1NDICE GENERAL

sialo veintiuno editores, sa

CERR6 DEl AGUA 2•8 . MEXICO 20, D.F.

sialo veintium> de españa editores, sa PREFACIO 3

C/ Pl~ZA S, MADRID 33. ESPANA

siglo veintiuno argentina editores, sa CAPÍTULO I. LA CONCEPCIÓN DE LOS MODELOS S

l. La base empírica del conocimiento científico S
sialo veintiuno de colombia, ltda 2. Los conceptos de "teoría y modelo" en las ciencias
AV . ~ - 17-73 PRIMER PISO . BOGOTA, D.E. COlOMBIA
naturales y en las ciencias sociales 6
3. Los modelos en las ciencias sociales 11

CAPÍTULO 11. ELEMENTOS CONSTITUTIVOS DE LOS MODELOS 17

l. Introducción 17
2. Concepto de modelo en economía 18
3. Elementos constitutivos de un modelo 20
l. Ecuaciones, 22; 2. Variables y parámetros, 27 ; 3. Cla-
sificación de las variables, 28; 4. Parán tetros, 33
4. Algunos ejemplos ilustrativos 34
l. Un modelo macroeconómico del crecimiento, adaptado
de M. A. Liebenberg et al., 34; 2. Un modelo macroeco-
nómico de la demanda nacional de bienes alimenticios
adaptado ele M. A. Girshick y T. Haavelmo, 36
Problemas 39

CAPÍTU LO III. CARACTE RÍ STICAS RELEVANTES DE LA CONST RUCCIÓN

DE LOS MODELOS ECONÓMICOS 41
portada de francisco l eyte
1. Estructura lógica de los modelos 41
a. Hipótesis o
proposiciones iniciales, 41 ; b. Tesis o pro-
pri mera edi ción, 1971 posiciones finales, 52 .
rovena edic ión, 1983
©siglo xxi 'ed itores, s.a. de c.v. 2. La corroboración empírica de los modelos 56
iSBN 968- 23 - 0422 -9
a. La genera lidad versus la validez, 56; b. El avance
simult áneo de generalidad y validez, 59 ; c. Las pruebas de
corroboración empírica de los modelos económicos, 61
derec hos reservado s conforme a la ley
impreso y hecho en méxico/printed and made in mexico Pml,lellt as 63
rv1
VI 1NDICE ÍNDICE VII
CAPÍTULO IV. PROCESO LÓGICO-EMPÍRICO EN LA CONSTRUCCIÓN DE CAPÍTULO VI. INTRODUCCIÓN AL ANÁLISIS ECONOMÉTRICO DE LOS
MODELOS ECONOMÉTRJCOS , 66 MODELOS MULTIECUACIONALES 163
1. Introducción • 66 1. Introducción 163
2. Las ecuaciones de comportamiento como expresión de 2. Postulados 164
la fuerza motriz o propulsora de los sujetos de la acti- 3. Estimación de parámetros 166
vidad económica 67
l. Mínimos cuadrados directos, 170; 2. Mínimos cuadra-
3. Fundamentos estocásticos o probabilísticos en la cons-
dos indirectos, 171; 3. Mínimos cuadrados bietápicos, 172
trucción de modelos 70
4. Espacio muestral y experimento estocástico 72 4. El problema de la identificación 175
5. Espacio medible 74 5. Ejemplo ilustrativo 183
6. Espacio probabilístico 76
7. Variables aleatorias 77 Problemas 185
8. Procesos estocásticos 79
9. Análisis de las observaciones empíricas y especifica- CAPÍTULO VII. CLASIFICACIÓN DE LOS MODELOS ECONÓMICOS 187
ción de un modelo 83 l. Introducción 187
10 . Las pruebas de corroboración empírica en los. ·mode- 2. La clasificación de los modelos de acuerdo con su
los econométricos 87
3.
construcción lógico-empírica
La clasificación de los modelos de acuerdo con el
. 188

Problemas • 91 dominio de la investigación 192

4. La clasificación de los modelos de acuerdo con sus
CAPÍTULO V. TEORÍA DE LA ESTIM ACIÓN EN MODELOS fines o utilidad práctica 197
UNIECUACl'ONALES 92
Problemas 201
1. Introducción a los métodos de estimación 92
2. Propiedades de los estimadores en pequeñas y gran- APÉNDICE MATEMÁTICO 203
des muestras 95
I. Matrices 203
3. Postulados sobre el comportamiento de la variable
~a~~ 1~
u. Operaciones con matrices 206
4. Análisis de la regresión lineal simple 107 1. Igualdad de matrices , 206; 2·. Suma de matrices, 206;
3. Diferencia de matrices, 206; 4. Multiplicación de ma-
l. Introducción, 107; 2. Estimadores mínimo-cuadráticos, trices, 207; Problemas, 211
109; 3. Propiedades de insesgabilidad y de consistencia
de los estimadores, 116; 4. Matriz de varianza-covarian- n r. Algunas formas matriciales particulares 212
za de los estimadores, 118; 5. Estimador de la varianza
residual, 121; 6. Estimadores de máxima verosimilitud, l. Matriz identidad, 212; 2. Matriz escalar, 213; 3. Matriz
123; 7. El coeficiente de correlación lineal simple, 125 ; diagonal, 214; 4. Matriz triangular, 214; 5. Matriz trans-
8. Pruebas de hipótesis sobre los estimadores, 127; 9. Prc pues ta , 215 ; 6. Matdce:-: simétricas y antisimétricas, 216;
dicción, 138; 10. Ejemplo ilustrativo, 140 Problemas, 216

5. Análisis de la regresión lineal múltiple 141 rv . Pa rtición de matrices 217

l. Introducción , 141; 2. Estimadores mínimo-c uadrático,, l. Ma tri ces particionadas, 217; 2. Suma de matrices par-
143; 3. Pruebas de hipótesis, 145 ; 4. Ejemplo ilu s trativo, 14 t ldonnd os, 218 ; 3. Multiplicación de matrices particiona-
cl ll ~ . 21\1 ; 4. Tri angulariza ción y diagonalización ele ma-
Prubl e mas 11 h t ' ~ por· purt ición, 221 ; Problemas, 224
VIII • iNill (' l

v. Determinantes

l. Introducción, 225; 2. Propiedades básicas de los tl c•lt• t

minantes, 228; 3. El cofactor de un elemento, 2.11 ; 4
Cálculo de un determinante por la ex¡:J"ansión de col'urto
res, 231; S. Cálculo de un determinante por la cxpunslcin A NUESTROS PADRES
de Laplace, 233; Problemas, 236 y
A NUESTROS HIJOS
Vl. La matriz inversa \H ALEX, PABLO Y LEO
Problemas, 240

vu . Dependencia lineal 241

l. Combinación lineal de vectores y dependencia lineal,
241; Problemas, 244; 2. Rango, 244; Problemas, 246

VIII. Solución de sistemas de ecuaciones lineales no-homo-

géneas 246
Problemas, 251

REFERENCIAS . 253
 PREFACIO

El conocimiento científico en las ciencias sociales, la economía en

particular, no se agota en la observación y explicación de la
realidad. El mismo se amplía con una filosofía para la acción
que podemos sintetizar en la expresión "conocer la realidad para
actuar sobre ella".
La idea central de este libro surgió hace diez años , en una
reunión de la XXXII Sesión del Instituto Internacional de Esta-
dística, celebrada en Tokio, al presentar Herman Wold una bri-
--- llante sistematización metodológica de la construcción de los
modelos econométricos. Posteriormente, las críticas constructi-
vas de Maurice Allais, Fran<;:ois Perroux, Oskar Morgenstern,
Nicholas Georgescu-Roegen y el propio Wold a trabajos publi-
cados por los autores sobre el tema constituyeron un fu~rte
estímulo para llevar a cabo esta tarea. Estas discusiones se com-
plementaron con la experiencia docente. de muchos años en uni·
versidades latinoamericanas, europeas y estadounidenses, donde
las dudas y sugerencias de los alumnos pusieron de manifiesto
la necesidad de presentar en forma sistemática el proceso meto-
dológico de la construcción de los modelos como una actividad
lógico-empírica, previa a todo análisis econométr ico.
Es justamente a los estudiantes y graduados de economía en
particular, y a los de ciencias sociales en general, a quienes la
estructura y el contenido de este libro pretenden ser útiles.
Se apoya en nociones básicas de filosofía de la ciencia, proba-
bilidad y estadística para fundamentar la concepción de los mo-
delos en las ciencias sociales y naturales, entrando luego al aná-
lis is de los modelos econométricos.
Los cuatro primeros capítulos y un apéndice matemático de
á lgeb ra lineal se ocupan de afirmar el enfoque axiomático del
a náli sis económico, no como verdades evidentes en sí mismas,
s ino como proposiciones singulares empíricamente constatables
y, por t anto, integrado por el conjunto lógico de hipótesis y
tes is que debe ser corroborado empíricamente para indicar el
rnd o de ge neralidad y validez alcanzado. El primer paso funda-
mentol co nsis te, entonces, en clasificar los elementos constitu-
:nt es de un modelo: ecuaciones, variables y parámetros. Cada
t'C lW c ió n es el cálculo que representa una proposición, premisa
o oxio1nt1 de un modelo.
S6lo In -; cc unci o ncs de comportamiento , tecnológicas e ins-
titu cionales so n axi oma s empíricamente constatables y necesaria-
[ 3]

