los combustibles, el agua potable y las tarifas telefónicas
están, en términos reales, a la mitad de su valor de agosto de 1990, mientras que
las tarifas eléctricas están 50% más altas que los valores de agosto de ese
entonces. Esta situación no quiere decir que se haya dado un embalse en los
precios admi nistrados, sino más bien que es necesario determinar los valores de
los precios administrados en concordancia con niveles internacionales y definir
una trayectoria de ajuste a ese nivel de tarifas y de las respectivas empresas
públicas para que puedan ser eficientes y privatizables.

l. LA REFORMA MICROECONOMICA DE LOS MERCADOS

La reforma microeconómica consiste en la liberalización de los principales


mercados en la economía; es decir, el mercado de bienes y servicios, el mercado
de dinero y el mercado laboral.

2.1. El Mercado de Bienes y Servicios

2.1.1. Medidas Adoptadas y Perspectivas

Reformas del comercio exterior

Importaciones:

Se redujeron los aranceles de importación a sólo dos niveles: 1 5 y 25%, con


el propósito de alcanzar un arancel unifonne de 15% a panir de 1995. Para
ello es necesario definir un esquema de avance hacia esa meta.

109
Se eliminaron las prohibiciones. restricciones a las importaciones y barreras
para-arancelarias tales corno las regulaciones fitosanitarias, zoosanitarias y el
registro de salud. Es necesario todavía eliminar la discrecionalidad que existe
con relación a esta materia en los ministerios. de Agricultura y Salud.

Se eliminaron los monopolios a la importación por parte de empresas públicas


tales como Enci, Ecasa y Petroperú. Así también. deben derogarse las
regulaciones que exigen el uso de insumos nacionales en Jos procesos de
fabricación.

Se impusieron restricciones a las sobretasas arancelarias a cuatro productos


agrícolas: trigo, leche, arroz y azúcar, las mismas que deben ser elimi nadas
paulatinamente de aquí a 1 995.

Se abrió la libre importación de bienes usados, con excepción de vestido,


calzado y artículos de aseo personal. Se permitió también el fraccionamiento
de derechos de importación de bienes de capital para estimular la inversión
y corregir el "sesgo anti-inversión".

Se contrataron empresas supervisoras de importaciones para reducir las


subvaluaciones y la posibilidad de corrupción. Se reformó la Aduana para
reducir trámites y reducir la corrupción y el contrabando. Se desactivaron
las instituciones de control del comercio exterior (v.g. el ICE).

Se aprobaron y aplicaron normas antidumping y derechos compensatorios


a través de un comité ad-hoc, utilii.ándolos en casos comprobados de acuerdo
a las normas del Acuerdo General de Tarifas y Comercio - GATI.

Exportaciones:

Se eliminaron los impuestos a las exportaciones tradicionales y los subsidios


a las exportaciones no-tradicionales (v.g. Certex y Fent). Se procedió a l a
devolución d e l IGV a todo tipo de exportaciones y s e hizo automático el
esquema de admisión temporal .

Se eliminaron diversos controles y monopolios de exportación, así como


la certificación de exportaciones y otros sobrecostos, (v.g. la contribución
a la Caja del Pescador como prerrequisito para realizar exportaciones en
el sector pesquero).
Se de be reneg ociar los contratos a ún e xis ten tes de e xpor tación . sean de
Certe xo ded euda por pr oducto s. No deben a pro barse,p oro tro la do,n ue vo s
contratos .

Hace falta toda vía en con tra r meca nis mos pr iva dos para la pro moción de
expor ta cio nes, con una or ientación h acia la int el ig en cia co merc ia l.

Reformas del comercio en general

Está en proceso una reducción d eco stos portuar ios a niveles in ternacionales .
Se ha el im inado la reser va de carga par ael transp orte marít imo ; se ha dado
una polít ica de c iel os ab iertos y una l iberac ió n de tar ifas enel transporte
aé reo, y tar ifas y r utas en el transporte terrestre urbano e ínter -urbano .

Se han el im inado d iversos mono pol ios de come rcia l izac ión est ata l. Se ha
l iqu id ado Ecasa y se de be or ienta r las act ivid ades de Enc i a canal izar las
donac iones de a limentos .

Se han ap rob ado no nn asde defensa del consum d i or,normas de com petenc ia
d esl eal y ant imonopol io , así co mo la c reac ión d e un In stit uto de De fensa
qel Consum idor (lnde cop i).

Hay que tener,s in embargo,c uidado en la apl ic ac ión de e stas nor mas,pues
el remed io puede resultar peor que la en fermedad . El Gob ie rno es un mal
v ig il ante de la cal id ad delo produc ido por el s ector pr i vado . Lassanc iones
del m ercado por ven tas de ma los pr oductos son más e fect i vas que la
inter venc ión est atal . Las regulac io nes del Gob ierno, gene ralmente, no
e vitan err ores y son f uente de co rrupción .

Se deben el im in ar las Zonas Francas come rciales pa ra redu cir la com petenc ia
desleal con el mercado inte rno y se deben promo ver Zonas Francas
industr iales de exporta ción .

2.1.2. Resultados y Perpectivas de la Liberalización del Mercado de Bienes y


Servicios:

La reducc ió n de ar anceles a los n iveles de 1 5% y 25% y la el im in ac ió n de


restr icc iones al come rc io e xte rio r ha de f in d
i o que en la economía peruana el
máx imo sobreprec io perm it id o se ade 25%. Es dec ir ,todo aquello que no puede

111
producirse con un margen de ventaja de hasta 25% respecto al producto importado
no tiene posibilidad de competir y sobrevivir en el mercado peruano.

Como se tiene dos niveles arancelarios, el máximo nivel de protección


efectiva que se otorga a un industrial cuyo producto tiene un arancel de 25% y
sus insumos uno de 15%, es del orden del 38%, en términos de valor agregado.

El contrabando ocasiona una desprotección, pues no sólo evade el arancel,


sino también los impuestos internos (IGV ,ISC, etc.). Es de urgente necesidad
corregir esta distorsión lo antes posible. La mejor manera de hacerlo es utilizando
mecanismos de mercado, antes que medidas represivas. Las posibles medidas
a aplicarse son: llegar a un arancel uniforme de 1 5% cuanto antes, bajar el ISC
de bienes suntuarios a 1 0% (v.g. licores, tabaco, joyas, electrodomésticos, aparatos
electrónicos en general, etc.) y eliminar las Zonas Francas comerciales con el
objeto de uniformizar los regímenes arancelarios en el Perú. Las medidas
represivas como la incautación y destrucción de bienes de contrabando deben
hacerse en forma automática. Pero la efectividad de estas medidas es mucho
menor que las basadas en mecanismos de mercado.

La liberalización del comercio exterior permite que el consumidor peruano


tenga la libertad de elegir entre una gran variedad de bienes nacionales e importados,
a precios asequibles y competitivos. Así por ejemplo, antes de la l iberación, el
consumidor nacional sólo tenía la opción de comprar tres marcas de automóviles
y el precio mínimo era de 25 mil dólares al contado. Hoy día se tiene disponible
todo tipo de marcas y los precios más bajos son del orden de seis a siete mil dólares
pudiendo pagarse en cuotas de 200 a 300 dólares mensuales. ¿Por qué el
consumidor peruano tendría que pagar por un carro tres o cuatro veces más de lo
que cuestan en el mercado internacional? El hecho de que el productor nacional
tenga acceso más directo a los canales de la burocracia o a los políticos no le da
derecho a obtener una renta monopólica o a cubrir sus niveles de ineficiencia a
costa del bolsillo de la gente.

Las importaciones de bienes de consumo se han incrementado de 251 millones


de dólares en 1989, a 638 millones de dólares en 1 99 1 . Los insumos, de 1 ,089 a
1,597 y los bienes de capital, de 666 a 934 mil1ones de dólares durante el mismo
período.

La liberalización de la tarifas de transporte urbano y de las rutas es otro caso


en el que pueden verse los resultados de la reforma en el mercado de bienes y
servicios. Antes de la l iberalización existía un control de precios en los pasajes

112
y un monopolio en la concesión de rutas. Ello produjo escasez del servicio de
transporte con grandes colas, deterioro de las unidades y huelgas cada vez que
se negociaba el incremento de las tarifas entre el Gobierno y el sindicato de
transportistas. Con la liberalización de precios, el número de unidades se incrementó
sustancialmente. Hoy en día Jos pasajeros viajan cómodamente sentados en
unidades nuevas, Jos pasajes no se fueron por las nubes, ya que hay competencia
de precios y, en la medida que aumenten las unidades, los si ndicatos van a ir
perdiendo poder. Por otra parte, no se ha dado ninguna huelga más en este sector.
S i los pasajes suben periódicamente no es por la liberalización sino por el
problema de la inflación. Se dice que la liberalización ha traído mucha congestión,
que va a traer la quiebra de muchos nuevos transportistas y mayor contaminación.
La congestión o abundancia es preferible a la escasez y si el Gobierno va a
i ntervenir en resolverlo, que lo haga aplicando reglas de mercado, tales como
abrir nuevas vías de acceso a los centros congestionados. El mercado mismo
también se autorregula, ya que muchos transportistas evitarán las rutas conges­
tionadas, pues de insistir en ellas empezarían a perder dinero. Respecto a las
quiebras, ése es el riesgo de toda empresa en una economía de mercado.
Recordemos que en una economía de mercado las ganancias o las pérdidas se
privatizan. Si las cosas funcionan se generan utilidades; en caso contrario la
empresa sale del mercado o se orienta a otros rubros. La contaminación, por
último, es un problema que excede Ja esfera del transporte y que el Gobierno debe
encarar globalmente, aplicando mecanismos de mercado.

La liberalización de las rutas y las tarifas de transporte aéreo nacional ha


permitido que de dos aerolíneas que tenían el oligopolio del servicio, se pase a
seis líneas y que éstas entren en una fuerte competencia de precios. Esto ha
determinado que hoy en día resulte, en términos relativos, más barato viajar
dentro del país en avión que por tierra.

La eliminación de la "reserva de carga" en el transporte marítimo --es


decir, de Ja disposición que establecía que el 50% de la carga de exportación o
importación peruana debía de realizarse en buques de bandera peruana- ha
abierto la competencia entre los fletes nacionales y extranjeros motivando una
reducción de los fletes en hasta un 50% y la pérdida del mercado nacional por
parte de las navieras nacionales que ya no cuentan con una ventaja legal. Así, por
ejemplo, la exportación de fletes durante 1 989 a 1 99 1 se redujo de 138 millones
de dólares a 59 millones, mientras que la importación de fletes se incrementó de
1 63 a 350 millones de dólares. Ello favoreció al productor y al consumidor
nacional al recibir ambos un servicio más barato y competitivo.

113
2.2. El Mercado de Dinero

2.2.1. La Refonna F"manciera: Medidas Adoptadas y Perspectivas

Se privatizaron y reestructuraron diversas instituciones financieras. Se


devolvieron instituciones expropiadas a sus legítimos dueños. Se eliminaron
los créditos del Banco Central a los sectores público y privado. Se redujo
significativamente el Banco de la Nación. Se procedió a una liquidación
ordenada de instituciones financieras insolventes, tales como la Banca de
Fomento, diversos bancos estataJes y bancos privados. así como mutuales
y cooperativas. Y se convirtió la Corporación Financiera de Desarrollo
(COFIDE) en banca de segundo piso.

Se devolvieron a sus tenedores Jos ahorros en moneda extranjera. expropiados


por García al tipo de cambio de mercado.

Se eliminaron las discriminaciones y se estableció una ley u niforme para


todas las instituciones e instrumentos financieros. Se estableció un nuevo
sistema de supervisión de instituciones financieras y se reestructuró la
Superintendencia de Banca y Seguros. Se creó un Fondo de Seguros de
Depósitos para garantizar los ahorros del público y evitar las corridas
bancarias.

Se ha iniciado un proceso de reestructuración de las carteras del sistema


financiero, pero la correcta orientación debe conducir a un sinceramiento
mediante la libre negociación entre acreedores y deudores, evitando la
compra de cartera o los subsidios por parte del Estado.

Se ha dado una nueva ley del Banco Central de Reserva que garantiza su
autonomía y evita que financie los gastos del sector público. Pero falta aún
recapitalizarlo con el objeto de eliminar el déficit cuasi fiscal.

Se ha liberalizado el mercado de seguros y reaseguros siendo ahora posible


contratarlos en el mercado nacional o internacional. Se ha dado también
una nueva ley del mercado de valores que permite su liberalización.
elimina las barreras de entrada y los impuestos a las ganancias de capital,
con el objeto de hacernos competitivos en los mercados internacionales.

Se ha eliminado la prioridad de la prenda agrícola a la banca estatal , para


posibilitar préstamos de la banca comercial a los agricultores.

114
Falta todavía eliminar las garantías del Gobierno en transacciones del
sector privado (v.g. el Seguro de Crédito a Ja Exportaci ón - Secrex).

Se ha dado, por ú ltimo, una nueva legislación sobre el sistema cooperativo


y se ha liquidado el Instituto Nacional de Cooperativas (lncoop).

2.2.2. Resultados de la Reforma Financiera

La remonetizaclón

Durante la hiperinflación de 1 988-90 la masa monetaria intermediada por


el sistema se redujo de 1 8% del PBI promedio, en el período 1 983-84, a 4% en
agosto de 1990. A diciembre de 1991 la remonetización ha incrementado dicha
masa a un nivel de 8% del PBL Es decir, luego de ese i ncremento, las 27
instituciones financieras existentes intermediaron algo más de la tercera parte de
lo que manejaron antes con casi el mismo número de agencias y personal. Esta
situación se puede interpretar como si las ventas de los bancos se hubiesen reducido
en 70% durante dicho período. A modo de comparación, l a intermediación
financiera en Chile equivale a 30% del PBI y la de los Estados Unidos a 80% del
PBI.

La remonetización se ha venido dando gradualmente mediante la emisión


del Banco Central que se utilizaba para la compra de dólares y la captación de
moneda extranjera, interna o externamente, para satisfacer las necesidades de
l iquidez del país. Durante el período comprendido entre setiembre de 1990 y mayo
de 1991 empezaron a retomar los dólares que la gente había estado guardando
bajo el colchón por la desconfianza que se generó tras l a expropiación de los
ahorros que dispuso García.

Entre mayo de 1991 y diciembre de 1 992 se empezó a repatriar el capital


peruano, ya fuese para ganar más intereses que en Miami o para recapitalizar las
empresas peruanas.

Entre noviembre de 1 991 y diciembre de 1992 aparece el capital "golondrina"


del gran inversionista peruano y del inversionista internacional, principalmente
latinoamericano.

Hasta fines de 1 992 habían entrado al país alrededor de 2,500 millones de


dólares por los conceptos antes mencionados.

115
Las inversiones en bolsa pasan por la banca y se han revitalizado por la
mayor confianza que existe en el Programa Económico, la liberalización de la
bolsa y el proceso de privatización. Las inversiones en bolsa convierten el capital
golondrina en capital de inversión. La Bolsa está experimentando un fuerte
crecimiento y gran actividad desde 1 99 1 . Los índices bursátiles han pasado de
1 00 en diciembre de 1 99 1 , a 373 en diciembre de 1 992, en donde las acciones de
bancos y servicios públicos se han quintuplicado y sextuplicado, respectivamente.
Los montos negociados han pasado de 5 1 millones de soles en diciembre de 199 1 ,
a 200 millones de soles en diciembre de 1 992.

La dolarización

La dolarización se ha venido acentuando por razones de la hiperinflación


pasada. Del total de liquidez, el 37% está en MIN y el 63% en M/E; en términos
de cuasidinero, 20% está en MIN y 80% en M/E. Esta tendencia continuará por
algunos años y se revertirá gradualmente en la medida que la inflación baje y
disminuya la expectativa de un ajuste cambiario significativo.

· La solvencia

El sistema financiero peruano estaba durante 1 991 y l 992 en una situación


muy frágil. La Banca de Fomento se encontraba en estado de insolvencia. Cuatro
bancos registraban pérdidas muy grandes y carteras muy pesadas: el Popular, la
CCC, la Caja de Ahorros de Lima, el Sunneban y el Banco Central Hipotecario.
Y fueron precisamente éstos l os bancos que quebraron durante 1 992. Existen
otras instituciones financieras que se encuentran con problemas y a las que no se
considera actualmente adecuadamente capitalizadas.

El sistema financiero se encuentra en un proceso de ajuste severo: bancos en


quiebra o en problemas, reducción de personal y reducción de agencias en más del
J 0%. Los bancos deben adicionalmente ajustarse con inversiones en modernización;
es decir, en computarización, comunicaciones, capital humano, provisiones por
malas deudas y una mayor capitalización.

116
La productividad de los bancos

La productividad de un banco se puede medir por la captación de depósitos


por trabajador bancario; es decir, cuánto dinero maneja cada empleado. Para
1 992, el promedio de un banco peruano era de 1 35 mil dólares por empleado.

Estas cifras se multiplican por cuatro para el caso de algunos bancos eficientes
del país. A modo de comparación, los bancos norteamericanos tenían una
productivadad, en promedio, de cuatro a seis millones de dólares por trabajador
y Jos bancos chilenos, de un millón de dólares por trabajador.

Las tasas de interés y la ganancia de los bancos

La distribución de las tasas y el spread en moneda extranjera era durante


1 992 como sigue:

Rubro Interés %

1 . Ingreso al ahorrista 8.0

2. Margen del banco 2.7


3. Ingreso al Fisco 5.0

ISC ( 1 5%) 3.2


Impuesto a los activos (1 %) 1 .5
Contribución a Ja Superin-
tendencia de Banca y Seguros 0.3

4. Costo del encaje 8.5

Costo aJ cliente 24.2%

Del costo total al cliente,que representa un 24% de la tasa de préstamo, 33%


le corresponde como ingreso al ahorrista, 33% es el costo del encaje del BCR,
20% son los ingresos del Fisco y 1 1 % el margen del banco.

117
El margen del banco porcadaUS$1 00captadossedescomponede lasiguiente
manera:

Ptos. Porcent.

a. Ingresos por encaje $50 x 4% 2.0


b. Ingresos por colocación $50 X 2 1 W.5
Ingreso bruto de bancos 1 2.5

c. Tasa pasiva 8.0


Ingreso antes de impuesto 4.5

Se debe deducir:

d. Impuestos a los activos ( 1 .5)


e. Contribución a la SBS (0.3)
Margen neto de Jos bancos 2.7

Los bancos menos solventes son los que mayores tasas de préstamos y
depósitos tienen respecto al promedio y a los bancos más eficientes.

La banca informal no está sujeta a encajes, impuestos, ni cuota a la SBS.


Las tasas de depósito en M/E en ella son del orden del 1 2 al 20%, y las tasas de
préstamo en M/E del orden de 30% o más.
,

Estas instituciones tienen margen para pagar la tasa de préstamo fonnal


(8 - 1 1 puntos porcentuales), más impuestos (5 puntos), más encaje (8.5 puntos);
es decir de 2 1 .5 a 24.5% de tasa pasiva y con un margen de 10% llegan al 30 o
al 35.

Las instituciones informales colocan mediante sistemas como el depósito


compensatorio (3 a 1 ); es decir, prestan S/. 100 y encajan como depósito S/.33.
Asimismo se cubren con garantías altas y tienen mecan ismos coercitivos de cobranza
que no aplica la banca formal.

Estas instituciones están en pennanente peligro de repetir el fenómeno de


Refisa.

118
¿Se puede reducir la tasa de interés?

El primer elemento requerido para bajar la tasa de interés es la reducción


de la inflación. Ello permitiría que la tasa de i nterés de los depósitos en moneda
nacional se reduzca en magnitudes semejantes y la expectativa devaluatoria
disminuya, con lo cual las tasas de moneda nacional y extranjera tenderían a
acercarse.

Un segundo elemento que contribuida a reducir la tasa de interés sería


disminuir el "riesgo país". Esto se logra en el mediano y largo plazo mediante la
estabilidad política y económica, y permite llevar a la baja los intereses de
depósitos en moneda extranjera.

Un tercer elemento sería disminuir los sobrecostos ocasionados por el


Gobierno al sistema financiero. Así por ejemplo, en materia fiscal, fue necesario
eliminar el impuesto a los débitos o t % a los cheques para permitir a los bancos
captar dinero barato y eliminar el irnpuc:Jto 11 los intereses de préstamos (ISC de
15%). Los bancos plantean estudiar la reducción o eliminación del l % a los activos
comounamedidaadiciona1 paralograresteprop6sito.En materiamonetariaseplantea
reducir gradualmente el encaje marginal de moneda extranjera que actualmente se
encuentra en 5()'Jf¡. Finalmente, se plantea eliminar o bajar significativamente la
contribución de las instituciones financieras a la Supeñntendencia de Banca y
Seguros.

Un cuarto elemento sería el saneamiento del sector financiero, mediante


la reestructuración o eventual liquidación de la banca estatal insolvente y la
intervención y liquidación ordenada de la banca e instituciones financieras privadas
insolventes. Asimismo, se requiere de la aplicación de nonnas estrictas de
prudencia financiera por parte de la Superintendencia de Banca y Seguros para
provisionar malas deudas de las i nstituciones financieras y capitalizarlas.

Un quinto elemento serían los ajustes que tienen que hacer los propios
bancos e instituciones financieras. Esto consiste en racionalizar personal, mlmero de
agencias, costos de seguridad y costos de cómputo así como en crear nuevos
productos e introducir estrategias de marketing y nueva gerencia.

Un sexto elemento sería fomentar una mayor competencia dentro del


sistema financiero captando inversión extranjera al sector mediante la privatización
de instituciones financieras, la reducci ón de los costos de los préstamos del
exterior por impuestos y la aprobación de la creación de nuevos bancos con
mayor nivel de capitalización.

119
El mercado de divisas

La líberaliwción del régimen cambiarlo en lugar de fomentar la fuga de


capital como se había dado en los años anteriores con los controles cambiarios,
lo ha atrai'do. El capital empezó a llegar a partir de abril de 1 99 1 y alcanzó niveles
de 100 a 1 20 millones de dólares mensuales. A la fecha se cuenta con alrededor
de 2,500 millones de dólares de corto plazo que han venido al país (dinero nuevo
o repatriado) que se utiliza en la remonetiUlción y en la recapitalización del país.

2.3. El Mercado Laboral

2.3.1. Medidas Adoptadas y Perspectivas

Se ha flexibilizado la &tabilidad Laboral. La aplicación de la Comunidad


Laboral se ha limitado a la distribución de utilidades bajo esquemas más
uniformes.

Se ha establecido el poder cancelatorio de la Compensación por Tiempo


de Servicios (CTS). Se ha reglamentado y democratizado las huelgas. Se
han dispuesto negociaciones colectivas que fomenten la relación directa
entre las empresas y sus trabajadores, y se ha establecido el principio: "día
no trabajado, día no pagado", con el objeto de reducir significativamente
las huelgas.

Se ha permitido los cierres de centros de trabajo sin necesidad de la


autorización del Ministerio de Trabajo. Se han reducido los intereses
laborales a tasas de mercado. Se ha flexibilizado el horario de trabajo y la
modificación de turnos y condiciones de trabajo.

El &tado se ha retirado de la fijación del salario mínimo vital. Se han


desindexado los salarios, permitiéndose que su fijación se dé de acuerdo
al mercado y la productividad. Se ha derogado la bolsa de trabajo en el
sector construcción y prácticas semejantes en otros sectores.

Se han liquidado monopolios laborales tales como la Comisión Controladora


de Trabajo Marítimo (CCTM).

Se ha desconcentrado el poder de los sindicatos sectoriales, de los gremios


empresariaJes y el del Gobierno.

120
Se han eliminado los conceptos de concertación tripartita entre el capital,
el trabajo y el Gobierno en favor de una negociación entre el empresario
y los trabajadores.

Se ha aprobado un sistema de pensiones privado administrado por las


Administradoras de Fondos de Pensiones (AFPs). se lo ha reglamentado y
se ha creado la Superintendecia de APFs.

Se debe evitar la intervención del Estado en áreas típicas del "Estado


Benefactor" como la creación del seguro de desempleo, el seguro médico,
ayudas suplementarias a familias con hijos menores, los suplementos de
alquileres, etc. Estos programas generan burocracia y la ayuda no llega a
los verdaderamente necesitados (a quienes están en la extrema pobreza),
ya que se filtra a los de mayores ingresos y acostumbra a la gente a vivir
de subsidios y a no trabajar.

2.3.2. Resultados de la Reforma Laboral

La reforma laboral ha ido cambiando l a actitud de los individuos hacia el


trabajo, despertando en ellos una conciencia acerca de la necesidad de conservarlo.

En términos de horas-hombre perdidas por concepto de huelgas, éstas se


han reducido considerablemente de 1 988 a 1 992. De 38 millones de horas- hombre
perdidas en 1988 a 1 5 millones en 1990, 1 0 millones en 1991 y a 1 .2 millones en
1 992. Hemos bajado, alcanzando el nivel más bajo que se haya registrado en
muchos años. El número de trabajadores afectados por huelgas se redujo de 690
mil en 1 988 a menos de 136 mil en 199 1 .

Los índices de empleo se han visto reducidos significativamente de 1 00 en


1 980 a 84 en 1 990 y a 67 en 1 992. Los sectores más afectados han sido el comercio,
las industrias y los servicios. Estos resultados son previsibles durante el período
inicial de estabil ización y Reformas Estructurales y no debemos olvidar que la
causa última de todo esto es la hiperinflación.

La reforma del sistema de pensiones se encontró con una realidad muy


compleja. A principios de 1 99 1 mas de tres millones de trabajadores aportaban
al sistema. Luego, en 1 992, esta cifra se redujo a 1 .7 millones debido a la
informatización del trabajo y a la racionalización del sector productivo.

121
El Sistema Nacional de Pensiones (SNP) colapsó en 1989 cuando los ingresos
por l os aportes no fueron suficientes para cubrir los beneficios ofrecidos. Los
ingresos cayeron de 2 a 1 % del PBI. Las reservas del SNP equivalen a 360
millones de dólares y las obligaciones con los actuales pensionistas y aportantes
son del orden de 29,500 millones de dólares. El 1 5% de estas obligaciones
corresponde a pensiones que se deben pagar a los actuales pensionistas hasta que
la obligación se extinga. El 85% restante corresponde a los beneficios que se
deberá brindar a los actuales aportantes en función a lo que a la fecha tienen ya
devengado en el sistema.

La brecha del SNP es de 29, 1 40 millones de dólares que constituye una


obligación del Estado. Ante esta situación hay tres alternativas para evitar que
la brecha siga creciendo: reducir más las pensiones, aumentar las aportaciones
o liquidar el sistema. La solución mas viable es la tercera.

El Instituto Peruano de Seguridad Social (IPSS) en el período 1985 - 1 990


mostraba una administración y resultados deficientes. La burocracia creció de 28
mil a 41 mil; los gastos administrativos se incrementaron de 14 a 21% del total
de gastos; la población cubierta por el Seguro Social se triplicó mientras que sus
ingresos se redujeron a la mitad. Para balancear el presupuesto las pensiones se
redujeron en 77% en términos reales y las prestaciones de salud eran tan deficientes
que hoy el 20% de los asegurados tienen seguros privados. Asimismo tanto las
pensiones como las prestaciones de salud estaban plagadas de prácticas inadecua­
das y corrupción.

A partir de 1 990 toma la dirección del IPSS Luis Castañeda Lossio quien
ha llevado a cabo una reorganización, reduciendo su personal y mejorando
las prestaciones de salud. Sin embargo, en materia de pensiones, poco puede
hacerse con una situación de quiebra como la descrita. El sistema privado de
pensiones es la única solución efectiva al problema.

El inicio del nuevo sistema de AFPs tendrá lugar en junio de 1 993, con por
lo menos siete empresas. Es fundamental igualar las aportaciones del IPSS con
las AFPs.

Se debe liquidar el Instituto Peruano de Seguridad Social en matería de


pensiones, por su crítica situación de insolvencia. Esto implica l levar a cabo et
remate de sus propiedades.

Se debe incrementar la edad de jubilación a 65 años y uniformizar los


regímenes de jubilación, eliminando de ellos Jos privilegios y el rentismo.
Es nece.wio incorporar al nuevo sistema los fondos<le pensiones existen�
espe.ciales, como l a caja de pensiones militares y policiales y la de rama
magisterial.

