Está en la página 1de 4

El cambio climático no es algo que sufrirán las próximas generaciones.

Es algo que
hemos sufrido, que sufrimos y que sufriremos. Y ahora que ya hemos entendido sus
bases científicas, llega el momento de ver las consecuencias que tiene (y tendrá) el
cambio climático a corto, medio y largo plazo. Empecemos.

1. Aumento del nivel del mar


El derretimiento del hielo del Polo Sur está provocando ya un aumento del nivel
del mar. El derretimiento del del Polo Norte no ya que es hielo flotando en agua (en el
Polo Sur está sobre una superficie terrestre), así que no hace que el volumen de agua
varíe.

Sea como sea, cada año llegan miles de millones de litros de agua que antes estaban
aislados en la Antártida en forma de hielo. Y aunque la extensión de los océanos es
increíblemente grande, ha sido suficiente para que en los últimos cien años, el nivel del
mar haya aumentado 20 centímetros.

De seguir así, y teniendo en cuenta que la velocidad del deshielo es cada vez mayor, se
estima que, de cara a 2050, más de 200.000 personas vivirán en zonas costeras que
sufrirán constantes inundaciones. Y, con el tiempo, unos 300 millones de personas
sufrirán las consecuencias de este aumento del nivel del mar.

2. Acidificación de los océanos


La actividad humana ha incrementado enormemente los niveles de dióxido de carbono
en la atmósfera tanto al quemar depósitos sólidos de carbono como al deforestar los
bosques. Y este CO2 es absorbido, en gran parte, por los océanos, donde los organismos
fotosintéticos están usando este exceso de dióxido de carbono para hacer la fotosíntesis.

Pero esto no es bueno. Ni mucho menos. Los océanos y mares están absorbiendo,


cada año, unos 2.000 millones de toneladas de dióxido de carbono más de lo que
deberían, cosa que hace que su acidez, en las capas más superficiales (donde están los
organismos fotosintéticos), se haya incrementado un 30%, algo que tiene dañinos
efectos para la vida marina.

3. Retrocesos en los glaciares


Los glaciares son masas gruesas de hielo presentes en la superficie terrestre. Y
todos los del mundo, desde los de la Antártida hasta los de Alaska, pasando por los de
Argentina, han sufrido notorios retrocesos. Debido al calentamiento global, se están
derritiendo, con efectos visibles a simple vista. Y esta llegada de agua procedente de su
derretimiento a los océanos es lo que provoca el incremento del nivel del mar.

4. Extinción de especies
Una de las peores consecuencias a nivel ecológico. De acuerdo a la ONU, cada año
desaparecen de la Tierra entre 18.000 y 55.000 especies debido al cambio climático y a
las alteraciones en sus ecosistemas y cadenas tróficas. Cada hora que pasa, 3 especies
se extinguen

5. Desertificación de ecosistemas
Debido a la desestabilización climática, los ecosistemas terrestres son lugares cada
vez más secos. La falta de lluvia provoca sequías, lo que lleva a que los organismos
fotosintéticos (como las plantas) no pueden instaurarse en ellos o que desaparezcan, lo
que impide que se forme una cadena trófica en ellos. La Tierra es cada vez un lugar más
desértico.

6. Deshielo ártico
Una de las consecuencias más evidentes. El hielo de la Tierra, debido al calentamiento
global, se está derritiendo. El hielo ártico, el del Polo Norte, se está derritiendo a una
velocidad de casi 300.000 millones de toneladas por año. Y aunque, como hemos
visto, al ser hielo flotando en el mar, no provoca un aumento en su nivel, la llegada de
tanta agua sí que desestabiliza (y desestabilizará más) el equilibrio de los océanos.

7. Temperaturas más altas


¿Es casualidad que haya más olas de calor que nunca? ¿Es casualidad que casi todos los
récords de altas temperaturas se hayan dado en los últimos cien años? ¿Es casualidad
que haya habido, de forma global, un aumento del número de muertes producidas por
las altas temperaturas? No. No lo es. La Tierra es cada vez un lugar más caliente. Y no
solo porque la temperatura global esté aumentando a un ritmo de 0,2 °C por
década, sino que, desde 2014, cada año está entre los más calurosos registrados en la
historia. Cada vez hace más calor.

