NOMBRE: PEREZ QUISPE PATRICIA GABRIELA.

MATERIA: REDACCIÓN II

FECHA: AGOSTO 5, 2019.

“No hay peor ciego que el que no quiere ver”, todos en algún momento de nuestras vidas
nos hemos negado a ver problemas solo por temor de afrontarlos. Esta acción toma más
importancia cuando se trata de autoridades intencionalmente ciegas que se niegan a
afrontar la amarga realidad. Esta situación puede verse reflejada en la corrupción que en
las instituciones del estado se convierte en un grave problema.

Todos sabemos de la existencia de la corrupción en nuestro país. Podríamos preguntarle a

cualquier ciudadano si es que cree en la completa honestidad y transparencia de las
autoridades que rigen nuestro territorio y este respondería con un muy seguro “no”.
Esto se ha normalizado tanto que sería verdaderamente extraño escuchar a alguien decir
que cree en las acciones transparentes de todas las autoridades. Los políticos y policías
son ejemplos claros que podríamos mencionar fácilmente.

En Bolivia hemos tomado la corrupción como algo habitual y a veces hasta formamos
parte de ello. Desde la “coima” que le damos al policía por una falta que consideramos
insignificante hasta descubrimientos grandes de redes de corrupción como vínculos y
amistades entre autoridades y narcotraficantes. Pero este conocimiento es aún más
habitual en otras autoridades que, a pesar de no estar involucrados directamente,
ignoran intencionalmente este problema.

El novedoso caso narco vínculos, hasta ahora, fue el descubrimiento del año. La población
quedaba sorprendida con los hechos que se presentaban día tras día. Pero lo que más
sorprendió fue el hecho de que todo lo ocurrido era demasiado evidente para no ser
visto. La orden de aprensión internacional a Pedro Montenegro desde el 2015, la
eliminación de antecedentes y la condecoración del mismo, por parte de la policía,
fueron hechos que otros pudieron haber descubierto mucho tiempo atrás pero no fue
así. ¿Cómo es posible que los hechos que fueron más que evidentes no sean descubiertos
antes por otras autoridades?

El caso narco vínculos fue el problema que los intencionalmente ciegos se negaron a
ver. Es demasiado probable que las autoridades tenían conocimiento de la existencia de
este tipo hecho pero no actuaron por el temor de afrontar la realidad. Estos tipos de
hechos se seguirán repitiendo una y otra vez en el territorio boliviano todo mientras las
autoridades persistan en ser los ciegos, estos ciegos que no quieren ver…