Gaia Novels

Autor│Woojoo Tokek

Traducción │Gaia Novels

 *Precaución*

Todos los eventos, lugares y nombres humanos que aparecen en la obra son ficticios.

Hay escenas de relaciones coercitivas y violentas. Tenga cuidado al comprar.

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06

- ¡Peter!
Tan pronto como se abrió la puerta, Peter cerró rápidamente el cuaderno. Jenny
entró en la habitación sudando y entrecerró los ojos.
- ¿Qué estabas escribiendo?
- Sí, tarea.

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 - ¿Qué tipo de tareas son?
Peter rió en silencio. Jenny entrecerró los ojos y preguntó: - ¿Qué es? -.
- No es realmente una tarea…. Solo estoy escribiendo.
- ¿Dices que estás escribiendo, incluso si no es una tarea?... eres realmente
increíble. Creo que voy a perder la cabeza solo por escribir la tarea. Pero,
¿qué estás escribiendo?
- Solo esto y aquello.
Peter sonrió y frunció el ceño. Se consideraba humillante decir con la propia
boca que estaba escribiendo en lugar de un diario, una simple historia.
- ¿Poesía? ¿novela?
- No importa.
- Si no es nada, muéstramelo también.
Cuando Jenny se acercó, Peter entró en pánico y escondió el cuaderno detrás de
su espalda.
- No. ¿Qué me vas a mostrar?
- ¿Por qué? Después de todo, si es un poema o una novela, está escrito para
que otros lo vean. ¿Qué tal si lo veo primero?
Las palabras de Jenny siempre tuvieron una extraña validez. Peter levantó las
orejas, preguntándose si era porque escondió el cuaderno detrás de él.
- Es como un diario, e incluso si no lo que ven otras personas, es diferente
de lo que estás escribiendo ahora, ¿no?
- Bueno…
- Te diré si está realmente bien después de verlo. En cambio, sí te parece
extraño, simplemente dejaré una nota en silencio en tu buzón y me iré.
Jenny tenía razón. Si fuese una novela o un poema, era escrito para mostrárselo
a otros. Si terminas jugando solo con tus notas, no progresarás.
- Si es raro, ¿por qué no lo pones en el buzón?
- Por supuesto, entonces
Peter le entregó mansamente la nota. Después de tomar el cuaderno, dijo Jenny
con los ojos brillantes.
- Yo también tengo algo que mostrarte.
- ¿Qué?

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 - Yo, yo, escribí una carta.
- ¿Qué carta?
- Una carta de amor para el príncipe.
Sacó un trozo de papel arrugado de su bolsillo y se lo tendió. - ¡Guau! -,
exclamó Peter.
- ¿Por qué? ¿Es demasiado romántico?
- Necesito descifrar lo que escribiste.
Jenny se rió a carcajadas y se sentó en la cama. Peter reunió su fuerza en sus
ojos y leyó con entusiasmo las letras en el papel.
- … ¿De verdad la vas a enviar así?
- ¿Por qué?
- Es demasiado explícito. Ugh, sentir el destino tan pronto como se
conocieron.
- ¿Es así? Quiero decir, realmente sentí el destino. Obviamente, el príncipe
y yo debimos haber sido amantes en una vida anterior.
- ¿Qué haces si escribes algo así en tu primera carta?
Mientras Peter lee la carta, la expresión de su rostro se vuelve más y más
llorosa.
- … ¿Por qué diablos terminas agregando que es bueno tener algunos
hijos?
- ¿No sería mejor discutir algo así con anticipación?
- No. Esto no es realmente así.
Peter negó con la cabeza.
- No puedes escribir una carta de amor como esta.
Jenny frunció los labios.
- Hablas como alguien que lo ha conocido hace mucho.
Peter señaló los libros apilados en la estantería. En ella también había alguna
que otra novela romántica.
- Está bien. Okey. Entonces, ¿qué debo escribir?
- No digas que lo amas todo el tiempo, lo que está demás, um… ¿No sería
mejor empezar de forma sencilla?
- ¿Qué?

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 - Un simplemente ¿Qué tal, hola? así.
- ¿Es aburrido? um, pero bueno, sí, pruébalo así.
Peter tomó la pluma y comenzó a escribir una nueva carta en el libro de práctica
de Jenny.
- ¿Quieres hablar sobre el día que se conocieron?
- ¡Está bien! ¡El príncipe tomó el bolígrafo que la tía Spencer me había
comprado ese día! ¡Qué agradecida estoy, escríbalo! Porque fue un
evento muy especial para mí. Estoy segura de que el príncipe también lo
recordará.
- ¿Qué pasa si no puede recordarlo?
- ¡No hay manera de que no pueda recordarlo! ¡Fue tan intenso! ¿Cómo
podría un príncipe olvidar algo tan importante?

Coger el bolígrafo de otro estudiante no parece una experiencia intensa, trató de

decir Peter. Pero los ojos de Jenny estaban tan brillantes que no podía hacerlo.
- Sólo ... ¿No sería mejor despertar un poco más la curiosidad? ¿Recuerdas
el momento en que nos conocimos? Y entonces no tendrás que
preocuparte por lo que será después.
- ¡Oh! ¡Bien! ¡Peter! ¡Eres un genio! ok, siguiente, siguiente
Los dos se sentaron uno al lado del otro y completaron la coautoría de la carta
de amor. Mientras juntaban sus cabezas y reflexionaban un rato, la madre de
Peter abrió la puerta y les entregó una limonada.
- ¿Por qué estás haciendo tanto esfuerzo?
- Es una tarea de escritura.
Peter sonrió y asintió con la cabeza.
- ¿Está bien? Cuando hayas terminado con tu tarea de escritura, ¿puedes
hacerle un mandado a tu mamá?
- Sí. ¿Qué es?
- Ve al supermercado y cómprame unas naranjas. Debería ser una o diez.
Necesito hacer mermelada, pero no hay naranjas.
- ¡Guau! ¿En serio? ¿Puedo comprarlas ahora mismo?
Peter, que ama tanto la mermelada de naranja de su madre, preguntó
emocionado.

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 - Tienes invitados.
- Oh, estará bien. Puedo volver más tarde. Escribí casi todo.
Jenny se levantó. Peter la miró con cara de pena.
- No. Puedes irte en un rato.
- Está bien. De todos modos, era hora de que me vaya a casa. En realidad,
tengo tarea de matemáticas. Es una tarea real.
Murmuró con una cara deprimida. -Anímate-, dijo Peter y le dio una palmada en
el hombro. Mientras bajaban las escaleras, los dos discutieron la carta de amor
en la que estaban trabajando como un libro conjunto.
- ¿Cuánto tiempo lleva traducir eso al coreano?
- Bueno. Si traduces una palabra, bueno, no se necesita mucho. Lo haré
pronto.
- ¿Entonces todo terminará esta noche?
- Bueno, si lo completo, ¿me comprarás algo delicioso?
- Luego, luego.
Después de que Peter recibió dinero de su madre para comprar las naranjas, los
dos se despidieron en la puerta principal.
- ¿Voy contigo?
- No. Iré solo.
- Está bien, entonces, adelante. Hasta la próxima.
- Sí, adiós.
Era una relación en la que podían verse en cualquier momento, incluso si
rompían sin hacer una cita para verse. Peter se guardó el dinero en el bolsillo y
comenzó a caminar hacia el supermercado cerca de su casa. Debido al clima
sofocante, sudaba profusamente al dar algunos pasos. Pensó que era buena idea
venir solo. Si hubiera traído a Jenny con este tipo de clima, habría sido un acto
de tortura para ella.
Después de caminar dos cuadras, Peter cambió de opinión. No importa qué tan
buena sea la mermelada, no era razonable salir en ese momento. Aun así, un
poco más lejos estaba el mercado. Cuando fue al centro comercial, se movió con
más fuerza, consolándose de que podía disfrutar del aire frío del aire
acondicionado a su antojo.

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No le gustaban los deportes. Debido a su débil corazón congénito, no podía
hacer ejercicio vigoroso, por lo que ni siquiera tuvo la oportunidad de
desarrollar sus nervios motores. Su personalidad introvertida también influyó,
por lo que no quería que lo vieran actuando torpemente frente a los demás.
Sin embargo, era un hecho que no solo el médico sino también Peter y su
familia sabían que necesitaba ejercicio regular. Al final, la madre pedía a su hijo
paseos de esta manera, muchas veces disfrazados de mandados.
Por lo general, se deja engañar por eso, pero hoy, no pudo evitar resentirse por
haber sido engañado.
- Suspiro….
En el momento en que abrió la puerta del supermercado con las manos
sudorosas y entró, respiró hondo. El aire estaba mecánicamente helado, pero se
sentía bien. Mientras escogía cuidadosamente y lentamente diez naranjas, Peter
reflexionó seriamente sobre si debería pasar el tiempo en el supermercado hasta
que se pusiera el sol.
Peter, que llevaba un rato parado junto a la puerta con unas naranjas en una
bolsa de papel marrón, no pudo soportar la mirada punzante del recepcionista,
abrió la puerta y salió.
Bueno. ¿Qué pasa con este calor? Si he podido llegar hasta aquí, también podría
irme.
Peter tomó la bolsa marrón en sus brazos y avanzó vigorosamente. Sin embargo,
ni siquiera podía caminar una sola cuadra, por lo que se sentó y se culpó a sí
mismo por su imprudencia. Sentado a la sombra, Peter esperó a que el sol se
pusiera un poco.
- Quien me vea pensará que soy un vampiro.
Peter miró sus delgados brazos blancos con venas azules. Sintió una debilidad
que no se puede comparar con otros estudiantes varones de la misma edad.
Quería ser saludable. Quería correr por el patio de recreo todo lo que quisiera,
quería viajar y quería hacer recados sin dudarlo.
Peter dejó a un lado la bolsa marrón y miró a los niños que jugaban al
baloncesto en la cancha de enfrente. Verlos sudar y moverse incluso bajo el sol
abrasador le hizo sentir aún más miserable.

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Corren como animales salvajes por el prado. ¿Cómo podían moverse jadeando
así?
Sentado en el banco, Peter miraba fijamente la cancha de baloncesto. Entonces,
de repente, un chico que era particularmente familiar entre ellos le llamó la
atención.
- Eh…
Peter se levantó de su asiento. Ni siquiera se dio cuenta de que una naranja se le
cayó a los pies.
Era un chico. En el momento en que lo reconoció, las otras personas a su
alrededor se alejaron como si estuvieran en un segundo plano. No por su gran
estatura, que es una cabeza más que otros estudiantes de su edad, pero el chico
tenía una presencia reconocible. Phillip voló entre los otros chicos, como si
quisiera demostrar el rumor de que todo el departamento de atletismo de la
escuela salivaba cuando él entraba. Incluso si fuera al club de baloncesto en
lugar de al fútbol, era una habilidad que no sería inferior.
Peter cruzó la calle como poseído por algo. El deseo de verlo de cerca lo hizo
volver bajo el sol. De pie frente a la cancha de baloncesto y la malla de alambre
que bloqueaba la acera, Peter observaba al chico jugar al baloncesto.
Peter se olvidó de lo que estaba haciendo hasta que un golpe sacudió la malla de
alambre. Sorprendido por el repentino ruido fuerte frente a su rostro, Peter gritó:
-¡Vaya!-, y se sentó en su asiento. La pelota de baloncesto golpeó la malla de
alambre y rodó hacia la cancha.
- Qué... él.
- ¿Lo conoces?
Los chicos que estaban jugando baloncesto en la cancha se volvieron hacia
Philip, señalando al pequeño niño asiático que los miraba.
Peter se encogió de hombros sorprendido mientras lo miraba como un hombre
en llamas. Si te hablara, ¿qué le dirías? Si te pregunta por qué lo miras así, ¿qué
le dirías? Dios mío, tal vez eso sea algo bueno. Su cabeza se quedó en blanco y
no pudo pensar en nada.
Si incluso hay un rumor de que es un acosador extraño, nunca más podrá volver
a poner un pie en la Asociación Coreana...
- ¿Lo conoces?
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Cuando alguien volvió a preguntar eso, Philip, que se estaba limpiando la cara
con una toalla, se encogió de hombros.
Solo ese breve gesto. Con eso, Peter se dio cuenta de que no pertenecía a su
mundo. También se dio cuenta de lo estúpido que era, inquieto por miedo a que
lo reconociera.
- ¿Estás bien?
Phillip golpea ligeramente la pelota de baloncesto en el suelo y pregunta. Peter
respondió sin rodeos que estaba bien, y empezó a recoger las naranjas que se le
habían caído al suelo al levantarse. Cada vez que tomaba una naranja y la metía
en la bolsa, Peter sentía que se le llenaban los ojos de lágrimas. Se mordió el
labio y lo soportó, sabiendo que no podría perdonarlo ni siquiera en la muerte si
derramaba lágrimas aquí.
Recogió todas las naranjas que habían caído al suelo, pero se dio cuenta de que
solo eran nueve, así que Peter miró a su alrededor.
Había una naranja al otro lado de la calle. Peter se paró al final de la acera para
cruzar la calle. Todo lo que tenía que hacer era recogerla y salir de aquí. Cuando
dio un paso para cruzar la calle, alguien lo agarró del brazo por detrás.
- ... ...!
baaaaah.
El sonido rasgado de un claxon apenas pasó frente a Peter. Corría un sudor frío.
Incluso si fuera un poco tarde, podría no estar en este mundo en este momento.
- ¿Estás bien?
Una voz amistosa vino desde atrás.
- Ah, ... Eh ...
- ¿Te caíste por culpa de la pelota? Lo siento.
Sin responder, Philip cruzó la calle y recogió una naranja que se había quedado
atrás y la devolvió. Sonrió y puso la naranja que había recogido en la bolsa.
Se terminó. Se dio la vuelta y volvió corriendo a la cancha de baloncesto como
si ni siquiera quisiera escuchar un agradecimiento.
- Yo, allá (disculpe).

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Era la primera vez en la vida que tenía tanto valor. Peter se sorprendió al ver lo
rojo que se había puesto cuando regresó a casa más tarde. Pero en ese entonces,
ese tipo de cosas era bastante bueno.
Philip miró hacia atrás. Con una malla de alambre entre ellos, los dos se miraron
a los ojos. El corazón de Peter latía como si fuera a explotar. Pensando que tenía
que ser ahora, Peter le tendió la mano.
- Vamos, come.
- ¿Sí?
- Nueve... Gracias por salvarme.
-Gracias- Peter se mordió la lengua en la boca porque las palabras no salieron
correctamente.
- No, está bien.
En el momento en que vio a Philip sonreír alegremente después de responder
eso, Peter pareció entender por qué Jenny lo llamó príncipe.
Peter le tendió en silencio la naranja que sostenía de nuevo. Se oyeron risas
sobre la cerca de alambre. Philip extendió la mano y tocó la naranja.
- ¿No puedes agarrarla?
- ... Ah.
Le tendió una naranja para comer con una malla de alambre en el medio, por lo
que era seguro para la otra persona verlo como un idiota.
Cuando Peter inclinó la cabeza y no dijo nada, Philip silbó a través de la
alambrada. Señaló con el dedo la malla de alambre perforada.
Peter tiró la naranja. La naranja, que dibujó una parábola y cruzó al otro lado de
la malla de alambre, aterrizó a salvo en la mano de Philip.
- Voy a comer bien.
Con esas palabras, volvió al mundo al que pertenecía. Peter agarró la bolsa de
naranjas y comenzó a caminar a toda prisa. El sudor goteaba por su frente y su
corazón dolía como si fuera a romperse. El sonido de un neumático desinflado
se escapó de su garganta. Pero no podía dejar de caminar.
Cuando llegó a casa, su madre se sorprendió al ver a su hijo en una ducha
sudorosa y gritó lo que estaba pasando, pero Peter entregó en silencio una bolsa
de naranjas a su madre.

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 - ¿Qué pasó? ¿Estás bien?
La madre preguntó una y otra vez con una mirada preocupada por la apariencia
inusual de su hijo. Peter simplemente negó con la cabeza.
- ¿No estás enfermo? ¿Vamos al hospital?
- Estoy bien.
- ¿Estás realmente bien? ¿No estás enfermo?
Peter sacudió la cabeza en silencio.
- ¿Estás realmente bien?
- Sí, estoy bien. Iré arriba y descansaré.
- Sí.

Su madre, que estaba sacando las naranjas de la bolsa, murmuró para sí misma,
diciendo: -Me estoy quedando sin una-. Peter, que estaba subiendo las escaleras,
escuchó esas palabras y comenzó a subir las escaleras de dos en dos como un
perseguidor. Entró a la habitación y cerró la puerta. Incluso después de
acostarse en la cama, estaba respirando con dificultad, pero su corazón
palpitante no se calmó fácilmente.
Peter se cubrió la cara con ambas manos.
Por mucho que faltara una naranja, había un sentimiento incomprensible en su
corazón. Tuvo que permanecer acostado en la cama durante mucho tiempo.

***

- ¿Es mejor venir de allá y caer así?

- Entonces el director de cámara se quejó de que el ángulo de la cámara no
salía. Primero, prueba lo que dije antes, y si no te gusta, entonces caes en
esta dirección.

Choi In-seop, que estaba escuchando la conversación entre el director y el

director de acción, les entregó con cuidado una bebida caliente.

- Oh, manager. Gracias.

- Es un poco más difícil porque solo tengo que filmar esta escena hoy.

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In-seop, que es diligente y sincero, fue bien recibido entre el personal del lugar.
Incluso los que murmuraban a sus espaldas preguntando si haría bien su trabajo
debido a su aspecto juvenil, ahora miraban su meticuloso manejo del trabajo.

