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A mi esposa Carolina González y a mi hijo Juan Lucas,
2
AGRADECIMIENTOS
Quiero agradecer a Cesar Caballero mi director de tesis, quien es un colombiano ejemplar y que
en 2004 nos dejó una lección de ética que debe ser valorada como un triunfo de la moral. Sus
valiosas recomendaciones metodológicas y conceptuales fueron una guía fundamental para esta
investigación.
A Carlos Andrés Pérez quien aportó sus amplios conocimientos de estadística y econometría en
el procesamiento de la base de datos, su infinita paciencia para procesar de nuevo la
información con cada cambio que se me ocurrió fue fundamental para afinar el modelo de
análisis de multivarianza que soporta este estudio.
A ACCION SOCIAL en cabeza del Alto Consejero Presidencial Diego Andrés Molano, por
permitirme usar la Base de Datos de UNIDOS y por ser un amigo, mentor y guía en el ejercicio
del servicio público.
A mis compañeros de la estrategia UNIDOS, nunca he conocido personas con tanta pasión y
dedicación por su trabajo, a pesar del difícil reto que supone implementar en la práctica modelos
de reducción de pobreza. Mucho aprendí de ellos sobre la forma de aterrizar los documentos y
las teorías en la realidad, cuando se está frente a alcaldes y comunidades.
A mi esposa Carolina, quien tuvo que soportar largos fines de semana sin poder disfrutar en
familia y fue quien más me impulso a terminar esta investigación cuando el cansancio y las
actividades propias del trabajo me hicieron dejarla de lado. Su disciplina y rigor han sido más
que un ejemplo de vida.
A mi hijo Juan Lucas, quien aprendió a gatear durante la elaboración de este documento y logró
interrumpir cada vez que pudo mi concentración, la gracia de sus movimientos y su adorable
sonrisa me estremecen el alma. Gracias hijo por hacerme sonreír mientras escribí esta tesis.
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CONTENIDO
AGRADECIMIENTOS
...............................................................................................................
3
CONTENIDO
..............................................................................................................................
4
INTRODUCCIÓN
.......................................................................................................................
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CAPITULO 1:
............................................................................................................................
11
Conceptualización de la pobreza
...........................................................................................
11
El enfoque de justicia como imparcialidad y los bienes primarios.
...............................
11
El enfoque de las capacidades
...........................................................................................
14
Evaluar el bienestar – medir pobreza
................................................................................
17
CAPITULO 2:
............................................................................................................................
20
Principales métodos de medición de la pobreza y la evolución de los indicadores en
Colombia
...................................................................................................................................
20
Medidas subjetivas
..................................................................................................................
20
Medidas no monetarias
...........................................................................................................
27
Medidas monetarias
................................................................................................................
37
CAPÍTULO 3
.............................................................................................................................
50
Nuevas formas para la medición multidimensional de la pobreza.
...................................
50
Índice de Oportunidades
.........................................................................................................
51
Medición Multidimensional de la Pobreza en México
.........................................................
56
Índice de Pobreza Multidimensional – IPM (Índice de Oxford)
.........................................
59
Índice de Pobreza Multidimensional para Colombia (IPM-Colombia)
.............................
61
CAPÍTULO 4
.............................................................................................................................
65
Propuesta de variables adicionales para la medición multidimensional de la pobreza.
65
Características poblacionales de las Familias de la Red UNIDOS
..................................
66
Pirámide poblacional
............................................................................................................
66
Razón de dependencia
........................................................................................................
67
Análisis multivariado en la población unidos
.......................................................................
68
Análisis de cluster
....................................................................................................................
79
Resultados de los cluster.
.......................................................................................................
81
4
A MANERA DE CONCLUSIÓN
.............................................................................................
87
El papel de las medidas multidimensionales en el proceso de superación de pobreza.
....................................................................................................................................................
89
BIBLIOGRAFÍA
.........................................................................................................................
92
5
Tabla 4. Resultados del IOH – Colombia 1997 – 2008 …………………………………....55
Tabla 5. Variables dicotómicas ……………………………………………………………… 73
Tabla 6. Coeficiente de correlación variables seleccionadas más NBI e ICV …………...75
Tabla 7. Resultados del Cluster …………………………………………………………...… 81
6
INTRODUCCIÓN
7
i. Reconceptualización sobre el fenómeno de la pobreza,
ii. Diseño de una nueva forma de medición (indicadores),
iii. Acciones del Estado para adaptar su acción a los nuevos paradigmas.
Las mediciones no están reflejando el desarrollo de las acciones del Estado con las
consecuencias que esto puede tener en el diseño, implementación y evaluación de las
políticas públicas. Por lo tanto, si el índice de pobreza extrema medido por línea de
indigencia aumenta o disminuye de un periodo a otro, las explicaciones del fenómeno
suelen darse en términos de factores externos a la acción del Estado2 y no al éxito o al
fracaso en la implementación de las políticas públicas, especialmente la política social.
La presente investigación pretende dar una discusión crítica sobre los conceptos y
formas de medición de pobreza extrema, ofrecer una visión de las actuales tendencias
en materia de medición de pobreza desde la perspectiva multidimensional y de esta
1
La misión para la erradicación de la pobreza extrema y la desigualdad – MERPD, creada por el Gobierno
Nacional en cabeza del DNP en 2004, realizó una serie de 10 estudios parciales sobre pobreza en
Colombia. Dos propuestas son relevantes para este trabajo: i. la creación la Red de protección social para
la superación de la pobreza extrema, conocida actualmente como la Red UNIDOS; y ii. la propuesta de
2
Durante la presentación de resultados de pobreza del año 2008 Colombia experimento un aumento de
pobreza extrema del 15.7% en 2005 a 17.8% en 2008. Este comportamiento fue explicado por el Gobierno
por la inflación de alimentos que experimentó el país durante ese
año.http://www.dnp.gov.co/PortalWeb/LinkClick.aspx?fileticket=sTGqIR2LyJk%3D&tabid=36 Recuperado
el 17 marzo de 2010.
8
manera proponer algunos elementos para que el país logre avanzar en el propósito de
medir este fenómeno de una manera más acorde con los conceptos, realidades y
tendencias actuales.
El segundo capítulo aborda las principales formas de medición usadas para analizar la
pobreza haciendo énfasis en los métodos usados y los resultados obtenidos en
Colombia.
En el tercero se presentan algunas de las nuevas formas de medición adoptadas por
algunos países como México y organizaciones multilaterales como el Banco Mundial
con el índice de oportunidades. Se muestra cómo hay un movimiento vanguardista que
promulga mediciones multidimensionales de pobreza y se analiza el panorama sobre la
9
forma como están avanzando estas nuevas medidas y los retos que enfrentan estas
iniciativas.
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CAPITULO 1:
Conceptualización de la pobreza
Para John Rawls la justicia social está referida a lo que es justo con respecto a la
asignación de bienes en una sociedad, entendida como una asociación de personas que
durante su interacción reconocen ciertas reglas de juego y actúan conforme a ellas,
conformando un sistema de cooperación cuyo objetivo es promover el bien para todos
los que hacen parte del sistema. Esto determina “una unidad de intereses puesto que la
cooperación social hace posible para todos una vida mejor de la que pudiera tener cada
uno si viviera únicamente de su propios esfuerzos” (Rawls, 1995, p 18). No obstante, en
dicha interacción se genera un conflicto de intereses en tanto que las personas tienden a
distribuirse de manera distinta los beneficios producto de la colaboración: cada cual
tiende a querer una participación mayor a una menor de acuerdo con sus objetivos de
vida.
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La estructura básica de las sociedades determina de alguna manera el grado de justicia,
en tanto que Rawls afirma que las instituciones son las que determinan el modo para
“asignar derechos y deberes y definen la distribución correcta de los beneficiarios y las
cargas de la cooperación social” (Rawls, 1995, p 18). Dicho de otra manera, las
instituciones son justas en la medida en que no hagan distinciones arbitrarias –como
advierte Rawls–, en la manera como asignan a las personas derechos y deberes.
Aquellos que tienen unas oportunidades sociales más ventajosas que otros –y como
hemos dicho estas oportunidades fueron determinadas por las instituciones–, tienden a
tener una mayor participación en la definición o transformación de nuevas instituciones y
estructuras sociales, las cuales a su vez asignan derechos y deberes de manera
diferentes para otras personas, generando lo que podríamos llamar una espiral de
desigualdad, es decir, un ciclo en el cual surgen más estructuras que asignan derechos
y deberes de manera diferenciada, si no arbitrarios si desiguales.
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más extenso de libertades básicas, que sea compatible con un sistema semejante de
libertades para los demás; y ii. Las desigualdades sociales y económicas habrán de ser
conformadas de modo tal que…:a) se espere razonablemente que sean ventajosas para
todos, b) se vinculen a empleos y cargos asequibles para todos” (Rawls, 1995, p 68).
Esto solo sería posible si las personas basan los acuerdos fundamentales al crear las
instituciones como parte del contrato social desde lo que él llama “la posición original” es
decir un estado en el cual las personas desconocen su posición en la sociedad, así
como las dotaciones iniciales que les brindan ventajas y desventajas, incluso
desconocen sus concepciones acerca del bien y sus rasgos psicológicos. Es decir, las
personas al elegir los principios básicos de una sociedad lo harían tras un velo de
ignorancia, (Rawls, 1995, p 135), logrando elegir los principios más justos posibles.
Los bienes sociales primarios son derechos, libertades, oportunidades y poderes, así
como ingresos y riquezas; este tipo de cosas son aquellas que un hombre racional
“quiere tener, además de todas las [demás (sic)] que pudiera querer” (Rawls, 1995, p
95).Es evidente que estos bienes primarios tienen una conexión con las estructuras
3
Para ver una de las más importantes críticas a la Teoría de a Justicia de Rawls por parte del
republicanismo kantiano ver el texto: “Reconciliación mediante el uso público de la razón” donde
Habermas hace una fuerte crítica a la posición original. (Habermas 1998 p 44).
13
básicas de la sociedad, bienes sociales como “las libertades y oportunidades son
definidas por las reglas de las principales instituciones, y la distribución del ingreso y de
la riqueza está regulada por ellas” (p 95).