8. Más periodos de sequía


En relación con lo que comentábamos de la desertificación de ecosistemas, una de las
principales consecuencias (y evidencias) del cambio climático es que, especialmente en
el sur y centro de Europa, cada vez hay más periodos de sequía. El cambio climático se
manifiesta con una disminución de las tasas de precipitación. Y sin lluvia, hay sequía,
con todos los efectos que esto tiene en la sociedad humana.

9. Mayor incidencia de eventos meteorológicos


extremos
Romper el equilibrio entre atmósfera, litosfera e hidrosfera ha provocado que cada vez
haya más eventos meteorológicos extremos. Las inundaciones, huracanes, tormentas,
lluvias torrenciales, vientos muy fuertes, olas de calor, etc, son consecuencia directa
del cambio climático. Y tanto su incidencia como intensidad solo harán que ir en
aumento.

10. Encarecimiento de los alimentos


El efecto conjunto de sequías y eventos meteorológicos extremos afectará directamente
a la actividad agrícola. Y esto no solo hará que los alimentos y materias primas sean
más caros para los consumidores, sino que puede poner en peligro la vida de las
personas de países en vías de desarrollo que dependen de lo que cultivan para
sobrevivir. Y ya sabemos en lo que deriva la hambruna.

11. Mayor incidencia de ciertas enfermedades


El incremento global de temperaturas hace que muchas infecciones se propaguen de
forma más rápida, pues la mayoría de gérmenes (especialmente aquellos que se
transmiten a través de alimentos y aguas, pero también los que se transmiten por
insectos) prefieren temperaturas templadas cercanas a las de nuestro cuerpo.

Esto no solo hará que aumente la incidencia en países tradicionalmente afectados por
enfermedades como la malaria o el dengue, sino que estas lleguen a zonas donde
tradicionalmente no había habido casos. Se están observando ya alteraciones en la
distribución de muchas enfermedades infecciosas transmitidas por el agua.

12. Enormes costes económicos


Puede parecer frívolo hablar de economía después de ver todo lo que hemos visto, pero
es necesario. Y es que no olvidemos que la economía es, al final, salud. El cambio
climático provocará enormes pérdidas tanto en la agricultura (por las sequías) como en
el turismo (por la pérdida de hábitats naturales), por no hablar de los costes asociados a
inundaciones y otros fenómenos meteorológicos extremos que sufriremos cada vez con
mayor frecuencia e intensidad.

13. Derretimiento prematuro de la nieve


Otra de las consecuencias del cambio climático es que la nieve continental, aquella que
se encuentra en zonas de montañas más o menos alejadas de los polos, cada vez se
derrite antes y en mayor cantidad. Esto es especialmente notorio en el hemisferio
norte, pues la nieve en esta región se derrite mucho antes de lo que lo hacía
normalmente y la cubierta cada vez abarca una región más pequeña.

14. Menos récords de bajas temperaturas


Una consecuencia (y evidencia) clara es que cada vez hay menos récords de bajas
temperaturas. Mientras que en los últimos cien años se han dado casi todos los récords
de altas temperaturas, prácticamente nunca se ha registrado, en el último siglo, un
récord de baja temperatura. La Tierra cada vez es menos fría y más caliente.
15. Calentamiento del agua de los océanos
No solo se calienta la atmósfera. Y es que otra de las más importantes consecuencias,
por todos los efectos que tiene en el equilibrio oceánico y marítimo, es el calentamiento
del agua de los océanos. Estos ecosistemas marítimos absorben gran parte de la energía
calorífica (que ha aumentado por el efecto invernadero), así que están absorbiendo cada
vez más calor. Esto ha hecho que, en los primeros 700 metros de la columna de agua,
la temperatura haya aumentado, en los últimos 40 años, unos 0,2 °C. De nuevo,
puede parecer anecdótico, pero de seguir así, las consecuencias para la vida marina
pueden ser devastadoras.

También podría gustarte