- ¿Estará bien?

Choi In-seop preguntó al director.

- Estará bien, porque lo hiciste, Lee Woo-yeon dice que no puede decir que
no, y solo dice que sí.
- Aun así ... escuché que no se trata solo de montar a caballo hoy.

Lo que tenían que filmar hoy era una escena en la que Lee Woo-yeon era
alcanzado por una flecha mientras corría a caballo y caía al suelo. Le han dicho
que el caballo también debe caer, y que, en ese momento, si atas un hilo delgado
e invisible a la pata del caballo y tiras de él, caerá en el momento exacto en que
debe caer.

Sin embargo, incluso después de escuchar todas esas explicaciones, In-seop no

pudo sacudirse la ansiedad que se elevaba en el aire.

- No te preocupes. Todos los caballos están entrenados, así que puedes

pensar que actúan con precisión.

El director de acción también ayudó y alivió las preocupaciones de In-seop. In-

seop dijo: - ¿Es así? - Sacudió la cabeza con impotencia.

- ¿Por qué? ¿La compañía te amenazó con pagar incluso con tu salario si
Lee Woo-yeon se lastimaba?

Cuando el director le arrojó una espina, In-seop se sorprendió y agitó la mano.

- No. El presidente no es en absoluto alguien que te amenace así. Ya que es

una persona muy agradable, sinceramente ...
- Ja, ja, ja, ja, ja. Es broma, ¿por qué estás en negación tan seriamente?
- ¿Realmente no estás siendo amenazado?

Lee Woo-yeon colocó su mano sobre la cabeza de In-seop, quien no estaba

seguro de qué hacer entre los dos directores.

- No intimides demasiado a nuestro representante.

- ¿Qué estamos atormentando?

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 - Estás bromeando.
- Parece estar sufriendo.

Lee Woo-yeon mueve su rostro de atrás hacia adelante para observar la

expresión de In-seop. Choi In-seop se puso pálido y se endureció como un
humano incluso si un monstruo se acercaba a la punta de su nariz.

Lee Woo-yeon sonrió y le dio una palmada en el hombro.

- Voy a escuchar la descripción de la escena una vez más.

In-seop miró el perfil de Lee Woo-yeon mientras escuchaba las instrucciones

del director y lo robó con sus ojos. Después de hablar con el director, Lee Woo-
yeon encontró a In-seop así y sonrió.

- ¿Qué?
- Ah, ... ¿Estás bien?
- Hiciste esa pregunta hace diez minutos, y la responderé de nuevo, estoy
bien.

Woo-yeon Lee respondió mostrando su mano vendada frente a In-seop. Lo

siento por el personal y otros actores, pero In-seop en realidad quería que se
retrasara el rodaje de Lee Woo-yeon para hoy.

- El representante me dijo que no me excediera.

In-seop finalmente trató de vender al buen CEO Kim. Lee Woo-yeon asintió
como si lo supiera. Sin embargo, no hubo respuesta, como retrasar el rodaje.

Al verlo montar a caballo con el equipo de rodaje, In-seop suspiró.

- ¿Por qué estás tan preocupado? un chico tan joven.

El director, que estaba comprobando el ángulo de la cámara, lanzó la palabra.

- Solo estoy preocupado.

In-seop se rió débilmente.

- Si alguien te ve así, pensará que eres una mujer preocupada por la dama
que fue al campo de batalla.

Aunque no sabía el significado exacto de las palabras Nang-gun y esposa, In-

seop sacudió la cabeza ante la idea de negarlo.

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 - Así no.
- Sí, eso parece, Ja, ja, ja. De todos modos, no se preocupe demasiado. Un
actor que tiene tanta confianza en el autocontrol como Lee Woo-yeon no
suele salir lastimado.

Cuando incluso el director dijo eso, la ansiedad de In-seop disminuyó un poco.

El director se fue a comprobar la ubicación de la cámara.

Sentado en el tocón de un árbol, In-seop respiró hondo con las yemas de sus
dedos congelados, rezando para que Lee Woo-yeon terminara la filmación de
hoy de manera segura.

***

- Ven rápido, rápido, rápido.

- ¿Qué diablos pasó?
- No lo sé exactamente. Conduce rápido.

El CEO Kim, quien fue contactado mientras bebía, llamó al gerente Cha y le
gritó que tenía que ir al hospital de inmediato. El gerente Cha, que salió
corriendo sin dormir, todavía no podía decidir cuál era la situación.

- Entonces, ¿Lee Woo-yeon se lastimó de nuevo?

Recordando el recuerdo de recibir una llamada de In-seop el día anterior cuando

Lee Woo-yeon se había lesionado la mano, preguntó el gerente Cha.

- No, quiero decir, Lee Woo-yeon también resultó herido, pero tiene
moretones y esta vez In-seop está lesionado.
- ¿Qué? Acaso se turnan, ¿eh?
- Ah, de verdad. Es inquietante la cantidad de veces que se ha hecho esto.

El CEO Kim chasqueó la lengua nerviosamente. Todavía estaba ocupado con la

revisión de la lista, pero debido a Woo-Yeon Lee, pensó que en estos días se
había vuelto más común en estos días.

- ¿Está bien In-seop?

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 - No lo sé. Lee Woo-yeon estaba enojado y colgó el teléfono, así que ni
siquiera pude preguntar.
- ¿Woo-Yeon Lee está enojado?

El gerente Cha que conducía se sorprendió y preguntó. Aunque Lee Woo-yeon

tiene mal genio, nunca se ha enfadado con el CEO Kim. Nunca había visto el
gerente Cha una escena en la que estuviera tan abiertamente enojado. Ha pasado
por muchas risas y rasguños en el interior de la gente.

- Por lo tanto. Estaba tan brutalmente enojado que ni siquiera pregunté en

detalle y colgué.
- ¿Qué dijo?
- Ven al hospital rápidamente. y… dice que va a matar al manager de Kang
Young-mo.
- … ¿Qué tal si sacamos a Lee Woo-yeon del drama ahora? ¿No sería
mejor maldecir un poco ahora y planificar el futuro en lugar de tener un
accidente?

El gerente Cha emitió su opinión con cautela. El CEO Kim, que estaba sentado
en el asiento trasero, cerró firmemente los labios y sacudió la cabeza.

- Ahora mismo se está revisando para incluirlo en la lista, por lo que, si

sucede algo así, es fatal, de ninguna manera. Ah, de verdad. Logré evitar
el accidente de la última vez, pero ahora, ¿cómo vas a hacer esto de
nuevo? De todos modos, en este momento, los reporteros estarán
encendiendo las luces para ver si hay algo que pueda caer sobre Lee
Woo-yeon.
- ¿La reportera Kim Hae-shin?
- Okey. Me equivoqué mucho. Después de todo, el peor de los niños ha
mordido a Lee Woo-yeon.

Después de ese día, Lee Woo-yeon rechazó todas las entrevistas con Kim Hae-
shin, aparentemente encendiendo su deseo de ganar.

El CEO Kim, que tenía el ceño fruncido en la frente, dijo: -Es un poco extraño
decir esto-, dijo.

- ¿De qué estás hablando?

- Choi In-seop, el chico es agradable, pero ¿por qué no crees que Lee Woo-
yeon y él no combinan?

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 - ¿Hace cuánto tiempo, no dijiste que firmaste un contrato por el resto de tu
vida?
- Esta es la tercera vez que Lee Woo-yeon se lesiona desde que entró. Hace
un buen trabajo y es amable, um... De todos modos, después de que entró,
siguen ocurriendo accidentes alrededor de Lee Woo-yeon, así que es una
mala idea. Después de que lo dije, lo siento mucho por In-seop.
- Si sabes que lo sientes, sé amable con In-seop. ¿Sabes lo sincero que es?
Es un niño que sale temprano en la mañana, prepara el desayuno, prepara
el café y sale todos los días para consultar el horario de Lee Woo-yeon.

A los ojos del gerente Cha, que había sido mánager en el campo, In-seop Choi
era el mejor mánager que conocía.

- ¿Quién sabe? Es solo que después de que In-seop se convirtió en

manager, Lee Woo-yeon a menudo tiene accidentes. … ¿Sería bueno?
- Es como cuando las personas que van a la iglesia y rezan todas las
semanas son muy buenas.
- Lo digo porque es frustrante, ah. De Verdad.

Al escuchar al CEO Kim refunfuñar, el gerente Cha pisó el acelerador.

***

- Oh….

Lee Woo-yeon levantó la cabeza al escuchar que alguien lo llamaba. Era una de
las enfermeras que había visto antes en este lugar.

- Si te parece bien, ¿podrías firmarlo por mí? Porque soy una verdadera
fan.

Lee Woo-yeon, que estaba apoyado en la cama con la barbilla apoyada en el

mentón, causó una leve impresión. Normalmente habría sonreído y firmado
algunos autógrafos, pero ahora no se sentía así.

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 - Lo siento. Lo haré más tarde.

Ni siquiera respondió amablemente.

- Espera, entonces, incluso una foto ...

- ... ...

Mierda, se ha convertido en enfermera, y ¿está diciendo cosas así en esta

situación?

Lee Woo-yeon miró la cara del oponente durante mucho tiempo y luego volvió
la cabeza. Al final, la enfermera, que había estado esperando un tiempo, no
pudo superar su vergüenza y regresó a su asiento.

Lee Woo-yeon miró el rostro del manager, acostado en la cama. Ver las
cicatrices por todo el puente de la nariz y las mejillas le hizo sentir muy mal.

Se sintió extraño cuando escuchó sobre el manager que previamente había

saltado al agua helada para rescatarlo del lago. Fue porque no entendía la
situación en sí misma de arriesgar su vida por otros. Además, era claramente
una situación en la que creía que Choi In-seop lo odiaba. Fue él quien se sintió
extraño por su comportamiento inconsistente, por lo que decidió mantener a In-
seop a su lado y vigilarlo.

Pero hoy, sucedió otra situación que Woo-yeon Lee no podía entender. Hubo un
accidente donde se cortaron las riendas en una escena en la que el actor tenía
que caerse cuando corría a caballo. Justo antes de que la pata del caballo tocara
el suelo, se cortaron las riendas y, en un instante, Lee Woo-yeon perdió su
centro de gravedad. Cuando Lee Woo-yeon cayó al suelo, la gente a su
alrededor gritó.

Desde entonces, el caballo ha perdido la compostura. No importa qué tan bien

entrenados estén, los caballos son básicamente animales tímidos. Para empeorar
las cosas, el caballo de Kang Young-mo, que lo seguía por detrás, pasó justo
frente a él sin disminuir la velocidad, por lo que el caballo de Woo-yeon entró
en pánico y comenzó a luchar.

Los pies de Lee Woo-yeon estaban atrapados en los estribos, por lo que no pudo
levantarse de inmediato. Las herraduras que se envolvieron a propósito
alrededor de los tobillos con tela para asegurarlos y que pudieran montar a
caballo de manera estable no ayudaron en este momento. No se soltaron por

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mucha fuerza que se aplicará. El caballo estaba tan emocionado que nadie se
apresuró a correr. Cuando Lee Woo-yeon se levantó e intentó sacar el pie, sintió
un fuerte dolor cerca del hombro. No podía moverse tanto como quería,
probablemente porque su hombro tocó primero al caballo y se dislocó al caer.

En ese momento, Lee Woo-yeon vio el rostro blanco de Choi In-seop corriendo
hacia él. Al ver a Choi In-seop, que estaba muy asustado, alcanzando un estribo
que colgaba de un caballo que corría salvajemente, pensó Lee Woo-yeon.

¿Me salvaste mientras temblabas así antes? ¿Con una cara tan asustada? ¿Dijiste
que me salvaste haciendo esa cosa patética?

'¡Vete!'

Lee Woo-yeon gritó así. Sin embargo, In-seop agarró el estribo con sus manos
temblorosas y se arrastró fuera de los pies de Lee Woo-yeon. Sin embargo,
cuando In-seop se acercó, se asustó aún más el caballo y se asustó aún más y
corrió hacia Lee Woo-yeon, balanceando sus patas delanteras. Lee Woo-yeon
cerró los ojos e inclinó la cabeza. Sin embargo, no fueron las patas del caballo
las que lo golpearon, sino el esbelto cuerpo de Choi In-seop. Luego, junto con
un chasquido, se sintió una fuerte sensación de peso. Al escuchar el grito de In-
seop, Lee Woo-yeon extendió la mano y abrazó su cuerpo, apenas rodando
hacia un lado.

El cuidador de los caballos escuchó la noticia y corrió a calmar la situación. Sin

embargo, extrañamente, las palabras no pudieron calmar la emoción fácilmente
y se volvieron locos durante mucho tiempo. Después de ver a algunos miembros
del personal apresurarse y sacar a duras penas al caballo, Lee Woo-yeon
comprobó que Choi In-seop yacía debajo de él.

'¿Está bien? ¿Está herido?'

In-seop, aterrorizado, se agachó y tembló, incapaz de responder correctamente.

Se sentía tan lamentable y miserable que era difícil mantener los ojos abiertos.
Lee Woo-yeon sostuvo a In-seop por el hombro, conteniendo su enojo por el
motivo de su intervención. Mientras trataba de sostenerlo y levantarlo, In-seop
gritó y rompió a llorar. Fue al mismo tiempo que un fuego se extendió en la
cabeza de Lee Woo-yeon, quien descubrió que los dos dedos de In-seop estaban
torcidos en una forma extraña.

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Lee Woo-yeon le gritó al personal que preparara un automóvil y encontraran el
hospital más cercano. Pensó que era una reacción desagradable, pero no pudo
contener su ira en ese momento. No, ni siquiera pensó en eso. El único
pensamiento era que Choi In-seop, que temblaba con lágrimas en sus brazos,
debía ser llevado al hospital de inmediato.

'Está bien. Estarás bien, no te preocupes.

Dijo Lee Woo-yeon envolviendo una manta alrededor del cuerpo de Choi In-
seop. Quizás entendiendo sus palabras, In-seop asintió levemente con la cabeza
mientras las lágrimas caían.

El director corrió hacia él y le preguntó si estaba bien. Lee Woo-yeon respondió

que iría al hospital, por lo que la filmación tuvo que retrasarse y él se subió al
auto.

Mientras conducía, trató de consolar a Choi In-seop para que no llorara y se

preguntó por qué estaba tan enojado, pero no pudo encontrar una respuesta. Al
final, Choi In-seop vomitó y se desmayó, y Lee Woo-yeon le gritó al personal
que estaba vigilando la señal, ¿qué diablos estás haciendo?

Fue Lee Woo-yeon quien llevó a Choi In-seop a la sala de emergencias. Cuando
Lee Woo-yeon apareció repentinamente en la sala de emergencias, los médicos
y enfermeras, así como los pacientes, se sorprendieron.

Sin embargo, nada de eso llegó a los ojos de Lee Woo-yeon. Se quedó sin
expresión con los brazos cruzados al lado de Choi In-seop hasta que escuchó del
médico que no tenía más problemas que un hueso roto y que se desmayó porque
estaba muy conmocionado.

Después de confirmar que In-seop estaba dormido, Lee Woo-yeon le dijo con
calma al personal que lo había acompañado al hospital que estaba bien regresar
porque mantendría su asiento. Cuando recibió una llamada del director, le dijo
que no se preocupara que estaría bien. Descubrió que en realidad no pasó nada.

Aun así, no se sentía mejor. Parecía que esta ira enloquecedora tenía que ser
aliviada retorciendo y matando cada rama de la palabra en este momento.

Fue entonces cuando Kang Young-mo llamó.

20
 ‘¿Cómo te lastimas así? ¿Está bien el manager? Realmente, no hubo suerte.
¿Cómo pudo ocurrir un accidente así? Si quieres, no me importa si te vas ahora,
pero todos están preocupados, así que mejórate pronto y nos vemos en el set’.

Lee Woo-yeon dijo: -No te preocupes- y colgó el teléfono. Como a propósito,

cuando le vino a la mente el rostro de Kang Young-mo, que apenas pasaba
frente a él, las maldiciones se elevaron.

Lee Woo-yeon llamó al CEO Kim para que viniera aquí de inmediato. Después
de terminar la llamada, fue a la sala de emergencias y Lee Woo-yeon se sentó
junto a la cama de Choi In-seop.

Le dieron una droga mezclada con sedantes y analgésicos, e In-seop no se

despertó ni una sola vez cuando cayó en un sueño profundo. Para ver si este
cachorro está realmente vivo, Lee Woo-yeon incluso puso su dedo debajo de la
nariz de In-seop.

Un par de horas más tarde, el CEO Kim y el gerente Cha entraron corriendo en
la sala de emergencias.

- ¿Estamos buscando al paciente Lee Woo-yeon?

- Lee Woo-yeon está allí ...

Una enfermera señaló al hombre sentado junto a la cama en la esquina.

- ¡Una coincidencia! ¿estás bien? ¿Estás herido?

El CEO Kim se le acercó y le preguntó.

- Esto es más un problema que yo.

Lee Woo-yeon miró al manager que yacía allí y respondió.

- ¿Cómo pasó esto? ¿In-seop está bien? ¿Se ha hecho mucho daño? ¿Se ha
roto algún hueso?

Debido al CEO Kim, que constantemente hace preguntas, la enfermera incluso

le advirtió que se fuera, diciendo que solo debería haber un tutor.

- Saldré y te lo diré.
- Me quedaré aquí.

El gerente Cha acercó una silla y se sentó. Lee Woo-yeon y Kim salieron de la
sala de emergencias y se dirigieron a un lugar poco común dentro del hospital.

21
 - ¿Cómo fue?
- Hubo una escena en la que estaba montando a caballo y me caí.
- ¿Quién? ¿In-seop?
- No, fui yo.
- ... ...