3. REFORMA DE LA ESTRUCTURA DE LA PROPIEDAD

3.1. Privatmción de Empresas Públicas

Actualmente existen t 80 empresas estatales cuyas actividades generan 1 5%


del PBI, cuyos empleados ascienden a 200 mil y cuyo valor de activos en libros
en 1 988 (en el caso de las empresas no financieras) era de US$5,500 millones.
Las empresas más importantes se encuentran en tos sectores de petróleo, energía,
minería y telecomunicaciones. Entre J 985 y 1 989 las empresas públicas perdieron
1 ,685 millones de dólares.

Durante 199 I se vendieron, mediante subasta bursátil, acciones ele clos


empresas al sector privado, obteniéndose 2.3 millones de dólares. Las empresas
vendidas fueron Sogewiese Leasing S.A y Compañías de Minas Buenaventura.

Durante 1992 se vendieron 1-0 empresas públicas, ya sea mediante subasta


pública o bursátil, obteniéndose por ellas alrededor de 247 millones de dólares.
Las empresas vendidas fueron: Buses de Enatru (US$ t 1 millones), Grifos de
Petroperú (US$ 37.4 millones). Minera Condestable (US$ t .3 millones), Banco
de Comercio (USS 5.4 millones), Química del Pacífico (USS 4.4 millones),
Industrias Navales S.A. (US$ 807 mi1), Solgás (US$ 7 .3 miHones), Minpe.co USA
(US$ 4. 1 millones), Hierroperú (US$ 1 20 millones) y Aeroperú (US$ 55
millones).

En dicho año no se pudieron privatizar y, por tanto, fueron liquidadas dos


empresas financieras: Banco Popular del Perú y el Sunneban.

Por otro lado, la demora en la privatización de Aeroperú generó pérdidas


por cerca de 50 millones de dólares que debieron ser cubiertas por el Fisco.

Estas ventas se realizaron a pesar de los sucesos del 5 de abril de 1 992, que,
al generar inestabilidad política y jurídica, pudieron haber paralizado el proceso.

123
El cronograma de privatizaciones para el '93 es el siguiente:

Enero: Fibras, Cementos Lima, Renasa. Flopesca.


Febrero: S iderperú.
Marzo: Petrolera Transoceánica, Refinería Conchán,
Reaseguradora Peruana, Petromar, Serpetro, Commsa.
Julio: Sedapal, CPT.
Agosto: En tel.
Diciembre: Centromín, Electrolima, Electroperú, Papelera Peruana.
Paramonga, Banco Continental e Interbanc.
Para fecha
indeterminada: Cemento Yura, Cerper, Emsal, Enata, Epsep, Fertisa
y Pescaperú.

Este cronograma presenta actualmente un retraso que es necesario corregir.


Lo óptimo sería que las 1 80 empresas públicas estén privatizadas para el 3 1 de
diciembre de 1 994.

Los principales problemas que se han dado en lo referente a la privatización


han sido el prejuicio de la supuesta "pérdida de soberanía". l a oposición
burocrática (por razones de pérdida de poder y status), y la concepción errada de
que las empresas no se deben vender en este momento en que el mercado está
deprimido o que, si son rentables, no deben ser privatizadas.

3.2. Reformas para Promover Inversión Nacional y Extranjera

Se ha promulgado una ley marco de la inversión nacional y extranjera que,


con sus respectivos reglamentos, busca atraer las inversiones al Perú.

Se ha suscrito a convenios de garantía a la inversión extranjera, tales como


Miga, Opic. Faltan aún el convenio de París y otros convenios bilaterales de
inversión extranjera. Se ha autorizado a1 MEF la suscripción de convenios
para evitar la doble tributación.

Se ha aprobado la legislación sobre propiedad industrial que i ncorpore el


concepto de patentabilidad en medicamentos, invenciones y otras actividades
en un período menor a un año.

Se han resuelto diversos litigios con inversionistas extranjeros. Esto se ha


hecho ya con Southern, Occidental y Japeco. Pero faltan resolver Jos litigios

124
con Belco-Aig y Petrolera Ganso Azul, así como l legar a un acuerdo para
la explotación del gas de Camisea.

Se ha promulgado la legislación sobre concesiones de bienes y servicios


públicos al sector privado, así como de leyes sectoriales que permitan la
venta o la concesión de la explotación de recursos naturales.

Se han aprobado reglas y convenios de migración-inversión para fomentar


la inversión extranjera.

Se ha promulgado una legislación ágil acerca de quiebras, que permite


a las empresas en falencia económica la salida del mercado, en corto plazo
y forma transparente.

Se ha dado una legislación que facilita las fusiones y restructuraciones


empresariales.

Las normas de promoción de la inversión extranjera han motivado que ésta,


que alcanzó la insignificante cifra de 1 5 mi llones de dólares durante el quinquenio
de García, subiera a cifras de compromisos por 600 millones de dólares durante
1991 -92. Las inversiones de l a Southern, tras la solución del litigio, suman
alrededor de 300 millones de dólares; las de la OXY, 60 millones de dólares, las
de Newmond en las minas de oro de Cajamarca, alrededor de 35 millones de
dólares en los próximos cinco años. Están también la de Televisa en el canal 4; las
inversiones extranjeras en privatización tales como Química del Pacífico, Solgás,
HierroPérú, Aeroperú y Quellaveco. La inversión nacional en el Perú no es
suficiente ni tiene la capacidad de movilizar grandes montos de dinero para
financiar proyectos. Es por ello que, si se quiere un rápido despegue del país hacia
la modernidad, se necesita con urgencia movilizar con gran dinamismo la
inversión extranjera.

3.3. Propiedad Sectorial

En este campo se han empez.ado a adoptar las siguientes medidas, que será
necesario profundizar:

Agricultura: Se ha dispuesto la libre transferencia de la tierra, la


l iberalización del uso de ésta como colateral, la eliminación del crédito
subsidiado y la desregulaci6n del comercio interno y externo de productos
agrícolas. Se ha establecido, asimismo, el cobro del agua de acuerdo con

125
los precios de mercado. Hay que declarar la terminación de la Reforma
Agraria y pennitir a las organiwones agrarias actuales (v.g. cooperativas,
Sais, etc.) escoger libre y democráticamente el modelo empresarial que
habrá de t:egirlas.

Pesquería: Se ha eliminado la intervención del Estado en la fijación de


coeficientes de transformación, -OSO de embarcaciones de diversos tipos,
etc.

Energía y Minas: S e deben liberalizar los precios de combustibles y de


energía o regularlos tomando modelos eficientes internacionales en los
casos de monopolio estatal. Se debe retirar al Estado de la labor de
explotación de yacimientos mineros y petroleros.

Industrias: Se han dado normas en defensa del consumidor que permiten


la patentabilidad.

Vivienda: Se ha liberalizado el mercado de alquileres. Pero todavía es


necesario profundizar esta reforma y eliminar el control de las rentas de
alquiler. Se deben asimismo flexibilizar las normas para nuevas edificacio­
nes.

Infraestructura: Se deben eliminar los monopolios en la asignación de


obras, mediante competencia doméstica e internacional. La construcción
de éstas la debe llevar a cabo el sector privado. Se debe eliminar también
la fórmula polinómica en los contratos de construcción entre el Estado y
el sector privado.

4. REFORMA DEL ESTADO

4.1 Tamaño del Estado

En este campo muy poco es lo que se ha avanzado. Solamente se ha fusionado


el Ministerio de Vivienda y Construcción con el de Transportes y Comunicaciones.
Sin embargo, el Fonavi no se ha comprendido en este ministerio así como tampoco
los servicios de saneamiento, que han pasado al Ministerio de la Presidencia. Ello
resulta contradictorio con la reestructuración planteada. Asimismo, solamente
se ha liquidado el Instituto Nacional de Planificación (INP) y el Instituto de
Comercio Exterior (ICE).

126
En materia de racionalización de personal se ha recolocado 70 mil personas
de un total de 645 mil activos en el Gobierno Central a un costo de más de 80
millones de dólares.

El Gobierno Central debe simplificarse mediante la reducción del número


de ministerios, de catorce a ocho, quedando los siguientes:

Relaciones Exteriores.
Defensa.
Interior.
Economía, Finanzas y Comercio.
Asuntos Sociales {Educación. Salud y Trabajo ).
Asuntos Productivos (Industria. Turismo, Agricultura, Pesquería,
Minería y Petróleo).
Infraestructura (Energía, Transportes, Comunicaciones, Vivienda y
Saneamiento).
Presidencia (Presidencia, Justicia y asuntos regionales).
Debe haber un sólo organismo central con rango ministerial: el Fondo de
Compensación y Desarrollo Social (Foncodes), orientado al alivio de la extrema
pobreza. Se debe liquidar el lnap.

Se deben desactivar o privatizar 52 organismos públicos descentralizados,


de un total de 70 existentes.

Se deben crear, o reforzar, seis instituciones autónomas:

Banco Central de Reserva (BCR).


Contraloría General de la República (CGR).
Superintendencia Nacional de Administración Tributaria (Sunat).
Superintendencia Nacional de Administración de Aduanas (Sunad).
Superintendencia de Banca y Seguros (SBS).
Superintendencia de Administradora de Fondos de Pensiones (Safp).

El personal del Gobierno Central se relocalizaria a través de la


descentralización de la educación y la salud, la compra de renuncias y la selección
de personal con pruebas objetivas, así como a través de la privatización. Ello
permitiría la reestructuración de la pirámide salarial del sector público, la
creación de sistemas de evaluación permanente y la creación de la carrera
pública.

127
4.2. Reforma Tributarla

Los objetivos hacia los que apunta la reforma tributaria son los siguientes:
alcanzar una presión tributaria del 1 3.5% del PBi en 1995 y una de 15% en el año
2000; basar la tributación en impuestos que afecten el consumo y no la inversión;
reducir el número de impuestos a cinco (Impuesto General a las Ventas, Impuesto
Selectivo al Consumo, Impuestos a la Importación, Impuesto a Ja Renta e
Impuesto al Patrimonio o a los Activos). No se debe exportar impuestos, para lo
cual se aplicaría la devolución del IGV. Se deben eliminar las exoneraciones y
exenciones tributarias, cualquiera sea su tipo (ya sean por sectores, ubicación
geográfica, etc.). Se deben eliminar el resto de impuestos, tasas y contribuciones,
los impuestos regionales y reglamentar los impuestos locales. Hace falta, por
último, eliminar o renegociar los convenios de estabilidad tributaria para evitar
que generen monopolios, y distorsiones en la asignación de recursos o privilegios.

Las características de los impuestos a aplicarse son� El IGV, con una tasa
de 1 8% de aplicación generalizada sin exoneraciones. El ISC se aplicaría sólo a
la gasolina, cerveza, gaseosas y automóviles. El impuesto a Ja importación
consistiría en un arancel uniform.e de 15%. El impuesto a la renta personal y
empresarial se basaría en un número reducido de tasas sin deducciones. Lo óptimo
sería una tasa uniforme del orden del 20% (las que nos recuerdan al quinto real). El
impuesto a los activos se ha concebido como un impuesto mínimo a la renta, que
puede eliminarse paulatinamente por su sesgo anti-inversión. Las exoneraciones
tributarias a los i ntereses, a los rendimientos de los instrumentos de la bolsa y a
las ganancias de capital deberían eliminarse gradualmente.

Se deben eliminar los impuestos que distorsionan la actividad económica


en la medida que la caja fiscal lo permita. En ese sentido, se han eliminado ya el
impuesto del l % a los débitos o a los cheques, el impuesto selectivo al consumo
del 1 5% a las operaciones activas de las instituciones financieras y una serie de
impuestos y contribuciones que encarecen y distorsionan las transacciones
económicas.

Se ha creado una administración tributaria moderna y eficiente, que ha


incrementado significativamente el número de contribuyentes y es respetada por
sus acciones.

Se ha elaborado un nuevo Código Tributario orientado a elevar el costo de Ja


evasión, de tal manera que pagar los impuestos supere los beneficios de evadir. Esto
necesariamente conlleva establecer la pena de cárcel por evasión de impuestos.

128
Se debe sincerar la deuda tributaria sin caer en amnistías o blanqueos. Hay
que acabar con la idea de que sólo los tontos pagan impuestos en el Perú.

4.3. Reforma del Gasto

Poco es lo que se ha hecho en este campo. Se ha separado la ley orgánica


del presupuesto de la ley anual del presupuesto para hacer este proceso más
transparente y menos engorroso. Se ha avanzado con ta Caja Unica, pero todavía
quedan fuera de ella el Fonavi, Jos ingresos propios de la Sunat y la Sunad, y los
de Jos ministerios (v.g los del Ministerio de Pesquería, Ministerio de Relaciones
Exteriores, etc).

En materia de inversión pública no se han llevado a cabo mayores reformas


o reestructuraciones. No hay una priorización de los proyectos en base a su
rentabilidad económica, ni una mayor participación del sector privado en la
ejecución de los mismos paca que el Estado pueda liberar recursos hacia otras
actividades. Los proyectos hidráulicos o de irrigación siguen siendo los prioritarios.
Se ha ejecutado en ellos 2, 1 00 millones de dólares a t 990 y queda un saldo por
ejecutar de 3,700 millones de dólares.

Asimismo, es necesario establecer criterios de asunción de deuda por parte


del Estado en materia de Reformas Estructurales. Los casos más relevantes son:
privatización, educación, fondo de pensiones y fondo de vivienda.

4.4. Atención a los más Pobres

En el sector educación se aprobaron tres leyes: las de descentralización,


financiamiento y promoción de la inversión privada en la educación. Estas son
los cimientos básicos para la mayor reforma estructural en el país. No hay a vanees
en cuanto a la educación superior, salud y vivienda.

En lo referente al alivio a la pobreza, se inició el programa de agosto a


noviembre de 1 990, pero luego fue desactivado por falta de fondos y de gerencia.
Durante 1 99 1 y el primer semestre de 1 992, poco se hizo en esta materia por los
problemas mencionados. Los gastos mensuales en alivio a la pobreza subieron
de cuatro millones de dólares mensuales a 30 millones de dólares mensuales a
partir de agosto de 1 992 con Iá incorporación de un nuevo gerente proveniente
del sector privado.

129
SehacreadounFondodeCompensaciónparael Desarrollo SociaJ (Foncodes),
que se deberá caracterizar por ser autónomo, eficiente, de alto nivel, apolítico y
permitir obtener donaciones significativas del exterior.

4.5. Protección del Medio Ambiente

Poco es lo que se ha hecho con relación a Ja protección al medio ambiente.


E1 nuevo código sobre esta materia fue aprobado en diciembre de 1 990, pero
resulta demasiado restrictivo, pues ha calcado esquemas y regulaciones de países
avanzados. No contempla mecanismos de mercado, lo cual es una grave carencia.
ya que los derechos de propiedad son probablemente el mejor instrumento para
proteger el medio ambiente.

S. REFORMA INSTITUCIONAL

Salvo en a1gunos aspectos relacionados con el Poder Judicial y en la elección


del Congreso Constituyente, poco o nada es lo que se ha hecho en esta materia.
(Ver capítulo m. acápite 2.5.2).

6. LA RESISTENCIA A LAS REFORMAS ESTRUCTURALES

La "Tiranía del Statu Quo" es la resistencia más fuerte a las reformas


estructurales, ya sea porque quienes la sostienen no quieren perder subsidios,
privilegios o inmunidades. Si se ha podido avanzar en fonna significativa en este
proceso, ha sido por la gran crisis económica. social y política que se experimentó
entre 1 988-1990. Esto permitió que se diesen los grandes cambios y romper el
"Triángulo de Hierro". Pero a medida que pasa el tiempo, el triángulo vuelve a
fortaJecerse y se hace más difícil avanzar en las Reformas Estructurales.

En la primera ola de Refonnas Estructurales se hizo frente a varias


presiones. Los gremios empresariales liderados por la SNI atacaron fuertemente
la medida de reducción de aranceles a través de los medios de comunicación. Los
sindicatos laborales hicieron también, a través de la CGTP, pronunciamientos en
contra de las medidas laborales adoptadas. Los apristas e izquierdistas en el
Congreso o quienes representaban sus ideas dentro del Gabinete se opusieron a
las medidas adoptadas, principalmente al decreto de privatización.

130
En la segunda ola de Reformas Estructurales. la mayor oposición la dieron
algunos de los partidos políticos, ya sea institucionalmente o a través de sus
representantes en el Congreso y el Tribunal de Garantías Constitucionales.
Varios miembros del Gabinete fuimos a los distintos medios de comunicación y
sostuvimos reuniones con diversos polfticos para defender el paquete de Reformas
Estructurales. Costaba creer cómo desde la ultraizquierda hasta el ex Fredemo se
oponían a la reforma de la educación arguyendo que atentaba contra la gratuidad
de la enseñanza; a la reforma laboral. porque buscaban defender a las comunidades
laborales; a Ja liquidación de la Reforma Agraria, porque tenían su propia ley
sobre la materia encarpetada hace algunos años; a la liquidación de la Comisión
Controladora deTrabajo Marftimo(OCIM), porque�gwu¡ p-otegían a esta inmtución;
a la privatización y a la liberati1J1Ción de rutas y pasajes, la que fue anulada por
et Tribunal de Garantías Constitucionales. Lo que más llamó la atención es que
la facultad para restructurar e1 Estado nos fuera negada por un voto del
Movimiento Libertad, a pesar de que esa organización política había propugnado
esa reforma durante su campaña.

Las medidas tributarias aplicadas entre enero y marzo de 1992 encontraron


seria oposición en ciertos gremios empresariales, los que tomaron como banderas
de lucha la reducción del IGV. la eliminación del impuesto a los activos y la
eliminación o reducción del ISC a los combustibles. Pedían también una mejor
tasa de cambio e incluso llegaron a plantear un Certex generalizado.

Las mayores presiones contra la tercera ola de Reformas Estructurales.


vinieron de parte de los gremios empresariales, gremios profesionales (cuando
se eliminaron las contribuciones a los colegios profesionales), las regiones de
selva y frontera (cuando se eliminaron las respectivas exoneraciones). y los
sindicatos laborales (cuando se dieron las leyes de huelgas y negociaciones
colectivas, de la tlexibilización de la Estabilidad Laboral y de las indexaciones).
Finalmente, hubo también oposición de la burocracia estatal a la privatización de
las empresas públicas y los fondos de pensiones.

7. ¿EN CUANTO TIEMPO DAN FRUTO LAS REFORMAS


ESTRUCTURALES?

Para muchas personas la gran pregunta es cuándo da sus frutos un pr-0grama


económico como el que se ha aplicado en el Perú. Unos piensan que aJ año o dos
las cosas ya deberían estar resueltas y el país arreglado. Estas apn:ciacioncs, sin
embargo, no pasan de ser buenos deseos. Pensemos en el caso de una empresa

131
quebrada; ¿Cuánto tiempo le tomará reflotarla a un empresario con experiencia?
La respuesta es entre dos y tres años. Ahora, tra.5ladémosnos al caso de un país
que ha estado en bancarrota total y durante por lo menos los últimos 40 años ha
venido empobreciéndose y retrocediendo a raíz de las reformas estructurales
socialistas de Velasco, las políticas populistas y demagógicas de García y la
guerra propiciada por el terrorismo. Se requiere estabilizarlo, aplicar las Refonnas
Estructurales, hacerlo sujeto de crédito internacionalmente y pacificarlo. Esta
tarea demora de 7 a 1 O años con facilidad. Para comprobar estas cifras hagamos
un análisis comparativo de otros países que estuvieron en situaciones semejantes:

En Chile el proceso de estabilización tomó cinco años. La i nflación bajó


de 508% en 1 973 a 30% en 1 978. El crecimiento pasó de -5.6% en 1 973 a 1 % en
1 974 para caer a - 1 3% en 1975 y luego crecer a partir de 1 977 a 8% anual por
varios años. El déficit fiscal bajó de 25% del PBI en 1973 a 1 % del PBI en cinco
años. Las exportaciones se i ncrementaron de 1 ,200 millones de dólares en 1 973
(previa caída en 1 975) a 4 mil millones en 1 979 y 8 mil millones en 1 989. Las
tasas de interés de préstamos se redujeron de 251 % en 1 973 a 62% en 1979 y 36%
en 1 989. Desde 1 980, Chile empezó a aplicar intensivamente sus reformas
estructurales y luego de una fuerte crisis entre 1982 y 1983, cuando quiebra todo
el sistema financiero, inicia una recuperación sostenida. Después de 20 años de
estabilidad política y 1 5 años de estabilidad económica, Chile es un país que en
1 992 creció al 1 1 % y bajó su inflación al 1 1 %. Hoy en día a este país no se le
considera subdesarrollado, pues es el más estable y el de mayor desarrol lo en
Latinoamérica. Es un caso exitoso de aplicación de un programa de estabilización
y de reformas estructurales basado en los principios de economía de mercado.

Bolivia tuvo también una hiperinflación entre 1 984 y 1 985, la que se redujo
de 8, 1 70% en 1 985 a 66% en 1 986 y a 1 1 % en 1 987. El crecimiento económico
cayó a -1 y -2.5% en 1 985 y 1 986, respectivamente; para luego crecer entre 2.5
a 3.5% anual durante los seis años siguientes. El déficit fiscal se redujo de 44%
del PBI a niveles del 3 a 3.5% en los años siguientes. Las exportaciones sufrieron
una reducción de 628 millones de dólares en 1 985 a 543 millones de dólares en
1 988 de manera constante y sostenida. para luego crecer a 724 millones de dólares
en 1 989. Las tasas de interés se mantuvieron altas entre 1 985 y 1992; las de
préstamos, por encima de 40% y Jas de depósito, en un nivel de 24% entre 1 989
y 1992. Bolivia es un caso exitoso de estabilización macroeconómica. pero con muy
poco crecimiento debido a que no se avanzó mucho en las reformas estructurales.
Sin embargo, es un país que crece moderadamente y tiene ya once años de
estabilidad política y siete de estabilidad económica.

Un tercer caso es el de México, que si bien no cayó en situaciones de


hiperinflación, alcanzó una tasa de inflación de 102% en 1 983. Le tomó cinco
años de ajuste y reformas estructurales bajar la inflación a niveles de 20% a partir
de 1 989. En este período México experimentó tres años de caída en el PBI y las
exportaciones se redujeron sensiblemente durante 1 985 y 1986. La tasa de interés
se mantuvo a niveles altos durante más de cinco años. Hoy en día ese país es también
un caso exitoso de estabilización y crecimiento económico, debido a que aplicó
un programa de estabilización y profundas reformas estructurales que le han
permitido crecer y bajar su inflación significativamente.

El Banco Mundial llevó a cabo estudios para determinar los tiempos y el


orden de sucesión de las reformas para transformar una economía de planifica­
ción centralizada en una economía de mercado. Para ello es necesario aplicar
reformas complejas y sin precedentes y no existe un orden de sucesión único para
las economías en transición. Hungría ha sido uno de los países con más experiencia
en decisiones descentralizadas; la exUnión Soviética realiza las reformas dentro
de una gran inestabilidad macroeconómica, mientras que lo contrario sucede en
Checoslovaquia Vietnam y China han permitido, por su parte, mayor presencia
de un sector privado en el campo comparados con otros países.

El Banco Mundial llega a conclusiones i mportantes en cuanto a las etapas


de la reforma, que pasamos a consignar:

Las reformas pueden tomar hasta 1 0 años.

La reforma macroeconómica requiere estabilizar en los primeros tres años


y mantener la estabilidad en los siguientes.

La reforma de los mercados supone lo siguiente: En el mercado de bienes


y servicios, se liberalizan los precios en los primeros dos años y en los
siguientes siete, los bienes de primera necesidad; se eliminan las restricciones
al comercio el primer año y se ajustan los aranceles a un nivel moderado
en los cinco años siguientes; y en materia de distribución, se privatiza y
desmonopoliza en los tres primeros años y se desarrolla la distribución en
los cinco siguientes.

En el mercado de trabajo, se desreguJa la contratación y el despido en Jos


dos primeros años y medio, y se liberalizan las negociaciones salariales en
los siguientes cuatro y medio.

En el mercado financiero se reestructura y desarrolla en los tres primeros


años, y se liberaliza y privatiza en los seis siguientes.

133
La refonna de la estructura de la propiedad implica desarrollar y privatizar
en tres años las empresas pequeñas; evaluar, reestructurar y privatizar en
1 O años, las empresas grandes; y revisar la reglamentación de la inversión
extranjera en los primeros dos años.

La refonna del Gobierno requiere modificar el marco jurídico (v.g.


legislación mercantil, sobre la propiedad, impuestos, etc.) en tres años;
reformar el marco i nstitucional en J O años; y refonnar la red de seguridad
de carácter social en un año, para atender emergencias e institucionalizar
en los siguientes siete.

"Las reformas indudablemente traerán consigo ajustes difíciles. La i nflación


y el desempleo se agravarán a medida que se eliminen los controles de precios
y queden en evidencia las verdaderas pérdidas económicas de algunas actividades.
La oposición política puede aumentar ante esa situación y ante J a agudización de
la desigualdad en la distribución del ingreso que se produce después de una
modificación radical de la estructura de los incentivos. Pero seguidamente podría
comenzar a aumentar Ja exportación y l a disponibilidad de bienes de consumo" .1

El Perú, comparado a los estándares de ejecución de las reformas estructurales


está mucho más avanzado, ya que nuestro reto es hacer en cinco años lo que en
otros lugares ha tomado 1 O. Pero una cosa es hacer las reformas y otra cosa es
recoger sus frutos, y al haber revisado las experiencias latinoamericanas, hemos
visto que eso toma entre 7 y 1 0 años.

En conclusión se requiere fácilmente de 7 años para lograr la estabilización


y el crecimiento autosostenido, siempre que el proceso se dé dentro de un marco
de estabilidad política y en u n ambiente donde impere la ley y el orden. Mientras
más precarias sean estas condiciones, mayor será el tiempo que tomará cosechar
los frutos.

' Banco Mundial (1991), Recuadro 7.7, pp. 1 70- 17 1 .

134
CAPITULO V

LA POLITICA EXTERIOR Y LA REINSERCION

La Reinserción Internacional es una pieza fundamental del Programa. cuyo


objetivo es fomentar la captación del ahorro del exterior para lograr un mayor
crecimiento económico.

La política exterior peruana en los '90 deberá considerar varios aspectos:


la normalización de las relaciones financieras internacionales, la atracción de la
inversión extranjera, l a repatriación de capitales, l a atracción de capital humano
del exterior. el cuidado de la atracción de tecnología, la imagen externa del Perú
y los acuerdos de integración económica con otros países. Estos son los
beneficios, pero también hay que pagar los costos de retomar a la comunidad
financiera internacional.

Durante el régimen de Alan García, el Gobierno asumió una posición


de confrontación, unilateralidad y ruptura del diálogo con los acreedores
internacionales. A raíz de ello, el Perú fue declarado inelegible por el FMI y el
Banco Mundial. La deuda externa total en 1 985 era de 1 3 mil millones de dólares
y como conse.cuencia de la política de no pago, alcanzó niveles superiores a los 20
mil millones de dólares, de los cuales más de dos tercios se encontraban en
situación de atraso. Esta es, en términos relativos, una de las deudas más
elevadas en el mundo y equivale a más del 500% de las exportaciones anuales
del Perú.

Enjulio de 1 990, cuando el Presidente Fujimori asumió el poder, se decidió


normalizar las relaciones financieras internacionales. Debido al nivel de la deuda
externa y a la magnitud de los atrasos era imprescindible seguir un enfoque
secuencial para resolver el problema de la deuda externa y "reinsertarnos" en
la comunidad financiera internacional. El enfoque secuencial se basaba en l as
siguientes prioridades: primero, restablecer relaciones con los organismos
internacionales y conformar el Grupo de Apoyo; segundo, renegociar la deuda
bilateral en el Club de Pañs y, en base a dicho acuerdo lograr acuerdos bilaterale8
con los países acreedores; tercero, negociar con la Banca Comercial y cuarto, hacer
lo propio con los proveedores sin garantía oficial .

En tal sentido, se reanudó el diálogo con el FMI, el Banco Mundial y el BID.


Se aplicó un programa de referencia con el FMI y se empezó a pagar nuevamente
al Banco Mundial y al BID a partir de setiembre de 1 990.