Rawls argumenta que los bienes primarios como medios necesarios para alcanzar los
fines que una persona puede tener en su plan de vida, pueden ser definidos por un
“índice de bienes sociales primarios” (Rawls, 1995, p 96). Un índice de este tipo permite
establecer comparaciones interpersonales de bienestar, las cuales deben estar
sustentadas sobre bases objetivas de comparación. “Resulta irracional preferir un fin
sobre otro sencillamente porque se le puede evaluar con mayor precisión” (Rawls, 1995,
p 94).
14
El enfoque de justicia como imparcialidad de Rawls argumenta que un índice de bienes
primarios identifica a las personas con menos ventajas y que la sociedad debería
establecer mecanismos para compensar estas diferencias. Reconoce también que a la
justicia como imparcialidad no le compete “el uso que las personas hagan de los
derechos y oportunidades de que disponen… supone que los miembros de la sociedad
son personas racionales capaces de ajustar sus concepciones del bien a su situación”
(Rawls, 1995, p 97). Quiso decir Rawls con esto que no importa como las personas usen
estos derechos, ni siquiera si se usan o no, basta con que todos tengan asegurada “una
libertad igual para llevar el plan de vida de les agrade”.
Sobre este postulado Sen argumenta que “si el fin es centrar la atención en las
oportunidades reales del individuo para alcanzar sus objetivos, habría que tener en
cuenta no solo los bienes primarios que poseen las personas sino también las
características personales relevantes que determinan las conversión de los bienes
primarios en la capacidad de la persona para alcanzar sus fines” (Sen, 2000 p 99).
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razones para perseguir, aquella que un individuo puede elegir de acuerdo con sus
intereses. En este sentido la concepción del desarrollo es un “proceso de expansión de
las libertades fundamentales” (Sen, 2000 p 19).
Los funcionamientos (o las funciones), son las diversas cosas que una persona logra
hacer o ser al vivir, las que una persona tiene razones para valorar, algunos
funcionamientos pueden ser muy básicos como por ejemplo comer bien, estar nutrido,
tener buena salud, etc., otros son más complejos como lograr la participación en la vida
social o la auto dignidad (Sen, 1998 p 56). Las capacidades son las diversas
combinaciones que una persona puede conseguir, por lo tanto las capacidades se
asocian a un tipo de libertad, la libertad para conseguir distintos funcionamientos, es
decir, la libertad para lograr diferentes estilos de vida (Sen, 2000 p 78).
Por lo tanto, los funcionamientos de una persona tienen que ver con la posibilidad de
elegir, “por ejemplo, el ayuno no consiste sólo en pasar hambre, sino en pasar hambre
por rechazar la opción de comer” (Sen, 1998 p 66). Hay una gran diferencia entre quien
no come porque no tiene otra opción y quien no lo hace porque así lo ha decidido en
razón a una libertad personal o una creencia. La segunda persona tiene un conjunto de
capacidades diferente a la primera toda vez que puede elegir alimentarse y estar bien
nutrida mientras que la primera no (Sen, 2000 p 100).
Sen reconoce el aporte de la idea sobre los bienes primarios de Rawls, como un
reconocimiento de las libertades de las personas, sin embargo, critica fuertemente la
conversión de los bienes primarios en la capacidad que tiene la gente de hacer cosas.
La forma en que las personas pueden convertir bienes primarios en la capacidad de
hacer cosas varia notablemente entre ellas, no es lo mismo las necesidades nutricioales
de una mujer embarazada de una que no lo está (Sen, 2010 p 95) Por lo tanto, Sen
plantea entonces, la necesidad de “trasladar el énfasis de los bienes primarios a la
evaluación efectiva de las libertades y las capacidades” (p 95).
De otro lado, la idea de justicia basada en las instituciones sociales y sobre la base que
sus principios serían seleccionados de manera imparcial, es fuertemente criticada por
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Sen, pues la considera hipótetica, el planteamiento de Rawls se basa en las instituciones
justas, pero no en “las sociedades justas, que pueden apoyarse tanto en instituciones
efectivas cuanto en caracteristicas reales del comportamiento” (p 96). Este será
entonces el eje sobre la cual Sen aborda su permanente crítica a la Teoría de la Justicia.
Para Rawls, los bienes sociales primarios como expectativas son sujetos de evaluación.
Desde el punto de vista del utilitarismo las expectativas pueden ser objeto de
comparaciones interpersonales, lo cual implica “tratar de encontrar algunas bases
objetivas para estas comparaciones, bases que los hombres puedan reconocer y
aceptar” (Rawls, 1995, p 94). El principio de la diferencia expuesto por Rawls supone
que los miembros menos favorecidos de la sociedad pueden identificarse,
probablemente sobre la base de un índice de bienestar. Es así como “las expectativas
de los hombres representativos se especifican en términos de bienes primarios”. (Rawls,
1995, p 360).
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de las cuales se considera que las personas padecen de privaciones escandalosas)”
puede proporcionar un enfoque de la pobreza (Sen, 1998 p 67). En este sentido, “la
identificación de la combinación mínima de capacidades básicas puede ser una buena
forma de plantear el problema del diagnóstico y medición de la pobreza”. (p 68).
Son numerosas las referencias en la obra de Sen en las que critica las medidas de
bienestar utilitaristas basadas principalmente en la renta (el ingreso) o en la mera
posesión de bienes como medios para alcanzar fines. Sen distingue al menos cinco
razones por las cuales la medidas de bienestar basadas en la renta no son adecuadas: i.
La heterogeneidad personal: las características de las personas hacen que las
necesidades sean diferentes, pues una persona con enfermedades puede necesitar más
renta que una que no las padece; ii. La diversidad del medio ambiente: aspectos como el
clima pueden hacer que las personas tengan necesidades distintas, son distintas las
necesidades de ropa y calefacción que tienes personas que viven en climas diferentes,
iii. Las diferencias de clima social: la presencia o ausencia de factores como la violencia
pueden afectar la transformación que hacen las personas de la renta en aspectos de la
calidad de vida; iv. Diferencias entre las perspectivas relacionales: el hecho de ser
relativamente pobre en un comunidad rica puede impedir que una persona logre ciertas
funciones dentro de su comunidad, a pesar del hecho que otras personas con un nivel
de renta menor logren esos funcionamientos en comunidades más pobres; y v.
Diferencias dentro de la familia: la familia es la unidad de análisis de las rentas, y
usualmente estos análisis presumen que la renta se distribuye equitativamente entre
todos los miembros de la familia, sin considerar que a veces se puede distribuir de forma
desproporcionada entre ciertos miembros de la familia (Sen, 2000 p 94 -96).
Estas cuestiones, sobre los enfoques del bienestar, asociados a la utilidad y la renta, o
hacia las capacidades básicas han dominado principalmente la literatura sobre el
problema de la medición de la pobreza; cada una de las mediciones que se proponen
tiene profundas raíces filosóficas sobre los conceptos presentados anteriormente, como
se muestra en adelante, las formas de medición dominantes se mueven en un amplio
espectro entre la utilidad de la renta y las libertades como capacidades.
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CAPÍTULO 2:
Medidas subjetivas:
Las medidas subjetivas de pobreza son entendidas como una forma de medición
complementaria a los análisis tradicionales que se hacen de la pobreza, especialmente
porque estos análisis son asociados a indicadores cuantitativos. Recientemente varios
20
autores han defendido la necesidad de complementar las mediciones de pobreza con
medidas subjetivas, es decir, identificando la percepción que tiene los pobres de ellos
mismos.
Aunque se han utilizado diferentes versiones de esta pregunta en esencia esta pregunta
busca determinar la percepción de las personas sobre su ingreso.
Las respuestas de la IEQ son utilizadas para establecer la relación entre el bienestar y el
ingreso de los individuos en particular (Aguado y Osorio 2006).
Esta pregunta ayuda a evaluar la brecha entre lo que las personas dicen ganar y lo que
gastan.
21
considerado “el nivel de pobreza subjetivo”, es decir el valor límite que define las
condiciones de ser pobre o no serlo.
Ingreso Mínimo
Subjetivo
Con esta pregunta, demostraron para el caso de Jamaica y Nepal, que es posible
obtener una medición subjetiva muy cercana a las mediciones objetivas usando líneas
de pobreza por ingreso.
22
Pregunta de la economía de escalera (Economic Ladder Question – ELQ).
Ricos
Imagine una escalera de 9 9
escalones, donde en el 8
primer escalón están las 7
6
personas más pobres y en el 5
último escalón están los más 4
ricos. ¿En cuál escalón se 3
ubicaría usted 2
hoy?(AGUADO y OSORIO Pobres
1
2006).
Los resultados confirmaron que, incluso por un poco aumento de los ingresos aumenta
la percepción subjetiva de bienestar económico, y adicionalmente confirmaron que las
formas en que la pobreza se mide convencionalmente no concuerdan con la percepción
subjetiva de quienes son los pobres. (Ravallion y Lokshin 1999).
La Economía de la felicidad.
El enfoque de la felicidad se usa para determinar, a través de una pregunta directa a los
individuos, el grado de bienestar. Se pregunta directamente por el grado de felicidad y
las respuestas son utilizadas como índice de bienestar. Un estudio en México
(RODRIGUEZ Sin Fecha) utilizó una pregunta sobre qué tan felices son las personas y
la comparó posteriormente con ciertas características socio demográficas. Si bien halló
cierta relación entre variables como el ingreso, el acceso a servicios públicos o el nivel
educativo, en la percepción de bienestar influye la heterogeneidad de los propósitos de
vida y el hecho de que el bienestar dependa de muchos dominios en la vida por ejemplo
los dominios laboral (la situación de la persona en su ambiente laboral), personal (la
posibilidad de desarrollar intereses y pasatiempos) o familiar (la relación con la pareja,
los hijos y los demás familiares), y no solo del dominio de consumo (la capacidad de
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adquirir bienes y servicios, la posesión del a vivienda y su situación financiera). La
pregunta utilizada fue la siguiente:
• Muy infeliz
• Algo infeliz
Tomando todo en cuenta en su • Ni feliz ni infeliz
vida, qué tan feliz es? • Algo feliz
• Bastante feliz
• Muy feliz
• Extremadamente feliz
Uno de los esfuerzos más recientes en medir la felicidad lo propuso el Reino de Buthan
al introducir en 2008 el Indice Nacional de Felicidad, sobre la base de nueve
dimensiones: 1) Bienestar sicológico: se estiman los niveles de estrés y prevalencia de
emociones como celos, frustración, generosidad, y tranquilidad. 2) Educación: Evalúa
calidad, escolaridad y nivel de educación. 3) Diversidad ambiental: acceso a servicios
ambientales, el conocimiento ambiental de la población y destaca por el indicador de
árboles sembrados por persona. 4) Nivel de vida: consumos de los hogares y el número
de casas propias, entre otros. 5) Gobernabilidad: calidad de los servicios públicos, la
confianza en las instituciones y los niveles de seguridad. 6) Salud: esima la atención
médica y las barreras de acceso, así como la calidad de los servicios de salud. 7) Uso
del tiempo: el tiempo que se dedica a dormir, a la participación comunitaria, a la
educación, al deporte, al cuidado de los demás y a meditar, entre otros. 8) Vitalidad
comunitaria: la confianza y el apoyo social entre los miembros de una comunidad, así
como los niveles de seguridad. 9) Cultura: conocimiento de la cultura propia, así como el
respeto y conocimientos de otras culturas. (The Centre of Buthan Studies, 2011).