El CEO Kim miró el rostro de Lee Woo-yeon con una mirada de incredulidad.
Es porque Lee Woo-yeon, a quien conoce, es lo suficientemente atlético como
para ser considerado un deportista completo.

- Se me soltó una de las riendas porque la martingala estaba suelta. El

caballo de repente se vuelve loco. Maldita sea, hay todo tipo de mierda
como esta.

Tal vez solo pensar en la situación lo enojó, Lee Woo-yeon soltó un lenguaje
abusivo mezclado con irritación. El CEO Kim rápidamente miró a su alrededor
e hizo un gesto de silencio. Era raro que Lee Woo-yeon expresara honestamente
emociones negativas de esta manera.

- ¿Pero por qué In-seop resultó herido?

- Me caí boca abajo y me enganché en el estribo y fui arrastrado.
- ... ...

Solo entonces el CEO Kim descubrió que los hombros y la espalda de Lee
Woo-yeon se habían ensuciado con tierra. Antes de sorprenderse de la pulcra
personalidad de Woo-yeon, este reveló un hecho aún más sorprendente.

- Ese bastardo me salvó y se apresuró a buscar esto, ah.

- ¿Qué clase de bastardo es ese? el manager.
- Lo corregiré. Un manager estúpido.
- … ¿Pero In-seop intervino para salvarte? ¿Además?
- Sí.

Mientras respondía, Lee Woo-yeon chasqueó la lengua como si fuera aterrador.

Al verlo perder los estribos y enojarse, el CEO Kim frunció el ceño por un
momento.

- Has estado escondiendo bien tu vida hasta ahora, pero es solo un

momento en el que se revela tu sucia personalidad. Cuando te veo en
estos días, pienso más de esa manera.

22
 - Incluso si se revela, se revelará después de la OPI 1, así que no se
preocupe por eso.

Se sintió como si le hubieran leído la cabeza, por lo que el CEO Kim tosió un
par de veces antes de girar la cabeza.

- Es un poco de broma esta situación, pero ... ¿despedirás a In-seop?

- ¿Sí?
- Bueno, le dije al gerente Cha antes, pero es un buen hijo, pero parece que
siguen sucediendo cosas desafortunadas y solo ocurren accidentes.

La voz del CEO Kim se hizo cada vez más pequeña. Lee Woo-yeon lo miraba
con ojos fríos y no tuvo más remedio que desdibujar el final de sus palabras.

- Vaya, presidente, yo no lo veía así, pero la gente es lo peor.

Lee Woo-yeon puso los ojos en blanco y sonrió.

- ¿Qué?
- ¿Ese sonido sale cuando alguien está acostado?
- No, me refiero…
- Es realmente malo, es lo peor.

No terminó ahí. Lee Woo-yeon se rió una y otra vez y derramó veneno sobre el
CEO Kim.

- ¿Qué despida a In-seop, mi salvavidas? No tienes suerte. ¿No es el Sr.

Choi In-seop quien tiene mala suerte? Por mi culpa, he estado al borde de
la muerte dos veces.

En respuesta al tema de llamar estúpido al manager que acababa de saltar para

salvarlo, sin dudarlo, Lee Woo-yeon se mordió los dientes y regañó al CEO
Kim.

- Hey, hombre, vale. Sólo lo he dicho una vez.

- Si quieres despedirlo, tienes que despedirme. Tengo mucha mala suerte
estos días. ¿No es así?
- Oye, Lee Woo-yeon, ¿por qué eres así? ¿Realmente te haría enojar si
despido a In-seop Choi? ¿Porque te gusta esto?

1
Oferta pública inicial.

23
Cuando el CEO Kim hizo una pregunta con una cara seria, Woo-yeon Lee
respondió con una voz dulce como si confesara el amor con una bonita sonrisa.

- Me siento como una mierda, ahora.

- ... ...
- He sido así desde que era pequeño. Cuando me desperté en medio de la
noche y escuché el zumbido de un mosquito en mi oído, nunca volví a
dormir hasta que atrapé al mosquito. Incluso si hay un límite para
permanecer despierto toda la noche. Descubrí que deshacerme de todo lo
que me molestaba era lo más inteligente que podía hacer.
- Oye, esa es tu personalidad…. vale.
- Hay algo que realmente me quita los nervios en este momento, y tengo
curiosidad por deshacerme de eso, y no es cómodo tenerlo al lado, okey.

Antes incluso de preguntar qué quería decir, Lee Woo-yeon fingió sonreír.

- Así que, yo tomó las decisiones con respecto al Sr. In-seop, CEO.
¿Sabías?

Si decía que no sabía, pensaba que algún día lo golpearían con un ladrillo o un
cuchillo mientras caminaba por la calle, por lo que el CEO Kim asintió con la
cabeza.

- De acuerdo, ... ¿Pero estás bien? Dijo que se había caído del caballo.

El CEO Kim miró cuidadosamente alrededor del cuerpo de Lee Woo-yeon.

- Creo que mi hombro está dislocado.

- ¿Qué? ¿Hombro? ¿Pero por qué estás haciendo esto sin tratamiento?
- Me olvidé.
- Hay algo más que olvidar, ah, de verdad. Ve a hacerte una radiografía y
hazte un tratamiento. ¡¿Estás loco?! ¡Tú!

Lee Woo-yeon se levantó de su asiento y respondió.

- ¿El CEO todavía piensa que estoy cuerdo?

- ... ...
- Es una broma.

24
Al mirar la suave sonrisa de Lee Woo-yeon, el CEO Kim pensó que, si no
hubiera visto esa escena en ese entonces, se habría engañado hasta ahora. Al
sentir el peso de la verdad, el CEO Kim negó con la cabeza temblorosa.

Afortunadamente, los ligamentos del hombro de Lee Woo-yeon estaban

ligeramente estirados, por lo que le dijeron que estaría bien si descansaba un
rato. El problema fue que Lee Woo-yeon no pudo tomarse un descanso por un
tiempo.

- ¿Qué vas a hacer?

Choi In-seop estaba dormido en la cama y Lee Woo-yeon se sentó en la cama

junto a él. El gerente Cha y el CEO Kim permanecieron en la sala de
emergencias con el pretexto de ser los guardianes de cada uno de ellos.

- ¿Cómo estás?
- Está filmando. Creo que tendré que ajustar mi horario por el momento.
- No es suficiente tomar fotografías toda la noche.
- ... ...
- Es mejor si le pone un poco de pasta y lo cocina al vapor.
- Sin embargo, los ligamentos se estiraron...
- No hay porque exagerar.

Ante la decisiva respuesta de Lee Woo-yeon, el CEO Kim asintió sin decir
nada. Entonces sonó el teléfono. Lee Woo-yeon sacó su teléfono de su bolsillo,
verificó su nombre y respondió la llamada de inmediato.

Luego, una enfermera cercana le pidió cortésmente que saliera de la sala de

emergencias porque no podía contestar el teléfono.

- Lo siento. Es una llamada urgente, así que solo será un momento.

- El uso del teléfono en la sala de emergencias está prohibido porque los
teléfonos celulares pueden dañar los dispositivos a través de las ondas de
radio, por lo tanto….

Lee Woo-yeon dijo: -Ah-, se agarró el hombro con una mano y fingió apoyarse
en la cama. Sin saberlo, la enfermera le tendió la mano y le apoyó con esa
expresión de tristeza.

- ¿Estás bien?

25
 - Lo siento. Me duele el hombro. Me han dado analgésicos, pero el efecto
no parece funcionar todavía. Saldré y hablaré por teléfono.

Cuando Lee Woo-yeon murmuró eso con una cara solitaria, la enfermera que
sostiene el historial pensó por un momento y luego comenzó a correr la cortina
instalada en la cama. Después de crear un espacio independiente cubriendo
todos los lados con una cortina, la enfermera sonrió y desapareció, diciendo que
debería estar terminado pronto.

Al ver a Woo-yeon Lee sonriendo amablemente y sosteniendo su teléfono junto

a su oreja, el CEO Kim y el gerente Cha patearon sus lenguas con caras que no
podían ver.

- Lo siento, es el hospital. Sí, ¿lo sabías?

Lee Woo-yeon, que sostenía el teléfono, respondió en voz baja, sí, sí, sí. Luego,
al darse cuenta de lo que no le gustaba, cambió la mano que sostenía el teléfono
y frunció el ceño a la vez.

- No depende de mí. Sí, asegúrese de mantenerlo dentro de una semana.

Está bien, gracias.

Cuando Lee Woo-yeon sonrió y colgó el teléfono, el CEO Kim preguntó.

- ¿Quién era?
- Es un conocido de alguien que conocí en Estados Unidos. Había algo que
pedí, y casi se ha resuelto.
- ¿Qué estás pidiendo? ¿A qué estás aferrándote?

Lee Woo-yeon puso su cuerpo en la cama y respondió con indiferencia.

- Son chinos-coreanos. Estaba tratando de mantenerlo bajo control.

- ¿Qué? ¿Los encontraste?

Lee Woo-yeon se llevó un dedo a los labios y fingió sisear y bajar la voz. El
CEO Kim bajó la voz con una señal de disgusto y nuevamente hizo preguntas
una tras otra.

- ¿Cómo los encontraste? Ni siquiera la policía pudo encontrarlos.

- No pudieron encontrarlos porque es la policía. Puedo encontrarlos a todos
si me lo propongo. Mientras las personas estén vivas, seguirán dejando
huellas.

26
 - Entonces, ¿lo denunciaste a la policía?
- ¿Por qué lo informaría?

Lee Woo-yeon abre los ojos y hace una mueca preguntando qué significa eso.

- Entonces deberías denunciarlo a la policía. ¿Qué vas a hacer?

- Tienes que enterrarlo.
- ... ...
- ... ...
- Creo que Corea tiene muchas montañas. Cuando estaba filmando en el
campo y subiendo, había una montaña por donde miraba. Creo que Corea
se llama Geumsugangsan2 porque hay muchas montañas.

Mientras Lee Woo-yeon hablaba con una sonrisa feliz, un escalofrío recorrió la
espalda de los dos hombres.

- ... Lee Woo-yeon, ¿sabes que enterrar gente en las montañas es un

crimen?
- Lo sé.
- ... ...
- ... ...

Después de un silencio sutil, el CEO Kim se humedece los labios secos con la
lengua y abrió la boca con dificultad.

- ¿Entonces eso significa que vamos a encontrar a esos chinos-coreanos

ahora y enterrarlos en la montaña? ¿Estás hablando así?

Lee Woo-yeon dijo que sí y sonrió como un niño. El CEO Kim dijo: -Me alegro
de que esta sea la sala de emergencias de un hospital, no me moriré, aunque me
desplome a gusto-. Luego agarró la parte posterior de su cuello.

- Ahí, que casualidad. ¿La gente no se puede enterrar?

El gerente Cha, que no lo había visto, ayudó con unas palabras. Lee Woo-yeon
dijo: -Lo sé- y agregó algunas palabras, pensando que no era suficiente.

- No es ilegal golpear a una persona por la espalda y arrojarla a un lago.

Los rostros de los dos que escuchaban esas palabras palidecieron gradualmente.
Lee Woo-yeon puso su cuerpo en ángulo y preguntó con calma.

2
Hermosas montañas y ríos como bordados en seda (山川).

27
 - Realmente no creerás que iba a enterrar a la gente en la montaña,
¿verdad?

A esa pregunta, ninguno de los dos pudo responder de inmediato que no. Por
muy benévola que fuera la sonrisa de Lee Woo-yeon, sólo era detestable para
quienes conocían su verdadera naturaleza.

- Por supuesto que estoy bromeando, estoy bromeando.

Incluso si Lee Woo-yeon dijo esto en broma, los dos no podían darse el lujo de
tomarlo como una broma cuando lo vieron sosteniendo una botella manchada de
sangre en un bar.

- Por cierto, si los encuentras, ¿realmente no los denunciará a la policía?

Sería mejor denunciar en lugar de convertirlo en un gran problema.
- Sí, está bien.

Él respondió que sí, pero no dijo que lo haría.

- Es la tercera vez que In-seop le salva la vida por casualidad. Oye, si te ha

salvado tres veces, ¿no deberías poner una estatua frente a la casa?
Gerente de Chung, Choi In-seop-sang.
- ¿Tres veces?

Lee Woo-yeon inclinó ligeramente la cabeza. Según su memoria, hasta el día de

hoy, ese gilipollas lo rescató y se lastimó dos veces, pero no entiende dónde se
agregó el primero.

- Luego, después de que te rescató del lago... en la villa.

El gerente Cha cubrió la boca del CEO Kim con la palma de su mano.

- ¿Qué más tienes que decir?

- No es nada.

El gerente Cha intentó fingir, pero Lee Woo-yeon vio lo que había sucedido sin
que él lo supiera.

- No es nada. ¿Qué sucedió? ¿Cuándo In-seop me salvó la vida una vez

más?

28
El gerente Cha dijo: -Oh, en serio-, y miró al CEO Kim. Obviamente, después
de ese incidente, In-seop vino más tarde y le rogó que mantuviera el secreto,
pero el CEO Kim, sin saberlo, se lo quitó de la boca.

- ¿Cómo salvó mi vida?

Lee Woo-yeon miró directamente al CEO Kim y preguntó. El CEO Kim se

rascó la cabeza y respondió: -Err, no lo sé-.

- En ese momento, te sacó del agua y te dio respiración artificial, así fue
como sobreviviste. Tú corazón se detuvo por un momento. Los
paramédicos dijeron que si In-seop no lo hubiera tratado correctamente,
podría haber muerto incluso si lo hubieran rescatado del agua.
- ¿Boca a boca?
- Luego de administrar respiración artificial, cualquier fosa nasal....

Antes de que el CEO Kim pudiera terminar sus palabras, escuchó el sonido de
algo cayendo de la cama junto a él. Cuando los tres miraron hacia un lado,
notaron que algo se movía debajo de la cortina.

Woo-yeon Lee, fingiendo estar asombrado, abrió las cortinas y gritó.

- Sr. In-seop. ¿Estás despierto?

- ... ¡Ah!

Choi In-seop, que yacía en el suelo, levantó la cabeza sorprendido. Parecía que
había escuchado toda la conversación que acababan de tener, con un brillo rojo
desde la nuca hasta el lóbulo de la oreja se le notaba. Lee Woo-yeon bajó al
suelo con una cara desconocida e hizo que In-seop se pusiera de pie.

- ¿Te has caído de la cama?

- … Sí.

Mientras responde, In-seop pone los ojos en blanco y no sabe qué hacer.

- ¿Estás bien con tus heridas? Estaba muy preocupado.

Lee Woo-yeon lo levantó, lo acostó en la cama y preguntó con ternura. Era

difícil creer que era la misma persona que acababa de hacer una declaración tan
grosera de que enterraría a los coreano-chinos en la montaña, o que Corea tiene
muchas montañas, por lo que se llama Montaña Geumsugangsan.

- Está bien, está bien.

29
In-seop, recostado en la cama, cubrió su cuerpo con la sábana y contestó. Al ver
que incluso la mano que sostenía el extremo de la sábana estaba al rojo vivo,
Lee Woo-yeon se tragó una carcajada.

- Está bien, excepto por un dedo roto. Si lo desea, puede quedarse en el

hospital por un día o dejar el hospital.

In-seop, que se escondió en el asiento, respondió en voz baja: -me darán de alta
en el hospital-

- Mientras consigas todos los permisos, puedes irte. Gerente, me puedes

dar algo de privacidad, por favor.

El gerente Cha miró a In-seop una vez y se puso de pie. No pudo evitar
preguntar si In-seop estaba bien mientras tenía una conversación como esa.

Lee Woo-yeon se paró junto a la cama de In-seop y dijo palabras amables.

- Sr. In-seop. ¿Hay algún lugar incómodo además de tus dedos?

- Si… bien.

Al escuchar su voz llorando, Woo-yeon Lee señaló con el dedo la sabana y

frunció el ceño al CEO Kim.

- Sr. In-seop. ¿estás bien? ¿No estás enfermo?

- Está bien ... todo.

Era difícil ver cuánto temblaba en el asiento. Lee Woo-yeon agarró el asiento
con la mano y lo abrió.

- ¿Estás realmente bien?

Cuando le quitó el escudo protector de la sabana, In-seop abrió los ojos y se

sorprendió mucho. Lee Woo-yeon extendió la mano y tocó la frente de In-seop.

- Tienes un poco de fiebre. ¿Cuántos días estarás hospitalizado? Dicen que

mañana por la mañana habrá una habitación en el hospital.
- No, no. Seré dado de alta.

In-seop miró con ansiedad la cantidad de líquido que quedaba del suero
fisiológico, tragó saliva seca. Solo quería deshacerse del suero o lo que sea y
huir como estaba.

- El suero está casi terminado. Si consigues terminarlo, puedes irte.

30
El gerente Cha regresó agitando su recibo. Los ojos de los cuatro hombres
estaban todos a la vez en la bolsa del suero fisiológico. Lee Woo-yeon esperó
con los brazos cruzados mientras observaba el líquido gotear, mientras el
gerente Cha y el CEO Kim hicieron una mueca que decía que no, e In-seop se
mordió el labio con una expresión como de un prisionero condenado a muerte
esperando la sentencia.

Finalmente, la última gota de la solución del suero fisiológico goteó sobre la

manguera. Lee Woo-yeon levantó la mano hacia la enfermera y le pidió que
viniera.

- Entonces, vámonos ahora.

No sabía por qué esas palabras hicieron que su corazón se hundiera tanto, Choi
In-seop cerró los ojos.

***

- Nos bajaremos aquí.