4 PREFACIO
mente deben intervenir para que el modelo pueda ser aceptado
o rechazado en términos probabilísticos.
Se desarrolla luego el proceso lógico-empírico en la construc-
ción de los modelos econométricos conf.orme a las siguientes eta-
pas: a] observación de la realidad; b] agrupación de las obser-
vaciones; e] análisis ex ante; d] especificación de un modelo
explicativo; e] análisis ex post; f] reespecificación del modelo
propuesto y g] utilidad práctica del modelo.
Previo al desarrollo sistemático de este proceso de siete eta-
pas, se exponen los conceptos básicos de probabilidad y esta-
dística que lo fundamentan.
Los capítulos v y VI se ocupan del análisis econométrico de los
modelos uniecuacionales y multiecuacionales, respectivamente.
En forma sencilla y rigurosa se exponen los métodos de estima-
ción de parámetros, haciendo hincapié en el de los mínimos
cuadrados para modelos uniecuacionales. Se consideran diferen-
tes pruebas de corroboración empírica de los modelGs, a saber:
a] pruebas de hipótesis sobre la significación del conjunto de
variables explicativas, b] pruebas de hipótesis sobre la significa-
ción estadística de cada variable individualmente considerada,
e] pruebas de hipótesis sobre la existencia o no de autocorrela-
ción, d] análisis estadístico de la matriz de correlación entre las
variables explicativas, e] análisis estadístico de la varianza resi-
dual y f] cálculo del coeficiente de correlación y de determinación.
Concluye el texto con una exhaustiva y fundada clasificación
de los modelos según: su construcción lógica empírica, su domi-
nio de investigación y sus fines prácticos. Todo su contenido está
ampliamente ilustrado con ejemplos que se adecuan a la realidad,
con particular referencia a las necesidades de las economías en
desarrollo. Cada capítulo incluye una lista de problemas propues-
tos para el lector y al final del libro la lista de referencias biblio-
gráficas señalando los capítulos en los que son básicos. Estamos
muy agradecidos a nuestros maestros y amigos Maurice Allais,
Nicholas Georgescu-Roegen, Corrado Gini, Franc:;ois Perroux, Oskar
Morgenstem y Herman \Vold por sus críticas constructivas sobre
diferentes temas desarrollados en este libro. A nuestros colegas
y amigos de la Universidad Nacional Autónoma de México, muy
especialmente a los profesores Leonel Corona Treviño y Aricl
Kleiman, por sus valiosos comentarios en las versiones prclimi ·
nares .;y por último, pero no menos, a los estudiantes que con Sll i
dudas y sugerencias motivaron la necesidad de escribirlo. Natu
ralmente, somos los directamente responsables de las ideas y
posibles errores que pueda tener esta obra.
C. DAGUM Y ESTELA M. BEE DE DAGUM
· Agosto de 1970
..
CAPÍTULO 1
LA. CON<;EPClúN DE LOS MODELOS
l. l. LA BASE EMPÍRICA DI:L CONOCIMIENTO CIENTÍFICO
Desde un punto de vista epistemológico, la economía forma part.e
de las ciencias reales, es decir, naturales y sociales, por oposició~
a las ciencias formales, la semántica, la matemática y la lógica.
A pesar de las diferencias fundamentales entre los objetivos
de las ciencias naturales y las sociales, éstas, como las demás
ciencias, utilizan procedimientos comunes para llegar a diferen-
tes grados de abstracción científica, o sea, a diferentes represen-
taciones de la verdad objetiva que el hombre logra mediante el
estudio de una realidad empírica. Ellos son: el conocimiento
(con la descripción y la explicación), la inducción y la dsduc-
ción, u :ilizadas conjuntamente o p0r separado.
La base y punto de partida del con'Ocimiento clentífico es la
experiencia, tal como lo afirmara Dilthey al sostener que "toda
ciencia es ciencia empírica", para luego agregar: "pero toda ex:
periencia encuentra su conexión originaria ~ la validez que ésta
le proporciona en las condiciones de nuestra>· conciencia, dentro
de la cual surge en la totalidad de nuestra \:taturaleza".
En esta concepción queda sin duda excluida la filosofía, ya
que una parte de ella, los objetos metafísicos, no tienen realidad
empírica. Igualmente, la semántica, ·la lógi~a y la matemática
por tratarse de ciencias formales o instrumentales que ofrecen
el proce5Ó lógrco de forma~órt ¡Jel conocimiento. Sin embargo,
gran parte de la matemática ha tenido un origen empírico, tan
remoto h,oy eP 1ía, que en las matemáticas modernas su origen
no es rastreab1e o ha sufrido una metamorfosis completa. Así,
Von Neumann [ 43 ]"discute este tema en uno de sus interesantes
t ra baj os ál afirmar: "Es innegable que alguna de las mejores
inspiraciones de las matemáticas -ei_J. aquellas partes que son
m a lc m ~ticas tan puras como uno pueda jmaginar- han prove-
ni do de las ciencias naturales.... La geometría fue la parte prin-
ripn l de las matemá ticas antiguas . .. No puede dudarse de que
s u u li gc n en la antigüedad fue empírico y que comenzó como
tul u disc.:ipli na p robablemente no distinta a la de la física teórica
dl· hoy e n dfa. Apar te de toda otra evidencia, el propio nombre
·l·oule t r fa lo indi ca".
J.n ha ~l' empír ica que genera el conocimiento científico con
r [ sJ
·'
6 LA CONCEPCIÓN DE LOS MODELOS
el recurso de la semántica, la lógica y la matemática como cien·
cias formales, comprende ya sea el conocimiento de la rcalidud
total como la filosofía, que aspira a alcanzar la unidad de' todo~>
nuestros conocimientos, o bien el conocimiento de rcalidndt•'l
parciales, que conforman los particularismos científicos de la
economía, la sociología, la historia, la física, etc.
Las observaciones empíricas -experimentales y no experi·
mentales- desempeñan un papel decisivo en el desarrollo dt•
las ciencias. Un brillante ejemplo, para las ciencias naturales, lo
brinda el astrónomo danés Tycho de Brahe, el cual al obscrvnl"
la poca exactitud de las tablas astronómicas basadas en el m
delo tolemaico recopiló durante más de veinte años observacio
nes astronómicas que lo llevaron a abandonar el modelo tole-
maico sin llegar aún a aceptar el de Copérnico. Con base en las
importantes observaciones empíricas de Tycho de Brahe, Kepler
formuló sus teorías. Su principal contribución fue explicar la
forma en que los fenómenos estaban constituidos, preocupándose
entonces del aspecto estructural de los mismos. El análisis de
Kepler fue complementado con el enfoque dinámico dado por
Galileo Galilei, el cual se concentró en los modos en que los
fenómenos se desarrollan.
De este modo, la terna, Tycho, el observador, Kepler y Galilc .... ,
los teóricos, sienta una base sólida para la construcción de las
ciencias naturales.
El correspondiente esquema en las ciencias sociales, en refe·
rencia a la historia, aparece un siglo más tarde. El Tycho de la
historia fue el filós0fo francés Pierre Bayle, considerado el fun-
dador del racionalismo del siglo XVIII. Su obra maestra, Dictiol1·
naire historique et critique, publicada por primera vez en 169i,
fue una fuente extraordinaria de información histórica y de
crítica. Estas observaciones permitieron a Voltaire, el Kepkr
de la historia, escribir su Essai sur les moeurs et l'esprit des
nations, obra clásica sobre el análisis histórico de las costum ·
bres y el espíritu de los pueblos. El Galileo de la historia será
Montesquieu, quien completará las contribuciones de Voltaire,
en el contexto dinámico, concibiendo la vida humana, en su
últíma realidad, no como constituida de esquemas fijos sino
de impulsos actuantes.
Estos ejemplos permiten ilustrar la importancia de la bnst•
empírica para el desarrollo del conocimiento científico.
I. 2. LOS CONCEPTOS DE "TEORÍA Y MODELO" El'< LAS CIENCIAS NATU~A
LES Y EN LAS CIENCIAS SOCIALES
Dentro del proceso y elaboración del conocimiento científico, lo
f I. 21 LOS CONCEPTOS DE "TEORíA" Y "MODELO" 7
filó sofos de la ciencia han discutido intensamente el aspecto can-
ceptual del término de "modelo" en relación con el de "teoría".
El término de "modelo" fue ampliamente introducido en el voca-
bulario científico por la escuela lógico-empírica del pensamiento
de Popper, Braithwaite, Nagel, Hutten , Brodbeck, Achinstein,
Albert y muchos otros.
El sentido que esta escuela le diera a los conceptos de teoría
y modelo es diferente al que contemporáneamente aceptan los
economistas, econometristas y otros investigadores de las ciencias
sociales, donde el término de modelo hiciera su aparición hacia
los años treinta, para luego difundirse rápidamente.
Según la escuela lógico-empírica las teorías científicas son afir-
maciones universales; entendiéndose por teoría sistemas axiomáti-
cos referidos a ciencias empíricas, en el sentido de que los axiomas
deben considerarse aquí como hipótesis con base empírica.
Los "axiomas" o "postulados", en esta corriente de pensa-
miento, no son necesariamente una verdad evidente en sí misma.
Los axiomas pueden ser vistos como: 1] hipótesis científicas
o empíricas y 2] como simples "convenciones" o "definiciones
implícitas" (ciertas por convención). Los axiomas son elegidoti de
tal manera que el resto de las proposiciones del sistema puede
derivarse a partir de los mismos por transformaciones puramente
lógicas o matemáticas.
Para que un sistema teórico sea considerado un sistema axio-
mático, ~e.s.ruio.__q~el _s.qnjunto..:de axio~s..o- proposicion§___.
iniciales satisfaga los siguientes requisitos: a] consistencia in-
t e rn~, o s_ea_ no cqntradicción entre ellos ni consigo mismo;
b] in de peudencia,~a....&~a..._qu.e_ning¡íÜ-ªl(iomaseaaecrucrdoc6ñü5
proposición final de los restantes , Estos requisitos conciernen al
• •, e \ sistema axiomático com-o tal. En relación con lajeo~ los axiomas
. 1 deben ser: e] ~fici! ntes para la deducción de todas las proposi-
ciones integrantes de la teoría y d] necesarios para el mismo...obje-
tivo, o sea..qu_e no debe poseer supuestos sullerfjuo~~dª-Ute,
Al definir la teoría como Ün sistema axiomático referido a
las ciencias empíricas, cuyos axiomas deben entenderse como hipó-
tesis empíricas, o sea basadas en la experiencia y sujetas a la
aceptación o rechazo por dicha experiencia, esta escuela exige de
toda teoría el cumplimiento del doble requisito de ser comproba-
IJ!e y de haber pasado las pruebas de falsificación exitosamente.
Los pruebas de jalsificación-determinan-en qué condic.io!.!~un
sis tema de proposiciones empíricas debe ser considerado falso. -
Por e l contrario, si los axiomas son considerados como sim-
pl es "t·onvcnciones" o "definiciones implícitas" de las ideas que
('xpreson, sin ningún contenido empírico, la escuela lógico-empíri-
r a M" 1 t•fierc a este tipo de sistema axiomático como un "mode-
lo", o '>t'H, segú n Popper [34 ], como "un sistema de proposiciones
analít kns ( dc rta s por convención). Un sistema axiomático in ter-
8 LA CONCEPCIÓN DE LOS MODI3LO
pretado de este modo no puede ser visto como un sistema de
hipótesis científicas o empíricas (en nuestro sentido) ya que no
puede ser refutado por la falsificación de sus consecuenaias". El
modelo es entendido así como una construcción puramente
teórica. • Aquí los modelos científicos sólo tienen el sentido dado por
Por otro lado, el significado de teoría y modelo en economía
y otras ciencias sociales ha sufrido un cambio en relación con
el dado por la corriente lógico-empírica, que corresponde más
adecuadamente a las ciencias naturales. ' llo. La teoría es vista siempre como un conjunto de afirmaciones
En efecto, en las ciencias sociales se acepta comúnmente por
"teoría" una estructura lógica, es decir, un sistema deductivo
que sólo debe cumplir con los requisitos lógicos de hipótesis
y tesis y que, si bien se construye con base en la experiencia, no
necesariamente debe ser sometido a las pruebas de falsificación.
Se entiende por "modelo" una oonstrucción teórico-empírica que
debe, en consecuencia, cumplir con los requisitos lógicos y los
empíricos, estos últimos caracterizados por la generalidad y la
validez.
Luego, mientras la corriente lógico-empírica considera un mo-
delo como una construcción puramente teórica, otros dentistas
especiaimente econometristas lo interpretan· como una construc-
ción teórico-empírica. · de dicho bien, del ingreso de los d~mandantes, de los gastos
Conviene aquí distinguir esta definición de modelo con la dt•
"ley científica" que se da en las ciencias naturales. En las cie n-
cias naturales se entiende por ley científica una estructura tarn
bién teórico-empírica pero con alcance universal dentro de s11
marco de referencia. Los modelos, por el contrario, son sicm
pre de alcance limitado en el tiempo y en el .espacio. Es decir, estas
restricciones a un período y a un espacio geográfico, que condl
cionan su generalidad y validez, caracterizan la historicidad dt•
las ciencias sociales. Su uso se ha extendido rápidamente, y Sil
niveles de aspiración son de alcance medio (limitado), por opc
sición a la construcción de modelos con pretensiones de validt•t.
universal, es decir, para todo tiempo y lugar.
Ambas corrientes de pensamiento coinciélen en distinguir JWI'
fectamente lo que es un modelo de una teoría. Sus enfoques M ili
sin embargo diferentes.
En general, la escuela lógico-empírica, según Agnati [ 11, co 11
sidera "que una teoría científica debe ser construida como sl., tc•
ma hipotético-deductivo cuyas expresiones de cálculo, incluyt· Jlclo • • ·•
los postulados y teoremas, deben ser interpretados recurrk11clo
a reglas semánticas (según las cuales un término dado desiV" "
una cierta propiedad) cuando estas expresiones se refierc11 ''
fenómenos directamente observables, o bien recurriendo a n ·Hill
de correspondencia (según las cuales un término dado tic•tu·
indirectamente un sentido) cuando estas expresiones se refic ·n•JJ
a propiedades más abstractas. Un modelo lógico, para una h•od
(I. 2) LOS CONCEPTOS DE "TEORíA" Y "MODELO" 9
basada sobre axiomas, es entonces un grupo ordenado de expre-
siones en el cual los postulados de la t eoría son satisfechos
(así un modelo para la teoría de Newton sobre la m ecánica de
las partículas)".
la lógica matemática y sólo establecen una analogía entre los
objetos descritos en la teoría y otros objetos más familicv-es, per-
mitiendo únicamente entender una teoría y favorecer su desarro-
de validez universal.
Por lo contrario, para los investigadores de las ciencias sociales
las teorías son simplemente construcciones lógicas de validez uni-
versal únicamente desde el punto de vista de su estructura lógica
pero no desde el punto de vista de sus regularidades empíricas. En
cambio, los modelos son construcciones teórico-empíricas, dis tin-
guiéndose en ellos una parte teórica y una parte empírica . Los
modelos en las ciencias sociales constituyen un sistema axiomá-
tico en el que pueden entrar ya sea axiomas considerados como
hipótesis empíricas o bien axiomas considerados como simples
convenciones o definiciones . Por ejemplo, un axioma o hip§tesis
sobre la demanda de un bien determinado, en función del precio
publicitarios, etc., se ~onsidera del tipo empírico, o sea que puede
ser sometido a las pru ebas de falsificación. En cambio, un axio-
ma que sostenga la igualdad entre la oferta y la demanda de un
bien debe entenderse como de simple convención, o sea, verda-
dero solamente por nuestro supuesto pero no por comprobación
empírica. Igualmente, en los modelos keynesianos el axioma so-
bre la igualdad del ingreso nacional a la suma del consumo
nacional, la inversión total neta y los gastos públicos es por
definición y, por tanto, no puede ser sometido a las pruebas
de falsificación empírica.
Los modelos en las ciencias sociales cumplen con algo más
que ayudar a entender y desarrollar una teoría, ellos constitu yen
un instrumento fundamental para la aceptación, modificación
y construcción de una teoría desde el punto de vista de su validez
empírica [ 11 ].
La combi nación de teoría con la experien.cia permite la formu-
lación de un modelo cuyo contenido, como se ha visto antes, es
l'll r>arte teórico y en parte empírico. Ambos aspectos deben
cot n•sponderse mutuamente y no es posible un divorcio en-
tre dios .
l.n relación entre teoría (T) y experiencia (E) como TBE
Orhliltryl! el esquema de referencia en la construcción de los
.tlhHklos 1 Wold, 45]. Particubrmente en los modelos económi-
co.,, -.i IL'rWrnos l!n consideración los obietivos para los cuales st>
l.;ons lnry¡·n, li.ls disposiciones administrativas para su aplica-
10 LA CONCEPCIÓN DE LOS MODELOS
[
,_,/
M
odelo /
Hechos
observados
Objet ivos
""'"/"'" /
contr ole~
Ad ministratrvos Aconteci m ie ntos
DIAGRAMA I. 1
Ción, etc., el esquema se puede representar más ampliamente
como sigue [Stone, 39].
Observamos que formulado el modelo con base en la teoría
y los hechos observados, al combinarlo con ciertos objetivos, ge-
nera una política a seguir. Aquí entran · ya los sujetos de ln s
decisiones prefijando los objetivos, siendo responsabilidad de
los dentistas la construcción del modelo. Pero ni unos ni otros
pueden trabajar independientemente sin discusiones a priori y
a posteriori. Una de las razones fundamentales es que los obj e-
tivos son múltiples y muchas veces conflictivos, siendo entonc..es
necesario conocer sus factibilidades y costos.
La combinación de una política con un conjunto de procedí
mientas administrativos permite la formulación de un plan .
En otras palabras, el plan nos dice cómo lograr nuestras políticas
dadas las características operacionales del sistema. Aquí entran
los administradores públicos y privados, independientemente o
en conjunto, según sea la naturaleza del plan. Cuando el plan es
puesto en funcionamiento se enfrenta a los acontecimientos reo
les del momento y del espacio en que ·se lleva a cabo ; es to
genera "nue.va" experiencia sobre el aspecto de la vida económicu
que se está analizando. Como resultado, la nueva información
obtenida por la experiencia lleva a modificar o aceptar la t eo• Íll
por un lado y a aumentar los hechos observados por el otro. El
esquema aquí presentado es muy sencillo, pero el proceso l' ll
la vida real es sumamente complicado.
Las relaciones no son unidireccionales sino bidireccionaks.
Cada etapa en el proceso clarifica las anteriores como las pos k
riores y cada parte del sistema influye, en mayor o menor grn<lt1,
en las restantes. Por ejemplo, el modelo está un tanto condid<
nado por los objetivos a servir, y éstos a su vez pueden s t•J'
modificados a la luz de los cálculos hechos con el modelo.
[ l. 3 ] LOS MODELOS EN LAS CIENCIAS SOCIALES 11
Igualmente, la política a seguir puede ser frenada por la
l
es tructura operacional del sistema, que a su turno es probable
que sea modificada por los intereses de la política prefijada y
así sucesivamente.
l lqlt!ll.f\1 1,.
I. 3. LOS MODELOS EN LAS CIENCIAS SOCIALES
Las características y usos operacionales de los modelos son
fun ciones de los principios sobre los cuales se construyen y los
objetivos que persiguen.
C. Gini sistematiza una serie de características de los modelos
económicos, destacando, en coincidencia con Hertz, que el princi-
pal objetivo de los mismos consiste en realizar una economía
del pensamiento, lo que es también objetivo en toda ciencia.
Ellos deben sintetizar las características permanentes y relevan-
tes de los fenómenos sometidos a estudio, para concluir en un
conjunto de conocimientos completo y consistente. Los modelos
no sólo deben satisfacer una economía del pensamiento, en el
sentido de minimizar los insumas de esfuerzos intelectuales para
alcanzar un cierto grado de rigor ,científico, sino que también
deb en cumplir con las propiedades de claridad de exposición
y rigor. Estos tres requisitos condicionan la fecundidad del co-
nocimiento científico, teoría y modelo.
Mucho antes que en las ciencias sociales, los modelos se des-
arrollaron en las ciencias naturales. Las razones parecen descan-
sar en dos aspectos, uno, el distinto significado atribuido a los mo-
delos en las ciencias naturales y, dos, el gran desarrollo de las
matemáticas adecuadas para la formulación de teorías represen-
t a tivas de su realidad y con afirmaciones del tipo universal. Así,
por ej emplo, la teoría del cálculo diferencial e integral fue creada
como una necesidad de la mecánica racional, permitiendo el
rá pido desenvolvimiento de la misma. Entre los modelos más
conocidos ten emos el del átomo, que ha constituido la base de
todas las investigaciones, descubrimientos e inventos que han
n ducido a la obtención de la bomba atómica. Igualmente el
modelo de las moléculas de los gases, para el cual se dedujeron
las leyes sobre la distribución y la presión de los gases, por medio
del cálculo de probabilidad. Otro, el del sistema solar, donde el
mode lo de Copérnico sucedió al antiguo modelo tolemaico.
nn las cien cias sociales, en particular en economía, los pri-
mc•"<>S n1 odelos que se construyeron tenían un significado muy
d ifere nt e a la acepción contemporánea. Ellos cumplían solamente
l ' O ll lo port e teórica y por lo tanto se confundían con el concepto
d(• ll·odn. E ro n cons trucciones puramente lógicas alejadas de toda
vulhkz l'lllpf r ico. Así, el modelo del hamo economicus, basado en el
 12 LA CONCEPCIÓN DE LOS MODELOS
famoso principio hedónico de maximizar los beneficiós obtenidos
con un esfuerzo dado, pretendió, como pura abstracción -t;eórica,
explicar los modos de actuar del hombre en su comportartüento
económico. Este modelo fue luego generalizado por los economis-
tas de la Cowles Commission con el def hamo stochasticus, des-
tacánd~se la contribución de J. Marschak.
En la actualidad a la concepción del hombre económico,
<:omo sujeto racional, calculador de satisfacciones u "hombre de
Descartes", se puede oponer muy acertadamente la concepción
del "hombre de Pavlov" o sea aquel ~ondicionado por el medio y
los eslóganes publicitarios.
Otro modelo clásico es el de la competencia perfecta, cuyo
sistema de hipótesis o axiomas es demasiado restrictivo para
que· se presente en la realidad. En nuestra concepción es una
teoría que sólo tiene alcance universal por su construcción lógica
~ matemática pero carece de validez empírica. Recordemos a tal
~ efecto los supuestos de la competencia perfecta para comprobar
.~ su irrealidad.
l. Atomicidad de la oferta y la demanda, es decir, que exista
fi
un número tan grande de productores y consumidores que nin-
~~ t guno tenga poder suficiente para influir en él precio, en las can-
N por el nivel de significación estadístico adoptado.
~ '1 tidades demandadas y en las cantidades ofrecidas.
2. Perfecta fluidez de la oferta y la demanda, o sea plena
~ 1ibertad de movimiento de los oferentes y demandantes sin suje-
\'~ & ción alguna por razones impositivas, racionamientos, control de
~ '\ precios o de producción, etcétera.
3. Perfecto conocimiento del mercado, y
4. Homogeneidad de los bienes ofrecidos, o sea, que no se
presente diferencia de calidad dentro de los de una misma es-
pecie.
Resulta evidente que estos postulados no pueden explicar
el funcionamiento de un mercado real contenido en la dimensión
tempoespacial, ni el comportamiento de los. sujetos de la acli
vidad económica en la toma de decisiones.
Este tipo de análisis y elaboración de modelos y teorías, con
fundidos en su significado como simples estructuras lógicas, ha
sido dominante hasta la década de los treinta, pero el espíritu
no conformista de los dentistas ha conducido a la formulación
de modelos teórico-empíricos y al perfeccionamiento de las tt•o
rías desde el punto de vista de las posibilidades de su alcanc-e
empírico. Por ejemplo, los trabajos de E. H. Chamberlin y Jo,m
Robinson sobre la competencia monopólica y la competendu
- imperfecta, respectivamente, permitieron una presentación rt'il
lista de la morfología del mercado. Más aún, el análisis tk-1
comportamiento real: de los sujetos de la actividad económit:a,
sus relaciones de fuerzas, sus estrategias, el tamaño de las unida
[l. 3) LOS MODELOS EN LAS CIENCIAS SOCIALES 13
des económicas, etc., permitió la elaboración de la teoría de los
juegos de Von Neumann y Morgenstem y de la teoría de la
dominación de Perroux, como modelos más comprensivos y re-
presentativos de la realidad.
· Los comienzos tardíos en la formulación sistemática y rigu-
rosa de modelos en economía y en otras ciencias sociales se ex-
plica por el erróneo enfoque metodológico de los economistas
en la utilización de las matemáticas, hasta aproximadamente la
•década de los treinta.
Estimulados los economistas por el éxito en la construcción
de modelos en las ciencias naturales (mucho antes que Adam
Smith escribiera su obra fundamental), trataron de asimilar
sus instrumentos y modelos en economía y otras ciencias sociales.
Los resultados fueron estériles, ya que la mecánica racional
(esencialmente determinista) es muy diferente de la mecánica
social, esencialmente probabilística, debido a la presencia, en
parte, del azar y las posibilidades del libre albedrío en la con-
ducta humana. Las teorías económicas no podían pretender
pasar las pruebas de falsificación en una dimensión universal, su
alcance empírico estaba limitado por el tiempo, por el espacio
y por la aceptación de un tipo de error máximo, dado este último
Los mismos modelos que completarían las teorías en este
aspecto, como construcciones teórico-empíricas, serían empírica-
mente de alcance limitado.
A partir de la década de los treinta, agudos problemas socio-
económicos atrajeron el interés de los matemáticos y economis-
tas ante la presencia de la gran crisis que ponía fin a los
principios liberales de una época; reflejada filosóficamente en
el positivismo baconiano que sostenía que la misión del intelec-
tual se agota en lo que hoy consideramos es el medio o el ins-
trumento fecundo para el cumplimiento de su misión, es decir,
en comprender y explicar la realidad. Su filosofía para la acción
era pasiva, sintetizada en la expresión 'la realidad económica,
social, etc., es así y así debe seguir siendo".
Por su parte, la corriente del pensamiento económico repre-
sentada por la teoría clásica concibió a la economía como un
sistema cuyo flujo de información lo constituían los precios.
Los individuos y los grupos respondían a las "señales" de los
precios en función principalmente de su propio interés, con
las únicas limitaciones, de un lado, de la opinión pública y la
ley y, del otro, del estado alcanzado por la tecnología. El sistema
~~conómico, sostenían, es 1] eficiente, 2] estable y 3] progresivo,
I)OSndos respectivamente en los siguientes principios:
1 l Ln oferta crea su propia demanda, fundada en la ley de
.1 B. Sny, por lo cual no existen en momento alguno ni excesos
de pmducción ni deficiencias de la misma en el sistema;
14 LA CONCEPCIÓN DE LOS MODELOS
2] En todos los puntos del sistema existen fuerzas reflejadas
en los precios que inmediatamente verifican su alejamiel)tO de la
posición de equilibrio; y
3] Las empresas y firmas operan muy eficientemente y las
nuevas ideas e inventos son incorporados en cuanto son bene-
ficiosos, de modo que el nivel de vida crece tan rápido como el in-
genio humano puede hacerlo.
Luego, el sistema, como un todo, permite el máximo des-
envolvimiento de los deseos e iniciativas individuales y, tal como
los sistemas biológicos o físicos, es regulado por controles pues-
tos en movimiento por el sistema mismo y no de fuera. A estas
virtudes se agregaba la de ser compatible en máximo grado con
la libertad humana.
No nos detendremos en destacar cuán alejada esta corriente
de pensamiento estuvo de la realidad económica de su tiempo, a
pesar de que su esquema fue creído y adoptado por los sujetos
de las decisiones políticas por largo tiempo.
· La acumulación de abusos, injusticias y despilfarro de recur-
sos 'ofreció otro panorama distinto al imaginado, que fue presio-
nando cada vez más para obligar a un cambio. Las imperfeC-
ciones del laissez faire como modo de organización económica
generaron reacciones que iban desde su completo rechazo en las
nacientes economías socialistas a su parcial modificación en los
países devotos de la libre empresa, que comenzaron a reconocer
la necesidad de una intervención estatal. Se trató de buscar un
punto conciliatorio entre la planificación central y la iniciativa
privada.
Se produce un cambio radical en la concepción de la ciencia
económica que deja de ser ciencia de simple observación para
convertirse en ciencia para la acción. La afirmación: "lo que es
debe ser", de reconocidas raíces hegelianas, sólo puede parcial-
mente aceptarse en el dominio de las ciencias naturales, pues
incluso allí el avance del conocimiento científico y la tecnología
debilitan esa afirmación. • lo señala O. Morgenstern [31] cuando afirma: "Si preguntára-
La nueva filosofía para la acción la sintetizamos en la expre-
sión "conocer la realidad para actuar sobre ella".
De la concepción de ciencia económica, en "sentido estricto",
que se le había atribuido durante todo el siglo XIX y el primer
cuarto del siglo xx, se pasa a la concepción "sociológica".
Así, Adam Smith consideraba la economía política como
ciencia de las riquezas, entendiendo por riqueza los bienes mate·
riales únicamente. Otras corrientes de pensamiento consideraron
la economía como ciencia del intercambio, reduciendo su campo al
de la teoría de los precios casi exclusivamente. Más contempon\
neamente, Lionel Robbins la definió como ciencia de la escasl'l.,
planteándose necesariamente la elección entre fines y medios.
Semejante concepto restrictivo de la ciencia económica crd
(l. 3] LOS MODELOS EN LAS CIENCIAS SOCIALES 15
su paso a un concepto más amplio: al de la ciencia social. O sea,
la economía no puede ya replegarse sobre sí misma haciendo
completa abstracción de las demás disciplinas sociales, tales
como el derecho, la historia, la demografía, la sociología, que
desde ángulos distintos, pero complementarios, tienen por objeto
el hombre y la vida social.
Su enfoque microeconómico se complementa con un enfoque
macroeconómico. La corriente clásica puso en primer plano al
ihdividuo y a pesar de que hubo intentos pioneros de un análisis
global, por ejemplo con los fisiócratas, principalmente con Ques-
nay y su Tableau Economique, la teoría clásica fue dominante
e impuso su punto de vista.
Son los economistas contemporáneos los que, iniciados con
la teoría keynesiana, realizan el cambio de· enfoque. Las condi-
ciones son favorables en todos los aspectos. El desarrollo de los
grupos sociales que inaugura la era de la economía de masas,
los progresos de la estadística, que permite series de valores
agregados, y la aparición de la planificación económica en mayor
o menor grado, con el objeto de determinar el crecimie]ltO y
el desarrollo de las economías, evidentemente han facilitado el
enfoque macroeconómico. Este enfoq4e macroeconómico que su-
pone el análisis de caq.tidades globales se complementa con un
análisis "estructural", es decir, un análisis ya no exclusivamente
a nivel nacional, sino por sectores (agrícola, industrial, servi-
cios, etc.) y por regiones o localidades.
Para la construcción de modelos que explicasen y proyecta-
sen una realidad, pudiendo tomar decisiones sobre la misma, fue
necesario que las matemáticas, como principal instrumento de
análisis cuantitativo, ampliasen su dominio de aplicación. Nuevos
métodos de cálculo debían inventarse o descubrirse para servir
a los problemas socioeconómicos, como lo hiciera el cálculo dife-
rencial en la mecánica clásica. No existe límite en el uso de las
matemáticas como instrumento cuantitativo de las ciencias. Ya
mos hoy cuáles son las limitaciones al uso de las matemáticas
en la física, tanto los matemáticos como los físicos se sorpren-
derían por la pregunta, la rechazarían como carente de sentido
y continuarían su trabajo. ~ste no podría hacerse sin un empleo
cada vez más amplio de las matemáticas. El hecho de que esa
ucs lión haya dejado de plantearse es un signo de la madurez de
lo ffsica y una consecuencia del enorme éxito de las matemáticas
:n In evolución de esa ciencia, o más bien, en la evolución con-
t·o rllllant c de ambas".
Hn ln s ciencias sociales, desafortunadamente, el uso de la
t·c·cl rlll tll'l t•t\lcu lo sólo podía hacerse con severas restricciones.
Nun•11 c·rr l'onsccucncia las matemáticas sociales, las que conjun-
lllrtlt'lllc• con l'l d ll culo de probabilidades y el método estadístico
16 LA CONCEPCIÓN DE LOS MODELOS
permiten la elaboración de modelos que pasan del aiiálisis cua-
litativo y descriptivo al análisis cuantitativo y explicativo, con-
juntamente con el análisis estadístico de sus propiedad~s pre-
dictivas.
Dos grandes nombres hacen época 'Con sus contribuciones:
uno, John von Neumann con su teorema del minimax desarro-
llado en 1928 y su modelo del crecimiento económico estable,
publicado en 1937, en el cual Von Neumann aplica su teorema
del minimax, y, dos, Abraham Wald con su contribución en 1934,
sobre las condiciones de existencia de soluciones factibles y de
estabilidad de los sistemas, en la teoría general del equilibrio
económico. Los trabajos de Von Neumann y Wald estimularon
el desarrollo de las matemáticas aplicadas a la economía. Así, el
trabajo pionero de Von Neumann y O. Morgenstern, en 1944,
sobre teoría de los juegos, representa una primera sistematiza-
ción de las nuevas matemáticas para servir a los problemas eco-
nómicos. A ellos se unirán más tarde los nombres de G. Dantzig
con su método del simplex para la solución de problemas de la
programación lineal en 1947, y que se diera a conocer pública-
mente apenas en 1951; los de D. Gale, H. W. Kuhn y A. W. Tucker
con su participación en el desarrollo del teorema d4al en la
programación lineal y algoritmos de solución en la programación
no-lineal.
Estas recientes contribuciones a las matemáticas sociales en
ningún momento disminuyen la importancia del desarrollo his·
tórico de las probabilidades y la estadística que constituyen, en
la sólida opinión de E. Bell, "la matemática social por excelen-
cia", quien además agrega: "para comprender y analizar las reac-
ciones de masas, sean éstas de átomos o de seres humanos -de
seres vivos diríamos más acertadamente-, se necesita dominar
los modernos métodos estadísticos".
Nombres ilustres por sus contribuciones al cálculo de pro-
babilidad y al método estadístico son el de T. Bayes, A. de Moi-
vre, J. B. Bernouilli, P. S. Laplace, A. Quetelet, G. Mendel, F. Gal-
ton, K. Pearson, C. Gini, R: A. Fisher y muchbs más.
E n el capítulo 1 se ha fundamentado la base empírica del cono-
cimien to científico_ La econoxnía.._es, ~n particular, una ciencia
empírica y no experimental. Es decir, oons-truye sus teorías y mo-
delos a partir de la observación del comportamiento empírico de
los suj etos de la actividad económica en la dimensión tempo-
espacial, en relación con un orden institucional y legal, y una
tecnología incorporada a la actividad económica. No existe hasta
la fecha un diseño de experimento capaz de ofrecer infonnación
experimental que sirva de base al análisis económico. El profesor
R. Selten de Francfort del Main realizó un interesante "e"peri-
mento" haciendo que sus alumnos desempeñaran varios papeles
de la vida económica real y "simulando" una unidad económica
objeto de investigación. Sin duda es ingeniosa y atractiva la idea
pero imposible pretender deducir leyes válidas del comporta-
miento económico a partir de la observación de un microsistema
económico simulado en dicha fonna. Este experimento supone
que dichos estudiántes pueden imitar, en fonna estadísticamente
representativa, el comportamiento racional de los sujetos reales
de la actividad económica. Su misma condición de estudiantes de
economía introducirá sesg~ "racionales" en la toma de decisio-
nes. A su vez, es un principio universalmente aceptado que la
mentalidad humana no puede imitar el azar. Menos aún podrá
imitar el comportamiento real de los sujetos de la actividad eco-
nómica ante situaciones de incertidumbre (infonnación incom-
pleta) cuyas decisiones son consecuencia de una racionalización
de dicha infonnación incompleta y, por ello, resulta integrada
por una componente "racional" o racionalizada y una compo-
nente "aleatoria". Además, el cálculo de probabilidades y la teoría
del muestreo confinnan empíricamente el principio antes enun-
·inclo. Émiie Borel pretendió demostrarlo mediante un teorema.
nsidcramos, sin embargo, que en la demostración Borel intro-
duce una "circularidad", sin discutir por ello la validez de su
n lll clus ión.
. St• hn analizado asimismo, en el capítulo anterior, el concepto
dt• lt•orla y modelo en las ciencias naturales y en las ciencias
sociaks . En este libro se retiene para los modelos el lenguaje
[ 17 ]
 18 ELEMENTOS CONSTITUTIVOS i>E LOS MODELOS
formal, es decir, su expresión simbólica a través de un conjunto
de relaciones matemáticas.
A fin de poder trahajar con este lenguaje formal, sé dará
en este capítulo un concepto descriptivo de modelo y se desarro-
llarán luego los elementos constitutivos del mismo. Una defini-
ción formal de modelo se presentará en oportunidad de estudiarse
la clasificación de los modelos conforme a varias características
alternativas.
II. 2. CONCEPTO DE MODELO EN ECONOMÍA
En concordancia con el análisis efectuado sobre teoría y mode-
lo en las ciencias sociales, con la orientación formal de este texto
y las características esencialmente cuantitativas de las informa-
ciones con que se trabaja en el análisis económico, se introduce
el siguiente concepto de modelo:
Modelo en economía es un conjunto de relaciones matemáti-
cas que expresan, en forma simplificada e idealizada, las carac-
terísticas básicas y esenciales de :
1] un orden institucional y legal vigente;
2] una tecnología incorporada a la actividad económica obje-
.., to de análisis ;
3] la regularidad observada en el comportamiento real de los
sujetos de la actividad económica.
Los modelos pueden estar integrados, en forma complementa·
ria, por otras dos categorías de relaciones matemáticas, a saber,
las identidades y las ecuaciones de equilibrio móvil.
En todo modelo económico intervienen relaciones matemáti
cas de alguno o de todos los tipos expuestos en 1] a 3 ]. Ello
depende del dominio de investigación específica que se considere
y del nivel de agregación con que se trabaje. Así, en el análisis
económico a n1vel nacional intervendrán generalmente relacio
nes matemáticas de las tres categorías. En cambio, sólo intt•r
vendrán relaciones de algunas y no todas las categorías incluidus
cuando se trate de la investigación de:
1] un subsistema, por ejemplo, el mercado nacional del mnl:t,
en el que entrarán, básicamente, relaciones de compor
tamiento de los consumidores, productores e int c ntH'
diarios;
2] un sector, por ejemplo, el sector agropecuario, el set·tor
industrial, el sector energético, en los que intcrvcndn\n
primordialmente relaciones tecnológicas;
(II. 2] CONCEPTO DE MODELO EN OCONOMÍA 19
3] un subsector, por ejemplo, el subsector de las industrias
metalúrgicas, en relación con el sector industrial; el sub-
sector de electricidad, con respecto al sector energético, etc.
Aquí también aparecen preponderantemente las relaciones
tecnológicas.
La estructura conceptual y analítica de la descripción de mo-
delo antes expuesta quedará más explícita en los capítulos III
y IV, donde se estudiará el proceso lógico-empírico que fundamen-
ta la construcción de los modelos en la ciencia económica.
Muchos autores, en distintos dominios del conocimiento cien-
tífico, han ofrecido su propia concepción de los modelos, que
presentan las características de definiciones descriptivas, de
acuerdo con las razones antes mencionadas. Entre dichos autores
tenemos:
1] Corrado Gini [ 18] (dentista social, con aportes científicos
a la estadística, la sociología, la economía y la demogra-
fía): "un modelo es una representación simplificada de la
forma en que ciertos fenómenos están constituidos. y/o
de la manera en que se desenvuelven". Este concepto inclu-
ye, en fonna explícita, el análisis estructural (la forma en
que ciertos fenómenos están constituidos) y el análisis
dinámico (la manera en que ciertos fenómenos se des-
envuelven) .
2] Edmond Malinvaud [29 y 30] (estadístico y econometrista):
" un modelo es la representación formal de ideas y conoci-
mientos relativos a un fenómeno".
3] Enders A. Robinson [36] (matemático): "un modelo es una
abstracción simplificada e idealizada cuyo objetivo es re-
presentar en forma aproximada el comportamiento de un
sistema". Robinson considera que: 1] todo cuerpo de cono-
cimiento trata con modelos y 2] un modelo debe ser siem-
pre, por necesidad, un compromiso entre la simplicidad y la
realidad. El concepto de modelo dado por Robinson afirma
el análisis dinámico de los sistemas. No incluye explícita-
mente el análisis de la estructura misma de los sistemas.
4] José Luis Sampedro [37] (economista): "un modelo es una
representación simplificada y en símbolos matemáticos de
un cierto conjunto de relaciones económicas". Esta defini-
ción describe particularmente el aspecto estructural del aná-
lisis económico.
S] André Regnier [35] (físico matemático): "un modelo de un
objeto concreto es un objeto abstracto cuya descripción es
considerada como una descripción de dicho objeto concre-
to". Este autor realiza luego una ilustrativa consideración
con respecto a su concepción de modelo. En efecto, sostiene
20 ELEMENTOS CONSTITUTIVOS DE . LOS MODELOS 1.11. 3 1 ELEMENTOS CONSTITUTIVOS DE UN MODELO 21
que, por una parte, el objeto abstracto está enteramente t .l que genera las informaciones muestrales. Dichos parámetros
constituido por su definición y que, al contrario, f!l objeto 'iiJ n una estimación de los parámetros estructurales.
concreto nunca puede ser susceptible de una · descripción La noción de "modelo estructural" fue introducida por los
exhaustiva. • :conometristas de la Cowles Commission [Haavelmo, 21]. El con-
l'l'plo sustitutivo de forma primaria del modelo fue introducido
En la concepción y metodología desarrollada en el prescn te por Wold [ 46]. Esta última designación facilita la distinción ne-
texto, la afirmación de Regnier, al sostener que el obj eto abstrnct :saria entre estructura y modelo de la que nos ocuparemos más
está enteramente constituido por su definición , la exprcsmn<)S <~delante. Anticipamos la relación conceptual que entre ellos exis-
diciendo que la especificación de un modelo es el resultado de uu te, diciendo que un modelo es una familia de estructuras.
sistema de axiomas o postulados concerniente al comportamicu to Así, la especificación: *
de los sujetos de la actividad económica en un sistema, subsiste·
ma, sector o subsector. (1) Dt = a1 - {31 Pt + ult, C!¡, {31 > o
Regnier vuelve sobre su concepción de los modelos para
expresarla con las siguientes palabras: "un objeto abstracto es (2) st = <I.2 + P2 Pt-l + u2t• a2 <O, (3 2 >O
un modelo de un objeto concreto cuando la definición del pri·
mero se toma como una representación del segundo".
(3) Dt = St = qt
donde P 1 es el precio, D 1 la demanda, S1 la oferta, u 11 y ~t son
variables aleatorias,** todos ellos en el período t, define un mo-
delo en su forma primaria que, en nu estro ejemplo, es ei cono-
11. 3. ELEMENTOS CONSTITUTIVOS DE UN MODELO cido modelo de la telaraña.
En cambio,
El concepto de modelo introducido en la sección anterior, con-
juntamente con la orientación expositiva de este libro, nos lleva
( 4) D1 = 80 - 1.20 Pt + uJt
l .~~\~~ Jf \o.
a especificarlo mediante un sistema de relaciones matemáticas.
Más restrictivamente, un modelo resulta especificado po.r un {_c)c '1-;:it"
1