24
reproducir los patrones de discriminación o marginación existentes si dichos patrones se
perciben como normales por la sociedad. Sin embargo, es innegable su utilidad como
método complementario para estimar el fenómeno de la pobreza, permitiendo entender
aún más las características de este, así como su contribución al diseño de políticas
sociales.
Fuente: NUÑEZ 2009
4
En el Capítulo L: Condiciones de Vida del Hogar. Se encuentran las preguntas: L4: Actualmente las
condiciones de su hogar son: (Muy buenas, buenas, regulares, malas); L5: Usted piensa que el nivel de
vida actual de su hogar, respecto al que tenía 5 años atrás es: (mejor, igual, peor); L7: ¿Usted se
considera pobre? (si, no); L11: Los ingresos mensuales de su hogar: (No alcanzan para cubrirlos gastos
mínimos, Sólo alcanzan para cubrir los gastos mínimos, Cubren más que los gastos mínimos); L13: ¿Cuál
considera usted que debería ser el ingreso mínimo mensual que requiere su hogar para satisfacer
adecuadamente sus necesidades? (Valor $); L22 Considerando todos los aspectos, qué tan satisfecho o
insatisfecho está usted con su vida actualmente? (use una escala de 0 a 10, teniendo en cuenta que 5 es
satisfecho, 10 es el mayor grado de satisfacción y 0 el mayor grado de insatisfacción); L23: Imagine una
escala de 10 peldaños, en la que en el escalón 1 se ubican las personas con la más baja calidad de vida y
en el 10 se ubican las de más alta calidad de vida, ¿dónde se ubicaría usted?
25
El gráfico 3 presenta la percepción de los colombianos en cuanto a su situación de
pobreza. Se evidencia una disminución de la precepción de pobreza en el 2008
comparado con el 2003. Aunque las cifras guardan cierta relación con las mediciones
de pobreza por línea de ingresos, al controlar por quintiles de gasto en la ECV 2008 se
evidencia que la percepción de pobreza no está en los quintiles más bajos. Como se
observa, la proporción de personas que se consideran pobres, disminuye con el
aumento del quintil de gasto, sin embargo, en los quintiles 4 y 5 se encuentran
porcentajes muy altos de hogares que se consideran pobres.
26
mínimos descendió del 58,1% al 51,5% en el mismo periodo. No obstante lo anterior,
sigue siendo importante tener en cuenta que uno de cada dos hogares en Colombia
considere que los ingresos son insuficientes para atender los gastos mínimos del hogar.
Medidas no monetarias
Las medidas no monetarias hacen parte del grupo de medidas de pobreza objetivas
frente a las privaciones de necesidades básicas, como resulta obvio no están basadas
en el ingreso, el gasto o consumo de los hogares, sino en la observación de ciertas
variables asociadas al bienestar. Algunos autores las denominan medidas directas del
bienestar en razón a la posibilidad de determinar directamente sobre los hogares que
gozan efectivamente de ciertas condiciones que afectan su calidad de vida. Las medidas
monetarias, por su parte, si bien se calculan sobre la base de una canasta básica, nada
garantiza que un hogar que tenga los ingresos para adquirir esa canasta, en efecto los
use para ese fin.
Hambre y desnutrición
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Sen (1992) el hambre es el aspecto más notorio de la pobreza. Usualmente se miden las
formas de desnutrición aguda, crónica y global y la carencia de una nutrición adecuada.
Si bien hay bastante acuerdo entre los teóricos de las mediciones de bienestar, del lugar
que ocupan el hambre y la desnutrición en el concepto de pobreza, no lo es tanto en la
forma de medición. Los requerimientos nutricionales son a menudo difíciles de
establecer con precisión en razón a las características de los diferentes grupos de
población incluso en la misma región, pero más aún es difícil traducir estos
requerimientos mínimos en alimentos, es decir, ¿cuál es el grupo de alimentos que
garantizan esos requerimientos nutricionales? Usualmente se opta por definir alimentos
adecuados a la región pero de bajo costo, construyendo una especie de “dieta” ideal con
base en el valor. Por supuesto, los hábitos de alimentación de la población no tienen
nada que ver con estos ejercicios de minimización de costos (Sen 1992). Actualmente
estas formas de medición se usan como una técnica de diagnóstico y de tamizaje de
28
bajo costo para identificar población que requiere atención especial, no tanto para medir
pobreza.
Gráfico 7. ENS 1990 – 2010. Desnutrición en niños menores de 5 años.
Fuente: ENDS 2010
29
Gráfico 8. Distribución de ingreso por quintiles de población
Fuente: ECV 2003 y 2008, cálculos autor.
En 1990 con la publicación del Informe de Desarrollo Humano por parte del Programa de
las Naciones Unidas para el Desarrollo – PNUD se publicó también el IDH como una
nueva forma de medir el desarrollo mediante la combinación de indicadores de
esperanza de vida, logros educacionales e ingresos en un índice compuesto. Se trató de
una combinación de variables sociales y económicas para medir el desarrollo relativo de
los países mediante una escala que va de 0 a 1, donde 0 es el menor desarrollo y 1 es el
máximo posible. Desde sus orígenes el IDH ha querido establecer una medida de
bienestar de los países alternativa al PIB.
Este índice pretende medir el desarrollo humano, entendido este como proceso de
“incrementar las posibilidades de elección de las personas” basado en el enfoque de
capacidades propuesto por Sen. (Mancero 2001 P 11) Desde su lanzamiento el IDH ha
30
sufrido toda suerte de críticas sobre su metodología y fuentes utilizadas, críticas que lo
han llevado a permanentes ajustes y a la inclusión de otros índices complementarios5.
Desde 1990 el índice mide tres aspectos fundamentales de la vida humana: longevidad
(Dimensión de Salud), conocimiento (Dimensión de Educación) y un nivel de vida
decente (Dimensión de Estándar de Vida), incorporando un enfoque denominado
“reducción de brechas”, el cual asigna una mayor importancia a las variables más
difíciles.6
Según el PNUD, casi todos los países han tenido avances muy importantes en
educación, ningún país ha disminuido ni el alfabetismo ni los años de instrucción, y las
carencias se concentran en la población de mayor edad, por lo que esto justifica pensar
5
A partir de 1991 se incluyeron otros índices como son: “ILH” = Índice de Libertad Humana, “IDM” = Índice
de Desarrollo de la Mujer, “IPM” = Índice de Potenciación de la Mujer, “IDG” = Índice de Desarrollo de
Género (igual a IDM), “IPG” = Índice de Potenciación de Género (igual a IPM), “IPC” = Índice de Pobreza
de Capacidad, “IPH” = Índice de Pobreza Humana. (MANCERO 2001).
6
El índice no usa valores normativos, sino que se establece sobre los valores máximos y mínimos que
puede alcanzar una variable, en ese sentido, los avances en cada dimensión se ponderan según la brecha
existente. Por ejemplo en la esperanza de vida es mucho más difícil, y por tanto tiene una mayor
importancia, pasar de una esperanza de vida de 60 a 70 años que pasar de 40 a 50 años.
31
en un indicador que ilustre de mejor manera el acceso que pueden tener los niños de
hoy. (PNUD 2010 P40-41).
Entre 1994 y 1999 se cambió el umbral e ingresos, fijado ahora, como el promedio del
PIB per cápita mundial en dólares PPA. (USD 5.120 para 1994). En 1999 se elimina la
idea del umbral de ingreso por lo que la nueva función de utilidad del ingreso incorpora
los retornos decrecientes únicamente a través de la función logarítmica7. (PNUD, 1999 p
159).
En la medición de 2010 se reemplaza el PIB per cápita mundial, por el Ingreso Nacional
Bruto – INB per cápita, para captar las diferencias entre el ingreso de los residentes de
un país y su producto interno. Esta modificación pretende incorporar a la medición, el
peso de las remesas que puede ser considerable para algunos países. (PNUD 2010 p
15).
Como se observa, los indicadores utilizados para el IDH han cambiado constantemente
en la medida en que el índice es criticado. Lo que no ha cambiado es el cálculo en si
7
La nueva forma de cálculo del ingreso real per cápita se estableció sobre la base del trabajo de Anand y
Sen (1999). Se conserva la idea según la cual los ingresos no son ilimitados para generar bienestar y se
elimina el umbral. La fórmula utilizada es: W(y)= log y – log y min / log y max – log y min
32
mismo. El procedimiento para calcular es índice es sencillo, inicialmente se calcula el
índice en cada una de las tres dimensiones y posteriormente se agrega en una sola
medida con la misma ponderación para cada dimensión.
1 1 1
!"# = !"# + !" + (!"#!)
3 3 3
Dónde: IEV: índice de esperanza de vida; IE: índice de educación; IPBI: índice de PIB.
Si bien el IDH se ha calculado por 20 años a cerca de 169 países, ha recibido muchas
críticas que aún no se han corregido con la sustitución de variables. En primer lugar, se
sigue criticando la fuente de los datos, muchos países no tienen cifras confiables por lo
que deben ser estimadas. El IDH es muy sensible a los cambios de metodologías para
hacer las estimaciones. En segundo lugar, el hecho de cambiar frecuentemente los
indicadores utilizados hace que los países sean comparables entre sí en el año del
informe, pero no tanto a lo largo de los 20 años de medición, por tanto, las evoluciones o
retrocesos en cada país pueden tener más explicación en la forma de cálculo que en los
avances o retrocesos del desarrollo humano. La tercera crítica tiene que ver con la
redundancia del indicador, pues el ordenamiento de países que produce el índice no es
sustancialmente diferente al ordenamiento que se produce cuando se analiza el PIB per
cápita de estos.