Lee Woo-yeon dijo eso mientras sostenía el hombro de In-seop. A lo largo del
viaje, In-seop expresó con entusiasmo su opinión de que regresaría a casa, pero
Lee Woo-yeon negó con la cabeza y dijo que no podía dejar solo al paciente y
que tenía algo que preguntar.

- Solo estaré en mi casa...

Incluso viendo a Lee Woo-yeon bajar, In-seop agarró el cinturón de seguridad

del auto y cerró los ojos. Sin embargo, sin esperar el final, Lee Woo-yeon
agarró a In-seop y lo sacó del auto.

- Jefe. Por favor, posponga todos mis horarios para mañana.

- ¿Qué? ¿Todos tus horarios para mañana?

¿Qué nueva mierda es esa?, preguntó el gerente Cha con una mirada.

- Te caíste de ese caballo. Con eso entenderás todo.

- Hey, hey ¡Woo-yeon Lee, eso no tiene sentido ...! ¡Oye!

31
Lee Woo-yeon cerró la puerta del auto antes de que el gerente Cha comenzará a
regañarlo.

- Vámonos.

In-seop, que todavía estaba pensando en salir, tuvo que ser atrapado por Lee
Woo-yeon y arrastrado dentro. Incluso en el ascensor, Choi In-seop dijo en un
tono serio que deseaba poder irse a casa, pero Lee Woo-yeon pretendió no
escuchar. No, para ser precisos, escucho, pero dio la misma respuesta.

'¿Cómo se deja al paciente solo? No puedes hacerle eso a un salvavidas '.

Quiero preguntarte algo, así que habla despacio.

Era una repetición interminable de tal conversación.

Lee Woo-yeon arrastró imprudentemente a In-seop fuera del ascensor. Choi In-
seop quería llorar.

Cuando despertó en la sala de emergencias del hospital, borracho por la

medicina, se sintió aliviado por primera vez por el sonido de las palabras. Se
escucharon voces familiares. Su corazón latía con fuerza mientras escuchaba la
suave reverberación que se mezclaba intermitentemente, pero pensó que le
gustaría escuchar esa voz para siempre.

Se siente tan bien. Duele y palpita aquí y allá, pero le hace sentir mejor cuando
el sonido de esa voz que suena bien que está cubierta de terciopelo se amontona
en sus oídos. Sin embargo, cuando su mente se aclaró y pudo captar el
significado de la conversación, los labios sonrientes de In-seop comenzaron a
endurecerse. Sintió vívidamente que la sangre brotaba de su corazón y corría
por su rostro.

Movió el cuerpo con el pensamiento de que tenía que salir del lugar de alguna
manera. Sin embargo, la cama en la que yacía estaba más alta de lo esperado y
su cuerpo intoxicado con medicina no se movió como se esperaba.
Eventualmente, mientras caía, tiró accidentalmente del asiento con la mano,
haciendo un ruido fuerte. Desde entonces, es una serie de recuerdos de “quiero
morir''. No había forma de que Lee Woo-yeon no supiera que había escuchado
la conversación. Pero no dijo una palabra al respecto.

Solo dijo que había algo que quería preguntarle.

32
Ah, quiero llorar. ¿No sería genial si pudiera llorar todo lo que quisiera ahora
mismo en este lugar? dame el derecho a llorar.

Choi In-seop se paró detrás de la espalda de Lee Woo-yeon cuando abrió la

puerta y bajó la cabeza, dejando las palabras que no podía decir su corazón.

- Adelante.

La puerta se abrió y dijo Lee Woo-yeon. In-seop dudó por un momento con una
cara perpleja incluso frente a la puerta principal.

- Entra, date prisa.

- ... ...

En el momento en que In-seop entró, Lee Woo-yeon inmediatamente cerró la

puerta. Las lágrimas de In-seop brotaron ante el sonido de la puerta que se
cerraba automáticamente desde atrás.

Quiero ir a casa. Me duelen demasiado los dedos, estoy avergonzado, estoy

cansado... Sobre todo, Lee Woo-yeon da miedo.

- ¿Qué estás haciendo? No te quitaste los zapatos.

- … Sí.

In-seop se quitó los zapatos y descubrió que sus calcetines estaban sucios y no
se atrevió a cruzar el umbral.

- ¿Qué sucede?
- Los calcetines ... Están sucios.
- ¿Calcetines sucios?
- No puedes entrar en la casa de otra persona con los calcetines sucios...

In-seop recordó el contenido del libro, en particular, que se debe prestar

atención a los calcetines cuando se visita la casa de otra persona porque la
cultura residencial de Oriente es sedentaria.

Lee Woo-yeon tampoco quería que otras personas entraran a su casa con
calcetines sucios y se movieran. Sin embargo, In-seop quedó atónito, como si
fuera un gran crimen.

- ¿Quién dice?
- En el libro…

33
Estaba pensando en responder que el libro era sucio e inútil, pero Lee Woo-
yeon caminó hacia el lado de In-seop.

- Sí. Es completamente de mala educación entrar a la casa de alguien con

los calcetines sucios.

Lee Woo-yeon, quien dijo eso, puso su brazo alrededor de la rodilla de In-seop
y lo abrazó.

- Okey, qué estás haciendo…

- Te llevaré al baño.
- Yo, yo iré…. No, descalzo, no, quiero decir, si corro con un pie ... ¡yo!

In-seop se tambaleó como un hombre que se ahoga, abarrotando palabras que ni

siquiera tenían un significado adecuado. Lee Woo-yeon agarró su hombro con
fuerza con la mano.

La sonrisa en sus ojos desapareció.

- No luches demasiado. Me duele el hombro.

- ... ...!
- Silencio por favor.

Su voz era amistosa, pero sus ojos eran tan aterradores que In-seop ya no pudo
pedirle que lo bajara. En ese estado, Lee Woo-yeon, quien llevó a In-seop al
baño, se apoyó en la puerta y habló con habilidad.

- ¿Vas a darte una ducha?

- Sí, quizás…
- Te lastimaste la mano, ¿puedes hacerlo solo? ¿Puedo ayudar?

Choi In-seop negó con la cabeza frenéticamente hacia un lado. Estaba tan
preocupado de que su cuello se cayera por la fuerza con la que negó con la
cabeza.

Lee Woo-yeon no tenía el pasatiempo de mirar el cuerpo desnudo de un

hombre. Además, no tenía el pasatiempo de ayudar a un hombre a ducharse. Sin
embargo, cuando tal reacción volvió a la broma, el deseo de ganar se estimuló
extrañamente. ¿Realmente no puede ayudar Lee Woo-yeon de pie con los
brazos cruzados? repasó a In-seop nuevamente.

- El agua no debe entrar en el yeso. ¿Y si la herida se pudre?

34
 - ... Lo haré bien.

En respuesta, Choi In-seop rápidamente se echó a llorar ante las palabras de que
sus heridas se estaban pudriendo. Lee Woo-yeon quería explicar cómo los
gusanos infectan la herida después de que se cura durante 10 minutos y cuán
terrible es el olor de una herida podrida, pero por hoy, quería detenerse en este
punto.

Lee Woo-yeon sonrió y dijo: -Espera un minuto, luego- trajo algo de la cocina y
se lo entregó a In-seop.

- Pon esto alrededor del yeso. No lo mojes.

Era papel celofán. In-seop asintió con entusiasmo, pensando que él solo podría
hacerlo por sí mismo.

Después de recibir el papel celofán y cerrar la puerta, In-seop suspiró aliviado

por primera vez después de despertarse. Pero pronto fuera de la puerta las
palabras mezcladas de Lee Woo-yeon lo atacaron.

- Llámame si crees que no podrás ducharte. Te ayudaré.

Choi In-seop dijo con voz temblorosa -Gracias, pero estaré bien-, y luego cerró
la puerta del baño.

Después de confirmar que la risa de Lee Woo-yeon se había desvanecido, se

sentó en el piso del baño.

***

Después de ducharse, Lee Woo-yeon se puso una bata de baño y salió a la sala
de estar, y lo primero que vio fue a Choi In-seop, que dormitaba en el sofá. Lee
Woo-yeon se tragó una sonrisa. En el momento en que le dijo que esperara un
rato porque iba a hablar después de tomar una ducha, todo el cuerpo de In-seop
se puso pálido y asintió en silencio con la cabeza.

La actitud de In-seop de actuar como una virgen que fue llevada a un hotel a
pesar de que no dijo que iba a hacer nada, solo dijo que se estaba duchando y,
sinceramente, a Lee Woo-yeon le fue tan divertido que casi muere. Así que,
después de darse una ducha y sentirse más relajado que de costumbre, salió sin
ropa. Estaba pensando en ver lo tembloroso que está Choi In-seop.

35
Pero, ¿estás durmiendo?

- ... ...

Lee Woo-yeon se sentó en el sofá, juntó las manos y miró fijamente a Choi In-
seop, que dormitaba como una chica enferma.

Bueno, fue así la última vez. Incluso derramó sus hemorragias nasales porque
estaba estresado, y luego se quedó dormido con la nariz cubierta con un pañuelo
de papel. En este punto, estaba confundido en cuanto a si es temeroso o audaz.

Lee Woo-yeon se sentó frente a Choi In-seop, que estaba durmiendo. El aspecto
de su mano izquierda, con una banda cortada adherida a la hoja incluida en la
carta enviada por el acosador, y su mano derecha medio enyesada con una
férula puesta, era tan lamentable que costaba creer que estuviera trabajando
como el manager de un actor.

Ahora que lo pienso, ¿Has perdido algo de peso?

Bajé un poco la cabeza y miré la cara crispada, y parecía que las mejillas donde
se levantaban los pómulos se habían vuelto un poco más delgadas.

Estos días han sido duros. Apenas dormí y esperé todo el día en el set en estado
de espera. In-seop, como otros managers, no tiene las agallas para bromear o
hacer otras cosas fuera de la vista, observando a los actores con moderación, por
lo que siempre se quedaba allí tenso.

Al verlo quedarse dormido, incluso parecía un estudiante que aún no se había

graduado de la escuela secundaria. Era increíble que un hombre con una piel tan
flácida le hubiera salvado la vida dos veces, no, tres veces.

Cuando recordó que In-seop le dio respiración artificial, sus ojos se movieron
naturalmente hacia sus labios.

¿Dijiste que pusiste esos labios sobre mí?

Lee Woo-yeon se tocó la punta de los labios con el dedo. Se preguntó cómo el
cobarde manager se habría frotado los labios mientras temblaba. Se sintió un
poco avergonzado por no recordar eso.

Una vez decidió despertar a In-seop.

- Sr. In-seop.

36
Cuando sacudió sus hombros ligeramente doblados un par de veces frente a él,
Choi In-seop saltó de su asiento en estado de shock como un hombre en llamas.

- ¡No! ¡No dormí! Solo cerré los ojos por un momento.

- Limpia la saliva de tus labios.

In-seop se limpió suavemente el costado de los labios con una expresión de

vergüenza, pero no salió nada. Su rostro se calentó al pensar que había sido
engañado por la broma que hizo de nuevo.

- ¿Estás cansado?
- No, estoy bien.
- ¿Tus manos están bien?
- Sí. Gracias por tu preocupación.

Para ser honesto, todavía le dolían tanto, que gritaba cada vez que lo tocaba,
pero In-seop respondió como un adulto, enderezando la espalda.

- Está bien. Entonces hablemos.

- ... ...

Prefiero decir que estaba enfermo e iba a morir.

Choi In-seop, con el sudor frío corriendo por su espalda, no sabía dónde poner
los ojos y esperó las siguientes palabras de Lee Woo-yeon.

- De acuerdo. Tengo una pregunta para ti.

- ... ...

Con el corazón a punto de estallar, Choi In-seop miró solo los labios de Lee
Woo-yeon.

- ¿Por qué yo…?

- No tuve elección. Pensé que se ofendería si se enteraba de eso, así que le
pedí a otras personas que lo mantuvieran en secreto. Me lavo los dientes
tres veces al día y no tengo ninguna dolencia bucal.

Era como una bolsa mágica que salía con una palmada en el costado. Lee Woo-
yeon se encogió de hombros y se echó a reír al ver a In-seop, quien puso su
mano en su regazo y miró hacia adelante, memorizando líneas que parecían
haber sido preparadas.

37
 - Ja, ja, ja, ja, no, eso no, Jajaja, claro que te iba a preguntar por eso más
tarde, pero ja, ja, ja, ja.
- ... ...
- Ja, ja, ja sí. Pero eso no es lo que estoy preguntando, ¿y qué?
- ... ¿No es así?

Arruinado.

Si estás quieto, ve en el medio.

¿Por qué In-seop pensó que la respiración artificial era la pregunta que Lee
Woo-yeon le quería hacer al traerlo a este lugar? … Si a alguien le gusta, In-
seop deseaba que alguien lo golpeara con un gran martillo y lo clavara en el
suelo para que no pudiera verlo a la cara.

- Por ahora, pasemos el tema. Por supuesto, tengo curiosidad sobre los
detalles, pero preguntaré más tarde.
- Sí….

En la medida de lo posible, In-seop deseaba que esto último no llegará antes de

salir de Corea.

- Tengo curiosidad por algo más. Hay algo que necesito saber antes, una
respuesta.

Mientras decía esas palabras, la sonrisa en el rostro de Lee Woo-yeon

desapareció lentamente. En cambio, fue una tenacidad fría la que tomó su lugar.

- No me importa si otras personas me engañan o no, no me importan los

asuntos que no tienen nada que ver conmigo. Pero me preocupan las
cosas sobre las que quiero saber, la verdad, quiero oír la verdad a toda
costa. Ahora quiero escucharla.
- ... ...

Choi In-seop estaba aterrorizado de preguntar qué tipo de pregunta iba a hacer a
tal fortuna.

Tal vez aprendió algo sobre ti. Tal vez esté tratando de descubrir que estás
trabajando con una identidad falsa bajo el pretexto de manager e intenta
investigar.

38
Con ese pensamiento, sus dedos se enfriaron y los labios estaban secos. Sin
embargo, no queriendo que se enterara de que estaba nervioso, Choi In-seop
trató de fingir que no pasaba nada y levantó la cabeza.

- Entonces, por favor responda mis preguntas honestamente. ¿Puedes

prometerlo?
- Sí, lo haré.

Sus ojos se encontraron en el aire. Lee Woo-yeon le hizo una pregunta a In-seop
en un tono tranquilo y relajado.

- ¿Por qué me salvaste?

- ¿Sí?
- ¿Por qué me salvaste dos veces, no, incluso si hice algo que no puedo
recordar, fueron tres veces? ¿Por qué?
- Eso…
- Como soy un ser humano, “porque soy tu manager”, fingiré que no
escuché la misma respuesta anticuada.

Choi In-seop estaba perplejo.

Esperaba que Lee Woo-yeon hiciera una pregunta asombrosa, pero nunca soñó
que llegaría una pregunta así. Además, como la fuente de las respuestas
plausibles que podía dar estaba bloqueada, la cabeza de In-seop literalmente se
convirtió en un papel blanco.

- Es suicida tirarse a un lago en invierno sin ninguna preparación. Esto se

puede hacer a cambio de salvarte de algo así en el baño dando cien pasos.
Pero es demasiado para una recompensa.

Lee Woo-yeon continuó hablando, señalando con el dedo uno por uno.

- Esa respiración artificial, aunque sea repugnante, si te enjuagas la boca

más tarde, es suficiente. No recuerdo eso, así que me pregunto si es cierto
incluso después de escucharlo.

Los elegantes y largos dedos se doblaron por segunda vez.

- Pero realmente no entiendo lo que pasó hoy. Debido a lo que sucedió

hoy, en realidad estoy confundido acerca de lo que sucedió frente a mí.
Así que tenía muchas ganas de escucharlo. ¿Por qué estás actuando como

39
 una persona frenética porque no puedes salvarme del peligro? Ah, sí.
También omite la respuesta de que es porque eres mi fan.
- ... ...!

Después de perder la última excusa para dar, la cabeza de In-seop estaba

realmente vacía. ¿Qué diablos se supone que debe decir?

- Piensa despacio. Porque tengo mucho tiempo.

Lee Woo-yeon se apoya en el respaldo y habla en un tono suelto. Sin embargo,

sus ojos se aferraron a Choi In-seop con fuerza y no lo soltaron, sin un solo
error como antes. Sentía como si mi cabeza estuviera siendo atravesada por la
mirada tenaz. Choi In-seop dejó escapar un pequeño suspiro y comenzó a girar
desesperadamente su cabeza que no giraba.

- Yo soy... por lo tanto... Con un corazón honesto...

- Sí, para ser honesto.

Lee Woo-yeon está decidido a decidir el destino de Choi In-seop hoy, según el
tipo de respuesta que devuelva. Hoy se dio cuenta de que ya no podía mantener
a Choi In-seop a su lado porque no podía entenderlo, porque estaba interesado
en verlo.

Como señaló hoy el CEO Kim, pensó que era solo cuestión de tiempo antes de
que se revelara su personalidad sucia. Si su personalidad estaba expuesta y su
imagen estaba dañada, tenías que renunciar si eras actor. Había ganado
suficiente dinero para vivir y comer durante el resto de su vida. Comenzó su
carrera como actor en primer lugar por un capricho de joder a su padre, quien lo
envió a Corea como cura para sí mismo. Entonces, actuar engañando a la gente
no es ilegal, genera dinero e incluso molesta a su padre, así que pensó que
estaba bien. Incluso si tuviera que dejar de actuar, no sería triste ni difícil. Sólo
era desagradable que en el momento de la renuncia se decidiera por una
intervención y no por su propia voluntad.