conjunto de ecuaciones o funciones entre las variables más rele- {5) S¡= -5 + 0.90P!-l + U !t
vantes que concurren a explicar una tecnología incorporada, un (6)
orden institucional o legal y/o el comportamiento de los sujetos D 1 = S,= qt
de la actividad económica en un sistema, subsistema, sector o
subsector.* Este conjunto de ecuaciones puede estar complemen- define una estructura. Ella es un elemento, de entre los infinitos
tado con .un tipo especial de relaciones introducidas por defini- Jementos posibles, perteneciente al modelo de la telaraña. En
ción, convención o construcción. Estas últimas, a diferencia de efecto, para cada combinación de valores factibles de a 1 aa, {3 1
las anteriores, son verdaderas por virtud de los postulados o por v {3 2 , prescindiendo por el momentó de los parámetros correspon-
la forma en que se convino definirlas y en consecuencia no pue- dil:ntes a la especificación que se realice sobre ult . y ~ 1 , se tiene
den ser sometidas a las pruebas de falsificación ya que éstas no una estructura distinta. Simbolizando con S el conjunto de estruc-
les son aplicables. turas o modelo y con s una estructura perteneciente a S, o sea
Las ecuaciones con que se especifica un modelo se llaman es- s E S, resulta, para la especificación del modelo de la telaraña,
tructurales o primarias y por lo tanto se dice que el modelo de acuerdo con la notación de la lógica formal que es común en
es "estructural o primario". Una vez estimados los parámetr os teoría de conjuntos:
que en ellas intervienen, se tiene una estimación de la estructu
(7) S = {s a1 > O, a2 < O, ~ 1 > O, /32 > Or
1