Por último, Castles (1999), ha sugerido que muchas de las conclusiones de los informes
son resultado de una mala interpretación estadística, y lo ejemplifica con el caso de
Omán en el cual el IDH demuestra que no hay avances en desarrollo humano, en tanto
que otras agencias del sistema de Naciones Unidas, como UNESCO, sostienen que ha
avanzado en temas como alfabetismo.
33
Gráfico 9. Evolución del IDH comparada Mundo, América Latina, Colombia
Fuente:
International
Human
Development
Indicators
en
http://hdrstats.undp.org/en/tables/default.html
Recuperado
el
22
de
marzo
de
2011.
34
medir su capacidad económica, los censos suelen no contener información sobre esas variables y,
cuando la contienen, ésta es poco fiable. Indiscutiblemente, el método NBI también debería
considerar necesidades básicas como la salud y la nutrición, pero las variables respectivas no están
disponibles en los censos de la región. Dadas estas limitaciones, el segundo paso en el proceso de
selección de indicadores consiste en determinar cuáles son las dimensiones factibles de ser medidas
dentro de cada necesidad básica, y qué variables censales serán utilizadas para dar cuenta de dichas
dimensiones. Tabla 1. Dimensiones y variables consideradas en el NBI.
Cuadro 1
NECESIDADES BÁSICAS, DIMENSIONES Y VARIABLES CENSALES
Necesidades Básicas Dimensiones Variables Censales
Acceso a vivienda a) Calidad de la vivienda Materiales de construcción utilizados en piso,
paredes y techo
b) Hacinamiento i) Número de personas en el hogar
ii) Número de cuartos de la vivienda
Acceso a servicios a) Disponibilidad de agua potable Fuente de abastecimiento de agua en la
sanitarios vivienda
b) Tipo de sistema de eliminación i) Disponibilidad de servicio sanitario
de excretas ii) Sistema de eliminación de excretas
Acceso a educación Asistencia de los niños en edad i) Edad de los miembros del hogar
escolar a un establecimiento ii) Asistencia a un establecimiento educativo
educativo
Capacidad económica Probabilidad de insuficiencia de i) Edad de los miembros del hogar
ingresos del hogar ii) Ultimo nivel educativo aprobado
iii) Número de personas en el hogar
iv) Condición de actividad
Fuente: CEPAL / PNUD (1989).
11
La medición en Colombia del NBI ha mostrado una mejora en todos los indicadores,
principalmente en los servicios públicos inadecuados y la inasistencia escolar.
35
Gráfico 10. Porcentaje de Personas con NBI.
Fuente: DANE. Censo de población 2005.
36
medida a través de la infraestructura, con riqueza física colectiva aproximada a través
del acceso a servicios públicos domiciliarios, con riqueza humana individual medida por
la educación de los miembros del hogar y la riqueza humana colectiva básica
aproximada por la composición de la familia. El índice asigna un puntaje entre 0 y 100,
que a medida que se incrementa, denota condiciones de vida más favorables: Es un
índice que conjuga variables categóricas y las combina en una sola variable continua.
Medidas monetarias:
Las medidas monetarias hacen parte del grupo de medias indirectas, en razón a que no
pretenden medir efectivamente el bienestar de los hogares, sino que miden si el hogar
tiene los recursos suficientes para cubrir ciertos estándares de calidad de vida,
37
independientemente si los hogares tiene la capacidad de traducir esos recursos en ese
estándar de bienestar. Dicho de otra manera, nada garantiza que los hogares con cierto
nivel de recursos, tenga un nivel de vida correspondiente. La noción de “línea de
pobreza” parte de la base de identificar un estándar que puede ser alcanzado con cierto
nivel de ingreso (o de gasto).
El Consumo calórico.
También es llamado FEI, por sus siglas en inglés. (Food-energy intake method). Según
este método, la línea de pobreza corresponde al nivel de ingreso (o de gasto) que
permite a un hogar alcanzar un consumo determinado de calorías. Según Feres y
Mancero (2001), hay dos formas utilizadas en la práctica para el cálculo de esta línea de
pobreza. Una de ellas es seleccionar una submuestra de hogares con un consumo
calórico cercano al requerido, y utilizar su ingreso promedio como línea de pobreza. La
otra opción es correr una regresión entre consumo calórico e ingreso, y con la relación
encontrada evaluar el ingreso necesario para consumir las calorías preestablecidas
(Feres y Mancero 2001 p. 18).
Adicionalmente, la metodología para establecer la línea de pobreza a partir del FEI, tiene
dos problemas que reflejan las debilidades de este método de medición de pobreza. La
primera es la diferencia urbana – rural, (World Bank, 2005. p 60) según la cual los
alimentos en las áreas rurales son más baratos que en las áreas urbanas, el efecto que
tiene esto es que sobre estima la pobreza rural y subestima la pobreza urbana. La
segunda tiene que ver con los precios relativos, la aplicación del método FEI en Vietnam
38
falló en 1998, cuando se encontró que las mismas 2.100 calorías que sirvieron de base
para establecer la línea de pobreza en 1993 eran mucho más caras que en 1998. (World
Bank, 2005. p 63). Algo claramente contradictorio con el crecimiento del 9% anual del
PIB entre 1993 y 1998. Cuando los investigadores analizaron las razones encontraron
que el precio de los alimentos había aumentado en ese período en un 70% en tanto que
los bienes distintos a los alimentos aumentaron 25%. Lo que generó que la línea de
pobreza de 1993 tuviera un salto inverosímilmente alto para 1998.
Uno de los elementos centrales de este método, se basa en identificar una población de
referencia (EPR), es decir, una población cuyo ingreso (o gasto) se calcula cercano a la
línea de pobreza. Determinar el EPR es uno de los primeros problemas que enfrenta el
método. Autores sugieren tomar el grupo de referencia cercano al nivel de pobreza. p.e.
si el nivel de pobreza se estima en el 40% conviene seleccionar a la población entre los
percentiles 30 y 50. Herrera, (2010 p 26). Sugiere también que el EPR sea uno solo
compuesto por hogares con distintas conformaciones y de diferentes regiones.
La línea de indigencia.
Para establecer la línea de indigencia se debe establecer en primer lugar una canasta
básica. Subyace aquí una discusión sobre la conveniencia de usar una canasta básica
39
normativa (es decir una canasta ideal que se construye sobre la base aporte calórico,
proteico, micro nutrientes, etc.) o una canasta real (canasta observada en la demanda
de alimentos de población) basada en los hábitos de consumo y en criterios de
frecuencia, cantidades, contribución al gasto, aporte calórico, etc. Es frecuente en los
países de América Latina el uso de la canasta real sobre la EPR.
Herrera (2010) advierte que un elemento adicional que debe tenerse encuentra para la
estimación de la línea de pobreza, es determinar si se usan los ingresos o los gastos. La
medición de la pobreza por la vía de gasto tiene la ventaja de medir mejor el nivel de
vida de los hogares por la vía del consumo efectivo, aunque este consumo se logre por
la vía del ahorro o del endeudamiento.
El gasto, refleja la adquisición real de bienes y servicios y por tanto, está asociada de
manera directa a la utilidad de los hogares, no solo al potencial de consumo como ocurre
con la medición del ingreso. Es claro que un hogar con ingresos cercanos a la línea de
indigencia tiene los recursos necesarios para comprar una canasta de alimentos mínima
para garantizar su subsistencia, pero otra cosa es que utilice el 100% de sus ingresos en
ella.
40
periodos con ingreso cero o periodos con altos ingresos. Esto se refleja especialmente
en los hogares rurales que viven de cultivos, que como se sabe, no generan ingresos
permanentes. Por último, la medición de las líneas de pobreza, por la vía del gasto
genera menos resistencia a la declaración por parte de los hogares. En general, se ha
evidenciado que los hogares tienden a sub declarar sin ingresos.
No obstante lo anterior, es frecuente que las mediciones se basen en el ingreso más que
en el gasto, básicamente por la disponibilidad de información, pues es más sencillo
identificar ingresos en los hogares, que identificar el gasto, dada la complejidad que
implica medir el consumo de todos los bienes y servicios que puede adquirir un hogar.9
El ingreso entonces –entendido como la cantidad de recursos que recibe un hogar
durante un período determinado– se asume como una medida de la capacidad de los
hogares para acceder al consumo de bienes y servicios. Como se anotó antes, el
consumo puede ser mayor al ingreso si la unidad se endeuda o vende parte de sus
activos para satisfacer sus necesidades, pero también puede ser menor si presta de
parte de sus ingresos o invierte en activos. En este sentido, se define al ingreso como “el
máximo monto que el hogar... puede contar para gastar en bienes y servicios de
consumo durante el período contable sin tener que financiar sus gastos a través de la
disminución de efectivo, de disponer de otros activos financieros y no financieros o de
incrementar su pasivo” (citado por Beccaria 2007). Esta definición excluye la variabilidad
de los ingresos por cambios en los activos o los pasivos de un hogar.
Una de las dificultades que enfrenta usar el ingreso como medida de bienestar, es la
confiabilidad en la información. Cuando se reporta el ingreso se presentan sesgos que la
metodología de medición de pobreza debe estimar y corregir, estos sesgos son: i.
sesgos asociados al muestreo; ii. No respuesta a ciertas preguntas, iii. Respuesta
incompleta, iv. Sub declaración.
9
La medición del ingreso se reduce a unas variables: Ingresos de los empleados; ingreso del empleo
autónomo, alquiler, renta de propiedad y transferencias. (Beccaria 2007)
41
Los errores asociados a muestreo, se pueden corregir en el contexto de cada encuesta,
en tanto que los otros tres son más difíciles de detectar10. En el caso de las no
respuestas el ajuste de los datos se hace imputando el ingreso no contestado con
relación a otros hogares de las mismas condiciones de aquel que no proporcionó la
respuesta.
La línea de pobreza.
Según los datos de MESEP (Misión para el empalme de las series de empleo, pobreza y
desigualdad) en los resultados de cifras, pobreza y desigualdad 2009 los pasos para la
asignación del insumo principal como medida monetaria parte de la Encuesta de
Hogares luego de imputar los sub registros ajustando por cuentas nacionales.
10
Para un análisis más detallado de los errores frecuentes en la medición del ingreso y las técnicas
utilizadas para su ajuste véase (FERES 1997).