A Lee Woo-yeon le gustaba controlar sus emociones. Sin embargo, si estás del
lado de Choi In-seop, a menudo pierdes la razón. Lee Woo-yeon sintió una
emoción fuerte y cálida en su corazón en el momento en que vio a In-seop,
quien corrió a rescatarlo, temblando también hoy.

La sensación, que parecía hormigueo y cosquilleo en las proximidades del

corazón, era desagradable y algo incómoda, lo que la hacía extremadamente

40
molesto. No quería dejarse llevar por un sentimiento que nunca antes había
sentido sin saber por qué.

- Dime, por favor.

Lee Woo-yeon miró fijamente a su manager, cuyos labios estaban humedecidos

como un estudiante regañado por un maestro.

- Soy… yo, alguien, nunca más…

Quería mantener los ojos en otra parte, pero ante la persistente mirada de Lee
Woo-yeon, In-seop ni siquiera podía girar la cabeza, enumerando las palabras
en su cabeza.

- Nunca más alguien… No quiero que nadie a mi lado muera o salga

lastimado.

Los ojos de Lee Woo-yeon, mirando a este lado con la barbilla inclinada, se
entrecerraron ligeramente. In-seop respiró hondo y exhaló.

- Mientras esté a su lado, no quiero dejar que nada le suceda.

- Al fin y al cabo, estás hablando del valor de la vida.

Lee Woo-yeon chasqueó la lengua como si se le hubiera liberado el pulso. -No

es In-seop -, dijo obstinadamente y negó con la cabeza.

- No estoy hablando de la preciosidad o la dignidad de la vida humana,

pero… Es solo mi deseo.

No sé si lo creerás, pero todo lo que digo ahora es sincero.

Choi In-seop nunca quiso volver a experimentar la muerte de otra persona.

Incluso si era algo por lo que tenía que pasar de forma natural en la vida, era su
sincera avaricia que no quería dejarle volver a pasar por algo así ahora.

- Cuando murió un amigo cercano… No pude evitarlo.

Una vez que la verdad comenzó a estallar, comenzó a fluir como agua por un
agujero en el bolsillo. Aunque sabía que no tenía que decir estas palabras, In-
seop no pudo evitar que sus labios se movieran.

- Así que quiero protegerte. No quiero volver a pasar por esa pérdida. Esto
es solo un deseo personal. No es un sentimiento noble de humanidad.

41
 - ¿Entonces quieres decir que vas a salvar a quien sea? No importa si no
soy yo, ¿verdad?

In-seop no vio la sonrisa torcida en los labios de Lee Woo-yeon cuando hizo esa
pregunta.

- No. No es así ... Mientras trabaje como manager junto a Woo-yeon,

durante ese tiempo, si hay algo que pueda hacer ... Quiero hacer cualquier
cosa. Es todo mi deseo.

Mientras decía eso, sintió como si estuviera escupiendo una bola de fuego de su
garganta. Fue sincero y verdadero. Incluso si llega el día en que lo traicione,
quiere hacer todo lo que pueda hasta entonces, todos son codiciosos. Quería
hacerlo, aunque sabía que era una codicia inútil y una cosa inútil.

Entonces, en el momento en que Lee Woo-yeon se cayó de su caballo, su

cuerpo se movió antes de que su cabeza pudiera tomar una decisión. Sabiendo
que no debía acercarse al caballo asustado, corrió a rescatarlo. Incluso cuando el
caballo balanceó sus patas delanteras y corrió hacia él, lo abrazo sin darse
cuenta.

No importaba si le señalaba por darle un biberón o una medicina. No, en este

caso le iba a dar medicina y luego un biberón.

- Solo lo deseo, y así será. Si me preguntas por qué, no hay nada que pueda
decir. Solo quiero hacer eso, lo que dice mi corazón.

No tenía caso tratar de repetirse a sí mismo que odiaba a Lee Woo-yeon y que
era un bastardo. Incluso si trataba de decidirlo mientras pensaba en Jenny, ya ha
llegado muy lejos en el pasado. In-seop tuvo que aceptar que, aunque lo
traicionara, nunca podría odiarlo.

- Solo quiero hacer algo...

Lee Woo-yeon trató de murmurar lo que Choi In-seop había dicho en voz baja
en su boca. Escuchar lo que estaba diciendo en la voz de la otra persona lo hizo
sentir extraño, y la cara de In-seop se sonrojó intensamente.

- ¿Cualquier cosa que quiera?

- Si es algo que puedo hacer.
- Bien, entonces.

42
Lee Woo-yeon dijo mientras se señalaba los labios con el dedo.

- Entonces, bésame.
- ¡¿Eh?!
- Bésame, ahora.

Mientras escuchaba sus palabras, Choi In-seop se confundió en cuanto al

significado del beso que conocía. In-seop parpadeó y puso cara de no entender
la situación actual

- Dices que puedes hacer todo lo que esté a tu alcance. Respiración

artificial o besar, eso es todo. ¿No es así?
- Uh, por qué… por qué… yo. ¿Esto?
- ¿No puedes? ¿Y lo que acabas de decir?

Cuando Lee Woo-yeon dijo algo parecido a una decepción, no era Choi In-seop
y negó con la cabeza.

- No es algo que acabo de decir, pero ¿por qué diablos pides esto...?
- Quiero confirmar que lo que me dijo Choi In-seop es sincero. Si quieres
exagerar, no tienes que hacerlo. Dejaré la respuesta a la pregunta
simplemente con amor por la humanidad.

Lee Woo-yeon intentó levantarse de su asiento. - No, In-seop -, dijo y lo agarró.

Era una sensación desesperada. Extrañamente, sentía una sensación de crisis en
la que tenía que convencer a Lee Woo-yeon ahora.

- Todo lo que digo es verdad.

- ¿Es eso así?

Una leve sonrisa cruza el rostro de Lee Woo-yeon cuando hace esa pregunta.

- Puedes hacerlo.

Lee Woo-yeon miró las yemas de los dedos de In-seop temblando incluso
mientras hablaba así.

- ¿Puedes?
- Sí.
- No tienes que exagerar. Ni siquiera es una emergencia, hazlo justo antes
de que se quede sin aliento.
- No yo…

43
 - Está bien. Entonces cerraré los ojos.
- ... ...

Era un tono que parecía mostrar una gran amabilidad. In-seop soltó el dobladillo
de la túnica de Lee Woo-yeon que sostenía. Se le secó la boca. Trató de
averiguar cómo iban las cosas, pero su cerebro no funcionaba correctamente. La
sangre corrió a su corazón. Podía sentir el pulso por todo su cuerpo. Sabiendo
que esta era solo la caprichosa prueba de Lee Woo-yeon, no pudo evitar sentir
que su corazón temblara.

Vamos a calmarnos. Esto es solo una prueba. Una prueba para ver si lo que digo
es cierto o no.

- ¿No lo harás?

Lee Woo-yeon preguntó, abriendo ligeramente uno de sus ojos cerrados.

Cuando In-seop se enfrentó a la cara de Lee Woo-yeon con los ojos cerrados
justo en frente de él, sintió que su corazón latía como loco.

Había días en los que pasaba noches calientes imaginando cómo se sentiría si lo
besara. Ciertamente hubo momentos en los que se sonrojó solo imaginando el
roce de sus labios.

Cuando le dio respiración artificial a Lee Woo-yeon, quien fue rescatado del
lago, sus labios se tocaron, pero era un momento tan urgente que ni siquiera
podía pensar en el beso o la textura de sus labios. Más tarde, pensó en esa
escena solo en su cabeza, y su rostro se calentó un poco.

Sin embargo, el recuerdo del toque no era más que lo que no tenía In-seop. Y
ahora estaba a punto de crear un nuevo recuerdo para él.

Choi In-seop inclinó lentamente la cabeza hacia adelante e inclinó la espalda. La

nariz afilada de Lee Woo-yeon, que da una sensación de frescor, estaba a una
distancia como si casi la tocara.

Creo que se iba a morir. Era tan guapo que se sentía irreal. De eso se trata todo
esto ahora. Sentía que estaba soñando.

Movió sus labios un poco más hacia adelante. Todo su cuerpo tiembla. Fue lo
suficientemente lejos como para que el aliento de Lee Woo-yeon tocara
directamente sus labios. Un poco más, un poco más.

44
La punta de sus labios apenas se roza. Fue un contacto pequeño y superficial,
pero eso solo fue suficiente para matar a Choi In-seop en el acto.

Oh Dios mío. Si sigo así, mi corazón realmente ...

En ese momento, Woo-yeon Lee abrió los ojos.

- ... ...!
- Era una broma. Ni siquiera puedo bromear con In-seop. Pero no tengo
pasatiempos con los hombres, así que no puedo ir más allá.

Lee Woo-yeon continuó jugando, ya sea que supiera o no que las puntas de sus
labios se tocaron ligeramente.

- Lo siento. In-seop no parece tener ningún pasatiempo, así que fue difícil,
¿verdad?
- ... ...
- Está bien. Te creeré. ¿Puedes creer las palabras de In-seop? Ja, ja, ja, ja.

Lee Woo-yeon cerró suavemente los ojos y sonrió ampliamente. Esta situación
era realmente divertida.

Sin embargo, parecía que In-seop se empapó de inmediato con agua fría. Sentía
que le despojaron de sus emociones frente a Lee Woo-yeon.

- ¿El Sr. In-seop está bromeando...?

Lee Woo-yeon miró la cara de In-seop, sacudiendo sus hombros.

- ¿Estás llorando?
- ... ...
- ¿Está llorando en este momento, Sr. In-seop?

Quería negar que no es así, pero las lágrimas ya caían por la barbilla de In-seop.

Realmente se odiaba a sí mismo, que estaba realmente emocionado por una

broma que Lee Woo-yeon le había lanzado casualmente, incluso por un corto
tiempo. Quería morir. Fue vergonzoso y humillante.

- … Veamos.

Esta vez, Lee Woo-yeon agarró el brazo de In-seop cuando estaba a punto de
levantarse. In-seop chocó las yemas de sus dedos contra el sofá, gritando en
silencio, y se agachó mientras intentaba quitárselo de encima.

45
 - ... ...!
- Lo siento, Sr. In-seop.

Lee Woo-yeon rápidamente lo agarra, lo levanta y examina su rostro.

- ¿Te golpeaste la mano? ¿Estás bien?

- Me iré a casa.

Las lágrimas caían sin parar. Fue un desastre. No sabía lo que era ahora, sí era
vergonzoso volver a mostrar lágrimas frente a este hombre, o si era vergonzoso
la cara que puso después de ser engañado por una broma.

Choi In-seop solo quería irse a casa. Le duele el dedo roto, se siente enfermo
por la broma, tiene la cara caliente... Se odiaba a sí mismo.

Han pasado algunos años desde entonces, pero estaba harto de su estupidez de
hacer esto sin la capacidad de aprender. Quiere renunciar. Era obvio que tipo de
final tendría quedándose con Lee Woo-yeon aquí de esta manera.

El incompetente solo debía ocuparse de las debilidades de Lee Woo-yeon en

lugar de sus propias debilidades, y luego descubre muchos puntos buenos y se
enamora de él nuevamente. Un idiota, un idiota, el idiota del mundo. Lo siento,
Jenny. He sido más idiota de lo que pensaba.

- Era una broma. No quise ofenderte.

Lee Woo-yeon acarició suavemente el rostro de In-seop, que lloraba en silencio,

y ofreció una disculpa.

Eso era cierto.

Fue solo una broma que hizo para divertirse. Los sentimientos de la otra persona
estaban fuera de su control en primer lugar. Ya sabía que lo que Choi In-seop le
había dicho era sincero. Solo quería burlarse de él. Quería ponérselo difícil.
Solo quería volver a ver esa cara de impotencia gracias a él.

Choi In-seop apretó los labios y trató de contener las lágrimas, pero tan pronto
como las lágrimas brotaron de sus ojos, se derramaron.

Lee Woo-yeon vio eso y pensó que estaba llorando tan hermosamente. Como
actor, ha trabajado con muchas actrices y ha visto llorar a muchas de ellas. Entre
ellos se encontraban algunas actrices que fueron elogiadas por tener una cara
llorando más bonita que una cara sonriente.

46
Sin embargo, la apariencia de Choi In-seop, que se mordía los labios frente a él
y derramaba lágrimas en silencio, era muy superior a la de ellas. Normalmente,
tenía una impresión ordinaria con líneas finas, pero cuando lo vio llorar, se veía
extrañamente bonito.

¿Fuiste tú la persona que lloró con esta cara en primer lugar?

Lee Woo-yeon sostuvo la barbilla de In-seop con la mano y lo miró

detenidamente, pensando en ello.

Para ser honesto, no me dolería mirar su cara de llanto todo el tiempo, pero era
demasiado lamentable solo mirar. Hoy se rompió el dedo por mí, así que
hagamos esto.

- Creeré que lo que dijo In-seop fue sincero. Así que no llores.

Lee Woo-yeon abrazó el hombro de In-seop. Choi In-seop se sobresaltó y trató

de recostarse, pero le dio fuerza a la mano que sostenía su hombro. Luego
apoyó la cabeza en el hombro de In-seop y le dio unas palmaditas en la espalda
con la otra mano.

- No llores. ¿Sí? Lo siento mucho.

- ... ...
- Estaba equivocado, Sr. In-seop.

La voz amistosa que llegó por su espalda parecía menos realista, por lo que In-
seop derramó lágrimas por un rato. - No llores, ¿por qué lloras así? Me veo
como un chico malo, lo siento, no bromearé más, lo siento por tratar así a mi
salvavidas -, dijo Lee Woo-yeon, persuadiendo a In-seop.

- Siento haber hablado así a una persona que llora.

Tenía miedo de volver a decir algo terrible, y las lágrimas que apenas habían
cedido volvieron a espesarse. Si era posible, In-seop quería taparse los oídos.

Lee Woo-yeon, que había estado callado por un tiempo, abrió la boca.

- ¿Te importaría reescribir el contrato conmigo?

***

47
 - Suspiro.
- ¿Por qué suspiras así? In-seop, ¿estás preocupado?

El gerente Cha, que compró agua en una tienda de conveniencia y se subió al

asiento del conductor, miró a In-seop y preguntó.

- No.
- Ah, tienes la cara llena de agua.
- No hay profundidad3.

Diciendo eso, In-seop se frotó suavemente la cara con la palma de la mano. Él

respondió que no había profundidad, pero estuvo nadando en las profundidades
del mar durante mucho tiempo.

Ese día, las palabras de Woo-yeon Lee de firmar un contrato a largo plazo con
In-seop yacían como una piedra en el pecho de In-seop. Esperaba que fuera una
frase cortés para consolarse porque lo sentía, pero cuando el CEO Kim le
entregó un papel en la oficina al día siguiente, In-seop tuvo que aceptar que era
en serio.

Cuando se unió a la empresa, el contrato era por un año. El período del contrato
era casi como un trabajo temporal. A In-seop no le importó, sabiendo que no
duraría varios meses. Sin embargo, el papel que el CEO Kim le entregó tenía
estampado un número increíble de tres años.

Esta fue la primera vez que Lee Woo-yeon decidió firmar un contrato formal
con su manager. El CEO Kim también tenía una cara que no podía creer cuando
le entregó el contrato. Las condiciones también eran buenas. Era un contrato de
ensueño que cubriría los cuatro principales seguros, generosas bonificaciones e
incluso gastos de vacaciones.

Sin embargo, In-seop no pudo firmar de inmediato. El plazo de 3 meses, que

pensó, no estaba muy lejos. Si no podía encontrar la debilidad de Lee Woo-yeon
en eso, enviaría una foto o un periódico sobre su intensa relación con una mujer
y se iría de Corea en silencio.

Pero es un contrato de 3 años.

3
Según el diccionario el Coreano dict Naver, quiere decir, que no tiene preocupación,
ansiedad.

48
Choi In-seop silenciosamente devolvió el contrato al CEO Kim para que lo
pensara. El gerente Cha, que lo estaba viendo desde un costado, le dijo que lo
pensara realmente, pero luego el CEO Kim se dio cuenta.

En ese momento, Lee Woo-yeon estaba sentado en un ángulo junto al escritorio

y sonreía alegremente. Es la vida que In-seop salvó dos veces, así que tienes que
responsabilizarte de ella, no, fueron tres veces.

Los arrepentimientos de no haberle salvado la vida llegaron como una marea.

Por supuesto, sabía que haría lo mismo una y otra vez si regresaba, pero por
ahora.

- Suspiro…

Cuando In-seop suspiró de nuevo, el gerente Cha lo miró, abrió la botella de

agua embotellada que había comprado en una tienda y se la dio a In-seop.

- ¿Están bien tus manos? ¿Cuándo vas a ir al hospital de nuevo?

- Dijo el doctor que me vería en quince días. No hay mayores problemas,
así que lo único que hay que hacer es poner la escayola así
- Me alegro mucho.

Diciendo eso, el gerente Cha le entregó el agua a Woo-yeon Lee, quien estaba
detrás de él. Lee Woo-yeon tomó el agua con ambas manos y dijo gracias con
voz cortés.

No quería que muriera el mánager de Lee Woo-yeon, y no lo quiero volver a

encontrar lesionado, ¿cómo se hace con un mánager que tiene las dos manos
lesionadas? No le gusta Choi In-seop, pero tampoco otros nuevos mánagers, …
En primer lugar, lo haría, las opiniones de los dos se combinaron y el gerente
Cha decidió servir como manager temporario de Lee Woo-yeon. In-seop Choi
estaba haciendo las mismas cosas que antes, conduciendo y usando su cuerpo,
pero ajustando el horario y cuidando a Lee Woo-yeon en detalle.