* En econometría, yen general en econom.í a matemática, se trnbn ju

con ecuaciones, es decir, relaciones de igualdad entre las variables intc
vinientes, que se verifican para determinados valores de ellas. En invcs tiwu
ción de operaciones (programación lineal, etc.) se trabaja con inecuaciones, 1:!
decir, relaciones de desigualdad entre las variables involucradas, dcfinld!lll
en un sentido determinado, o sea, relaciones de tipo ?: (mayo r o igual) o
(menor o igual).
• l,n c~pecificación a,<O implica que existe un precio mínimo P=-~>0,
1111 ')tiC),;,.,,,, !()do P1 1 ::;;,'P la oferta en el período t se:rá nula. ¡¡,
•• fil l'<ltH 1 plo <k v:~nable aleatoria se introduce en la sección n. 3. 3 y con-
l!:t.~ ult~ ttt•mltJ lit~ llh uholi7.ará con u, salvo indicación en cont rario.
22 ELEMENTOS CONSTITUTIVOS DE LOS MODELOS
En palabras, el modelo S se define como el conjUnto•(familia
o clase) de estructuras s tal que sus parámetros a 1 , ~ 1 y ~ son
positivos y <l2 negativo. En oportunidad de tratar los modelO!> esto-
cásticos se hará una explícita consideración de las res tri cciones
sobre los parámetros correspondientes a las variables aleatorias.
En la concepción expuesta sobre los modelos en economfa se
han introducido las categorías de WULJCwnes, variables y paró-
metros como elementos integrantes de los modelos. A continun
ción trataremos en detalle los mismos.
n. 3. l. Ecwu:ion.es
En primer lugar, un modelo se especifica mediante una ecuación
(modelos uhiecuacionales) o varias ecuaciones (modelos multi-
ecuacionales ). Cada ecuación explica un sector (agricultura, ma-
nufactura, gobierno, etc.) o una categoría (consumidores, produc-
tores, inversores, instituciones financieras, etc.) de la actividad
económica objeto de investigación.
Según sea su contenido empírico, las ecuaciones de un mo-
delo se clasifican en : •
J
1] Ecuaciones de comportamiento;
2] Ecuaciones institucionales o legales;
3] Ecuaciones tecnológicas ;
4] Ecuaciones de definición o identidad;
1 5]. Ecuaciones de equilibrio móvil.
Esta clasificación es de vital importancia para determinar si
el modelo puede o no ser sometido a las pruebas de falsificación
con la experi~ncia. Sólo las tres primeras clases de ecuaciones, a
saber: 1] de comportamiento; 2] institucionales o legales y 3] tec-
nológicas, son el resultado de axiomas o hipótesis empíricamente
comprobables. Para su construcción, el investigador parte de las
observaciones empíricas (no experimentales) sobre el modo de
actuar de los sujetos de la actividad económica, que presentan,
como en los demás dominios del conocimiento, caracteres de
permanencia o regularidad. De la observación empírica se obten-
drá: 1] las variables relevantes que intervienen en la explicación
del sector o 'a ctividad sometida a análisis; 2] las característica:
de permanencia o regularidad que determinan el comportamien-
to d~ dichas variables y 3] sus relaciones de causalidad. Ptll"
conseguir esta información, el economista hace ciertos supue s to ~
simplificadores de la realidad mediante un proceso de abstruc
ción. Elaboradas las ecuaciones de origen empírico que intcgm
rán un modelo, ellas deben ser contrastadas con "nueva" cxrH'
riencia en términos probabilísticos, para determinar la medida
de realidad de las mis:mas. Obsérvese que hemos dicha "nueva"
experiencia, es decir, nuevas observaciones, ya que las vi e ju~
(II. 3] ELEMENTOS CONSTITUTIVOS DE UN MODELO 23
observaciones en que se basa la ecuación nunca darán resultados
diferentes a los obtenidos. Sólo las nuevas observaciones son las
que podrán decidir en favor o en contra de las hipótesis y del
modelo en general.
Las restantes clases de ecuaciones, a saber, por definición
y de equilibrio móvil, son axiomas por "convención" o por "defi-
nición implícita" y por tanto no pueden ser sometidos a las
pruebas de falsificación empírica. "
A continuación damos el significado de cada uno de los tipos
de ecuaciones que pueden integrar un modelo:
1] Una eouación de comportamiento explica el modo de ac-
tuar de los sujetos de la actividad económica pertenecientes a una
categoría determinada (consumidores, productores, importadores,
asalariados, etc.).
Veamos algunos ejemplos de ecuaciones de comportamiento
que con frecuencia aparecen en los modelos económicos.
La función consumo :
(8) C1 = <IQ + a 1 (Y1 _ 1 - T 1_ 1) + a 2 t + U 1, Ü <U¡< 1
representa el comportamiento de los consumidores; según la cual
el consumo C1 es función del' ingreso disponible del período pre-
cedente medido por (Y1 _ 1 - T1 _ 1 ), ésto es, el ingreso nacional
menos los impuestos, y de los hábitos de consumo y gastos de los
consumidores reflejados en la componente tendencia) que se ex-
presa por medio de la variable tiempo t:
La función inversión inducida,
(9) lt =~o+ ~1 (Yt-1- Yt-2)- ~2 rt + Ut, f.3v i32 >o.
es también de comportamiento, pero ahora del conjunto de los ,
inversores, y nos dice que la inversión inducida 11 es función
creciente del incremento de ingreso del período precedente, me-
dido por ( Y1 _ 1 - Y1 _ ,2 ) y función decreciente de la tasa de interés
ba ncaria r 1 •
La función de demanda de un bien industrial
( 10 ) D1 =a¡,- a1 P1 + a2Pst + a 3 Y,+ a4 Zt +u¡;
av a2, as. a4 > O
s de comportamiento, según la cual los demandantes reaccionan
e n función del precio P1 de dicho bien, del precio de un bien sus-
titutivo, si lo hubiera, P81 , del ingreso Y 1 y de los gastos publicita-
.-i os Z 1• La especificación matemática de la ecuación (10) nos indi-
:a qu e la demanda es función decreciente del precio del bien y
l'url r i6n c reciente del precio de un bien sustitutivo, del ingreso y
·dl' lo ~ l:¡as tos publicitarios que realice la empresa para la promo-
ci t'lll <k di cho bien.
 24 ELEMENTOS CONSTITUTIVOS DE LOS MODELOS ( 11. 31 ELEMENTOS CONSTITUTIVOS DE UN MODELO 2.5
2] Las ecuaciones institucionales o legales reflejan los efectos sta ecuación tecnológica considera que la producción es fun-
que producen en un modelo económioo, la existencUJ. d"e leyes o :ión de dos factores productivos, el capital K y el trabajo L, y su-
un orden institucional dado, al condicionar la actividaft econó- r>onc rendimientos globales constantes a escala.
mica. uando la función de producción Cobb-Douglas es homogénea
Así, por ejemplo, la ecuación del impuesto, le grado r, su ecuación resulta,

~
( 11) Tt = a + ~ Y 1 + u1 0<~<1 ( 14 ) Q = F (K, L) =A K
a
L r=a+~

es una ecuación institucional o legal. Ella indica que el total de Una versión más refinada de la función de producción incor-
impuestos Tt que se puede recaudar es función del ingreso nacio- pora el progreso tecnológico neutral con una componente ten-
nal Y¡, pero sus parámetros a y ~ están condicionados por las dencia! t y su ecuación es :
leyes impositivas.
La ecuación a f! at
(15) Q = F (K, L, t) =A K L e
(12) Mt = (l + ~ Yt + U t í3>0 4] Las ecuaciones de definición o identidades son relaciones
que se verifican si.e mpre, ya sea por su construcción lógica o por
es también una ecuación institucional o legal, ahora en relación la de finición contable que ellas satisfacen.
con la oferta monetaria Mt como función del ingreso Yt y donde Así, la ecuación,
a y ~ son parámetros determihados por disposiciones legales
que rigen el tamaño de la base monetaria.
3] Una ecuación tecrwlógica explica los modos de producción
(16) Yt = Ct + lt
incorporados a la actividad económica. que particiona funcionalmente la demanda final total o producto
En general ellas reflejan la tecnología que utiliza una econo- nacional Y 1 en la demanda de bienes de consumo e, y la de-
mía. Son ejemplos típicos las funciones de producción, tales como manda de bienes de inversión lt , es una identidad por definición
la función de producción Cobb-Douglas homogénea de grado uno,* de las variables que intervienen. Asimismo,
1-a
(13) Q = F (K, L ) = A K a L (17) Kt = Kt - 1 +lt

define una identidad por la construcción lógica a que responde.

En efecto, el capital acumulado hasta el período t, Kt se ha par-
ticionado tempora.lmente en dos: una parte es el capital acumu-
* Una función es homogénea de grado uno si satisface la siguiente lado hasta el período t - 1 y la otra recoge la inversión neta I,
igualdad, para todo 'A. positivo: realizada en el período t.
F('A.K, 'A.L) = 'A.F(K,L) Cuando una identidad es el resultado de la partición de una
variable (construcción lógica), sus componentes son conjuntos
Para la ecuación ( 13) resulta:
disjuntos, o sea, su intersección es el conjunto nulo y su unión
a 1-a a 1-a reproduce la variable particionada. De acuerdo con la notación de
F(I, K, I.L)=A(I.K) ('A.L) ='A.AK L ='J..F(K, L)
la teoría de conjuntos* se tiene para ( 16)
Una función es homogénea de grado r, si para todo 'J. positivo S() tiene· .
F ('J.. K, 'J. L) = /.r F (K, L)
(18) e, n lt = cf> (conjunto vacío)
Para la ecuación (14) resulta: (19) Ct u lt = Yt,
a ~ a+~ a ~ * La int~rsección de dos conjuntos A y B se simboliza por A n B y es el
F(I,K, 'J..L)=A('J..K) O. L) ='A AK L = l,rF(K ,L), ·conjunto de elementos que pertenecen a A y B simultáneamente. La unión
. de dos conjuntos A y B se simboliza por A u B y es el conjunto de todos los
siendo r = a + (:l elementos que pertenecen a A o B .
26 ELEMENTOS CONSTITUTIVOS DE LOS MODELOS
es decir, que cada bien demandado en el período ·r es un bien
de consumo o uno de inversión y ningún bien pertenece a am-
bas categorías. Análogamente en (17): " z
(20) K 1 _, () lt = <P '
(21) Kt-1 Ult =K 1 Ingreso
Una identidad por definición contable es una relacíon qu~·
ex post se verifica siempre, como las identidades ex post que n··
sultan de la contabilidad del ingreso nacional. Por ejemplo, lu
identidad (contable) ex post ahorro igual inversión.
5] Las ecuaciones de equilibrio móvil son aquellas igualdades
que resultan de una condición impuesta o postulado introducido.
Así, la ecuación ( 3) en el modelo de la telaraña
D1 = St = qt
es una ecuación de equilibrio móvil. Se postula la igualdad entre
la oferta y la demanda como condición de equilibrio.
Los siguientes son ejemplos· de ecuaciones de equilibrio móvil
en macroeconomía, en un contexto dinámico.
(22) P1 =Z 1_ 1 (retardo de tipo lundbergiano)
(23) Y 1 = P1 _ 1 (retardo product~ingreso)
(24) Z1 = Y1 _ 1 (retardo de tipo robersoniano)
Estas variables representan el producto nacional rec;pectiva-
mente desde el punto de vista de la producción de bienes y servi-
cios (P1 ), la distribución del producto (Y1 ) y la demanda total
o gasto nacional (Z 1 ) . •
La ecuación ( 22) supone el equilibrio móvil entre el producto
nacional de bienes y servicios que se espera en el período t, es
decir ex ante, con la demanda total o gasto nacional realizado
(ex post) en el período t - 1 .
La ecuación ( 23) es de equilibrio móvil entre el ingreso es
perado (exante) Y 1 y el producto ya generado (expost) en t•l
período t - 1 .
La ecuación (24) asume el equilibrio móvil de los gastos tola
les o demanda nacional global que se espera en el período t, ( Z,)
con el ingreso percibido en el período t - 1, (Y1 _¡).
En resumen, las ecuaciones (22)-(24) constituyen una intcr·
pretación de la corriente circular del ingreso en el contexto clirr
( II. 3] ELEMENTOS CONSTITUTIVOS DE UN MODELO 27
Demanda
Retardo de tipo
robertsoniano
Retardo de tipo
lundbergiano
y P Producción
Retardo
Producto-Ingreso
DIAGRAMA 11 . 1
mico de una economía nacional. Ella se ilustra gráficamente en
el diagrama 11.1.
Se puede partir desde cualquier punto del triángulo YZP,
pero una vez elegido el mismo se debe seguir la dirección de la
corriente de ingresos. Los retardos deben interpretarse en tér-
mino de expectativas. Así, el retardo de tipo lundbergiano es una
interpretación de las expectativas de los empresarios con respec-
to al nivel deseado de la producción P en le período t, corrdici~
nado por el nivel realizado de la demanda efectiva en el período
t - l. Es decir, la demanda Z 1 _ 1 induce los planes de producción
en el período t. El retardo product~ingreso es una interpreta-
ción de las expectativas de ingreso esperado (Y) por los titulares
de los factores de la producción en el período t, en función del
nivel de producción P realizado en el período t - l. Por último, el
retardo de tipo robertsoniano es una interpretación de las expec-
tativas de gasto total (demanda efectiva Z) esperado por los titu·
lares de ingresos en el período t, las que resultan estar en función
de los ingresos (Y) percibidos en el período t- l. Es decir, el
ingreso en un período induce las expectativas de gasto en el pe-
ríodo siguiente.
Tr. 3. 2. Variables y parámetros
Hemos visto que toda ecuación es una relación matemática entre
un conj unto de variables, que se verifica para determinados va-
lores numéricos de ellas. De este conjunto de valores sólo nos
interesan aquellos que tienen significado económico, es decir, los
valores factibles que definen su correspondiente dominio o re-
rrido. Así, para las variables precio, producción, consumo, ingre-
so, ah orro, etc., sólo son factibles los valores no negativos. Ade-
•nós, en toda ecuación (relación matemática entre variables)
i 11 t t• rvi cnc otra categoría matemática que son los parámetros.
IÍ.., Ios so n los factores de ponderación correspondientes a cada
v111 iablt• expli cativa y miden el efecto de las fluctuaciones de
t·o., tao., variables sobre la variable explicada. Así por ejemplo, en