En la reunión del BID en abril de 1991 , en la ciudad de Nagoya, tuvo lugar


la primera reunión de los " Amigos del Perú", que resultó ser un preludio del Grupo
de Apoyo. En esta reunión se mostró Ja mejor intención de ayudar al Perú, pero
no se logró nada concreto en cuanto a cifras. A finales de abril, se llevó a cabo
una reunión de los Gobernadores del FMI y del Banco Mundial en Washington,
en la cual se convocó a los países que desearan participar en el Grupo de Apoyo
para el Perú. En dicha ocasión los Estados Unidos y el Japón manifestaron su
voluntad de liderar conjuntamente el Grupo de Apoyo, anunciando su decisión
de aportar 350 y 400 millones de dólares. respectivamente. En agosto visitamos
los países europeos, cinco países en cinco días, para persuadirlos de la necesidad
de que conformaran el Grupo de Apoyo. Luego de la gira, se convocó en Washington
a una última reunión del Grupo de Apoyo, en la cual los Estados Unidos
manifestaron que incrementarían su aporte en 56 mi1Jones de dólares y otros
países hicieron también ofrecimientos de incrementos. Finalmente, el 9 de
setiembre, se rea1izó una vez más en Washington D.C. la reunión final del Grupo
de Apoyo, en la cual 1 1 países del Club de Pañs se comprometieron a dar
donaciones o préstamos concesionales por l , 1 00 millones de dólares. La
conformación del Grupo de Apoyo era el punto de partida para llegar a acuerdos
con los organismos multilaterales y los miembros del Club de París.

Los atrasos con el FMI ascendían a 873 millones de dólares, los del Banco
Mundial a 927 millones de dólares y los del BID a 433 millones de dólares. Como
resultaba imposible limpiar, simultáneamente, los atrasos de los organismos
multilaterales, dada su magnitud, se acordó esquemas específicos con cada institución.

Con el FMI se adoptó un acuerdo de "acumulación de derechos" (RAP), por


el cual no se pagarla por dichos atrasos hasta fines de 1 992. El Programa
F.conómico 1 99 1 - 1 992 de 1 5 meses de duración (del primero de octubre de 1 99 1
al 3 1 de diciembre de 1 992) fue aprobado por el Directorio del FMI el 1 2 de
,

setiembre de 1 99 1 . El cumplimiento de las metas del Programa permitía


acumular trimestralmente el derecho a obtener, al final de 1 992, un préstamo por
los 873 millones de dólares con el FMI por un período de ocho años que incluyen
un período de gracia de tres años. A principios de 1 993, el Perú necesitaba conseguir

136
un préstamo puente para cancelar los atrasos con el FMI y que éste desembolsara
recursos por el mismo monto para cancelar el puente. Desde ese momento, el Perú
sería elegible para recibir recursos frescos del FMI para financiar o apoyar su
balanza de pagos y entraría a negociar un programa de Facilidad Ampliada (EFF)
para el período 1 993-95, como efectivamente lo hizo, aunque con un atraso de
tres meses.

Con el Banco Mundial se diseñó u n esquema similar al RAP, que seña


aplicado por primera vez para el caso peruano. De acuerdo con el cumplimiento
de las metas con el programa del FMI, el Banco Mundial permitiría al Perú ir
acumulando gradualmente el derecho de obtener préstamos por el monto total de
los atrasos a fines de 1 992. Se requeriría un crédito puente para l impiar los atrasos
con el Banco Mundial para esa misma fecha. El Banco tiene programados tres
préstamos para el sector comercio, el sector financiero y el préstamo de ajuste
estructural (SAL) del orden de 300, 300 y 400 millones de dólares, respectiva­
mente. Este esquema también se ha cumplido.

Con el BID se cancelaron los atrasos en setiembre de 1 991 , mediante un


crédito puente del Fondo Latinoamericano de Reservas (FLAR) al Banco Central
por un monto de 325 millones de dólares. Por su parte el BID aprobó un crédito
al sector comercio por 425 millones de dólares el 1 8 de setiembre de 1 99 1 ;
después de más de siete años de n o haber recibido créditos del BID.

Una vez que se logró la conformación del Grupo de Apoyo, se firmó el


Acuerdo con el FMI y se renegoció la deuda pública externa con el Club de París.
La deuda ascendía a 7,800 millones de dólares, de los cuales el 73% tenía atrasos .
El objetivo de la reprogramación de la deuda fue reducir al máximo la presión
de pagos de 1 99 1 -92 e ir a una nueva renegociación en 1 993. El 1 6 y 1 7 de
setiembre de 1 991 se renegoció la deuda externa peruana con 1 7 países acreedores
del Club de París.

Los resultados obtenidos fueron muy favorables para el Perú :

Los créditos obtenidos con anterioridad al primero de enero de 1 983 (deuda


anterior a la fecha de corte), fueron reprogramadas bajo los términos de
Houston, de forma tal que los créditos oficiales concesionales se pagarán
a 20 años, con 1 O de gracia y los comerciales con garantía oficial, a 1 5 años
con 8 de gracia.

Los créditos obtenidos con posterioridad al primero de enero de 1 983,


pagarfan 33 1 millones de dólares en 1991 (a diferencia de los 85 1 millones
de dólares que correspondía pagar). Los atrasos de l a deuda posteriores a

137
la fechade corte, computados al 30de setiembrede 1 991 en 1,041 millones,
se pagarán en seis años a partir de 1993. Este constituye un tratamiento sin
precedentes, que supuso la ruptura de una "regla de oro" del Oub de París.

Otro mérito en la negociación fue la postergación del 100% de los intereses


de la refinanciación que se generan por la reprogramación de la deuda
anterior a la fecha de corte. Esta concesión fue otorgada únicamente a
Polonia en marzo de 1 990, pero bajo condiciones menos generosas que en
el caso peruano. El Perú deberá pagar el 30% de los intereses moratorios
en 1 993 y 1 994, y el 70% restante entre el '95 y el '97.

En conclusión, el alivio obtenido asciende a 6,545 millones de dólares y


corresponde a obligaciones.de crédito al sector pllblico o que cuentan con garantía.
Este alivio fue mayor al que hubiese resultado de aplicar los términos de Toronto,
Polonia o Egipto.

El proceso de reinserción internacional se puso en riesgo con los sucesos


del 5 de abril de J 992. En la primera reunión de cancilleres de la OEA, l levada
a cabo días después del 5 de abril de 1992, se Je dio un aviso al Perú para que
regresase a l a institucionalidad democrática, pues en caso contrario se le podrían
aplicar recortes de crédito y hasta embargos comerciales y económicos. Este
mensaje no quiso ser entendido por el responsable de l a cartera de Relaciones
Exteriores de ese entonces. Durante mi visita a Washington, el 16 de abril de
1 992, el mensaje fue más claro y termi nante: los países del Grupo de Apoyo no
continuarían ayudando y los organismos internacionales cortarían los desembolsos
y la aprobación de futuros créditos. Ello motivó mi segunda renuncia a mi regreso
al Perú, pues veía en ese momento señales de que no sería viable continuar con
el ProgramaEconómico si no se encontraba unasalidapolítica a la situación. ElEjecutivo
optó por realizar algunos ajus� en el Gabinete y facilitar que se permitiera mantener el
Programa, razón por la cual decidí permanecer en el MEF.

Al quedarme en el Gobierno el reto era inmenso. Se trataba de mantener


el Programa Económico, evitando que se cerraran las puertas de la reinserción
y lograr una salida política a este quiebre de la institucionalidad democrática. Ello
se logró durante una larga semana en la que, con el Presidente y con Remando
de Soto, elaboramos la propuesta del Congreso Constituyente. Es así que el 1 8
de mayo de 1 992 e l Presidente se comprometió en las Bahamas a restaurar la
institucionalidad democrática en un período de cinco meses. Este compromiso
a nivel internacional y nacional permitió que no se cerraran las puertas de la
reinserción a nivel mundial.

138
En el frente interno nos esperaba el reto de mantener el Programa
F.conómico con escasos recursos provenientes del exterior. Es bajo esas circunst.ancí$
que se logró que cJ BID desembolsara el segundo tramo del crédito de comercio
por 100 millones de dólares en mayo de 1 992 y que el Japón cofinanciara el mismo
con un monto semejante.

Estas fueron las primeras muestras de que algún dinero estaba ingresando
al Perú. Un reto mayor aán fue lograr la firma del crédito financiero del BID que
se debió realizar el 6 de abril de 1 992 y que se frustró por los sucesos del dfa
anterior. El 24 de setiembre, es decir, antes de las elecciones del CCD, después
de i ntensas negociaciones a nivel del BID, el Departamento de Estado, el
Departamento del Tesoro y el Congreso Americano, se logró la firma de este
crédito, lo que constituyó un gran triunfo político para el Perú. Finalmente, el 20
de noviembre de 1 992, a dos días de las elecciones del eco. se logró firmar el
"Tolling Agreement" o levantamiento de los juicios y litigios de la banca
comercial internacional al Pero. Estas eran las muestras que teníamos que dar al
Perl1 y al mundo de que Ja reinserción internacional estaba viva y que, a pesar de
todo, seguíamos avanzando en ella.

Tras las elecciones del CCD, la agenda de la reinserción internacional


entraba a una nueva etapa, quizás algo menos riesgosa, pero a su vez más
laboriosa y complicada. Las etapas a cumplir para esta segunda fase eran las
siguientes:

Era necesaria la conformación de un segundo grupo de apoyo que financiase


41 O millones de dólares. Ya el 1 5 de diciembre se tuvo una primera reunión,
lográndose el 50% de este monto.

Hacía falta un nuevo acuerdo con el FMI después de haber cumplido


satisfactoriamente el RAP. Este Acuerdo de Facilidad Ampliada se estuvo
negociando cuatro semanas, de octubre al 20 de noviembre. A pesar de haber
estado virtualmente lista para su aprobación, ésta se demoró innecesariamente.

Lograda la aprobación y firma del acuerdo con el FMI para el período


1 993-95, se requería el reconocimiento de parte del CCD de las deudas
contraídas con los organismos i nternacionales. Con ello se eliminaba el
riesgo de la aplicación del artículo 141 de la Constitución de 1 979. Todo
esto se ha cumplido.

Este acto permitió la limpieza de atrasos con el FMI y el Banco Mundial.


mediante préstamos puentes con el Departamento del Tesoro de los
Estados Unidos. Ello a su vez haría posible empezar a recibir dinero fresco

139
de dichas instituciones. Esto último se encuentra todavía pendiente.
Seguidamente, se tenía que renegociar la deuda con Japeco y terminar con
el caso Belco-Aig. Esto último se encuentra todavía pendiente.

El siguiente paso será la renegociación de la deuda externa en el Club de


París, para hacer viable el servicio de la deuda bilateral para el período de
1993-95.

Luego vendrían las negociaciones con los antiguos países socialistas, con
la Banca Comercial Internacional y los Proveedores sin garantía oficial
como las siguientes etapas para concluir la ronda de negociaciones en esta
segunda fase de la reinserción internacional.

A continuación se analizarán las estrategias de negociación con los


principales acreedores:

l. CLUB DE PARIS 11

El monto adeudado con el Club de París al 31 de diciembre de 1 992 asciende


a US$ 8,900 millones y el servicio anual de 1993 a 1998 está en el orden de los
900 a 1 ,000 millones de dólares. Estos montos no son viables y el objetivo
principal en la próxima negociación del Club de París es iniciar un proceso de
reducción del stock de deuda junto con una reestructuración del servicio. El
problema es que el Japón no acepta una condonación de deuda. En tal sentido,
se pueden plantear las siguientes alternativas:

Reducción de por lo menos 50% de los vencimientos durante el período de


consolidación y reestructuración del remanente en un período de 20 años,
con 1 0 de gracia, a tasas de mercado.

Reducción de por lo menos 50% de los intereses, a tasas de mercado y


reestructuración a 25 años con l O de gracia.

Reestructuración a 20 años con l O de gracia y nuevos préstamos


concesionales por montos equivalentes al servicio durante el período
de consolidación a 30 años, con 10 de gracia y tasas concesionales.

140
2. BANCA COMERCIAL

La deuda con la B anca Comercial al 31 de diciembre de 1 992, asciende a


US$ 5,500 millones. De ellos el Citibank representa el 26%, el Wells Fargo el
20%, el Morgan Guarantee Trust el 9% y el Chase Manhattan Bank y el Arlabank
el 6%.

El esquema de negociación con los bancos debe hacerse al amparo del Plan
Brady e incluyendo un menú de opciones compuesto de recompra, bonos de
descuento {reducción de stock), bonos par (reducción de intereses) y bonos de
privatización. Este esquema podría permitir reducir el servicio de la deuda de
US$ 600 millones anuales para el período 1 993-2000 al 40%. Y si a el lo se le
agregan los bonos de privatización, la reducción puede ser mayor.

3. PROVEEDORES SIN GARANTIA

El total de esta deuda a setiembre de 1 992 asciende a US$ 1 ,860 millones.


De ellos Japeco y Marubeni representan el 58%, lo que amerita un tratamiento
prioritario.

3.1 Japeco

Esta es una deuda originada por el fi nanciamiento de la construcción del


Oleoducto Nor-Peruano en la selva norte. La deuda asciende a US$907 millones
al 3 1 de diciembre de 1 992 y su reestructuración debería contemplar los
siguientes aspectos: reducción del 1 00% de mora del principal e intereses en el
stock de l a deuda; préstamo concesional de OECF por US$200 millones a 30 años,
incluyendo 1 O años de gracia y tasa fija del 3% para reducir el stock de l a deuda
en 80% y reducción del servicio de la deuda de 1 993 en 20%; reestructuración
del saldo en términos concesionales a 40 años, incluyendo 1 2 años de gracia y tasa
fija de 5% anual. Finalmente, motivar a los inversionistas japoneses para que los
pagos se inviertan en la explotación del gas de Camisea.

3.2 Marubeni

Originada por el financiamiento de Cerro Verde 1 y la Línea de Transmisión


Lima - Chimbote, esta deuda asciende a US$ 1 79 millones. Existe interés de
Marubeni por adquirir los activos de la unidad de Cerro Verde mediante el

141
esquema de deuda por activos. En conclusión, mediante estas negociaciones de
la deuda externa se podría reducir el stock de la deuda de US$ 23,800 a US$ l 3,500
millones, lo que haría más manejable el servicio de la deuda.

142
CAPITULO VI

MAS ALLA DEL DERECHO

l. LAS REGLAS DE JUEGO

Aún en el caso de que los inslrumentos de política propiciaran una economía


sin interferencias indebidas del Estado, ello no bastaría para crear condiciones
de prosperidad y un acelerado ritmo de desarrollo. Estos se han dado siempre
como consecuencia de montos de inversión en permanente crecimiento y no
puede haber procesos acelerados de inversión de capital si es que la sociedad no
proporciona a los ciudadanos un eficiente mecanismo de protección de sus
derechos, referidos a sus propiedades o a sus personas.

En otras palabras, es imposible l legar a una economía de mercado sin u n


sistema de normas que defina apropiadamente los derechos d e las personas, sin
un marco que ordene y limite el poder utilizado en las funciones de gobierno, y
sin mecanismos eficientes de detección de las infracciones. No se puede
prescindir de una sistema claro y estable de las "reglas de juego" en que deben
operar los agentes económicos. Si bien en el aula el economista puede poner entre
paréntesis estos aspectos, es imposible que lo haga si se encuentra con la sociedad
y el mercado realmente existentes.

La economía está a tal punto atada al Derecho, que fue en sus orígenes un
apéndice de los cursos de Jurisprudencia. Ella debe su desarrollo científico, en
realidad, a un acucioso académico de la materiajorisprudencial de la Universidad
de Glasgow en el siglo XVIII , el profesor Adarn Smith. Jamás serán suficientemente
enfatizadas sus palabras cuando advierte que:

"El comercio y las manufacturas pocas veces pueden florecer durante


mucho tiempo en un Estado que no disfrute de una ordenada administración de
justicia, donde la gente no se sienta segura de la posesión de sus propiedades, en
el que el cumplimiento de los contratos no sea amparado por la ley y en el que
su autoridad no se ocupe de forma permanente de obligar a que paguen sus deudas
todas aquellas personas que se hallan en condiciones de hacerlo. En pocas
palabras, el comercio y las manufacturas pocas veces pueden florecer en un Estado
donde no haya cierto grado de confianza en la justicia del Gobierno" •

Un sistema de libre mercado opera con base en Ja propiedad privada y los


derechos individuales. No hay propiedad ni derechos si no están debidamente
protegidos del uso de la fuerza o de l a amenaza del uso de la fuerza, por
particulares, organizaciones o el propio Estado. El Estado es, justamente, el
aparato de coerción que permite detectar a los infractores de derechos, detenerlos
y sancionarlos de forma regular y proporcionada al tipo de delito o falta.

Tanto el reconocimiento de normas comunes de recta conducta, como los


mecanismos de su institucionalización y protección garantizan en conjunto la
paz, Ja justicia y la libertad, imprescindibles para la cooperación social.

La sanción de normas con refuerzo de la 1ey, para que no se convierta en


un si stema de abuso lega1izado. debe regirse por los principios de lo que los
tratadistas alemanes bautizaron como el Rechtsstaat o Estado de Derecho. Las
i nstituciones a través de las cuales éstos mantienen cierto control sobre el aparato
normativo y el aparato coercitivo del Estado concurren a su vez en los principios
del Gobierno Limitado. Los mecanismos de detección y represión de las infracciones
a los derechos deben garantizar la Seguridad de los Ciudadanos.

2. ESTADO DE DERECHO

E1 Rechtsstaat remite, en resumen, a los siguientes principios:

Supremacía de la ley.
Igualdad ante la ley .
Seguridad jurídica.
Certeza y certidumbre de la ley.
Primacía de 1as personas.
Justicia rápida y eficaz.

La supremacía de la ley es aquel principio por el cual todos los que


participan en la sociedad reconocen la necesidad de subordinar sus intereses al
mandato de l a ley. Ello supone, sin embargo, que se establezca un mecanismo

1 Smith (1 98lb}, vol. II. V. iii. 7, p. 9 1 0 y muchos otros pasajes similares.

1 44
adecuado para que las autoridades pertinentes descubran las normas que
espontáneamente respetan Jos individuos en su conducta. El imperio de la norma
legal no reside en la fuerza física del Estado, sino en la uniformidad y extensión de
la obediencia debida a las leyes.

Debe distinguirse, sin embar$o, entre las leyes como normas generales de
aplicación para todos y la legislac1ón que, con el nombre de "ley", no recoge
normas de conducta sino que establece órdenes o mandatos, privilegios o licencias,
otorgadas por la autoridad a ciertos ciudadanos en una circunstancia detenninada.

En un país en el que, como en el Perú, la "ley" se dedica más a dar órdenes


que a reforzar normas de carácter universal, prosperará la desobediencia civil yse
desacreditarán l a autoridad y la institucionalidad, incluso, las de las leyes en
sentido estricto. Formalmente puede regir un sistema legal, pero materialmente
esa legalidad está de espaldas a las reglas de justa conducta, de espaldas a la esencia
misma de la convivencia social .

La supremacía de la ley i mplica, también, que Jos distintos tipos de normas


deben sujetarse a cierta jerarquía de antemano conocida, definiendo claramente
los ámbitos de competencia de cada una. Este es un principio subsidiario del
i mperio de la ley, conocido como el de Ja "jerarquía normativa". Muchas veces
en el poder se siente la tentación de resolver un problema con un decreto supremo
aunque, a través de esta solución, se infrinj a una norma legal de mayor jerarquía
formal. El problema y la confusión se suscitan por el hecho de que, como
decíamos, tienen nombre de "ley" muchas cosas que no son norma universal.

A pesar de ello, es preferible sacrificar los objetivos de corto plazo que se


pudieran conseguir por e l uso de la fuerza legítima pero formalmente no legal,
a cambio de que, en general, se respete en la formalidad de la ley. Para eso se
requiere que esa formal idad no contradiga l a esencia del derecho. La experiencia
y los errores nos han enseñado que el problema son los malos ejemplos. El orden
formal y material no podrá restablecerse si cada uno cree que tiene facultad para
trasgredir aquellas partes de la formalidad legal que considera ilegítimas.

El caso de los convenios de estabilidad tributaria, por ejemplo, nos h a


dejado lecciones a l respecto. Estos convenios eran formalmente legales. El
gobierno de García Pérez había vincul ado al Estado a un compromiso de no
cobrar o devolver ciertos impuestos. No había, pues, contenido de justicia en la
norma legal; no se trataba bajo ningún punto de vista de una ley en sentido estricto
y material. Era una legislación sin derecho sustantivo. Por su mandato se l e daba

145
a grupos de poder dinero que se les quitaba a los consumidores de cerveza o
cigarrillos, a los que compraban gasolina o pagaban puntualmente su IGV.
¿Había derecho para tan burda forma de expoliación?

Con la idea de posponer lo más posible la transferencia que se debía hacer


de los impuestos cobrados al resto de la ciudadanía a favor de este grupo de
privilegio, fuimos a la vía j udicial. Ahí perdimos la causa, por lo cual quisimos
crear una instancia más para este caso especial. Vistos los acontecimientos a la
distancia, con la reflexión que permiten el tiempo y la reflexión, debo reconocer
que eso fue un error. No porque los beneficiarios del privilegio tuvieran derecho,
sino porque se violentaba uno de los principios del Estado de Derecho.

Para que haya supremacía de la ley, la legislación no puede aplicarse


retroactivamente. Más importante que las ventajas pecuniarias y de hacer justicia
i nmediata es dejar establecido el principio de la "irretroactividad de la ley". Nadie
debe sentirse con título a desafiarlo. La autoridad debe, ella misma, restringir su
poder y quedar sometida a la supremacía de la ley, aun en la etapa de tránsito de
un sistema de legislaciones sin ley a uno de leyes en sentido estricto.

Pero no sólo la autoridad debe quedar sometida. Todos deben ser iguales
ante la ley. Es un principio fu ndamental del Estado de Derecho que nadie sea
tratado de forma distinta por la norma legal . Esta debe aplicarse por igual,
i ndependientemente de la persona, el caso o la circunstancia.

La ·igualdad ante la ley es un principio que no se consigue a través de u n


texto legal, por mayor jerarquía que éste tenga Se sustenta sobre todo e n l a
discreción d e los jueces y legisladores, así como en la disposición d e la opinión
pública para hacerlo respetar. En el Perú, los líderes políticos no han hecho mucho
para identificar la importancia de este principio. La gente, por tanto, se ha amoldado
al sistema creado y ha perdido vigor en la defensa de este ideal .

El sentimiento jurídico sobre el que debe asentarse este principio puede ser
restablecido, sobre todo si la autoridad y los líderes de opinión así como los líderes
políticos muestran las ventajas inestimables de su aplicación.

Cuarenta años de expoliación legal, de transferencia legalizada de rentas,


no sólo han hecho perder confianza en l a ley, sino que han hecho perder de vista
la alternativa al privilegio y la discriminación: la igualdad ante la ley.

Este principio apunta a dotar equitativamente a todos de los miJ;mos derechos.


En una sociedad libre los individuos deben tener las mismas prerrogativas, deben
estar facultados de la misma forma y en la misma extensión para establecer ciertos

146
fines y realizar los actos que permitan lograrlos. No debe confundirse el derecho
con el suministro de los medios materiales necesarios para ejercerlos. Esta es una
regla de oro para evitar que el derecho se convierta en mecanismo de repartija en
virtud de l os méritos o necesidades que ciertos funcionarios creen que poseen
determinadas personas.

El derecho del l ibre tránsito, por ejemplo, garantiza que yo pueda tomar un
avión e ir de Lima a Arequipa. No quiere decir, sin embargo, que el Estado tenga
la obligación de comprarme un boleto de avión para que yo pueda ejercerlo. La
igualdad ante la ley significa que el Estado se obliga a proteger nuestros derechos
de la misma forma para todos. Que, por tanto, nadie tiene esferas más amplias de
libertad que el resto.

La libertad general de una sociedad se pierde cuando unos individuos son


"más l ibres" que otros. La libertad es facultad para hacer cosas. Si el Estado
faculta a unos a no pagar impuestos y a otros, no, ¿podemos decir que todos somos
igualmente l ibres? Si alguien se lleva el dinero q_ue yo aporto, ¿podemos sostener
por ventura que nos encontramos en un régimen de l ibertad? Si no somos
igualmente l ibres, no somos libres en absoluto. El l iberalismo no es la racionalización
teórica de los privilegiados, sino todo lo contrario, la doctrina de la igualdad ante la
ley por excelencia.

Para crear Órden y paz no basta con que seamos iguales ante la ley o con
que las leyes sean generales y universales. Hace falta, además, que las leyes no
estén cambiando a cada momento, generando inseguridad e imposibilidad de
prever las consecuencias de su respeto o infracción. Por eso es imprescindible,
también, garantizar la seguridad jurídica.

La eficacia de las leyes para crear un orden de convivencia pacífica reside


en gran meruda en la capacidad de la que puede dotar a los individuos para prever,
dentro de ciertos rangos, las consecuencias de sus actos. En tal virtud, es
i mprescindible que el sistema por el cual se cambian las normas legales permita
a los ciudadanos tener expectativas sobre sus fines o los medios escogidos para
alcanzarlos. Si ellos no tienen cierta razonable seguridad acerca de las consecuencias
futuras de los actos que han cefiido al sistema de reglas conocido, las leyes
perderán su eficacia para proteger derechos y expectativas sobre el fruto de su
ejercicio.

El mandato de las leyes debe, en consecuencia, sujetarse al conocimiento


que de las misma debe tener el ciudadano antes de su vigencia. En el caso de
normas generales que ya funcionan espontáneamente es obvio que el principio
subsidiario de la "publicidad de las leyes" se da por definición. Son normas que

147
son respetadas por todos. No se trata de "conocerlas" en cuanto a su formulación
verbal y explícita, sino simplemente a través del método empírico de "puedo/no
puedo" que todos aplicamos aJ realizar nuestros actos, más o menosconcientemente.

No sólo se deben conocer las normas, sino también las formas y la medida
en que éstas pueden cambiar. El Derecho no está formado .por leyes sueltas, sino
por sistemas de normas; esto es, por normas vinculadas entre sí, cuya i mportancia
se determina por la relación que tienen con las otras nonnas. Este carácter sistemático
del Derecho no supone, empero, que se trate de una correlación cerrada de leyes.
Estas deben provenir de las normas consagradas por el uso y la costumbre y, por
tanto, el sistema de leyes debe ser por naturaleza cambiante. Lo importante, l o
decisivo, es justamente que esos cambios sean relativamente previsibles. S i el
sistema se mantiene fiel a la fuente del Derecho, los ciudadanos podrán saber qué
tipo de cambios puede haber y, en todo caso, sabrán que esos cambios serán
graduales, lentos y coherentes.

La seguridad jurídica significa que no hay sorpresas en el sistema y en el


cambio de reglas. El ciudadano no es asaltado por restricciones o expansiones
abruptas de sus derechos. La garantía de la seguridad jurídica no es, nuevamente,
una declaración formal en la legislación positiva.. sino una fidelidad dogmática
a la fuente de donde emana el Derecho; esto es, los usos y costumbres, las normas
cultural y espontáneamente respetadas. Nuevamente, este principio del Estado
Derecho depende tanto de las personas encargadas de reforzar sus instituciones
como de la opinión pública que les reconoce autoridad y vigencia.

Otra característica fundamental de l as leyes es que deben ser ciertas y que


deben generar certidumbre. Son dos cosas distintas. Leyes ciertas son leyes sobre
las cuales no caben equívocos. La ley no debe ser ambigua y debe poderse
expresar con certeza. Se trata de que los individuos puedan proyectar su acción
en el futuro. Para lograrlo no basta que sepamos cómo cambia el sistema
normati vo. Es preciso, además, conocer exactamente a qué se refiere la norma.
qué manda y qué no manda, a qué obliga y qué permite. Si queremos que la ley
se aplique a todos de igual forma, es absolutamente necesario que todos los jueces
puedan entender de manera uniforme, c lara y objetiva el mandato de la ley.

Uno de los problemas del sistema jurídico del mercantilismo es que sus
legislaciones son resultado del juego de presiones. La correlación de influencias, en
consecuencia.. va variando y los intereses también, al punto de que la legislación se
hace imprevisible. No hay supremacía de la ley, generalidad de la ley ni igualdad ante
ella, como tampoco seguridad jurídica.

1 48
El problema es peor aún cuando, ni siquiera con respecto a esas leyes que
duran poco, hay certeza. No se sabe a ciencia cierta lo que quieren decir. Esta es
una típica expresión del legalismo mercantilista: la norma se enreda tanto, que
nadie sabe qué permite y qué impide, de modo que el que la mandó a elaborar sabe
por dónde filtrar sus intereses y cómo hacer para burlar la igualdad ante la la ley
y así obtener mayores prerrogativas que el resto de ciudadanos. Si las leyes no
son ciertas, claras y objetivamente demostrables, ¿cómo puede alguien defender
los derechos que ellas supuestamente amparan? O, a la inversa, ¿cómo puede
obligarse a alguien a obedecer un mandato que no queda debidamente definido?