El gerente Cha tomó el volante solo después de recibir la promesa del CEO Kim
de que debería tratarse a sí mismo como un conductor sustituto. De hecho, lleva
varios días trabajando cómodamente ya que no tiene que preocuparse de nada
más que de conducir. Por supuesto, también se planeó robar un bono especial
del CEO Kim.

49
El gerente Cha, feliz al pensar en el bono, tarareó y encendió la radio. Lee Woo-
yeon, que estaba leyendo el guión desde atrás, levantó la cabeza con una ligera
impresión. Choi In-seop rápidamente apagó la radio y negó con la cabeza.

Al leer el guión, Lee Woo-yeon odiaba encender la radio o hablar con él. La
razón era que la mezcla de voces humanas interfiere con la concentración. “¿Por
qué el gerente Cha que no se da cuenta de la situación sin darse cuenta?”
preguntó y volvió a encender la radio.

Mientras sonaba la música de baile, el gerente tarareó y comenzó a conducir el

automóvil. Lee Woo-yeon miró a la cabeza del gerente desde atrás, pero no dijo
nada.

- ¿Puedo reproducir el CD que traje?

In-seop preguntó con cautela.

- Eh. Haz lo que quieras.

In-seop abrió la guantera del salpicadero, sacó un CD y puso música. Estaba

grabado con las canciones favoritas de Lee Woo-yeon. Mientras sonaba música
tranquila en la camioneta, el gerente Cha murmuró.

- Cuando conduzco, no tengo ganas de conducir cuando escucho una

canción como esta. El Sr. In-seop tiene un gusto muy especial. ¿Qué hace
un hombre que escucha esta canción?

Choi In-seop sonrió torpemente y miró a Lee Woo-yeon, que estaba sentado en
el asiento trasero. Lee Woo-yeon no miró hacia este lado y solo leyó el guión,
preguntándose si quería ignorar al gerente en absoluto. Cuando In-seop y él
estaban en la furgoneta, había una atmósfera completamente diferente a la de
hablar entre ellos. Parece que la declaración del CEO Kim de que la
compatibilidad entre el gerente Cha y Woo-yeon Lee es secretamente
inconsistente, es cierta.

- Por cierto, ¿cómo fue el rodaje de la escena de la cabalgata? ¿se está

filmando de nuevo? ¿Es hora de volver a rodar?
- Lo editaran apropiadamente y lo sacarán así. Además, ya me caí una vez.
Creo que en realidad sería mejor de esa manera.

Lee Woo-yeon entregó el guión y respondió con indiferencia. Después de eso,

después de recibir una llamada del director diciendo que el caballo que lo

50
montaba se rompió la pierna y tuvo que ser sacrificado al final, Lee Woo-yeon
tuvo dificultades para tragarse las palabras -Es bueno- mientras lo escuchaba.
Eso es una lástima, cuando respondió apropiadamente, el director se disculpó,
diciendo que el estado del caballo parecía un poco extraño desde el principio.

En ese momento, por un momento, Lee Woo-yeon cubrió la canción hwagu del
teléfono con la mano y preguntó con una sonrisa: - ¿Qué pasa si demandamos a
las personas que lo administran al CEO Kim? -. Si eso sucede, esto es lo que lo
hará quedar mal, por lo que el CEO Kim apenas lo consoló diciéndole que
sigamos adelante. Incluso después de colgar el teléfono, Lee Woo-yeon pensó
que sería bueno demandar por un tiempo, le hirvió el estómago al CEO Kim.

La cena de hoy fue una reunión preparada por el director para Lee Woo-yeon.
Estaba destinado a disculparse con Lee Woo-yeon, quien estaba lesionado, y
para reunirse y discutir sobre la fecha de transmisión del drama que fue corta.
Una persona que sabe lo que siente le daría un descanso de incluso una hora,
pero al director no parecía importarle, murmuró Lee Woo-yeon mientras
colgaba la invitación.

El CEO Kim comenzó a sudar cuando sintió que la frecuencia de la

personalidad sucia de Lee Woo-yeon estaba aumentando. Mirando a Lee Woo-
yeon en estos días, se siente como escalar un volcán activo donde el magma está
hirviendo.

- Quiero decir, ¿estás bien?

Choi In-seop, que no estaba al tanto de esta situación, preguntó con cautela.
Cuando se cortaron las riendas y Lee Woo-yeon tropezó hacia un lado y cayó,
In-seop perdió el equilibrio y casi rodó por el suelo.

El gerente Cha dijo: 'Oh, ¿no lo sabías?' Respondió a la pregunta de In-seop con
una pregunta.

- ¿Qué?
- Está muerto.

Lee Woo-yeon, que estaba detrás de él, habló en un tono muy ligero, por lo que
In-seop se confundió por un momento si había elegido la palabra incorrecta y la
había usado.

- ¿Muerto?

51
 - Oh, es cierto, se rompió la pierna. Los caballos con patas rotas suelen ser
sacrificados.
- ¿Qué dijiste? ¿Dónde está? Puedes arreglarlo. ¿No pueden ponerle un
yeso?

In-seop exclamó exaltado.

Era difícil creer que el caballo llamado Jenny, que le dio palmaditas en el
hombro para darle fuerza, murió en vano. Ni siquiera quería creerlo.

- Un caballo se acaba cuando se hiere una pata. Porque no puede acostarse

como los humanos. Dicen que si ocurre una infección secundaria
mientras está acostado, será aún más doloroso.
- Pero, ¿ se le aplico la eutanasia?

Fue casi como llorar. In-seop exclamó, girando su cuerpo completamente hacia
un lado, colocando una correa alrededor de su cuello.

- ¿Cómo estás? ¿Qué hizo mal? Simplemente se cayó. Podrías cometer un

error. La gente también comete errores ...
- Está bien.

Lee Woo-yeon cortó las palabras de In-seop.

- No sé si es mejor o no. ¡Si te quedas a su lado y lo cuidas, podría vivir!

In-seop estaba tan emocionado de que lo cuidaría si lo tuviera justo frente a él.
Lee Woo-yeon se acercó por detrás y tocó la mejilla de In-seop. In-seop se
sobresaltó por el frío toque de sus dedos y se puso pálido.

- Es mejor aceptar el problema inevitable.

- ... ...
- Es inevitable. No es algo que podamos elegir o influir.

No había emoción en el tono tranquilo de Lee Woo-yeon. No era la forma

habitual de sonreír y rascar el interior de las personas, ni era un tono exterior de
ser educado y amable.

El gerente Cha miró a Lee Woo-yeon a través del espejo retrovisor y pensó: -
¿Qué pasa?-. Cuando sus ojos se encontraron en el espejo, Lee Woo-yeon
frunció el ceño juguetonamente.

… Yo también lo odio.

52
El gerente Cha se estremeció y giró el volante como si viera algo que no podía
ver.

- Entonces tomaré un trago hasta tarde hoy. ¿Espero cerca?

Al darse cuenta de que In-seop estaba exhausto hablando de caballos, el gerente

Cha preguntó a propósito con voz brillante.

- Gerente, vete a casa. Yo manejaré.

In-seop no tenía ganas de beber.

- De ninguna manera. Todavía es una locura In-seop, toma un buen trago

hoy también. Al ver que el director le pidió deliberadamente a In-seop
que trajera al Sr. Oh, yo también quiero una bebida gratis.

Cuando recordó el alcohol gratis, el manager apretó sus papilas gustativas sin
darse cuenta.

- Ve en mi lugar. Esperaré en el coche.

Cuando In-seop lo dijo en serio, negó con la cabeza y dijo: -Eres el gerente Cha-
. Por supuesto, sería falso si dijera que la propuesta de In-seop no era atractiva,
pero él no era tan quisquilloso como para no saber si le permitían unirse o no.

La razón por la que un manager, Choi In-seop, fue invitado a este lugar hoy es
porque se rompió el dedo en un accidente ese día. Probablemente, estaba claro
que solo unas pocas personas importantes entre los actores y el personal fueron
invitadas a la reunión de hoy.

- Hecho. Después de todo, sólo habría actores nobles. Además, el director

te llamó, por supuesto que ...

Mientras hablaba, el gerente Cha escuchó el timbre de su teléfono celular y

asintió con la cabeza hacia In-seop.

- Mira mi teléfono celular al lado. En este momento, la única persona que

me puede llamar es el CEO Kim.
- ¿Quién es la hija del diablo?
- ¿Qué?

El gerente Cha casi detuvo el automóvil en medio de la carretera. Tragó saliva e

hizo un gesto a In-seop.

53
 - Guárdalo, guarda el teléfono. Ex esposa.
- ¿Sí?
- Apaga el teléfono que suena.

In-seop recordó haber escuchado que la ex esposa divorciada del Sr. Cha era la
ex esposa de Kim. ¿Aún no se ha aclarado?

In-seop agarró su teléfono y miró a su alrededor para saber qué hacer, cuando
Lee Woo-yeon extendió la mano y agarró el teléfono.

- Lo dejaré atrás. Oh, lo siento. Le di aceptar.

Cualquiera podría decir que fue intencional bajo la apariencia de un error.

Desde el celular, la voz de una mujer, -Hola, hola-, resonó dentro del auto. El
gerente Cha levantó el teléfono para llorar y comer mostaza.

- Hola. Eh ... Eh ... No trabajo ¿Qué? No, ¿por qué lo estoy? ¿Por qué fui
allí y lo hice? ¿Qué? ¿Qué?

La voz del teléfono se volvió cada vez más áspera. El gerente Cha dijo: - ¿Por
qué estoy allí?-. Lloró unas cuantas veces más, pero fue en vano. Después de
que terminó la llamada, todas las preocupaciones del mundo cayeron sobre su
frente.

- ¿Qué está pasando?

Cuando Choi In-seop preguntó con cuidado, el gerente Cha murmuró con una
cara deprimida.

- … No te divorcias después, no, ni siquiera te cases en absoluto. Solo vive

solo porque eso es una compensación.

-Lo siento-, dijo el gerente Cha, quien habló hasta ese momento, y continuó.

- Tengo un lugar al que necesito ir hoy, así que cuando me vaya, llamaré a
un agente y luego vete. Lee Woo-yeon, ten paciencia hoy.

Cuando el gerente Cha parpadeó hacia Lee Woo-yeon, que estaba sentado
detrás de él, de casualidad envió una señal de OK con la mano. El gerente Cha
estacionó el automóvil en el estacionamiento en un bar de Nonhyeon-dong,
donde tenía la cita hoy. Le entregó la llave del auto a In-seop.

- Si no quiere que le llame un agente, vaya a tomar un taxi. ¿Comprende?

54
 - Sí. Gracias por llevarme.

In-seop despide al gerente Cha. Lee Woo-yeon también movió la cabeza por
detrás y lo despidió. El gerente Cha pudo ver claramente la burla que brilló en
sus ojos.

Maldito niño.

Cuando Choi In-seop desapareció primero en el edificio, el gerente Cha agarró

silenciosamente a Lee Woo-yeon por el hombro.

- ¿Por qué?
- ¿Qué?
- El teléfono.

Lee Woo-yeon dijo: -Ah-, y sonrió. Si no conoces su verdadero color, tiene un

rostro tan hermoso que te sorprenderá lo guapo que es.

- Quiero decir, odio esa música de baile.

- ¿Qué?
- Adiós.

Lee Woo-yeon despidió al desconcertado gerente Cha y entró por la entrada del
edificio. El gerente Cha, que se quedó solo, no pudo continuar con sus palabras
de forma absurda, y luego suspiró, sin suspirar. Mientras caminaba hacia la
carretera principal para tomar un taxi, decidió que debía aconsejar a In-seop que
se lo pensara dos veces antes de firmar el contrato.

***

Tan pronto como entró en la tienda, In-seop Choi miró a su alrededor con cara
de sorpresa, preguntándose cuánto dinero se necesitaría para alquilar todo el
lugar. El interior, que se basó en negro y ocasionalmente se pintó con azul, le
dio una sensación moderna al interior y una iluminación limpia. Solo la
atmósfera lo hizo sentir abrumado, por lo que In-seop se preguntó si había
venido a un lugar desconocido.

- Bienvenido. Tus compañeros están esperando adentro.

55
El camarero guió a los dos al interior de la tienda.

- ¿Están aquí?
- ¿Estás bien?

Las personas que se sentaron primero los saludaron a los dos y les hablaron.

- Gracias por su preocupación. Estoy bien.

In-seop respondió cortésmente y se sentó en el asiento más esquinero junto a la

puerta. Sacudió la cabeza diciendo que estaba bien que la gente le hiciera señas
para que entrara. Como dijo el gerente Cha, la mayoría de las personas presentes
hoy eran actores. El personal, rara vez mezclado, era un director de cámara, el
director de iluminación, director de dirección y director de acción. In-seop se
dio cuenta de inmediato de que había venido aquí hoy como disculpa por un
dedo roto.

… ¿Es importante tener un dedo roto? En ese momento, el caballo que cayó se
rompió la pierna, pero en lugar de recibir una disculpa, fue sacrificado.

Choi In-seop se sentó solo y bajó la cabeza deprimido. Incluso cuando alguien
estaba sentado a su lado, In-seop se quedó mirando el vaso de agua.

- ¿Te duele la mano?

- ... ...?
- ¿Puedes llevarme a casa?

Era Lee Woo-yeon. In-seop no entendía por qué estaba sentado junto a la puerta
junto con él. Lee Woo-yeon era nada menos que el protagonista del encuentro
de hoy.

- Ah, por qué…

Todos en la sala lo miraban con cara de perplejidad, probablemente curiosos por

todas las preguntas que In-seop no podía formular con palabras.

- Queda más cerca del baño.

- ... ...
- ¿Por qué? Puedes sentarte en cualquier lugar. ¿Qué importa?

La gente admiraba a Lee Woo-yeon, que no es un actor de primera línea en este

papel, pero In-seop no podía.

56
Por alguna razón, cada vez que Lee Woo-yeon se acercaba a él de esta manera
desde ese día, se preguntaba si lo estaba haciendo a propósito.

De hecho, era difícil para In-seop. Cada vez que el brazo de Lee Woo-yeon
tocaba suavemente su cuerpo, y cada vez que se inclinaba y le susurraba al oído
en voz baja, se le erizaba el vello de todo el cuerpo.

- ¿Qué? ¿Ya han empezado?

Una voz familiar e inoportuna vino de la puerta. Todos los que estaban sentados
se pusieron de pie a la vez. Lee Woo-yeon también se levantó y saludó a Kang
Young-mo.

- ¡Lee Woo-yeon! Cuánto tiempo sin verte.

Normalmente, habría pasado fingiendo no verlo y tratarlo como un extraño,

pero por alguna razón, estaba muy feliz y saludó a Lee Woo-yeon. Incluso se
dejó caer frente a Lee Woo-yeon.

- Oh, sí. Se cayó del caballo y se lastimó. ¿Estás bien?

- Sí. Gracias por tu preocupación.
- ¿Está bien el manager de Lee Woo-yeon?
- Sí.

In-seop respondió brevemente. Kang Young-mo se sentía incómodo de muchas

maneras, por lo que era incómodo y difícil mezclar palabras.

- Escuché que el caballo que montó Woo-yeon Lee era un poco extraño.
¿Escuchaste sobre eso?

Kang Young-mo señaló su cabeza con el dedo y miró a su alrededor.

- Sí, más o menos.

Tan pronto como salió la conversación sobre caballos, notó que la expresión de
In-seop, que estaba sentado a su lado, se oscureció, y Lee Woo-yeon trató de
cambiar sus palabras. Sin embargo, Kang Young-mo insistió en hablar sobre el
caballo como si no tuviera intención de hacerlo.

- De hecho, es porque los caballos que montó Woo-yeon Lee eran así. Sin
suerte.
- Lo sé, verdad.

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Lee Woo-yeon sonrió y bebió agua fría. Primero, el director, que estaba sentado
en la parte superior, tosió secamente y miró a Lee Woo-yeon a los ojos.

- Escuché que estabas un poco herido, ¿estás bien?

- Sí. Gracias a…
- ¿Hay algún obstáculo para filmar? No puedes estorbar. El calendario ya
está apretado. Por supuesto, Lee Woo-yeon tiene la agenda más apretada.

Incluso si filmamos un drama todos los días, no hubo suficientes tomas previas,
por lo que cuando se transmitió, fue casi como una transmisión en vivo. Dicen
que ahora van a dormir a Seúl, pero llegará un día en que todo lo que tendrán
que hacer será ducharse en un motel cercano y luego salir.

Además, luego de su emisión, dependiendo de la reacción de los espectadores,

se podría cambiar el elenco de la película. Ahora, según el original, la relación
de filmación de Kang Young-mo es ligeramente superior, pero no fue difícil
predecir que el juego cambiaría una vez que saliera al aire. La historia detrás de
la historia que Lee Woo-yeon leyó en el guión y lo reinterpreta es tan atractiva
que supera al original, que el autor original vino al set de filmación y lo vio una
vez y estaba muy feliz.

No sería una exageración decir que Lee Woo-yeon es el actor más ocupado de
los actores que están filmando actualmente, por lo que el calendario de
filmación está casi en línea con su horario. Kang Young-mo, a quien no le
gustaban todos los movimientos de Lee Woo-yeon, estaba muy molesto por
tener que moverse de acuerdo con el horario de Lee.

- Esta semana, podré concentrarme en la filmación, ya que tengo un trabajo

completamente diferente.
- Sí. Solo tenemos que esperar que un accidente tan extraño no vuelva a
ocurrir.

Kang Young-mo le preguntó al director de cámara que estaba sentado a su lado

dónde estaba el baño. Todos dieron un suspiro de alivio al saber que todo iba a
terminar ahí.

- Lee Woo-yeon tiene mucha suerte.