28 ELEMENTOS CONSTITUTIVOS DE LOS M()f)IH 11
la ecuación ( 2) del modelo de la telaraña, que relaciona el pn·do
en el período t - 1 con la oferta en el período t, o sea, ,.
(2) S t = a2 + ~2 Pt-1 +u2t • ~<O, ~2 >O
el parámetro ~2 mide el impa cto de los niveles de P en un período,
sobre el nivel de la oferta en el período siguiente. De acuerdo con
la restricción impuesta a ~ 2 (positiva), dicho impacto mide una
relación directa, o sea, valores crecientes de P en un período
inducen valores crecientes de S en el período siguiente.
n . 3 . 3. Clasificación de las variables
La clasificación de las variables que intervienen en un modelo es
indispensable para determinar si el mismo cumple o no, como
sistema axiomático, con las propiedades de la consistencia y de la
independencia mencionadas en el capítulo anterior. Por consis-
ter,cia se entiende la no contradicción entre las diferentes hipó-
tesis o ecuaciones que integran un modelo. Por independencia se
entiende que cada hipótesis no puede ser deducida como propo-
sición final de las restantes. Si el sistema de ecuaciones es consis-
tente, entonces el modelo puede tener una única solución o
infinitas soluciones. En caso contrario, el modelo no admite solu-
ción alguna (véase el capítulo III).
Otra razón primordial fundamenta la necesidad de conocer
los tipos de variables que entran en un modelo. Ella se refiere
a la selección óptima de los métodos de estimación de paráme-
tros, que depende entre otros de las clases de variables inter-
vinientes (véanse los capítulos v y vi).
Existe una clasificación básica de las variables, que corres·
ponde a las categorías de variables que aparecen en los modelos
estructurales o forma primaria de los modelos, a saber:
A. Clasificación de las variables en los modelos estructurales
1] Variables endógenas
· { 2.a] Exógen.,
2] Variables predeterminadas
2. b] Endógenas con retardo
3] Variables aleatorias o estoc sticas
4] Variables expectativas
1] Las variables endógenas son aquellas cuyos valores es tinrn
dos van a ser determinados por las soluciones particulares <kl
sistema de ecuaciones que integran el modelo. Ellas son las va
riablcs llamadas dependientes en el análisis matemático. En t'l
modelo de la telaraña, son variables endógenas la demanda n,.
( II. 3] ELEMENTOS CONSTITUTIVOS DE UN MODELO 29
la oferta S 1 y el precio Pt; en la función consumo ( 8) es variable
endógena el consumo C 1 y en la ecuación (9) lo es la inversión
inducida ]¡.
2] Las variables cuyos valores no se obtienen por la solución
del modelo sino que provienen de fuera del mismo son llamadas
variables predeterminadas. Ellas contribuyen a explicar el com-
po r ta miento de las var iables endógenas de un modelo sin ser
explicadas por el modelo mismo. Comprenden dos categorías, a
saber : a] variables exógenas y b] variables endógenas con retar-
do del tiempo.
2 . a] Las variables ex.ógentlS incluyen variables económicas
propiamente dichas y variables no económicas. Ambas son ex-
plicativas en un modelo dado pero no constituyen objeto de aná·
lisis y de explicación en dicho modelo. Así, por ejemplo, en la
ecuación de demanda de un bien industrial (10), si el modelo
estuviera constituido por esa única ecuación, el precio del bien P1•
el precio de un bien sustitutivo P 81 , el ingreso nacional Y 1 y los
gastos publicitarios Z 1 se considerarían variables exógenas, todas
ellas con significado estrictamente económico. Este hecho limita·
ría severamente la validez del modelo, ya que algunas de esas va-
riables necesitan ser explicadas en el modelo, particulann.ente el
precio del bien en cuestión, y no consideradas como explicativas.
En casos no extremos como éste, el carácter de exógena o
endógena respecto a una variable depende esencialmente del pa-
pel que va a desempeñar en el modelo, es decir, si va a ser explica-
tiva o explicada, respectivamente. La inclusión de variables exó-
genas con significado económico se justifica por el dominio de la
investigación (sector, subsector, actividad, etc.) y el período
que se considera. Así, la inversión pública puede tratarse como
variable exógena en un modelo macroeconómico a corto plazo.
Análoga consideración merece la oferta monetaria. Pero si el
modelo es de largo plazo, tanto la inversión pública como la ofer-
ta monetaria difícilmente podrán tratarse como exógenas y, en
cambio, requerirán ser explicadas por 'el modelo.
Las variables exógenas sin significado estrictamente económico
no tienen las limitaciones de los anteriores. Ejemplos de dichas
variables nos los brindan la precipitación pluvial en una ecua-
ción de oferta de productos agrícolas, la población, el tiempo, etc.
2 . b] La. variables endógenas con retardos, por sus caracte-
rísticas específicas, intervienen como variables explicativas. En
efecto, recurriendo nuevamente al modelo de la telaraña, el pre-
cio P1 es una variable endógena. Su comportamiento resulta expli·
cado por el modelo (ecuaciones 1, 2 y 3 ), pero P 1 _ 11 o sea el precio
n el período anterior, es endógena con retardo de una unidad de
tlt·rnpo , y se considera explicativa. En el período t, P, ~ 1 es un dato
y, por· cons iguiente, es irreversible. Su valor influye sobre S 1 y no
t"l t•xplic'ncla por el modelo.
 30 ELEMENTOS CONSTITUTIVOS DE LOS MODELOS
Las variables endógenas con retardo intervienen -intensamente
en el análisis económico y su introducción caracteriza líl forma
más importante que se sigue en la construcción de los mod elo
dinámicos, de los cuales nos ocupamos en el capítulo VII. Ln
importancia de su introducción en el análisis económico se dct
al efecto producido en los niveles actuales de las variables cndó·
genas por los valores asumidos en el pasado inmediato por mu-
chas de ellas. Esta observación fue decisiva para la construcción
y desarrollo econométrico de los modelos con retardos distri·
buidos. Así por ejemplo, el consumo nacional puede explicarse
por los niveles del ingreso nacional de todos los períodos precP-
dentes, incluido el período actual. O sea:
(25) Ct =a+ ~o Yt + (3 1 Yt-1 + ... + ~i Yt-i + ...
donde las ~i definen las propensiones marginales parciales a con-
sumir y
C() o
(26) ~ = C=O
~ [3,, o < ~i < 1' {3 < 1
define la propensión marginal tota! a consumir. La contribución
de las variables endógenas con retardos en la explicación y tam-
bién en la predicción de los fenómenos económicos puede sinte-
tizarse en la siguiente afirmación: El pasado contribuye a explicar
el presente y compromete el futuro en su acción.
3] Las variables aleatorias o estocásticas constituyen una cate-
goría fundamental en el análisis econométrico de los modelos
estructurales. Son variables no observables y su introducción ca-
racteriza a los modelos estocásticos o probabilísticos; por oposi-
ción a los modelos deterministas. Estos últimos siguen dominando
el contenido de la economía matemática, mientras que los mo-
delos estocásticos son de uso habitual en la econometría.
El análisis de la variable aleatoria y de sus postulados en los
modelos econométricos será realizado en el capítulo v. Cumplen
con la misión de recoger el conjunto de causas que no se encuen-
tran explícitamente incorporadas en un modelo. Tales,
a] Omisión de variables explicativas. En efecto, en la espccifi
cación de una ecuación se incluyen aquellas variables que se con
sideran más relevantes. Así, para el modelo de la telaraña, en lo
función de demanda se incluye únicamente el precio del bien
considerado. Se omiten variables explicativas de la demanda , tal es
como el ingreso, los precios de los bienes sustitutivos y de lC>.'l
complementarios, etc. Un principio general que debe observanw
en la selección de variables, es que la contribución explicativa th•
las que se excluyen debe ser proporcionalmente inferior a la debi-
da al conjunto de variables incluidas.
( II. 3] ELEMENTOS CONSTITUTIVOS DE UN MODELO 31
b] Errores de especificación. En efecto, suponiendo que se han
incluido las variables explicativas más relevantes, lá variable alea-
tor ia recoge los efectos de una especificación incorrecta sobre
la ley matemática de correspondencia entre las variables que se
incluyen en la ecuación. Así, por ej emplo cuando se especifica
que la r elación de correspondencia entre las variables es lineal
per o la observación indica qu e no es lineal (cuadrática, logarít-
mi ca, logística, ex'pon encial, e tc.) .
] Errores de m edida sobre las variables endógenas. Se con-
s id e ra qu e dkhos e n ·o1·es son al ea torios y se los incorpora en la
val'iubl o es tocás t len de cada ecua ci ón de un modelo. Se supone
qtw In <~ vnriahlt•s t~ x t'>ge nn s es tá n medidas sin error. El abandono
d1 · 1'1'1 11' ~> taput::. t· o pl ttatt c.·a pro bl emas es pecí fi cos de análisis econo-
IIH'• t aiw qm· l 'l! tratado tnttli ciona lmcnte en los llamados modelos
t•on t•a·ro n:s e n ln s va riables.
El a ná li s is de las cau sas qu e originan la introducción de las
va riabl es al ea torias condiciona la formulación de un sistema de
pos tulados sobre su comportamiento. Así, por ejemplo, la exclu-
s ió n de una variable relevante da lugar a la observación de un
proceso autorregresivo para la variable aleatoria. Es decir, que
!n lugar de presentar residuos independientes entre sí, resultan
a u Locorrelacionados.
Toda variable aleatoria está asociada a una distribución de
probabilidad. Esta ley de distribución no necesita ser conocida
o pos tulada cuando se estim:ln parámetros por el método de mí-
nimos cuadrados. Debe ser necesariamente especificada cuando
se realizan pruebas de hipótesis, corno se ve_rá en el capítulo v.
4] Las variables expectativas. Éstas son variables no observa-
bles y su introducción exige el enunciado de un postulado adicio-
nal en el que se especifica su comportamiento en función de
variables observables. Son variables expectativas, entre otras,
las variables precio normal esperado, ingreso normal esperado,
inversión normal esperada, etc. Esta clase de variables interviene
en los modelos con retardos distribuidos, como por ejemplo en el
s iguiente modelo que es el resultado de rigideces (de comporta-
miento, tecnológicas e institucionales).
(27) ct - c,_1 = ~ (C,*- c,_l), o<~< 1,
(28) C/ =a+~ Yt
S i C es consumo e Y ingreso, la ecuación (27) expresa que el
in cre me nto de consumo entre el período t- 1 y el período t es
111111 proporción ~ de la diferencia entre el consumo observado
t•n \'1 1wrfodo t- 1 y el consumo normal esperado en el perío-
do t((', 'lf ) . A su vez, la ecuación (28) especifica que el .::onsumo
34 ELEMENTOS CONSTITUTIVOS DE LOS MODHJ.O, ( 11. 4] ALGUNOS EJEMPLOS ILUSTRATIVOS 35
los períodos precedentes, se demuestra que es igual a~· [Se dedu · 11.4 . l. Un modelo macroeconómico del crecimiento, adaptado
ce a partir de la solución de la ecuación en diferencias finitas ( 29) de M. A. Liebenberg et al. [28]
en función de Y 1 .] "'
(35) C1 = ao + a 1 Yt + a2 Ct- 1 + u1t,
Otra categoría de parámetros que al?arece en la solución de O < a1 < 1; O < a 2 < 1
ecuaciones e.n diferencias finitas y de ecuaciones diferenciales (36) 11 = ~o+ ~ 1 Bt +~a Kt - 1 + ~~. ~1 >o
son los parámetros arbitrarios, llamados así porque la ecuación
que los contiene es solución de la ecuación en diferencias finitas (37) w, = bo + ~h Y,+ a2t + UJ!t• a1 >o
o de la ecuación diferencial de la que se ,obtuvo, para cualquier (38) Y 1 = C.+1 1 +G,
valor real de dichos parámetros. Por ejemplo, sea la siguiente
ecuación en diferencias finitas, homogénea de primer orden, que (39) Bt =Y, - Wt
nos dice que el consumo C1 es función lineal del ingreso del pe- (40) K 1 =Kt - l+lt
ríodo precedente Y 1 _ 1 , siendo a la propensión marginal a con-
sumir. s iendo:
(32) C1 = aY1 _ 1 0<a<1 ct = consumo nacional
lt = inversión neta
Su solución general, que nos da el comportamiento dinámico del Y 1 =ingreso nacional
consumo, es: G1 = gasto público en bienes y servicios
(33) C1 =A a 1
wt = ingreso de los asalariados
B 1 = ingreso de los no asalariados
K 1 = existencias de capital al finalizar el período t
Esta solución verifica la ecuación ( 32) para cualquier valor t =tiempo ·
de A considerado como un parámetro arbitrario ya que puede
asumir infinitos valores. A deja de ser un parámetro arbitra·
En este modelo, la ecuación ( 35) es de comportamiento. Ella
rio y queda unívocamente determinado, cuando se conoce una explica el modo de actuar de los consumidores, según la cual el
condición inicial. Si suponemos conocido el consumo nacional consumo ( C1 ) es función del ingreso nacional ( Y 1 ) y de los hábi-
para un año cero e igual a C0 , sustituyendo en la ( 33) resulta,
tos de consumo reflejados en C1 _ 1 • Contiene un modelo con dis-
C0 = A a.0 = A, luego, tribución del retardo siguiendo una ley geométrica [ véanse ecua-
ciones (27), (29) y (35a)].
(34) ct = Coa1 · La ecuáción ( 36) señala el comportamiento de los inversores
En general, la solución de una ecuación diferencial o de una poniendo de manifiesto que la inversión es función de los ingre-
ecuación en diferencias finitas de orden r contiene r parámetros sos que percibe la clase no asalariada (B 1 ) y de las existencias
de capital al finalizar el período t - 1 (K1 _ 1 ).

arbitrarios, los que resultan unívocamente determinados si se dis·
pone de r condiciones iniciales.
I1. 4. ALGUNOS EJEMPLOS ILUSTRATIVOS
Las clasificaciones de ecuaciones, variables y parámetros las cienl ·
plificaremos con algunos modelos . económicos a fin de faciJitn•·
:e
La ecuación (37) explica el comportamiento de los salarios W 1
como función del ingreso nacional ( Y 1 ) y de una componente
tendencia! t.
La ecuación ( 38) es de definición o identidad, donde el in-
.· greso (Y 1 ) se define como la suma del consumo (C1 ), la inversión
• ¡• neta (1 1 ) y los gastos públicos (G1 ).
~ La ecuación (39) es también de definición, donde el ingreso
• de los no asalariados (B¡) se define como la diferencia entre el
S
e

una comprensión global de los elementos constitutivos de 011 1 ingreso nacional ( Y 1 ) y el ingreso de los asalariados W 1•
modelo. La ecuación ( 40) es otra id en ti dad por la cual se definen las
xi.stc ncias de capital al finalizar el período t (K 1 ) como la suma
de las cxístencias de capital en el período t - 1 ( K 1 _ 1 ) y la in-
n neta realizada durante el período t(11 )
36 ELEMENTOS CONSTITUTIVOS DE LOS MODELOS
l 11. 4) ALGUNOS EJEMPLOS ILUSTRATIVOS 37
El modelo tiene seis variables endógenas que serán explicadas
por el mismo. Ellas son: C 1, lt, W 1, Y 1, B 1 y K,. Las va ria bles ( 43) e,= s,
predeterminadas o explicativas del modelo, cuyos va lo re)S 1'ro- (44) Yt ~ Ao +.A1 lt + /.,2 Yt - 1 +uat•
vienen de fuera del mismo, son: 1] consumo del período pn.•cc- ~o 1 ~2
dente (C1 _ 1 ) , 2] existencia de capital del' período precedente K 1_ 1, Ao = , .A1 = , .Aa =---
3] los gastos públicos G1 y 4] el tiempo t. Las dos primeras son 1 - 1)1 1- ~1 1- ~1
endógenas con retardo y las dos últimas son exógenas. De c nln•
las exógenas, los gastos públicos tienen sentido económico miL'n-
(45) = Yo +
Zt Y1 PMt + Y2 PM, t-1 + Ya t + U4t• Y1 >O
tras que el tiempo no lo tiene. ( 46) Pm = w 0 + <.0 1 P 1 + <.0 2 t· + u 5 1, (.01 >o
Las variables aleatorias son u 11 , U& 1 y U~t· Donde :
Los parámetros del modelo son todos estructurales. En la
ecuación ( 35 ), a 0 representa el consumo autónomo, a 1 la propen- C 1 = consumo de productos alimenticios
sión marginal parcial a consumir debida al ingreso en el período t Y 1 = ingreso disponible
y a 2 el efecto sobre el consumo debido al nivel de consumo alcan- P 1 = índice de precios al por menor de productos ali-
zado en el período anterior. Resulta ilustrativo observar que esta menticios
ecuación pu ede deducirse de una con distribución del ret;:trdo t =tiempo
siguiendo una ley geométrica y recíprocamente. Procediendo a S 1 = oferta de productos alimenticios en el mercado al
sustituir C1 _ 1 en forma recurrente se deduce: por menor
! 1 = inversión neta
~ 2
(35a) et = + a 1 Y 1 + a1 ae Yt - 1 + a1 a2 Y 1_ 2 + ... + v, Z 1 =producción de bienes alimenticios
1 - ~2
. /

La propensión marginal parcial a consumir debida a Y 1 se

deduce derivando parcialmente et con respecto a y t en (35a) .
Obteniendo las derivadas parciales con respecto a Y1_ 1 , Y, _., . .. ,
y sumándolas se deduce la propensión marginal total a consumir
o derivada, a largo plazo, del consumo con respecto al ingreso.
Es decir,
oo o ct U¡
k--
í=O O Yr-i 1 - a2
En la ecuación ( 36) ~~~ es la inversión autónoma, ~ 1 mide la ve-
locidad de cambio en la inversión ante cambios en el ingreso de
los no-asalariados y ~ 2 mide la velocidad d~ cambio de la inver-
sión ante cambios en las existencias de capital.
En la ecuación ( 37) 1)0 es el salario autónon;w, 1) 1 mide la velo-
cidad de cambio de los salarios totales ante cambios en el ingreso
nacional y 1) 2 el impacto de la componente tendencia! en la detcr- S 1S
minación de los salarios.
u.4.2. Un modelo macroeconómico de la demanda nacional tle
bienes alimenticios adaptado de M. .4. Girshick y T. Haa-
PMt = índice de precios al por· mayor
La ecuación ( 41) es de comportamiento, referida a los consu-
midores de productos alimenticios. Ella explica que el consumo
de estos bienes (C1 ) es función del ingreso disponible (Y 1 ) del
mismo período y del ingreso disponible del período preceden-
te ( Y 1_ 1 ), del precio en el mercado al por menor (P1 ) y de los
há bitos de consumo y gustos de los consumidores, reflejados en
la componente tendencia! t. '
La ecuación ( 42) explica el comportamiento de los interme-
di arios u oferentes en el mercado al por menor. La oferta (S1 )
es función del precio (P1 ) y del volumen de producción de bie-
nes alimenticios (Z 1 ).
La ecuación ( 43) es de equilibrio móvil, por la cual se asume
la igualdad entre la oferta (S 1 ) y demanda (e1 ) de bienes ali-
m enticios.
La ecuación ( 44) se refiere al ingreso nacional, ya no consi-
. siderado como una identidad sino como ecuación de comporta-
mi ento. Esta ecuación ( 44) es el resultado del siguiente modelo:
(47) e, = l'lo + 1'1 1 Y,+ l}z Yt-1 + vlt; ~v ~.2 > 0; ~1 + ~2 <1
(48) l, = Y -et1

velmo [ 19] d t• do nd e se deduce la ecuación ( 44) del ingreso nacional. En

(41) e, = a 0 + a 1 Y1 + a 2 Y1 _ 1 - aa P 1 + a4 t + u 11 ; t• ftT IO, .
Q_< U¡ + <12 < 1, aa > O ~o 1 3.2 vlt
(42) S1 = ~o + p Pt + ~2 Z, + Ueu ~ 1 • ~2 >O ( 4411) Y, = - - + - - 11 + --Yt-1 + - -
1
1- ?h 1- 1)1 1- ~1 1 - l)¡
 PROBLEMAS
38 ELEMENTOS CONSTITUTIVOS DE LOS MODELO:S 39
haciendo, rfodo, análogamente y2 , pero respecto a los precios del período
precede~te (PM, 1_ 1 ), y y 3 mide el impacto de la componente
tendencia!.
~=~.
llo 1 Vu
1 -ll¡ = Ao. 1 - ll1 = A1 , 1 - l)¡ 1- b¡ = ~. En la ecuación ( 46), Wo es el precio autónomo, ro1 mide el
:fccto del precio al por menor (P1 } sobre el precio que reciben
los productores (PM,) y ~ mide el efecto de la componente
resulta la ( 44 ). tendencia!.
La ecuación del ingreso explica que el mismo es función de
la inversión I, considerada autónoma y del ingreso del período
precedente Y,_ 1 •
La ecuación ( 45) explica el comportamiento de los produc-
tores en función del precio que reciben por sus productos (P111 ) PROBLEMAS
en el período t y análogamente respecto al período precedente
(P11 , ,_.¡ ) y de una componente tendencia! que incorpora los JI. J. Explique los siguientes conceptos:
hábitos de producción. a] Ecuación.
Por último, la ecuación ( 46) se refiere al comportamiento del b] Variable.
precio en el mercado al por mayor (PM,) de productos alimen- e] Parámetro.
ticios. Considera que los productores no pueden esnerar y deben
necesariamente vender sus cosechas. Por consiguiente los pre- 11.2. ¿Por qué es importante la clasificación de las ecuaciones? ¿Qué
cios al por mayor son fijados con un carácter "residual" res- tipo de ecuaciones son empíricamente comprobables?
pecto a los precios al por menor (P1 ),. incluyendo además la
componente tendencial. n .3. ¿Es posible formular un modelo co:p ecuaciones únicamente de
El modelo tiene seis variables endógenas que serán explicadas identidad y/o equilibrio móvil? ¿Por qué?
por el mismo, a saber: e,, st. P¡, Y¡, Z, y PMt· Son variables pre-
determinadas: Y1 _ 1 , PM, t - 1 , t e / 1• De1éstas las dos primeras son n .4. ¿Para qué sirve la clasificación de las variables? ¿Cómo clasi-
endógenas con retardo y las dos últimas son exógenas. La inver- ficaría la inversión planeada y el ahorro planeado que figurasen
sión ( 11 ) es exógena con significado económico mientras el tiem- en un modelo? ¿Cómo clasificarla la inversión realizada y el
ahorro realizado?
po (t) no.
Con excepción de los parámetros de la ecuación ( 44) todos 11.5. Dado el siguiente modelo,
los demás son estructurales.
Así, en la ecuación ( 41 ), ~ es el consumo autónomo, a 1 y <l2 1] e,= 0.0 +a¡ (Y,_l- T,_¡) +a, c,_l + Uw o< al< 1
las propensiones marginales parciales a consumir. Su suma 2] / 1 = ~o + ~ 1 (Y1 _ 1 - Y1 _a) + "':zt• 13 1 >O
a 1 + a 2 nos da la propensión marginal total a consumir, a 3 mide 3] T1 = /..0 + A1 Y,+ ~~· O< ). 1 < 1 ·
el efecto de los precios al por menor sobre el consumo y a 4 4] Y1 =e,+ 11 + G1
mide el efecto de los hábitos de consumo y gusto de los con-
sumidores incorporados en la variable tiempo. Siendo:
En la ecuación ( 42) ~o es la oferta autónoma, ~ 1 mide el
efecto de los precios al por menor sobre la oferta y ~ 2 mide e1 = consumo nacional
el efecto de la producción sobre la oferta que hacen los inter- 11 = inversión neta
mediarios ( S 1 ). T 1 =impuestos
En la ecuación ( 44) Ao. A1 y A2 son parámetros de la for· Y 1 = ingreso nacional
ma reducida, llamados multiplicadores, siendo específicamcnt
1 Se pide :
A. 1 = - - - el multiplicador de la inversión 1,.
1 -- 1\, ' 1 Clasificar sus ecuaciones.
En la ecuación (45) y0 es la producción autónoma, y1 mid h 1 Clasificar sus variables.
la velocidad de cambio en la producción de bienes alimentici() t~ 1 Clasificar sus parámetros e interpretar sus significados
ante cambios en los precios al por mayor (Py1 ) del mismo pe· "'Onómicos.
40 ELEMENTOS CONSTITUTIVOS DE LOS MODELOS
CAPÍTULO III
11.6. Dado el siguiente modelo con el que se pretende representar
el mercado de productos y el mercado monetario de una eco- CARACTER1STICAS RELEVANTES DE LA CONSTRUCCióN
nomía : ·• DE LOS MODELOS ECONóMICOS

1] <
C 1 = 0.0 + a 1 Y 1 + ult> O< a 1 1 '
2] lt = ~o + ~1 (Yt-1- Yt-2) + U:!t• ~1 >O
3J Yt = ct + rt + Gt
4] L 1 = A0 + A1 Y 1 - Aa r 1 + u~w A1 , A2 >O
5] Mt = ao + al yt + Uw al> o III . l. ESTRUCTURA LÓGICA DE LOS MODELOS
6] M1 = L1
Hemos señalado en el capítulo I que las teorías en las ciencias
Siendo, sociales son esencialmente estructuras lógicas, basadas en una
experiencia pero no necesariamente sometidas a las pruebas de
C1 = consumo nacional falsificación. Por tanto su alcance es universal sólo desde el pun-
l t = inversión neta to de vista de su construcción lógica pero no desde el punto de
Y 1 = ingreso nacional vista de sus regularidades empíricas.
Gt = gasto público en bienes y servicios
Los modelos, por el contrario, son construcciones teórico-
empíricas que resultan de un proceso lógico-empírico y, en con-
L 1 = demanda monetaria secuencia, debe en ellos distinguirse una "parte teórica" y una
M 1 = oferta mo·n etaria _ _, "parte empírioa". •
1
rt = tasa de interés ) La teoría, al igual que la parte t eórica de un modelo, se ca-
racteriza por constituir un sistema teórico deductivo que sólo
Se pide: debe cumplir con los requisitos lógicos de hipótesis y tesis, sin
ser necesariamente sometido a las pruebas de falsificación con
a] Clasificar sus ecuaciones. la experiencia. También podemos referirnos a la teoría cien-
b] Clasificar sus variables. tífica como un sistema deductivo constituido por un conjunto
e] Clasificar sus parámetros e interpretar sus significados eco- de proposiciones llamadas iniciales (hipótesis) de las cuales se
nómicos. derivan otras proposiciones finales (tesis), de acuerdo con prin-
cipios lógicos. Las proposiciones finales del sistema pueden ob-
tenerse en forma inmediata o mediata a partir de las propor-
ciones iniciales.
Las características lógicas hacen a la construcción oFdenada
y coherente de una teoría o de la parte teórica de un modelo,
respondiendo al esquema de verdadero o falso de la lógica formal
pero completamente independiente de la validez empírica que
tanto uno como otro puedan tener.
A continuación nos ocuparemos especialmente de estas ca-
racterísticas lógicas (hipótesis y tesis), en referencia a los mo-
delos económicos que constituyen el objetivo principal de este
.libro.