Por otra parte, estas leyes ciertas deben ser capaces de generar una
certidumbre razonable sobre las consecuencias de respetarlas o no. No es ésta una
característica que pueda señalarse en cada una de las leyes, sino que atraviesa,
por así decirlo, el espíritu de su objetivo. Las leyes definen ámbitos de acción
legítimos y, mientras mayor certidumbre se tenga sobre ellos, habrá mayores
posibilidades de realizaciones y transacciones al amparo de tales esferas de
acción.

La certidumbre de la ley es una característica abstracta a la que apunta el


sistema normativo más que cada ley específicamente. Este principio debe, pues,
estar muy presente a la hora de legislar, como a la hora de juzgar, dado que no
es algo inmediatamente deducible ni empíricamente comprobable.

El objeto fundamental de la certidumbre es la salvaguarda de los derechos


y expectativas de los individuos. Todo el sistema de coerción social está montado
para proteger y garantizar estos derechos que son anteriores al Estado y, por lo tanto,
a la legislación que proviene de él. En el fondo de todo el sistema normativo está
la primacía de las personas. Los derechos son, antes que nada, derechos de
individuos y por lo tanto, a éstos les corresponde la mayor jerarquía en caso de
conflicto de derechos.

Los derechos corresponden primariamente a las personas y por tal motivo


no hay ni puede haber ninguna organización o asociación de individuos que tenga
derechos de mayor rango que los derechos de las personas. La existencia de
ficciones legales como las personas jurídicas no debe hacer olvidar que los que
tienen derechos son seres de carne y hueso y que es en función de ellos que el
cuerpo social asume ciertos principios metodológicos de convivencia pacífica.

Este es un principio que debe atravesar una serie de cuerpos doctrinarios


en materia legislativa. Así. por ejemplo. en el caso del derecho a la huelga, hasta
ahora se había mantenido la supremacía del grupo frente al individuo, impidiendo
que éste ejerciera su derecho de elegir ir o no a la huelga Ello dotaba a los

149
sindicatos de "mayor libertad" que a sus miembros considerados individualmente.
Podían, bajo tal precepto, obligar a una serie de personas a aceptar las consecuencias
de una acción que éstas no avalaban.

Los sindicatos pueden ser muy necesarios para las relaciones entre
trabajadores y empleadores pero, bajo la legislación anterior, se daba un poder
inusitado a los grupos sindicales, se permitía la formación de "argo1las" en torno
al poder obtenido y, sobre todo, se les dotaba de un poder coercitivo que ni siquiera
el Estado tenía.

Bajo la primacía de las personas, en cambio, no puede admitirse de ningún


modo que organización alguna tenga mayores derechos que los individuos que
la forman e, incluso, que cualquier otro individuo que tenga que ver con ella.

Otro ejemplo de cuán justo y eficaz es este principio para garantizar la


vigencia del Estado de Derecho es el de los regímenes de atención social por
capitalización individual. En el anterior régimen de Pensiones los individuos no
podían escoger. Estaban constreñidos a servirse de un solo "productor" del
servicio de admi nistrar sus pensiones. Por falta de competencia, obviamente, se
permitía una serie de i neficiencias. Bajo el nuevo Sistema Privado de Pensiones,
en cambio, el trabajador es el que tiene el derecho y puede ejercerlo materialmente,
porque la ley permite ahora elegir entre distintas ofertas. U no puede escoger entre
quedarse en el Sistema estatal o pasar a las administradoras privadas, así como
elegir también los montos o monedas en las que quiere aportar, escogiendo entre
distintos tipos · de cobertura e intereses, así como diferentes grados de riesgo y
beneficio.

A pesar de que los derechos de los grupos puedan quedar supeditados a los
derechos de las personas y éstos puedan quedar definidos con certeza. el ejercicio
de los derechos de unos puede colisionar con el de los otros. Para resolver esos
conflictos se requiere, como decía Adam Smith, de "una ordenada administración
de justicia".

Los jueces deben i nterpretar las leyes y sancionar en forma oficial la


aplicación de su mandato. El sistema judicial peruano es el subproducto del
sistema jurídico mercantil ista. Hecha la legislación para favorecer a grupos de
interés especial, la administración de justicia se ha visto contaminada por el
ejercicio de la influencia. cuando no de la corrupción y del soborno.

¿Qué se debe hacer? ¿Debemos desobedecer el mandato de jueces que no


sabemos si son corruptos o no? Un nuevo sistema de administración de justicia
sólo podrá implantarse si, por ahora, pervive Ja obediencia civil. Los sistemas de

150
elección de j ueces en algunas de las instancias es·una buena medida para mejorar
la situación. Parte de una experiencia consuetudinaria y legaliza esta práctica
habitual de las comunidades, donde el juez es una autoridad conocida por los
vecinos. De esta manera, cualquier cambio de fortuna inexplicable o cualquier
actitud sospechosa podrá ser controlada por Ja misma población afectada.

La justicia, sin embargo, es algo bastante técnico y antes de que se vaya a un


sistema por elección completo, es preciso adoptar algunas medidas para evitar
que nuestra justicia sea lenta e ineficaz, cuando no francamente corrupta.

Los distintos intentos del Ejecutivo por reorganizar el Poder Judicial han
fracasado hasta el momento. Se ha partido del supuesto equivocado de que basta
cambiar a unos hombres por otros para acabar con la corrupción. Pero lo que hay
que modificar no es la conducta sino el marco institucional por el cual se favorece
una conducta irregular frente a un comportamiento honesto. Los herederos de
Adam Smith que han expandido los campos de aplicación de su ciencia parten
de 1a premisa de que todos somos igual mente raciona1es. En consecuencia, todos
tratamos de "maximizar" nuestros beneficios y de reducir los costos o Jos riesgos.
El análisis costo/beneficio del juez deshonesto hace realmente poco racional ser
honesto y, por tanto, nada cambiará a pesar de la reorganización del personal.

Lo que hace que sea atractivo dar sentencias a cambio de sobornos es el hecho
de que las legislaciones a aplicarse pueden efectivamente otorgar beneficios
pecuniarios. Si esto cambia, se podrían quitar gran parte de los beneficios de la
conducta potencialmente deshonesta.

Un sistema de informática y una estandarización de determinados


procedi mientos comunes, podría, como ha propuesto el abogado Mario Paseo
Cosmópolis, permitir el acceso de los organismos de control interno a los
procesos judiciales, de manera que se pueda detectar con rapidez y eficacia las
conductas sospechosas.

Una recomposición de las áreas de competencia de las instancias y la


desburocratización de la Corte Suprema, a su vez, podrían facilitar la celeridad
de las sentencias. Debe encontrarse también un mecanismo especial para resolver
Jos casos acumulados por el viej o sistema, que es material y humanamente
imposible resolver en el corto plazo.

Una mejora de la legislación, así como una tecnificación de los procedimientos


judiciales puede alterar sustantivamente este defectuoso marco i nstitucional. Por
un lado, se despojaría a las leyes de su capacidad de redistribuir rentas, haciendo
menos atractiva la presión ante el juez. Por otra parte, se facilitarían los

151
mecanismos d� detección de sentencias irregulares, aumentando el riesgo o costo
de la conducta potencialmente deshonesta. Todo ello será inútil, sin embargo, si
se mantienen los actuales niveles remunerativos de los j ueces. La liberalización
económica y la incorporación del país al circuito productivo y financiero del
mu ndo puede permitir a la postre "internacionalizar" también los niveles
remunerativos de los jueces. La privatización, por lo pronto, librará al Estado de
una pesada carga y la desburocratización permitirá asimismo elevar los niveles
de retribución de los trabajadores que realmente lo necesitan, como es el caso de
los jueces.

De este modo se invertirían los términos clave del marco institucional,


haciendo que el análisis costo/beneficio racional pase a favorecer las conductas
honestas frente a las deshonestas. Poco a poco se restablecería entonces no sólo
la celeridad y eficacia del sistema sino. sobre todo la justicia, que es la base del
edificio de la cooperación social.

3. GOBIERNO LIMITADO

Para iniciar las reformas que conduzcan a un Estado de Derecho hay que
partir, en forma simultánea, tanto de lo que está a mano del Gobierno, como de
lo que tiene efectos a más largo plazo.

La deformación de nuestro sistema de derecho no sólo parte de los intereses


sectoriales, de la burocraci a tecnocrática y de l a oferta política de intervenciones
públicas (del "Triángulo de Hierro"); surge también de las ideas y doctrinas que
han predominado en la formac ión de nuestros intelectuales, abogados y juristas.

En efecto, la influencia del positivismo jurídico ha consolidado nociones


contrarias a la permanencia de normas generales y no discriminatorias. Mientras
se creía que la ley podía hacerlo todo y que todo lo que emanaba de la autoridad
era ley, independientemente de sus características cualitativas, se favorecía
cualesquiera posiciones políticas contrarias al Estado de Derecho y la Economía
de Mercado.

No se puede proteger los derechos para que la gente se fije fines y establezca
medíos materiales libremente si es que el Estado tiene una idea preconcebida
sobre lo que debe ser el orden social. Concebido el derecho como un instrumento
de "corrección" del orden social, cuando no de creación y diseño del mismo,
obviamente no cabe proteger de manera unifonne y no discriminatoria los
derechos de las personas.

152
Un derecho así concebido implicaba, necesariamente, legislaciones para
beneficio de sectores particulares, exclusiones, exoneraciones, privilegios y
discriminaciones. Los legisladores creaban, pues, leyes de carácter particular
que, además de reflejar intereses y no principios, daban c ada vez más poder al
Estado desplazando el área de acción protegida de los ciudadanos.

Adicionalmente, las instituciones se iban formando con el mismo carácter


i ntervencionista, quitando espacio legal a los c iudadanos, para dárselo a los
grupos de presión organizados. El marco constitucional, por ejemplo, que debería
constituirse en el máximo i nstrumento de limitación de los poderes del Estado
para la salvaguarda de los derechos personales, fue siempre en nuestro país l a
arena donde se jugaron las lides políticas y s e hicieron los toma y dacas ("vota
por mí en el tema A, que yo voto por tí en el tema B"), con lo que nuestros textos
constitucionales fueron irracionales, intervencionistas y, en suma, lo contrario de
lo que deberían ser.

Los golpes de · Estado se han dado generalmente debido a un vacío


constitucional y al divorcio completo entre el ordenam iento institucional vigente
y los requerimientos de acción por parte del Gobierno. Si se comparan nuestras
constituciones con aquellas que, en otros países, han durado más, se ve claramente
el tipo de diferencias que han hecho a u nas efímeras y a otras estables y duraderas.

La creencia de que basta con legislar un texto para que éste forme nuestro
ordenamiento constitucional ha llevado a creer a los legisladores en s u
omnipotencia. L a verdad e s muy distinta, los principios constitucionales operan
ya en el respeto que la gente guarda a las instituciones. Los constituyentes
deberían s implemente recoger, interpretar y disponer estos principios en forma
adecuada, l lenando los vacíos con la mayor fidelidad posible al espíritu de las
demás normas ya conocidas.

La virtud de la Constitución no es de carácter instrumental. No sirve para


lograr fines u objetivos específicos sino, simple y llanamente, para asegurar el
mantenimiento de ciertos principios elementales de la acción legítima del Estado.
S u máxima virtud, por tanto, es la de ser estable y duradera., de manera que se
convierta en fuente de estabilidad institucional.

Una Constitución moderna debería definir claramente las funciones básicas


y elementales del Estado, dejando a los gobiernos la potestad de aumentar esas
funciones bajo responsabilidad política y supervisión por la vía electoral. Es
fundamental que consagre el principio del equilibrio de poderes, porque si bien
un solo poder puede lograr cosas más rápidamente en el corto plazo, a la larga

153
termina aumentando su poder a l ímites i ncompatibles con la libertad individual.
"El poder corrompe y el poder absoluto corrompe absolutamente", decía Lord
Acton.

Las elecciones, por otra parte, deberían dar opción a una elección de
candidatos sin partido, lo que puede lograrse a través del Sistema de Distrito
Electoral Múltiple, en lugar del actual, que da mucho poder a las organizaciones
partidarias, transformando las elecciones en una conquista por el poder para el
servicio de intereses particulares.

Se debería, además, consagrar parte de nuestra experiencia con las dos


Cámaras. La de Diputados ha sido siempre una cámara política que muy bien
podría dedicarse a fiscalizar al Ejecutivo y dar ciertas disposiciones referidas al
manejo de los asuntos del Gobierno. Una Cámara de Senadores, de número más
reducido y mandato más prolongado, renovable por partes, podría despolitizar a
la larga el sistema de elección, desvinculándolo de intereses de corto plazo. Ella
estaría encargada de hacer leyes en el sentido de normas generales, universales
e iguales para todos.

Bajo este esquema. se requeriría una tercera cámara, compuesta por gente
de mayor edad y experiencia, de muy pocos miembros, dedicada exclusivamente
a definir conflictos de competencia entre las otras dos asambleas. Esta tendría
sólo facultad para decir qué legislación no se ajusta a la competencia de tal o cual
cámara, sin poder decir qué normas sí se deberían aprobar.

De acuerdo a nuestra repetida experiencia, por otro lado, se debería aprobar


que el Presidente pudiera disolver una de las cámaras con mayor facilidad que
bajo el esquema de la Constitución de 1 979. En este caso el Presidente debería
quedar excepcionalmente sometido a responsabilidad política, por ejemplo,
permitiendo que la nueva cámara censurara al jefe del Estado en caso de que así
l o juzgara necesario una mayoría c ali ficada. En el contexto actual de
unicameralidad, el hecho de que el Presidente pueda disolver el Congreso sin
responsabilidad le da un poder omnímodo sobre los representantes del pueblo.
Elimina de un plumazo la limitación del poder por la división de sus funciones
y el equilibrio de sus potestades. Eso constituye realmente un gravísimo error, en
momentos en que, además, el Perú necesita demostrar al mundo que lo del 5 de
abril no fue simplemente un exceso autoritario que buscaba eliminar la democracia.

La democracia no debe entenderse como simplemente la voluntad de las


mayorías. Es, más bien, la consulta a la mayoría para la toma de decisión sobre
asuntos que afectan a todos por igual. De acuerdo a la noción ingenua de democracia,
la mayoría puede llegar a tener poderes i limitados. Eso degeneraría sin embargo

154
en "tiranía de mayorías", que es exactamente igual de viciosa que la tiranía de uno
solo. De hecho, algo de eso vivimos cuando García Pérez manejaba el Congreso
a su antojo, haciendo aprobar leyes contra el sentimiento jurídico del país entero.

Debe buscarse también un mecanismo de control constitucional más eficiente


que el que se tuvo. Debe facilitarse, además, la descentralización sin llegar a
esquemas compulsivos de reagrupamiento político. Si algo ha sobrevivido a los
embates de la política han sido los departamentos, y hay que partir de esa
realidad.2

Es inevitable ir a una Reforma Institucional completa, dado que todo el


aparato institucional debe cambiar para funcionar de acuerdo con principios los
de la Economía de Mercado y el Estado de Derecho, en vez de hacerlo con base
en los mecanismos de la Economía Mercantilista y el Positivismo Jurídico.

4. SEGURIDAD DE LOS CIUDADANOS

Un orden pacífico no se mantiene sólo con leyes, jueces e instituciones


adecuadas. Hace faJta afinar también el aparato coercitivo del Estado para detectar
y prevenir la trasgresión de los derechos por parte de los antisociales.

No puede haber un desarrollo económico sostenido y armonioso si es que


los ciudadanos no se sienten seguros de sus vidas, de sus propiedades y de sus
libertades. Uno de los servicios fundamentales del Gobierno debe ser el de garantizar
la seguridad de los ciudadanos. Ello se está haciendo, y se puede mejorar,
atendiendo principalmente las siguientes áreas.

Defensa Nacional.
Pacificación.
Lucha Antidrogas.
Seguridad Comunal (serenazgo, rondas urbanas y rurales).
Protección Policial.
Derechos Humanos.

2 Las ideas aquí apuntadas han sido debatidas con un grupo de abogados especializados en
el tema, y se toman de los documentos preliminares esbozados por dicho grupo, de próxima
publicación.

155
Con el fin de la Guerra Fría han cambiado muchos de los conceptos de
seguridad externa o Defensa Nacional. Lo cierto es que tenemos que ir a una
acelerada actualización tecnol ógica, sin que eso signifique iniciar una carrera
armamentista. Al contrario, Jos nuevos tiempos parecen indicar más bien que el
camino del desarme debe estudiarse cuidadosamente y que pueden, efectivamen­
te, encontrarse vías de limitación de compra de armamento sofisticado.

Lo más importante en este momento, para que las Fuerzas Armadas y


Policiales garanticen el cumplimiento de la ley y el orden, es la paciftcaci6n.

Así como en la economía, la principal amenaza, l a más inminente, es la


inflación; en el campo de la seguridad de los ciudadanos la prioridad es la lucha
antisubversiva. El terrorismo es la barbarie y la irracionalidad convertidas en
doctrina orgánica· y acción criminal.

Hay sociedades pobres que no tienen terrorismo, pero el Perú tiene l a desgracia
de haberse empobrecido no sólo material sino también intelectualmente. Sólo así se
explica la aparición de grupos fanatizados alrededor de doctrinas y teorías
inconsistentes, equivocadas y ya superadas, incapaces de enfrentar la realidad de
las cosas de otro modo que no sea a través del asesinato y J a dinamita.

Para entender el terrorismo hay que partir del hecho de que se trata de una
subcultura del marxismo vulgar que se ha venido enseñando en nuestras universida­
des por décadas. Mucha gente ha sido intoxicada con valores incompatibles con Ja
convivencia social. Debido a la gran depresión intelectual que hemos sufrido, la
forma de acceso al mundo de las ideas para muchos fue el folletín y el panfleto, la
prédica de profesores adheridos a sus manuales, capaces únicamente de reproducir
en los alumnos Ja fraseología de autores y doctrinas absolutamente superadas desde
el siglo pasado.

Cuando se enseña economía marxista, por ejemplo, se tiene poca informad ón


sobre las refutaciones de BOhm-Bawerk o los descubrimientos de la teoría subjetiva
del valor por Menger. Al hablarse de la planificación centralizada no se menciona
el famoso l ibro de Mises sobre el Socialismo. publicado en 1 922, donde
demuestra la imposibilidad lógica de un orden basado en esos principios. Cuando
se enseña la doctrina de la lucha armada, por poner otro caso, ninguna noción se
tiene de los escritos de Rilstow en este siglo, o Acton, en el pasado.

Para combatir el terrorismo se requiere cortar su excrecenci a violentista, pero


sobre todo arrancar la raíz ideológica desde donde ésta fructifica. Para eso hay que
librar una intensa lucha ideológica en las universidades y sindicatos, en las escuelas
y en las artes. No es una tarea propiamente del Gobierno, pero éste puede ayudar
mucho a promoverla.

1 56
Hay que señalar, también, que cualquier análisis del poder en el Perú de Jos
últimos 40 años se ha de topar con la naturaleza corrupta y de crisis cíclicas del
mercantilismo. Esto quizá haya alentado el progreso del terrorismo, al encontrarse
en l a realidad, en efecto, algunos e1ementos del diagnóstico senderista. Esto es
lo que ha permitido la confusión y esto es lo que hay que cambiar y aclarar.

La principal inconsistencia de los subversivos es la pretensión de acabar


con la corrupción a través de métodos meramente policiales. La deshonestidad
crece cuando crece el poder y lo que ellos proponen simplemente es una inflación
ilimitada del poder central a expensas de los derechos de las personas.

En el aspecto militar, se requiere de una unidad especial que pueda salvar


los obstáculos de la burocracia regular. Como no se puede equipar a todos de
manera sofisticada, hay que seleccionar, separando las tareas de inteligencia
de las operaciones. Hay que trabajar con lo que se tiene y hay que pasar a l a
ofensiva permanente.

a. Operaciones militares: Si bien el objetivo es la captura de los terroristas,


también se deben tomar medidas de prevención de operaciones. Hay que
mantener una presión constante por parte del Gobierno y mostrar resultados
en el corto, mediano y largo plazo. Pieza fundamental en este avance es el
respeto irrestricto a los derechos humanos. Se ha comprobado que, aparte
del imperativo moral que comporta, hay en esto un beneficio utilitario,
pues se evita dar argumentos al enemigo que siempre está en trabajo de
adoctrinamiento.

b. DesmanteÚJr la organización terrorista y evitar su crecimiento: Se debe


penetrar en s u organización con operaciones de intel igencia e
institucionalizar las recompensas para quienes proporcionen información
y para los arrepentidos. Asimismo, utilizar a los delatores y arrepentidos
como parte del equipo de Gobierno y enfrentar a los infil trados en los
sindicatos, universidades y colegios.

c. Movilización populiJr. Hace falta realizar programas sociales y obras de


atención social en zonas de emergencia. Se necesita acción cfvica de las
fuerzas del orden en los asentamientos humanos, urbanos y rurales. Se
debe otorgar títulos de propiedad urbana y rural, capacitar a universitarios
para programas de apoyo a los asentamientos humanos. Hay que identifi­
car a los líderes populares y dar protección a los mismos para obtener su
colaboración. Es imperativo el establecimiento de rondas campesinas y

157
urbanas, haciendo impopulares las operaciones subversivas. Además, hay
que hacer contrapropaganda a través de campañas para contrarrestar la
propaganda.

d. Compartir los gastos de seguridad entre el Gobierno y el sector privado:


Hace falta una contribución pecuniaria para la lucha contra el terrorismo,
medidas de seguridad para las empresas y viviendas, así como coordinar
e institucionalizar el uso de la capacidad ociosa instalada y el tiempo libre
de las fuerzas del orden, desalentando el pago de cupos y coordinando con
las compañías de seguros medidas de protección exigibles para el pago por
siniestros.

e. Medición objetiva de los avances: Se debe crear unidades de medida para la


evaluación del progreso y recopilar Ja información existente, así como
util izar las encuestas de opinión.

Muchas de estas acciones para combatir el terrorismo pueden y deben basarse


en los principios de la Economía de Mercado y del Estado de Derecho y tener
como pauta la racionalidad económica que prima en las relaciones entre los
individuos.

Otra área que falta cubrir para garantizar la seguridad de los ciudadanos es
la que se refiere a la lucha antidrogas. El narcotráfico se ha ido adueñando de la
zona de ceja de selva del Alto Huallaga en el Perú. En diez años ya son 1 00 mil
familias campesinas las que cultivan 235 mil hectáreas de hoja de coca,
suministrando materia prima para la producción de pasta básica de cocaína de la
zona. Los ingresos que genera el narcotráfico representan el 22% del PBI total,
el 80% de las exportaciones totales y 14% de la deuda externa acumulada.

El contrabando de estupefacientes está evolucionando. De la hoja de coca se


está pasando gradualmente al cultivo de la amapola, de acuerdo a las variaciones de
los mercados del exterior.

Su carácter clandestino hace que el narcotráfico cree un Estado dentro de


otro Estado, dado que se utiliza la violencia para protegerse de la i nterdicción.
Corrompe, además, a las instituciones del Estado, debilitando el ascendiente
moral de las autoridades y de la función de gobierno. Es una fuerza que, si no se
controla, terminará acabando por controlar al país, como ya dijimos.

158
Las acciones para controlar y erradicar el narcotráfico del país son las
siguientes:

Interdicción o labor de represión policial.


Seguridad por vigilancia de las fuerzas del orden.
Desarrollo alternativo.
Educación sobre efectos del uso de la droga.
Tratamiento médico a la drogadicción.
Internacionalización de Ja lucha contra el narcotráfico.

La erradicación de esta lacra debe contemplar también mecanismos de


mercado. Una opción es sacar adelante las propuestas de desarrollo alternativo
frente a la siembra de la hoja de coca. Esta podría ser una de las reformas más
importantes en el Perú.

Nada de esto puede tener eficacia si se hace sobre la base de una trasgresión
sistemática de los derechos humanos. La búsqueda de la seguridad de los
ciudadanos es justamente un intento de restablecer derechos persona] es perdidos.
Es absurdo acometer esta tarea anulando otros derechos.

Como Ja herencia de décadas de descuido sobre Ja capacitación de soldados,


y mandos medios militares y policiales no pennite un control absoluto sobre las
acciones discrecioñales de los efectivos; se requiere institucionalizar y profundizar
l a comunicación entre los organismos de defensa de los derechos humanos y el
Gobierno. No se debe tener miedo a enfrentar l a realidad de las cosas, que muchas
veces quiere encubrirse por un mal entendido sentido de la lealtad y por intereses
políticos de coyuntura.

Por otro lado, debe crearse un mecanismo que haga al Defensor del Pueblo
un funcionario con verdadera autonomía y autoridad para rescatar los derechos
fundamentales de la persona. No se puede combatir la conducta incivilizada con
represión indiscriminada. No somos el único país que sufre sus consecuencias,
pero nuestra economía ha quedado tan vulnerable, que debemos hacer un
esfuerzo especial por mejorar más rápido que los demás.

159
CAPITULO V II

TIGRES DE PAPEL

Si bien el Programa Económico puede haber adolecido de algunas


ineficiencias. muchas de las críticas que recibió no resisten un análisis serio;
otras. en cambio, sí sirvieron o pueden servir todavía para mejorarlo. Veamos
algunas:

l. LAS CRITICAS AL PROGRAMA ECONOMICO

1.1 "Ya es Hora de Reactivar"

Bajo el supuesto de que la reactivación de la economía debe provenir de la


intervención directa del Gobierno. se levanta esta demanda como proporcionando
una excusa para expandir sus acciones. Se argumenta que el gasto público es
necesario para inyectar dinero o crédito a la producción y disminuir el desempleo,
dando un impulso a la economía y compensando la caída en la actividad privada
Es muy probable que una acción de este tipo genere un incremento en la infiación
y que todo el impacto se traslade hacia el alza de precios y deje el gasto privado
sin mayores cambios en términos reales. con lo cual este mecanismo no permitiría
salir de la recesión y terminaría agravándola.

1.2 "¡Para Qué Tanto Dinero en las Reservas!"

Hay quienes piensan que las reservas internaciones equivalen a dinero


disponible en las bóvedas del Banco Central de Reserva y que, por tanto, se debe
echar mano de ellas para aumentar la liquidez de la economía, bajar con ello las
tasas de interés y reactivar en consecuencia el aparato productivo. Total -se
dice- ¿qué sentido tiene guardar dos mil millones de dólares? Esta fue una de
las ideas rectoras de Alan García. El creyó que era así de simple. Se equivocó y
provocó un verdadero desastre.
En primer lugar, hay que señalar que lo realmente disponible de las Reservas
es aquella parte que se conoce como "posición de cambio". En diciembre de 1 992,
de los 2,000 millones de dólares de RIN sólo 3 1 1 correspondían a este rubro.

Por otro 1ado, al ser retiradas de bóvedas las RIN tienen que convertirse en
dinero, lo que equivale a emitir. La emisión, sin embargo y como hemos visto,
debe crecer a tasas menores a las de la inflación. El impacto inflacionario es el
mismo, provenga el circulante adicional de donde provenga. Esto, aparte del
riesgo que supone echar mano de las reservas en dinero disponible en el marco
de una balanza de pagos vulnerable. Además, una acción como ésta daría una
pésima señal a los agentes económicos con respecto a los niveles de precios
futuros, la disciplina monetaria y la falta de seriedad en el manejo de los recursos.

1.3 "¡Se Viene una Crisis de Balanza de Pagos!"

Todos los años, desde 1 9 9 1 , se ha dicho que l a situación de la balanza de


pagos se va a tornar inviable. Según tales vaticinios, una crisis de la balanza es
inminente, lo que al final hará caer el Programa.

No obstante, han pasado dos años y tales pronósticos no se han cumplido.


Ello se debe a que ya no hay un control del tipo de cambio, sino un esquema de
"flotación sucia" que permite, aunque de manera incompleta, satisfacer la
demanda de moneda extranjera. En la medida que el Banco Central se abstenga
de intervenir o lo haga de la forma más limitada posible, los vaticinios no podrán
cumplirse.

