PLAN DE VIAJE: 2do. día / Playa Rosalina – Maranpata -
día / Choquequirao todo el día
1er. día / Cusco – Cachora – Playa
Rosalina
Los viajeros son recogidos en su hotel y
partimos de Cusco a las 6:00am en bus
privado hacia el pintoresco poblado de
Cachora, un pueblito que es un “balcón”
con vista a la imponente Cordillera de
Vilcabamba. Desde el mirador de
Capuliyoc, ubicado a orillas del cañón del
Apurímac, empieza la expedición a pie.
Casi al fondo del mundo, la tropical Playa
Rosalina es el primer campamento. Cena y
pernocte.
3er.
Choquequirao
Después del desayuno, cruzamos el puente
colgante; no hay vuelta atrás, el largo y
empinado ascenso desde el nivel del río
(1.500 metros), hasta la zona de Marampata
(2.900m.s.n.m.) le roba el último aliento al
caminante. Lo tomamos con calma, el
sacrificio se disfruta; en el camino es
posible recuperar fuerzas en Santa Rosa,
donde Julián -el único poblador del
campamento- atiende con bebidas
rehidratantes y galletas (no incluidas) a los
esforzados visitantes. En Marampata el
almuerzo repone las fuerzas y el espíritu
permanece intacto, el viajero sabe que está
cerca y luego de dos horas de fácil camino
se arriba al campamento de Choquequirao
(2.870 m.s.n.m.) Nos espera Phaqchayoc
(el sistema de terrazas o “despensa”
dedicadas al cultivo del maíz) y La Casa de
la Caída de Agua (según los estudiosos, la
vivienda del Inca provincial de
Choquequirao). De retorno al campamento,
cansados, se servirá la cena y se pasará la
noche. (Baño y ducha fría disponibles).
Este es el día más lindo. Nos llama la
atención cómo la inmensa mayoría de
visitantes se toma 4 jornadas de camino
(dos en ir y dos en volver) y sólo algunas
horas o tal vez minutos (¡!) en disfrutar
explorando los distintos sectores de
Choquequirao. Entendiendo que el
complejo está organizadamente
desparramado a ambos lados del espolón
del Apu Qorihuayrachina sabremos
dedicarle el tiempo que se merece y es
necesario para comprender la integridad de
su contexto. Tendremos todo el día para
visitar los mejores sectores del Parque
Arqueológico; las llamas, las partes alta y
baja, la Gran Vereda, el Muro Triunfal de
Sartiges. Nuestros viajeros disfrutarán del
almuerzo cerca al Conjunto, para no
interrumpir la visita y ver -con un poco de
suerte- el vuelo majestuoso del cóndor
sobre el profundo cañón del Río Apurímac.
Regresamos al campamento, donde se
servirá la cena y se pasará la noche. (Baño
y ducha fría disponibles).
4to. día / Choquequirao – Hacienda San 5to. día / Villa Los Loros lodge – Cusco
Ignacio – Villa Los Loros lodge Después del desayuno, abordamos el bus
de retorno a Cusco, en donde llegamos
alrededor de la 1:00 pm.

Mapa de viaje :

Nos sorprenderá lo novedoso del paisaje;

ahora disfrutamos de una vista distinta
porque los ánimos (y los músculos
recuperados) están al máximo. La voz del
río siempre ahí, el imponente Cañón del
Apurímac parece tragarse al viajero.
Finalmente, la Playa San Ignacio. “Látigo
Negro”, “Machuco”, “Cayguash” o algún
otro nos esperan. El retorno sobre sus
lomos nos da la oportunidad de una última
gran mirada al paisaje del que ya somos
parte. Cabalgar permite una excelente
forma de fotografiar a los amigos con
quienes vinimos y a los nuevos amigos que
el viaje nos obsequia; su modo de vida
calará hondo en los recuerdos del viajero.
Al lado de los muros derruidos de la
Hacienda San Ignacio, descansamos y
luego del almuerzo el paseo a caballo nos
lleva a Villa Los Loros Lodge. Al volver la
vista atrás sabremos qué lejos hemos
llegado. Cena y pernocte.