111 . l . a. Hipótesis o proposicio11es iniciales

Por hipótes is entendemos el axioma o conjunto Je axiomas, pos-

t u Indos o proposiciones iniciales referente a la conducta de los
[ 41 ]
42 CONSTRUCCIÓN DE LOS MODELOS ECONÓMICOS
sujetos de la actividad económica en relación a un orden insti-
tucional y a una estructura tecnológica dados.
En nuestra definición hemos considerado a los axiomas o
postulados como "proposiciones iniciales", o sea, lo que los
filósofus de la ciencia llaman "afirmaciones singulares", por opo-
sición a las "afirmaciones universales" que son proposiciones
con carácter de leyes naturales y que difícilmente se encuentran
en la ciencia económica. Las proposiciones iniciales describen lo
que generalmente se conoce como las "causas" del fenómeno en
cuestión.
Todo sistema axiomático o conjunto de hipótesis o postula-
dos, para ser considerado como tal, debe cumplir con los re-
quisitos de la "consistencia" y de la "independencia". Se dice,
entonces, que el modelo que corresponde a dicho sistema es
completo, o sea puede admitir solución; en caso contrario, el
modelo no admite solución. De allí la gran importancia que tiene
el cumplimiento de estos dos requisitos y la necesidad de que
queden perfectamente claros para el lector.
Por consistencia se entiende la no contradicción entre los
diferentes postulados o proposiciones iniciales que integran el
conjunto de las hipótesis. •
Por independencia se entiende que cada postulado no puede
ser deducido como proposición final¡ de los restantes.
Como en economía se trabaja frecuentemente con modelos
constituidos por sistemas de ecuaciones lineales, formas con que
matemáticamente se especifican las proposiciones iniciales, las
propiedades de independencia y consistencia podemos expresar-
las más rigurosamente con la ayuda del álgebra lineal.
En este punto el lector deberá hacer un esfuerzo de sistema-
tización de los teoremas que se enuncian a continuación, a fin
de poder comprender luego los ejemplos económicos con que se
ilustran los mismos (para un tratamiento más extenso, véase el
apéndice matemático).
Dado el siguiente sistema de m ecuaciones lineales no horno·
géneas con n incógnitas, el que representa "un modelo dado ,
pudiendo ser m > n, m = n, ó m < n,
O¡¡ X¡ + 0¡2 +X:! + a1 ,.x,. = b1
~~x~ + ~2x2 + + ~ .. .x.. = b(2
(1)
a,.¡ Xt + am2 X:! + .... + Omn X,.= bm
que simbolizándolo en forma matricial resulta:
Ax = b o bien, Ax-b=O
[ 111. 1) ESTRUCTURA LÓGICA DE LOS MODELOS 43
siendo A la matriz de coeficientes de orden m X n; x el vector
columna de las incógnitas de orden n X 1 y b el vector columna
de los datos, de orden m X 1.
Si a la matriz A la descomponemos en n vectores de orden m;
a 1 = [a11 , ~ 1 , ••• , a'"¡]
a2 = [al2, a..l2, ••• , am2l
a,. = [a 1,., 0:¡,., ••• , a'",.]
se dice entonces que el nuevo vector de orden m,
- -- A.1 a 1 + #.2 a2 + . . . . + ).,. a,.,
donde las ). son parámetros arbitrarios pertenecientes a un cam-
po numérico F, es una combinLZCión lineal de los vectores a 1 ,
~ •. . . , a,., todos ellos de orden m.
Definido el concepto de "combinación lineal de vectores" po-
demos enunciar el teorema sobre la independencia.
Teorema I (independencia): Los vecrores a 1 , a.:z, .. . , a,. son "li·
nealmente independientes" dentro de un campo numérico F, si y
solamente si,
.
l: ).,a,=
,_1 o
para todos los ~ = O.
Este concepto de independencia lineal de los vectores puede
extenderse al de independencia lineal de ecuaciones. En efecto,
Teorema II: lAs ecuaciones del sistema ( I ), son linealmente
d ependientes, si y solamente si, el rango de la matriz aumenta-
da [ Ab] es menor que el número de ecuaciones m.
Se entiende por rango de una matriz A de orden m X n, sim-
bolizado r[A], el máximo número de vectores linealmente inde-
pendientes en A. O sea, el rango de una matriz está dado por
el determinante de mayor orden no nulo. Si el rango de la matriz
aumentada , r[Ab] =k< m (número de ecuaciones), entonces
m-k ecuaciones del sistema son combinaciones lineales de las k
restantes. Estas m - k ecuaciones se dice que son redundantes
y pueden eliminarse del modelo sin que afecte su solución.
Enunciamos, a continuación, los teoremas sobre la consis-
tencia.
44 CONSTRUCCIÓN DE LOS MODELOS ECONÓMICOS

Teorema III (consistencia): Un sistema Ax- b = O de m ecua- ·-·- TII. 1] ESTRUCTURA LÓGICA DE LOS MODELOS 45
ciones lineales con n incógnitas es consistente, si y solam~Nte si,
la matriz de coeficientes A y la matriz aumentada [Ab] tienen el
mismo rango. ,
Esto implica que el vector b debe ser una combinación lineal
de las coiumnas de A. Si el sistema Ax - b = O es consistente y
---- (2)
(3)
londt•
T, = Ao + A1 Y, + u,2t ;
Y 1 = C, + T, + G,
O< A1 < 1

pertenece a un campo numérico F, puede tener una única solu-

ción o infinitas soluciones. Si tiene solución única, ésta pertenece .. - e, co nsumo nocional.
a F. Si tiene infinitas soluciones sólo la solución completa per- '1' 1impues tos totales.
tenece a F . Luego, en el caso de infinitas soluciones, el sistema .- Y, ingreso nacional.
tiene soluciones que pertenecen a F (sólo cuando es solución 11 = invers ión neta considerada autónoma.
completa) y soluciones que no pertenecen a F. Estas últimas
pertenecen a otro campo numérico que contiene a F. Si el sis- . -··· G1 = gasto público en bienes y servicios .
tema no es consistente no admite solución alguna.
Cumplido el requisito de la consistencia, o sea r[A] = r[Ab ],
para saber si el sistema tiene una única solución o infinitas
o
- La ecuación ( 1) nos indica que los consumidores compran
:n fun ción de sus ingresos disponibles (Y 1 - T1 ) ; la ecuación (2)
representa el volumen total recaudado de impuestos en función
soluciones es necesario conocer el rango de la matriz A. del ingreso nacional. La primera es ecuación de comportamiento
~-·-
la segunda es institucional o legal.
Teorema IV: Si el r[A] = r[Ab] = n (siendo n el número de
v.ariables dependientes o endógenas) el sistema tiene solución
"-- Por su parte, la ecuación ( 3) no es un axioma empíricamente
comprobable, es un axioma o hipótesis planteado por defibición
únioa.

Teorema V : Si el r[A] = r[Ab] < Íl (siendo n el número de

variables dependientes o endógenas) el sistema tiene infinitas
--
soluciones. · experiencia observada que constituye la teoría sobre la cual se "
La construcción de los modelos económicos generalmente re-
quiere una solución única para lo cual se exige el cumplimiento
de los teoremas In y IV. Ello implica como condición necesaria
que el número de variables endógenas o dependientes sea igual
al número de ecuaciones del sistema y como condición necesaria
y suficiente que la matriz de C:leficientes A sea no singular, es
decir, su determinante distinto a cero. Dichos modelos se llaman
completamente contenidos.
Ilustraremos estos conceptos, que hacen . a la independencia
y consistencia de un sistema axiomático o de hipótesis, con
ejemplos correspondientes a dos tipos generales de modelos. Los
llamados modelos interdependientes introducidos por T. Haavel-
mo en 1943 y los modelos recursivos o de cadenas causales intro-
ducidos empíricamente en 1938 por Jan Tinbergen y, más tarde,
desarrollados y sistematizados teóricamente por Herman Wold,
quien dedujo sus propiedades matemáticas y econométricas.
del ingreso nacional como el total de! consumo más la inversión
neta más los gastos públicos. Al estar explícitamente definido no
puede evidentemente ser sometido a las pruebas de falsificación.
Los axiomas que fundamentan este modelo se basan en una
construye, pero, al ser ·contrastatlo luego con otra experiencia
tempoespacial, no necesariamente han de pasar las pruebas de
falsificación. Por ello, los modelos, como construcciones teórico-
empíricas, están limitados siempre en su validez empírica a la
realidad tempoespacial para la cual se elaboraron, afirmándose
así el carácter de historicidad de la economía.
Agrupando en el primer miembro las variables endógenas,
que constituyen las incógnitas de nuestro modelo, resulta:
(4) e, - al Y, + U¡ Tt = ao + ult
(5) T, - A1 Y t = A.o + u .2t
(6) Yt - et = I, + Gt
El que presentamos en forma matricial:
" "

Veamos a continuación ejemplos de ellos.

~'+ G]
Ejemplo II/-1 . Sea un modelo interdependiente del ingreso na-
(7)
O
1 U¡1 -- U¡J
/,¡
[ TtetJ -
-
cional que toma en consideración los impuestos totales.
[
- 1 O. 1 Y1 [
(1) e,= a.o + a 1 (Y 1 - T1 ) + ult; 0 < Ut <1
En notación compacta resulta:
 .•
46. CONSTRUCCIÓN DE LOS MODELOS ECONÓMICOS ( III. 1 ) ESTRUCTURA LÓGICA DE LOS MODELOS 47

Ax=b tamiento observable de los demandantes, los que responden en

Observamos que en el análisis de la consistencia trabajamos
con la parte determinista del modelo. Eliminamos el vector u
de variables aleatorias .. Las componentés del vector b están for-
madas con los términos independientes y los correspondientes
a las variables predeterminadas.
El r[A] = r[Ab] = 3, o sea, la matriz de coeficientes A
será no singular siempre que a 1 ( 1 - A.1 ) =1, 1, por ser det A =
= 1 - a 1 ( 1 -A.¡). Luego, la matriz será singular si, y solamen-
1 demanda observada en el período precedente D1 _ 1 y la oferta
te si, A. 1 = 1 - - - . Entonces, el modelo cumple con la pro-
a¡
piedad de la consistencia y además con la de solución única
ya que r[A] = r[Ab] = n (número de variables endógenas del
modelo). O sea, el vector de las incógnitas x es igual a la ma-
triz inversa A - 1 por el vector ( b +u), o sea x = A-1 ( b +u)
(ver apéndice matemático). En este ejemplo, la matriz A es
definitivamente no singular por virtud de la especificación de los
parámetros a 1 1..1 en las ecuaciones /(1) y ( 2), respectivamente
(ver problema III-4 ).
función del precio del bien en cuestión P1, del ingreso Y, y de los
gastos publicitarios de la empresa Z 1• La ecuación (9) nos dice
que los productores u oferentes de dicho bien planean su pro-
ducción en función del precio que tuvo el bien en el período prt>
cedente P 1 _ 1 y sus costos de producción también del período
precedente C1 _ 1 • La ecuación (10) indica que el sector de los
intermediarios del mercado fijan el precio del bien en función
del precio observado en el período precedente P 1 _ 1 y lo que se
llama el "exceso de demanda" medido por la diferencia entre la
planeada para el periodo actual S 1•
Agrupando las variables endógenas en el primer miembro,
resulta:
( 11) D1 + a 1 P 1 = ao + a 2 Y 1 + a 3 z, + Utt
(12) St =~o+ fh Pt-1- P.2 Ct-1 + ~~
( 13) P1 + ')..St = Pt-1 + 'ADt-1 + Ust
En forma matricial, tenemos:

J
Ejemplo III-2. A continuación ilustramos con un modelo recur-

(14) [1o o] [D1 J

sivo o de caderu2s causales.
Sea el siguiente modelo de oferta y demanda de un producto a1
<lo + U.2 Yt + as Z1
industrial, que incluye el sector de los intermediarios represen- 1 ').. PI = P1 - 1 + A. Dt -t
tado por la ecuación correspondiente al precio.
oo 1 s, [ ~o + j31 Pt-1 - ~2 Ct -1
(8) D1 = ao- a 1 P1 + 0o2Y1 + a 3 Z 1 + u11, av 0o2. as. >O
Que podemos simbolizarlo en forma compacta como:
(9) S,= ~o+ ~1 Pt-1- ~2 Ct-1 + U:u. ~¡, ~2 >o
(10) P1 = P1-1 +A (Dt-1- S,) + Ust• A.>O Ax =b
siendo donde el vector b, por lo indicado en el ejemplo anterior, excluye
D 1 = demanda del bien. la componente aleatoria.
P1 =precio por unidad del bien. Rápidamente se observa que r[.4.] = r[Ab] 3 ya que el =
Y 1 = ingreso nacional. det A = 1 (o sea, cumple con el requisito de la consistencia y
Z 1 = gastos en publicidad. tiene solución única), siendo x = A- 1 b + A-1 u.
S1 = oferta del bien. O sea, el vector de las incógnitas es igual al producto de la
P 1_ 1 =precio por unidad del bien correspondiente al pe- matriz inversa de los coeficientes A- 1 por el vector b más el vec-
ríodo precedente. tor de las variables aleatorias.
C1 _ 1 =costo por unidad de producción en el período pre- Siendo en nuestro ejemplo,
cedente.
En este modelo, el sistema axiomático está constituido por
=
1- A] a1 a1
tres axiomas empíricamente observables. Ellos representan el
comportamiento de los demandantes, oferentes e intermediarios,
respectivamente. En efecto, la ecuación ( 8) explica el compor-
(15) A- 1
[o oO 1 -A.
1
48 CONSTRUCCIÓN DE LOS MODELOS ECONÓM l <.:OS [III. 1] ESTRUCTURA LÓGICA DE LOS MODELOS

]
49
resulta, cons tituyen los duo.lisnws estructurales, cuya matriz particionada
es diagonál, de la fo r ma :

~
(16)
Dt ] [ 1- 1U¡ u
1
A] Uo + a.2 Yt + ua Z t + u 11 , .
Pt = O -'A Pt-1 + ' 'A Dt - 1 + Uat A1 :
1
O
[ S 1
1 O O 1 ~u + {31 Pt-1 - ~2 Ct-1 + u 2t 1

