Saturno y Plutón

Hola Saturno, soy yo...

Plutón. Ya pasó mucho
tiempo desde que dejé de
formar parte del sistema
solar en el tu órbitas, pero
tenia que decirte algo,
tengo que confesar.
Hace un tiempo me
enamore de ti, de tus
colores tan llamativos y el
tamaño de tu masa, así que
empece a hablar con
algunas estrellas y a
muchas les gustaba como
te reflejabas en este
sistema solar, muchos
como yo observamos lo
diferente que eras a otros
planetas, y tal vez nunca te
diste cuenta de lo mucho
que me esforcé para llegar
a ti, pero por más que lo
intente, nuestras órbitas
nunca coincidían y solo me
alejaba cada vez más. Me
encantaba observarte, y
tenía mucha envidia de
todos los meteoritos que
giraban a tu alrededor
formando tus anillos, me
enojaba mucho el hecho de
pensar que podrías hacer
el amor con cualquiera de
ellos, cualquiera de todas
esas opciones que giraban
a tu alrededor. Siempre
fantasee con girar en
alguno de tus anillos, de
chocar contigo con tanta
potencia para formar
nuestra propia supernova,
y recrear nuestro propio
sistema solar, pero era algo
imposible, pues nunca
llegue a estar cerca de ti,
nunca fui suficiente. Cada
vez me volvía menos
importante para muchos
hasta el punto de dejar de
formar parte del sistema
solar y ser lo que soy
ahora, un planeta olvidado
que órbita fuera de tus
alcances. Mientras tu estás
a punto de hacer el amor,
yo estoy aquí... siendo el
centro de la soledad y el
olvido, y aunque hay otros
planetas cerca que pueden
órbitar conmigo, a mi no
me interesa nadie mas. La
distancia me quito las
esperanzas de formar
parte de ti, de estar
girando a tu alrededor así
como lo hace la luna con el
planeta tierra, pero si esta
supernova no nos permitió
estar juntos tal vez otra si
lo haga, tal vez muy pronto
se forme otra explosión de
estrellas, y esa supernova
forme un solo camino para
los dos y así hacerte el
amor, para así estar
contigo por siglos y años
luz. Adiós Saturno, me
quedare en la oscuridad
donde no me puedes ver ni
escuchar, pero aquí estaré
esperando nuestra
oportunidad de explotar y
hacer brillar el espacio, que
el destino haga su trabajo
para ser suficientemente
bueno para ti y que tu estés
para mi.
Me aferre aunque nunca te
alcance, te ame aunque
nunca lo notaste, te abracé
aunque nunca me sentiste,
y lo intente aunque termino
siendo un desastre.