Al salir de la habitación, Young-mo Kang murmuró como un diálogo interno,

vio a Lee Woo-yeon y sonrió. Incluso In-seop, que no podía leer bien las líneas,

58
supo de inmediato que era un comentario sarcástico. La multitud de la izquierda
miró la tez de Lee Woo-yeon, preocupada de que pudiera sentirse mal.

Sin embargo, Lee Woo-yeon estaba sentado allí con una cara indiferente como
una persona que no podía escuchar esas palabras. Todos verdaderamente
admiraban su maravillosa personalidad. No se podía comparar con Kang
Young-mo, quien solo tenía buenas habilidades de actuación y tenía un bajo
nivel de humanidad.

- Iba a estacionar mi auto allí, pero otro auto se estacionó frente a mí, así
que...

En ese momento, el manager de Kang Young-mo, Yoon Cheol-jin, que entró en

la habitación, confirmó que Kang no estaba en la habitación y cerró la boca. El
director de cámara le hizo señas para que se sentara con ellos, pero encontró a
Lee Woo-yeon e In-seop justo frente a él y endureció sus expresiones con
torpeza.

- ¿Dónde ha estado el Sr. Kang?

- Fue al baño.
- Ah, sí. Gracias por decírmelo.

Tan pronto como Yoon Cheol-jin dejó su asiento, las personas que estaban
sentadas adentro estaban discutiendo.

- Le dijiste a tu manager que te llamara maestro también.

- No conozco el carácter de esa persona. Cody y todos, dicen, llámame
maestro. Si quieres escuchar a tus maestros así, te conviertes en maestro
de escuela, ¿por qué te conviertes en actor?
- ¿De qué son culpables los estudiantes? entonces.

Todo el mundo dijo -Wow- y se echó a reír. Los grupos con un enemigo común
eran fáciles de reunir. Todos se echaron a mal hablar mientras Kang Young-mo
iba al baño. Cuando se trata del personal y otros actores, suele ser doble lujuria
y señalar con el dedo, por lo que, naturalmente, era imposible no decir nada
detrás de escena.

- Eh, voy al baño.

Nadie le prestará atención, pero In-seop murmuró en voz baja y se levantó de su

asiento porque sintió que tenía que hablar así. Cuando Lee Woo-yeon bromeó: -

59
¿Quieres que vaya contigo? -, las personas cercanas se rieron y dijeron: -El Sr.
In-seop estará bien-.

Choi In-seop rápidamente cerró la puerta y salió, preguntándose qué pasaría si

Lee Woo-yeon realmente lo siguiera.

- Vaya...

Fue frustrante. No estaba familiarizado con la cultura de beber de Corea, y el

asiento con Lee Woo-yeon a su lado y Kang Young-mo en el futuro era como
un cojín de espinas. Le inundaron los arrepentimientos como si hubiera dicho
que se quedaría en el auto.

Queriendo tomar un poco de aire fresco y entrar, In-seop caminó hacia la terraza
conectada a la tienda. En el momento en que agarró la manija y abrió la puerta,
escuchó una voz familiar.

- ¿Cómo hacerlo? Ahora.

Era Yoon Cheol-jin, el manager de Kang Young-mo. In-seop trató de evitar el

lugar, preguntándose si podría siquiera hacer una llamada telefónica. Pero antes
de que pudiera retirarse del lugar, se escuchó la voz molesta de Kang Young-
mo.

- ¿Cómo haces qué? Maldito bastardo Incluso si eres tan viejo, ¿tienes que
mojarlo en caca o pasta de soya para saberlo?

No podía entender por qué las dos personas que iban al baño estaban aquí. Era
común ver a Kang Young-mo agarrar al manager como un ratón. Sin embargo,
las siguientes palabras que escuchó mantuvieron a Choi In-seop en su lugar.

- Aun así, me siento un poco así. Pensé que terminaría con solo una caída,
pero el manager de Lee Woo-yeon se rompió el dedo y Lee Woo-yeon
también resultó herido ...

In-seop agarró la manija de la puerta y escuchó la conversación entre los dos.

- Así de mala suerte tienen estos cabrones. ¿Qué te importa? Deja de llorar.
- Ese caballo, siento un poco de pena por haberlo sacrificado ...
- ¿Eres estúpido? ¿Cuál es el problema para que un caballo muera? No hay
evidencia de esa droga de todos modos. No hay pruebas, ¿qué puedo
hacer?

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Cuando Choi In-seop recordó a Yoon Cheol-jin, que salía corriendo de la
masacre ese día, su sangre salió a borbotones. Estaba claro que Kang Young-mo
le había dicho a Yun Cheol-jin qué hacer con esas palabras. In-seop empuja la
manija de la puerta con todas sus fuerzas.

- Tengo algo que decirte.

Cuando In-seop apareció de repente, ambos parecían avergonzados. Cuando

Yoon Cheol-jin no supo qué hacer, Kang Young-mo le hizo señas para que se
fuera. En lugar de cometer el más mínimo error, pensó que se ocuparía del
joven manager él solo.

Yoon Cheol-jin se fue y solo quedaron dos personas en la terraza.

- Estoy ocupado, así que no sé de qué estás hablando, pero termínalo

rápido.

Kang Young-mo sacó un cigarrillo de su bolsillo y lo encendió. El humo del

cigarrillo fue expulsado deliberadamente frente a In-seop y sus dientes
tartamudean. Choi In-seop tomó una decisión con calma.

- Por casualidad escuché la conversación que ustedes dos tuvieron, y tengo

una pregunta.
- ¿Escuchaste eso por casualidad? ¿No me escuchaste a escondidas como
una rata?
- No fue a propósito, pero primero me disculpo.

Sus dedos estaban fríos. In-seop apretó y abrió su puño detrás de su espalda y
miró a Kang Young-mo claramente.

- Entonces, ¿qué quieres decir?

- Quiero saber qué medicamento le diste a Jenny, no, ese caballo de antes.
- ¿Caballo? Ah, ese caballo. Originalmente era así.

Kang Young-mo también señaló con un dedo cerca de la sien y le dio vueltas y
vueltas.

- No. Cuando lo vi, estaba bien. Obviamente, dijiste que le diste al caballo
algún tipo de medicina. Debido a esa droga, el caballo estaba extraño ese
día ...

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In-seop no pudo hablar. Un dolor ardiente se extendió por sus mejillas junto con
el sonido de una palmada.

- ¿Qué estás diciendo ahora? ¿Drogué al caballo?

- Ustedes dos eran obviamente ...

Esta vez, fue golpeado más fuerte que antes. Podía sentir el sabor amargo de la
sangre en su boca. Sin embargo, In-seop no le tenía miedo a Kang Young-mo.
Solo estaba enojado.

- ¿Conversación? ¿Qué conversación? ¿Nunca lo hice? ¿Tienes alguna

evidencia?
- ¡Obviamente lo escuché!

Abrió los ojos y respondió, pero lo que regresó fueron los golpes de Kang
Young-mo. In-seop, quien fue golpeado de manera estable cerca de su rostro,
colapsó en el lugar junto con la mesa en la terraza.

- ¿Qué has escuchado? ¿Tienes alguna evidencia?

- ... ...
- Maldita sea, no hay pruebas, pero ¿eres el único que me dice eso en este
momento? ¿Estás loco? ¿Vas a hacer que sea imposible para mí poner un
pie en este piso?

La producción en la que Kang Young-mo es miembro fue una de las tres

principales compañías de entretenimiento en Corea. Su tío era el presidente de
la empresa, así que por muy sucia que fuera su personalidad, no podía tratarlo
mal. Incluso el CEO Kim aconsejó a Lee Woo-yeon que no se involucrara con
Kang Young-mo si era posible.

Choi In-seop levantó la cabeza y miró a Kang Young-mo.

- ¿Dónde levantas tus ojos?

- Las riendas se cortaron ese día. Es como darle al caballo una medicina
rara. No debe haber sido una coincidencia.

Kang Young-mo inclinó los hombros hacia atrás y se echó a reír.

- Ja, ja, ja. Es gracioso. ¿Sabes qué tipo de detective eres? Parece que estás
malinterpretando algo.

62
Kang Young-mo, una vez más, abofeteó la mejilla de In-seop con la palma de la
mano y presionó el cigarrillo que sostenía sobre su yeso para apagarlo.

- Te lesionas gravemente mientras juegas con tu boca sin ninguna

evidencia. ¿Crees que eres el único herido? Incluso Lee Woo-yeon está
herido, así que no salgas en vano.

Tocó la punta de la barbilla de In-seop con el cordón de su zapato y escupió. La

puerta del patio se abrió y el sonido de sus zapatos se desvaneció.

Choi In-seop se levantó de su asiento y se sacudió la ropa. Mientras caía, sin

saberlo, tocó el suelo con su mano herida, provocando un hormigueo en los
dedos. Una hemorragia nasal le mojó el dobladillo de su manga.

- Ah... Eww.

Rápidamente inclinó la cabeza hacia atrás y luego se inclinó hacia adelante,

recordando las palabras de Lee Woo-yeon de que, si hacía eso, la sangre fluirá
hacia su garganta y sería bastante malo. Se estaba tapando la nariz con la mano
y la sangre goteaba entre sus dedos.

Al ver que la sangre de la nariz caía al suelo, In-seop llegó a Corea y pensó que
no sabía lo que estaba haciendo. Tenía una mano desgarrada, un dedo roto y
estaba golpeado y sangrando. En medio de esto, recuerda la voz de Lee Woo-
yeon, quien estaba preocupado por él….

- Te ves realmente estúpido.

Estaba llorando por lo estúpido que era.

Iba a preguntarle a Young-mo Kang qué le hizo al caballo con calma, pero ni
siquiera pudo expresar sus intenciones correctamente. Si conoces su
temperamento habitual, debería haber grabado la conversación antes...

Un humano como yo no sería capaz de aprovecharse de la debilidad de alguien

ni de amenazar ni siquiera para el resto de su vida.

In-seop recordó el caballo canoso que había visto esa tarde.

Lo siento. Jenny. Como fui un tonto, ni siquiera pude revelar tu desafortunada

muerte. Volvió a pasar otra vez.

63
Las lágrimas mojan sus zapatos. In-seop se quedó allí un rato y luego salió de la
terraza cuando dejó de sangrar por la nariz.

***

- Entonces, ¿viniste a Corea después de estudiar en los Estados Unidos?

- Sí. Puedes ver eso.
- ¿Por qué viniste a Corea?

Llevándose la bebida a los labios, Woo-yeon sonrió suavemente sin decir una
palabra.

El padre, que no podía mantener a su hijo en un hospital psiquiátrico debido a

su condición y estatus social, le pidió a su madre que contactara a un pariente
para enviarlo a Corea con el pretexto de la recuperación. La gente como tú tiene
que sufrir un poco para volver en sí.

Lee Woo-yeon, que llevaba una vida cercana al encierro en una remota zona
montañosa en la que era sorprendente cómo entraba la electricidad, pensó que
entraría en razón, derribó al encargado que custodiaba el alojamiento y vino a
Seúl. Entonces, inmediatamente fue a una compañía de entretenimiento visible
y preguntó si les gustaría criarlo como actor.

Esa fue la maldita historia secreta que llevó a Lee Woo-yeon a donde está hoy.

- Se rumorea que vino a Corea en contra de la actuación porque provenía

de una familia muy prestigiosa, ¿es así?

Así es. Grité y me quedé dormido. Me echaron porque mi hermano está loco.
Estuve a punto de ir a la cárcel por hacer una locura. Eso sí, como dijiste,
debido a una familia prestigiosa, me enviaron a un hospital psiquiátrico con
buen nombre, no a una prisión, sino a un sanatorio. Lee Woo-yeon sonrió
amablemente y mantuvo las palabras dentro de su boca.

Ese día fue un accidente. Un accidente que se produjo debido a un momento de

descuido en el que la persona había estado reprimiendo su apariencia real.
Comenzó con un oponente que agitaba un plátano mientras se burlaba de él
como un mono antes del partido y deliberadamente le dio una patada en la

64
espinilla durante el partido. Fue un día particularmente malo y el partido no
salió tan bien como esperaba, pero el fuego se encendió.

Después del partido, fue al vestuario del equipo contrario y pisoteó al jugador
hasta que murió. Al oír esto, se podría pensar que se trata de una pelea común
de la misma edad y de la misma época, pero si se mira de cerca, los pelos del
cuerpo son tan aterradores que podrás ver hasta los huesos.

El jugador contrario que lo provocó estaba tan herido que apenas podía usar una
de sus manos, y su córnea casi se desprendió, perdiendo finalmente la vista. Fue
una situación tan trágica que se consideró un milagro estar vivo. No solo eso,
sufrió lesiones tanto el jugador del equipo contrario como el mismo jugador del
equipo que lo detuvo. Entre ellos, hubo varios estudiantes que resultaron heridos
hasta el punto de no poder jugar en absoluto, por lo que el incidente fue
inevitable. Todos dijeron que iría a la cárcel, pero fue liberado en un estado de
debilidad. En ese momento, Lee Woo-yeon no pudo evitar admirar el hecho de
que el dinero realmente puede resolver cualquier cosa. Por supuesto, su
enfermedad no se pudo resolver ni siquiera con dinero al final.

Después de varias pruebas, se le diagnosticó una cuarentena de por vida. Lee

Woo-yeon recordó en silencio el rostro de su madre, quien escuchó con calma la
explicación del médico de que su temperamento innato no se puede cambiar.

Como de costumbre, leyó varias emociones en los ojos de su madre.

Vergüenza e ira, miedo y tristeza y desesperación.

¿No es triste cuando una persona está enferma? ¿Realmente no sabes por qué no
se puede matar a una criatura viva? ¿No puedes entender realmente por qué no
debes lastimar a la gente? Su madre tomó las manos de su hijo y le preguntó con
seriedad varias veces. En ese momento, había dejado de fingir ser amable, por
lo que honestamente sonrió y dijo la verdad.

- No estoy triste. Realmente no sé lo que es la tristeza. ¿Por qué no

matarlo? Es terriblemente molesto. No importa si mueres o no. Ja, ja, ja.
¿Qué pasa si me lastimo un poco? Te lastimas después de un accidente
automovilístico, es similar. Si, hablo en serio. Mierda, ¿qué dices? Nací
así. Ahora, aceptemos lo que no podemos evitar.

Con una hermosa sonrisa en su rostro, la madre soltó la mano de su hijo como
sacudiéndose algo feo. Después de la visita, la madre regresó a casa ese día e

65
intentó suicidarse. No podía aceptar el hecho de que su hijo no era un paciente
enfermo, sino un ser completo en sí mismo, y que el Dios que tanto amaba le
había regalado tal monstruo.

Por supuesto, fue un espectáculo breve, con sus muñecas cortadas

superficialmente en una bañera en una casa llena de empleados. Pero para su
padre, incluso el breve espectáculo, fue un gran evento. Cuando su padre, que
parecía aturdido desde hacía unos días, habló de ello durante un rato, no mostró
ninguna reacción en particular.

No estaba realmente preocupado porque pensé que, si realmente quisiera morir,

no habría elegido ese camino. Solo pensé por un momento, y luego simplemente
respondí: -Debe ser difícil jugar al tenis por un tiempo-.

Al escuchar sus palabras, su padre se levantó de un salto y se fue. Esa fue la

última vez. Después de un tiempo fue expulsado a Corea.

- ¿En realidad? ¿Viniste a Corea para actuar?

- ... ...

Como si hubiera aceptado el silencio de Lee Woo-yeon como algo positivo,

gritó mientras parpadea sus pestañas con el rímel puesto.

- Creo que los rumores son ciertos. Totalmente genial.

La actriz sentada junto a Lee Woo-yeon era una de los ídolos famosos, y se dio
el caso de que la supuesta agencia la puso en un pequeño papel en el drama. Sin
darse cuenta, se aferra a Lee Woo-yeon y le pregunta al respecto, y nadie piensa
en detenerla. Pensó que era de mala educación, pero, de hecho, todos tenían
curiosidad por el pasado de Lee Woo-yeon.

- ¿Hay algún rumor?

Lee Woo-yeon preguntó con una sonrisa como si estuviera sorprendido.

- Por supuesto. Aparte de eso, ¿qué fue? Ah, claro. Casualmente, escuché
que la familia de tu hermano es una especie de familia aristocrática. Hey,
esto es una mentira. ¿Dónde están los nobles en América?

Para ser precisos, su abuelo era de ascendencia aristocrática británica. Sin

embargo, no se podía considerar que Lee Woo-yeon perteneciera a esa familia

66
porque era un hijo que trajo su madre cuando se volvió a casar. Lee Woo-yeon
sonrió y dijo: -Lo haré-.

- ¿No es una coincidencia que no tengas novia?

Miró a su alrededor, lo agarró del brazo y le preguntó cariñosamente. Lee Woo-

yeon agitó su mano y fingió revisar su teléfono celular porque quería ser joven.

Hubo un mensaje de texto. La persona que llamó fue el manager. Al mismo

tiempo, Lee Woo-yeon estaba a punto de salir a ver a In-seop, quien dijo que iba
al baño, pero porque In-seop no regresó.

Una sonrisa se desvaneció de la comisura de los labios de Lee Woo-yeon

mientras revisaba el texto.

- Oh, qué casualidad hyung. ¿Adónde vas?

- Saldré un rato.

Lee Woo-yeon se disculpó cortésmente con las personas que lo rodeaban y se

puso de pie.

***

Cuando In-seop vio su rostro mientras se lavaba la cara en el baño, se

sorprendió terriblemente. Tenía los labios desgarrados y las mejillas
enrojecidas, así que no importa cuánto lo mires, era como un anuncio de que
alguien te había golpeado.

