Hubo un hombre pecador, muy rico, llamado
…Y TU FAMILIA,
¿… COMO ESTÁ.?
¡Bien! ¡Muy Bien! Es la respuesta más escuchada
cuando preguntamos a alguien por su familia. Sin
embargo, al mirar a nuestro alrededor, notamos
que es otra la realidad. Pues, lo que vemos es:
Infidelidades, pleitos, abandono, madres solteras,
feminicidios, sufrimientos, drogas, hijos rebeldes,
alcoholismo, rencores, enfermedades, etc., etc.
En fin, los hogares de hoy distan de ser aquel lugar
feliz, ideado por Dios, en donde cada miembro
encontraría paz y amor. Y aunque muchos
aparenten ser “felices” realmente no lo son.
Todo lo anterior sucede porque las familias
actuales, han desplazado a Dios de los hogares,
desobedeciendo su palabra que dice: “...Si
Jehová no edifica la casa, en vano trabajan los
que la edifican...” Salmos 127:1. Aprovechando
el enemigo para “...hurtar, matar y destruir”,
pues, para eso fue que él vino. Pero, “Jesús, por
el contrario, vino para dar vida y vida en
abundancia”. San Juan 10:10.
Zaqueo, que por curiosidad quiso conocer a
Jesús, pero el Señor al verlo, notó tanta necesidad
en él y en su familia que le dijo: “...Zaqueo es
necesario que yo pose en tu casa.” Lucas 19:5.
Aprovechando aquella oportunidad, Zaqueo invitó
a Cristo a su hogar, se arrepintió de sus pecados,
y Jesús lo bendijo diciéndole. “Hoy ha llegado la
salvación a esta casa.” Lucas 19:9.
Josué, un hombre valiente y temeroso de Dios,
tomó una sabia decisión ante su pueblo, diciendo:
“Escojan ustedes a quien servir, pero mi familia
y yo serviremos a Jehová”. Josué 24:15. (NVI).
AMIGO: Tú y los tuyos también pueden tener un
hogar feliz y en paz. Si te Arrepientes HOY de tus
pecados, Entregas tú vida y la de tu familia a
Jesucristo, y se Reúnen en una iglesia donde se
Predique y se Viva la Santa Biblia; seguramente
Dios cumplirá en Ti la promesa que dice: “Cree en
el Señor Jesucristo y serás Salvo Tú y tu
Familia.” Hechos 16:31. (NVI).
G. Trespalacios L.
Iglesia “LUZ VERDADERA”.