42
Esta misión efectuó los empalmes de las series 2002 a 2005 y así responder al cambio
metodológico ocurrido al pasar de la encuesta continua de hogares a la gran encuesta
integrada de hogares, de esta manera se oficializó la cifras de pobreza por medio de
este insumo monetarios correspondiente al periodo 2002 al 2008 (sin incluir 2006 y
2007) siendo comparables:
Es importante tener en cuenta que este cálculo refleja el promedio esperado del total de
hogares sin tener en cuenta la inequidad en los ingresos y esta medida tendrá completa
validez cuando los ingresos tienden a ser normales y no inequitativos. Según el grafico
12 la tendencia varía únicamente para el año 2009 aproximadamente en un 2%.
Frente a la pobreza nacional desde el año 2002 al año 2009 se ha disminuido en 8.2
puntos porcentuales. El gráfico muestra una tendencia clara descendente pero cada vez
43
con menor intensidad, el cambio más representativo de dio en 2002-2003 (2.5%), se
mantuvo estable entre 2003-2005. Durante los 2006 y 2007 debido a un cambio de
metodología del DANE, no fue posible medir la pobreza, lamentablemente el país se
quedó sin mediciones justo en los años en los que más aumentó de PIB en las últimas
tres décadas. Fue necesario crear la Misión para el empalme de las series (MESEP)
para empalmar las series de los años anteriores dada la nueva encuesta y metodología
incorporada por el DANE.
Gráfico 13 Pobreza nacional
44
Gráfico 14. Pobreza extrema nacional
11
La única medida de las analizadas hasta ahora que no identifica a los pobres es el IDH por ser una
medida agregada que hacer referencia al bienestar de un país. Algunas de las variables usadas para
medir el IDH no se pueden determinar para cada persona u hogar sino que se les asigna a un conjunto de
la población, como por ejemplo la esperanza de vida, o las tasas de cobertura de educación.
45
Para entender las medidas agregadas de la pobreza, es necesario considerar el enfoque
axiomático incorporado por Sen en 1976. Los axiomas de los índices de pobreza son
ciertas condiciones que estos deben cumplir para garantizar su robustez. Algunos de los
axiomas más relevantes se describen a continuación. (Feres y Mancero 2001a).
El Axioma focal establece que una medida de pobreza no puede variar si hay una
variación en el ingreso de los no pobres. Por supuesto los cambios en el ingreso de
quienes están por encima de las líneas de pobreza no debe afectar el bienestar de las
personas pobres. El axioma focal, en últimas lo que establece es la conveniencia de
usar promedios en los índices agregados de pobreza, porque los promedios son muy
sensibles a los cambios en el ingreso de los no pobres.
El Axioma de monotonicidad indica que una medida de pobreza debe ser sensible a la
disminución de los ingresos de los pobres. Es decir que como medida agregada de
pobreza, debe haber correspondencia con la distancia de los pobres respecto de la
línea.
!
!=
!
46
De forma simple, el índice de recuento es el porcentaje de personas que se encuentran
bajo la línea de pobreza en relación con el porcentaje total. Es evidente que esta es
una medida sencilla de interpretar y de comunicar para fines de política pública, cumple
con el axioma focal porque cualquier aumento en el ingreso de los no pobres no modifica
el valor del índice. De igual forma, si los más pobres disminuyen su ingreso el índice
permanece invariable, por lo cual se dice que este índice no cumple con el axioma de
monotonicidad, al igual que si hubiera una transferencia de ingreso entre los pobres – y
en el entendido en que con esta transferencia ninguno supera la línea de pobreza – el
índice no lo podría captar, por esto tampoco se cumple con el axioma de transferencias.
Para medir la profundidad de pobreza, es decir, qué tan pobres son los pobres, se usa el
índice de brecha de la pobreza, se denota como PG (por su nombre en inglés, “poverty
gap”). Este índice indica la distancia promedio de los pobres en relación con la línea de
pobreza pero ponderado por la incidencia. La brecha de pobreza se calcula así:
!
1 ! − !!
!" =
! !
!!!
Una forma simple de este índice es: PG = H * I, Donde I es el coeficiente de brecha del
ingreso entendido como:
! − !
! =
!
47
manera establece el porcentaje que le hace falta al promedio de los pobres para
alcanzar la línea de pobreza, por tanto entre mayor sea ese número más lejos están
los pobres del valor normativo.
Esta interpretación es útil cuando se requiere estimar el valor que se requeriría para
eliminar la pobreza vía transferencias monetarias a los pobres. El mínimo costo para
eliminar la pobreza es simplemente la suma de todas las brechas de la población
pobre. (Ravallion, 1992).
La razón por la cual se debe ponderar el coeficiente de brecha del ingreso por el índice
de recuento obedece a que si se tomara el primero solo, para cada persona cerca del
umbral de pobreza que dejara de ser pobre, el promedio y disminuiría, y por tanto I
aumentaría (dado que solo se toma el promedio de los pobres) a pesar de que ahora
hay un pobre menos y el resto está en las mismas condiciones.
10 − 6.33
! = = 0.36
10
10 − 5
! = = 0.50
10
48
Lo que refleja un aumento en el índice de brecha de ingreso a pesar que ahora hay un
pobre menos. Para corregir ese problema se pondera por el índice de recuento H.
PG= H*I, reemplazando el primer ejemplo, entonces PG= 0,375 * 0.36= 0,135, en
tanto que en el segundo ejemplo PG=0,250 * 0,50= 0,125, lo cual refleja una mejoría
en el entendido en que una brecha cercana a cero equivale a una brecha más
pequeña.
El índice de brecha de pobreza cumple con el axioma focal y, a diferencia del índice
de recuento, cumple también con el axioma de monotonicidad, pues si el ingreso de
una persona pobre disminuye, el promedio de ingresos también caerá y el índice PG
aumentará. (Feres y Mancero 2001a). Sin embargo, esta medida no cumple con el
axioma de transferencia, ya que un traspaso de ingresos de una persona pobre a una
persona menos pobre no se reflejará en el índice PG, dado que la media de ingresos
permanecerá constante.
49
CAPÍTULO 3
Cómo hemos visto hasta ahora, los enfoques conceptuales de la pobreza coinciden en
afirmar que el bienestar es multidimensional. “Existe un acuerdo generalizado que la
privación es multidimensional. No es suficiente mirar sólo a la pobreza de ingresos,
también tenemos que mirar a otros atributos” (Atkinson, Citado por Alkire 2010a). Los
esfuerzos por lograr mediciones multidimensionales se han visto limitados en cuanto a
las variables que se usan para construir índices sintéticos. Estas limitaciones han estado
asociadas en primer lugar a la disponibilidad de la información de los censos o las
encuestas de hogares, pero también al contexto relevante de los países. La falta de
acceso a servicios públicos en América Latina determinó en gran medida las variables
que se usaron para el NBI.
Como lo reconoce el Banco Mundial, los países de América Latina han logrado empezar
una reducción lenta de la pobreza (Banco Mundial 2008, p. 8), pero no así de la
desigualdad. Cada vez toma mayor importancia en el debate la inequidad en la región
más desigual del mundo. Nuevos conceptos sobre trampas de pobreza, vulnerabilidad,
manejo del riesgo y protección social han enriquecido el debate. Estas nuevas
tendencias han orientado a los académicos y policy makers buscar nuevas formas de
entender el fenómeno de la pobreza en los contextos actuales.
Por lo tanto es fácil ver que en los últimos años, ha surgido una nueva tendencia de
medición multidimensional de los niveles de bienestar. Alkire (2010) mostró que los
indicadores multidimensionales combinan juicios de valor normativo con técnicas de
medición estadística. Como sabemos los juicios de valor normativo que se establecen,
dependen del contexto de la sociedad. “En una sociedad bien ordenada, regulada de
modo efectivo por una concepción compartida de la justicia, existe también un acuerdo
público acerca de lo que es justo e injusto. (Rawls, 1998. p. 64).
50
Como se verá continuación, algunas de las nuevas formas de medición de pobreza y
desigualdad han utilizado nuevos juicios de valor normativo, y mejorado las técnicas de
medición estadística, en un esfuerzo por comprender mejor la pobreza, construir mejores
marcos de evaluación de las políticas públicas y orientar los esfuerzos del Estado hacia
la focalización adecuada de recursos, todo eso mientras se intenta mejorar las fuentes
de información disponibles.
Índice de Oportunidades
51
• Pueden ser injustamente influenciadas por las circunstancias.
“En su interpretación más simple, el IOH mide la tasa de disponibilidad de los servicios
que son necesarios para progresar en la vida (como por ejemplo, el agua potable),
descontando o “penalizando” la tasa por cuán injusta es la distribución de esos servicios
entre la población”. (Vélez, Azevedo, Posso 2010 p 11). La forma de distribución es la
innovación en el índice, puesto que dos regiones con la misma cobertura “pueden tener
distintos IOH si los ciudadanos que no tienen el servicio son todas mujeres, o todos
indígenas, o todos tienen un alto número de hermanos o, en términos generales,
comparten una circunstancia personal que no esté bajo su control. En otras palabras, el
IOH es la cobertura corregida por la equidad”. (2010 p 11)
52
Así, un crecimiento de la cobertura de un servicio básico a nivel nacional es
posible que mejore el índice.
O = p* (1 – D)
Existen dos versiones del índice, el IOH agregado de 5 oportunidades o IOH Agregado
Internacional – IOHa5 y el IOH agregado extendido a 12 oportunidades –IOHa12, el cual
incluye las variables del IOHa5 más 7 variables adicionales.
IOHa5 IOHa12
53
No obstante, la versión del IOH para Colombia incluye 24 indicadores:
54
La medición del IOH para Colombia, sobre la base de las encuestas de calidad de vida
1997, 2003 y 2008, arrojó una mejora en casi todos los periodos. Entre 1997 y 2008 el
IOHa5 creció 8 puntos, a una tasa de 0,8 anual, en tanto que el IOHa12, creció 17
puntos a una tasa de 1,6 anual.
Esto se explica porque el crecimiento de las primeras 5 variables es mucho más difícil
cuando se han alcanzado niveles alrededor de los 70 puntos; obsérvese la asistencia
preescolar como pasó de 34 en 1997 a 59 en 2008, (25 puntos en una década es un
gran avance), y compárese con la asistencia escolar entre 9 y 15 años como paso de 83
en 1997 a 91 en 2008, al parecer un crecimiento de 9 puntos parece bajo en solo una
década, pero es un buen resultado cuando se parte de un nivel alto.
