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La carta es una queja de Confabulario a un zapatero que reparó sus zapatos de manera deficiente. Confabulario notó que los zapatos estaban deformados, duros y resecos después de la reparación, a pesar de que el zapatero había elogiado previamente la calidad de los zapatos. Confabulario no pudo ponerse los zapatos y los comparó con zapatos de hierro, haciendo comentarios irónicos sobre el fallido trabajo del zapatero. Al final, Confabulario le pide al zapatero que recoja los zap
Descripción original:
Título original
CARTA DEL ZAPATERO RESUMEN TEXTUAL CELESTE PINTO AREVALO
La carta es una queja de Confabulario a un zapatero que reparó sus zapatos de manera deficiente. Confabulario notó que los zapatos estaban deformados, duros y resecos después de la reparación, a pesar de que el zapatero había elogiado previamente la calidad de los zapatos. Confabulario no pudo ponerse los zapatos y los comparó con zapatos de hierro, haciendo comentarios irónicos sobre el fallido trabajo del zapatero. Al final, Confabulario le pide al zapatero que recoja los zap
La carta es una queja de Confabulario a un zapatero que reparó sus zapatos de manera deficiente. Confabulario notó que los zapatos estaban deformados, duros y resecos después de la reparación, a pesar de que el zapatero había elogiado previamente la calidad de los zapatos. Confabulario no pudo ponerse los zapatos y los comparó con zapatos de hierro, haciendo comentarios irónicos sobre el fallido trabajo del zapatero. Al final, Confabulario le pide al zapatero que recoja los zap
“CARTA A UN ZAPATERO QUE COMPUSO MAL UNOS ZAPATOS”
La carta es escrita por Confabulario, destinada a un zapatero a quien le ha enviado
su calzado para que lo reparara, pensando que había realizado una excelente inversión, pero se había equivocado. Recibió gustoso y alegre su par de zapatos pero cuando los examinó detalladamente notó que estos presentaban notorias fallas, por ejemplo, los encontró un poco deformes, un tanto duros y resecos. A esto no le dio gran importancia puesto que es normal que en unos zapatos recién remontados eso sucediera. Pero luego, comienza a reprocharle al zapatero que sus zapatos no estaban completamente arruinados cuando él se los entregó y que también este le daba magníficos elogios por la fabricación y materiales de estos mismos. Seguidamente continúa narrando que los pies de él no pudieron entrar en ese calzado y que se encontraba delante de unos zapatos de hierro. Realiza comparaciones sobre los calzados que ha tenido a lo largo de su vida donde le han hecho sentir emociones positivas, hace irónicamente comentarios hacia el zapatero sobre su fallido trabajo y criticas diplomáticas. Al final le hace la propuesta que en vez de que se reproche por esa carta, pase de nuevo por la casa de Confabulario, recoja el calzado y le realice una segunda mano de obra para que pueda mejorarlos.