O sea, el vector de las variables endógenas queda expresado

-- --· ----
1
1
1

1
en función de las variables predeterminadas. Esto se conoce 1
como la forma "reducida" del modelo. O : A2
El modelo recibe el nombre de recursivo · porque el proceso
a seguir para obtener una solución consiste en estimar el valor Veamos ejemplos de cada uno de ellos.
de una de sus variables endógenas o dependientes y de allí
se lleva a las ecuaciones restantes en forma recurrente para
obtener la solución final. En nuestro ejemplo, la oferta S 1 queda jemplo /Il-3. Un modelo recursivo interbloques.
perfectamente estimada por el -conocimiento del precio del pe-
ríodo precedente pt - 1 y del costo del período precedente ct- 1·
Determinada la oferta se lleva sp valor a la ecuación de precio P1
y una vez calculado éste se pue~e conocer la demanda D 1 de la
.8! a
El siguiente es un modelo teórico con el que se pretende re-
presentar el mercado de productos y el mercado monetario de
una economía:

ecuación ( 11 ). ( 17) C1 = a 0 + a 1 Y 1 + u 11 0 <U¡< 1

Existe en economía otro tipo de modelos llamados "particio- ( 18) '
nables", los que constituyen una categoría intermedia entre los l t =~o + ~1 (Yt-1- Y t-2) + u2t ~1 >o
interdependientes y los recursivos. ( 19) Y t = c t + I t + ct
Se caracterizan por tener una matriz de coeficientes A que (20)
puede transformarse en una matriz triangular o diagonal por Lt = Ao + A¡ Yt - l..2 rt + Uat Av !..2 >O
"bloques". Si la matriz particionada es diagonal por bloques, (21) Mt = ~o + ~1 Yt + U4t ~1 >o
cada subsistema es completamente contenido y el modelo es (22) Mt = Lt
segmentable en submodelos independientes.
Recordemos que un subsistema es completamente contenido
cuando posee las propiedades de independencia y consistencia, La ecuación ( 17) es del consumo nacional C 1 en función del
admitiendo solución única. ingreso nacional Y t. La ecuación ( 18) representa la inversión
En cambio, si la matriz particionada es triangular por blo- 1 •
neta 11 en función del incremento del ingreso nacional en el
período precedente, medido por (Y1 _ 1 - Yt_ 2 ) . La ecuación (19)
ques, uno o varios subsistemas son completarpente contenidos
. _ , • define el ingreso nacional como la suma del consumo más la
pero no todos. El modelo interbloques es entonces recursivo. 1 inversión neta más los gastos públicos Gt.
Un modelo recursivo interbloques presenta un proceso de _ La ecuación ( 20) nos dice que la demanda monetaria L 1 es
causalidad en cadena entre bloques, pudiendo ser interdepen- • ' • función del ingreso nacional y de la tasa de interés rt. La ecua-
diente intrabloques, es decir, entre las ecuaciones pertenecientes ción (21) considera la oferta monetaria Mt función del ingreso
a cada bloque. El caso extremo de causalidad en cadena co-
rresponde a la familia de modelos Wold-Tinbergen, donde la
1 ' . nacional. La ecuación (22) supone el equilibrio entre la oferta
y la demanda de dinero a fin de determinar la tasa de interés
causalidad en cadena es interecuaciones, o sea cada "bloque" " _ , • de equilibrio. '
es uniecuacional, como en el ejemplo III-2.
Cuando la matriz particionada es diagonal por bloques hemos 1_ Agrupando las variables endógenas en el primer miembro,
1 res ulta:
dicho que cada bloque define un subsistema completamente
contenido. Esta situación corresponde a un caso extremo de es- l .8
tructuras económicas que recibe el nombre de heterogeneüúul e, - U¡ Y, = <l<• + ult
estructural. Un caso particular de heterogeneidad estructural lo T, = ~o + ~~ (Yt- 1- Yt - 2) + u,.¿t
so CONSTRUCCIÓN DE LOS MODELOS ECONÓMICOS ( 111. 1J ESTRUCTURA LÓGICA DE LOS MODELOS
51
(25 ) Y, - e, - 1, = G, Ejemplo Il/4 . Un modelo segmentable en subsistemas indepen-
(26 ) L 1 - 1.1 Y , + 1..2 r1 = Ao + U at
dientes entre sí.
Sea el siguiente modelo que consider a muy agregadamente
(27 ) a
M 1 - 1 Y, = a0 + u 41
el mercado de p r oductos y el mercado laboral en u na economía.
(28) L,- M 1 =O, (31) e, =~+ Ot Y, +~ e, _¡+ aa t + Uu,
la que present amos en forma matricial particionada: O< a 1 < 1, O< a~ <1
(32) I, =~o+ fJ 1 (C, - e,_d- ~ r,_ 1 + ~,. ~ 11 ~>O
(33) Y,= e, + lt + G,
o ---r--
o : ------
o o. o- r, ~o+ ~~ ( Y, _¡ - Y,_2 ) + Uet (34) DMt = Yo - Yt W, + Uat•
-- .,. -----
1
Yt >O
O ¡
1
1 - a1 ;
1
O O O e, no + U11
(35) SMt = Ao + A¡ w, + U4t• At >O
- 1 :- 1 o o o
1 : Y, G, (36) DMt = SMt
(29) - -- ~ -- - - --- - ~ - -- -- - ----
0 : o-~. : 1 o o
1 1
M, ~o+ u., donde
o ¡ o o :_ 1 1 o
' 1
L, o e,= consumo nacional.
o : o - "· i o 1 "~ r, 4 + Uat 11 = inversión neta.
Y, = ingreso nacional.
Hemos dividido la matriz en 6 bloques o submatrices que t =tiempo.
podemos simbolizarla como : r 1_ 1 = tasa de interés del período precedente.
G, = gastos públicos de biehes y servicios.
-J
[
A=
.~:t_ __~ __o_- -~ --~ DMt = demanda de mano de obra.
W, = índice de salarios reales.
A21 A21l : O
1
SMt =oferta de mano de obra.
-----~ -----~ - --- -
0 : As2 : Aaa
e,,

:t
Las variables endógenas del modelo son 1, Y,, DMt•
w, y S M t • y
las predeterminadas e,_¡, t, r,_¡, G,.
E n forma matricial, resulta:
Si el determinante de A es distinto de cero, el modelo tiene
solución única. La matriz A particionada es triangular y su O -a 1 : Oo o e, ao + ~e,_ 1 + a.at + u11
determinante, por la expansión de La place (véase apéndice mate- 1
- ~. 1 o :o o o r,
mático), es det A = det A11 X det A 22 X det Aaa· 1 ~.. - 13. e, _. - tJ:, '•- r + ~'
En nuestro ejemplo: - 1 - 1 1:o o o Y, G,
(37) ¡--·---------r--- - -----
O O O l1 O Yr Dll, = Yn + UJt
detA 11 = 1, detA 22 = 1- o 1 y detAa.1 = ~; 1
o o o lo 1 -1.. s~~, l.o + u4,
luego 1
o o o : 1 -1 o w, o
det A = ( 1 - o 1 ) 1. 2 =1= O, por ser o1 <1 y /..2 > O.
Este modelo particionable es recursivo . .
mterbloques. La sub · , Para que exista solución única es condición necesaria y su-
matriz A11 es un subsistema completamente contemdo de orden ficJCn te que 1.1 =1= - y1 y que 01 =1= 1 (véase proble-
1+~
cero, que puede resolverse directamente para determinar I,. Lle-
van do este valor a las ecuaciones ( 23) y ( 25), las que forman un
mn rn-5 ).
1
m modelo es p articionable, formando por bloques una matriz
subsistema de orden 1, quedan determinadas C,, Y, y, por últi- cll¡llJOilll l. Coda subsistema es un submodelo completamente con-
mo, conocido Y 1 se puede resolver el subsistema de orden 2, lt'l u ldo, lu<kpcndicn te del otro. El modelo puede entonces seg-
formado por las ecuaciones ( 26 )-( 28 ), con lo que quedan deter- mr nt unlt• e• u dos submodelas independientes entre sí, en nuestro
minadas L 1, M,1 y r,. t ' IIHO, lo'l dt• l nwrcado de la producción y del mercado laboral.

52 CONSTRUCCIÓN DE LOS MODELOS ECONÓMICOS
III . 1. b. Tesis o proposiciones finales
1 •
Las proposiciones finales o conclusiones se deducen a partir de
un sistema axiomático o de las · hipótesis que posea las propie-
dades de consistencia e independencia.
Las proposiciones de un sistema deductivo, ya sea bajo la
forma de teoría o modelo, pueden considerarse como ordenadas
de acuerdo a niveles. Las hipótesis o axiomas del más alto nivel
son las premisas o proposiciones iniciales, las de menor nivel
son las conclusiones o proposiciones finales que denominaremos
"tesis" para distinguirlas de las primeras que las hemos consi-
derado hipótesis, en un sentido restrictivo. En consecuencia,
llamamos tesis a las proposiciones finales o conclusiones refe-
rentes al comporta·m iento de los sujetos de la actividad eco-
nómica, deducidas a partir de las hipótesis o proposiciones
iniciales. ( .
Las tesis o conclusiones obtenidas deben ser lógicamente con-
sistentes con el conjunto de las hipótesis, o sea debe haber una
afirmación única de verdad o falsedad.
Yara ilustrarlo, utilizaremos un ejemplo muy sencillo de
Braithwaite [ 6] adaptado de acuerdo con la definición de teoria
y modelo que hemos considerado para las ciencias sociales y sin
dar significado concreto a cada uno de los símbolos utilizados.
Las letras griegas representan la clase o colección de objetos
que poseen una cierta propiedad empírica.
Supongamos que tenemos las siguientes hipótesis:
( 38) Todo lo que es A es tamhién L y M y viceversa, expresado
simbólicamente como a~ ( ¡._ ¡t)
(39) Todo lo que es B es también M y N y viceversa, expresa-
do simbólicamente como ~ ~ (¡.t. v)
(40) Todo lo que es e es también N y L y viceversa, expresado
simbólicamente como y~ ( v 1.)
Estas tres hipótesis son premisas o postulados iniciales de
cualquier sistema deductivo, teoría o parte teórica de un mo- 1 -¡ •
delo. Los símbolos a, ~ y y representan a las clases con las pro-
piedades empíricas A, B y e respectivamente, y A, !L y V, las clases
de L, M y N respectivamente.
A partir de (38), (39) y (40) se pueden deducir, entre otr~s.
las proposiciones finales o conclusiones siguientes: • -•f
( 41) Todo lo que es A y R es también e, expresado simbólica- S 1S
mente como (a~) ~ (y (a ~) )
.•
[ III. 1] ESTRUCTURA LÓGICA DE LOS MODELOS
53
(42) Todo lo que es B y e es también A, expresado simbólica-
mente como <P y)~ (a <P y))
( 43 ) Todo lo que es e y A es también B, expresado simbóli-
camente como (y a) ~ (~ (y a) )
De es te modo, el sisteipa {38) a ( 43) constituye una estructura
lógica que en las ciencias sociales es considerada como teoría
o bien la paFte teórica de un modelo.
No hemos comprobado aún la validez empírica ni de nuestras
proposiciones iniciales ni de nuestras proposiciones finales con
la realidad tempoespacial que se pretende describir y/o explicar.
El sistema hipotético deductivo utilizado para ejemplificar,
umple evidentemente con los requisitos o características lógicas
desde este punto de vista es verdadero. El proceso deductivo
lógico m atem á tico empleado es el del álgebra de Boole.
También podemos ilustrar el proceso lógico deductivo que
permite obtener las proposiciones finales a partir de las propo-
'>i ciones iniciales con un sencillo ejemplo de la teoría de la
:mpresa. Se asumen las siguientes proposiciones iniciales p hi-
pó tesis:
( 44) Todas las firmas buscan la maximización de sus bene-
ficios ;
( 45 ) La cu rva de ingresos marginales de una firma corta a la
de los costos marginales por encima;
( 46) Las curvas de costos marginales e ingresos marginales son
continuas.
Como tesis o conclusión de ( 44) a ( 46 ), obtenemos:
(47) Ca da firma producirá la cantidad de bienes que corres-
ponde al punto de intersección de sus curvas de costos e
ingresos marginales.
Evidentemente, están implícitas en el conjunto de las hipó-
tes is o tras proposiciones como los conceptos de beneficio, costo
! ingresos marginales y fundamentalmente el de un sistema ins-
11 lu cional da do , en este caso el de la libre empresa. Nada hemos
dic ho ot'u1 sob re la validez empírica de nuestras conclusiones
11 i dt• nues tras hipótesis. Esto será ampliamente analizado en el
fllilll o -. lgule nte.
. 1111 ~rt o cll'l o ge neralmente tiene más de una conclusión. Vea-
llr r• ~ . 1"" t•lt•m pl o, un sencillo modelo de mercado para un
p1 11d 111 111 ,1¡nlco ln, debido a Wold, caracterizado como el ante-
54 CONSTRUCCIÓN DE LOS MODELOS ECONÓMICOS 1'111. 1] ESTRUCTURA LÓGICA DE LOS MODELOS SS
rior por ser una construcción teórica y no teórico-empírica, en Si la demanda D1 _ 1 resulta ser igual a la oferta S 1, el precio
el sentido de su evidencia con las formas de mercado actua- n el período t es el precio de equilibrio P*, deduciéndose de la
les. Sea: · '"u ación (50),

(48) D1 = a1 - ~~ P1 ; ~1 >o (51) P* = Pt = Pt-1

(49) St = <12 + 6.2Pt-1; fh >o
(50) Pt = Pt-1 +A (Dt-1 - St); A>O para lodo t en que se cumple la condición de equilibrid, o sea
(52) P* = Pt = Pt-1 = . ·. = Po
El mismo ~e basa en los siguientes supuestos o proposicio-
nes iniciales :
Pero si la demanda esperada no es igual a la oferta en un pe-
(48) La demanda en un período es función lineal decreciente I'Íodo cero, el precio P1 de dicho período es P0 =1= P*. Si resol-
del precio del mismo período; vemos el modelo con respecto a P1 obtenemos el comportamiento
dinámico del mismo. Utilizando el método de solución de ecua-
iones en diferencias finitas, resulta:
(49) La oferta en 1.Jil Í>eríodo es función lineal creciente del
preciO-del período anterior;
(53) P1 =P*+[l-A(~ 1 +~2 )]t(P0 -P*); P0 =f=P*
(50) El precio en un período es función del precio del período '
precedente y del exceso de demanda esperada, medido A partir de (53) se deducen otras tres proposiciones finales
por la diferencia entre la demanda de un período y la respecto al comportamiento dinámico del precio.
oferta del siguiente. En este ejemplo, D 1 _ 1 es la demanda
esperada por los productores en el período t y ¡que se 2
(54) Para O < A < , el comportamiento dinámico del
supone será igual a la demanda observada en el perío-
do t - 1. ~1 + ~2
precio P 1 converge nuevamente al precio de equilibrio P*;
Este conjunto axiomático cur.1ple con los requisitos de la
independencia y de la consistencia. En efecto, en forma matricial 2
resulta:
(55) Para A > , el comportamiento es divergente o
~1 +~
explosivo;
(51)
t ~1 o] [Dt]
O 1 A Pt : : [;:_1 + A Dt-1] 1 1 • (56) Para A =
2
, el comportamiento es oscilante, con
[ ~1 + 132
O O 1 S1 ~ + ~.z Pt-1. fluctuaciones regulares, siendo, para t par, P,21 = P y,.
0
para t impar, P 21 _ 1 = 2 P*- P0 •
simbolizado en forma compacta como
Las proposiciones finales obtenidas son lógicamente consis-
Ax =b tcnles con Jos postulados o proposiciones iniciales del sistema.
Todo modelo, considerado como un sistema hipotético deductivo,
La matriz de coeficientes A es triangular y su rango /r[A] = 3.
O sea, el rango de A es igual al rango de la matriz aum((ntada Ab,
a 1• Incluye la~ proposiciones iniciales o hipótesis y las proposiciones
fin ales o tesis. Por otro lado, es posible que se presente un orden
e igual al número de variables endógenas o incógnitas del proble- .lt•rt'lrquico en la construcción de algunos modelos en economía,
ma. Luego no sólo cumple con la independencia y la consisten- clo11dc los supuestos iniciales de uno son conclusiones o tesis
cia, sino que el modelo tiene solución única, siendo x =A-lb. dl'. otms modelos de orden superior.
Veamos qué proposiciones finales o conclusiones podemos
obtener a partir de las premisas o hipótesis.
56 CONSTRUCCIÓN DE LOS MODELOS ECONÓMICOS (III. 2] CORROBORACIÓN EMPÍRICA 57
III. 2. LA CORROBORACIÓN EMPÍRICA DE LOS MODELOS En el eje vertical se representa la dimensión teórica del mo-
delo y en el eje horizontal su alcance empírico. Así, para un
III . 2. a. La generalidad versus la validez conjunto de hipótesis H obtenemos un conjunto de conclusiones
o tesis T. Este sistema deductivo posee el alcance empírico OE.
La parte empírica de la construcción de los modelos exige su La superficie rayada en el diagrama mide el contexto teórico-
contrastación con la experiencia a fin de tener una medida d empírico del modelo.
su realidad, esto es, del grado de representatividad de los mismos Veamos ahora qué pasa si decidimos aumentar la generalidad
y, por tanto, del alcance de sus aplicaciones empíricas. del modelo utilizando hipótesis más amplias y menos restric-
Las proposiciones iniciales (hipótesis) y las proposiciones tivas, pasando· de H a H 1 • Se observa que también las conclu-
finales (tesis) de un modelo se contrastan con la experiencia en siones o tesis a que llegamos son más amplias, ganando el modelo
términos probabilísticos. La probabilidad de que las hipótesi s y en dimensión teórica, pero disminuyendo su alcance empírico, o
tesis no sean contradecidas por la experiencia aumenta con el nú- sea, sus posibilidades de aplicación, tal como lo refleja el Dia-
mero de pruebas que la corroboran y la diversidad entre ellas . grama III. 2.
Dos aspectos fundamentales hay que considerar en cuanto a
la contrastación de los modelos con la experiencia, a saber: la
"generalidad" y "la validez" [ 11 ]. Ambas son medidas de la rea- D im ensión
Teórica del
lidad del modelo y están estrechamente conectadas con el alcan- Modelo
ce de su aplicación empírica. La generalidad supone reducir la
fuerza (restricciones) de las hipótesis o su grado áe especifica-
H1
ción respecto a la conducta "real" de los sujetos de la actividad Hip6tesis
económica, analizada en la dimensión tempoespacial. Cuanto más
generalizante sea el modelo más posibilidades tiene de aplica-
H
.
'

ción empírica, pero pierde validez en cuanto a sus conclusiones. .·· ..•
Por el contrario, cuanto más especializado sea un modelo, esto 1 l.
es, cuanto más sustancia y rigor o especificación agregamos a
las hipótesis, perdemos generalid<id y ganamos en validez. Se • • •
entiende por validez el grado en que las conclusiones o proposi-
dones finales de un modelo explican la conducta "real" de los
sujetos de la actividad económica en la dimensión tempo-espa-J'"!
cial. Podemos ejemplificar estos conceptos en el Diagrama III. 1
adaptado de H. Wold [45].
·'

,
.¿•
lf •
o)
E¡ E
Alcance
Empírico
del Modelo

T
Tesis

T1
Dimensión
Teórica del
Modelo
"
Hip6tesis H 1r , , , r ' r r t 1 1 1 1 1 1 1 1 11 1 1 1 t 1 1 1 1 1 1 1 1 1 1 1 1 1 1 1 1 1 11