55
Medición Multidimensional de la Pobreza en México
12
La Ley General de Desarrollo Social aprobada en 2004.
56
En ese sentido, la medición del enfoque de bienestar se asoció a la disponibilidad de
recursos económicos, reconociendo la importancia del ingreso como una forma de
aproximarse a las capacidades que le permiten a una persona elegir opciones de vida.
Para ello fue necesario construir nuevas líneas de pobreza, llamadas línea de bienestar
y línea de bienestar ajustado.
“El espacio de los derechos sociales establece un vínculo directo entre el ejercicio de los
derechos y la medición de la pobreza. Por lo anterior, los indicadores de carencia social
que se utilicen para medir la pobreza deben ser tales que identifiquen elementos mínimos
o esenciales del derecho, sin los cuales se pueda asegurar que una persona no ejerce o
no ha podido ejercer alguno de sus derechos sociales definidos en la Ley”. (2009 p 35)
13
Para profundizar sobre los umbrales establecidos en cada indicador ver CONEVAL (2009)
57
carencias. El umbral de privación extrema (C*) está determinado por 3 carencias de las
seis que componen el indicador de derechos. (2009 p 23).
Ahora bien, la forma de combinar las dos mediciones obtenidas hasta ahora se
establece de la siguiente manera:
58
Para establecer el grupo de población en situación de pobreza extrema multidimensional
se establecieron dos umbrales adicionales: para el ingreso la línea de bienestar mínimo
y para los derechos sociales el umbral de privación extrema C*= a tres carencias. Lo
cual genera un subgrupo denominado I”.
59
El IPM, parte de la premisa que las condiciones de personas en entornos de pobreza no
se genera exclusivamente por la carencia de ingresos. El índice complementa las
medidas de la pobreza basadas en ingresos, reflejando “las privaciones simultáneas que
padecen los hogares en las tres dimensiones del IDH y muestra la cantidad promedio de
personas pobres y las carencias que deben afrontar estas familias”. PNUD 2010.
Para identificar a los pobres se agregan los puntajes de privación para cada hogar a fin
de obtener la privación total del hogar. El punto de corte para establecer los hogares
pobres y no pobres, es de 3, es decir, un tercio de los indicadores. De esta manera un
hogar con 3 o más carencias se considera pobre.
14
Los umbrales definidos son: “en educación: ningún miembro del hogar completó cinco años de
educación y por lo menos un niño en edad escolar (hasta grado 8) sin asistir a la escuela. Los umbrales en
salud son: al menos un miembro del hogar está desnutrido y uno o más niños han muerto. Los umbrales
en el nivel de vida se relacionan con: no tener electricidad, no tener acceso a agua potable, no tener
acceso a saneamiento adecuado, usar combustible “contaminante” (estiércol, leña o carbón) para cocinar,
tener una vivienda con piso de tierra y no tener auto, camión o vehículo motorizado similar y poseer sólo
uno de los siguientes bienes: bicicleta, motocicleta, radio, refrigerador, teléfono o televisor”. (PNUD 2010 p
242)
60
Gráfico 17. Variables del IPM.
2
El IPM refleja la incidencia, así como la intensidad de la pobreza es decir que una
persona que tenga el 90% de las privaciones en los indicadores está claramente en una
peor situación que alguien que tiene el 20% de las privaciones15.
61
de modificación por medio de la política pública. Otro de los objetivos es que el nuevo
índice tenga la capacidad de discriminación en el contexto Colombiano y así permitir
determinar no sólo la incidencia del la pobreza, sino la brecha y la severidad, como se
sabe ni el NBI y el ICV permiten desarrollar estas medidas agregadas.
• Asistencia escolar: Hogares con al menos un niño entre 6 y 16 años que no asiste
a una institución educativa
• Regazo Escolar: Hogares con al menos un niño entre 7 y 17 años con rezago
escolar (número de años aprobados es inferior a la norma nacional)
• Acceso a servicios para el cuidado de la primera infancia: Hogares con al menos
un niño de 0 a 5 años sin acceso a todos los servicios de cuidado integral (salud,
nutrición y cuidado)
• Trabajo Infantil: Hogares con al menos un niño entre 12 y 17 años trabajando
62
Ocupación
Salud
63
Grafico 18. Pesos y componentes IPM Colombia
DNP (2011)
Como hemos visto hasta ahora, estos ejemplos de medición multidimensional buscan
ampliar el espectro de las dimensiones que deben ser consideradas en la medición de la
pobreza y la desigualdad. Todos han partido de amplios conceptos de pobreza, pero
pasar del concepto a la implementación implica elegir ciertas dimensiones del bienestar
sobre otras. La selección de las dimensiones que componen una medición son un
problema conceptual fundamental, es allí donde los conceptos toman forma y se vuelven
aplicables.
Alkire (2010b) explica que existen cinco formas que usualmente los investigadores usan
para elegir las dimensiones: la teoría sobre la cual se soporta el índice, las datos
disponibles, el consenso público, los procesos participativos y la evidencia empírica
respecto de los valores de las personas. Si bien algunas de ellas pueden no estar
presentes en la definición de una medida multidimensional, es evidente que la
disponibilidad de los datos es una de las que más limita la construcción de índices
multidimensionales.
64
65
CAPÍTULO 4
66
Actualmente la Red UNIDOS cuenta con más de un millón cuatrocientos mil familias
acompañadas en 1.026 municipios del país. (ACCION SOCIAL 2011) y ha construido
una robusta base de datos que no solo da cuenta de los logros básicos que las familias
han alcanzado o que tienen por alcanzar, sino que brindan información necesaria para la
gestión de la oferta. La línea de base cuenta con 238 preguntas en las dimensiones
citadas lo cual se constituye en una herramienta fundamental para la gestión de las
políticas públicas, así como una fuente importante de información para la investigación.
Esa base de datos cuenta con 3`978.350 registros de familias pobres y en situación de
desplazamiento y se constituye en el universo de análisis de la presente investigación.
Pirámide poblacional
67
Gráfico 19. Pirámide Poblacional de UNIDOS
Para leer esta pirámide poblacional, es necesario hacer una consideración metodológica
antes. La encuesta de UNIDOS se desarrolló entre el 2009 y 2010, actualmente solo se
ha levantado la línea base, por lo tanto no se han registrado los nacimientos desde el
levantamiento de la encuesta hasta ahora, eso explica porque el porcentaje de menores
entre 0 y 4 años es tan bajo. Todos los demás grupos etáreos son comparables.
Razón de dependencia
68
compara hipotéticamente las poblaciones con y sin capacidad (edad) de tener algún tipo
de actividad de producción.
!!!" + !!!"
!" = ∙ 100 = 75,4%
!!!"!!!"
Para la presente investigación se tomó la base de datos de UNIDOS con corte a abril de
2011, la cual contaba con 1´163.017 registros de familias pobres, posteriormente se
calculó el NBI y el ICV a cada una de las familias, se seleccionaron 13 variables
adicionales que se consideraron asociadas a la pobreza, algunas de las cuales no son
incluidas dentro de las mediciones multidimensionales en Colombia y posteriormente se
16
Si este índice fuera igual a 100% significaría que las personas que no trabajan (<15 y >65) tendrían total
dependencia de los que si están en edad de producir.
69
utilizaron técnicas de análisis multivariado para establecer grupos (cluster) de familias y
analizar las diferencias entre los grupos. A continuación se presentan un análisis sobre
las variables seleccionadas y posteriormente se explican los hallazgos de los cluster.
Dado que las mediciones más utilizadas en Colombia para medir pobreza
multidimensional han sido el NBI y el ICV, se tomó el universo de familias UNIDOS y se
calcularon esos indicadores arrojando los siguientes resultados:
NBI
Es importante mencionar la relación que existen entre ambos indicadores, es decir que a
medida que el ICV se incrementan el NBI tiene menor incidencia.
Como se explicó antes, el ICV es una variable continua entre 0 y 100 de acuerdo con la
gráfica 16, se observa que en general los hogares se encuentran distribuidos por toda la
unidad y son bastantes heterogéneos. Como se observa, mayoría de las familias tienen
un ICV por debajo de los 80 puntos y más de una NBI, lo que demuestra que la
estrategia UNIDOS tiene una adecuada focalización hacia los más pobres, sin embargo,
como se mostrará más adelante, un grupo de familias con similar NBI o ICV no tiene
necesariamente las mismas condiciones cuando se analizan otras variables.
70
El NBI es una variable categórica y refleja que la mayor parte de los hogares (34%)
tienen dos necesidades básicas insatisfechas, por otro lado no existen muchos hogares
que presenten las cinco y solo el 7% presentan cuatro necesidades básicas
insatisfechas. El 11% de los hogares vinculados a UNIDOS no tiene necesidades
básicas insatisfechas, lo cual no quiere decir que no sean pobres, sino que más bien
refleja la obsolescencia de este indicador, por cuanto esta familias son vulnerables
según las variables del Sistema de Selección e Identificación de beneficiarios de
Programas Sociales - SISBEN, razón por la cual hacen parte de la estrategia de
reducción de pobreza.
Con el fin de establecer si hay diferencias entre los grupos familias de similares NBI o
ICV se seleccionaron 13 variables observables en las familias a través de la línea base
de UNIDOS. La selección de estas variables derivó del criterio del investigador buscando
que hubiesen variables que hoy contemplan los indicadores tradicionales, con el fin de
darle robustez a los resultados y otras que actualmente no se tienen en cuenta en las
mediciones tradicionales, las variables seleccionadas para el análisis fueron las
siguientes:
• Jefatura femenina: Del total de hogares del análisis, el 41% aseguran tener como
jefe del hogar a una mujer y el 59% a un hombre.
• Desplazamiento: Aproximadamente la quinta parte de los hogares presentan esta
condición, entendida como hogares con al menos una persona en situación de
desplazamiento reconocida como tal por los sistemas de información del Estado.
El resto de las familias son familias vulnerables de los primeros tres quintiles del
nivel 1 del SISBEN.
• Embarazo: 10 de cada 100 familias presentan casos de embarazo de mujeres
mayores de 20 años al momento de la visita del cogestor.