Adicionalmente, es necesario señalar que un país puede experimentar


déficit por períodos prolongados en su balanza en cuenta corriente, en la medida
que el flujo de capitales la financie. Esta situación se dio en los Estados Unidos
durante casi todo el siglo XIX y se ha dado en el Perú desde 1 990 a la fecha.

1 .4 "Eleven el Tipo de Cambio"

La ganancia de paridad cambiarla es un reclamo que hacen constantemente


algunos exportadores y productores para el mercado interno. Hemos visto que las
inflaciones altas producen retrasos en la paridad cambiarla; pero no sólo eso:
también reducen el poder de compra de los salarios y el rendimiento de los
ahorros. Pensar que el Estado debe compensar ahora a los exportadores por esa
pérdida de paridad es absurdo, pues el mismo derecho para tal compensación

162
tendrían los asalariados, los pensionistas y los ahorristas. Esa paridad se perdió
por el despilfarro y la inflación y no se debe esperar una compensación a través
del control del tipo de cambio. Las empresas tienen que ajustarse a una nueva
situación que reducirá la inflación y a vivir sin subsidios y sin protección alta. No
esperemos que el tipo de cambio-se ajuste para compensar la eliminación de los
antiguos privilegios. ·

1.5 "Bajen los Intereses"

La reducción de la tasa de interés es un clamor de los agentes productivos.


Después de inflaciones altas y de la liberalización del sistema financiero se
pueden esperar tasas de interés altas. Estas no van a bajar ni con controles ni por
ley. Es como si se quisiera bajar la inflación por decreto. Eso nunca ha funcionado
ni funcionará. Las tasas de interés se reducirán en la medida en que baje la
inflación, disminuya el "riesgo país", se reestructure y se haga más competitivo
y solvente el sistema financiero, se abran líneas con el exterior y se obtenga
inversión extranjera en el sector financiero, al tiempo que se vaya remonetizando
el país. Se requerirá también para ello que las instituciones del sector ajusten sus
costos operativos, a través de las exigencias de la competencia.

1.6 ''Se está Pagando Mucha Deuda Externa"

Lamentablemente todavía hay quienes proponen una "reducción


unilateral" de los pagos de la deuda externa. Ya ese esquema tuvo su abanderado
en García, quien hablaba de una "Deuda Social Interna" que debía priorizarse
frente a la deuda externa. La frase es conmovedora, pero en nombre de ella
provocó una hiperinflación de 7,650%, nos dejó un país en bancarrota y
empobreció a la población. Se debe reducir los pagos de nuestra deuda externa,
pero por la vía de la negociación multilateral y bilateral. La unilateralidad ya fue
probada y debemos aprender de sus resultados.

1.7 "¡Falta Emoción Social! "

La falta de u n "rostro humano", de solidaridad y , en general, de consideraciones


sociales en el Programa Económico son una crítica frecuente. Hay que reconocer
que ciertas imprevisiones en el Plan de Gobierno y en la gerencia del gasto público

163
impidieron la canalización de mayores recursos para el alivio de la pobreza extrema.
Eso se está resolviendo, pero en todo caso no puede esgrimirse este argumento
para favorecer un manejo irresponsable de Jos recursos.

La palabra "social" se usa en forma ambigua, generaJmente como un modo


de imprimirle a otros conceptos un matiz que indicaría una preocupación especial
por los sectores menos favorecidos. No es casual, sin embargo, que quienes con
mayor frecuencia la han tenido a flor de labios hayan sido aquellos políticos cuyas
gestiones fueron precisamente las que más empobrecieron a los sectores; es decir,
han sido anti-sociales. Así por ejemplo, se han acuñado términos como democracia
social, economía social de mercado, propiedad social, seguro social, ajuste
social, costo social, deuda social, etc. para dar nombre a experimentos que en
algún caso pueden haber sido motivados por buenas intenciones pero cuyos
resultados han sido invariablemente lamentables.

1.8 "Falta Liquidez"

La necesidad de remonetizar el país más rápidamente es otra demanda


frecuente. Desmonetizarlo tomó cinco años y remonetizarlo en forma prudente
tomará otro tanto. Pensar que este proceso se puede acelerar es tentar la vuelta
a la i nflación alta. Este proceso se hará gradualmente, en soles o dólares, lo que
el público quiera elegir. La dolarización es una realidad, ya que con las tasas de
inflación tan altas, por ahora nadie confía en la moneda nacional. Por sí misma
la dolarización no atenta contra la estabilidad. Bolivia estabilizó con dolarización
y el Perú también puede hacerlo.

1.9 "Se Está Favoredendo a los Monopolios"

Hay quienes piensan que, corno resultado de la aplicación del Programa


Económico, determinados monopolios privados se han fortalecido. En primer
lugar, hay que distinguir entre los monopolios naturales -es decir, los que son
resultado de la eficiencia competitiva sin par de un agente económico-- y los
artificiales, producto de regulaciones o reservas de mercado legalizadas gracias
a la intervención del Estado.

El Programa de Reformas ha reducido sustantivarnente los casos de


monopolios artificiales y crea la base para continuar en ese trabajo. El reacomodo
de l a inversión producto de detener la inflación, por otra parte, permite que ciertos

1 64
agentes descubran nuevas áreas de inversión, con lo que pueden obtener legítimas
ganancias altas, hasta que la competencia y el aumento del capital, hagan
incrementar la oferta y reducir con ello las ganancias y precios iniciales.

1.10 "El Fonavi y las Pensiones Son un Impuesto a la Planillaº

Esta crítica que señala el riesgo de que las contribuciones al Fonavi y al


Fondo de Pensiones se conviertan en un impuesto a la planilla, constituye una
crítica válida. Hoy en día no se aplica la capitalización individual sobre todo en
el Fonavi y es el Estado quien recibe esos fondos, los que no son tratados como
un ahorro de los trabajadores para dedicarlo a vivienda.

Entre las múltiples críticas al Programa una de las más curiosas -publicada
bajo la forma de una Carta Abierta- pretendió atribuirle una contradicción
fundamental; a saber, que sus efectos reducían la libertad económica. Es cierto
que los agentes acostumbrados a. la prota;ción del Estado perdieron l ibenad de
acción, pero eso no equivale a que se haya reducido la libertad de los demás (para
mayor detalle, ver anexo VI).

2. DESVIACIONES DEL PROGRAMA ECONOMICO

La aplicación del Programa F.conómico, a nuestro juicio, adolece de ciertas


inconsistencias que no corresponden, sin embargo, a las críticas que generalmente
se le hacen y que hemos reseñado.

Algunas de las desviaciones provinieron de la injerencia que, tt pesar de


nuestros esfuerzos, llegó a tener la política sobre el ctiterio técnico. Otras tuvieron
su origen en el poder discrecional que ejercían muchos funcionarios de disti nta
jerarquía, algunos de los cuales no estaban convencidos de las bondades de l
Programa mientras que otros, filtraban intereses sectoriales difíciles d e detectar
en primera instancia.

Hoy en día estas distorsiones han aumentado y pueden llegar a constituir


una amenaza contra las líneas maestras del Programa.

Algunas de ellas son las siguientes:

Las restricciones a la importación de algodón establecidas en 1 99 l ,


aludiendo a la presencia del "picudo mexicano". La aplicación de esta

165
medida para-arancelaria rindió grandes beneficios a los productores de
algodón, en desmedro de los textileros. El lobby funcionó tanto a favor de
los algodoneros corno de algunos burócratas.

Las restricciones en el uso de leche en polvo para producir leche evaporada.


Esta norma puede haberse sancionado con l a mejor intención de defender
l a producción y alentar el desarrollo de la ganadería nacional; pero
constituye en realidad una clara interferencia con el mercado; y sus
resultados, como era de prever, han sido contrarios a los esperados. La
producción de leche fresca no aumentó y su consumo tampoco. Lo único
que se propició fue la importación de leche evaporada, pues ahora sale más
barato hacer esto que producirla localmente.

Las sobretasas arancelarias a los productos agrícolas, como el trigo, la


leche, el arroz y el azúcar. Esta norma fue adoptada para proteger al
productor doméstico de los precios de dumping del exterior. Como
sabemos. toda protección se traduce en un perj ui cio para el consumidor. En
este caso, además, no se ha fomentado l a producción nacional, sino más
bien se ha abierto el espectro del virus proteccionista con el riesgo de que
se expanda a otros productos derivados, tales como la harina, los fideos, el
pan, para el caso del trigo; o la leche evaporada, la leche condensada, el
queso y el yogurt, para el caso de la leche.

Las cajas rurales , en la medida que sean un disfraz de i ntervención estatal,


son inadecuadas para el Programa Económico. Ellas están naciendo con
préstamos del Estado para comprar los antiguos locales del Banco Agrario;
además, sus fondos provienen de las cobranzas del antiguo Banco Agrario.
De seguir así, el próximo paso podría ser que el Gobierno les empiece a dar
préstamos todos los años y que éstos no se recuperen. Es decir, pasaríamos
de un Banco Agrario a cientos de banquitos agrarios con sus mismos vicios
y defectos. El 1 O de febrero de 1 993, Cofide anunció que creará seis cajas
rurales piloto con fondos del Estado por un monto de tres millones de
dólares.

La i ntroducción de controles de precios en el transporte, la educación, los


salarios, así como la posibi lidad de hacer lo mismo con la tasa de interés.
El Ministerio de Economía y Finanzas negoció en el mes de enero una
reducción del pasaj e urbano a cambio de la eliminación del medio pasaje
para algunos sectores de la población. Negoció también que el pasaje no
varíe hasta junio de 1 993.

166
En el mismo mes, el MEF congeló las matrículas escolares de marzo a los
niveles de hace un año y dispuso que cualquier i ncremento adicional
debería materializarse en abril, junio y julio. Esto, nuevamente, constituye
un velado control de precios. En enero, el Ministro de Trabajo volvió a
negociar con el gremio sindical de mayor poder monopólico (la CGTP) y
planteó que el sueldo mínimo vital pasara de 72 a 350 soles y no a los 200
que pedía la CGTP. Esto tlltimo no prosperó.

Finalmente, Adex está presionando para la aplicación de controles de precios


en la tasa de interés y la fijación del tipo de cambio vía Decreto Supremo. Estas
desviaciones de la economía de mercado tienen el objeto loable de evitar
que la inflación se desboque. No obstante, debemos recordar que los
controles de precio -velados o no-- no bajan la inflación; al contrario, la
retrasan, con lo que . una vez más, ésta al final se desboca. Baste recordar
la experiencia del gobierno de Alan García, cuando se aplicó el control no
sólo a los precios claves, sino a miles de precios y acabamos con una
hiperinflación y un mayor intervencionismo.

Las condonaciones de las deudas del Banco Agrario en l iquidación son una
mala señal. Significan aceptar que no se pague lo que se prestó y eso quiere
decir que a la gente se le cobró impuestos para al final regalarlos a través
de créditos condonados. Esta política fue aplicada por García bajo la forma
de los famosos "créditos chicha", con los resultados que conocemos. En
segundo lugar, esto genera un efecto de demostración: primero es la
condonación de la deuda agraria, luego sigue la deuda mi nera, después la
de los industriales y así cada sector pensará que tiene el mismo derecho que
el anterior.

La creación de nuevas empresas e instituciones públicas. Se está hablando


de crear el "Banco de Fomento Nacional", lo que equivale a crear nuevos
Bancos Agrarios, cuando ya Cofide asumió la función. También l a
Cancillería h a preparado un proyecto para que el Ministerio d e Relaciones
Exteriores cree una agencia de viajes como empresa estatal de derecho
privado. "La Agencia de Viajes tendrá por finalidad alcanzar una óptima
administración de los recursos fiscales y propios, así como faci litar las
funciones del Servicio Diplomático de la República, mediante el control
y gestión directa en la emisión de pasajes con aerolíneas nacionales e
i nternacionales" reza un documento preliminar. La agencia se ll amaría
"Agencia de Viajes Sipán de Turismo, S.A.". Estos son síntomas de la
intención de volver a crear empresas pú bli c as S i esto es así, ¿qué sentido
.

tiene la privatización?

167
La suspensión de la liberalización d e rutas para transportistas, dispuesta
por D.S.005 publ icado el 3 de marzo de 1 993 del Ministerio de Transportes,
es una marcha atrás en el proceso de liberalización. Significa que los
burócratas de transportes van a decidir las rutas de 23 mil nuevos vehículos
automotores ( 16 mil camionetas rurales y 7 mil ómnibus).

Nuevamente se podría presentar el mercantilismo en la asignación de rutas,


con el consiguiente fortalecimiento del poder monopólico de la Federación
de Choferes. El próximo paso podría ser el control de las tarifas.

Lo que debió hacer la Municipalidad es definir cuáles son las rutas; y los
transportistas escoger Ja que más les conviniera de acuerdo a sus costos y
beneficios.

El Instituto Nacional de Defensa de la Competencia y de la Propiedad


Intelectual, el Indecopi, fue creado con la idea inicial de mantener algunas
de las funciones del antiguo Instituto de Investigación Tecnológica Industrial
y de Normas Técnicas (ITINTEC). Cometimos el error, sin embargo, de
dejar abierta su área de jurisdicción con respecto a la intervención que
podría tener sobre los precios de mercado.

En el mercado puede haber productores que, por su eficiencia, carezcan de


competidores cercanos. Tienen, pues, margen para elevar sus precios sin
que ello signifique atentar contra las reglas de la libre concurrencia.

Indecopi ha caído ahora en la tentación de señalar cuáles alzas de precios


del sector privado son producto de cárteles y deberían, por tanto, ser
coactivamente modificadas. Esto equivale a otra moda1idad de control de
precios, bajo la forma esta vez de la "protección de la competencia".
Indecopi debería limitarse a corregir las regulaciones que crean monopolios
y cárteles que no son producto de la eficiencia productiva singular. De lo
contrario, podrá convertirse en un centro de poder para reducir la competencia
y la eficiencia productiva.

Las distorsiones se estári multiplicando, al punto que en la nueva


Constitución ya se han consagrado medidas como la "indexación de las
pensiones". Las presiones mercanti listas han contagiado, incluso, a la
mayoría oficialista del Congreso.

168
EUo implica que se elabora un texto constitucional para el plazo que duren
las presiones e intereses de sectores particulares. Esto resta confianza en
el marco institucional en ciernes, lo que puede afectar la capacidad del
Programa Económico de generar mayores, más rápidos y duraderos
efectos positivos.

3. REFLEXIONES

El Programa de Economía de Mercado que se viene aplicando en el Perú,


debe entenderse como un conjunto de medidas i ntegradas y coherentes entre sí.
No se puede pensar que al cambiar algunas de sus partes y piezas por conveniencia
de ciertos grupos, el Programa no se va a alterar o echar a perder. Subir o
diferenciar aranceles a las importaciones o incrementar el tamaño del Gobierno,
serían medidas que traerían abajo el Programa, por más que sean adoptadas con
las mejores intenciones. No olvidemos que el camino al i nfierno está empedrado
de buenas intenciones.

Esto no quiere decir que el Programa Económico sea i nmutable o inalte­


rable: es posible ajustarlo y corregirlo, pero dentro de una l ínea acorde con
los siete principios de una economía sana, mencionados en el segundo
capítulo de este libro. Las medidas que adopte el Gobierno deben guardar
coherencia con los principios en que se basa el Programa Económico y con
el Programa mismo. Las autoridades gubernamentales deben abstenerse de
dar señales de la necesidad de hacer cambios y correcciones al Programa,
ya que lo único que generan con ello son inseguridades y expectativas
inadecuadas. Adicionalmente, despiertan los apetitos de quienes propugnan
alejamientos de los mecanismos de mercado para beneficiarse con l a
creación de monopolios y privilegios.

La convicción y la perseverancia del Estadista en la aplicación de un programa


de economía de mercado es una condición sine qua non para el éxito del
mismo. U na persona puede ser persuadida por un día, un mes o varios meses
de tomar una serie de decisiones o acciones, pero el lo no quiere decir que
esté convencida de la necesidad de ellas. Esta mi sma persona puede ser
convencida por otra persona de ideas opuestas en un plazo igual o menor,
que en el caso anterior. La única persona que realmente puede persuadir
y convencer a uno es uno mismo. La convicción y la perseverancia se
manifiestan al adoptar unos principios y una dirección y no sal irse de ella,
a pesar de los problemas y momentos difíciles que se puedan pasar.

169
Suponen no ceder a presiones ni popularidades de corto plazo. Requieren
contar con un grupo de personas convencidas, que colaboren en la
aplicación de esa línea.

Los mercantilistas, los populistas y los burócratas son los menos indicados
para garantizar la continuidad de un programa de economía de mercado.
Para l levar a cabo estas grandes transformaciones se requiere de un equipo
gerencial de por lo menos 1 50 personas de alto nivel, que estén convencidas
de las bondades de un programa basado en la economía de mercado y que
actúen en las distintas áreas del sector público.

Se debe evitar lo que podríamos llamar el Síndrome de Alan García; una


verdadera tentación autoritaria que consiste en la i ncli nación de u n
estadista por sustituir a los ministros y concentrar mayor poder. La tentación
más grande suele ser la de convertirse en Ministro de Economía, ya que es
la posición desde la que se maneja los recursos fiscales. U na de las formas
de hacerlo es mediante una mayor injerenci a en la política econ6míca, lo
cual constituye un riesgo muy grande para el Programa Económico. Esto
ya se dio con Alan García entre 1 985 y 1 990, y las consecuencias fueron
funestas.

Muchos reformadores económicos y sociales creen que el problema radica


solamente en los hombres y no en los sistemas y las reglas. Piensan que
despidiendo a los deshonestos y contratando a los-honestos se resuelven los
problemas. Eso explica por qué muchas reformas han fracasado cuando las
reglas sin arbitrariedades y los hombres honestos no van de la mano.

Así, por ejemplo, si en una institución pública se cuenta con un equipo


honesto, que sin embargo dispone de un poder y reglas arbitrarias, es casi
seguro que a lo largo del tiempo esta institución, por presiones políticas,
económicas y sociales, acabará corrompiéndose. No i nteresa cuán buena
voluntad haya tenido el reformador para crear una institución honesta si las
reglas permiten arbitrariedades.

Es tan corto el tiempo que uno ejerce un cargo público desde el que se
pueden tomar decisiones y es tanto lo que hay por hacer, que uno se
arrepiente de lo que dejó de hacer, no de lo que hizo. Es necesario avanzar
lo más rápido posible porque los días de vida de un ministro son contados.
Esta posición es contraria a la del burócrata que evita hacer cualquier cosa
en aras de su supervivencia. En ella uno siente que está corriendo sobre un
pantano y que si se detiene, se hunde.

170
La credibilidad interna y externa se gana muy lenta y difícilmente, pero se
pierde rápidamente. La credibilidad se gana mostrando honestidad en las
acciones y en las palabras. Las acciones deben concordar con lo que uno
dice y, lo que es más importante, no se debe engañar jamás a las personas.
Es preferible decir la verdad, por más dura que ésta sea, la gente al final
lo aprecia. Estos principios son válidos dentro y fuera del país, pues una
vez que se pierde, la credibil idad no se recupera más.

Algunos piensan que lo programas de economía de mercado sólo se pueden


aplicar bajo regímenes autoritarios. Esta apreciación no es correcta, los
países desarrollados de Occidente son una prueba de que la economía de
mercado no sólo es compatible con la democracia y el Estado de Derecho,
sino su necesario complemento. Son elocuentes también en este sentido los
casos de Bolivia, Argentina y Honduras, así como Jo que está sucediendo
en algunos países de Europa del Este. La libertad económica lleva a la
l ibertad política.

El Banco Mundial señala en su Informe sobre el Desarrollo Mundial en


1 991 que entre 1 950 y 1 970 se consideraba que las democracias tendían a
ser populistas, mientras que los regímenes autoritarios eran necesarios
para llevar a cabo reformas impopulares. En los ochenta en cambio, se vio
que estos regímenes no daban buenos resultados económicos y que estaban
sujetos a presiones de pequeños grupos. "[ . ], los datos de que se dispone
..

indican que la distinción entre gobierno democrático y gobierno autoritario


no es por sí sola una explicación satisfactoria del hecho de que los países
inicien o no reformas, las apliquen eficazmente o sobrevivan a las
consecuencias políticas que de ellas se derivan".1

Siempre ex is te el peligro de que como en un péndulo, 1 as ideas "socializantes"


regresen. Esto se da en todo el mundo, ya que existe la inclinación humana
de concentrar todo el poder y, especialmente, incrementar el poder del
Estado sobre la sociedad. Es precisamente para evitar eso que existen
corrientes de pensamiento que buscan entregar el poder a los individuos,
como el l iberalismo económico y el liberalismo poJítico. Es fundamental
limitar el poder del Estado, lograr la separación de poderes y proteger los
derechos del individuo.

1 Banco Mundial ( 1 99 1 ) p. 1 56.

171
Para que un programa económico sea estable y sus efectos irreversibles es
necesario que la gente crea en él y lo haga suyo. Es, pues, fundamental que
tenga aceptación popular. Para ello se requiere de un cambio de mentalidad
de la población, una conciencia de cambio. El momento es hoy propicio
en el Perú, pues venimos de experimentar la peor crisis e hiperinflación de
nuestra historia. Para institucionalizar las Reformas Estructurales y sus
principos, éstas deben ser recogidas en leyes consagradas en la nueva
Constitución.

Luego de 40 años de mercantilismo, los grupos de presión están muy bien


organizados y enquistados en la periferia del poder. Las Reformas Económicas,
que tienen a veces una secuencia ideal para guardar coherencia entre sí, deben
realizarse sin embargo en forma simultánea, avanzando ahí donde se puede y
preparando el terreno donde no hay otra cosa que esperar. No se puede cambiar
un orden establecido sin resistencias y por eso hay que estar dispuestos a tomar
la iniciativa aun cuando todavía no parecería ser el momento justo. De lo
contrario. después puede ser demasiado tarde. El juego de presiones es corno una
maleza que crece rápidamente en las áreas donde se le deja espacio.

Esto es lo contrario al pragmatismo. La peor equivocación que se puede


cometer es creer que basta con realizar lo que es políticamente posible en un
momento dado para realizar los cambios requeridos. Se trata, más bien, de hacer
que los objetivos trazados se hagan políticamente viables.

No hay peor amenaza contra el Programa de Liberalización que una


adhesión al pragmatismo, que consiste en cambiar los objetivos cuando no se
puede avanzar. Hay que ser prácticos, pero no pragmáticos. Esto quiere decir: no
hay que perder de vista nunca los principios de Economía de Mercado con Estado
de Derecho.

En general, hay que actuar en función de principios c laramente definidos


y no según la "conveniencia" de la coyuntura política. El pragmatismo es la
filosofía de acción del mercantilismo. Si no adherimos sólida y consistentemente
los principios, podemos ser barridos por todos los argumentos acerca de las
"ventajas pragmáticas" de deformar tal o cual curso de acción que, finalmente,
puede llevar a la deformación completa del Programa.

Nadie duda que el Certex, por ejemplo, puede inicialmente aumentar las
exportaciones. Pero no se puede sacrificar el principio de la disciplina fiscal e
igualdad ante la ley para obtener algunas ventajas políticas para el Gobierno y
otras, pecuniarias, para un grupo de intereses especial. Creemos o no creemos en
la libre competencia. No hay en esto tercera vía posible.

1 72
Por la senda de las concesiones se desencadena el mecanismo de las
presiones y se regresa al viejo sistema que, a la postre, lleva a mayores
intervenciones públicas, desembocando finalmente en una vertiente totalitaria.
El pragmatismo lleva al socialismo, o a la tentación totalitaria de cualquier signo.

La experiencia que tuvimos en el MEF nos permite recomendar J a


i mperativa necesidad d e contar con u n equipo de técnicos eficientes y
principistas, absolutamente convencidos del Programa. Ellos deben estar dis­
puestos a ocupar determinados cargos en la administración en los que se requiere
tanto conoci miento técnico como capacidad de resistencia a las presiones
mercantilistas. Debe haber, incluso, equipos de recambio, dispuestos a sustituir
a quienes tuvieran que salir de la administración pública por distintos motivos .
Esta fue una de las deficiencias más sensibles de nuestra gestión.

Debemos recomendar también un mayor liderazgo de las Reformas. Para


que la población conozca sus beneficios alguien debe asumir personalmente su
defensa. Las críticas generalmente tienen cabida en los medios y si no se "saca
la cara" por las Reformas, éstas tendrán menos posibilidad de ser apoyadas por
la población. Tal liderazgo no puede asumirlo el Presidente de la República, porque
se trata más bien de un puesto de permanente exposición política, en el que hay
que "bajar al llano" para debatir públicamente las ventajas del cambio institucional.

173
CAPITULO VIII

CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES

l. AVANCES DEL PROGRAMA ECONOMICO

El Perú, durante el gobierno de Alan García ( 1 985-90), experimentó la crisis


económica más grande de su historia republicana. La hiperinflación alcanzó niveles
de 7,650% anual, la caída del PBI fue de 20% entre 1 988 y 1 990, las reservas
internacionales llegaron a ser negativas en 1 00 millones de dólares, el déficit fiscal
y cuasi fiscal alcanzó el 1 6% del PBI y la emisión iba de la mano con la inflación.

En materia de seguridad, el Perú iba perdiendo terreno en la lucha contra el


terrorismo, y en materia política, el gobierno de García había concenlrado
desmesurada e inadmisiblemente el poder.

Enjulio de 1 990 un independiente, el ingeniero Alberto Fujimori, es elegido


Presidente derrotando a los partidos políticos tradicionales. En corto tiempo
decide aplicar un programa de ajuste para controlar la hiperinflación, pero su
esquema inicial fracasa en diciembre de 1 990, incrementándose la i nflación
nuevamente a niveles de 24% mensual.

En febrero de 1991 se aplica en forma consistente e integral una política


económica basada en cinco grandes reformas estructurales, en una política exterior
de apertura y reinserción financiera, y en el mantenimiento del Estado de Derecho.

Las Reformas Estructurales fueron: la reforma macroeconómica; la


liberalización de los mercados de bienes y servicios, de dinero y laboral; la reforma
de la estructura de la propiedad (mediante l a privatización de activos del Estado);
la reforma del Estado con el objeto de reducir su tamaño y funciones, y la reforma
institucional, para lograr la estabilidad de las reglas de juego.
Las Reformas Estructurales se dieron en tres olas. La primera se inició el
1 2 de marzo de 1991 y duró hasta abril de ese mismo año, y en ella se aprobaron
61 decretos supremos, que dieron inicio a la liberalización de los mercados y la
privatización. La segunda ola se dio entre el 1 8 de mayo y el 1 5 de noviembre
de 1 99 1 , y en ella se aprobaron 1 1 7 decretos legislativos bajo el amparo de la
delegación de facultades del Congreso. En esta ola se profundizó las reformas
anteriores, definiendo el ámbito de la privatización. La tercera ola se dio entre
el 5 de abril y el 30 de diciembre de 1 992, y en ella se amplió el espectro de las
reformas, aplicándolas a sectores como las pensiones y la educación.

La reforma macroeconómica mostraba, a diciembre de 1 992, resultados


positivos: la inflación se redujo de 7,650% a 57% al año; las Reservas Internacionales
Netas se incrementaron de - 1 00 millones de dólares a dos mil millones de dólares;
el déficit fiscal se redujo de 1 6 a 2.5% del PBI; la emisión monetaria creció a tasas
menores que la inflación y la presión tributaria aumentó de 5 a 9 .5% del PBI. El
crecimiento del PBI durante 1 99 1 y 1 992 fue nulo, pero éste es un resultado que
podía esperarse como el costo de controlar la hiperinflación.

Las reformas de los mercados muestran también progresos significativos.


Los precios de los bienes y servicios, el tipo de cambio, la tasa de interés y los
salarios se han liberalizado y se determinan ahora por el mercado. Los precios de
los servicios públicos están en proceso de liberalizarse. Los mercados se han
desregulado significativamente y los monopolios artificiales han sido eliminados
casi en su totalidad. El comercio exterior se ha liberalizado al haberse reducido
los aranceles a un nivel promedio de 1 7 % (dos niveles 1 5 y 25%), eliminarse los
para-arancelarios y liberalizarse en gran medida el mercado cambiarlo.

La reforma de la estructura de la propiedad también presenta avances


i mportantes. Durante 1 992 se vendieron 1 O empresas públicas al sector privado,
generando alrededor de 247 millones de dólares. La inversión extranjera se
estimuló pasando de cinco millones de dólares anuales durante el gobierno de
García, a más de 1 00 millones de dólares anuales en los dos últimos años y
contrayéndose compromisos por más de 600 millones para las próximos cinco años.
Finalmente, el Estado aprobó el otorgamiento de concesiones para infraestructura
y servicios públicos.