67
Incapaz de volver a su asiento, le envió un mensaje de texto a Lee Woo-yeon
diciendo que esperaría en el auto. Puso música en el auto y reclinó el asiento al
máximo.

Las lágrimas fluyeron impotentes al recordar a las dos Jennies que ya no

existían en el mundo. No pudo quedarse con ninguna de ellas. No consiguió
ninguna ayuda. ¡Incluso ahora, corrió de la fiesta de bebidas y le ordenó a Kang
Young-mo que le dijera sobre medicina del caballo! ¡Él debe haber sido el que
rompió las riendas! ¡Ese es el malo! ¡Él es el bastardo! Quería gritar.

Pero no tenía pruebas. Por un corto período de tiempo, pudo sentir la forma en
que este mundo iba a hacer que le dolieran los huesos.

Ahora, si In-seop dijera que Kang Young-mo lo golpeó, su relación con Lee
Woo-yeon empeoraría aún más y la filmación del drama podría verse
interrumpida. Luego, como cuestión de rutina, In-seop será despedido.

No fue injusto que le despidieran. Al final, simplemente odiaba su incapacidad

para hacer otra cosa que no fuera retirarse. Lo que hace un hombre adulto lo
único que puede hacer es encerrarse en el coche y exprimirlo.

¿Se va a ir a América? ¿No podemos tirar todo por la borda e irnos a América,
cuidar la tumba de Jenny por el resto de nuestras vidas y vivir con un corazón
expiatorio?

- Jenny...

In-seop cerró los ojos mientras gritaba un nombre del que no había respuesta.

Jenny, Jenny, Jenny, Jenny, Jenny .... Te extraño, mi única amiga.

Entonces alguien llamó a la ventanilla del coche. In-seop se sobresaltó, se

levantó de su asiento y bajó la ventanilla.

- Voy a sacar el coche pronto ...

Dijo eso porque había estacionado en doble fila porque no había lugar para
estacionar, pero la persona que lo miraba desde afuera fue inesperada.

- ¿Por qué estás aquí?

- … Estoy cansado.

68
Choi In-seop pensó que era una suerte que las luces del automóvil no estuvieran
encendidas. No podrá ver las cicatrices en su rostro con la luz oscura en el
estacionamiento.

- Está bien. No he podido dormir en todos estos días. También quiero

dormir un rato si es posible.

Al ver a Lee Woo-yeon sonreír suavemente, In-seop suspiró aliviado. Pero las
palabras que siguieron hicieron que su corazón se hundiera una pulgada más o
menos.

- ¿Pero quién hizo eso?

- ¿Sí?
- Tú rostro.
- Me caí.

Lee Woo-yeon extendió la mano hacia el interior del vidrio del auto. La mano
blanca que se acercaba desde la oscuridad era aterradora. In-seop intentó
retroceder inconscientemente, pero su barbilla estaba atrapada. Lee Woo-yeon,
que lo miraba a la cara aquí y allá, como si examinara las cosas, murmuró para
sí mismo.

- ¿Puedes caerte y lastimarte así?

- ... ...
- ¿Quién te golpeó?

Choi In-seop dudó por un momento si confiaría en todo lo que sucedió con
Kang Young-mo. Pero mantuvo la boca cerrada y negó con la cabeza.

- Me caí. Esto es lo que pasó cuando me resbalé por las escaleras.

Lee Woo-yeon agarró la mejilla de In-seop con la otra mano. La sensación de

las palmas frías hizo que el corazón de In-seop se calentara y sus ojos se
abrieron.

Lee Woo-yeon, que siempre tenía una cara sonriente, entrecerró los ojos y habló
con voz pálida.

- Es molesto seguir lastimándose.

- ¿Sí?
- Es desagradable.

69
Choi In-seop, sin saber qué responder, devolvió la disculpa, tartamudeando
como un hábito.

- Si sabes que lo sientes, ten cuidado.

- Sí.
- Vete primero. Puedo volver en taxi. Dígale al gerente Cha sobre el
automóvil.
- No. Está bien.

Los ojos de Lee Woo-yeon se suavizaron.

- Regresa.

Era una voz tan resuelta que cualquiera podía entender que era una orden, no
una recomendación. Choi In-seop no tuvo más remedio que asentir con la
cabeza.

***

Mientras bajaba del metro y esperaba el autobús de la ciudad, In-seop sacó su

teléfono celular de su bolsillo. Miré el reloj y era hora de preparar el desayuno
para la casa americana. Hoy no era el día que prometió llamar, pero lo hizo.
Después de que el teléfono sonó varias veces, la voz de la madre inquieta salió
del teléfono.

< ¿Peter?>

- ... ...

En el momento en que escuchó la voz de su madre, algo caliente subió por su

garganta.

< ¿Peter? ¿Peter? Cariño, ¿no puedes oírme?>

- Puedo oírte.
70
Apenas respondió.

< ¿Estás sorprendido? ¿Cómo es allí? ¿Está de noche ahora? ¿No es duro el
trabajo? ¿Estás comiendo bien?>

In-seop recordó deliberadamente el contenido de una revista a la que se había

suscrito para estudiar la cultura coreana. Cuando las madres coreanas hablan por
teléfono con sus hijos, estaba escrito: - ¿Has comido? -. Se dice que la pregunta
se hace como saludo no sólo a la hora de comer, sino también a última hora de
la noche o a primera hora de la mañana.

Choi In-seop pensó que no era necesariamente una cultura exclusiva de Corea.
Su madre siempre se preocupaba por lo que comía y se aseguraba de que no se
saltara las comidas cuando llamaba. In-seop respondió que sí, por supuesto, y se
sentó en una silla en la parada del autobús.

<Pero, ¿qué está pasando a esta hora? ¿Pasa algo?>

- No. Cuídate. Solo llamé porque quería escuchar tu voz.

Desde que llegó a Corea, In-seop solo llama una vez cada tres días y nunca más.
Le prometió a su padre que haría eso, pero también fue una regla que se impuso
porque pensó que debilitaría su mente si hablaba por teléfono con demasiada
frecuencia.

< ¿No pasa algo?>

Preguntó preocupada la madre al notar que la voz de su hijo había disminuido.

- Nada está pasando. ¿Cómo están?

<Sí, estoy durmiendo junto a tu padre, ¿quieres hablarle?>

- No. Mañana te llamaré, así entonces podemos hablar. Es sólo que... llamé
porque quería escuchar la voz de mi madre hoy.

Aunque no de sangre, In-seop nunca pensó que su madre no fuera su verdadera

madre. Amaba y trataba por igual a In-seop y a los niños que dio a luz a causa
de su dolor de estómago. La misma existencia de su madre era un consuelo para
el presente In-seop.

- Mamá, ahí estás.

In-seop hizo una pausa por un momento antes de hablar.

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 - ¿Debo volver a América?

<Por supuesto, tu casa está aquí. Si quieres venir, puedes venir. En cualquier
momento.>

Las lágrimas de In-seop, que apenas había contenido, cayeron al escuchar la

cálida voz de su madre. El lugar donde le golpearon palpitaba y dolía. Le dolía
tanto que no podía soportarlo. Quería correr al aeropuerto de Incheon ahora
mismo, comprar un boleto y volar a los Estados Unidos.

Las personas que esperaban el autobús junto a él miraron a In-seop. Era natural
llamar la atención ya que el hombre que hablaba inglés con fluidez estaba
bañado en lágrimas.

<Si lo estás pasando mal, ven ahora. No se preocupe por nada. ¿si?>

- Tengo que irme ahora. Te llamaré mañana. Te quiero.

In-seop dijo adiós y rápidamente colgó el teléfono. Si hubieran hablado un poco

más, parecía que lloraría y contaría todo lo que había sucedido hasta ahora.

No. Tomemos una decisión. Por ahora, vayamos a casa, tomemos una ducha
tibia, reguemos a Kate y leamos tu libro favorito. Entonces te sentirás mucho
mejor.

- Genial. Todo irá bien.

Secándose las lágrimas con la palma de la mano, In-seop se guardó el teléfono

en el bolsillo.

- Eh…

Se dio cuenta de que había traído la llave de la camioneta con él. Mañana el
gerente Cha necesitará la llave para traer la camioneta. Tenía que dejarlo en el
estacionamiento o en el mirador, pero se la ha traído para salir sin problemas.

Choi In-seop se levantó de su asiento y caminó hacia la entrada del metro

nuevamente. Mirando hacia atrás por el camino por el que había venido, pensó
en qué hacer a continuación.

Según el plan, después de un mes y medio, sería despedido y tendría que irse a
los Estados Unidos con la naturaleza verdadera de Lee Woo-yeon, y allí tendría
que escribir una carta a un periódico. Era la intención de acabar con todo allí.

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Sin embargo, si se mantiene así, puede que tenga que firmar un contrato de tres
años con Lee Woo-yeon. Absolutamente quería evitar eso. No tenía la confianza
para estar al lado de Lee Woo-yeon durante tanto tiempo.

Entonces, ¿quizás eso sea algo bueno? Si vuelve así, no hay cara para ver a
Jenny. Ni siquiera tenía la confianza para estar al lado de Lee Woo-yeon.
Extrañaba a su familia, quería apoyarse en alguien y su corazón se estaba
debilitando.

- ¿Nos vamos ...

Al pasar por las puertas del tren, In-seop trató de murmurar un poco.

Después de escuchar la voz de su madre, su deseo de ir a América se hizo más

fuerte. In-seop recordó la evidencia que tenía sobre la complicada relación de
Lee Woo-yeon con las mujeres. Después de dárselo al periódico, será ruidoso
por un tiempo. Sin embargo, no podrá sacar a Lee Woo-yeon del lugar. A
diferencia de las artistas femeninas, la industria de la radiodifusión es tolerante
con las celebridades masculinas. Si Lee Woo-yeon da una conferencia de prensa
y anuncia que hubo un malentendido y que solo son amigos cercanos, será
ruidoso por un tiempo, pero al final pasará sin mayores problemas. Lee Woo-
yeon no solo se gana la vida con su imagen, sino porque es un conocido actor
con talento.

Choi In-seop dejó escapar un pequeño suspiro. Lee Woo-yeon, si mirabas desde
un costado, era un actor perfecto. Puede que dañe su imagen seria y suave, pero
al final, tenía que admitir que no sería capaz de derribar al actor Lee Woo-yeon.

¿No habrá un gran percance dentro de un mes y medio en el que pueda

demostrarle al mundo que Woo-Yeon Lee es un bastardo?

- Ganar la lotería es más probable.

Choi In-seop murmuró y caminó sin entusiasmo. Recordó que el CEO Kim se
quejó de que sería difícil encontrar un ser humano perfecto en la creación de
imágenes tanto como Lee Woo-yeon. Lee Woo-yeon también es humano, por lo
que puede cometer errores en su vida, pero el problema es que la probabilidad
de que suceda dentro de un mes y medio es cercana a cero.

- Debo haberme ido a casa.

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In-seop sacó su teléfono celular y miró la hora. Escuchó que la cena de hoy
termina temprano porque mañana hay una filmación a primera hora. Después de
comer y beber con moderación, estaba de humor para romper. De hecho, es por
eso que dijo que se quedaría hasta el final, pero In-seop no tuvo más remedio
que salir del auto porque Lee Woo-yeon le dijo que regresara con una cara
aterradora.

Espero que todos vuelvan cuando termine. Porque Kang Young-mo tampoco
quiere encontrarse con su manager. Debía ir al set de filmación mañana y ver su
rostro, pero nunca quiso verlo tanto como hoy.

Con la esperanza de que la reunión hubiera terminado, In-seop caminó por la

calle. El restaurante donde se ha celebrado la cena de hoy está en un lugar
tranquilo y alejado del centro de la ciudad, por lo que cuanto más se camina,
menos gente hay.

- Fue así.

Choi In-seop miró a su alrededor. Estaba oscuro y apenas había luces

encendidas, por lo que fue más difícil de lo que pensaba encontrar el camino. Al
parecer, había una floristería y un café uno al lado del otro aquí ...

Mirando hacia atrás en la calle por la que acababa de regresar, miró a su

alrededor con impaciencia. Entonces apareció un Bentley plateado en sus ojos.
Miró la matrícula para ver si era el auto de Kang Young-mo.

- ... ...

Frunció el ceño al pensar que Kang Young-mo podría estar cerca. Era la
primera vez en su corta vida que tenía tan mala personalidad. ¿No sería mejor si
pudiéramos descubrir los puntos negativos de Kang Young-mo y dejar que el
mundo lo sepa? En menos de tres meses, y mucho menos en una semana,
podríamos reunir mucha evidencia.

In-seop giró deliberadamente hacia el interior del callejón en lugar de allí,

preguntándose si Kang Young-mo estaba en el auto. Si iba por este camino,
tendría que regresar por un tiempo, pero pensó que sería mejor que encontrarse
con Kang Young-mo en un lugar raro.

Dijiste que lo evitas porque está sucio, no porque tengas miedo a la caca.

- Kang Young-mo es un pedazo de mierda.

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Después de decir eso de su boca, se sintió un poco renovado por dentro. Choi
In-seop caminó por la calle, diciendo mierda, mierda, mierda un par de veces
más. Le hizo sentir extrañamente mejor cuando estaba solo en una calle donde
no había nadie alrededor y decía palabras tan vulgares. Creo que la gente dice
palabrotas de este gusto.

- Chico malo. Kang Young-mo es como una mierda...

Se escuchó un sonido extraño en los oídos de In-seop cuando apretó los labios
para decir -Maldita sea-. Sonaba como el grito de un animal, por lo que In-seop
se detuvo y escuchó. Pensaba que, si había un animal herido, tenía que salvarlo
y llevarlo al hospital. Sin embargo, incluso después de quedarse quieto durante
mucho tiempo, el grito del animal ya no se oía.

- ¿Escuché mal?

Cuando In-seop, que había inclinado la cabeza, intentó moverse de nuevo,

escuchó un sonido sordo de algo rompiéndose. Entonces, se escuchó un chillido.

No era el llanto de un animal, era un gemido humano. Al darse cuenta de esto,

sintió un escalofrío subiendo por su espina dorsal.

¿Qué demonios es esto? ¿Alguien ha sido robado? ¿Realmente necesito llamar

al 911 para decir que alguien resultó herido en algún lugar? ¿O el 112? ¿Pero
dónde está la gente? ¿Debería llamar a la policía primero?

In-seop buscó su celular. En busca de la persona herida, sacó su celular y miró a

su alrededor para poder llamar a la policía en cualquier momento. Lo primero
fue determinar de dónde venía el sonido.

Entonces vio que alguien salía del espacio entre los edificios. El hombre tiró al
suelo algo que sostenía. Fue una billetera.

Eso es un ladrón. Estoy viendo al ladrón ahora.

In-seop se escondió detrás del auto sin darse cuenta. Pensó que debería tomar
una foto del criminal, así que tomó el teléfono con manos temblorosas. Apagar
el flash y el sonido cuando se toma una foto con un teléfono celular para filmar
en secreto a Lee Woo-yeon es muy útil...

- ... ...

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In-seop, que estaba tomando una foto del hombre con su teléfono celular, se
congeló en el acto. En el momento en que el hombre salió de la sombra del
edificio, su rostro se reveló bajo la luz de la luna.

Lee Woo-yeon, que tenía una expresión sobria en la que normalmente no habría
pensado, levantó la punta de los labios y sonrió con satisfacción.

Estaba tan asustado. A diferencia de sus ojos, que no contenían ninguna

emoción, sonreía al máximo y la apariencia de sus dientes blancos expuestos en
la oscuridad parecía mucho más allá del reino de los seres humanos.

Todo el cuerpo de In-seop tembló. Parecía que el hombre frente a él no era el

Lee Woo-yeon que había conocido hasta ahora. Sin saber cómo iba la situación
alternativa, In-seop se escondió detrás del auto y observó a Lee Woo-yeon con
ansiedad.

Después de mirar alrededor por un rato, Lee Woo-yeon caminó hasta el final del
callejón con una apariencia de depredador después de una comida satisfactoria.
In-seop no pudo moverse de su lugar hasta que el sonido de pasos confusos
desapareció.

Después de confirmar que Lee Woo-yeon había desaparecido por completo, In-
seop salió con cautela de detrás del auto. También en el suelo había una
billetera. Con las mangas cubriendo sus dedos, In-seop recogió lentamente la
billetera.

Puede que lo hayas escuchado mal. Puede ser que Lee Woo-yeon
accidentalmente se le cayera la billetera. … Por supuesto, Lee Woo-yeon está
usando una billetera de cuero negro en lugar de una billetera marrón. Existía la
posibilidad de que tuviera una billetera que no conocía y la tiró porque se cansó
de ella. Todo tipo de posibilidades aparecieron en su mente. In-seop no sabía de
quién quería que fuera esta billetera. Abrió la billetera con sus manos
temblorosas lentamente. También contenía una identificación. Saco la
identificación.

Era un rostro familiar.

- Eww...

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Un doloroso gemido resonó en el callejón. Choi In-seop pudo decir quién estaba
acostado en un espacio donde uno apenas podía atravesar las grietas del edificio,
incluso sin mirarlo a la cara.

- Kang Young...

Incluso antes de que gritara su nombre, In-seop se dio cuenta de en qué tipo de
escena se estaba metiendo. No lo podía creer. Ni siquiera pudo parpadear,
preguntándose si estaba soñando. Sin embargo, el viento amargo que golpeó su
rostro lo trajo rápidamente a la realidad.

El toque frío del teléfono le tocó las yemas de los dedos.

Choi In-seop tenía la debilidad de Lee Woo-yeon.

<Continúa en el siguiente volumen>

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