• Embarazo adolescente: Del total de las familias, el 3% casos en los cuales las
niñas menores de 20 años estaban embarazadas o ya habían tenido al menos un
hijo. Sin embargo, cuando se analizan solo las familias que tienen mujeres
71
menores de 20 años, este porcentaje llega al 13%. En total se reportan en la base
de datos 37.201 mujeres en embarazos o con hijos menores de un año.
• No cobertura de energía eléctrica: 10% de las familias en pobreza extrema
acompañadas por la red UNIDOS no tiene cobertura del servicio de energía
eléctrica.
• No cobertura en alcantarillado: aproximadamente la mitad de las familias pobres
extremas en Colombia no cuentan con el servicio de acueducto y alcantarillado.
• Variables de la dinámica familiar: 5% de los hogares presentan casos de violencia
intrafamiliar, 3% alcoholismo y drogas, por otro lado 1 de cada 100 presenta
casos de abuso sexual. Es importante tener en cuenta que estas variables son
asignadas por el cogestor por medio de la percepción del mismo y aunque se
convierte en una variable subjetiva tiene sentido cuando se relacionan con otros
componentes de la encuesta, como por ejemplo las denuncias frente entidades de
protección o casos de trabajo infantil.
• Discapacidad: La cuarta parte de las familias de Unidos tiene alguno de sus
miembros con problemas para desarrollar sus tareas diarias o algún impedimento
para realizar alguna tarea que les permita entrar al mercado laboral actual. Según
la base de datos de unidos hay 445.142 personas que reportan algún tipo de
discapacidad, esto corresponde al 11% del total de la población, sin embargo
cuando se mira por familia se observa que esas personas con discapacidad
corresponden a 296.221 familias, lo que corresponde al 25% del total de familias
del universo.
• Analfabetismo funcional: aunque el analfabetismo del Unidos es del 17% (es decir
las personas que se auto declaran no saber ni escribir), existen un 33% adicional
de personas que aunque afirman saber leer y escribir no tiene más de 3 años de
educación aprobados, es decir, son analfabetas funcionales al no entender con
exactitud lo que leen o escriben. Dada la formulación de la metodología (la cual
es a nivel de familias mas no de personas) se traduce en que el 60% de los
hogares tienen al menos un analfabeta funcional, es decir que están distribuidos
homogéneamente en todo el territorio nacional y 6 de cada 10 hogares presenta
este evento.
72
• Falta de dinero para el acceso alimentos: a la pregunta si han tenido alguna
dificultad de dinero para conseguir alimentos el 40% de las familias aseguran si
haberlo tenido. Esta se convierte en una aproximación a la capacidad adquisitiva
de las personas y la calidad de los alimentos que consumen.
Fuente: Red de Protección Social para la Superación de la Pobreza Extrema –UNIDOS, Encuesta de Línea Base
Familiar. Sistema de Información unidos. Cálculos autor
17
El
siguiente
ejercicio
no
muestra
relaciones
de
causalidad,
se
limita
a
establecer
si
existe
una
correlación
positiva,
neutra
o
negativa.
73
cuenta con un solo tipo de variable cuantitativa: binarias o también llamadas
dicotómicas; este tipo de variables solo pueden tomar dos resultados: uno (1) para
representar éxito del enunciado de la variable y cero (0) frente a la negación, en otras
palabras o se tiene la característica o no, pero no pueden existir puntos intermedios,
caso en el que sería una variable continua o categórica.
74
frecuencia de los hogares según la cantidad de variables indeseables que presenta cada
hogar.
Coeficientes de correlación:
75
El denominador del coeficiente es la covarianza que es una medida de dispersión de
dependencias18:
!
1
!"#(!, !) = !! − ! !! − !
!
!!!
! !
!
!!! !! − !
!! =
!
Una vez calculado cada una de las covarianzas se divide por el producto de las dos
desviaciones estándar, por ejemplo si se tuviera un vector de unos la media de este
vector equivale a 100% porque únicamente se presentan estos resultados, la desviación
estándar de esta seria de 0 dado que no presenta variaciones, en el caso que se
presenten el mismo número de eventos de unos y ceros el promedio y la desviación
estándar tienden a ser iguales (0.5), y a medida que la desviación estándar se
incrementa significa que tiende a estar menos homogénea la distribución de los ceros
frente a los unos o viceversa.
!"#(!, !)
!=
!! ∙ !!
18
Es
importante
tener
en
cuenta
que
la
media
de
las
variables
binarias
es
equivalente
al
porcentaje
y
que
este
representa
!
de
las
formulas
y
!!
únicamente
puede
tomar
valores
de
0
y
1.
76
Tabla 6. Coeficientes de correlación Variables seleccionadas, más NBI e ICV
Fuente: Red de Protección Social para la Superación de la Pobreza Extrema –UNIDOS, Encuesta de Línea Base
Familiar. Sistema de información unidos. Cálculos autor
19
La relación estadísticamente significativa implica que con una alta probabilidad (más de 95%) esta
relación es verdadera, y aunque no implica causalidad si implica un alto nivel de asociación que puede ser
directa o inversa, busca encontrar la relación por ejemplo que a medida que A se incrementa qué sucede
con B: se mantiene igual (no existe correlación o es cero), B se incrementa (correlación positiva) o
negativa cuando al incrementar A disminuye B. El valor que se encuentra debajo del coeficiente es la
probabilidad de rechazar la hipótesis nula que la relación no es significativa, es decir que se acepta que
existe relación al aceptar la hipótesis alterna (estos son los datos que tienen un asterisco).
77
niveles de analfabetismo funcional dentro de los hogares con jefe mujer son
menores aproximadamente en 8% que los de jefatura masculina, por último frente
a la variable de análisis ICV la relación es positiva, es decir que estos hogares por
lo general presentan mejores condiciones de vida en general comparados con los
hogares comandados por hombres.
78
• No cobertura eléctrica y alcantarillado: La mayor correlación se presenta frente a
otros servicios públicos y dado que son componentes del ICV están altamente
correlacionados. Estas variables se consideran de control debido a que aunque
no representan gran potencial de análisis garantiza el no sesgo de los grupos, la
coherencia y la confiabilidad en los resultados al interior de las agrupaciones, en
otras palabras si el cluster con el ICV promedio más alto (mejores condiciones de
vida) tiene porcentajes de alcantarillado y energía eléctrica bajos (los definidos
para el cluster) sería necesario replantear la métrica o corrección en la generación
de la batería de datos de la línea base. Es decir, un grupo con ICV alto, no puede
tener bajas coberturas en servicios públicos, por tanto estas variables generan
confiabilidad en el modelo.
• Analfabetismo funcional: este índice presenta relaciones negativas con los ICV,
aunque este no lo capture o lo tenga en cuenta dentro de sus factores, se puede
establecer que altos índices de analfabetismo funcional están relacionados con la
incidencia de la pobreza.
79
• Falta de dinero para el acceso alimentos: esta relación es negativa, es decir que
hogares con menores ICV se espera no tengan acceso a alimentos por falta de
dinero.
Es importante aclarar que todos los coeficientes tienen un nivel de significancia (95%),
es decir que si no existe el dato significa que no cumple con el margen de error
establecido para rechazar la hipótesis nula de que no existe dependencia entre las dos
variables que se están analizando y que el porcentaje no es significativo.
Análisis de cluster
80
Valor de a: significa que los hogares tienen en común dos eventos
El índice de Jaccard se aplicó para establecer los grupos y las distancias entre las 13
variables a partir del conjunto de familias. Se establece como la proporción de eventos
de éxitos simultáneos (letra a) cuando al menos uno de los vectores tiene un uno (o lo
que es lo mismo, tiene presencia de la variable observada: a b o c) es decir que cuando
los dos vectores tienen cero esto se considera indefinido:
!
!"##"$% =
!+!+!
Como se observa el índice de jaccard captura la relación entre dos variables cuando se
presenta el fenómeno observado, por esa razón el índice no considera la letra d, que
como ya sabemos es cuando las dos variables observadas toman el valor de cero
20
Para el presente análisis se eligió un k = a 10. Se hicieron pruebas con K= 6, 8 10; 12 y 14, los dos
primeros, presentaron grupos con diferencias muy grandes entre ellos, lo que hacía que ciertas variables
quedaran excluidas; los últimos dos, generaron grupos pequeños que tampoco reflejaban una adecuada
agrupación de Variables.
81
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,*"%*+*"/-&.%4$+14'+AA
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I DE CFE DE CE DE OHE IE DE CE CE DE CDDE IFE FDKL CKNJ HJCMOFO
J ICE COE CDE CFE JE JNE JE CE HE HE CDDE FLE JHE FCKD CKNH CODMNGF
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G JJE HDE NE OE JE HIE LIE IHE LHE JNE HFE OIE JJE FGKO CKGC HDMGND
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Fuente: Red de Protección Social para la Superación de la Pobreza Extrema –UNIDOS, Encuesta de Línea Base
Familiar. Sistema de Información UNIDOS. Cálculos autor
Como se observa 1´163.017 familias fueron agrupadas en 10 cluster, que son diferentes
entre sí, pero muy homogéneos al interior de cada grupo en relación con las 13 variables
seleccionadas. A cada grupo se le calculó el promedio de NBI y de ICV para poder
demostrar que niveles similares de estos dos indicadores, cuando se miran con otras
variables, estas se invisibilizan.
Como se observa cada cluster tiene un número diferente de familias, el cluster más
grande es el número 3 con 241.565 familias y el más pequeño es el número 7 con
20.790. Es importante no confundir los cluster con deciles, en cuyo caso los grupos
tendrían el mismo tamaño. Esto en razón, a que como ya se explicó, el análisis de
conglomerados busca generar grupo similares sin importar si tamaño.
Frente a las diferencias entre los ICV promedios de cada cluster se realizan las
diferencias de media únicamente frente al cluster estadísticamente más cercano debido
a que son los únicos que posiblemente pueden reportar diferencias y conciernen para la
investigación, la razón por la cual los cluster 5 y 10 están vacíos es porque son
82
diferentes de 4 y 6 para el 5 y del 9 frente al 10. Dicho de otra manera, aunque el cluster
5 muestra que 235.530 familias tienen tiene un promedio de ICV de 64,5 no son
estadísticamente similares a las 131.561 familias que componen el cluster 6 y que tienen
un promedio de ICV de 65,0. De igual forma, el promedio del NBI del cluster 5 es 1,84 y
es estadísticamente diferente a los cluster 4 y 6, a pesar de tener promedio similares
(1,92 y 1,79 respectivamente).