La reforma del Estado exhibe logros i mportantes. Las pensiones de los


trabajadores se encuentran en proceso de privatización; la educación está siendo
municipalizada y privatizada; la reforma tributaria está muy avanzada; el gasto
público orientado al alivio de la extrema pobreza está siendo priorizado y, para

176
1 993, debe incrementarse del medio por ciento al 1 % del PBI. Sin embargo, en
la reducción de instituciones y del empleo en el sector público todavía no hay
progresos notorios.

En materia de política exterior y con relación a la rei nserción financiera,


1 99 1 fue un año de grandes logros: se creó el Grupo de Apoyo (que otorgó más
de 700 mill ones de dólares al Perú); se logró un acuerdo con el FMI (el RAP) que
fue cumplido con holgura durante los 1 5 meses de su aplicación; se renegoció con
el Club de París y se l i mpió atrasos con el BID, obteniéndose más de 300 millones
de dólares frescos.

Gracias a ese cumplimiento del RAP se han limpiado los atrasos con el FMI
y con el Banco Mundial el 1 8 de marzo de 1 993. El Perú ha vuelto a ser, así, país
elegible, después de haber estado aislado financieramente del mundo por más de
siete años. Este es un gran paso en el proceso de re i nserción. Asimismo, ya se tiene
un programa con el FMI por tres años y se puede contar con dinero fresco de esa
institución y del Banco Mundial. Resta ahora proceder a negociar con el Club de
París y la Banca Comercial en el corto plazo.

La repatriación y la venida de capitales a corto plazo ha alcanzado niveles de


2,500 millones de dólares. La refonna financiera ha pennitido liberar mercados
deprimidos en el sistema financiero y mejorar los niveles de insolvencia y prudencia
en el mismo. En la reestructuración del li<;tado se ha avanzado poco con respecto
a la reducción de su tamaño; hay, sin embargo, i mportantes avances en la
privatización. Se han vendido activos por valor de 250 millones de dólares. Con
la reforma tributaria se ha logrado una racionalización de los tributos, un
incremento en la recaudación y una mejora en la administración tributaria. Con
la reforma laboral se ha liberalizado el mercado de trabajo, el que en el mediano
plazo logrará mejores niveles de empleo remuneración real. En el campo de las
pensiones de jubilación y la educación se han promulgado leyes de trascendental
importancia que deben aplicarse durante 1 993. Finalmente, en las reformas
institucionales lo poco que se ha avanzado está concentrado en el Poder Judicial.

En cuanto al mantenimiento de la paz.la ley y el orden, se han logrado


progresos s ignificativos. El terrorismo ha sido duramente gol peado con l a captura
de los líderes de los movimientos subversivos más importantes durante 1 992.
Asimismo, la acción cívica de las fuerzas del orden, las operaciones de inteligencia
y las reformas del Poder Judicial, así como el control de la corrupción y el
narcotráfico permitirán que el país avance en la vía de la pacificación.

177
En conclusión, el Perú, durante el gobierno de García era un país sumido
en el caos y Ja desesperación y hoy, gracias a las reformas, es un país con
perpectiva de futuro. La economía se viene recuperando gracias al esfuerzo de
la población, del trabajo, de la inversión nacional y extranjera. Debemos dejar
claro, sin embargo, que estamos a l a mitad de un camino duro y largo. Tenemos
que perseverar en el cambio de rumbo que iniciamos con el Programa Económico
para los noventa.

2. AGENDA PENDIENTE 1

En cuanto a estabilización, se puede decir que la inflación todavía no está


controlada. La balanza de pagos no está equilibrada y el nivel de reservas
internacionales debe seguir fortaleciéndose de manera prudente. El déficit fiscal
no está controlado y la recaudación tributaria es todavía baja. Finalmente, la
emisión monetaria no está necesariamente alineada con las metas del Programa.
Hace falta continunr con la di:sciplina fiscal y monetaria para consolidar la
estabilización de las variables macroeconómicas.

En materia de modernización y reformas estructurales, queda todavía


mucho por hacer. No se ha avanzado en la reestructuración del Estado, en la
reforma del gasto público, del sector salud, de la vivienda y en el alivio de la
extrema pobreza. Lo mismo sucede con las reformas institucionales.

Con respecto a las reformas de la educación y del sistema de pensiones, si


bien se ha establecido el marco legal, queda todavía pendiente su reglamentación
y puesta en marcha.

Se tiene que acelerar significativamente l a privatización, s i se quiere


terminar el proceso en 1 995 y avanzar bastante más en la reforma de los sectores
productivos.

Finalmente, es necesario completar la reforma del comercio exterior


liquidando ENCI, eliminando las sobretasas arancelarias a los productos agrícolas,
las restricciones en la utilización de la leche en polvo como insumo y retirándonos
definitivamente del Grupo Andino, así como con la eliminación de las negocia­
ciones bilaterales de corte mercantilista.

1 El detalle de algunas líneas de acción específicas se presente en el anexo IX.

178
El fomento a la inversión extranjera requiere de la solución de los litigios
pendientes con inversionistas extranjeros tales como AIG-Belco y Ganso Azul.

La reforma financiera exige reducir el Banco de la Nación a su mínima


expresión y fomentar la competencia entre las instituciones financieras.

La reforma laboral precisa de un cambio en la estabilidad y la comunidad


laborales.

La reforma tributaria requiere de la cancelación de los convenios de


estabilidad tributaria del sector privado que generen monopolios o privilegios, así
como de la eliminación de todas las exoneraciones.

En lo referente a la reinserción internaciona1, es imprescindible renegociar


con el Club de París con el objeto de reducir la deuda y hacer viable nuestra situación
de pagos con el exterior; así como crear una mesa de donantes extranjeros en materia
de apoyo sociru. También se n:;quicrc cumplir las condiciones para conseguir los
desembolsos pendientes para los créditos comercial, financiero, de privatización,
agropecuario, de sa1ud, de saneamiento, de vivienda, de ajuste estructural y apoyo
social del BID y el Banco Mundial.

Se requiere renegociar la deuda externa con los antiguos países socialistas,


con ALADI, la banca comercial y los proveedores.El objetivo en este caso es
reducir significativamente la deuda externa con instrumentos de canje de deuda
por privatización, inversión, naturaleza y servicios sociales. Se requiere también
canjear deuda antigua por nueva deuda.

Con respecto al mantenimiento del Estado de Derecho, falta emprender


tareas de corto y largo plazo; en lo que se refiere a limitar constitucionalmente
al Gobierno, los esfuerzos realizados hasta ahora no son los más eficaces y hay
que considerar ya l a posibilidad de modificar los mecanismos del trabajo
constitucional. En lo concerniente al mantenimiento de la ley y el orden, poco es
lo que se ha hecho contra el narcotráfico y la corrupción.

3. RECOMENDACIO�Y RFSPONSABllJDADF.SPARA ELF1J1URO

Et nuevo rumbo ha sido trazado pero, como hemos dicho, nos encontramos
sólo a Ja mitad del camino y, para culminar exitosamente el proceso, es necesario
que cada uno de los poderes del Estado asuma una serie de responsabilidades en
los años venideros.

179
El Poder Legislativo debe demostrar autonomía, capacidad de fiscalización,
entendimiento y defensa de un programa basado en la F.conomía de
Mercado. La Constitución debe crear un marco adecuado para la limitación
de poderes del Estado y la protección de los derechos de la persona.
Finalmente, se debe continuar apoyando la aplicación del Programa
F.conómico y avanzar con las Reformas Estructurales.

El Ejecutivo no debe caer en la tentación de concentrar poder indebidamente.


Se debe buscar una mayor democratización del país. No hay que echar por
la borda lo que se avanzó en dos años y medi o para caer en las tentaciones
populistas o autoritarias.

El Poder Judicial debe mostrar su autonomía ante los otros poderes, debe
ser el líder de la moralización y el celoso guardián de la modernización del
país.

Existe la necesidad de contrarrestar la influencia de los intelectuales


des actualizados y propensos a favorecer el aumento del poder en detrimiento
de las libertades personales. Los estudiantes no tienen muchas alternativas
en nuestro restringido mundo académico y es ahí donde hay que mostrar
cuáles son los caminos de bienestar y libertad.

180
ANEXOS

l. Cuadros Estadísticos.

11. Cartas de Renuncia al Cargo de Ministro de Economía y Finanzas.

111. Cartas Cursadas por el Ministerio de Defensa.

IV. Carta del Presidente al Director Ejecutivo del FML

V. Proyecciones Macroeconómicas 1993 - 1995.

VI. Carta Abierta del Presidente de Tacama.

VII. Relación de Ministros de Economía a partir de 1930.

VIII. Indicadores de Gestión de los Ministros de Economía del Perú, 1975 - 1992.

IX. Agenda Pendiente, lineas de Acción Espec(ficas.


ANEXO I

Cuadros Estadísticos
l. CUADROS ESTADISTICOS

1. Estadísticas de Hiperinflación

PAIS INICIO DURACION · INFLACION INFLACION


··

·� PROM.MES (%) MASALTA MF.S (%

Austria Oct. 1 921 11 47 1 34

Alemania Ago. 1922 16 322 32,400

Grecia Nov. 1 943 13 365 86 millones

Hungría Mar. 1923 10 46 98

Ago. 1 945 12 1 9,800 41 ,900 billones

Polonia Ene. 1923 11 81 zn

Rusia Dic. 1 921 26 57 213

Bolivia Abr. 1 984 18 47 1 83

Perú Set. 1 988 24 53 397

Fuente: Basado en Cagan (1956), cuadro No. 1, p. 26.

2. Relación de la Emisión con la Inflación

AÑO · EMISION (CAM810.%) f • INFLAcION (%) '


1 987 11 l 1 15

1 988 439 1722

1989 1783 2776

1 990 52 1 4 7650

1991 96 1 39

1 992 62 57

Cuánto (1992).

185
3. Estadiiial de Creámiento Económico (Promedio Anual en Variación
Porcentual)

AÑOS PBI EXPORTACION INV.EXT. TERM. DE INTERCAM.


: :. .
(1) .. (2)

1 900- 04 1 .8 5.0 23.5 0.86

1 905- 09 3.0 7.3 23.5 0.85

1 9 1 0- 1 4 2.0 4.0 8.0 0.76

1 9 1 5- 1 9 9.1 1 1 .2 1 3.8 0.91

1 920- 24 3.3 6.6 4.9 0.74

1 925- 29 6.1 8.4 2.8 0.60

1 930- 34 4.7 1 .0 - 1 .3 0.59

1935- 39 3.2 0.5 -2.9 0.64

1 940- 44 4.0 -3.5 1 0.7 0.62

1 945- 49 6.4 3.7 1 0.7 0.70

1 950- 54 7.9 1 1 .4 1 1 .9 0.78

1 955- 59 3.5 7.9 1 1 .9 0.68

1 960- 64 7.4 1 7 .8 4.4 0.69

1 965- 69 3.5 2.4 4.4 0.90

1 970- 74 6.9 -4.6 4.8 1 .09

1 975- 79 1 .4 5.3 1 .05

Boloña (198 1 ) p. 70.


( 1 ) Inversión Extranjera.
(2) Ténninos de lnten:ambio.

1 86
4. Tasa de Crecimiento con Relación a las Exportaciones (Promedios
Anuales de Variación Porcentual)

AÑm PRODUCCION EXPORTACION PRODUCTIVIDAD


· nE.LAINVERSION

1 95 1 - 62 7.0 9. 1 0.292

1 963- 67 5.6 3.0 0.243

1 968- 77 3.9 1 .7 0.175

1 978- 82 2.6 5.0 0.097

1 983- 90 -2.0 0.4 -0.00 1

Banco Mundial ( 1 990) p. 1 .

S. Tasa de Desempleo para el Periodo 1980 - 91 (Porcentaje de la PEA)

AÑO . DESEMPIIEO . .. ...· SUBEMPLEO


1 980 7.1 26.0
1985 1 0. 1 42.5
1 987 4.8 34.9
1989 7.9 73.5
1990 8.3 73.1
1 99 1 5.9 78.5

Cuánto ( 1992).

187
6. Indice de Pobreza

AÑO 'INDICEPOBREZA CRITICA

1 985 103.4

1988 86.6

1 989 1 24.6

1 990 1 56.4

1 99 1 1 79.2

Cuánto ( 1 992) p. 462.

7. Tipo de Cambio

' ····
AÑO " INFLACION % • DEVALUACION' %

1985 1 58 240

1 986 63 43

1 987 1 15 1 26

1 988 1 ,722 684

1 989 2,775 1,1 18

1 990 7,639 3,750

1991 1 39 87

1 992 57 63

Cuánto ( 1992).

188
8. Tasa de Interés en Moneda Nacional

MJN (Porcentaje mensual)

PERIODO INT. PREST. INT. DEP. INFLACION


(1) (2)
Dic. 1990 1 2.5 5.1 23.7

Mar. 1 99 1 23.8 9.4 7.7

Jun. 1 99 1 1 7. 1 7.3 9.3

Set. 1 991 1 2. 1 5.6 5.6

Dic. 1 99 1 9.9 4.4 3.7

Mar. 1 992 8.0 3.4 7 .4

Jun. 1 992 7.8 3.2 3.6

Set. 1 992 7.2 3.1 2.6

Dic. 1 992 6.7 2.8 3.8

Cuánto (1 992).

(1) In1erés para Préstamos.


(2) Interés para Depósitos.

1 89
9. Tasa de Interés en Moneda Extranjera

M/E (Porcentaje anual)

PERIODO INT. PRFST. INT. DEP.


. .
(1) ·.. (2}
Ene. 1992 23.4 8.4
Mar. 1992 22.2 7.8
Jun. 1992 20.4 6.6
Set. 1992 1 8.7 6.4
Dic. 1 992 1 8.4 6.3

Cuánto (1992).

(1) Interés de Préstamos.


(2) Interés de Depósitos.

1 90
10. Relación de la Tasa de Interés entre la Moneda Nacional y la Moneda
Extranjera (Porcentaje Anualimdo)

o
opr;�,
· 1li+.:(2)7100}>
Ene. 1 991 1 0 1 .2 7.2 87.7
Mar. 1 991 1 93.9 6.7 1 75.5
Jun. 1 99 1 1 32.9 9.5 1 1 2.7
Set. 1 99 1 92.3 9.4 75.8
Dic. 1 99 1 67.7 8.5 54.5
Mar. 1991 49.4 7.8 38.6
Jun. 1 99 1 45.9 6.6 36.9
Set. 1 99 1 44.2 6.6 35.3
Dic. 1 991 42.5 6.3 34. l

Cuánto ( 1 992).

191
11. Principales Impuestos

PRESIONTRIBUTARIA (% DEL PBI)


IMPUESTOS
1992; 19'5-98

l . IGV. 2.0 7.0

2. ISC. 3.6 3.0

3. RENTA 0.9 2.0

4. PATRIMONIO Y

ACTIVOS 0.7 2.0

5. IMPORTACION L1 3.0

6. OTROS LO

1 TOTAL
1 9.3
1 17.0
1
Fuente: BCRP, MEF.

12. Banca de Fomento (al 31-12-91)

BANCO UTILIDAD . CARTERAPESADA


(llliles) (% de la cartera) .

POPULAR -1 2391 46.9

ccc. -1 2298 34.7

CAL. -6589 48.9

SURMEBAN - 1 1 29 35.0

Fuente: SBS., BCRP.

1 92
13. Principales Bancos Productivos (al 15-1-92)

BANCO CAPTACIONES POR


TRABAJAOORUS$
WIESE 300,000

MERCANTIL 230,000

CREDITO 1 88,000

LIMA 165,000

LATINO 1 35,000

CONTINENTAL 1 1 8,000

SURMEBAN . &8.()00

POPULAR 35,000

Fuente: SBS, BCRP.

14. Distribución de las Tasas de Interés y la Ganancia de los Bancos

INTERES �· DIST. �
a. Ingreso al Ahorrista 8.0 33. 1
b. Margen del Banco 2.7 1 1 .2
c . Ingreso del Fisco 5.0 20.6
. ISC. ( 15%) 3.2
. IMP. ACT. ( 1 %) 1 .5
. Contrib. SBS. (211000) 0.3

d. Costo del Encaje 8.5 35. 1

1 COSTO AL CLIENTE
1 24.2
1 100
1
Fuente: SBS, BCRP.

193
15. Tasas de Préstamos y Depósitos de Bancos Menos Solventes

BANCQS · PREST. DEPoS.


MIE MIE

POPULAR 23.0 9.0

SURMEBAN 26.5 1 0.0

ccc 26.8 1 0.0

CAL 24.0 9.0

CREDITO 2 1 .0 7.0

WIESE 20.5 8.5

INTERBANC 20.0 8.5

CONTINENTAL 1 8.0 8.5

Cuánto (1992).

16. Distribución del Margen Neto

. ,, . PUNTOS % DISTRIB.
PERSONAL l .2 44.5

GASTOS GENERALES 0.8 29.6

DEPRECIACION 0. 1 3.7

PROVISIONES 0.3 1 1. 1

VARIOS O.l 3.7

UTILIDAD 0.2 7.4

1 1 2.7
1 100.0
1
Fuente: SBS, BCRP.

194
ANEXO il

Cartas de Renuncia al Cargo de


Ministro de Economía y Finanzas
ANEXO IIA:

PRIMERA CARTA DE RENUNCIA AL CARGO


DE MINISTRO DE ECONOMIA Y FINANZAS

Lima, 1 5 de mayo de 1 99 1

Señor Ingeniero
A lberto Fujimori
Presidente de la República
Presente

Estimado señor Presidente:

Por medio de la presente, le estoy presentando la renuncia irrevocable al


cargo de Ministro de Economía y Finanzas que he venido desempeñando desde
el 1 5 de febrero del presente año.

La divergencia de opiniones y la manera cómo fue tratada en público me


resta posibilidades para el buen desempeño de mi gestión en un momento en que
la dificultad de las circunstancias exige tomar decisiones de gran dureza y coraje.
Dada esta situac ión, creo que es más conveniente retirarme del cargo y dejar
libertad para la aplicación de otras medidas que usted crea convenientes.

En el período que me he desempeñado como Ministro, creo haber contribuido


con el inicio de un nuevo esquema de reformas estructurales que constituirán los
cimientos de la nueva estructura económica del Perú que queremos cambiar y
desarroll ar. Sin embargo, la estabilización económica y el déficit fiscal son temas
de corto plazo que nos exigen decisiones inmediatas y que no se van a resolver
con el discurso político.

En este corto período de haber trabajado para el Gobierno, he buscado


siempre trabajar con dedicación, honradez y profesionalismo y ésa es la contribución
que quiero dar a mi país y a su gobierno.

Muy atentamente,

Carlos Boloña Behr


ANEXO IIB:

SEGUNDA CARTA

Lima, 20 de abril de 1992

Señor Ingeniero
Alberto Fuj imori Fujimori
Presidente de la República
Presente

De mi consideración:

Le dirijo la presente a fin de presentar a usted, señor Presidente, mi


renuncia irrevocable al cargo de Ministro en el Despacho de Economía y
Finanzas, cargo para el que tuvo usted a bien nombrarme en febrero de 1 99 1 . Las
especiales circunstancias que rodean esta decisión, me obligan a efectuar
algunas precisiones en torno al tema.

Al ser nombrado Ministro de Economía y Finanzas, iniciamos un importante


programa de modernización de la estructura económica del país, que se sustentaba
en tres pilares fundamentales que actúan de manera conjunta e indivisible: la
estabilización económica, la reinserción en el mundo económico y financiero
internacional y las Reformas Estructurales. Complementaban este programa las
acciones de apoyo en el área social, imprescindibles para compensar el esfuerzo de
la población y cuya responsabilidad se haya bajo el ámbito de la oficina del Primer
Ministro.

Los resultados obtenidos en el esfuerzo por desarrollar los tres pilares antes
mencionados, han merecido la aprobación del pueblo peruano e incluso de sectores
mayoritarios de la oposición política, así como el apoyo y los elogiosos comentarios
de los organismos internacionales y de los países amigos. En todo caso, será la historia
la que juzgue el resultado de mi gestión a cargo del Ministerio de Economía
y Finanzas.

El 5 de abril del presente año, usted señor Presidente, se dirigió a la Nación


para poner en su conocimiento la decisión de disolver el Congreso de la República
y reorganizar el Poder Judicial, el Ministerio Público, el Tribunal de Garantías
Constitucionales y la Contralorfa General de la República. El sustento de tan
importante decisión estuvo constituido por la amenaza que significaba para la
democracia y la estabilidad económica del país la acción del terrorismo; del
narcotráfico, y la de una facción política que, a través del control que ejercía sobre
algunas instituciones democráticas, pretendía desmantelar el programa de
Reformas Estructurales, mediatizar la reinserción mediante el ataque a los
grandes inversionistas extranjeros y afectar la estabilización al generar un clima
de inestabilidad jurídica.

Conociendo de manera directa la magnitud del esfuerzo desplegado por el


pueblo peruano en los últimos veinte meses, decidí continuar en el cargo a fin de
evitar, hasta donde me fuera posible, que ese esfuerzo resultara inútil e improductivo.
Para tal efecto, realicé un viaje a los Estados Unidos de Norteamérica a fin de
eval uar el impacto real que sobre el Programa Económico tiene la decisión
tomada por el Gobierno desde la perspectiva de los Organismos Multil aterales y
l os principales países cooperantes con el Perú.

Luego de haber meditado y completado la evaluación, la conclusión, señor


Presidente es lamentablemente cl ara y precisa: el Perú se ha reincorporado al
reducido conjunto de países aislados de la comunidad financiera internacional.

Es decir, señor Presidente, que la comunidad financiera internacional ha


decidido aislar al Perú hasta que la situación del orden constitucional sea
regularizada de acuerdo con la Resolución de la Organización de los Estados
Americanos. Ignoro, señor Pre<iidente, si esta situación le fue infonnada oportunamente
o si pudieron orientarse y manejarse los hechos de manera distinta a través de
los responsables de l a política exterior; pero la constatación de la situación
antes descrita, me obliga, a mi pesar, a señalar la i nviabil idad del Programa
Económico dentro del marco ya descrito. Se ha perdido la credibil idad interna­
cional, el apoyo de los países industrializados y los organismos multilaterales,
y los potenciales inversionistas extranjeros han decidido abrir un paréntesis
hasta que la situación se normalice.

En tales circunstancias y habiéndose afectado los pilares sobre los que


descansa el Programa Económico, considero, señor Presidente, que mi permanencia
en el despacho de Economía y Finanzas no tiene sustento ni justificación.

Finalmente, debo expresar mi agradecimiento por la oportunidad que me


brindó de iniciar un programa económico orientado a sentar bases sólidas para
el desarrollo de la patria como un país moderno, eficiente y adecuadamente
ubicado en un mundo interdependiente económica y financieramente, lamentando
profundamente las circunstancias que me obligan a tomar la decisión de renunciar
a la cartera de Economía y Finanzas.

Atentamente,

Carlos Boloña Behr


ANEXO IIC:
TERCERA CARTA

Lima, 4 de enero de 1 993

Señor Ingeniero
Alberto Fujimori Fuj imori
Presidente de la República
Presente

Señor Presidente:

Con fecha 30 de diciembre procedimos todos los Ministros a poner a su


disposición nuestros cargos en atención a una tradición democrática. Habiendo
transcurrido varios días en los cuales usted ha hecho referencia a la necesidad de
real izar cambios importantes en el Programa Económico sin que por otro lado se
haya procedido a una aceptación formal de m i renuncia ni a una ratificación
expresa, planteo a usted mi renuncia al cargo de Ministro de Estado en el
Despacho de Economía y Finanzas para el que fui designado el 15 de febrero de
1 99 1 .

A l alejarme del cargo creo conveniente efectuar algunas precisiones y


reflexiones sobre algunos temas, todo lo cual contribuirá al éxito del Programa
Económico en proceso de ejecución:

1) El momento más difíc i l de mi gestión se produjo el 5 de abril ya que, a pesar


de no estar de acuerdo i n icialmente con las medidas tomadas, continué en
el cargo con el objeto de mantener la viabil idad del Programa Económico
y contribuir al retorno de la institucionalidad democrática. Estos objetivos
se cumplieron a pesar de las grandes dificultades por las que atravesamos
debido al mayoritario apoyo de la población y a la comprensión y
cooperación de los organismos multilaterales.

2) Durante mi gestión, reiteradamente fui objeto de presiones de toda índole


para caer en manejos económicos, tales como: financiar el gasto público
con emisión, conceder subsidios y privilegios a sectores y agentes económicos
y utilizar las reservas internacionales para apoyar crediticiamente al sector
privado y público. Me negué rotundamente a hacerlo, recibiendo críticas
de toda clase. Las acepté y acepto porque sé que ése es el costo de transformar
radicalmente al país.

3) Una seria preocupación respecto al Perú se refiere a que siempre se


nos ha visto como una país que se queda a la "mitad del camino" en los
cambios y reformas que intenta hacer. Se toman medidas importantes de
transformación, pero no se tiene la paciencia y perseverancia para esperar
que estas medidas rindan los frutos que en otros países han producido. Han
transcurrido apenas dos años y meses desde que en el Perú se inició un
proceso de transformación para convertirnos en un país moderno y
próspero, y ya hay voces que plantean abandonar el camino del esfuerzo
y el sacrifico para retomar el del facilismo que obtiene resultados positivos
en el corto plazo y desastres económicos en el mediano plazo. Quisiera
creer que esta vez no se va a repetir esta constante.

4) Igualmente, observo que se quiere gobernar mirando las encuestas y l as


popularidades de corto plazo y utilizar con mayor frecuencia la frase "esto
no es político" para justificar por qué no se hace algo. Lamento decir que,
por estas razones, leyes de gran importancia que regía n el ámbito laboral
y de la vivienda se quedaron sin firmar el 30 de diciembre, a pesar de su
i ndudable trascendencia.

5) El seguir postergando la firma del Acuerdo de Facilidad Ampliada con el


Fondo Monetario Internacional, después de haberlo negociado durante
ocho semanas, es contraproducente para el Perú. Da una señal al exterior
y al interior de falta de perseverancia en materia de discipli na fiscal y
monetaria. Esta situación podría poner en peligro el proceso de reinserción
que, como es sabido, es la columna vertebral del Programa Económico.
Igualmente, esta demora puede ocasionar una reducción significativa en la
cuantía que los países que conforman el Grupo de Apoyo deben compro­
meter en nuestro favor.

Atentamente,

Carlos Boloña Behr

202
ANEXO ID:

Cartas Cursadas por el Ministerio de Defensa


ANEXO ilIA:

CARTAS CURSADAS POR EL MINISTERIO DE DEFENSA

Lima, 2 de octubre de 1 99 1

Oficio No. 6 1 40 - MD-H

Señor : Doctor
Carlos Boloña Behr
Ministro de Economía y Finanzas

Asunto: Reitera financiamiento de fondos para la atención de


requerimientos mínimos de Acción Inmediata

Ref. Oficio 6079-MD-I, del 27 SET 91

E s grato dirigirme a usted, señor Ministro, e n relación al asunto, para


manifestarle que con el documento de l a referencia, el Despacho a mi cargo
remitió el Presupuesto de requerimientos mínimos para Acción Inmediata; a
fin de satisfacer los requerimientos más urgentes relacionados con l a Capacidad
Operativa de las FFAA .

El mencionado presupuesto ha sido aprobado y autorizado por el Señor


Presidente de la República, sin embargo, hasta la fecha el Portafolio a su cargo
no autoriza la calendarización respectiva; originando con ello la total paralización
de las actividades i nherentes a la entrada en acción que tienen previstas las FF. AA.

Sobre el particular, señor Ministro, me permito manifestarle que de no


alcanzarse oportunamente la Capacidad Operativa mínima requerida, los hechos
que se deriven de esta extrema situación serán de entera responsabilidad histórica
de dicho Ministerio, por no tomarse en cuenta la grave situación internacional en
la que se encuentra comprometido el Territorio Nacional.

Aprovecho la oportunidad para expresarle a usted los sentimientos de mi


especial consideraci ó n y estima personal.

Dios guarde a Ud.

Jorge Torres Aciego


General de División "R"
Ministro de Defensa
ANEXO IIIB:

RESPUESTA A LA CARTA ENVIADA


POR EL MINISTRO DE DEFENSA

Oficio No. 163-9 1/EF

Señor General de División "R"


Jorge Torres Aciego
Ministro de Defensa
Presente

Asunto: Solicitud de Financiamiento de Fondos para la Atención de


Necesidades Administrativas.