. DIAGRAMA III. 2

O 1111111111111111111111111111111111111111111 < • ~~~~~:o

Modelo
del
Se observa que el alcance empírico del modelo se reduce
de OE a OE 1 mientras que su dimensión teórica se acrecienta,
Tesis T 111 111 111 111111 11 1111 11 111111 11 11 11 11 1 11 1 11 pasando de HT a H 1 T1 .
Veamos más concretamente cómo se relacionan los conceptos
de generalidad y validez y sus respectivos de dimensión teórica
y alcance empírico de un modelo con un ejemplo económico.
DIAGRAMA III . 1 Sea el sencillo modelo de mercado presentado anteriormente:
58 CONSTRUCCIÓN DE LOS MODELOS ECONÓMICOS ( III. 2] CORROBORACIÓN EMPÍRICA 59
( 48) D, = 111-~lP,; ~1 >o Si pretendemos utilizar el sencillo modelo de Wold para un
' ; producto agrícola, en una economía donde sabemos que es posi-
(49) S, = 112 + ~~ Pt-1; ~·2 >o ble que el Estado prefije precios subsidiados para favorecer,
(50) por ejemplo, la recolección de la cosecha, entonces necesaria-
Pt = Pt-1 +'A (Dt-l- S¡); A>O mente debemos introducir cambios en el mismo que nuevamente
Desde el punto de vista de su dimensión teórica este modelo quitan generalidad y le agregan validez empírica. Un modelo
de este tipo puede ser:
tiene gran generalidad, o sea cubre una gran cantidad de casos
donde es posible, teóricamente, que la demanda D1 se guíe por
el precio P 1 y que la oferta S 1 se guíe por el precio del período
(48) D, = ao - a 1 P,; a, >O
precedente, ya se trate de mercados para productos agrícolas (49b) St = ~o+ ~lP, _ , + ~ 2 R,; ~t > O
o productos industriales o de cualquier otro tipo. Pero desde (50b) A(D 1_ 1 - S¡)= (1 - A) Pg 1 - (1- A) P 1 ; A= O ó 1
el punto de vista de su ap1icación empírica, el modelo es muy
únicamente
limitado ya que otras variables relevantes se han eliminado del
conjunto de sus hipóte§is, quitándole validez a sus conclusiones. La ecuación ( 48) nos dice que la demanda D 1 es función del
Así, por ejemplo, si pretendiéramos aplicar el modelo consideran- precio de mercado P1 •
do al mercado de un bien industrial, debemos introducir otros La ecuación ( 49b) nos indica que la oferta S 1 es función
supuestos como el ingreso de los demandantes, los gastos en del precio de mercado del período precedente P 1 _ 1 y de la pre-
publicidad, el precio de otros bienes sustitutivos (si los hubiera), cipitación pluvial R 1, esta última como nueva información incor-
el costo de producción para los oferentes, etc. El modelo que porada al modelo de Wold.
resulta de la incorporación de esta nueva información que modi- La ecuación ( 50b) ·nos dice ahora que si ').. es igual a 1, la
fica los postulados o premisas contenidos en ( 48) y ( 49) es :
demanda esperada es igual a la oferta, determinándose el precio
de mercado P1, pero si existe control' "de precios, A toma el va-
(48a) D1 = ao- 111 Pt + 112 P.,+ 113 z, + 114 Y~; <1.1, Cl,z, 11a, ~>O
lor cero y entonces la ecuación ( 50b) indica que el precio actual P,
(49a) St =~o+ ~1P1-1- ~2C1 -1 ; ~¡, (}2 >o en el mercado es igual al precio que fija el gobierno Pqt·
(50) Pt =P 1_ 1 +A (D 1 _ 1 - S 1 ); A>O HI. 2. b. El avance simultáneo de generalidad y validez
donde En la construcción de los modelos se plantea, como problema
D 1 = demanda del bien. rucia!, el de la generalización del conocimiento versus la espe-
P 1 =precio por unidad del bien. cialización del mismo. Es decir, cómo agregar sustancia a las
P81 = precio por unidad del bien sustitutivo. hipótesis que hagan más válido el modelo sin sacrificar en gran
Z 1 = gastos en publicidad. m edida su dimensión teórica. Podemos ,e nunciar algunos requi-
Y 1 = ingreso nacional. sitos que consideramos básicos para el avance simultáneo. de
S 1 = oferta del bien. • generalidad y validez en los modelos económicos [ 11].
P 1 _ 1 = precio por unidad del bien en el período t - l.
C 1 _ 1 = costo por unidad de producción, en el período t - l. 1] Formación humanista del economista;
2] Formación matemática y estadística del economista;
Hemos agregado sustancia y aumentado la validez empírica 3] El desarrollo de las matemáticas sociales, esto es, de las
del modelo pero también le hemos quitado generalidad, ya que matemáticas necesarias para la solución de los problemas
su dimensión teórica se ha reducido. O sea, los casos a los cua- planteados por la ciencia económica;
les pudiéramos aplicar este modelo son ahora menores. 4] El desarrollo de los métodos estadísticos aplicables a las
Podríamos aún ir más lejos suponiendo que la especificación ciencias sociales;
de las ecuaciones, basada en nuestra observación, no es ya lineal S] Perfeccionamiento de los métodos de cálculo numérico,
sino que tiene otro comportamiento matemático (cuadrática, especialmente adaptados para ser computados electrónica-
exponencial, logarítima, logística, etc.), con lo cual el modelo se- mente, y
ría más válido pero menos generalizante. 6] Series estadísticas abundantes y precisas.
60 CONSTRUCCIÓN DE LOS MODELOS ECONÓMICOS
La formación humanista del economista le permitirá ubicar
su ciencia dentro del contexto de las ciencias sociales, distin-
guiendo sus características propias y acentuando su relaVi.vismo,
de acuerdo con la concepción moderna de la economía que se
amplía con el de ciencia social. Se hace necesario un ciar
entendimiento de las consecuencias que la toma de decisiones
económicas trae aparejado en los otros dominios de actividad
del ser humano, como las actividades sociales, culturales , políti-
cas, etcétera.
La economía debe rechazar toda pretensión de cientificismo
en el sentido que las ciencias naturales dan a este concepto, o
sea, construcción definitiv~, ahistórica y aespacial (de alcance
universal) de sus modelos y teorías, mediante la única considera-
ción de los requerimientos lógicos (hipótesis y tesis).
El progreso en el Cl/mplimiento simultáneo de las caracte-
rísticas empíricas y lógicas requiere el conocimiento de los
métodos cuantitativos de análisis (matemática y estadística) por
parte del economista, para juzgar racionalmente sobre la elec-
ción de las variables relevantes y una más adecuada especificación
matemática de las ecuaciones. Esto implica que, además de los
métodos matemáticos y estadísticos existentes, sea necesario des-
cubrir otros nuevos. Tarea a la que en parte han contribuido
brillantes economistas y matemáticos a partir de los años treinta,
como J. von Neumann, O. Morgenstern, A. Wald, G. Dantzig,
D. Gale, H. Kuhn, H. Wold, T. Koopman y numerosos más. A su
vez, la formulación de modelos más comprensivos exige no sólo
descubrir nuevos teoremas matemáticos y nuevos métodos de
estimación de parámetros, sino en particular, respecto a estos
últimos, resulta necesario elaborar los métodos de cálculo nu-
mérico y el desarrollo de las computadoras electrónicas que
permitan alcanzar un mayor grado de desagregación de .]as va-
riables y sectores y una especificación más acertada de las ecua-
ciones.
Por último, para hacer posible la combinación óptima y fecun -
da de los requisitos considerados, 'la sexta 'es estratégica. Si se
cuenta con suficiente información estadística en cantidad, pe-
ríodo de tiempo y calidad, será posible el avance simultáneo
de sustancia y generalidad con un fecundo significado operativo
y validez. Sobre este aspecto del grado de exactitud de las se-
ries estadísticas, O. Morgenstern ha hecho una importante obse r-
vación [ 31]: "Las diferencias entre las variables 'verdaderas' y
las 'observadas' no son necesariamente las de fuerzas económi-
cas despreciables por tratarse de supuestos errores aleatorios.
Estas diferencias pueden ser mucho más que elementales, ba·
sadas en los propios datos sobre los cuales se ha establecid
el modelo econométrico. La palabra 'elemental' debe interprc-
tarsé. aquí en sus dos sentidos: como 'simple' desde un punto
l III. 2) CORROBORACIÓN EMPÍRICA 61
de vista técnico y como 'fundamental' desde el punto de ;vista de
la construcción de los modelos".
11 J • 2 . c. Las pruebas de corroboración empírica de los modelos
ecmwmicos
La base empírica de la ciencia económica conduce a un análi-
s is de comprobación sobre la existencia o no de concordancia
:ntre el modelo formulado y la realidad, concordancia que se
!Xpresa en términos probabilísticos. De allí que no podemos
nfirmar de un modelo que sea "verdadero" o "falso" en un sen-
tido absoluto sino "más probable" o "menos probable" en el
sentido de la lógica probabilística. Más aún, las viejas observa-
ci ones en que se basa un modelo nunca darán nuevos resultados,
sino que son las "nuevas" observaciones las que deciden en
contra o en favor de un modelo.
Todo viejo modelo superado por las nuevas informaciones,
puede retener su validez sólo como caso límite o extremo del
nuevo modelo y aun puede aplicarse con cierto grado de aproxi-
mación, en los casos en que fuera útil, anteriormente, o. pre-
sentara condiciones muy similares. ·
Se distinguen cuatro aspectos fundamentales que deben con-
siderarse para la corroboración de un modelo. Primero: el de la
nsistencia lógica de las hipótesis y tesis que concierne exclu-
ivamente al sistema hipotético deductivo o parte teórica del
modelo. Segundo, la investigación sobre la naturaleza de los axio-
mas o postulados que posee el modelo, a fin de determinar si
tiene el carácter de empírico o es simplemente convencional
tautológico. Tercero, su comparación con otros modelos, con
'1 propósito de determinar si el nuevo modelo constituye un
.. vanee científico, después de haber previamente pasado exitosa-
mente las pruebas de falsificación. Y, P,Or último, la contrasta-
ión del modelo por medio de las aplicaciones empíricas de sus
oclusiones o tesis.
El objetivo de esta última prueba es encontrar hasta qué
rado las conclusiones del modelo tienen viabilidad operacional
o s ignificado operativo, es decir, la utilidad práctica del modelo.
El hecho de que los modelos emplean generalmente un con-
.i unto de hipótesis o proposicione~ iniciales básicas tiene conse-
cuencias importantes sobre el procedimiento de la contrastación
' mpírica. Todo conjunto de observaciones o experiencia que
o ntrodi ga las conclusiones o una sola conclusión deducida del
mode lo invalida el mismo, refutando el conjunto de hipótesis
<k ln s cuales se derivan.
Lu refut o~ ión no es completa, pues lo que la experiencia nos
dkc ul J'ec hazar una conclusión es que hay algo equivocado
 62 CONSTRUCCIÓN DE LOS MODELOS ECONÓMICOS
en nuestro sistema axiomático pero no, concretamente,· qué
parte del sistema es.
Luego, la evidencia de una hipótesis científica en un' modelo
no sólo debe sostenerse empíricamente por la obser-Vación de sus
instancias sino que debe ser corroborada por las conclusiones o
proposiciones finales y por las observaciones de otras hipótesis
que integran el sistema.
La contrastación de los modelos económicos con la realidad
tempoespacial que pretenden analizar es una etapa esencialmente
econométrica (esto se tratará en extenso en los capítulos IV, v
y VI). Para ello se analiza, por ejemplo, si la especificación
matemática supuesta de ~as ecuaciones o hipótesis (lineal, expo-
nencial, cuadrática, logarítmica, etc.) es representativa de la
relación causal observada ; si una o varias variables omitidas
de una ecuación pueden o no contribuir significativamente a
explicar el sector de actividad considerado; si las características
de un número limitado de observaciones (muestra) son repre-
sentativas de las del universo o población que incluye todas las
'()bservaciones posibles. Otro aspecto de gran importancia es el
de la estimación (o sea determinación de uri valor liUmérico) de
los coeficientes incógnitas (llamados parámetros) en las ecua-
ciones integrantes del modelo, a partir de una muestra de obser-
vaciones empíricas y, por último, el análisis de sus propiedades
predictivas.
Existen numerosos métodos estadísticos para la estimación
de parámetros, con diferentes propiedades y limitaciones según
los casos en que se aplican. Así, el método de los mínimos cuadra-
dos indirectos para modelos multiecuacionales interdependientes
exige, para generar estimaciones estadísticamente aceptables, que
el sistema sea exactamente identificable, es decir que se puedan
determinar o identificar exactamente los parámetros estructura-
les del modelo a partir de los valores de los parámetros de la
forma reducida.
Por su par te, otro método, el de máxima verosimilitud, re-
quiere la solución de un sistema de ecuaciones no lineales gene-
Tadas por el jacobiano de la transformación. Generalmente suelen
ser difíciles de resolver a pesar del desarrollo de los métodos de
cálculo numérico y de las computadoras electrónicas, como ins-
trumentos de cálculo.
Todo modelo que cumple con las características lógicas (hipó-
tesis y tesis) y las características empíricas (generalidad y vali-
dez) puede ser utilizado con diferentes fines prácticos (tratados
en detalle en el capítulo vn). Ellós son:
1] Explicación.
2] Predicción.
3] Decisión.
1UI. 2] CORROBORACIÓN EMPÍRICA 63
El término de explicación lo tomaremos en su sentido amplio,
!Sto es, incluyendo el de descripción. Se dice que un modelo ex-
plica la realidad cuando no sólo responde a la pregunta: ¿qué
hn pasado?, sino también: ¿por qué ha pasado? Es decir, este
11po de modelo describe una realidad y determina las causas re-
levantes de tal situación. Todos los modelos con que hemos ilus-
1rudo nuestro& conceptos en este capítulo tienen la pr;opiedad
de ser explicativos. Si un modelo describe y explica una realidad,
puede utilizarse con fines . de predicción y de decisión. Por pre-
licción entendemos aquí todo enunciado científico referente a
un suceso desconocido, generalmente futuro. Los modelos pre-
dictivos responden a las preguntas del tipo: ¿qué pasará? Su
utilización exige un requisito fundamental que es la "permanen-
cia estructural" de sus ecuaciones. Por permanencia estructural
de una ecuación queremos significar que dicha ecuación conti-
nuará explicando su correspondiente sector o subsector de la
1ctividad económica, aun cuando se produjeran cambios tecno-
lógicos, institucionales o de comportamiento que invalidaran otras
t•cuaciones del modelo. Es decir, para utilizar un modelo expli-
ativo con fines de predicción debemos sostener la hipótesis
fundamental que, si explica lo que ha venido pasando, lo seguirá
explicando en un futuro inmediato. ,
Los modelos de decisión cumplen una misión especial en la
programación del crecimiento y desarrollo de un sector, región
o nación. En el modelo se prefijan ciertos objetivos que los suje-
tos de las macrodecisiones desean alcanzar (por ejemplo, un ni-
vel de empleo, una tasa de crecimiento del producto nacional, un
porciento de analfabetismo, etc.) que dan lugar a una política
a seguir. Ellos permiten que la economía deje de ser ciencia de
simple comprobación para ser ciencia de acción o activante sobre
una realidad que se quiere cambiar.
PROBLEMAS
HT.l. Explique los siguientes conceptos:
a] Hipótesis o proposiciones iniciales.
b] Independencia.
e] Consistencia.
d] Modelo interdependiente.
e 1 Modelo recursivo.
f1 Modelo particionable.
1 Tesi~ o proposiciones finales.
h 1 Cc•cwmlldnd.
1 Vullch·
ICC , ;l , 111)111' "'' c•ctllc•ccc(l' Jllll e III 'IHJ II~ clll tlc·no¡ lnl.llc 'll'l dt• 1111 lllOdt•lo
 -
64
III.3.
CONSTRUCCIÓN DE LOS MODELOS ECONÓMICOS
¿Qué se entiende por características empíricas de un modelo?
. ...... PROBLEMAS

4) Y1 = 1.0 + '- 1 1¡ + ~ Yt-1 + Uat

65

111.4. Demostrar que la matriz A del ejemplo 111.1 es no ,singular,

teniendo en cuenta las especificaciones O< a 1 < 1 y O < 1.1 < l. --··..
,__.,.
5)
6J
Zt = Yo
PMt ..
1- Y¡PMt -+ Y2 PM,t- l + Yal +
w0 + w1 P 1 + w2 t + u 61 ,
u4t• Y¡>
(1)1
0
>0
111.5. Deducir las condicio11es necesarias y suficientes para que el Slcud
modelo del ejemplo 111.4 tenga solución única.
III.6. Deducir el resultado dado en la ecuación (53) que presenta el -· 1
Y1 •
.:onsumo de p roductos alimenticios per capita.
ingreso disponible per ca.pita. '
comportamiento dinámico del precio como solución del siste-
ma (48)-(50). .... -~·
P1 lndice de precios al por menor de productos ali-
m enticios .
t = tiempo.
111. 7.

III. 8.
Deducir lqs proposiciones finales dádas en las ecuaciones
(54 )-(56).

Dado el siguiente modelo:

-· S1

11
= ofer ta de produc tos alimenticios en el mercado al
por menor.
= inversión neta per capita.
Z1 = producción de bienes alimenticios per capita.
et = <Xo + «¡ Yt + a2 et :_l + u 1t•
1¡ = Po + ~1 Bt + 132Xt-1 + Uzt•
Wt = Yo + 'Y¡ yt + 'Yz t + u~t ·
o< Cl¡ < 1, o< ~ < 1
~1 >o -· PMt = índice de precios al por mayor recibidos por los pro-
ductores de bienes alimenticios. ·

Y 1 = et + 11+ Gt
Bt = Yt- Wt
Y1 > 0
-· Se pide:

a ) Construir la matriz de coeficientes de las variables- endó-

Siendo:
K 1 = K 1 _ 1 + 11
-··. genas.
b] Determinar las condiciones bajo las cuales el modelo ad-
mite solución única o no.
et = consumo nacional .
- e] Triangulizar por partición la matriz de coeficientes.
Y 1 = ingreso nacional.
11 = inversión neta. -- lT r.l O. Dado el siguiente modelo:

B 1 = ingresos totales de los no-asalariados.

wt = ingresos totales de los asalariados.
K 1 = existencias de ;:apital al finalizar el período t.
-- 1)
2)
3]
el=
1t = 13o
1'1 = 1.0
a.o +U¡ (Y¡_¡- T¡_¡) + U¡¡.
+ 131 (Yt-1- Y t -2) +
+ J. 1 Y 1 + u31 ,
U<¿¡,
0<u1 <1
131 >o
0<1..1 < 1
G1 = gasto público en bienes y servicios.
t =tiempo. -- Siendo,
4) Yi = e1 + 11 + G1,

Se pide :
e1 = consumo nacional.
a] Construir la matriz de coeficientes de las variables en- 11 = inversión neta.
dógenas. T1 = impuestos totales.
b] Determinar las condiciones bajo las cuales el modelo ad- Y1 = ingreso nacional.
mite solución única o no. G1 = gasto público en bienes .y servicios.
e] ¿Es el modelo interdependiente, recursivo o segmentable?
¿Por qué? Se pide :
m. 9. Dado el siguiente modelo particionable:
a] Construir la matriz de coeficientes de ·las variables endó-
genas.
1] e1 = a0 + a1Y 1 +
a 2 Y1_ 1 - aaP1 +a~ t + u 11 , bJ Determinar las condiciones bajo las cuales el modelo ad-
O< u 1 < 1 ; ·!la > O, O< u ..~ < 1 mite solución única o no.
2] S, = fln + ~~ Pt + Uzt• 131 >O e) Triangularizar por partición la matriz de coeficientes.
3J e 1 = s,