En la columna Xi=Xj se resalta en amarillo los grupos que son estadísticamente similares
en cuanto a los promedios de ICV y NBI, esto es; cluster 1 y 2, cluster 3 y 4, cluster 6 y 7
y cluster 8 y 9.
Al observar por ejemplo los dos ICV promedio de los cluster 1 y 2 de los cuales en total
hacen parte 180.513 hogares no se encuentran diferencias significativas, es decir que
para el ICV o el NBI este conjunto de hogares tendrían las mismas características en
cuanto a las mediciones de pobreza pero al interior se encuentran grandes diferencias;
en el cluster 2 el total de los hogares tienen alguna mujer mayor de 20 años en estado
de embarazo, en tanto que el cluster 1 solo el 1% de las familias presentan embarzo en
mujeres mayores de 20 años.
Como se observa, el puntaje promedio del ICV y de NBI puede ser similar en términos
estádisticos, pero todas estás variables son diferentes, incluso en la variables de control
que se incluyeron, nótese la diferencia en las coberturas de energia eléctrica y
83
alcantarillado, son mucho más bajas en el cluster 1 y eso hace que el promedio del ICV
sea 47,4. Este puntajes es muy bajo, y denota unas inadecuadas condiciones de vida,
pero en contraste, el cluster 2 se encuentra ligeramente mejor con un promedio del ICV
de 49,3. Sin embargo, como acabamos de ver, estos hogares del cluster 2, tienen
dinamicas sociales muy distintas que hacen que mejorar sus condiciones de vida en el
futuro sea más dificil. Dicho de otra manera, el cluster 2 tiene, de lejos, mayores niveles
de vulnerabilidad que el cluster 1 y sin embargo tiene un mejor puntaje promedio que
este.
De igual forma los cluster 3 y 4 son estadísticamente iguales en ICV y NBI pero tienen
marcadas diferencias en cuanto a la jefatura femenina, casos de embarazo de mujeres
en edad fértil pero mucho más heterogéneos frente a los casos de discapacidad donde
todas las 150.976 familias del cluster 4 tienen al menos un miembro que reporta una
discapacidad, en tanto que ninguna de las familias que componen el cluster 3 presentan
esta característica.
Que 150 mil familias tengan una persona con discapacidad, además de los otros
factores que hacen que sean considerados pobres, es una vulnerabilidad adicional que
debería tenerse en cuenta para el diseño de políticas públicas. La experiencia de UIDOS
en el acompañamiento a familias pobres, ha indicado que existe un fuerte relación
(habrá que comprobarla con datos empíricos) entre la discapacidad y los bajos ingresos.
Los hogares en los que tienen personas con discapacidad severa, es muy frecuente ver
que algun miembro de la familia actúa como cuidador, y por tanto este sale de las
opciones del mercado, no participa en procesos de capacitación ni trabaja, restringe sus
opciones para generar ingresos, su papel es cuidar a la persona con discapacidad. En
casos de hogares con discapacidad severa, se podría afirmar que dos personas son las
que quedan inhabilitadas, desde el punto de vista del mercado laboral, por supuesto una
es la persona con la discapacidad y la otra es su cuidador/a. Esto hace que superar las
trampas de pobreza sea más difícil.
84
El cluster 7 tiene la característica de presentar la mayor cantidad de casos de violencia
intrafamiliar, abuso sexual, drogas y alcoholismo, en esta parte se explica la gran
correlación entre este conjunto de variables analizadas en el coeficiente de correlación y
la diferenciación del cluster frente a los demás. Es claro observar que aunque los cluster
6 y 7 son estadísticamente iguales, son muy diferentes frente a las características de
disfuncionalidad familiar (variables de violencia intrafamiliar, abuso sexual, abuso de
drogas y alcoholismo), mientras el cluster 6 tiene porcentajes de 3%, 1%, 2% y 2%
respectivamente, esas mismas variables en el cluster 7 tiene porcentajes de 83%, 32%
82% y 49% respectivamente.
La falta de dinero para adquirir alimentos, es otra gran diferencia entre estos grupos,
pues en tanto que el cluster 7 reporta un 44% de las familias que manifiestan no haber
consumido una comida por falta de recursos, el cluster 6 reporta el 100% de las familias
con esa misma dificultad. De igual manera el anafabetismo funcional tiene una diferencia
de 53 puntos porcentuales, pues en el cluster 6 no hay familias con personas
analfabetas funcionales, en el cluster 7 el 53% de las familias tienen estas
caracteristicas. Como se observa, la diferencia entre los puntajes del ICV es de 2,3
puntos y del NBI es 0,08 necesidades básicas, lo que implicaría desde la óptica de estos
indicadores que estas familias tienen el mismo nivel de bienestar.
85
concentran 780.422 familias con un ICV entre 60,8 y 67,5 punto, a primera vista y de
acuerdo con los pesos específicos de las variables de ICV no parece ser una gran
diferencia, sin embargo un indicador multidimensional limitado como este no permite ver
las marcadas diferencias que existen frente a otras variables.
Por supuesto, hay que reconocer que las variables endógenas de las familias como el
embarazo a cualquier edad no necesariamente son determinantes de la pobreza, por
tanto se requiere profundizar este análisis con técnicas estadísticas más robustas que
permitan validar si estas características indeseables están asociadas a la pobreza.
Los índices que se utilicen en Colombia, deben incluir y tener en cuenta indicadores de
impacto como la maternidad en adolescentes, la dinámica familiar y la discapacidad, de
modo que se conviertan en un punto central en el desarrollo de estrategias para
combatir la pobreza en Colombia. Sin duda, lograr avances en esta materia permitirá
que no solo se mida de una mejor manera la pobreza multidimensional, sino que
también se logrará orientar los esfuerzos de la política social y medir los impactos de las
intervenciones asociadas a estas variables.
86
87
A MANERA DE CONCLUSIÓN
Si bien los indicadores de ICV y NBI han sido muy útiles como método de “identificación”
solo son indicadores de recuento de los pobres, como se mostró en el capítulo 2, no
permiten hablar de las brechas ni de la severidad de la pobreza. Adicionalmente han
perdido capacidad explicativa, el gráfico 10, por ejemplo, indica que solo el 11% de la
población tiene dos o más NBI, lo cual hace que no sea un indicador óptimo para
focalizar políticas públicas. Una de las razones principales por las cuales no captan
adecuadamente la situación de pobreza en Colombia es que no han sido actualizadas
sus variables. Desde sus orígenes se pensó como un índice que usara la información
disponible en los censos de población.
En los últimos 40 años, las fuentes de información disponibles han cambiado, hoy en día
se disponen de más y mejores datos que no son aprovechados por los índices
tradicionales. Esta investigación demostró cómo los hogares con similares puntajes de
ICV o con promedios muy parecidos en cuanto a las necesidades básicas insatisfechas,
son muy distintos cuando se analizan sobre la base de otras variables.
Una primera recomendación derivada de este análisis esta relaciona con la necesidad
de incluir en la nueva medición multidimensional, que prepara el DNP, variables como
embarazo adolescente, discapacidad y de dinámica familiar dentro de las que se incluye
el alcoholismo, la drogadicción, la violencia intrafamiliar y el abuso sexual. Como se
demostró, muchos de los hogares pobres tiene una alta incidencia de estas condiciones,
las cuales están relacionadas como trampas de pobreza.
Incluir estas variables en la medición, no solo cambia los indicadores de recuento que
tiene el país, es decir el porcentaje de pobres y pobres extremos que hay sobre el total
de la población, sino que, dado que el índice multidimensional propuesto por el DNP
permite calcular la brecha y la severidad de la pobreza, estas variables se constituyen en
un foco de atención de la política pública.
88
Incluir nuevas variables en los indicadores de pobreza, debería ser una prioridad para el
país. Dado que esta tesis usó técnicas básicas de análisis multivariado, utilizando como
fuente de información únicamente la población pobre extrema, una segunda
recomendación es adelantar un análisis con técnicas estadísticas más robustas y por
supuesto hacerlas extensivas al total de la población, esto con el fin de evitar una
medición circular. Recordemos que en el capítulo dos se explicó que una debilidad de
los indicadores por ingreso utilizados hasta 2004, es tomar como población de referencia
al 25% de la población pobre, lo que genera una redundancia metodológica.
89
El papel de las medidas multidimensionales en el proceso de superación de
pobreza.
No se trata de reemplazar los métodos de medición por ingresos, se trata más bien de
complementarlos con medidas multidimensionales que además sean útiles para la
gestión de políticas públicas. A pesar de las constantes y agudas críticas a los métodos
de medición indirecta de la pobreza a través de ingresos o gastos, esta sigue siendo la
forma más utilizada para dar cuenta de la situación de pobreza de una persona o grupo
social. Los métodos por líneas de pobreza e indigencia son permanentemente
perfeccionados por investigadores, cada vez con técnicas estadísticas más sofisticadas
y refinando aún más cada uno de los pasos que sigue el procedimiento de cálculo.
A primera vista, parece más importante observar en los hogares las carencias que estos
presentan, sin embargo, no es sostenible que un sistema económico de un país provea
todos los bienes y servicios que requieren las familias para desarrollar sus capacidades
básicas. Los Sistemas de bienestar con altas coberturas en servicios sociales, donde se
ha logrado coberturas universales de salud y educación, con tasas de analfabetismo
cercanas a cero, con subsidios al desempleo y otros amplios beneficios sociales,
requieren una fuerte carga impositiva al ingreso de los hogares, lo que implica, por
supuesto que haya una adecuada capacidad de generar ingresos.
Los países en vías de desarrollo, se encuentran atrapados en ese círculo vicioso, no hay
posibilidades de ampliación de servicios sociales, porque no hay posibilidades de que el
Estado capte más ingresos, y esto no es posible porque los niveles de pobreza y bajo
capital humano no lo permiten. Para romper esa trampa de desarrollo, se requiere
90
invertir adecuadamente el gasto social, lo que implica hacer esfuerzo en mejorar la
eficiencia del gasto y focalizarlo de la mejor manera.
91
Es por esta razón que la medición multidimensional de la pobreza representa una
inquietud permanente de los hacedores de política pública y en los ámbitos académicos.
Porque no solo mide los resultados finales, sino que mide el proceso para lograrlo, aún
más, da luces de cómo avanzan los programas que en su conjunto conforman la
estrategia de superación de pobreza.
92
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