Referencia:
a) Oficio No. 6079 MD-1 del 27 de setiembre de 1991
b) Oficio No. 6 140 MD-H del 2 de octubre de 1 99 1

M e dirijo a usted, señor Ministro, para dar respuesta a s u s oficios d e la


referenci a y manifestarle al respecto que ni como Ministro de Estado y mucho
menos como ci udadano peruano puedo admitir que se pretenda atribuirme la
responsabilidad histórica que usted me asigna por los hechos que pudieran
derivarse de una supuesta falta de "Capacidad Operativa de las FFAA" para
afrontar acciones i nmediatas en el campo de la Defensa Nacional, las cuales, en
todo caso, son responsabilidad compartida de todo gobierno.

No puedo pues, señor Ministro, permitir por razones de ancestro y por mi


conducta personal , que se dude o se cuestione en forma alguna mi patriotismo y
dedicación a los supremos i n tereses de la Nación.

En este sentido debo precisar a usted, señor Ministro, que los requerimien­
tos que solicita a mi Despacho con el oficio de la referencia (a), tal como se puede
apreciar en el presupuesto que adjunta, son para satisfacer esencialmente
necesidades administrativas y no preci samente operativas de las FFAA, tanto
es así que en dicho presupuesto figuran conceptos relativos a la adquisición
de materiales de escritorio, enseñanza, laboratorio, construcción, i mpresión.
fotografía, fonoteca, enseres distintivos, condecoraciones, pasajes, viáticos,
publicaciones, arrendamiento de muebles, vehículos, etc. que no son prioritarios
para el equipamiento, disponibilidad y "operatividad combativa" de l as Fuerzas
Armadas y que coinciden con los aspectos que, como ocurre en Jos demás
sectores, han sido materia de austeridad presupuesta!.

Debo, asimismo, expresar a usted, señor Ministro, que mi Despacho es


conciente de la urgente necesidad de elevar el nivel operativo de las FFAA ,
disminuido no por responsabilidad de este gobierno ni por mi Despacho. Es una
situación que se ha heredado de administraciones anteriores, como también
hemos heredado la más grave crisis económica de nuestra historia y que usted,
como Ministro de Estado y, parte del equipo de Gobierno, muy bien conoce.

Como usted conoce en su calidad de miembro del Gabinete, dada la


situación de violencia que vive el país y la profunda preocupación de mí
Despacho para que las Fuerzas Armadas estén en condiciones de afrontar con
éxito cualquier emergencia en el frente externo y cumplir con el mandato
constitucional de garantizar nuestra soberanía e integridad territorial, venimos
coordinando con los respectivos institutos lai; acciones necesarias para satisfacer
las necesidades financieras que permitan poner disponibles y operativos el
máximo de equipos de combate.

Creo si nceramente que en las actuales circunstancias, tan difíc iles y


delicadas que afrontamos, requerimos de la máxima serenidad, discreción y
responsabilidad para hacer frente y tratar de resolver cordialmente los graves
problemas que l a Patria y el señor Presidente nos han encomendado.

Por todo lo expuesto, señor Ministro, le reitero que no puedo admitir l a


entera responsabilidad histórica que usted, con mucha ligereza, pretende asignarme
y que, en todo caso, la comparte y debe compartir el Supremo Gobierno.

Dios guarde a usted,

Carlos Boloña Behr


Mini stro de Economía y Finanzas

ce: Presidente de la Repúbl ica


Presidente del Consejo de Ministros
CC.FF.AA.
Comandante General del Ejército
Comandante General de l a Marina
Comandante General de Fuerza Aérea del Perú

208
Anexo IV:

Carta del Presidente al Director Ejecutivo del FMI


ANEXO IV:

CARTA DEL PRESIDENTE AL DIRECTOR EJECUTIVO DEL FMI

Lima. 13 de diciembre de 1992

Señor
Michel Camdesus
Director Gerente
Fondo Monetario Internacional
Washington D.C.

De mi consideración:

Es grato dirigirme a usted para agradecer el apoyo del FMI a los esfuerzos
que realiza el Perú para regularizar sus atrasos y para expresarle algunas
reflexiones en torno al Proyecto de Programa Económico referente al período
1993-1995.

El objetivo fundamental de mi política gubernamental es la pacificación


del Perú. Este hecho constituye la condición básicapara reencontrar el crecimien­
to económico sostenido. Nuestro país tiene dos graves problemas sociales que lo
diferencian de muchos países de América Latina: el terrorismo y el narcotráfico.

Esfuerzos de mi gobierno han determinado la captura del 95% de los


cabecillas de los movimientos terroristas. En el combate al narcotráfico aún no
se ha registrado avances para sustituir la coca por cultivos agrícolas legales. Los
logros obtenidos en el área policial-militar contra el terrorismo deben ser
complementados con políticas económicas que hagan posible la erradicación de
la pobreza y la miseria. Ello constituye l a mejor garantía para aniquilar al
terrorismo y al narcotráfico.

En este contexto, un programa económico para encarar la particular


situación del Perú debe entenderse básicamente como un instrumento de pacifi­
cación. Ello implica consolidar la estricta política fiscal y monetaria que hemos
adoptado desde agosto de 1990 para continuar con la reducción de la inflación,
garantizar una sólida balanza de pagos y culminar el proceso de nuestra
reinserción en la comunidad financiera internacional.
Mi compromiso es con la pacificación del país y con un Programa
Económico que apunte hacia ese objetivo, particularmente cuando se trata de
políticas y metas financieras que corresponden a los próximos tres (03) años de
mi gobierno. En este marco el programa ha avanzado en términos "ad
referéndum" con el FMI, está bajo revisión y análisis por parte del Consejo de
Ministros y la Presidencia de la República.

En función a las actuales circunstancias que atraviesa nuestro país,


considero que un programa acorde con el proceso de pacificación requiere de un
programa masivo de inversiones y generación de empleo cuyos montos están
en proceso de determinación.

De otra parte, en lo que atañe a la normalización de nuestras relaciones con


el FMI es conveniente plantear que la limpieza de atrasos se real ice en un período
de tiempo similar al que tomará la refinanciación con el Banco Mundial. Tengo
l a firme convicción en que el espíritu y la voluntad de cooperación del FMI hacia
países que realizan heroicos esfuerzos para reconstruirse. se permitirá levantar
cualquier restricción legal o técnica para la consecución de tal fin.

Finalmente, en lo que concierne al acceso de recursos del FMI, por


principio, encuentro que el Programa Sucesorio debería referirse a la cuantía de
la cuota de la novena revisión, tan pronto se efectúe la regularización de los
·

atrasos.

Hago propicia l a ocasión para expresarle las seguridades de mi estima


personal.

Atentamente,

Alberto Fujimori Fujimori


Presidente de la República

ce: Ministro de Economía y Finanzas


Presidente del Banco Central de Reserva
Director alterno ante el FMI

212
ANEXO V:

Proyecciones Macroeconómicas
1993 - 1995
ANEXO V:

PROYECCIONES MACROECONOMICAS 1993 - 1995

PERU: SECTOR PUBUCO COMBINADO

(Porcentaje del PBI)


ESTIMADO PROYECTADO

1991 1 992 1993 1994 l99S


Gobjemo Q;plml
·� conicmles 'JI 8.2 V 9.4 J O.O l t.S B.O
Gasto corriente 'JI
(exduyendo Ílllel\'lS)eS -6.0 -6.9 -7.0 -6.7 -6.6
de ros cuales:
PES o.s o.s 0.6 0.S 0.4
Cllenla wnteme
(excluyendo intemes) 2.2 2.S 3.0 4.8 6.4

Ahorro *-1 resto del Sec:tm: Público


No ñnanciem 1. 1 1.2 1.0 0.7 0.4

euenm eome• 111r Sector Público


Hg FiAancielo {!:!Jduyendo j-) 3.3 3.7 4.0 s.s 6.8

lngiesos de privatización o.o 0.1 0.6 0.6 0.3


Reformas Esuuclurales o.o -0.1 -0.6 -0.6 -0.3
Gastos de capilal 31 -2.4 -3.0 -3.l -3.9 -4.7
IMficit quasi-fiscal -0.4 -0.l -0. 1 llO o.o
Déficit exclUyendo ÍDlC.l1:llm -0.S -0.6 -0.8 - 1 .6 -2.l
Intereses (devengados) 41 -3.4 -3.0 -3. 1 -3.9 4.7

Déficit doh!d -3.0 -l.S -2.9 -23 -1.8


financjamimto 3.0 2..5 2.9 2.3 1 .1

Interno -0.3 -0.1 o.o o.o o.o


Externo 3.3 2.4 2.9 2.J 1 .8

Fuente: BCRP; ME.F; 'J estimaci6n del FMI

ll Incluye el m:audo llecho a través de R>NAVI (6'1- sobre planilla)


'JI Excluye mcwsos de privati-=ién.
31 lndu'je inversi6n financiera en 1992.
41 Incluye deuda externa.
PERU: PROGRAMA DE MEDIANO PLAZO
(Ta<;a Anual de Crecimiento)

1 99 1 1 992 1993 1 994 1995

PBI Real 2.6 -3.0 3.5 4.5 5.0


Precios al Consumidor (Promedio del Período) 409.2 73. l 37.4 1 8.9 1 1 .5
Precios al Consumidor (Fin de Período)
(En Porcentaje del PBI} 1 39.2 54.4 27.0 1 5.0 9.2
l. BALANZA DE PAGOS
Billim� ® Cuenm Co!Iii:n!!: -4.6 -5.2 -6.0 -5.7 -5.5
Exportaciones Netas de Bienes
y Servicios No Financieros - 1 .9 -2.8 -3.2 -2.7 -2.4
Balanza Neta de Servicios Financieros -3.3 -2.9 -3.7 -3.8 -3.7
Otros Servicios y Transferencias 0.6 0.5 0.9 0.8 0.6

Cuenta de Capital!ls 5.6 5.9 6.4 6.0 5.7


Sector Público 3.3 2.4 2.9 2.3 1 .8
Capital Privado 2.3 3.5 3.5 3.7 3.9

Cambio en la Reservas Internacionales Netas


(Incremento ) -l.O -0.7 -0.4 ·0.3 -0.2

Il. SECTOR PUBLICO COMBINADO


Balooi.;i: ®1 Sector Públi1;2 C2m!!in¡¡s!Q -3.0 -2.5 -2.9 -2.3 - 1 .8
Ahorro del Sector Público No Financiero 0.2 0.6 0.3 1 .6 2.9
Ga<;tos de Capital 2.4 3.0 3. 1 3.9 4.7
Pérdidas del Banco Central -0.4 -0. I -0. 1

Déficit Global -3.0 2.5 2.9 2.3 1.8


Financiamiento Externo 3.3 2.4 3. 1 3.9 4.7
Financiamiento Interno -0.3 0. 1

m. AHORRO E INVERSION
� 1 6.2 1 5.6 16.2 17.5 1 8. 8
Sector Público 2.4 3.0 3.l 3.9 4.7
Sector Privado 1 3.9 1 2.6 1 3. 1 1 3.6 14.1

ÁhQIIQ 16.2 1 5.6 1 6.2 17.S 1 8. 8


Ahorro Externo 4.6 5.2 6.0 5.7 5.5
Ahorro Interno 1 1 .6 1 0.4 10.2 1 1 .8 1 3.3
Sector Público Combinado -0.6 0.5 0.2 1 .6 2.9
Sector Privado 1 2.2 9.9 1 0.0 1 0.2 1 0.4

Mm.2
Intereses del Sector Público 3.4 3.0 3.7 3.9 3.9
Superávit Primario (sector Público Combinado) 0.5 0.6 0.8 1 .6 2.1
Deuda Externa Pendiente (Como porcentaje del PBI) 42.3 43.S S L2 50.8 48. 1
Servicios de la Deuda Externa
(Porcentaje de las Exportaciones de Bienes
y Servicios No Financieros) 58.8 49.S 36.5 38.6 34.3
De los cuales: lnteres 34.3 3 1 .9 32.5 32. 1 30.9

Puente: Banco Central de Reserva y Estimados del Staff del Fondo.

216
PERU: FINANCIAMIENTO EXTERNO DEL SECTOR PUBLICO

FINANZAS PUBLICAS (RESUMEN)


(En millones de dólares)

SECTOR PUBLICO - FINANCIAMIENTO EXTERNO

1 99 1 1 992 1993 1 994 1 995

Cuenta Comente (Excluye Inrer. Deud. Públ.) -71 l - 1 1 54 - 1 036 -886 -873
Cuenta Comente -2199 -2505 -2529 -2479 -2542
Interés Deuda Públ. + cargas del FMI 1488 1351 1493 1 593 1 669

Servicios de la Deuda
Pública (Incluye Servicios del FMI) -2544 -2 1 09 -2472 -2475 -2569
Multilaterales -436 ' -401 -555 -607 -650
Bilaterales - 12 1 3 - 1 1 85 -1 322 - 1 300 - 1 333
Club de París -9 1 5 -824 -968 -985 - !039
Otros -298 -361 -354 -3 15 -294
Acreedores Privados -895 -523 -595 -568 -586

Cambios Reservas Brutas -422 -328 -323 -314 -314

Cambios e n atrasos
Multilaterales o -988 -870 o o
FMI o o -870 o o
Baneo Mundial o -988 o o o

Total de Requerimientos
Financieros -3677 -4579 -4701 -3675 -3756

Fuentes Posibles de Financiamiento 3677 4579 4701 3675 3756


Capital Privado 676 1 732 1 445 1 563 1 802
Desembolsos (no efectivos,
Comprometidos) 225 280 283 344 289
Multilaterales 57 1 14 1 14 1 86 224
Oub de París 168 166 169 158 65

217
Desembolsos Muldlatenles (en efectivo} 325 1 1 38 1 343 445 268
FMI o o 1032 1 85 208
Banco Mundial o m ISO 250 so
BID 32S lSO 161 10 10
Alivio (Reprognunado) 2081 1 2SS 1 220 1215 1 199
Multilaterates 121 o o o f}
Bilalerales 1 073 779 692 707 673
Club de París 914 556 484 520 490
Otros 1 59 223 208 1 87 1 83
Acreedores Privados 887 476 528 S08 526
Requerimientos Financieros
Adicionales 370 l74 410 108 1 98
Posible FinanciamieRto Multilaleral :no 174 o o o
Destinados a Proyect05 o 42 o o o
El'ectivo 370 1 32 o o O
Brecha Remanente o o 410 108 198

.M.cum;.
Pagos al FMI 96 22 950 87 99
Intereses 61 8 63 87 99
Principal 35 14 887 o o
Corrientes 35 14 17 o o
Atrasos o o 170 o o
Cuotas de Acceso al FMI o o 162 1 85 208

211
PDU: BALANZA DE PAGOS
(En miDones de d61anls}

1991 1992 1 993 1994 1 995

Cuenta Corriente -2 199 -2505 -2529 -2479 -2542


Balanza Comercial - 1 65 -639 -6$ -483 -378
Exportaciones 3329 3333 3466 371 1 4046
lmporrac:iones -3494 -3912 -4075 -4194 -4424
Servic. y Transf. -2034 -1866 - 1920 - 1 996 -2 1 64
Serv. No Finan. -724 -726 -704 -673 -739

Transferencias 268 283 338 312 295

Cuenta de Capilllles 1 008 1 296 858 1 08 1 1 1 91


Sector Público -8 1 6 -680 -538 -6J t
Desembolsos 205 210 213 344 289
Amonizaciones -1021 -74l -963 -882 -900
Sector Privado
(lnel. errores y
omi<iione.<i) 1 824 1579 1 538 1619 1 802

Balance Total - 1 702 - 1 209 - 1 756 - 1 454 - 1 35 1

Cambios e n l as Reservas
Netllll del BCRP V -457 -342 -J78 - 1 29 -106
Reprogramación · 537 556 484 520 490
Cambios en atrasos -3993 -317 729 695 709
Financiamiento Excepcional
(Banco Mundial, BID
y Grupo de Apoyo) 715 1 31 2 721 368 258

11 La reealendarb:ación y los diferidos reflejan el acuerdo del Club de París de setiembre de 1 99 1 .

2 1 9.
PERU : PRINCIPALF.S INDICADORF.S MONETARIOS
1 99 1 1992 1993 1 994 1 995
(Flujos valorizados a un tipo de cambio constantes: en millooes de Nuevos Soles)

l. BANCO CENTRAL DEL PERU


Reservas Internaciones Netas JJ
35 1 428 356 317 288
(U.S. dólares) (457) (342) ( 1 78) ( 1 29) ( 1 06)
Activos Domésticos Netos 19 -44.5 -38 -44
Crédito al SPNF 1 07 7 1 .9 -ll8
Crédito sistema Financiero
-56 -348. 1 -54.5 -46
Otros -3 1 -231.7 118 16.5 2
Circulante 370 384 356 279 244
Memo: Requerimientos de encaje
por depósitos en M/E -38 1 -207 -500 -554 -544

IL SISTEMA FINANCIERO
Reservas Interna Netas 1079 743.2 858 87 1 832
(U.S.dólares) ( 1480) (604) (429) (354) (306)
Activos Domésticos Netos 952 656 1 007 1 083 1010
Crédito a l SPNF -3 16 44 - 1 05
Crédito Sector Privado 1 352 1 353 1 26 1 1 191 1 1 94
Otros -84 -741 - 1 49 - 1 08 - 1 84
Obligaciones con el Sector
Privado 2031 1 399 1 865 1 954 1 842

Ill. PRINCIPALES INDICADORES


(Porcentaje del PBI)
Circulantes + Depósitos
a la vista (M I ) 1 .9 1 .9 1 .9 2.0 2. 1
(M l) + Cuasidinero 2.8 3.1 3.2 3.3 3.5
Pasivos con el Sector
Privado (M3) 6.4 9.6 10.5 10.9 1 1 .2
Crédito al Sector Privado 4.3 6.1 7.7 8.7 9.5
(Crecimiento porcentual, stocks medidos
al mismo tipo de cambio)
MI 124.7 52.9 36.0 21 .9 1 6.8
M2 163.3 54.4 35.6 27. 1 1 8.2
M3
Valorizado a u n tipo d e cambio
constante 1 50.8 3 1 .2 23.6 1 9.9 14.7
Valorizado al tipo de cambio
de fin de período 295.2 1 34.3 69.8 4 1 .3 24.0
Base Monetana 98.6 57.2 30.9 20.0 14.4
Circulante 1 35.7 59.1 34.6 20.2 14.7
Crédito al sector privado
Valorizado a un tipo
de cambio constante 1 47.7 43.4 1 8.4 1 4. 1 1 1. 1
Valorizado al� de cambio
de fin de peri o 262.6 1 05.5 45.I 26.9 15.3
De los cuales: moneda nacional 2 1 8.9 69.7 34.3 26.8 1 8. I
Memo:
Tasa de Inflación: 1 39.0 53.9 26.9 15.0 9.2

Fuente: Banco Central de Reserva y Estimados del Staff del Fondo


11 Excluye los requerimientos de reserva en U. S. dólares.

220
ANEXO VI:

Carta Abierta del Presidente de Tacama


ANEXO VI..:
CARTA ABIERTA DEL PREmDENTE DE TACAMA

Lima. 8 de febrero de 1993

Señor don
Carlos Boloña
Presente

Muy señor mío:

El 8 de enero último ha formulado usted renuncia al cargo de Ministro de


Economía y Finanzas aduciendo que el señor Presidente de la República no
aceptaba las nuevas medidas que usted proponfA_ Tal planteamiento intenta
derivar hacia el señor Presidente de la República y a su sucesor en el Ministerio
de Economía y Fmanzas, el ingeniero Jorge Carnet, la responsabilidad por la
inevitable reaparición de la inflación como consecuencia del agotamiento de su
programa.

En Carta Abierta que dirigiera el 10 de setiembre de 1991, publicada en los


diarios el 12 de dicho mes y año, a nombre de la Negociación Vitivinícola Tacama
S.A cuya presidencia ejerzo; le manifestaba mi discrepancia con el programa
.•

económico que usted había elegido, consistente en mantener a un sector privado


en pleno receso frente a un sector público sobredimensionado y asfixiado por
ineficientes empresas públicas, que finalmente causarían daño irreparable al
país. Le agregaba que el programa elegido era el más duro para las empresas y
el más doloroso para los pobres. Ambos hechos han quedado plenamente
comprobados por la realidad.

Durante los casi. dos años que las finanzas públicas han estado a su cargo,
ha mantenido usted los controles de precios y de cambios más estrictos que ha
conocido el Perú. De precios, mediante la tolerancia del contrabando que no sólo
limitaba la venta de su producción a tas empresas nacionales, abrumadas con
indefendibles impuestos al capital y a rentas fletas, que las empresas deben pagar
con cargo a su capital de trabajo, que le s impiden pagar adecuadamente
a sus trabajadores y adquirir moneda extranjera para remover su maquinaria y
mantenerse a tono con la tecnología más moderna, necesaria para la competencia
internacional. No sólo con decretos o la fueraa pública se controla el tipo de
cambio.
Ambos controles se han traducido en una recesión que pudo evitarse con
liberalizar totalmente la economía y dejar que todos los bienes y servicios buscasen
su punto de equilibrio; lo que, quienes creemos en la economía libre, sabemos que
tiene lugar de modo automático. Ahí están Alemania, Japón y Chile.

Nadajustificaba controlar la inflación tratando de volver al pasado económico,


recurriendo a la recesión. Mucho menos ir a pedir ayuda con un presupuesto
desequilibrado.

Dos caminos llevan al equilibrio presupuesta!. El primero, es el incremento


de la carga tributaria. Este sistema nunca resulta porque su rendimiento baja en
la medida en que se elevan las tasas, y porque los gravámenes son cada vez más
insensatos e incoherentes, causando los graves daños que hoy contemplamos. El
segundo, es la reducción de los gastos que siempre surte efecto inmediato. Usted
escogió el primero y, a pesar de saber que lo recaudado por i mpuestos es sagrado
porque constituye el ahorro de otros, no vaciló en dilapidarlo en pagar la frondosa
burocracia que existe en el Estado y cubrir los déficit de las empresas públicas.

A la hora undécima ha puesto en marcha una costosa y complicada


reducción burocrática y una tímida privatización que se realiza con cuenta gotas.

Ha llegado usted, inclusive, a un superávit presupuesta! que los tratadistas


de derecho administrativo y de economía consideran tan errado y dañino como
el déficit. S i fue por cálculo equivocado, malo; si fue deliberado, peor.

Ir al Fondo Monetario Internacional sin antes haber equilibrado el presu­


puesto, era una grave equivocación que puede ilustrarse con la figura de un
jugador de ruleta imaginario que puede estirar uno de sus brazos hasta llegar al
banco y pedirle dinero para incrementar sus apuestas. Ni siquiera cabe imaginar
las exigencias del banquero.

La reinserción internacional del Perú en el mundo financiero es esencial ,


por honradez y por necesidad, pero no tiene por objeto endeudarse más, sino
utilizar los nuevos préstamos para reemplazar al capital dilapidado y crear trabajo
reproductivo.

Se debió pues comenzar por una reducción drástica de los gastos y un


incremento temporal de los impuestos para atender a los que más sufrirían el
impacto del "shock".

Usted debió iniciar su gestión decidido a completar la liquidación de las


empresas públicas en un plazo máximo de seis meses, y entregarlas a quien

224
hiciera la mejor oferta por sobre cerrado. El mayor precio que se obtenga en Ja
venta de esos corruptos elefantes blancos, a través de alambicadas fórmulas
destinadas a continuar alimentando costosos burócratas que intencionalmente
postergan y alargan las privatizaciones, no justifica ese insignificante mayor
precio, dentro del descomunal costo mensual de esas empresas. En todo caso,
nunca se comparará con los sufrimientos que va a vivir el país como consecuencia
de esa política, cuya responsabilidad usted ha pretendido dejar caer sobre el señor
Presidente de la República y su sucesor en el Ministerio de Economía y Finanzas,
ingeniero Jorge Carnet. Así mismo, debió despedir sin más trámite a todos los
empleados públicos excedentes introducidos en l a administración estatal y en las
empresas públicas por el favor político de los últimos diez años, durante los cuales
se destruyeron sin escrúpulos ni consecuencias para los culpables, dos monedas.
Fondos tienen esos señores para superar un duro reajuste.

Eliminadas las empresas y los burócratas innecesarios debió proceder


luego a suprimir todos los trámites y autorizaciones burocráticas inútiles, que
encarecen el manejo de las acti vidades económicas y se traducen en coimas: y
todas las trabas laborales que dificultan el pago de adecuadas remuneraciones,
recargan el costo del manejo de los negocios y eliminan las nuevas inversiones.

Todas estas medidas hubieran traído la, por todos deseada, moralización
del país y el respeto por el derecho ajeno y por la ley. Es hecho sabido que el
socialismo es corrupción y que ésta desaparece cuando se pone fin a aquel.

Al liberar verdadera y completamente la economía se hubiese formado


automática y rápidamente una nueva estructura de precios en la que los que se
excediesen se verían obligados por el mercado a retroceder rápidamente. El
doloroso lapso del reajuste hubiese sido entonces de meses y no de años.
Alcanzado el verdadero nivel de todos los bienes y servicios, habría terminado
la especulación y se hubiese establecido con exactitud el nuevo valor de nuestro
signo monetario, poniendo así fin al carnaval financiero vivido por espacio de
diez años.

Es ilusorio creer que siendo el mundo un solo mercado económico, es dable


con medidas parciales e incompletas y manteniendo restricciones y controles,
atraer al capital nacional y extranjero. Bastantes problemas tenemos ya con el
narcotráfico y el terrorismo para conservar limitaciones y privilegios adicionales
innecesarios que hacen i nviables los negocios.

Con un presupuesto equilibrado, hubiera sido más fácil tratar con el Fondo
Monetario Internacional, los Estados Extranjeros, la Banca Comercial y los Bancos
Privados Extranjeros y hubiera obtenido usted para nuestro país mejores condiciones.

225
El país debe tener pleno conocimiento de que no son el señor Presidente
de la República, ni su sucesor en el Ministerio de Economía y Finanzas, ingeniero
Jorge Carnet, los responsables si rebrota la inflación como parece prácticamente
inevitable. Deseo que las nuevas autoridades logren evitarlo, permitiendo l a
reactivación d e l a actividad privada, única y verdadera fuente de trabajo.

Para detener la inflación no es menester terminar con el paciente. Contiene


un principio de verdad el refrán según el cual "muerto el perro se acabó la rabia",
pero no es aplicable a un país.

La comprobación de los hechos innegables que menciono, justificaron l a


carta abierta que le dirigiera y que s e completa por l a presente.

Como verá usted, no cabe tampoco la alegría de quienes celebran el fracaso


del "neoliberalismo". En el Perú no hemos abandonado la economía controlada.
Seguimos debatiéndonos entre la econometría y fórmulas esotéricas, para
hacernos creer que la economía es una ciencia oculta. Es tan sencilla como la que
desarrolla toda ordenada ama de casa.

Atentamente,

NEGOCIACION INDUSTRIAL
VITIVINICOLA TACAMA S.A.

Manuel P. Olaechea
Presidente del Directorio

226
RESPUESTA A LA CARTA DE TA CAMA

En vista de que el autor de esta carta pretende pasar por defensor del libre
mercado, sus afirmaciones deben responderse.

El Programa Económico no busca recesar al sector privado para mantener


un sector público sobredimensionado. Esa ha sido la principal causa de la
hiperinflación y no hay que confundir causas con efectos. El Programa busca
eliminar la hiperinflación, lograr los equi librios macroeconómicos y modernizar
el país mediante las Reformas Estructurales. Uno de los efectos al reducir l a
hiperinflación es l a recesión y el desempleo. Cuando se dice que e l programa
escogido es el más duro para las empresas y el más doloroso para los pobres,
nuevamente se confunde causas con efectos. Es el alza desbocada de precios l o
que más afecta a las empresas y a los pobres. Si eso n o h a quedado claro después
de 24 meses de hiperinflación quiere decir que no se ha entendido de lo que se
trata.

