LA AREQUIPA DE MIS RECUERDOS

Por: Pablo Nicoli Segura.

Hace casi ya 50 años, me refiero a la Arequipa de los años 70, yo todavía era un niño y casi
púber y, por algún motivo que hoy evoco, me gustaba pasear parte del centro histórico, en
donde yo vivía, en la calle San José, especialmente por las tardes, cuando la Arequipa de
aquellos años y en domingo, parecía abandonada... La ciudad parecía convertirse, los
domingos de tarde, en un lugar fantasmal; la gente se encerraba en sus casas para hacer sus
quehaceres, ver televisión en familia, escuchar la radio o hacer las últimas tareas antes del
inicio de semana. Como decía, a mí me gustaba recorrer las calles del centro y hoy, guardo
imágenes apenas un flash, de lugares como la plaza San Francisco, totalmente vacía y aun con
la escultura de San Francisco al centro de la plaza, de la calle Santa Catalina y sus alrededores,
San Lázaro, la plaza España y su iglesia y, tantos otros sitios que como decía, en día domingo
por la tarde, estaban casi deshabitados... Imaginaba pues, historias en mi fértil imaginación,
como que algo había pasado en la ciudad y yo no me había enterado. Cómo que todos habían
ido algún lugar y yo no lo sabía, o que había pasado algo extraño y todos habían
desaparecido... Y, no solo guardo el recuerdo, hoy extraño, sino también el ambiente y
sensaciones que me hacían sentir ver esas calles vacías que, por momentos, me transportaba
una Arequipa del pasado, me refiero a la del siglo XIX y claro, los monumentos y
construcciones coloniales ayudaban en mucho para avivar estas sensaciones y, por momentos,
el temor de saberme solo, me hacian imaginar o quizás en realidad aparecian imágenes de
entidades que, asomaban sus cabezas por una esquina y luego desaparecía, o una beata
vestida de oscuro que pasaba lentamente, sin verme, de una acera a otra, o imaginar la
presencia de algún fantasma que me asustaba por detrás de alguna cortina de las ventanas de
las casonas de los alrededores. Entonces, viendo que la noche se acercaba y el ambiente
tomaba un extraño tono azul, tomaba la decisión de volver a la seguridad y el amparo del
hogar para ver en familia, una linda película de Disney.