Se dice que en los dos últimos años se han aplicado los controles de precios
más estrictos en el Perú. Nuevamente, surge una gran confusión. Queremos
controlar la disparada de precios utilizando mecanismos de mercado y disciplina
fiscal y monetaria, así como reduciendo los aranceles para que la competencia
externa ponga tope a los incrementos de precios internos. Y en esta parte de la
carta es donde no se muestra el concepto de l ibre competencia, sino más
bien una vocación mercantilista con ropaje de "liberalismo". La reducción
arancelaria aumenta la competencia e impide el alza de precios, dando
alternativas de compra a la gente. Esto se l lama libre comercio y es uno de los
elementos de la economía de mercado.

En cuanto al contrabando, coincido en que es una competencia desleal pero


su corrección debe hacerse vía i nstrumentos de mercado (v.g. bajar aranceles al
15% y reducir el ISC de los bienes suntuarios a 1 0%) y hacer, a través de l a
interdicción, más riesgoso y menos rentable el contrabando.

Al hacer referencia a un presunto control de cambios, se dice que éste se


daría vía los impuestos al capital y a las rentas fletas. Una cosa no guarda relación
con la otra. Creo que la confusión es grande en este punto.

En materia de equilibrio presupuestal se dice que llegar a él mediante


aumento de impuestos es dañino y perjudicial comparado con una reducción del
gasto. Plantear esto para el Perú, donde la presión tributaria descendió a 5% del
PBI, es ignorar una realidad. Mantener esa presión tributaria como óptima es un
absurdo; ella debería llegar al 1 5 % del PBI. Asimismo, plantear que el superávit
fiscal es malo, también es otro prejuicio: Chile, S ingapur y Taiwán lo tienen y
no les ha traído problema alguno.

En cuanto a haber acudido al FMI sin antes equilibrar el presupuesto, se


dice que es un error. El error es más bien, no saber que para eso existe el FMI:
para colaborar en lograr los equilibrios macroeconómicos, uno de los cuales es
el fiscal. Ajustarse sin ayuda del FMI es mucho mlls duro y recesivo que hacerlo
con su ayuda.

Los países que recurren al FMI lo hacen normalmente porque están en


situación de dificultad económica grave o de bancarrota. No es una obligación
ir con el FMI, pero al ser éste un banco central de banco centrales permite obtener
recursos multilaterales o bilaterales para controlar y salir de una crisis económica.

Plantear que se debieron liquidar las empresas públicas en seis meses y


reducir el personal excedente del Gobierno en un período semejante no pasa de
ser un buen deseo. Gran Bretaña y Chile llevaron a cabo este proceso en siete años,
México en cinco, Argentina en tres y así sucesivamente. Pretender hacerlo en seis
meses muestra falta de realismo.

También se menciona que para detener la inflación no es necesario matar


al paciente. Las cosas son al revés: la inflación es la que mata al paciente.
Asimismo se plantea que es inevitable el rebrote de la inflación por causas del
agotamiento del Programa. Esto no es cierto, la inflación rebrota por incrementos
en la emisión monetaria y el programa no se agota; es duro, pero hay que
perseverar. Los que sí se agotan son los mercantilistas, que quieren volver cuanto
antes a las prácticas de los últimos 40 años. Finalmente, plantear la necesidad de
reactivar el sector privado como única fuente de trabajo es plantear que el
Gobierno reactive gastando más (y con menos i mpuestos), lo que equivale a
mayor desequilibrio, mayor emisión e inflación. ¡ Esto es volver a los tiempos de
García! Creo que deberíamos tener muy en mente lo que pasó en ese quinquenio
para no repetirlo jamás.

Atentamente,

Carlos Boloña Behr


Ministro de Economía y Finanzas

228
ANEXO VII :

Relación de Ministros de Economía a partir de 1930


ANEXO VII:

RELACION DE MINISTROS DE ECONOMIA


A PARTIR DE 1930

1 . Ing. Fernando C. Fuchs 0 1 -08- 1 930


2. Crnl. Ricardo E. Llona 25-08- 1 930
3. Dr. Manuel Augusto Olaechea 22- 1 1 -1930
4. Dr. Pedro Bustamante y Santisteban 3 1 -01 -1931
5. Dr. Gerardo Balbuena 24-02-1 93 1
6. Dr. Manuel A. Vinelli 1 1 -03- 1 9 3 1
7. Dr. Emilio L. Gómez de la Torre 23-07-193 1
8 . Ing. José G. Cateriano 08-1 2-193 1
9. Dr. Francisco R. Lanatta 29-0 1 - 1 932
1 0. Dr. Ignacio C. Brandariz 1 3-04-1 932
1 1 . Dr. Alfredo Solf y Muro 29-06- 1933
12. Sr. Benjamín Roca 25-1 1 -1933
1 3. Cml. Teófilo Iglesias Rodríguez 24-1 0-1 936
14. Sr. Benjamín Roca 28- 1 0- 1 937
1 5. Sr. Manuel Ugarteche 01 - 1 2- 1 938
1 6. Ing. David Dasso 06-04- 1 940
1 7. Sr. Julio L. East 24--08-1 942
1 8. Ing. Rómulo Ferrero 28-07- 1 945
1 9. lng. Carlos Montero Bernales 0 1 -1 0- 1 945
20. Sr. Manuel Vásquez Díaz 29--01 - 1 946
2 1 . Dr. Luis Echecopar García 1 3-01 - 1 947
22. V.A. AP Roque A. Saldías 24-02-1 948
23. Sr. Manuel B. Llosa 06--07-1948
24. Ing. Rómulo Ferrero 07-08-1 948
25. Cml. Luis Ramírez Ortíz 27-1 0- 1948
26. Gral. Emilio Pereyra Marquina 27-10-1 949
27. Sr. Andrés F. Dasso 28-07-1 950
28. Sr. Emilio Romero 0 1 -09-1 952
29. Sr. Emilio Guimoye H. 02--02-1 954
30. V.A. AP Roque A. Saldías 09- 1 2-1 955
3 1 . Sr. Juan Pardo Heeren 28-07- 1 956
32. Dr. Augusto Thorndike Galup 1 0-0 1 - 1 958
33. Dr. Luis Gall o Porras 1 0-06- 1 958
34. Sr. Pedro Beltrán Espantoso 14-03-1 959
35. Sr. Alex Zarak 26-04-1 96 1
36. Gral. Augusto Valdez Oviedo 1 7-07-1 962
37. Sr. Javier Salazar Villanueva 28-07-1 963
38. Arq. Carlos Morales Maccbiavello 1 4-09-1964
39. Sr. Sandro Mariátegui Chiappe 1 5-09-1 965
40. Sr. Tulio De Andrea Marcazzolo 08-09-1967
4 1 . Dr. Raúl Ferrero Rebagliati 29-01- 1 968
42. Gral. Francisco Morales Bermúdez C. 20-03- 1968
43. Dr. Manuel Ulloa Elías 0 1 -06-1968
44. Gral. Angel Valdivia Morriberón 03-10-1968
45. Gral. Francisco Morales Bermúdez C 03-03- 1969
46. Gral. Guillermo Marco del Pont S. 02-01 - 1 974
47. Gral. Amilcar Vargas Gavilano 1 8-07-1 974
48. Dr. Luis Barúa Castañed 02-09-1 975
49. Ing. Walter Piazza Tanguis 1 6-05- 1 975
50. Gral. Alcibiades Sáenz Barsallo 06-07- 1 977
5 1 . Dr. Javier Silva Ruete 1 5-05- 1 978
52. Dr. Manuel Ulloa Elías 28-07-1 980
53. Dr. Carlos Rodríguez Pastor Mendoza 03-01- 1983
54. Ing. José Benavides Muño 22-03-1 983
55. Dr. Guillermo Garrido Leca 29-01 - 1 984
56. Dr. Luis Alva Castro 28-07-1 985
57. Dr. Gustavo Saberbein 29-06- 1 987
58. Sr. César Robles Freyre 1 6-05- 1 988
59. Dr. Abel Salinas Eyzaguirre 02-09- 1 98 8
60 . Sr. Carlos Rivas Dávila 28- 1 1 -1 988
61. Sr. César Vásquez Bazá 1 3-05-1 989
62. Ing. Juan Carlos Hurtado Miller 28-07- 1 990
63. Dr. Carlos Boloña Behr 15-02- 1 99 1
64. Ing. Jorge Carnet Dickrnan 08-0 1 - 1 993

232
ANEXO VID:

Indicadores de Gestión de los Ministros de Economía


del Perú, 1975 - 1992
. ·---·�v ...orales Bennlldez Fernando Belallnde Teuy
GOBIERNOS 1 (1975 ( 1 97� . 1980)

l'laua. 1980)
l wall<r Alcibiades Javier Silva Manuel CAiias JOOI! Guillermo ºS
Tangult Súuz !hiele IJ!loa Ellas Rodri¡¡uez P. Beaavides M. Garri<lo Lecca �z
Periodo 1 Entrada 02.09. 197' 16.05.1977 06.07. 1977 15.05. 1 978 28.07. 1 980 03.0 1 . 1983 20.03. 1984 28.12. 1984
Salida 15.05.1977 05.07.1977 14.05.1978 27.07. 1980 01.01.1983 2 1 .03.1984 28. 1 2. 1984 27.07.1985 ��
# Meses cargo 2U u 1U 26.5 29.0 14.S 9.0 7.0

Cnicimiento del PBI (lL) Acumulado 2.5 -0.I -U 7.2 7.3 ·12.1 3.4 !.O
Prom. Meo1uaJ 0.1 -0.1 -0.1 0.3 0.2 ·0.9 0.4 0.1
lnRación (lL) Acumulado 63.2 8.2 66.8 170.9 27U 179.8 70. 1 107.1
Prom. Mcn•ual 2.3 5.4 4.5 3.8 4.7 • 7.4 6.1 1 1 .0

Y.u. del Ingreso Mf.Umo Legal Real Acumult.d<I -21.3 -7.6 -2 1 .4 50.4 ·27.1 -1 9.6 10.1 -31.2
Prom. Mensual -1.1 -5 . 1 -2.1 1.6 ·1.1 · 1 .5 1.1 ·l.2
11
·24.0 -
��
Var. dé Reinuneraciones Reales Acumu.lado n.d. n.d. n.d. n.d -20.7 0.3 19.3
del Gobíemo Otnerd í!>l Prom. Mensual n.d. n.d. n.d. n.d ·0.9 - 1 .6 o.o ·3.0

Devaluación 061ar Lib,. (lL) Acumulado 75.6 6.6 125.2 59.7 425.0 2 1 6.9 127.4 8.5 ��
7.3 1.8 5.9 8.3 9.6 1,2
Prom. Mensual 2.7 4.3

Devaluación D6lor r.tUC (ll>) Acumulado 99.9 6.3 1 40.6 74.2 424.6 llU 100.0 1 28.8 >�
l't'om. MeBSuat 3.3 4.1 1.9 2.1 5.9 6.6 8.1 12.6 �
Reservas lnternacioules Netu Entrado 431 -410 -448 1255 914 925 1 12 5 ��
(USS Millones) Salida -410 -448 ·600 im 792 925 l l 2.5 894
Plujo -841 -3 8 -152 1 85 5 -463 11 200 -231

Galón Gasolina de 84 Entradi n.d. n.d. n.d. •.d. •.d. n.d. n.d. n.d.
(1JS$ Millone•) Salidt n.d. n.d. n .d. n.d. n.d. n,d. n.d. n.d.

Y.u. Emisión Acumulado 72.9 2.8 48.2 1'8.3 167.5 182.9 297.9 '3S.8
Primiui• ('ió)
Prom. Mensual 2.6 1.8 3.S 3.6 H 7.4 16.6 4.5
��
Aprobación de su ge:sdón Entrada n.d. n.d. n.d. n.d. n.d. n.d. n.d. n.d.
��
Salida n.d. n.d. n.d. n.d. n.d. n.d. n.d. n.d. � f""
Nórncro de paquetes n.d. n.d. n. d. n.d. n.d. n.d. n,d. n.d. �


Alan Gan;!a Pérez Alberto Fujlmorl Fujlmori �


GOBIERNOS (1990 • 199S)
0985 • 1990)
Luis Alva Clulla>O a- Abel � a.. v......,. Juan C. Carlos
CalllO Sibclboin Rollles P. S.lau lll•11 D6vlll. - Hurtado M. � B. �
Periodo Enirada 28.07. 1985 30.06.1987 16.0, . 1 988 02.°'. 1988 28. 1 1 . 1 988 13.0J.1989 28.01.1 !l90 1'.02. 1 99 1
Salida 29.06. 1987 U.0,.1988 01.09. 1988 27. 1 1. 1988 12.05.1 989 27.07. 1990 14.02.1991 04.0 1 . 1 993 �
ll M...& cargo 23.0 10,, 3.5 3,, 5.5 14.5 6.5 22.5
Cftlclmie- del PBI (<¡f,) Acumulado 17.7 o.o · 1 0.3 -10.4 13.9 5.3 ·2.0 ·O.ti
Prom. Menaul 0.7 o.o ·1.4 o.o 2.2 0.4 -0.3 ·O.O

llllW:ión ('11>) Acumulado 184.6 190.8 80.6 274.5 612.6 4,323.6 142'.8 10!1.7
Prom. Men11al 4.7 10.2 34.4 15.3 38.7 3l.! 52.1 3.3 -3

Vu. del lnpto Mflllmo Legal Re.i ACllmulado 22.9 •7.7 IS.! ·19.9 50.7 11.8 850.0 89.5
Prom. Mellaul 0.9 .0.7 3.6 -6.3 ·7. 1 .0.5 41.4 2.9
Vu. de Rlmwieraciono1 Realn Acumulltdo 1:1..8 5.9 ·10.4 -38.0 ·'3.9 ·14.6 .,-,,7 ·25.l
del Cldllmlo OellOtlll
!'11>) Prom. Memul º·' ..o.s .2_5 ·ll.3 ·8.0 • l .O -12.4 ·l.l

=
Deval-11la Dólar Ubre ('11>) Acumulado 108.9 540.3 65.3 m.1 338.7 7172.7 3'4.5 196.4 t:!r.!
Prom. Monaul 3.3 18.4 13.4 27.2 27.9 3�l.8 26.2 4.9 t:!r.!
DeYllluacilla D6llr MUC (!11> Ac1111l111 l.do 32.8 108.7 o.o . 14!1 . , 262.0 2360. 1 1 150.9 196.4 n
Prom. Mmsu.i 1.2 7.0 o.o U?.5 23.9 25.7 47.5 4.9
Ro..,..u lll_.onahl• N- llalrlda !ni 790 ·3'5 ·266 .3,2 22.0 -169 725 �
(1JS$ Milloae a) Salida 790 -3'5 ·225 .352 22 · 1 '2.0 725 2001
!'llljo · 18 1 -1145 llll 86 374 ·174.0 894 1 276
o
0.1611 ClalldliDl do 84 Batnda 1.06 0.03 0.20 o.21 0.92 0.84 0.20 1.02
{US$ Ml11-sl Salida o.63 0.20 0.21 0.92 0.84 0.20 2.02 1.(17

Var. Bmili6D Priman• (<¡f,) _....., 1506.7 125.5 109.4 l8.3 276.3 1 894.0 253.4 -0.9

Prom. Memual 8.2 7.7 20.3 8.7 48.6 23.8 21.4 .o.o =
AproUol.sa de .. ac•llda Blltnda a.d. 38 18 •.d. .... 37 52 54
S&llda 52 16 ll ..... 9 41 '46
n.d. �
Ntmero de �s 6 4 1 2 3 4 2 o


ANEXO IX:

Agenda Pendiente, Líneas de Acción Específicas


ANEXO IX:

AGENDA PENDIENTE, LINEAS DE ACCION ESPECIFICAS

A pesar de la gran cantidad de leyes y normas legales que se han dado para
iniciar el proceso de Reformas Estructurales, es muchísimo todavía lo que falta
por hacer en el aspecto normativo. En primer l ugar, falta que se promulguen leyes
sumamente importantes que no fue posible dar o elaborar a diciembre de 1 992.
En segundo lugar, queda por resolver la mayor parte del ordenamiento reglamen­
tario de las leyes ya promulgadas.

Una mayor y más sostenida captación de inversión, especialmente la de


l argo plazo, no será posible si no hay confianza en l a continuidad y profundización
del Programa de Reformas, así como en el mantenimiento de los acuerdos con el
FMI, el Banco Mundial y el BID. De aquí la importancia de que el nuevo equipo
de gobierno acelere y concluya la consecución de los objetivos pendientei:.
dejando para una segunda etapa los cambios de orientación y los ajustes que sean
necesarios.

Entre los distintos sectores del Gobierno no existe el mismo grado de


compromiso con el Programa. Por esta razón corresponde a quienes quieren
continuar con la labor iniciada tomar agresivamente l a iniciativa y avanzar, para
no quedarnos a mitad del camino como tantas veces. Hay que profundizar las
Reformas hasta llegar al punto en que los retrocesos sean imposibles. La tarea
legislativa pendiente debe abarcar, por lo menos, las áreas que a continuación se
detallan:

Política Fiscal

Simplicación de la tributación vigente.


Eliminación de los impuestos de Gobierno Central y en favor de beneficiarios
directos de la contribución.
Reestructurar el impuesto a los activos.
Racionalización de l a Tributación Municipal.
Reformulación del Nuevo Código Tributario, especialmente en lo que a
sanciones se refiere.
Regularización de las situaciones de infracción tributaria, mejorando
la proporcionalidad de la sanción.
'
Unificar Tribunales Fiscal y de Aduanas, así como la Sunat y la Sunad en
una sola Superintendenci a de Contribución Fiscal.
Simplificación integral del IGV y del ISC.
Definición política sobre la fijación de tarifas públicas.
Creación del Sistema Nacional de Inversión Pública y de una Unidad de
Inversión Pública en el MEF.
Nueva Ley de Administración Fi nanciera del Estado y Reestructuración y
Fortalecimiento de la Gestión Presupuesta! y Financiera.

Sobrecostos

Limitar a cinco UIT los derechos de i nscripción de partidas en los Registros


Públicos.
Reestructurar comisiones de Conasev.
Reestructurar contribuciones a SBS.
Eliminar todo tipo de licencia., padrón o registro sectorial con excepción
del Registro Unico de Contribuyentes (RUC) y la Licencia Municipal de
Funcionamiento. Los Municipios verifican el cumplimiento de disposiciones
sectoriales.

Comercio Exterior

Eliminar dispersión arancelaria, unificando los aranceles a 15%, para


luego reducirlos al 10%.
Eliminación del ISC a la mayoría de productos en el marco de simplificación
aduanera y lucha contra el contrabando.
Reestructurar primero y eliminar después las sobretasas arancelarias para
productos del agro.
Eliminar barreras para-arancelarias (fito y zoo sanitarias) y restricciones
a la importación, como en el caso de insumos para leche evaporada.
Eliminar los beneficios de Selva y Frontera.
Compatibilizar acuerdos bilaterales de comercio que trasgredan el principio
de uniformidad arancelaria.
Eliminación de la doble tributación en las exportaciones, a través del
drawback.
Eliminación de Zonas de Tratamiento Especial.
Creación de Zonas Francas ú nicamente para fines de exportación.
Eliminar Reglamento de Equipajes.

240
Nueva Ley General de Aduanas.
Nueva Ley de Admisión Temporal.
Modificación al Régimen de Supervisión de Importaciones.

Sector Laboral

Flexibilizar legislación laboral para adecuar empleo a la producción y


remuneraciones a la productividad.
Sustituir la Comunidad Laboral por mecanismos de participación individuales
y por acuerdo entre las partes.
Reglamentos de los Decretos Legislativos 677 y 728.
Reglamento sobre descanso laboral y horarios de trabajo.
Perfeccionar legislación sindical y de huelgas, centrándola en la protección
de los derechos individuales del trabajador frente a los intereses grupales,
de la Empresa o del Sindicato.
Agilizar y modernizar legislación referida a la libre movilidad de la mano
de obra.
Precisar la aplicación de intereses legales en los casos laborales en que el
Tribunal de Trabajo los venga capitalizando en forma ilegal.
Eliminar el Fuero Administrativo Laboral derivándolo a la Justicia Común.
Sustitución del actual sistema de contribución al Fondo Nacional de
Vivienda, por un régimen de contribución individualizada (Fondo de
Vivienda, FOVI), como en el caso del S istema Privado de Pensiones, con
cuentas de capitalización.
Liberar en el largo plazo al trabajador del carácter obligatorio de las
contribuciones no fiscales (AFPs y FOVI).

Atención y Apoyo Social

Crear mecanismos de inversión en infraestructura comunal con control


directo de los pobladores.
Creación del Fondo de Inversión Comunal, para pequeñas inversiones
rurales y urbanas que incidan en empleo de mano de obra.
Mejorar mecanismos de captación y canalización de donaciones interna­
cionales a través de un nuevo estatuto para Foncodes.
Legalización de los sistemas de contribución comunal y voluntaria
actualmente existentes, tanto en asentamientos humanos como en
pequeñas comunidades rurales.
Uniformar mecanismos de subsidio directo a las áreas de extrema pobreza.

241
Descentralización y Servicios Sociales

Municipalización de servicios de atención básica de la salud (postas médicas).


Modificación al Decreto 7 1 8 y reglamento de las Organizadones de Servicios
de Salud.
Retiro del Registro Sanitario e inclusión del mismo en Indecopi.
Municipali zación de la supervisión y administración de servicios de
educación básica e inicial.
Reglamentos de Ley de participación comunal en la gestión y administración
educativa, de financiamiento Educativo y de Mejoramiento de la Calidad
Ejecutiva.
Legalización de los sistemas de seguridad vecinal y comunal (serenazgo,
rondas urbanas y campesinas).
Nuevo mecanismo registra] que permita acceso rápido, barato y cierto a
derechos de propiedad, especialmente de la vivienda.
Transferir a los Municipios locales todo tipo de trámite administrativo del
Gobierno Central que no ¡:>ueda ser elimi nado.
Nueva Ley Orgánica de .Municipalidades.
Derogatoria de la Ley de Bases de Regionalización.
Implementar Sistema Privado de Pensiones (AFPs) y eliminar el carácter
obligatorio de las contribuciones.
Crear e implementar Fondo de Vivienda (FOVI), para contribuciones
voluntarias y de capitalización individual.
Regímenes de incentivos a las inversiones en la construcción de viviendas
y de renovación urbana.
Decretos Legislativos Nrs. 696 y 709.
Reglamento de la Ley de Promoción de Saneamiento (Decreto Legislativo
Nr. 697).

Reforma del Estado

Reestructurar la administración que corresponde al Ejecutivo en cuatro


funciones básicas: Educación, Salubridad, Infraestructura y Seguridad.
Reagrupación de los ministerios, especialmente los de la producción y los
de asuntos de atención social.
Modificar el Sistema de Seguridad Social-al cual deben acceder todos los
ciudadanos, y no sólo los que tienen trabajo estable- de modo que se
fusionen los hospitales del IPSS con los del Estado.

242
Redefinir la función ministerial, convirtiendo las carteras del Ejecutivo en
entes más bien normativos, transfiriendo las tareas de ejecución y control,
cada vez más, a los organismos locales.
Desconcentrar instituciones del Estado, como base para dinamizar la provincia,
reubicando entidades que generan demanda agregada, como las Escuelas
Militares y Policiales .
Eliminar por completo la participación del Estado en actividades
empresariales.

Privatización

Liquidar empresas y vender activos de empresas que no se puedan vender.


Profu ndizar y acelerar el proceso de privatizaciones.
Convertir deuda en papeles válidos para intervenir en subasta de empresas
del Estado.

Infraestructura y Sectores de la Producción

Nombramiento de Cepris de Enapu y Corpac. Iniciar la privatización de


ambas entidades, así como la reforma de la materia legislativa respectiva.
Agilización de proyectos de carretera y otros.
Ley General de Transporte.
Reglamento de Licitación Pública, Decreto Legislativo 7 10.
Nueva Ley General de Aguas.
Modificación de la legislación del registro de tierras.
Derogatoria de la Décimo Quinta Disposición Complementaria al Decreto
Legislativo 653.
Liquidación de Enci.
Reglamento de las Leyes Generales de Pesquería y Minería.
Arrendamiento Financiero de embarcaciones pesqueras (Decreto Supremo
026-92).
Nueva Ley de Hidrocarburos.
Ley de Turismo.
Reglamento de aguas termales y reservas de eco-turismo.
Reglamento de Indecopi, limitando sus funciones al ámbito de las
restricciones estatales y regulatorias de la competencia.
Reglamento de la ley de Reestructuración empresarial.
Modificación de la ley Antimonopolio, Competencia Desleal y Propiedad
Industrial.

243
Reforma Financiera

Reestructuración del Banco de la Nación.


Reestructurar la Superintencia de Banca y Seguros.
Modificación de la Ley Orgánica del BCR.
Modificaciones a la Ley de Bancos.
Modificaciones a la Ley Orgánica de Conasev.
Reglamento de la Ley del Sistema General de Control.
Elaboración de un esquema para la capital ización del BCR.
Nuevo Marco de Endeudamiento Externo.
Fomentar mercado de capitales.
Nombramiento de Cepris para Banco Continental e Interbanc.
Promulgación del nuevo Estatuto de Cofide incluyendo modificaciones en
el marco de su nuevo papel de banca de segundo piso.
Tasa de interés de acuerdo a mercado, eliminando los sobrecostos (eliminación
del ISC, reducción del encaje o mejora de su remuneración, modificación del
impuesto a los activos) .
Reglamentar la publicación de las tasas de interés anualizadas.
Normar régimen cooperativo y de mutuales.
Eliminar cautiverio de l a Bolsa de Valores según disposición transitoria
con plazo hasta enero de 1 995.

Deuda Externa

Liberalizar la deuda privada ajena al Estado.


Legalizar mecanismos que permitan que el deudor y acreedor negocien
entre ellos, sin intervención del Estado o el BCR.
Vincular la deuda del Estado y sus empresas a los proveedores y a la banca
comercial a través de la privatización, la recompra de la deuda bajo
subasta, bonos de largo plazo, etc.
Crear mecanismos legales para que se pueda capitalizar la deuda externa
en empresas del Estado.

Orden Interno y Derechos Humanos

Ley sancionadora de alteraciones del orden público (movilizaciones no


autorizadas, etc.) con multas y detenciones efectivas de carácter disuasivo,
en lugar de los actuales sistemas de agresión física (rochabús, gases,
perdigones).
Mejorar autonomía de la Defensoría del Pueblo.

244
Establecer mecanismos regulares de coordinación con organismos de
derechos humanos.
Agregar a funciones de PromPerú la de difundir la visión externa del Perú
y de los temas de derechos humanos entre los mandos militares y policiales.
Transferir completamente funciones de seguridad ciudadana a Jos municipios
y comunidades rurales organizadas, dejando sólo las principales (investigación
de delitos, servicios especiales, etc.).
Transferir Policía de Tránsito a l a administración municipal.

Administración de Justicia

Transferir Juzgados de Paz y Primera Instancia al ámbito municipal, para


u n mejor control ciudadano.
Modificar el sistema de nombramiento y establecer ratificación periódica
de todo magistrado.
Eliminar fueros especial izados:, con excepción del M i litar.
Texto Unico Ordenado de la Ley Orgánica del Poder Judicial.
Reglamentos de Secigra-Derecho, de la Ley General de Adopción de Menores
y de l a Ley del Sistema de Registro del Estado Civil.

245
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253
El programa de Reformas Económicas iniciado en
1991 abre para el Perú las puertas a la conquista del
bienestar, al romper con más de cuatro décadas de
intervencionismo económico y político del Estado.
En Cambio de Rumbo, el principal impulsor de este
proceso, el ex ministro de Economía Carlos Boloña,
hace por primera vez una exposición integral de los
principios y líneas fundamentales sobre las que se
basó su gestión, así como de los obstáculos que tuvo
que enfrentar.

La reinserción financiera, la estabilización y la li-


beralización de los mercados se presentan aquí en
detalle. Los resultados obtenidos en ellas son eva-
luados por el autor con rigor y sin perder de vista los
objetivos que se buscaban al iniciarlas. Sin caer en el
anecdotario político, Cambio de Rumbo da cuenta
también de las múltiples resistencias que atentaron
contra el proceso de cambios y de los riesgos que
aún lo amenazan.

Carlos Boloña Behr, ministro de Economía y Fi-


nanzas del Perú entre febrero de 1991 y enero de
1993, es doctor en Economía por la Universidad de
Oxford, Inglaterra. Ha ejercido en diversas oportuni-
dades la docencia y actualmente es presidente del
Instituto de Economía de Libre Mercado, consultor
de diversos organismos internacionales y recono-
cido empresario de éxito en su país.

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